"Lo
que me gusta de tu cuerpo es el sexo. Lo que me gusta de tu sexo es la boca. Lo
que me gusta de tu boca es la lengua. Lo que me gusta de tu lengua es la
palabra."
Julio
Cortázar.
"PROHIBIDO".
CAPÍTULO TREINTA Y CUATRO.
“Este
miedo de ti, de mí... De todo,
Miedo
de lo sabido y lo entrevisto,
Temor
a lo esperado y lo imprevisto,
Congoja
ante la nube y ante el lodo.
Déjame
estar. Así. ¿No te incomodo?
Abajo
ya es la noche, y hoy has visto
Cómo
acerca el temor: aún me resisto
Pero
me lleva a ti de extraño modo.
Déjate
estar. No luches: está escrito.
Desde
lejos nos llega, como un grito
O
como un lerdo vértigo rugiente.
Me
darás lo más dulce y más amargo:
Una
breve alegría, un llanto largo...
Sé
que voy al dolor. Inútilmente”.
Julia Prilutzky Farny.
Julia Prilutzky Farny.
15
de junio de 1924 – Se publica “20 poemas de amor y una canción desesperada”, de
Pablo Neruda.
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Poema 20 // Pablo Neruda.
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Poema 20 // Pablo Neruda.
“Puedo
escribir los versos más tristes esta noche.
Escribir, por ejemplo: "La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos".
El viento de la noche gira en el cielo y canta.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.
En las noches como esta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.
Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.
Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío.
Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.
Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.
Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.
La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.
Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.
De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.
Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.
Porque en noches como esta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.
Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y estos sean los últimos versos que yo le escribo”.
Escribir, por ejemplo: "La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos".
El viento de la noche gira en el cielo y canta.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.
En las noches como esta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.
Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.
Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío.
Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.
Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.
Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.
La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.
Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.
De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.
Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.
Porque en noches como esta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.
Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y estos sean los últimos versos que yo le escribo”.
Partido de la Costa, 06 de enero de 2017.
No
durmieron mucho. Se despertaron a medianoche y tras saciar el deseo mutuo que
sentían decidieron saciar el hambre. Guillermo se puso los pantalones y Pedro
solo la camisa de Guillermo, tras lo cual bajaron a la cocina, para su alegría,
la heladera estaba a rebosar con las sobras del picnic. Ensalada fría de
cangrejos, lonchas de pollo, pan y galletas.
__Por
suerte no hemos dejado nada tirado en la cocina.
__ ¿Eso
significa que tienes mucha experiencia a la hora de recoger la ropa interior
que queda en el suelo de la cocina? _interrogó Pedro.
__Solo
en casa de Cuca, lo prometo __dijo
Guillermo sonriendo __.La mía no, la de la tía antes tuve que recogerla muchas
veces.
Pedro
se echó a reír.
__Bueno,
¿cómo eras de pequeño? Además de amable y generoso con Cuca quiero decir.
__Solo
apenas un poquito más sociable que vos, Pedro, no era lo que imaginas.
__Guille,
es Reyes, ¿qué podríamos dejarle a los chicos?
__No
hemos comprado nada en especial, creo que estar acá es regalo suficiente, más
para Felipe, aunque lo es para Fabián aunque no lo creas. Antes con mi fobia
pocas veces vinimos.
Creo
que dejarlos aprender surf y navegar es regalo suficiente para los dos, el mío
sos vos cielito, llegaste a mi vida cuando nada me apasionaba, como bien dijo
Jorge entonces, era un caos, llevaba una farsa con Ana, Juan y Fabián, con
todos, era un lío sin salida, solo el
amor me sacó de ello, pareciera que hace un siglo, y no pasó un año siquiera.
Entonces pensaba que era tarde para cambiar, para aspirar a una vida real, pero
¿cuándo es tarde para cambiarlo todo?
Remolinos
de recuerdos, empujan los sentires. Emociones casuales y causales, enredan en
el tiempo y el pensamiento se vuelve eco. Vienen a mi memoria, distintos
estadios de la vida. Todas las veces que prematuramente me dije que era tarde.
A mis estrenados veinte pensé, era tarde para dejar una carrera que sabía no era para mí.
A los treinta pensé, ya era tarde para borrar y volver a escribir.
Tarde. ¿Cuándo es tarde? Cuando el aliento se esfuma en el viento. Y sentimos que no podremos llegar a la cima, cuando deja de gustamos la vida como vino añejo.
Cuando no nos permitimos desplegar las alas y llegar al horizonte. Al horizonte ensangrentado de un hermoso ocaso. Un horizonte con el mar unido en espléndida muerte.
¿Cuándo es tarde? No lo sé. Lo único que sé, yo tengo las ganas. Y voy creando las fuerzas. Y las alas crecen. Y yo solo pienso en volar. En llegar a la cima. En desangrarme en experiencias nuevas con vos, en medio del ocaso. Fundirme con ese sol que se despide, sabiendo que volverá al amanecer. Ese amanecer que no veo. Soy habitante del nocturno misterio.
Y renaceré como siempre. Como quijote de mis sueños. Arremeteré contra los molinos. Y esta vez no me importa ganar. Me entrego al albur de lo desconocido. Sin plantearme tanto. Para no llegar tarde. Para llegar en el justo instante. Quiero contarte que en un tiempo pasado mi corazón estaba mutilado por cada pedazo que le daba a los seres amados él se lamentaba porque nunca recibía nada, sembraba y sembraba semillas de Amor y nadie las regaba, sufría y se oscurecía, tristezas no le faltaban. Mi mente lo cuestionaba porque lloraba y no reaccionaba. Mi alma empezó a volar con alas prestadas que eran ilusiones sueltas que a mí me llegaban y un impacto emocional me daba. Pude descubrir cómo late en mí el Amor al conocerte en que mente y corazón se unieron para que pueda mi alma soñar.
Mi corazón se volvió fértil ahí sembró sus semillas y las regó con las buenas actitudes conjugando al Amor y sanó su palpitar, fue feliz, floreció mi vida, pude perfumar mi alrededor.
Las emociones, sentimientos, sensaciones, placeres, sentidos me pertenecen, pueden dar pero la cuna esta en mí y crecen en mi ser, conquisté mi paz después de aprender.
La vida y el Amor me premiaron, los manejo yo, no espero nada, tampoco necesito nada. Solo agradecer a Dios, a la vida y al Amor que viven en mí junto a vos, no necesito nada más.
A mis estrenados veinte pensé, era tarde para dejar una carrera que sabía no era para mí.
A los treinta pensé, ya era tarde para borrar y volver a escribir.
Tarde. ¿Cuándo es tarde? Cuando el aliento se esfuma en el viento. Y sentimos que no podremos llegar a la cima, cuando deja de gustamos la vida como vino añejo.
Cuando no nos permitimos desplegar las alas y llegar al horizonte. Al horizonte ensangrentado de un hermoso ocaso. Un horizonte con el mar unido en espléndida muerte.
¿Cuándo es tarde? No lo sé. Lo único que sé, yo tengo las ganas. Y voy creando las fuerzas. Y las alas crecen. Y yo solo pienso en volar. En llegar a la cima. En desangrarme en experiencias nuevas con vos, en medio del ocaso. Fundirme con ese sol que se despide, sabiendo que volverá al amanecer. Ese amanecer que no veo. Soy habitante del nocturno misterio.
Y renaceré como siempre. Como quijote de mis sueños. Arremeteré contra los molinos. Y esta vez no me importa ganar. Me entrego al albur de lo desconocido. Sin plantearme tanto. Para no llegar tarde. Para llegar en el justo instante. Quiero contarte que en un tiempo pasado mi corazón estaba mutilado por cada pedazo que le daba a los seres amados él se lamentaba porque nunca recibía nada, sembraba y sembraba semillas de Amor y nadie las regaba, sufría y se oscurecía, tristezas no le faltaban. Mi mente lo cuestionaba porque lloraba y no reaccionaba. Mi alma empezó a volar con alas prestadas que eran ilusiones sueltas que a mí me llegaban y un impacto emocional me daba. Pude descubrir cómo late en mí el Amor al conocerte en que mente y corazón se unieron para que pueda mi alma soñar.
Mi corazón se volvió fértil ahí sembró sus semillas y las regó con las buenas actitudes conjugando al Amor y sanó su palpitar, fue feliz, floreció mi vida, pude perfumar mi alrededor.
Las emociones, sentimientos, sensaciones, placeres, sentidos me pertenecen, pueden dar pero la cuna esta en mí y crecen en mi ser, conquisté mi paz después de aprender.
La vida y el Amor me premiaron, los manejo yo, no espero nada, tampoco necesito nada. Solo agradecer a Dios, a la vida y al Amor que viven en mí junto a vos, no necesito nada más.
Es
tu piel canela el cálido manto que cubre mis temores y mis miedos, ese lienzo
fragante que guarda como sellos mis caricias y mis besos. Son tus dedos y tus
manos tiernos lazos que acarician mi cabello, que escriben suavemente en mi
espalda hermosas prosas con tus verbos.
Tus
piernas abrazadas a las mías, van formando un roble de amor y de fuego, que
alimenta sus raíces con caricias y la savia de mis besos.
Quiero
amarte sin espacio, sin tiempo, ponle alas a mis labios, quiero volar hasta tu
cielo, para darle a mis brazos el calor de tu fuego.
Quiero
libar de tu miel si no te alejas me acerco, y al sentirte cuerpo a cuerpo se me
excita hasta la piel. Estaba tan deseoso
de darte un beso y te llamo para decirte que te amo, que nuestro amor es
hermoso y ya no tenemos que ocultarnos de nadie, somos libres.
En
el amor la constancia no tiene leyes ni normas. Sé amar de todas las formas, cuerpo
a cuerpo o a distancia. No vivas lleno de enojos. Ve por el mundo y camina,
busca esa luz que ilumina el verde hermoso en tus ojos. No tengas la fe
perdida. Si a alguien quieres amar y quieras con él pasar todo el resto de tu
vida no te detengas pensando que es pecado, no nos neguemos a vivir lo que nos
pasa, es mágico, nunca a ninguno de los dos nos sucedió antes.
Mi
vida ha dado otro giro, se acabarán mis tormentos. Acércate mi amor que siento
tu suspiro en mis suspiros. Ven amor, sé que quieres derramar tus ganas sobre
las mías llenas de espumas, mientras nuestros cuerpos solos se buscan. Ven
dichoso, mi cama espera con tu desnudez, hay sábanas blancas para tu piel
tersa, para embriagarlas con tu aroma.
Amor,
sé que somos perversos y amorosos llenos de pasiones sin términos, la noche nos
evoca como un canto apacible y lleno de lujurias. Quiero medir tus deseos, el brazo
de mi amor quiere asirte, solos vos y yo
en la secreta alcoba y nuestra presencia expuesta a las caricias.
Ven,
abrázate a mi cuerpo busquemos lo que quema nuestro adentro, tengo ganas de vos
y estamos juntos, derramemos nuestra locura pasional.
Cuando
la noche con su manto cubre de enigmático embeleso, nuestra piel se pinta de
encanto emerge un volcán de emociones.
