"SIGNIFICAR".
CAPÍTULO CUARTO.
“En el amor no existe el libre
albedrío,
Nadie puede decidir de
Quién va a enamorarse”. Alejandro
Dolina.
Los amantes - Julio Cortázar
“¿Quién los ve andar por la
ciudad
si todos están ciegos?
Ellos se toman de la mano: algo habla
entre sus dedos, lenguas dulces
lamen la húmeda palma, corren por las falanges,
y arriba está la noche llena de ojos.
si todos están ciegos?
Ellos se toman de la mano: algo habla
entre sus dedos, lenguas dulces
lamen la húmeda palma, corren por las falanges,
y arriba está la noche llena de ojos.
Son los amantes, su isla flota a
la deriva
hacia muertes de césped, hacia puertos
que se abren entre sábanas.
Todo se desordena a través de ellos,
todo encuentra su cifra escamoteada;
pero ellos ni siquiera saben
que mientras ruedan en su amarga arena
hay una pausa en la obra de la nada,
el tigre es un jardín que juega.
hacia muertes de césped, hacia puertos
que se abren entre sábanas.
Todo se desordena a través de ellos,
todo encuentra su cifra escamoteada;
pero ellos ni siquiera saben
que mientras ruedan en su amarga arena
hay una pausa en la obra de la nada,
el tigre es un jardín que juega.
Amanece en los carros de
basura,
empiezan a salir los ciegos,
el ministerio abre sus puertas.
Los amantes rendidos se miran y se tocan
una vez más antes de oler el día.
empiezan a salir los ciegos,
el ministerio abre sus puertas.
Los amantes rendidos se miran y se tocan
una vez más antes de oler el día.
Ya están vestidos, ya se van por
la calle.
Y es sólo entonces
cuando están muertos, cuando están vestidos,
que la ciudad los recupera hipócrita
y les impone los deberes cotidianos”.
Y es sólo entonces
cuando están muertos, cuando están vestidos,
que la ciudad los recupera hipócrita
y les impone los deberes cotidianos”.
Julio Cortázar - Último Round.
Jueves,
31 de enero de 2018.
No parecía serlo, para nada”.
Cuando ve a Juan que
llega desaloja el ensueño.
__Te queda bien __ le dice sin
entusiasmo __, tendré que acostumbrarme, pero te queda bien.
Guillermo añora al Juan de los
cumplidos de su juventud, no sabe en qué momento se volvió tan parco.
Cinco días después, Pedro está
de alta médica. Guillermo lo sabe, irá a buscarlo para llevarlo a la casa. Lo
que no tiene en claro, es qué hará después para continuar a su lado y ayudarlo.
“Meditabundo..., desde mi ventana, veo pasar la noche
rutilante recordando tu porte galante como estrella que soberana destaca de
entre todas en el cielo. Tu rostro lozano y bello me embarulla, tu mirada
inmensa se me antoja apasionante, tus labios gruesos son de besar abrasante y tu figura es tan
grácil que engalana, sos hermoso Pedro Beggio.
Y observando la noche persistente, prosigues vagando por mi mente, mientras arde mi piel pensando en vos aunque duerma junto a Juan.
Y observando la noche persistente, prosigues vagando por mi mente, mientras arde mi piel pensando en vos aunque duerma junto a Juan.
Pero qué hombre, me he sorprendido pensando de forma inoportuna,
no prefiere tener frente a él a uno
joven, qué hombre no ha calculado su edad en algún momento de su vida, siquiera
distraídamente, con arreglo a la cambiante naturaleza de su comportamiento en
presencia de una mujer u hombre lindo en tales circunstancias. Y es que el
fenómeno de la gente joven y linda continúa siendo el mismo, he seguido
cotorreando para mis adentros.
Salta a la vista
que continúo siendo el mismo año tras año, mientras envejezco y cambio, y sigo
cambiando y envejeciendo sin parar, hasta que siento que hasta el sexo será
peligroso. Pensar que uno se siente cohibido durante años frente a una mujer u
hombre bello. Desde la adolescencia hasta los veinte y tantos, uno se acerca con
timidez y luego se aleja apresuradamente, guardando el recuerdo de un encuentro
tan casual como fugaz, una mirada de refilón, o una pizca de perfume. Luego uno
se pasa años recelando de ellos, consciente de que es posible el acercamiento,
pero temeroso de las consecuencias, pues la vida tiene ahora un centro de
gravedad claro, el matrimonio. Uno teme lo que pueda ocurrirle a su psique, a
su marido o a su cuenta corriente si permite que se altere la libido cada vez
que se produce un encuentro fortuito, como por ello mentí la identidad al
muchacho de Rosario en ese viaje.
Uno aparta la mirada, habla con voz queda, miente,
nombre, domicilio. Los impulsos entran en pugna y se producen intercambios de
insultos. Entonces da comienzo de pronto la siguiente fase, la fase de la que
uno ha sido consciente por mucho que se haya negado. Yo empecé a abordarla
descaradamente, a hacer comentarios que podían ser interpretados como guiños, a
entablar conversaciones cómplices a sabiendas y, en la ocasión más memorable de
todas, en una terraza con vistas al río. Luego vino todo lo demás. Está la otra
llamada que podría hacer. Podría hacerlo en cualquier momento. Sí, esta fase se
prolonga durante años.
Hasta que al fin
uno aprende, quizá tras hacer definitivamente el ridículo, o tal vez no, tal
vez solo porque de pronto se cansa del asunto, porque de pronto deja de
interesarle, o le interesa solo de vez en cuando, por fin uno aprende la
fórmula consistente en solo una sonrisa halagadora, en una mirada de
complicidad y desaprobación de la fórmula que significa que uno ya ha pasado
por eso, lo que significa que hace tiempo quizás hubiera intentado ligar con
vos, quizás, y puede que vos hubieses tonteado conmigo, pero ahora no, ahora ya
no. Aunque sospecho que aun a los cincuenta, Juan continúa tonteando con
varios, exactamente igual que a los treinta como lo hizo conmigo, pero no es lo que siento con Pedro,
no está en estas generales de la ley, todo él es diferente, todo con él lo es,
lo que siento y puedo llegar a sentir lo es.
Me miro, me reconozco, busco la exacta anatomía y
geometría en este indómito universo de sensaciones. Porque la perfecta
vibración no solo es el reflejo de tu mirada, está en ese clamor que nace, en
esas huellas que en tu fluir buscarán los días y las noches.
Me exploro, me siento y encuentro los límites del gozo que
nace en las tinieblas de lo negado.
Porque la caricia es esa espuma en los mares del placer que bañan tu piel. Porque tu carne se aviva incontenible bajo los incandescentes soles del deleite. Así es tu naturaleza que amanece, así es la desnuda virginidad de tus sentidos, así es cuando experimentas frente al cristal que te refleja.
Porque la caricia es esa espuma en los mares del placer que bañan tu piel. Porque tu carne se aviva incontenible bajo los incandescentes soles del deleite. Así es tu naturaleza que amanece, así es la desnuda virginidad de tus sentidos, así es cuando experimentas frente al cristal que te refleja.
Afloras a tus momentos para germinar tus instantes. Ya no
estás incompleto, tienes ahora la atracción de tu propia seducción.
Quiero detener el tiempo junto a vos Pedro, para poder
conocerte, y adentrarme en tu mundo. Que se detenga el tiempo cuando estoy con
vos, que no muera el momento de nuestros suspiros. Entre tantos caminos sos vos
creo mi destino, a la larga lo serás y no sé cómo, pero sé que es lo que los
dos sentimos y vivimos. Y deseo que se detengan las horas, mas despertar
a tu lado, entre besos y largos abrazos, en la elocuencia de sueños húmedos
mientras el pensamiento desgrana sus pieles sobre el fuego humillado. Que se
detenga el cielo al sonido de tus besos, nuestras almas al encuentro florezcan
en el eco ilusionado. Que se detenga el universo, con cada gota de amor que
sucumbe en las venas del corazón, como el aire al aroma de su anhelo. Que se
pare el tiempo, al compás de nuestros latidos para hacer arder la hoguera que
alimenta nuestros sentidos.
No sé qué estoy pensando, cómo sucederá, pero cuando te conocí tus palabras eran una
bella melodía y llegaban al fondo de mi alma, era la caricia de tu tierno sentimiento.
Mi ser se agitaba como las ramas de los árboles por la furia del viento.
bella melodía y llegaban al fondo de mi alma, era la caricia de tu tierno sentimiento.
Mi ser se agitaba como las ramas de los árboles por la furia del viento.
Quedé hechizado y solo deseé por siempre mirar el
misterio que desborda de tus ojos. Solo deseo mirarte en el silencio de
nuestra alma y vivir en ternura. Sueño con tenerte entre mis brazos como
cuando con la excusa de que estabas herido te atraje. Me cuesta creer en
tanta felicidad. Es tan hermoso, la vida se agita como esa rosa que enraizó en mi alma y solo con sentirla trastorna todo mi ser. Mi sueño es dejar mis huellas en tus labios, para que
eternamente sepas el sabor de mi amor y me enseñen cómo ama tu alma. Y aunque mis ojos se llenaran de lágrimas serían de gratitud por tanta felicidad. ¡Estoy loco de amor! ¿Por qué tiene que doler el amor? Quizá la respuesta sea, el amor no duele. Duele no saber amar, quizá sea verdad, quizá sea mentira, lo cierto es que cuando se ama y existe la duda de no ser amado es cuando se entra en conflicto. Ya que cuando amamos quisiéramos ser igualmente correspondidos y la verdad jamás será así ya que cada persona es única e irrepetible y quizá vean el amor de una forma distinta. Habrá gente que amamos con el alma, con el corazón incluso hasta con nuestra propia esencia pero tristemente también hay gente que solo ve una cara y un cuerpo bonito. Ojalá nuestra capacidad de amar fuera la misma para todos y entonces y solo entonces se acabarían los conflictos y las diferentes formas de ver el amor.
tanta felicidad. Es tan hermoso, la vida se agita como esa rosa que enraizó en mi alma y solo con sentirla trastorna todo mi ser. Mi sueño es dejar mis huellas en tus labios, para que
eternamente sepas el sabor de mi amor y me enseñen cómo ama tu alma. Y aunque mis ojos se llenaran de lágrimas serían de gratitud por tanta felicidad. ¡Estoy loco de amor! ¿Por qué tiene que doler el amor? Quizá la respuesta sea, el amor no duele. Duele no saber amar, quizá sea verdad, quizá sea mentira, lo cierto es que cuando se ama y existe la duda de no ser amado es cuando se entra en conflicto. Ya que cuando amamos quisiéramos ser igualmente correspondidos y la verdad jamás será así ya que cada persona es única e irrepetible y quizá vean el amor de una forma distinta. Habrá gente que amamos con el alma, con el corazón incluso hasta con nuestra propia esencia pero tristemente también hay gente que solo ve una cara y un cuerpo bonito. Ojalá nuestra capacidad de amar fuera la misma para todos y entonces y solo entonces se acabarían los conflictos y las diferentes formas de ver el amor.
