“EL VIAJE”.
CAPÍTULO 129.
“Pero hagamos un trato: yo quisiera contar con usted, es
tan lindo saber que usted existe, uno se siente vivo; y cuando digo esto,
quiero decir contar aunque sea hasta dos, hasta cinco. No ya para que acuda,
presuroso en mi auxilio, sino para saber, a ciencia cierta, que usted sabe que
puede contar conmigo.
MARIO BENEDETTI”.
MARIO BENEDETTI”.
26 de julio de 2016.
Estudio Graciano y Socios.
_Dieciocho.
__Bien, es imputable siempre
que ella esté dispuesta a denunciar, o que él confiese, o haya testigo.
__Los hay, pasó anteanoche,
quizá puedan obtener muestreos todavía. Ella guardó la ropa. Llegó al country
con un conocido, que luego se emborrachó y se perdió entre todos, ella estaba a
disgusto, empezó a ver cosas que no le gustaban, y entonces con miedo y todo,
llamó a un taxi para regresar a la ciudad, cuando lo esperaba, se perdió, entró
a la habitación equivocada. El pibe la persiguió toda la noche y ella se le
escapaba.
Diez minutos después se oyeron
las sirenas, y llegó Alberto, más bien Gaby no oía nada, porque solo se
limitaba a llorar desconsoladamente entre las contracciones, hasta que se
aferró a la mano de Beto, y en diez minutos llegaban al hospital, con todos los
demás siguiéndolos y dando la noticia a quienes estaba en… la casa del Delta.
__Madre de Dios bendito, estas
mujeres me van a matar de susto, Pedro, esta casi tuvo a mi ahijada en el
estudio, casi peor que Valeria en la casa.
Cuando llegaron a urgencias,
las enfermeras la llevaron en la camilla, y no les dio tiempo de nada, porque
enseguida nació una niña preciosa que pesaba tres kilos, y medio, tenía una
pelusita rubia, los puños apretados, y berreaba como una marrana, mientras los
papás lloraban muertos de miedo, pese a que no era la primera, y
Guillermo y Pedro se paseaban fuera, con Melina y Cuca que estaban con ellos.
El viaje de la vida continuaba,
en la nueva generación, de todos.
“Qué vanidad imaginar que puedo darte todo, el amor y la
dicha, itinerarios, música, juguetes. Es cierto que es así: todo lo mío te lo doy,
es cierto, pero todo lo mío no te basta como a mí no me basta que me des todo
lo tuyo. Por eso no seremos nunca la pareja perfecta, la tarjeta postal, si no
somos capaces de aceptar que solo en la aritmética el dos nace del uno más el
uno. Por ahí un papelito que solamente dice: Siempre fuiste mi espejo, quiero
decir que para verme tenía que mirarte. Y este fragmento: La lenta máquina del
desamor los engranajes del reflujo los cuerpos que abandonan las almohadas las
sábanas los besos y de pie ante el espejo interrogándose cada uno a sí mismo ya
no mirándose entre ellos ya no desnudos para el otro ya no te amo, mi amor.
Julio Cortázar”.
Entré apresuradamente a mi habitación y me lancé de
rodillas sobre el piso mientras hundía mi rostro en el cubrecama azul cielo que
recibió impasible este, mi rostro desencajado y triste. Lloré con todas mis
fuerzas y ahogué mis gritos en la silente pieza de tela que solo permanecía
ahí. “¡Perdón mi Dios, Perdón!”, grité con la incontenible fuerza de mi
espíritu, que aunque quebrado, jadeaba y convulsionaba cansado de tanta presión
mental. El apellido lo había heredado de papá pero el arte de la manipulación
fue el regalo que mamá me dejó como testigo y parte de todo lo que padecería al
utilizarlo cabalmente. Mientras lloraba, reasumía esta vocación que había
refinado a niveles de meticulosidad casi perfecta, y repasaba sin querer
hacerlo los rostros de todos a los que afecté con este estilo de vida tan
peculiar y pero como no quedaba espacio
para la mentira sino para vomitar mis verdades, arrodillado ante el creador,
tuve que reconocer que esta corrupción emocional me había llevado casi al
ostracismo.
Mientras mi espíritu recobraba la calma, sentí la imperiosa necesidad de pedir perdón desde lo más profundo de mis entrañas, sin omitir ningún pecado, ya no tenía sentido, estaba quebrado y el fondo de los fondos me recibía y se afanaba por sujetarme a él. Solo Dios podría redimirme, si acaso alguien pudiera. A esta altura de mi vida, después de haber cruzado el punto de no retorno, solo me quedaban dos caminos a seguir: La sobredosis de comportamiento abusivo y manipulador hasta las últimas consecuencias, o el cambio radical y el pedido de ayuda profesional o de cualquier naturaleza. Sintiendo las consecuencias de estar en esta posición sumisa sobre el suelo duro, reflexioné en que el dolor del cambio pagaría con creces cualquier esfuerzo que debería hacer para modificar el rumbo de esta vida que hasta ahora solo iba dejando a los lados, como si fuese un barco navegando entre personalidades, borbotones de sentimientos heridos, sufrimiento y marcas indelebles en personas que no deberían haber pasado la experiencia de mis fobias y berrinches.
La decisión estaba tomada y con vehemencia empecé a escribir mi futuro, el inmediato, preparando los movimientos que me devolvieran al mundo de las personas normales. Agradecí reiteradamente lo que consideré una respuesta espiritual que me llevaría a conocer las bondades de una vida sin movimientos solapados. De dejar de torcer caminos rectos a fuerza de imponer subrepticiamente mi pensamientos sin que ellos fuesen notados. Agradecí nuevamente a mi Dios por escucharme y comencé a levantarme, rogando que lo mismo pudiera hacer con mi espíritu que permanecía desinflado pero con un toque de esperanza. Mientras secaba mis lágrimas, pensaba en si realmente habría sido convincente mi demostración de arrepentimiento. Después de todo, una cosa es manipular la mente de pares y otra muy diferente… es hacerlo con el amor de la vida.
Mientras mi espíritu recobraba la calma, sentí la imperiosa necesidad de pedir perdón desde lo más profundo de mis entrañas, sin omitir ningún pecado, ya no tenía sentido, estaba quebrado y el fondo de los fondos me recibía y se afanaba por sujetarme a él. Solo Dios podría redimirme, si acaso alguien pudiera. A esta altura de mi vida, después de haber cruzado el punto de no retorno, solo me quedaban dos caminos a seguir: La sobredosis de comportamiento abusivo y manipulador hasta las últimas consecuencias, o el cambio radical y el pedido de ayuda profesional o de cualquier naturaleza. Sintiendo las consecuencias de estar en esta posición sumisa sobre el suelo duro, reflexioné en que el dolor del cambio pagaría con creces cualquier esfuerzo que debería hacer para modificar el rumbo de esta vida que hasta ahora solo iba dejando a los lados, como si fuese un barco navegando entre personalidades, borbotones de sentimientos heridos, sufrimiento y marcas indelebles en personas que no deberían haber pasado la experiencia de mis fobias y berrinches.
La decisión estaba tomada y con vehemencia empecé a escribir mi futuro, el inmediato, preparando los movimientos que me devolvieran al mundo de las personas normales. Agradecí reiteradamente lo que consideré una respuesta espiritual que me llevaría a conocer las bondades de una vida sin movimientos solapados. De dejar de torcer caminos rectos a fuerza de imponer subrepticiamente mi pensamientos sin que ellos fuesen notados. Agradecí nuevamente a mi Dios por escucharme y comencé a levantarme, rogando que lo mismo pudiera hacer con mi espíritu que permanecía desinflado pero con un toque de esperanza. Mientras secaba mis lágrimas, pensaba en si realmente habría sido convincente mi demostración de arrepentimiento. Después de todo, una cosa es manipular la mente de pares y otra muy diferente… es hacerlo con el amor de la vida.
Una moneda se rehúsa al pasar del tiempo, solo es un
objeto de cambio sin vida ni sentimientos; solo es la materialización de tus
superficiales pensamientos.
La sonrisa de tus niños no conoce lo eterno, solo es parte de un imperdible momento; a igual que la mirada de tus padres, al igual que sus valiosos consejos.
_Una moneda no compra recuerdos, no los borra ni los hace sentimientos; no cura las penas, no cura la culpa de ausentes intentos.
Las travesuras de tus niños construyen recuerdos, te roban sonrisas ocultas en enojos; como una charla con tus padres, que aunque no complazcan tus pensamientos, te nutren de sabiduría, perfeccionando tu intelecto.
Una moneda solo compra tus vacíos, solo los llena de absurdos complejos; contamina tu ego, alejando de ti tus más bellos momentos.
Tus niños se hacen hombres, mientras tú te haces viejo; tus padres se hacen ancianos, mientras tú te marchas lejos.
Una moneda no tiene raíces ni fundamentos, solo es un dogma social que te aleja de lo realmente bello; te hace sentir completo, fortaleciendo tus innecesarios apegos.
Tus niños solo te piden un cuento, para hacerlos realidad en sus sueños; tú sueñas con ser un guerrero, en un cuento de triunfos, ausencias y desvelos; tus padres solo te piden un segundo, de tu ambicioso y escaso tiempo.
Una moneda muere mañana, cuando en tu "hoy" entierras un verdadero mundo de ensueños; tu familia te espera con ansias, mientras en tu búsqueda de monedas, tú los dejas lejos.
No sacrifiques a tus seres amados, por errados triunfos; sacrifica tus triunfos, por los seres que amas mucho; una moneda no compra un te quiero, un te quiero compra un universo.
Triunfar no es tener monedas en tus bolsillos, triunfar es tener en la mente y en el pecho hermosos recuerdos; es ver cómo crecen tus hijos, es ver a tus nietos como oyen tus cuentos; es ver la vejez de tus padres, como un instante dulcemente eterno.
No sacrifiques lo más bello, con monedas que borren y destierren tus más hermosos recuerdos; solo se vive una vez, no sobrevivas ambicionando triunfos etéreos.
Triunfa siendo el padre, el hijo y el esposo, de aquellos que no te negaron su tiempo; acarícialos, abrázalos, bésalos, y recuerda... Que la vida solo es un corto momento.
La sonrisa de tus niños no conoce lo eterno, solo es parte de un imperdible momento; a igual que la mirada de tus padres, al igual que sus valiosos consejos.
_Una moneda no compra recuerdos, no los borra ni los hace sentimientos; no cura las penas, no cura la culpa de ausentes intentos.
