“SUR”. CAPÍTULO CINCUENTA Y UNO.

“SUR”.

CAPÍTULO CINCUENTA Y UNO.

“Tus pies de hueso arqueado, tus pequeños pies duros. Yo sé que te sostienen, y que tu dulce peso sobre ellos se levanta… Pero no amo tus pies sino porque anduvieron sobre la tierra y sobre el viento y sobre el agua, hasta que me encontraron”.

PIES - NERUDA.

"Y tú, con delicadas pinzas de paciencia me arrancas
los dientes, las pestañas, me desnudas
el trébol de la voz, la sombra del deseo,
vas abriendo en mi nombre ventanas al espacio
y agujeros azules en mi pecho
por donde los veranos huyen lamentándose."

Julio Cortázar.

 Bs. As., viernes 12 de agosto de 2016.

Esos días los dedicaba a mí. Por eso, cuando yo decidí dedicarme a la criminología forense, y no seguir sus pasos, él no se opuso sino que me alentó, solo puso una sola condición: el día en que él no estuviera, yo me quedaría a cargo. Y yo… acepté.

No lo escuché. Ese día él entró sin anunciarse, sigiloso. Sonrió, me miró un rato y cuando apoyó su anotador sobre la mesa, yo giré y le devolví la sonrisa.

__Tenemos que hablar, Analía.

__

Rubén Maler repasó los estados contables de la editorial rápidamente y los colocó en el maletín, no le interesaban en absoluto. Había comprado la mitad del paquete accionario por motivos totalmente ajenos al negocio.

Buenos Aires 1903.

__ ¿Sarmiento? __preguntó Zaldívar.

__Sí, y a él se lo entregó el mismísimo Charles Darwin durante su segunda expedición a bordo del HMS Beagle a principios de los setenta. Este secreto viene de las manos más antiguas y hemos de velar por él  hasta que llegue el momento de ser revelado.

__Un momento _dijo Guille__. Sarmiento era Masón.

__El manuscrito… ¿Hipatía? ¿La Tabla Esmeralda? _completé mirando a Guille…

ANOTACIONES DE PÉRGAMO.

Egipto, Alejandría. 415 d.C.

Abandonó la casa de Orestes y emprendió camino hacia el templo erigido en honor al dios Serapis. No le importaba perderse en la oscuridad de la noche.

 Bs. As. 2016.

En esos momentos en que tus sueños van devaneando, me cuelo por ellos, repartiendo las caricias que me quedan en mis manos por tu piel.
Me gusta besar tus labios recién despiertos, notar el vaivén de tu sonrisa mientras me miras y salpicas su savia por mi boca sedienta.
Tienes los mismos colores de las estrellas en tus dos ojos que rematan a los míos y hacen desfallecer mi cuerpo mientras me miras. Pareciera que la noche aún no quisiera irse, que quiere empezar de nuevo a contar sus horas junto a ti, que la templanza de las pieles quisieran unirse de nuevo y todo va rodando en un amanecer que está llamando ya a la puerta.
Pareciera, que en esta luna que nos cortejó esta noche, se hubiesen unido nuestras almas como de costumbre sin más tapujo que el propio amor, y ahí, entremezclados tú y yo, hemos ido dejando verbos regados sobre unas sábanas sin más ambición que la de tenernos cerca. Pareciera, que en un rincón del alba me hayas dejado la brisa acurrucada, que no quieres tampoco que amanezca tan pronto, por no partir esta magia que nos une.
Me gusta ver clarear el día muy cerca de tu espalda donde resguardo mi frío, donde el mundanal ruido no rompa el silencio y la tenue música que siente mi corazón cuando respira tu aroma.
Me gustan tus amaneceres, tus despertares, verte, tenerte y retenerte en mis pupilas otras veinticuatro horas.
Pareciera... que te quiero.

---Analía, antes de que sigas, queremos decirte que tenemos preparado el bolso, hemos decidido ir con vos _dijo Guillermo convencido.

__No saben cómo me aliviarían, pero ¿y los chicos?

__No te preocupes, estarán bien. La cuñada de Pedro y mi… tía _titubeó Guillermo__ se encargarán de cuidarlos, por otra parte Pedro esperaba la firma del divorcio de su ex y una zona de exclusión que ya tenemos, por lo tanto iremos con vos.

__Qué alivio siento, aunque me moriría si corrieran riesgos, no entiendo nada de esta lectura de testamento, y necesitaré asesores legales de confianza.

__No temas, no nos pasará nada, y amén de ser tus asesores legales y de que no pienso en que Gutiérrez sea peligroso, no deja de preocuparme que tu padre y tu ex fueron asesinados en simultáneo y sospecho por la misma razón y que sos la heredera. Quisiéramos protegerte.

__Sí, lo sé, supongo que vendrán por mí si no podemos dar con el o los asesinos aunque yo no sé nada de lo que sea que haya disparado esta locura. ¿Puedo hacerles una pregunta? _interrogó Analía mirando a uno y al otro.

__Claro _dijo Guillermo inclinándose en el sillón.

__No quise hablar antes de esto porque ustedes no sacaron el tema, y no deseo ser indiscreta, pero aunque no me reconociste, estuve en la presentación de tu libro Guillermo, y conozco la historia de Sur, como lo que en ella se refleja y el paralelismo de los personajes con ustedes _afirmó ella__. Sé que se declaró que era una ficción pero también hubo rumores de que la historia era verídica, y sospecho que si no temen a nada, es quizá porque tienen la certeza de que no pueden  estar en riesgo, ¿es así?

Guillermo se aclaró la garganta sorprendido por la revelación, Pedro se le adelantó.

__Es verídico Analía. Lo ocultamos por mi ex, y por los motivos que puedes sospechar en una sociedad que no podría entenderlo, pero el caso es que mi abuelo era alquimista, en Polonia, que Guille y yo nos enamoramos allí, en una vida eterna en mi caso, efímera para él como soldado  que fue, pero que renació en el sur, y volvió a amarme, yo tengo para la ley un apellido que me dieron padres adoptivos y una edad creíble pero la real son casi cien años, y he luchado contra el mal en el sur. ¿Me sigues?

__Sí, leí el libro, en parte está tu diario y es impresionante lo que cuentas, y me alegro aunque no logro entenderlo del todo, ¿qué sienten de ser eternos?

