lunes, 4 de junio de 2018

“NO SOY YO”. CAPÍTULO UNDÉCIMO.



“A veces pienso que morir es escamotearse un poco al vacío. La verdadera aniquilación debería ocurrir en vida, así: estiro despacio la mano, toco el vacío, y por ahí me voy. Morir, en cambio, es como pasar a una nada pasiva.”
DIARIO DE ANDRÉS FAVA.
(1950, Capítulo desprendido de El examen -publicado póstumamente en 1986- )
*Julio Cortázar.

“NO SOY YO”.
 CAPÍTULO UNDÉCIMO.

Cuatro años después.
Camila le había contado que era hijo único. Él le creyó como lo de sus padres en Valparaíso. Creyó muchas cosas que en ese momento podrían demostrarse falsas. ¿Sobre qué más le habría mentido?
Desterró esa pregunta. Se dijo que ya se ocuparía de eso más tarde. En ese preciso instante tenía que concentrarse en el presente o acabaría llorando a mares.
__
Cuando se detuvieron junto al Ford Focus, se volvió hacia Agustín y lo miró a los ojos. Unos ojos verdes, se percató en ese momento, que resultaban perturbadoramente familiares. Eran los de su sobrina Malena. Como sus propios ojos en algunas ocasiones que viraban de color.
__
Gastón asintió con la cabeza, incapaz de entender sus súbitos cambios de humor. Jamás había visto nada semejante. Su voz pasaba de conmoverlo hasta lo más hondo a apuñalarlo con su frialdad en un abrir y cerrar de ojos, provocándole un escalofrío en la espalda.
__De acuerdo. Lo entiendo. ¿Tú estás bien?
__ ¿Yo? Sí, estoy acostumbrado a vivir en el infierno, lo superaré.

Gastón lo observó alejarse. Sin embargo, no se sentía mejor que antes. En todo caso, se sentía peor. Hablar con él solo había demostrado que ese hombre había querido a su esposo muchísimo más de lo que él había supuesto. ¿A… él?

“Cuando vi esta imagen me vi allí, debajo de la ducha, dejando caer las gotas sobre mi cara mientras tapaba mi boca y lloraba en silencio después de un día estresante lleno de cansancio.
Cansa el cuerpo, cansa la mente, cansa el alma  sentir que todo te duele y al mismo tiempo no está, no existe pero te duele y cansa.
Sea cual sea el motivo, el empleo, la familia, los estudios, las malas relaciones, los amigos, los esposos, los buenos o los malos, la mente cansada ya no se acuerda de rutinas nada importantes, olvida dónde está la llave de casa, se olvida de pagar una cuenta importante incluso las más simples, olvida la contraseña de la tarjeta.
Se despierta ya cansada, sin ritmo, sin ánimo. Pero despierta, pone su armadura e incluso, herida y cansada, se obliga a ser fuerte, a ser  la persona valiente que la sociedad te obliga a ser.
Ser fuerte no es ventajoso, es necesario, matamos a un león por día y seguimos sonriendo.
Pero cuando estamos a solas, se derraman lágrimas, lloramos, no hacia fuera, lloramos hacia dentro, y no porque nos falta coraje, es por el exceso de él, que nos obliga a parecer impenetrables.
Lloramos para aliviar el dolor del alma, lloramos porque, a solas, podemos ver nuestras heridas, lamerlas y curarlas,  lloramos con nosotros mismos para ser más fuertes.
"Sea fuerte y valiente" ya me decían eso desde que recuerdo, lástima que no avisaron lo fuerte que era necesario ser.
No te avergüences por hundirte de vez en cuando, no te sientas incapaz de llorar por el cansancio de tus días, que no te dé vergüenza limpiar tus heridas cuando ellas se enfermen.
Cuán importante es llorar para mantener la cordura.
Y no te preocupes ni tengas vergüenza, que te aseguro que en otras casas también hay una persona, que está en la ducha tapando la boca y llorando en silencio dejando que el agua lleve sus dolores.
Estoy cansado, Camila, cansado de  no saber quién soy, qué hiciste de mí, qué está sucediendo, cansado de tratar de obligar a mi mente a abrir esas puertas a los recuerdos que se niegan a llegar. Me dicen tantas cosas, a veces siento que soy responsable de hacer mal a otros, como hoy a Guillermo, como a esa nena y al propio Bruno, es espantoso no saber qué hice, qué sentí, si pude haber cometido un delito, si hice tanto daño, no termino de hacerme responsable de nada porque no lo recuerdo, quisiera pedir perdón y pagar mis culpas pero cómo hacerlo si no lo recuerdo, si no sé qué hice antes, a quién dañé. Me siento culpable pero nunca demasiado, quisiera sentirme peor, quizá como hago sentir a los demás, pero cómo si no lo recuerdo y mentiste al parecer en todo, por Dios mujer, ni siquiera sé si fuiste mi esposa, si mi hijo es nuestro, o…, es igual a Guillermo.
 ¿Qué mierda hiciste de mí, Camila Moravia?
Guillermo, te sentí tan vulnerable hoy, tan triste, por momentos me atraes aun sin recordarte, por otros me lleno de miedo, a todo temo, porque nada sé, nada recuerdo, y desconfío de todos.
Temo el mirarte a los ojos, y evado el simple roce que enciende los volcanes en mi interior gimiendo furiosos.
Y doy los pasos necesarios para "salvarme" al escuchar tu risa, que suele embriagar todos mis sentidos, desatando la furia de los mares que quieren golpear contra todas tus orillas.
Me alejo para no convertirme en polvo y en cenizas en tus manos ardientes, mientras
voy intentando engañar al corazón que quiere escaparse saltando desde mi pecho para anidar en el tuyo. Lucho cada día con tu recuerdo negado, con un ser gay que desconozco como todo el resto, amando y odiando cada uno de tus gestos, y me escondo para no decirte esas palabras que no debo, porque aún no es tiempo de hacerlo; mintiéndome que a la distancia necesaria de tu boca hago menguar el sentimiento que parece ir madurando, aunque trato de impedirlo con todas mis fuerzas.
Siento celos del viento, de los rayos de sol que te acarician desde muy temprano, de la música que se filtra por tu alma trayéndote recuerdos de los amores de antaño, celo a tu estúpida almohada que puedes abrazar cada día en mi lugar, y yo aquí enredándome en mil ideas para no pensarte, mientras mi pecho se constriñe porque aún no puedo alcanzarte”.

“Pedro, sos vos, Pedro, te amo a rabiar y te odio porque no  me recuerdas, no encuentro el amor en la mirada, apenas algunas chispas de a ratos, y me lleno de ira, contra ella porque está muerta y no puede dar explicaciones, y me muero de amor, por llevarte a casa, porque despiertes en mi cama, por compartir un desayuno con Malena, porque sepas que es tu hija y la ames, me muero de amor, como la primera vez que te vi en la biblioteca de la UBA hace tantos años.
Esta noche cerraré la cortina de mi mirada  al cielo para poder bloquear  la luz de las estrellas.
Esta noche no me interesa lo que  ocurra o navegue por el cielo nocturno.
Tan solo me importa tu compañía  y que en estos segundos estés a mi lado  y que las únicas luces que me llaman la atención son los luceros que brillan en tus ojos color café y miel y el radiante brillo de tu sonrisa color perla, tus hoyuelos.
Esta noche cerraré mi vista a todo lo que me distraiga  que no tenga tu rostro y tu aroma
y me  negaré a escuchar cualquier ruido que venga de lo desconocido.
No importa que  cualquiera que pasó por mi vida se ponga triste o celoso por no pronunciar su nombre. Tan solo en esta noche ya casi madruga. Tan solo quiero perderme en el firmamento de tu cuerpo y que las lágrimas que brotan de tus ojos se vuelvan gotas de cristal que apaguen el fuego de mi cuerpo al atreverme a profanar el tuyo y a tu pura alma cristalina como el cielo azul.  Si vos me lo permites hoy quiero llegar a mi hogar, hundir mi cabeza en los huecos de tu cuerpo como antes, que me dejes sin aliento  ya que en estos momento de locura, con salvajismo,  con algún toque de lujuria combinado con pasión  me encuentro perdido y quiero que el lunar  que nace sobre arriba de tus labios  sea la estrella de norte que me guíe por tu cuerpo y que los demás lunares que se encuentran escondidos sean la constelación que ilumine mi camino a tu corazón, que el diamante que llevas por tatuaje me guíe a tus secretos, si así te conozco, por lunares, piel, y tatuajes, que miles de veces he recorrido con mis manos, con mis besos, y de nuevo solo puedo soñar con lo que siento, como hace tantos años te imagino en la nada o en cada cuerpo equivocado.
Recuerdo tu timidez cuando nos encontramos cada vez desde la primera mirada, aquella primera vez, en que me confesaste lo que deseabas, en que te pedí mi mayor anhelo.

Entre carcajadas y pasados de copas, salimos del boliche gay el que insististe conocer pero solo a mi lado,  a seguir recorriendo el centro histórico de  la ciudad que entonces poco conocías. A esa hora de la noche aún había gente caminando, sobre todo turistas, que al igual que nosotros apreciaban las antiguas edificaciones y tomaban fotografías.

