"PROHIBIDO". CAPÍTULO TREINTA Y CINCO.

"PROHIBIDO".

CAPÍTULO TREINTA Y CINCO.

“¿Por qué tan lejos de los dioses? Quizá por preguntarlo. ¿Y qué? El hombre es el animal que pregunta. El día en que verdaderamente sepamos preguntar, habrá diálogo. Por ahora las preguntas nos alejan vertiginosamente de las respuestas. ¿Qué epifanía podemos esperar si nos estamos ahogando en la más falsa de las libertades, la dialéctica judeocristiana? Nos hace falta un Novum Organum de verdad, hay que abrir de par en par todas las ventanas y tirar todo a la calle, pero sobre todo hay que tirar también la ventana, y nosotros con ella. Es la muerte, o salir volando. Hay que hacerlo, de alguna manera hay que hacerlo.”

–Julio Cortázar, Rayuela-

 Partido de la Costa, 08 de enero de 2017.

Para vos, mi primera carta de amor _dijo Guillermo entregándola en mano, las miradas en una, las almas encendidas titilando.

Solo me faltó escribir una cosa.

__ ¿Qué? __preguntó Pedro.

__ ¿Te gustaría que antes de regresar, en presencia de mi hijo y Felipe, nos comprometamos?

¿Estás preparado para ser mi novio oficialmente pase lo que pase al regresar?

“Mi cuerpo se estremece en tu regazo y mi piel se enchina  cuando tomas mi cintura  y la  llevas hacia ti,  siento tus impúdicas  caricias, acariciar mi piel. Mientras,  tu mástil aparta dulcemente mi geografía, y  mi alma enloquecida lanza gritos  de pasión  cuando me tomas  en tus brazos para hacerme el amor.
Quiero que me lleves al infierno  y yo subirte al cielo...  Amor te necesito dentro de mí.
Necesito sentir cómo vas deshojando uno a uno los pétalos de mi  ardiente  túnel y ver cómo tus  humedades unidas a las mías  inundan mi oasis  con el néctar  divino de tu amor.
Siento tu respiración entrecortada  en mi cuello y tu dulce voz diciendo  muy quedo a mi oído te amo mi amor, y escucho tus gemidos y suspiros mordiendo gritos de pasión y  vuelvo a ser tuyo hasta ver  un nuevo amanecer.

Te amo, Guille”.

 Bastó la mirada de siempre, el sutil roce de mis dedos en el dorso de tu mano para encender la furia contenida en estos huesos que solo saben amar. De costado en la cama nos abrazamos con ternura infinita, con calor y fuego renovado, “¡Mi novio, mi novio!”,  pensé aun sabiéndonos atravesados por años de amor creciente y aterradoramente emocionantes. La sensación del primer beso que impregna, los labios que saben nuevos cada vez, ese aroma de piel deseada y la emoción irrefrenable en cada encuentro. Y nos besamos como niños y furioso  me muerdes y asiento, sí,  qué otra cosa puedo desear más que sentir ese dolor punzante que iguala al de mi corazón al verte. Te frenas y me miras, irrumpe la sensación antes que el movimiento y tomo tus cabellos y clavas tus afiladas uñas en mi espalda que las deseaba desde hace un siglo. Saltas sobre mí y el amor sucio e incontenible se apodera de nosotros y nos besamos locamente y no voy a soltar tu pelo y lo sabes y te gusta y la sangre que brota de mi espalda y el cabalgar desesperado y la cinta y el nudo. Ya no ves quién, te susurro algo prohibido y pides más. Las gotas de sudor embriagan en este momento, quién lo diría, y el ritmo nos aleja del piso, de todo y ya no hay miedo ni culpa ni dolor, ni vida ni vuelta atrás. Solo el golpe de tu respiración en mi oído y los te amo. El grito ahogado y la ilusión de más y volar juntos y abrazados chocando cosas al paso sin importarnos nada más. Pájaros, sol y luna quedaron atrás y solo pienso en vos. Caemos, caemos y damos de lleno contra el piso de nuestros anhelos y morimos un rato y suelto los nudos como puedo y te permito ver. Respiro profundo recuperando la vida perdida y ahí está mi amor, tan lindo como siempre, tan maravillosamente bello y quiero llorar. Me besas la punta de la nariz y reafirmas tu amor, como si hiciera falta y secas mis lágrimas. No decimos más, aunque en el aire se esparce el rumor: “Hasta mañana mi amor” y dormimos tomados de la mano. Mañana la cita a las diez.

__Quiero estrenar tu amor vida mía, quiero volverte a ver y llenarte de ansias de tenerme, quiero que me busques en los caminos de la vida y dejes en los jarrones de mi vida flores llenas de sonrisas, yo llenaré tu mundo de emociones nuevas, de pasiones nuevas, quiero despertarte las sensaciones dormidas que habitan en tu alma, déjate amar amor mío, déjate que te tenga en mi mundo, un mundo nuevo donde nacerán cada día para ti amaneceres blancos, amaneceres en mis brazos y en mis labios, despertarnos de nuestro sueño en la mañana y simplemente, empezar entre sábanas de lino blanco a soñarnos de nuevo amor, mis ojos no te dejarán marchar.
Se fue haciendo una costumbre para mí el soñarte, le puse nombre a la noche para poder llamarte cuando mi alma sola se siente, y te llama a gritos, entre desvaríos y deseos, entre ausencias y soledades, y en ese hilo invisible donde sujetarme quiero, estén tus ojos para sostenerme, para que mi sueño no desaparezca porque necesito soñarte aunque solo vivas en los adentros de mis pensamientos.
Esta noche amor mío me pondré a las puertas de tu alma, quizá sientas los latidos de mi ser, y mi perfume de amor llegue hasta ti.
Soñémonos amor de nuevo esta noche.

__Hallé en la cálida mirada de tus ojos remansos de ensueños y ternuras,  lagos en calma cristalina y tan pura donde desinhibidos se bañan mi despojos.

Y sobre ellos, tus cejas se enmarañan cual gaviotas en vuelo de ilusiones,  allí se enredan  mis locas tentaciones en el coqueto parpadear de tus pestañas. Hay un oasis, donde beben mis antojos las dulces mieles que causan embeleso, donde  deposito un beso en el panal ardiente de tus labios rojos.

Tu pecho tiene rosas palpitantes en capullo entre mis manos exhalando sus perfumes y en los espasmos de placer, tu piel resume que mi cuerpo, alma y corazón son solo tuyos.

Son de tus manos las caricias,  tan hermosas sensaciones sobre mi piel planeando en vuelo, en cada roce  de emoción me lleva al cielo de tus entrañas amante. Vibro en el nido de tu ardiente oscuridad donde mi leño se calcina bajo el fuego de tu llama pasional, donde me entrego para quemarme a voluntad, allí en tu hoguera. Hallo en tu encanto una sublime fantasía que se convierte en sortilegio  como este verbo que te adorna  cual ninguno.

