“PROHIBIDO” CAPÍTULO CUARENTA Y UNO.

“PROHIBIDO”

CAPÍTULO CUARENTA Y UNO.

Sábado, 26 de enero.

__Shh. Lo sé mi amor, sé lo que sientes porque cuando lo hiciste casi me muero con vos, pero ya está, ya pasó, te necesitamos fuerte porque tenemos que sacar a Felipe de esto, esa será tu forma de enfrentar a esos hipócritas.

__Lo sé, y no, haré mucho más que eso.

__ ¿Qué significa eso?

__Que me inscribí en la UBA, no tengo por qué esconderme como dice Jorge, no soy un delincuente por amarte, quiero estudiar abogacía y especializarme en derecho canónico.

__Me parece bien, te apoyaré, además puedes ver a Fabián en la UBA.

__Hay más, no quiero ser cura toda mi vida, no me gusta, me equivoqué, no son Dios para  que no pueda volver a ser laico.

__ ¿Entonces?

__Estuve andando todo el día, pensando, quiero consultar al abogado que tomará el caso del nene y llegar al Vaticano, quiero una dispensa real, me equivoqué, entré a la iglesia por razones equivocadas, como una forma de castigarme por haber nacido en la nobleza cuando alrededor había gente que moría de hambre, pero no tenía ninguna culpa y resulta que ser parte de ellos hoy me da asco, no quiero _gritó, y Guillermo lo calmó  en sus brazos, y allí permanecieron en silencio, hasta que regresaron al departamento.

__Todo ha sido bastante intenso, pero honra y da validez a lo que vivió, y le transmite el mensaje de que nadie que abuse de él saldrá impune, y que hay gente decente que se preocupa por él.

__Me alegro, y espero pueda ayudar a Pedro, yo le diré a Marcos que apure la tutela, pero… Guille, vos no crees en Dios, menos en la iglesia, no todos te van a apoyar en esto, habrá gente de parte del cura, y que crea que el nene fabula, te lo tenía que decir.

__Lo sé, Beto, sé que tendremos gente en contra,  y te aseguro que eso no nos detendrá, ni siquiera sé hasta que no lo vea un especialista qué daños tiene el nene, y si son reversibles, no  nos  van a parar ahora que estamos encaminados,  y ojalá con esto ayudemos a muchos más. Chao.

«Parecía especializarse en causas perdidas. Perderlas primero, y después largarse atrás como un loco».

Julio Cortázar | Rayuela [31]

Era el sufrimiento gozoso, como la picazón bien rascada, sangra pero te gusta a la vez.

-Julio Cortázar.

“Yo me enamoré de sus demonios, él  de mi oscuridad.
Éramos el infierno perfecto”. Mario Benedetti.

Una primera gota de lluvia se adelanta a mi caricia por tu piel, logró infiltrarse por tu hombro descubierto y comienza hacer su camino, tu mirada que invita a la mía a mirar el descenso de aquella gota… pero impertinentes mis labios la ahogan en un beso, en pleno camino por tu pecho y al sentir allí tu piel, agradezco a la lluvia el nacimiento de mi beso en la muerte de aquella gota.

Contadas caricias de lluvia, voy bebiendo beso a beso por tu hombro, mientras los brazos atrapan las cinturas, tibieza de amor se va despertando, gotas que descienden y mis besos que ascienden por tu cuelo, encuentro en un suspiro tuyo, la excusa perfecta para alimentar en tu boca de pasión, mis húmedos labios, me incendia por dentro tu aliento, tu saliva que mi lengua atrapa despierta los deseos.

En el balcón queda la lluvia con su suave melodía, en el cuarto, la húmeda ropa es la excusa perfecta para ir desnudando los cuerpos, al compás del suave ritmo que toca la lluvia, tus prendas voy dejando caer por el suelo, tu mojado cabello se recuesta sobre mí, al tus labios abrazar los míos… entre esos embriagadores besos, libero tus pezones y el posarse en mi piel es una deliciosa y excitante caricia.

El infierno de tu piel evaporó las huellas del paso de la lluvia, comienza ahora, sobre mí tu calor  a condensar el deseo en un vapor de pasión que nos envuelve por completo, tu erótica danza que incendia mis sentidos, mis suaves suspiros ahora son un ardiente aliento de delirio que busca en tu boca calmar la sed de tu licor  que tiene mi garganta, que  viaja por mi sangre del que mis átomos se embeben.

Se arrastran mis labios por tu piel, como adorando cada centímetro de ella, deshojando besos a cada paso, queriendo a cada trazo recorrido hacer estallar  tus poros  y en esos puntos secretos tuyos, percibir aquel espasmo de tu piel que hará en tu boca nacer los gemidos de placer que me lleven sentir que ardo en tu delirio.

Sobreviviente a tu calor, de tu húmedo cabello huye una gota de lluvia, la descubro presurosa correr por tu pecho, se detiene… como abrazándose a esa cumbre perfecta, allí con memoria propia, van mis labios a beber no solo una simple gota de lluvia… sino todo tu aroma, lo más minúsculo de ti allí arrastra, tu esencia…  esta noche me bebo de ti el amor, me consumo en el infierno de tu piel.

__Cielito, te amo, y creo que seremos muy felices, que podremos construir una hermosa familia aunque los chicos están grandes y es posible que nos dejen solos pronto_ afirmó Guillermo.

__Ojalá no hubiera perdido media vida encerrado, amor, pero al menos lo de Felipe sirve para que sane de ese error y no viva con la culpa que me inculcaron, ni me esconda del mundo como si hubiese sido el peor _respondió adormilado acurrucado en el cuello__. Recuerdo cuando fui a Chile en plena crisis y le hablé a mi madre del miedo que tenía a lo que sentía por ti y no comprendía, y lo único que veía eran esas olas enormes que arrasaban con todo, mas tú eras mi tierra firme, el oro que me daba soporte, y así fue en este largo camino de regreso a casa.

__Ha sido como llegar al hogar, como entrar a puerto ¿verdad? _ dijo Guillermo emocionado__.  Estaba pensando… ahora que vienen tus papás, que aún no estamos locos de trabajo, ¿por qué no nos casamos? ¿Qué tenemos que esperar luego de tanto sufrimiento? Yo no necesito más que a vos, a los chicos, al juez y está la gente del estudio que te adora, con la llegada de tus padres, no veo para qué esperar, ¿te gustaría?

__Sí mi amor, digo… sí quiero casarme contigo, sé que ya te lo he dicho, pero quisiera que sepas que estoy preparado, que ahora no temo ni a ello ni a nada más creo.

-- Mi apreciado señor: Tras verlo pasar por la bohemia de mi calle, osado, me tomé la libertad
de comprarle flores, y un paraíso sin serpiente en mi imaginación, con la exclusiva del pecado de su cuerpo. Le mandé margaritas por  las dudas, siempre es una tendencia al error.
Me quedé, en si me quiere omitiendo  el resto de pétalos para que usted  deshojara
a placer  un sí lo quiero. Un girasol que gire en torno suyo, aun cuando duerma  al azar conmigo, sea la luna que gira orbitando los secretos de su almohada.
Y entre el ramo de mis ojos y flores, deposité violetas, pequeñas, delicadas del cristal de su piel
frágil y sensible. Tulipanes  de mil colores sin fronteras, de un mismo lenguaje en el esperanto
de su pecho. Un racimo de claveles desnudos  en su sonrisa desnuda, en la piel de sus labios, que crean  su boca, que hacen los besos en la fragua de su lengua.

