NAUFRAGIO.
CAPÍTULO
FINAL.
107.
PARTE DOS.
“Pero
ahora es diferente”, pensó, “ahora ya no queda esperanza, ya nos hemos dicho
las palabras del exorcismo. Ahora hay la malcontenta y ésa es la palabra
que colma definitivamente el agujero de la esperanza, ésa es la verdadera
piedra de hule. Sólo una cosa me queda por hacer y es irme, porque sé que si
vuelvo nos besaremos, haremos el amor, habrá otro plazo, otro interminable
tenderse del arco, otro armisticio florido con paseos y cortesía y tanto
afecto, gnomos y noticias y hasta proyectos, putrefacción de putrefacciones,
cuando todo eso se acabó en mi pie derecho frenando junto a las casas rojas, un
martes por la tarde”.
*Julio
Cortázar / 62 Modelo para armar /
23
de octubre de 2016.
“La
fiesta terminó de madrugada, llevamos a mamá al hotel, antes Fabián había
acercado a Jorge, dormimos casi toda la mañana, y me dediqué a desayunar con Pedro, cosa que
disfrutaba como nada, untaba las tostadas mientras me dedicaba a preparar el
café, más cargado y negro que jamás”.
__Extraña
la casa en silencio ¿verdad amor? _interrogó Pedro con el rostro arrebolado.
__Poco
va a durar, ya se pondrá en movimiento cuando despierten los chicos.
Josecito
apareció de la nada escabulléndose en la cama, deseando dar más regalos, besos,
arrumacos, dimos un respingo cuando aterrizó.
__!Feliz
aniversario, papás!
__Gracias
campeón, ¿de dónde saliste? _interrogamos a coro, advertimos que el nene
llevaba varias hojas en las manos.
__Me
trajo mami, ufa, papás, están acostados todavía, yo quiero ir al barco, mamá
tiene mi bolso.
__Ya
peque, es temprano, iremos a desayunar, ven siéntate entre los dos, a ver qué
tienes allí.
__Sí.
Los
ayudamos a acomodarse, las piernitas le colgaban fuera de la cama. Nos resultó
adorable, el ser más amado por los dos.
__
Este regalo lo hice yo, para los dos __afirmó frunciendo el entrecejo, muy
concentrado en separar las hojas.
__!Ah,
sí! __dije pasando las hojas __. Parece hecho por un niño de diez años, no de apenas uno y peniques.
__!
Los hice yo, lo prometo!
__
Te creemos. Eres superinteligente como el tío y él nos contó que te enseñó a
dibujar.
__ ¿En
serio?
__En
serio. Qué bien dibujaste a Guille.
__Sí.
Y éste eres tú, cuando lo miras embobado, pero tú eres mucho más lindo. No me
saliste bien, papi __admitió y arrugó la nariz.
Embargado
de una ternura infinita le besé en el carrillo regordete.
__Estoy
precioso, como dice papá.
__ ¿Tan
precioso como yo? __preguntó mientras se limpiaba los besos.
__Lindísimo.
Analizamos
las diez hojas, en la última aparecían tres personas más.
__ ¿Y
éste?
__Mi
hermanito, mamá y el tío. Papi, ¿puedo ir
la piscina? _interrogó serio.
__Luego,
a la pequeña del barco, ahora iremos a desayunar, a ver qué trajo mamá en tu
bolso, y esperaremos a que despierte Andrés.
__Yo
tengo dos papás, y él no tiene, papi.
Decidimos
poner buena cara al mal tiempo. Levanté la mano derecha con los dedos
extendidos y los ofrecí.
__!
Choque de cinco, campeón!
El
papá de Andrés se murió, como el nuestro, los tres más el tío somos un equipo
sin papás acá en la tierra, ¿quieres festejar que tienes dos?
__!Sí!
_exclamó y golpeó la mano.
__Igualmente
nosotros seremos como sus papás, y el tío lo mismo.
__Bueno
Sabandija, fuera de la cama, vamos a la ducha y a desayunar así podremos subir
al barco.
---
¡Sabandija! __repitió Pedro, le levantó la remera y le mordisqueó la pancita,
José rio a carcajadas. ¿Qué haces acá sabandija? ¿Me quieres robar a Guille?
__!
No! Sólo traje mis regalos.
Pedro
lo depositó en la cama, y lo tomé acunándolo para defenderlo de las cosquillas.
Acabamos enredados los tres entre las sábanas en guerra de cosquillas, al fin
Pedro lo colocó entre sus piernas, lo abrazó y lo besó varias veces en la cabecita. Las
imágenes se me desdibujaron, me aclaré la garganta antes de hablar.
__Ey,
genio. __ Le acaricié la piernita __ ¿Sabes qué vamos a hacer al regreso? Vamos
a comprar cinta adhesiva transparente
para colgar tus dibujos justo en la pared de frente a la cama, o mejor sobre la
cabecera. ¿Qué te parece?
__Está
bien __comentó__. ¡Yupi!
“La
fiesta terminó de madrugada, llevamos a mamá al hotel, antes Fabián había
acercado a Jorge, dormimos casi toda la mañana, y me dediqué a desayunar con Pedro, cosa que
disfrutaba como nada, untaba las tostadas mientras me dedicaba a preparar el
café, más cargado y negro que jamás.
Me
habría gustado llevar a mi madre a Ezeiza, pero María prometió hacerlo con
Orestes, nosotros en cuanto nuestro niño aparezca y se separe de la mamá,
partiremos hacia el barco, quisiera ver las sorpresas que preparó Manuel allí
por las dudas a tiempo de huir, antes de la noche”.
__Amor,
es copado, no loco, no será nada malo,
sabe que iremos con dos niños y con Pía.
__Por
las dudas. Es increíble cómo se adaptó esa chica, el nene ya con dieciocho
meses, es tan compañero del nuestro como un hermanito de él, no de ustedes __
afirmé alcanzando a la mesa una bandeja
con tazas y el café humeante cuyo
aroma fue un contento para los sentidos.
__ Y
sí, era de esperarse por la edad, yo no logro sentirlo como hermano.
¿Tenemos
la valija lista amor?
__Supongo
que sí, ¿acaso piensas desembarcar en alguna parte? __interrogué indagando.
__No
lo sé, puede… ¿por?
__Nada,
no llevo ropa de gala, te aviso, con lo
de anoche tengo para años.
__Ni
yo, no da tanto como para gala.
__Papás
__dijo Camila que se asomó con el bebé y el bolso.
__Camila,
¿Manuel?
__En
el barco, fue a corroborar que estuviera todo preparado, me dijo que los
esperaría allá, yo prefiero despedirlos acá, me voy a emocionar. Quise traerles
la ropita del nene. Y ya está llegando Pía con Andrés. Pedro, sé que no
necesito decirlo, pero son chiquitos, por favor que no anden solos.
__Camila,
tranquila, es mi único hijo, no temas, además de ser obediente, estaremos encima, y Pía, ¿cuántos son de
tripulación?
__Julián
y tres, más la mucama, un montón. _ ¿Me llamarán una vez al día? Estoy plomo,
pero es que desde que nació nunca nos hemos separado.
__Si
preciosa, lógico, tranquila. Disfruta del bebé, del loquito de Manuel, de la
casa vacía, si desean estar solos, envía a María y a tu padre para esta casa.
__Hijo,
no somos un paquete, ya lo habíamos pensado.
María
y Orestes llegaron abrazados, terminamos desayunando todos juntos, al tiempo
que Fabián se despidió ya que pasarían unos días con Ana aprovechando las
ausencias.
Cuando
al final el sol estaba en lo alto,
empujados más por el entusiasmo de los chicos que por la nostalgia de los
mayores, nos dirigimos de la mano hacia
la ribera, allí anclado esperaba el barco, y en el muelle la sonrisa de
Manuel.
Me
sentía feliz, sin siquiera saber adónde
iríamos a parar, tampoco con fecha certera de regreso, despojados de temores de
la clínica, de mamá o de Fabián, todo quedaba en manos de Orestes y María, en
la clínica de mi amigo, deseaba disfrutar de mi amor y de mi hijo pequeño,
sabiendo que mi madre estaba con el
hombre de su vida iniciando un nuevo viaje en el gran trayecto recorrido de su
vida, de tantos años olvidados, perdidos hasta
de su memoria.
Miraba
a los gemelos abrazados y me perdí en tanta belleza y ternura, convencido del
poder del amor, no temía a surcar el Océano.
__Hermano,
cuida de todos. Disfruta de Camila y del nene que ya José puede estar con
nosotros, gracias por todo.
__Espero
que ustedes disfruten de este viaje. Guille, lo que hice en el barco fue con la intención de que en nada les recuerde a lo que sucedió antes, en
el naufragio, en vida de tu hermano, está casi al nivel de un barco mayor hoy.
__Gracias,
Manuel.
__Chao
tío. __ Josecito se desenredó de los brazos de Manuel y con prisas tironeó de
nosotros ansioso por ir a la piscina del barco. Al fin con bolsos y valija en
la bodega, nos desprendimos de la casa y de Manuel, el único que bajó a
despedirnos, y subimos al Catamarán.
