"SEÑALES DE AMOR". CAPÍTULO 18.

"SEÑALES DE AMOR".

CAPÍTULO 18.

“Poema atribuido a Benedetti, pero cuyo real autor es el cantautor Pablo Milanés.

Yo no te pido

“Yo no te pido que me bajes
una estrella azul
sólo te pido que mi espacio
llenes con tu luz.

Yo no te pido que me firmes
diez papeles grises para amar
sólo te pido que tú quieras
las palomas que suelo mirar.

De lo pasado no lo voy a negar
el futuro algún día llegará
y del presente
qué le importa a la gente
si es que siempre van a hablar.

Sigue llenando este minuto
de razones para respirar
no me complazcas no te niegues
no hables por hablar.

Yo no te pido que me bajes
una estrella azul
sólo te pido que mi espacio
llenes con tu luz”.

__ Viernes, 03 de noviembre de 2016.

Guille no llamó otra vez, ni envió un mensaje de texto, ni de correo electrónico. Pasé las horas y la semana siguiendo instrucciones de mi terapeuta, luchando con un manuscrito, borrando capítulos que podría haber escrito un niño en edad escolar, limpiando el loft y la casa sobre lo limpio, encerrado por horas en mi despacho en la empresa, he hice una entrevista  con la doctora más traumática que  la suma de las anteriores.

Hablé de David y de su muerte, no quería pensar en ello.

Baste decir que a viernes, el primer viernes de noviembre, he logrado convencerme de que Guillermo sólo ha estado jugando conmigo.

__

Nuestras miradas se encajaron,  y casi me estremecí por la punzada de atracción que silbó en mi pecho.

__Gaby, tu hijo, la gente del estudio, se han convertido casi en buenos amigos, no quiero volver a perderlo todo, no quiero estropearlo. Y no quiero tener una relación. Con nadie.

No me vengas con leyendas, conjuros… ni siquiera con las benditas… Señales de amor.

No me interesan, si las siento o no,  eso no cambia nada, no quiero tener una relación otra que quizás con Camila cuando regrese, quédate con Ana, el fachero, Juan, tienes para elegir, y pensé que iríamos unos días a conocernos a alguna parte, no en esta invasión.

__ ¿Terminaste?

Porque precisamente… pienso que como yo estás temblando, consumido, por y en… las… Señales de amor.

__

“Llegas intenso y profundo,  como ansioso el silencio se hace mar en espacios de la vida, en manos que tocan los segundos y despiertan las ternuras. Ésas que siempre esperan al espacio, silencio con deseos de decir lo bello de la música de las notas que yacen danzando en un lirio, de las miradas que se quedan en las flores que huelen a rosas porque fueron tocadas por tu mirada que es polen y miel en mi alma”.

“Pedro, sos sencillo  como lo más tierno que llevas en la piel, es por eso que la belleza es el sostén de tu vanidad, es la inmensidad masculina la que te permite liberar al tiempo y espacio que ya no es tuyo, es del arte que haces y de la vida que dejas en la fragancia embebida en mis manos”.

__Guillermo, no quiero lo que buscas, no insistas, estás casado, yo tengo novia, no busco un amante, no sé siquiera si soy gay _dije poco convencido.

__Pedro, la leyenda es verdadera, más allá de lo que dice tu hermano, de lo que saben todos, yo veo a la mujer que sufre en la casa que compré, y soñé con el amor eterno que la espera, y si hemos de romper el sortilegio, no podrás cambiar el destino _afirmó mirándome recostado en mis retinas.

__ ¿Cómo? Te advierto que Beto no le regaló perlas a Gaby, iba a hacerlo pero se arrepintió, menos creo que me vayas a dar zafiros, ¿verdad? ¿Qué soñaste exactamente?

__Todo empezó en la tumba de la mujer que esperó a mi tío abuelo, fui al cementerio.

“__ ¿Estás aquí? __murmuré__. Hay fotografías tuyas con el tío abuelo en uno de los álbumes que mi madre retiene de cuando murió mi abuelo. No conservaba muchas fotos de este lugar. ¿No es extraño que conservara de las tuyas? __Me puse de rodillas para observar de cerca el epitafio y la alfombra de flores que había sobre la tumba__: Te debían de gustar mucho las flores, el jardín de tu casa es precioso. A mí me gustan mucho aunque no lo creas, es lo que más me agrada, cuidar de ellas, hasta tengo plantitas en mi estudio que riego con una botella.

__Tenía mano con los seres vivos.

Al oír el comentario, miré hacia el pozo y me levanté. Había allí un hombre vestido con ropajes plateados que brillaban con el reflejo del sol. Pensé que formaba parte de algún espectáculo de algún circo cercano o algo así. Su larga melena negra, su sonrisa burlona y sus resplandecientes ojos le daban aspecto teatral.

__No te asustas fácilmente, Guillermo, ¿verdad? Eso dice mucho a tu favor.

__Un hombre que se asuste fácilmente no debería venir aquí. Es un lugar precioso _afirmé __. Aunque en realidad me asustan cosas mucho más triviales, le temo a demasiadas tonterías, no a los muertos.

__A mí el sitio me gusta mucho. Debes de ser el hombre que se mudó a la casona, para construir sueños y encontrar respuestas.

___Más o menos, no sabía en todo caso que me mudara por esas razones, simplemente decidí mudarme allí. ¿Y vos?

__ Soy el príncipe de las hadas y duendes de la leyenda, es un honor conocerte.

__ Vaya, el que me contó Beto.

__Has oído hablar de mí, en efecto, no te burles, incluso antes de mudarte.

__Naturalmente. ___ Pensé que o estaba loco o  no quería abandonar el papel que representaba en algún teatro. Probablemente fuesen las dos cosas __.Da la  casualidad de que estoy viviendo en  esa casa encantada.

__Sé perfectamente dónde vives. Y no me importa ese tono condescendiente que empleas. No te he traído hasta aquí para que te diviertas a mi costa.

__Que vos me has traído…

__Mortales _gruñó __. Les gusta creer que ellos lo hacen todo. Tu destino está aquí Graziani, unido al mío, ¿te has visto al espejo la mirada? He tenido que hacer algunas cosas para conseguir que vinieras.

__Amigo, si bebes desde tan temprano no deberías andar solo por estos sitios. ¿Qué te parece si te acompaño a tu casa?

__ ¿Borracho?, ¿piensas que estoy borracho o drogado? __El extraño echó la cabeza hacia atrás y soltó una tremenda carcajada__: Yo te enseñaré lo borracho que estoy, déjame que me recupere un poco. __Respiró hondo un par de veces__. Veamos…, tiene que ser algo muy contundente, te conozco, no crees en demasiadas cosas fuera de ti mismo, eres tu soberano, dices siempre, porque eres del tipo de los cínicos. Ya sé.

 Sus ojos se tornaron color cobalto y habría jurado que salieron destellos de las yemas de sus dedos. De repente, apareció una esfera entre sus manos, era trasparente como el agua. En ella flotaba la imagen de la pareja… de nosotros en la playa, Pedro, de lo que venimos planeando hacer.

__Mira cuál es tu destino. Pedro es hermoso y tiene una voluntad fuerte y un alma hambrienta de su par. Como Alberto con Gaby, sí, ellos son lo mismo. ¿Serás lo suficientemente inteligente como para conseguir lo que te ofrece el destino y te marcaron las señales?

Arrojó la esfera hacia mí. Instintivamente  estiré las manos para cogerla y noté que mis dedos atravesaban algo frío y suave y que la esfera se deshacía como una burbuja.

__Un buen truco. __ Mire hacia abajo y lo busqué luego, pero  noté que estaba solo___. Un buen truco __repetí mientras me miraba las manos más impresionado de lo que hubiera sido capaz de reconocer.