Alguna enredadera para ascender a su cuello,  abrazar su esqueleto,  subir por su espalda sorprendiéndolo en sus pensamientos, abrir las rejas de sus dientes y enredarme en su voz.
Algún Narciso vanidoso para que lo  envidie. Una flor de loto para el estanque sereno de su alma. Rosas de mi sangre sin los cementerios de mi ser, con los pétalos perfume de sus formas.
Y una  fuente  de carne viva sensual, insinuante,  hacia mis  labios abiertos en la  parada de mis deseos. Adjunto mi interés y el de mi ventana, de volverlo  a ver tras mis cristales. Atentamente. Su jardinero fiel.

__ Fiel  y el mejor amante sin dudas. Si yo  hoy tuviese que escoger  un lugar en el que vivir,  escogería mis sueños, porque yo estoy aquí soñándote y tú allá, sin duda soñando y deseo ser parte del ese sueño, mas yo sigo soñándote y susurrando al aire tu nombre, miro el cielo
y te envío  un beso, esperando que la brisa nocturna te lo haga llegar, hay días que me la he
pasado soñándote despierto, pero a veces no sé  si estoy despierto o es un sueño  en el que sueño que estoy despierto  soñando contigo, realmente tú te has vuelto parte de  mi mundo y de mis ilusiones, yo ya no sé  si tú eres real o eres un sueño, pero si eres real, te quiero aquí a mi lado, pero si eres un sueño, no quiero dejar de amarte, por eso he decidido que no quiero despertar y solo quiero seguir soñándote.

__Tengo el pensamiento perdido de tanto desearte. Fluye enamorada la brisa cuando besa tu cuerpo desnudo, sin consuelo y callado mi verbo caminas hacia mí, moviendo tu pecho, mi desvelo.  Estás tan cerca  que tus aromas embriagan todos mis sentidos.
La lujuria de tu cuerpo incita a recorrerlo todo, con pasiones y delirios con mi boca y lengua, desde tu cuello y hasta la pradera de tu ombligo. Mi boca se pierde insaciable de tus labios de pétalos de rosas. Mi lengua recorre tu espalda suave hasta  el diamante tatuado en tu vientre
entre tus espasmos y gozos, cuando acaricio la tibia  fuente  de tus cimientes.

Bebo el néctar dulce de tu boca, como la abeja a las flores. En el loco desenfreno de los espasmos extasiados entre lujurias soberanas y en el gozo que entrecierra tus ojos, en el límite de las caricias profanas. Y te poseo suavemente, ardiendo en llamas de una pasión inmortal.
En el abismo y placer de una noche desmayada,  pierdes tu pudor naciente cuando busco con premura la  entrada pequeña en la dulce pesadilla de tu  cálido túnel.

La pasión y lujuria entrecierran turbados  el mar de tus ojos. Tu cuerpo se aposenta en el mío como un montón de pétalos en mi vientre y se mueve intensamente, entre delirios y gozos, sobre lujurias conscientes. Extasiada de lujuria y delirio, tu lengua inventa caricias profanas.
Rotas las esperas y quimeras, tu cuerpo fluye suavemente, al amor nace  entre mis piernas y brazos en la agonía del éxtasis, estremecido de placer. El sol pinta de rojo tu figura menuda, cuando te duermes desnudo. Tu belleza aturde mis sentidos, y el recuerdo de tu total entrega al amor y me pierdo en los barrancos tibios de tu pecho, de pétalos y flor. Mi hombre, que tienes tanta piel donde escribir… Y yo, con tantos  sueños de vida en mis manos, te amo, Pedro Beggio, celebro haberme atrevido a invadir  tu encierro.

 Miércoles, 30 de enero.

Vendrá agotado, la jornada laboral no perdona y estar de pie durante ocho  horas pasa factura a su escultural cuerpo.

Por suerte yo tenía esta semana suave. El turno  libre de un trabajo propio tiene eso, pues los cuellos de botella suelen aparecer en el segundo o tercer turno quedando siempre el primero por su desarrollo en el tiempo de la vorágine de la sociedad como el período diario en el que coger impulso y forzar la maquinaria previniendo la positiva resolución de incidencias.

Llegué temprano a casa y me puse a trabajar en lo que tenía en mente, quería que aquel día fuera inolvidable, ¿algún motivo en especial?, sí, esas pequeñas grandes cosas que dan significado a la vida y no son más que la elevación de la convivencia, el día a día, a un nivel sublime; nuestro  minuto a minuto de ocio juntos, su existencia, mi suerte de haber sido elegido por él, nuestro indestructible amor.

Mis dotes culinarias  son sobresalientes, bueno, para ser sinceros no soy de los que marcan la diferencia en cuanto a constancia, pero cuando estoy inspirado es difícil superarme.

Y él cada vez me gusta más.

Alentado por ese sentimiento, primero le preparo un aseo con todo lo necesario: velas  por doquier en la habitación de baño, sales aromáticas en el agua templada, el ambientador que tanto le fascina y aquella música de fondo que recrea el batir de las olas.

Una vez todo ello puesto a punto, me dedico terminar de inflar los globos que inundarán el zaguán a la entrada de casa, el helio comprimido hace que muchos queden pegados al techo y su mezcla con aire que otros queden a media altura conformando un túnel psicodélico que Pedro encontrará apenas abra la puerta. Se dará de bruces con un cuento de hadas multicolor, algo así como “Alicia en el país de las maravillas”, sé que entrará sin pensárselo dos veces aunque no vea el final del camino, es intrépido  y le gustan los retos.

Después de que disfrute de ese momento alucinante y cuando despeje delante de sí el último globo, encontrará un camino marcado con pétalos de lirios que le llevarán a la habitación de baño, allí el vapor ya habrá empañado el espejo a excepción de unas letras grandes que quedan al descubierto después de haberlas, yo, rubricado con el sencillo truco de la punta del dedo embadurnado en espuma de afeitar:

“Te quiero”.

Es obvio el disfrute de semejante relax (él aún no me ha visto mas  intuye mi forma de pensar, nuestro código interno le indica que solo tiene que dejarse hacer), desnudo entra en la bañera. Yo esperaré y eso lo sabe cualquier hombre; esperar por  ese alguien  que valga la pena no solo se limita a una tradición en el altar el día de la boda para otros, el hombre  que lo vale siempre tiene el derecho de hacernos esperar.

El extractor de la cocina impide que los aromas del manjar que preparo viajen al resto de la casa. La vajilla de porcelana y las copas finas se yerguen con orgullo sobre el mantel de hilo, la ocasión lo exige. Uno de sus caldos predilectos, Merlot crianza que ya está respirando, custodia el centro de la mesa embutido en gabardina termoquímica que lo mantiene a sus requeridos 15 °C, el incienso acaricia el ambiente, las cortinas entornadas apaciguan la luz del atardecer, algunas velas dejan bailar sus llamas, los medios tonos abusan de los neones, el jazz hace una cama de pasión a los oídos; todo en su justa medida de la seducción.

Se despereza, sale de la bañera y se deja guiar por el otro sendero, esta vez de azucenas, que le lleva al dormitorio. No se ha secado el cuerpo, le gusta hacerlo al aire, también le gusta que yo lo mire, pero no estoy presente. Aguardo. El atuendo sport  que le he comprado de su talla está extendido sobre la cama, ya frente al espejo él  nota que realza su figura, el  blanco  acentúa el contraste con sus ojos  de miel, es un atuendo de gala. Él nota que sobre el tocador hay una invitación al restaurante más íntimo de la ciudad, se peina, adereza, escoge las alhajas más elegantes, se enfunda en  las prendas de Dior y acude presto  al salón-comedor de nuestra casa a mi encuentro.