La
tarde soleada en que partíamos. En la cubierta de la nave, nos abrazamos, y
vimos cómo nos alejábamos de la costa, las manos en alto de Manuel se perdieron
al tiempo que se achicaban las casas.
Las
lágrimas agolpadas tras los párpados rodaron, atrapé con los pulgares las de
Pedro antes de que las vieran los chicos, aunque andaban corriendo ya seguidos por Pía que no dejaba de
agradecer asombrada al ir descubriendo el barco.
Llorábamos
porque en esa casa que veíamos ahora en perspectiva se había consolidado la
familia y el amor soñado por todos, algunos en ella habían conocido el amor,
como Mirna y María, que ni siquiera
llevaban dos años en el país y ya
iniciaban otra vida, como en el caso de Pía y de Andrés. Al fin era su
aniversario puesto que apenas casados habíamos viajado a Kenia, no de la
llegada a la casa, pero sí de decidir el destino, y poco a poco nuestra casa,
nuestra ciudad, comenzaban a ser las suyas, como antes había compartido la
mansión en Kenia con Mirna y María.
Los
días que pasaríamos en el barco serían felices. Hacía tiempo que no podíamos
descansar de esa forma, era lindo no tener que levantarse pensando en ir a
trabajar, viviendo en la maravilla que era el yate, y estando en compañía del
amor, completamente relajados, sin obligaciones de trabajo, ni siquiera de
organizar las fiestas pasadas, tan sólo concentrados en mimarnos y disfrutar.
Un fuerte optimismo que nacía del descanso se apoderaba de los dos.
Poco
a poco fuimos descubriendo los cambios, lo que era el regalo de Manuel.
La
cubierta y la sala de máquinas era lo único que estaba igual a la última vez,
los chicos se treparon a los mandos, Julián enseguida se hizo dueño de ellos, Pía
no sabía hacia dónde mirar.
__Es
bellísimo, Pedro, hacía siglos que no subía a un barco. Bueno en realidad nunca
subí a uno como éste, a veces, en otro mar iba a trabajar, es muy lindo, les
agradezco que me halle acá, es una maravilla para mí estar con los chicos, con
ustedes, y me parece un sueño.
__Lo
mereces, Pía, nada que agradecer, además los chicos no te darán respiro.
__Sí,
iré ni bien me muestren el barco a cambiarlos, quieren ir a la piscina, de paso
iré a tomar sol __dijo sonriente, era menudita, de tez blanca, cabello
negro, rasgos delicados, bonita, para
nadie pasó desapercibido que bailó toda la noche con Ramiro, el abogado
asociado del estudio, y en verdad nos parece excepcional que tenga la
oportunidad de amar, quizá por primera vez.
Recorrimos
el barco, y la dejamos a ella compartiendo un camarote en suite enorme con los
chicos, tomamos otro en suite con la
nueva decoración estilo Luis XV que había elegido Manuel que quedaba en el
segundo piso pero alto, con vistas al mar.
El
primer subsuelo tenía el living, el comedor, la cocina, estilo ultra moderno, y
Pía no salía de su asombro del lujo que albergaba la nave.
Como
los camarotes que ocupamos, sólo había dos de los seis, constaban con un balcón
privado con tumbonas para tenderse al sol, para disfrutar de la brisa marina y
las vistas, y con mesitas ratonas para llevar algo para beber o comer.
El
interior del cuarto estaba revestido de alfombras, cubrecamas y empapelados
alegres haciendo juego, en nada
recordaba el barco original, junto a un vestidor con espejo de pared y banqueta
como el ante baño, más una salita anterior con sillones y cortinados de
terciopelo color verde seco.
Pensamos
en cada mañana disfrutar de desayunar en la habitación lo que un mozo nos alcanzaría
e, inmediatamente, salir al balcón para tendernos en las tumbonas y disfrutar
de la vista del agua, más tarde almorzaríamos todos juntos en el comedor, y
Manuel había agregado a la piscina de cubierta, otra en el segundo subsuelo, cubierta y temperada, de
adultos y de niños, junto a ellas, y en el mismo nivel había canchas de tenis,
salas de lectura , patio de juego, y en el gran comedor adjunto al de diario
hasta había un rincón de música con una pista para bailar, y en el subsuelo
había sumado además un micro- cine con películas seleccionadas de primerísima
calidad.
Compartir
esa rutina descansada que el barco proponía, perdidos en el Atlántico, sin meta
ni prisa por llegar a ningún lugar, nos
permitía ver la vida de otra manera, casi como en un ensueño, donde tumbados
abrazados por el baño del sol, o de noche bajo el manto de estrellas mirábamos
a los chicos reír y chapotear o simplemente conversar de sus temas junto a sus
papás, porque para Andrés era lo que comenzamos a ser en ese viaje en particular.
__ ¿Qué
es esto mi amor? __interrogó Pedro, mostrándome una carta que coloqué en uno de
los libros a propósito.
__Una
carta, o varias, ya ni recuerdo, cosas que te escribí hace dos años cuando
temía no volverte a ver.
__Pero…
ni me dijiste nunca.
__Las
había olvidado, las encontré cuando fui por la que me dejó mi padre para Mirna,
lee, y sabrás lo que sentí entonces.
“Hoy
los momentos caminan como hace tiempo y no logro hallar el amor, tu recuerdo lo
llevo presente en cada instante de mi existencia y esta herida en mi corazón no
me permite amar.
Ahora he llegado hasta aquí para escribirte mis letras que brotan de mi alma, espero que te agrade lo que escribo, eternamente mis líneas son sólo tuyas amor anónimo que llevas en tus manos mi alma, mi vida.
Por esa razón he llegado hasta aquí, para expresar lo que mi alma siente hoy por vos aun sin conocerte, estas letras llenas de amor y de añoranza.
Ojalá algún día comprendas que escribo, porque deseo que regreses a mi lado, sos mi mayor necesidad, jamás seré feliz sin tu presencia, por favor vuelve a mi lado.
Esto que escribo e imagino sé que no es lo que buscabas pero son sólo para vos y enciérralas dentro de tu alma para que ella sepa lo importante que sos. Aquí estaré eternamente cuando desees regresar, mi corazón te espera amor. El libro que escribo me lo has dado, hoy está lleno de mágicas letras llenas de amor y de buenos recuerdos de instantes juntos en Palermo, de los momentos mágicos de nuestro amor y que hoy me cuidan de todos mis miedos.
Todo está grabado en mi alma, lo escribo con letras llenas de ilusión, expresan toda la dicha que vivimos y la llevo tatuada en mi corazón.
Te ofrecí un corazón duro y frágil lleno de ausencias, que con sólo un abrazo, un beso, una noche mágica de pasión y amor cálido podría sanar.
Añoro el aroma de tu piel, que me enloquece de deseo, el aroma de tu cuerpo lo recuerdo en los suaves besos como el pétalo de una rosa, y los instantes de aquel maravilloso encuentro de nuestra primera caricia de amor.
En mi libro de memorias, cada letra sale de mi alma enamorada, en la cual eternamente estará la historia de nuestro gran amor.
Ahora he llegado hasta aquí para escribirte mis letras que brotan de mi alma, espero que te agrade lo que escribo, eternamente mis líneas son sólo tuyas amor anónimo que llevas en tus manos mi alma, mi vida.
Por esa razón he llegado hasta aquí, para expresar lo que mi alma siente hoy por vos aun sin conocerte, estas letras llenas de amor y de añoranza.
Ojalá algún día comprendas que escribo, porque deseo que regreses a mi lado, sos mi mayor necesidad, jamás seré feliz sin tu presencia, por favor vuelve a mi lado.
Esto que escribo e imagino sé que no es lo que buscabas pero son sólo para vos y enciérralas dentro de tu alma para que ella sepa lo importante que sos. Aquí estaré eternamente cuando desees regresar, mi corazón te espera amor. El libro que escribo me lo has dado, hoy está lleno de mágicas letras llenas de amor y de buenos recuerdos de instantes juntos en Palermo, de los momentos mágicos de nuestro amor y que hoy me cuidan de todos mis miedos.
Todo está grabado en mi alma, lo escribo con letras llenas de ilusión, expresan toda la dicha que vivimos y la llevo tatuada en mi corazón.
Te ofrecí un corazón duro y frágil lleno de ausencias, que con sólo un abrazo, un beso, una noche mágica de pasión y amor cálido podría sanar.
Añoro el aroma de tu piel, que me enloquece de deseo, el aroma de tu cuerpo lo recuerdo en los suaves besos como el pétalo de una rosa, y los instantes de aquel maravilloso encuentro de nuestra primera caricia de amor.
En mi libro de memorias, cada letra sale de mi alma enamorada, en la cual eternamente estará la historia de nuestro gran amor.