Las travesuras de tus niños construyen recuerdos, te roban sonrisas ocultas en enojos; como una charla con tus padres, que aunque no complazcan tus pensamientos, te nutren de sabiduría, perfeccionando tu intelecto.
Una moneda solo compra tus vacíos, solo los llena de absurdos complejos; contamina tu ego, alejando de ti tus más bellos momentos.
Tus niños se hacen hombres, mientras tú te haces viejo; tus padres se hacen ancianos, mientras tú te marchas lejos.
Una moneda no tiene raíces ni fundamentos, solo es un dogma social que te aleja de lo realmente bello; te hace sentir completo, fortaleciendo tus innecesarios apegos.
Tus niños solo te piden un cuento, para hacerlos realidad en sus sueños; tú sueñas con ser un guerrero, en un cuento de triunfos, ausencias y desvelos; tus padres solo te piden un segundo, de tu ambicioso y escaso tiempo.
Una moneda muere mañana, cuando en tu "hoy" entierras un verdadero mundo de ensueños; tu familia te espera con ansias, mientras en tu búsqueda de monedas, tú los dejas lejos.
No sacrifiques a tus seres amados, por errados triunfos; sacrifica tus triunfos, por los seres que amas mucho; una moneda no compra un te quiero, un te quiero compra un universo.
Triunfar no es tener monedas en tus bolsillos, triunfar es tener en la mente y en el pecho hermosos recuerdos; es ver cómo crecen tus hijos, es ver a tus nietos como oyen tus cuentos; es ver la vejez de tus padres, como un instante dulcemente eterno.
No sacrifiques lo más bello, con monedas que borren y destierren tus más hermosos recuerdos; solo se vive una vez, no sobrevivas ambicionando triunfos etéreos.
Triunfa siendo el padre, el hijo y el esposo, de aquellos que no te negaron su tiempo; acarícialos, abrázalos, bésalos, y recuerda... Que la vida solo es un corto momento.
Me lo dije una y miles de veces tras hacerle un escándalo
a Pedro celoso de un cliente y tomármelas con mi hijo, con Beto y hasta con los
chicos, nervioso por los partos.
Salí como siempre, distraído y cansado, pero no hoy.
Mientras caminaba comencé a percibir lo que estaba sucediendo a mi alrededor.
El problema es poder expresarlo en palabras. La dificultad de trasladar con
tinta la magnificencia de un momento único y espero que repetible. La ráfaga de
viento marino en plena ciudad quitó de un tirón mi atuendo en exceso formal y
de pronto una suave y florida camisa veraniega sumada a un refrescante short,
alivianaron mi espíritu y me sentí muy bien.
Miré por encima de mis hombros pues sentía la estridencia de cosas que no comprendía. Las secas y resquebrajadas ramas de los árboles, tornaban en verde vivo, olvidando lo otrora reseco y mustio. A mi paso brotaban las hojas a tiempo descomunales y crecían hasta alcanzar estado pleno y las flores tras ellas. Se dibujó una sonrisa en mi rostro y no pude resistir el mirar atrás y todo, completamente todo era fulgor y belleza y aroma a plenitud. Dudé en entender si lo que sentía bajo los pies era realmente así o solo un espejismo de mis sentimientos pero no, el agua fresca acariciaba mi pisada y empujaba mi voluntad sobre estas pintorescas piedras multicolores que colmaban mi avidez por profusión sensorial. Peces multicolores se empeñaban en acompañar mi visión, mientras formaban rondas y escenificaciones graciosas con toda intención de mantenerme absorto en esta realidad que deseaba perpetuar. Aunque caminaba sobre piedras multiformes, a mis pies y sentido del tacto, sabían a terciopelo y colchón de flores. El perfume silvestre y dulzón insuflado en mis narices, sin que pusiera resistencia alguna, elevó mis ojos y ahí estaba el maravilloso mar de flores que se mecían mezclando las tonalidades, sin que pudiera advertir dónde comenzaba un color y terminaba el otro. El éxtasis se adueñó de mi carácter.
Volví en tiempo a este tiempo real pero no me importó. Quizás estaba enamorado, o quizá todo esto ocurrió porque te había vuelto a ver.
Miré por encima de mis hombros pues sentía la estridencia de cosas que no comprendía. Las secas y resquebrajadas ramas de los árboles, tornaban en verde vivo, olvidando lo otrora reseco y mustio. A mi paso brotaban las hojas a tiempo descomunales y crecían hasta alcanzar estado pleno y las flores tras ellas. Se dibujó una sonrisa en mi rostro y no pude resistir el mirar atrás y todo, completamente todo era fulgor y belleza y aroma a plenitud. Dudé en entender si lo que sentía bajo los pies era realmente así o solo un espejismo de mis sentimientos pero no, el agua fresca acariciaba mi pisada y empujaba mi voluntad sobre estas pintorescas piedras multicolores que colmaban mi avidez por profusión sensorial. Peces multicolores se empeñaban en acompañar mi visión, mientras formaban rondas y escenificaciones graciosas con toda intención de mantenerme absorto en esta realidad que deseaba perpetuar. Aunque caminaba sobre piedras multiformes, a mis pies y sentido del tacto, sabían a terciopelo y colchón de flores. El perfume silvestre y dulzón insuflado en mis narices, sin que pusiera resistencia alguna, elevó mis ojos y ahí estaba el maravilloso mar de flores que se mecían mezclando las tonalidades, sin que pudiera advertir dónde comenzaba un color y terminaba el otro. El éxtasis se adueñó de mi carácter.
Volví en tiempo a este tiempo real pero no me importó. Quizás estaba enamorado, o quizá todo esto ocurrió porque te había vuelto a ver.
__Guille, amor,
¿de veras es lo que deseas a horas de los partos?
__Sí Pedro, entre los violadores, los juicios que vienen
y el susto que pasé con ellas y los chicos, quiero estar solo con vos, como
antes, como cuando nadie sabía nada, como cuando éramos casi fugitivos, o siento que estoy a punto de perder el
control.
__Amor, no pasa nada, ya nacieron, tranquilo __dijo Pedro intentando la calma.
__Nada debió ser así, ni
Fabián hacer esa locura, ni Gaby estar en parto en el estudio, y si vamos a tener más hijos, tenemos que
estar muy de acuerdo y seguros.
__Vale, Guiiermo, no lo han hecho a propósito para
molestarte.
__Pero lo hicieron, y ahora mismo solo quiero pasar un
fin de semana largo solo con vos en el yate,
prefiero un tsunami a ese lío que hay en casa.
__Mi vida, los trillizos están con Moni, las nenas son
muy buenas, y tu nieta goza de buena salud, los casos, los unificaremos, no
será ni la primera ni la última vez que vayamos contra tipos como esos.
Pero bueno, ya está, casi hemos huido de la casa, solo
espero que no se enojen porque salimos de nuevo y justamente ahora.
__Ya sé que la familia es lo mejor que tenemos, pero a
veces necesito estar a solas con vos.
La ribera estaba preciosa y paseamos sin prisa por la
orilla del río hasta llegar al yate, nos
besamos y abrazamos a cada rato como en esos primeros tiempos cuando estos
viajes eran un refugio, como aquel en que nos comprometimos hace dos años. Tal
como quería mi esposo aunque de pocas horas, el viaje fue como una segunda luna de miel, un
lugar donde olvidar el estrés de las últimas semanas, los hijos, el trabajo, los juicios que
vienen, y cuando al fin nos quedamos abrazados en cubierta con la mirada en el
mar, Guiie me miró sonriendo.
__ ¿Sabes una cosa? Me alegro de haberme casado contigo
_dijo Pedro mientras se tomaba un café.
__Me encanta oírtelo decir _contestó Guillermo, soltando
una carcajada al fin__. ¿Cómo has llegado a semejante conclusión?
__Veras, pues, tú eres un buen hombre. A veces, armas un
alboroto tremendo, unos berrinches que solo yo puedo soportar, pero eres lo
bastante inteligente y honrado como para hacer marcha atrás y rectificar.
Dijo esas palabras pensando en este recodo del viaje, en
los enojos con los chicos que pasaban a los minutos, pensando asimismo en las aventuras amorosas de
Guillermo.
__Lo intento, pero a veces no soy tan inteligente
como vos, Pedro.
__Bobadas.
__Hablas como Fabián _dijo él mirándolo con expresión de
reproche.
__Bueno, no, no soy más inteligente que tú. Quizá más
obstinado en ocasiones.
__Obstinado y obsesivo soy yo, pero tal vez tu infancia
de maltrato te hizo fuerte y hoy no soy yo tan fuerte como vos, o no tengo el
valor de resistir y adaptarme a ciertas cosas como vos. A veces siento deseos
de escapar.
__Si es por eso, ante la primera de cambio el que escapó
al centro de rehabilitación y luego a Chile fui yo _dijo Pedro estrechándolo.
__Eso fue en otra vida y porque estabas enfermo, yo hablo
en condiciones normales, a veces el temor a que enfermen los trillizos o que
acosen a las nenas me gana y quiero escapar como lo quise en los partos.
Pedro pensó que él lo había hecho un par de veces, pero
Guillermo siempre había vuelto a recibirlo y su esposo se lo agradeció. Pero
esta vez se sorprendió de lo que su esposo le dijo a continuación.
__A veces yo también querría escapar, ¿sabes? Pero luego
pienso en lo que ocurriría si lo hiciera ahora que tenemos una familia. ¿Quién
calmaría tus berrinches, y quién cuidaría a los chicos? Miró a su marido, le
dirigió una sonrisa con hoyuelos y añadió___: Tú, naturalmente, pero soy tan
egocéntrico que me figuro que todo andaría mal si yo desapareciera, lo cual no
es cierto, pero me ayuda a seguir en la brecha. Al cabo ya de años.
__Yo soy más egocéntrico, pero a veces pienso eso, y me alegro _dijo Guillermo, tomando una de
sus manos. Seguían estando tan enamorados y profundamente unidos como al
segundo mes de conocerse cuando Guillermo le diera en el yate la alianza__.
Porque tienes razón. Todo andaría manga por hombro si te fueras y te doy las
gracias por no haberlo hecho nunca más luego de casados.
__Yo te agradezco que nunca me dejaras _aseveró Pedro,
aunque quizás algún día en uno de tus berrinches me escaparé y me cobraré
alguna de tus aventurillas teniendo yo una con algún guapo actor o cantante
__comentó Pedro riéndose.
__A veces me preocupa esa posibilidad, soy un hombre
grande y vos un chico __dijo Guillermo con la cara muy seria__. No me hace mucha gracia
que salgas solo, te llevo veinte años.