Mi indumentaria de etiqueta queda totalmente eclipsada ante su belleza, como debe  de ser. Solo nos miramos profundamente.

El aperitivo formado por pinchos de dátiles enrollados en lonchas de bacon coronando cucharas chinas adorna  dos extremos de la mesa mientras los entrecots, humeantes y en su punto, reposan sobre sendos platos donde las verduras juegan a decorarlos, todo ello a la deriva sobre el cristal-mesa-lago colmado de pétalos de rosas. Le tomo una mano, lo  guío a su asiento, se lo retiro, él  lo toma, se lo acomodo y antes de ir a ocupar mi sitio, justo frente a él, para comenzar la aventura, me inclino para colocar la servilleta de seda en su regazo cuando entonces  tuerce la cabeza y nos encontramos fortuitamente frente a frente para fundirnos, sin mediar palabras, en la casualidad de un largo beso. Al terminar coincidimos al susurrarnos al unísono:

“Te amo”.

__ Deja que sean mis labios los  que griten la pasión de mis sentimientos, porque hoy quiero dejar de amarte en silencio, ya me cansé de callar mi amor, quiero dejar de imaginarme tu mirada, tu sonrisa, tus besos y tus caricias,  basta de jugar a tenerte, basta de sueños y fantasías, hoy quiero al fin detener el tiempo, vivir en tu mirada y que sean tus ojos, la luz de mi amanecer,  perderme en tu cuerpo, con el candor de mis labios y así conocer cada uno de los  secretos que esconde  tu piel, mientras los cuerpos se irán fundiendo, en el eterno abrazo de la pasión  y así podré pintar un arco iris en mi vida, porque al fin pude tenerte a mi lado.

__ Disfruta leyendo y besando, "así no perderás tu lengua".  Ama aunque tu mundo parezca una telaraña con el corazón roto y trizas de cristal que hiere como perdigones. Hay corazones en mundos corpóreos con mentes bipolares; de repente cambian como las fases de la luna, y son estaciones bruscas donde la tormenta la apacigua una oleada de tormentas que llevan a la desestabilidad emocional. Si eres el fabricante de tu telaraña, pueda que no te quedes atrapado en ella, pero sin darte cuenta ya eres dependiente de estar viviendo en una red sin valores.
El amor no se compra ni vende, tampoco se puede jugar con los sentimientos porque la confianza mata y la costumbre se vuelve rutina en hilos invisibles que te atrapan porque vives ahí.
Mi faro sigue enviando señal, mientras yo sigo observando, aguardando que aparezca esa barca perdida en la tormenta y que zozobra en medio de la nada, tambaleando y tratando de salir a flote.
¿Quién puede y desafía la tormenta?  Solo aquel que no le teme a los desafíos del corazón, que se aferra al timón y el vuelo de la gaviota le hace sentirse con alas para seguir en la lucha mientras permanezca con vida y logre encontrar la luz que le guiará a tierra firme. 
¿Dónde estará mi príncipe  que su amor no es fácil de encontrar? No lo  he encontrado en mis libros ni fábulas; tan solo delirios y aventuras donde pequeñas conquistas hacen quijotescas aventuras para un gran soñador que sabe de las beldades en jardines florecidos y pétalos de rosas con espinas hirientes.
Cuando aparezcas, desnúdate ante mí; no tengas miedo que lo corpóreo es el espejo del alma y la belleza interior, y sin contemplar la puerta, no se verá el templo ni la señal de bienvenida.

 
Estoy ebrio de las aventurillas, y estas ya no me sientan bien; busco ese fiel guerrero que allá en la distancia me contempla a través de mis escritos cargados de amor: ven ahora, muestra tu coraje y dale rienda suelta al amor, que el acorazado ha atracado en el puerto y no quiere volver a la mar, porque quiere otra clase de turbulencia; la del amor y pasión que brinda la vida en pareja y allá en mi bohío. Me cansé del amor en migajas de cada puerto.

__ Aquí estoy amor mío, con mi pizca de locura, con mi sonrisa en plenitud porque sé que ha llegado la hora de soñar que tus besos se lían con los míos, sueño  que bailo bajo la lluvia de tus caricias, sueño vida mía  que tus manos se enredan en mi cuerpo perdiéndose entre mis lunares y el tiempo, te sueño en el aire amor y dibujo sonrisas para ti, sueño contigo amor mío pero no solo sueño,  me duermo en tus brazos con todo este dispendio de emociones, sin poder llegar nunca a ese destino, te salgo a buscar entre la gente, camino imaginándome que te encontraré en la esquina de mi calle, en cualquier trocito de suelo donde solo quepamos los dos, pobre corazón mío, condenado de por vida por las cadenas de tu sonrisa, de esa mirada tuya carcelera de mi razón, nos miramos aquel día y sin saber ni cómo ni por qué,  la voz de mi alma me susurró…  este es el fin de tu camino, llegaste a tu destino, imposible descreerlo no quería  pero ese artífice del destino estaba escribiendo el epílogo de esta historia de amor, y en esa tarde tormentosa donde faltaba  el aire donde la tormenta se acercaba, el pensamiento cruel me preguntaba  ¿cuántas vidas todavía le hacen falta a este amor para volver a encontraros, y poder estar juntos al fin?, dejé  errante a ese pensamiento pues el destino nunca da respuestas, nunca es generoso, es caprichoso y desconcertante ante el amor.
Es locura amarte como te estoy amando, lo sé, pero me enamore de ti y de este amor  que fue imposible, pero sé que sueñas con mi ternura, que soy tu capricho en las noches de luna, que soy tu amor, que sueñas bailar en mi sonrisa haciéndome parte de ti, que te duermes soñándome en tus brazos en la oscuridad de tu soledad me sientes a tu lado, lo sé amor,  lo sé.
Vuelve a mí esta noche vida mía, y si dormido me encontraras, bésame amor,  bésame hasta el amanecer.

Cuando los padres de Pedro llegaron ya el departamento lucía ordenado y formal,  la mesa esperaba para una cena familiar, y luego de los besos y abrazos emocionados del reencuentro, eran una familia  como tantas brindando por la vida y el amor.

__Estás enorme Felipe _ dijo Amalia mientras el muchacho vestido con su ropa nueva sonrió agradecido__.  Nunca olvidaremos lo que hiciste por Pedro, lo sabes, ¿verdad?

__Siempre lo quise mucho, él hizo más por mí enseñándome cuando no podía ir a la escuela. Y soy muy feliz acá, con ellos y Fabián.

Amalia y Alberto habían escuchado asombrados la historia del muchacho apenas llegar cuando él junto a Fabián estaban en casa de Ana, e intentaron evitar el tema durante la cena.

__Hijo, nos arreglaremos en el hotel por unos días, no queremos molestarlos _dijo Alberto.

__No es molestia papá pasa que el departamento es justo, pero pronto compraremos algo grande y confortable.  ¿Piensan vivir en la estancia?

__No lo creo, hemos pasado demasiado tiempo separados  de ti, está lejos, la idea sería comprar un departamento cerca de ustedes,  aunque iremos a ver cómo anda aquello, hace años que nadie controla pese a que el capataz es honesto, pero no quisiéramos enterrarnos en el campo, quiero además de estar cerca, que mamá disfrute de los teatros,  conciertos y todo lo que no ha tenido.

__Me parece muy bien, y me alegro de verdad que hayan decidido instalarse en Buenos Aires, yo estoy en pleno cambio y poco podría haberlos visitado, ¿vendieron la casa de la playa?