Pasé la noche atormentado por los sueños. Mis sueños siempre han sido vívidos y fulminantes, pero desde que entré a esa casa, son nítidos, cristalinos. Como si alguien hubiese enfocado el objetivo de una cámara.

El extraño personaje del cementerio estaba cabalgando sobre un caballo blanco alado por encima del mar, mas lo raro es que podía sentir los músculos del corcel mítico debajo de mi cuerpo, y jamás he montado. A lo lejos, el cielo y el mar claramente separados, como si se hubiese dibujado una línea con una regla.

El mar era del color de zafiros, el cielo plomizo.

El caballo se zambulló, cortó la superficie del mar con sus poderosos patas delanteras y yo pude ver, notar, todas y cada una de las gotas. Pude paladear el sabor salado en los labios. Me encontré en un mundo turbulento y gélido con un brillo misterioso. Podía ver el parpadeo de luces incandescentes, como el batir de alas de hadas, y podía oír las gaitas que sonaban  entre el incesante sonido del mar. Un estremecimiento me recorrió el cuerpo.

En el suave lecho del fondo del mar se elevaba  un palpitante promontorio de color azul intenso, era como un corazón anhelante. Desde su interior, el hombre que se hace llamar príncipe, llevó mi mano hacia una masa. Sentí  su resbaladiza textura en mi cuerpo, la onda vibrante en mi propio brazo. Cerré la mano, torcí la muñeca y arranqué el corazón del mar.

“Para él”, pensé agarrándolo con fuerza. “Es mi constancia. Sólo para él”.

Al despertar tenía el puño cerrado, pero el único corazón que latía era el mío. Desconcertado, abrí las manos. Estaban vacías, por supuesto que estaban vacías, pero pude notar cómo una sensación de energía se desvanecía entre mis dedos.

El Corazón del Mar.

Es ridículo. No hacía falta ser biólogo marino para saber que en el fondo del mar no hay ninguna masa azul latiendo. Había sido una jugada de mi subconsciente, llena de simbolismo, eso era verdad, que podría analizar hasta el infinito si me interesara, pero no es el caso.

Me levanté y fui al baño. Me pasé distraídamente la mano por la cabeza, tenía el pelo húmedo, sudor, dije.

Me detuve en seco, bajé la mano, la miré. La llevé lentamente a la cara y olí. Agua de mar.

Desnudo, me senté en el borde de la cama. Nunca me había considerado fantasioso o influenciable. En realidad alardeaba de tener los pies anclados bajo la tierra.

Sin embargo había soñado que volaba sobre ese caballo a través del mar, y había despertado con el pelo mojado por agua de mar.

¿Cómo podía explicar eso un hombre racional? Necesito recopilar información. Escribí a mis padres, preguntando por la leyenda, por mi tío abuelo y su historia, le conté de la casa a mi madre, le pregunté sobre el príncipe y la doncella. Enviado el mail, miré el reloj, ocho en punto, quería ver a Beto, pero decidí esperar. Es todo, vine a cumplir con lo que te había dicho antes”.

__Es lo que se dice, Beto no está, y tú te encargaste de que se encuentre en casa de Gaby, no creo ser el dueño de esa cosa simbólica, te  has obsesionado como mi hermano con la leyenda y las señales, yo no, no quiero, manejo con mi mente mi vida, y no es lo que quiero, voy a sufrir, haré sufrir a otros.

Te pedí tiempo, y me corres por todos lados, no puedo Guillermo, no me conoces, apenas te he contado de mi culpa por la muerte de mi madre, de Emanuel, sabes, me viste en pánico, pero no me conoces.

__Déjame hacerlo, y mientras…  no niegues lo que sucede.

Pedro, no amo a Ana, soy gay. No tengo amantes hoy, estoy solo. Le temo a las señales y a esa leyenda tanto como vos, no creo que hayas hecho daño más que yo en mi vida, y el que resta cuando Fabián sepa la verdad, pero necesito que me dejes entrar a tu vida, de a poco soltaré a Ana, y vos no tienes ninguna mujer a la vista. Camila desapareció, y para cuando regrese, me gustaría haberte convencido de que ya no puedes mantener esa farsa.

¿Vamos un par de días a la Costa en el próximo fin de semana?

__No lo sé, hoy no sé. Guillermo, estoy iniciando una terapia, no es acostarme contigo la decisión que puedo tomar o que la doctora me aconsejaría justo ahora.

__Pedro, no hemos discutido nada sobre no ser algo, me gustas demasiado, de verdad, desde que te vi en la mudanza.

Guillermo…

__No me repitas que no quieres tener ninguna relación con nadie, porque en ese caso, no te estoy proponiendo ninguna relación.

__No miento si digo que me estás confundiendo. Ya, bueno, Graziani, ¿qué estás proponiendo?

__Hoy es el día más importante de tu vida, porque hoy tienes la oportunidad de decidir si ves la vida como una tragedia, o la vez como una oportunidad para ser un hombre extraordinario.
Te criticaste por años y no funcionó, estuviste esperando a que te valorara el mundo  y nunca lo hizo.
Ahora no te pido que veas lo maravillosa que es la vida, ahora te lo exijo, te exijo que veas lo maravilloso que sos, te exijo que te des la oportunidad de decir sí al amor, aunque te vaya mal, porque debes saber que no existe un amor que con toda seguridad sea para siempre, él que sea para siempre depende de que los dos por siempre lo rieguen con esos pequeños detalles que hacen que por siempre esté encendida la llama del amor. Vos decides, sí,  sos vos quien decide el rumbo de tu vida o que sea otro el que decida por vos, porque quiero que nunca olvides esto: tu vida es sólo tuya y por siempre será sólo tuya.
Porque nadie puede crecer por vos, nadie va a pelear por vos, nadie puede creer por vos si vos no lo haces.
Por eso mismo nunca permitas que te manipulen, no permitas que te digan que no puedes, porque quien te lo dice no te ama, quien te lo dice es tu enemigo.
Nunca permitas que te obliguen a hacer algo que atente contra tus valores, tus principios, contra tu dignidad.
Nunca permitas que te prostituyan en nombre de un supuesto amor, quien te prostituye no te ama.
Porque la vida no admite representantes, entonces cuando te enamores de vos mismo vas a poder ser feliz y te enamorarás de alguien digno de vos, porque si no logras ver tu invaluable valor, es muy posible que te juntes con alguien que tampoco pueda ver tu gran valor.
Vos decides qué quieres hacer con tu vida, si haces de tu vida una tragedia o si la vives como una hermosa aventura.
Vive cada día no como el último día de tu vida, vive cada día como el mejor de tu vida. Pero no temas, entiendo que no debo decirte que te amo, ni hablar de la leyenda.

La espera es parte del amor, no siempre el amor llega cuando debe llegar ni cuando llega se hace de amar. El amor para resistir debe ser puro, sencillo, con dotes de entrega y humildad. Ésa la grandeza del amor y del amar… amar es sentir el corazón del alma, el alma universo del todo y las partes, es prosa y  tiernamente poesía  y simpleza de carne en los bordes del cielo. No es utópico, es real aunque se hace sueño porque el sueño es fantasía y la mente es parte de la fantasía, y qué es realidad y qué ficción, no lo sé, la vida es sueño, dijo el grande.  El ser humano es alma y vida,  vida amada, sentida.

Amar es tener manos llenas de espera, de sentir la mirada del amor en el alma, de cobijarse con el más frío intenso y amanecer con el calor de la vida, esa vida que amo con el alma, alma que sigo amando y se quedó en mi alma para siempre.

¿Dónde estás?
Me hace falta sentirte  cerca... poder rumorar a tu oído este deseo que me colma,  estas ganas de abrazarte, de sentir que te abrasa esta llama que arde  en mis entrañas, para así concederle calma  a estas ansias que me  queman por amarte y entregarte en mis besos  y caricias el alma.

Esta soledad, me quiebra hasta los huesos, hace hielo mis carnes, en cuatro paredes de piedra mi corazón, al no tener tu abrigo me arrebatan los sueños, este comparecer.