Hoy me quedo con quien ama con todo su ser, hoy me
quedo con quien ama con el alma y el corazón, hoy quiero amar y ser
amado por alguien igual que yo. Hoy solo pido una oportunidad de
amar sin restricciones y sin limitaciones, hoy quiero amar y que me
amen de verdad. Hoy tan solo quiero en el amor una oportunidad y siento
que esta vez esa oportunidad, la última, la única, sos vos, Pedro Beggio.
Y pensando y admirando las estrellas sigues vos dominando
mi alma, y aunque intente negarlo ha sido así, desde el primer momento en que
te vi.
Las palabras he dejado cerca del río o junto al silencio
de la marea que no termina de llegar.
Me apoyo en la mirada perdida en el oleaje, en el muelle, en mis ganas de llorar.
Estoy casado, sos prohibido y mi alma sabe que te vas, que apenas unos días quizá pueda compartir con vos, que solo quedará tu aroma en mis sentidos, mi soledad nada más. Y entonces iré a mi muelle donde mi velero sube y baja con el agua y sabrá de mis secretos y mis silencios.
No podré tal vez evitar hacerme a la mar queriendo perderme en la tempestad brutal ni evitar partir en silencio del puerto sin rumbo sin final. Siento que mis manos te buscan, que se han secado mis labios musitando tu nombre, y me pregunto si me recordarás cuando vuelvas a estar sano, sé que mirando tu recuerdo me sentiré muerto y no quiero pensar como tampoco que cuando Juan regrese no estará mi velero en el puerto, ni estarán las amarras perdidas en el mar.
Dejaré un beso secando con unas rosas en la última hoja de alguno de tus libros preferidos y
el último beso que te dé me lo llevaré a la eternidad.
Me apoyo en la mirada perdida en el oleaje, en el muelle, en mis ganas de llorar.
Estoy casado, sos prohibido y mi alma sabe que te vas, que apenas unos días quizá pueda compartir con vos, que solo quedará tu aroma en mis sentidos, mi soledad nada más. Y entonces iré a mi muelle donde mi velero sube y baja con el agua y sabrá de mis secretos y mis silencios.
No podré tal vez evitar hacerme a la mar queriendo perderme en la tempestad brutal ni evitar partir en silencio del puerto sin rumbo sin final. Siento que mis manos te buscan, que se han secado mis labios musitando tu nombre, y me pregunto si me recordarás cuando vuelvas a estar sano, sé que mirando tu recuerdo me sentiré muerto y no quiero pensar como tampoco que cuando Juan regrese no estará mi velero en el puerto, ni estarán las amarras perdidas en el mar.
Dejaré un beso secando con unas rosas en la última hoja de alguno de tus libros preferidos y
el último beso que te dé me lo llevaré a la eternidad.
Los rasgos, señala Schopenhauer con relación a los rasgos
de carácter, constituyen un continuo: un rasgo bueno se confunde con uno
malo sin que se dé una solución de
continuidad clara que indique el paso de lo positivo a lo negativo. La paciencia
se confunde con la indolencia, el ímpetu acaba trocándose en firmeza, la
ternura tiende a generar agobio. Me enamoré de Juan hace treinta años, si es
que alguna vez esto fue amor… por su
vivacidad, su alegría, por su vehemencia, me digo por su energía. Me lo he
repetido miles de veces. Pero luego me encontré con que solo era grosería,
soberbia, y lo que es peor a veces histeria, de histrión, útero, casi se puede
comportar como una mujer. Dentro de los límites de un rasgo dado, el amor solo
ve el aspecto positivo, señala Schopenhauer, quizá con pesar. Sigue, pero luego
el amor ve el continuo completo o lo que es peor lo negativo.
Pero ahora no quiero hacer el balance de mis años con él,
se va de viaje como tantas veces él o yo, y puedo concentrarme en Pedro, en la
mañana le dan el alta y no puedo más que pensar en él. Solo en Pedro Beggio.
__
Cuando en la mañana el médico anuncia el alta a mediodía,
la noticia le causa a Pedro una rara sensación de vacío en el estómago.
Curiosamente lo ha pasado bien allí. La enfermera adusta le ha tomado cariño y
sus atenciones le han removido recuerdos de su madre sentada toda la noche en
una silla mecedora a su lado velando una de sus enfermedades infantiles, no
recuerda si el sarampión o la varicela, sí el reto cuando apareció la pared
adyacente a la cama garabateada con fibra roja. No piensa mucho en sus padres.
De vez en cuando con amigos que viajan, ellos envían dinero, camisas, regalos y
cada tantos meses lo llaman por teléfono.
Han hecho una vida nueva en Estados Unidos y no tienen
ningún interés en regresar ni a Chile ni a Argentina. No quieren ver cómo ha
cambiado, prefieren guardar el recuerdo de cuando Chile era un país
revolucionario antes de la dictadura, le ha dicho su padre. El hijo encuentra
paradójico que diga eso viviendo en New York, pero quizá tenga razón, en
Estados Unidos le es más fácil olvidar las esperanzas perdidas de cuando se
metió a guerrillero y pensó que todo cambiaría para siempre en su país. Los
padres le han ofrecido que vaya a visitarlos, pero en la Embajada Americana le
han negado tres veces la visa. No lo intentará más.
El médico le ha dado una lista de medicamentos e
instrucciones. Pedro tendrá el brazo inmovilizado por dos meses o más.
Guillermo y Juan han reiterado que se encargarán de que no le falte nada.
“Divertida la gente con plata. ¿Cómo cumplirán esa
promesa de que no me falte nada?
¿Me dejarán la de comida lista en la puerta o vendrá don
Guillermo a cocinarme, a bañarme y vestirme, a limpiarme la casa?
Siento que tus manos son íntegra energía, que al tocarme
el cuerpo se me eriza.
Me pierdo en un grito de eterna rebeldía, al saber que no estoy siempre junto a tu brisa. Miro en tus ojos la calidez de un príncipe, el encanto del señor bueno y piadoso, cómo pagar tus gentiles desvelos de nobleza, que adornan tu vida como una rosa en el jardín.
Me pierdo en un grito de eterna rebeldía, al saber que no estoy siempre junto a tu brisa. Miro en tus ojos la calidez de un príncipe, el encanto del señor bueno y piadoso, cómo pagar tus gentiles desvelos de nobleza, que adornan tu vida como una rosa en el jardín.
Manos misteriosas que al tocar dan sanación, palabras de
amor de consuelo y verdaderas, no sé si adivinas pero puedes ver el corazón, anhelando
correr juntos todas las praderas.
Verás que silenciosamente
todo empieza a mejorar poco a poco, Pedro, hasta que comprendas el porqué de todo lo que
no ha sido, el porqué de aquellas noches solitarias y las madrugadas de
ensoñaciones sin respuesta, y después, cuando recuperes tus fuerzas, empieces una
vez más, tu mente se aclare y tu corazón sienta el fuego de vencer todos los
obstáculos, tendrá tu alma la respuesta del porqué a los mejores contrincantes
se los desafía continuamente, se torturan sus sentimientos y se los perfecciona
en soledad bajo las estrellas; y si eres paciente, tal vez escuches decir a la
vida, que ya estás listo para recorrer tu camino.
A veces me gusta quedarme en silencio, porque a veces
solo los locos entienden, a veces es mejor quedarme en silencio y escuchar tan
solo el hueco del silencio, a veces, a veces me quedo en la penumbra de un
filo herido, porque solo este loco sabe lo que habla el hueco, a veces, solo a
veces el hastío aclama a mi cordura.
Caminos tras caminos donde apenas veo mis polvorientos
pies manchados de sueños, detrás, detrás una soledad acompañante en frente, un
silencio donde ya mi cordura se halla temblorosa, de qué me vale el haberte
regalado un soplo de luz y un cacho de
nube si tus labios se me pierden, ya las palabras hermosas que habitan en el
corazón se convirtieron en misterios.
Mustios caminos, lágrimas contenidas al caminar sin tu
mano agarrada a la mía, orilla triste donde ya ni las estrellas brillan,
huellas que se alejan, que se pierden en la sequedad de una brisa, hoy mi no
cordura me habla en la lejanía de mi mente, hombre de ojos de alma, solo el hueco hallado
sabe del amor que te tengo, pura dulzura en tu mirada, y en tu boca, en tu boca
mi mundo.
Volver, volver al paso lento, al despiste en el vuelo de
una mariposa, volver a la orilla, solo, solo pero donde mis pasos flotan, donde
la brisa calienta mi rostro maduro, donde la sal del mar seca la sal de mis
ojos, donde mi cuerpo siempre flota, donde las olas me acompañan y juegas,
solo, solo pero lleno del sosiego de una calma, y en mi rostro, en mi rostro un
misterio.
Me robaste el aliento en tu bella madurez Guillermo
Graziani, mas dudo que te des cuenta siquiera. Soy solo un carpintero pobre de
barrio, y para ti solo eso y tu víctima, me olvidarás tras dejar la culpa del
accidente, seguirás tu camino con tu marido, y yo… solo, siempre solo.
