EL OTRO. CAPÍTULO CINCUENTA Y TRES.

EL OTRO.

CAPÍTULO CINCUENTA Y TRES.

 

Tú fuiste, eres y serás para mí la más hermosa

historia de amor, jamás contada. “Montecristo”

“El amor es una palabra, un pedacito de utopía, es todo eso

y mucho menos, y mucho más” Mario Benedetti.

Solo dejaré de amarte cuando el mar este seco, la playa

no tenga arena, y Dios se lleve mi vida. “Montecristo”.

__

_Lo es doctor. En mi tribunal el periodo medio es diez meses. ¿Qué problema tiene?

__Ninguno señoría, simplemente necesito el tiempo suficiente para preparar el juicio.

__Tonterías. La apertura ha concluido, ustedes tienen sus expertos, los demandantes los suyos y entre los dos cuentan con más personal eficiente como para cualquier juicio expeditivo.

 

Menuda pantomima, pensó Marcos, este caso y los demás habrían recibido indemnización en menos de un mes.

__ ¿Doctoras Karros? __preguntó el juez.

 

__Tenemos algunos conflictos, señor juez, pero nada que no se pueda arreglar.

__Muy bien, la vista inicial de juicio queda fijada  para el diez de octubre del corriente, sin atrasos ni aplazamientos. Muchas gracias. __Dio un golpe con el mazo y concluyó__. Se levanta la sesión.

 

 02 DE JULIO DE 2016.

 

 __Azul…  preciosa, tú duermes abajo, y Melina arriba ¿están cómodas? __interrogó Pedro arropándolas.

 

__Sí, Pedrito _respondió Azul __. ¿Y mi hermano?

 

__ Tu hermano por unos días dormirá en  la sala, son poquitos días hasta que encontremos una casa y estemos todos juntos, ¿sí?

__Esto es lindo ¿verdad, Melina? _ quiso ratificar la niña ciega.

 

__Sí, es una linda casa,  mucho más linda que  todas las que hemos conocido.

Pedro intentó sofrenar la emoción al oírlas cuando Guillermo  lo supo y lo abrazó desde atrás.

__ ¿Crees de verdad  que Matías te dará el divorcio al regresar sin más?

__Sí creo que está comenzando algo con Diego, y que  los dos están dejando atrás relaciones pendientes para recomenzar. Y creo que te amo más allá de todo, Graziani, y es hora de que aceptes nuestra ayuda para salir adelante, Fabián también lo desea, además tenemos que comprar la casa para Azul, Santiago y Elena, y quizá Melina.

__Lo sé amorcito, lo sé.

__Amor, Elena, y los chicos estarán en casa de mi tío, ayudarán a Valeria con Matías hasta que camine normalmente, y eso nos dará tiempo para acomodarnos y buscar la casa _dijo Pedro mientras echaba las últimas prendas y regalos.

 

__Me parece perfecto precioso, y Melina deberá estar con nosotros, pese a que es tu tío quien tiene la tutoría, pero en cuanto nos casemos la conseguiremos.

__Eso si es que antes no damos con el padrino y la lleva con él o sus hermanas.

__Veremos, Fabián  se ocupará del tema, se ofreció, y no quiere molestar hasta que no tengamos la casa, vivirá en algo alquilado _dijo.

_

… ¡Cómo Santiago podría ir a la universidad! si vivía en una rancho que se caía a pedazos por el último terremoto que azotó la zona, su padre campesino, mapuche, que vivía del trigo que le daba su tierra, lo llevaba al mercado y por chauchas lo vendía y con eso compraba aceite, azúcar, yerba para el mate y eso sería todo. Esa es la verdad, Pedro y yo  cocinaba con leña en un brasero grande en medio de la habitación a la que le llamábamos “cocina”,  el humo del fuego estaba por toda la pieza, ahí secaba las pocas pilchas que cada uno de los miembros de la familia, siete en total, teníamos, cuando regresaban cada uno de sus faenas en día de lluvia (y aquí llueve nueve meses al año) mojados enteros, se cambiaban por raídas camisetas que alguna vez fueron nuevas pero ellos la adquirían ya viejas, en los puestos de ropa usada en la feria del pueblo a veinte kilómetros de su casa.

En el refugio antes que ustedes llegaran las cosas no fueron mucho mejor, y ya sabe cómo perdí a uno de mis hijos, y adónde conocieron a Santiago.
 No hace un año que la televisión decidió hacer un reportaje a varios niños para preguntarles con qué sueñan para el futuro y entre tantos, eligieron a Santiago, la periodista y el camarógrafo siguieron por espacio de tres días la rutina de mi niño mestizo, su padre mapuche y su madre bibliotecaria, mucama o lo que fuese, chilena.

 

08 de julio…

 

Tal como Orestes planeó, se reunieron todos a cenar, las chicas  más tarde irían a su despedida de solteras con amigas y los amigos a un boliche gay, por tanto Pedro logró a regañadientes convencer a Guillermo para que fueran, y hasta Fabián se les uniría un rato, pero antes el Procurador quiso festejar con todos su  fortuna extra, y planear con sus seres queridos cómo repartirla, pues poco deseaba para él, y más quería  donar a sus hijos como consideraba a Camila y Nancy y a Pedro, ahora a esa fundación que deseaban armar para refugio de la gente del sur.

Antes…  contrariado llamó a su sobrino al estudio, Guillermo elevó una ceja mas los dejó a solas intuyendo de qué deseaba hablarle pues la ausencia de sus supuestos suegros hablaba per se,  amén de que algo Pedro le tuvo que contar.

 

__ ¿Tío?

__Lo siento hijo, me enteré hace un rato, nunca imaginé tanta…

__ ¿Qué? __Pedro lo sintió abatido en medio de tanto por festejar y no entendió en un comienzo.

__ Tus padres, acabo de encontrar la miserable nota que me dejó el insensato de mi hermano, y me cuesta creerlo _ dijo con sincera tristeza__, debería haberle adelantado de lo de ustedes, pero pensé que deseabas contarles tú, y me equivoqué,  como más o menos al fin  irían al casamiento de las chicas…

__ No te culpes tío _ convino Pedro resignado__, lo de mis padres no tiene vuelta atrás, no es tu culpa ni la mía, siempre seré para ellos algo así como el enfermo, el raro,  algo que escapa de lo normal, y que vivan y sean del país que son no ayuda, allá las cosas no son como acá.

__ Ellos podrían evolucionar pese donde viven _ reconvino el tío__, no los voy a justificar__, sé que por ellos dejaste Chile, y fue para bien, pero  podrían al menos haberse despedido de mí, y aun si me consideran como imagino un traidor porque te apoyo, y porque supieron que considero a Matías como a otro hijo, al menos pudieron no hacer ese desplante a Camila, ella también estaba contenta de verlos en su casamiento.

 

Pedro se acercó a Orestes apoyando el brazo en su hombro, con la mirada brillante.

__ Tío, Cami lo único que necesita para sentirse plena  en su boda es que su papá la haya entendido, que la acepte y la ame, mis padres nunca estuvieron  ni estarán, nunca nos aceptaron y no me hice ilusiones cuando me dijiste que viajaban, menos luego de que hablé por teléfono aun sin contarles nada.

__ ¿Y qué sucedió?

__Lamento no haber podido demorar las cosas hasta que pasara el casamiento, pasa que sin querer, Matías apareció contento, con los papeles del divorcio para colmo, pero feliz porque ya camina más libremente, y vino con Diego, y lo vieron,  no pude evitar contarles que nos habíamos separado _ le relató Pedro__, al hilo se dieron cuenta que nos estábamos divorciando,  no es que lo quisieran al otro precisamente, pero al verlo con Diego, creo que  lo interpretaron como algo así como una sanación para mí, como que me había curado.

 

__ ¿Qué dijo ese idiota de mi hermano?

__ Que ahora sí encontraría una chica adecuada para formar una familia como Dios manda, los tres no evitamos la risa, solo agradezco que Guille estuviese en el estudio por el lío de ese juicio, y no iba a decirlo todo, pero ya que se dio así, para ser justo con todos, sobre todo para  no volver a mentirme a mí mismo, y  no negarlo a  él, le dije que  estaba enamorado. Fue allí cuando por poco saltaron de alegría y me pidieron conocer a la afortunada.