Nuestros cuerpos encendidos danzan al
compás del suspiro de velas, hermosas melodías cantan con cadencia de inquietas
olas. El placer y el deseo con algarabía asisten y en tu vientre pueril se
engalanan musitando sempiterno amor placentero con besos que por tu piel
navegan. Sensaciones sublimes florecen y nuestras almas al compás suspiran en quimérico frenesí sumergidas, culminan
besos de pasión que visten al éxtasis de
amor. Lléname de ti... quiero sentir el calor de tus manos recorrer mi cuerpo,
y que acaricien mi piel desbordada de pasión, ahogues mis poros con tus besos. Quiero que me
ames bajo la luna plateada, recorras mis
secretos con las yemas de tus dedos, desnuda mis labios con tu aliento y
suspiros hasta saciarme el sabor de tu saliva. Quiero escribas un poema sin
metáforas en el lienzo de mis párpados huérfanos de rimas y aromas de tus ojos.
Quiero me abraces junto a tu pecho duermas este amor ávido de crepúsculos en un
otoño sin alas... Guardo tu nombre en las cuencas del viento y... callo.
__A
veces tenemos miedo de las personas que aparecen en nuestra vida, aun sabiendo
que son buenas las dejamos ir, a veces por lo que piensan los demás (porque
vivimos en una sociedad de apariencias) y otras simplemente porque no valoramos
lo que nos brindan.
Y al final lo que menos importa es la apariencia, si tan solo escucháramos al corazón no existiríamos tantas personas rotas tratando de sobrevivir cada día a las heridas que se hacen en nombre del amor. Tú eres mi más gran amor y ahora me duele mucho la lejanía, pero aun así te sigo amando, en cada suspiro de mi alma, en cada instante de mi vida te pienso, en cada paso que cruzo por donde vivíamos nuestro amor, ahí esperé un día encontrarte, y anhelé que tu amor fuera el más sincero, como el que te brindé por primera vez que fue cuando te entregué mi corazón, hoy este amor crece y el tiempo es mi cómplice para poder demostrar lo importante que eres para mí.
Ahí estás perdido en las sombras y estás agonizando, deseo que me muestres el camino, para hacer vibrar nuevamente tu corazón, hoy mis tristes letras las escribo para ti porque deseo que sepas que mi amor por ti jamás cambiará, que ni la distancia y las fronteras dejarán que te deje de amar.
Deseo que sepas que a pesar de no estar juntos, sentí tu presencia la cual me dio fuerzas para seguir adelante, porque tú eres un destello de luz en mi alma llena de oscuridad, a veces el destino juega con los corazones pero este gran amor que siento hoy por ti nadie lo hará cambiar, tú me has hecho sentir el hombre más afortunado de tener tu corazón por eso deseo que sepas que siempre serás el gran amor de mi vida.
Y al final lo que menos importa es la apariencia, si tan solo escucháramos al corazón no existiríamos tantas personas rotas tratando de sobrevivir cada día a las heridas que se hacen en nombre del amor. Tú eres mi más gran amor y ahora me duele mucho la lejanía, pero aun así te sigo amando, en cada suspiro de mi alma, en cada instante de mi vida te pienso, en cada paso que cruzo por donde vivíamos nuestro amor, ahí esperé un día encontrarte, y anhelé que tu amor fuera el más sincero, como el que te brindé por primera vez que fue cuando te entregué mi corazón, hoy este amor crece y el tiempo es mi cómplice para poder demostrar lo importante que eres para mí.
Ahí estás perdido en las sombras y estás agonizando, deseo que me muestres el camino, para hacer vibrar nuevamente tu corazón, hoy mis tristes letras las escribo para ti porque deseo que sepas que mi amor por ti jamás cambiará, que ni la distancia y las fronteras dejarán que te deje de amar.
Deseo que sepas que a pesar de no estar juntos, sentí tu presencia la cual me dio fuerzas para seguir adelante, porque tú eres un destello de luz en mi alma llena de oscuridad, a veces el destino juega con los corazones pero este gran amor que siento hoy por ti nadie lo hará cambiar, tú me has hecho sentir el hombre más afortunado de tener tu corazón por eso deseo que sepas que siempre serás el gran amor de mi vida.
La
mirada que le echó Guillermo hizo que Pedro se atragantara de golpe la comida
que tenía en la boca. Sin decir una sola palabra más, devolvieron el resto de
comida a su lugar y corrieron de regreso al dormitorio.
Una
hora después, Guillermo sugirió probar la enorme bañera con Jacuzzi de la
suite, Pedro gimió y dejó que él lo llevara casi a rastras por el pasillo de
camino al cuarto de baño.
__Mi amor de día, mi príncipe de noche, el que
hace realidad mis fantasías, y el que hace crecer mi pasión ardiente, no te
separes mucho de mí, ¿no ves que mi cuerpo necesita de ti?
Ven
que haremos de la noche nuestro caldero donde ardan más nuestros deseos de
poseernos, quitémonos las ropas que son solo un estorbo para sentir el calor
que emana de nuestros cuerpos. Te miro, me miras y el deseo florece, nuestros cuerpos se atraen frenéticamente, solo
desean navegar en los mares de la pasión bañándome tú, con tu mar incesante
toda mi piel y yo veo cómo mi cascada va recorriendo tu rostro, pasando por tus
peñascos hasta que mis aguas se junten con tus mares, en esa zona esplendorosa donde
se conjugan nuestros torrentes incesantes.
Amor, cuando estoy contigo el tiempo es uno
con nosotros, quiere ver toda esta ardiente pasión que nos une, haciendo la
noche larga y los días cortos para que nuestros cuerpos se fundan hasta el
amanecer, porque no quiere perderse cada fantasía hecha realidad en nuestros cuerpos.
Los
días grises se acabaron, al fin los nubarrones que oscurecían el cielo se
disipan definitivamente, se acerca un nuevo amanecer. Recordar ya no tiene caso
sería seguir hundido en el mismo abismo, después de todo mi pasado ya no duele y la paz se ha instalado en el
alma. Ahora las cosas se ven diferentes,
para qué atormentarse con algo que no puede regresar y fue un error de
niño, fluir, solamente fluir como el viento,
como el río que corre incesante es lo que ahora necesito. Aprender a saltar los
obstáculos, a librarlos con astucia no evitarlos, no cayendo también se aprende.
Vivir el aquí, el ahora, escribir cada día esa página en blanco, no planear,
porque se nos va el tiempo en ello y cuando miramos ya transcurrió. El pasado
dejarlo en su lugar, atrás, ya se fue ya no se puede modificar, para qué arrastrar un lastre que solo nos hará
infelices. Esto es un proceso de aceptación, aceptar nuestra realidad, nuestra
nueva vida, estar listos para un nuevo comienzo.
En tu ofrecimiento no hay rodeos ni rehúsas al deseo y besas con sedientos labios haciendo mía tu voluntad y tuyo es el acto. En tu dorso hay inusitada vía que mis manos recién transitan y tus falanges inquietas hacen erizar a mi piel logrando ambos conquistar nuestros
oasis y conseguí que tus ansias se unan a mi ensueño. Rindes tus valles y regiones y llego a poseerte consagrándote un indefenso cautivo a la espera que me adentre al último confín y así desvanecer tu último tabú.
Tras
el telón pasional liberaste a ese beso cual astro luminoso. Tras el telón que
ardió tan fogoso, me dejaste un mundo de placeres. Pues en mis labios tu fuego
fijaste y tu boca fue tacto orgulloso que mi lengua candente, sin reposo fue
ese gozo que tú le regalaste.
Mi
sudor y tu calor revelado fueron llama y
huella en el silencio, sabor que a mi gusto le fue dado, olvidando yo tu tenue desprecio cuando fuimos ese fuego
invocado que hoy, en esta pasión evidencio.
Cuando
ya no estés presente siempre, serán mis labios los que me harán recordar las veces que te
besé. Serán mis labios, los que recordaran a tus besos, y los momentos que mis
labios recorrieron toda tu piel. En mi mente estarán las sensaciones que
sintieron mis besos, cuando tocaron tus labios, recorrieron tu cuello y
llegaron hasta tu pecho, sintiendo tu respiración. Y cada latido de tu corazón
excitado, por el toque de mis besos. Cuando ya no estés, será real el recuerdo
del sabor de tu piel, la sensación suave de esta, y la forma en que se erizaba
con cada caricia que con mis manos tocaba tu cuerpo. Cuando mis manos dibujaban tu
figura, por todo tu cuerpo. Serán esos momentos en que mis manos recordarán cada pieza de ropa que quito y dejo caer poco
a poco desnudando tu sedosa piel y dejando tu cuerpo totalmente al desnudo. Cuando
ya no estés, no olvidaré los momentos, los
instantes que juntos pasamos, que caminamos tomados de la mano, de las largas
conversaciones y que terminábamos siempre con un beso. De cada debate y planes
que hicimos y que ahora no se realizarán. No olvidaré, las veces en que mis
caricias y tus besos, nos provocaron el deseo y la pasión de estar juntos, de
simplemente desnudarnos y hacernos el amor. Las noches que las estrellas
miraban con rubor cómo nos amamos.
Cuando
ya no estés, tu presencia se haya marchado de este mundo. Serán los recuerdos
más tristes que lleve conmigo, serán los momentos que no olvidaré y mi corazón
llorará. Pero en mi alma guardará, todo el amor que una vez sentí por ti mas
hoy estamos al fin juntos, plenos y vivos.
__Ayer
en la noche transcurrían las horas llegando a la tranquila madrugada, hablaba
con mi desvelo sobre recuerdos de mi historia, buscando mis vivencias en las
gavetas del pasado , envueltas en polvo, en mi vuelo despacio, caminando sin
hacer ruidos por el aire de la melancolía, atravesando surcos sembrados de
nostalgias, tratando de no abrir los ojos para continuar navegando por los
sueños, acercándome al océano donde existen olas que limpiaran nuestras mentes
de lejanos pensamientos endebles, recordando mis aventuras que quedaron
colgadas en un espacio del tiempo, donde cada día se van extinguiendo a punto
de llegar a los secretos de mis antepasados convertidos en cenizas navegando en
el viento. Donde cada aliento de respiro se apodera de mis huesos mal heridos,
destinados a las sombras de un mañana con lágrimas ocultas que seguirán
provocando mi débil y derrotado ánimo en el cuerpo.
Expulsado de mi lógica se abalanzan mis demonios devenidos fantasmas que danzan mis angustias sobre el pueblo que existe bajo la tierra en espera de su próxima víctima, donde se marchitan las rosas deshojadas en el jardín de los olvidos. Pecados que viven en mí, saborean en la espera de un advenimiento indeseado que impone el castigo de la dudosa sospecha de encontrarme en el cielo, a la búsqueda de ese amor cautivo y escurridizo como imágenes entrecortadas que desaparecen, raudo y veloz de nuestros ojos.
Me identifico plenamente y abiertamente con el desorden de rimas en poemas desolados de versos, estrofas mutiladas por la mentira, aprendí a vivir sin la presencia metódica de la razón, alimentando mi locura y embriagándome de mis verdades.
Desastrosas melodías que yacen sobre una desafinada guitarra llorando arpegios moribundos sobre las cuerdas rotas, enmudecidas por el silencio de ángeles que cuidan de la eterna soledad...
Me tranquiliza erróneamente, aferrarme a la mentira aborrecida por la verdad donde dominaba a mis nervios, que locuazmente transmitían la esperanza de una ilusión humana hacia el amor, hacia esa puerta llena de deseos, placeres y pasiones donde volvemos a sentir la tentación de morder la manzana de Eva siempre presente en nuestro destino, progresando la felicidad en mi camino espinoso y agrio.