__ Es una brisa agradable a esta hora.
___ Bastante agradable para ser la ciudad.  Buenos Aires  es enorme, con millones de habitantes – dije  abriendo los brazos  suspirando.
__ ¡Eso es increíble!
___ Increíble es haber conocido un apuesto chileno en la biblioteca de la facultad.
___ Gracias por lo de "apuesto", lo mismo digo, Graziani.
___ Lo sos, precioso, un chiquilín lindo  - afirmé yo ajustando vos la  lente de la cámara y apuntándome.
¿Vas a tomarme una fotografía?
___ Me voy mañana, quiero inmortalizar este momento así que posa para mí, tengo que viajar a Chile y no sé cuándo te volveré a ver.
___ ¿Así? Bromeé yo cruzando los brazos y poniendo un pie en el escalón de piedra.
___ Un poco más relajado, vamos Guille, ponle buena vibra.
___ Entonces así - agregué quitándome los lentes.
___ ¡Tus ojos son tan hermosos!
___ No es para tanto.
___ ¡Es en serio! ¡Guillermo, me encantan tus ojos!
___ Exageras. Los tuyos son preciosos.
____ Graziani ¿puedo pedirte un favor?
___ Claro.
___ Dime algo al oído
___ ¿Qué te diga algo al oído?
___ Sí, en francés o en lunfardo, algo diferente, que me encienda cuando ya no te vea, es en serio, siempre tuve una fantasía.
___ ¿Qué fantasía?
___ Que un apuesto  hombre maduro, me diga algo romántico al oído.
___ ¡Ah! Soy maduro pero no apuesto. Soy hombre pero nada romántico.
El Cabernet y más que había bebido en el bar provocó en mí una hilaridad incontenible, no paraba de reírme de todo y por todo.
___ Pero mi fantasía no termina ahí – dijiste guardando la cámara en su maletín.
___ ¿Sigue?
___ Sí, el punto culminante de mi fantasía es un beso, el primero de un hombre, quiero que sea contigo, tuyo.
___ ¿Nunca has besado un a…, un hombre?
___ Mi lista solo incluye un montón de frías chicas y a Camila.
___ ¡Vaya lista!
___ ¿Lo harás?
___ Bueno, si lo hago corres un riesgo.
___ ¿Cuál?
___ Que te guste - respondí yo  guiñando un ojo.
____ Quiero correr ese riesgo –dijiste.
___ ¿A dónde vamos?
___ _ A donde no haya mucha gente, mi fantasía necesita un poco de privacidad.
Yo aún estaba aturdido por el alcohol, había bebido demasiado. Te  llevé de la mano hasta el parque y busqué una semi- penumbra bajo un frondoso árbol.
____ Ahora sí, estamos solos, nadie nos ve, dime algo al oído.
___ ¿Algo como qué?
___ Ya que aseguras no ser romántico, dime algo pervertido y lujurioso.
___ A ver... déjame pensar.
Mientras yo pensaba una buena frase me sorprendiste, provocando como siempre hiciste luego, tu mano aflojaba ansiosa el cinturón. La inquieta mano encontró rápidamente el paraíso tras las capas de tela.
Yo, sorprendido ante las caricias del atrevido chileno de mi sueño,  solté una sarta de obscenidades perversas en tu oído. Te besé como solo pueden hacerlo los amantes,  conquisté el ósculo con la lengua dentro de tu boca y ahí dentro se libró una húmeda batalla de lenguas e intercambio de saliva con sabor a lujuria y a  alcohol, te mordí el labio inferior hasta beber tu sangre.
Lubricado y excitado,  caíste de rodillas a mis pies. Yo  cerré los ojos y me entregué al placer. La última vez que recibí sexo oral fue anónimo y mecánico de modo que no tardé mucho en eyacular, y sentí que me estabas adorando, bebiste mi ser con veneración.
A  mí todavía me hormigueaba el cuerpo a consecuencia del orgasmo cuando sonó el celular. Sacaste el teléfono maldiciendo en tu idioma  por la inoportuna llamada,  y tu cara revelaba que no habías recibido buenas noticias.

___ ¿Qué pasa?
____ Acaban de notificarme sobre un cambio de planes. Uno de mis colegas llamó y dijo que debemos reunirnos con el resto del equipo en el hotel para ultimar detalles sobre el viaje  y debo regresar ya.
____ Entiendo, salgamos a la claridad para que puedas buscar un taxi.
___ Llamaré un  taxi.
El parloteo y la risa se habían esfumado y en su lugar había quedado un hueco triste.
___ Espero que tengas un buen viaje – dije yo para romper el silencio, sin saber cuántas veces iba a despedirme de vos, hasta esa última maldita vez hace cuatro años.
___ ¡Ven con nosotros!
___ Pedro, no puedo acompañarte a ese lugar con tus colegas. Debo ponerme en contacto con un cliente importante y llevar un juicio desde el lunes.
___ Me refiero a Chile, si vienes, le diré a Camila que no viaje.
___ ¡Debes estar bromeando! __ dije yo entre risas y moviendo negativamente la cabeza, era tan simple entonces sin conocer el dolor de despedidas, olvidos, pérdida, pensé que estarías de regreso en un par de días, y estaba seguro que lo nuestro iba a continuar, que la ibas a dejar a ella para siempre.

___ Hablo en serio ¡ven conmigo! Estoy enamorado de ti.
___ Eso no es posible, Pedro, tienes apenas unas horas de conocerme. Aunque siento algo especial, no conozco el amor, y vos estabas enamorado de una mujer.
____ Lo suficiente para darme cuenta que eres el hombre que siempre estuve buscando. Que a ella no la amaba, porque esperaba a un hombre, a ti.
___No has buscado bien - bromeé yo.

Te secaste las lágrimas con el revés de la mano y miraste hacia otro lado.
___ ¿Por qué lloras?
___No sé, quizá porque estoy ebrio. Quizá porque no soy lo suficientemente bueno para ti... Ni para nadie.
____ Eres bello, inteligente, con una carrera exitosa... ya encontrarás a alguien, tal vez sí sea yo, lo sabremos en poco tiempo.
___ ¡Te quiero a ti!
___ Lo siento, no puedo corresponderte, no como vos quieres, no quiero hacerte daño, Pedro, siempre usé a los tipos, sos precioso, y no sé si esto es amor, aunque se le parezca.
____ Es porque estás esperando por más y yo solo soy un abogado joven, no soy famoso, aprendiz de geólogo por mi hermano, algo de actor por un sueño de niño.
____ ¡No digas tonterías!  No debiste beber tanto, hablas estupideces.
Mientras  aún hablaba el  auto se estacionó frente a nosotros y antes de subir,  intentaste besarme pero yo evadí el beso mirando hacia otro lado. Tal vez merezca todo lo que sucedió, estaba muerto de miedo por lo que me hacías sentir, me negué a amarte, no quería enamorarme, no sé…  tal vez haya merecido este dolor de hoy.
El automóvil se alejó hasta confundirse con el resto entre las luces de la ciudad. Me dolía la cabeza por el disgusto y por la ebriedad. Sabía que fui muy duro con vos, que esa despedida pudo ser diferente, que quizá debí corresponder a ese último beso, que te lastimé. No quería darle más vueltas al asunto, evité pensar en eso y regresé fumando hacia la farsa  que por entonces mantenía en casa, con Ana.”
___

Gastón miró furioso la pantalla del ordenador. El parpadeo del cursor solo logró acentuar el palpitante dolor de cabeza que sentía como siempre detrás de los ojos. Desde la ribera le llegaba el rumor de las olas al romper en las piedras de un río furioso como si fuera el mismo mar, el quejido de las ramas arreciadas por el viento, el rumor de este al  arrastrar las hojas, y una llovizna gris que caía contra los cristales repiqueteando en su porfía de desear entrar a su estudio nuevo, situado en la planta alta de la casa.
Debería estar editando un artículo que tenía que haber estado listo dos días antes. En cambio, estaba realizando otra búsqueda sobre Guillermo Graziani.
 De momento, había encontrado fotos de él muy acaramelado con una guapa morena, tomadas en algún evento o convención. También lo había visto con un nene, que ahora sabía que era su hijo Fabián, quizá fuese hijo de esa mujer,  en revistas de cotilleo y eventos se lo veía a veces con una despampanante pelirroja, una versión top muy parecida a Gabriela Soria.
Estaba claro que le gustaba la variedad, estaba cerca de hombres, había uno que se repetía, alto y muy delgado, siempre sonriente, pero no se mostraba como gay en público, a su brazo se prendían mujeres.

__ ¿Papá?
__ ¿Cielo?
¿Por qué se preocupaba por esas cosas? ¿Por la posibilidad de que hubiera sido su marido? Era ridículo. Al fin y al cabo, él había estado casado con Camila, o al menos en pareja por años, siempre había sido ella, no podría haber mentido tanto, y más de una persona. No tenía motivos para sentir esa punzada de celos.
Lo más sorprendente del resultado que arrojaba su búsqueda era al parecer que su vida había cambiado desde la muerte de su esposo. Antes era solo famoso como abogado penalista, el mejor, apenas en letra chica aparecía que era vicepresidente de una pequeña empresa farmacéutica heredada. Después, creó la suya propia y se expandió, haciendo estragos en la industria.
¿Se habría convencido de que el trabajo era una virtud tras enviudar? ¿O tal vez había usado el dinero del seguro de vida de su esposo para ampliar su empresa?
En cualquier caso, se había beneficiado enormemente de la muerte de Pedro Beggio.
Gastón tecleó el nombre del estudio, luego el de la empresa, y  encontró la página web correspondiente a cada uno.
En el estudio no halló nada que no supiera del flamante abogado penalista, colega si él ejerciera, pero le echó un vistazo a la información técnica de la empresa mientras el eco de las palabras de Graziani  acudía a su mente. Se dedicaban sobre todo a los medicamentos para el tratamiento del cáncer.
“Vos padeciste hace años cáncer de cerebro, Camila te operó, yo esto ya lo viví, estuviste en coma… Perdiste la memoria pero al menos sentías”.
La especialidad era ensayo con medicamentos que después analizaba la autoridad regulatoria que los sometía a sus controles por necesidad y con la promesa de sustanciales beneficios si los superaban.