__! Dios! __exclamó Orestes.

__Y decidí no mentir más, no más secretos ni desvíos, les dije que era afortunado, que era un juez, y para rematar el rostro demudado de mi padre y el llanto de mi madre, les dije que había estado casado con Matías antes, de allí a que supusieran que era mayor que yo un paso y casi terminé a las trompadas, agradezco a Matías y a Diego que me frenaron, porque me dijo que encima cambiaba al de siempre por un viejo _ concluyó Pedro abatido, y el corazón le dio un vuelco y se detuvo al ver a Guillermo en el vano de la puerta, mientras Orestes negaba con la cabeza.

 

__ Tranquilo amorcito, que lo disfrazaste algo, pero lo imaginé cuando regresaste _ le susurró abrazándolo__, no esperaba menos luego de saber cómo son, lo he vivido con los míos, todos nosotros al fin.

__Perdón amor, obviamente que no lo dejé pasar, simplemente no quería repetir esa necedad. En fin tío, luego me dijo que me olvidara de ellos, que con razón estaba tan unido a ti que al fin Camila era igual, y que se irían, lo que no me dijo fue cuándo, que le harían ese desplante a la sobrina, pero Camila está acostumbrada, las chicas están de regreso de todo, y solo importabas tú en esto __ le hizo saber al tío clavándole la mirada__,  si por algo ellas no se casaron antes, es porque esperaban tu comprensión, nunca dudaron, y yo nunca los tuve, tío, ni esperaba un cambio. Desde que dejé Chile supe que no habría vuelta atrás. __ Pedro encontró y enlazó la mirada limpia, sincera en la de Guillermo__. Yo no iba a negar lo nuestro amor mío, ni a disfrazarlo, ni a ocultarlo, no tengo por qué, es un problema de ellos.

__ Es así, ellos pierden un hijo maravilloso, lo siento por esa mezquindad de almas estrechas, yo gané tres, porque los quiero…  a ti, a Matías y a ti Guillermo, ellos eligen quedarse solos, hasta perdieron a su sobrina _ concluyó Orestes.

__ Pero nada de amargarles la noche, que es de ellas tío, y tuya…  nuevo rico _ exclamó Pedro con una sonrisa que pintó el rostro de luz abrazando a su tío_, y además del dinero, me parece que hay otra cosita que tienes para contar aún, ¿me equivoco?

 

Orestes se ruborizó, e intentó recomponerse.

__ Por favor, ya lo dijiste, hoy es la noche de mi hija, y además ella no lo sabe aún, no digas nada, ni yo lo termino de creer __ confesó a medias respecto de la mamá de Matías__, pero es una mujer excepcional, y  nunca me pasó desde que se fue mi esposa.

__Ya tío, si temes por la reacción de Camila, te digo como que la leo como a un libro,  que lo que siempre quiso además de tu aceptación y amor es no dejarte solo, es que volvieras a amar, y además ya lo sabe, todos lo sabemos, ella también creo _ lo animó.

__ ¿Tanto se me nota?

__Bastante _le confirmó Guillermo con una sonrisa__, muy buena elección amigo, y tal vez por allí viniera ese cariño especial por Matías. Mira, a mí me cayó un hijo del cielo, bueno del mismo sitio desde donde vino la mujer de tu vida, los dos recibimos un regalo inesperado cuando menos lo esperábamos.

__ Les juro que soy el primer sorprendido, pero sé que pronto dirá que regresa a Boston y no creo poder dejarla ir, la seguiré creo, porque ya dijo que regresará, no sé, no lo entiendo, pero me enamoré como un adolescente,  ni me animo a decírselo pero creo que viajaré con ella, y quisiera luego en setiembre invitarla a Europa, cuando las chicas regresen de su luna de miel, no sé cómo sucedió. __ Terminó riendo y llorando en brazos de Pedro  _. Gracias sobrino por animarme a decirlo, al menos me sirve de ensayo, las chicas se irán de viaje y tengo que hablar antes, y no me salía.

 Pedro se separó buscando la mirada clara.

__Tío, ella es la mujer adecuada, y vienes amando a su hijo como propio desde siempre, los tiempos de Dios son perfectos, y  luego de discutir con mis padres, pensé que todo está perfecto, como debe de ser, y tú sabes que esto… __Tomó a Guillermo de la mano para acercarlo__. Lo nuestro comenzó en verdad junto al Lago en la primera mirada, o antes cuando sin verlo lo oí, pero me sedujo con partidas de ajedrez, estando en la convención, y pensé que como en ellas, desde hace tiempo, sin que lo viéramos veníamos jugando mal, cuando estaban todas las piezas, solo que las movíamos  equivocadamente… Matías y yo, Diego, tú,  la mamá de Matías, Guille casado con él antes, todos equivocados, y de pronto, como si una mano en la noche apareciera con su magia, las piezas se recolocaron en su sitio correcto, hasta Juan y  Miller, todos, cada uno con  el ser que nació para él o ella, y bien tu hija será la primera en oficializar esta perfección de piezas, de jugada _ afirmó, Pedro sin darse cuenta que las lágrimas de emoción bañaron el rostro, y que Guillermo se apresuró a secarlas y recogerlas con sus yemas.

__ Bueno, al fin aprendiste  a jugar amorcito… creo, tuviste un buen maestro.__rio entre lágrimas__. Es exacto lo que dice tu sobrino.

Pedro calibró la mirada decidida y desafiante, así como la serena sencillez que emanaba del cuerpo de su hombre y sintió el pecho henchido de orgullo. Una calidez súbita invadió su alma y tuvo que respirar hondo para no quemarse con ese sentimiento, y se sintió feliz de no haberlo negado  u ocultado ante sus padres.

 

__Bueno, y así es _informó Orestes a todos__, ni sé cuánto he ganado, pero desde ya hija _miró a Camila que tenía la mirada brillante, emocionada por su padre__ este piso es para ustedes, el viaje a Europa, y donde deseen ir, lo mío es de ustedes__ y como sé cuánto lo amas, de Pedro  que es tu hermano, el que eliges desde chica, y de lo que deseen hacer para esos chicos que tanto necesitan.

 

Camila extendió la mano por sobre la mesa y con lágrimas en el rostro la posó sobre la de su padre.

__ Papi, lo mereces, yo ya tengo todo, o lo veré culminado  en unas horas cuando tú, como mi papá, y mi padrino, me entregues a mi amor, y Pedro _lo miró cómplice_ mi hermano sí, sea mi testigo, como espero serlo en su casamiento __ le advirtió al primo y este le sonrió__. Quiero que disfrutes de ese dinero, Nancy y yo vivimos con menos.

__Y lo haré hijita, pienso tal vez pedir una excedencia en el cargo y divertirme un poco, quisiera cuando ustedes regresen y se instalen,  viajar a Europa, tipo setiembre _ dijo mirando a Valeria que se sonrojó__. Antes pensaba acompañar a esta dama a Boston, si me deja Matías y pasear con ella por Cape Cod, ahora puedo permitírmelo sin dejar otras cosas, y me gustaría luego invitarla al otro viaje__. ¿Qué te parece? __ le preguntó a Valeria con suavidad.

 

Ella le contestó un poco más tarde cuando los demás estaban hablando entre ellos.

__Me parece interesante  __dijo ella con una sonrisa__. Vemos primero cómo nos va en casa.

__No seas tan sensata__ la reprendió él. Era una mujer despierta. Orestes tenía la sensación de que había encontrado a la mujer de su vida__. Me encantará ir a tu lugar.

 

Ella parecía tentada y los dos se rieron. Ambos sentían la misma atracción irresistible. Pero todo llegaría. No debían precipitarse. Más tarde, mientras paseaban solos por la finca, Valeria así se lo dijo, y Orestes estuvo de acuerdo. Simplemente, estaban pasando tantas cosas, que Orestes se sentía como un crío en una tienda de dulces y quería compartirlo con ella. Le habló de su conversación con Pedro, y le dijo que luego de ella se había sentido liberado. Y acababa de decírselo a Camila, que  se había prendido a su cuello llorando sin consuelo, mas de alegría, para luego confesarle con picardía que ya lo sabía, que lo supo antes que él, y que eso y no tanto el dinero es lo que lo haría y a ella más feliz.

__Pues yo debo decírselo a Matías, que creo saltará de alegría puesto que te ama. Creo que está saliendo con Diego en serio _ dijo ella con cautela pues no le gustaba meterse ni ser indiscreta puesto que aún no se divorciaba de Pedro.

