SINO.
CAPÍTULO
SEGUNDO.
"Ayer
de tarde estábamos sentados junto a la mesa. No hacíamos nada, ni siquiera
hablábamos. Yo tenía apoyada mi mano sobre un cenicero sin ceniza. Estábamos
tristes: eso era lo que estábamos, tristes. Pero era una tristeza dulce, casi
una paz. Ella me estaba mirando y de pronto movió los labios para decir dos
palabras. Dijo: "Te quiero". Entonces me di cuenta de que era la
primera vez que me lo decía, más aún, que era la primera vez que lo decía a
alguien. Quizá ya no precise decirlo más, porque no es juego: es una esencia.
Entonces sentí una tremenda opresión en el pecho, una opresión en la que no
parecía estar afectado ningún órgano físico, pero que era casi asfixiante,
insoportable. Ahí, en el pecho, cerca de la garganta, ahí debe estar el alma,
hecha un ovillo. "Hasta ahora no te lo había dicho", murmuró,
"no porque no te quisiera, sino porque ignoraba por qué te quería. Ahora
lo sé". El deleite frente al misterio, el goce frente a lo inesperado, son
sensaciones que a veces mis módicas fuerzas no soportan. Menos mal que alguien
explica siempre las cosas. "Ahora lo sé. No te quiero por tu cara, ni por
tus años, ni por tus palabras, ni por tus intenciones. Te quiero porque estás
hecho de buena madera." Nadie me había dedicado jamás un juicio tan
conmovedor, tan sencillo tan vivificante. Quiero creer que es cierto, quiero
creer que estoy hecho de buena madera. Quizás ese momento haya sido
excepcional, pero de todos modos me sentí vivir. Esa opresión en el pecho
significa vivir."
*Mario
Benedetti /LA TREGUA.
Las lágrimas volvieron a asomarse
a los ojos de Pedro, mientras Guillermo apretaba su mano con fuerza.
__No llores, siento que te he estado
esperando durante toda la vida, y pase lo que pase, no tengo intención de
perderte.
Sos mi destino… mi sino.
__ ¿Lo sospecha alguien de tu familia?
__Ni siquiera lo quise o pude admitir ante yo
mismo hasta esta noche, Guille, aunque siempre me sentí fuera de todos lados__
dijo, Pedro__. Aunque ahora lo sé. Y con toda certeza y entiendo toda mi vida.
Quiero que así sea, quizás esperaba que así fuera, contigo y con nadie más. Lo
he esperado, te he esperado toda mi vida, lo mismo siento… que eres mi sino.
__ ¿Estás seguro de que quieres reconocerlo?
_ le preguntó, Guillermo, mirándolo fijamente__. Después ya no se puede
retroceder. No se puede cambiar la manera de pensar ni de sentir. Supongo que
algunos lo consiguen, pero yo siempre me pregunto hasta qué punto están
convencidos o son auténticos. Francamente, no lo sé. __Miró a Pedro, tendido a
su lado, en la arena. Se incorporó, mirando a Pedro apoyándose en un codo. La
playa estaba desierta y las casas iluminadas del fondo parecían joyeles, eran
como miles de anillos de compromiso que él estuviera ofreciendo… Como una
corona__. No quisiera hacer nada para lo que vos no estuvieras preparado. No solo es sexo.
El amor no solo es sexo y el sexo no se trata solo de abrirle las piernas, penetrarlo y eyacular,
¿Qué felicidad tiene hacer eso? Yo lo hice por años y te deja vacío cielito, el sexo sin alma, sin intimidad, te deja más solo, sucio, sin nada al terminar, más que con alguien que luego molesta.
¿Qué felicidad tiene hacer eso? Yo lo hice por años y te deja vacío cielito, el sexo sin alma, sin intimidad, te deja más solo, sucio, sin nada al terminar, más que con alguien que luego molesta.
Hacerle el amor es hacerlo sentir único,
especial, hacer que piense en ti todo el
día, que cierre sus ojos y lo
reviva, fantasee con ese momento
íntimo y especial vivido entre los
dos, que te desee más, tener fantasías sexuales contigo todo el
día, que te desee con tanta intensidad
con tan solo pensar en ti y en esos recuerdos que saltan en su mente como fuegos de colores.
con tan solo pensar en ti y en esos recuerdos que saltan en su mente como fuegos de colores.
Nunca trates de abrir solo sus piernas, en primer lugar trata de conocerlo, mimarlo, consentirlo, colmarlo de caricias,
me dije al conocerte.
Escucha su cuerpo, haz que se sienta
único, especial, pues así lo es, es
único, es especial y antes de abrir sus
piernas abre su alma, su alma toca su
corazón. Demuéstrale que puede confiar en ti, que se sienta seguro a tu
lado, que abandone sus miedos y así pueda mostrar su alma desnuda, que no tema mostrarse tal cual es, su lado delicado, sensible o el más perverso
y salvaje. Que pueda contar sin tapujos sus fantasías para poder complacerlo, que sepa que tú estás hay para hacerlas realidad si así lo desea, hacerlas realidad no solo para disfrute de uno sino los dos unidos, asegurarte que él las disfrute intensamente. Claro que sí, hazlo tuyo, hazle
el amor, penétralo… suave, fuerte, con violencia, como él más lo
desee, provócale los orgasmos más
intensos de su vida. Jueguen, disfruten, gocen como si no existiese un mañana, quién sabe, hagan cosas sucias, perversas, divinas o suaves, divertidas, pero nunca te olvides de acariciarlo mientras lo penetras. Besarlo,
susurrarle cosas cariñosas en su oído, no solo te muevas, no eres una máquina,
siéntelo, él debe de sentirte siempre cerca, apasionado y cuando él este alcanzando su punto
máximo de excitación antes de
culminarlo susúrrale al oído lo mucho
que lo amas, cuánto disfrutas estando
con él, haciéndole el amor, eso le
encanta. Siempre trata de dejar todo lo
demás fuera cuando estés con él, con él solo
tienes que ser diverso, romántico,
cursi, salvaje, dominante, sumiso,
sorprenderlo siempre con algo distinto,
con algo que le demuestre que es único,
especial. No hay secretos, solo es cuidarlo
como te gusta que te cuiden a ti, consiéntelo, mímalo siempre porque sabes tal vez no estén juntos para siempre pero te aseguro que nunca podrá olvidarte si lo cuidas con pasión y aunque encuentre otro hombre nunca te sacará de su alma, de su mente. Porque cualquier hombre puede abrirlo de piernas y penetrarlo pero no todos saben amar, yo prefiero abrir su alma y hacerle el amor de mil maneras distintas cada día siempre que él me lo permita. Eso quiero con vos, Pedro.
como te gusta que te cuiden a ti, consiéntelo, mímalo siempre porque sabes tal vez no estén juntos para siempre pero te aseguro que nunca podrá olvidarte si lo cuidas con pasión y aunque encuentre otro hombre nunca te sacará de su alma, de su mente. Porque cualquier hombre puede abrirlo de piernas y penetrarlo pero no todos saben amar, yo prefiero abrir su alma y hacerle el amor de mil maneras distintas cada día siempre que él me lo permita. Eso quiero con vos, Pedro.
__No me gusta que suene como a prepararme
para el que sigue, vuelvo a creer que harás lo que viviste tú, yo quiero todo
contigo y solo contigo, la vida y más allá _dijo, Pedro atribulado.
__Amorcito, y yo, pero el que yo creía amar
se murió apenas a tres años de estar juntos, y luego antes de vos, tuve otras
relaciones, ojalá nunca te deje, aunque sé que si muero antes, te esperaré en
otra vida si existe y solo para volverte a amar, amo tu alma, Pedro.
¿Sigues estando seguro?
__Lo estoy. Lo sé con toda seguridad. Me he
sentido muy solo hasta ahora, no me dejes perdido ahí afuera.
Guillermo lo estrechó fuertemente entre sus
brazos y ya no pudo resistirlo por más
tiempo. Hizo lo correcto, le ofreció la
oportunidad de elegir. Jamás se había aprovechado de nadie y no pensaba hacerlo
con aquel muchacho.
__ ¿En qué piensas? _interrogó Pedro elevando
la mirada.
__En que quiero cuidarte, ir despacio, no
deseo que te asustes, la primera vez debe de ser especial y única, no quiero
precipitarla, quiero conocerte, que sepas todo de mí.
_ ¿A ti no te cuidaron?
__Sí y no, no lo sé. Creo que sí, que me dieron
esta oportunidad de elegir y yo la di. Yo como vos fui un nene solitario del
interior de la provincia, en una época mucho peor que esta. Cuando llegué a Bs.
As. Apenas me iniciaba en esta profesión, y me encandiló un productor, un
hombre de la edad de tu papá. De la mía hoy y él fue quien me enseñó todo, con
él hice el amor por primera vez, y pasamos meses juntos _admitió Guillermo.
__ ¿Meses?
__ No era el amor, y al cabo de unos meses
las relaciones a escondidas empezaron a complicarse. Él se pasaba el tiempo
leyendo guiones y tratando de decidir lo que iba a hacer, se había hartado del
joven amante. Le sabía a poco. Los seis meses ya eran demasiado para él y yo lo
percibí antes que él dijera nada. Fue un momento muy doloroso para ambos, pero
al final, yo le planteé claramente la cuestión.
“__Ya todo ha terminado, ¿verdad?
__Ya no pareces tan joven, pero lo eres _ respondió,
él.