Mi almohada se hace roca, muda y triste al desgranarse en boronas, mi compungir un descuido me deja frío, al estar ausente se arremolinan los lobos, por tu consentir.

Dios se hace guardián  del asecho felino,  pone a tu pecho una nota de prohibido para que no ronde en ti ese letal veneno que te haga preso, en tan ajena distancia. Aliviano celos ante inmarcesible pureza, llamo a que mi tranquilidad sea paz, sosiego nunca débil, ni quiebre en desconfianza, seas bendito, para mi amor idílico.

Te asaltan soles tras mi esencia de dios, que no  dobleguen tu reino con riquezas o tesoros, el filo de una espada ni me separen de tu vida por no ser un surco brillando como el oro.

Dejo mis sábanas, alisto a tu fiel guerrero para que sea el vigilante de tu morada, a la redonda y vigile tu cetro, como un valiente gladiador, piratas saltan del mar, en aspas sus espadas. Me inclino a merced, siendo muro de tu reino pondré obstáculos, como una férrea defensa para ser yo el que esté con vos adherido con mi escudo y seré el ajedrecista, dando jaque y mate al rival. Pondré de arma mi corazón, de fusil mi prosa, alistaré de balines el rugir del cañón en verbos al disparar en ráfagas de metáforas lanzaré letales proyectiles, en explosivos besos.

 Siento tu ausencia en este silencio que evoca el recuerdo, en cada uno de los espacios que me hablan de ti. Fijo la mirada en el infinito y puedo ver tu rostro. No hay cordura cuando en el corazón se extraña y en el alma se llora. Voy caminando buscando tu sombra junto a mí y la calidez de tu mano guiando, siempre aquí... Pienso ¿qué será de vos?, has dejado un vacío que no se puede describir y la soledad que acompaña sin poderla ahuyentar.

Se borran las huellas de tus besos y aquellas caricias tatuadas en mi piel y los ecos de tu voz rondando en mi interior.

Te contaré una historia que es la mía, la tuya, la de muchos, el sinsentido.

__Guille…

__No es leyenda, no. Sólo escucha.

El tren bullía, el vaho escapaba de prisa, aún detenido se alegraba de ser una máquina de poder, de fuerza, el vapor era la energía, esas aguas destiladas por el fuego, aguas encerradas sin reposo alguno, bullían como queriendo estallar en mil pedazos, pero estaba presa, la encarcelaba esa presión desmedida por el horno a altas temperaturas.
Se inflamaban las gotas, ahora esfumadas como un humo de mil cuchillos, bastaba un orificio para reclamar como un cincel de lanzas su libertad, estremecía los fierros el duro acero, los ejes inertes inquietos palidecían al estar estacionados esperando peregrinos viajeros llenaran su vagones, la refriega intensa del vapor acumulado hería sus émbolos, la cuna que aprisionaba sus extremos, rígidos como los brazos de un Hércules, el temple de Sansón.
Se resistía ante el enojo estático de ser inercia, por ahora detenida, los pasajeros con su boleto uno a uno tomaban asiento, la algarabía era callada por el lloro de los vahos, el quejido de los hierros, el lagrimear de esa blanca estela que furiosa y felina salía de los herméticos empaques aferrados a la misión de no dejar salir ninguna partícula de la fuerza centrífuga.
Los rostros sonrientes de quienes partían y el dejo triste de quienes se despedían, abrazos fuertes, manos atadas se resistían a soltar al ser querido, las parejas sentían un hueco en el corazón, un roto en sus memorias, la tristeza parecía tener sal, un sabor a vinagre, el dulce desaparecía de sus lenguas, pensaban tanto para decir ese simple adiós.
Bufó el sonido de la parida, paralizó el corazón como un viento helado, las lágrimas saltaban de la ventana de los ojos, un escozor en los hálitos, las cejas caídas. Los párpados con sombras de incertidumbre no podían ponerse el antifaz de la sonrisa.
Un segundo bufido retumbó de lleno los oídos, se escuchó largo, impetuoso ya no había tiempo para esperar, la hora había llegado, rechinaban los vapores al consentir el cambio de presiones, los pistones aceitados, los líquidos de presión, movían las bielas, se escandalizaba el rugir, un tercero cerró las puertas, desaparecieron los hombres de uniforme.
Un solitario hombre, sentado con el umbral de su sonrisa impasible, nada descifrable, la soledad tenía ese ritual frío, calculador, inquebrantable, tomó un esfero, una libreta de apuntes, mientras el tren comenzaba a tomar fuerza, rechinaron los rieles, los frenos se abrieron de sus trincheras ya libres bajo el peso de toneladas sacaron las primeras chispas al comenzar a rodar.
Pronto el tren fue ganando velocidad, las ruedas cantarinas con su chacha, sacudían los rieles paralelos, mientras este pasajero en especial comenzaba con su recitar de letras a soñar, se asomó a la ventana, corrió las cortinas, y miró al cielo, a sus blancas nubes.
Un castillo apareció en sus pupilas, la danza de un arco iris resucitó, cavilaba ese encuentro, paseaba sus sentimientos en la otra orilla, su destino apuntaba al norte ahora indicado por la brújula que ya tenía en su corazón el punto de llegada, el tren del amor y de la felicidad ya transitaba por recovecos, curvas, grandes rectas, subidas y bajadas, era una araña, un escarabajo arañando las montañas, un tentáculo de pulpo para sostenerse en los descensos.
El corazón dibujaba una tierna musicalidad, su pecho ahora sonría en notas, ese rítmico son entre el tren y su pálpito eran el grito de victoria para alcanzar la felicidad, que muchos sacaron sus cartas malignas, realizaron embrujos para engañar la razón del verdadero amor.
El pasado, tóxico o no, en un comienzo nebuloso lleno de tragedias, lodo, incertidumbre, castigos inclementes, incomprensiones, engaños, su alma largamente contaminada, al recibir el oxígeno de un don, el de escribir, de escalar del mundo sordo y mudo, por la timidez, un taimado comportamiento que le negó el derecho de ser nombre libre.
Mientras crecía, superaba contrarios retos, sacudía ese polvo doliente, los amargos ratos de los amigos de lo ajeno, las distintas sombras oscuras para restarle luz y brillo a sus ideales, metas a medio escalón retrocedieron al ver un inexperto en las lides de la administración.
Poco a poco ese nefasto bache construyó una mente férrea de luz, paz y esperanza, cada insulto a su confianza, nobleza lo impactaron para ser distinto en el compendio de las leyes, esa trinchera de reflexión y meditación profunda fueron artífice para tener esa válvula de escape, en ese legado las virtudes en lugar de besar el piso, fueron extendiendo puentes, construyendo murallas para no ser derribado de nuevo.
Ese latir justiciero fue suavizando las esferas pesadas de sus equivocaciones tomando otras suaves, ligeras al cultivar en el surco de Dios, el ruego de un nuevo germinar, el dar gracias por tener ángeles aliados para vivir dignamente, conoció de paso el oscuro mundo de la intolerancia, estar en el universo de los pobres, en limbo de la economía, miró en los espejos los distintos rostros de la soberbia, los pavos reales con su vistoso plumaje que humillan el tránsito de la humildad, el egoísmo manifiesto al no poseer riqueza, ciertos odios al que le puso el sello del adiós y olvido.
Mientras se alejaba dibujaba ahora la cara de la sonrisa, la alegría le decía a su corazón, vamos a la cima de la montaña, a agradecer al creador, por darle ese nuevo aire de acariciar el amor de su vida, surge el cantar de su libertad a la felicidad.
En la otra orilla con el espejo de las galaxias en la estación un ser de espíritu guerrero, esperaba impaciente la llegada de su amado, era un adonis con una historia tan distinta, la vida le había sonreído distinto, tenía el ángel de la humildad, pero también lo vestía el orgullo, el amor también lo traicionó, vivió las aventuras de la soledad, le llovió cortejo por su gran belleza, pero  fue piedra invitada de románticos predeciros poéticos, se alineó de una agenda para buscar el hombre de sus sueños.
La afinidad, la complicidad de semejanza, ese mismo ritual de costumbres, forma de ser parecidas, como estilo de vida en la cotidianidad en muchas similitudes, dieron al veredicto del sí.
Nace el amor, el juramento en el mes de las flores, se extiende un jardín como testamento, del cáliz de las flores germinan los besos, se alzan pétalos con el ruego a Dios para que se alargue vida, perdure feliz el tiempo para disfrutar el amor que envuelve ahora el corazón, se hace nido de abrigo, al esperar ese gemelo de anhelos, dulces caricias, él tiene en su despensa el néctar,  para vestir a su amado, en casa de los laberintos, donde se bebe el elixir del verdadero amor.