__Quiero ser de ti... Ese beso en tus labios, caricia en tus manos, palabra de tu voz; tu mejor canción, melodía en tus oídos, mirada de tus ojos, hombre en tu cuerpo, historia de amor en tu piel, Guille.
El espacio que nos queda, entre la vida y la muerte, se nos llenará de recuerdos, y un segundo se hace eterno.
El espacio que me queda, entre besarte y perderte, se me llena de dulzuras, que se amargan si no vuelves.
No me atrevo a pronunciarte por el temor de estar vivo pero solo tu presencia me devuelve la alegría.
Y el espacio que tú llenas, promesa de amor eterno, se hace invisible en mi pecho, cuando me aprietan tus brazos.
No me queda alternativa, voy cediendo mis espacios para que llenes mi alma y mi cuerpo.
Todo mi ser te reclama, me he vuelto adicto a  tus besos, a tus labios suaves y carnosos,  a tus mordidas con pasión. Quiero que seas mío con  dulzura, con amor y con  arrebatos de locura. Con erótica poesía  porque lo que tú y yo  hacemos no se explica, se siente. Porque tú eres  como el día y  yo la noche. Eres azúcar morena y yo tu blanca sal.
Soy fuego y tú la pólvora  que activas cuando mis  manos recorren tu piel  centímetro a centímetro y me convierto en fuego  puro, e incendiamos la oscura noche, tu cuerpo desnudo  huele a una fragancia  de pétalos de rosas, jazmín, y plantas aromáticas.

Ardo en deseo de saborear  tu piel. Una rica  sensación que me  recorre por la  espina dorsal como una  descarga eléctrica, hasta  la punta de los pies, somos  como dos almas que bailan en el viento, suspendidos  en el tiempo. Como un  lujurioso juego, recorro  intensamente tu cuerpo  con intensa pasión y  deseo en una  vorágine  de pasión sin freno. Loco estoy de ti.

Ya quiero tenerte, llenarte de pasión, de mi locura. Sabes que soy tuyo,  deja sentir a tu cuerpo,  que sienta que es mío. Quiero quedarme dormido en tus brazos  pues soy tuyo. Bésame como solo tú lo sabes hacer, me encantas.

Dios me conduce cada día a expresarme con palabras, a donde vaya en mi corazón yo te llevo.

Ahora ven conmigo,  toma mi mano no me sueltes, agárrate de mis brazos fuertes, que mi cuerpo sangra por el trabajo y quiere unos besos.

__Llegué  a mi cuarto  y encontré la cama vacía, te busqué intensamente, mas no pude encontrarte, me tumbé sobre la cama y deposité mi rostro afligido sobre la almohada, e inmediatamente sentí tu aroma, tu esencia, esa huella que  dejaste impregnada en la suavidad  de las sábanas y la almohada, cierro los ojos y lentamente me vence el sueño y comienzo  a sentir tu piel rozándome y la exquisitez de tus labios, llenando este profundo vacío.

Y amorcito…   estás echado boca abajo delicioso como un néctar de los dioses, donde podía apreciar toda tu espalda ¡Esa humanidad que me hacía tambalear! Recorriéndola con mis manos empecé a besarla suavemente, donde mi lengua se volvía esclava de tu piel y me iba quedando sin aliento mientras surcaba esa espina dorsal tuya y acaricié tus nalgas muy sabrosas haciéndolas estremecer de par en par... Y mientras seguía besándote aumentaba la temperatura de nuestros cuerpos, donde tu sudor y mi sudor se mezclaban, logrando que de nuestras pieles un vapor empezara a emerger. Una fragancia especial se podía percibir también en el ambiente,  era única e indescriptible ¡Cómo no serlo si era el aroma de tu piel! Respondiste a mis encantos, a mi trato y a mi manera de amarte, en donde cada vibración tuya era un sismo de grado diez en nuestra cama. Encontrando en vos ese calorcito que mi cuerpo necesitaba, un gemido nuevo, un amor distinto, un sabor propio, una entrega única y especial.

__

__Hijito,  ¿has visto a Pedro? _interrogó Guillermo llegando a la cocina atraído por el aroma del café.

__Ni a Pedro ni a Felipe, desperté y no estaban, pensaba desayunar y buscarlos, ven, no deben de estar lejos, seguramente en el mar.

__Seguramente, pasa que le pedí comprometernos y temo que me apresuré, tal vez se asustó, a veces olvido que hace un mes casi se suicidó.

__Bueno, papá, qué genial. Al contrario, Pedro fue cura, creo que al estar conviviendo si formalizan se sentirá mejor.  Además cuanto antes lo hagan más fácilmente podrán hacer todo juntos,  desde la tutela del nene y comprar una casa, no te pongas paranoico pa, la pasamos muy bien en el mar, deben de estar por allí.

__Seguramente hijito, soy yo que temo por todo por lo que sucedió, pero seguro que tienes razón, a ver qué tal está este café. Desayunemos y vamos por ellos.

__Rico desayuno, ahora regresemos que ya deben de estar buscándonos _dijo Pedro abrazando a Felipe.

Caminaron algunas callejas hablando de las materias que el nene debería estudiar antes de marzo, de pronto Pedro sentía que se estaba convirtiendo en padre sustituto de ese nene hombre  con todo lo que ello implicaba, todo un trabajo de aprendizaje y adaptación para ellos.

Pasaban delante de una capilla, y Pedro quiso entrar, aún lo necesitaba cada vez que pasaba por una. Vio que Felipe se quedaba retrasado, de piedra.

__ ¿Felipe?

__No tengo la menor intención de pisar una iglesia.

¿Por qué lo haces luego de todo lo que te hicieron?

__Porque me gusta. Porque lo necesito, porque Dios no tiene que ver con los curas malos que me dañaron.

__Tampoco con que entres a ese lugar o que enciendas velas a los santos.

__Pensé que te gustaba, cuando estabas conmigo pasabas horas en la capilla.

__Porque estaba contigo, pero ellos son malos. Son todo un hatajo de ladrones y mentirosos y que entres solo sirve para darles más dinero que no necesitan. __Su tono era áspero.

__ Espérame acá, enseguida regreso, y vamos a hablar nosotros, no son todos malos como dices. Me siento bien entrando a la iglesia _respondió Pedro __.No estoy rezando a los curas sino a Dios y encendiendo algunas velas a los santos. Llevo haciéndolo años, desde que era más pequeño que tú. __Continuó caminando.

Al salir, Felipe permanecía en silencio, Pedro se armó de valor para preguntar.

__ ¿Por qué este cambio respecto  de la iglesia? No quiero que mi salida te aleje de ella.

__No es por ti, desprecio a los sacerdotes, a la iglesia y todo lo que huela a ello, si entré a la capilla fue porque estabas tú, y quería aprender a escribir, ya sabes que estaba y sigo atrasado.

Era evidente el enojo que le producía el tema y en ocasiones su odio a los curas se exacerbaba.

__Felipe, tu mamá cantó en el coro y fue organista en casamientos, ¿verdad? La religión no puede resultarte del todo ajena. ¿Por qué odias tanto a los curas, Felipe? Y no me digas que por lo mío, porque yo no lo hago, no todos son malos, Jorge no lo es, yo no lo fui.

__Porque sí, son malos. Hacen creer a todo el mundo que son buenos, y no es así.

__ ¿Cómo quién? __Pedro lo sentía tan convencido que su desprecio despertó su curiosidad__. ¿Conociste a algún cura malo cuando eras más pequeño?

__Sí. El padre Ernesto __respondió con un gesto furibundo que le sorprendió__. Era el cura de la parroquia antes que tú llegaras, hace menos de un año fue trasladado a Ente Ríos__. Jugaba conmigo mientras mi mamá estaba  en misa o en el órgano.

Pedro estuvo a punto de dar un traspié al oírlo. Evitó poner cara de susto o transmitirle alarma.

__ ¿Qué quieres decir con que jugaba contigo?__ Trató de adoptar un tono neutro pero de pronto se le encendió una alarma en el cerebro. Y el hecho de que él hubiese sacado el tema era una muestra de la confianza que tenía por él.