El me llevaba veinte años y aunque era joven
acababa de conocer a un hombre de
cincuenta que lo volvía loco. Jamás había tenido un amante de aquella edad y
estaba deseoso de pasar ratos con él, pero como me tenía a mí pegado todo el
día como una lapa, le era imposible hacerlo. Aunque cuando me contemplaba
desnudo no se arrepentía de nada de lo que había hecho, y se preguntó si yo lo
lamentaba, nunca descubrió el menor indicio de que así fuera, de hecho no lo
lamenté… yo al conocerlo parecía haber encontrado mi lugar en la vida y eso iba
más allá de él, era feliz, sacaba muy buenas notas, tal vez había merecido la
pena, pensó mientras le sonreí con tristeza, y pensó que había llegado la hora
de ser sincero.
__Creo que sí, Guillermo. La vida a veces es
así, la vida y lo justo no se llevan muy bien quizás. Pero lo hemos pasado muy
bien juntos, ¿no lo crees?
Yo asentí con aire abatido, no podía hacer
otra cosa. No quería dejarlo aunque últimamente la situación había empeorado
bastante, excepto en la cama, pero hoy sé que eso no es suficiente, ni siquiera
lo más importante. Allí todo iba bien porque ambos éramos jóvenes y rebosábamos
de salud. Sin embargo, yo deseaba conocer toda la verdad.
__ ¿Hay otro hombre?
__Todavía no. __Él quería ser completamente
sincero conmigo.
__Pero, ¿lo habrá muy pronto?
__Lo ignoro y, además no se trata de eso _ contestó,
mientras se levantaba la última vez que hicimos el amor__. Solo sé que quiero
sentirme libre durante algún tiempo. Aquí no ocurre lo mismo que en el mundo.
La gente no se enamora y se casa, y tiene doce hijos y vive feliz. Para
nosotros, todo es mucho más difícil, no es frecuente que las relaciones duren
mucho. Eso también ocurre, claro, pero, en general, lo que más abunda son las
aventuras de una noche o de un par de días, incluso de una semana. Con un poco
de suerte las relaciones pueden durar hasta meses, como en nuestro caso, pero después,
ya no tienes adónde ir.
__No es suficiente _ dije yo disgustado__. Yo
quiero algo más que eso.
__Pues que tengas suerte. __Entonces él me
miró con sonrisa de entendido__. Es posible que lo encuentres, pero la mayoría
de las veces no podrás.
__ ¿Por qué no?
__Puede que no sea nuestro estilo __contestó,
encogiéndose de hombros__. Nos interesan demasiado las caras bonitas, los
cuerpos hermosos, un delicioso trasero y una figura tan joven como la tuya. Y
todos sabemos, que algún día, dejaremos de ser jóvenes.
Él estaba empezando a sentir algo de eso. A
veces me envidiaba y me trataba con aspereza o me celaba de cualquiera. Su otro
amigo le hacía sentir joven y hermoso, tal como lo era yo para él.
__ ¿Qué vas a hacer ahora?_ repregunté.
__No lo sé. Viajar un poco, quizá.
__ ¿Podré verte alguna vez?_ pregunté.
__Claro que sí. Para mí ha sido maravilloso,
quiero que lo sepas.
__Yo nunca lo olvidaré _ dije, mirándole con
vehemencia__. Nunca… Siempre te recordaré.
Después, me acerqué a él, nos besamos. Aquella
noche, me quedé en su casa, pero al día siguiente, me acompañó a mi
departamento, y sin necesidad de que dijera nada, yo comprendí que no volvería
a verle. O por lo menos durante una larga temporada.”
__
__ ¿Y no volvieron a verse? _preguntó, Pedro.
__Creo que él no me vio, yo sí pero por casualidad, iba saliendo del
trabajo, y se estacionó un coche carísimo, y entonces lo vi, estaba en ese auto
junto a un hombre mayor, apuesto, con pelo entrecano, y parecía feliz, sonreía
y lo acariciaba, él no se dio cuenta de nada.
__ ¿Crees que puede suceder lo mismo conmigo?
¿Qué si soy tu amante te aburrirás en unas semanas?
__No precioso, no lo dije para asustarte, ni porque vaya a sucederme
con vos, pero quiero cuidarte, que vos estés muy seguro, yo no lo pasé bien
entonces. Y me gustaría hacerte el amor sin pensarlo, llevarte a cenar o, por
lo menos, a tomar unas copas a un boliche de homosexuales, pero no sé si me
hallo preparado para introducirte en ese mundo. Comprendo instintivamente que
vos tampoco lo estás. Queremos que estas relaciones sean un secreto entre ambos
al inicio, yo te seguiría la corriente, dejaré de ver a mis amigos habituales
durante cierto tiempo, no será simple que tus padres entiendan, no quiero
empujarte a decirles la verdad.
__Pero, no quiero que dejes nada por mí,
quiero ir a un bar, quiero que me enseñes y me muestres ese mundo _ dijo, Pedro
al borde de las lágrimas.
__Está bien, pero iremos un rato, solo un
rato a un bar céntrico, común, a veces lo normal y expuesto es donde menos conocidos
encuentras, después de todo somos amigos.
__ ¿No quieres hacer el amor?
__Calma, precioso, hay tiempo, toda la vida,
tranquilo amorcito, si te toco, no sé cómo podría detenerme.
Por
debajo de mi piel, galopan enloquecidas mis emociones, entre las vestiduras y
la piel algo viaja a una velocidad más rápida que mis latidos, una corriente
que enloquece los poros en todos los puntos cardinales de mi cuerpo.
Las emociones se vuelven irreales de solo sentir que estoy a punto de tocarte, será como entrar en un universo del que no querré salir.
Las emociones se vuelven irreales de solo sentir que estoy a punto de tocarte, será como entrar en un universo del que no querré salir.
Imagino
lo inimaginable… pues mi razón se encuentra perdida entre tantas emociones que
aceleran mi pulso, tu proximidad algo comienza a incendiar en mi pecho y un
extraño, inquietante, dulce ardor parece consumirme por dentro y me vuelvo
completamente dependiente de tu esencia.
Bastará
que tus ojos hagan blanco en los míos para sentir que llenas de luz mi alma…
bastará que tus labios esbocen ante mí una sonrisa, para que los míos
titubeantes de deseos, imiten tu gesto y un húmedo aliento de pasión los
prepare para que instantes antes de tocar tu boca comiencen a nacer, para ti,
los primeros besos de amor.
Pasará
lo inevitable si te toco, bastará solo un primer contacto con tu piel para que
estallen mis ansias, descontroladas mis emociones dominarán mis labios que
enloquecerán en contacto con los tuyos… mis manos dominadas por las caricias
antes calladas ahora se perderán por tu cuerpo y ya… ya nada dominaré en mí, a
ti sumiso entregaré mi amor.
Si
te toco asumiremos las consecuencias sin
medirlas, serás la fuente de mis delirios, destino perpetuo de este amor que
arrastro por ti en el tiempo... Si te toco, ya no habrá marcha atrás, querré
por siempre aceptar las consecuencia de en ese primer beso tomes posesión de mi
alma enamorada.
__
El
lugar es agradable. La luz tenue y la música suave regalan un clima íntimo y
distendido. En medio del salón a la derecha se encuentra una barra, en el
centro unas mesas, contra la pared unos
boxes con sillones amplios, y al fondo se distingue una escalera. No bien
entraron perciben que los espacios están diseñados para dos personas. Ocuparon
un box apartado luego de descubrir unos reservados en la planta alta.
Guillermo
lo llevó de la mano primero hacia la barra y se sentaron en unas banquetas
altas. De inmediato, un joven los atendió con amabilidad, y pidieron un Malbec
que el muchacho aireó y les sirvió.
Se
sorprendió de ver al poco rato que estaba disfrutando del momento, nadie
parecía haberlos reconocido, ni siquiera el chico que dispensaba las bebidas, y
Pedro observaba todo fascinado, hasta que llevaron las copas hacia el reservado
más oscuro, que se encontraba casi vacío.
_ Quiero
que me cuentes toda tu vida, lo que no sé desde la fama de tus padres __pidió,
Guillermo.
__ ¿Lo
olvidaste?
__ ¿A
quién?
__A
tu amante, a ese hombre.
__Nada
puede olvidarse cielito, pero antes de
conocerte, llevaba años solo, con amantes ocasionales de esos de días o
semanas, nadie importante, solo sexo.
__Pero
hubo alguien importante dijiste __insistió, Pedro.
__Sí,
Juan, pero se murió, viví con él tres años y murió, él fue el único que quise, ya te hablaré de él _admitió,
Guillermo.
__Lo
siento, está bien. Esperaré. La vida en un esperar continuo y yo estoy aquí
esperándote, mas pasan las horas, los días, las semanas, los años y quién
dice, quizá también se pase la vida, mas
te seguiré esperando y soñando, porque te espero desde que tengo memoria, pero
lamentablemente hasta ahora no llegaste, y aunque sea un contrasentido, siempre
pude tenerte en mi vida, pero tan solo en mis sueños, en mis deseos, en mis
esperanzas y aunque me pase la vida esperándote, siempre seguiré esperando,
porque te quiero en mi vida, aunque solo pueda tenerte en mis sueños. Aunque tú
no quieras ni quiera yo, somos eso que el destino quiso, y hasta la eternidad
estaremos en su historia, solo son palabras de hombre que se confiesa enamorado,
que le urge sacar este dolor, mi corazón está cansado y a veces le escucho decir,
dónde estás amor que necesito contarte, necesito decirte de mis logros y fracasos,
pero sobre todo necesito despertarme en tus brazos, enredando mis labios en un
beso enamorado.
Por ti amor mío, podría ser tu luna llena y convertirme en un sol menguante, para así poder enredarte en la cárcel de mis verbos, quiero ser para ti un niño dormido, quiero ser para ti esa melodía en el aire que envuelve las mareas del sentir, donde cada rincón de mi cuerpo se vuelva cielo y mar en tus manos.