Llegabas vos enfrentando mis miedos, transformando en victorias mis fracasos, alimentando mis ansias de amar lo prohibido durante siglos, desordenando organizadamente mi antigua manera de expresar mis atributos libremente sin llegar a lo absurdo de la timidez, me abriste el cielo ante mis ojos cerrados, solo necesité el olor de tu aroma para encontrar el rastro de tu silueta en los capítulos continuos de mi existencia.
Volvió a cantar la guitarra las melodías sutiles de siempre, dándole vida a esos arpegios que saltaban sobre las cuerdas alegres que inducían al baile de ángeles celestiales.
En nuestro lecho de amor, enjaulados entre cuatro paredes, testigo ellas del renacimiento del amor, aprobado por el reino del olimpo, fuimos magia imperecedera al tocarnos, tus deseos cumplidos, mis promesas acertadas, nos fundimos en un abrazo con principio y sin final, besos que se perdían en los poros de la piel, roces que incitaban al desnudo de los misterios más profundos que ocultábamos por decencia, gemidos como lenguaje corporal de un sexo indescriptible.
Fuimos una dosis pequeña de sensatez, dominados de la cabeza a los pies por la locura de quemarnos sin reparo liberándome de las cadenas más siniestras que me mantenían preso a los recuerdos de mi historia, alejándome de las dudas, entregando todos mis temores a la paz eterna del olvido.
Y así me rindo ante el cansancio de mi conversación ante el desvelo de mis insomnios y caigo exhausto en mi lecho por un sueño que camina al borde de la realidad, sembrando la felicidad en mi locura de amarte.
Gracias a vos vida, me inclino ante tus pies por haberme entregado tanto, haciéndome partícipe de una historia que habitará en los recuerdos de un pasado que seguirá respirando sueños en los brazos de un presente que lucha por un mañana anhelado en mi interior que me guiará hacia el destino final, para encontrarme con ese amor eterno que diviso a la distancia en esas lejanas galaxias que existen en el hermoso firmamento que se apodera de mi mente haciendo volar mi alma desnuda en libertad.
Expulsado de mi lógica se abalanzan mis demonios devenidos fantasmas que danzan mis angustias sobre el pueblo que existe bajo la tierra en espera de su próxima víctima, donde se marchitan las rosas deshojadas en el jardín de los olvidos. Pecados que viven en mí, saborean en la espera de un advenimiento indeseado que impone el castigo de la dudosa sospecha de encontrarme en el cielo, a la búsqueda de ese amor cautivo y escurridizo como imágenes entrecortadas que desaparecen, raudo y veloz de nuestros ojos.
Me identifico plenamente y abiertamente con el desorden de rimas en poemas desolados de versos, estrofas mutiladas por la mentira, aprendí a vivir sin la presencia metódica de la razón, alimentando mi locura y embriagándome de mis verdades.
Desastrosas melodías que yacen sobre una desafinada guitarra llorando arpegios moribundos sobre las cuerdas rotas, enmudecidas por el silencio de ángeles que cuidan de la eterna soledad...
Me tranquiliza erróneamente, aferrarme a la mentira aborrecida por la verdad donde dominaba a mis nervios, que locuazmente transmitían la esperanza de una ilusión humana hacia el amor, hacia esa puerta llena de deseos, placeres y pasiones donde volvemos a sentir la tentación de morder la manzana de Eva siempre presente en nuestro destino, progresando la felicidad en mi camino espinoso y agrio.
Llegabas vos enfrentando mis miedos, transformando en victorias mis fracasos, alimentando mis ansias de amar lo prohibido durante siglos, desordenando organizadamente mi antigua manera de expresar mis atributos libremente sin llegar a lo absurdo de la timidez, me abriste el cielo ante mis ojos cerrados, solo necesité el olor de tu aroma para encontrar el rastro de tu silueta en los capítulos continuos de mi existencia.
Volvió a cantar la guitarra las melodías sutiles de siempre, dándole vida a esos arpegios que saltaban sobre las cuerdas alegres que inducían al baile de ángeles celestiales.
En nuestro lecho de amor, enjaulados entre cuatro paredes, testigo ellas del renacimiento del amor, aprobado por el reino del olimpo, fuimos magia imperecedera al tocarnos, tus deseos cumplidos, mis promesas acertadas, nos fundimos en un abrazo con principio y sin final, besos que se perdían en los poros de la piel, roces que incitaban al desnudo de los misterios más profundos que ocultábamos por decencia, gemidos como lenguaje corporal de un sexo indescriptible.
Fuimos una dosis pequeña de sensatez, dominados de la cabeza a los pies por la locura de quemarnos sin reparo liberándome de las cadenas más siniestras que me mantenían preso a los recuerdos de mi historia, alejándome de las dudas, entregando todos mis temores a la paz eterna del olvido.
Y así me rindo ante el cansancio de mi conversación ante el desvelo de mis insomnios y caigo exhausto en mi lecho por un sueño que camina al borde de la realidad, sembrando la felicidad en mi locura de amarte.
Gracias a vos vida, me inclino ante tus pies por haberme entregado tanto, haciéndome partícipe de una historia que habitará en los recuerdos de un pasado que seguirá respirando sueños en los brazos de un presente que lucha por un mañana anhelado en mi interior que me guiará hacia el destino final, para encontrarme con ese amor eterno que diviso a la distancia en esas lejanas galaxias que existen en el hermoso firmamento que se apodera de mi mente haciendo volar mi alma desnuda en libertad.
“Sin
saber cómo ni por qué, nunca pude dar crédito a lo que mis manos eran capaces
de crear, con tan solo un recuerdo. Era como si todo mi ser, ávido de
sensaciones nuevas rotara en torno a su sonrisa, al verdor de sus ojos
reflejado en su mirada, o a la dulzura de una voz imaginaria, que con ardor de
ruiseñores me susurrase al oído dulces baladas del mejor compositor, jamás
conocido. Era un terremoto, un tsunami o un volcán que escupiese pasiones
encendidas desde dentro de sus entrañas. Era la ola embravecida que chocase con
furor en la proa de una triste embarcación, perdida en los mares del
subconsciente. Era polen, almíbar, azúcar o caramelo. Era paz, calma, sosiego,
amor, cariño. Era mi sol, mi luna y mis
estrellas. Mis noches, mis días y mis crepúsculos. Mis sentimientos y mis
formas de pensar e incluso mis más bajos instintos y vicios ocultos. Era todo y
todo me llevaba a crear”.
__Guille no aguanto más, tómame. Soy tuyo.
Guillermo
comenzó bajo el agua a explorar su cuerpo mientras que el agua jabonosa
convertía cualquier contacto en una caricia. Le recorrió las piernas, siempre
en sentido ascendente, y se detuvo entre los muslos, Pedro sintió que escalaba
las montañas más altas de Chile y tocaba las estrellas, como si se hubiera ido
de viaje de la luna al sol, como si estuviera rodeado de rayos solares,
mientras Guillermo le besaba el cuello y lo instaba a sentarse de la forma que
supiera lo mucho que lo deseaba. Le besó la garganta, descendió con los labios,
comenzó a besarle los pezones, hasta que descendió de nuevo, y Pedro echó la
cabeza atrás y después la apoyó en su hombro, Guillermo lo besó en la mejilla.
__Sos
precioso _susurró él__. Tienes una piel dorada por el sol y perfecta. Y a
veces, tengo la sensación de conocerte desde siempre.
A
Pedro le gustaron esas palabras, aunque tenía la impresión de que ocultaban un
sentido más profundo. Se volvió, le echó los brazos al cuello y pegó el pecho
contra su torso, y besándolo en el mentón habló.
__Aquí
me tienes. No pienso marcharme de nuevo__. Lo besó en la boca, rozándole el
labio inferior con la lengua__. Suave, suculento _ susurró.
__Voluptuoso
y firme __dijo Guillermo.__ Le atrapó el
labio inferior con los dientes__. Me excita, me tienta, me enloquece. __Pasó la lengua por encima del superior,
disfrutando de la aspereza que sentía, y lo besó en la boca antes de volver a
concentrarse en el labio inferior__. Sueño con él de día y de noche. Con
acariciarlo, con besarlo, con chuparlo, con mezclar nuestros alientos y beber
de ti en derroche__. Por un instante separó los labios contra los suyos antes
de volver a succionar el labio inferior__. Con chuparlo, con lamerlo. Con
sentirlo contra los míos.
Cuando
tropezaron las miradas, tenían los ojos oscurecidos por el deseo, por ese fuego
que empezaban a adorar. En un abrir y cerrar de ojos, Guillermo se puso de pie,
levantándolo a Pedro consigo sujetándolo con fuerza mientras lo sacaba de la
bañera y lo llevaba al dormitorio. De nuevo se quedó de pie junto a él mirando
el cálido y húmedo cuerpo y la sonrisa ruborizó a Pedro.
__Además
de tus labios, hay partes de tu cuerpo que me gustan mucho __dijo al tiempo que
se tumbaba junto a él.
__ ¿Como
cuáles? __peguntó Pedro mientras Guillermo lo besaba en el cuello, con una mano
en el vientre.
__Se
me da mejor mostrarlo que describirlo.
__ ¿De
verdad? _susurró Pedro__. En ese caso a lo mejor deberías hacerme una
demostración.
__Será
un placer. __ Comenzó a descender por su cuerpo, siguiendo con los labios el
sendero que trazaban las manos.
__Aquel
amor ilusionado, amor sencillo y puro, tan
tuyo mi amor, amor tan tuyo, amor amado,
amor de piel y segundos, amor que no se
pierde, que no se evapora, ese amor
amante de dos bocas... La tuya y la mía,
las nuestras, nuestro amor, ese
encendido y rojo apasionado amor.
Suspirado y ladronzuelo amor, amor robado, el que de tus manos brota sobre mi rostro, ese rostro que te pertenece, amor de sueño, soñado y bendito amor, amor amante amor sereno, de noche amor, de amor la noche... De luna amor, de universo estrellado, mi amor, de tus labios carnosos, de tu cuerpo, de tus ojos fieros, este perverso amor, de sexo a sexo, de alma con alma, tu mirada, amor que fluye entre las venas, entre las ganas, ganas de amarte, de conjugarme en ti, de mezclar este amor ya de por sí revuelto, amor anudado, atado, enredado entre los besos, de amor besado, amor amante y despiadado, tu amor, mi amor, ese sentir que yo deseo amor, en tu cintura canela navegando, sin retorno, retorno que no quiero que no deseo, que solo muerto, me harán volver a donde nunca quise estar... Estar en tus amoríos quiero, quiero amor, amor del bueno, del que se siente del que quema, de aquel que incinera todo aun sin tocar. Amor amante, mi amor libre y verdadero, loco y destellado amor, amor de ti, de tu pecho, amor que solo encuentro en tus besos.
Suspirado y ladronzuelo amor, amor robado, el que de tus manos brota sobre mi rostro, ese rostro que te pertenece, amor de sueño, soñado y bendito amor, amor amante amor sereno, de noche amor, de amor la noche... De luna amor, de universo estrellado, mi amor, de tus labios carnosos, de tu cuerpo, de tus ojos fieros, este perverso amor, de sexo a sexo, de alma con alma, tu mirada, amor que fluye entre las venas, entre las ganas, ganas de amarte, de conjugarme en ti, de mezclar este amor ya de por sí revuelto, amor anudado, atado, enredado entre los besos, de amor besado, amor amante y despiadado, tu amor, mi amor, ese sentir que yo deseo amor, en tu cintura canela navegando, sin retorno, retorno que no quiero que no deseo, que solo muerto, me harán volver a donde nunca quise estar... Estar en tus amoríos quiero, quiero amor, amor del bueno, del que se siente del que quema, de aquel que incinera todo aun sin tocar. Amor amante, mi amor libre y verdadero, loco y destellado amor, amor de ti, de tu pecho, amor que solo encuentro en tus besos.