__En mi caso, no lo he dimensionado aún, para mí esta vida se hizo eterna al encontrar a Pedro, luego de morir Ana, cuando viajé al Sur a escribir, todo era mi sino, no sabía que allí estaba él, el caso es que yo era medio ser, me faltaba mi mitad para ser el alma única en dos cuerpos, lo que Aristófanes define como alma gemela, y allí encontré esperándome a Pedro.

Cuando presentamos el libro y su ex nos halló, desmentimos su veracidad. Yo he vivido por ahora como cualquier mortal mis cincuenta años, pero no hace demasiado esa mujer quiso matarnos y acá nos tienes, a Pedro le disparó dos veces, a mí quiso envenenarme, y estamos vivos, por tanto creemos que al menos no hemos de morir por métodos convencionales _explicó Guillermo __.Y sí, en parte por ello deseamos estar a tu lado para cuidarte.

__Y en parte porque pensamos que el secreto de esos manuscritos que resguardaron tus antepasados y los de Rubén, puede  tener que ver con mi don, con la Tabla Esmeralda y la vida eterna, pero por favor, Analía, no necesitamos pedirte que no digas nada de nada de esto a nadie. De hecho es quizá lo que te ponga en riesgo y lo que los mató a ellos __informó Pedro observando directamente a la criminóloga.

__Increíble pero ahora todo cierra, es un gran alivio que me acompañen, porque no podría hablar de esto con nadie, y además tengo que  hacerles escuchar algo que ahora adquiere sentido, que solo he compartido con Belén, pero que ni la policía sabe, mucho menos Gutiérrez.

__No estamos seguros de nada, pero deseamos estar allí en todo momento donde vayas a partir de ahora, por otro lado si es una lectura de testamento solamente será ir y venir, y si en cambio encontramos sorpresa deseamos estar allí _afirmó Guillermo__. Ahora sí termina de contarnos cómo es que se separaron tu padre y Maler, cómo este terminó en Madrid, fuera de tu relación, claro.

__Por mi tema no se preocupen porque a la fecha ni yo sé por qué Rubén me dejó y terminó casándose con esa mujer en Europa, nunca lo supe.

__Hasta ahora, lo único que llama la atención es que Sarmiento era masón como el abuelo de Pedro, y que uno de los guardianes de los manuscritos  que nombraste era director del zoológico que es donde apareció el cadáver de tu padre, es demasiado poco para armar  una hipótesis, ni le digas a tu amiga, pero tal vez, encontremos algo en Madrid.

__Sigo entonces, tienen razón, recién  veo lo que dicen.

No confié de inmediato en  Rubén, por el contrario.

Bs.As., fines del 2001.

La reunión del consejo directivo había empezado a las doce. Mi padre como socio mayorista presidía la sesión, yo me encontraba a su izquierda, en frente se encontraba la gente de Mona Lisa, la empresa que había adquirido el cuarenta y nueve por ciento de las acciones. La sociedad estaba representada por Antonio Gutiérrez, quien de manera inmediata ocuparía el cargo de director en jefe. A su lado se ubicaba el representante legal y financiero de la compañía. Rubén Maler.

Yo conocía la reputación de Maler. El bróker tenía fama de buitre. Además de operar de manera muy agresiva en el mercado de valores, se dedicaba a la compra de empresas en declive para remontarlas y venderlas a precios exorbitantes. Era especialista en fusiones y por eso estaba allí. Pero yo no pensaba dejar que él sacara ventajas de la situación de la editorial.

Conocía la empresa de una punta a la otra. Sus vértices minúsculos, sus aristas profundas, las discusiones de pasillo y los reclamos del personal- Me había criado allí como les conté. Por eso, cuando supe  que el reconocido financista y playboy estaba a cargo de la operación que comprometía la compañía decidí participar activamente del comité directivo que controlaría la nueva editorial. No iba a permitir que un ave de carroña se devorase la empresa que mi padre se había desvivido por mantener. No concebía la posibilidad de perder a manos de un trepador desconocido.

Maler había abierto la sesión tratando de aparentar la mayor amabilidad posible. Habló de la historia que les conté, del renombre de cada uno de los autores que la casa había publicado, lo escuché atentamente, pero no pude evitar distraerme cuando noté que extrañamente, mi padre tenía la mirada perdida en el paisaje tras la ventana de la oficina: un innovador puente del arquitecto Calatrava que estaba a punto de terminar de construirse. Este cruzaba el Río de La Plata logrando una síntesis perfecta entre lo pacífico del río y lo revolucionario de la construcción. Sufría. Mi padre no lograba digerir la pérdida del control total de su compañía y yo no podía verlo abatido. Volví a concentrarme en Rubén. El hombre envuelto en un traje azul e impecable camisa blanca, parecía un modelo a la espera de una sesión de fotos para una revista más que un mago de las finanzas y las inversiones. Ya no lo estaba escuchando. Él lo notó, porque sin ningún sentimiento de culpa se ubicó frente a mí y me estaba recorriendo de punta a punta, aunque no lo noté hasta que el silencio fue evidente. Tenía la cabeza en otro lado.

__Perdón, me distraje _me disculpé. Me acomodé en la silla y esperé que Maler continuara con su perorata.

Antonio Gutiérrez se excusó cuando recibió un llamado y salió de la oficina. Mi padre aprovechó  para salir un momento también.

__Por favor _dijo mi padre__, continúe, señor, Analía es de mi total confianza, usted puede informarle todo a ella. Enseguida vuelvo.

Maler asintió y volvió  a mirarme. Me había conocido por los diarios, sabía que era una belleza pero no imaginaba que en persona lo era más, según me dijo luego. Prosiguió.

Lo escuché unos segundos mientras me acomodaba en la silla y me servía un vaso de agua. Rubén Maler era famoso por su temperamento y por su habilidad para mantenerse impávido frente a cualquier situación. Era una de esas personalidades difíciles de descifrar, un enigma que no hubiera tenido ningún inconveniente en descubrir si no me generara entonces tanto rechazo su egocentrismo. Ni hablar del modo en que acababa de recorrerme con la mirada. Una ola de calor  me arrebató el cuerpo y la rosácea se hizo presente. Noté que Maler sonreía burlón. Yo no era una adolescente como para no controlar mis emociones. A fin de cuentas, estaba allí por un objetivo concreto: sacar la mayor ventaja posible frente a la fusión.