Sé vida mía, que lo nuestro es más fuerte que este dolor arrasador de vidas, que no tiene sentido tanta soledad, lo sé amor, sé que volverás a mí, y esperándote estaré como siempre en mis sueños dadores de vida que en esta realidad absurda necesita soñar para sentirse vivo.
Hoy como siempre desperté en la mañana, y en el aire de mi alcoba, respiré el aroma de una rosa, las que dejaste para mí en la madrugada, enredada en mis sábanas blancas, para así en mi realidad, poder seguir viviendo.
Por ti amor mío, podría ser tu luna llena y convertirme en un sol menguante, para así poder enredarte en la cárcel de mis verbos, quiero ser para ti un niño dormido, quiero ser para ti esa melodía en el aire que envuelve las mareas del sentir, donde cada rincón de mi cuerpo se vuelva cielo y mar en tus manos.
Sé vida mía, que lo nuestro es más fuerte que este dolor arrasador de vidas, que no tiene sentido tanta soledad, lo sé amor, sé que volverás a mí, y esperándote estaré como siempre en mis sueños dadores de vida que en esta realidad absurda necesita soñar para sentirse vivo.
Hoy como siempre desperté en la mañana, y en el aire de mi alcoba, respiré el aroma de una rosa, las que dejaste para mí en la madrugada, enredada en mis sábanas blancas, para así en mi realidad, poder seguir viviendo.
La
tarde se termina, la noche, se acerca serena, como la luz de un reloj detenido
en el momento exacto, donde yo tengo que traerte a mi sueño, donde tu presencia
se convierte en esa realidad que enaltece mi alma, cuando irresistiblemente
sueño tus besos, y su caída en mis labios, son como las gotas de rocío entre
las alas del ángel de los sueños, ese que me cuida en cada momento de
desespero, convirtiéndolos en reparadoras lágrimas de miel, cayendo por mi
piel. Yo, libre como un cielo gris, azul, blanco, tormentoso o en calma en el
que los lamentos son tormentas que alborotan el universo, dejo que mi alma
baile en esa melodía que me lleva hacia ti donde se encuentra la felicidad eterna,
y le dejo, que sueñe al compás del pentagrama de la dulce razón, para seguir
vivo.
Mientras la noche no llega, me arreglo para tu llegada, quiero que me sientas, dulce, sereno y libre, dejaré que te acurruques en mis brazos, donde el sentir del corazón hará que emanen momentos de dulzura, eternos, donde puedas sentirte amor mío vivo y libre en mí.
Por fin aquí está la noche negra, la recibo con agrado porque sé que ella será fiel, y te traerá a mí, como cada noche de luna blanca para encontrarnos entre sus sombras.
Déjame amor mío, ser tu ángel de amor, el día que mis ansias se pudieron encontrar entre los colores, jugando entre los trazos, tocando la aventura de atreverse al cambio.
Mientras la noche no llega, me arreglo para tu llegada, quiero que me sientas, dulce, sereno y libre, dejaré que te acurruques en mis brazos, donde el sentir del corazón hará que emanen momentos de dulzura, eternos, donde puedas sentirte amor mío vivo y libre en mí.
Por fin aquí está la noche negra, la recibo con agrado porque sé que ella será fiel, y te traerá a mí, como cada noche de luna blanca para encontrarnos entre sus sombras.
Déjame amor mío, ser tu ángel de amor, el día que mis ansias se pudieron encontrar entre los colores, jugando entre los trazos, tocando la aventura de atreverse al cambio.
__Pedro,
con vos quiero dejar los grises, los pastos secos, los vientos fríos, los pirulos
de las brujas, de las mañanas todas las brumas, las ausencias frecuentes de
brisas tibias de las tardes, flotar como lo hubieran hecho las hojas de mis
nogales, los diablos dorados de mi amantísimo peludo, la vigilante mirada de la
fiel güera, la que siempre quiso acompañarme a la ciudad de la eterna
primavera.
Entender
el vuelo de las mariposas hasta los aromas de tus flores, sentir el sabor sutil
de tus flores, encontrar la magia de los colores para alegrar tu piel, sentir
la calidez de los poros de tus areolas a la espera de las caracolas de mis
labios, percibir las emociones de los rubores que invaden tus sentidos, como la
luz cuando acaricia entre brisas las sombras de tus cabellos.
Ver
entre los ojos de las alas de las mariposas, recorrer tus valles bajando desde
las altas montañas, andar las veredas de tus sensaciones, guiado por los ecos
de tus gemidos. Amarnos sin límites.
Lentamente
beso tus ojos, esa mirada tierna me
arrebata, incita mis sentidos más
íntimos, devora las ganas de hacerte mío,
sutilmente estampo un ósculo a tus labios ardientes
que se entregan a los míos entrelazando las lenguas sin fin, mis manos acarician tu pecho, se cuelas a los pezones que se muestran altaneros deseosos de erizarse con furia ante la arremetida sagaz de mis ansias, pieles que se deslizan eróticamente anidando en los poros lascivos dejando huellas excitantes a lo largo de la noche tempestuosa, susurros y gemidos
lamentos de lujuria desbordante excitando las mentes desquiciadas sumergidos en los cuerpos sudorosos, ya nada será como antes, el cielo y el infierno se juntaron para crear una sinfonía mágica donde los protagonistas somos tú y yo, acompáñame amor mío en este viaje de aventuras fantástico adentrándonos en el mundo mágico de amarnos sin límites.
que se entregan a los míos entrelazando las lenguas sin fin, mis manos acarician tu pecho, se cuelas a los pezones que se muestran altaneros deseosos de erizarse con furia ante la arremetida sagaz de mis ansias, pieles que se deslizan eróticamente anidando en los poros lascivos dejando huellas excitantes a lo largo de la noche tempestuosa, susurros y gemidos
lamentos de lujuria desbordante excitando las mentes desquiciadas sumergidos en los cuerpos sudorosos, ya nada será como antes, el cielo y el infierno se juntaron para crear una sinfonía mágica donde los protagonistas somos tú y yo, acompáñame amor mío en este viaje de aventuras fantástico adentrándonos en el mundo mágico de amarnos sin límites.
__
¿Siempre bailas así con todos?
__No
tontín, con nadie, solo con vos, no seas tan celoso. Y cuidado, si te alejas te
van a abordar decenas de chicos. Pedro, hace tiempo atrás estos sitios eran
mirados con recelo, cuando no con burla, eran antros de perdidos. Hoy, por
suerte, los homosexuales no necesitan esconderse, pues después de una intensa
lucha que continúa, han logrado derechos y que se reconozcan estos. Gracias a todo
lo recorrido este sitio es uno más de los pubs de la ciudad lejos de ser un
reducto oscuro y secreto, pero hay chicos que vienen solos buscando conocer
pareja y otros que ejercen la prostitución, Taxi Bois que ofrecen sus
servicios, por lo general a tapados, a tipos casados o empresarios, políticos y
esos que no desean que se sepa lo que son, que llevan una vida de luz con mujer
e hijos y otra secreta en que vienen a sacarse las ganas y a hacerlo con
hombres, lo sabes, ¿verdad? Por lo general piden chicos diferentes y no usan su
identidad cada noche.
__Entiendo,
pero yo solo quiero estar contigo.
__Más
te vale, por fin yo también solo quiero estar con alguien y solo con ese
alguien.
__ ¿Y
Juan?
__También,
a él no lo conocí en uno de estos sitios, y veníamos así, en pareja, éramos
fieles. Pero no hagas trampas que hoy quiero saber de vos, y solo tengo ojos
para vos, para ti en fino.
Cómo
olvidar que sentí que tú me
observabas, sabía que me mirabas y esa
sonrisa tuya
tan pícara te delataba, esa sonrisa de niño bueno que tanto me encanta. Mi camisa desabotonada mostrando mi varonil torso y que al pasar junto a ti el aroma de mi loción, mezclado con el cuerpo ligeramente sudado, cómo aceleraba el palpitar de tu corazón.
tan pícara te delataba, esa sonrisa de niño bueno que tanto me encanta. Mi camisa desabotonada mostrando mi varonil torso y que al pasar junto a ti el aroma de mi loción, mezclado con el cuerpo ligeramente sudado, cómo aceleraba el palpitar de tu corazón.
No
querías soñar con un príncipe, porque soñabas conmigo día y noche, nunca fui un recuerdo siempre fui y seré un
presente en tu vida. Ahora soy yo quien
te mira cuando tú no te das cuenta y tiemblo con tu aroma, mi cuerpo te reclama
deseoso de ti. Ahora todo es diferente,
yo te deseo como mi hombre, no veo ese amigo que un día se sonrojaba con mi presencia, sino que miro y veo a un joven atractivo que me enamora. Porque sin tocarte, te desnudo para disfrutar de tu excitante, y desbordante cuerpo de la pasión con curvas y carreteras peligrosas, deseo amarte más que nunca y hacerte mío cada día.
yo te deseo como mi hombre, no veo ese amigo que un día se sonrojaba con mi presencia, sino que miro y veo a un joven atractivo que me enamora. Porque sin tocarte, te desnudo para disfrutar de tu excitante, y desbordante cuerpo de la pasión con curvas y carreteras peligrosas, deseo amarte más que nunca y hacerte mío cada día.
__Seré
tu anhelo, esas ansias humedecidas que acarician mi reflejo en lo profundo de
tu mirada. Seré tu anhelo, ese silencio que abrazas cuando gritas en la oscuridad
tus deseos incontrolables, ese suspiro que desgarras en los besos que brotan de
tus labios ardientes, ese fuego que respira las brisas febriles en la cima de tu pecho, y rescatar tu alma de las
cenizas hirientes de un recuerdo que yace en el olvido del tiempo.