__Papá _dijo Bruno, que estaba tendido boca abajo en el suelo a su lado jugando, te he hecho una pregunta.
__ ¿Qué quieres, campeón? Estaba trabajando.
__ ¿A dónde va la gente cuando se muere? ¿A dónde fue mamá?
La pregunta hizo que dejara de teclear, Bruno no le había preguntado ni una sola vez sobre la muerte durante las semanas transcurridas desde la muerte de Camila.
__Al cielo, al otro lado de un camino, como de un espejo dicen,  a  través del que siguen viendo a la gente que aman _dijo alzando a su niño, llevándolo a su regazo como cada noche.

Bruno estrelló un cochecito rojo contra uno negro, muy concentrado en la destrucción que estaba ocasionando.
__ ¿Y ya nunca vuelven?

”! Ay, Dios!, pensó. De todos los temas de conversación que podía haber sacado, había tenido que elegir ese y ahora, que no entendía por qué se parecía tanto a los Graziani, que le decían que era Pedro y que tenía una hija, que veía que Malena era su fiel retrato en mujer.
__ ¿Quién te ha dicho que se vuelve del cielo o del otro lado? __le dijo con dulzura.

__ Michael me ha dicho en el cole que las estrellas  de mar resucitan después de morirse.
Pedro esbozó un asomo de sonrisa.
__Las estrellas de mar pueden reproducirse mediante un proceso de regeneración... Si se les corta un brazo de ese brazo puede crecer una estrella nueva. Eso no significa que  mueran y después resuciten. Cuando una estrella de mar muere, se va para siempre.
Bruno  alzó los ojos penetrantes color café para mirarlo y le heló la sangre al sentir los de Guillermo. Unos ojos que lo leían, unos ojos que eran, tal como se percató, idénticos a los que había visto en la pantalla de su ordenador minutos atrás.
__ ¿Se van al cielo las estrellas de mar?
__Sí, campeoncito. Se van al cielo de las estrellas de mar.
Pedro lo soltó y el nene siguió jugando.
__Pero si tú moriste y has vuelto.
__ ¿Qué dijiste?
Gastón contuvo el aliento. ¿Cómo lo sabía? ¿Se lo habría dicho Camila? ¿Cuándo?
__Eso fue diferente. Bruno, mírame. __ Su hijo alzó la vista. Era una mirada inocente y adorable. El único vínculo con su vida pasada, lo único que amaba de verdad. Lo único que le quedaba__. El corazón de papá se detuvo unos segundos por un… por un accidente. Los médicos lo pusieron en marcha de nuevo antes que muriera el cerebro y el resto del cuerpo. No es lo mismo que cuando una persona muere y la entierran o no, se pierde. Si una persona muere, no vuelve. Aunque a veces si la amaste mucho la sientas en el pecho.
__ ¿Nunca vuelve? __le preguntó él con los ojos llenos de lágrimas.

Gastón sintió una dolorosa opresión en el pecho recordando las palabras de Daniela, al fin su madre biológica era ella, no Camila, pero para el caso, su hijo amaba a Camila, la lloraría a ella. Pero un niño de su edad como fuera que fuese no debería estar haciendo esas preguntas sobre la muerte y los muertos. No debería experimentar la pérdida de la madre, aunque fuese adoptiva, quizá de hermanos. Pero ahí estaba su hijo, y tal vez Malena, creciendo más rápido de lo que debería y tratando de sobrellevar una situación a la que ningún niño debería verse obligado a enfrentarse. Se frotó el pecho. El dolor que sentía no era por Camila, como esperaba. En esa ocasión, el dolor era por una familia a la que no conocía. Por un hombre y su hija que habían perdido a alguien a quien habían querido más de lo que él había supuesto, alguien que llevaba su rostro, o muy similar. Por más información que encontrara sobre Guillermo Graziani, ese hecho no cambiaría. Había visto el sufrimiento en sus caras.
¿Estaría también Malena haciéndose todas esas preguntas? ¿Se estaría preguntando por qué su madre y uno de sus padres no estaban y su padre había vuelto de la muerte, de entre los muertos y lo que eso significaba a largo plazo? ¿Era la causa del rechazo de Fabián al verlo?
¿No debería ser él quien contestara todas esas preguntas e intentara arreglarlo todo?

__ ¿Papá?
La voz de Bruno lo distrajo de sus pensamientos. Esbozó una sonrisa mientras le alborotaba el pelo oscuro. Si los resultados de las pruebas de ADN  daban positivo, tendría que hablarle a Guillermo de él, a Fabián, a Daniela.  ¿Había un tercer hermano muerto? ¿Bruno y Malena lo eran y uno de ellos o los dos tendría un gemelo idéntico muerto como solía suceder en inseminaciones con estimulación hormonal? Las ideas le provocaron un repentino temor. ¿Qué diría Guillermo cuando descubriera que se había perdido años de la vida de su hijo, tanto como él de ser Pedro Beggio de su hija? ¿Cuándo supiera que para Bruno su madre era Camila y él su papa? ¿Quién creería Malena que era su madre? ¿Una madre sustituta… muerta? Todo eso solo empeoraría las cosas.
No tenía respuestas para todas las preguntas que giraban alrededor en su cabeza, pasaba las noches,  insomne mirando el techo, mientras los pensamientos giraban en su mente, entre lagunas que eran abismos, pozos a los que se lanzaba sin poder saber dónde estaba el fondo. En ese momento, tampoco quería pensar en esas preguntas. Solo quería concentrarse en la preciosa cara de su hijo y recordar por qué estaba en ese lugar y por qué estaba buscando información que tal vez nunca encontrara.

__ ¿Sí, mi niño?
__Te quiero. ¿Iremos al mar?
La expresión de Gastón se relajó mientras lo abrazaba y se lo sentaba en el regazo de nuevo.
__Yo también te quiero. No sabes cuánto. Sí que iremos, a otro mar, papá tiene una casa prestada allí, lo prometo.

“Se torna gris a lo lejos en la bruma de las dudas, llega la noche apoderándose del cielo azul, cierra sus ojos el día, exhausto se derrumba sin caer en el pasto, pues las brisas del viento lo hacen flotar y el crepúsculo lo abriga con sábanas que lo cuidan de la frialdad de las penumbras. A lo lejos en el horizonte se divisa el límite de lo inalcanzable por mis manos, solo en los sueños logro acariciar esa franja enrojecida en la distancia, tiempo que se escapa en los recuerdos imprescindibles de mi memoria. En el firmamento las estrellas se desvisten deseosas por romances invitándome a las aventuras ardientes bajo los misterios develados por el sol, el cual se siente poseído por la inigualable fuerza y vitalidad entre los brazos de otro sol, ambos dueños en su propio templo. Logro ver una luz que atraviesa de un lado a otro entre las nubes que tratan de confundir mi mirada. ¿Será una visión imaginaria impulsada por los nervios que habitan prisioneros en mi subconsciente hechizado por el deseo de sentir el placer que vivo en mis sueños?
Se escuchan susurros en la oscuridad de la eternidad que acoge en sus aposentos los rumores del silencio, huésped a la espera de milagros que cumplan las expectativas que aun respiran en las sombras de la incertidumbre. Noches que gritan sus pecados y agonizan velozmente por el empuje de la aurora que llora sus cristalinas e incontrolables pesares por interrumpir apasionadas historias que vivirán por siempre en un espacio pequeño, pero imborrable en mi mente. Luces que nunca se apagarán mientras me cobije el amor. Hoy solo tengo el tuyo hijito, solo el tuyo”.

__
“Cómo deseo estar a tu lado...  sentirme abrazado por tu sonrisa, sentir la suavidad de tus labios, sentir tus manos en las mías, como dos avecillas reposando después de tanto tiempo volando distancias hasta encontrar el nido anhelado.
Ese momento será sublime, te haré el amor más allá de un coito apasionado, te haré el amor al mirarte tiernamente, al acariciar tus pies cansados, te haré el amor con mi voz, con cada suspiro que exhale y roce tu piel aunque no te esté tocando, te haré el amor de tal manera que olvidarás que me has extrañado, que me has olvidado por años.
Volaremos juntos en la quietud de la noche con nuestros ojos cerrados, el cielo nocturno será nuestro lecho, reposaremos sobre la estrella más brillante para fundirnos en su calor y destellar nuestro amor a otros enamorados.
Si estuvieras a mi lado... en este instante, para siempre como lo hemos soñado, yo sería tu verbo amar  y vos mi historia de amor para rimarnos toda una vida, para ser el libro perfecto que sea leído por siempre, para que todos sepan cuánto nos amamos.
Y ese abrazo de segundos al verte, se hizo eterno, sentí volver a vivir, tu presencia me llenó cada espacio vacío en mí, esos guardados para tu ansiada llegada, apareciendo rey y señor como siempre.
Domingo, primer día de la semana, al medio día, cuando el sol en su cenit estaba, apareciste vos, cargado de mis sueños, de mis anhelos, intactos, perfumados en tu corazón, atesorados estaban, muchacho de cabellos suaves, despeinados y juguetones.
Ese camino que tantas veces soñé recorrer, se hizo realidad, volaste entre mis miradas enamoradas, entre mis palabras que repitieron una y otra vez tu nombre, ahí en medio de miradas ajenas, con mi sonrisa pirata, te amé con mi corazón latiendo a mil.
Volví, volví a nacer, puro de pecados, no tengo pasos sin destino ya, vos sos mi camino, mi encanto, mi lucha, esta que curado de heridas, la he ganado por vos  y para vos desde siempre.