__ Creo que está bien, Valeria, con mi sobrino, y antes con Guillermo no funcionó, pero esta vez creo que está bien, para los dos, y está bien para nosotros que lo amamos y queremos verlo feliz al fin. __ Le sonrió, y le tomó la mano, y cuando la dejó en la puerta de sus habitaciones, la besó sellando una promesa. Era un mundo de nuevos comienzos para todos, como dijera Pedro. Era curioso, pero cuando se sabía esperar, las cosas parecían salir como debían hacerlo. Para ellos y para Matías y Pedro algo menos, la espera había sido larga, pero unos y otros al fin habían acabado por encontrarse. Y para cuando volvió a besarla, fue como si fuera cosa del destino. Entonces, ella entró silenciosamente en la casa pensando en él, y se alegraba de que estuviera allí, aunque ya no esperaba nada ni a nadie, se sentía como ella misma, una mujer que se enamora del mejor amigo. Y era lo mismo que sentía Orestes cuando iba por el camino hacia la casa grande. Ahora esperaba con anhelo viajar con ella.

 

Guillermo y Pedro  verificaron con Elena que Santiago, Melina y Azul estuviesen bien, ya dormían cuando regresaron, y se dejaron caer en el sofá felices y extrañados, de pronto en el plano profesional todo era un caos, no por la culpa de ellos, pero deberían hacerse cargo, mas en el plano personal y familiar todo se acomodaba. Matías ahora que caminaba y al fin se liberó de escayolas y muletas solo hablaba del divorcio, su relación con Diego lo aceleraba.

__ Increíble el golpazo que tuvo que darse para que se acomodara _ dijo Guillermo__, a veces no me lo creo, y espero que salte con algo sorpresivo otra vez.

__No, amor, esta vez el otro, es otro, sí que le vio la cara a la muerte, pero esta vez de verdad, no simulada como tantas antes, y se dio vuelta, la presencia de la madre ayudó, y más la de Diego, dejó a ese hombre nefasto, creo que me soltó y entendió que ni tú ni yo teníamos nada que darle _ se sinceró Pedro__, creo que yo fui en parte responsable, que siempre lo supe y me conformé, solo porque pensaba que compartíamos gustos, cuando en verdad me acomodaba a los de él y me volvía sumiso, me perdía a mí mismo hasta que al fin me dejé usar, y abusar, te hice sufrir por ello, yo también necesité algunos golpes __ dijo sinceramente __, aunque el de él fue definitivo.

__Esperemos, y pensando en lo que nos ofrece Orestes, no sé si puedo aceptarlo _ dijo seriamente Guillermo__, nosotros ganamos bien,  tú eres su sobrino, pero yo… nada, y aunque Marcos me arruine, que nos  regale una casa enorme, que nos instale todo lo necesario para traer a la gente del refugio… es un montón.

__ Amor, déjalo __ suplicó Pedro__. Primero, dudo que quedes en la calle aunque Marcos pierda ese bendito juicio, segundo, en la fundación está Camila también y yo soy como su hijo, yo lo aceptaré, aun con nuestros cargos,  con lo que ganamos, no podríamos darles lo que él nos ofrece, no es para nosotros, y al fin dudo que mi padre no me haya borrado ya hasta de la partida de nacimiento _ dijo algo apenado__. Créeme, la suma es inconcebible, se lo puede permitir.

Ya,  ahora, es el día de mi prima, bueno en horas, no quiero ni pensar en el caso, ni en mis padres, ni en nada que no sea ese matrimonio, solo yo sé lo que le ha costado a Camila, cuánto apoyo mutuo nos dimos, y además me ha dado muy buenas ideas para nuestra boda, aunque falte un poco, que no creo que sea tanto al fin.

__ ¿Cómo? __Guillermo le clavó la mirada llena de preguntas.

__No lo intentes, porque no diré nada, solo que te mantengas atento a cada paso de esta ceremonia __ le anticipó__, y que sonrías y seduzcas a la jueza porque pretendo pedirle lo mismo que mi prima.

__ ¿Que sería qué?

__Sorpresa amor  __ le susurró Pedro que ahogó más preguntas en el beso.

_ ¿Y los chicos? __Saltó Guillermo de pronto alarmado.

__ ¿Qué pasa con ellos? Ya hablamos, buscaremos colegio a Santiago, con Azul esperaremos, la pobrecita es quien más extrañará aquel medio, ella parecía hablar con la naturaleza, necesita adaptarse a esto, no quiero empezar a atosigarla con Braille, con estudios.

__No claro, pensaba en los que tiene Camila, y los de Orestes, por lo visto tu tío piensa seguir a Valeria, y acá no entra ya un alfiler _ le recordó preocupado.

__ Por eso no te alarmes _ le tranquilizó, Pedro__, tendremos la casa para ellos en una semana__, Orestes no viajará  sin ordenar ese dinero, hará todo antes.

__Ya tenías decidido aceptarlo por lo que percibo.

__Sí, porque lo necesitamos, y a él le hace feliz darlo _lo provocó Pedro desparramando besos por el rostro de su amor, mordiendo el lóbulo de la oreja susurrando ternezas.

__Me preocupa, Melina, tu tío parecía estar tras la pista del padrino, pero ahora no lo veo siguiéndola _ dijo Guillermo__, tal vez Fabián podría encargarse de ayudarnos, aunque es muy difícil.

__Estará encantado de hacerlo, y por ahora dispone del tiempo _ respondió Pedro ahora serio__, en verdad esa chica pareciera más débil y vulnerable que Azul, que pese a su ceguera es una nena feliz, pero lo de Melina… Quizá deberíamos pensar en una terapia, además de buscar a su padrino, aun hallándolo eso no le asegura el reencuentro con las hermanas.

__Así es, puede que tengas razón.

_Pedro… ¿qué sorpresa me tienen preparada con Camila? no me agradan te aclaro _ le advirtió __. Y si lo pienso, tu prima y vos juntos son un peligro.

__ Y yo en cambio creo que sí te gustará, esto, y lo del verano.

__ ¿Verano?

__Bueno quizás otoño, nuestra luna de miel, mañana es el día de ella, y de Nancy, no nuestra boda, tengo pensado… que quiero ser aquel que goza cuando atisba tus caderas en sutil sincronía cuando transitas a mi ribera  y agitas el deseo de ser mío. Hombre que sufre en agonía cuando  acaricio tu cuerpo desde tu cabello  y toda tu piel  de terciopelo.

Déjame ser tu amante tierno,  ya no puedo vencer la locura de amarte en la loca dulzura de tus ansias, ya gimiendo. Añoro perderme, sediento,  en el silencio de tu alcoba cuando tu  pelvis zozobra aplacando mis tormentos. Deja que se agote mi aliento pervertido y loco en tu vida, tu boca sedienta y atrevida en un celestial movimiento. Voy a perderme en tu garganta, voy a soñar sobre tus pezones sedosos y cuando mi pasión se agigante buscando en tu vientre amoroso. Déjame abrevar en tu  fuente, en tu  pelvis estrecha, agraciado y de miel, apretadas caderas impúdicas… un edén. Quiero sentir tus locos latidos sobre tu pecho, y los míos en tu cuerpo ardiendo impío, todo el gozo de mis sentidos. Vivo apasionados gemidos de tu dulce placer, consentido entre tu cuerpo y mis piernas en movimiento, enloquecidos. Gozos sobre todo bien y todo mal, busquemos juntos el éxtasis final, déjame sentirte así y hacerte mío, amarte con la vida hasta agonizar. Siento la necesidad de amarte  y la omnipotencia del amor, hasta el fin de nuestras vidas. Entre mis  senderos abrigo tus sueños, y despacio voy sintiendo  cómo se incrusta tu piel en la mía. Con el beso ardiente de tu boca,  voy sintiendo humedecer la cúspide  de mis montes que arden mientras  te posas sobre mí.

En el oscuro paisaje de tu cuerpo se pierden mis dedos que bailan sobre el exquisito relieve de tu hombría, mientras entre mis manos que no dejan de sentir derramas elixir. Y derribas la distancia de mis miedos cuando me dices que soy siempre tuyo. Que vivo en ti. Mientras tu espalda se arquea, en el grito de éxtasis de saberte libre,  de sentirte mío, saberte plenamente feliz.