__Hay
que envolver el pensamiento para que el cuerpo perciba esa piel que eriza a tal
punto de la ebullición interna.
¿Acaso no es mágico el pensamiento como para que dos cuerpos entren a candente preparatoria a un encuentro?
Te vestirás de gala porque un cuerpo desnudo tiene gracia cuando nos deja descubrirle el alma.
Tan desnudo venías que ya mi pensamiento perverso traspasaba la barrera de tu ropa la primera vez, cruzando umbrales del pensamiento para adentrarme en tu mundo que abría las puertas a este sediento lascivo.
Solo era probar tus labios e intercambiar suspiros para saber que la perdición en la mescolanza nos atrapaba para volvernos ciegos ante lo demás que nos rodeaba.
Y embriagados por la pasión, empezaron las caricias que poco a poco fueron encontrando partes tan electrificantes que al solo tacto de las caricias dos cuerpos se estremecieron.
Vinieron jadeos y constantes temblores en carnes trémulas que empezaron a sudar, y ya se percibía que tantos adornos eran estorbo para la ocasión donde ya no importa el pecado, porque se quiere caer en él, sabiendo que es abismo gloria o posibilidad de infierno
Nada más importaba que probarlo así llegase al dolor.
La tentativa no cesa y los impulsos evolucionan a tal velocidad que un frenazo repentino equivaldría a un shock del corazón.
Y aunque todo parezca infierno y se padezca, aún peor cerrando los ojos y mostrando desesperación y agite; nadie desea parar porque el impulso es tal que se crea una unión de dos masas corporales para que aquello llegue al máximo de escucharse un ahogo casi gutural con el encuentro y conexión entre dos mundos.
¿Quién pudiera captar y percibir tal tormenta en aquellos momentos cuando dos mundos han chocado y la electricidad es tal que se entrecruzan en incandescentes fogonazos?
Si alguien capacitado y extrasensorial llegase a captar aquellos momentos idílicos; entenderíamos el desgaste y la preparatoria tan descomunal a que se exponen dos cuerpos, para que nada del engranaje se descomponga con la prueba que ha de pasar a la evolución _susurró, Guillermo al oído.
¿Acaso no es mágico el pensamiento como para que dos cuerpos entren a candente preparatoria a un encuentro?
Te vestirás de gala porque un cuerpo desnudo tiene gracia cuando nos deja descubrirle el alma.
Tan desnudo venías que ya mi pensamiento perverso traspasaba la barrera de tu ropa la primera vez, cruzando umbrales del pensamiento para adentrarme en tu mundo que abría las puertas a este sediento lascivo.
Solo era probar tus labios e intercambiar suspiros para saber que la perdición en la mescolanza nos atrapaba para volvernos ciegos ante lo demás que nos rodeaba.
Y embriagados por la pasión, empezaron las caricias que poco a poco fueron encontrando partes tan electrificantes que al solo tacto de las caricias dos cuerpos se estremecieron.
Vinieron jadeos y constantes temblores en carnes trémulas que empezaron a sudar, y ya se percibía que tantos adornos eran estorbo para la ocasión donde ya no importa el pecado, porque se quiere caer en él, sabiendo que es abismo gloria o posibilidad de infierno
Nada más importaba que probarlo así llegase al dolor.
La tentativa no cesa y los impulsos evolucionan a tal velocidad que un frenazo repentino equivaldría a un shock del corazón.
Y aunque todo parezca infierno y se padezca, aún peor cerrando los ojos y mostrando desesperación y agite; nadie desea parar porque el impulso es tal que se crea una unión de dos masas corporales para que aquello llegue al máximo de escucharse un ahogo casi gutural con el encuentro y conexión entre dos mundos.
¿Quién pudiera captar y percibir tal tormenta en aquellos momentos cuando dos mundos han chocado y la electricidad es tal que se entrecruzan en incandescentes fogonazos?
Si alguien capacitado y extrasensorial llegase a captar aquellos momentos idílicos; entenderíamos el desgaste y la preparatoria tan descomunal a que se exponen dos cuerpos, para que nada del engranaje se descomponga con la prueba que ha de pasar a la evolución _susurró, Guillermo al oído.
__Hazme el amor. Si es lo que dices quiero ese uno, quiero estallar, morir en ti.
__No.
Todavía no, y menos acá _ aseguró Guillermo sonriendo y reprimiendo el deseo__.
Me olvidé de vivir, luego de la muerte de Juan no le encontraba
sentido a la vida, pero todo cambió el
día que te conocí, ese día comprendí que esta vida me deparaba cosas bellas.
Aprendí
a contar las estrellas bajo la cornisa
de tu ventana donde esperaba verte cada
noche asomado, soñaba que mis manos
buscaban el contacto de tu piel delicada, solo mis deseos de acariciarte y poder tenerte junto a mí. Desde el día que
te conocí cambió mi vida, mi manera de vivir, ahora solo deseo tenerte junto a mí,
hacerte feliz, verte sonreír, sé que pronto estaremos juntos y nada ni
nadie lo podrá evitar.
Ama
a ese hombre, que además de acostarse contigo, se acuesta con tus sueños.
Ese que ronca hasta joderte y despierta tus ojos risueños. Da lo mismo pagar la cuenta y dejarse los bolsillos vacíos. Sonríe, habla poco, más, sus desafíos son tus miedos, Pedro.
Y si no te aguanta en sus brazos, buscará la forma de cargarte en su espalda, no importa si muestras tus piernas, él te prefiere.
Ese que ronca hasta joderte y despierta tus ojos risueños. Da lo mismo pagar la cuenta y dejarse los bolsillos vacíos. Sonríe, habla poco, más, sus desafíos son tus miedos, Pedro.
Y si no te aguanta en sus brazos, buscará la forma de cargarte en su espalda, no importa si muestras tus piernas, él te prefiere.
Ama
a ese hombre que se levanta en la
madrugada y te mira como un tonto, te abraza, no te suelta, deseando despiertes pronto. Y qué más da si
te pellizca las nalgas en su
rudeza, o te hace el amor con
delicadeza. Qué importa si tiene su alma rota, si escupe tu cara cuando grita
demasiado por el juego de pelota. Qué
importa si te desnuda cuando se pasa de
copas. Siempre te trae ganas y te
promete serás su esposo.
Ama a ese hombre al que no le das un beso y no pide mucho. Sale a trabajar y no le da vergüenza que le digan mandil o mamá lucho. Ámalo, es imperfecto como tú, valiente no porque se la rife con veinte, pero valora tu vida y daría la suya a cambio de protegerte. Ama a ese hombre y bésalo. Pero bésalo de verdad. Que te valga madres si no tienen la vida resuelta. La unión es lo que hace la fuerza. Ama a ese hombre, hazle el amor las veces que quieras, hazle el sexo como la vez primera... Ámalo, es real... Él ya te ama, el mundo está lleno de falsos enamorados. Toma su mano, camina con él, aunque los días estén nublados.
Ama a ese hombre al que no le das un beso y no pide mucho. Sale a trabajar y no le da vergüenza que le digan mandil o mamá lucho. Ámalo, es imperfecto como tú, valiente no porque se la rife con veinte, pero valora tu vida y daría la suya a cambio de protegerte. Ama a ese hombre y bésalo. Pero bésalo de verdad. Que te valga madres si no tienen la vida resuelta. La unión es lo que hace la fuerza. Ama a ese hombre, hazle el amor las veces que quieras, hazle el sexo como la vez primera... Ámalo, es real... Él ya te ama, el mundo está lleno de falsos enamorados. Toma su mano, camina con él, aunque los días estén nublados.
__Eres
la luz que guía mi camino. Eres el calor que abriga mi alma. Eres el aire que
roza mi piel. Eres la pasión que enciende mi cuerpo. Eres el agua que sacia mi
sed. Eres el sol que eriza mi piel. Eres
la voz que susurra poemas de amor a mi corazón. Eres tú quien da sentido a mi
vida. Tú eres mi pasión, motor de lo que sé que puedo ser.
Como
sabueso que olfatea lo prohibido, así mi amor encontrará el encanto de tu aroma
escondido. No me detendré, venceré los obstáculos o lo que fuera, sea verano,
otoño, invierno o primavera. En verano, seré la frescura de tu ardiente vida.
El otoño seré la cama con sus hojas caídas. En invierno, seré el abrigo de tus deseos dormidos.
Y en primavera, en mis brazos, tú serás la más bella flor merecedora de mi amor.
El otoño seré la cama con sus hojas caídas. En invierno, seré el abrigo de tus deseos dormidos.
Y en primavera, en mis brazos, tú serás la más bella flor merecedora de mi amor.
Será
mío el candor de tu quejido en la dicha, merecido. Aspiraré el aroma tierno de
tu cuerpo estremecido. En fin, el universo no se opone, tu aroma es mi destino.
Cuando
la luna te dé permiso, honraré la tierra y las antiguas raíces, honraré la
dorada corriente del atardecer y del
cielo, mas... cuando aleteen tus besos púrpuras, correré y correré al manantial
de tus labios, hasta hundirme como una gota de fresca leche en tu desierto de
hambrientas pieles, hasta hundirme como el barro quebrado en el manantial de tu
túnel al fondo de dulces aguas, para renacer desde la salida de tu hoguera y es
que el deseo me excita las ganas, por un poco de tu piel, tan solo por un poco...
Qué no darían mis calientes manos por el estallido de tus pezones en mis yemas, o sentir que te estoy
tocando, rozando tu vello dorado, a la
vez, cometiendo el mayor de los dulces pecados.