¡Por supuesto que no se ocuparán de mí! ¿Y mi trabajo? La
clienta de las sillas de seguro no me hará más encargos. Y perderé otras
oportunidades. Es un desastre todo esto. Supongo que al menos estoy vivo, como
dice Camila. Según ella, eso debería alegrarme, no he quedado parapléjico y
después de semejante encontronazo, solo tengo que lamentar mi brazo, la herida
en la pierna, dos costillas quebradas y unas puntadas en la cabeza. ¡Bendito
optimismo el de las mujeres! Don Guillermo cada vez que me ve parece aliviado
de que siga lúcido y mejorando. Vale sí, menos mal, y mientras he estado en el
hospital, él muy atento ha llegado a visitarme a diario muy bien vestido, guapo
siempre, mirándome con curiosidad como si yo fuera un raro espécimen. Lo trato
de usted, muy formal y él a mí también. Yo además del usted le llamo “don
Guillermo”. Él me ha pedido que lo llame simplemente Guillermo, pero yo no he
omitido el don, todavía. No es que me sea difícil tratarlo de tú a tú, pero no
puedo evitar el discreto deseo de mortificarlo al menos un poquito. Me
entretiene confundirlo, mezclar la distancia con comentarios que lo halaguen.
Aunque no lo culpo abiertamente, no dejo de considerarlo responsable del estado
en que me encuentro. El don lo hace sentirse mayor sin duda. De seguro lo
molesta porque sin duda es uno de esos hombres sin edad.
He tratado de
calcular cuántos años puede tener. Supongo que ronda los cincuenta, pero solo
porque Camila me ha dicho que tiene un hijo de veintitrés. Pero es muy
atractivo y emana sensualidad. Y a mí esos hombres maduros me sobresaltan y
atraen. Son como muebles con estilo, con la madera ya curada, bruñida y la
tapicería rica, de brocado, nada de plástico o puro cuero.
Me gusta celebrarlos, acusar recibo de la impresión que
me causan, mostrar que como hombre no me son invisibles o indiferentes, menos
alguien como Guillermo. Hay un gran contraste entre la manera de los jóvenes de
recibir los piropos y la de ellos. Yo soy discreto, respeto las enseñanzas
maternas de decirle a las mujeres cosas bonitas, solo que no me atraen de
verdad ellas, lo supe al entrar en la adolescencia, y lo hago extensivo a los
hombres, caramba, con lo fácil que es hacerlo a uno feliz, decía mi madre. Si
las mujeres nos arreglamos es para que algún mortal lo reconozca, por ello
piropeo a Camila y lo mismo hago con algunos hombres, aunque cuido de
distinguir entre quienes lo agradecen de los o las que carecen de sentido del
humor o tienen un ego desproporcionado. Valoro la relación con mis clientas,
algunas me confían sus cuitas.
En fin, me esperan tres meses de un gran desafío. Cuando
tu día sea gris y sientes que se cae en tu cabeza, solo ríe y toma
una cerveza. Tómate la vida con calma. Estar de buen humor es necesario para
los días sin horario como los míos, que salgo a mojarme con la lluvia y superar
el desafío. Y tengo que soportar todo el día a un vil y cruel ladino en
la calle arriesgando mi vida porque ese es mi destino. Por unas míseras
monedas es el escape que me queda para esperar la tenencia, esa es mi
sentencia. Si crees que perdí la paciencia a mi simple existencia y a que el día se convierta en mil mariposas que
salga el sol radiante y el cielo se cubra de colores diamantes. Pero aunque no
sea así solo vive tu vida y sé alegre, me digo.
Esto es lo que hay no te aflijas ni te amargues, pide a Dios un segundo de paz y Él te lo dará, sin hacer alardes. Piensa en positivo si solo tienes un motivo, supera el desafío, sé feliz.
Esto es lo que hay no te aflijas ni te amargues, pide a Dios un segundo de paz y Él te lo dará, sin hacer alardes. Piensa en positivo si solo tienes un motivo, supera el desafío, sé feliz.
Eres tan bello cuando me miras don Guillermo, disfruto la
profundidad de tu mirada, en ella me siento reflejado, anhelo tanto perderme en
ella, es como viajar a un mundo desconocido donde solo existiéramos tú y yo, tu
cuerpo y el mío, nada más bello sería.
Bello sería cada atardecer encontrarme contigo, que tus
brazos fueran mi refugio, cómo callar si
en tus brazos es donde mejor puedo estar,
abrazarme fuerte, que ese abrazo tuyo
me hiciera sentir seguro al mismo tiempo desaparecer esos miedos que
rondan por mi mente.
Bello es contemplar una noche radiante, entrelazar
nuestras manos, contar una a una las estrellas, contarle a la luna nuestro secreto de amor,
sabes ella nos sonríe a partir de hoy, ella será nuestra cómplice, cómplice de
nuestras locuras.
Bello es este encuentro de dos corazones enamorados
ansiosos de amarse, qué bello es nuestro
amor, solo bastó mirarnos para darnos cuenta lo inmenso de nuestro sentir, algo
bello amor que nació de la nada, hoy se
convirtió en todo.
Bello sentimiento de amarte minuto a minuto, nada me hace
más feliz que pensarte y sentirte junto a mí, no hay distancia que impida amarnos y hacer de
este bello sueño realidad, llegará el momento… sé que llegará.
Permítame decirle don Guillermo, que yo le he puesto por sobre
todo el mundo porque nunca he amado a nadie como le amo. Amo su alma, amo su
mente, amo su ser y eso que siento trasciende cómo se vea físicamente porque lo
que yo amo de usted me arrebata el alma, embriaga mi corazón y obnubila mi
mente.
Debo confesarle que tal vez lo más grave sea que le necesito irracionalmente. Perdón por irrumpir en sus sueños para decirle cuánto y cómo le amo.
Debo confesarle que tal vez lo más grave sea que le necesito irracionalmente. Perdón por irrumpir en sus sueños para decirle cuánto y cómo le amo.
Verás que
silenciosamente todo empieza a mejorar poco a poco, hasta que comprendas el
porqué de todo lo que no ha sido, el porqué de aquellas noches solitarias y las
madrugadas de ensoñaciones sin respuesta, y después, cuando recuperes tus
fuerzas, empieces una vez más, tu mente se aclare y tu corazón sienta el fuego
de vencer todos los obstáculos, tendrá tu alma la respuesta del porqué a los
mejores contrincantes se los desafía continuamente, se torturan sus
sentimientos y se los perfecciona en soledad bajo las estrellas; y si eres
paciente, tal vez escuches decir a la vida, que ya estás listo para recorrer tu
camino.
Caramba don Guillermo si su imagen me inunda los
sentidos, su piel inunda mis sentidos, su aroma se quedó impregnado en mí, lo
reconocería entre miles a ciegas. Acaricia mi alma, mi cuerpo, y acelera mis latidos. Lujuria plena es su piel
que invade mis ansias, mi mente, mi sexo, es un delirio pero colma mi deseo, su
miel deja hambrientos mis labios que solo desean libar de los suyos el elixir,
beberlo gota a gota, y saborear cada
gota de su piel, apagando en ellas mi sed fusionando nuestros alientos en un solo ser. Va a amarme don Guillermo,
aunque sea prohibido, pecado, aunque tenga esposo, aunque su mundo no sea el
mío, siento en las entrañas que me llegará a amar y yo a usted, que he de beber
de su esencia divina donde su mar me mojará los labios resecos ansiosos
de sus besos y su piel.
Su piel me domina, me calma, me da vida, qué perfecta es
su piel, suave como la seda, en mi imaginación recorro su anatomía por entero,
casi la sé de memoria de observarlo en estos días, su aroma está corriendo por
mis venas, y es en parte su piel fundida en mi sangre como si libara de ella
cada vez que lo veo. Deje que mis manos hambrientas toquen cada gota de su esencia,
y apague mi sed donde su mar me moja los
labios.
Cuando amas a alguien se te olvida la vida, en los ojos
de tu amado te pierdes y ya no tienes salida. El tiempo se hace eterno y el
infierno se hace cielo, juntos pasan las horas
y dulce es el desvelo. Cuando amas a alguien, no te detienes, solo miras, y te entretienes. Cuando amas a alguien te olvidas del mundo que gira y gira y se vuelve eterno cada segundo.
y dulce es el desvelo. Cuando amas a alguien, no te detienes, solo miras, y te entretienes. Cuando amas a alguien te olvidas del mundo que gira y gira y se vuelve eterno cada segundo.
Cuando amas a alguien te conviertes en héroe, salvas tu
vida, su corazón y su alma te regala un duende. Cuando amas a alguien nada más
importa, vives el hoy, el ayer y el mañana como marmota, todo lo puedes, un
siglo se muere antes y en los brazos de tu amado, renacen las fuentes. Cuando
amas a alguien juntos se ensalzan, tomados de la mano sus almas se alzan.
Mimos, caricias, besos y abrazos, en mil miradas. Nos
elevamos. He visto atardeceres que invaden con rojizos cielos a mis ojos
tristes y cansados. He tenido contigo mil sueños de quimeras y un océano de
soledad. Y me vence el dolor, el cansancio del naufragio de mi alma rota
que divaga entre la penumbra de un silencio mortal sin el eco
de tu voz, mientras yace mi alma solitaria, sombría.
Agonizo en la inmensidad de la noche, de
aquelarres fantasmales, me sumerjo en ti, en el recuerdo punzante de
la soledad sin dejarme respirar. Me arrancas la piel y te alejas de
mí, dejándome desnudo y sin vida casi moribundo, mas mi alma no
tiene prisa, sino esperanza.
Pero vienes a mi mente, como rayo de luz, yo
inerte agonizando cada hora sin ti, sin tu amor. Me quedo vacío, sin
nada con las manos frías, como escarcha y tú vienes y te vas, como un pensamiento fugaz,
mientras nada calma mi angustia y mis ansias porque mi alma tiene prisa.
Y sin embargo, en un rato comienza todo siento, y me
repito, no te inquietes por las
dificultades de la vida, por sus altibajos, por sus decepciones, por su
porvenir más o menos sombrío. Quiere lo que Dios quiere. Ofrécele en
medio de inquietudes y dificultades el sacrificio de tu alma sencilla
que, pese a todo, acepta los designios de su providencia.
Poco importa que te consideres un frustrado, un
fracaso. Si Dios te considera plenamente realizado, a su gusto. Piérdete
confiado ciegamente en ese Dios que te quiere para sí.
Y que llegará hasta ti, aunque jamás le veas. Piensa que estás en sus manos, tanto más fuertemente, cuanto más decaído y triste te encuentres. Vive feliz. Te lo suplico.