__No. Les gustó tanto a ustedes que pensamos  desearían regresar, quizá ya con los chicos, está con los caseros, no necesitamos vender nada, solo compraremos un departamento  cerca de donde se instalen, el resto quedará en su lugar, es hora de disfrutar de la familia y de la vida. ¿Qué estás planeando hacer hijo además de un cercano casamiento con Guillermo y la custodia de Felipe?

__Por ahora ya  retomé las clases en mi cátedra de letras, en principio me aconsejaron no hacerlo, como tampoco estudiar en la UBA, pero he entendido que no tengo por qué esconderme, lo que diga la gente porque dejé la iglesia no es mi problema, nadie se opuso a que tomara mi cátedra como laico, aunque si me quedara tiempo daré clases particulares, y estudiaré abogacía como Fabián, pero para especializarme en derecho canónico y casos especiales de menores.__ Cruzó miradas cómplices con Guillermo y sus padres.

__Nos han contado Felipe que conociste el mar y que visitaste a tu familia, ¿verdad?

__Sí, alucinante los días que pasamos en la costa, y más que me dijo el abogado donde fuimos que quizá me indemnicen… por lo que pasé a manos del cura ese, yo no quería dinero pero luego supe que si me lo dan es que lo merezco, y al fin decidí que lo quiero para ayudar a mis hermanitos, ellos viven muy mal, casi apenas comen trabajando de sol a sol, y quiero sacarlos de esa vida, que puedan viajar, vivir acá, estudiar. Yo me quedaré  en esta familia, hoy mis papás no  me pueden dar nada y quiero estudiar, pero luego el dinero que me den lo usaré para ellos.

__Está muy bien tesoro, claro que sí, eres un hombrecito sorprendente.

__Pedro, Guillermo, con papá estamos felices de verlos así al fin. Hoy sé  que nuestro amor no ha sido en vano,  siempre hemos caminado tomados de la mano, existe el amor eterno, porque tú y yo nos amamos,  hemos seguido unidos, a pesar de los años

Cierto es que hemos sentido  nudos en la garganta pero ningún contratiempo espanta  a nuestro amor,  ha habido caídas, y nos hemos levantado, papá ha estado a mi lado  cuando más le he necesitado. Hijo, yo te miro y te digo, la vida es así, no llores ni te angusties, aún yo estoy aquí, la vida es una ruleta, es solo un juego de azar mientras unos se van, otros vuelven a empezar pero ese no es el motivo por el  que yo quiero contar nuestro amor eterno, es lo que quiero plasmar porque hay amores que vienen, y amores que van pero el nuestro, para siempre vivirá, juramos amarnos después de la muerte,  esa vez mi corazón  latió mucho más fuerte porque todo lo puede este amor que nos damos pues desde antes de los tiempos, nos amamos, y entre ustedes intuimos lo mismo, lo supimos con todo lo que lucharon por hacerlo realidad.

__Gracias madre, y en cierto modo los estábamos esperando porque hemos decidido casarnos en estos días, de manera simple, una ceremonia, quizás una cena con amigos, un asado en el estudio, no necesitamos más.

__Nos alegra mucho oírlo hijo, no hay que dejar pasar las oportunidades, y de hecho que ese casamiento de los amigos de Guillermo les dio esta, vívanla sin culpa, y a propósito, nos encantará conocerlos, ir al estudio.

__No lo dude Amalia, ya ellos los conocen  por lo que hablamos de ustedes, tal vez organicemos  algo allí para cuando nos casemos.

Cuando más tarde Pedro estaba dándose solo una ducha luego de haber llevado a sus padres al hotel, Guillermo atendió sin entusiasmo un llamado de Juan. Quiso evitar el conflicto y le habló de Felipe para ir por el lado legal.

__Pero Dios, Guille, no me lo puedo creer lo que haces por ese cura—Exclamó en tono duro, Guillermo supo que se refería a Pedro__: No me puedo creer que estés haciendo ahora esto. ¿Acaso vuelves a arremeter contra la iglesia y crees que vas a ganar? ¿Y cómo sabes que ese chico ha contado la verdad?

Juan no se lo había creído en absoluto. Entre las acusaciones reales, también había habido un montón de otras tantas que habían destrozado la vida a curas buenos. Era la otra cara de la moneda, sin embargo, ese no era el caso de Felipe. Guillermo  como Pedro le creían sin asomo de duda. El sufrimiento que el tema le causaba era demasiado real.

__ ¿Buenos como los que recibieron tus anónimos o los de Matías cuando yo veía a Pedro a escondidas o como el mismo Matías que se esconde por su homosexualidad tras una sotana, Juan? Estoy totalmente seguro que Felipe dice la verdad, esto no tiene que ver con mi eterno tema con la iglesia ni con lo de Pedro, es un chico al que pudieron robarle la infancia y la vida _ replicó con calma.

__ ¿Y vos qué sabes? Muchos chicos y  no  tanto han mentido sobre estos temas. Y que te impliques en eso me revuelve las tripas, y te puede traer problemas con los habituales clientes. Ese pibe no es tu hijo, apenas lo conoces y ahora es suficiente y te metes contra la iglesia católica, diciendo que no lo haces por Pedro. Sé que no crees en Dios, pero, ¿qué te pasa?

Guillermo estaba indignado de nuevo con lo que estaba escuchando, sin dudas ya no podía hablar  de nada con Juan y así se lo dijo.

__Y lo bien que hago en no creer… No sé si no creo en Dios, pero sí estoy seguro que odio a sus representantes, casi mataron a Pedro, no quieren darle su total libertad y ahora esto de Felipe, no creo en curas que se aprovechan de su posición para abusar de niños o violarlos. No te equivoques. ¿Y quién va a dar la cara por él si sus padres viven casi en una tapera con otra decena de hijos de todas las edades y apenas para comer? Vos no entiendes de dónde viene este chico, y te importa un bledo, pero así y todo es sano, noble, hizo de todo cuando Pedro casi se mata por esos curas que lo encerraron.

__Por el amor de Dios, quieres ir a por la iglesia en la que nos educaron nuestros padres, es un sacrilegio y para muchos sería inmoral. No me puedo creer que vayas  a hacer algo así.

__Inmoral es lo que ellos hacen y permiten, mis padres iban a misa todos los domingos, quizá de pequeño los haya acompañado obligado, pero desde que me hice responsable nunca he sido practicante, solo por Ana es que bautizamos a Fabián y lo sabes. Parece que pretendes defender al padre en esto aunque quizás haya violado a Felipe, pero no darme la razón por presentarle batalla.

__No puedes ir en serio, te echarán encima cien abogados, perderás clientes, de verdad creo que debes replanteártelo, Pedro no tiene nada para perder hoy, pero vos mucho __insistió en tono de incredulidad furiosa y severo rechazo.

__ ¿Qué? ¿Y transmitir la idea al nene de que no pasa nada porque abusaran de él, que no tiene importancia y que el cura que se lo hizo es un buen tipo? Tendría que estar preso. Además estoy seguro que se lo ha hecho a muchos niños más. Hace poco yo mismo lo he visto con uno.

__ ¿Y qué estabas haciendo? ¿Seguirlo?

__Te vas por la tangente, nunca harás hoy otra cosa más que criticar lo que haga, me recuerdas más a Miguel que al que una vez fue mi compañero y amigo. Pero nada de lo que digas hará que deje de apoyar a  Felipe, fui  a Entre Ríos a ver cómo era, y es un verdadero personaje de ficción que desentona entre hombres de Dios.

__Igual que vos, nunca pensé que vería el día en que atacarías como abogado abiertamente a la iglesia por una calentura.

__Vete al demonio, ya déjame en paz, no es por Pedro, en esto sí debo atacarla. Hay que delatar  a esos tipos. Son pederastas de la peor calaña. Son pedófilos y deben ir a la cárcel, sos vos el que no piensa como abogado.