__Me besaba _dijo Felipe, mirándolo a la cara con aquellos ojos que a Pedro le llegaban al alma__.  Y me obligaba a besarlo a él, encima. Me decía que a Dios le gustaría y que quería que lo hiciese.

__ ¿Cuántos años tenías?

__No lo sé. Ocho o nueve quizá. Me dejaba tocar sus libros y estudiar en el sótano cuando mi mamá no podía comprarlos, pero me avisó que si le contaba a alguien me metería en un lío, por tanto tenía que mantener el secreto. No podía decirle a nadie  que me dejaba bajar. A veces me pasaba toda la tarde allí estudiando, nadie como tú se preocupaba por mí entonces, y yo quería estudiar, pero en casa no tenía cómo. Era cuando me obligaba a besarlo. Creo que habría hecho cualquier cosa con tal de poder estudiar. A veces se sentaba conmigo en el banco, y me leía o me pedía que leyera, y entonces me besaba en el cuello y luego me… ya sabes… hizo cosas… que yo no quería, pero él me dijo que no podría volver nunca más si no lo dejaba.

Pedro notó que empezaba a marearse al intentar armarse de valor. La imagen de la escena que estaba describiendo Felipe le revolvió las tripas. Quería hacerle mil preguntas, una vital, pero no sabía cómo formularla de una manera que no se sintiera avergonzado.

De pronto supo varias cosas, primero se sintió culpable por no haberlo sospechado en tantas veces que viera en los años a sacerdotes acompañados de chicos en la sacristía cerrada, dos, supo por qué había sido sacerdote sin vocación, no solo para huir de la vida de sus padres, sino para ser un sacerdote bueno que combatiera la corrupción desde adentro, y tres, supo lo que haría de ahora en adelante, la carrera que deseaba seguir.

__Él…  ¿Tú lo hiciste con él? __preguntó al fin, procurando parecer lo más afable posible, que no se sintiera juzgado, al tiempo que crecía su rabia hacia el sacerdote que desde ya se juró ir a buscar y conocer, capaz de  haber hecho aquello, abusar de un niño, de cuántos.

__No, no lo hice. Creo que él quería. Pero dejé de bajar al sótano antes que me obligara. Por eso dejé el estudio, Pedro, y por eso corrí a ti, cuando supe que no eras como él, y que podrías ayudarme a retomarlo.

__ ¿Qué te hizo?

__Solo me tocó, unas cuantas veces, ya sabes… ahí… y me metía las manos por dentro de los pantalones mientras yo leía. Decía que no era su intención, pero que yo era tan lindo y leía tan bonito que lo tentaba. Decía que era culpa mía, y que si le contaba a alguien me iría al infierno, y me metería en buen lío, por ir por allí tentando a los curas de esa manera. Decía que hasta podía ir a la cárcel, me metía miedo.

Yo no pretendía tentarlo ni tener problemas con Dios o ir a la cárcel. Por eso dejé de bajar y de estudiar. Después de eso, no fui nunca más hasta que supe de ti. Pero él venía a casa a visitar a mis padres los domingos después de la misa. A veces se quedaba a comer. Ellos pensaban que era lo mejor que les había pasado en la vida y que era un santo.

__ ¿Nunca les contaste lo que te hacía?

__Una vez lo intenté… Le conté a mi madre que me besaba, pero ella dijo que yo era un mentiroso que solo quería dejar de estudiar y que iría al infierno por decir esas cosas malas del padre. Entre el infierno y la cárcel, nunca le conté el resto. De todos modos, tampoco me habría creído. No le he contado a nadie, solo a ti. Por eso odié cuando te tenían preso, porque los conozco, yo sabía cómo estabas sufriendo. __ Felipe notaba cómo Pedro confiaba en él y se había sentido bien rebelándole el secreto que llevaba años guardado.

Se sentaron en la plaza, en un banco,  Pedro le tomó las manos.

__Felipe, eres consciente de que lo que hizo ese hombre está mal, ¿verdad? Que es él quien obró mal y que tú no tienes culpa de nada. Que tú no lo tentaste. Ese hombre es un pervertido y quería culparte a ti de lo que hacía él.

__Sí, lo sé _respondió Felipe__. Por eso  es por lo que he dicho que los curas son unos mentirosos y unos ladrones, excepto tú y el amigo de Guille. Yo creo que solo me dejaba tomar sus libros para poder hacerme esas cosas.

Había acertado de lleno, pensó Pedro. Todo había sido una trampa asquerosa para seducir a una criatura inocente y un abuso total de su posición de confianza en la vida del niño. Ponía los pelos de punta. Había podido hacerlo fácilmente en el sótano de la iglesia, donde no los vería nadie. De pronto se le ocurrió que tal vez otros niños de la parroquia no hubieran tenido la misma suerte. Gracias a Dios que la atracción que ejercía el estudio sobre Felipe no había sido tan fuerte como para que el cura hubiese llevado a cabo un abuso más allá. Y esperó, por el bien del chico, que esa parte fuera cierta.

__Felipe, ese hombre no debería ser cura, es un delincuente horrible. La gente va a la cárcel por cosas así.

__Qué va, el padre Ernesto nunca irá preso, todo el mundo lo quiere, incluidos mis padres. Los domingos, cuando él se presentaba en casa, yo siempre me marchaba. Prefería no estar cerca de él. Y cada vez que mi madre iba a la iglesia, yo le decía que me sentía mal. Al cabo de un tiempo dejó de pedirme que fuera con ella y me dejaba quedarme en casa sin decir nada. No volví a misa hasta que llegaste, y cuando supe lo que te hacían me juré no ir nunca más, y no pienso volver. Y ese tipo es un viejo asqueroso. __Su recuerdo le producía escalofríos.

__Cuánto lo siento, Felipe. __Y entonces añadió__: No está bien que nadie lo sepa. ¿Y si se lo hace a otros?

__ Probablemente ya lo ha hecho. Tuve compañeros que también lo odiaban. Nunca les pregunté por qué, pero me lo imagino. Eran mayores que yo y eran monaguillos, y sus madres también lo adoraban al padre. Todo el mundo lo quería. Ellas solían hacerle comidas y tejerle ropas. Les daban dinero  que necesitábamos en casa. De verdad que es un mal tipo.

Después de lo que acababa de contarle, Pedro sintió que se quedaba corto. Guardó silencio durante el resto del camino de regreso  pensando en lo que acababa de escuchar, agradecido de no ser parte al fin. No quería disgustarlo ahora con más preguntas ni que él se sintiera avergonzado por lo que había confesado. Pero imaginarlo como un nene de nueve años del que había abusado un cura le había afectado enormemente y deseó no sentirse como a veces aún sacerdote. Eran las cosas que salían en periódicos y noticieros pero nunca pensó que podrían sucederle a alguien que conocía.

Felipe se había hallado en situación de vulnerabilidad.

Su familia era numerosa y apenas tenía para comer, además ellos estaban obnubilados por el cura. Él deseaba salir de la pobreza, y estudiar, y ese desgraciado le ofreció la oportunidad, a cambio de…, no era de extrañar que hoy adiase a la iglesia, que se pegara a él y lo ayudara a salir. Lo emocionaba enormemente que confiara en él para contar semejante secreto. Quería hacer algo al respecto pero no sabía qué hacer ni por dónde empezar ni si en realidad era buena idea. Solo esperaba que le hubiese contado todo y ese cura no lo hubiese sodomizado, la posibilidad hizo que sintiera náuseas. Esperaba de verdad que no hubiese sido el caso, ya que de por sí, bastante terrible era lo que había contado y podría dejarle secuelas psicológicas permanentes. El pobre había sufrido mucho. Y su confianza en él le pareció un regalo aún mayor No podía pensar en otra cosa. Una y otra vez le llegaba la imagen del nene leyendo en el sótano, el cura con las manos metidas en los pantalones del nene culpándolo por tentarlo y amenazándolo con la cárcel.