¿Pensaste que cuando tenga setenta apenas o ni siquiera
tendrás cincuenta y serás aún más bello?
__No. Yo también siempre supe contar, Graziani, te conocí
con treinta y tres y tú como la butaca del avión tenías cincuenta y cinco y me
enamoré, cuando tengas cien yo tendré casi ochenta, ¿estás seguro que no me
dejarás por uno de veinte con ese pasado que te condena?
Rieron los dos recordando cada uno sus celos.
__Siempre me porto bien desde conocerte _afirmó Guillermo
y Pedro resopló poniendo los ojos en blanco.
__! Guiie! No me hagas dar nombres y deja de decir
tonterías, por las dudas siempre procuro no perderte nunca de vista.
__ ¿De veras? __Guillermo enarcó las cejas.
Pedro le dio un mordisco en la oreja, mientras Guillermo
lo atrapaba en el beso.
__Vamos a hacer un pacto _propuso Guillermo.
__No, de nuevo, no. Ya lo hicimos en Europa, en Chile, ya
Guiie, somos grandes y tenemos seis hijos.
__ Es diferente, a ver, permitidos, ahora nos daremos permitidos.
__ ¿Y eso qué sería? __interrogó Pedro no convencido.
__Permíteme que me enrede en los rizos de tu pelo, que a tu cintura me amolde y acomodarte en mi pecho, deja que en tus tempestades libre avance mi velero y que al vaivén de tus caderas mi cordura pierda el miedo.
__Permíteme que en tus brazos la vida cambie de rumbo, que no requiera más nada que de tu voz el arrullo, que a la luz de tu mirada se combinen nuestros mundos y dócilmente mis besos se intercalen con los tuyos.
__Permíteme que deguste el perfume de tu piel, deja que
sacie en tus mares de sus aguas esta sed, que bese desde tu frente hasta tus
pequeños pies y me aprenda de memoria tu anatomía a placer.
__Permíteme descubrir esos misterios de tu alma, en los
que quiero asomarme y caminarles descalzo, para adherirme a su esencia y así
poder ser la causa que los inquiete y
motive como el sol a las mañanas.
__Permíteme que inaugure el augusto recorrido que viaja desde tu pecho a donde nace tu
ombligo, que transite por tu cuello y murmure a tus oídos y después encuentre
sendas que lleven a nuevos destinos.
__ ¿Lo llevamos a la práctica? Hace frío acá.
Hoy te quiero decir algo tal vez te pudo haber tocado como a mi paso, la verdad es algo indescriptible, es algo sorprendente y a veces no sé cómo describirlo. Pero existen en el mundo personas como estas, tal vez estén ahí y tú no lo sepas; tal vez no puedas percibir su presencia por más que estén tan cerca pero de que existen, existen. Son seres que a veces están ocultos entre las sombras por ser como algunos los llaman "diferentes". Pero ¿sabes algo?, ellos son más que eso, son seres de luz, son seres especiales, porque cuando te llegan a la vida te la cambian totalmente. Son personas muy difíciles de encontrar o que te lleguen pero a veces se tienen que ocultar porque nosotros mismos los discriminamos por hacer o pensar diferente, pero cuando te llegue a la vida, una conexión tan grande habrá habido entre ustedes y ya no podrás dar marcha atrás por más que quieras hacerlo. Porque si lo haces te puedes arrepentir o hasta te podría dejar un gran vacío en tu ser. Y la verdad no pretendas hacerlo, porque eso te pasará, llegará a tu vida sin que lo planees, sin siquiera pensarlo. Aunque muchas veces mientras en tu soledad lo pedías, no sabías si eso se daría en algún momento y hoy ha llegado el momento de que lo sepas, sin lugar a duda será tu persona favorita, tú persona mágica. Tú eres eso para mí, es lo que fuiste cuando estaba llegando al otro lado y es lo que eres en la vida cada día.
Siempre espero las
mañanas de terciopelo para acariciar
tu hermoso pelo, quiero sentir tu
respiración en mi oído, poner tu rostro hermoso en mis hombros. Haz una tempestad de pasión en mis labios. Bésame hasta quedar sin aliento, detén mi corazón que está que se me sale del pecho al escuchar tu voz, siente que la pasión estalla, llévame a la gloria de estar junto a ti, en un parque en el silencio del atardecer, tomados de las manos sintiendo cada suspiro tuyo, al sentir mis palabras llenas de amor por ti. Qué divino es estar junto a ti entre flores oliendo el aroma de las rosas que son mi perdición por ti.
No quiero detenerme aquí, quiero estar siempre cerca de ti. Besar tus labios color rojo pasión, es por esto que estoy aquí, para amarte solo a ti. Sintiendo tu cuerpo temblar
con mis besos entregados con amor.
¿Sientes el calor que me da el valor de vivir siempre junto a ti? Llévame al éxtasis del amor, con besos eternos, que me hacen ver todo lleno de amor, es porque tú estás junto a mí, eres mi pasión, mi perdición cuando siento tu suave piel junto a mí.
respiración en mi oído, poner tu rostro hermoso en mis hombros. Haz una tempestad de pasión en mis labios. Bésame hasta quedar sin aliento, detén mi corazón que está que se me sale del pecho al escuchar tu voz, siente que la pasión estalla, llévame a la gloria de estar junto a ti, en un parque en el silencio del atardecer, tomados de las manos sintiendo cada suspiro tuyo, al sentir mis palabras llenas de amor por ti. Qué divino es estar junto a ti entre flores oliendo el aroma de las rosas que son mi perdición por ti.
No quiero detenerme aquí, quiero estar siempre cerca de ti. Besar tus labios color rojo pasión, es por esto que estoy aquí, para amarte solo a ti. Sintiendo tu cuerpo temblar
con mis besos entregados con amor.
¿Sientes el calor que me da el valor de vivir siempre junto a ti? Llévame al éxtasis del amor, con besos eternos, que me hacen ver todo lleno de amor, es porque tú estás junto a mí, eres mi pasión, mi perdición cuando siento tu suave piel junto a mí.
La vida empezó en tu beso, en tu aroma, en tu cuerpo, en el despertar al amor, al sentir tu humedad, al cabalgar de cuerpos, al gemido de felicidad, al morir en cada entrega. Literalmente al estallar el terremoto.
Eso es la vida, la verdadera, la que habita en el corazón, en el verbo del amor, de amar, de sentir emoción al verte, al querer oír tu voz al extrañarte sin saber por qué razón.
Eso es la vida, la alegría, la necesidad que no tenía, como tampoco vivía, no era vida la mía, no era sentir el viento, la lluvia, el amor, el deseo, el espacio en que me pierdo cuando a tu lado me encuentro, cuando estás conmigo, el infinito es eterno. Y vivo, y siento, y deseo, y espero, y me despojo de mis miedos, tan solo con sentir tu aliento, que me eleva al cielo.
Eso es la vida, la verdadera, la que habita en el corazón, en el verbo del amor, de amar, de sentir emoción al verte, al querer oír tu voz al extrañarte sin saber por qué razón.
Eso es la vida, la alegría, la necesidad que no tenía, como tampoco vivía, no era vida la mía, no era sentir el viento, la lluvia, el amor, el deseo, el espacio en que me pierdo cuando a tu lado me encuentro, cuando estás conmigo, el infinito es eterno. Y vivo, y siento, y deseo, y espero, y me despojo de mis miedos, tan solo con sentir tu aliento, que me eleva al cielo.
Un beso. Quiero comerme un beso tuyo, disfrutar el sabor de tu boca, la delicia de sentir cómo se deshacen tus deseos,
atrapar tus pensamientos, cuando lo sienta. Quiero viajar en tus labios,
deslizarme profundo, emprender el viaje a lo desconocido, arriesgar el alma en
el intento por sentir un instante el
paraíso. Es verdad, quiero conocer el
cielo, que me lleve sobre sus alas, cuando sienta tus labios en mi cuerpo.
Perder la vida dentro de ese beso,
desaparecer en ese momento, convertirme en parte de tus besos. Saborear
la muerte en el intento, porque estoy seguro que mi corazón, no saldrá vivo de
este deseo, mi alma está dispuesta a entregar todo, si en este beso encuentro
el Amor eterno.
Y en el beso se llenaron de susurros, de esos que hacen
perder el sentido y cantando al oído susurraron esos te amo que erizan la piel,
minutos de felicidad y calma robados a la noche, cuando llegaron sin hacer
bullicio entrando a los sueños convirtiéndose en protagonistas de las pasiones.
Cada uno hizo del otro su marioneta, guiando los movimientos, la lengua suave y
profunda supo de travesuras nocturnas escuchando cómo más respiraciones se
hicieron entrecortadas, mordisqueando las orejas, susurrando deseos, amaron la
noche, las caricias fueron del otro, se sintieron en cada rincón del ser, se
envolvieron la dermis con la misma piel, la oscuridad de la noche fue la máscara
que cubrió el rostro , y aunque no
pudieran verse, supieron que estaban presentes, sintieron llenar de susurros
los anhelos en derroche.
__Te siento y sé que estás aquí.
Era un día normal como cualquier día, te vi solo despertar. Ahí pensé que han sido muchos días que no nos hemos sentado a conversar. Te pedí ver una película, y en tu rostro vi mucha pasión, entendí que te había olvidado y hacía falta un día de acción. Empecé a tocar tu cabello, pude sentir ahí tu ansiedad, sentí duros tus pezones y me los puse a besar. Bajé poco a poco a tu vientre, fue una dicha beber tu elixir, pues fueron torrentes de néctar de los que me pude deleitar. Fue un día corto el nuestro, pues esas horas fueron cortas, porque bebí mucho de tu boca y tu cuerpo calmó mi ansiedad.
Quiero repetir de nuevo el día. Quiero saber si gritabas,
porque llegabas al clímax total.
Quiero que arañes de nuevo mi espalda y así poder saber que eres mío y de nadie más.
Quiero que arañes de nuevo mi espalda y así poder saber que eres mío y de nadie más.
__Me encantas con tus kilos de más y tus curvas de menos.
Me encantas con tus arrugas en tu piel, y tu alma suave como seda. Me encantas
con tu sexo pletórico de pasión, de deseo, de lujuria. Me encantas cuando tiras
tus dudas al piso y tus miedos por la ventana.