__ ¿Qué quieres decir con todo lo que me dices?

__Nada, nada de nada, por ahora déjame estar con vos.

__ ¿Qué estás proponiendo?

__Sólo sexo.

__ ¿Qué?

__Vos y yo. Sólo sexo. Cuando se nos antoje. Sin contratos, sin rótulos, sin ataduras que te asusten.

__Sólo sexo _repetí, sintiendo cómo las palabras rodaban en mi boca y mi cerebro.

Sólo sexo con Guillermo cada vez que quiera, sin ataduras y sólo con él.

__ ¿Qué pasa con todo lo demás? _pregunté__. ¿Gaby, Beto, la gente con la que salimos, tu familia?

Guille se encogió de hombros.

__Nada de eso al menos por ahora, tiene que cambiar. Seremos amigos que salen como hasta hoy y que tienen sexo juntos.

__ ¿Y qué le diríamos a la gente?

__No es asunto de nadie, la intimidad es un derecho que nos asiste.

__Me refiero a Beto, a Gaby.

__La verdad si quieres. __Me miró con atención__. Yo no miento a mi hermano.

__No sé si le gustará, con mi historia y conociéndome, no lo sé.

__Me lo dijo, no le gustará, pero, me importa un pimiento si a ellos les gusta o no. De hecho si fuera mi hermano, o Gaby preferiría que no se metieran en mi vida sexual.

__Es difícil, la persona con la que quieres tener vida sexual, vive casi todo el tiempo con él.

__Duermen en habitaciones separadas, tienen loft diferentes, y siempre puedes visitar el mío, para ello me vine de casa, me separé de Ana. Me divorciaré cuando haya nacido mi nieto.

__No puedo.

__ ¿No puedes o no lo harás? __Sus ojos se entrecerraron peligrosamente.

“Malditas señales, vuelco de estómago, tirón en las entrañas, revoloteo de mariposas, el corazón volando. Puedo sentir su cuerpo apretado contra el mío otra vez, notar su lengua tocando la mía y su mano firme en mi pecho. Dios. Mis ojos se abrieron y descubrí que su mirada se había suavizado en mí.”

__ ¿Sólo sexo?

Me di cuenta de que estaba tratando de contener una sonrisa como si supiera lo que estaba pensando y sintiendo.

__Bueno… casi.

__ ¿Qué?

¿Casi?

__Necesito que alguien me acompañe a comidas de colegas, compromisos sociales, convenciones, Ana no será mi esposa, no quiero “otros” a mi lado, tengo eventos sociales a los que podrías acompañarme como mi socio, o alguien que trabaja codo a codo en el estudio si te parece mejor que pareja.

Será lindo salir con alguien que no está esperando que le proponga matrimonio o un collar de perlas al final de la noche.

__Eso no es sólo sexo. Eso es un compromiso. Como los acuerdos que sueles tener con todas esas barbies como la misma Gaby, Sonia, o con hombres como el facherito o Juan. Te he visto con todos y cada uno, lo cual me lleva a la pregunta. ¿Por qué yo? Guille, tienes un montón de fama, dinero y no eres precisamente feo, así que ¿por qué no te vas y consigues a una de esas modelos y a los facheros que saltarán ante la posibilidad de saltarte encima?

La sorpresa destelló en la cara de Guillermo, y bajó la cabeza.

__Uno: porque he sido bisexual y no quiero seguir mintiendo con eso, las chicas necesitan que las cuide.

Los chicos como Matías quieren que les hable de sentimientos, las chicas lo mismo y que les compre cosas. Estamos hablando de sacar eso de encima, y el trato vale para los dos.

 Y dos: ¿en serio?

Torcí el gesto porque no sabía a qué se refería con la preguntita.

__Bueno. __Negó con la cabeza, sonriendo: Siempre me sorprendes.

__ ¿Cómo es eso?

___Sólo suponía que sabías lo sexy que sos. Al parecer, no. El objeto de mi deseo, es muy bonito y no lo sabe.

Vaya, me ruboricé por dentro como si sus palabras hubiesen atravesado mi coraza.

__Lo que tú digas.

Mi respuesta displicente lo disuadió. Estaba decidido a responder a mi pregunta.

__No, no pareces mi tipo de hombre. Me gustan los tipos de mi edad como Juan, morochos, y vos sos pendejo, y debiste nacer rubio.

Ahora lo fulminé con la mirada.

El muy arrogante sonrió.

__Y aun así me provocaste en la mudanza con cada movimiento, una excitación que me arrasó, como cada vez que te veo, que te escucho o te sueño.

Me quedé boquiabierto.

__Estás mintiendo, te pasa con todos, te creo que no con mujeres, pero sí con los tipos.

Negó con la cabeza, disfrutando de sí mismo.

__Tienes un rostro cincelado a mano por Leonardo, unas piernas que adivino  fantásticas, unos músculos dibujados a mano, unas montañas firmes para escalar a morir, una sonrisa asombrosa con esos labios gruesos y esos pocitos, aunque la usas muy de vez en cuando. Creo. __Se rió cuando mi mirada se hizo dardo__. No importaría nada más a la hora de pensarte debajo de mí, mientras me muevo dentro de vos, enloquecido.

Pero creo que me atraes sobre todo por tus ojos. Quiero sacar de ellos lo que nadie más saca.

__ ¿Y qué es eso? _pregunté acallando lo previo, con la voz grave, casi ronca. Sus palabras me habían afectado tan profundamente como un afrodisíaco.

__Dulzura en lugar del dolor que leo desde conocerte. __Su voz propia había profundizado con la atmósfera__. La dulzura que sólo puedes tener luego de hacer el amor conmigo, de llegar el infinito, pero conmigo.

Tu piel  sin vello fue para mí embrujo, el  dolor de tus ojos almendrados, el color pardo de tu boca me sedujo  y la tersura de tu pelo. Fui cautivo de tu descendencia chilena desde el primer momento, con ese acento que me estremece cada poro, salimos juntos, y vimos la mañana… Probé la rica dulzura de su tus besos  con pasión desenfrenada. Y con lujuria de ambición sedienta… tu cuerpo  me apasiona más y más. He soñado tu piel desnuda, he visto el alba recostado en tu pecho jugando con tus botones, y  he dado sustento en tu piel  hallando fuentes de deseos, desbordando fantasías preciosas, complaciendo mis deseos penetré  recovecos oscuros, te he amado con pasión embrujada, nos despedimos, y todavía recuerdo… ese fuego encendido en tu mirada. Quiero de nuevo hallar en mi camino lo que he sentido, diariamente lo busco y no lo encuentro, es ése mi destino, deseo el embrujo de tu cuerpo.

Siento tu ausencia en este silencio que evoca el recuerdo, en cada uno de los espacios que me hablan de vos. Fijo la mirada en el infinito y puedo ver tu rostro.
No hay cordura cuando en el corazón se extraña y en el alma se llora. Voy caminando buscando tu sombra junto a mí y la calidez de tu mano guiando, siempre aquí.