 Se preguntó cuántas noches Felipe pasaría con esas pesadillas en lugar de sueños.

__ ¿Puedo contarle a Guille todo? Es abogado y puede aconsejarnos. No necesitas repetirlo.

__Sí, a él, sí, pero no quiero quedarme con mi familia, Pedro, por favor.

__Está bien campeón, ya veremos cómo conseguir la tutela, tranquilo.

¿Te quedas con Fabián? Mira, te está llamando.

__Sí, gracias, Pedro, te quiero mucho.

 Pedro encontró a Guillermo ordenando la vajilla y se sentaron a la mesa donde le contó lo sucedido.

__Pedrito, me dejas helado, aterrorizado.

__ ¿Qué se puede hacer,  Guille? ¿Tuviste algún caso alguna vez?

__No. A decir verdad no trabajamos con eso, es uno de los límites del estudio supongo, pero con lo del nene, dejará de serlo, no tengo experiencia en esto, no tengo idea de qué mierda se hace. Lo poco que sé de la iglesia es lo que padecí por tu dispensa, pero puedo averiguar, déjame llamar a Miller. Es un fiscal amigo, es gay, pero trabaja en comedores, y ayuda a gente humilde, quizá pueda orientarnos.

__Llama, por favor, si esto es así, al ir con los padres de Felipe, tendremos que estar preparados. Iré a cambiarme, tenemos clases de natación, ¿recuerdas?

__Mmm, sí, me asusté al no encontrarte, bueno, ahora me asusta lo que pueda acarrear ese nene si no hacemos lo que se debe. Ve. ¿Estás bien?

__Sí, Guille, todo me costó mucho, lo sabes. Cuando estaba allá, preso… solo mi diario y Felipe evitaron la locura o la muerte.

Él, mi sombra, mi yo solo miraba pensativo a la nada mientras se fumaba un cigarrillo y tu recuerdo me sostenía de la cadera, yo tenía el mejor de los panoramas y el más espléndido de los aromas; te tenía a ti, tenía la noche, tenía tus brazos y solo eso me bastaba, bastaba para perderme y volverme loco.
La noche se tornó multicolores y entre estrellas y un viento tan frío que calaba los huesos y penetraba hasta el alma, volví a besar tus labios color a muerte, volví a soñarme tuyo , abracé tu recuerdo y lloré junto a él, la noche se volvió madrugada, después salió el sol y cuando pude abrir los ojos me di cuenta que había perdido la razón; rodeado de café derramado, retratos cortados y hojas de aquel cuaderno que ambos llenamos por ningún lado, imagino que eso, puede llamarse amor...  No puedo calmar estar ganas de desearte y postrarte en mi cama, llenarte de caricias así como mis ansias por ti.
Quiero desprender tu ropa como loco salvaje, despertar tus instintos ocultos y que saques tus deseos perversos.
Deja que fluyan las emociones, quiero escuchar tu furia por querer explotar sobre mi cuerpo hasta saciar tu sed.
Piensa como yo que es nuestra primera y última noche juntos,  quiero que hoy sea un momento inolvidable.
Necesito de tu miel, sujétame hacia a ti, tócame tan fuerte como tus anhelos, hazme tuyo a la luz de la luna.
Vuela conmigo no pienses en las horas, sé cómo el tiempo avanza sin detenerte, solo tócame con todas tus fuerzas.
No despegues tu piel junto a la mía, solo goza nuestro calor, deja que sude una y otra vez, goza y disfruta de la pasión.

__Lo haré mi amor, claro que lo haré.

“Parecía que no habría una tarde parecida a esa.
Parecía que nunca me perdería de nuevo en su sonrisa, ni hallaría en otros soles lo que se escondía en aquel.
¡Deseaba que fuesen esos momentos eternos clausurados por el tiempo para no salir de ellos!
Esa noche lo besé con la locura que aún se desconoce, lo observaba y en ese silencio que nos rodeaba crecía de manera potencial un amor que no moriría”.

__Hazme sentir que vale la pena amarte. Y pondré un mundo nuevo a tus pies. Un mundo donde las lágrimas,  donde los nudos en la garganta por impotencia o distancia  serán cosan de solo un pasado que poco a poco quedará borrado porque de eso se encargarán  mis manos, mi cuerpo, mis besos, y  también mis labios. Hazme sentir que vale la pena cualquier tipo de espera, que cada beso tuyo, que cada palabra de amor será como una hermosa recompensa.

Hazme sentir que soy único, insustituible,  que tú me amas de una manera incorruptible, y  mi vida la dedicaré a hacerte feliz hasta el último día que yo respire. Hazme sentir que vale la pena, si por amarte  me condenan, que vale la pena luchar contra todo mundo porque mi amor será  solo tuyo aunque me aventaran al fondo del  océano amarrado de unas piedras.

Hazme sentir que puedo confiar en ti ciegamente porque de esa manera estarás  en mi corazón y en mi mente y  nuestro amor arderá como antorcha eternamente.

Hazme sentir que morirías si me pierdes, que basta una caricia de mis manos para desatar toda la pasión  que hay en tu vientre. Hazme sentir que vale la pena cada espera de tus besos,  que vale la pena tenerte por ahora y  cada minuto que pases a mi lado.
Me encargaré  de que sean los más bellos. Hazme sentir que tú eres  el hombre que necesito, que yo esperaba.  Y te amaré día a día minuto a minuto, hasta donde pueda terminar el infinito.

__Así es, soy ese hombre y vos mi único amor.

__ Guille, Miller, ¿es…?

__Amigo, no te hagas ideas raras, solo amigo de tribunales, hace tiempo que he cortado lazos con él, nunca fue tan cercano como Juan.

__ Tengo celos de ese tiempo  que pasaban juntos,  con Juan, con Ana u otro,  de esa calidez  que desprendías en el encuentro, celos hasta las sábanas  que pudieron rozarte, mientras yo solo me conformé  con soñarte.

Siento celos de ellos,  y de tus gotas de sudor  con las que solían  embriagarse excitados.
Celo la idea  de que suplantaban mi lugar  y te ibas confortando,  mientras yo moría  cada día un poco más  pensando en tenerte a mi lado. Celo a la taza  que te besa los labios, celo al viento, a la lluvia y al sol  que se asoma a mirarte  muy temprano antes que yo.

__Precioso, a mí me sucede lo mismo. Pero si hay alguien que sepa lo que puede hacerse es Miller, necesito saber cómo han llevado semejante situación otras personas y cuál es el procedimiento a seguir. También qué secuelas puede dejar esto en Felipe. No deseamos hacer nada que pueda herirlo, pero es una injusticia tan horrorosa que alguien pueda hacerle algo así a una criatura que desearía denunciar a ese cura en nombre de él.

__Y yo, no sé cómo estando dentro nunca es que lo vi, o quizá lo hice y no me di cuenta. No sé qué es lo más acertado pero hasta entonces, no le contemos nada a él.