Cuando la noche emerge, y las flores del jardín duermen no encuentro una buena razón para no buscarte entre mis sueños, cielito. ¿Son esos tus ojos? ¿Esa es tu sonrisa?
Había estado buscándote siempre, entre el borde de lo imposible y posible.
Me estoy reflejando en tus ojos, he visto que los sueños a veces tienen rostro.
Necesito un poco de tu vida, no puedes encender el fuego, sin al menos una chispa.
Ven, estoy dispuesto a quemarme dentro de tus besos, aunque solo sea esta noche.
Voy a columpiarme sobre tus caderas, vamos a vivir como si el mañana no existiera.
El mensaje de mi cuerpo cada vez es más claro, hoy en el cielo arden las estrellas, y se asoman por debajo de las puertas, susurran y se animan sonriéndose entre ellas. Me levanto, compruebo mi aspecto al espejo esperando encontrarnos nuevamente entre los sueños.
¿Esas son tus manos que sostienen las  mías?
Sé que algo está pasando ahí a lo lejos, ven,  vamos juntos a secarnos el sudor de nuestros cuerpos. Entre risas, caricias, besos,  pasión y fuego sacudiré ese mundo obsoleto desde los cimientos de tu cuerpo. ¿Dices que te mueres de hambre por mis besos? No, no lo recuerdas pero yo sí estoy más hambriento de vos que hace años.
Me muero por un poco de calor de tus labios, de tus manos, cuerpo y de tu sexo.
¿Será esto real o nos salimos juntos de este sueño? ¿Soy la misma persona al despertar esta
mañana? ¿Sos vos el mismo de anoche? No sé, no existe una respuesta clara.
Esta noche me pierdo por tus ojos, entre cánticos de grillos, olor a hierba y luces azuladas que nos alumbran el momento. Por primera vez comprendo, que eras mío, mucho antes... antes de conocernos. Un día mis besos descansarán sobre los tuyos, dejando huellas apasionadas y de ternura en esos hermosos labios que dibujan sonrisas, que liberan al mundo palabras de amor. Un día nuestras miradas se encontrarán como se encuentra el sol con la lluvia, fabricando arco iris en el cielo asombrando nuestros propios pensamientos. Un día nos encontraremos solos, sorprendidos y encantados por la oportunidad, un momento único, libres de la realidad, sin más sendero que buscar. Un día estarás conmigo, en mis brazos... Y mis manos serán suficientes para poder protegerte y abrazar cada parte de tu cuerpo, solo por el placer de amarte.
Hoy amor mío llegaste a mí dejando melodías en mi alma, es tu sentir y tu amar lo sé, llenas mi vida de sueños y cosas bonitas, bailas en mi piel y en mis labios, haciendo que renazca a un nuevo día, despierto de mi sueño y te busco no te encuentro vida mía, mi mente juega conmigo me grita tu nombre nada más despertar y  vos vienes y la alimentas dejando que me roce un suspiro cuando me piensas, y me buscas en tu despertar igual que el mío y no me encuentras. Porque te gana el olvido, pero debes de recordar, de recordarme.
Hoy desperté y volé hacia vos, fui a buscar los besos que necesito, mas, sé que no son míos aunque cada uno lleve mi nombre escrito, cuando los míos te besan en tu noche negra, te quiero a mi lado amor, te quiero conmigo, procúrame tus brazos, no quiero días de lágrimas negras, ni noches sin luna, quiero poner en tus labios mis besos lentos, quiero que los sientas mientras yo me paseo en el mar de tus ojos, ahí es donde yo me duermo,  donde en mis sueños te encuentro, y el destino permite que nuestros besos se besen en el deseo de este sentir nuestro, amor soñado, amor eterno.
Y sueño, y sigo soñando como llevo años que beso tus labios y lentamente como un ladrón me deslizo entre tus sábanas tratando de alcanzar tu más preciado tesoro, luego de un instante,
comienzo a sentir tus ardientes contracciones, mientras mi saliva viste tu piel desnuda  y mis manos,  delinean tu fascinante cuerpo y juntos así, piel contra piel,  despertamos la pasión y continuaré saboreando la humedad de tu cuerpo, no pares amor,  te escucho implorar y yo,  esclavizado a tus súplicas, y deseoso de estar en vos, continúo avivando el fuego que nos hará sucumbir en un éxtasis total. Hoy tu cuerpo, será una hoja en blanco y mis labios cual pluma, se deslizan lentamente por tu piel, escribiendo  la historia de amor, esa que olvidaste,  mi saliva será la tinta que va dejando plasmado uno a uno estos ardientes y sensuales  hechos, cada letra  tendrá el sabor de tu piel, con cada frase  iré saciando mi deseo por vos y con cada estrofa, devoraré tu fuente prohibida, más,  te amaré miles veces con estas modestas letras y por eso esta será una noche, repleta de pasión y transformaré  en página de vida compartida de nuevo  cada suspiro, cada gemido y cada orgasmo  que brote de tu boca.
¿A dónde estás? Si eras lo único que tenía en mi vida dónde es que te has marchado con  mis suspiros y esos besos que faltan,  extiende tus ojos hacia mi corazón. Es que me hace tanta falta tu amor, soy un viento sin rumbo al horizonte, muy triste esta soledad en el camino, mi alma se apaga sin calor de tu luz. Ya no te encuentro ni en los sueños tu rostro,  un espejismo en la mente, esas manos no se posan en mi piel. ¿Dónde estás que no me respiras?
Tan solo una mirada fría basta para saber que no soy tuyo, estás lejos de mí,  lo intuía, con tu desprecio el cual aplasta. Tan solo un instante fuiste mío, el placer se hizo latente, ardió, un infierno de ascuas nos invadió, al traspasar la frontera del frío. Tan solo es fantasía de la mente, recordando tiempo pasado jugando a ser adulto, desmesurado, te pierdes navegando entre la gente. Tan solo es un momento, tan poca cosa fui instrumento, tan solo soy eso... tras el olvido, tan solo soy nada, oscuridad, el mismo vacío que inunda tu mente, pero debes de recordar y de lo contrario… volver a amar. Si me elegiste una vez, si te enamoré dos, podré hacerlo miles de veces, todas las que sean necesarias, Pedro, hoy ella no está, al menos ya no te apartará de mi lado. No puedo perderte, me niego y simplemente no quiero, y no puedo.
Cuando entraste en mi vida todo el mundo cambió, el sol volvió más radiante, los besos que esperaba me los diste, me atrapaste con tu sonrisa, llegaste para quedarte… las indecisiones ya no más, estando a mi lado desafiaré al tiempo, escalaré montañas, volaré tan alto donde las águilas lloran mirándote a los ojos, el cansancio se va…  abrazando tu cuerpo. Bailando con vos   soy como un niño y huelo la libertad por siempre enamorados.  Te sorprenderás. Yo no amo normalmente,  soy de esos que sorprenden regalándote una flor recogida del suelo, el beso espontáneo, un viaje imprevisto a la playa caminando cogidos de las manos sintiendo el mar lamiendo los pies, porque a eso me acostumbraste vos, precioso, todo lo aprendí con vos. A
danzar a la luz de la luna, abrazarte como si fuera la primera vez, cocinar el platillo que te gusta, brindar a cualquier hora, fundirnos con ganas en la cama con abrazos y caricias nuevas experimentando la sensualidad a flor de piel despertando y verte dormido deseándote una vez más, cantando con las voces chillonas, riendo a carcajadas, diciéndote algún secreto al oído, haciéndote cosquillas, leyendo recostados tiernamente volando sin nada que nos detenga … lo único que no te complacería es salir de compras con vos.
Al llegar la noche, a solas en la cama,  estando juntos  cuerpo con cuerpo es cuando más  solo me  encuentro... Sí, vos estás a mi lado  y nuestros cuerpos  están juntos, prácticamente solapados, yo casi sobre vos pero vos estás inerte,  incluso pienso que tan solo es tu cuerpo el que está, tu alma, tu esencia  es como si estuviera en otro lugar, así sería hoy, así te veo de a ratos, cuando no me reconoces, y por instantes veo al otro, al mío, a mi Pedro, a mi todo, al que deseo en mi cama siempre, al despertar, en mi vida.
Siento que ya hace tiempo que te he perdido y temo de despertarme  y asumir mi derrota, asumir que esto  es el fin. No, no lo acepto, no es el fin que no me recuerdes, no lo es. Dios no puede si existe ser tan cruel de nuevo, si no es por mí, al menos por la nena.
Sé que poseo más defectos que virtudes, que suelo cometer mil errores por doquier, pero soy marea alta de pocas quietudes y podrías beber de mi agua bendita. Quizá no sea la perfección de tu sueño, la escultura perfecta que quieres esculpir. Quizá  sea utopía mi ser como tu dueño.
 O quizá seas vos la mayor exigencia, el señor que ha creado su propia ley, mandato que desea una divina vivencia, deseos ansiosos por un agraciado rey. Al amante ideal en mí encontrarías.
Amor romántico en carne personalizado. Amor apasionado del cual degustarías. Placer y gozo, dulce brebaje vivificado. Tu ordenanza personal cual divino antojo traerá variopintos varones a tu merced. Tus manos recogerán en un solo manojo de caballeros ilustres que calmarán tu sed.
Enamórate de mí, no ruego ni insisto, lo ordeno Pedro, solo de mi mano comerías sublime manjar. Ordinario plebeyo de amor dulce provisto, podrías disfrutar de este amante vasallo.