Pienso ¿qué será de ti? has dejado un vacío que no se puede describir. Y la soledad que acompaña sin poderla ahuyentar. Se borran las huellas de tus besos y aquellas caricias tatuadas en mi piel y los ecos de tu voz rondando en mi interior.

No quiero tenerte como a mariposa en cautiverio, quiero que elijas, que me elijas.

Las mariposas presas son sólo bellezas que nos iluminan cuando revolotean en su vuelo, hermosura en sus alas, nos traen esperanza cuando las encontramos cerca, nos alimentan las ansias de disfrute y alegría en cada segundo de nuestras vidas con sólo mirarlas. Quienes las atrapan, obligándolas al yugo del cautiverio a vivir fuera de su hábitat que es la libertad, producen un estado de metamorfosis en su forma de ser, se convierten de bellas mariposas en demonios voladores. Necesitan ser tratadas con delicadeza y amor, pero respetando su libertad de expresar sus deseos que no es negociable, jamás serán felices si se sienten presas de un destino indeseado y tormentoso de sufrimientos. Me pregunto si estas mariposas no tienen semejanzas con ese ser divino  que sos. Y sí, mi concepto es que tienen almas gemelas, cuando logramos amar a una mujer en caso de Beto, a un par nosotros,  debemos brindarles todos nuestros sentimientos y felicidad si queremos recoger el fruto de su sonrisa y abrirle las puertas del corazón donde guarda el tesoro más preciado que es el amor.

Pero si hacemos lo contrario algún día sólo encontrarás sus ceras que resguardan sus cuerpos como polvo en el nido, y al mirar por la ventana las verás volando alejándose buscando el verdadero camino que las coloquen en el lugar indicado donde anidarán recibiendo el goce, el cariño, la paz, la tranquilidad, la seguridad y el amor sin límites que siempre han soñado. Quiero todas las riquezas de tu trono, Pedro.  O sólo fluirán en mi ser las nostalgias sin parar, obligando a recordar y en el corazón siempre la esperanza de amarte. Viviré preguntándome en qué momento del tiempo te perdí con tu recuerdo enquistado en mi mente mientras morirá mi alma desolada esperando tu regreso.

  Lo cierto es que hoy, presente o imaginado me acompaña tu calor, vivo respirando ilusiones, sin rumbo abrigado por tu ausencia. Se fugan las palabras al destierro de la soledad, imponiendo las sombras que opacan mi memoria. Sentimientos que escapan dejando un gran vacío, rompiendo los cimientos en lo profundo del corazón. Intensidad del olvido alimentándose en mentiras, donde yacen lentamente en los gritos del silencio. Ámame o déjame, pero termina con mi encierro, derrota mis insomnios liberándome de tu cuerpo.

Como susurro doliente siento el aplomo irónico de tu mirada, usted que habla de mí sin conocer mi alma, quien se atreve a dañar mi imagen con burlas, usted, sí... usted me duele su triste vida, su vacío momento, su pena extrema, aunque yo sólo mire la luminosa sonrisa con hoyuelos, la que hace que mis lágrimas caducas escriban de mi amor, silencio marchito,  rompe mi pecho dañado, soledades inocuas llegan desde el suspiro caliente de sus labios, labios que aun amo callado.

¿Cómo puede usted hablar de mí con tanta ironía, cómo puede usted burlarse del amor que le tengo, es que usted no sabe lo que es sentirse nube púrpura por un amor que ni le ama, es que usted jamás ha flotado con el perfume de un sueño, es que usted jamás ha deseado morder lo dulce de unos inalcanzables labios amados, es que a usted jamás le han brillado los ojos a través del vuelo del éxtasis?

Pues yo lo amo, pues yo lo quiero, no me importa que se burle de mi alma si algún día el roce de mis labios rozan lo candente de su boca, mi dulce animalito difícil de atrapar, mi suspiro doliente, mi sueño despierto y dormido, sí..., mi único sueño púrpura en mis labios aunque usted se burle del amor, del querer de mi absurdo desear, irónico soy por sufrir por unos labios que se burlan de mi llanto, por unos labios que hablan mal del amor de mi vida.

__Estás hablando de amor de nuevo.

__En cierto modo nadie es perfecto ni nadie lo sabe todo, la humildad debe prevalecer. Las personas arrogantes y faltas de tacto abundan, pero es así. Siempre tengo la fe de que todos podemos cambiar. No siempre hay un motivo para hacer algo. La verdadera amistad no se busca y menos por el interés, eso es lo más repugnante el amor menos, es, simplemente es. Muchas de las preguntas que no tienen respuesta ya las sabemos aunque no queremos aceptarlo. ¿Por qué a mí? Es lo que todos nos preguntamos a menudo. La vida ya es difícil para aún complicarla más, somos expertos en ello. Es como caminar por un sendero, al principio empieza muy ancho y muy suave pero seguimos y con el tiempo se hace muy estrecho y con muchas piedras. Debemos mostrarnos siempre como somos sin querer gustar a todo el mundo ya que eso es imposible. Si actúas con naturalidad mostrándote tú mismo, todo es más fácil y te sorprenderás con el resultado. Lo importante es tu felicidad. Pasé medio siglo para saberlo, viviendo equivocado.

Tragué saliva por dentro, por fuera mostré una sonrisa astuta.

__Eres bueno con las palabras como que eres el mejor penalista, te lo concedo.

__Soy bueno con las manos, ¿puedes concedérmelo?

Reí y su sonrisa se ensanchó, perversa y hermosa,  suspiré y negué con la cabeza, otra vez.

__Suena a algo más que sólo sexo, Guillermo. Estás pidiendo compañía, y ello está complicando las cosas, el mundo nos verá como pareja.

__ ¿Por qué? Son sólo dos amigos que salen de vez en cuando como hasta hoy, sólo que luego tienen sexo.__ Notó mi duda inquebrantable en eso porque se encogió de hombros__. Mira ¿cuándo me he puesto serio con una mujer u otro? Te deseo y vos me deseas. Está flotando sobre lo que debería ser una bonita amistad, así que afrontémoslo.

__ ¿Añadiendo noches de citas? ¿Extendiendo el periodo de esto? La última vez que lo hice maté a mi madre.

Creí ver un destello de irritación en sus ojos, pero desapareció en un abrir y cerrar los míos.

__ ¿Quieres ponerle un plazo para estar más seguro? Tu madre no está, y no la mataste por ser gay, Pedro, esa parte llévala a la terapia, que te la extirpen de la cabeza de una vez por todas.

__Un mes.

 Entonces sonrió, dándose cuenta que yo estaba cediendo. Mierda, estoy cediendo.

__Seis.

Resoplé.

__Dos.

__Tres.

Nos miramos uno al otro midiéndonos como rivales en duelo, como si de repente se nos ocurriera que estábamos hablando de cuánto tiempo pretendíamos explorar una relación sexual, la tensión, ya insoportable entre nosotros se encendió todavía más, y enrareció el aire. Era como si alguien hubiera echado un lazo en torno a nosotros dos y estuviera tirando y tirando, tratando de acercarnos. Una imagen de nosotros dos en mi cama, desnudos y retorciéndonos, destelló en mi mente. Mi cuerpo respondió al instante. Con los brazos ya suficientemente mojados, mis pezones se unieron a la fiesta y se endurecieron, visiblemente bajo la remera. Los ojos de Guillermo bajaron a mi pecho y empezaron a fundirse antes de regresar a mi rostro.

__Hecho __murmuré.

__En el borde de mi cama te encuentras tibio  descansando del amor
abrazando anhelos,  hablándome de pasión. Con tus delicadas manos
fábricas caricias suaves,  y con tu boca poco a poco las repartes.

Así nos encuentra la noche, hablando de amor eterno abrazados somos uno,
delicias de hermosas tardes en que la vida se vive, entre realidad y quimera. Fantasías del amor, en noches de plenilunio sueños futuros vividos, en tu sonrisa y la mía.