La voz profunda de él me devolvió a la realidad. Había algo en él que me resultaba atractivo. Algo que no podía definir, un extraño cosquilleo y una aversión contrapuesta y simultánea. Una mezcla de rechazo y atracción que me desconcertaba. Me había molestado pero, por otro lado, el calor de esos ojos que parecieron desnudarme palmo a palmo había levantado la temperatura de mi cuerpo de manera inesperada.

__Dígame señorita, ¿no resultan suficientes las garantías que le di a su padre?

Yo sonreía, él pensó que era idiota.

_Creo que es mejor para todos resolver esto mano a mano __respondí yo, con una firmeza que no pareció molestarlo.

__ ¿No confía en mí? __inquirió él divertido, mientras se apoyaba sobre el sofá de la mesa de reuniones y se cruzaba de brazos marcando el trabajo evidente de sus músculos.

__No __contesté yo, desafiante__. La palabra de un señor, como le dijo  a mi padre, no es ninguna garantía.

__Usted sabe que soy cabeza de una de las sociedades de bolsa más prestigiosas del mercado de valores. La Comisión Nacional no admitiría menos que un señor entre sus miembros _rebatió Maler.

Dejé escapar una carcajada que resumía todo cuanto pensaba de la perorata del mercado de valores y de señores como Maler.

__la CNV __ irrumpí__ cierra los ojos cuando no quiere ver. Insisto, ni su dudoso carácter de señor ni su cintura bursátil son garantía de nada. Un par de operaciones exitosas en el momento justo y el mundillo financiero está a sus pies. Pero ¿cuánto va a durar? ¿Hasta un próximo efecto “X”?

Maler no pudo evitar reírse. La mujer no tenía ni la menor idea de lo que hablaba, es decir yo para él, sin embargo en mí había algo que le hacía acordar a alguien. A él mismo. Era desafiante, fuerte, y poseía una personalidad interesante, sin dejar de mencionar que le gustaba mi cuerpo y que se le antojaba ya entonces para otra cosa más que para una operación fructífera. Me siguió el juego.

__Discúlpeme, señorita, pero el hecho de que no le guste que su empresa haya caído en manos de mi cliente no hace de mí una mala persona y, menos que menos, un caballero de honra dudosa. __ Maler me estaba tomando el pelo. Soy un simple intermediario. Que me piense como una estrella financiera, es demasiado.

__ ¿Cuál es su comisión? __pregunté sin inmutarme, él sonrió__. Vamos, Rubén, usted no está acá por altruismo. Dígame cuánto le paga Mona Lisa. ¿El uno y medio? Le pago el doble si se aparta de la fusión y deja todo en manos de otra gente.

Concluí mi frase al tiempo que me cruzaba de piernas y clavaba mis ojos negros en el azul petróleo de los de él. Percibí desconcierto en él, que enarcó una ceja, incrédulo.

__ ¿Tanta mala fama tengo? __inquirió divertido con el modo en que estaban desarrollándose los hechos.

__Su trabajo no es el de un miembro de Cáritas.

__Gracias a Dios _contestó mientras reía__. Si fuera así. La gente como usted perdería su fortuna en un abrir y cerrar de ojos.

__ ¿La gente como yo?

__Exacto. Gente que hereda una fortuna de la labor incansable de sus padres o abuelos y la pátina en un abrir y cerrar de ojos, por incapaz.

Yo no podía creer lo que estaba escuchando. Él no solo se estaba burlando de mí, también me estaba llamando incapaz.

Rubén sonrió. Yo no esperaba semejante respuesta, no estaba acostumbrada a que me hablaran así, y menos que me discutieran. Era dueña de una cuantiosa fortuna y heredera de un imperio, todo el mundo me decía que sí. Eso me sacó de mi lugar, y Maler pensaba usarlo para su beneficio.

__ ¿Y usted se llama a sí mismo, señor? _pregunté incrédula__. Me ocuparé de que la CNV le revoque la matrícula de operador de mercado _grité indignada.

__ ¿Cómo intentó hacer con Ernesto de Alvear?

El golpe fue bajo, pensé. Sabía que mi ruptura con Alvear fue vox pópuli y mi aparición pública poco digna de mi apellido. Respiré, traté de no volver a cometer el mismo error.

__Nos estamos desviando del tema.

__Cierto, nuestro tema es esta empresa. Le anticipé que podemos llegar a un arreglo, pero no voy a negociar ni un solo punto de lo pactado.

__No esperaba menos _dije.

__No hay nada en el mundo que pueda ofrecerme para que cambie de opinión señorita. Lo que se arregló con la empresa con la compra del paquete accionario así se queda.

__Le puedo hacer la vida muy difícil en el comité _respondí.

Maler se acercó, su cuerpo firme que reposaba sobre la silla y dejó que sus manos se aposentaran sobre el apoyabrazos.

__Y yo se la puedo hacer mucho más difícil, Analía _dijo él.

Pude entonces sentir su aliento cálido. Lo tenía a escasos dos centímetros. La mirada clavada en mis ojos, los brazos apoyados a  mis costados impidiéndome moverme. El silencio que nos envolvía resultaba tenso.

__No me amenace, Analía. Soy mucho más de lo que puede manejar.

Maler se alejó de la silla y volvió a su escritorio. Repentinamente abandonó su postura de galán y surgió el hombre de negocios. Yo había subestimado al oponente. Maler no era mi padre y mi atractivo no estaba dando el efecto esperado.

__Le estoy ofreciendo una salida elegante _insistí. Creo que un tres por ciento es más de lo que cualquiera estaría dispuesto a pagar, tan solo porque deje que yo elija al manager de la fusión.

__No insista _respondió. En este caso no hay billete que valga _el sarcasmo en la voz del bróker no me sorprendió.

__ ¿”En este caso”? __inquirí__. ¿Es un asunto personal? ¿Algo pendiente con mi padre, tal vez?

Allí sospeché que había algo mucho más allá del poder y el dinero, pero luego, lo olvidé, no até cabos a la historia, a algo secreto, no sé qué imaginé, pero de seguro no algo que los pusiera en peligro.

__ ¿No le da miedo que sus preguntas destapen cuestiones que no está preparada para afrontar? __ me retrucó.

__No hay nada que no pueda manejar. De hecho,  si tiene algo pendiente con mi padre, resuélvalo en este preciso instante.

Me levanté de la silla con la intención de buscar a mi padre. Maler se acercó a tal punto que pude percibir su perfume. Yo no me inmuté y devolví la mirada sin pestañear. __Hágame el favor __intenté abrir la puerta__. Terminemos  con esto y resuelva lo que tenga pendiente con mi padre. Después haremos negocios.