Eres ese volcán que perturba mi frío, la chispa que mi hoguera enciende, que enloquece de amor a este hombre. Mas... ya al sentir tus manos clavadas en mi espalda supe que eras mío,
y ante el asombro de los pálpitos se va creando un océano henchido. Ese océano que se derrama en tu secreto y multiplica por mil mis latidos, ojos de almendra que vuelan al gemir tu boca, mas yo ya casi descalzo, sazono todo tu vientre, mientras mi boca muerde lo dulce del néctar de tus labios.
Eres ese volcán que perturba mi frío, la chispa que mi hoguera enciende, que enloquece de amor a este hombre. Mas... ya al sentir tus manos clavadas en mi espalda supe que eras mío,
y ante el asombro de los pálpitos se va creando un océano henchido. Ese océano que se derrama en tu secreto y multiplica por mil mis latidos, ojos de almendra que vuelan al gemir tu boca, mas yo ya casi descalzo, sazono todo tu vientre, mientras mi boca muerde lo dulce del néctar de tus labios.
Pedro
suspiró, y se separaron, para controlar las sensaciones.
_Te contaré. Mis padres eran millonarios, mi
madre una famosa actriz como sabes, entonces, mi papá no, heredó una fortuna, y
se dedicó a vivir sin pensar que podía acabarse alguna vez, y la llenaba de
joyas y de lujos, mi madre lo amó sin reparos y aunque le molestara su
indolencia con trabajar lo aceptó, y llegué… el primero.
El
día en que nací, papá pasó horas paseando en el pasillo, en vano pidió ver al
médico. Cuando este llegó a las tres de la madrugada, le vio acercarse con el
gorro y la bata azul aún puestos, la máscara le colgaba alrededor del cuello.
Enhorabuena,
tiene usted un precioso hijo varón, le dijo este, tendiéndole la mano y
sonriendo. Mi padre se quedó aturdido como si no lo esperara después de pasarse
tantas horas esperando paseando como un loco por el pasillo, el parto no fue
fácil, a punto estuvieron de hacer la cesárea. Comprendía muy bien que un
hombre entraría en sala de partos. Él no hubiera podido resistir la tensión
media hora más, pesa cuatro kilos y medio, completó el médico y su esposa se
encuentra perfectamente.
Papá
no pudo verla enseguida y fiel a su estilo se asomó a conocerme y salió a
comprarle una joya y a cambiarse, ya entonces soñó todas las cosas que podría
hacer conmigo, su primogénito. En los viajes y juergas que compartiríamos. Su
padre, un millonario ausente y bohemio, jamás había hecho nada con él, por ello
soñaba que conmigo todo sería distinto. Jugaríamos al tenis, al polo,
practicaríamos pesca de altura al sur del Pacífico, viajaríamos y nos lo
pasaríamos de maravillas.
__ ¿Y?
__Los
deportes me gustan, pero el resto… No pude estar cerca de él, nunca me conoció,
Guille. Yo era regordete, grande, precioso, con el pelo tan rubio como mamá,
era igual a ella, lo soy, lo viste de entrada, no era el hijo que mi padre
hubiese deseado tener, aunque me esforcé, nunca pude complacerlo, pese a que
salieron del hospital, rebosantes de felicidad y orgullo. Pocos días tuve una
niñera, enseguida mi madre recuperada ya no se separó de mí. Me bautizaron para
Navidad en la iglesia en que ellos se habían casado. Yo era tranquilo, apenas
lloré en la ceremonia, no parecía molestarme que me pasaran de mano en mano. A
poco tuvieron una segunda luna de miel y mamá quedó embarazada de Agustín, yo era
bebé, cuando en parto rápido nació él,
igual a papá, en todo, y entonces decidieron
tomar precauciones por un tiempo. A los seis meses de mi hermano viajamos todos
a Europa, así era papá, le regalaba de todo, joyas, mansiones, viajes, y mamá
de paso olvidaba que había dejado su
carrera para dedicarse a la familia, total éramos ricos.
Pero
cuando yo tenía dos años y mi hermano diez meses, poco antes de su cumpleaños,
mamá anunció el tercer embarazo que fue más difícil desde el inicio, y en marzo
nacieron mis hermanas gemelas, una… monja desde bebé, la otra rebelde y diva como
mi mamá, se llevaba por delante el mundo
desde pequeña. Yo las quiero, los quiero, pero nunca pude abrirme a ellos,
éramos muy diferentes, demasiado, solo me sentí siempre unido a mi madre, solo
a ella.
La
mayor de las gemelas se parecía de entrada a mamá, por tanto a mí, con
facciones perfectas y rubia, era reposada y tranquila, la menor tenía una
carita perfecta, era pelirroja y endiablada, y no cambió nada al crecer, ni la
diferencia entre ellas. Yo las soportaba con paciencia, mi hermano las tomaba
de los pelos, pero de niños nos lo pasábamos bien, eso hasta que…
__ ¿Qué?
__ Recordando
su desdichada infancia huérfano de madre y con padre ausente y la de mi mamá
similar y muy pobre, papá nos compensaba llevándonos a todos lados, y nosotros
disfrutábamos, aunque yo era tranquilo, callado, observador, y siempre más unido
a mamá. Mi seriedad sacaba de quicio a mi padre, el cual se pasaba horas
jugando al fútbol y corriendo con mi hermano, jovial, atlético y despreocupado.
Las gemelas eran cada vez más bonitas, una sumisa y resignada, la soñadora de la familia, solo se dedicaba a
escribir, a menudo se encerraba y se vestía sencillo, le gustaba una mirada de
mamá, una caricia de papá, tomar mi mano, o entregarse a sus sueños de hadas o
ensoñaciones tumbada en la hierba, la menor en cambio, le quitaba la ropa, las
muñecas, exigía ser el centro de atención.
Mi
padre nunca fue más que un niño fingiendo ser un hombre, y cuando yo tenía seis
años, Agustín cinco, y las nenas tres apenas, mamá supo que la fortuna de papá
la había rifado en viajes, fiestas y joyas, y que estábamos sin nada y con
deudas por todos lados. El cuento había terminado, y de no haber sido por el
amor y la fuerza de ella, papá se hubiese suicidado. Nunca trabajó en sus
negocios ni hizo buenas inversiones y todo desapareció.
Ella se plantó ante todos y con los abogados vendió lo poco que
quedaba e intentó vendiendo hasta la casa pagar la deuda, quedó apenas para
alquilar, lo que casi derrumbó a mi padre, que de hecho no soportó la pobreza, y empezó a beber, y a
faltar de casa, hasta que un día lo fotografiaron con otra, una mujer rica, se
fue con esa amante dejando a mi madre pobre sin su fama y trabajo con cuatro
hijos en una casita humilde, apenas teníamos ahorros para comer.
Cuando
abandonamos la casa primera, todos estábamos llorando. Mi hermano y yo éramos mayorcitos como para entender que
dejábamos para siempre el hogar de nuestra infancia, un refugio hermoso, seguro
y cómodo, y la cara de nuestros padres asustaban. De repente, todo parecía
distinto, aunque no sabíamos por qué, las nenas de apenas tres años fueron las
menos afectadas, si bien percibían el nerviosismo general.
__No
será para siempre __decía mamá, como eco a lo que siempre decía cuando soñaba
huir de la pobreza del hogar de sus padres. Sin embargo, y aunque no escatimó
en esfuerzos para embellecer lo imposible con las cosas que se salvaron de la
venta, aquello era peor.
__No
sé si podré resistirlo __dijo mi padre al ver la casa ya arreglada.
__!
Alberto! __contestó mamá, enfureciéndose con él por primera vez en meses__,
todo el mundo en esta familia está haciendo de tripas corazón y más te vale
hacerlo tú también. Yo no puedo detener el reloj. No podemos hacernos la
ilusión de que esta es nuestra vieja casa de siempre. Pero es nuestro hogar, el
mío, el de los niños y también el tuyo.
Nunca
voy a olvidar que tuve la certeza de que papá no podría soportarlo, de verdad
la casa olía a moho, y era como si nos hubiéramos convertido en los criados en
nuestro hogar, para él una pesadilla surrealista, y por ello, escapó, huyó de
todo, y traicionó a mamá, nos abandonó.
Pero
antes hubo idas y venidas, mamá empezó luego de seis años a trabajar, no ya de
actriz porque siempre soñó con dirigir películas, no estaba preparada pero
estudió, y se puso a trabajar por poco dinero como ayudante de productores, y
directores, mientras mi padre no hacía
nada, y de vez en cuando desaparecía por meses, hasta que mamá harta de hacer
la vista gorda lo echó, él no quería que ella trabajara, le decía que nunca
sería lo que deseaba, que ninguna mujer lo lograría, pero ella no se amilanó, y
al fin todos supimos que se habían separado.
Mamá
dirigió como ayudante dos películas y a poco de terminar la tercera le dieron
la gran oportunidad que no iba a echar por la borda, la primera dirección,
sola, y ya no se detuvo jamás.
Vivimos
todo ese tiempo de los intereses de la pequeña inversión de lo que salvó en la
quiebra y de lo poco que ella ganaba, al cabo de cinco meses de no verlo, papá
reapareció, parecía mayor, más maduro en todo sentido, y mamá reticente a que
nos lastimara volviéndose a ir no deseaba que nos viera, pero al fin lo dejó, y
mis hermanos se aferraron a él, solo yo le clavé la mirada y me quedé lejos,
anclado en el suelo, luego avancé cauteloso, hasta que mirando a mamá, ella me
dijo que sí, que podía ir a jugar con él en el jardín.
Papá
había conseguido un trabajo por primera vez en su vida, en un banco, y tenía un
auto viejo. Esa noche nos invitó a cenar y al regresar, le pidió perdón a mamá,
habló de lo mucho que nos extrañaba a todos, y de lo arrepentido que estaba de
lo que había hecho. Ella por sobre el orgullo y su forma de ser lo amaba.