Me encantas cuando empiezas el juego de seducción y armamos
este bello rompecabezas, al acoplarnos simétricamente en una danza de lujuria y
sexo.
Me encantas, por ser una belleza de pies a cabeza,
deteniéndome un rato en tu corazón. Me encantas por ser único, irrepetible,
indescifrable, incógnito, de extraña belleza, por la magia que destilas en cada
movimiento al andar, seguro de ti mismo, seguro de que te deseo más que a nada
y no hago otra cosa que miles de fantasías en mi mente, para llevarlas a cabo
en tu cuerpo, porque no hay mejor seducción que tu sonrisa tierna, tu
mirada candente y tu mente perversa.
__ Delicias son tus labios que muerden los míos. Benditos
tus besos que me dejan sin aliento,
gloriosa tu lengua que me lleva al infierno, celestial tu sexo que me eleva al cielo.
Sublime el estallido agudo y agonizante de mi orgasmo. Maravilloso es este momento en que me convierto... en lo más sagrado, pecado de tu cuerpo.
gloriosa tu lengua que me lleva al infierno, celestial tu sexo que me eleva al cielo.
Sublime el estallido agudo y agonizante de mi orgasmo. Maravilloso es este momento en que me convierto... en lo más sagrado, pecado de tu cuerpo.
Llegaste a mi cuerpo sigilosamente, primero con sutileza
saludando una que otra vez de lejos, luego ya cuando te presentaste tu cercanía
me inquietaba, me ponía de nervios, esa confianza tuya de tomarme la cintura y
saludar con dos besos.
Tu olor al acercarte me provocaba, ya me había fijado en
tu aspecto, en tus manos tan suaves y me atraía esa carita tuya de niño malo,
tu risa pícara y descarada me apasionaba, el solo rozar tu piel me producía una
descarga de electricidad.
Cuando quedamos en esa cita que me tomó por sorpresa, créeme por dentro ya me sentía tu presa, pero tenía miedo o quizás era la anticipación de saber la atracción que me causabas, me excitó tu voz al momento de pedirme que te acompañase.
Cuando quedamos en esa cita que me tomó por sorpresa, créeme por dentro ya me sentía tu presa, pero tenía miedo o quizás era la anticipación de saber la atracción que me causabas, me excitó tu voz al momento de pedirme que te acompañase.
Pasamos a mi casa y no pensé que fuera a caer tan fácil,
me tomaste por sorpresa, me abrazaste por la espalda y me besaste, esos besos
fueron mi perdición, disfruté cada toque, cada beso, cada caricia y la rapidez
y habilidad para tenerme como querías, bebí de tu semilla, me besaste hasta la
sombra, me hiciste sentir cosas en lugares que yo mismo no sabía que podías
excitar, esa manera tan tuya de poseer mis sentidos es lo que me tiene loco, no
hay nada que no se nos ocurra que dejemos de hacer y juntos descubrimos cada
vez.
__Ese primer encuentro en Chile no se me borra de la
mente y me gusta hacerlo contigo cada vez que estamos solos, en los sitios
menos pensados, nos saltamos todas las reglas de moral y de principios, pues
nos hemos amado y aún a este tiempo no encontramos alivio a este delirio de
poseernos cada vez que podemos.
Estoy ahora mismo esperando que llegues por mí, pero me
he asegurado que no haya nadie más, porque es seguro que me tomarás en esta
misma mesa de donde escribo y que si no lo haces tú, seré yo el que te posea,
el que haga de ti mi presa.
__
Cuando entraron al camarote en ese amor olvidaron el mar,
el paisaje, la noche, el mundo detenido, sus hijos y nietos, sus profesiones. Durante el resto del viaje
solo pensaron en sí mismos y en que se iban a entristecer al llegar la hora del
regreso.
__Bonitas minivacaciones ¿verdad amorcito?
__Desde luego _contestó Pedro.
__Me gustaría pasarme toda la vida con vos haciendo lo
mismo.
__No lo creo, Graziani, acabarías volviéndote loco.
Dentro de una semana ya estarías metido de lleno en un juicio y me dirías que
todo es una calamidad, y empezarías a tirarte de ese hermoso pelo negro que
tienes. Sin todo eso y sin las peleas del estudio, no podrías soportar el
aburrimiento. ¿A qué no?
__Bueno, es que aún no tengo edad de retiro, pero algún
día…, me dedicaré a cuidarte, a protegerte, a vos y a los niños, que si
continuamos serán decenas.
__Ya me dirás cuándo.
__Lo haré _ contestó él, mirando a su marido con
determinación.
__Siente mi piel con tus manos, provocaré mil latidos, te
erizaré la piel con la miel de mis
labios, vuélveme loco con tus
morbosas y ardientes caricias, aprisióname a tu cuerpo, déjame seducirte
un poco, calma mi sed con tu boca, encarcélame en tu locura. Ábreme tu alma, déjame sin aliento, quiero ser
tu bello tormento, quiero que me estremezcas por completo, hasta perder la
razón, hasta que desnudes tu cuerpo completo.
Sedúceme sin piedad, quémame el alma con tu deidad, tómame mi piel, desliza tus manos suavemente en todo mi ser, te pertenezco en cuerpo y alma, aniquila todo esto, soy tu pecado, tú mi seducción, déjame exhausto, hasta enloquecerte, hasta dejarme sin razón, tortúrame, entre tu infierno y tu paraíso, no tengas compasión y hazme el amor, no tienes escapatoria, porque eternamente mío serás, y no te dejaré escapar ni un segundo, solo sedúceme, solo tómame, dueño, solo disfruta toda mi esencia, que yo disfruto de la tuya.
Sedúceme sin piedad, quémame el alma con tu deidad, tómame mi piel, desliza tus manos suavemente en todo mi ser, te pertenezco en cuerpo y alma, aniquila todo esto, soy tu pecado, tú mi seducción, déjame exhausto, hasta enloquecerte, hasta dejarme sin razón, tortúrame, entre tu infierno y tu paraíso, no tengas compasión y hazme el amor, no tienes escapatoria, porque eternamente mío serás, y no te dejaré escapar ni un segundo, solo sedúceme, solo tómame, dueño, solo disfruta toda mi esencia, que yo disfruto de la tuya.
Tatúa tus caricias en mi piel, déjame sentir tus
suspiros. Calma mis ganas caprichosas a tu antojo, con tu ternura. Déjame
probar el sabor especial de tu aroma, te necesito con locura.
Tus besos hacen que me olvide de todo, mi amor, te amo con locura nunca lo olvides.
Te deseo, déjame amarte hasta el amanecer. Tu piel y mi piel en gran entrega, nos iremos y nos vendremos en tanto amor.
Nuestros cuerpos disfrutarán los más bajos instintos del placer, alrededor de la cama volarán como mariposas. Tú y yo desnudos cabalgaremos al viento, y algo más.
Tus besos hacen que me olvide de todo, mi amor, te amo con locura nunca lo olvides.
Te deseo, déjame amarte hasta el amanecer. Tu piel y mi piel en gran entrega, nos iremos y nos vendremos en tanto amor.
Nuestros cuerpos disfrutarán los más bajos instintos del placer, alrededor de la cama volarán como mariposas. Tú y yo desnudos cabalgaremos al viento, y algo más.
Seré tu anhelo, esas ansias humedecidas que acarician mi
reflejo en lo profundo de tu mirada, ese silencio que abrazas cuando gritas en
la oscuridad tus deseos incontrolables, ese suspiro que desgarras en los besos
que brotan de tus labios ardientes, ese fuego que respira las brisas febriles
en la cima de tus pezones, y rescataré
tu alma de las cenizas hirientes de un recuerdo que yace en el olvido del
tiempo.
Y cuando las sábanas se aquietaron en aquella noche de
placer, vi tu alma a través de tus ojos, con una voz muy tierna y sujetándome
la mejilla dijiste. Hubiera querido
conocerte unos años atrás. En ese
momento sentí lo mismo que tú y mirando cómo brotaba una lágrima sobre tu rostro,
te abracé y te pregunté, ¿y eso?..., es que me salió del alma, contestaste.
Te anclas con fuerza a mi cuerpo y yo hago lo mismo al
tuyo, nos arrastra esta furia natural, incapaces de luchar contra este torrente, por él nos
dejamos llevar, inmersos en un torbellino de pasión nos encontramos, la razón y
la cordura de nuestras mentes han escapado y solo nos queda aferrarnos a los sentidos para
pasar esta furia que nos envuelve.
Siento tus uñas rasgando mi espalda cuando buscas retomar
el aliento y en ese momento son tus ojos los faros que iluminan más allá de los
míos, cegando mi pedida razón, diciéndome con la mirada lo que en palabras no
alcanza… y me llevas a beber tu respiración… y me ahogo en el ardiente aire de
tu boca.
Perdido… en un instante de lucidez me veo perdido, sin
hallar el horizonte en este cálido mar que es tu cuerpo, solo navegan mis besos
impulsados por los sentidos enloquecidos por el deseo, mis caricias reman
suaves provocando un lento oleaje que tu piel estremece… no tengo destino fijo
navegando en ti, solo me dejaré arrastrar por esta tempestad natural que nos
atrapó.
Desorientados por propia voluntad, nos fugamos del mundo
real, solo existe para nosotros este tiempo, este espacio, en el que
despertamos la tempestad más esperada, más deseada por nuestros cuerpos y donde
nuestras almas enamoradas se confunden en una sola luchando tan solo porque
esta tormenta nos consuma y sentir que cada parte de nuestro ser se inundó de
este amor verdadero.
Perdidos en este universo finito que es nuestro lecho
entre cielo y mar, tierra y aire, lo eres todo en y para mí y has desintegrado
la inmensa nada que me abrazaba… tan solo me queda entregarme por completo a
tus corrientes y tus aires, dejarme consumir por completo en ti, que por
siempre este amor que arde en mí, sea tu sustento.
__Hoy siento que la vida, me da mil oportunidades, para
seguir en este laberinto, lleno de alegrías y a veces de necedades.
La vida me lo ha dado todo, lo malo, lo bueno, y hasta esos minutos dulces entre los aromas de un te quiero.
La vida me lo ha dado todo, lo malo, lo bueno, y hasta esos minutos dulces entre los aromas de un te quiero.
Qué sería de mi pobre corazón, sin la brisa que azota el
viento, sin el atardecer dorado y sincero, sin el renacer de las rosas, en esas
alegres primaveras, o sin que mis ojos vean, las noches llenas de luminosas
estrellas.