__
Casi
anochecía. Ya los restaurantes y cafés del pueblo iluminaban tenuemente sus establecimientos
como invitando a los turistas a entrar y disfrutar de la gran variedad
culinaria regional e internacional.
Guillermo
se detuvo frente al "Café de la Costa" y con su característica
sonrisa se volteó y dijo a su novio.
___
Entremos aquí, para que te sientas como en casa.
___
No vengo de París sino de Chile y antes de…, una península.
___ Ah,
bueno ¿quieres entrar? El propietario también es chileno y atiende personalmente a los
comensales.
____
Qué buen detalle. Parece que conoces muy bien al pueblo y sus habitantes.
___
Traigo turistas varias veces al año. Conozco y sus alrededores como la palma de
mi mano __mintió Guillermo.
____
¡Qué aroma a café!
____
¡Sí! Huele rico ¿verdad? A café recién molido y tostado.
El
dueño del establecimiento se acercó y les dio la bienvenida, tomó su orden e
hizo lo mismo con los clientes que recién ingresaban y tomaban asiento.
Pedro sacó el celular de su mochila y comenzó a digitar rápidamente.
Pedro sacó el celular de su mochila y comenzó a digitar rápidamente.
___
¿Te conectas a internet sin problemas aquí?
___
¡Claro! El 95% de hoteles, cafeterías y bares ofrecen conexión inalámbrica a
velocidades aceptables.
Él
parecía estar muy concentrado enviando y recibiendo mensajes y a pesar de que Guillermo
moría de curiosidad de saber con quién, no se atrevió a preguntar y quedar como un
entrometido.
___
Disculpa, es que estaba escribiéndole a mi enamorado.
___
¿Tu qué?
___
Mi enamorado, o sea mi novio. Él está en la casa ahora y se preocupa cuando no
respondo rápido a sus mensajes. Ya le avisé que estoy bien y que le haré un
video llamado más tarde.
Guillermo
sintió que su corazón cayó rebanado en dos sobre la mesa al enterarse de la
existencia de un hombre en la vida de
Pedro, ¿acaso lo había conocido en Chile? Sin duda él era un hombre afortunado. Intentó
encubrir su decepción y desencanto fingiendo una sonrisa, no quería que él
sospechara sobre sus sentimientos ocultos.
___
Mira, es él - dijo Pedro poniendo el celular sobre la mesa.
Guillermo
le echó un vistazo a la foto y lo que
vio fue a un hombre alto, atlético, con apariencia de deportista, de muy buen
parecer. Estaba en una playa junto a Pedro muy abrazado. Él, al ser de más baja
estatura reposaba tiernamente la cabeza sobre su pecho, definitivamente era un hombre afortunado y más que celos
sintió envidia de su suerte.
___
¿Qué lugar es ese?
___
Norte de Chile. Es en la playa de La Serena. Tiene las olas más cálidas del país. Es muy buscada
por los tablistas nacionales y extranjeros.
___
Parece ser un lugar muy bonito.
___
¡Lo es! En Chile tenemos kilómetros de
costa con olas perfectas para surfear. Marcial y yo amamos el surf y los deportes acuáticos.
Yo
solía navegar con mi velero cuando vivía allí, de niño, bueno, el de mi padre.
___
¿En serio? ¡Fantástico!
___
Me gusta tanto el océano que hasta me hice un tatuaje de ancla en el brazo -
dijo Pedro mostrándoselo.
___
¡Wow, sos todo un marinero! __exclamó
Guillermo tocando con suavidad el tatuaje.
Pedro
sintió electricidad recorriendo cada milímetro de su cuerpo cuando él posó sus
dedos sobre su piel, tan delicadamente como una frágil mariposa.
___
Yo también amo el océano ahora. ¿Marcial?
__Mi
primo, tonto, ¿qué crees Graziani? Los presentaré cuando logre convencerlo de
que venga a visitarnos.
___
¿Ah, sí?
___
¡Sí! - respondió Pedro sonriendo.
Esa
sonrisa era tan luminosa, solo comparable con el sol. Al contemplarla Guillermo
quedó extasiado, estaba sintiendo por ese joven algo inexplicable. Era un dolor
muy dulce que le producía un extraño placer. Su pulso se aceleraba cada vez que
lo miraba, era como si el corazón se le
fuera a salir del pecho. Su relación pintaba algo sólido y estable.
__Cómo
quisiera que estuvieras a mi lado siempre y poder sentirte junto a mí, sentir tu respirar
y el olor de tu cuerpo, el roce de tu piel junto a la mía que está deseosa por
tenerte. Mis instintos arden por dentro por sentir tu virilidad junto con tus
besos, tus caricias bordeando mi cuerpo
dibujando el perfil de mi figura con tus manos. Cómo deseo, que se
junten nuestros alientos y fundirnos en un solo cuerpo, para devorarnos como
dos amantes que se encuentran a los tiempos. Qué ganas de sentirte junto a mí,
juntos, para no separarnos y amarnos todas las noches con pasión y frenesí. Con
un amor tierno, de esos cuentos de duendes donde al final, el príncipe rescata a
su adonis, de su torre de cristal y vivir
felices para toda la eternidad.
__Que
se apaguen los mundos, que hablen las lunas de los amores prohibidos, que me
traigan los mares tus besos, que la noche me traiga ya los sueños, porque ya mi
alma desbordada está de ansias de amarte vida mía, sabes que en cada trazo de
mis letras y a través de mi desvelo llego a ti, y me instalo ahí donde desde
lejos me miras y me acaricias con tu sonrisa, siento, que cada mirada dice mi
nombre bajo esta oscuridad de la noche que agita mi piel porque atrapado me
siento en tus ojos, tú, vida mía, eres la sombra que elevas mis sentidos,
llevándome a ese oasis deseado de tus labios.
Ahora amor mío me instalaré con el sosiego que me permita mi mente, y ahí estaré a la espera de tu llegada, porque sé que no me dejarás solo esta noche, lo sé, porque este sentimiento enamorado me dice que tu alma necesita alimentarse de mis verbos. Dejamos atrás los miedos, ocultos tras desconfianzas, solo importan los momentos donde la ardiente pasión sublima nuestros instintos causando fascinación. Así te tengo en la cuna donde mi abrazo te arrulla, tú eres mío y yo soy tuyo… ardiendo en el fuego de la misma hoguera.
Ahora amor mío me instalaré con el sosiego que me permita mi mente, y ahí estaré a la espera de tu llegada, porque sé que no me dejarás solo esta noche, lo sé, porque este sentimiento enamorado me dice que tu alma necesita alimentarse de mis verbos. Dejamos atrás los miedos, ocultos tras desconfianzas, solo importan los momentos donde la ardiente pasión sublima nuestros instintos causando fascinación. Así te tengo en la cuna donde mi abrazo te arrulla, tú eres mío y yo soy tuyo… ardiendo en el fuego de la misma hoguera.
__
Me
atrapas y me condenas en esta
pasión que por dentro quema, sentimos cómo
fluye nuestra sangre y nuestros
sentidos unidos en un solo latido,
acompasados en el ritmo y movimiento le damos la emoción a nuestro divino momento. Nos consume el calor dilatando mis
dinteles, provocadora mi fuente va
destilando sus mieles.
Gemidos entrecortados te avisan que es el momento por los dos esperado de entregar nuestro portento. Aprisionas mi cadera reduciendo los espacios, el túnel parece abrirse recibiendo mi fortuna... mientras, por entre las nubes la luna nos va mirando.
Gemidos entrecortados te avisan que es el momento por los dos esperado de entregar nuestro portento. Aprisionas mi cadera reduciendo los espacios, el túnel parece abrirse recibiendo mi fortuna... mientras, por entre las nubes la luna nos va mirando.
Justo
de ti… mis ansias te roban las caricias, tus montañas por mi boca son escaladas, y tus
cúspides quedan a la intemperie esperando al volcán ver brotar su lava, tus
planicies encantadoras me empujan a dar
a las cataratas de tu querer… que en
delirante salto me llevan al pozo que define tu gozo y tu placer en el fondo de
tu sendero secreto.
__Llegan
a mí las más hermosas palpitaciones emanadas desde ese cielo azul donde mis
pensamientos divagan en un despertar de espejismos con tu linda presencia
entrañada en mis vacíos, donde tú eres esa estrella que brillará por siempre.
Mi sol, sus destellos.
Parece
que deambularas en este cielo azul, como un ángel con tus brazos abiertos
recibiendo esa energía estelar, de ese sol ardiente llegado a mí para
envolvernos entre imágenes candentes de placeres alineados.
Tu
rostro expresivo y deseoso, donde tus ojos son como el mar en el cual navego en
las más tranquilas aguas para llegar a tu encuentro en medio de la nada, entre
imágenes e ilusiones sentidas en el vacío.
En
ese vacío te encuentro y frente a frente nuestras miradas se entrelazan en un
acercamiento y deseo, las palabras sobran, solo nuestras miradas hablan y no
hace falta acariciarte o tenerte porque ya te amé entre imágenes.
07
de enero.
__Vamos
por los chicos que quiero verte desnudo
y tendido en la playa donde el
mar te seduce con cada ola que atraviesa
la arena húmeda, donde cubre tu
cuerpo y el mar juguetea con cada
ola. Mientras me sueñas que estoy a tu
lado y con cada beso que te doy hago
estremecer tu cuerpo que reconoce mis
caricias como las olas que
cobijan nuestro amor. Dormido te
vienes y humedeces las sábanas como las arenas al tocar las olas que embriagan mis besos en tu
lindo pecho y leves gritos que salen de
tus labios. Mientras te estremeces en
sueños húmedos bajo las olas de
este mar que te enamora entre mis brazos
y te hago mío en noches de playa y
bellas olas de este mar.
__Bajo
la luz de la luna nos demostramos este amor que
nos hace vibrar y suspirar cuando
me dices al oído, te amo. Hoy desperté en medio de un sueño en el que te
abrazaba. Nuestra respiración sonaba al unísono, acompasada. No hubo más que ese abrazo
fraternal tan necesario. De repente desperté como un disparo. La persona que
mis brazos estrechaban no eras tú. Esa suerte impostora de domingo que te
arrebató el alma y a mí el corazón.
__Pero era
todo un sueño, porque de hecho amaneciste en mis brazos y salimos tomados de la
mano a desayunar.
Ahora
la magia de tu belleza es más que una ilusión, cuando al bajar la mirada te observo cómo te espumas en el horizonte sin
dejar rastro, sos la luz que hace vibrar mi corazón y el dulce aroma que
grabado está en mi alma, al saborear la dulce esencia de tu recuerdo, el lento
caminar de mi destino como tu mirada la cual me guía en mi sendero como la
alegre sonrisa y tus suspiros, ahora ya no tengo ilusiones como la luz que se
apagó y ahora solo me llevo tatuado el
recuerdo de nuestro amor para esos instantes en que no puedo verte y tocarte.