Sin
rumbo me encuentro en el laberinto de tu olvido. Caminando en las sombras de tu
ausencia, me aferro en el silencio que grita tu presencia. Tragos que imponen
buscar calor en los brazos del pecado para renunciar a tus recuerdos si me
equivoco y no lograra volver a verte. Se alarga mi espera sin razones. Abrazo a
la nostalgia que vive en la soledad de noches sin regreso, atrapado en mi
historia. Tomo asiento pacientemente en el banco de la espera, donde mi memoria
abre sus alas y gravita entre lluvias y tormentas buscando el vacío de la
locura mas no cometeré el error de volver con Juan, ni con nadie. Hojas secas
que caen ante nuestros pasos como presagio de un crimen, asesinando ideas y
sentimientos. Sigues a distancia sin lograr ver tu rostro, como gotas que
habitan en las penumbras de tu demencia. Horas enjauladas que anidan en el
tiempo envenenado por momentos que desangran pasiones. Y sigo sin cordura en
mis actos. Tras la puerta que abre se avecina la maldad con hambre de
conciencia. Las estrellas se apagan, pierden su luz, la brisa traiciona al
viento, y la sangre abandona el cuerpo. Locuras que habitan sin dormir, como
custodios vigilantes de la mente alimentando sufrimientos. Quizás el mundo no
es lo que pensamos, tal vez es un sueño, sólo eso, que camina en una cuerda
floja hacia la pesadilla que nos engaña con su ego personificado. Y vos,
cielito, te alejas en el espacio con tus misterios, sin que sepas que nadie
escapa, a la mística eternidad”.
__
Amor, menos mal que apenas demoré en dilucidar mis dudas, en llegar a la
clínica, nunca olvidaré el instante en que conocí a Beto, menos cuando al fin
entré a tu despacho y te vi junto al ventanal. Y sentí a poco de contar las
historias que empezaba la vida, que estaba escrita.
Hoy
eres el farol que alumbra mis tormentas,
luz que brillas en mis sombras, farol donde la mar avisa, candil donde en tu
pecho me acurruco y mi alma despierta en tus labios de seda, amor donde solos al unísono nuestros labios
tocan la misma nota.
Melódicas
serenatas de juglares bailan descalzos al compás del sabor efervescente de
nuestros besos, estrellas fugaces cantan sinfónicas y extasiadas al abrazo
perenne de nuestros cuerpos, ojos en éxtasis aletean sublimes al momento. Preámbulo
de un contrito ya ido, ya los melancólicos despertares como humo volaron al
infinito, sólo la savia recorre nuestros cuerpos unidos en verdades adyacentes,
tu mano sobre mi pecho escucha los quereres que a tu boca desea. Simposio de
enamorados donde nuestras almas correteando juegan al abrazo bonito, al
despertar de dos seres que se aman locamente, platónico despertares junto al
candor dulce de tus húmedos y dulces labios, labios donde mi vida vive.
__Me
gusta dormir, con la percepción acrecentada de su cercanía, en el extrarradio
de mi alma, en ese habitar que me
evoluciona emocionado, junto a tu cuerpo adaptándome a sus contornos, dormir,
adherido a tu piel, con la satisfacción de tus orgasmos, con el orgásmico
placer de dormir a tu costado, abrazado a su espalda despertándome frente a tu
cara, y en silencio, casi imperceptible llenarla de besos o arropando tus
sueños. Me gustan las mañanas a tu lado, pasar de un sueño a otro, de un estado subjetivo al estado de tu
contemplación, plastificarte con la
mirada en la líquida mirada de mis ojos, conservándote en mis retinas como la
imagen congelada, en una fracción de segundo llena de emociones, con muchas de
tus vidas por sentir. Llegar a la emoción
no contenida como una lágrima de mi alma, suspendida donde todo cobra
vida en la quietud de tu entorno, y silencio y sentimiento se
unifican, conspirando con el tiempo aliándose con la alusión, con Dios y la
eternidad, la memoria y mis lágrimas en el complot de este instante que hace tu
recuerdo.
Me gusta compartir amaneceres bajo las sábanas y tu desnudez, tras la piel que te decora, transpira y respiro, pegado a la mía que la padece y la siente. Circunnavegarte por dentro sobre la superficie calma de tus sueños, hondear los océanos de tu consciente inconsciente,
y sigiloso y a hurtadillas de forma preconcebida robarte los sueños, dejar, en tus miradas cerradas el eco de un “te amo” para cuando despiertes. Me gusta escapar de mis pesadillas e ir a tu encuentro y encontrarte cosido a mi lado, con hilos de acertijos y aciertos, en puntadas de emociones y deseos, anudados de sexo, en hiladas de sentimientos, descoserme aunque me duela la piel para de nuevo enhebrarme a tu piel y a tus huesos, desenamorarme de nuevo para volverme a enamorar, dormir a tu lado despertándome a tu costado, enmadejados.
Me gusta compartir amaneceres bajo las sábanas y tu desnudez, tras la piel que te decora, transpira y respiro, pegado a la mía que la padece y la siente. Circunnavegarte por dentro sobre la superficie calma de tus sueños, hondear los océanos de tu consciente inconsciente,
y sigiloso y a hurtadillas de forma preconcebida robarte los sueños, dejar, en tus miradas cerradas el eco de un “te amo” para cuando despiertes. Me gusta escapar de mis pesadillas e ir a tu encuentro y encontrarte cosido a mi lado, con hilos de acertijos y aciertos, en puntadas de emociones y deseos, anudados de sexo, en hiladas de sentimientos, descoserme aunque me duela la piel para de nuevo enhebrarme a tu piel y a tus huesos, desenamorarme de nuevo para volverme a enamorar, dormir a tu lado despertándome a tu costado, enmadejados.
Esa
noche nos sentíamos flotando, la brisa susurraba palabras de amor, el mar
arrullaba conjuros con el manto del cielo estrellado, los chicos reían en su mundo
de magia jugando con Pía y en cubierta los contemplamos sumidos en un mundo de
paz. Después de cenar fuimos a cubierta, la música sonaba suave y al fin nos
pusimos a bailar bajo la cálida brisa disfrutando de las melodías y del momento
de placidez.
__Mañana
mamá vuela para Miami, espero que se sienta bien en la playa _afirmé mirando el
cielo.
__Sí
amor, es otra playa, otro sitio y está con su esposo, regresará encantada y
feliz.
¿Te
gustaría que pasemos un par de días en Punta del Este?
__Me
gustaría no bajar esta vez, estamos tan bien acá, ningún hotel puede ser
comparable a lo que tu hermano hizo en
el barco, pareciera uno de esos palacios flotantes de antaño.
__Ojalá
al regresar, Pía logre una relación como la nuestra con Ramiro, lo merece.
__Nosotros
tenemos mucho más que una relación cielito, algo mucho más grande, tenemos un
gran amor, un tesoro único, un sol que siempre nos cobijará en días malos, un
aire fresco para cuando arrecie la vida. Te amo con toda el alma, mi amor por
vos y por mis hijos es infinito y eterno, para toda la vida y más allá. Sopesar
la existencia de antes, plagada de desencuentros, me hace valorar más lo que
hoy tenemos, casi me parece que mi vida
de antes fue de otro, Ana y su adicción, las trampas con Juan y mis amantes, el
hastío con el que llegué a Palermo, creo que estaba al límite de buscar la
muerte.
¿Quieres
bailar conmigo mi amor?
__Sí,
quiero _dijo Pedro asombrado mirándome más allá de los ojos, internándose en el
alma.
Y
así, abrazados, pegados el uno al otro, sintiéndonos enteros en cuerpo y alma,
nos quedamos prendados en ese momento único presente continuo y eterno,
bailando enamorados, meditando en cuántos hilos invisibles tenía la vida. En la
no existencia de casualidades más que como hechos a los que Dios olvidó firmar
para no llamar milagros pues todo encuentro es causal. El amor era uno de
ellos, un milagro, un prodigio, una maravilla, magia pura… Porque sentí a Pedro
en mis brazos y pude adivinar lo que sintió mi padre durante el naufragio, o
moría por él o mataba por ella. Lo quiero completamente para mí, desde la punta
de los pies, hasta el último de sus cabellos, incluidos sueños y pensamientos.
Quería poseerlo de todas las maneras posibles, inventando otras pero a la vez
dejarlo libre para comprobar que él volvía a mis brazos por elección.
Dejé
de pensar profundamente para dedicarme a imaginar cuáles eran todas las maneras
posibles de poseerlo. La cercanía y la calidez de la noche invitaban a ello.
Despedimos
a los chicos, Pía los hacía dormir contándoles cuentos, y tras bailar muy
apretados, las respiraciones entrecortadas, le dije a Pedro lo que él mismo
deseaba.
__Vamos.
__ ¿A
dónde?
__Al
camarote.
__Vamos
_dijo Pedro desenredándose con esfuerzo.
En
el camarote abrí un Malbec, imaginé que el hilo rojo podría ser rojo malbec, y
tras degustar una copa, nos sacamos la ropa en pocos minutos, con premura y con
avidez, y con premura abrimos el porta ventanas saliendo al balcón. Allí bajo
la luz de la luna, Pedro se tendió en la tumbona donde tomábamos sol por la
mañana, y me llamó. Vaciamos
nuestra alma en el espejo del otro, brindamos por la vida y nuestra íntima
complicidad, las divisas de sueños y el velo ardiente del compartir juntos.