__Comprendí
de golpe el tesoro que teníamos _ dijo él __, pese a no vivir en una mansión…
__Todo
eso no nos hace una maldita falta _ dijo mamá__, en cambio te necesitamos a ti.
Al
fin, quedaban muchas cosas por decir, heridas que cicatrizar, pero aquella
noche papá regresó a casa luego de
llorar, suplicar, prometer amor, y mamá
de saber por sobre todo que pese a que nunca sería un hombre fuerte lo amaría
siempre, y la vida volvía a comenzar, para todos. Papá dejó la pensión donde se
había refugiado y regresó a la miserable casa sin apenas darse cuenta de lo deprimente que era.
Mientras subía las maletas a su dormitorio, le pareció maravillosa…
Bueno,
ya te conté mi infancia. Dime cómo llegó Juan a tu vida.
__Juan
estuvo siempre, desde el colegio, solo que era tímido, apocado, muy apuesto,
muchas chicas iban tras él, y siempre me buscaba, pero pensé que solo deseaba
ser mi amigo, eso creí durante años,
parte de la escuela primaria y todo el colegio secundario.
Cuando
íbamos a fiestas del colegio, las chicas lo buscaban, yo sabía de un par que
pretendían seducirlo, pero él siempre buscaba estar con los varones y sobre
todo se acercaba a mí, y llegué a conocerlo bastante en esas charlas. Entre
un dejo de nostalgia y un arranque de inspiración y locura, le he arrebatado a
la vida momentos maravillosos así como dolorosos, que se vuelven cristales
diáfanos en la memoria confundiéndose entre alfileres punzantes y valiosos
diamantes. He ido aprendiendo en el camino con la sonrisa puesta en los labios
y aflorando en los ojos perlas de hielo y fuego del corazón, la cabeza fría y
corriendo por las venas la sangre ardiente de la razón, el alma firme y fuerte
aunque a veces flaquee y calle, soy feliz cada vez que se presenta el momento
indicado alimentando mis sonrisas y fantasías, y he tocado la infelicidad por
algunos instantes inconquistables que gracias a Dios pronto vuelan lejos de mí.
Y
así pasa la vida... Llevándose sueños añejos y regalándome ilusiones modernas, arcoíris
de tonos grises y nubes rosas pintadas de azul, almacenando líneas nuevas en la
piel y experiencias eternas en la conciencia, por eso entre más pasa el tiempo
más agradezco a la existencia por dejarme recorrer como he querido cada rincón
de sus caminos, equivocándome, cayendo, levantando, amando, odiando, perdonando
y volviendo a amar. Se va otro año que me llevo en el alma, escondido en el
recuerdo y presente en la memoria, con la seguridad de que mañana... Mañana
volverá a nacer el sol.
--- ¿Qué tiene que ver todo eso con Juan?
__Que
murió por mi culpa, que pensé que todo lo que tocaba saldría lastimado, que
nunca volvería a amar, que él era ese amor eterno e incondicional, y…
___
¿Tu culpa?
__No
quiero hablar de él, Pedro, es tarde, tengo que trabajar en un rato, ¿lo
hablamos luego?
__Está
bien, aunque dudo que seas culpable de algo, menos de… Nada. ¿Puedo dormir
contigo?
__ ¿Dormir?
__Sí,
dormir.
__ Cómo
entender, cómo explicar un camino de amor que olvida el pasado y vive un
futuro, un sendero solo basta para colmarnos de pasión y recorrer el estrecho
delirio; y un camino que cruza solitario y gris empañado de la soledad, del
entierro mismo y el coraje enviciado de un engaño o una muerte que se clava
como un cuchillo, afilado es su acero, cortante de ese amor que se ha vivido,
solo se extienden sus miradas eligiendo su destino, olvidar su pasado que
destruye el amor que sigue vivo.
Un
camino es un destino. Un destino tiene un futuro. Un futuro es tu vida misma. Una
vida es tuya siempre que elijas.
Solo
ama si hay amor, perdona con el corazón los errores de la vida, son precios que nos
enseñan a valorar cuando en verdad nos aman y sacrifican el pasado que nos
lastimó; recuerda que nadie es perfecto.
__Compartiré
contigo cada instante que nos haga felices dejándonos bellos recuerdos en la
vida que aún falta por recorrer, aunque
parezcan pequeñeces te daré una rosa vestida de aromas, escribiré en tu honor
una canción y besaré tu rostro cada mañana.
No
miraré hacia el dolor y cerraré mis ojos a otras pasiones que no me dejen
caminar junto a ti hasta ver caer el sol cada atardecer. Quiero ser sincero y
amarte como soy, con defectos, virtudes y heridas pero también con un corazón
dispuesto a compartir contigo el resto de mi vida.
Ayer
no pensé estar hoy contigo y menos que
me atrevería a ser yo mismo, a desnudar mi ser, a sentirme casi uno contigo,
era solo otro amanecer lluvioso, otro
amanecer recordándote, otro amanecer extrañándote, otro amanecer en que
despertabas mis anhelos, otro amanecer queriendo volver a perderme en tu mirada, a besar tus labios,
respirando tu aliento, anhelando tus caricias, sintiendo el calor de tu cuerpo,
ansiando escuchar tu voz susurrándome un te amo, otro amanecer amándote y
queriendo pasar cada segundo a tu lado, otro amanecer de lluvia, sintiendo tu
aroma invadiéndolo todo, otro amanecer
queriendo estar junto a ti, enredado
entre tus piernas y mis deseo, otro amanecer para vivir y amarte,
pero lamentablemente, era otro amanecer queriéndote en mi vida, pero solo te tenía en mi mente. Hoy quiero amanecer a tu lado, y tener esa vista imponente desde tu ventanal ante mis ojos al abrirlos, disfrutarla a tu lado. Sé que eres mi sino. Pasó poco más que mi graduación y mayor aislamiento de todos, hasta de mi familia en mi adolescencia, Guille, hasta conocerte, mi existencia ha sido anodina. Y absurdo es querer ser lo que no es y querer tener lo que no es para mí, buscar sin encontrar el pensamiento y tejer nubes en el cielo. Regar flores secas,
rezar por sentimientos muertos, llorar noches sin sueño. Dejar volar las emociones, sin estar en la cama que deseo, con ganas de que mi piel se junte a la tuya.
__Llevar mil besos en el bolsillo sin recordar quién me los dio, el colmo de lo absurdo es amar
y buscar ser amado. Encontrar sin buscar en otro lado los besos que tanto anhelas, creer ser dueño de una vida, si estaba dedicada a otros labios y la dulzura de esos labios no era para mí. El amor que yo creía no existió. Dejé mil cosas por allí, sin abrir, perfumes caros dedicados para mí, porque no era el aroma que me gusta. Viví ilusionado y sentí lo que no debo sentir.
Lloré mil soles y te amé muchas noches en otros cuerpos y rostros. ¿Cómo… para qué?
Pensamiento absurdo… Amar no tiene sentido, si vos no fueras el amor mío, aun amándote como te amo, te dejo ir, cuando no hay amor, no tiene caso amar así. ¿Mañana tendré a quién amar?, tal vez ¿La vida me llevará por otro camino? mas puedo jurar que vos sos mi destino.
pero lamentablemente, era otro amanecer queriéndote en mi vida, pero solo te tenía en mi mente. Hoy quiero amanecer a tu lado, y tener esa vista imponente desde tu ventanal ante mis ojos al abrirlos, disfrutarla a tu lado. Sé que eres mi sino. Pasó poco más que mi graduación y mayor aislamiento de todos, hasta de mi familia en mi adolescencia, Guille, hasta conocerte, mi existencia ha sido anodina. Y absurdo es querer ser lo que no es y querer tener lo que no es para mí, buscar sin encontrar el pensamiento y tejer nubes en el cielo. Regar flores secas,
rezar por sentimientos muertos, llorar noches sin sueño. Dejar volar las emociones, sin estar en la cama que deseo, con ganas de que mi piel se junte a la tuya.
__Llevar mil besos en el bolsillo sin recordar quién me los dio, el colmo de lo absurdo es amar
y buscar ser amado. Encontrar sin buscar en otro lado los besos que tanto anhelas, creer ser dueño de una vida, si estaba dedicada a otros labios y la dulzura de esos labios no era para mí. El amor que yo creía no existió. Dejé mil cosas por allí, sin abrir, perfumes caros dedicados para mí, porque no era el aroma que me gusta. Viví ilusionado y sentí lo que no debo sentir.
Lloré mil soles y te amé muchas noches en otros cuerpos y rostros. ¿Cómo… para qué?
Pensamiento absurdo… Amar no tiene sentido, si vos no fueras el amor mío, aun amándote como te amo, te dejo ir, cuando no hay amor, no tiene caso amar así. ¿Mañana tendré a quién amar?, tal vez ¿La vida me llevará por otro camino? mas puedo jurar que vos sos mi destino.
Vamos
a casa _ dijo Guillermo tendiéndole la mano, Pedro sonrió dulcemente mientras
se encaminaban hacia la casa, charlando como si se conocieran de toda la vida.
Pedro
tuvo la sensación de haberse sacado de encima un gran peso. Sabía lo que era, y
quién era, al fin le había puesto nombre a eso que llamaban raro, diferente,
solitario, distinto, a ese no encajar en ningún modelo, y por si fuera poco
sabía de quién estaba enamorado al fin, adónde iba y le pareció que estaba
bien. Ya no tenía miedo.