__No existen problemas pendientes entre Rubén y yo, Analía __interrumpió mi padre, que notó la tensión entre ambos. Continuemos, por favor.

Maler sonrió, y volvió a mirarme. Me clavó los ojos como si fuera la última vez que fuera a verme. Yo no me inmuté. Gutiérrez volvió a la sala.

__ ¿Seguimos?

Los presentes asintieron.

Escuché el resto de la conversación en silencio. Malar continuó la charla con mi padre y, eventualmente, me miraba desafiante. Yo, devolvía el convite sin amedrentarme. El teléfono de Gutiérrez volvió a interrumpir la reunión. Se disculpó y salió, no pasaron más de dos minutos y regresó.

__Señor, los escribanos nos esperan en la sala contigua.

__Perfecto. Por favor, Analía, continúa vos, hija. Yo firmo los papeles, y luego tengo otra reunión. ¿Está de acuerdo señor Maler?

__Encantado __respondió el financista. Luego sonrió y me volvió a mirar. No pensaba dejarme escapar en ningún sentido. Solo que yo no lo sabía entonces.

Cuando mi padre y Antonio se marcharon, Maler tomó su maletín y casi me ordenó.

__Vamos.

Yo no tenía intención de ir a ninguna parte con él, pero repitió.

__Vamos.

Y sin saber por qué hice caso al imperativo poco sutil.

__ ¿Dónde? _me sentí en desventaja.

¿Desde cuándo le hacía caso a un total desconocido?

Pero Maler no dio respuesta ni tiempo para pensar, simplemente salió de la oficina y llamó al ascensor. Yo, lo seguí sin decir palabra y solo hablé cuando noté que estábamos en la cochera del edificio.

__Perdón, ¿me puede decir adónde vamos?

__No _respondió y enfiló por Alicia Moreau de Justo.

La fusión de la empresa se firmó, él recuperó lo que su antepasado cedió, con ello quizás algo más, y necesito ahora que sé que no los pondré en peligro, hacerles oír su último mensaje, es del día en que murió mi padre, no sabía en quién confiar, pero lo de Rubén fue una muerte anunciada que nadie ya podía evitar.

__ ¿Cómo? __dijo Guille.

Vengan.  Me dejó el mensaje el miércoles en que murió papá, a horas de su propia muerte.

“__Anni, soy Rubén. Escúchame bien. No puedo hablar mucho.

Se lo notaba agitado, hablaba a toda prisa, casi como si no quisiera perder el tiempo en respirar.

Yo salí del baño corriendo y alcancé el contestador cuando el mensaje llegaba a su fin. Presioné el botón de repetir y sentí cómo  me latía el corazón. Volví a escuchar la angustiada voz de mi amante de antaño, y supe que papá estaba muerto, por ello supe que  aunque lo encontramos el viernes, había muerto el miércoles.

__Fueron por tu padre, vienen por mí y, si no haces exactamente como te digo, van a ir por vos, porque sos la heredera de la editorial.

Parece aterrado. Guarda silencio por unos segundos y continúa.

__Analía, confío en ti  y tú no confíes en nadie. Están muy cerca, en nadie.

Y la comunicación se cortaba allí, y supe que papá estaba muerto, que lo matarían a él, que yo no sé qué debo hacer ni por qué y que no puedo confiar en nadie, ni siquiera en Gutiérrez, por eso te llamé, Guillermo.

__Está muy claro que estás amenazada por ser la heredera de la editorial y que el secreto que buscan está allí, y que caerá cada director o dueño hasta que lo hallen _dijo Guillermo preocupado__. Con más razón no nos separaremos de vos. Hiciste bien en llamarme. También es claro que o no alcanzó o no lo dejaron decirte quién es el asesino, ni qué es lo que busca, apenas pudo advertirte.

__Pero es que no sé cuál sea el secreto ni qué es, menos quiero ser dueña de eso.

En ese momento la chica prorrumpió en llanto, y al tiempo llamó Gutiérrez, Guille atendió y puso el auricular al oído de Analía.

__Nos vamos a Madrid __le dijo ella convencida mirándonos__. Te veo en el aeropuerto.

___

__No Pedro, viajen tranquilos, en un rato iré a buscar a Dora y a Cuca, Ivanna y yo estaremos atentos, los chicos estarán bien. Amén de que apenas viajan por unos días _ alentó Agustín.

__Si fuese solo un testamento, horas, pero tememos encontrar mucho más, ya despedimos a los chicos, y duermen, es mejor así o mi niño comenzará a hacer mil preguntas. Ni bien nos instalemos llamaré y a él cada día.

__Lo sé.

__No siempre tendremos señal, de pasar algo, deja mensajes en el hotel, por favor hermano, si llamaran del penal, ahora mismo Guille está avisando a Gaby y a Beto por si pasara algo con Camila.

__Estaré en contacto con ellos, trabajo allí, ve a descansar un rato, Pedro, los llevaré a Ezeiza.

__

__Amor, ¿les encargaste el caso del nene intoxicado por el plomo?

__Sí, cielito, tranquilo, quizá en Europa demos nosotros con esos dientes macabros, veremos.

Ven acá, ya está todo preparado.

Otro día ha pasado,  las penumbras anuncian la llegada de la noche, otra noche pensándote y deseando tenerte, de verme reflejado en tus ojos, y de sentir tu respiración, otra noche que mis besos volverán a ahogarse en la almohada, otra noche que mis labios quedarán sedientos de pasión, otra noche en que los suspiros, se perderán en la inmensidad del silencio, otra noche donde tu aroma, es lo único que aún permanece  impregnado en mis sábanas, otra noche en la que solo la luna  es mi compañía e ilumina la oscuridad de mi cuarto, otra noche para extrañarte, otra noche para desearte, otra noche para amarte y otra noche para tenerte,  como siempre en mis sueños.  No sé cómo soportó Analía ese abandono, estaba muy enamorada.

__Nos unió el destino y esos besos, que apasionadamente nos dimos, esa voz y esa sonrisa
que me cautivaron  y con cada amanecer, fui descubriendo tu luz interior, esa luz que me da paz,  cuando sueño que amanezco contigo, te sueño y siento tu mirada, te sueño y siento en mis labios  el fuego de los tuyos, te sueño y lentamente nos fueron  unieron los mismos anhelos y hoy, en mis sueños siento tus caricias, esas caricias que me hacen temblar y bajo mis sábanas muero, cada noche, sintiendo el roce de tu piel, ese roce imaginario, que lentamente transforma los cuerpos en una sola alma, no sé si tú me sueñas, pero yo solo sé soñar contigo.