Lo
observé con la claridad de la luna, lo encontré tan bello, tan mío, tan anhelante, que, sediento, fui tras
mi amor, lo rocié por entero con el vino, era el hombre que me pertenecía
porque su corazón me daba la certeza, y fui a su encuentro sintiendo cómo la
brisa acariciaba los rostros antes que él. Bebí algo más de la copa, pero dejé
algo en la boca para luego dibujar con la lengua la línea de la mandíbula al
hombro. Lamí el cuello como bebiendo de la piel el malbec. Y seguí transitando
caminos en Pedro, lo giré y salpiqué gotas de vino en la espalda, él se dejó
saborear. Mis dedos húmedos corrieron a prepararlo, a humectarlo, abrí las
nalgas y lo mojé más y más y el cuerpo cedió ante mí, se abrió, era su señor.
Pedro cerró los ojos dejando que el cuerpo decidiera por el. Sintió el vino
corriendo por la cintura, y seguí lamiéndolo como antes lo había bebido
succionando sus botones, ahora preparaba el acceso, lubricándolo, rozando
enhiesta mi umbría las piernas, entrando elegantemente, hasta que Pedro me
cobijo abrazándome todo adentro, sentí el contacto directo con su piel, no pensé
en nada más que en el bombeo que le contraía el abdomen, un leve calambre eléctrico
creciendo desde las plantas de los pies. Eran descargas, eran como golpes,
electricidad que lo contraían y relajaban. Apreté los dientes y los párpados,
él lanzó un gemido brusco y derramé brusco, toda mi esencia dentro de su ser,
sé que entró en su cuerpo arrasándolo hasta la inconsciencia, un morir para
renacer, éramos sólo nosotros dos, solos en medio de la inmensidad, el arrullo
susurrante del mar, las estrellas brillaban como guirnaldas de lamparitas
colgadas especialmente para nosotros. Juntos acostados fugamos la mirada
perdida hacia la estrellas. El silencio era ensordecedor. Estábamos solos en
medio de la nada, del agua mas sin temor a naufragio otro que el de nuestro mar
interno. No existía nada más en el mundo.
__No
podía no pasar.
__ ¿Qué?
__El
hilo rojo, esto, el reencuentro en la clínica, el de Palermo, este amor.
Cuando
te dejé la primera vez pensé en que haríamos demasiado daño, a Ana, a mi hijo,
a Camila, a Juan, dudé, mas hoy sé que era inevitable, por momentos sabía que
nos volveríamos a encontrar, en otros dudaba, pero nada estaba mal ni era
pecado, estaba entonces todo fuera de lugar.
Hoy
desperté y aún sigo soñando en tus dulces labios...Labios de miel y
mi boca peregrina hambrienta de lo carnoso y dulce de tus labios, como
luciérnaga me embeleso en la luz de luna de tus ojos, candil de mi hombría.
__Labios finos, labios que en mi boca son ardiente manantial caliente, candor que haces hervir mi sangre, me derrites con sólo mirarte, eres toda la luz de mis palabras, eres el sabor de espuma que mis labios desean. Cada una de tus curvas es pura crema montada, donde mis besos aterrizan sin demoras, jardín encendido al canto de mi pálpito, al susurro insistente de mis labios que en los tuyos siempre terminan, labios, tus labios.
Boca que derrama sentires, labios que brillan, lamedor incansable soy el camino de tus labios, mis ojos cerrados, mi boca te espera, mis manos palpitan al roce, y tu boca me besa despacio mientras yo saboreo tu espuma, tu espuma de mar de tu fuente.
__Labios finos, labios que en mi boca son ardiente manantial caliente, candor que haces hervir mi sangre, me derrites con sólo mirarte, eres toda la luz de mis palabras, eres el sabor de espuma que mis labios desean. Cada una de tus curvas es pura crema montada, donde mis besos aterrizan sin demoras, jardín encendido al canto de mi pálpito, al susurro insistente de mis labios que en los tuyos siempre terminan, labios, tus labios.
Boca que derrama sentires, labios que brillan, lamedor incansable soy el camino de tus labios, mis ojos cerrados, mi boca te espera, mis manos palpitan al roce, y tu boca me besa despacio mientras yo saboreo tu espuma, tu espuma de mar de tu fuente.
Almas,
dos almas que a promesas se besan locamente al reencuentro, manos que no pueden parar el deseo, dos almas
unidas, entrelazadas, amándose como locas por el reencuentro de vidas, hambrientas
de caricias eternas, de susurrar amores al oído, verdades a los ojos, pasiones
en sus labios. Añejas las tristezas se pierden entre nuestros suspiros, páramos
que florecen espontáneamente al paso que nos une, párpados que se alivian de
pesares cuando nuestros labios se acercan, gotas de sal de iris brillan de
alegría, mi corazón escarchado en deshielos sobrevive de nuevo gracias al
candil de tu pecho.
Aún,
vida tras vida no puedo olvidar la miel de tus labios, el sabor tan dulce de tu boca,
boca que a besos muerdo enamorado, mi preciosa alma gemela, vida tras vida nos
despedimos de un cuerpo y renacemos en otro y nos encontramos , sólo ansío tus
besos en el despido del cuerpo. Ahora de nuevo unidos bésame, sólo bésame que
necesito tu dulce, bésame amor, mi única alma gemela y dame de nuevo la vida
con el sabor de tus labios rojos, labios que en mi mente perduran.
La
urgencia se apoderó de la lujuria de mi deseo, de la desesperación de mis manos
por explorar tu piel sensual.
Tu piel tan erótica, que no puedo contener las ganas de hacerte mío, de probarte como si fueras un dulce y delicioso postre en la punta de mi lengua mientras... despacio tus labios de rojo lujuria terminan enganchados en mi boca.
Beso tus besos, desmesuradamente hasta hacer humedecer tu fuego, el fuego que llevas dentro, que mana deseos entre tus piernas mientras tus muslos se frotan a la espera, a la espera de mis manos que suavemente te toquen, que abran tus anhelos, que sople a tu fuego que arde.
Tu pecho suculento, como fruto de primavera que florece y anhela mis labios, tu intimidad que arde, poniendo en mis manos agarradas a tus manos tu cuerpo que exige el deleite desmedido del fuego caliente y húmedo, que mana dulces gotas de tu fuente que atrapo o que recorren tus muslos mientras tus gemidos ya no controlan el momento, donde mi boca desea terminar ahogada, llena de tu ser.
Mis manos recorren tu piel suave, despacio, sin prisas mi boca a besos resbala por tu cuerpo mientras mi lengua invade tu intimidad aprisionada, tu secreto como a gritos pide ser penetrado.
Mis dedos rozan como a suspiros tu húmedo y delicioso acceso de fuego de hombre en erupción, de deleite, de vientre que mana el fuego de su fuente que mi boca desea.
Mi lengua palpa, mi lengua acaricia el interior del manantial que me ofreces mientras tu abres tu boca redonda, tu boca llena de gemidos que escapan, ojos cerrados como queriendo no despertar de este erótico sueño.
Abro despacio tus piernas descubriendo el caudal pélvico más rico, el caudal que mana y me embriaga en la lujuria de este momento, como esclavo arrodillado, como náufrago del deseo más íntimo, como amante de pasiones, me someto como mortal a tus bajos deseos.
Tú enhiesto, esperando, emanando gotas , yo con mi cara perdida mirando como escapan olas blancas de amor del mar que hay entre mis dedos y tus dedos, con mi lengua saboreo, tomo, acaricio, con mis labios succiono, abarco en mi boca el deseo, atormento, provoco, te llevo al límite, suplicas ardiendo en fuego mientras tus espasmos me permiten de abajo hacia arriba lamerte como si fueras mi amo y yo tu fiel amante, como narcotizado por el efecto de tus feromonas que llenan mi sangre, saboreo en mi lengua llena del manjar que un hombre desea del otro que ama con todo sentido.
Mi hombría con la que tus manos no han parado irrumpen en la entrada estrecha volcánica que quema, entrada al fuego dulce aumentando aún más y más tu deleite, en tu interior lascivo azoto y azoto tu intimidad que arde intensamente de placer a cada golpe que entra, a cada golpe que penetra en tus más bajos deseos de hombre que ama a su hombre.
Acaricio tu cara besándonos al mismo tiempo los labios, brillantes ojos en tu cara, ojos ya serenos que aún desean más besos, más caricias y deseos.
Hoy cabálgame que no sólo en tus sueños, soy tu hombre, el hombre que con mis brazos fuertes te agarra y te lleva a rozar las estrellas del cielo, con el que puedes dormir sobre mi cuerpo mientras mis ojos te miran, mientras mis brazos te protegen, hoy duerme tranquilo, que mientras duermes éste… tu hombre mojará sus dedos o te cobijará en sus brazos… Mientras duermes.
Tu piel tan erótica, que no puedo contener las ganas de hacerte mío, de probarte como si fueras un dulce y delicioso postre en la punta de mi lengua mientras... despacio tus labios de rojo lujuria terminan enganchados en mi boca.