Y el amor nos encontró… Quiero que me poseas de todas las formas y maneras, porque  quiero entregarme a ti, por hacerme sentir tan querido y cuidado, tan único y amado. A pesar del miedo que siento, contigo estoy seguro que has de cuidar de mí porque así lo prometiste, y jamás me apuraste para que dijera que sí. Me tuviste mucha paciencia y me tienes aún, dándome tu amor, para sentir  el refugio en ti donde sentir tu protección y calor, por eso quiero entregarme a ti mi amor.

__ Voy a cuidarte mi adonis precioso, te llenaré de besos y caricias, con muchas pausas y sin prisa, para que nos disfrutemos sin pudor, sabiendo que haremos el amor, con dulzura y pasión. Fundidos en el uno al otro, ya somos uno solo, empieza la danza conjunta, entre tu voz entrecortada, gemidos suaves de ambos, que juntos vamos gozando, el vaivén de los dos, en distintas posiciones, nos hace cada vez más, entregarnos sin prejuicios, porque los dos estamos seguros, de que es por amor esta entrega mutua. Una vez y otra, tocamos el cielo con las manos, nos llenamos y nos vaciamos del elixir de ambos, que se mezclan siendo el mismo, y nuestro lecho de testigo. Bella entrega que se ha concretado, siendo más de lo que pensamos, con lágrimas en tus ojos, y mirándome fijamente, me dices gracias mi amor, de ahora y para siempre  he de ser por siempre tu hombre, amante, compañero, esposo y todo.

 

10 de julio.

 

__ ¡Uau, qué hombre más bello tengo! __  celebró Guillermo  abrazándolo desde atrás, encontrando la mirada en el espejo, mientras se cambiaban para el casamiento de Camila con Nancy, adivinaba los contornos como si los estuviese dibujando.

__ Yo tengo al hombre más seductor del mundo __ respondió Pedro, no pudiendo evitar la mano atrevida que descendió a su pelvis,  ni la mirada encendida que resbaló por los hombros y más allá. La boca de labios finos que vagó imprecisa por el cuello esbelto y se detuvo en el pecho __. Ya Guille,  terminemos o no llegaremos.

 

Pedro escapó de los brazos y fue hacia un bolso que sacó del vestidor, Guillermo escudriñó los movimientos,  asombrado.

__ ¿Y eso? __ preguntó cavilando.

__ Un bolso.

__Lo veo,  ¿qué tiene dentro? ¿De quién sería? Porque los regalos no son, esos irán desde la casa donde dejaron la lista.

 Pedro se acercó con mirada pícara y sonrisa seductora, enfundado en el esmoquin que Guillermo ya deseaba quitarle con los dientes.

__ El bolso es nuestro, lo preparé anoche cuando caíste agotado, y es para irnos de… tómalo como una especie de campamento, una noche libres, a solas.

__ ¿Qué? Tu prima hermana se casa no nosotros.

__Lo sé, pero ya sabes que aunque las chicas no lo deseaban, mi tío quiere darles la fiesta, y será en la estancia, bueno no sabes mucho porque pasaste todo el tiempo en el estudio…

__ ¿Aquella donde el otro te envenenó y casi terminé a punta de pistola con él? __ lo cortó Guillermo.

__Guille, eso ya pasó, ni lo recuerdes _ se apresuró a decir Pedro_, Camila, Diego y yo tenemos muy lindos recuerdos de ella, el otro se coló esa vez, pero ahora todo es diferente, es más, estará en el civil, espero que lo saludes amablemente.

__No sé ni por dónde seguir, no soy un ogro, si él no provoca y está con Diego y Valeria,  no digo que le daré un beso, pero soy educado, entiendo que siendo quién es, y más ahora estará allí. En cuanto a la casa y el bolso, no entendí nada __ lo miró con desconfianza.

__ Mi amor, las chicas  no quieren su noche de bodas clásica en el hotel veinte estrellas y la pompa, la fiesta casi la impuso mi tío, en la estancia, sospecho que Valeria lo ayudó, y hasta creo que Gaby, de paso te digo que ellos estarán, recuerda que es amiga de las chicas.

__Lo veo a Marcos y lo mato.

__ Él no irá __ tranquilizó Pedro__, solo Gaby y Beto. Y no le dirás nada, porque sé cuánto los quieres, y que Beto será seguramente tu testigo de boda, aunque ahora está Fabián… Bueno, el caso es que nos quedaremos a dormir allá, ¿vale? El resto lo sabrás en el camino, o llegaremos tarde _ quiso terminar Pedro, pero Guillermo intuía algo raro, aunque terminó de arreglarse el nudo de la corbata.

__ ¿Por qué te vestiste de negro?

__ Porque Camila me lo pidió, creo que tiene que ver con su atuendo, su rol, y el de Nancy, no lo tengo muy en claro _ le respondió con sus hoyuelos dibujados, y Guillermo sentía crecer cosquilleos en el pecho y más allá__, amor, confía en mí, ¿sí? Todo tiene que ver con la ceremonia que será algo especial como lo será la nuestra. A ver, Camila y yo pasamos mucho tiempo en Chile, como Diego, y  una vez tuvimos la suerte de encontrarnos unos días con una tribu mapuche, en el sur.

__ ¿Indios?

__Y sí amor, indios, ya sabes que ellos llegaron a Neuquén, a la Patagonia, a Río Negro desde Chile, hubo una lucha con los puelche, los tehuelches que los blancos ni vieron y se impusieron, se mezclaron, queda gente así como vimos en Bariloche __ le resumió__, y  en base a eso, y a lo que vivimos en la adolescencia durante unos meses con mapuches con mi prima, es que armó la ceremonia, y algunas cosas de todo esto, nada  raro, no te alarmes que te conozco, es bonito, confía en mí.

__ Ay Dios, creo que me acostaré de nuevo y no iré a ninguna parte __ se alarmó Guillermo__. ¿No tendrás plumas ni nada raro en ese bolso, no es así?

__No mi cielo, ya, vamos, o tu hijo se sentirá perdido allá, Orestes llevará a Camila, y Diego a Nancy, y yo soy el testigo, por tanto andando, y te aclaro que además me vestí de negro, con gusto, porque me reservo mi color favorito para nuestra boda _ le dijo misterioso.

__ ¿Que sería?

__Guille, lo sabrás ese día.

__Te veo demasiado eufórico por ser que peleaste con tus padres, etc., y con todo este misterio, lo de los indios, la estancia… ¿qué hacía el otro con los papeles de divorcio? __le lanzó recordando de súbito.

__ Llevármelos para la firma, te dije que quizá con una ayudita del procurador, y tan apurados como todos estamos, tal vez… eso salga mucha antes de lo que crees _ dijo mirándose al espejo por última vez, le gusto su imagen, la de Guillermo lo perturbó con su traje oscuro y el cabello brillante como los ojos.

__ ¡Dios! Igual hay que esperar plazos legales.

__ ¿No quieres casarte pronto Graziani? Mira que yo ya tengo planes.

__No quiero nada en esa estancia para nuestra noche de bodas, y luna de miel, eso te lo aseguro _ le aclaró mientras salían.

__ No será allí, lo nuestro, no, lo prometo __ le dijo zalamero__, nunca te vi tan lindo.

__ Yo nunca te vi así _ respondió casi dando la vuelta__, bueno sí, estabas mortal en la convención, te estudié  en detalle cuando expusiste.

__Mira… y ya que estamos de confesiones ¿Fuiste tú el que me movía las piezas de ajedrez aunque habías desaparecido?

__ ¿Y quién si no? Estaba allí, escondido, pero te castigaba porque me odiabas.

__ No te odiaba, me odiaba por amarte, y me consumían los celos no del otro, sino de ti, de saberte el ex anterior de él _ confesó Pedro_, por eso  peleamos.

__Y me acompañaste a las curaciones, yo no quería amarte, y lo mismo, te odiaba por estar con el otro.

 

Siguieron los recuerdos hasta llegar al civil, donde los asombró la cantidad de gente que los esperaba, entre ellos el que antes salió a saludarlos fue Fabián.

__Hijo, ¿todo bien?

__Genial, qué lindos están ustedes, les cuento que anduve haciendo sociales con mis futuros socios, Gaby es una belleza, lástima que también llegué tarde pareciera, Alberto me fulminó con la mirada cuando le dije un piropo _ confesó sonriendo, y a Guillermo se le derritió el corazón__, mejor me dedico al trabajo, creo que no volveré a mirar a una chica, están todas ocupadas acá.