Basta un matiz de gracia para moldear tu rostro, un susurro al oído de un recóndito anhelo, acariciar la idea de esa tarde de invierno en que dos golondrinas aspiraban ser cielo. Una mirada intensa cuyo incitante brillo estremeció al instante el vaivén del sentido, qué apacibles recuerdos, qué agraciados designios. La fugaz inocencia sugestión de un latido, un sonrojo en el rostro que un roce inadvertido se refugió en un beso preguntando al destino: ¿Es que acaso las almas en mortales delirios no ameritan la gloria de un ideal compartido?
Mi vida, es amarte por siempre. Sosteniendo mi tiempo en tus ojos. Y aferrarme a tu piel intensamente,  en ella amarrar el destino y un sueño. Mirar un horizonte de mil caricias en un silencio que abrasa el suspirar, en miradas fijas convergiendo en un destino, un amor, como somos dueños de una locura mutua, del beso que marcó nuestra vida cuando el viento dibujó aquella sonrisa, y la expresión de un mirar, un latir, un corazón, dispuesto a dar la vida, porque  mi alma te ama en la verdad de sus palabras sin fin, porque en ella está escrita nuestra historia que marca aquel camino sin retorno  donde las huellas se borran al pasado. Y solo aquí estamos solos para seguir aquella fantasía que la vida nos regala. Y ella misma es testigo de este amor,  en su alma abraza lo que sentimos  aun cuando a distancia es la razón  de buscarte en mi pensar y amarte  porque necesito saber de vos para vivir.

 __ ¿Ves eso? __Agustín señaló a una zona del río donde se habían acumulado los sedimentos generando una zona de tierra con forma de abanico__. Es un abanico aluvial.

__ ¿Cómo se forma, tío? __le preguntó Malena con genuino interés sacando a Guillermo de su ensimismamiento y del libro donde escribía desde conocer a Pedro cada día, cada hora, con o sin él.

Se había tomado el día libre ya que era incapaz de concentrarse en otra cosa que no fuera la confusión que lo abrumaba, y había puesto rumbo al río por insistencia de su cuñado. Todavía no sabía cómo se había dejado convencer.
__Por regla general, el agua arrastra los sedimentos y los deposita en ese lugar __contestó Agustín__. Oras veces sucede por un corrimiento de tierra.

__Ya vale, ustedes dos. __Guillermo se limpió el sudor de la frente con el antebrazo.

__A ella le gusta _replicó Agustín, que le sonrió a Malena.

__ ¿Ah, sí?
Malena lo miró con una sonrisa.
__A la niña le gusta _dijo.

__No sé qué narices hay en los genes de los Beggio, pero sea lo que sea, Malena los ha heredado __Guillermo aplastó un mosquito que se le había posado en el brazo __. Me están comiendo vivo, solo por ella soporto esto, lo sabes.
Agustín le dio un codazo a Malena.

__Es un chico de ciudad, papá es come- cemento.
Ambos se echaron a reír.
__Ya está bien de jugar con la tierra por hoy, con tu influencia cuñado esta nena me saldrá exploradora, antropóloga o alguna cosa semejante y me voy a matar __anunció Guillermo__. Estoy sucio y cansado. Vámonos a casa.

__Papá, como dice Fabián, eres un aguafiestas. __Malena lo alcanzó y lo tomó de la mano.

Guillermo le pasó un brazo por los hombros mientras enfilaban el camino de vuelta, Agustín que  caminaba tras ellos, seguía comentando los elementos geológicos con los que se iban encontrando.
__ ¿Ves lo que has provocado? __murmuró Guillermo.

Malena rio entre dientes.
__Imagínatelo en una cita.
__Precisamente por eso no sale mucho con chicas.
__ ¿De qué narices están hablando? __gritó Agustín.
__De nada __le contestó Guillermo, alzando la voz.

__De que no sales con nadie, tío.
__Muy cómicos padre e hija __replicó Agustín por lo bajo.  Da la casualidad que esta noche tengo una cita con una chica que está buenísima. __Le guiñó un ojo a Malena mientras se subía en su polvoriento Ford__. Algo que no puede decir el vejestorio de tu padre.

Guillermo lo miró con intensidad desde su asiento.
__ ¿Quién narices ha accedido a salir con vos?
__Bueno, más que una cita romántica es una cita por otros asuntos, pero si está buena como tú dices, podría convertirse en lo primero.
El vehículo se zarandeó a medida que descendía por el camino de grava. Guillermo tenía la nauseabunda sensación  de que sabía por dónde iban los tiros, e iba camino equivocado.
__Por favor, dime que no has quedado con Gaby.
__ ¿Por qué no? Tú mismo dijiste que es preciosa y soltera.
Guillermo apoyó un codo en la ventanilla y se masajeó la dolorida frente.
__Mentí, usa anteojos, el pelo en coleta, y además está enamorada de Alberto, casi casada aunque no le sepa todavía, no sales con mujeres casadas, Agustín déjala en paz, de verdad, es la mujer de Alberto.
__Que yo sepa nunca lo aceptó.
__Lo hará, no quieras sufrir, vos no.
__ ¿Me dejas entonces a la amiga que a veces le hace de secretaria?
__ ¿A Nancy? Menos, tiene un hijo, no sales con mujeres que tienen hijos y quilombos con su ex, ¿recuerdas?
__Me gustan los niños. Mira a Malena.
__Ella es una anomalía. A los niños normales no les gusta la geología, menos la abogacía. Además creía que estabas saliendo con una arqueóloga, una pelirroja que pintaba de modelo, ¿no?
__Estaba, se ha marchado a una excavación. Lo nuestro no funcionaba.
__ ¿Funciona con alguien?
__ Oye, tú. No te pongas tan tonto conmigo porque estás de mal humor. Soy el único que te soporta en la casa, tal vez Gabriela sea la mujer de mi vida y no la de Alberto.
Guillermo suspiró.
__Agustín, la mujer o el hombre de tu vida en mi caso, no existe, son solo quimeras.
__Tal vez haya una, ¿has pensado alguna vez que a lo mejor estoy cansado de perseguir mujeres?
__Sí, ya. Y yo he visto un caballo alado.
__Vale, Guille, que tengo una vena sensible. No tiene nada que ver ni de malo querer acurrucarse con alguien de vez en cuando. No siempre voy buscando sexo.
__Como se te ocurra pronunciar la palabra amor y matrimonio, vomito aquí mismo.
__ Mira,  si sirve para que te sientas mejor, esté buena o no, casada o no, Gaby jamás saldría conmigo. Por lo menos no ahora mismo.

Algo en su rostro, en la manera de mirar a Malena, en su tono de voz hizo que Guillermo volviera la cabeza para mirar a su hija. Tenía los ojos cerrados y la cabeza apoyada contra la ventanilla.
__Pedro, Gastón, o como se llame ahora mi hermano la ha contratado para que lo represente -añadió Agustín en voz baja, y la necesita más que yo, necesita que lo ayude a encontrar la verdad, Guillermo.
Guillermo lo miró al punto.
__Yo también quiero investigar por mi cuenta, necesito saber qué sucedió que no subió a ese avión,  qué hizo Camila con su cerebro, a dónde están Orestes y Marcial que lo hizo intentar ir a Chile supuestamente por un infarto de tu padre, pero ¿qué quieres decir con eso?
__Quiero decir que Gaby es la abogada de Gastón.
__Gaby es mi socia y mi amiga. ¿Por qué?
__No estoy seguro. __Se desviaron hacia la autopista. Ahora mismo creo que más que ayudarlo en investigar en esa clínica privada es la responsable de los análisis de ADN. Cuando estén los resultados puede haber… otros… temas legales.
Ya basta, todavía no lo sabemos y ¿ya se ha buscado un abogado?
__No te enojes. Todavía. Los dos pensamos que es Pedro. Si lo es, habrá que tomar decisiones sobre ciertos temas legales.
__ ¿Te refieres a que quizá sea bígamo o a la custodia de la nena? __Guillermo soltó un taco entre dientes y volvió la cabeza para mirar por la ventanilla.
 __No va a intentar conseguir la custodia de Malena si ni siquiera la conoce.
__Todavía __murmuró Guillermo. Mierda, Agustín, es Pedro, y quiero que conozca a su hija, que regrese conmigo, que me deje ayudarlo a recordar, jamás intentaría impedirle que se acerque a su hija, pero no voy a conseguir que lo logre por la fuerza__. No le permitiré entrar en mi vida de nuevo  como si tal cosa para cargárselo todo, no por la nena. ¿Cuánto hace que estás al tanto de estas noticias?

Agustín hizo una pausa, pero mantuvo la vita clavada en la autopista. __Unos cuantos días. Mira, en este tema te apoyo totalmente. No creo que deban concederle la custodia, además de no conocerla no recuerda nada, y hay cosas muy turbias en esta historia. Pero, Guille, si es el padre de la nena, tiene derecho a conocerla.
__ ¿Me crees capaz de impedírselo solo porque no sabe que me amaba?
__No, desde luego que no. Pero él no lo sabe. Si lo que dice es cierto, lo desconoce todo sobre nosotros. No sabe lo que somos capaces de hacer o lo que no. Aunque me moleste, creo que hizo bien en buscarse una abogada.
Guillermo miraba por la ventanilla.
__No quiero que salgas con Gaby.
__Eso lo decido yo, no tú.
Guillermo sintió que perdía un poco el control que mantenía sobre sus emociones.
__Mierda, era mi esposo, lo es supongo.
__Y mi hermano, Guillermo. Tengo el mismo derecho que tú a descubrir qué está pasando, además por mis padres.
__No me vengas con el cuento de que lo conocías antes que yo, no es lo mismo.
__Lo sé _le soltó Agustín__. Pero yo también lo quería, lo quiero, y me duele todo esto tanto como a ti. Si una cita con Gaby puede ofrecerme algún tipo de información o quizá más adelante sobre lo que está pasando y sobre cuándo sabremos algo más, quedaré con ella las veces que sean necesarias.

Guillermo apretó los dientes y mantuvo la vista clavada en las salidas que iban dejando atrás. No estaba enojado con su cuñado. Estaba enfadado con la vida, con la situación en general. Y con su incapacidad para lidiar con ella cuando todos los demás parecían llevarlo mejor.
__Mierda. Las cosas no deberían pasar de esta forma.
__Lo sé _replicó Agustín, suavizando su tono de voz __.De momento, no ha pasado nada. Solo quería que estuvieras al tanto, preparado, por si acaso pasa algo.