A veces, mi corazón revolucionario se llena de sonidos
extraños, sueltan las mariposas que revolotean cerca de mi alma, y mi corazón
se estremece, entre el latir de mis entrañas,
que se adentran sigilosamente en los valles de mi alma.
que se adentran sigilosamente en los valles de mi alma.
A veces, sueño con miles de palomas blancas, que tiñen el
cielo de alegría y esperanza.
A veces, son blancos cerezos, y cuando me siento cerca de ellos, se convierten en frutas maduras, ahuyentando mis locuras.
A veces, son blancos cerezos, y cuando me siento cerca de ellos, se convierten en frutas maduras, ahuyentando mis locuras.
Hoy, navego en el silencio, en ese navío que no llega a
ningún puerto, que se va deteniendo en sus propios miedos, y cuando alcanza las
olas, se siente mareado y lleno de matices en solitarios momentos.
Una tenue luz te acaricia, y desde lejos te admiro
con la mirada, el silencio nos envuelve, como las primeras sombras de
este atardecer, me miras y te miro, sonríes, mientras las olas bañan la
arena y tus descalzos pies, más que cosas de la vida, el destino quiso
juntarnos
a ver esta puesta de sol y mientras las gaviotas volaban a nuestro alrededor, seguimos en silencio, observando cómo la noche comienza lentamente a llegar, de reojo veo que sigues mirándome, mas no sé cómo romper ese silencio, solo atino a acercarme paso a paso,
y en un segundo estamos prácticamente pegados, en esa playa, mirando el anochecer y dejándonos abrazar por la brisa del mar, una mano se acerca a la otra, una sonrisa pícara lleva a otra sonrisa y sin darnos cuenta comenzamos a seducirnos bajo la tenue luz de una luna cómplice.
a ver esta puesta de sol y mientras las gaviotas volaban a nuestro alrededor, seguimos en silencio, observando cómo la noche comienza lentamente a llegar, de reojo veo que sigues mirándome, mas no sé cómo romper ese silencio, solo atino a acercarme paso a paso,
y en un segundo estamos prácticamente pegados, en esa playa, mirando el anochecer y dejándonos abrazar por la brisa del mar, una mano se acerca a la otra, una sonrisa pícara lleva a otra sonrisa y sin darnos cuenta comenzamos a seducirnos bajo la tenue luz de una luna cómplice.
__Te pienso, te sueño y mi soledad se llena de ti, otra
noche soñándote, mi alma y mi cuerpo,
te echa de menos y en mis días te busco impacientemente y en mis noches,
te deseo, te veo, te siento, pero tú no estás allí, y aunque mi piel, huele a tu perfume, por las noches escucho tu respirar y siento el calor de tu cuerpo abrigándome, y tus manos acariciándome, pero realmente, cuando el amanecer llega, te busco y tú no estás, te he soñado toda la vida y aún te sueño en esos momentos en que no estás a mi lado.
Si la noche hablara te diría lo que significan tus besos, si la luna hablara te contaría cómo te extraño, que el sol llega y, yo aún te pienso. Si el viento hablara te diría que eres mi fuerza, mi centro, mi motor. Pero no hablan y solo hay silencio atroz, mi boca te diría te amo pero no estás, cuando llegas quedo mudo de la emoción, solo te abrazo y se juntan la luna, el viento, la noche para amarnos sin hablar. No hace falta la palabra, son los sentimientos que son libres para volar, son mis ojos que te miran con amor. Es el corazón que loco galopa a tu encuentro para con su latir decirte lo que siento.
Hablar no hace falta, solo quiero sentir tu respiración sobre mí. Detener el reloj y quedarme así abrazado sin hablar, con el latir de los corazones al unísono.
te echa de menos y en mis días te busco impacientemente y en mis noches,
te deseo, te veo, te siento, pero tú no estás allí, y aunque mi piel, huele a tu perfume, por las noches escucho tu respirar y siento el calor de tu cuerpo abrigándome, y tus manos acariciándome, pero realmente, cuando el amanecer llega, te busco y tú no estás, te he soñado toda la vida y aún te sueño en esos momentos en que no estás a mi lado.
Si la noche hablara te diría lo que significan tus besos, si la luna hablara te contaría cómo te extraño, que el sol llega y, yo aún te pienso. Si el viento hablara te diría que eres mi fuerza, mi centro, mi motor. Pero no hablan y solo hay silencio atroz, mi boca te diría te amo pero no estás, cuando llegas quedo mudo de la emoción, solo te abrazo y se juntan la luna, el viento, la noche para amarnos sin hablar. No hace falta la palabra, son los sentimientos que son libres para volar, son mis ojos que te miran con amor. Es el corazón que loco galopa a tu encuentro para con su latir decirte lo que siento.
Hablar no hace falta, solo quiero sentir tu respiración sobre mí. Detener el reloj y quedarme así abrazado sin hablar, con el latir de los corazones al unísono.
__ ¿Quieres que hablemos de nuestros hijos ahora que
estamos a solas? __propuso Pedro.
__Quiero que tengas ese hijo, cielito, es importante para
vos, es ser padre lo que te completará.
__Y yo no quiero hacerte pasar por el estrés en que
estuviste por tu nieta y Betsy, pese a que no eran nuestros.
__ ¿Por qué no?
__Porque te amo demasiado _dijo Pedro abrazándolo y
besándolo__. Eres lo único en mi vida, no necesito de más para ser feliz. Ahora
mismo mi férrea decisión de no volver a hacer el amor empieza a derretirse como
lava ardiente, en cuanto siento tu lengua en mi boca, instintivamente empiezo a
acariciarte, y ya no necesito más, y quizá no podemos tener más hijos.
__Pero sí podemos, Pedro. Te quiero con todo mi corazón y
no voy a hacerte eso.
__Y yo no destrozaría tu vida, ¿de veras quieres tener
quizá de nuevo trillizos o mellizos?
__Sí _ confesó Guillermo. Acababan de pasar horas
amándose, y era cierto. Había pasado noches en vela pensándolo. Otros hombres
se habían casado con mujeres a las que doblaban en edad, y otros tenían una
docena de hijos. No era lo peor que podía ocurrirle__. Quizá solo sea uno.
__Está bien, en cuanto pasen los juicios de los
violadores, lo haremos si Moni está de acuerdo, cuando sea el parto, deberíamos
tener lista la ampliación del estudio, quizá los trillizos ya mayorcitos y adaptados a esa mamá que están
eligiendo, pero deseo la inseminación mixta, no aceptaré otra cosa, no
discutas.
__Está bien, acepto.
¿Te has puesto a pensar lo grandes que están las nenas?
Belén y Paula, digo. Hemos tenido demasiada suerte con ellas o aún no
comenzaron los dramas creo.
__No lo preveas, no son chicas problema, no fueron
abandonadas de bebés, tienen a sus abuelos, conservan lazos de familia, no
inventes fantasmas. Son todos chicos sanos, amor. Y también lo serán
Guillermito y Diana, porque Fabián y Valeria son padres amorosos.
__Eso espero, y que esté cuidando de los demás ahora
mismo. Se va a recibir a fin de año al menos y eso lo favorece para estar más
libre.
¿Recuerdas cuando nos comprometimos en este yate?
__Recuerdo tu locura de regalarme la alianza a dos meses
de llegar, claro. Y te quiero más que entonces _ dijo Pedro al tiempo que se
inclinaba para besarlo.
Se besaron con ternura, con tanta dulzura que sus cuerpos
parecieron fundirse el uno en el otro.
__Me vuelves loco como la primera vez.
__Me alegro.
¿Quieres que probemos el agua de la piscina? La hice
calentar.
__Me parece muy bien.
Pedro se tomó la molestia de colocarse un bañador,
sonriendo al recordar las peleas por el tamaño en Brasil año atrás o más y se
lanzó de cabeza al agua mientras Guillermo contemplaba su aterciopelada piel.
Era tan hermoso que dolía lejos del pequeño que fue que solo existía para ser
maltratado y esconderse en su habitación.
Pensando en cómo lo conociera, se desnudó y se lanzó al
agua.
Nadaban como delfines bajo el agua y después emergían a
la superficie, y se asían por la cintura. Poco a poco, Guillermo lo atrajo a
Pedro hacia sí. Ya no podía resistir más. Lo deseaba demasiado. Los cuerpos de
ambos se juntaron mientras él le acariciaba el cuello y la espalda y le besaba
con dulzura. Lo acompañó fuera de la piscina, lo envolvió en una toalla, y lo
llevó al interior del camarote, eso deseaba, tenerlo para él a toda hora, estar
desnudos en alma y cuerpos haciendo el amor sin pensar en nada más, ser
egoístas por esos días. Ya no quedaba nada por decir con palabras, ya no podía
seguir hablando, pensó, dirigiendo una sonrisa al adonis tendido en la cama.
Contempló su propio cuerpo todavía firme, sus duros músculos y sus fuertes
piernas, y pensó que, un día, podrían tener ese nuevo par… de hijos. Sin
embargo en ese momento no le interesaban los hijos que tendrían sino solamente,
Pedro. Lo besó y lo acarició con ternura, y él creyó recordar una especie de
amor jamás conocido en realidad hasta que ya no pudo resistir y los cuerpos
volvieron a fundirse en uno solo. Al contacto con el suyo, todo el cuerpo de
Pedro se arqueó y onduló de placer y ambos parecieron danzar durante mucho
rato, elevándose hacia el cielo hasta estallar, por fin, como un sol de
radiante fulgor.
__Con vos con el tiempo aprendí, que no se juega con la
vida, hay momentos que entiendes que ya no es un pasatiempo, te lo hace saber, inaudita, inesperada, solo
en un momento
sentida tristeza yerma y vuelas, sin el tiempo a despedidas.
sentida tristeza yerma y vuelas, sin el tiempo a despedidas.
Perdido en soledad, en la bruma
misteriosa, en cruel martirio se ve un crepúsculo
que se ahonda poco a poco, en la noche
desolada y extraviado sientes el halo
frío de su presencia no esperada y tu conciencia embravecida te incita a la
lucha, convencido.
Y rechazas su sombra oscura que
te hiere el alma con su frío aferrado tenazmente a la vida, fuerza que renace,
y vencerla. Otras veces ya lo hiciste y le ganaste, con dureza y entereza, ya sabes que el amor te protege, tu conciencia
lucha con vos.