__ Ya hijo, ya llegará. Mírame, estuve casado con…

__ Conmigo __ aclaró un Matías sonriente y seductor que apoyado en  Valeria que resplandecía con su traje ceñido color crema,   se acercó a saludar __, hola Pedro…  ¿Guillermo?_ saludó sin besos para evitar peleas. Y Pedro sonrió, Guillermo más bien respondió con una mueca desconfiada aunque cortés besó la mano de Valeria.

__ Pedro, ¿y los chicos? __ se alarmó Guillermo de nuevo,  recordando que al parecer no regresarían, amén de que Gaby y Beto estaban allí, lo mismo que Valeria, y ya llegaría Orestes__. Los de todos digo.

__ Ya ordenó mi tío que duerman con Elena todos en el piso de él, Guille, no pasará la noche allí.__ Miró con picardía a Valeria__. Está todo arreglado, mañana todos volverán a su sitio. Por Azul nos pareció lo mejor no llevarlos a la fiesta, tanto ruido podría asustarla, es demasiado.

__Miren, una de las novias _ señaló Fabián y todas las miradas se dirigieron a la pareja que casi parecían dos hombres, Diego, enfundado en un traje crema, llevaba del brazo a Nancy, con un nuevo corte de cabello muy corto, y vestida con un enterito pantalón  holgado, de seda azul celeste con ribeteados de encajes, y una sonrisa preciosa pintada en el rostro, apenas maquillado.

__ Viendo a esta, empiezo a entender lo de los roles _ murmuró Guillermo al oído de Pedro__. ¿Camila viene de blanco?

__ No  con el vestido de las novias tradicionales, pero sí, de blanco, Nancy vendría con atuendo masculino, y me pidieron que mi traje fuera parecido al de ella, es decir oscuro, creí que vendría de negro, creo que cambió de color a último momento, está bellísima igualmente.

¿Diego?

 

Los amigos se abrazaron, todos fueron a saludar a Nancy que derrochaba sonrisas y besos, por partes iguales  que ansiedad mirando hacia la calle y hacia la puerta por donde ya se colaban invitados.

__ ¿Creíste que me perderías amigo? __ le dijo Diego cómplice a Pedro.

__No, Cami me dijo que traerías a su mujer, además no veo el porqué, eres mi amigo desde niños. __ Guillermo se hacía el distraído, pero sus miradas furtivas se dirigían alternativamente hacia el otro, y a Diego, pero al parecer, estaban acaramelados, ahora el lazarillo de Matías pasó a ser su nuevo novio.

__ Gente, yo entro _ les informó Nancy__,  voy entregando los documentos, firmando, y ya espero a Camila junto a la jueza, Pedro, se supone que vienes conmigo, ¿verdad?

__Claro, para eso me puse este traje, y soy el testigo. __Sorprendió con un beso ardiente a Guillermo y le tendió el brazo donde se tomó una de las novias, y mientras todos ingresaban a la sala, llegaba Camila con su padre, Orestes impactante con su frac blanco a antojo de su hija, y ella con su bello vestido blanco ceñido bordado en perlas, holgado en la zona de los tobillos, de la que partía un pequeño velo  a modo de cola, su rostro delicadamente maquillado, y su cabello en un recogido flojo con una diadema que le dibujaba el óvalo del rostro, y algunos mechones sueltos, era una princesa a ojos de todos, su padre encontró la mirada de Valeria, y sintió el orgullo de estar allí, con sus dos mujeres, de nuevo dos amores.

 

__ ¡Qué hermosa es Camila! _ se embelesó Fabián, Guillermo suspiró, en eso su hijo no se le parecía, le gustaban todas, mujer que veía lo enamoraba, por lesbiana u ocupada que estuviera.

__ Empiezo entender a tu ex hijito, ya,  que se casa.

__Tengo ojos papá, es solo eso, Valeria es muy linda también __ se enfurruñó el hijo por primera vez con el hace poco estrenado padre.

 

Camila avanzó  con la felicidad despuntando en chispitas desde sus ojos, la sonrisa pintada, el orgullo puesto en el brazo de su padre, que la condujo como había hablado con la jueza, como si fuese su padrino, de hecho era su rol, aunque no se casara por iglesia, él la entregaría a la novia. Pedro los esperaba como testigo junto a Nancy, que con los ojos brillantes  creía que Camila era una virgen, parecía etérea, un ángel.

__ ¡Qué bonita ceremonia, papá!

__Mapuche, o no sé qué cosa india _ medio protestó Guillermo.

__ Tehuelche, lo sé.

__ ¿Te contaron a vos?

__Algo, y me encantó, ¿ves? Orestes lleva a la novia como su padrino y la entregará a Nancy cuando esta recite sus votos, que serán promesas de amor y fidelidad para su esposa, pero dirigidos al hombre de la familia.

__ Orestes __lanzó Guillermo seguro.

__Podría ser, pero no, Camila quiso que fuera Pedro, Orestes la entregará, y vendrá con nosotros, Pedro es quien firma como testigo y se queda allí, la testigo es una amiga de Nancy, por las dudas ni la miré __ aclaró Fabián que siguió explicando la ceremonia a su padre, este empezó a atisbar la suya y por las dudas a sonreír a la jueza como le dijera antes su novio.

 

Tal como contara Fabián, Orestes entregó a la novia, Pedro para sorpresa de Guillermo que escrutaba todo ansioso se colocó a su lado, al tiempo que el padrino ocupó su lugar  junto a Valeria y él mismo, susurrándole algo, Guillermo vio por el rabillo la sonrisa de… “el otro”, no sabía si ya Orestes le había pedido la mano de la madre, o como  fuere, pero le pareció que Matías estaba enterado de todo y más que feliz, ya que estaba miró el entorno, toda gente distinguida y amigos, conocidos.

 

__ Papá, ¿se te perdió algo?

__El mapuche.

 No hay indios pa, aunque yo que vos, me cuidaría en tu propio casamiento, pero acá, no habrá  nativos,  deberían haberlo hecho todo en la estancia, y…

__ ¿Preocuparme yo por mi…?

__Shhh…

 

 La jueza comenzó a decir sus palabras  legales y tradicionales, sus enhorabuena,  y entonces luego miró a Nancy, allí estaba la diferencia, esta comenzó a recitar sus votos, preciosos de amor, y fidelidad dirigidos a Camila, Guillermo se turbó tanto ante la sonrisa de su prometido que apenas escuchó, se perdió en los ojos  de caramelo y miel que amaba, buceó allí buen rato, hasta que vio que Nancy lo conminó a Pedro a desengancharse y mirarla a ella, allí estaba la ceremonia, ella recitaba sus votos, al miembro masculino de la familia, que Camila decidió que fuese Pedro,  cuando ella juró amar y proteger a Camila en la riqueza y en la pobreza, en la salud y enfermedad y serle fiel más allá de la muerte, recién Pedro le entregó las alianzas, asintió como dándole permiso, y la jueza preguntó ella a cada una si se aceptaba a la otra, el sí rotundo llenó la sala, intercambiaron alianzas, y llegó el beso y la declaración de esposas ante la ley en matrimonio igualitario, las firmas, y aplausos. Guillermo estaba embelesado, y casi lloraba a la par de Orestes, y de las novias como Pedro, pero también confundido, pensando en quién haría de qué si Pedro deseaba eso mismo para ellos, sus ojos vagaron, y supo que estaban allí,  Camila, Beto, y Fabián, Orestes, demasiados se dijo, y en qué sitio.

__ Papa… ¿estás bien?

__Perfecto, hijito, perfecto.

 

En camino a la estancia, Pedro y Fabián charlaban de la ceremonia, y Guillermo que iba entendiendo  se deshizo primero de la creencia de mapuches en la estancia, de plumas, y vinchas, de tatuajes y más como viera en Bariloche, luego le preguntó a Pedro.

__ ¿Eso quieres que hagamos? Con padrino, o madrina y testigos, ¿así como ellas?

__ ¿No te gustó acaso?

__Sí, fue muy bonito y original, pero quién, cómo… ¿Orestes te entregaría a mí como tu padrino?

__Podría ser, y Camila y Beto como testigos, pero yo pensé otra cosa ahora.

__ ¿Qué? __ Guillermo lo miró expectante.

__ Que bien y más original sería, si acepta claro, que Fabián te entregara a mí como hijo padrino de casamiento de su padre, y que Camila y Beto fuesen los testigos, mi tío entenderá, supongo, ¿qué les parece?