Beso tus besos, desmesuradamente hasta hacer humedecer tu fuego, el fuego que llevas dentro, que mana deseos entre tus piernas mientras tus muslos se frotan a la espera, a la espera de mis manos que suavemente te toquen, que abran tus anhelos, que sople a tu fuego que arde.
Tu pecho suculento, como fruto de primavera que florece y anhela mis labios, tu intimidad que arde, poniendo en mis manos agarradas a tus manos tu cuerpo que exige el deleite desmedido del fuego caliente y húmedo, que mana dulces gotas de tu fuente que atrapo o que recorren tus muslos mientras tus gemidos ya no controlan el momento, donde mi boca desea terminar ahogada, llena de tu ser.
Mis manos recorren tu piel suave, despacio, sin prisas mi boca a besos resbala por tu cuerpo mientras mi lengua invade tu intimidad aprisionada, tu secreto como a gritos pide ser penetrado.
Mis dedos rozan como a suspiros tu húmedo y delicioso acceso de fuego de hombre en erupción, de deleite, de vientre que mana el fuego de su fuente que mi boca desea.
Mi lengua palpa, mi lengua acaricia el interior del manantial que me ofreces mientras tu abres tu boca redonda, tu boca llena de gemidos que escapan, ojos cerrados como queriendo no despertar de este erótico sueño.
Abro despacio tus piernas descubriendo el caudal pélvico más rico, el caudal que mana y me embriaga en la lujuria de este momento, como esclavo arrodillado, como náufrago del deseo más íntimo, como amante de pasiones, me someto como mortal a tus bajos deseos.
Tú enhiesto, esperando, emanando gotas , yo con mi cara perdida mirando como escapan olas blancas de amor del mar que hay entre mis dedos y tus dedos, con mi lengua saboreo, tomo, acaricio, con mis labios succiono, abarco en mi boca el deseo, atormento, provoco, te llevo al límite, suplicas ardiendo en fuego mientras tus espasmos me permiten de abajo hacia arriba lamerte como si fueras mi amo y yo tu fiel amante, como narcotizado por el efecto de tus feromonas que llenan mi sangre, saboreo en mi lengua llena del manjar que un hombre desea del otro que ama con todo sentido.
Mi hombría con la que tus manos no han parado irrumpen en la entrada estrecha volcánica que quema, entrada al fuego dulce aumentando aún más y más tu deleite, en tu interior lascivo azoto y azoto tu intimidad que arde intensamente de placer a cada golpe que entra, a cada golpe que penetra en tus más bajos deseos de hombre que ama a su hombre.
Acaricio tu cara besándonos al mismo tiempo los labios, brillantes ojos en tu cara, ojos ya serenos que aún desean más besos, más caricias y deseos.
Hoy cabálgame que no sólo en tus sueños, soy tu hombre, el hombre que con mis brazos fuertes te agarra y te lleva a rozar las estrellas del cielo, con el que puedes dormir sobre mi cuerpo mientras mis ojos te miran, mientras mis brazos te protegen, hoy duerme tranquilo, que mientras duermes éste… tu hombre mojará sus dedos o te cobijará en sus brazos… Mientras duermes.
__En
esta noche envuélveme en tu alma, murmúrame al oído cuánto me amas, voy a
entregarte mis besos más salvajes, llega a los rincones más prohibidos de mi
cuerpo, tu piel me llama. Siente mi aroma que quiero entregarme sin límites ni
decencias, quiero desnudar tus deseos más íntimos para entrar en lo más
profundo de tu ser.
Esta
noche haz que me olvide de todo porque quiero embriagarme con tus besos, voy
a recorrer todo tu cuerpo con mis besos y entregarte tantos deseos contenidos.
Ya
de madrugada ambos ardemos de lujuria y pasión y deseo escucharte gemir
embriagado de placer, entra en lo más profundo de mi ser donde nadie ha
llegado, tu ansiedad y la mía en un sólo latido de corazón enamorado.
Necesito
una vida porque quiero
mostrarte todas las notas que te he escrito y jamás me atreví a
decirte o enviarte. Quiero mostrarte todas las canciones que te
he dedicado y que a solas escuchaba dudando si te las enviaba
o te cantaba. Quiero contarte de todas las noches en que con insomnio
sólo pensaba en vos, quiero contarte de todos estos días que te he
esperado desesperado. Quiero decirte a los ojos cuánto es que te amo. Te
tomo en mis brazos para que nadie te toque,
eres sólo mío, siento que sos parte
de mi cuerpo, vives aferrado a mi sentimientos, me quedo sin aliento cuando veo
tu hermoso cuerpo desnudo y subimos al infinito en los brazos del placer que me entregas, cuando
te desnudas para ser mío otra vez, me cautivas, me mantienes vivo con tu calor, el que me das cada vez que hacemos el amor, con suavidad y con amor. Ese que nos hace estremecer hasta subir al infinito una y otra vez, naciste para que yo te amara, nací para que me gozaras, sos mi delirio, el que me hace estremecer cuando te llevo en mis brazos a nuestro dormitorio donde serás mío como hoy como ayer, como siempre mi amor.
te desnudas para ser mío otra vez, me cautivas, me mantienes vivo con tu calor, el que me das cada vez que hacemos el amor, con suavidad y con amor. Ese que nos hace estremecer hasta subir al infinito una y otra vez, naciste para que yo te amara, nací para que me gozaras, sos mi delirio, el que me hace estremecer cuando te llevo en mis brazos a nuestro dormitorio donde serás mío como hoy como ayer, como siempre mi amor.
__Un
loco sueño de pasión ahí donde sentí tus dedos jugando con mis deseos,
donde me provocas un estallido de humedad, donde sin más que
gemidos me desnudo y comienza un sueño de placer. Ahí donde siento tu
boca deslizándose en mi piel, ardientes labios que se detienen entre
mis muslos. Donde mi cuerpo tiembla, y mis gemidos se hacen intensos.
Sin palabras sólo miradas me entregaste, fuego que recorrió mis entrañas.
Sin palabras sólo miradas me entregaste, fuego que recorrió mis entrañas.
__Tengo
miedo de asomarme a las fibras de las palabras aquellas que conforman tu
alma; pues temo enredarme y quedarme enclaustrado en tu jaula. Temo encontrar
en cada letra las convicciones para ver luz clara, focos de consejos y en cada
uno de ellos tus besos.
Tengo
miedo de mirarme en tu mirada, descifrar cada enigma de tus sentires y en esos
sentires caer rendido, como la hace el peregrino al encontrar entre tantas
ardides el rescate de una pequeña posada. Temo ver tu risa entre tanta bofetada
que me recrimina por amar lo imposible, que sin respetar distancia te
hace corte de nube galana en las telas de musa en fragancia, lo cual es real
aunque invisible. Temo ser imprudente por amor: acceder de a poco a tu amor, hacer
de una inverosímil ilusión el concreto
monumento a lo veraz; ver no sólo airosos mecanismos de suspiros donde vos y yo
nos encontramos.
Tengo
miedo, mucho miedo que me prenda de tu alma, que aquello que sólo admiré por
belleza, me ate como anillo al dedo para que cual plebeyo a su príncipe tenga
el sortilegio de compartir su casa. Pero hoy amo esos miedos porque añoro lo
que me diste y tengo con vos amorcito.
__El
amor no es un instante. Un instante es sexo. Nuestro amor es un
sentimiento que flota en el alma deseando salir y abrazar a su alma
gemela. Amor es ese escalofrío que se siente cuando tu piel y mi piel se tocan.
Cuando nuestros labios llenos de lujuria de amor se acarician,
es cuando sentimos deseos de escribir verbos en el aire.
Amarte es despertar a tu lado. Es ese sueño anhelado que se regocija en tus brazos. Es tu radiante mirada tierna y enamorada. Es ese momento precioso que nos lleva al paraíso.
Amarte es despertar a tu lado. Es ese sueño anhelado que se regocija en tus brazos. Es tu radiante mirada tierna y enamorada. Es ese momento precioso que nos lleva al paraíso.
Es
sentir como llenas de ternura y despertar a tu lado en ese momento tan
dulce, amar es ese estallido de pasión, el éxtasis de una bella
noche que si no es la primera es la que te hará soñar con las del resto de tu
vida.
...Amor eres tú vestido de sueños de felicidad
compartida.
Yo
sé que una voz me llama, es tu corazón que tiene el recuerdo de haberme conocido
y tu voz me busca constantemente, tanto el alma y el corazón están los dos
en contacto y saben que tú respondes a sus ecos de las llamadas esas voces
que son suaves y singulares en la vida.
Buscaré ese camino para seguirte hoy, aunque no nos conociéramos, es tu voz la que siempre pregunta por mí, yo contesto y me dices que siga ese camino que un buen día soñaste, y al final te esperó, porque es allí donde deseo abrazarte muy fuertemente. Seguí buscándote, desde que estaba en Kenia sin imaginarte, tan sólo sabiendo de ti por el recuerdo de Mirna, luché y di batalla a los juicios de mi padre, sin saber que defendía: “Esto… lo nuestro”, aunque en ello me cueste y me canse, es una batalla compensada y sin obstinación, correré hacia ti, siempre pensé en ello, porque este mundo es muy bello, y en ti está esa belleza de la que tú me has llenado y mi vida te reconoce junto a la mía. En un momento de la lucha se ve claro.