__Miller estará al tanto de curas que hayan cometido delitos sexuales contra menores o sabrá a quien recurrir, confía en mí.

__José, Guillermo.

Al enterarse de quién era,  Miller soltó una exclamación.

__! Qué bonito que no me hayas llamado en meses ni hayas devuelto mis llamadas!

Miller había pasado casi un año tratando de comunicarse con Guillermo al saberlo divorciándose de Ana y separado de Juan y había sido él quien se negara a atenderlo, al fin Beto le había dicho que era un zombi, que no deseaba hablar con nadie, que había cortado con todo el mundo y que trabajaba como un esclavo. José había quedado preocupado, pese a que le envió varios e-mails, como Guillermo no había contestado a nada de lo que él escribía, al fin dejó de insistir, esperando que si deseaba hablar con él, lo llamara. Ya había dejado de albergar esperanzas. Y sin embargo, allí estaba.

__Perdón, José _dijo Guillermo casi arrepentido. Volver a oír su voz lo conmovía, era como volver a oír a Juan pues los tres habían estado conectados  por años. Pero ese caso era diferente. Lo llamaba por Felipe____. Mi vida ha cambiado mucho, José, separado de Juan, divorciado de Ana, me enamoré de otro hombre, y quiero casarme con él. No me reconocerías.

__Menuda lástima, te he perdido de nuevo _se lamentó él__. Seguro que ya volverás a estar solo.

__No es lo mismo esta vez _respondió Guillermo con las emociones a flor de piel__. Todo es diferente con Pedro. Nos costó mucho esto, y nos casaremos.

__ ¿Te va bien entonces? Te he echado de menos _le dijo el fiscal con suavidad. Ya nada es como en los viejos tiempos intuyo.

__Sí, ahora me va muy bien _respondió Guillermo y era sincero__.  ¿Todavía no te has casado?

__Bah, me parece que he perdido el tren. Me siento demasiado a gusto como estoy. Me parece que mis novios son cada vez más jóvenes. Me da un poco de vergüenza, pero me lo paso demasiado bien como para dejar esa vida.

__Yo pensaba lo mismo hasta que me enamoré de Pedro, ya te va a suceder.

_Bueno ¿y qué te ha hecho caer del cielo? __preguntó por último. ¿Solo deseabas saludar?

No era tonto y sospechaba que su llamada escondía algún motivo concreto. Guillermo siempre había sido una persona increíblemente profesional y muy centrada, incluso cuando estaban pasándoselo bien.

__Digamos que me encuentro en una situación compleja –reconoció__. Tenemos a un muchacho que ayudó a Pedro en un momento muy difícil,  adoptado de forma extraoficial. Bueno, no exactamente. Nuestras vidas se cruzaron hace unos meses, tiene familia pero desea estar con nosotros, supongamos que estamos haciendo de mentores, desearíamos ser tutelas legales, pero en el caso de Pedro es más difícil porque es… cura, lo sabes, ¿verdad?

__Sí, en el estudio me contaron, entonces quieres la tutoría del nene, podría ayudarte con eso, sí.

__No es todo, es solo parte, la familia del nene es indigente, tiene trece años y quiere estudiar, íbamos a pasar a hablar con ellos, viven en el Litoral. Marcos estaba viendo el tema de la tutela, no creo que se opongan si podemos darle estudio que es lo que desea.

Pensarás que estamos locos, pero es un chico genial, brillante, intentamos darle los mejores colegios, vivienda digna, Fabián lo adora, sin alejarlo del todo de su familia. Pese al trabajo, mientras estemos con él le daremos todo el afecto que nos salga que es mucho te aseguro.

Miller escuchó con paciencia, intrigado por lo que acababa de contarle. Por un lado, no se lo imaginaba acogiendo bajo su techo a un adolescente sin casa con familia lejos, pero, por otro,  había criado solo a Fabián, y podía ser un padre excelente, eso sin conocer a Pedro.

__Hablando con Pedro, le contó algo que nos dejó de piedra. En los últimos años han salido historias así en la prensa, todos las hemos leído. No es nada nuevo. Pero este chico nos importa mucho, mucho de veras. Cuando tenía ocho a nueve años, un cura abusó de él. Parece de película, pero este caso es peor porque no lo es, ocurrió de verdad. Un sótano oscuro, en una iglesia del Litoral, el cura dejándole estudiar con sus libros para engatusarlo y que fuese a su iglesia diciéndole que tenían que mantenerlo en secreto porque si no le traería problemas. Se sentaba a su lado, y le besaba, le metía la mano en los pantalones, en el mejor de los casos, para después recriminarle que todo era culpa suya, y lo amenazaba con que lo meterían en la cárcel  si se iba de lengua. Esto para él como la misma culpa tenía gran peso, para su propio mal, le intentó contar a sus padres y no le creyeron, lo pensaron vago y mentiroso, y más…  adoran al cura al parecer, como muchos. En definitiva los feligreses lo creen un santo. Como ves, es una historia de abuso típica, como se leen a diario.

__Cómo odio a esos desgraciados _dijo Miller __ he conocido casos en el comedor, de adultos inclusive. Y a mí como seguramente a Pedro me cae peor porque soy católico, de niño conocí a muchos curas como ese. Los aborrezco. Manchan el nombre de toda la Iglesia. Deberían expulsarlos sin más del sacerdocio y entrarlos al penal, en lugar de protegerlos.

También en las noticias se había hablado mucho de esto, de casos en los que los delitos de los sacerdotes se veían tapados por los superiores y por las diferentes congregaciones. El instinto le había dictado a Guillermo que Miller sería la persona indicada con quien hablar, y así mismo le ofrecía la oportunidad de recuperar el contacto con él como amigo.

__ ¿Violó al niño? __preguntó Miller, indignado por la historia.

__No creo, Felipe dice que no, pero ¿quién sabe? Es posible que haya reprimido el recuerdo. Era muy pequeño.

__Tienen que llevarlo a examen con un psiquiatra, a ver qué dice. Puede que descubra algo mediante hipnosis. Si el chico tuvo suerte, la cosa no pasó de un beso y una mano en los pantalones. Es una violación absoluta de confianza desde su posición de poder, por no hablar de delito sexual o de abuso sexual a menor vulnerable.

La reacción de José era vehemente como había sido la de Pedro y Guillermo. Le guió un poco y le quitó algo de peso hablarlo con él, pues estaba confirmando lo que él mismo había pensado.

__No sé qué hacer, José, nunca he llevado casos contra curas, no sé por dónde empezar ¿Con quién tendría que hablar? ¿A quién acudo? Al parecer es un caso grave de protección porque lo trasladaron de parroquia y provincia. ¿Lo dejo pasar? Si denunciamos al cura, ¿empeorará las cosas para Felipe? ¿O es mejor castigar al que comete los abusos? ¿Se puede ganar a la iglesia? A Pedro la dispensa casi le cuesta la vida. Nos hemos pasado horas dándole vueltas a las opciones.

Miller siempre había amado  Guillermo pero era pareja de un amigo, de Juan y ahora volvía a estar fuera de su alcance.

__Si te soy sincero, desconozco el procedimiento _reconoció él--, estoy al tanto de las noticias, como todo el mundo, pero no sé mucho más. ¿Quieres que indague un poco? Además, así tengo una excusa para volver a hablar con vos _añadió cariñosamente, y él al oírlo sonrió.

__No volveré a desaparecer, pero que no te oiga Pedro, es celoso, ya los presentaré _respondió Guillermo en voz baja __.Estoy bien, aunque pasé un año duro, ahora estamos bien, todos.