Vive en paz. Que nada te altere. Que nada sea capaz de quitarte tu paz, ni la fatiga psíquica, ni tus fallos morales. Haz que brote y, conserva siempre sobre tu rostro una dulce sonrisa, reflejo de la que el Señor continuamente te dirige. Y en el fondo de tu alma coloca, antes que nada, como fuente de energía y criterio de verdad, todo aquello que te llene de la paz, de Dios. Recuerda: cuanto te reprima e inquiete, es falso.
Te lo aseguro en nombre de las leyes de la vida, de las promesas de Dios por eso, cuando te sientas apesadumbrado, triste, adora y confía... de una lágrima, se aprende mucho.
Aprendes que llorar no es tan malo, sino bueno, humilde. Aprendes a lavar tu alma, la purificas, te elevas de espíritu y mente, meditas.
Y que llegará hasta ti, aunque jamás le veas. Piensa que estás en sus manos, tanto más fuertemente, cuanto más decaído y triste te encuentres. Vive feliz. Te lo suplico.
Vive en paz. Que nada te altere. Que nada sea capaz de quitarte tu paz, ni la fatiga psíquica, ni tus fallos morales. Haz que brote y, conserva siempre sobre tu rostro una dulce sonrisa, reflejo de la que el Señor continuamente te dirige. Y en el fondo de tu alma coloca, antes que nada, como fuente de energía y criterio de verdad, todo aquello que te llene de la paz, de Dios. Recuerda: cuanto te reprima e inquiete, es falso.
Te lo aseguro en nombre de las leyes de la vida, de las promesas de Dios por eso, cuando te sientas apesadumbrado, triste, adora y confía... de una lágrima, se aprende mucho.
Aprendes que llorar no es tan malo, sino bueno, humilde. Aprendes a lavar tu alma, la purificas, te elevas de espíritu y mente, meditas.
Aprendes de la humillación, a no ser más humillado,
ni mucho menos a humillar a nadie.
Aprendes a hacerte fuerte porque el bumerang de la vida vuelve, todo vuelve... Lo bueno y lo malo, vuelve y se pasa factura con cada lágrima de dolor. De una lágrima. Aprendes a vivir puro, sin trucos, sin magia, auténtico. Aprendes a ser realmente bueno, sin mentiras, sin miedos. Pero una lágrima dice todo... Los ojos tienen su lenguaje, miradas que hablan, lo dicen todo, sin una palabra. Y se paga con cada lágrima de amor. Dice si tú eres transparente
cristalino, buena persona,
¿O el dolor cubre con su manto de llanto invisible al orgullo que llevas puesto como vestidura?
No lo ves. Es inmaterial pero existe, tiene vida y hace un lugarcito dentro de tu corazón.
Hasta que crece día a día, poco a poco teje su telaraña y se fusiona en: rencor, odio, egoísmo, maldad, oscuridad, mentira, envidia, traición, venganza, y aumenta con cada lágrima de dolor
la desgracia. De una lágrima, se aprende todo... Aprendes que Dios existe, que sientes su presencia en cada lágrima de oración. Bienaventurado el hombre que tiene en ti sus fuerzas, en cuyo corazón están sus caminos. Atravesando el valle de lágrimas lo cambian en fuente, cuando la lluvia llena los estanques, irán de poder en poder; verán a Dios en Sión.
Aprendes a hacerte fuerte porque el bumerang de la vida vuelve, todo vuelve... Lo bueno y lo malo, vuelve y se pasa factura con cada lágrima de dolor. De una lágrima. Aprendes a vivir puro, sin trucos, sin magia, auténtico. Aprendes a ser realmente bueno, sin mentiras, sin miedos. Pero una lágrima dice todo... Los ojos tienen su lenguaje, miradas que hablan, lo dicen todo, sin una palabra. Y se paga con cada lágrima de amor. Dice si tú eres transparente
cristalino, buena persona,
¿O el dolor cubre con su manto de llanto invisible al orgullo que llevas puesto como vestidura?
No lo ves. Es inmaterial pero existe, tiene vida y hace un lugarcito dentro de tu corazón.
Hasta que crece día a día, poco a poco teje su telaraña y se fusiona en: rencor, odio, egoísmo, maldad, oscuridad, mentira, envidia, traición, venganza, y aumenta con cada lágrima de dolor
la desgracia. De una lágrima, se aprende todo... Aprendes que Dios existe, que sientes su presencia en cada lágrima de oración. Bienaventurado el hombre que tiene en ti sus fuerzas, en cuyo corazón están sus caminos. Atravesando el valle de lágrimas lo cambian en fuente, cuando la lluvia llena los estanques, irán de poder en poder; verán a Dios en Sión.
(SALMOS 84; 5-7)
Por eso... de cada lágrima aprendemos a vivir, que la
vida es una lágrima. La maravilla de cada lágrima es sentir que en una diminuta
gota de tus ojos encierras tantos sentimientos, buenos y malos y
aprendemos con cada lágrima que la vida es una sola. Aprendemos a vivir la vida
y sentir que cada lágrima es el secreto de ser feliz y sentirte
vivo. Las lágrimas son un manso río, por donde se van nuestras
tristezas y alegrías, nuestro rencor y nuestro razonamiento, las
lágrimas son un desfogue del alma aprisionada entre el dolor y la
tragedia.
No quiero llorar por desamor y por ello confío en lo
mejor, don Guillermo.
Aunque en momentos te sé no presente, todo tú, hombre de
mis deseos delirantes cruzas por mis pensamientos… desquiciante te
apoderas de mi mente. Provocando que los recuerdos del ayer se resguarden en el
alma, fieles y renuentes volando cual aves que huyen del invierno buscando
el calor de la primavera ausente. Buscando con afán destinos donde anidar donde
posar sus cansadas alas para cantarle a la vida, para soñar paraísos, para
vivir extasiados.
Y hoy al salir sé que veré un cielo azul lleno de luz,
belleza y color que armoniza corazones ilusionados endulzando las ricas mieles
del amor de seres amorosos y apasionados. Notas acompañadas de lindos
verbos inspirados en bellas y místicas criaturas donde abundan las caricias y los besos desapareciendo
las ilusiones difusas. Compases regios de un coro de ángeles que arrullan
a los espíritus románticos con un deseo que enchina sus pieles despertando a
fríos cuerpos estáticos. Palabras brotando de ricos manantiales de aguas
divinas, claras y mágicas donde viven y nacen seres inmortales que ayudan
a las almas nostálgicas. Robaré del universo notas armoniosas igual que
el pensamiento de los dioses
con que enamoran a las dignas diosas y bajaré el edén para que tú lo goces.
con que enamoran a las dignas diosas y bajaré el edén para que tú lo goces.
Mi sangre en un lienzo que por ti verteré derramando
el dulce néctar del amor, inventaré el
más hermoso mensaje con solo sonidos de
dulzura y de candor para algún día poder alcanzar el tesoro de tu
intimidad que será por lo que lucharé noche y día, una meta para alcanzar
la felicidad, tú y tu cuerpo serán mi sensual melodía.
Hoy, una mariposa, ha revoloteado sobre mis labios, y
quizá, pensando en usted ha cruzado al otro lado del mundo, curvándose en su
continente mi señor, para que sintiera mis besos.
Este efecto, llamado mariposa es un concepto sobre la teoría del caos, donde se dan peculiares circunstancias del tiempo y espacio entre dos situaciones de puntos distintos, usted, en el extremo de su mundo y yo en mi continente.
Es un determinado sistema dinámico caótico, con dependencias sensitivas a las condiciones iniciales, y cualquier pequeña discrepancia entre usted y yo, señor mío, provoca una pequeña variación en los sentimientos iniciales.
Resaltaría sin duda alguna sin explicación razonable, dando situaciones de tristeza, abandono, desapego, donde ambos sistemas, usted y yo evolucionando en ciertos aspectos de forma diferente, yo, por recordarlo o usted, por olvidarme, ello implicaría que si en un sistema, se produce una pequeña perturbación, como la aflicción, el anhelo el desearlo sin tenerlo, se iniciaría un proceso de amplificación, pudiendo generar un efecto considerable, de quererlo más y usted me piense, es su rutina. Le expongo como ejemplo particular este efecto, llamado mariposa, si hacemos dos mitades del mundo, su lado y el mío, en situaciones globales idénticas pero si en uno de ellos dicha mariposa no aletease en sus labios, en el otro costado a corto o a largo plazo no recibiría sus besos, ambos lados serían diferentes, en uno de ellos podría quererlo más, mientras que en el otro se produciría la catástrofe del olvido.
Este efecto, llamado mariposa es un concepto sobre la teoría del caos, donde se dan peculiares circunstancias del tiempo y espacio entre dos situaciones de puntos distintos, usted, en el extremo de su mundo y yo en mi continente.
Es un determinado sistema dinámico caótico, con dependencias sensitivas a las condiciones iniciales, y cualquier pequeña discrepancia entre usted y yo, señor mío, provoca una pequeña variación en los sentimientos iniciales.
Resaltaría sin duda alguna sin explicación razonable, dando situaciones de tristeza, abandono, desapego, donde ambos sistemas, usted y yo evolucionando en ciertos aspectos de forma diferente, yo, por recordarlo o usted, por olvidarme, ello implicaría que si en un sistema, se produce una pequeña perturbación, como la aflicción, el anhelo el desearlo sin tenerlo, se iniciaría un proceso de amplificación, pudiendo generar un efecto considerable, de quererlo más y usted me piense, es su rutina. Le expongo como ejemplo particular este efecto, llamado mariposa, si hacemos dos mitades del mundo, su lado y el mío, en situaciones globales idénticas pero si en uno de ellos dicha mariposa no aletease en sus labios, en el otro costado a corto o a largo plazo no recibiría sus besos, ambos lados serían diferentes, en uno de ellos podría quererlo más, mientras que en el otro se produciría la catástrofe del olvido.
Tengo, mi señor, un jardín dormido con mariposas en mi
estómago, que despiertan aleteando cuando lo pienso, que revolotean en mis
labios para que no le falten los besos.
Si al nacer, rompes con la oscuridad del lazo umbilical de
tu orfanato, y a un golpe de vida gritas libertad, rompiendo el silencio con tu
llanto, no es así, hoy se sabe que es cruel y feroz cortar de inmediato el
cordón umbilical, que lo que todos creen es el llanto de fortaleza no es más
que el cruel grito del recién nacido que se ve privado del oxígeno materno en
instantes y que obligado a aspirar el aire helado así lo recibe en sus pulmones
y le duele, y grita y llora, como se llora la carencia emocional del contacto
con ese cuerpo que nos daba todo toda la vida si no nos vemos resarcidos de la
pérdida del útero con amor.