 Sí, hoy quiero hacerte mío otra vez  sin dudas, ni preguntas, solo quiero amarte y sentir el calor de tu piel, atraer la mía en deseo y sensaciones que acaricien mi alma por dentro y por fuera, que retumben mis oídos al sentir tu lujuria en cortos movimientos.

Que salga también mi pasión a volar y se estrelle con tu cielo, que recorra  bien los caminos que lo llevarán al huerto del edén, frutas en deliciosos sabores encontraremos  y con el almíbar de tus labios friccionará cada parte de mi cuerpo dejando el sabor de tus labios impregnados en mi piel. Busca mis caricias que también  contemplen tu puerto, quieres que me arrulle en tus brazos y conduzca mi pasión adentrándose en  las profundidades de tus olas que envuelven y mojan mi piel de pasión.

Mis encantos atrapan la pasión de tu amor, te excitan y no quieres dejar de amarme, pide más de mí sin control  sin medida y te vuelves loco perdiéndote en la cumbre donde te doy de beber y calmas tu sed embriagándote de su sabor. Las horas pasan y pasan, pero eso aún nos importa si todos nuestros anhelos y deseos los hacemos realidad. Nuestros cuerpos desean juntos ser amados y disfrutar de lo bello que siente el ser correspondido y amado en un momento de entrega de amor.

Cada noche te busqué  entre mis verbos,  y entre mis recuerdos,  pero no pude por años encontrarte, y solo pude verte en mis sueños, como anhelo volver a tenerte y así revivir esos amaneceres,  esas tardes de caminatas o esas noches de pasión,  mas cómo poder respirar  en las mañanas  cuando me faltaba el aire,  cómo recordar tu mirada  si no llegaba a conocerte,
cómo tenerte si nunca te tenía o si te tuve, en ese hoy no te tenía, mas, pasaban las horas y los días,  y trataba  de encontrar esa mirada  en cuantas personas veía, y trataba de recordar aquellos momentos, ya olvidados y a veces dudé de mi cordura, o si realmente exististe alguna vez o habías  sido producto de mi imaginación, por eso solo esperaba  en silencio encontrarte, y por ello seguí  esperándote, mientras las horas, los días, los meses  y los años pasaban sin piedad, pero yo seguí buscándote y caminando, caminando…, hasta reconocerte en el hostal.

“Arde mi página al plasmar en ella mis variadas y sorprendentes anécdotas, del que al contemplarlo siempre he creído mi  sur, mi mar.
La mayor parte de mi vida ha formado parte de mi entorno y es casi tan necesario para mí, como el respirar.
Se me agolpan las ideas, forman cortocircuitos que aparecen y se van entre fragmentos donde las chispas y los relámpagos, simulan arder reflejados en mi página blanca, que hasta el momento virgen, protesta inquieta doblándose con la brisa existente para desechar los funestos reflejos que el fuego haría que ardiera y acabara por devorarla.
¿Quién, sino yo mismo podría decir que es parte integrante de mi espíritu?
Es mi centro, y cuando las distintas circunstancias me han llevado a vivir alejado de él, me he sentido en el exilio.
Mi admiración por cada cala, cada golfo, cada istmo, que él baña, es andar vagando por paradisíacos caminos y entrever en cada centímetro de suelo, tesoros escondidos.
Sus mareas, sus envolventes y variadas olas, su quietud y su bravura me infunden las más bonitas, tranquilas y controvertidas ideas así como alucinantes sensaciones.
Lo amo, lo respeto y le temo.
Nunca podré olvidar el cúmulo de sensaciones vividas, cuando en un viaje de recreo dominical, toda la familia, invitados por unos amigos a pasar el día con ellos en una pequeña isla, ya de regreso, nos sorprendieron unas olas gigantes de aproximadamente tres metros que junto al fuerte viento, dejaban la lancha oculta en el hipotético suelo y la veíamos tan diminuta entre los muros de agua de los olas, que abrazados a nuestros hijos creímos que era nuestro final. En ese instante éramos todos creyentes y le rogábamos a Dios que nos llevara sanos y salvos al puerto. Fue un verdadero milagro que llegáramos todos completos, eso sí, pálidos, desencajados y con el miedo metido en el cuerpo.
Pero son muchas las satisfacciones y los buenos ratos llenos de quietud y los agradables silencios para percibir el rumor de las olas y el arrastre cuando se lleva con su fuerza, los grandes troncos esculpidos por el roce del agua, y que náufragos son depositados en la orilla por el tiempo.
La sensación de libertad al nadar en sus aguas, y flotar de espaldas mirando el azul cielo y cerrar los ojos cegado por la luz brillante del sol, es poder entrar en el fantástico mundo de la nada, donde el pensar está prohibido y solo vagas etéreo sin llegar a importarte dónde te encuentras, tan grande es el placer que sientes.
Llama la atención que ahora lo disfrute de lejos, casi nunca traspaso el dintel de sus orillas, me molesta el tórrido sol, mi dermatólogo me dice que la piel delicada que tengo, tiene memoria y la mía por problemas debe alejarse de él.
Pero, tengo simbiosis contigo " mar", procuro no pasar día sin verte y descubrir nuevos secretos en tu forma de avanzar, en lo que nos arrojas a la orilla como presente, en tus rumores que traen alegrías y penas, en ofrecernos ese mundo ignoto, para soñar y traspasar la apatía y las tristezas y no me importaría naufragar arrullado por la canción envolvente del rumor de tus olas con el borde de espuma blanca.
Aunque ardieras página, donde están ya saturados los renglones de gráficos y caracteres, así te consuma el fuego, no se llevará a cabo nada que impida mi unión contigo, ni apague el amor que te tengo, mi  sur.”