__Quiero indagar acerca de ese cura, ¿sabes los datos y si sigue en qué parroquia?

__Creo que Pedro quedó tan atónito con la historia que no se le ocurrió preguntarle al nene. Podría averiguarlo  o preguntárselo a Felipe. Puede que no lo sepa. No ha vuelto a esa iglesia desde hace años.

__ Es posible que presentaran otras quejas sobre él. Estaría bien saberlo. Por mera curiosidad ¿por qué no averiguas si sigue allí o dónde lo han trasladado? Un traslado entiendo que ya compromete en encubrimiento a la iglesia.

__Creo que el nene conoce a otros chicos que lo odian y supone que por el mismo motivo, monaguillos mayores que él entonces.

__Quédate con todos esos datos y deja que me entere de cuál es el procedimiento que se sigue para denunciar este tipo de hechos. Y, claro, tu chico tiene que estar dispuesto a hacerlo. Muchas víctimas prefieren permanecer en la sombra para siempre y no denunciar. Así es como tipejos como este consiguen salir impunes. Todo el mundo tiene miedo de agitar las aguas. O cuando menos algunas personas gracias a Dios, ya no es todo el mundo. Te llamo en cuanto sepa algo. Y vos, intenta averiguar el paradero y los datos del cura.

__Lo haré __prometió Guillermo __.  Y José, gracias. De verdad, gracias. Me ha encantado hablar con vos.

__No pienso dejar que vuelvas a desaparecer  __le advirtió__.  Aunque Pedro sea celoso. Te llamo en cuanto lo sepa. Cuídate.

__Lo prometo, gracias. __Cuando colgó se sentía mejor. Miller había sido la persona idónea a la que llamar.

__

Mientras vamos camino al club, recibo un mensaje de texto en mi celular  _ ¿a dónde estás? Lo leo y no reconozco el número, a lo que respondo _ ¿Quién eres? Pero nunca llega la respuesta.

Al llegar al club, ya la clase ha comenzado, es tarde, así que voy a cambiarme y al llegar a la piscina, Pedro  me pregunta: _ ¿A dónde estabas?,  y me doy cuenta que fue él quien escribió, continúa diciéndome ya han pasado veinte  minutos de la clase, por favor espera al siguiente turno.

No me esperaba su actitud, de no dejarme ver la clase, pero pienso  que tiene razón,  llegué muy tarde, así que me siento en los banquillos a esperar y le envió  un mensaje a mi hijo explicándole que saldré más tarde de la clase, lo entiende y me responde que okey, está con Felipe que le ha contado la verdad jugando en la playa, que le avisará.

Veo a lo lejos a Pedro, y siento cómo su mirada se escapa a ratos para verme, eso me encanta, me seduce, y hace más placentera mi espera.

Termina la clase, y van llegando los alumnos del siguiente turno, Pedro ha aceptado ese trabajo, me pareció bien porque es lo que hacía en la iglesia y fuera, son apenas unos días. Se acerca a saludarme con un beso en la mejilla, susurrándome _ te extrañaba __, mi cuerpo se estremece y alborota todas mis hormonas, con tan solo escucharlo.

Comienza la clase, y hacemos los ejercicios de calentamiento, suena el silbato del otro entrenador, en señal de que ya es tiempo de entrar a la piscina, y mientras yo entro al agua, veo que todos toman sus cosas y se van con el entrenador a otra piscina, la más profunda, Pedro nota mi rostro de extrañeza y me dice  _ es el turno avanzado, siempre toman la clases en aquella piscina, y  sonríe con un toque de picardía diciendo _ tienes toda la piscina para ti.

Se lanza al agua, y se dirige hacia donde estoy, mira alrededor, y se acerca más, al punto de que nuestros cuerpos se rozan, coloca sus manos en mis mejillas, tiene esa mirada y esa sonrisa que me matan, y me dice _iniciemos la clase, y se separa rápidamente de mí  _ vamos Guille, como lo hemos practicado, a flotar, mueve poco a poco las piernas, desplázate, sin miedos, yo estoy cerca.

“Ufff, pensé que me besaría, muero por sentir sus labios.”

No me queda  otra que seguir sus instrucciones, y así transcurren  treinta  minutos, estoy flotando en un intento de nadar de espaldas, Pedro se acerca.

_ Vas muy bien, debes soltar ese miedo.__ Y desliza sus dedos por el torso de mi cuerpo, haciendo que me detenga, y pierda el equilibrio, y él está allí como siempre, para sujetarme entre sus brazos, y me besa sorpresivamente.

Siento su hombría, sus ansias aprisionando mi cuerpo, acariciando mi piel casi desnuda, entrelazando nuestras piernas debajo del agua, sintiendo mis latidos queriendo salir del pecho, y cómo vibra cada centímetro de mi cuerpo extasiado, hundido en la pasión de sus labios, probando el dulzor de sus mieles, donde mi mundo se paraliza, no existe el miedo, no existe nada, solo él, solo yo, solo quiero estar entre sus brazos, sintiendo el placer que me brindan sus besos, que me hacen sentir un orgasmo sin siquiera nuestros sexos haberse tocado.

Alguien se acerca a la piscina, y nos ha visto besándonos, no le sentimos llegar, solo su voz al decirnos que hace rato terminó la clase.

Me siento apenado, la persona se aleja y Pedro me mira.

 __Tranquilo, no dirá nada __, y nuevamente me da un beso, que calma todos mis miedos.

Pedro sale de la piscina y toma mi mano para ayudarme a salir, busca mi toalla y me la coloca sobre mis hombros y espalda, arropándome.

 _Ya está oscureciendo, no te refríes __, y le veo una mirada tierna, que nunca he visto de nadie por mí, me da un abrazo,  estoy enmudecido  entre sus brazos, aún tengo en mis labios los gemidos que ahogué con sus besos, aún siento entre mis piernas esa divina sensación que me provocaron sus caricias, ese orgasmo que jamás había sentido, y que quiero repetir bajo el agua.

__Esta noche no quiero otra cosa más que tus labios en mi boca. No quiero otro sentir más que tus impulsos que provocan. No quiero otra cosa que llenarme los pulmones de tu febril aliento. Quiero que te quedes grabado en mí por mucho tiempo. Quiero guardar en mis brazos el calor que emana de tu cuerpo. Quedarme prendido suspendido en ti,  atrapado  entre tu espalda y tu pecho. Quiero que respires mis ansias contenidas. Tócame más allá donde palpitan los deseos. Dame la muerte o  dame la vida en esta ola de fuego. Esta noche no quiero otra cosa más que tus besos en mi boca, quiero que devores mis labios que
tiemblan sin demora, que me quites la cordura y me vuelvas loco. Quiero esta noche que llenes de ti todos mis espacios, escríbeme en la piel, cada suspiro de tu aliento.

Que no se evapore ningún suspiro con el viento. Quiero que me envuelvas con cada caricia, con cada beso. Ven atrévete sin prisas. Seremos infinitos. Seremos eternos. En un mismo cielo.

__

En la cena los chicos contaron aventuras del día, preferimos no tocar el tema de Felipe, pero fue él quien lo hizo.

__Guille, sé que ya Pedro te ha contado, puedes hablar, yo le he contado todo a Fabián porque es como mi hermano.

__Sí, viejo, me contó, es horrible. ¿Podrás hacer algo?

__No lo sé, hijo, veremos, nunca el estudio ha tenido un caso de esos.

__Hazlo, papá, llama a Marcos,  conoce jueces, debes de hacer algo _exigió Fabián con una mirada intensa.

Luego cambiamos de tema hasta que al fin se fueron a jugar a la play a la habitación.