Si al roce de una mirada furtiva, de un sentir
entremezclado de dolor y alegría, por unos ojos
que te atraen, te atrapan, te mira y te cautivan, rompiendo todo cuanto eres solo por amor. Si al deambular circundante de tu existencia, rompes la rutina las normas establecidas
aplicando ciencia y razones para darle un nuevo sentido a tu vida. Si rompes el cristal
de las tristezas que te despedaza, levantándote en tu caída buscando otros
horizontes de esperanzas, liberándote sentimental de la soledad y el desamor.
que te atraen, te atrapan, te mira y te cautivan, rompiendo todo cuanto eres solo por amor. Si al deambular circundante de tu existencia, rompes la rutina las normas establecidas
aplicando ciencia y razones para darle un nuevo sentido a tu vida. Si rompes el cristal
de las tristezas que te despedaza, levantándote en tu caída buscando otros
horizontes de esperanzas, liberándote sentimental de la soledad y el desamor.
Si rompes, con la santa, con la ley de los hombres, las
leyes materiales que rigen la tierra.
¿Por qué no rompes con la miseria y el hambre, por qué no destruyes las armas y las guerras? Depón las armas que no son tus armas ante la vida, rompe tus cadenas y grita, libertad, antes que el poder te asesine por defenderlos.
¿Por qué no rompes con la miseria y el hambre, por qué no destruyes las armas y las guerras? Depón las armas que no son tus armas ante la vida, rompe tus cadenas y grita, libertad, antes que el poder te asesine por defenderlos.
El celular vibra, es un mensaje de Guillermo… “Llegaré a
mediodía a buscarlo”. Y yo estaré aquí, respondí.
__
Llega acompañado de Juan. Es él quien me ayuda a subir al
coche. Guillermo casi no habla durante el trayecto, en cambio el marido me hace
preguntas y más preguntas sobre el negocio de carpintería, dónde consigo la
madera, cómo la curo, cuál es la indicación para esto y lo otro.
Al fin me deja en paz cuando recibe una llamada en su
celular.
“Hoy no te sirve de nada recordar Camila, se dice ella
junto a Pedro presintiendo, pues dejaste marchar al amor de tu desdicha y con
una triste sonrisa, enseñaste la salida, ahora ruegas al cielo que vuelva cada
día. Lo viste marchar con los sueños en su mochila, con un puñado de recuerdos
que no olvida, con un montón de
sensaciones ya abolidas con su infortunio y la despedida de sus mejillas. Se
marchó sin mirar atrás pensando en su dicha dijo adiós a las risas, a sus
palabras, sus caricias, se despidió con la mirada, de sus pardas
pupilas y no quiso volver a sentir entre sus brazos. Lo vio ir sin importar,
pero eso es lo que decía sabía que en su subconsciente todo era mentira, tenía miedo a descubrir que ese otro la quería
y conocía que él por ella, no entregaba su vida”.
“Exquisito y sutil aroma de la exuberante mañana, que abre con delicadeza los
corazones, nuestras miradas que desean alejarse de la luz, y envueltos en la penumbra
de la oscuridad celestial, bellos
sueños, si tú así lo deseas, don
Guillermo, enciérrame en el centro de tus melodías, mis ojos ansiosos de
esperar el así sea, y que derrames en mi habitación la gloria de tu caricias.
Libérame de este dolor que desde el día de verte no hay luz en mi alma llena de aflicciones, aleja todos los recuerdos que veo en mis pensamientos, impone tu figura grabada en mi corazón, es mi deseo no vivir en esta soledad como un ermitaño y cierra la cripta de mi alma para que no sufra tu abandono”.
Libérame de este dolor que desde el día de verte no hay luz en mi alma llena de aflicciones, aleja todos los recuerdos que veo en mis pensamientos, impone tu figura grabada en mi corazón, es mi deseo no vivir en esta soledad como un ermitaño y cierra la cripta de mi alma para que no sufra tu abandono”.
Sé bien Pedro que los sueños no dependen de mí, pese a
las amarguras el alma siempre sueña. En la decaída mirada de mi tiempo leo mis
escritos y mis verbos, se han precipitado los años en mis sienes pero he visto
la calma de mis cansados ojos. La brisa resuena en el silencio y el sol se ha
tragado el horizonte. Lentamente anochece en mis pupilas y la calle se ilumina
de farolas, la humedad se cala entre mis huesos, el amor es un enigmático
sortilegio, me siento extraviado, adormecido, nocherniego, en este largo
silencio. Este cigarrillo de ausencia que alumbra mis añejos dolores, es
cadáver de antiguas bohemias. La ciudad dormita los sueños tristes, de sus
tristes habitantes. Y yo, ahogando el grito atenazado en mi garganta,
gritando tu nombre vestido de noche, mientras el silencio, dormita una pena que no quiere contar. No sé si debo amarte, no sé si puedo.
gritando tu nombre vestido de noche, mientras el silencio, dormita una pena que no quiere contar. No sé si debo amarte, no sé si puedo.
La soledad es el promiscuo sentir de las noches sin
conciencia. Es caminar prostituido en las entrañas del alma, es el perpetuo insomnio
de las sombras imaginando días mejores en las mañanas. La vida es una constante
prueba, para todos nosotros, para el amante desconocido, el que perdió su horizonte
en una roñosa taberna, el que camina sin recuerdos, sin nombre, sin futuro. Para
los que nunca acabaremos de conocer, ninguno
comprende nada ni a nadie.
Para la gente que olvida de donde viene, para los moralistas desnudos en la plaza.
Para la gente que olvida de donde viene, para los moralistas desnudos en la plaza.
Y así, sin más, el mes se pierde en el tiempo, la justicia sigue siendo ciega y siempre
termina hundiéndose en la mugrosa inocencia de lo justo. El mes es una
gesta en mi tiempo, no me importa diciembre, tal vez mi indiferencia es
arbitraria, sin embargo seguimos condenados al olvido. Escritos de vientos y
brisas que riegan la tarde y tu pupila derrama una lágrima fingiendo no
haber leído nada, y piensas que siempre queda un brote de sol en cada estrofa y
me pregunto, por qué la vida es así.
¿Por qué esas bolsas de cosas que estaban en rebaja en
sus delicadas manos, regaladoras de caricias incestuosas? ¿Dónde queda la oficina
que atienden a los pobres? me pondré a la fila del sustento, esa que me
alimente el alma y el pellejo. Ya no recuerdo si alguna vez conté que fui feliz
en una soleada tarde, después vinieron otras vidas distintas de esa tarde. Y vi
crecer los árboles y vi crecer a mi hijo y me fui quedando solo. Las calles de
mi infancia no existen, ahora camino por la vida, y me fui olvidando de todo, hipotecando
mi tiempo en un amor que queda lejos y aunque suene raro, lo amo señor.
Aún me preguntó ¿cómo me enamoré de una quimera? siempre
estarás lejano de mí, cada noche sueño con tu pecho desnudo, sediento de
caricias y besos, navego por los salones del sueño, te veo esperándome,
tu aroma invade mi cuerpo, como ave asustada tiemblo, cuando tus brazos
me cobijan, con tus manos recorres mi cuerpo, me dices mira mis
ojos en ellos verás la profundidad de mi amor por vos, cómo no perderme
en ese fuego tu piel brillante como el sol, mis manos se deslizan… es
sedosa y hermosa, no hay una cicatriz que le robe su belleza, eres
como un dios griego, soy prisionero de una pasión intangible que solo vive en
mi mente, mis caricias las envuelvo en pétalos de rosas para no
lastimar tu piel y dejar ese exquisito aroma en tu desnudez, al despertar
contemplo la soledad de mi habitación, las lágrimas dejo rodar , jamás serás mío, estoy navegando por el mar de las pasiones, cuando
veo la luna reflejada en el agua, en la lejanía veo tu barco, cierro mis
ojos y comienzo a soñar pensando en vos, Pedro.
“Quiero cubrir mi cuerpo de la fragancia de tu ser, que
sea la morada de tu descanso mi alma, el refugio de tu querer, no tener
espacios ni horarios marcados. Te quiero a cada instante en mis grises días de
lluvia te quiero cuando me haces reír, te quiero en cada uno de tus silencios y
en cada momento que estás junto a mí. Te siento en mí como la brisa de la
mañana en el roce de tus labios en los míos, te siento en cada lugar de mí donde te has
quedado. Búscame en ti y entenderás la magnitud de mi querer en cada instante
que me sientas ahí siempre estaré.
Sentirte es lo que me mantiene vivo en estas nostalgias que me invaden y mis soledades son mi compañía, haces que mi día sea fácil. Al atardecer, se esconde el sol para amarnos tú y yo. Te pienso todo el tiempo. Te necesito mío. Eres mi delicioso placer que me desborda los sentidos. Sabes a delirio, a sexo inaudito. Eres un peligro, sabes a pecado y ha prohibido.
Sentirte es lo que me mantiene vivo en estas nostalgias que me invaden y mis soledades son mi compañía, haces que mi día sea fácil. Al atardecer, se esconde el sol para amarnos tú y yo. Te pienso todo el tiempo. Te necesito mío. Eres mi delicioso placer que me desborda los sentidos. Sabes a delirio, a sexo inaudito. Eres un peligro, sabes a pecado y ha prohibido.
Te extraño tonto. ¿Cómo puedes dudarlo? Eres mi sueño
anhelado. Mi éxtasis planeado, adoro la tentación de rendirme ante tus brazos.
Amo que me ames, que de repente me llames que vivas deseándome. Quisiera
ser tuyo por siempre, que nada nos
separe. Adoro que digas que te parezco endemoniadamente hermoso no porque
lo sea, sino porque para ti soy único.
Amo tu sabor y los besos de tu boca. Amo tu piel y el
deseo que me provoca. Amo la dulzura de tu voz, el alma me trastornas. Te amo
con el corazón y mi alma vive adorándote...