Ya estás tranquilo, el peligro
que te lleve por ahora ha pasado y ella muerde el polvo con rabia, te busca con
ojos enrojecidos. Pero no esperes que su próxima visita, se pierda en el olvido
eterna y paciente en ella tiempo y espera, la tiene sin cuidado. La vida y el
amor, son dos obras maestras del ser humano. El amor sobrevive por siempre. No puede con él, ni la muerte. El amor
resiste, y ya lo hemos comprobado, lo que apenas aparece casi olvidado, es lo
que vivimos en otra vida, no tengo dudas de que en este viaje hemos muerto y
renacido muchas veces, solos o juntos en la misma vida.
__Ven… escapa del desierto que
vive tu piel sin mis caricias… deja que el amor corra bajo esta lluvia al
encuentro de los corazones tan ansiados de armarse… que cada gota alimente el deseo de por amor perder la razón y mojados
los cuerpos al deliro escondido entregarse.
Ven… deja que mis besos se
beban cada gota de lluvia que corre por tus labios y alimente así mi alma
sedienta por tu amor… bébeme y déjame beberte en cada gota de agua mezclada con
gotas de este delirio que es desearte… déjame así con tus mojadas prendas
amarte.
Fúndete a mi piel en esta noche
mojada… dejemos que el fuego de esta pasión oculta, nos evapore, nos consuma,
nos vuelva rocío para en la madrugada volver, en penumbras a entregarnos al
delirio, hasta bebernos cada gota de este amor que funde nuestro corazón.
Ven… escapa a esta locura de
amarnos, ocultemos este amor bajo esta fría lluvia, como dos locos enamorados
escapando de esa prisión, ese martirio
que es no tenernos en alma, en piel… que el cielo de esta noche nublada nos
oculte de todo y de todos bajo una misma gota de pasión.
Ahora que las bocas acarician
olvidos he latido vida más allá de mis muertes, lágrimas duermen en el regazo y amanecen
sueños entre las ruinas. Ahora que la herida no adolece he hallado eternidad en
una mirada, esperanza oscilando cielos azules, savia nueva para mis horas secas. Ahora que
los miedos no encarcelan he salido a caminar por tu sonrisa y la rosa no es tan
solo espinas, la coraza perdió toda su valía. Ahora que el presente exilió
tristezas he coloreado soledades a suspiros, huir de tu piel ya no es
estrategia ahora que somos sustantivo sin etiqueta. Habito en el límite de tus
locuras, en leyendas que susurran duendes impacientes, de dos almas que
respiran deseos ardientes, seré tu lágrima forzada,
tu consuelo preferido, seré tu grito incontrolable en el lenguaje de tus gemidos, el río dulce que acaricia tus temores, las verdades que te ofrezco en las cauces de mis pasiones, la lluvia bendita que cae besando tus intimidades, ese ángel que busca la razón de tus deidades, la cura de tus lamentos que en la soledad compartimos, el crepúsculo en las noches donde nacen los suspiros, el sueño que esperas para sentir los latidos, que avivan los impulsos de un corazón malherido. Seré tu luna, tu sol, tu placer que provoca recuerdos inducidos por momentos agradables que entre tú y yo hemos vivido, seré el pecado que conquista todos tus sentidos, en una historia inolvidable contada por los dos.
tu consuelo preferido, seré tu grito incontrolable en el lenguaje de tus gemidos, el río dulce que acaricia tus temores, las verdades que te ofrezco en las cauces de mis pasiones, la lluvia bendita que cae besando tus intimidades, ese ángel que busca la razón de tus deidades, la cura de tus lamentos que en la soledad compartimos, el crepúsculo en las noches donde nacen los suspiros, el sueño que esperas para sentir los latidos, que avivan los impulsos de un corazón malherido. Seré tu luna, tu sol, tu placer que provoca recuerdos inducidos por momentos agradables que entre tú y yo hemos vivido, seré el pecado que conquista todos tus sentidos, en una historia inolvidable contada por los dos.
__
Me dediqué a escribir un rato mientras Guiie quedó
exhausto y dormido, y mi fantasía deambuló a otro encuentro, a cómo podría
haber sido algo casual no relacionado con el trabajo, y lo imaginé en un
ascensor de tribunales.
--Después de un primer excitante encuentro en la mente del escritor en la cual había sido mío completamente el hombre de mi sueño, y yo había sido completamente de él, me percato de la ironía de la historia.
Le había hecho el amor a un hombre apuesto del cual no sabía ni su nombre. Entonces tomo la decisión de dar el siguiente paso, acercarme a él detrás del escritorio en la recepción de su estudio, con el pretexto de ser un cliente más.
Pedro se levantó
con sigilo, encendió la cafetera y se
trasladó al estar para intercalar otra historia que leería luego a su amor, al
despertar.
Al día siguiente como parte de la rutina volvería a la biblioteca para investigar más sobre la musa de mi nueva historia, de mi nueva aventura en la vida. El cuál sería la causa perfecta para despertar del letargo al amante, al hombre seductor que moraba en su alma, su corazón y su piel. El cual vivía un invierno mortal a causa del desamor causado por una mujer u otro hombre imaginario, quien en su pasado fuese la mayor fuente de inspiración de sus obras impregnadas en el papel en las cuales a pesar de tanto amor y odio " El equilibrio perfecto de los sentimientos" que sentía por la doncella más hermosa que Dios en toda su sabiduría había creado en la historia de la humanidad que podría ser Camila pues fue la única antes de él, había sido rechazado, su amor y toda la pasión existente en su piel, por el simple hecho de ser imperfecto para ella.
Volviendo a la historia. Al haber pasado una semana de su primer encuentro en el cual solo sus miradas habían sido cómplices de la atracción mutua entre ambos.
En esta ocasión, no sería la recepción el lugar del encuentro entre ambos, sería en la puerta del ascensor, donde ambos esperaban para subir al quinto piso.
-- Hola mi dios hecho hombre. ¿Cómo estás?
-- Hola, muy bien gracias, ¿y vos?
-- Muy bien y más ahora que estoy en presencia del abogado más hermoso que mis ojos han visto. "Sus palabras causaron rubor en las mejillas de los dos y robaron una sonrisa de sus apetitosos labios" a lo que agregó también la pregunta que él mismo se había hecho por varias noches de insomnio.
__ ¿Cómo te llamas?
-- ¿Para qué quieres saber mi nombre? __le preguntó él.
A lo que respondió sin perderle la mirada.
-- ¿Para qué quieres saber mi nombre? __le preguntó él.
A lo que respondió sin perderle la mirada.
__ Porque me gustas mucho y desde que te vi he tenido esa
duda. Saber el nombre del hombre que me
hace delirar y al cual he decidido convertir en una de las musas de mi historia,
soy abogado, pero me gusta más escribir.
--¿Me hablas en serio?
--Sí, muy en serio, me atraes demasiado. Tanto como para desearte en mi piel por muchas noches.
--¿Me hablas en serio?
--Sí, muy en serio, me atraes demasiado. Tanto como para desearte en mi piel por muchas noches.
Él se volvió a ruborizar y le preguntó de qué se trataba la historia. A lo que Pedro respondió:
-- Es un secreto
que descubrirás al final.
Y dime ¿eres soltero?
-- Sí, o casi, divorciado hace mucho __le respondió con un aire de coqueteo y mirándolo a los ojos para que supiese que no mentía.
-- ¡Qué bien!, eso me gusta.
--¿Por qué?-- le preguntó Guillermo.
-- Porque estás libre, al igual que yo.
Y dime ¿eres soltero?
-- Sí, o casi, divorciado hace mucho __le respondió con un aire de coqueteo y mirándolo a los ojos para que supiese que no mentía.
-- ¡Qué bien!, eso me gusta.
--¿Por qué?-- le preguntó Guillermo.
-- Porque estás libre, al igual que yo.
Al salir del ascensor, ambos fueron a la recepción y de allí pasaron al despacho, donde el abogado se sentó tras el escritorio, y Pedro frente a él a espera de ser atendido en un supuesto caso.
__Tus ojos son la mezcla perfecta de lo divino y de lo
infernal __dijo Pedro y le guiñó el ojo anticipando
esta vez el encuentro de sus miradas lo cual le parecía ideal en esta ocasión
al escritor.
Ya que había conseguido lo que anhelaba por el momento, el nombre de la musa o muso si existía la palabra, de su primer aventura sexual. Hombre, mediana edad y lo haría suyo sin mentiras, sin contratos ni promesas de amor, en el momento indicado. Con lo cual liberaría a su alma y a su piel de los años de inhibición que guardaba por amor. Años en los cuales el deseo y la pasión fueron sustituidos por poesías para su villana e invaluable mujer, o por prejuicios a lo que presintió ser.
Camila y las palizas de su padre a través del dolor que causaron en su alma le hicieron aprender la verdad de las verdades. “La mujer es el regalo perfecto de Dios". " La mujer es amor, por lo tanto la mujer debe ser el Dios del hombre ", y que aquellos hombres que las vean solo como objeto de placer, usando al amor como trampa para gozar de su piel nunca serán merecedores de ser amados por una mujer, ni complacidos por ellas. Pero aquellos hombres que no mientan para saciar sus deseos más íntimos y que no usen al amor para la seducción serán los dignos de ser amados y complacidos por ellas. Porque su sinceridad y transparencia los hará dignos de los placeres en ellas ocultos con total libertad siempre y cuando ellas lo deseen." El buen amante solo la hará suya, cuando ella lo desee".
Ya que había conseguido lo que anhelaba por el momento, el nombre de la musa o muso si existía la palabra, de su primer aventura sexual. Hombre, mediana edad y lo haría suyo sin mentiras, sin contratos ni promesas de amor, en el momento indicado. Con lo cual liberaría a su alma y a su piel de los años de inhibición que guardaba por amor. Años en los cuales el deseo y la pasión fueron sustituidos por poesías para su villana e invaluable mujer, o por prejuicios a lo que presintió ser.
Camila y las palizas de su padre a través del dolor que causaron en su alma le hicieron aprender la verdad de las verdades. “La mujer es el regalo perfecto de Dios". " La mujer es amor, por lo tanto la mujer debe ser el Dios del hombre ", y que aquellos hombres que las vean solo como objeto de placer, usando al amor como trampa para gozar de su piel nunca serán merecedores de ser amados por una mujer, ni complacidos por ellas. Pero aquellos hombres que no mientan para saciar sus deseos más íntimos y que no usen al amor para la seducción serán los dignos de ser amados y complacidos por ellas. Porque su sinceridad y transparencia los hará dignos de los placeres en ellas ocultos con total libertad siempre y cuando ellas lo deseen." El buen amante solo la hará suya, cuando ella lo desee".