Sabes que siempre al buscarte te encontraré y mi equipaje lo llevaré a cuestas y cuando te vea gritaré al viento para que mi eco se oiga muy lejos y vean mi hermosa alegría de que al fin pude sentirte y haber vencido a eso que se llama soledad, pero la razón es este amor que
mutuamente nos ofrecemos los dos y hoy mi vida esta iluminada. Déjame hacerte el amor.
Buscaré ese camino para seguirte hoy, aunque no nos conociéramos, es tu voz la que siempre pregunta por mí, yo contesto y me dices que siga ese camino que un buen día soñaste, y al final te esperó, porque es allí donde deseo abrazarte muy fuertemente. Seguí buscándote, desde que estaba en Kenia sin imaginarte, tan sólo sabiendo de ti por el recuerdo de Mirna, luché y di batalla a los juicios de mi padre, sin saber que defendía: “Esto… lo nuestro”, aunque en ello me cueste y me canse, es una batalla compensada y sin obstinación, correré hacia ti, siempre pensé en ello, porque este mundo es muy bello, y en ti está esa belleza de la que tú me has llenado y mi vida te reconoce junto a la mía. En un momento de la lucha se ve claro.
Sabes que siempre al buscarte te encontraré y mi equipaje lo llevaré a cuestas y cuando te vea gritaré al viento para que mi eco se oiga muy lejos y vean mi hermosa alegría de que al fin pude sentirte y haber vencido a eso que se llama soledad, pero la razón es este amor que
mutuamente nos ofrecemos los dos y hoy mi vida esta iluminada. Déjame hacerte el amor.
__Aún
recuerdo cuando los dedos impacientes jugaban con los botones en tu pecho,
provocando un estallido de humedad en ese lugar cálido y ardiente de tu
intimidad.
Y
cuando las palomas de mis manos inquietas descendían al jardín del deseo,
buscando mi boca beber la miel de ese pequeño océano donde se perdían mis
labios y mi lengua inquieta hasta ahogar la fuerza de tu interior, naufragando
en oleadas de placer y gemidos de pasión, muriendo poco a poco, piel a piel, en
el eterno abrazo del amo a esa fuente de placer.
Que
te parece si te pido esta noche, que me dejes pernoctar en tus caderas, si te
pido, que dejes pasear a mi lengua por tu nuca salada de seda, si te pido,
escribir un poema en cada una de tus pecas, o si te pido amansar en tu río , en tu fuente, la sed de mi boca tan
sedienta, si te pido bajo un techo estrellado, las caricias de tus yemas, o si
te pido ser la vida y la vivamos ambos de todas las conocidas maneras, qué
dirías si te pido, que mis dedos por tu espalda se entretengan, si te pido ser
en mi universo, la única resplandeciente estrella, si te pido ser mi amor, mi
amigo, mi amante, si te pido ser el sol de mis brillantes mañanas, o los verbos
de todas mis letras.
__Lo
soy y lo seré para siempre mi droga, mi amor adictivo, mi amo, mi señor. Divina
droga de amor es tu besar tan divino, como una copa de vino elimina el
resquemor, hace crecer el valor a explorar con mis manos, esos rincones insanos
ocultos a la luz solar, haciéndote a ti vibrar por mis contactos villanos.
Esos
besos enajenan este pensar que me pierde, entonces mi sangre hierve cuando de
deseos se llenan mis venas, y me condenan a esclavizarme a tus pies, porque una
y otra vez sigo deseando tus besos, y mis pasos están presos a seguirte donde
estés.
Tus
besos sabor de fuego que con deleite me prenden, y con su poder me pierden para
meterme en tu juego, no esperaré para luego en este vicio descrito, y porque no
es proscripto me seguiré endrogando, tus besos iré buscando como tu fiel
drogadicto.
__Silencio
de labios dormidos, esperando que una boca despierte su aroma en una piel. Mis
ansias esperan tu luz que aplaque las sombras de mi espera. Cada día de tu
olvido, araño algún recuerdo, bebo el silencio callado de tu ausencia,
navego en los mares de lágrimas, con oleajes con sabor a amargas
nostalgias, con colores de antiguas ternuras. Pero eso es pasado y fue corto el
desamparo. Desde días luego del reencuentro te amo, antes con mi voz estancada
en el viento, tu rostro aun sonriendo en pedazos de miradas.... en mi
mente...
Sólo quedaba eso....alguna ternura aún viva y temblorosa que me hacía recordarte más. Y hoy tu amor es un fuego Hoy desnudo tu alma en mis anhelos, poso mis manos en tu corazón para sentir su latir con el mío, me adentro en senderos y surcos del alma, reconozco recovecos, y luego vuelo con las manos a la piel. Encuentro la misma, tu cuerpo desnudo envuelto, vestido con el mío igual que la flor esperando el rocío, mi cuerpo, vestido siempre de vos para que jamás nos podamos separar, hilvanamos las fibras de la piel con piel en una.
En tu piel nace mi bendito deseo de escribir verbos donde yo creo, en mi piel siento tu único anhelo, de querer entrar en celo para que con mucha ilusión, pueda amarte sin fatua intención. He puesto en vos todo mi empeño, cuando te sueño como dueño de tu voluntad no puedo esconder la verdad, se me desbordan las ganas y te aseguro, no son vanas.
Dueño de una gran ambición, sufro por conquistarte con emoción. Aunque haya un poco de codicia, no está presente la malicia.
Quiero poder saciar mi apetito, calmar mi sed igual que un pajarito Convertir esta sublime y sensual atracción en una verdadera pasión. No sos ningún capricho sino lo eterno
Tengo deseos de poseerte con ansia, de no dejar ninguna vacancia de amarte y con verdadero placer. En tu piel encontré la mejor caricia, de todas, la mejor delicia.
Dispuesto estoy a complacer hasta que me dejes satisfacer; estoy seguro te va a encantar, es una nueva manera de gustar, en mi piel te vas a cautivar, con ella te dejarás seducir.
Mis besos y caricias gustaron...que tus pezones se pelearon es lo que tu cuerpo comenta.
Umbría apasionada y excitada muy bien estimulada, con un poco de lubrique y de imaginación. No pudo resistir tanta tentación... En mi piel encontraste el goce, en tu piel necesité del roce.
Sólo quedaba eso....alguna ternura aún viva y temblorosa que me hacía recordarte más. Y hoy tu amor es un fuego Hoy desnudo tu alma en mis anhelos, poso mis manos en tu corazón para sentir su latir con el mío, me adentro en senderos y surcos del alma, reconozco recovecos, y luego vuelo con las manos a la piel. Encuentro la misma, tu cuerpo desnudo envuelto, vestido con el mío igual que la flor esperando el rocío, mi cuerpo, vestido siempre de vos para que jamás nos podamos separar, hilvanamos las fibras de la piel con piel en una.
En tu piel nace mi bendito deseo de escribir verbos donde yo creo, en mi piel siento tu único anhelo, de querer entrar en celo para que con mucha ilusión, pueda amarte sin fatua intención. He puesto en vos todo mi empeño, cuando te sueño como dueño de tu voluntad no puedo esconder la verdad, se me desbordan las ganas y te aseguro, no son vanas.
Dueño de una gran ambición, sufro por conquistarte con emoción. Aunque haya un poco de codicia, no está presente la malicia.
Quiero poder saciar mi apetito, calmar mi sed igual que un pajarito Convertir esta sublime y sensual atracción en una verdadera pasión. No sos ningún capricho sino lo eterno
Tengo deseos de poseerte con ansia, de no dejar ninguna vacancia de amarte y con verdadero placer. En tu piel encontré la mejor caricia, de todas, la mejor delicia.
Dispuesto estoy a complacer hasta que me dejes satisfacer; estoy seguro te va a encantar, es una nueva manera de gustar, en mi piel te vas a cautivar, con ella te dejarás seducir.
Mis besos y caricias gustaron...que tus pezones se pelearon es lo que tu cuerpo comenta.
Umbría apasionada y excitada muy bien estimulada, con un poco de lubrique y de imaginación. No pudo resistir tanta tentación... En mi piel encontraste el goce, en tu piel necesité del roce.
__Apagaré
la luz, que sea tu piel ya sin las
blasfemas prendas que osan empañar la gloria de tu desnudez la que ilumine el sitio en que el placer
acampa.
Mis
labios acarician a tus labios, mis pupilas se dilatan en tu noche; tu cuerpo
luminiscente emana delicados rayos de erizada lujuria, y arde mi piel al sólo
roce de tu piel de seda.
Mis
besos se sumergen en tu cuello hirviente, aromados poros saltan de impaciencia,
recoge mi lengua la sutil esencia, que despierta al dios pagano que sos.
Navega
en rocío mi boca de vela, olas
sonrosadas tus montes divinos, pezones de cielo coronan su cumbre, y mojan de
ensueño mis dientes de guerra, y mis labios de fuego.