Llegaron
a la casa y entraron, tonificados por la brisa nocturna. Guillermo volvió a
llenar dos vasos de vino, tomó un sorbo, encendió la chimenea y se fue a la
otra habitación, dejando a Pedro solo con sus pensamientos, y su vaso de vino.
__Puedes
ir a la habitación y ducharte, yo estaré en la
otra _susurró antes de irse.
Desde
allí se oía el sonido del agua.
“Siento
el agua caer sobre mi piel, la libertad se atiza muy dentro de mí.
Sumergiéndome todo
en el infinito mar de tus pasiones. Mis orgasmos de continuo salen llenando mi cuerpo de placer. Hoy estoy aquí, sintiendo en mi cuerpo el agua fresca que cae desde el cielo.
Después de una hermosa noche donde sin vergüenzas, donde sin tapujos fui tuyo, una y mil veces, aunque sea en mi mente cumpliendo en ti todos mis antojos hasta llegar la aurora.
Ahora estoy acá en medio del océano infinito de mis sensaciones. Sintiendo dentro de mí
que rotas fueron todas las cadenas que me impedían amarte. Aquellas cosas que me laceraban
despertando miedo hasta de sentir tus besos. Me siento libre para poder amarte. La brisa refresca mi rostro. Y el deseo me embarga todo, deseo volver a estar entre tus brazos. Sintiéndote todo muy dentro de mí, como ráfagas de fuego que me incendien todo.
Llevándome total hasta la gloria. Me siento hombre que ama a otro, porque descubrí el secreto que explotó el volcán, que estaba dormido en todo mi cuerpo, las oleadas de deseo, las entrañas que desean acogerte.
¡Te siento tan mío¡ ¡Yo soy tan tuyo¡ Que ahora solo quiero despertar los dos. Enredados siempre en el infinito mar de nuestros deseos”.
en el infinito mar de tus pasiones. Mis orgasmos de continuo salen llenando mi cuerpo de placer. Hoy estoy aquí, sintiendo en mi cuerpo el agua fresca que cae desde el cielo.
Después de una hermosa noche donde sin vergüenzas, donde sin tapujos fui tuyo, una y mil veces, aunque sea en mi mente cumpliendo en ti todos mis antojos hasta llegar la aurora.
Ahora estoy acá en medio del océano infinito de mis sensaciones. Sintiendo dentro de mí
que rotas fueron todas las cadenas que me impedían amarte. Aquellas cosas que me laceraban
despertando miedo hasta de sentir tus besos. Me siento libre para poder amarte. La brisa refresca mi rostro. Y el deseo me embarga todo, deseo volver a estar entre tus brazos. Sintiéndote todo muy dentro de mí, como ráfagas de fuego que me incendien todo.
Llevándome total hasta la gloria. Me siento hombre que ama a otro, porque descubrí el secreto que explotó el volcán, que estaba dormido en todo mi cuerpo, las oleadas de deseo, las entrañas que desean acogerte.
¡Te siento tan mío¡ ¡Yo soy tan tuyo¡ Que ahora solo quiero despertar los dos. Enredados siempre en el infinito mar de nuestros deseos”.
Al
poco rato, Guillermo apareció desnudo, y se plantó en el centro de la
habitación, iluminado por las luces indirectas, le hizo señas a Pedro de que se
acercara. No pronunció ni una sola palabra y este no tuvo ni un momento de
vacilación. Se levantó y le siguió a la cama, donde se enredaron en la calidez
de los cuerpos.
__Caminas
en la barranca franca de mi corazón, corazón que late al son de tus pasos;
¿a dónde vas? Tráeme la paz de tus brazos, que de tenerte y verte, me abraza la ilusión.
¿a dónde vas? Tráeme la paz de tus brazos, que de tenerte y verte, me abraza la ilusión.
No
tengas cuidado de caer al acantilado, que te recibe el mar en calma de mi alma,
cuida más de no robar la calma a mi alma, y dame el embeleso de tus besos rosados. Está en flor este amor, que no perezca; y dale al sentimiento, aliento y vida, dale al corazón una pasión sin medida, y dame la brisa de tu sonrisa fresca. Porque yo no creía en el amor, y con vos me ha llegado una barca, cargada de una herencia de amor.
cuida más de no robar la calma a mi alma, y dame el embeleso de tus besos rosados. Está en flor este amor, que no perezca; y dale al sentimiento, aliento y vida, dale al corazón una pasión sin medida, y dame la brisa de tu sonrisa fresca. Porque yo no creía en el amor, y con vos me ha llegado una barca, cargada de una herencia de amor.
Dame
de tu mirar, el mar sereno y claro, que quiero navegar y amar tus lindos ojos; una
ola sola me lleva a tus antojos, sin estela ni vela, me guío de tu faro. Tengo
antojos rojos de tus labios divinos, me provocas locas ganas de besarte; es la
manifestación y acción de amarte,
dame de tu licor de amor, dame de tu vino. Dame el derecho de tu pecho y su ternura,
dame la miel de tu piel, tersa y sagrada; llévame a tus sueños risueños, amado, de mi piel y de tu piel, haremos una.
dame de tu licor de amor, dame de tu vino. Dame el derecho de tu pecho y su ternura,
dame la miel de tu piel, tersa y sagrada; llévame a tus sueños risueños, amado, de mi piel y de tu piel, haremos una.
Tengo
muy poco que darte, solo amor rezado como promesa, serás a mi modo, mi todo, mi
universo, más la promesa y certeza de adorarte. Mi equipaje son paisajes, y
una obra,
que te he guardado con esmero; te doy mi sentir, mi vivir, mi amor sincero, mi corazón, inspiración, y bruma. Si no perezco, te ofrezco mi alegría, hermosas prosas al amor de los amores, lo que te doy, es lo que soy, ten mi carrera, que al fin es la tuya, mi ayuda en tus estudios y mi compañía. Te doy el canto y el encanto de las aves, el esplendor y el candor que hay en la rosa, la mariposa que de flor en flor se posa, mi pensamiento, y mi aliento, mi aire suave. Mi devoción y adoración, mi esperanza, la serenidad y la bondad de mi regazo,
la fuerza de mis brazos, el calor de mi abrazo, mi feliz momento, juramento, una alianza.
que te he guardado con esmero; te doy mi sentir, mi vivir, mi amor sincero, mi corazón, inspiración, y bruma. Si no perezco, te ofrezco mi alegría, hermosas prosas al amor de los amores, lo que te doy, es lo que soy, ten mi carrera, que al fin es la tuya, mi ayuda en tus estudios y mi compañía. Te doy el canto y el encanto de las aves, el esplendor y el candor que hay en la rosa, la mariposa que de flor en flor se posa, mi pensamiento, y mi aliento, mi aire suave. Mi devoción y adoración, mi esperanza, la serenidad y la bondad de mi regazo,
la fuerza de mis brazos, el calor de mi abrazo, mi feliz momento, juramento, una alianza.
Tiempo
no siente, es paciente y va a llevarnos, trae tu sonrisa y armoniza mi alegría;
aquí en mi pecho y en mi lecho, se te ansía, no tengas temor, amor, vamos a amarnos.
aquí en mi pecho y en mi lecho, se te ansía, no tengas temor, amor, vamos a amarnos.
__
Era la madrugada, las copas de los árboles
se mecían a ritmo de un alevoso viento, las luces de la ciudad irradiaban
enorme soledad, las calles vacías con
sus semáforos inútiles invitaban a alamedas
que asemejaban panteones, paseaba por las calles vacías en un silencio
eterno buscando algún rinconcito de vida
y de plenitud. Caminaba abrigado por un leve saco de traje que llevaba siguiendo
a rumbo la luz de luna que iluminaba mis pasos. Entre los vestigios otoñales álamos
y pinos desafiaban el frío, respiraba tu
ausencia, tu fragancia amor mío llegaba
desde la cima de la lejana montaña de un opaco verdor que anunciaba tu llegada, indiscutible tu cercanía, caminaba frenético siguiendo pistas y huellas, memorias del
pasado
me llevarían a ti alma de mi alma, contemplaría tu deslumbrante belleza, la ternura y nobleza de tu enorme corazón, los aires me traían ya el eco de tu canción.
me llevarían a ti alma de mi alma, contemplaría tu deslumbrante belleza, la ternura y nobleza de tu enorme corazón, los aires me traían ya el eco de tu canción.
__ ¿Y
eso?
__Lo
que soñaba antes, en Chile, en mi país, y por años de cómo sería encontrarte,
pero no veía tu rostro. Te encontré reclinado en un rayo de luna seguro y
confiado en mi inevitable llegada con inefable sonrisa abandonaste tu lecho. Acercándote
a mí tomaste las solapas de mi saco, sin
enunciar palabra me entregaste tu boca rico beso. Y yo acariciaba con dedos
ansiosos tu pelo. Me acariciabas tú, te
acariciaba yo, ambos perdidos en el
arrullo divino y sensual de un olvido convertido en delirio. Amor mío no sabría
decirte lo ocurrido en ese instante eterno divino olvido del yo, del tú, en un
momento sagrado. Solo sé que al despertar del embeleso de nuestro idilio te
contemple ruboroso, fulgurante, mi pecho reventaba de amor y de ternura
eras mío, el divino devenir lo proclamaba. Y yo seguía embriagado de tu dulce fragancia
sabiendo ya que jamás te perdería.
eras mío, el divino devenir lo proclamaba. Y yo seguía embriagado de tu dulce fragancia
sabiendo ya que jamás te perdería.