__Te propongo un ejercicio para cuando seamos mayores.

__ ¿Qué?

__Que tengo varios fracasos de pareja y no los quiero con vos, sígueme.

- Perdón por haber olvidado ese deseo de ser el elegido. Porque olvidé que los detalles suelen ser indispensables,  no tiene por qué dormir el paraíso.

--Perdón por no recordarte qué fue lo que me hizo amarte. Por ocultar el brillo de mis ojos y solamente callarlo, aun cuando mi corazón me impulsaba cada noche a confesarlo.

__Perdón por ese desdén. Por no saber comprender  las súplicas de tus ojos, las que gritaban te amo. Por dejarme llevar por el orgullo y  no sentirme acobardado.

- Perdón por descuidarte tanto cuando me sentí seguro, cuando sentí que tú eras el afortunado y  que no habría hombre que te distrajera porque no estaban a mi altura.

_Perdón por llegar cansado y  rematar en vos mis cansancios,  mis días malos, mis frustraciones. Por no valorar tus esfuerzos, por no entender tus razones, y  hacer oídos sordos a tus reclamos, por hacerte sentir torpe.

- Perdón por darle prioridad solo a mis necesidades,  a mis caprichos, y  deducir que había alguien que fuera  responsable de tantos de tus olvidos.

- Perdón por olvidar las rosas. Las serenatas, los chocolates, por pensar que al trabajar, justificaba mis desplantes, que yo era la autoridad,  que para conservar el amor ya no tenía que esforzarme.

- Perdón por creer que yo siempre lo entregaba todo y que nada valorabas, por exigirte el trato anterior y que  olvidara de poner de mi parte.
- Perdón por dejar de repetir te amo. Por creerlo fuera de lugar y asumir que lo sabías,
por olvidarme de tu alma, de tus sueños, de tus deseos,  por negarme a complacer  alguna de tus fantasías.

- Perdón por dedicarme a mi cuerpo y olvidarme de mi alma. Por pretender vivir un sueño y  juzgar que me olvidabas sin ver que yo te alejaba al compararte con alguien que para mí no fracasaba.

- Perdón por desviar mi vista. Por no saber esforzarme. Por no entenderte en tus días donde deseabas escucharme que seguía igual de enamorado, o  tal vez mucho más que antes.

- Perdón por levantarte la voz, por haber perdido la paciencia, por solo percibir chantajes, por no aguantar las inclemencias, por creer que por amor, debías soportar lo que fuera.

--Perdón por culparte de todo y  olvidar que también sientes, que a veces necesitas descanso,  a veces ser el  inconsciente  que espera que lo seduzca, que lo enamore, que le regale flores y no ser siempre quien me busca.

- No me resigno a perderte. Sé que de verdad he fallado, y  aunque ha habido muchos silencios, malentendidos que pudieron  haberse evitado, quiero que en este momento te des cuenta que te amo. Es un ejercicio que deseo que siempre practiquemos, hoy parece tonto, pero la rutina a la que nadie escapa hará que alguna vez sea necesario.
__ Yo también te amo y tengo a Dios por testigo las noches que en vela he llorado por sentir que tú me engañas, que ya no me quieres, que ya no te gusto, y que el sueño de amarnos por siempre, por momentos se ha acabado.

__Si vos me amas y yo también no dejemos que el amor se apague. Volvamos a enamorarnos cada día. Quiero volver a conquistarte, retomemos lo que fuimos.
Los cómplices, los amigos y  los mejores amantes.

__ Aún despiertas en mi piel sensaciones que son tuyas y logras estremecerme con tu mirada nocturna,  todo mi ser te desea, haces que mi alma se sacuda.

Juntos, ahora.

Nos amaremos,  siempre y cuando peligre nuestra promesa los dos debemos hablar, confesar qué nos inquieta, nuestro amor soportará lluvias, ciclones y tormentas porque un amor cuando es sincero su caducidad es eterna.

Te amo Pedro.

__

Esa noche decidieron no contarle a Felipe de lo hablado con Miller. Con suerte deseaban saber el apellido del cura y si seguía en qué parroquia, con astucia podrían conseguir esos datos al viajar allí mismo. Y lo más importante, deseaban corroborar el aspecto del cura por ellos mismos.

__Hoy me he levantado meditando sobre todos los pasajes vividos en mi vida, recuerdos plagados de mucha emoción sentimental, historias arraigadas de una eterna felicidad, otras guardadas en un espacio donde abunda la penumbra por ser desgarradoras, pero que juntas han sido el sostén indestructible de mi sencilla y abierta página de mi existencia.
Imágenes engavetadas en el baúl del pasado, que yacen como fantasmas silenciosos en un desierto interminable, donde nos sentimos vivos con solo saborear en nuestros labios una gota de agua, y así volar y volar sin detener el vuelo hacia la libertad de sueños infinitos en nuestra mente.
Se apagan las luces intermitentes de mi memoria, pero insisto y lucho contra la amnesia, me declaro enemigo del olvido, y así recorro las cenizas enterradas por heridas que se esconden en las sombras de un porvenir desdibujado por un llanto que destila sus lágrimas tristes, dándole cobija a la incertidumbre en mi camino.
Mi alma desterrada sufre, mi cuerpo débil sucumbe ante la pérdida de placeres y deseos perdiendo el rumbo por la pasión de amar. Se aleja la claridad indisoluble de mis verbos, mi jardín llora por perder sus adoradas rosas, marchitándose lentamente por el veneno de un descuido mortal que impone la oscuridad y desolación del corazón.
Siento hilos finos en mis manos y piernas, como una marioneta que la guían, convirtiéndome en un maniquí del diablo, poseído por una autodestrucción frenética de mi propia conducta, donde no encuentro el verdadero destino a mi vida.
Mi boca produce un aliento a víctima de mi interior vacío, alimentando melodías melancólicas y devastadoras que nos llevan a ahogarnos en un mar de estiércol donde se divierte el engaño de demonios que flotan escondidos disfrazados de ángeles y yo no logro identificar la maldad de tan dañino proceder.
Mi propia locura encontró la perfecta cordura cuando apareciste vos, ahí, como inspiración para un cuadro con tu imagen y carisma, levantándome el ánimo, llenándome de fuerza mi interior, transformando el vacío de mi soledad, en un ser lleno de amor.
Con tu magia tocaste mis más frágiles intimidades, y hoy te digo: con vos todo, sin vos nada.
Simplemente gracias serás siempre mi amor.

Despierto por ese aroma  que destila tu piel, amanece y esos olores naturales a tus feromonas que se apoderan de los espacios vacíos de aquella habitación, incitándome a besarte por todas las dimensiones eróticas de tu anatomía y proseguir con nuestras locuras que gimen entre las paredes culpables que nos mantienen prisioneros por deseos de amarnos sin descanso, donde saboreamos cada instante llegando a ese clímax febril por tanta pasión desbordada en nuestros cuerpos. Te amo Pedro, lucharemos por hacer justicia pero no olvides el compromiso.