Hoy en este día me siento más grande que el inmenso universo, caminé sobre las estrellas como si fueran las más suaves nubes, me siento estar en el mismo paraíso y me olvidé de las estrellas del universo, jamás olvides que la vida es eterna, somos como las flores en el inmenso valle de la pasión, porque tan solo pasamos un instante en el camino de la vida, hoy es el instante de llenarnos de amor y pasión. Cada vez que crees y sos honesto con vos mismo, mereces lo mejor de lo mejor. No permitas que traigan tempestades en tus días tranquilos. No temas decir sí, a lo que deseas llegar y por lo cual enfrentas tus batallas. Harás lo imposible y lo posible por alcanzar tus objetivos, suma triunfos que al final te permitirán levantar tus pensamientos y fortalecer tu libertad de decisión de que lo deseas y mereces. Si es necesario di no, sin tener culpa, cada vez que te digan no puedes o intenten desgastar tu esfuerzo, por lo que deseas lograr. No siempre estaré pegado para defenderte, tendré que dejarte solo andar el mundo y debes de saber hacerlo, cielito.
Hoy en este día me siento más grande que el inmenso universo, caminé sobre las estrellas como si fueran las más suaves nubes, me siento estar en el mismo paraíso y me olvidé de las estrellas del universo, jamás olvides que la vida es eterna, somos como las flores en el inmenso valle de la pasión, porque tan solo pasamos un instante en el camino de la vida, hoy es el instante de llenarnos de amor y pasión. Cada vez que crees y sos honesto con vos mismo, mereces lo mejor de lo mejor. No permitas que traigan tempestades en tus días tranquilos. No temas decir sí, a lo que deseas llegar y por lo cual enfrentas tus batallas. Harás lo imposible y lo posible por alcanzar tus objetivos, suma triunfos que al final te permitirán levantar tus pensamientos y fortalecer tu libertad de decisión de que lo deseas y mereces. Si es necesario di no, sin tener culpa, cada vez que te digan no puedes o intenten desgastar tu esfuerzo, por lo que deseas lograr. No siempre estaré pegado para defenderte, tendré que dejarte solo andar el mundo y debes de saber hacerlo, cielito.
__Abrázame
con el calor de tu piel, con lo suave de tus manos, acaríciame... Bésame tierna
y apasionadamente con esos labios tuyos; un beso candente... Mírame, desarma mi
estructura, desnúdame lentamente, tómame... Rompe mis oídos con el tono
avasallador de tu voz, enloquece mis sentidos, que nuestro pudor muera de
olvido... Que no exista paz en nuestra cama, que nuestras fuerzas se extingan deshaciéndose
en caricias, que mis ojos vivan con tu
imagen y tu imagen se quede en mí por
siempre. Sueña en mí, conmigo, con ambos, siénteme, deseo hacer un delirio de
esta pasión. Roza mi cuerpo, lacera, flagela cada parte, hazme trizas en un
golpe de placer, que mi humedad se evapore, que mi carne se convierta en polvo, que mi
último suspiro muera en tus labios, que mi último aliento lleve tu nombre
grabado.
__Llegaste
a mi vida cuando temía volver a caer... Y tus ojos me tendieron la mano. Llegaste
a mi vida cuando pensé en descreer del Amor. Y tu sonrisa me devolvió la confianza para
amar. Llegaste a mi vida cuando otra noche oscura se cernía y tus palabras fueron el bálsamo que todo lo
cura. Llegaste a mi vida cuando temblaba de miedo ante la soledad de quien para
sentirse vivo necesita amar de verdad y con pasión como si no hubiera ni principio ni fin... y
tu forma de llegar a mí, me enamoró para los restos sin más. Llegaste a mi vida
cuando más te necesitaba y espero te
quedes en ella, pues es mi deseo que veamos
infinitas puestas de sol juntos.
__
Hacía
calor, los días eran luminosos, una neblina titilante se alzó lentamente sobre
el paisaje pero terminó dispersándose con el sol de la mañana, el aire olía a
tierra húmeda y hierba recién cortada.
__ ¿Te
gustaría ir a nadar, Felipe? __ le preguntó Pedro cuando este se dio vuelta en
la cama, los ojos entrecerrados, la melena desperdigada en la almohada. Desde
esa posición, Pedro veía la leve pauta de las pecas en la nariz del chico que
sentía como un hijo, o un hermano pequeño, y las pestañas individualizadas por
el sol, pensó que nunca había lucido tan bonito.
__ ¿Vendrá
Guille también?
Pedro
no pudo evitar una sonrisa.
__
También vendrá Guille, sí. ¿Lo quieres mucho?
__Mucho,
a los dos.
__
__Papá,
¿qué le sucede a Pedro?
Hace
rato que está solo contemplando el mar, de a ratos echa a caminar. ¿No lo
acompañas? __dijo Fabián mientras desayunaba con Felipe.
__No
hijo, déjalo.
__Pero…
luego de lo que sucedió en el estudio, ¿no temes?
__No.
Tienes que entender que estuvo solo desde niño, si con toda una vida encerrado
en la iglesia no necesitara a tan poco de salir esos momentos a solas estaría
loco, es normal, tendremos que
respetarlo, hasta que al fin no sienta la necesidad.
__Está
bien, entiendo. Lo importante es que ustedes estén bien. ¿Se van a casar
pronto?
__Sí,
Guille, dile _acotó Felipe.
__No
lo apuren, no le he dicho nada al respecto, hijito, es demasiado pronto, hace
días estaba solo escondido en Chile, no le digan nada que pueda hacerlo
retroceder, ya oyeron a Jorge y en todo lo que dijo, tiene razón.
__Bueno,
Papá, está bien.
__Iré
con él por las cosas, no demoren.
__
Al
final Pedro cargó con una manta, toallas
de playa, repelentes de insectos, protector solar, un puñado de revistas viejas
y juegos, una nevera llena de té helado y gaseosas, varias bolsas de patatas
fritas, frutas y Guillermo un par de sillas de playa destartaladas, el tiempo
ese día era perfecto.
Llegaron
a la orilla justo antes de la hora del almuerzo.
Mientras
descendían a la playa solo Felipe hablaba contando de su vida en Misiones.
A
Guillermo le parecía milagroso sentir la mano de Pero enlazada en la suya, como
sentía que siempre había sido, como él lo había dicho, en cierto modo. Pero
ahora todo era diferente, ya no había un confesionario, un encuentro furtivo,
el juicio de pares, era diferente y mejor.
Una
vez en la playa, toda cohibición desapareció. Felipe entró gritando de alegría
en el bosque lindero llevando una toalla en lo alto encima de la cabeza, con lo
que ondeaba como una bandera. Fabián lo persiguió, apartando las ramas del
camino. Guillermo y Pedro los siguieron cargados con toallas y sillas de playa
y la nevera, en la que el hielo crujía.
La
playa estaba impecable. Habían instalado botes de basura en cada extremo con lo
cual botellas vacías, restos de comidas y colillas de cigarrillos ya no estaban
en la arena peinada.
La
luz del sol que se filtraba a través de los árboles coloreaba el agua con tonos
locos, púrpuras y verdes, y azules vívidos. Incluso la empinada pared de roca
al otro lado del agua desde la que los osados saltaban, se veía hermosa con
flores creciendo en las grietas de la piedra y enredaderas que bajaban hasta el
agua. Tostados por el sol, los árboles en la cima de la plataforma de salto ya
habían adquirido un color rojo fuego.
Felipe
corrió hacia Pedro que extendía la manta en el suelo de arena. Soplaba una
brisa ligera y tuvo que asegurar las esquinas con diferentes objetos, chanclas,
gafas de sol, una pelota de playa.
__ ¿Puedo
tirarme desde la plataforma, Pedro? _interrogó Felipe ante la mirada asesina de
Guillermo.
__Desde
allí se tira la gente que nada muy bien, Guille no lo hará ni tú tampoco, solo
quizá Fabián y yo.
_Yo
supongo que soy un gallina __dijo Guillermo guiñando un ojo a Felipe.
Por
un instante sus ojos se encontraron con los de Pedro. Nunca habrían adivinado
en abril, estar ahora comenzando el año así, libres y juntos, Pedro, su amigo,
su amor, y esa era la cuestión, Pedro era el de siempre, el mismo y también
alguien diferente al que llevaba sotana. Y eso mismo en cierto sentido llenaba
a Guillermo de esperanza. Las personas sí cambiaban, él mismo podía hacerlo,
ser feliz, de hecho ya lo era.
__No
es tan alto _comentó Felipe fascinado por cada sitio que visitaban entornando
los ojos__. ¿Cómo se sube?
__Trepando
_dijo Pedro.
Felipe
abrió la boca sin decir palabra.
__!
Vamos, Felipe! __Fabián estaba junto al agua, contoneándose para quitarse la
bermuda. A pocos metros, Guillermo lo miraba sonriendo___. ¡El primero que
entra al agua gana!
__No
es justo __gritó Felipe, pateando la arena y luchando para quitarse la camiseta
al mismo tiempo.
Pedro
y Guillermo se echaron de espaldas sobre la manta, la cabeza de Pedro sobre el
pecho fuerte de Guillermo. Cada cierto tiempo, él le pasaba los dedos con
suavidad por el pelo. Durante un rato estuvieron en silencio. No necesitaban
hablar siquiera. Pedro hoy sabía que sin importar lo que pudiera depararles el
destino en el futuro él siempre sería suyo y los dos siempre tendrían eso, un
día perfecto, un alivio temporal del frío.
Había
empezado a quedarse dormido cuando Guillermo se movió.
__Te
amo, Pedro.
Pedro
abrió los ojos. Hacía calor. Se sentía perezoso.
__Yo
también te amo __dijo. Las palabras brotaron sin ninguna dificultad.
La
vida te trata como la trates, al
igual que el amor y si yo no soy tu amor
seré tu vicio.
Buscaré
la intensidad de tus orgasmos atrapados
entre tus caderas en cada madrugada a solas haciéndote gritar mi nombre. Es inútil espiar mis pecados, no me arrepiento de ninguno de
ellos en los que tú estés presente Guille. Como una mariposa me
posé en tu corazón, tenía un sembradío
de rosas en el jardín de tus sentimientos, perfumaba tu alrededor con los
aromas del Amor. Yo embobado vivo embriagado del dulce néctar de esta
fascinación de tener tu pasión que es solo para mí porque tú me lo haces sentir
cuando encendemos la piel
del chispeante placer que es amar con todo nuestro ser. Y caminamos de la mano por este camino que elegimos tú y yo para vivir juntos con tempestades y arco iris coloreando esos momentos que inventamos para nosotros en este mundo que creamos para divagar en sueños e ilusiones con vuelos compartidos emplumando nuestras alas de amor, deseos, placeres y muchas pasiones. Porque somos dos locos enamorados de la vida y el amor.
del chispeante placer que es amar con todo nuestro ser. Y caminamos de la mano por este camino que elegimos tú y yo para vivir juntos con tempestades y arco iris coloreando esos momentos que inventamos para nosotros en este mundo que creamos para divagar en sueños e ilusiones con vuelos compartidos emplumando nuestras alas de amor, deseos, placeres y muchas pasiones. Porque somos dos locos enamorados de la vida y el amor.
Belleza
es tu mirada, aquella en donde veo reflejada las galaxias más hermosas, mirada
que es limpia como aquella lluvia que cae sobre tu piel, haciendo que la
humedad ciña tu silueta y se vean a través de tu ropa ese poder de tus
encantos, labios cual carmesí guardando besos con dulzura y mucha pasión que envolverán
a ese mortal que logre besar y posar sus labios junto a los tuyos, naturaleza
muy generosa con tu belleza sí que se dio el tiempo necesario para esculpir en
ti a un hermoso ángel, que ni el mismo Da Vinci ni Picasso con la gran
habilidad que tuvieron sus manos podrían haber logrado. De tu sonrisa que puedo
decir sí es esencia pura y divina que habita en tu corazón, cual frescura con
el rocío de una mañana ligeramente fría con gotitas de agua en las hojas que
hay en el campo.