Somos enamorados locos que a la vida le sonríen, mostrando así la alegría, de tantas cosas hermosas, que con vos viviría.

De tu aroma que despierta mis sentidos, de tus besos que son ricos como miel, de tu cuerpo sólo escucho los latidos y por eso me perdí entre tu piel, del verano el calor es lo de menos, del invierno es tu piel contra mi piel, primavera una rosa entre tus labios, del otoño son las hojas y el papel, elixir que me embriaga en atadura, soy tu amante y voy creciendo de nivel, es tu lengua que me lleva a la locura y por eso me perdí entre tu piel, y me perdí en el océano de tu vida, en el hechizo de tus ojos, imposible que detenga mi caída, tú me llenas... de dicha y de placer, cuando paso mis manos por tu espalda, y tu fuente estalla en erupción,  o te cobijo dentro siento el fuego de la pasión.

__Aunque no te sigo viendo en el café. Aunque no te sigo viendo un segundo cada atardecer sé que estás aquí, a mi lado.  Con tu sonrisa, con esos ojos que son como dos luceros en la madrugada. Siento tu aliento, huelo el perfume de tu cuerpo que me embriaga y me seduce.
Siento tu piel tan suave como pétalos de rosas, tan blanca como la porcelana, aun siento apretar tu mano con la mía. Sólo quiero que sepas que por ti sueño, por ti suspiro, por ti vivo esperando ese sublime momento en que te vuelva a tener entre mis brazos,  bajo las sábanas blancas.
Tener tu cuerpo pegado junto al mío, sentir el vaivén de tus caderas al ritmo
del amor.  Cuánto deseo hacer todas esas locuras que tanto disfrutamos, besar cada milímetro de tu cuerpo y estar en lo más profundo de tu ser. Deseo escuchar tus gemidos de locura y de placer sentir tu cuerpo húmedo que me incite  y me seduzca a una noche de placer, de esa entrega interminable que reclama nuestro ser.
Te diré que no son tus besos lo que  deseo, lo que deseó es hacer mía tu boca, seducirla con mis labios sedientos de los tuyos porque tú y yo sabemos que nuestros  cuerpos  hace tiempo se aman con locura y se reclaman con desesperación. Hoy estoy sólo en el café, pero sé bien que no será así por siempre. Ya huelo el perfume de tu cuerpo, ya siento tus labios en mi boca.

__Sé cuánto intentas olvidarme en las tardes cuando un gorrión deja su ruta marcada en el infinito. Te duermes en el susurro de aquel beso, que elevó al altar del amor,  las veces que me embriagué de tu saliva errante, no lo intentes, sabes que he dejado mis huellas en tu sentir y nada borrará las noches, que tu voz mecía mis largas melancolías.

Sé cuánto intentas olvidarme, desvestirte de mis caricias lanzarlas a la indiferencia, sin imaginar que vivo en los secretos de tu vientre, en las ganas que dominas cuando la lluvia refresca tu soledad. Invéntame en alguna calle, bar o esquina, pero no te zafes de mí. Apasióname esta noche, es larga sin vos, sin el sabor de tu esencia, sin la calidez de tu mirada, tómame una vez más y hazme partícipe de tu mundo de misterio. Sé cuánto intentas olvidarme, pero serás íntimo  y perpetuo en mis días menos blandos, pero más huecos, difícil es andar sin el sonido de tu sombra, maldita manera de amar al filo de la nada. Palpita tu corazón sobre mi pecho golpeando el pozo vacío de mi amor. Aquí tu primer abrazo, aquí tu primer beso.

¿Cuál fue la magia que nos llevó a este deseo?
No sé si fue la belleza de tus labios o tu corazón pero aquí estamos los dos. Ya no te veo como te veía ayer, ya no te respiro como te respiraba ayer. Un beso, un abrazo, un te quiero, son ahora un único deseo. Adiós a los despertares en soledad, fotos de manos que pasean cogidas, busco tu rostro, tu mirada, en cualquier esquina.

Ahora mis miedos son tus ausencias, mis alegrías la sonrisa de tus labios, es el momento de decirte ahora vos y yo somos la misma esencia. Admiro tu hermoso cuerpo. Me haces viajar a otro mundo, obtengo con vos  un tiempo repleto de un amor profundo. Me derrochas una nueva vida, ilusiona a mi alma tu mirada, me haces olvidar las heridas, las que  lastimaron mi alma, sé que sería feliz con vos a mi lado. Sos la luz que me brinda calor, sin vos hoy todo es desolado. Sos  ese dulce y tierno amor tan deseado y soñado por mi triste corazón. Sos el  que me ha enamorado con esa mirada encantadora, incitas a mi alma soñadora a decir que te adora...

__Guille, no puedo, no debo, quisiera pero no debo.
Quisiera ser en tu vida el aire limpio cuando respiras, quien sane de tu corazón la herida, alguien que convierta en verdades tus mentiras, el frondoso árbol de verdes hojas, y cubrir tu fatigado cuerpo con mi sombra, quisiera ser una gota de paciencia cuando te enojas y ofrecerte el dulce canto de la alondra, el motivo de tus ilusiones, y ser la luz que anuncie tu mañana, besar tu rostro a través del cristal de tu ventana y adorarte sin ponerte condiciones. Quisiera ser un suspiro fugitivo, que llegue a tu alma tímida y rota, y lanzar tus tristes penas al olvido frente al fuerte ciclón que nos azota. Y la última copa de vino, que embriague tus sentidos, estar en tus sueños más divinos y besar tus ojos cuando estén dormidos.  Pero no debo, temo por ti, por mí, por todos.

__ Pedro, olvida. Levántate,  despierta, háblame con voz alegórica, dame el eco de tus sentidos, abre tus sueños,  rompe con el silencio de mis poros, para que huyamos despiertos. Caminas al borde de la barranca franca de mi corazón, corazón que late al son de tus pasos.
¿A dónde vas? tráeme la paz de tus brazos, que de tenerte y verte, me abraza la ilusión. No tengas cuidado de caer al acantilado, que te recibe el mar en calma de mi alma, cuida más de no robar a mi alma la calma, y dame el embeleso de tus besos rosados. Está en flor este amor, que no perezca; y dale al sentimiento, aliento y vida, dale al corazón, una pasión desmedida, y dame la brisa de tu sonrisa fresca.

Dame de tu mirar, el mar sereno y claro, que quiero navegar y amar tus lindos ojos; una ola sola me lleva a tus antojos, sin estela ni vela, me guío de tu faro. Tengo antojos rojos de tus labios divinos, me provocas locas ganas de besarte; es la manifestación y acción de amarte, dame de tu licor de amor, dame de tu vino. Dame el derecho de tu pecho y su ternura, dame la miel de tu piel, tersa y sagrada; llévame a tus sueños risueños,  de mi piel y de tu piel, haremos conjuro, tengo muy poco que darte, amarte  reza la promesa de mi verbo; serás a mi modo, mi todo, mi universo, más la promesa y certeza de adorarte. Te doy mi sentir, mi vivir, mi amor sincero, mi corazón, inspiración, y bruma. Si no perezco, te ofrezco mi alegría. Te doy el canto y el encanto de las aves, el esplendor y el candor que hay en la rosa, la mariposa que de flor en flor se posa, mi pensamiento, y mi aliento, mi aire suave. Mi devoción y adoración, mi esperanza, la serenidad y la bondad de mi regazo, la fuerza de mis brazos, el calor de mi abrazo, mi feliz momento, juramento, una alianza.

Tiempo no siente, es paciente y va a llevarnos, trae tu sonrisa y armoniza mi alegría; aquí en mi pecho y en mi lecho se te ansía, no tengas temor, amor, vamos a amarnos rompamos el sortilegio de la leyenda.

La pregunta fue inesperada, pero, práctica.