Guillermo asintió con la cabeza aunque habría preferido estampar un puño contra una pared, mierda, Pedro estaba vivo, cómo que no había pasado nada, mal que le pesara, aunque no recordara su amor al menos estaba vivo. Cada vez que analizaba la puta situación, surgía algo nuevo. Y, de momento, solo podía concentrarse en la posible batalla futura por la custodia.
No estaba dispuesto a perder también a Malena ni siquiera por un día. Con Fabián era lo único que le quedaba, lucharía hasta el final para mantenerla a su lado, ya fuera Gastón Guerrico su esposo o no.

__Viendo el árbol de mi vida, puedo rescatar lo importante de sus partes... Mis raíces de las que mamé la savia del amor, la educación, los valores y la fe. Este tronco ya añejo curtido de tantos golpes que intentaron quebrarme o hacer cenizas,  solo lograron doblar mis ramas pero aun así sigo de pie. La fuerza de estas son la que me sostienen, ustedes, los pocos amigos  a los que conozco personalmente a casi todos y a otros tantos de largas charlas por el chat, pero sobre todo mis dos hijos, y aunque no lo sepa ni le importe el amor por él. Las hojas que el viento arrancó de mi árbol en su momento sirvieron de mucho en este aprendizaje de vivir, porque adornaron mis días de alegorías,  sueños, esperanzas y fueron parte de mi frondosa copa de conocidos a los que consideré amigos, sirviendo hoy de mantillo donde descansan los recuerdos. Mis flores aun no marchitan porque se alimentan de esa savia que me fortalece convirtiéndose en servicio, solidaridad y entrega. Sus frutos algunos maduraron con las metas alcanzadas y otros siguen firmes esperando el tiempo justo para saborear el triunfo sobre las injusticias que pronto saldrán a la luz. Solo espero poder ver las semillas que sembré a mi alrededor den vida nueva para sentirme realizado.  Mientras tanto aguardo observando sutilmente el devenir de los tiempos con la esperanza de que la justicia llegue y el amor me siga manteniendo en pie.  Gracias por ser parte de mi árbol y de mi historia.
Pero lo necesito, no puedo engañarte a vos, no solo a los chicos,  lo necesito a él, preciso el reflejo de un amante, el amanecer de una mirada que me contemple al comienzo del día.
El detalle sin envoltura de una flor desnuda. Empezar con él las horas despertando la sonrisa
pícara, excitante que genital besa, húmeda te recibe obsequiándote, la sorpresa salvaje aborigen  de los orgasmos. Preciso y sé que es él, el espejismo de un amante, el consolador de sus emociones, el vibrador de su intelecto, el afrodisíaco de sus pensamientos, el coito de su boca en el almacén de sus besos, el estimulador del embrujo de su inteligencia emocional. El jadeo sabio, entre líneas de un libro en sus oídos, un cine más cope en sus ojos en el celuloides de sus miradas, el foco que ilumine el centro de su vida, un concierto privado en la almohada, la cultura de su existencia en el arte de su alma. Preciso recuperar ese esposo amante en el desierto de mi piel, de manos sabias sibaritas, en su cuerpo, dedos expertos, atrevidos jugando a la intriga del deseo, a la trama del erotismo, al suspenso del sexo en la madeja de la
perversión. Preciso la cúpula de sus abrazos, el sexo oral de su silencio en la orgía de sus palabras. La sabiduría precisa exacta, que preñe de orgasmos, las fuentes de su sentir en las entrañas de su vientre. Un amante, un beso a oscuras que entre sábanas lo duerma, rozar los labios, haciendo el cariño de cada día que lo despierte.
__Lo sé, sé cómo se amaron, no sé quiénes pudieron tramar esto…  qué cosa que no entiendo, lo sé, Guillermo.
__Déjame en el estudio y lleva a la nena a casa.
__

Apenas llegar y saludar a Cuca, Guillermo se encerró en el despacho, ya todos sabían cuándo no quería ser molestado.
El teléfono en la mano le quemaba, necesitaba oír esa voz, esa voz tan bella, era la de Pedro, a quién deseaba engañar, era él.

__Hola.
__Pedro, Gastón, como desees llamarte, disculpa que a veces te trate mal, es por la impotencia de que no recuerdes lo que nos une.
__Guillermo, yo…
__He de amarte con todos los riesgos que el quererte conlleva, con todos los preceptos con todas sus consecuencias, con esas vicisitudes de la vida diaria, con esas contradicciones que de noche inquietan, con las realidades que la vida imponga,  con esa mirada que a mis pensamientos hacen tuyos y doblegan. ¿Qué si tengo miedo? Claro que tengo miedo,  soy un alma que aún siente, que aún su sangre se tiñe de rojo, y por tal motivo tengo temor
a que mis sentimientos  no los exprese correctamente, que mis labios no sepan decir... te quiero, que no hallen la forma de expresarte que te llevo en mis pensamientos, que sos esa constancia  que alegra mis momentos. He de amarte y espero disculpes mis errores, esa emoción que de mi ser brota, que pierde el control cuando te siento cerca,  cuando siento tu esencia, cuando puedo admirar tu existencia. Sí... he de amarte porque es lo que mi corazón ordena, porque es lo que mis sentimientos  quisieran gritarte aunque me niegues y te opongas, y bien sé, que alguna lágrima  ha de rodar por mi mejilla, que la melancolía de vez en
cuando vendrá a visitarme, pero esto, es una consecuencia de un todo y ese todo es el amor que te confieso es el amor que hoy vengo a declararte, he de amarte  porque es una decisión con sentimiento, un razonamiento que  va perdiendo la lógica, que se olvida de los cuestionamientos, que no le importan los perjuicios, que no le importa lo que fuiste, lo que le importa, es lo que llegues a ser en mi vida y conmigo, he de amarte aunque vos no lo hayas pedido, he de amarte porque así lo he decidido, he de amarte esperando que me quieras,  he de amarte aunque me dijeran que este amor que siento puede ser un castigo.
Con solo amarte soy dichoso, si fuese correspondido te juro que no resistiría tanta dicha. Sí,  tu corazón está silencioso mas tu hombría es un pan generoso que anhelante espera a su tierno señor. Soñé que era el señor de tu corazón y virilidad y mi alma se conmovió hasta la gloria de Dios pero cuando desperté lloré en silencio otra vez. Te empecé queriendo minutos hace un montón de años y terminé amándote sin medida ni tiempo pero estás lejos, tan lejano como una estrella donde tu débil titileo me ronda sin cesar.
Esperaré con paciencia el sí de tus labios pero por ahora me hablas por tus ojos tiernos que tengo que volverme sutil para entenderte. En esta mi soledad...  Jesús me llama hermano en la alegría, me tenderás la alfombra de tu vientre y mientras seguiré aferrado a una quimera de amor.
__Guille, no sigas, no puedo, no soy yo…
__Solo deseo poseerte... Deleitarme con tu cuerpo, perderme en tu mirada, besar tus labios ardientes, como el deseo que nos embarga. Deseo acariciar tu rostro, beberme tu alma y disfrutar de tu carne tantas veces soñada. Quiero olvidar en tus brazos  que el mundo existe,
ser tuyo, tan solo tuyo, mientras la noche silente nos cobija con su sábana. Quiero solo poseerte… Sucumbir ante el embrujo de tu cuerpo, mientras mi boca curiosa explora cada pliegue de tu piel. Quiero aspirar tu aroma, probarte, embriagarme de tu néctar, mientras te transporto conmigo a mi paraíso del placer  que es el tuyo, y en tanto, vive sin miedo aun sin recuerdos. Ya no sos un niño, sos un hombre, sal, conoce, disfruta, aprende a volar de nuevo
con equivocaciones y aciertos, la vida es bella y  solo te pertenece a vos. Nunca olvides que
tus padres están aquí, toda tu familia está, cuenta con nosotros para todo pero tu vida es tuya, sal,  comete el mundo y si te caes levántate rápido para  seguir avanzando. Vive sin miedo a
equivocarte, todos  nos hemos equivocado alguna vez, no tengas miedo a cometer errores,  aprende de ellos y soluciónalos, nosotros podemos ayudarte  siempre que vos lo pidas y lo desees  pero aprende a volar, a vivir la vida, disfrútala,  solo tenemos una ...
Llegando la noche, cuando las sombras de la soledad  invaden mi espacio por completo, solo hay un pensamiento en mí, un deseo que ilumina mis ilusiones... Llegan los silencios, llegas vos.
Llegas acompañado de mis ganas, con cientos de sonrisas y miradas, te acomodas junto a mí, tomas mis manos entre las tuyas, y se vuelven inquietas... Mientras la noche pasa, pasas vos sobre mi cuerpo, pasa tu piel ardiente y tu aliento, y me besas cálido, sin tocar nada, disparando suspiros en mi espalda, llevándome a los sueños, donde jamás duele nada, así he sobrevivido años esperándote, nunca creí que estabas muerto.
Desde hace un tiempo, tu corazón es mi morada, en tus ojos encuentro mi mirada.
Desde hace un tiempo, de no ser por vos, no sentiría nada, desde hace casi una década, en medio de ausencias mis sueños son solo con vos, y seguirán con vos.
Si a veces hablo de vos no creas que es porque te quiero o porque aún anidas en alguna parte de mi pensamiento, es simplemente porque hubo  un extraño momento en que mis labios se gobernaron solos y no pude evitar pronunciar tu nombre, piénsalo así si lo prefieres.
Si alguna vez, oyes que hablé de vos no te ufanes ni dejes que tu vanidad crezca, mucho menos pienses que aún tienes potestad sobre mí, todo lo que comienza termina, y sí a los muertos se
les llevan flores,  imagina que mi recuerdo es el epitafio  que en tu tumba nunca pude escribir, pasó, hecho está, se vivió lo que se tenía que vivir, quizá  nunca quisiste dar más de vos, quizá nunca supe controlar la entrega que tuve hacia vos. Si alguna vez, te dicen que hablé de vos no te preocupes que nada malo diré, pero tampoco diré nada bueno, tan solo contaré los momentos que vos y yo decidimos vivir, la gente dirá que a tu modo me quisiste, la gente contará que tal vez nunca supe amarte y alégrate porque aún te recuerdo o porque tal vez algo o alguien, hizo que tu nombre volviera hacia mí, mas si hablo de vos no es porque te ame, mucho menos porque te quiera, es porque yo decidí, que de mi vida, formaras parte y fueras parte de mi historia, historia que hoy me hace comprender...  que fui aquello, que nunca supiste valorar, ni entender.  Si prefieres verlo así, lo aceptaré.