Es
mi corazón reviviendo el amor, que desde antes, ya estuvo aquí. Entre tus
pestañas y mis abrazos la vida dibujó magia pura e insaciable, de placer incesante
y ternuras habituales. Tus mejillas brillaban como brillan las gotas del rocío
en los pétalos de lirios, cual celeste matinal. Ojos de semillas y tu suave
bamboleo al andar abrillantan tus blondas en los cielos... aún amo tus potras, al verte caminar. Mis besos
calaron tus perennes cordilleras y la entrega en forma de verbo llegó, como
llega un príncipe al corazón de su princesa. Vestido completamente de candor me
viste dibujando tus latidos, cegado en tus esculpidas montañas y abatido de
amor, en las leñas de tu deseo.
Amanecer
contigo es besar el cielo en las catatumbas, es alcanzar las estrellas en alba,
es explorar la luna blanca en una noche volcada. Amanecer contigo es mirar el
firmamento sin límites, es observar las constelaciones sin rumbo fijo, es visualizar
el horizonte. Amanecer contigo es tocar tu esencia, es querer tenerte en mi
lecho y saber de lo que estás hecho,
es tocar tu corazón que se desnuda ante mí, es tocar tu alma y adentrarme en tu ser amor mío,
Y ser tu prisionero o esclavo, devoto de tu amor, lleno de pasión, trasladándonos al centro del universo cuando solo tú y yo estamos juntos, y amanecemos pegados.
Cuando solo tú y yo estamos juntos, en el diáfano panorama de mis cavilaciones, en mi ilimitado campo de flores esparcidas. Vives en mi piel cuando las dudas invaden mi espacio, en los dones de tus rítmicos encantos, en el sabor de cerezas y dátiles que deleitan tu avidez de lunas compañeras. Vives en mi piel suavemente, en los dominios de tus apetencias, en la indulgencia de las peticiones, en el magisterio de las palomas. Vives en mi piel más allá del relieve de los muros, más cerca de las siluetas bosquejadas, en el alba de las súplicas, en la confluencia de mis candiles que te necesitan.
es tocar tu corazón que se desnuda ante mí, es tocar tu alma y adentrarme en tu ser amor mío,
Y ser tu prisionero o esclavo, devoto de tu amor, lleno de pasión, trasladándonos al centro del universo cuando solo tú y yo estamos juntos, y amanecemos pegados.
Cuando solo tú y yo estamos juntos, en el diáfano panorama de mis cavilaciones, en mi ilimitado campo de flores esparcidas. Vives en mi piel cuando las dudas invaden mi espacio, en los dones de tus rítmicos encantos, en el sabor de cerezas y dátiles que deleitan tu avidez de lunas compañeras. Vives en mi piel suavemente, en los dominios de tus apetencias, en la indulgencia de las peticiones, en el magisterio de las palomas. Vives en mi piel más allá del relieve de los muros, más cerca de las siluetas bosquejadas, en el alba de las súplicas, en la confluencia de mis candiles que te necesitan.
Tus
ojos y mis ojos sean de contemplar en la
quietud de la luz crepuscular, beberemos el alma anheladamente y tu rostro se
anidará en mi mente. Como dos aves que abren sus alas, en los albores del amor,
y ansias, en la paz de la tarde con ilusión
surcando el cielo con latir del corazón. El ocaso se pinta de color
ternura, en un azul de alegría
envuelve, cautiva, con manto de estrellas del cielo, augura el andar cadencioso de la luna de oro va. Al
saberme tuyo, y al saberte mío, seremos el ocaso y alba, la noche y el
día, conscientes de nuestro ser en
mortalidad en el sereno atardecer convertido en eternidad. Cuando en tus
pupilas mi ser vi plasmar como el reflejo del sol en el agua del mar, y en
ellas se sumergió mi alma, mi mirar
con sed de amor, decidí caminar contigo la vida. Soy aquel que te espera, oculto, detrás de cada hora. Que vive de tus segundos, de tus migajas, de tus sobras, que tiene que ser roca, respira sin hacer ruido, para que nadie sepa que soy tu amante, tu amante bandido, ese suspiro, del que nunca te enterarás, porque tu amor, ante el mío, nunca superarás. Soy verbo más que callado porque mi prosa, mi poesía, mi llanto, viajan en el silencio, tras bambalinas de tus encantos. Soy casi cero y sin embargo, soy infinito, rogando al tiempo y a tu cuerpo
que sacies en mí, tus salvajes instintos. Amante soy de tu alma y de tu cuerpo, si quieres, también. Déjame arrancar tus suspiros, que seas de mi cama el vaivén.
con sed de amor, decidí caminar contigo la vida. Soy aquel que te espera, oculto, detrás de cada hora. Que vive de tus segundos, de tus migajas, de tus sobras, que tiene que ser roca, respira sin hacer ruido, para que nadie sepa que soy tu amante, tu amante bandido, ese suspiro, del que nunca te enterarás, porque tu amor, ante el mío, nunca superarás. Soy verbo más que callado porque mi prosa, mi poesía, mi llanto, viajan en el silencio, tras bambalinas de tus encantos. Soy casi cero y sin embargo, soy infinito, rogando al tiempo y a tu cuerpo
que sacies en mí, tus salvajes instintos. Amante soy de tu alma y de tu cuerpo, si quieres, también. Déjame arrancar tus suspiros, que seas de mi cama el vaivén.
Si
yo me atreviera a confesarte, que eres tú, lo más importante, que te pienso al
despertarme, y te sueño al acostarme, si me atreviera a mirarte, y pudieras ver
las constelaciones que veo en tu semblante, vivo por ti, cada instante. Ojalá
pudiera en silencio hablarte, labios terciopelo besarte, abrazarte con ansias
sin soltarte, amarte en libertad demencial. Si pudiera confesarte abiertamente mis
intensos sentimientos, que eres una necesidad en mi existencia, y bendigo tu
sublime existencia. Quizá si te voltearas a ver el brillo de mis ojos, mi
sonrisa brillante, lo alegre de mi alma, mi corazón palpitante, encontrarás que
eres tú la única causa.
Si
me atreviera a confesarte pero no me atrevo, espíritu libre, amo tu vuelo y la
libertad de tus alas, la quietud de tu vuelo. Te amo en silencio. Aún no tengo
tus labios, aún no tengo tus besos, son
fugaces en cada encuentro, cuando cada
mirada desnuda el alma, tus brazos me alcanzan,
presa de tu corazón, de tu pasión, de este deseo que se convierte en lujuria,
en gemidos, en gritos incesantes en el silencio de la madrugada, y aquí me
tienes esperando por ti, tocando el cielo tocando el infierno, o el paraíso.
__Confiesa
que me amas, que extrañas mi mirada mi
sonrisa y mis ganas. Confiesa que mi recuerdo llega por las noches y se mete entre tus sueños, se queda muy adentro esperando no despertar, imploras quedarte un instante más. Confiesa
que siempre hay una palabra que alguien
pronuncia y te hace perder la calma. Despiertas
y abrazas a la almohada esperando vivir
la fantasía de que en ella se encuentra
mi cuerpo. Confiesa que cada mañana esperas
un mensaje, una llamada para calmar un poco la inquietud de tu alma. Confiesa que aún llega la canción con la cual hicimos el amor la primera vez y la piel te grita en tu interior el nombre que quieres olvidar pero jamás lo lograrás. Confiesa que estás buscando desesperado alguien
que te dé la paz, el consuelo y cuando piensas que lo has logrado tu corazón lo desecha.
Porque bien sabe que no es amor. Confiesa que a pesar del largo tiempo no puedes encontrar los sentimientos que se quedaron conmigo y que tú amor mío cuando nos separaron te quedaste vacío.
un mensaje, una llamada para calmar un poco la inquietud de tu alma. Confiesa que aún llega la canción con la cual hicimos el amor la primera vez y la piel te grita en tu interior el nombre que quieres olvidar pero jamás lo lograrás. Confiesa que estás buscando desesperado alguien
que te dé la paz, el consuelo y cuando piensas que lo has logrado tu corazón lo desecha.
Porque bien sabe que no es amor. Confiesa que a pesar del largo tiempo no puedes encontrar los sentimientos que se quedaron conmigo y que tú amor mío cuando nos separaron te quedaste vacío.
__Así
fue cuando me trasladaron, ya te amaba y había decidido que más que a Dios.
Guillermo
acababa de besarlo __una vez suavemente, en la frente, y luego en la cara, con
más intensidad, en los labios, después que Pedro inclinara la cabeza hacia la
suya, cuando oyó gritar a Felipe.
__!
Pedro!
Felipe
estaba en la cima misma de la roca. No lo había visto trepar, debía de haberlo
hecho muy rápido. Pedro sintió un latigazo de miedo, Guillermo se quedó sin
capacidad de hablar.
Ahora estaban en el agua, no podía creer que había
arrastrado a Guillermo hacia el mar, Fabián solo a metro de ellos.
__Mírenme
_alardeó Felipe___. ¡Voy a saltar!
Y lo
hizo, sin vacilar. Se arrojó al vacío y durante un segundo pareció quedar
suspendido en el aire, los brazos y las piernas extendidas, la boca abierta,
riendo. Y un momento después entraba en el agua y volvía a superficie
escupiendo agua.
__ ¿Lo
vieron? __gritó___. No me dio miedo. Para nada.
Una
oleada de alegría inundó a Pedro y lo hizo sentirse leve y un poco mareado. Antes
de que Felipe hubiera alcanzado la orilla, se puso de pie y se zambulló para
coger a su amigo y devolverlo al agua justo cuando empezaba a ponerse de pie.
__No
tenías miedo, ¿eh? __Pedro atacó el estómago de Felipe mientras él se retorcía
chillando de risa y gritaba a Guillermo pidiendo ayuda ___. Las cosquillas sí
que te dan miedo, ¿no es así?
__!
Guille, socorro! _gritó Felipe al tiempo que Pedro lo envolvía en un abrazo de
oso.
__!
Voy, Felipe!
Y un
instante después Guillermo chapoteaba hacia ellos. Los alcanzó y tiró de Pedro
hacia atrás, con lo que ambos se derrumbaron en el agua. Pedro se levantó
escupiendo, riéndose, empujándolo.
__No
te podrás librar de mí tan fácilmente _dijo Guillermo que siguió rodeándolo por
las caderas. Sus ojos eran reflejo del agua. Su Pedro, su Guille, su amor.
__Chicos,
no peleen _dijo Fabián burlándose.
El
viento les puso la carne de gallina, pero el sol aún calentaba, Pedro tenía conciencia de que ese día, ese sentimiento de plenitud, no podía durar
exacto para siempre. Todo pasaba, y eso, el hecho que pasara, formaba parte de
su belleza. Volvería a sentirse raro libre, a vivir cosas difíciles. Era
inevitable. Pero eso ya no era un problema. La ola gigante de su sueño, aquella
ola de miedo ya no lo podría arrasar, porque su ancla de oro, su tierra firme
era… Guillermo, y él sí sería su amor eterno. El valor estaba en seguir
adelante, sin importar qué, estaba bien a veces temer, sería idiota y no
valiente de lo contrario, pero sabiendo que siempre habría una salida, y esa salida
era el amor.