Violenta
tormenta tu vientre agitado, espasmos y truenos arrastran a mi boca sin rumbo
hacia un mar en llamas interno, en un
estrecho abismo ardiente; destino ignorado en que quiero perderme. Ya sin
velas, naufraga mi boca entre tus muslos oceánicos, entre violentos oleajes de
caderas, entre el bramido de fluidos delirantes,
inundada de delicias y besos.
Naufragio
y muerte deseada que llevan a la vida tras renacer. Cielo en la tierra, portal
al delirio, magma de gloria, rosado crisol en que se funden nuestras mieles;
infierno dulce y voraz de mi alma y de mi carne. Cósmica explosión, erupción
del alma, infinita y sublime fuente de placeres, fragilidad y poder de lo
divino y lo mortal unificado, divino beso al universo y a la gloria.
Después de la gloria y tempestad, emerge de nuevo mi barca.
__
Un minuto de silencio para los que nunca amaron. Un segundo de tentación para
los que nunca pecaron. Un momento de cordura para los que tienen un beso en sus
labios. Y un instante de pasión para los que arrodillan sus miedos en el gran
infierno del placer. Piénsame y siente cómo eriza caricias tu piel. Cómo mi
ternura te besa a sorbo, cómo se desgarra mi corazón con cada uno de tus
latidos. Deja que tu cuerpo desnude mi cama, que tu saliva moje mis labios, que
tu mirada me penetre, que el silencio suspire, que el sudor de mi cuerpo
taladre rocío en tu alma y prepara tu piel para el estallido. Atraviesa mi
noche de norte a sur. Rásgame, acaríciame, poséeme y bésame profundo hasta que
las lenguas ardan, las piernas tiemblen y el volcán explote. El duro vigor
escriba los últimos verbos de mi amor. Quiero explicarte que tenerte es
más que poseerte. Que abrazar tu cuerpo, es compartir la virginidad de tu alma.
Que lamer una lágrima en tu gemido, es tocar el amor infinito.
__Sucumbí
ante tu pasión, me perdí en tu profundidad…Sentí lo que nunca soñé, acaricié lo
que nunca sentí y en la dulce perversión de ese instante, enamoré mi piel
de tu sudor. Cresta de ola que alcanzaste tu clímax en mi cuerpo, miel
que transpiras a gotas, lágrima que escribes éxtasis en mis ojos…Sensualidad de
hombre que poseíste mi alma hasta la extenuación del corazón. En mis dedos
nacieron tus huellas, en tus labios vivieron mis besos, entre mis brazos
crecieron tus cumbres y en tus cabellos
perdí mis manos. Poco a poco en mis sentimientos nació tu amor, en el silencio
del deseo tu aliento penetró mi garganta y en la exhalación de nuestro orgasmo,
el viento rompió con su fuerza nuestros miedos. Rasgamos sábanas, enaltecimos soles,
arrancamos tiempo de nada…Abrimos manos y dejamos que en nuestros puños viviera
la pureza de la intensidad, la eternidad del instante y la ternura de la noche.
Conquistamos lienzos, descubrimos humedades, aprendimos que el dar no tiene
medida, que recibir es gozar y que amar es compartir todo. Marea alta que
nos transportas al sublime sueño del amor, marea alta que excitas almas al
límite de la razón, marea alta que exprimes contorsiones y dignificas el
profundo abrazo de la generosidad, marea alta que expones libertad al
desnudar nuestros cuerpos…Marea alta que me llenas de ansiedad, hazme tuyo cada
día porque entre tus olas, escribiré la historia de una pasión.
__Escuché
una palabra en tu beso. El aliento confundió mi saliva, tu lengua tocó mi alma
y tu sabor llenó de miel mi corazón.
Temblaron mis labios al rozar tanta suavidad, lloraron mis encías ante la
blancura de tus dientes y esa dulce sensación, cerró mis ojos.
Sentimos
calor, pasión, atrevimiento y deseo. Sentí calor, ese calor que nace de la
sangre y nunca muere, ese calor que enchina piel y levanta poder…Ese calor que
invade intimidad y deshace miedos. Sentí pasión, esa pasión que nace de la
libertad y no escucha razones, esa pasión que entre puños, arruga sábanas
y deshace soledades…Esa pasión que desboca fierezas y pervierte ansiedades. Esa
pasión que enciende fuego y deja brasas. Sentí atrevimiento, porque tu
dulce voz lo excitó. Sentí atrevimiento porque en mi boca vive la osadía y tú
la besaste, sentí atrevimiento porque tus manos acompañaron tu beso, porque tus
caricias me lo pidieron y porque caí en la profundidad de tu deseo. Sentí
atrevimiento porque fuiste tú, quien besó mis labios. Sentí deseo,
ese deseo que confunde religiones y explica pecados, ese deseo que mata
pensamientos. Ese deseo que nace de lo profundo y crece en tu piel. Quisiera
que la vida me explicara ese deseo, ese momento en el que se juntan nuestros
labios, el instante en el que mi lengua penetra tu boca y en ella abrazas el
milagro de mi éxtasis. Un beso, sentimiento del corazón…Tu beso, tatuaje en mi
alma.
Quiero
decirte algo... Algo que ni las hormigas en su trabajo nunca llegarán a
decirte, ni las aves en sus alturas llegarán a explicarte... Algo que ni las
nubes en su esponjosidad llegarán jamás a expresarte...sólo quiero decirte:
"TE AMO".
__Quiero
decirte algo.... Algo que las piedras ni rodando en el río llegarán nunca a
decirte, que ni los ríos nadando al mar llegarán a explicarte ni los mares
inundando horizontes llegaran jamás a expresarte......sólo quiero decirte:
" TE AMO".
__Quiero
decirte algo... Algo que las miles de estrellas sembradas en el universo nunca
llegarán a decirte, ni los millones de soles nunca llegarán a explicarte... Algo
que ni mis siete lunas son capaces de expresarte... sólo quiero decirte:
"TE AMO".
__Quiero
decirte algo.... Algo que la intensidad del universo nunca podrá decirte... Algo
que ni la magia de la naturaleza podrá explicarte... Algo que ni la mano del Creador
podrá expresarte..... Sólo quiero decirte: " TE AMO".
Respiré
hondo, me tiré hacia atrás y abrí mis brazos en cruz. Quería abrazar ese cielo
lleno de estrellas donde mi mirada se fugaba y navegaba, colmado de destellos
que hacían guiños. Así había sido mi vida. Respiré profundo y me liberé dando
un respingo de descarga. Desnudo en alma y en piel en medio de la nada,
aturdido de silencios rotos por orgasmos y respiraciones, repté sobre Pedro
para disfrutar de esa noche y de cada una sin pensar en nada. Sin hablar.
Empezamos
de nuevo a hacer el amor, suave, conectados, tiernos. Con el mismo ritmo. Lo
cabalgué como en cámara lenta dejando la vida en cada embestida. Quería
sentirlo en detalle. Entramos en un trance profundo. Ninguno deseaba acabar.
Ninguno deseaba que esos días acabasen. Contuve cada orgasmo. Los sostuve como
guardándolos. De pronto el mundo giraba alrededor nuestro. Las estrellas
empezaron a irse. De a una despacio. El sol asomaba agazapado, espiándonos. El
cielo se iluminó por completo y nosotros seguíamos allí, haciendo el amor.
Liberamos todos los orgasmos posibles en un solo grito desgarrador.
Me desvanecí sobre su espalda. Respiramos
profundo. Seguí dentro de él. Habíamos estado toda la noche haciendo el amor.
Fundiéndonos en el uno, uno en el otro, un ser… para siempre, para la
eternidad, desafiando a la muerte, porque no todas las parejas terminan igual,
porque el amor resiste, a cualquier cosa, hasta la muerte, porque lo nuestro
aunque juzgado y tildado de prohibido al inicio del tiempo, lo es y lo será, y
resistió, y es… el mayor sobreviviente de… El Naufragio.
25
de octubre de 2016.
Fugamos
la mirada a José, nuestro hijo, está tostado por el sol y la brisa, feliz de
estar con dos papás que al parecer desea compartir con Andrés, y Pía sonríe
cómplice.
Hemos
leído la carta de Juan con un dejo de nostalgia, casi he revivido mi vida de
extrañar a Mirna, de pronto abrimos los regalos de ella y de María, Pía sabía y
se quedó cerca, nos encontramos recorriendo nuestras vidas sin conocernos,
todavía, en fotos resguardadas por ellas, desde Pedro de bebé, a mis primeros
años antes del viaje, hasta las del
último año, instantes guardados para siempre, congelados de momentos que la
memoria podría perder.
Miramos
a los chicos, Pedro empezó a filmar a José y vino a mostrarme.
__Es
precioso, ¿verdad?
__
Es la suma de vos y de tu hermano con un toque de la belleza de Camila.
¿Pedro?
__ ¿Qué?
__ ¿No
tendremos más hijos? Quiero decir, biológicos no, pero ¿te gustaría tener más
hijos, juntos?
__Es
algo que tendría que pensar, puede que sí, que sí desee más hijos si son
contigo.
__!Atorrante!
Más te vale que sólo conmigo.