“Otra vez el café, mi viejo y único amigo. Reconozco que me gusta sentarme solo a comer, tomar un café y soñar con la vida que pudo ser. La rutina del trabajo y el bar y luego a dormir. Solo con mi soledad. Me gusta ver las familias ir y venir. Les robo un poco de ese sentimiento del que carezco hace tanto. Me imagino que soy yo, que vencí la timidez, que me atreví, que tuve agallas.
Pasó el tiempo, implacable, casi sin darme cuenta estoy llegando al fin, mis días se agotan en el cansancio de la soledad extrema. Me entristece un poco pensar que nadie quizás sostenga mi mano cuando la bocanada final no quiera entrar. Soy el artífice de este destino y no hay rencor ni en quién volcarlo tampoco, fue mi decisión, déjalo para después me repetía en una continua e implacable cascada de excusas que me condujeron hasta el bar.
Por ahí leí lo bueno de estar solo y pensar, la soledad como medio de reflexión y me reí. A veces hago el ejercicio de mirarme desde afuera, de penar en ese tipo solo en la mesa de un bar, un restaurant, un café como a otra persona y es dramático. ¿Cómo puede un ser vivir en ese estado, vista perdida y fingida felicidad?
Ahí está el solitario ladrón de los momentos de otros, lo veo leer, saludar a gente que conoce a fuerza de repetición de la silla ocupada una y otra vez. Se recuesta sobre la mesa, cansado de esa soledad, ¿cuánto tiempo descansará? El mozo se acerca y otro comensal, la ambulancia a lo lejos, las miradas y ¿quién lo conoció? Los hombros encogidos, y la partida hacia el final. Nadie sabe de mí, solo el número en la etiqueta en mi piel”.

__ ¿Y eso?

__Mi vida antes de vos, cielito, antes de que algo o Alguien me llevara al Sur. Hora de romperlo, o reescribirlo, hoy recreamos ese café pero juntos en esas charlas de café y whisky del hostal.

__ ¿En qué piensas? __interrogué a Guille.

__En vos, en el hostal en esas noches en ese paraíso encantado que dejamos. En que no imaginé tanto quilombo luego de vencer el mal, Camila, este crimen y tu secreto.

¿Vos?

__En ti. Porque tú existes, merece la pena vivir en este mundo, porque todo es posible si tú estás aquí, transformas mis horas y mis días, respirar se hace tan sencillo, y ver el mundo a través de tus ojos es hermoso, todo existe por ti,  porque yo vivo solo para ti, por eso llévame de la mano  por los caminos de la vida, a ese mundo tuyo, al mundo de la eternidad, donde al terminar el día y antes de dormir, entre tus brazos, recibiré siempre tu última sonrisa, sabiendo que amaneceré siempre, en el paraíso, y el amor existe,  porque tú existes.

Fue como un instante detenido en el tiempo, cuando te vi por primera vez, e inmediatamente me sentí atraído por ti,  tú me viste y te cautivé, trato de seducirte,  y te dejas seducir, quiero conquistarte y tú también de dejas conquistar, porque somos dos seres en igual sintonía, como dos almas gemelas  conociéndose, me atrae tu sensualidad y erotismo, y a ti mi pasión y mi deseo, ambos separados y juntos a la vez,  mas cuando  no te tengo, te busco en cada lugar que recorro, en cada hoja que se desploma a mis pies, en cada gota de lluvia que cae en mi jardín,  en cada pétalo de rosa que comienza a florecer, en cada rayo del sol que baña
mi ventana al amanecer, en cada suspiro que el viento parece hacer, así como también, en el resplandor de la luna al anochecer, te busco noche y día y sigo buscando ese rostro angelical,
que me permitió   que lo sedujera, lo conquistara y que me ha robado el corazón. Cuando estábamos en el hostal miles de veces escapé, sabía quién eras pero no te conocía en esta vida, necesitaba entenderte, comprenderte, conocerlo todo de ti, y así sucedió aceleradamente en el sur.

__Somos dos seres que se aman abrazados en el fuego de nuestras almas, sentirte mi dueño, es un gran placer,  sentir cómo me seduces  lentamente y con ternura es lo que me vuelve loco
cuando estoy junto a vos. Somos fuego y calma cuando nos entregamos sin  ninguna duda ni reserva,  somos cóncavo y convexo, nuestros cuerpos siempre se amoldaron como piezas de un Lego, como que nos conocíamos y pertenecíamos, como hechos uno para el otro, y así te reconocí la primera vez que te acaricié, que te tuve en mis brazos, cuando hacemos el amor eso es lo que somos vos y yo.

Este fuego nos consume por dentro pide a gritos llegar hasta el límite de la pasión que sentimos los dos, es fuego entre dos cuerpos  que se aman y se pertenecen.

Sabemos lo que queremos en el arte del amor, acaricias con suavidad y ternura todo mi cuerpo
hasta llegar a estremecerlo de dicha y de pasión. Me estremezco dentro de vos y vos lo sientes y terminamos al mismo tiempo dando gritos de gran placer. Hasta terminar con los  cuerpos entrelazados sin importarnos nada  a nuestro alrededor. Solo somos dos seres que se aman y se desean y se  complementan en el  arte del amor.

__Esta noche haré que te dejes llevar mi amor, por las caricias de mis verbos  escritos que te dedico sin afán, solamente trataré de llevarte a ese lugar de mi ser donde grabado está que te amo, que te amo con locura, que te amo de verdad, déjate llevar mi amor, y podrás sentir ese dulce calor que habita en mí, huérfano de ti.
Una vez más entre sombras viajo por los álbumes de la vida buscando tu imagen y cuando te encuentro me haces sentir, y de repente, lo eres todo para mí, eres mi acierto y mi equivocación, eres mi pecado y mi respirar, necesito de tu risa y necesito de tu melancolía, necesito el sabor de tus labios cargado de otros besos, me sonrío imaginándome cómo sonaría un te quiero en tus labios, me imagino que son tus brazos los que me levantan cuando caigo en mis noches, me imagino vida mía que en las mil noches sin ti, es tu aliento el que respiro en los besos perdidos en el aire, ese que persigo entre olvidos y soledades.
A veces pienso que esto ya no es amar, es algo más ,es el alimento del que mi vida precisa para poder seguir en esta existencia, para poder recobrar ese tiempo vivido en las primaveras del primer beso, pero este deseo, se convierte solo en un sueño de amor.
Una vez más amor, soñaré que dejas sobre mi piel flores de tu jardín.

__Pedrito, el que sepamos de la eternidad no hace que vayamos a descuidarnos, no te separarás de mí, ni correremos riesgos innecesarios, no conocemos la cara del enemigo, casi como cuando enfrentaste a Michael.