__ Me re copa __ lanzó Fabián eufórico, el nudo de emoción que cruzó la garganta de Guillermo, impidió que su razón objetara que su hijo fuese su padrino, y terminó en un nudo en el abrazo de tres en el coche que conducía Diego.

 

La fiesta y el banquete serían fuera, entre la piscina y los jardines, Orestes no reparó en  derroches de dinero y buen gusto si se trataba de agasajar al fin a su única hija, que no paraba de abrazarlo donde lo encontrara, lo mismo que a su primo. Junto a la piscina, entre maceteros  rebosantes de flores, se habían dispuesto carpas con arañas y candelabros, centros de mesa con orquídeas, y  hasta los nombres de las chicas y la fecha grabados en los cubiertos de los comensales. En la mesa principal se ubicaron ellas y la familia, era enorme, la comida exquisiteces de una empresa de catering que eligió Valeria, y de fondo una orquesta de cámara tocaba en vivo la música culta suave, aunque más allá se veía un equipo y una pista de baile, un escenario…  para el baile supuso Guillermo.

 

__Bien, hija, como sabes, mientras ustedes estén en Europa acompañaré a Valeria _ explicó Orestes__, sí, ya le pedí su mano a Matías __ aclaró__, regresaremos a tiempo de recibirlas, y si todo marcha bien nos tocará a nosotros el viaje _ afirmó, aunque Pedro lo detuvo.

__Eso si no deben de esperar a nuestro casamiento _ le advirtió al tío__, no quiero que faltes, sabes que soy medio o del todo huérfano.

__ O al nuestro _ se aunó Matías mirando a Diego con embeleso.

__ Aún no me iré a ninguna parte, luego de despedir a las chicas, quiero ir al estudio, Pedro, Guillermo, he estado pensando que esta casa está desocupada casi todo el año, que tiene el personal trabajando, y que sería muy bueno para los chicos y la gente del refugio crecer, y trabajar en un sitio como este _ les ofreció Orestes dejando a la pareja anonadada__,  si Elena era bibliotecaria podría encargarse de administrar, o de dar clases, Nancy, hija, cuando regresen, ustedes ayudarán y contraten a quien deseen _ concluyó Orestes.

__Orestes, no __ dijo Guillermo__, esto es demasiado para la fundación,  aunque…

__Guille, déjalo, yo sí creo que lo que dice mi tío puede permitírselo, esto es enorme, podríamos trasladar en días a la gente, piensa que están pasando frío, bajo la nieve quizás, y sí, la estancia está funcionando, solo tendríamos que contratar maestros, profesores para los chicos.

__ En cuento regresemos _ cortó Camila__ cuenten con nosotros, y la idea es genial, gracias papito _ afirmó Camila emocionada.

__ Yo me anoto en lo que se necesite, para el papeleo _ se ofreció Fabián __, además de buscar a ese hombre que puede devolverle la familia, o al menos ayudar a cerrar esa historia a Melina.

 __No se hable más, el lunes haremos el traspaso, ¿cómo la quieren llamar?

__ Azul _dijo Pedro  antes de pensar las palabras__, perdón, “la cabaña Azul”, en honor al sitio de donde vienen y a la nena.

__Precioso __ apoyó Guillermo__, aunque esta mansión y el parque, y todo…  de cabaña no tiene una pared. Orestes, no sé cómo agradecerte, me da vergüenza aceptar algo así, pero realmente este sitio podría dar trabajo a los adultos, cobijo a los niños, aunque Pedro y yo quisiéramos retener junto a nosotros a Santiago y Azul, a Melina, al menos por ahora y en la semana.

__Me parece bien, aunque a la nena ciega por lo que sé le hará bien venir, aunque sea de visita, además pensé en que esto ya está armado, como las chicas y yo mismo viajaremos tan pronto, ya todos podrán tener techo, trabajo y comida, más en pleno invierno, y le daré a Fabián lo que sé de ese hombre padrino de la chica huérfana, aunque no será fácil hallar a las hermanas, ojalá las diera en adopción a la misma familia, pero aun así, una tenía cinco años y puede que la recuerde, la otra con menos de uno, no sabe que ella existió cuando las separaron, es muy triste.

__ Lo es __ convino Pedro__: Tío, gracias,  y si vamos a reunirnos, antes de irte quisiera pedirte otro favor, quizá pueda el procurador ayudarnos con la empresa, la del lío que armó Marcos, pero no se hable más de trabajo, ¿vale?

__Bien, madre __ cortó Matías mirando a Valeria, ¿le dijiste a Orestes quién eres? ¿Quiero decir, que el hotel que tanto admira donde irán es de tu familia?

__ ¿Qué? __ se asombró, Orestes y todos, que siempre pensaron que ella era humilde, en su serena y honesta aparición, viuda, la creyeron sin recursos__. ¿Cuál es tu apellido de soltera?

__Hijo por favor, no hacía falta… Huitechift, es verdad, nunca dependí del padre de Matías, mi familia es dueña de la cadena hotelera, yo vivo en una parte de uno de los hoteles __ se sinceró.

__Pero… __ Orestes abrió los ojos como platos__, por favor, que yo conocí a tu madre, ella me mostró parte de los hoteles hace años. __ Valeria de pronto era heredera de una de las mayores fortunas de Estados Unidos, y Orestes agradeció ser quien podía ahora, para no sentirse menos ante semejante persona y personaje__. Y yo que pensé que…, bueno, no tienes un atisbo de vanidad o arrogancia, tampoco Matías me dijo nunca nada.

__Solo que están todos viejos, Orestes, prepárate para ir a trabajar, siempre ha estado muy sola, tendrás que ayudarla a ponerlos en primera plana de nuevo __ le dijo Matías risueño, Valeria le lanzó una mirada asesina.

__Si es por ello, encantado.

__Bueno… qué tal si hacemos un brindis __ dijo Pedro levantándose__, por las novias.__ Chocó la copa con las chicas y todos lo siguieron en el brindis  y las palabras__. Y por esta familia, y la mayor que se formará con la fundación, extraña, Fabián debe de sentirla rara, como muchos, pero armónica, fiel, ¿verdad?

__ Primo, hermano, papá, amor _ dijo Camila__, me siento tan feliz, que no puedo esperar a salir  e ir al vals, al baile, Pedro, entrégame a mi esposa luego de mis votos. Sé que  Dios será testigo de nuestro amor, continuemos con la ceremonia. __ Miró emocionada a Nancy y musitó a borbotones su amor:

“Retornaré a tus brazos como aquel día de una  sombría mañana de domingo cuando mi amor lejano fallecía en mi esencia,  te miré y tu corazón latía en mi pecho. Nuestra historia de amor ya estaba pintada, tú me esperabas y yo te buscaba… dos corazones navegando a la deriva, preludio de amor para toda la vida. Y se abrazó el amor con las miradas silentes,  nuestras almas se besaron y tejieron el camino de nuestras vidas, mis manos trémulas te abrazaron. Tú, con las penas tempranas escondidas, yo con las mías abiertas pregonando, gotas de lluvia  sembradas de extravío, el sol recóndito atisbando entre nubes. Y nació el amor entre palpitantes heridas, tú con miradas de caricias curaste las mías y yo con mis labios trémulos sané las tuyas…, cicatrices que nos recuerdan hoy  penas foráneas. Amor como el tuyo inmutable en el tiempo, galera de nuestros cuerpos, la distancia y la luz que el amor emanado abrasó, amanece indeleble como el sol de tus ojos.

Te amo y prometo será mientras quiera Dios __ concluyó Camila ante las lágrimas de emoción de todos, Pedro tomó de la mano a las dos, y las enlazó, abrazándolas contra su pecho embargado de emoción y felicidad por ese sueño, y tantos cumplidos.

__Bueno… La fiesta sigue…

 

Una estampida y unos fogonazos los hicieron levantarse, de pronto afuera todo cobró vida, unos imponentes alazanes con jinetes disfrazados de nativos, con cuerpo y cara pintadas con franjas azules, y manto de rojo, vinchas emprendieron una danza  en sus  monturas conjurando espíritus que bendijeran la unión, los chicos y los peones lanzaban fuegos de artificio que rasgaron la oscuridad del cielo, mientras el vals comenzaba a sonar ante los ojos asombrados de todos.