__Por lo que cuentas ese chico no sufre y es un pibe feliz y sano. No es el primero al que le pasa, lo superará. No hace falta que conviertas esto en una misión sagrada ni que te pongas en ridículo.

__No puedo hablar de esto con vos, Juan, en realidad ya no tengo nada de qué hablar con vos __respondió Guillermo y apretó los dientes__. Lo que me estás diciendo es indignante. Según vos, ¿qué se supone que tiene que hacer la gente? ¿Defender a curas malvados? ¿Esconderlos? ¿Olvidar que existen? Porque eso es lo que ha estado haciendo la iglesia, y no hace sino empeorar la situación aún más.

__Son hombres santos _ dijo Juan con voz de hielo__. Dios te castigará si te enredas en esas cosas sumado a lo de Pedro.

__Ya basta con esas estupideces no existen culpa, castigo, pecado ni esas pamplinas, en todo caso más me castigará ÉL,  y también mi  consciencia si no ayudo a un niño o a varios a obtener justicia en este mundo.

__ ¿Por qué no dejas de proponerte misiones imposibles y te ocupas de tu propia vida, en lugar de ir por allí seduciendo sacerdotes y recogiendo perros callejeros con los que te cruzas y de recorrer el mundo intentando resolver problemas que no tienen solución? Regresa a lo nuestro, vuelve a una vida normal ahora que al fin te divorciaste de Ana,  no los conoces, ni a Pedro ni a ese chico,  por el amor de Dios, ten un poco de respeto por la iglesia.

__Gracias por tus consejos __dijo Guillermo y colgó echando chispas sin despedirse.

Estaba temblando de furia. No podía creer lo que había dicho ese hombre con el que alguna vez se sintió tan unido sobre sacerdotes que habían vulnerado todas las leyes con un desprecio total por la moral y la decencia y que se dedicaban a violar criaturas, sino que era evidente que Juan como abogado hubiese preferido esconderlo.

__ ¿Quién era amor? Me ha parecido oírte gritar cuando he salido de la ducha.

Guillermo daba gracias porque no hubiese oído lo que había dicho.

__Era Juan, no le he dado cabida, tranquilo, y hemos tenido otra bronca porque molesta y no tiene sentido, ya pasó, no creo que siga molestando.

__No estoy tan seguro, y mejor será que no sepa cuándo nos casaremos _dijo Pedro secándose  y sonriendo__. Siento cómo mi alma se estremece  al sentir el tacto de tu piel de seda, mi piel, mi cuerpo, mi ser te extrañan  pensando en tantas caricias  que de madrugada recorrían  nuestros cuerpos. A tu lado   todo es un sueño de amor  en las noches largas, frías, si tú no estás junto a mí el mundo se desvanece.

Hay noches en las que sueño con  esas puestas de sol,  en las largas noches de pasión, en las madrugadas tibias  en las que el sol rayaba el horizonte con los primeros destellos  del nuevo día saludándonos. Sueños, de algún modo, compartidos contigo, escuchando las más bellas palabras de amor, las más dulces canciones,  baladas románticas  que nos regalan sus dulces melodías  haciéndome soñar entre tus brazos. A tu lado se desbordan  los más bellos sentimientos  juntos al despertar cada día  con una nueva ilusión. A tu  lado tengo todo el amor,  el más puro sentimiento  que nace del corazón, el dolor de no tenerte seria inmenso
destructivo para mi alma,  la que solo encuentra paz a tu lado en las noches de tormento,  tormenta de sentimientos producidos por las ganas  de tocarte a mi lado. Escuchar tu voz aumenta  las ilusiones,  las ganas de estar unidos,  la alegría de vivir junto a ti,  de vivir nuestra vida,  de escribir nuestra propia historia.

Eres mi centro del universo,  mi luz al poseerme. ¿Cómo no amarte? Si tenerte es saborear la felicidad completa.  Amarte es tan fácil que no entiendo cómo pude estar sin ti todo este tiempo. Mi embeleso porque nada me llena como tú. Que amarte así es pecado, murmura la gente, díganle a mi corazón que no entiende de razones, el solo sabe amar... Y si amándote me condeno, acepto  cualquier castigo, porque amarte es mi locura. Mi embeleso donde se quedan todos mis besos con esas ansias de más.  ¡Porque amarte es gozo! Es condena, es pecado, es infierno, es tocar el cielo  con cada beso mi amor _susurró Pedro hundiendo la cabeza en la  nuca abrazándolo desde atrás _. Estoy loco por ti.

_Así es como he podido ver las vidas, entre las historias,  entre secretos que surgen del cántaro de barro, para después convertirse en recuerdos en las aguas tranquilas de las orillas del río, son aguas cristalinas que entre reflejos del cielo,  entre reflejos de enramadas doradas, sueñan con llegar algún día a juntarse con las aguas del mar; así los reflejos de los sueños que hacen tres vidas, flotando entre deseos caricias y anhelos, sueños que danzan entre los cantos saltando a los más altos silbidos como brisas brotando, belleza de ensueño,  el mejor regalo de la juventud, destrezas ganadas con la fuerza de sus deseos, reflexiones entre sensaciones que buscan los caminos de la vida que vendrá después, amor por la pasión del arte, vidas de preciosas pieles rodeadas por los colores del sonido del silencio, acompañadas por los cantos de las aves por los coros del viento, telas suaves que danzan como magia que se plasma entre los lienzos, reflejos de amantes del arte del movimiento, sueños que entre los reflejos sueñan con disfrutar las sensaciones al danzar; sueños cansados que van quedando dormidos, sueños que van quedando atrapados entre las letras entre los verbos, sueños que invitan al descanso del ansiado sueño, son así los sueños de las vidas dormidas entre los secretos que guarda el cántaro de barro, vidas que van surgiendo como los cantos impresos en el viejo papel del libro de versos, vidas que quedaron en meras ilusiones y anhelos, que no les alcanzan por momentos para sentir la dulzura de la pasión del amor, vidas que quisieran que lleguen las vidas del sueño con su antifaz dorado, dejarme sentir los cabellos jugando sobre  el pecho, produciéndome sensaciones que floten,  que ericen con la brisa de la tarde cada palmo de mi piel, dame cántaro de barro de tus vidas,  regálame de tus secretos, convídame de las sensaciones de las caricias suaves de los besos, déjame flotar entre los trazos grises del carboncillo, déjame adquirir el sutil tono de los sueños, dame la suave vida entre las sombras difuminadas entre las luces, déjame conocer los misterios para flotar desnudo  entre los matices;   gracias le doy a las vidas  que en las aguas tranquilas de las orillas del río vinieron un día con un cántaro de barro para platicarme sus historias,  gracias por esas vidas de labios suaves con seres pasionales que bebieron sus aguas frescas, dulces amantes que dieron su vida por probar de sus delicadas mieles, caricias envueltas en besos que me hicieron flotar entre sus refrescantes aguas, secretos que a la vida le pude arrancar cuando me dejó saciar mis sedes, aguas cristalinas y puras corran entre las sombras entre los reflejos de cielos turquesas, las regreso con las calmadas aguas de la orilla del río, junto a los juncos junto a los lirios, floten y silben contentas entre los dorados reflejos del follaje de los árboles del camino, salgan de este cántaro amigo, salgan hombres  hermosos de cuerpos divinos, con pieles suaves como pétalos de rosas con brillos citrinos, libérense las pasiones,  ericen la piel al cantar sus historias, libérense los dulces encuentros de las vidas que se encuentran dormidas, salgan dulces eventos para hacer los momentos que hacen las vidas, salgan del cántaro como la más dulce canción, regalen de sus amores,  den  a probar sus pasiones, dejen fluir la magia de sus cristalinas aguas, disfruten en su camino los reflejos del cielo, de los reflejos de las enramadas doradas, fluyan hasta llegar para juntarse con las aguas del mar.  Acá están las cartas, sobre la mesa han sido echadas, sin importar mi juego mi apuesta es por el amor, sí, no necesito mirar mis cartas pues sé que perder no puedo.
Mi apuesta es por el amor, a pesar de las heridas, a pesar del dolor hasta ahora obtenido por amores mal vividos.
Le sigo apostando al amor ¿acaso es el amor el culpable de nuestros duelos? ¿No es acaso la culpa de nosotros mismos que no sabemos amar de veras?
Apuesto mi vida por el amor, el amor romántico, el amor de hermano, el amor de amigo, el amor de hijo, el amor de padres, el amor sincero que tu mascota te brinda, el amor propio que tan imperante es hoy en día, el amor divino que todo lo permea.
Mi apuesta es al amor que amar no teme, al amor que amando se queda aunque una bofetada le haya sido propinada, el amor que respeta, el amor que une, el amor que lucha, el amor altruista y nada egoísta.
Mi apuesta es y seguirá siendo siempre por el amor, el amor que inmutable siempre se presenta. El amor que hoy tenemos cielito, que es de siempre, que no tendrá final.