__Lo sé, amor, no temas, la idea  es cuidar a Analía, e ir siempre todos juntos.

 Ahora ámame, me pondré mi mejor traje, el que me diseñaste con tus caricias,  el que mediste con tus besos,  delineando con tus dedos  las curvas de mi cuerpo,  despertaste mis sentidos dormidos e  hiciste la mejor creación en mí.
Esta noche me vestiré de ti, de la figura que reseguiste y creaste con lengua, besos, labios y dedos...  Quiero que escribas música  que combine con el ritmo  de nuestros cuerpos,  que la sinfonía de gemidos  sean acordes a la cadencia  de mi pelvis ansiosa de poseerte.
Que ese acto sublime y pasional  donde te pertenezco, donde llevo tu nombre  en la etiqueta de mi alma,  sea mejor que cualquier maravilla del mundo.  Hazme olvidar el mundo entero, déjame vivir esta locura,  déjame vestirme de tus besos.

Y se duerme la luz de tus ojos a espalda o al compás de otros a tu lado, siento lejos de llegar mi sueño, el despertar de mis sentidos… viaja mi percepción más veloz que la luz para sentirte dormido… para ser ese delgadísimo espacio entre mi piel y la tuya… por celos quiero evitar le sientas tocarte… poder evitar sientas mi respiración fundirse con la tuya… mas no quiero inquietarte, no quiero interrumpir tu sueño… para así dormido tocarte y pensarte.

Y así mientras la mitad del mundo duerme, obligo a este mundo tan solo mío permanecer despierto para no perder un segundo sin sentirte, aunque lejos de tus pensamientos me hayas dejado dormido, en un sueño tuyo buscaré despertar para vivir lo que tanto anhelo a tu lado… eso tan solo me queda…. poder lograr que de tanto pasearte por mi mente, en tu noche inconscientemente me despiertes y me lleves a ser tu sombra, vivir una realidad oculta, clandestina a tu presente y al mío.

Cómo lograr invadir tus momentos desde aquí, si tu realidad me vuelve algo que va detrás de ti sin siquiera poder tocar tu sombra… te persigo en silencio sin alcanzarte, aunque tus pasos detengas… y me sabes en tus momentos de soledad estar desnudando tu piel con los ojos del alma… y ese frío que tan suave te recorre y eriza tu piel no es más que mis caricias distantes y mis besos viajeros que sin saber cómo,  hacen hogar en tu boca,  mi perfecta adicción.

Y me dejas al recibir tú la noche, al borde de la locura… pues sabes de mis ansias por estar viviendo en tu piel… me dejas al límite de romper mi cordura y mi razón se nubla… se estremece mi cuerpo de deseos por el tuyo… mas de nada servirá,  por un momento pienso, pues al abrigo de otra sombra duermes… y un grito estalla en mi pecho; amor despierta tan solo para mí… y te escapas a la luz de este amor que como un faro te indica que al sur de tu realidad mi amor aún espera devuelvas a la vida esta alma, sin ti perdida.

Tú sabes bien que me enloqueces, todo de ti me gusta. Escucha cómo mi cuerpo suspira por ti, quiero que sepas que te deseo. Eso y muchas cosas más, ya ves te diré que estás en mi mente.
Das la fuerza a mi diario vivir, te siento en cada latido de mi corazón. Me das todo, de una forma muy bonita haces  vibrar mi pecho. Pronuncio  tu nombre, y le pido a Dios te bendiga.
No podría estar sin ti, bésame despacito con gran sentimiento, eso es,  sigue por Dios.
Ven a mí,  quiero ver todo tu cuerpo, camina lento hacia mí. Tienes una linda figura, resalta muy bien tus encantos, tus atributos. Poco a poco poquito,  besaré  tus labios. Lentamente vas a ser mío, mis manos cruzan sobre tu cuerpo. Así, así sígueme besando, como solo tú sabes.
Entrégame tu pasión, y enséñale  a mi boca a sentir lo que es ternura y dulzura.
Te pido por favor me enseñes a ver y tocar el cielo, y comenzar de nuevo con el beso más dulce.

__Somos amantes en el secreto de vivaces deseos que anidan en las locuras tentadas por el pecado, somos fuego que abraza la soledad aplacando la sed de seducirnos, somos una historia entre dos seres que emerge desde las ruinas las pasiones perdidas, somos la mentira y la verdad que habitan en cada extremo de las dudas, somos el silencio entre las grietas incurables que se esconden en las impurezas de recuerdos, somos el grito en las noches calladas de placeres que acarician las intimidades del alma, somos una aventura oculta donde sentimos el final de un sueño si nos amamos a la luz del sol, somos amantes, es el camino sin salida que nos marca el destino, amantes, solo amantes y esposos cósmicos, al regresar quizá ya podamos casarnos ante la ley.

__La ternura que hay en ti, es el abrigo que necesitaba mi alma.
Mi ser entero se te entrega en cada latido y cada amanecer es distinto. El sol brilla en todo su esplendor. A tu lado soy más que feliz. Me llena tu presencia amada.
La vida a tu lado, cobra sentido es un cielo, es un campo florido, es un mundo donde solo habita el amor. Y es que todo lo encuentro en ti. Tú eres quien alimenta mis esperanzas.
Tu corazón lo has vuelto mi hogar y mi nido. Mi refugio, mi lugar preferido, tienes todos los sentimientos de mi corazón. Y sé que tú sientes lo mismo por mí, lo siento en cada beso, en cada palabra, vibra tu esencia  muy dentro mío. Eres el motivo y la razón por los que respiro.
¡Gracias por tanto!  ¡Gracias por crear magia con este amor!

Mirando el hermoso cielo  estrellado la luna ha alumbrado un lugar en la arena  donde nos encontramos y el agua en calma y serena  nuestros rostros ha reflejado.

Ese lugar tan nuestro, tan mágico donde tú y yo nos besamos reflejando nuestro amor  en el resplandor de la luna, ella que creía que nuestro amor  le pertenecía. Bajo la luna nos amamos,
solo ella es testigo mudo de nuestros deseo y pasión, con furor nos besamos, apretando nuestros cuerpos, manos inquietas bajo la ropa sintiendo placer de deseos.

A nuestros deseos nos entregamos, con gran alegría festejando que esa noche serías mío
y llegando el nuevo día  firmaríamos el pacto  de amarnos de por vida, eres mi amor eterno, te lo demostraré día a día con besos de lluvia, besos mojados, dulces, besos acaramelados. Besos tiernos y apasionados. Son los que tú me das  cuando estás a mi lado. Son tantos los besos que me das en todos lados; me tienen atontado y a ti enamorado.
Son los besos de tu boca que me están anonadando, hasta el punto de vivir por siempre, sin estar separados.