__ ¿Los mapuches? __ preguntó asombrado Guillermo a Pedro tomándose de su brazo.

__Tranquilo amor, son solo peones disfrazados  _ se hizo oír Pedro__. Ofrendan la ceremonia y yo termino de entregar a la otra novia a cambio de los votos de mi prima, ahora viene el vals, y las chicas tendrán que bailar con todos, no hay indígenas, al menos acá y en esta boda.

__ Armas algo así para la nuestra y quedo viudo luego del civil _ lo amonestó Guillermo mirando a todos lados.  Camila ya lo estaba tomando de la mano, mientras Pedro le decía divertido que la de ellos sería en vivo.

Las chicas  y todos fueron desde las carpas a la pista de baile, el vals los convocó hasta que las parejas se reunieron nuevamente, Guillermo se aferró a Pedro como para no soltarlo más, y fue entonces cuando vio el trencito, antes de poder protestar su futuro esposo le devoró los labios y más allá en un beso devastador, y al sentir el amor que lo desarmaba, se prendió a sus caderas para seguirlo y no perderlo en el tren, donde Gaby lo empujaba a él.

Cuando empezaron los lentos, Guillermo sintió el corazón volviendo al pecho, y atisbó dónde andaba “el otro”, que había osado quitarle a Pedro en uno de los ratos de vals.

__ Vuelves a juntarte con ese y lo mato __ le advirtió a Pedro sin soltarlo__, ¿nos vamos a casa?

__No amor, ahora llega el Karaoke, tranquilo, no te haré subir a ninguna parte, Orestes y tú quedarán liberados, solo quiero dedicarte una canción, las chicas me harán el coro, y ya, olvídate de “el otro”, apenas se mantiene en un pie aferrado al cuello de Diego, déjalo de mirar _ lo amonestó __. Mejor mira a tu hijo, al fin baila con la amiga de Nancy, tal vez no sea lesbiana.

__Pobre hijito, él en medio de un mundo gay o de mujeres prohibidas.

__Primo, vamos…

En minutos, Guillermo lo vio arrastrado por las esposas hacia un escenario, donde estaba la banda de música, entre mesones con exquisiteces y bebidas para que los jóvenes se quedaran bailando hasta el amanecer…

La voz dulce de Pedro lo envolvió, le erizó el vello de la nuca, y se vio junto al lago, y en los bosque de arrayanes, en aquellos senderos cuando el huía, pensándose de “el otro”.

“Mi Alma en Tus Manos. Carlos Casella.

No digas nada más
Si ya pasó lo que pasó
Maldigo haber creído
tu falso corazón
Lo vas a lamentar
No tiene precio mi ilusión
Pagaste con un beso
Mejor no hablar de eso
Que lástima los dos.

Dejo mi alma en tus manos
Y juegas conmigo
Te digo farsante
Pero igual me entrego
Al haberte mentido
Dejo mi…

Fuente: Musixmatch

__ ¿Desde cuándo cantas y por qué eso? _ musitó Guillermo emocionado.

__Desde siempre, desde el coro del colegio, y sí, así fue mucho tiempo, mas hoy tienes mi alma en tus manos, Guille, cuídala, solo tú puedes lastimarla, y si hoy me ves desatado, contento, es porque ya no quiero ser ese hombre gris sometido que conociste, menos que te aburras de mí, ni quiero verte a ti derrotado como entonces, aprendí de ellas, de las chicas, aunque protestes ahora por la música y los disfraces, sé que esto será inolvidable, te amo, y es por siempre Graziani.

__ Gente, Valeria y yo nos vamos a la casa… a suites separadas, no piensen mal, los jóvenes quedarán hasta el amanecer, sé que mi hija y Nancy no dormirán acá, todos pueden quedarse.

__ Yo me voy con Gaby y Beto, papá _informó Fabián__, los veré en el estudio el lunes. Gracias igual Orestes,  estuvo todo  de no creer, y lo que ofreces es lo más.

__ ¿Y Pedro, Nancy? __ interrogó Guillermo a Camila que lo tomó del brazo con rostro angelical  de inocencia.

__No sé, supongo que deben de haber ido a cambiarse, ya vendrán.

__Pero…- ¿por qué no me dijo?  Ni sé dónde dormiremos.

 

__Por acá creo __ dijo ella enigmática __. Te dejó esto. __Depositó una notita escrita en una servilleta en la palma y Guillermo se estremeció.

 

“Voy aferrado a los vientos del amor, surcando mares de pasión. Los latidos de mi viejo corazón rompen el silencio de la noche,  asomado a mi pecho mira todo lo que pasa, cómo soy. No me doy por vencido ante ningún dolor. Y tomamos sueños, besos que son nuestro alimento para crear emoción. Que no habrá zapatilla de cristal, ni príncipe, ni sapo. Simplemente un hombre enamorado que me hará feliz. Habrá fiesta en mi corazón y soplarán vientos de buenos augurios, que por fin seré libre de amar, sin dudas, ni miedos. El comienzo de una historia que día a día  escribiré con cada beso y  caricia que me des.  Y no habrá mejor paisaje que mirarme en tus ojos llenos de amor. La luna con sus hechizos me vestirá de deseo, para que con tus abrazos llegue el sol. Y seré tuyo, y serás mío, mientras quiera Dios.

Por un beso tuyo  yo daría la vida entera. Me volvería loco de contento. Escribiría versos por todo tu cuerpo, besos que saben  a cielo y tu boca a miel,  tiernos, bellos, agradables…  que encienden mi  deseo y el mar de mis  anhelos. Por un beso tuyo  rico, pasional, sabroso,  erótico y muy amoroso,  sería capaz de detener el mundo entero y demostrarles a todos lo mucho que te quiero. Que estoy dispuesto a darlo todo para  contemplarte en pleno gozo. Por un beso tuyo qué no daría. Por uno solo, iría hasta la constelación mayor solo para traerte la más bella estrella que  hay en el firmamento.  Si me dieras un beso  detendría el tiempo y cada amanecer  admiraré tu hermosa  sonrisa sintiendo el amor, milagro  de la vida. Por un beso tuyo entrelazaría mis  manos con las tuyas,  me quedaría en el oasis de tu sonrisa  y me internaría por siempre en tu mirada como una ola que se  interna en la inmensidad  del mar mezclándome con tu esencia, fragancia de  olorosas hierbas y madera que  despide tu cuerpo  y te diría al oído en  susurros lo mucho que te quiero, que  eres mi mundo…  lo más mágico, sublime,  es lo que daría por un beso tuyo mi amor.”

 

Antes de reponerse de la emoción, de nuevo los jinetes reaparecieron en un estampido alocado, y cuando Guillermo se disponía a huir, distinguió a Nancy y al mismo Pedro, cada uno montado a un zaino, blanco y colosal el de Pedro. Cabalgaron con todos entreverándose en cruces peligrosos, mas nada malo sucedió, y en medio del entrevero, Pedro, su serio muchacho del lago, cabalgó junto a Nancy, los dos tomando velocidad hacia Camila y Guillermo que aguardaban temblorosos, los dos se irguieron sobre los estribos, inclinaron la espalda audazmente y cada uno capturó a su pareja, sentándolos frente a ellos, ante los aplausos y gritos de despedida de todos, el corazón desbocado de los amantes por diferentes motivos, la sonrisa orgullosa de Orestes que abrazó a Valeria y a Fabián que nunca había asistido a un espectáculo similar.

 

Así continuaron cabalgando, seguidos del bullicio del festejo que iba desvaneciéndose, mientras los cascos de los caballos los llevaban a sitios que solo Pedro y Nancy conocían, rincones ocultos y secretos, donde a escondidas y huyendo de a  ratos, con ayuda de peones cómplices, habían usado los días previos para acondicionar el lugar de acampada, el nido de amor de las dos parejas para esa noche, ni hoteles  de lujo, ni grandes camas con dosel, Nancy solo en un toldo de pieles y palos, Pedro en una cabaña de guardaparque habían querido honrarlos, algo loco, diferente, y único, travesuras que recordaban las que hicieran de niños a solo unos kilómetros de la estancia.