__
Por ti me reinventé de mil maneras. Si
volviera a nacer lo haría otra vez. Luché, me anonadé y logré tu amor.
Eres un maravilloso caballero que desde el principio robó mi corazón, me aceptaste como soy con dulzura y admiración me envolví en la magia del amor. Me comprendes a la perfección, compartes mis sueños y tristeza, por las noches eres pasión, maestro perfecto del amor. Tu corazón late con más fuerza cuando estoy junto a ti, tu mirada seduce mi alma, sediento besas mi boca. Mi cama está feliz de sentir tu calor y de que pasemos noches en vela disfrutando el amor, bajo la luz de las velas. Amorcito corazón nunca te vayas de mi vida, eres el complemento perfecto mi eterno compañero. Amor eterno he de vivir a tu lado en la pobreza y riqueza nunca podría alejarme de ti, compaginamos muy bien el amor. Soy inmensamente feliz desde que apareciste en mi vida, eres luz y manantial que da bienestar y seguridad en cada paso de mi vida.
Eres un maravilloso caballero que desde el principio robó mi corazón, me aceptaste como soy con dulzura y admiración me envolví en la magia del amor. Me comprendes a la perfección, compartes mis sueños y tristeza, por las noches eres pasión, maestro perfecto del amor. Tu corazón late con más fuerza cuando estoy junto a ti, tu mirada seduce mi alma, sediento besas mi boca. Mi cama está feliz de sentir tu calor y de que pasemos noches en vela disfrutando el amor, bajo la luz de las velas. Amorcito corazón nunca te vayas de mi vida, eres el complemento perfecto mi eterno compañero. Amor eterno he de vivir a tu lado en la pobreza y riqueza nunca podría alejarme de ti, compaginamos muy bien el amor. Soy inmensamente feliz desde que apareciste en mi vida, eres luz y manantial que da bienestar y seguridad en cada paso de mi vida.
Un
ser extraordinario que cambia mis días, transforma mis noches, quien cuida mis
desvelos y vigila de ellos. De un noble corazón del cual aprendo de él en todo
momento, compartiendo cada minuto haciéndolo único. Que alborota un cosquilleo
en mi estómago cuando estamos juntos y grandes muecas de alegría sin parar. Sí,
tú quien me sorprendes a cada instante
con tu ternura y esa loca manera de amar sin cesar. Soltando una gran chispa de
romanticismo envuelta entre besos y una
gran ternura de quererme. Das todo de ti, eres tan transparente que al instante
puede distinguirse el noble corazón que habita en tu ser.
Nada te detiene para obtener tus ideales, mas no puedes ocultar cuando se apodera de ti la tristeza y así niegas. He conocido tanto de ti que leo tus pensamientos, gozo al escuchar de tu boca la palabra te amaré por siempre.
Nada te detiene para obtener tus ideales, mas no puedes ocultar cuando se apodera de ti la tristeza y así niegas. He conocido tanto de ti que leo tus pensamientos, gozo al escuchar de tu boca la palabra te amaré por siempre.
Un
beso dado con todo el corazón puede ser el arma más letal. Y que dado en
circunstancias de luna llena puede afectar la fuerza gravitatoria de tu vida. Dado
en un momento preciso del tiempo y el espacio puede ser inoxidable e
inolvidable. Hay besos que son un tesoro de por vida. Por el deseo por unos
labios y el secreto de sus mieles, se ha perdido la razón y muchas veces
ha sido motivo de locura. Y negado en una conjunción de sentimientos puede
dejar una cicatriz invisible en el corazón. Y dado con la furia de los
elementos en comunión entre sangre y carne se puede quemar hasta tu alma.
Por un beso se han vendido ciudades, por un beso prohibido se ha perdido todo, por una tentación en rojos labios no se ha ganado nada, otros descubrieron el camino al paraíso y más de algunos se fueron al infierno. Porque un beso puede ser preludio de una sinfonía, melodía de una primavera, ignición de incendios sin control, chispa determinante y definitiva en un incendio de grandes proporciones.
Por un beso el fuerte se hizo débil y el débil fue más fuerte que el acero, por un beso en marea alta y a mar abierto con la luna de testigo un poeta hizo poesía, y por un beso robado un poeta se hizo argonauta. Porque un beso puede ser breve y dejar una huella hasta el infinito. Pero lo más triste sin duda es que con un beso se selló la traición a un dios. Mas el nuestro, es un beso que sella el amor.
Por un beso se han vendido ciudades, por un beso prohibido se ha perdido todo, por una tentación en rojos labios no se ha ganado nada, otros descubrieron el camino al paraíso y más de algunos se fueron al infierno. Porque un beso puede ser preludio de una sinfonía, melodía de una primavera, ignición de incendios sin control, chispa determinante y definitiva en un incendio de grandes proporciones.
Por un beso el fuerte se hizo débil y el débil fue más fuerte que el acero, por un beso en marea alta y a mar abierto con la luna de testigo un poeta hizo poesía, y por un beso robado un poeta se hizo argonauta. Porque un beso puede ser breve y dejar una huella hasta el infinito. Pero lo más triste sin duda es que con un beso se selló la traición a un dios. Mas el nuestro, es un beso que sella el amor.
Regresaron
a la casa tras el ocaso, y mientras los chicos se quedaron viendo tele en la sala, Guillermo llevó a
Pedro a la suite, embobados del amor y la libertad de estar en ese paraje
encantado, sin fantasmas, sin pasado.
__Sos
pura sensualidad que embriagas sin aparentes motivos y razones de un dulce y
bello adonis que inquieta nuestros corazones. Figura candente y sugestiva
solo cubierta de tersa piel, tu cuerpo de radiante hermosura de dulce
néctar y miel. Beberé de vos toda tu esencia
que emana de seres celestiales poseyéndote en mi demencia con caricias atrevidas y sensuales. Éxtasis y placer del atrevimiento que sublimas a nuestras vidas con el goce y el advenimiento que alegra existencias sufridas. Para tus oídos, bellas melodías, para tus ojos... radiantes colores estimulando todo tu ser vida y amor de mis amores. Me propuse hace meses el reto de conquistar un ángel con honor y gallardía, estoy dispuesto a hacerte siempre feliz ya que pude alcanzarte. Si no miente tu mirada atrevida todo lo propuesto se alcanza
como lo dicta la ley de la vida con amor y un poquito de esperanza.
que emana de seres celestiales poseyéndote en mi demencia con caricias atrevidas y sensuales. Éxtasis y placer del atrevimiento que sublimas a nuestras vidas con el goce y el advenimiento que alegra existencias sufridas. Para tus oídos, bellas melodías, para tus ojos... radiantes colores estimulando todo tu ser vida y amor de mis amores. Me propuse hace meses el reto de conquistar un ángel con honor y gallardía, estoy dispuesto a hacerte siempre feliz ya que pude alcanzarte. Si no miente tu mirada atrevida todo lo propuesto se alcanza
como lo dicta la ley de la vida con amor y un poquito de esperanza.
__Me
encantaría crearte la fábula de amor, más hermosa del mundo, más sería solo
eso, una fábula, una ilusión que quizá, más temprano que tarde, se diluya
entre otros pensamientos.
Por
eso prefiero escribirte letras, palabras, las mismas, los mismos puntos, con mi
misma firma, con este sentimiento que aflora cada día más, y es por ti.
Hoy,
me gustaría escucharte, que el eco de tu voz me acompañe, en todos mis
momentos, en los alegres, en los tristes, en esos espacios, donde muchas veces
se esconde, lo más puro, por no ser tan obvio, hombre enamorado. Tú, solo tú.
Pablo
Neruda declaró, "confieso que he vivido." Yo, confieso que te Amo,
con mis defectos, con mis luchas, con mis años, pero más, con este sentimiento,
que gracias a ti, vive en mí... El Amor.
Aún
tengo tu aroma impregnado en la piel, en el aire que respiro, esta,
cada parte de tu ser y en un halo de viento en medio de este calor
intenso te siento, eres la luz de mi alma,
hombre que yo quiero, el que hace el amor sin sosiego, eres pasión , eres ternura, eres fuego.
Cuando me distiendo en tus brazos siento que toco el cielo, cuando te beso concibo emociones que recorren mi cuerpo, siento que tu aliento me hechiza y me entrego en deseos, como si estuviera sediento de saborear tus besos, de sentir tu cuerpo en mi cuerpo.
hombre que yo quiero, el que hace el amor sin sosiego, eres pasión , eres ternura, eres fuego.
Cuando me distiendo en tus brazos siento que toco el cielo, cuando te beso concibo emociones que recorren mi cuerpo, siento que tu aliento me hechiza y me entrego en deseos, como si estuviera sediento de saborear tus besos, de sentir tu cuerpo en mi cuerpo.
__Mi
bello dios, no sé por qué te extraño tanto, solo sé que me hace falta tu
presencia y sueño con el momento de abrazarte, darte un beso y mirándote a los
ojos decirte cuánto te amo.
Para mí sos lo más bello en este mundo, la prueba irrefutable de que existe un creador, ya que solo sus manos, pudieron dar a luz un ejemplo digno de tanta belleza, por ello le agradezco a la vida, haberme concedido la dicha de conocerte y a diario le pido al cielo, me permita estar con vos hasta el día de mi muerte. Ahora me despido con el alma llena de gozo al sentirme amado y al haber desahogado mi sentimiento. Se despide de vos quien más te ha amado.
Para mí sos lo más bello en este mundo, la prueba irrefutable de que existe un creador, ya que solo sus manos, pudieron dar a luz un ejemplo digno de tanta belleza, por ello le agradezco a la vida, haberme concedido la dicha de conocerte y a diario le pido al cielo, me permita estar con vos hasta el día de mi muerte. Ahora me despido con el alma llena de gozo al sentirme amado y al haber desahogado mi sentimiento. Se despide de vos quien más te ha amado.
Para
vos, mi primera carta de amor _dijo Guillermo entregándola en mano, las miradas
en una, las almas encendidas titilando.
Solo
me faltó escribir una cosa.
__
¿Qué? __preguntó Pedro.
__ ¿Te
gustaría que antes de regresar, en presencia de mi hijo y Felipe, nos
comprometamos?
¿Estás
preparado para ser mi novio oficialmente pase lo que pase al regresar?
__Búscame
entre esas ganas de amarme o matarme, entre esos sueños húmedos de madrugada, entre
las sábanas donde aún está impregnado mi olor, entre esos recuerdos donde mi
gemir ocasionó orgasmos. ¿Qué prefieres, amarme o matarme? Si escoges amarme,
hazlo, ven, ámame, desvísteme con suavidad, acaríciame despacio, recorre mi
piel con tus labios hasta llegar a esos puntos de locura, donde tu lengua juega
un papel muy importante. Enloquéceme con tus suspiros, con tus murmullos, entre
medio de quejidos, un te amo al oído, miradas donde se desborda lo que tú y yo
sentimos, hagamos el amor al ritmo de nuestro pulso y acabemos juntos envueltos
por el amor. Si escoges matarme, hazlo en lo desconocido, en lo prohibido,
seamos un secreto pervertido. Ven, mátame, seamos dos fieras indomables,
hagamos el sexo a lo salvaje, tatúame tus mordidas mientras yo dibujo en tu
piel mis arrumacos. Desgastemos estás ganas de comernos, de hacerme tuyo y tú,
mío, mátame de placer, de lujuria, de deseos en el cuarto, en la cama, en el
piso o donde sea, qué más da.