__

Y su cuerpo jamás había sentido placer alguno, a Guillermo le hicieron creer que así se debía amar a una mujer. Nunca llegó a sentir nada de eso, le faltaba sentir que hacer el amor no era solo acostarse sino era más que eso. Hasta que llegó el momento de que en su vida apareció ese hombre que lo deslumbró totalmente, lo supo amar y le dio esa demostración de cómo se le debe hacer el amor a un par. Donde sus manos no solo le tocaban la piel sino también el alma, donde un beso se transformaba en deseo, en placer,  donde cada caricia era brisa, donde cada movimiento era un jadeo constantemente. En donde  buscaba con la mirada y se volvía su presa y esto que nacía entre los dos era un amor encantado, en donde le temblaba hasta el orgullo y le hacía tambalear sus bases endemoniadas. Interrumpiendo sus pensamientos, entrelazando su lazo contra el tuyo amándose hasta  decirle ¡No pares amor continúa, hasta el amanecer!
Donde el calor de sus labios le marcaba el cuerpo, haciendo que se despojara de sus prendas, incrementando en él ese deseo insaciable porque lo hiciera suyo y serlo. Indudablemente cada gemido suyo y el de él eran melodías que hacían que el ambiente se calentara, y ya próximo a posicionarse de su cuerpo él le daba esa sensación de temblor entre tus piernas. Haciendo que en su interior hubiera una explosión de galaxias como nunca se vio en él, con nadie antes.

__El amor está avanzando, lleva en su mano otra mano, la frescura, la arrogancia, un sentir que no es extraño al saberse aceptado, que es recíproco y que es sagrado, que las almas se han juntado. Que las noches, son un pago, un aliciente para este pobre desgraciado, que perdido en tu mirada pide al cielo un contrato, una vida a tu lado,  y una pausa para verte, un día más, por todo un año.

__Atrévete está noche a ser indecente, a tomarme por la piel, a pasar los límites, a desafiar el destino, a amarme sin corazón, a desear ser mi eclipse, a mojar mis instintos y empapar los tuyos... Sí, Atrévete, te dejo entra y envenénate de mi sed,  de mi sabor,  de mi olor y conoce  cómo mi infierno  te quema lento,  cómo mis demonios  dominan a los tuyos,  cómo mis alas blancas  se vuelven negras y apasionadas,   cómo te inyecto una y otra vez haciéndote suplicar  por el antídoto de mi amor que irá envuelto  en el orgasmo  de un nuevo amanecer.

 Esta noche hazme sentir solo tuyo y borra cualquier caricia que tenga grabada
en mis recuerdos y tatúa con tu lengua la esencia de tu piel. Solo tú amor mío, haces arder este fuego que llevo por dentro, cuando me acaricias  con un suave roce de tus dedos. Solo tú vida mía, me haces arder de amor y  pasión al contemplar tus hermosos ojos, que  me hechizan y me devoran. Cuando me tomas entre tus brazos, puedo sentir tu respiración agitada y tu boca al  recorrerme hace estremecer  mi piel. El amor y la pasión nos poseen cada noche y  me haces tuyo  una y otra vez, sin darnos cuenta  nos sorprende el amanecer. Entre gemidos y jadeos la bella luna se  ruboriza al darse cuenta que tú y yo no tenemos ninguna prisa. La luz del alba acaricia nuestra piel  desnuda, mi cuerpo rendido sobre el tuyo
extasiados de amarnos. Impregnados nuestros cuerpos de todo el amor y la pasión, en mi boca llevo tu sabor y sabor a mí lleva tu boca. Para mí no existe  momento más delicioso  que acurrucar  tu sentir junto al mío. Para mí no existe  instante más exquisito que despertar  y sentir tu deseo  junto al mío.  Me muero sin tu mirar.  Si tus manos y las mías abordaran nuestros sentires, si tus besos gozaran  el placer en mis labios  sería algo sublime.
Amor te pienso  y siento  cuándo tu sentir a mí llega, siento como fuego  tu mirar en mi silueta, mi sentir  tu mirar siempre espera. Me fascina  tu mirada maliciosa cuando me invitas  a tus travesuras, esa mirada  que me suplica: hazte  cómplice  de mis aventuras, esa mirada  que me dice: te involucraré  en mis locuras. Tu mirar  excita mi sentir me dice une tus labios  a mi esencia, tus ojos me piden  déjame besar  tu hombría, ellos me susurran  tengo ganas de poseerte, cuando así me miras  a tus deseos me rindo, mientras te beso  con ansias  enamorado te digo, sí mi querer  acércate y poséeme,  mi fibra lubrica, al éxtasis elevémonos, con ganas amémonos. No existe más rica caricia que cuando  con malicias me miras, me posees  delicioso con tu mirar, tu mirada me acaricia, tu mirada me excita, tu mirada me desorbita, me muero si no me miras, me muero sin tu mirar.

__ ¿Estás bien? __interrogó Guille mientras me perdí en los dibujos del techo.

Sí, solo abrázame fuerte, abrázame, quiero envolverme con tu amor y tener  el calor que emana de tu ser, sintiendo tu corazón junto al mío  palpitando incansable al son de su melodía sin fin, estrecharme  al fuego candente de tu amor, sellando sobre mi cuerpo los  surcos de todas las pasiones.

Deja grabado en mis labios el elixir que tus besos me regalan logrando que mi boca absorba el sabor de tu néctar tan dulce como la miel, quiero quedarme en ti sin dejar de quererte, en espera de cada amanecer a  tu lado, con la magia que nace.

Ven abrázame tan fuerte y no  me sueltes, desnuda mis miedos, toma mis manos tiernamente y  dime despacio al oído que eres mi dueño, entrelacémonos así hemos de hacer cómplices a  nuestros ojos en cada mirada  con el placer de tenernos mi sol.

__

Pensaba que si los padres de Felipe no apoyan la denuncia, llegado el caso, intentarán poner piedras en el camino, quizá sea lo mejor no decirles nada y pedirles antes la tutela por otros temas, ¿qué opinas?

__Creo que sí, pero veremos al conocer al tipo, indagaremos entre otros fieles, a ver cuán hipnotizados están.

Pedro, quiero que me seas completamente sincero.

__ ¿Qué? Siempre lo soy.

___ ¿Entiendes que esto puede ser otra guerra con la iglesia, verdad? ¿Estás preparado vos para llevarla adelante?

__He estado pensando en ello, Guille, y la respuesta es que sí.

Me hice cura por un montón de motivos equivocados, pensé que era vocación y no lo era, casi muero y no he salido del todo, deseaba ser un sacerdote de los buenos y no medí que sin vocación no podría. Hoy sé cómo puedo ayudar más no siéndolo.

__ ¿En qué piensas?

__En hacer justicia por Felipe y esos chicos, pero ya sé lo que deseo hacer, puedo ser mucho más útil como abogado especialista en derecho Canónico, y ponerme a trabajar con organismos de abusos y delitos sexuales, que desde dentro de la iglesia.

Esa es la carrera que deseo, amor, estudiaré con ahínco para no demorar en montar en el estudio, una rama del derecho dedicado a este tipo de delitos, y pienso trabajar en contra de la parte negra que está enquistada en la iglesia.

Eso es lo que deseo, lo que Felipe me ha hecho ver.

__Me parece perfecto, amor, y estaré a tu lado, en lo que necesites, lo prometo.

¿Te he dicho que te amo?

__En estos últimos cinco minutos creo que no.

Entonces Guillermo evitó las palabras, y lo atrajo hacia el abrazo uniendo los labios en un beso que confesó sin palabras lo que estas no eran capaces de decir.

CONTINUARÁ.

HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS.

CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES MERA COINCIDENCIA.

LENGUAJE ADULTO.

ESCENAS EXPLÍCITAS.