__ ¿Estás sano? ¿Te has analizado?

__Sí… ¿Y tú?

__Después de cada relación.

__Ya bueno, entonces supongo que podemos empezar, pero no te aseguro que mañana piense lo mismo.

__ ¿Tengo que exigirte el contrato por tres meses por escrito?

Las palabras apenas habían salido de mi boca, y él ya estaba de pie sobre mí, ofreciéndome su mano grande, con expresión seria y decidida. Sus ojos me quemaron.

__ ¿Qué? ¿Ahora? __chillé sintiéndome absolutamente no preparado.

__ ¿Quieres seguir esperando?

__Sólo… pensaba que tendría hasta llegar a la costa, para prepararme.

__ ¿Prepararte?

__Ya sabes, la mente, el cuerpo, perfume, bóxer…  lindos, cena previa, velas, ambiente…

Mi cuerpo chocó con el suyo, mis ojos tropezaron con sus párpados y sus brazos me rodearon por entero, apretándome contra él, con su mástil duro contra el mío. Contuve un gemido, echando la cabeza atrás para encontrarme con sus ojos brillantes.

__Precioso, todo eso es para seducir a alguien, yo estoy más allá, estoy loco por vos cielito.

__Vale, pero…

Su boca me cortó, aplastando la mía con su lengua buscando la entrada de inmediato. El beso fue profundo, húmedo, casi declamando, esto no es una cita, es sexo, es nuestra primera vez. Gemí y deslicé los brazos por sus laderas como reconociendo sus contornos, él lo tomó como mi asentimiento.

Bésame, muérdeme la boca, arrebata el suspiro más profundo de mi alma y deja las huellas de tus caricias por cada rincón de mi cuerpo. Déjame besarte el alma y tatuar sobre la desnudez de tu piel mis caricias.

__Hoy dejaré esta página en blanco, no escribiré nuestros juramentos consentidos, no diré que mi amor es más grande que una estrella,  esa que ilumina tus ojos soñadores, no quiero que tu boca de rosa se marchite en ningún verbo, mordiendo las oscuras grietas de algún viejo recuerdo. Hoy escarbaré la tierra hasta que me sueñes, hasta que la romería de recuerdos se haga ermitaña, y salgamos del ojo de esta tormenta de hielo, esta inclemencia que lo enfría todo, aferrados a los vestigios que están más allá de los abismos.

Hoy se vaciaron mis ojos de tanto mirarte en la memoria y en las esponjas húmedas del viento llueven antiguos dolores, mojando la tierra removida, haciendo brotar los argumentos, desafiando realidades, proyectando falacias sin sentido, nosotros perturbados y antagónicos queremos ser ajenos, sin embargo la realidad nos dice lo contrario, somos dueños de este amor a pesar de todo. Y no sabes lo que me provocas cuando me hablas o me rozas, lo que en mí despiertas cuando tus labios me rozan y la lengua se enreda a la mía ansiosa. No sabes lo que me apasiona cuando te tomo en mis brazos y te fundes en mi ser mientras susurras mi nombre aun sin quererlo. No sabes lo que me gusta  ni lo que me enamora sentirte tan dentro de mi cuerpo aun sin estarlo y tan dueño de mi alma, porque soy tu dueño al tiempo tu esclavo  cuando corro dispuesto,  cada vez que me llamas. Sabes que soy sólo tuyo, pues mi alma y mi cuerpo, sólo a  vos proclaman.

No me importan tus desprecios, no me importa tu razón, no me importa que me dejes y me hieras corazón, no me importa y te lo digo, para amarte sólo yo, no me importa que te vayas, yo soy dueño de tu amor, sólo sé que son caprichos, son caprichos por temor,  como yo en este mundo, nadie más te va a querer, ve si puedes y busca otros rumbos si amor quieres probar, no me importa y te lo digo, sé que vas a regresar, porque nadie como yo... para hacerte el amor, porque nadie como yo... que te bese sin pudor, ya conozco bien tu cuerpo y lo que te hace estremecer, esas ricas sensaciones cuando estás en la pared, por las curvas de tu cuerpo, por los besos que te doy, cuando beso por tu espalda, para abajo siempre voy, para amarte te lo digo... para amarte sólo yo, pues conmigo vas al cielo, cuando hacemos el amor.

__Nuestros cuerpos amantes,  se juntan uno con el otro  rezumando caricias, cuando  nos recorremos piel a piel,  en el delirio de tantas delicias  tan apasionadas; mi corazón  late desenfrenadamente  con el tuyo. Quiero del mar  lo más profundo para entrar a nadar, abrazar tus pies, brincar las olas en su resaca  y meternos desnudos, en esas  aguas llenas de seducción, amarnos sin inhibiciones,  besar tus labios, recorrer  con voluptuosidad tu piel; aunque me extravíe entre  tus senderos y montes. Que broten sonrisas y carcajadas,  colmadas del placer, que nuestros  besos nunca nos dejen de sorprender;  y la sensualidad sea nuestra, emoción.

Que nuestros corazones retumben,  como las tormentas que apremian  la entrega sin límites, eres lo mejor que me ha tocado vivir,  el anhelo más ansiado que llegó a mí, permíteme, intentar otras locuras. Recostado en tu pecho sueño con  fantasías, en tu vestidura, en tu piel,  en las encrucijadas de tu cuerpo,  labios y formas entretejiendo  nuestros contactos; dejando pasar
el tiempo. Que nuestros sentidos rompan  las fronteras  de nuestros estados  conyugales, el éxtasis de nuestra  intimidad nos corresponde. Nos deseamos ardientemente con  nuestros cuerpos entrelazados; fusionados por la  locura delirante de amantes intensos.

__Sutilmente se miraron y en esa mirada descubrieron que no hacían falta palabras, que estaban de sobra todos los preámbulos,  simplemente se tomaron de la mano y empezaron a caminar hasta llegar  a ese lugar que contaba con el suficiente espacio que ellos necesitaban, hubo un breve silencio, un angosto distanciamiento y sin decir palabra... de sus ropas  se empezaron a despojar, quedando al descubierto dos cuerpos perfectos, que no existiría postura en la que no se pudieran a acomodar, esas bocas que no habían pronunciado palabras empezaron a buscar en la piel del otro la manera de saciar esa sed que el deseo les había provocado con tan sólo mirarse, de mitigar ese calor que les brotaba desde dentro, desde lo más profundo de su ser.

A los dos les gustaba ir abriendo las piernas, enroscarse en la sensualidad de un baile de cuerpos inventado por ellos, sentir el susurro de las pieles acomodándose poro a poro en la otra, sus piernas abriéndose para dejar al descubierto esa bella fuente que de a poco se  agigantaba con la sangre bullendo hacia el centro íntimo para mostrar toda su belleza y esplendor, obligados a plantarse con gallardía para admirar toda su virilidad.
Ambos empezaron a besarse con tal  fuerza y desesperación que pareciese no fueran a tener vida después de ese  encuentro, sus manos se empezaron  a mover como el viento, introduciéndose en cada recodo, acariciando ese punto donde sentían que la piel se erizaba más, donde un gemido era el delator de que el éxtasis estaba por llegar.
Se mostraban plenos, no pronunciaban palabra alguna, tan sólo emitían quejidos, quejidos que podían traducirse en la exclamación de ¡quiero más! Uno tenía un gran compromiso y mientras su virilidad se mantenía al  vaivén de las caderas de ambos, su boca saciaba la sed que tenía, con el néctar de sus pezones  antes... , mientras una mano jugaba con su boca y la otra se entretenía con su cabello, para al voltearse, cambiar el vuelo de manos sin dejar el beso, sin apartar la mirada, siguiendo el vaivén y lo acontecido podía ser incrédulo, pero hubo testimonio confirmatorio de todo para que no fuese un sueño más y esos testigos  fueron: Una cama, un ropero que sus espaldas y pechos sostuvo, una manta en el suelo y un  viejo sofá.