Eres mi pasión avasallante, la música que me dedicas, mi alegría
constante. Te amo viajero, te amo libre, te amo desvelándote por
mí, te amo amante, siempre mío, siempre dispuesto a todo, pronto podré
amarte y es lo que más deseo. Te estaré esperando
Te estaré esperando el tiempo justo y
necesario que así deba de ser. Y cuando decidas volver seremos
realmente felices. Sé que sufres en silencio esa soledad de dos amantes que al
dejarse sienten cómo se desliga la ilusión y el encontrarse será la mejor
opción, y va a suceder, es solo cuestión de tiempo, Guille, ya no te diré de don
ni de usted. Dejar de quererte jamás podrá ser y aunque lejos estés de mi
presencia, siempre estarás cerca del
corazón.
En los ladrillos resquebrajados de los castillos que aún
no se constituyen, escribo tu nombre. En la blanca arena de esa cálida playa
que no he caminado, escribo tu nombre. En las hojas en blanco de las paredes de
un libro aún no leído, escribo tu nombre. En la comisura de mis labios
que desean ser devorados por tus besos, está escrito tu nombre. El calor que hace vibrar mi alma, al saber que necesita de tu cuerpo, al caer la noche, pronuncio tu nombre. Con mis verbos escribiré en tu piel, y queden grabados, y cada vez al leerlos, pronunciaré tu nombre, te voy amar Guille, me amarás, lo prometo.
que desean ser devorados por tus besos, está escrito tu nombre. El calor que hace vibrar mi alma, al saber que necesita de tu cuerpo, al caer la noche, pronuncio tu nombre. Con mis verbos escribiré en tu piel, y queden grabados, y cada vez al leerlos, pronunciaré tu nombre, te voy amar Guille, me amarás, lo prometo.
¿Alguna vez has prestado atención a lo que el viento te
susurra al oído?
¿Habrás podido escuchar el canto de la lluvia? La naturaleza en su esplendor nos acaricia con la magia de su poder, pues el viento nos lleva los ecos de esas voces que llenan nuestras mentes de los más bellos recuerdos, lluvia que te haces cómplice de mis lágrimas, al mojar mi rostro logras ocultarlas en esos días, en que por las calles no camino bajo un cielo que parece
llorar conmigo compartiendo la nostalgia que embarga a mi corazón, por un amor que no es mío, todavía.
¿Habrás podido escuchar el canto de la lluvia? La naturaleza en su esplendor nos acaricia con la magia de su poder, pues el viento nos lleva los ecos de esas voces que llenan nuestras mentes de los más bellos recuerdos, lluvia que te haces cómplice de mis lágrimas, al mojar mi rostro logras ocultarlas en esos días, en que por las calles no camino bajo un cielo que parece
llorar conmigo compartiendo la nostalgia que embarga a mi corazón, por un amor que no es mío, todavía.
Quisiera tener
alas y volar con la fuerza del viento, que sean sus ondas las que me lleven
lejos, que me lleven justo ahí al lugar en el que te encuentras, y poder
envolverme en tus brazos, besar tus cálidos labios y perderme en el mundo
escuchando tu voz que nace del alma, susurros, que son provocados por el
amor que a mí profesas, que mi amor has conquistado, es la distancia la que nos separa, sin
embargo nuestras almas nos unen, con ellas nos acariciamos y besamos el
alma, es en ella en las que a ti me
entrego hasta que el sentimiento se haga eterno, donde los besos sean consuelo
y ardor al mismo tiempo. Donde habite la locura y se despeguen los pies del suelo,
donde tus brazos me sujeten. Donde el suspiro viaje través del viento y en
tu boca se pose. Donde me recuerdes, donde me pienses, donde me ansíes la piel
como yo a tu cuerpo. Ahí estaremos los dos en la lejanía amándonos. Haciendo
realidad el amor, la pasión, la alegría.
Solos tú y yo... En un mismo corazón. Aquí y ahora.
__
Pedro sentado en la parte posterior del coche observa los
hombros del hombre que le roba el sueño, anchos, firmes, la piel del cuello
blanca como la porcelana, se le antoja que tostada por el sol semejaría madera
de teca dorada, se fija en la curva que hace sobre la clavícula, la línea
grácil sobre el disco del omóplato que remata en el brazo que imagina torneado.
Ve las formas e imagina que saca un molde, que la línea recta entre el hombro y
el otro es la mesa que desciende formando las gráciles patas.
Llegan al taller de Pedro, Camila baja y espera en la
puerta. Qué bien que esté la muchacha de la farmacia, le dice Juan a Guillermo por lo bajo. Pedro
cojea un poco porque la herida de la pierna le molesta aún al caminar, pero se
nota alegre de regresar, de ver a Menfis, al que acaricia torpe con la mano
izquierda. El gato tiene la cola en alto y restriega el lomo ronroneando contra
las piernas de Pedro.
__Cuidado si lo hace caer __dice Juan, que no es muy
amigo de las mascotas.
Gente del barrio se ha acercado a saludar al muchacho. Su
amigo el de los marcos y molduras le da el brazo para entrar al taller.
Guillermo, se apresura a entrar a la habitación con
Camila para asegurarse de que Pedro podrá acostarse en la cama. Entre los dos
retiran el edredón verde mientras Juan se queda rezagado del pequeño grupo
mirando con curiosidad el taller. Las herramientas y las mesas de la
carpintería.
Guillermo nota que todo está limpio y hay unas flores en
un vaso con agua sobre la mesa de noche. Pedro dice que prefiere sentarse en la
mecedora junto a la cama, que ya ha estado acostado demasiados días.
__Me siento como el santo en una precesión _dice y todos
ríen.
Juan regresa a la camioneta para bajar las bolsas que
Guillermo ha preparado con jugos y latas diversas. Un poco incómodo sin saber
moverse en ese ambiente o qué pensarán los vecinos, las pone sobre una de las
mesas de la carpintería. Guillermo sale a traer almohadas y toallas.
__Está a todo atento usted _le dice Pedro con una sonrisa
que le roba el aliento.
__Cuando se está convaleciente las almohadas y toallas
nunca están de más.
__ ¿Qué más necesita? __pregunta incómodo Juan __. ¿Qué
otra cosa podemos hacer?
Pedro piensa que habla como si llevarlo de regreso a casa
y dejarle unos víveres y jugos cerrara el capítulo de obligaciones contraídas por
los culpables de lo sucedido.
__No se preocupe, doctor, aquí hay quien me cuide __dice
Pedro. Guillermo está consciente del silencio de Camila, y de las otras
personas y no puede dejar de pensar que todos están ansiosos de verlos partir
para quedarse con quien les pertenece, con uno de ellos.
__Bueno, por ahora los dejamos, regresaré mañana, Pedro
__se excusa Guillermo.
__Creo que hemos cumplido _dice Juan cuando van de
regreso.
__No entiendo cómo puedes pensar eso vos siendo médico, Juan
_contesta Guillermo __.Creo que sabes bien que ahora viene lo más difícil. Los
impedimentos con los que se topará el muchacho que vive solo y no tiene
familia.
__Vos no entiendes, en los barrios las cosas son
diferentes, la gente es mucho más solidaria. Son pobres pero no de espíritu. De
no ser así yo no estaría tan tranquilo, Guillermo, pero hay que saber hasta
dónde puede uno ayudar. No te enteraste pero dejé un buen monto de dinero con
Camila. Se ve que esa muchacha si no está enamorada, le tiene mucho afecto.
A lo mejor se casan, quién sabe, a lo mejor serviste de
Cupido sin darte cuenta.
A Guillermo la explicación no termina de convencerlo.
__Muy fácil pensar que los demás se harán cargo porque no
son pobres de espíritu, porque son solidarios.
¿Eso cómo nos deja a nosotros que tenemos los medios para
no ser pobres de espíritu y ser solidarios?
__Nos deja en la realidad de que salimos sobrando de ese
entorno __responde Juan__. ¿Qué, acaso
no te sentiste incómodo? No me digas que no porque lo noté en tu cara.
Parecemos de otro planeta en vestimenta y caminando torpes entre tablas y
herramientas.
¿Cómo crees que vas a ayudar?
¿Quieres llevártelo a convalecer a nuestra casa? No me
opongo, si eso te tranquiliza.
__!Pero si te vas al Congreso pasado mañana! ¿Cómo me voy
a quedar en casa con una persona que recién conocemos? __exclama Guillermo.
Juan ríe.
__Está inválido, Guillermo y es un joven.
Vos podrías ser el padre.
__No es así, tiene treinta y ocho años _replica con
énfasis.
__ ¿No, qué? __pregunta Juan.
__No quiero que convalezca en nuestra casa, no aceptaría
además. Es una idea descabellada.
__Entonces déjalo tranquilo que lo haga en la suya _dice
Juan, y no vayas a meter ruido, además tienes que regresar al estudio, no
tienes demasiado tiempo libre.
__
Guillermo no contento con su apariencia tenía turno con
su médico, estaba dispuesto a hablar francamente con él, en el camino, mientras
Juan fue a terminar sus turnos antes del viaje, la mente no se apartó de qué
hacer por y para Pedro, era obvio que no se arreglaría con unas latas de comida
y agua, solo.
No puedo dejarte solo, Pedro, no es como dice él, además algo me impulsa hacia
vos, es tu juventud, es tu belleza, es la inquietud que me domina, no es la
culpa del inicio, te deseo.
Si en el rozar de esos labios la vida se me fuera bien
vale el intentarlo aun sin tener tu permiso,
qué importa si me muero, más terrible es la espera de un beso que no llega, que niega el paraíso. Comisuras por probar, pecar por vez primera, tu boca es tan hermosa, tus labios un hechizo, mas yo me dejo embrujar, ya soy a tu manera; compruébalo en un beso, delicado, preciso. Sostengo lo que digo, si en tus labios muriera, a la muerte bendigo, seré un feliz occiso.
¿Quién teme a la tumba si tu piel es la madera? Mando mi vida en prenda, juro por mi alma entera, he de besar esos labios... aun sin tu permiso.
qué importa si me muero, más terrible es la espera de un beso que no llega, que niega el paraíso. Comisuras por probar, pecar por vez primera, tu boca es tan hermosa, tus labios un hechizo, mas yo me dejo embrujar, ya soy a tu manera; compruébalo en un beso, delicado, preciso. Sostengo lo que digo, si en tus labios muriera, a la muerte bendigo, seré un feliz occiso.