Entre
sonrisas y temores un beso furtivo te robé cuajado de ilusiones saboreé tu
dulce boca. Recuerdo que echó raíces en lo profundo del alma soñando que tú me
acaricies lentamente pero sin calma. Cuando sé que voy a verte ese beso llena
mi sentir, no sabría estar sin quererte y
sin ese sueño yo no sé vivir. Besos entregados al viento, tu húmeda boca
buscando difuminados por el tiempo pero en tu corazón anidando. Y es mi deseo despertar
en tus brazos
cada mañana es mi deseo, pero más que ese deseo es sentirme protegido y amado en ellos.
cada mañana es mi deseo, pero más que ese deseo es sentirme protegido y amado en ellos.
Es
sentir que valió la pena tanto sacrificio de espera. Es querer vivir cada instante
de mi vida a tu lado sin dejar de amarte un solo segundo. Es admirarte y elogiarte con
la dulzura de mis besos y caricias. Es susurrarte al oído con la melodía de mis verbos las
travesuras que quiero hacer contigo. Es gritar un te quiero y amo con todas las fuerzas de mi
alma. Es recorrer con mis besos todo el panorama que a mí me pertenece. Soy el que marcó tu piel con el pincel de mi lengua y te llevó a conocer mi estación de primavera donde nacen las flores con un rico aroma seductor.
de mi vida a tu lado sin dejar de amarte un solo segundo. Es admirarte y elogiarte con
la dulzura de mis besos y caricias. Es susurrarte al oído con la melodía de mis verbos las
travesuras que quiero hacer contigo. Es gritar un te quiero y amo con todas las fuerzas de mi
alma. Es recorrer con mis besos todo el panorama que a mí me pertenece. Soy el que marcó tu piel con el pincel de mi lengua y te llevó a conocer mi estación de primavera donde nacen las flores con un rico aroma seductor.
Soy
el que provocó en tus ojos una mirada de deseo lujurioso que nutre a tus pupilas
de fantasías eróticas. Escalando y
resbalando por mis montes entras a mi secreto túnel. Mides mi espalda palmo a
palmo con tus manos entrelazando
tus dedos en mis cabellos como
enredadera bailando tu danza favorita entre mis dos lunares. Excita tanto a tu
sexo que hace que expulses tu cremoso elixir
y lo riegues bañando todos mis rincones oscuros que son para ti un
tesoro guardado.
__Yo
escribí una obra para nosotros, un esbozo de la primera vez, pero es simple _dijo
Guillermo.
Llega
la hora pactada de nuestro encuentro. ¡No
llegas! Salgo a la ventana a ver si asomas por entre las ramas de los árboles y
jardines que adornaban el camino a la entrada de la hermosa cabaña. Tanta era
mi ansiedad de verte que los segundos se hacían minutos, los minutos
horas ¡Por fin te veo! Mi corazón saltaba de emoción, al ir acercándote más las pulsaciones eran más fuertes. Salgo a tu espera con emoción y nervios a la vez, mis ojos recorren tu silueta de arriba abajo, dejando fluir mis sentimientos y decidido a enfrentar lo que sucediera en aquel momento que a solas nos encontrábamos en aquel lugar.
horas ¡Por fin te veo! Mi corazón saltaba de emoción, al ir acercándote más las pulsaciones eran más fuertes. Salgo a tu espera con emoción y nervios a la vez, mis ojos recorren tu silueta de arriba abajo, dejando fluir mis sentimientos y decidido a enfrentar lo que sucediera en aquel momento que a solas nos encontrábamos en aquel lugar.
Cruzamos
miradas y fuerte nos abrazamos, pude sentir también el palpitar de tu corazón,
junto al mío y esos nervios que conjugaban con los míos haciendo el momento un
poco más tenso.
Me
abrigué en tus brazos que de ellos no quería apartarme, sentí tus labios
acariciar mi cabello, mi frente, mis ojos, mis mejillas y no se atrevían a
tocar mis labios. Los nervios te invadían tal vez más que a mí. La sala era toda
nuestra, nos sentamos en el sofá y comenzamos a dialogar, risas iban y venían mientras
escuchábamos unas lindas melodías que acompañaban ese momento, también se hacía
presente un gran vino añejo que relucía en el bufet.
La
ocasión lo ameritaba y decidimos brindar por nuestro encuentro y por la oportunidad
que teníamos para amarnos. Comenzábamos la primera hoja en blanco que llenaríamos hasta nuestro primer aniversario. Aquí quedaría plasmado cada día de nosotros vividos juntos hasta el final.
que teníamos para amarnos. Comenzábamos la primera hoja en blanco que llenaríamos hasta nuestro primer aniversario. Aquí quedaría plasmado cada día de nosotros vividos juntos hasta el final.
__ Así
fue que dejé que tú fueras el escritor y yo el protagonista de tu nueva
película.
__Lentamente se iban uniendo nuestros labios sumergidos por el deseo y entrelazando nuestras manos que deseaban jugar entre nuestros cabellos. Haciendo una mezcla de nuestros perfumes entre dulce y apasionado. Las caricias y besos que nos dábamos nos obligaba a desprendernos de nuestras prendas que poco a poco iban cayendo al suelo y sin darnos cuenta desnudos nos encontrábamos.
__Lentamente se iban uniendo nuestros labios sumergidos por el deseo y entrelazando nuestras manos que deseaban jugar entre nuestros cabellos. Haciendo una mezcla de nuestros perfumes entre dulce y apasionado. Las caricias y besos que nos dábamos nos obligaba a desprendernos de nuestras prendas que poco a poco iban cayendo al suelo y sin darnos cuenta desnudos nos encontrábamos.
Nuestros
ojos no juzgaban nada de nuestros cuerpos, solo cumplían con su deber y
nuestras miradas gozaban del paraíso en donde nos encontrábamos con la fruta
prohibida para ti, pero la más llamativa y un deleite para tu paladar.
El
tiempo fue nuestro mejor aliado en aquel momento y pude sentir la llama de tu
pasión arder como fuego por todo mi cuerpo, quemar con lujuria cada uno de mis
poros de mi piel hasta hervir mi sangre de tu pasión y entregarnos al amor en
aquella ocasión hasta un final feliz.
__Ensayemos
la obra.
Tus
labios como tinte derramado de una roca mueren vivos en los míos, carnosos como
el descenso tibio de un pétalo, fruta traviesa que desgarra el calor de la
noche, sutil hoja de terciopelo que termina agasajada al filo de mi beso salpicando
el lomerío de mis labios,
rocío en nuestros cuerpos despiertan acalorados mientras nuestras raíces flotan.
Mas con verdadero denuedo, anclo tus manos hacia los atajos de mi cuerpo, y renace el arrebol en tus mejillas al rozar el dulce laberinto de mi boca, donde el arpegio de mis deseos muerde el gemir de tu jilguero, en tu torrente de mar me endeudo hasta la última gota del rocío del perfume de tu blanco estrecho, mientras mi lengua acaricia el calor de tus candiles,
Como amantes que oran hasta que el sol vuelve cenizas las erizadas pieles, ya en el saudade calor del mar de tu hoguera, cubro de mi aroma la sed de tu túnel, mientras arden los cantares del gemir de tu boca.
rocío en nuestros cuerpos despiertan acalorados mientras nuestras raíces flotan.
Mas con verdadero denuedo, anclo tus manos hacia los atajos de mi cuerpo, y renace el arrebol en tus mejillas al rozar el dulce laberinto de mi boca, donde el arpegio de mis deseos muerde el gemir de tu jilguero, en tu torrente de mar me endeudo hasta la última gota del rocío del perfume de tu blanco estrecho, mientras mi lengua acaricia el calor de tus candiles,
Como amantes que oran hasta que el sol vuelve cenizas las erizadas pieles, ya en el saudade calor del mar de tu hoguera, cubro de mi aroma la sed de tu túnel, mientras arden los cantares del gemir de tu boca.
No
hacen falta las palabras cuando siento tus latidos, el color de tus mejillas el
aroma de tu piel, el sabor que llevo dentro de tus labios compartidos, el amor
es el que habla sin perder nunca la fe, cuando siento el canto alegre de las
aves y sus sueños, cuando escucho en tus
adentros el latir del corazón, que hable el amor en suspiros y latidos, que no
caiga en el silencio de la cruel indiferencia, que del cielo hacia el infierno eres tú la
diferencia,
el amor es el que habla no hace falta que lo digas, yo lo siento en el rocío y en tus ojos si me miras, en el río y su murmullo en aromas de una flor, en la luna de su eclipse cuando ama al señor sol, el amor es el que habla y yo lo quiero escuchar, con caricias de tus labios...
el amor es el que habla no hace falta que lo digas, yo lo siento en el rocío y en tus ojos si me miras, en el río y su murmullo en aromas de una flor, en la luna de su eclipse cuando ama al señor sol, el amor es el que habla y yo lo quiero escuchar, con caricias de tus labios...
__No
dudo, Guille, hazme el amor, quiero ser tuyo, para siempre y solo tuyo.
CONTINUARÁ.
HECHOS
Y PERSONAJES SON FICTICIOS. CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES COINCIDENCIA.
LENGUAJE
ADULTO. ESCENAS EXPLÍCITAS.
Rafael Excelente, como todo lo que sale de tu fina pluma
ResponderEliminarRuby Exquisitamente erótico y muy romántico, entrega absoluta al sentimiento.
ResponderEliminarDelma hermoso
ResponderEliminarKaro Que hermoso,
ResponderEliminarMarielaBellísimo 😍
ResponderEliminarShyvis 💖 hermoso
ResponderEliminarVeronica Lorena Piccinino maravilloso capitulo Eve Monica Marzetti... me enamoré de sus dialogos sinceros y dulces.
ResponderEliminarGenial Eve, cuánto erotismo y seducción...Hermoso nacimiento de una relación que promete ser de amor verdadero, de ternura y de pasión, de sueños infinitos y de realidades imposibes de olvidar...
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