¿Terminamos
de leer y vemos “hilo rojo”?
__Nos
instalamos en el microcine, y al final de la película y ya conocida la historia
nos asombró.
__ ¿Qué?
__pregunté aturdido __ ¿Por qué Manuel nos regaló esto? Ella no se juega, no cree en el hilo.
__Él
fue a la cita, él está seguro que el destino
los hará reencontrarse una y otra vez.
Final
abierto.
__ ¿Y?
__Que yo creo que sí, que creo que se reencontrarán una y otra vez, hasta que al fin el universo de alguna manera acomode las cosas como lo hizo en nuestras vidas para que no sientan la culpa de amarse, para que puedan vivir el Amor, amor en el que aún no creen demasiado, porque el flechazo sin tiempo hace dudar. Pero se van a reencontrar, al fin se van a rendir, es el final que presagio, es mi final, es el que elegí contigo, es el que dijo… Un Destino… Un amor… Para siempre.
__Que yo creo que sí, que creo que se reencontrarán una y otra vez, hasta que al fin el universo de alguna manera acomode las cosas como lo hizo en nuestras vidas para que no sientan la culpa de amarse, para que puedan vivir el Amor, amor en el que aún no creen demasiado, porque el flechazo sin tiempo hace dudar. Pero se van a reencontrar, al fin se van a rendir, es el final que presagio, es mi final, es el que elegí contigo, es el que dijo… Un Destino… Un amor… Para siempre.
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Para siempre te amo, Pedro. También espero ese final y lo elijo. Tienes razón,
el hilo invisible existe, es un destino, es sólo un amor.
“Principios
y finales. Tales cosas no existen.
Solo
existe lo que ocurre entremedio.
Robert
Frost”.
Hasta
Pronto.
Guille
y Pedro… Pedro y Guille… Un destino… Un Amor.
Gracias
Pol-ka y a sus personajes. Farsantes la tira del 2013.
Gracias
Guilledro.
Gracias
a las trescientas lectoras que acompañaron por tres años esta historia.
HECHOS
Y PERSONAJES SON FICTICIOS.
CUALQUIER
PARECIDO CON LA REALIDAD ES MERA COINCIDENCIA.
LENGUAJE
ADULTO.
ESCENAS
EXPLÍCITAS.
Moisés Gracias Eve
ResponderEliminarChio Bello final, Gracias por la distincion
ResponderEliminarArturo Muy bello
ResponderEliminarPatricia Precioso!!!
ResponderEliminarVictoria Bellísimo y sublime final.
ResponderEliminarAurora Hermoso
ResponderEliminarValle Muy bello
ResponderEliminarRaquel Muy bello, gracias, muakk.
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ResponderEliminarPaloma Sánchez-Archidona Divino.
Yoli Genial, que pasada, gracias.
ResponderEliminarSilvia. Gracias Eve, me encantó, la primera parte, ya leo ésta, gracias a vos.
ResponderEliminarIsabel...Lo más, qué bello, pero dime que falta uno más, porffis
ResponderEliminarAlexis en el fondo uno sabe que hay un vacío, uno es conciente de la rueda en la que una y otra vez damos vueltas sin salir de ella, esa es la zona de confort, esa rueda que te impide ser quien realmente sos, esas frustraciones, esos actos fallidos, ese deseo de cambiar, en el fondo uno es conciente de sus limites autoimpuestos , ese papel en que actuamos, en el que no somos genuinos, en donde estamos limitados por fantasmas.Hasta que llega el amor y se toma la decisión o se entiende que es sea el género que sea.
ResponderEliminarAngélica. Divino, porfa, uno más, porfis.
ResponderEliminarEmocionante Eve,no podía ser de otra manera...Tanto amor no termina por supuesto, Naufragio es una historia maravillosa que queda abierta en el corazón de todas las que la vivimos junto a vos y por supuesto, junto a Pedro y a Guillermo...Gracias a vos y a esos personajes que siguen alimentando con su amor mi fantasía y mis sueños...
ResponderEliminarEmocionante y no quiero rabiar sabes las pocas que he terminado y que no puedo poner fin, nada más parecido a hilo rojo que Naufragio por ello tomé ésta para aplicarlo, creo que no dejé cabos suelto ninguno y me tomé varios capítulos para darle el mejor... hasta pronto, gracias por estar, espero que NORMA HAYA SALIDOS BIEN DE SU CIRUGÍA DE LOS OJITOS PORQUE AMÓ ESTE ENCUENTRO PARA MÍ EL MEJOR Y QUIZÁ LA TIRA CASI TODA ROMÁNTICA MÁS BELLA, VEREMOS SEÑALES, LA PRESIENTO LA MEJOR COMO SALIDA DEL SUEÑO QUE ME DIO SITIOS Y PERSONAJES. hAY UNA TRAMPITA, QUERÍA TERMINAR EL ÚLTIMO CAPÍTULO ANTES DE IR A LAS TREMENDAS DE EL OTRO Y VECINOS TAN DIFERENTES, PERO FALTA EL EPÍLOGO COMO NO PODÍA SER, FAÑTA UNO MÁS, AUN NO LO PENSÉ, GRACIAS INFINITAS Y MI AMOR, PERDÓN QUE ME ASOMO POCO PERO LEO TODO ES POR EL OTRO GRUPO Y MI FALTA DE INTERNET QUE PAENAS ME DEJA PUBLICAR, LIBERADO ESTO AHORA S´Í VOY A LAS POLICIALES, EL OTRO, VECINOS DESAFÍO, EL VIAJE MEDIO LO TENGO EN PAUDSA ESPERANDO SABER DE NORMA, SON LAS PRÓXIMAS, DE NAUFRAGIO VERÉ DE DAR UN BELLO EPÍLOGO, BESOTE, YA TE ARREGLO VECINOS QUE DEBES ESTAR FURIOSA, EL OTRO, NO SÉ AÚN, PERO VECINOS YA CREO QUE SALVO A GUILLERMO Y NO HE PENSADO EL FIN DE NUESTRO AMIGO, ESTABA EN MODO NAUFRAGIO. BESOTE. Y LAS QUE VAYAN LLEGANDO.
EliminarVeronica Lorena Piccinino Ese es verdad... No siempre na vida regala finales felices... Pero estos personajes eternos y nuestros se lo merecen. Gracias
ResponderEliminarSusana Alcaraz Eve termino de leer Naufragio ,bellisimo final , no puedo entrar al blog lamento mucho pero no se que pasa ya no entiendo mucho estos cambios de formato que tiene facebook, respecto a Naufragio a mi entender fue mi preferida una historia hermosa , con tantos personajes y vos los fuistes llevando asta donde tenian que terminar cada uno de ellos , fantastico como escribis Eve , como siempre llore mucho , de ver estas almas gemelas al fin juntos en ese viaje tan maravilloso que escribistes Eve y ese hilo rojo que en ellos jamas se rompera , quiero darte las gracias por todos estos años en los cuales has escrito tantas maravillosas novelas , tal vez no haya sido una buena lectora y tampoco no poder expresarme por escrito lo que siento realmente para mi es dificil escribir mis sentimientos , no se hacerlo , pero desde mi corazon y alma amo a este Naufragio que tal vez deje abierta como para otro capitulo , eso lo veras vos Eve , hoy dejo naufragio , pero seguire cuando mi cuerpo y mente me lo permita con marcados y ¿ y si fuera posible ? te mando todo mi cariño y besos tqm , y a seguir adelante Eve con todas estas fantasticas novelas , besos y abrazos y perdon si no me he expresado bien cariños amiga ¡¡¡
ResponderEliminarEve Monica Marzetti Gracias Susana Alcaraz. Ponte contenta que falta el epílogo. Quería dar la segunda parte del 107 pero queda otro y Ser a hasta pronto para espiar. Para mí también a hoy fue la mejor. Besote.
EliminarSusana Alcaraz que bueno, esparare el epilogo Eve , gracias ¡¡¡
EliminarSilvia Colases Hola Eve. Desde hace unos meses estoy bastante ocupada y no estoy leyendo mucho, te pido disculpas por ello. Pero ahora, como estoy bastante atrasada comenzé a leer algunos capítulos todos juntos como por ej. Prohibido y El. Ahora empecé con los cap. Atrasados de Naufragio y me encanta.Hermosa historia de amor con sus contratiempos, problemas pero con muchísimo amor, ahora corro para el final, no te creí. Te felicito y te mando un beso grande
ResponderEliminarEve Monica Marzetti Silvia Colases, Prohibido e y si fuera son lo más y él es divina, pero dale con Naufragio que te dediqué el final, falto sólo el epílogo, es la más bella de las pocas que he terminado, te quiero reina, besos.
EliminarVeronica Lorena Piccinino muy lindo capitulo Eve... gracias
ResponderEliminarSol Urvino. Divino. Todo amor. Un beso Eve.
ResponderEliminarEmocionante final de Naufragio una historia bella en cada momento,transmitiendo tantas emociones y el amor qun los unió conformando una familia unida, gracias por tanto Eve nada mejor que poder leerte sos insuperable :) te quiero !!!
ResponderEliminarBellísimo !!!!!
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