¿Quién teme a la tumba si tu piel es la madera? Mando mi vida en prenda, juro por mi alma entera, he de besar esos labios... aun sin tu permiso.
En mis jóvenes recuerdos escondidos del día del
accidente tu figura aparece tan desnuda que altera nuevamente mis
sentidos y encierra mi razón en otra duda. Tus aprecios y besos bendecidos se
vuelven a mi boca tartamuda y empapan a mis labios encendidos quitando de su
savia vieja muda. Negando que se fuguen sentimientos, tus ojos sueltan rayos de pureza llenos
de sol, de lunas y de vientos. Me colman de acertijos tus lamentos que rasgan
mis adentros con fiereza mas no puedo cambiar mis pensamientos.
¿En dónde quedó el pecado?, ¿en la memoria de la piel
dormida en las fuertes locuras perdidas o en el dolor que le ha atrapado?
¿En dónde cayó su amor vetado por las lenguas viperinas en
las noches de luna oscurecida y el placer que no ha brotado? ¿En dónde está el
grito acallado?, ¿en dónde anda la boca parlanchina?
¿Dónde se conjugó la cruel mentira de aquel amante equivocado?
¿Dónde se conjugó la cruel mentira de aquel amante equivocado?
¿En dónde el amor amado? ¿En dónde la bondad esparcida?
Que caigan estrellas bendecidas y el caballero sea
condecorado ¡No hay pecado!, hay vida bendecida, hay línea confundida, hay un matrimonio
equivocado.
__Pedro, tengo que
regresar a la farmacia, ¿estarás bien?
__Ve, Camila, tranquila, dormiré un buen rato, Menfis me
cuidará en tanto, ve tranquila.
__Tonto.
Cuando Camila salió luego de haberlo ayudado a llegar a
la cama, Pedro perdió la mirada en el techo pensando en lo sucedido, en el
porqué.
"Cuando no existe enemigo en tu interior, el enemigo
de afuera no puede hacerte daño".
Tus pensamientos importan, tus pensamientos crean tus
sentimientos, tus sentimientos crean tus acciones y tus acciones crean tu
vida, están todos interconectados, sin excepción, procura tener pensamientos
positivos, muchas veces la única barrera que nos separa de nuestros sueños
somos nosotros mismos y un muro erguido con bloques de pensamientos negativos y
dudas, pero, no se ha construido nunca una pared que no pueda ser derribada.
Muchas veces el aferrarnos a situaciones o personas del
pasado no nos permite avanzar hacia donde queremos, todo ese rencor acumulado
es como querer caminar con un pie atado, solo podrás andar en círculos, es por
eso, que debes aprende a perdonar, en especial a ti mismo, deja las
preocupaciones de lado y confía en que cuando una situación inesperada llegue
tendrás las herramientas y capacidades para superarla. Nunca te dejes engañar por
aquellos que te hagan pensar que eres muy joven, muy viejo, que te faltan
estudios o te sobran estudios, que te falta experiencia, que es muy tarde para
cambiar o es muy pronto, el mejor momento para cambiar es ahora y tú en tu
interior lo sabes, el Dalai Lama dijo una vez “cuando dudes entre lo que dice
tu corazón y lo que dice tu cabeza, sigue a tu corazón, que aun si te equivocas
tu cabeza podrá ayudarte a aprender”, sigue tu voz interior que ella es sabia y te
conoce mejor que nadie, ella sabe cuáles son las palabras que debes decirte
para ser más positivo y seguir creciendo como persona.
Somos lo que hacemos repetidamente, por eso la excelencia
no es un acto, es un hábito, el pensamiento positivo es parte de la excelencia
como personas que venimos a desarrollar, por eso es importante que te repitas
constantemente frases positivas sobre ti mismo. Hoy somos el resultado de
nuestros pensamientos de ayer, y mañana seremos lo que hoy pensemos; es nuestra
responsabilidad convertirnos en aquello que queremos, aunque ya no podamos
hacer nada por lo que pasó es mejor tomar responsabilidad por lo que será de
ahora en adelante, lo importante es recordar qué podemos ser y llegar donde
queremos.
Todas las respuestas, ideas, posibilidades y potenciales
que necesitas están dentro de ti solo recuerda escuchar tu voz interior y
confiar en que el resultado siempre será el más apropiado. Todo en la vida está
preparado para que tú seas lo mejor que puedes ser y cumplas con tus misiones
de vida, ten confianza en que hay razones por las que vives cada una de las
experiencias de tu vida, baila al ritmo de la vida y verás cómo terminarás
brillando más allá de lo que nunca te has imaginado. Tú puedes, eres capaz, lo
lograrás. ¡Tú te lo mereces!
Las horas pasan en el reloj que de la pared cuelga, me
dicen que el tiempo es infalible y no se detiene, y las miro, mientras pienso
¿cuánto más para encontrarte?, sin saber
que esa misma hora se refleja en tu cuenta. Rompo minutos en segundos para
contarlos uno a uno, sabiendo que por cada segundo un suspiro del alma sale y
vuela hacia ti envuelto en un ligero avioncito de papel, transportando un ‘te
amo’ escrito con suspiros de miel.
Son minutos lentos, cuando correr a tus brazos yo quiero, mas pasan a ser minutos rápidos cuando hablando estamos y no hay tiempo extra para disfrutar más suspiros no dados.
Tan solo un minuto, con sus segundos y fracciones robamos. Y así el día pasa, sin tiempo suficiente para poder verte. Sin tiempo suficiente, para decirte lo que te he pensado.
Acaso un instante para añorar un beso dado repentinamente, y abrazarte gentilmente mientras en solitud te digo: creo que voy a amarte, mas no temas que no lo diré si no estás preparado.
Y pensar en ti.... El día que pasa rápido, en que llega la noche y encontrar mi cama vacía.
Sin ti y tan llena a la vez de tantas palabras que llenan mis pensamientos... deseos de ti.
Noches y noches llenas de deseos. Mi cuerpo arde en fiebre sin saber de ti.
Cómo verás la luna si te alumbra lo mismo que a mí, si te traerá mi recuerdo lo mismo que a mí. Lágrimas de estrellas que atraen a mis sueños, quedar saciado de ti. Poder detener cada noche en el ardiente sueño. Ese beso eterno que entre suspiros me hace tenerte.
Si tuviera un solo pensamiento tuyo. Si en tus sueños me desearas tanto como yo a ti, cesaría esta tristeza calmando esta necesidad que tengo de ti. Si tan solo tuviera un instante de tus deseos en este sentimiento que siento por ti.
Son minutos lentos, cuando correr a tus brazos yo quiero, mas pasan a ser minutos rápidos cuando hablando estamos y no hay tiempo extra para disfrutar más suspiros no dados.
Tan solo un minuto, con sus segundos y fracciones robamos. Y así el día pasa, sin tiempo suficiente para poder verte. Sin tiempo suficiente, para decirte lo que te he pensado.
Acaso un instante para añorar un beso dado repentinamente, y abrazarte gentilmente mientras en solitud te digo: creo que voy a amarte, mas no temas que no lo diré si no estás preparado.
Y pensar en ti.... El día que pasa rápido, en que llega la noche y encontrar mi cama vacía.
Sin ti y tan llena a la vez de tantas palabras que llenan mis pensamientos... deseos de ti.
Noches y noches llenas de deseos. Mi cuerpo arde en fiebre sin saber de ti.
Cómo verás la luna si te alumbra lo mismo que a mí, si te traerá mi recuerdo lo mismo que a mí. Lágrimas de estrellas que atraen a mis sueños, quedar saciado de ti. Poder detener cada noche en el ardiente sueño. Ese beso eterno que entre suspiros me hace tenerte.
Si tuviera un solo pensamiento tuyo. Si en tus sueños me desearas tanto como yo a ti, cesaría esta tristeza calmando esta necesidad que tengo de ti. Si tan solo tuviera un instante de tus deseos en este sentimiento que siento por ti.
__
Pedro, dame
veinticuatro horas, finge que me amas solo esas horas de más, es lo
único que te pido, al cumplirse el plazo me marcharé sin ningún reproche sin ningún
reclamo.
Déjame decirte hasta que mis labios enmudezcan y queden
secos de decir todos los te amo que tenían guardados ellos para vos. Tranquilo,
no espero que los respondas, solo recíbelos, a mí me quedan de sobra, no
son para nadie más solo para tu persona, creo que me enamoré sin aviso, sin
pedirte permiso, como jamás pensé que sería capaz, y me callaré si sos de ella,
de Camila.
Una vez más camina conmigo, tómame de la mano, sé que te
cuesta mucho pues no soy el motivo de tus sonrisas por las mañanas pero un día
más de agonía te pido "amor de mi vida..." así era como me decías en
mi sueño de estos días.
Siéntate conmigo en la sala, beberemos café en tus tazas y déjame leerte el último capítulo
de esta divina comedia que fue tu vida junto a la mía en estas horas.
No me mires con lástima, siempre has sido muy buen
actor... Bueno gánate todos los premios fingiendo
y actuando como lo has hecho siempre siendo ese amor que jamás hubo en tu
alma... Llévame a la cama, desnúdame
y hagamos el amor una vez o no, si para hacer
el amor la tienes a ella. Entre gemidos y venidas termina de sacar todo ese
amor que falsamente inyectaste en mí, como droga en las venas vida mía. Déjame
vacío, seco que quiero llegar con quien ocupará tu lugar como nuevo... Sin rastros de vos, sin una pizca de tu
existencia.
Déjame amarte solo un día.
Déjame amarte solo un día.
Estoy perfectamente consiente que no me amas y trato de
entenderte pero hoy estoy consciente, prefiero suicidarme entre tus brazos un
día que ser cobarde y seguir aguantando.
Cumpliéndose el plazo me marcharé y saldré de tu vida.
Un poco más lastimado, con el corazón aún más roto, con las ilusiones y sueños guardados en el bolsillo de mi pantalón... Pero con la frente en alto porque aquí en esta historia el cobarde no seré yo, no habré fingido como en la farsa de toda mi vida.
Un poco más lastimado, con el corazón aún más roto, con las ilusiones y sueños guardados en el bolsillo de mi pantalón... Pero con la frente en alto porque aquí en esta historia el cobarde no seré yo, no habré fingido como en la farsa de toda mi vida.