__Cuando te tengo en mis  brazos, inhalo la esencia a flores  que despide tu cabello, el aroma a miel que respira  tu piel en cada poro de tu  cuerpo,  también ese olor a cielo  que brota de tus vellos,  experimento una deliciosa  agonía,  sensaciones que me abrasan  con su fuego,  se inflaman mis arterias,  el corazón me palpita  y solo hallo sosiego cuando  estoy inmerso en tu sexo  y en una bella melodía  te regalo mis amores.

__Tengo ganas de un amor:

Tengo ganas que sea tú, ganas de amarte, ganas de tenerte,  ganas de abrazarte,  ganas de tocar tu mejilla,  aspirar el vaho de tu piel, ver lo hermoso que eres,  ver tus ojos que me enamoraron, ganas de escuchar tu voz, tu risa que me fascina,   acariciar tu cabello castaño.

Tengo ganas de tenerte, de llenarme de ti, de escuchar nuestra canción, de contemplar nuestros silencios, de saciar nuestras ganas acumuladas. De abrazarte y no soltarte, de ir por la vida tomados de la mano, de dormir contigo despertar a tu lado, de reñir y besarte para verte sonreír. Tengo ganas de ese amor bonito del que se ve en las películas, y se lee en los libros, de ese que parece destinado a mí, del que se da solo una vez en la vida, por el que vives y mueres, ríes y lloras pero al fin siempre está. De tenerte y saber que eres real, de terminar con esta ilusión, que me mantiene vivo y me matará de desesperación. Tengo ganas de ti, ganas de que seas tú. Tú eres  el amor de mis sueños que me elevas al séptimo cielo, placer de mis fantasías eres delicia de mi imaginación. Ese amor que me hace sentir  como el príncipe más feliz  de este gran y bello universo,  donde hay grandes estrellas  que con su gran luz alumbran todo mi largo camino hacia ti.

Esa espléndida luz de luna que alumbra mi lento caminar,  rodeada de brillantes estrellas que realzan tu belleza y tu luz. Luz de luna, reina del universo capaz de transmitir mucho amor, haces que  dos hombres se amen eternamente y con pasión. No hay nada que los separe, tanto es el magnetismo en el amor, que  se recorren desierto, praderas,  y el universo hasta encontrarlo.

 Sin tocarnos la piel el amor nos abrazó el alma… cómo escapar de tan fuertes cadenas si sus eslabones, cada vez más fuerte los hemos hecho con nuestro insaciable deseo… tan fuerte nos encadenó  esta pasión que otros fuegos no pueden fundir, ni quebrar, esto por lo que hoy al firmamento imploramos, no dejes que terminemos nuestros días sin amarnos piel a piel.

Besar tus labios sin que los míos lleguen a tocarte, acariciar tu piel, jugar con tus cabellos… todo ello aprendí desde aquí e incluso mi alma llegó  en noches clandestinas en hurtadillas a hacerte el amor en medio de tus sueños… y de regreso a mi cuerpo llenándome luego desde adentro con tu esencia que invadió cada uno de mis sentidos, dejándome en la piel la sensación de que llevo tu aroma.

Y así,  en ocasiones mi cuerpo una carcasa sin alma divaga, transita calles de memoria, como un autómata, interactúa y ríe con la gente como programado de antemano… pues alma y amor van de la mano en la distancia en tu busca para en ti alimentarse… como un espectro te recorro sin que me sientas, tan solo cuando tu alma y amor perciben  a la mía y tu piel en ese momento logra despertar.

Oculto entre las sombras aguardo a que en tus momentos de soledad me despiertes… me lleves a sentir tu piel, pasearme por las líneas ocultas de tu cuerpo… quedarme un momento en la comisura de tus labios para sentir que allí soy el primero en beber tu aliento… y me hablas de amor en la distancia… sintiéndome allí a tu lado, espectral amor que tan solo para ti se vuelve perceptible… pero al momento de romperse el silencio, por otra presencia cercana, vuelvo a la penumbra.

Oculto para ti mi rostro… no quiero veas el dolor en mi fantasmal figura, por esos labios ajenos que te besaron… por esas palabras de amor que decías  y que tan solo mías deberían ser… pero aquí está mi cuerpo y mi mente esperando para amarte y contigo perder la cordura… a tu lado está mi alma y entre sus manos mi amor, esperando esos instantes que me vuelves real, para aun distante, así poder amarte.

Me pregunto qué sabremos en este viaje.

__Tal vez nada y quizás el todo, amorcito, arriba que es la hora.

__

Aróbaro era su nombre de guerra. Pese al aspecto de hombre común, era un doble agente. Analía  no estaba errada al desconfiar de él. El carácter arquitectónico de la mentira en que vivía permitía sostener dos realidades paralelas: El agente encubierto de Interpol, inmerso en el corazón de La Legión, y Aróbaro, el espía que La Legión creía haber formado y preparado para infiltrar en la Editorial.

Para los Servicios secretos de Interpol, Alejo Riglos se convirtió en el Agente Cero y solo unos pocos oficiales conocían su verdadera identidad, misión y destino. Para la Legión, que venía formándose desde aquella vieja legión seguidora del Arzobispo de Alejandría, era Aróbaro, su espía en la Editorial de Analía.

Él ya no sabía quién era, en realidad. Demasiados  años  pasaron, trabajando en la clandestinidad.

Y fueron las muertes del padre de su único amor y de Rubén Maler, su amigo,  las que despertaron la necesidad de parar. El objetivo de estar metido en el centro de la organización era poder desbaratar sus planes, pero Disco no lo había participado del asunto. Se encontró con el hecho consumado y la culpa a flor de piel. Apenas pudo mirar a los ojos a Analía.

Se comunicó con su contacto en la Agencia y le informó sobre su necesidad de terminar su misión. Los servicios accedieron a liberarlo de su posición encubierta una vez que completara la misión que le había encargado La Legión. Después de eso podía retirarse y ellos, desbaratar la organización que venían investigando por más de una década.

Accedió, no faltaba demasiado para concretar la misión que Disco le había encargado.

Madrid, sábado 13 de agosto de 2016.

Estudio notarial.

CONTINUARÁ.

HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS.

CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES COINCIDENCIA.

LENGUAJE ADULTO. ESCENAS EXPLÍCITAS.