Guillermo no se arrepintió ni por un instante de apoyar a Felipe y a Pedro en la lucha. En realidad, se trataba precisamente de apoyar a la iglesia católica, de defenderla, más que a los curas que la habían profanado. Y se trataba de defender el derecho de los niños a vivir a salvo, protegidos de todo peligro en un entorno puro y seguro. Juan le soltaba una diatriba defendiendo a la iglesia, a lo indefendible de ella y Guillermo estaba furioso pero sus momentos junto a Pedro a solas eran sagrados. Aunque se daba cuenta de que lo que empezaban a hacer levantaría ampollas cuando ciertas personas se enterasen, gente que, al igual que Juan preferiría que los pecados de un puñado de curas se mantuvieran en secreto y fingiría que el clero católico era infalible. Guillermo no estaba dispuesto a eso. Tanto como Pedro,  él creía en buscar la verdad, en sacar a luz el mal, en luchar por que se hiciera justicia a víctimas inocentes y en defender el derecho de los niños a no ser violados ni sometidos a abusos por parte de sus párrocos. Para él era evidente que se trataba de uno de los principios por los que merecía la pena luchar, pensara lo que pensase cierta gente, peor para quienes los censuraran. Guillermo creía cien por cien en lo que estaba haciendo. Esa noche, cuando Felipe los abrazó antes de irse a dormir, con un destello de fe en la mirada, no tuvieron dudas de que estaban obrando bien.

__Dime por qué nos rompemos hoy todas las reglas y que sea mi boca quien te arranque la ropa,  que tus tobillos reciban de primero a mis yemas  para que veas qué bien dan lo que no remedias. Verás a mi lengua por tus muslos dando guerra,  sintiendo en cada mimo ese latido de tus venas  al abrir a ti las puertas de sus dulces condenas  si encontraron el infierno que encierra  ese cielo.

Mientras sientes el pecado con toda su entrega dándole a la piel ese color que tanto me altera  cuando ante grato rubor mi alma se  doblega  en esa frontera donde danza mi cadera. Al tiempo que la magia sin su fuego da candela  y sí mi flama abrasa en esa pira,  no sorprenda
si un  rey me enseñó cómo el hielo se deshiela,  de ahí todo el calor que prende bajo tus prendas. Incitando a continuar sin importar lo que obtenga  si con tanto deseo es imposible que  nada  arda  si en tu manto de seda no me pides que contenga  la llama que desde el cielo raro es que no se viera. Por eso busco hacer sentir de los pies a la cabeza  y poder lograr en el hecho el mejor de los poemas  al tocarte con los dedos y mostrarte tal destreza  que ansíes poseer  los roces que más queman.

Así que vamos, dame audiencia entre tus piernas, entrégame los besos hasta que mis labios duelan  en ese océano de amor que con cariño gobiernas   junto al agradable tacto que los míos te revelan.

__Desvísteme con tu mirada, lentamente y arrópame  con besos apasionados. Atrapa mis pensamientos; agita este deseo  de fluir entre tus brazos. Saborea, deslizando todos los sentidos; préndete del néctar  sagrado de mis labios. Aprisiona mis anhelos que te invitan a recorrer  un camino profundo y divino, envolviéndonos en el amanecer; en un laberinto de locuras, deleitando el placer en todo su esplendor entre sábanas de seda, navegando en un mar de felicidad, embriagados en ardiente pasión. Sedúceme a perderme en el deseo de tus ansias, saciando tu sed de amar. Átame con tus ardientes y apasionadas caricias, haciendo de este amor una locura eterna. Donde siempre reina las ganas de seguir  fluyendo en la plenitud  desenfrenada y extasiada de este sublime sentimiento que nos envuelve en un viaje sin parar al séptimo cielo.

__ ¿Y cuándo nos casamos? Soy un hombre mayor, no quiero ser viejo _dijo Guillermo junto a los labios.

__El amor no conoce la vejez, siempre ha de ser como nuestra hermosa primera vez. Déjame apreciarte bajo la luz de nuestra alcoba, déjame pintarte con el lienzo de mi mirada; como ayer cuando te pintaba con mi alma el más hermoso cuadro, mi esposo eternamente amado; no te avergüences de tu hermosa silueta, vive orgulloso de tu madura belleza; aún me cautiva tu mirada coqueta, me enamora, me sonroja, me embelesa.
Aún de tu piel siguen brotando las más ardientes rosas, aquellas que robaron dulcemente mis primaveras,  aquellas que encienden a mis manos cuando en tu cuerpo ellas ahí aún se posan;
el tiempo no te ha robado  el sublime calor que tus poros aún derrochan; el tiempo no te ha amargado la miel que aún desprendes de tu boca.
Cuando te veo pintado de ropa, aún fantaseo con explorar lo que tu cuerpo a mí me esconde;
los años no borraron de tu cuerpo aquellas rosas las que me hicieron el más dichoso hombre;
mis dedos llegan hasta el cielo cuando te tocan, como ayer cuando volábamos entre las nubes;
aún siento la frescura de tu boca como la primera vez, aquella vez en que te tuve.
No cubras lo que siempre he amado y aunque ya haya sido mío, te anhelo... como en aquel tiempo ya pasado; quizá los años nuestros cuerpos arrugaron, pero también los años más cerquita nos juntaron; bésame sin temor de los años, bésame con aquella pasión en tus labios,
con la misma pasión con la que un día me besaron; no temas a la luz que nos descubre,
mira mis manos que en tu luz se han cegado, siente al hombre que ha envejecido a tu lado
enamorado de ti, de ti siempre enamorado.

_Perfumadas son las noches en nostalgia que rebuscando imágenes en calma,
llegan despóticos tus sacros recuerdos. El humo del cigarro gravita en lo real de mi efímera existencia  entre turbulentos insomnios que laceran, extrañando la tibieza de tus brazos.

Y en la frialdad inconmensurable de mi alma, siento la calidez necesaria de tus besos. Son mil noches las que marcan tu ausencia. Pinceladas de amores en el lienzo del dilema, letras en poemas que solo apuntan abortos. Más, con fina y menguada clarividencia encandilo las sombras que me bañan en la mar de esos cálidos momentos. Suspiros que brotan en la taciturna noche callada al vaivén de grises y fantasmagóricas fumarolas.