Y lo peor en él, Dios hizo al hombre y a la mujer, el
amor entre pares es abominable, según las normas de una sociedad como en la que
lo vio nacer, según sus padres, y la iglesia.
Después de su encuentro en el ascensor le pareció excitante plasmar su deseo en ese lugar. La idea de estar atrapado solo con él, le hizo delirar su segundo encuentro pasional.
El ascensor estaba a punto de cerrar sus puertas, cuando el escritor lo detuvo. Al entrar al ascensor se encontró con él.
Las puertas se cerraron y el aprovechó el momento para saludarlo.
-- Hola mi hermoso abogado, inspiración de los sueños prohibidos para este hombre.
-- Hola escritor loco. Le respondió riéndose y sonrojándose por las primeras palabras que le dijo.
-- Loco. ¿Por qué me dices así?
-- Por las cosas que me dices, precioso.
-- Pues no estoy loco, solo soy sincero. Tú me gustas y despiertas un inmenso deseo en mi piel.
-- Ves que si estás loco. Escucha lo que dices.
-- Bueno si estoy loco pero de deseo por ti.
En ese momento el ascensor se detuvo a medio camino. Se había ido el fluido eléctrico.
-- ¡Qué buena suerte¡ pensó él.
Al mismo tiempo que Guillermo llamaba para avisar que estaban atrapados en el ascensor. A lo cual le avisaban que la electricidad volvería en un par de horas. Que se mantuvieran tranquilos. Después de terminar la llamada Pedro le preguntó qué le dijeron.
-- Que la electricidad volverá en un par de horas, que tuviera paciencia.
En el rostro del escritor se dibujó una sonrisa maléfica acompañada de estas palabras.
--- ¡Huy qué buena suerte!
--¿Qué hay de buena suerte en quedarse atrapado en un ascensor? –Replicó el hombre.
-- Si me hubiera quedado atrapado solo, pensaría que es mala suerte. Pero quedarme atrapado con un hombre tan bello y sexy como tú, es más bien una bendición del destino, porque tú sabes que me atraes de cabeza desde que te conocí. Además es una gran oportunidad para conocerte y seducirte.
Guillermo se sonrojó y le correspondió con una sonrisa cómplice. La idea que el escritor quisiera saber más de él aparte de seducirlo en un lugar donde estarían por unas horas. Además de no estar solo atrapado en el ascensor como decía él no era tan mala suerte, aparte de que él también se sentía atraído por él.
--¿Qué hay de buena suerte en quedarse atrapado en un ascensor? –Replicó el hombre.
-- Si me hubiera quedado atrapado solo, pensaría que es mala suerte. Pero quedarme atrapado con un hombre tan bello y sexy como tú, es más bien una bendición del destino, porque tú sabes que me atraes de cabeza desde que te conocí. Además es una gran oportunidad para conocerte y seducirte.
Guillermo se sonrojó y le correspondió con una sonrisa cómplice. La idea que el escritor quisiera saber más de él aparte de seducirlo en un lugar donde estarían por unas horas. Además de no estar solo atrapado en el ascensor como decía él no era tan mala suerte, aparte de que él también se sentía atraído por él.
Pedro se sonrió al verse en la mente tan osado, si en
lugar del muchacho en pánico que no se sabía gay en La Toma, hubiese sido así,
como Matías quizás, es decir seguro de su deseo y capaz de lanzarse por su
objetivo, todo podría haber sido así, y se sintió divertido.
__Me encanta el argumento, cielito, ¿te ayudo? __le llegó
la voz y la caricia desde atrás, Guillermo con sigilo de felino no solo había
despertado sino que estaba besándole la coronilla espiando el escrito.
--¿A dónde te gusta que te acaricien?
-- No te voy a responder eso _replicó__. Y no preguntes cosas así.
-- ¿Entonces me dejas averiguarlo?
--No.
-- No te enojes Graziani. Me gustas, solo soy directo y quiero conocer tus secretos íntimos.
--Pero no te los contaré. Te quede en claro.
-- Está bien, no me los cuentes. Pero ¿puedo averiguarlos piel a piel?
Guillermo guardó silencio por unos segundos. En su mente imaginaba a ese hombre recorriendo su cuerpo, descubriendo los puntos exactos donde su alma y su cuerpo se conectaban a través del placer en un solo ser, llamado lujuria celestial. Esos puntos que el intrépido hombre a su lado, en el mismo ascensor en su interrumpida historia, en un yate en la real, deseaba descubrir. Lo cual provocó en él una corriente eléctrica que surcó desde su cerebro hasta su sexo.
--¿Me lo permites? __ Volvió a preguntar el osado escritor.
-- No. Debes ganártelo si quieres recorrerme.
-- ¿Cómo? _pregunto él.
- Vos dices que deseas seducirme. Entonces demuéstralo. No tengo que decirte cómo hacerlo. No soy tu maestro.
__Tienes razón. Tú eres mi alumno y hoy seré tu maestro.
Primera lección: Mira y no toques. Acto seguido Pedro puso una canción con el celular y comenzó a bailar para Guillermo.
Sus movimientos eran serpenteantes, de arriba hacia abajo, lentos y rápidos, y sus caderas se movían al danzar de las olas de un lado al otro sin prisas, con la sensualidad perfecta del movimiento. Mientras se iba desabrochando su camisa, dejando libre su pecho y torso.
Guillermo disfrutaba con la danza del macho, que bailaba para él. En su interior el fuego del deseo crecía constantemente y las ansias de sentir de cerca ese cuerpo, provocaban corrientes eléctricas desde su cerebro hacia su sexo. El latido de su corazón amenazaba con competir con los truenos de la tormenta que se avecinaba fuera y era el mismo que seguía por la sangre y se descargaba en su entrepierna.
Con sus manos Pedro se acariciaba desde su cuello,
mientras se desabrochaba la camisa, para acariciarse los pezones al mismo tiempo que se mordía los
labios.
Mientras su macho continuaba danzando desnudaba su cuerpo para él. Esta vez se desabrochó el pantalón y lo quitó de un tirón. Se recostó en la pared. Y el vaivén de sus caderas, se hizo más lento y combinado de un lado a otro, de arriba para abajo. Mientras su manos recorrían, dejando caricias en su cuerpo desde los pies a su cabeza. “El macho le mostraba cómo quería ser acariciado." Y su pene completamente erecto, mostraba su imponente presencia.
Guillermo continuaba acariciándose en espejo. Sus manos invadían sitios secretos sin darse cuenta. Se masajeaba con suavidad por encima de la ropa. Su respiración se agitada, con cada movimiento que su hombre hacía. El cual se acercaba lentamente, sin abandonar su suave danza, sin perderle la mirada en la cual le decía cuánto lo deseaba, se acercó hasta él y empezó a frotar su cuerpo desnudo, fuerte y vigoroso. Advirtiendo a su hombre que estaba prohibido acariciarlo y abrir los ojos. Que esta vez para ver la danza, debía sentirlo, hacerlo con los ojos cerrados. Que solo le estaba permitido respirar y sentir la danza que hacía en su cuerpo.
Mientras su macho continuaba danzando desnudaba su cuerpo para él. Esta vez se desabrochó el pantalón y lo quitó de un tirón. Se recostó en la pared. Y el vaivén de sus caderas, se hizo más lento y combinado de un lado a otro, de arriba para abajo. Mientras su manos recorrían, dejando caricias en su cuerpo desde los pies a su cabeza. “El macho le mostraba cómo quería ser acariciado." Y su pene completamente erecto, mostraba su imponente presencia.
Guillermo continuaba acariciándose en espejo. Sus manos invadían sitios secretos sin darse cuenta. Se masajeaba con suavidad por encima de la ropa. Su respiración se agitada, con cada movimiento que su hombre hacía. El cual se acercaba lentamente, sin abandonar su suave danza, sin perderle la mirada en la cual le decía cuánto lo deseaba, se acercó hasta él y empezó a frotar su cuerpo desnudo, fuerte y vigoroso. Advirtiendo a su hombre que estaba prohibido acariciarlo y abrir los ojos. Que esta vez para ver la danza, debía sentirlo, hacerlo con los ojos cerrados. Que solo le estaba permitido respirar y sentir la danza que hacía en su cuerpo.
Ahora su cuerpo estaba pegado al de él subiendo y bajando con más lentitud, la fricción entre ambos, aumentaba la temperatura en su encierro temporal, el aire cada vez era más cálido debido a la respiración agitada de ambos. Al bajar sus manos se quedaron sus pechos jugando, mientras con sus labios besaba, mordiendo y saboreaba al descender la piel hasta inquietar y estremecer la de sus muslos. Su lengua húmeda y tibia acompañaba a los labios en su recorrido. Guillermo y su geografía eran la guía del camino a seguir, la cual avanzaba por su entrepierna hasta llegar a su sexo en el cual esta vez, su lengua se detiene para lamer, deslizando el bóxer para empezar a chupar, al mismo tiempo, sus manos trazaron con caricias el camino hacia abajo de su cuerpo, detenidas en su vientre, el cual estrujaba con fuerza, cada vez que su lengua y su boca hacían contacto con sus objetivos. Lo cual hizo por pocos segundos, para continuar su danza, abandonando su sexo y siguió avanzando por su vientre hasta llegar a sus botones, blancos y tersos como el algodón. Mientras sus manos llegaron a sus muslos, para recorrerlos tan ligeramente que se volvieron tortura y castigo, Guillermo se deshizo en gemidos, lo que se inició espiando una historia se convirtió en un delirio erótico que reinventaba el amor entre ellos.
Estaba con sus ojos cerrados y acompañaba la danza del macho que lo llevaba al delirio del placer. Sus caderas danzaban de lado a lado.
__"!Dios, qué
rico! me está llevando al cielo, se
decía a sí mismo en sus pensamientos.
Acompañando sus pensamientos con gemidos de placer que incitaban
a su hombre a seguir con la travesía en su delicioso cuerpo.
Cuando él devoraba y succionaba sus claros pezones, sus manos estrujaban con fuerza sus muslos y sus uñas se incrustaban en su entrepierna.
Sus labios continuaron su camino en el cual se detuvieron para besar, lamer, morder su cuello antes de llegar atrás de su oído y susurrarle: " Eres mío, estás castigado", aún no puedes abrir los ojos, hasta que yo te diga. Pero luego invertiremos los roles.
Cuando él devoraba y succionaba sus claros pezones, sus manos estrujaban con fuerza sus muslos y sus uñas se incrustaban en su entrepierna.