Como un mago hechizaste mi corazón, entraste a mi vida
eclipsando sutilmente mi alma y mi mente solo para ti; quiero decirte lo que
pienso y lo sos para mí.
__ Con solo besar mis labios húmedos que estaban ansiosos
por los tuyos, me perdía de emoción, cuando recorrías mi cuerpo con la calidez
de tu boca, la ternura de tus ojos, la suavidad de tus manos que se enviciaban
con mi piel.
Yo era como un manantial de aguas dulces que me
desbordaba con inmensa pasión y vigor, me hacías volar a otra dimensión
perdiéndome en mi propio mundo de espejismo, sintiéndome extraño y ajeno a la
realidad.
Al estar entre tus brazos sintiendo el calor del roce de
tus labios, tu lengua cálida presionando mi pecho con fervor, me estremecía, no quería soltarte, con todo esto y mucho más,
eres como una magia que llenaste mis sueños de fantasías.
Te refugiaste en mi alma, despertando mis anhelos en mis
peores momentos de soledad y melancolía. ¡Increíblemente no sé cómo! pero eras
capaz de hacer de mí a tu antojo, yo siempre dispuesto, dejándome querer.
Disfrutaba cada momento a tu lado, mientras dormías te
despertaba delicadamente con mis besos y caricias, siempre quería mostrarte
algo nuevo con muchos deseos de amarte, de sentirte en mis entrañas con la
potencia de tu pasión.
Los gemidos excitantes del placer sin darme cuenta me
perdían en ti vehemente, con mis uñas te arañaba con lujuria; perdido en la
lascivia de tu virilidad sin control, aullando como bestias bajo la luna llena,
enloquecidos del gran placer.
Nuestros cuerpos y alma vibraban fundiéndose de tanta
pasión; fue así que escribieron mis garras marcando tu espalda para siempre, para
que no me olvides.
Ahora aquí estoy esperando de nuevo tu regreso y podamos
reiterar, saciando nuestros deseos que complementan nuestro amor, no tardes
mucho aquí te espero, don Guillermo. Sé que vendrás.
__
Mientras Juan se despedía de sus compañeros tomando
un taxi, Guillermo en la sala de espera divaga con Pedro, sentirlo cerca de él, oler su perfume y
ver sus labios rojos de cerca imaginando cómo lo besaría suavemente y
mordería sus labios para después jugar con su lengua y acariciar su
piel; estaba excitado pensando en el momento de ver la desnudez. Imaginar los hermosos montes de su
pecho, frágiles botones que besa mientras lo hace suyo, lo vuelve loco, sueña con llegar a su casa, con la partida de
Juan, con desvestirse e ir a la ducha para seguir fantaseando con Pedro.
Los infinitos misterios de la mente influyen en la capacidad
soñadora de vivir la fantasía abriendo el cofre de la materia gris impulsada
por los destellos de luz innata y poderosa que llevan a saborear las mieles de
tu alma. Déjate llevar por esos misterios que traerán algo oculto y sentirás
curiosidad por abrir y ver qué tesoro esconde, se dijo.
Verbos de la esencia que rezan, cantan en la mente con
trémulo silentes secretos de notas que no riman, palabras acalladas en desveladas
noches. Secretos de amor que no tienen nombre
hibernan por siempre sin aliento, sentimientos foráneos sin lumbre sin verbo que conjuguen el eco. Secretos dormitando en la alcoba entre muros, suspiros pintados que se ausentan al despuntar el alba de la realidad de mi vida, esotéricos. Secretos de estela que alumbra y no sabe de besos y caricias sin lienzos revelados pasión que en el pecho ya no caben, sempiternos con mis deseos adormecidos. Secretos foráneos de besos y caricias, delirio de naufragar en tu palpitante regazo, descifrar lo insondable de tu cuerpo de olas y navegar en tu piel hasta el último ocaso.
hibernan por siempre sin aliento, sentimientos foráneos sin lumbre sin verbo que conjuguen el eco. Secretos dormitando en la alcoba entre muros, suspiros pintados que se ausentan al despuntar el alba de la realidad de mi vida, esotéricos. Secretos de estela que alumbra y no sabe de besos y caricias sin lienzos revelados pasión que en el pecho ya no caben, sempiternos con mis deseos adormecidos. Secretos foráneos de besos y caricias, delirio de naufragar en tu palpitante regazo, descifrar lo insondable de tu cuerpo de olas y navegar en tu piel hasta el último ocaso.
__
Guillermo se concentró en observar a los hombres que
esperaban al médico.
¿Cuántos años tendrían los mayores?
¿Hacían el amor? Porque él con Juan, muy rara vez, casi
por compromiso, sin romanticismo, sin
ganas. Difícil imaginarlo. Observa los rostros con sus líneas de ruta, los kilos
imprudentes en el vientre. ¿Cómo podrían esperar hacer el amor?
Soy injusto, piensa, rara vez cuando veo hombres mayores
me pregunto cómo esperan que los amen sus parejas. No se me ocurre dudar. Y sin
embargo sí critico a las mujeres que no cuidan su aspecto, su apariencia.
Atender la belleza ha sido desde su infancia una
obligación para la que fue rigurosamente entrenado por Mirna. Ella, muy joven
cuando él nació, volcó en él todos los cuidados. En las fotos de su niñez,
Guillermo jamás aparece jugando o descuidado, tal vez allí radique el origen de
sus fobias de hoy, piensa. Solo lo retratan acicalado para sus cumpleaños, y
ella lo vestía con trajes haciendo juego con zapatos y medias. De adolescente
le compraba lo último de la moda. El padre le llevaba chocolates y dulces y él
comía a escondidas porque su madre jamás los permitía.
Todas las tardes lo llevaba a calles de Ballet y más
adelante a clases de deportes aeróbicos, también corría aunque amaba la moto.
Fue un chico dócil y recatado frente a ellos, pero a solas leyó libros
prohibidos y soñó con romances y con una vida de médico en algún lugar
distante, mas su madre lo paralizó en sus intenciones y terminó siendo abogado,
aunque estaba casado con un médico y cursó cuanto pudo ambas carreras, y lo
paradójico fue que su madre dejó para el final de sus días la rebelión contra
esa docilidad que predicó incansable a su hijo.
Aunque no le cuenta a Pedro, ellos lo mismo, durante la dictadura,
ella deprimida por el exilio, tuvo una caída, se levantó de un coma de tres
días, convertida en una criatura beligerante y desaseada que salía a la calle
descalza, se negaba a bañarse y que le reclamaba a gritos al padre una rigidez que
hasta entonces había aceptado no solo con mansedumbre sino con total
complicidad, la locura de su madre desajustó con su aire de tragedia griega a
la larga placidez de la familia perfecta. Incapaz de aceptar los consejos
médicos de que fuera recluida en asilo para enfermos mentales, el padre pagó
enfermeras para que la cuidaran en casa y se creó una vida aparte en la que se
dio licencia en casa para beber lo que no había bebido, y gustar los placeres
de la carne con prostitutas vip y eternamente lindas.
Guillermo se pregunta si ese reproche silencioso a sus
congéneres hombres o mujeres de perder todo atisbo de coquetería, de
sensualidad, de belleza y convertirse en personas de cuerpos cuadrados y
vestimenta aburrida, le vendría de su madre desquiciada, y si el cambio de su
padre causaría el temor a que amantes jóvenes y bellos lo sustituyeran en la
vida de Juan. Le es difícil digerir la transformación que llevó a su padre a infringir
sus rígidas normas de conducta para convertirse en un donjuán. Tras ser
respetable hombre de negocios, ahora su preocupación es que no le falte el
viagra. Quizá por vergüenza, y por saber que él es gay, se ha distanciado de su
único hijo.
Pero los amoríos de hombres viejos con chicas son
tolerados, en cambio de hombres gais con parejas jóvenes como en caso de
mujeres mayores son objeto de crueles burlas y desconfianza. Los hombres
heterosexuales, si por viagra o por casualidad aciertan el tiro pueden, calvos
o canosos, panzones o arrugados, pasear ufanos empujando cochecitos de bebé.
El médico asoma por la puerta y lo saca de sus divagaciones,
indicándole que pase.
Mientras espera que la médica atienda una llamada, la mente huye a cómo estará Pedro, en el
cúmulo de nuevas sensaciones que le provoca, que en definitiva aceleran su
decisión de estar y verse bien. Cosquillas, euforia, descargas y relámpagos en
sus partes más íntimas, y no puede evitar de preguntarse qué música brotaría de
él… en sus manos.
CONTINUARÁ.
HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS, CUALQUIER PARECIDO CON
LA REALIDA ES MERA COINCIDENCIA.
LENGUAJE ADULTO, ESCENAS EXPLÍCITAS.
Paulina Edelmira Mansilla Calderón SUCEDE.QUÉ BUENA.
ResponderEliminarJoss V.....sublime y bello querida...
ResponderEliminarVictoria Bellísimo .Gracias
ResponderEliminarMichael Excelente
ResponderEliminarLavi Hermoso. Un placer de lectura.
ResponderEliminarPaula Interesante
ResponderEliminarLorena muy linda... gracias por compartir con este hermoso espacio, beso querida.
ResponderEliminarMarta Bellooo!!!
ResponderEliminarSusana Bellooo!!!
ResponderEliminarMaria Luis ESCRITORA EVE MONICA Buenos días que tengas un genial y mágico jueves muchas GRACIAS por permitirme estar en tu mundo de novelas y ficciones, saludos.
ResponderEliminarMayda Interesante....que bonita imaginacion.
ResponderEliminarVeronica Lorena Piccinino Hace a Juan que tiene una vida paralela. Así Guillermo puede estar con Pedro sin culpa... Eso es lo que me genera la personalidad que le hiciste a Juan cuando lo le
ResponderEliminarVeronica Lorena Piccinino Y mira que Juan me agrada y jose también... Pero lo hiciste como una persona amorada y eso es lo que siente Guillermo. Una relación por conveniencia donde se perdió el amor
EliminarInevitable Eve, las dudas cuando se llega a cierta edad y sobretodo cuando la relación es más una costumbre que un sentimiento verdadero...Por eso cuando aparece el amor verdadero el mundo todo parece cambiar...
ResponderEliminarLlegaste, a este Juan creo que como pediste lo mandaremos al exterior, uille está apurado por no verlo, es bella, gracias y mi amor.,
Eliminar