 

__  ¿Acaso dormiremos los cuatro juntos? Nunca te había visto montar __  balbuceó Guillermo tomado como garra de Pedro.

 

__Ya dejaremos a las chicas, y seguiremos un poco más allá, y sí que monto, desde niño, solo que en el cemento no puedo amor, y es algo como el manejo que no se olvida, una vez que se aprende, creo que lo llevo en la sangre, además.

__ Pero yo no, y casi me ha dado un infarto con lo que hicieron.

__Pedro, primo, acá nos quedamos _ le gritó Camila feliz abrazada a Nancy ya frente a su campamento__. Los veremos en la casa en el desayuno, así nos llevas al aeropuerto.

 

__Feliz noche, prima, gracias, las amo _ les respondió y siguió azuzando al animal hasta que Guillermo suspiró cuando al fin aminoró la marcha al hallar su nido de amor. Pedro detuvo la cabalgadura, tan abruptamente, que el animal levantó las patas delanteras y Guillermo lo apretó aún más.

 

__Precioso, vas a matarme, justo ahora que estamos a meses de casarnos.

__Guille, mírame.

Guillermo lo hizo, con una luz especial en la mirada, todavía montados, lo observó en detalle.

 

__Quiero que adoptemos a Azul, quiero que sea nuestra hija _ soltó, Pedro, es un presentimiento, un presagio, creo que Elena aceptará.

__Yo adopto a los que desees, y quiero más.

 

Pedro rio, al tiempo que saltaba al suelo, y extendía sus brazos para tomar a su amor y bajarlo, dejando que resbalara contra su cuerpo.

__”Te reconocí, mi amor __ le susurró__.  Entre la multitud tu alma asomaba tímidamente, pero aun así eras tú. ¿Cuántas vidas? ¿Cuántos momentos y vidas incompletas vividas?

¿Crees que esta vez lo haremos bien? De forma consciente y egoísta quiero seguir tropezándome una y otra vez en la eternidad contigo. Dejemos incompleta nuestra misión  para así condenarnos a vivir una y otra vez nuestro intenso amor. Te reconocí, solo bastó mirar tus ojos y las estrellas se ordenaron y entraron en mí cual energía del universo. Te sentí como se siente el último suspiro de vida,  con ganas e intenso. Te admiré y te seguiré admirando, como la puesta de sol que baña por última vez de luz el mar, tímida y silenciosa.  Y entonces comprendí, que  merecía sentir una y otra vez de esta forma tu esencia,  morir una y mil veces y todas las condenas eternas. Comprendí a su vez que estar condenado a tu amor, a tu piel y a tu alma ha sido el mayor regalo que el universo me podía dar.

 

La cabaña parecía la de Bariloche, de madera y troncos, apenas un ambiente aislado en medio de un bosquecito,  como en silencio en medio del bullicio Guillermo anheló ese día, entraron de la mano. Adentro el ambiente era amplio y estaba cubierto de pieles… de ovejas, Guillermo no daba crédito a lo que veía, un sendero, un acolchado de pieles y pétalos de rosas blancas, una chimenea donde las brasas chispeaban y reflejaban luces extrañas haciendo a la magia del sitio, la noche era fía, mas el calor de los cuerpos, llevó a los dos a quitarse los sacos, el moño, la corbata, que Pedro colocó cuidadosamente en el respaldo de dos sillones de mimbre, y como en un pacto tácito, en silencio y en trance,   perdidos uno en la mirada del otro se despojaron de todo, ropas, dudas, temores, prejuicios, y se tumbaron  sobre el lecho de pieles y pétalos.

 

__ Lo acondicioné para ti, me pareció demasiado un toldo nativo, quise hacerlo similar a lo del sur, ¿te gusta? Hice traer esos sillones, un cesto con panes caseros, algo de café, pero mañana iremos a la casa a desayunar y adecentarnos, no te asustes, es solo un anticipo de lo que vendrá.

__ Precioso… _ murmuró Guillermo con el nudo en la garganta molestando__, ¿sabes lo que has hecho?

 

__No __ respondió Pedro.

__Has derruido mis fortalezas, has derribado mis muros, has derretido el rencor y la amargura de años.

__ ¿Tu escudo?

__El de mi corazón, ya no necesito rodearlo, porque sé que jamás podrías hacerme daño, y también lo dejo en tus manos, lo sanaste con amor, lo cuidaste por meses, lo acunaste, y hoy es tuyo… solo y para siempre tuyo.

 

Pedro acarició el rostro amado con la mirada.

__ Al fin lo reconoces, pues creo que tienes razón.

 

Tocó con sus labios la boca suave de Guillermo, un beso llevó al otro hasta que los dos rodaron por el suelo, en un abrazo interminable, las manos quitaban, recorrían, delineaban contornos, hasta que se enderezaron para apreciar el espectáculo de los cuerpos desnudos. Ellos que toda su vida se sintieran perseguidos por la mala suerte de pronto se sabían afortunados, habían chocado para poner el mundo del otro patas arriba, pero de un modo u otro desde entonces los conflictos se resolvían, los inconvenientes se vencían, era la magia del amor verdadero.

 Pedro buscó con la boca el pico de un pezón y dejó que los labios resbalaran en saliva hacia el vientre y más, jugueteó con la lengua sobre el ombligo, hasta que Guillermo le tomó la cabeza entre las manos y lo miró a los ojos.

 

Pedro negó, esta vez quería otra cosa.

__Déjame probar, ¿sabes que tengo algunos poderes, verdad? __ Y mientras lo decía se puso de espaldas sentado sobre los muslos de Guillermo, para que su masculinidad enhiesta rozara sus nalgas, se frotó contra él provocando oleadas de calor en las entrañas de Guillermo, hasta que él no pudo resistir, trató de tumbarlo de nuevo, pero Pedro se negó. Firme en su propósito. Con sus manos empujó el pecho de Guillermo hasta conseguir que volviera a estar acostado, y sin que tuviera tiempo de objetar nada, se encaramó sobre su cuerpo como antes y se dejó caer, llenándose de su carne anhelante y dispuesta hasta donde jamás había llegado esta. Comenzaron a subir y bajar, a balancearse suavemente primero, mecidos por el deseo creciente, hasta que ya no fue suficiente, y necesitaron fundirse en un abrazo más fuerte, el de ser uno. Y rodaron entre pieles y pétalos diseminados, probando maneras diferentes de gozarse, suspirando y riendo, jadeando y susurrando, entrelazados en formas imposibles, para acabar tendidos y exhaustos maravillados como siempre después de sus encuentros, casi en la entrada de la cabaña, solo faltaba la nieve del sur.

 Guillermo había quedado boca arriba contemplando un trozo de cielo que se colaba por un ventanuco, su pecho fuerte subía y bajaba con celeridad. El corazón de Pedro, sólido en su retumbar, reverberaba adentro de su propio pecho pues estaban tan pegados que no sabían dónde empezaba uno y terminaba el otro, ya no existía límite.

En un tono bajo y adulador, rozando su nariz contra la de Pedro, y luego el cuello, Guillermo susurró:

 

__ ¿Me amas?

__Mucho.

__Gracias por esta locura, quiero a Azul, y a los hijos que desees, con vos los que quieras, dímelo.

__ ¿Qué?

__ Que me amas, precioso, en todos los idiomas.

 

Pedro tomó la cara perfecta de quien ya sentía su esposo y lo contempló extasiado, la reciedumbre de aquel rostro tallado por la vida, le prometía años de maravillas y aprendizaje.

 

__Te amo… Je t” aime… Je t” adore… I love… __ pronunció y percibió cómo se endurecían nuevamente, aun celoso.

 

__Celoso siempre de cualquier cosa que esté cerca de vos, que te roce la piel, que atraiga tu atención__ murmuró Guillermo con voz ronca, mientras su lengua jugaba en el cuello de Pedro que era una ofrenda, que lo volvía loco.

__¿Y de nuestros hijos… Guille?

Él lo miró con intensidad, y sus ojos dulces se posaron en su alma.

 __ En los hijos que tendremos… solo te veré a ti precioso, y más te amaré.

__ Rohayhu __ susurró, Pedro… te amo…  en guaraní…

 

Y la noche los envolvió en su manto, mientras volvieron a perderse en pieles y entre pieles.

 

CONTINUARÁ.

HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS.

CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES COINCIDENCIA.

LENGUAJE ADULTO. ESCENAS EXPLÍCITAS.