Sus labios continuaron su camino en el cual se detuvieron para besar, lamer, morder su cuello antes de llegar atrás de su oído y susurrarle: " Eres mío, estás castigado", aún no puedes abrir los ojos, hasta que yo te diga. Pero luego invertiremos los roles.
Pedro inició el descenso hacia su sexo, pero antes
se detuvo en la boca, para besarle con
tal pasión, que su lengua envenenaba su garganta, al mismo tiempo sus dedos
invadían su sexo. Lo penetraban en su puerta de acceso a un ritmo acelerado,
alternando masajes sobre su umbría.
Mientras él seguía su descenso jugaba otra vez sobre sus pezones, mordiendo sus pezones erectos por la excitación. En cada mordida que le propinaba, él gemía con más intensidad y se aferraba con fuerza a las barras de metal que recorrían el lugar. El cual se había vuelto el lugar perfecto para que fuesen saciados sus deseos más íntimos.
Su entrepierna estaba bañada por las delicias de sus fluidos mezclados, ya fundida la piel en una, los cuales se escurrían por sus muslos, hasta llegar a sus pies. Se encontraba completamente perdido entregado al placer que su hombre le propinaba, con sus labios, su lengua y con los dedos que hurgaban en su interior.
Sus gemidos se hacían más intensos, más excitantes, lograron provocar a su macho avanzar con más rapidez hacia su objetivo.
El aroma de sus delicias intoxicó los sentidos de Pedro el cual reaccionó de la siguiente manera.
Lo alzó con sus brazos y lo subió sobre las barras de metal de las escaleras.
Ahí estaban, él de rodillas y su esposo postrado sobre las barras de metal con sus piernas extendidas. Con su boca devoraba, la lengua jugaba, hacía magia. Le ordenó abrir los ojos y mirarlo a los propios. Guillermo lo hizo. Él se sintió complacido y le dijo: soy tu esclavo, tú eres mi dueño ahora.
Mientras él seguía su descenso jugaba otra vez sobre sus pezones, mordiendo sus pezones erectos por la excitación. En cada mordida que le propinaba, él gemía con más intensidad y se aferraba con fuerza a las barras de metal que recorrían el lugar. El cual se había vuelto el lugar perfecto para que fuesen saciados sus deseos más íntimos.
Su entrepierna estaba bañada por las delicias de sus fluidos mezclados, ya fundida la piel en una, los cuales se escurrían por sus muslos, hasta llegar a sus pies. Se encontraba completamente perdido entregado al placer que su hombre le propinaba, con sus labios, su lengua y con los dedos que hurgaban en su interior.
Sus gemidos se hacían más intensos, más excitantes, lograron provocar a su macho avanzar con más rapidez hacia su objetivo.
El aroma de sus delicias intoxicó los sentidos de Pedro el cual reaccionó de la siguiente manera.
Lo alzó con sus brazos y lo subió sobre las barras de metal de las escaleras.
Ahí estaban, él de rodillas y su esposo postrado sobre las barras de metal con sus piernas extendidas. Con su boca devoraba, la lengua jugaba, hacía magia. Le ordenó abrir los ojos y mirarlo a los propios. Guillermo lo hizo. Él se sintió complacido y le dijo: soy tu esclavo, tú eres mi dueño ahora.
-- Cállate, no te he dado permiso de hablar __le ordenó Guillermo.
Lo tomó por el cabello y lo pegó a su umbría ordenándole.
__Succiona, hazlo hasta que estalle mi amor y placer en
tu garganta e invada tu sangre.
Él no podía hacer nada debía obedecer a su dueño.
Así que continuó devorando, bebiendo, lamiendo y con sus dedos invadió su ano. Lo cual generó un suspiro alucinante en su amo. Se encontraba a punto de explotar por lo cual le ordenó a su esclavo abrir la boca y beber cada gota que emanaría de sus entrañas.
Así que continuó devorando, bebiendo, lamiendo y con sus dedos invadió su ano. Lo cual generó un suspiro alucinante en su amo. Se encontraba a punto de explotar por lo cual le ordenó a su esclavo abrir la boca y beber cada gota que emanaría de sus entrañas.
__Quédate quieto __ le ordenó. Se detuvo por un segundo
que fue eterno para su sirviente postrado ante él. Entonces con un alarido
celestial que emanó desde su alma la explosión fue inminente. De su fuente emanaba a cántaros el delicioso ser vivo que su esclavo obedientemente bebía con
total placer. Guillermo se desvaneció
cayendo al suelo. El clímax alcanzado superó los límites de sus experiencias anteriores.
Al reaccionar su esclavo estaba a su lado, con una sonrisa y su cuerpo completamente bañado por el vino sagrado que había emanado desde él. Entonces se acercó y le susurró al oído: " Es hora de continuar".
Al reaccionar su esclavo estaba a su lado, con una sonrisa y su cuerpo completamente bañado por el vino sagrado que había emanado desde él. Entonces se acercó y le susurró al oído: " Es hora de continuar".
Y cuando al fin lo penetró, ya no supieron en el nuevo
estallido si se trataba del sonido de la tormenta y el mar fuera del barco, o
de la propia muerte de ellos, en el éxtasis que los catapultó a la inconsciencia
renovada, de esa nueva forma de amarse, inventada tras dos años de la primera
vez.
__ Y mientras miro
y remiro tus fotografías, son esos ojos tuyos los que me llaman y me hipnotizan, esos
mismos ojos, que parecen querer decirme
todo, con una mirada que me embruja y
que son el reflejo de tu alma, por eso puedo ver a través de ellos, lo que
realmente sientes y aunque lo niegues, sé que me extrañas, como yo te extraño y
aunque no quieran decirlo, sé que cuando tus ojos vuelvan a mirarme, seguramente, encenderán el fuego de una loca pasión, mas, con solo imaginármelo, hace que vuelva a
palpitar mi corazón, por eso sigo soñando, con que un día tú al fin me digas que
yo también te hago mucha falta y quieras
verme siempre a los ojos, pero por ahora
tan solo debo conformarme, con verte en tus fotografías y que aunque nos separe
la distancia, ambos sabemos que tú corazón me pertenece y es solo mío.
__ ¿Y eso?
__Un fragmento del libro de cuando estaba en Chile y no
estabas a mi lado.
__Te amo cielito, definitivamente, necesitaba esta
continua luna de miel. Solo con vos mi amor, ha sido todo precioso.
Nordelta.
Cuando tres días después regresamos a la casa, la
algarabía nos inundó el alma. Las nenas estaban radiantes, con las peques en
brazos, José en los de Moni, le acariciaba la mejilla, y Valeria abrazada por
Fabián, tenía en su regazo a la pequeña Diana Elizabeth, sana y fuerte como
cada uno de los Graziani.
Beto y Gaby se habían marchado con sus niños a casa,
volvíamos a ser solo nosotros, y nos acercamos con sigilo a la bebé para evitar
asustarla, aunque ya berreaba con fuerza, peleando porque le dejaran en la
intimidad que deseaba que por ahora era la mamá.
Nuestras peques nos tendieron los bracitos, y ya
comenzaron el canturreo, Moni sonriendo, nos acercó a José,
y al fin, nos abrazamos a los trillizos, con Belén y Paula detrás.
Tal vez en el devenir del tiempo no podamos prever el qué
harán de sus vidas, mas intentaremos estar siempre por y para ellos, sin
juicios, aceptando lo bueno y lo no tanto, nos guste o no respetando lo que
decidan, como quizá nosotros no pudimos disfrutar de nuestros padres, no por
maldad sino por ignorancia.
__Hijo, ¿llevaron a la nena a control? _interrogó Guille
a Fabián.
__Está perfecta papá, y el primero de agosto reiniciaré
las clases, no quiero perder el año, a propósito de abogados, llamó Melina, el
padre está al tanto del caso de la
amiga, y dice que quiere declarar, hacer la denuncia formal.
__Gracias hijo, el deber llama, mañana mismo le tomaremos
declaración, y la llevaremos a la fiscalía.
Queríamos decirles algo, a todos, que hemos decidido en
estos días.
__Si Moni está de acuerdo _acotó, Pedro.
__Si Moni sigue pensando que desea ser mamá, cuando los
trillizos cumplan el año, y caminen en octubre, deseamos hacer la inseminación
artificial mixta, y esperar a lo que Dios quiera darnos. ¿Puede ser Moni?
__interrogó Guillermo.
__Claro, es lo que deseo, tener hijos, y me encantará que
sean ustedes los… papás, conociendo a la familia, sé que no he podido tomar por
ahora una mejor decisión.
Continuará.
Hechos y personajes son ficticios. Cualquier parecido con
la realidad es coincidencia.
Lenguaje adulto. Escenas explícitas.
Amaranta Bellísima
ResponderEliminarVictoria Precioso. Gracias
ResponderEliminarPatricia Bellísimo!!!
ResponderEliminarAlexia Esto va para todas esas personas que sólo prefieren quedarse solos y solas por miedo a amar y enamorarse...esos los cobardes.
ResponderEliminarMientras otros buscan querer amar a alguien más... esos son los valientes. 👍
Silvana A veces no es cobardia..
ResponderEliminarA veces es una decisión tomada para el resguardo de inocentes...
Flor Bello
ResponderEliminar1
Frida Hermoso !!!
ResponderEliminarCarmen Sensualmente bello.
ResponderEliminar1
Susana Dulce proyecto, que todo pase y juntos lleguen a mañana.
ResponderEliminarDelia Me encanta
ResponderEliminarMarta Susana Buenisimooo.
ResponderEliminarLeticia me.encanta leerte
ResponderEliminarTeresita Bellisimo
ResponderEliminarMara. Me encantó, años con ellos en el viaje de la vida.
ResponderEliminarLorena. Acá, Eve, desde hace mil con el viaje, gracias.
ResponderEliminarAna Ingenioso y diferente... 👍!
ResponderEliminarBelén. Divino, un beso.
ResponderEliminarSol... Hasta la docena de hijos, no se detienen, gracias
ResponderEliminarSilvia. Divino, esperando No Soy Yo.
ResponderEliminarMirtha linda
ResponderEliminarValle muy bello
ResponderEliminarSheylla HERMOSA
ResponderEliminarEva Genial
ResponderEliminarSylvia Hermoso
ResponderEliminarBellísimo siempre este interminable viaje por la vida de esta pareja eternamente enamorada y de la hermosa familia que formaron y que, según parece, seguirá creciendo para felicidad de todos...
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