__Guillermo, no entiendo, no lo recuerdo, ayúdame a saber, a entender, a sentir.
__Hoy amor mío llegaste a mi dejando melodías en mi alma, es tu sentir y tu amar lo sé, llenas mi vida de sueños y cosas bellas, bailas en mi piel y en mis labios, haciendo que renazca a un nuevo día, despierto de mi sueño y te busco,   no te encuentro vida mía, mi mente juega conmigo me grita tu nombre nada más despertar y tu vienes y la alimentas dejando que me roce un suspiro cuando me piensas, y me buscas en tu despertar igual que el mío y no me encuentras.
Quizá sientas que el impetuoso viento  eriza cada poro desnudo de tu inquieta piel;  quizá sientas que en la oscuridad de tu  pecho,  cubiertos por la herejía de unas prendas,  van cayendo unas gotas de sudor; aquellas gotas insinuantes de tus ganas,  que ingenuamente buscan despertar...  tus deseos mas traviesos;  quizá sientas en las puertas de tu ombligo,  que el calor ondula en su regazo, buscando cruzar hasta llegar a tus entrañas; quizá sientas en el
fuego entre tus piernas,  un grito de socorro y de calma,  viendo una esperanza de sosiego en la humedad de lo insaciable;  y vos, con mirada de inocente y con ganas de culpable;  cerca a la locura y lejos de incomodarte;  tus dedos inexpertos, confundiéndose de puerta, buscando refugiarse no tocan tu alma abierta;  si no...  se introducen en tu boca,  aquella que anda inquieta;  será que en un enigma indescifrable te conectaste a mis ansias;  porque por cada segundo rebelde al tiempo una eternidad yo te he deseado;  y en lo absurdo de lo falso,  que te deseo, yo....  tontamente te he negado;  pero mi cuerpo mentir no sabe,  él solo implora...  estar profundizado en vos  porque mis ganas muy secretas acariciaron cada parte tuya; y en un descarado mar de deseos,  naufragué entre tus piernas; vos, no temas,  y permíteme enterrarme en tus apasionadas tierras;  y en un cerrar de ojos,  permíteme contemplarte desde adentro, desde adentro y hacia afuera.
Y si te beso con mi lengua rodeando tu punta, succionando hasta tocar la campana
de mi garganta, hasta enrollar todo en mi lengua, dejando que se escurra mi saliva,
producida por el sabor de tu sexo y que empapa mi averno  como champán que aguarda con ansias a que adentres tu lengua y que te bebas todo mi cóctel preparado especialmente
solo para vos, no temas.
__Guille, basta, no sé si podré volver a amar o recordar, no sé si soy…  él.
__Lo sabes, sos Pedro, sos mi esposo, sos el amor de mi vida, aunque a veces te eche, no me hagas caso, te odio a veces mas te amo. Susúrrame, despacio, suave, haz de nuestro encuentro  el mejor de los momentos, acércate muy lentamente, mientras tu aliento  penetra en los poros de mi cuello. Susúrrame, sin prisa, con calma, que tus palabras se claven en todo mi ser, haz de mi presencia, tu mayor fantasía, tu deseo más grande, tu sueño de cada noche.
Susúrrame,  colocando tus dedos sobre mi espalda y con ellos, dibuja tus huellas,
dejándolas tatuadas  por cada rincón de mi cuerpo y disfruta cada instante de placer. Susúrrame, pero también  devórame, recorre los recovecos,  esos que en mí viven escondidos,
usa tu mejor arma y hazme subir al cielo más alejado. Susúrrame, pero ámame, que tu esencia se inyecte en mí, que tus ojos no sepan dónde mirar, que tus manos se desmadren paseando por mi piel, que tus labios  sean mi dulce preferido y que unidos, seamos vida. Susúrrame palabras en el oído, de esas que se clavan en el alma, de esas, que se tatúan en el corazón, de las que jamás se olvidan, de las que  solo una vez usarás y ámame sin hablarme. Susúrrame con la magia de tu boca en la mía, con pasión desbordada, hasta el cansancio, para volar a las estrellas y bajarlas, sin que la luna se esconda, susúrrame… mientras me haces el amor.
 Pedro, te conozco de la cabeza a los pies, tus lunares, tu tatuaje, tu talla, tu medida. Te he visto, en el preciso instante que nos hicimos uno, las miradas fueron testigos de la necesidad de amarnos, cada momento se hizo único, en los besos dormidos a nuestro lado, en las sonrisas que devastaron los miedos y los hicieron nada... el olor intenso en tus manos me gana, me invita a quedarme, me dice que no es mentira, ni ilusión ni cosa parecida...
Le rogué al tiempo un minuto a solas contigo y me dio un sol,  una luna en destiempo, entonces se detuvo... éramos solo vos yo.
Fue un caos bonito el vivir en tu mente y besarte los verbos de cerca, verte de vez en cuando y de cuando en vez, para decirte al oído lo mucho que te amo, este no es un texto barato ni un tanto trillado..., este es mi verbo alado con suspiros desvencijados surcando los cielos de ambos.
Si se detendrá el tiempo de nuevo, no lo sé, eres memoria cautiva en mi cuerpo, habitante eterno. Si ser feliz requiere desgarrar el cuerpo para encontrar el alma desde ya te digo  viviré sin piel, sin conciencia, ni nada. Solo locuras impregnadas de ser,  de quedarse,  de estar... Mientras nuestros labios se muerdan.
__
Cuando Guillermo cortó Pedro estaba sentado a su mesa de trabajo, intentando editar y un artículo sobre la colaboración geo científica y el Cuerpo de la Paz. Tras apoyarse en el respaldo, miró por la ventana hacia el río. El artículo no había logrado captar su atención ni acallar lo que Guillermo dijera. Mucho menos ese día.
Resopló y arrojó el artículo, incapaz de seguir leyendo, el contenido era más sociológico y político que científico.
Sin embargo tampoco habría sido capaz de leerlo aunque fuera el artículo más interesante del planeta. Se frotó la cara con las manos e intentó relajarse un poco. Los nervios lo estaban matando mientras esperaba que Gaby le dijera algo y se preguntaba qué estaría pensando Guillermo a futuro. Si tenía otra identidad era un delito. ¿Acaso también Camila era responsable de eso? ¿Quizá se hubiera casado con ella bajo ella y carecería de validez? Tantas preguntas sumaba en lugar de restar.
El dolor palpitante que sentía en la cabeza le indicaba que necesitaba cafeína.
Se puso de pie y se dirigió a la sala de la oficina, donde se sirvió una taza de café, tras lo cual bebió un buen sorbo. Estaba malísimo, pero si lo libraba del dolor, no pensaba quejarse. Si las resonancias eran normales, si no había padecido de cáncer, por qué esos dolores. Todo podría ser mentira, debería ir a un neurólogo.
Regresó a su despacho sin levantar siquiera la cabeza y cerró la puerta al entrar. Cuando se volvió, le sorprendió encontrarse con Gabriela que estaba tras su mesa, contemplando el río.

__Bonita vista __dijo ella.

__Hola... No esperaba verte hoy.
__Lo sé. Tenemos que hablar.

Su intuición le dijo que no eran buenas noticias. Después de tomar una honda bocanada de aire que no lo relajó en absoluto, rodeó la mesa y se sentó. Gaby tomo asiento frente a él.
__Vale,  antes que nada, necesito contarte una cosa. Quedé en tomar algo con tu… con Agustín Beggio esta noche,
__ ¿En serio?
__Sí, en serio. No será una cita personal. Bueno podría convertirse en una cita personal. Me llamó creo que para hablar de ti, pero me gusta su forma de ser. No pasa nada pero… te lo cuento porque soy tu abogada y quiero que sepas que tú eres mi prioridad, aunque sea socia y amiga de Guille. Le diré esto mismo a tu hermano, perdón, a Beggio, no volveré a quedar a con él a menos que los resultados de los análisis fueran negativos. Y no lo haré.
__Vaya, eres directa por lo que veo.
__Es la única manera de dejar las cosas claras. Me gusta él, pero no es el primer hombre que me gusta con solo oír su voz o a la primera de cambio, con Alberto me pasó, y no di el salto. Lo que pasa es que no quería que te enteraras de esto más tarde porque él te lo contara o porque saliera a relucir fuera de contexto.
__A mí también me gusta Agustín Beggio _replicó Gastón __. Lo poco que conozco de él. Me parece buen tipo. Si me hubieras dicho que estuviste de copas con Guillermo, en fin, creo que eso sí me habría molestado. A veces me ama, otras no puede verme ni en pintura.

__No es eso, Gastón. Está confundido. Son cosas muy distintas.
__A mí no me lo parece. __Observó a Gaby__. Letrada, está autorizada a tener una vida privada.

Gaby frunció el ceño y Gastón se percató de que quería decir algo, pero acabó mordiéndose la lengua.
__Entonces ¿has venido a contarme eso?  __le preguntó.