__Abrazo a la lluvia con ternura esperada con segundos milenarios, acaricio al tiempo dejando correr su vestir hasta encontrarme con aquél que daba los primeros pasos en busca de los vientos escondidos entre los arbustos, para atrapar a los fantasmas de la noche que se disfrazaban de tiernas miradas enlazadas en las sombras de las ramas, espero con paciencia la llegada de las nubes para cobijarme con la libertad del cielo, que sigue tan nuevo y brillante como lo vieron los navegantes en busca de la tierra prometida, escribo despacito con el deseo de ir descubriendo algunas palabras que se hacen piel y destino entre mis manos, junto al viento del alma, que me llama y me dice ; somos piel del suspiro y el instinto.

Tus besos cargados de tanto placer me llenan cada instante de un mar de deseos que irrumpen en mi soledad con tal fuerza que mi calma naufraga en los mares húmedos de tus labios con un frenesí a seducción. Tus besos llenos de tanta pasión hacen que me pierda en tormentas sin destinos en mi camino que me encarcelan en el tiempo provocando la ausencia de indecisiones y desprecios,  limpia los dramas de mi mente. Tus besos son antídotos que curan todos los enigmas y dudas de neuronas que se multiplican cuando sienten paz y vuelan como ráfagas de vientos haciendo sentir el fuego en mi cuerpo. Tus besos que destilan por mi piel un veneno deseado que me asfixia y logran conectarme con la fragilidad del cristal que separa la vida de la muerte. Tus besos conquistan mi cuerpo seguiré perteneciendo a ellos, sin ellos entraré al mundo infalible de la resignación. En ese espectro que yace por entregarse al sentir de besos tan profundos que prefiero esclavizarme eternamente de ellos con tal de tenerlos cerca de mi cuerpo.

Con tu amor me habitas. En algún momento  de tus ardientes caricias tu sabor gozaré de nuevo, no sé cómo logras con tu voz tocar mis fibras instante sutil  que en mi ser provocas la plenitud, mientras... ese sentir esconderé adentro de mí, ese recuerdo guardaré para siempre. A mi oído  en el silencio  de la noche susurran tus anhelos las delicias del embeleso, siento cómo tu deseo y tu pasión invaden mi lecho, en mi pecho te cobijas, provocando la conjugación de tus vicios y mis fantasías, tu aliento hace temblar  mi intimidad  con tus malicias. Mi corazón sin ti quiere detenerse, sólo tu voz hace restablecer  su ritmo, mi sentir estalla en tu boca o en tus manos y mi alma te suplica, una y otra vez pidiéndote  saciar mis caricias. Yo sólo vivo cuando  me evocas a tus lujurias cuando  contigo me elevo, cuando  a mis ganas  te inmolas, cuando  nos complace los mutuos deseos, cuando me enloqueces con tu pasión hasta el desenfreno. Entonces...  me desorbitas, en mí te realizas, mientras me habitas con tu amor.

__Ya no pude esperarlo más, lo comprendió  y se hizo en mí  en un sólo beso  que le dio la vuelta al mundo. Estaba descubierto antes de que llegase la noche, estaba espléndido, desnudo, como bandera de patria, como símbolo de amor y ternura, sentido y creciendo en mi pecho aunque era en mis ojos que se hacía complemento del espacio, del extensivo celeste que el sol, dejaba parte de su horizonte y se convertía en ilusión de las estrellas al estar cerquita de él, como besándolo, como queriéndolo y yo diciéndole cuánto lo he amado, con mis dos miradas, con mis labios que lo besan y con mi pecho que suspira por él, porque realmente lo amo. Levántate, levántate, despierta, háblame con voz alegórica, dame el eco de tus sentidos, abre tus sueños,  rompe con el silencio de mis poros, para que huyamos despiertos.

Un corazón roto es tan especial que sigue siendo inmenso, a pesar de no encontrar el pedazo que le hace falta.  Y cuando lo halla, se siente vivo, entero, latiendo al compás.

__Me entregué a ti como el atardecer al beso del sol, como la caricia de la noche a la llegada del alba, como un cuerpo inerte que deja de respirar. Me aferré a tu cuerpo como náufrago a la deriva, que encallaba en tus labios para no morir de soledad. Me enamoré como las estrellas del firmamento mismo, en esas noches cálidas y silenciosas donde los enamorados observan su brillar.

 Fue la entrega de dos almas desnudas que se unen, matando dulcemente las ganas entre suspiros y gemidos de placer, sin dar respiro a sus cuerpos que brotaban deseo, dos almas aferradas fuertemente a una noche única, llena de amor y pasión.

__Si me dieran a elegir entre  el cielo y el infierno me quedaría con vos. Porque nunca había entendido la diferencia, hasta que te tuve rendido ante mis brazos. El sentimiento que abraza mi corazón es ese latir que me hace vivir. Llama de chispeante hoguera, calor vivo que abraza al corazón. Lo que envuelve en el encanto de nuestra pasión, es el amor que nos une  aunque negado y prohibido, en silencio. Somos dos almas que viven unidas con una ilusión por compartir, con un sentimiento mutuo y común tan bello como es la ternura de nuestro amor. Yo seguiré aquí junto a vos como el primer día que nuestras miradas se unieron y nuestros corazones comenzaron a latir juntos al ritmo de la linda melodía de una bella ternura que nos acompañará para siempre fundiendo nuestras almas en un bello amor  entre caricias, besos, y ternura.

__Ese amor que cuando llega la noche, cómplice es con su luz de luna entrando en nuestra alcoba, iluminando tu silueta por mí amada. Es tal su hechizo, que la ternura en el corazón se asoma embriagándonos de pasión, culminando nuestra unión en una sublime excitación en nuestro ser, deposita su bello hechizo de amor. Noche cómplice de nuestros amores, compañera de secretos, amiga de nuestros sentires en deseos,  eterna noche, pliego de mudas palabras, fuego de celo y reproche, cuna de nuestro amor con mágico encanto del sentimiento del corazón. Cuando llegas noche, todo renace  y falto soy de coraza, pues me dejo llevar por la mágica excitación que produces en nuestro amor. Tu luz en la alcoba sus ojos recreó, y en la pasión de nuestros seres tu candente hechizo nos atrapó.

En un momento estaba en el suelo, en el otro estaba en los brazos de Guille, con los cuerpos estrujándose incrustados, besándonos en desespero y derroche, robando prendidos al alma algunos,  guardados para regresar buscarlos, y al besarnos adrede deseamos mordisquearnos y provocarnos y lamernos los labios, los dientes, conociendo el tacto, bebiendo el gusto del otro, grabando en la memoria la esencia.

__! Pedro! __ respondió Guille, y su forma de pronunciar las palabras vibró con fuerza en mis labios, se derramó por cada poro y fibra de mi ser.

Sin tiempo para quejarme porque abandonara mi boca menos para pensar qué estaba haciendo, sentí el aire en el cuello y estábamos moviéndonos al pasillo, por el pasillo, en la habitación y entones estaba cayendo, golpeando en el colchón elevando la mirada hasta tropezar con la de él… me excité de súbito, y él se inclinó hacia mí, apoyando las manos en el colchón, a ambos lados de mis laderas con el rostro sobre el mío.

__ Nuestro tiempo empezó a correr, y deseo aprovecharlo ya que me quitaste tres meses negociando la propuesta.

Mis ojos bajaron a su boca, la boca que quería otra vez en la mía. Sus labios tocaron los míos, suaves, delicados y se echó hacia atrás con los ojos ardiendo, palpitando los dos, la noche que continuaría, al menos por esta noche, saciaríamos y nos guiarían… las señales de amor.

CONTINUARÁ.

HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS.

CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES MERA COINCIDENCIA.

LENGUAJE ADULTO.

 ESCENAS EXPLÍCITAS.