¡Amado mío, ven!, estrella tu cabeza en mi regazo. Abraza este cuerpo que mutilado de emociones, ansía con vehemencia tenerte a su lado. ¡Ven! Desgarra el dolor que puebla mi corazón. Mi angustiado, frío y descuidado corazón  que dejaste en desamparo de tus cándidos amores. Son tuyos los besos que aún están guardados. Son tuyos los versos que no fueron escuchados. Y en el lánguido transcurrir de la noche deja  que mis manos siembren en tu piel...
la semilla inagotable de ese amor renovado. Deja que por tus poros dilatados fluya la savia dulce del error perdonado a sabiendas que nuestro destino… está por Dios y por nosotros marcado.  Son tuyos los besos que aún están sellados. Son tuyos aquellos íntimos verbos…
que al marcharte… no fueron publicados.

Todavía guardo este diario de aquellos meses de martirio y ausencia, y me servirá al momento de ir contra la iglesia si es necesario recordar mi dolor –dijo Pedro cerrándolo y acurrucándose contra el cuerpo amado.

__Llegan primero las letras que te hablan de este amor, te hablan del deseo que se encierra callado, dormido en mi pecho, esperando aquel momento que piel a piel se liberen los sentimientos, se despierten los sentidos que hoy solo siente la mente y por momentos, por las noches engaña al cuerpo que, sin tenerte despierta la percepción inexplicable de sentirte rozando mi piel.

Desatan la envidia, extraña sensación que turba las ideas, mis propios versos ya logran amarte sin que mis manos rieguen de caricias tus curvas… sin que mis labios suavemente logren despertar tus poros, pues son ellos los que primero te besan, los que primeros llenan de caricias tu piel, despiertan en ti esa sensación de amor, pero lejos de ti mis besos y caricias lejos están.

Mis letras  viajan hacia ti, sentidos míos montados en estas líneas, que reciben la vida al fijar tú la mirada en ellos, los llenarás de calor, si en silencio no me lees… recorrerás estas líneas y será como si me dejaras besar tu piel con cada palabra que tus ojos vean, cada palabra que tu voz pronuncie, que sean los versos los que primero te hagan sentir este amor, aunque me corroe la envidia por no ser yo quien en besos escriba estos versos en tu piel.

Primero los versos… sí primero estos versos que en voz baja le cantan a los sentidos mis labios, se llevan su humedad, se llevan los besos, tantos besos que te debo y que recompensaré, aquel momento que tus rojos labios se unan a los míos, compartiremos ese manantial de amor que habita en las bocas… llenarás allí mis sentidos, mi garganta de nuevos verbos que hablarán de la pasión que día a día en la piel y en el alma viviremos.

Te veo  y no puedo ya resistirme, siento tu mirada unirse a mi mirada, siento tus labios llamándome  y mi boca está sedienta de tus besos, cómo resignarme  a no tener esa mirada,
a no sentir esos labios, a la suavidad de tus caricias, al sabor de tu piel, al aroma de tu cuerpo, a vivir sin tus suspiros, a no gozarte todas la noches y a descubrirte cada madrugada, cómo resignarme a este deseo, que fluye como mi sangre y que hace vibrar mi ser, con tan solo verte, pero cómo hacerte mío entonces, si tú parecías un amor prohibido y eres como el insomnio  que llega a mí cada noche, porque tú eres lo que el corazón no entiende y lo que la mente sí comprende, eres mi deseo, mi tentación y mi pecado, pero muchas veces el pecado, es la puerta de entrada al paraíso.

Al día siguiente apenas despertar los sorprendió el abogado. Se le había ocurrido una idea y deseaba hablar con ellos cuando Felipe no estuviera presente. Por eso llamó en  horario escolar.

__ ¿Felipe ha ido alguna vez a un terapeuta? _le preguntó a Guillermo que respondió el llamado.

__Me parece que no, nos lo habría contado.

__Creo que sería buena idea que lo evaluaran. Si le han quedado secuelas psicológicas del abuso, nuestra posición como parte demandante se vería reforzada. Y, quién sabe, quizá recuerde algo que no haya contado o de lo que ni siquiera sea consciente. Es una idea nada más. Es un chico con un equilibrio interior sorprendente, teniendo en cuenta lo que ha vivido. Aunque estoy seguro de que ustedes  tienen mucho que ver con eso –comentó.

Le impresionaba que esa pareja hubiese querido implicarse tanto con él, y saltaba a la vista que el chico y ellos se preocupaban por igual uno del otro. Ellos eran buenos con él, lo trataban con cariño y respeto.

__Nosotros aparecimos hace poco en su vida –dijo Guillermo con modestia__, y hasta entonces ya se lo había arreglado muy bien. Ahora tiene un techo, comida y educación, pero su estabilidad mental y emocional es por entero obra suya.

__Es un chico con mucha suerte _dijo el hombre.

Guillermo sabía sin embargo que el exabogado del Vaticano también formaba  parte ahora de la buena suerte de Felipe, al haber aceptado llevar la demanda civil, y sin cobrarles nada.

Antes de despedirse, le dio el nombre de una psicóloga con la que había trabajado en otras ocasiones, con resultados excelentes, sobre todo con niños en casos similares. Guillermo anotó sus datos.

__Por cierto, creo que les va a hacer falta para la psicóloga un permiso de sus padres. Puede que sin él no lo atienda. Los terapeutas suelen ser puntillosos al respecto.

__Ya lo necesitamos para matricularlo, comienza el secundario en un buen colegio, al comienzo no le gustó demasiado, es doble escolaridad, no está acostumbrado, pero sabe que Pedro y yo no estaremos en esas horas disponibles, tampoco mi hijo, por tanto al fin se resignó. Llamaremos a los padres para que nos firmen _dijo Guillermo sin que supusiese el menor problema.

__Tiene que ser engorroso y frustrante que ellos sean los tutores legales cuando ustedes tienen la custodia del chico.

__La verdad es que no. Es buena gente, hasta ahora han sido muy amables siempre que hemos pedido autorización, aunque opinaban que era caso perdido y escaparía del colegio, no creemos que ahora sea así. Al parecer con ellos lo hacía, y ha vivido en sitios insólitos, pero no lo quiere desde que conoció  a Pedro.

Fue Pedro el encargado de comunicarse con la madre, cuando luego de enviarle un mail esta llamó.

__ ¿Para qué esta vez? ¿Van a llevárselo a Europa de vacaciones? _preguntó riéndose. Le había impresionado que lo hubiesen llevado a la costa en el verano y luego a visitarlos. En su opinión su hijo tenía mucha suerte.

__No _ respondió Pedro seriamente__, es que nos gustaría que lo viese un terapeuta.

__ ¿Qué clase de terapeuta? _ quiso saber__. ¿Es que se ha hecho daño o está enfermo? Ese crío anda siempre saltando de un lado a otro. No me sorprendería.

__Se está portando muy bien, y no, él está bien _respondió con serenidad__. Me refiero a un psicólogo, a esa clase de terapia.

__ ¿Y para qué querría que lo viese un psicólogo?

Parecía muy asustada, y Pedro se preguntó a qué se  debía.

__Creo que Felipe intentó contárselo hace algún tiempo. Era muy pequeño, es probable que no se expresara de una manera muy convincente por aquel entonces. __ Con eso pretendía ofrecerle a la mujer una excusa airosa por no haber escuchado a su hijo en relación con algo tan importante__. Al parecer, Felipe fue víctima de abusos sexuales por parte de un cura de la parroquia cuando tenía nueve años, o diez. Vamos a iniciar acciones al respecto, la semana pasada presentamos una denuncia ante la policía contra el agresor, y, en cuanto lo acusen formalmente, presentaremos también una denuncia civil a la archidiócesis.