__No. __Gaby sacó una carpeta de su maletín y tomó una honda bocanada de aire__. Tengo los resultados de los análisis de ADN. Pero, antes de nada, quería hablar contigo. Llamé a Guille hace un rato, hemos quedado esta tarde, más tarde en mi despacho.

Gastón tragó el nudo que tenía en la garganta, incapaz de hablar asintió con la cabeza.
Gaby le entregó la carpeta, y esperó en silencio a que leyera el documento.
__Gastón, es un informe preliminar. Pero las coincidencias son evidentes. Hay que tomar muestras de los Beggio, de tus padres para determinar también tu parentesco con ellos pero… Me han dicho que viven cerca. Creo que de momento no los han informado de tu posible identidad.

Gastón dejó la carpeta sobre la mesa. Tras levantarse, se acercó a la ventana con las piernas temblorosas y cruzó los brazos por delante del pecho mientras soltaba despacio el aire en un intento por tranquilizarse. Repitió el proceso de nuevo, pero el corazón siguió latiéndole a toda pastilla.
__ ¿Sabes todo lo que esto implica?
Es cierto, soy Pedro Beggio. Guillermo es mi marido. Malena es mi hija. Camila mintió en todo.

La realidad del momento lo atravesó, le oprimió el corazón y se lo estrujó. Y en esos instantes solo tenía… ¿qué? Una familia a la que no recordaba y un futuro que no parecía mucho mejor que el que imaginaba cinco minutos antes. En todo caso, parecía mil veces más confuso.

Volvió a tragar saliva para hablar.
__Tenía el pálpito de que este sería el resultado.
__Creo que era lo que pensaba todo el mundo. Si te sirve de consuelo, creo que ellos ya lo sabían. Me dio esa impresión  tal vez eso facilite las cosas.
__Eso espero pero me parece que no facilita nada. __Se limpió las lágrimas y se volvió. Tenía la mente llena de ideas, posibilidades, preguntas pero no podía concentrarse en nada de eso todavía. El dolor le atravesaba el pecho al pensar en lo que estaba por llegar, pero intentó respirar para mitigarlo un poco. Sabía que tenía que sacar el tema__. Muy bien, Gaby. Ha llegado el momento de que te ganes el sueldo. Tengo un hijo.

Gaby alzó la vista en cuanto lo escuchó.
Gastón tenía la impresión de que se le habían reducido los pulmones, pero se obligó a seguir hablando.
__Tiene la misma edad de Malena. Cuando desperté del coma, ya tenía tres y algo. No. No lo he comentado antes porque quería asegurarme de no involucrarlo en todo esto. __Cerró los ojos para contener las lágrimas__. Cuando te pedí consejo legal por si resultaba que era Pedro Beggio, lo hice con Bruno en mente. Creo que es seguro decir que Guillermo es su padre, aunque no entiendo cómo sucedió lo de los chicos. Se parece tanto a él como Malena a mí. Quiero que le hagan los análisis también a él, para confirmarlo.
__Por supuesto.
__Y quiero…  contárselo a Guillermo, te agradecería que no hables del tema con él hoy.
__Por supuesto. __Gaby anotó algunas cosas en su cuaderno.

Gastón empezó a masajearse la cicatriz de la sien mientras pensaba en Guillermo. Mientras pensaba en la reacción de Malena, de Fabián. En lo que dirían y harían cuando descubrieran la existencia de Bruno.
__Querrá conocer a Bruno de la misma manera que yo quisiera conocer a Malena. La cosa podría complicarse un poco con los regímenes de visitas y demás. Con lo mal que le caigo a veces… no creo sirva para mejorar mucho la situación.
__Ya lo arreglaremos todo. No te preocupes por eso ahora. Guille es un hombre justo y honesto. No importa lo que la prensa diga de él, ni tampoco la actitud que ha demostrado hasta ahora, al final cooperará.
__Yo no estoy muy seguro. __Gastón se pasó las manos por el pelo mientras se le llenaban los ojos de lágrimas.

¿Por qué tenía que ser todo tan doloroso? Debería estar feliz. Debería estar eufórico tras haber obtenido la respuesta. Por fin sabía quién era. ¿Por qué no le bastaba?
Gaby rodeó la mesa y lo abrazó.
__Respira. Lo superaremos, te lo prometo.
Pedro se concentró en inspirar y espirar cerrando los ojos. Se concentró en lo único que podía hacer en ese momento. Lo demás… lo demás se solucionaría por sí solo. Tenía que dejar pasar el tiempo. Su cabeza así se lo decía, aunque su corazón no lo tuviera tan claro.
Se apartó de Gaby y se secó los ojos.
__Gracias. Te… agradezco todo lo que has hacho por mí. Te gradezco tu ayuda y tu amistad. No me había dado cuenta hasta ahora de lo mucho que echaba de menos tener una amiga.
__Pedro me caía bien, muy bien, era su amiga en el estudio, buena miga. Pero tú también me caes bien. Habría sido tu amiga tanto si lo hubiera conocido como si no.
__También te agradezco que digas eso _susurró Gastón. Se secó las lágrimas y miró a Gaby, en esa ocasión consciente de que podría sobrevivir al cataclismo emocional si se mantenía firme en su objetivo__. Hay otra cosa más de la que quiero hablarte.

__Vale, dispara.
__He estado indagando en busca de respuestas. Antes  todo eran especulaciones, pero ahora que sabemos la verdad no sé si supondrá alguna diferencia a largo plazo, pero necesito saber qué me pasó. Camila sabía todo, tenía que saberlo. Tenía que haber un motivo para que me mintiera, ¿le estaba poniendo los cuernos a Guillermo por aquel entonces? ¿Abandoné a mi familia? No puedo seguir viviendo sin saber la verdad.
__Sigue _le dijo Gaby.

Gastón siguió paseándose frente a la ventana.
__Bueno, por lo que he podido deducir del informe del accidente, mi cuerpo jamás se recobró, obviamente _añadió con sarcasmo__. Pero había un cuerpo en mi asiento.

__Correcto. __Gaby fue en busca de su maletín y sacó la carpeta que contenía los documentos sobre el accidente. Era obvio que  ella también había estado indagando__. La lista de pasajeros demuestra que embarcaste en al avión cuando Guille te dejó, lo que significa que la azafata hizo un recuento y que había alguien en tu asiento después que cerraron las puertas. Pasaste los controles de seguridad con tu tarjeta de embarque y con tu documento real... Tus pertenencias personales se encontraron después del accidente. Tu maleta y también tu mochila, que se encontró debajo de un asiento y que Guille identificó.
__ ¿Crees que lo conservará?
__No lo sé. Puedo preguntarle. ¿Qué se te ha ocurrido?
__No lo sé. Tal vez espero recordar algo al verlo. Ni siquiera me permiten la entrada. Pero me da la impresión de que es el lugar indicado para empezar.
__No me han devuelto las llamadas de la clínica y no tengo suficientes indicios como para conseguir una orden judicial que nos permita acceder a sus archivos.
__Lo sé. __Gastón se frotó la dolorida frente__. Ojalá pudiera entrar en la sala donde guardan los archivos.

Gaby alargó el brazo en busca de la carpeta y se la colocó sobre el regazo.
__ ¿Dónde está? __Ojeó la información que había conseguido__. Creo que tengo una amiga cuya madre está ingresada en esa clínica. __Se mordió el labio como si estuviera sopesando sus opciones __.Es posible que yo pueda entrar aduciendo que quiero visitarla.

__Letrada, no estarás sugiriendo que hagamos algo ilegal, ¿verdad?
__ ¿Por qué lo llamas así?
__ ¿Cómo? ¿Letrada?  Lo eres, ¿no?
__Sí, es solo que me parece raro que Agustín también me llame así.
__No es tan raro. Ya no.
Gaby se puso de pie e intentó sonreír.
__No. Supongo que ya no.
Vamos a hacer una cosa. Llamaré a mi amiga y le hablaré para confirmar que su madre está allí. Si es así, te lo diré y decidiremos qué hacer.
__Vale.
Gaby recogió sus cosas.
__Voy a ver a Guille. Tú tómate un poco de tiempo para pensar qué vas a decirle. Si quieres que yo esté presente, lo arreglaremos y concertaremos una cita en mi despacho. Lo haremos como tú quieras.
__Gracias, pero  creo que debo hacerlo yo solo, Gaby, lo de los chicos es muy confuso, hay una madre biológica que creo que Guille piensa que está muerta, hay hermanos muertos, y quizá Camila tuvo que ver con el manejo de la información, no sé el cómo, yo estaba en coma creo-
__!Dios!
Vale. __Gaby le regaló una sonrisa__. Te llamaré después de hablar con él.
Pedro… hiciste bien en mudarte, todos merecen saber la verdad, todos.
__Lo sé, me muero de miedo, pero lo sé.


CONTINUARÁ.
HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS. CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES MERA COINCIDENCIA.
LENGUAJE ADULTO. ESCENAS EXPLÍCITAS.



17 comentarios:

  1. Silvia Gracias mi querida Eve, qué sorpresa, mi preferida, Bendiciones!

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  3. Mery... Bello , una bella historia de amor, ! Muy lindo gracias . Saludos

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  4. Miryam que BELLO Es detenerse en ese BELLO entrelazado ..
    ES UN encantó leerte

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  5. Veronica Lorena Piccinino Hermoso Eve. Me muero de angustia porque están separados pero es hermosa está historia. Gracias

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  6. Qué situación Eve...Ahora que Pedro ya sabe quién es le va a costar acomodar sus sentimientos con su falta de memoria, pero estoy segura de que se vienen momentos lindos y que la dicha va a superar el dolor que todos vivieron...

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  7. Sol Urvino El agotamiento por estres y el cansancio son asi, EVE, nos consumen y sin embargo seguimos, gracias al coraje de vivir. BELLISIMO, UN BESO

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