__Amante
mío. Mi carne se diluye en tu fluir de los vientos. Y es una puñalada tu deseo
candente sobre la cruz del alma. Soy el amante ardoroso del volcán encendido de
tu cuerpo y te dibujo pájaros que te rozan
con mis dedos abiertos porque estoy en tu río de sal y de calor esta
mañana y surcas los canales de mi pecho mojando con tu aliento. Amo la audacia
loca de tus manos volando por mi piel como la llama, mi exquisito fantasma que clausuras el ansia
que duerme en mis adentros. Soy ruiseñor de gasas celestes que picotea tu lanza
desmayada.
Soy la golosa y peregrina fuente de esta ansiedad que sientes y que siento. Soy la luz de tus secretos, sos el recinto de mi deseo. Por vos cantan mis labios al rozar tu delicia con este ardor eterno. Porque sos mi nave pasajera, mi puerto y mi ancla, he de hundirte en tu ser como lo más hermoso que te entrego. Y un pájaro de niebla te desgaja la piel y así entro en tu alma.
Y un pájaro de niebla me desgarra y me sacia con tu cuerpo.
Son tus besos, elixires ungidos de pasión, caricias, en los arcos del amado, empatía en las redes del amor. Fragancias de liturgias, pasionales ternuras de cohesión entre los dos, sensaciones pirotécnicas, del deseo y el amor. Inquietud en la mirada, turgencia en las lenguas enredadas que se alea, a la mente con el alma. Enhebrando la ansiedad de los cuerpos ambrosia silenciosa del deseo. Ya mis ojos solo miran tus pupilas, y conversan a escondidas, en el iris de tu amor. Mis labios, se hidratan en los tuyos, bulbosos, abisales, bucólicos y granates, se alean a los elixires de tu cuerpo. A la trasparencia de tus ojos, y al perfil de tu semblante, derramando en cada poro, la necesidad y el énfasis, del encuentro amoroso. De las lenguas sonrosadas, del abrazo permanente, de dos cuerpos que se aman. Mis manos se unen a las tuyas. Mi pecho sintiendo la esponjosidad de tu botón, las lenguas ara, las profundidades de las bocas, y labran los sentimientos encendidos de un hombre con su par completando el círculo del yin yang. Sobredosis de endorfinas, y en la cara dibujada, una sonrisa placentera.
Soy la golosa y peregrina fuente de esta ansiedad que sientes y que siento. Soy la luz de tus secretos, sos el recinto de mi deseo. Por vos cantan mis labios al rozar tu delicia con este ardor eterno. Porque sos mi nave pasajera, mi puerto y mi ancla, he de hundirte en tu ser como lo más hermoso que te entrego. Y un pájaro de niebla te desgaja la piel y así entro en tu alma.
Y un pájaro de niebla me desgarra y me sacia con tu cuerpo.
Son tus besos, elixires ungidos de pasión, caricias, en los arcos del amado, empatía en las redes del amor. Fragancias de liturgias, pasionales ternuras de cohesión entre los dos, sensaciones pirotécnicas, del deseo y el amor. Inquietud en la mirada, turgencia en las lenguas enredadas que se alea, a la mente con el alma. Enhebrando la ansiedad de los cuerpos ambrosia silenciosa del deseo. Ya mis ojos solo miran tus pupilas, y conversan a escondidas, en el iris de tu amor. Mis labios, se hidratan en los tuyos, bulbosos, abisales, bucólicos y granates, se alean a los elixires de tu cuerpo. A la trasparencia de tus ojos, y al perfil de tu semblante, derramando en cada poro, la necesidad y el énfasis, del encuentro amoroso. De las lenguas sonrosadas, del abrazo permanente, de dos cuerpos que se aman. Mis manos se unen a las tuyas. Mi pecho sintiendo la esponjosidad de tu botón, las lenguas ara, las profundidades de las bocas, y labran los sentimientos encendidos de un hombre con su par completando el círculo del yin yang. Sobredosis de endorfinas, y en la cara dibujada, una sonrisa placentera.
Y en
el iris de tus ojos, ese brillo
descubriendo emociones satisfechas, de un momento inspirado. Son los besos
deseados son los besos soñados, que se quedan indelebles, para luego recordarlos. Cómo olvidarme si aún
me quedan huellas por dejar, si mi piel tiene las marcas de mi proceder, mis
manos guardan más que las caricias recibidas... las caricias que fueron
otorgadas, aquellas que se quedaron en la antesala de ser expresadas. Cómo
olvidarme
si sé que todavía existes, si sé que todavía tus labios tienen la esperanza de ese beso, beso que una vez me negaste y que creí haber olvidado. Cómo olvidarme si en mí se hallan aquellas palabras de afecto, ese buen consejo, el abrazo de un amigo, esa tertulia que cierta noche nos perdimos esa mirada tuya, ese suspiro mío. Cómo olvidarme si aún respiro, si aún tengo frío, si de noche recuerdo tantas cosas, cosas que me vuelven taciturno, si todavía camino sin rumbo fijo, que no he podido olvidar aquellos momentos, aquellas acciones que a mi pensamiento incomodan, que provocan que la tristeza me visite o que la alegría haga fiesta, que viva en eterna algarabía o que la soledad me invite a su mesa.
si sé que todavía existes, si sé que todavía tus labios tienen la esperanza de ese beso, beso que una vez me negaste y que creí haber olvidado. Cómo olvidarme si en mí se hallan aquellas palabras de afecto, ese buen consejo, el abrazo de un amigo, esa tertulia que cierta noche nos perdimos esa mirada tuya, ese suspiro mío. Cómo olvidarme si aún respiro, si aún tengo frío, si de noche recuerdo tantas cosas, cosas que me vuelven taciturno, si todavía camino sin rumbo fijo, que no he podido olvidar aquellos momentos, aquellas acciones que a mi pensamiento incomodan, que provocan que la tristeza me visite o que la alegría haga fiesta, que viva en eterna algarabía o que la soledad me invite a su mesa.
Cómo
olvidarme si no he podido olvidar tus bellos ojos, esa caricia que en mí quedó
perdida, esas ganas de gritar..."vamos lejos " conozcamos nuevas
tierras, nuevas formas de pensar, vivamos el hoy porque no sabemos si el mañana
para nosotros existirá. Cómo olvidarme, cómo
dejar de pensar, podré dejar de existir quizá nadie me recordará más no podré
olvidarme, porque en vos siempre habrá algo de mí. Nunca podré olvidar nada, ni
siquiera aquellos encuentros en el confesionario… cuando me eras Prohibido.
__Que
nada nos separe... Bajo la luz de la
luna frente al mar tumbados sobre la arena contándonos el día
a día mientras nos acariciamos y entre risas nos besamos. Me encanta
sentir tus labios, oírte reír, acariciar tu piel, me encanta ver cómo te
excitas, quiero besar tu cuerpo, alcanzar el éxtasis. Ven ponte encima sobre
mí, quiero sentir el peso de tu cuerpo, besarte, rodear con mis manos tu
cadera, quiero que serpentees sobre mí, siente mi erección, lo que tú provocas
en mí es maravilloso, solo con tenerte cerca me siento tan
bien que no quiero que nos separemos jamás. Esta pasada noche te
dibujé a besos. Vi cómo te adentrabas en mi alma hasta llegar a mi corazón descubriendo
cada uno de mis deseos.
Contemplé cómo con tus labios ibas descubriendo lo más oculto, lo más íntimo de mi propio ser. Desnúdame ante ti. Seré solo tuyo postrándome ante ti para satisfacer cada uno de tus sueños. Mis deseos son tuyos. Morderé tu alma para saber todo lo que tu mirada grita y quiero espirar el aroma de tu piel hasta llegar a rozar las estrellas. Encontrar las palabras exactas para hacerte gozar de placer. Que me hagas tuyo para no extrañarte, para saciar esta sed, para retenerte eternamente en mí, señor, porque sus manos fueron palomas de la paz sobre mi cuerpo, que guerra buscaba... Su boca entre mis labios, fuente inagotable de amor,
haciéndolos derramar manantiales de agua dulce. Fue su abrazo, lugar tranquilo para mi reposo. En la penumbra de un cuarto dos amantes, dos miradas que se cruzan, dos cuerpos desnudos, labios que se buscan, manos recorriendo de extremo a extremo, pieles que lentamente se encienden con los besos, camino de placeres que conduce a la fuente
del deseo y la pasión, dedos temblorosos auscultando el misterio, sangre que hierve, cuerpos transformándose en hogueras infernales, humedades que brotan, suspiros y gemidos que nacen en la garganta y lo invaden todo, dos cuerpos unidos, satisfechos, convertidos en uno e iluminando los verdaderos secretos del amor.
Contemplé cómo con tus labios ibas descubriendo lo más oculto, lo más íntimo de mi propio ser. Desnúdame ante ti. Seré solo tuyo postrándome ante ti para satisfacer cada uno de tus sueños. Mis deseos son tuyos. Morderé tu alma para saber todo lo que tu mirada grita y quiero espirar el aroma de tu piel hasta llegar a rozar las estrellas. Encontrar las palabras exactas para hacerte gozar de placer. Que me hagas tuyo para no extrañarte, para saciar esta sed, para retenerte eternamente en mí, señor, porque sus manos fueron palomas de la paz sobre mi cuerpo, que guerra buscaba... Su boca entre mis labios, fuente inagotable de amor,
haciéndolos derramar manantiales de agua dulce. Fue su abrazo, lugar tranquilo para mi reposo. En la penumbra de un cuarto dos amantes, dos miradas que se cruzan, dos cuerpos desnudos, labios que se buscan, manos recorriendo de extremo a extremo, pieles que lentamente se encienden con los besos, camino de placeres que conduce a la fuente
del deseo y la pasión, dedos temblorosos auscultando el misterio, sangre que hierve, cuerpos transformándose en hogueras infernales, humedades que brotan, suspiros y gemidos que nacen en la garganta y lo invaden todo, dos cuerpos unidos, satisfechos, convertidos en uno e iluminando los verdaderos secretos del amor.
Quiero
ser oficialmente tu prometido, Guille, te amo, pase lo que pase, ya soy solo
tuyo, para siempre, ya no seré nunca… Prohibido.
CONTINUARÁ.
HECHOS
Y PERSONAJES SON FICTICIOS. CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES COINCIDENCIA.
LENGUAJE
ADULTO. ESCENAS EXPLÍCITAS.
Lavi Zapién Hermoso
ResponderEliminarRaquel bellísima!!!
ResponderEliminarEdel Hermosura
ResponderEliminarPatricia. Maravilloso. Muchas gracias querida Eve Monica Marzetti. Muy amable. Cariños
ResponderEliminarPatri Bellísimo!!!
ResponderEliminarGladis Gracias, hermoso
ResponderEliminarEdna Placer leer
ResponderEliminarAlba iiiBelleza
ResponderEliminarValencia Agua mansa eres,rocio en mis humedades!!hermoso!!
ResponderEliminarAida Leonor hermosa
ResponderEliminar1
Tamaira Sanarrucia Bonita
ResponderEliminarHortensia Bello !!
ResponderEliminarIsabel Muy emotivo querida
ResponderEliminarGaby Bello
ResponderEliminarBellísimo Eve...Qué más agregar? La magia del amor los envuelve y ante ella ya nada es Prohibido...
ResponderEliminarSol Urvino Con la fuerza de este amor y tu compañia, Querida EVE, espero poder transcurrir este invierno que comienza en pocas horas UN BESO.
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