Al otro lado del teléfono se hizo un silencio sepulcral.

__ ¿Qué agresor? __preguntó la mujer horrorizada.

__El padre Ernesto _contestó Pedro, y la madre de Felipe profirió un grito agudo.

__! No pueden hacer eso! ¡Felipe fabula, miente! Ese padre es sanador, es un santo, es el hombre más bueno de la tierra. ¡Felipe arderá por toda la eternidad por difamarlo, ha ido contando mentiras sobre ese hombre de Dios! __Saltó como loca en su defensa para horror de Pedro.

__Lo he visto, y entiendo por qué se siente usted cautivada. Es un hombre muy atractivo, afable, pero el hecho es que abusó sexualmente de su hijo, y puede que de otros chicos de la parroquia. Está destrozando la vida a esas criaturas y eso no se puede consentir. La policía ha abierto una investigación, y Felipe no va a ir al infierno ni por eso ni por ninguna cosa, señora. Es la víctima de un delito sexual. __Pedro procuraba mostrarse lo más razonable posible y no perder los estribos.

__Es un mentiroso y siempre lo ha sido. Ya intentó colarme eso. Le puedo asegurar que no hay ni un asomo de verdad en lo que dice. Es usted el que cometerá un crimen si intenta meter a ese hombre en la cárcel. El padre Ernesto es un santo.

Oyéndole, a Pedro le entraron ganas de ponerse a gritar. No obstante se obligó a mantener la calma y la razón, debían de obtener la tutela y por ahora necesitaba el permiso para llevarlo a la psicóloga.

__Sé que es muy desagradable y que le costará creerlo, por el afecto que le tiene a ese hombre, pero sé desde que Felipe me buscó para que le enseñara yo, que dejó de estudiar por ese acoso, y que él ha engañado a todo el mundo, y va a salir a la luz la verdad. Hablarán otros chicos, pero mientras tanto necesitamos ese permiso para Felipe.

__No pienso darle ningún permiso ni nada que sirva para que acosen a ese hombre. No vamos a firmar nada que los ayude en esta empresa impía, qué horror de usted, que fue, o es cura. Y ya puede decirle a Felipe que se olvide que somos su familia si no retira la acusación sobre el padre Ernesto inmediatamente. __La madre dejó muy en claro su postura, acto seguido se despidió y colgó.

Pedro llamó enseguida al abogado para contarle lo que había sucedido y este no se sorprendió.

__Suele ocurrir. La gente se siente amenazada cuando se le obliga a enfrentarse a algo así, y es probable que ella se sienta culpable por no haber escuchado a Felipe.

__ No me lo ha parecido. Ese hombre es tan convincente y tan seductor… Yo  mismo lo comprobé. En cualquier caso, no quiere firmar la autorización, así que no podremos llevarlo a la psicóloga. __Pedro parecía desalentado.

__No se preocupe _lo tranquilizó__, de momento no nos hace falta. No corre prisa. Puede volver a intentarlo más adelante, veré de ayudar para que obtengan ustedes la tutela legal.

Pedro dijo que lo haría, pero no le había parecido que esa mujer fuese a firmar nada, y así se lo comunicó a Guillermo, que pensó que Juan había dicho más o menos lo mismo, aun sin conocer al cura, la de preservar el silencio en torno a la iglesia, sin importar lo que hubiese hecho ese pervertido.

No le contaron a Felipe de la conversación con la madre, no habría servido de nada.

Más tarde Guillermo recibió un mensaje esperanzador de su colega donde le contaba que los investigadores de la policía habían encontrado cinco casos más de abusos cometidos por el padre Ernesto en la parroquia de Felipe, correspondiente a chicos que habían decidido hablar, y otros dos en Entre Ríos, y que estaba convencido de que aparecerían más. Habían abierto la caja de Pandora del díscolo sacerdote, que había permanecido firmemente sellada durante años. La policía sospechaba que la archidiócesis había tenido conocimiento de algunos casos y lo había trasladado para que pudiera hacer borrón y cuenta nueva. Pero que, una vez en su nuevo destino, había vuelto a las andadas.

 Pero al final del día recibió un llamado del abogado.

__Guillermo, he tenido noticias de la archidiócesis esta tarde _ dijo contento__, quieren vernos__ agregó contento. Así que la semana que viene tenemos cita con el religioso que se ocupa de estos casos, en la archidiócesis. Es un viejo cabezota, jesuita, trabajé con él dos años en Roma. No nos lo pondrá fácil. Pero también es un hombre inteligente y puede que acabe dando su brazo a torcer. No tienen modo de defender al cura _le contó__. Hoy he hablado con la oficial, y están dando con más casos, algunas víctimas son hombres hechos y derechos ya, el mayor que he visto en la lista tiene casi cuarenta años. Tenía quince cuando el padre Ernesto abusó de él, recién salido del seminario. Todo esto pinta muy mal para él. Es evidente que lleva el problema desde siempre, y ellos lo saben. Esto viene a reforzar más aún la acusación.

__ ¿Saben algo de ese amigo de Felipe? _le peguntó Guillermo satisfecho con lo que habían averiguado.

__Un investigador de la policía ha hablado con él, pero como también suele suceder, lo niega todo. Yo no le creo, pues ahora dice que el padre Ernesto es la mejor persona que ha conocido en su vida, me parece que está demasiado asustado. El cura debió amenazarlo.

Tal como estaban las cosas, aun antes de que se concluyese la investigación, había cada vez más pruebas. El abogado le contó también que se habían presentado quince chicos más contando historias casi idénticas sobre abusos sexuales cometidos contra ellos por el carismático cura. El responsable diocesano quería reunirse con ellos y con el abogado sin Felipe. Iba a ser un encuentro de lo más interesante. El abogado le aseguró que todo iría bien, pero a Guillermo le preocupaba que la archidiócesis invirtiera todos los hechos en sus esfuerzos de defender al padre, y a la iglesia, en lugar de intentar compensar a Felipe por todo lo que le habían hecho. El abogado le advirtió que aun era posible que intentaran desacreditar y minar a Felipe, y que casi con toda seguridad sería lo que harían en esa primera reunión.

__Pero no se preocupe, Guillermo, lo conseguiremos _ quiso tranquilizarlo__, aunque empiecen pegando fuerte, no me dan miedo. Recuerda que un día fui uno de ellos. Eso me da una ventaja sin igual, aparte de que conozco a muchos de los jugadores, sobre todo a los que tienen poder. Conozco muy bien a ese prelado, es implacable, pero es justo y honrado.

Cuando Guillermo le contó la conversación a Pedro este no pudo evitar su curiosidad por el abogado, por los motivos que lo habían llevado a abandonar la iglesia, pero no se le ocurría aún preguntar nada, quedaron en verse el lunes, media hora antes en un bar a una cuadra de la reunión, y más tarde se lo contaron a Felipe.

__ ¿Y eso es bueno o malo? _preguntó este.

__Es el procedimiento habitual _respondieron con calma__. El prelado quiere vernos antes de hablar del tema, no hace falta que vengas, iremos con el abogado.

El chico pareció aliviado. Y esa tarde como la familia que empezaban a ser, fueron los cuatro al cine.

CONTINUARÁ.

HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS. CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES COINCIDENCIA.

LENGUAJE ADULTO. ESCENAS EXLÍCITAS.