lunes, 11 de febrero de 2019

“EL VIAJE” Capítulo 131.


 “EL VIAJE”

Capítulo  131.


28 de julio de 2016.


• "El problema del matrimonio es que se acaba todas las noches después de hacer el amor, y hay que volver a reconstruirlo todas las mañanas antes del desayuno."
*Gabo /

Amor y deseo son dos cosas diferentes. No todo lo que se ama
se desea, ni todo lo que se desea se ama”. Miguel de Cervantes.

En media hora  la casa es un caos. Consuela a los trillizos y comenzó a picar el tomate para la salsa mientras controló el cuaderno de Paula. La cocina se ha vuelto un lío. Pero él sonrió a todos. Ha sido una buena tarde en todos los sentidos.
Fue a su cuarto a darse una ducha. El ruido del coche le confirmó la llegada de Guiiermo. Se apura.
En cuanto reapareció en la cocina, vio a su marido ensimismado en el teléfono, atrapado en el trabajo, todo volvió a la normalidad en el hogar Graziani- Beggio.

__ ¿Cómo?
__ ¿Guiie?


“¿Qué es el amor?
Cuando hablo del amor, a mí particularmente no me agrada buscarle catedrática definición.
Es que no existe un término académico  para hacer referencia al amor. Y desde mi escaso conocimiento concluyo que el amor posee magnos poderes inalcanzables. Con luz y sombra.
Pasado y presente, el futuro incierto.
Y el amor es odioso, y otras veces muy adorable, como esos ocasos interminables. Y es inexorablemente imperfecto, y tan contradictorio que es capaz de colmar de instantes bellos y perfectos.
Indefinidas metamorfosis experimenta y sufre. Y en ocasiones su dolor le es ineludible.
Y él te va de frente siempre que puede, y si puede de gozos inolvidables te llena el alma, la piel, el esqueleto, los ojos, la sangre.
Y el amor es el beso más desnudo con el que arropas todo tu mundo.
Y a veces, solo a veces,  él puede propinar vigorosos reveses. Y no te acostumbras porque cada vez el golpe es más certero y más te duele.  Pero eso es solo a veces. Solo algunas veces.
Y el amor es la fuerza más incontrolable que te eleva por el aire.
Y te hace estremecer... Y por gusto corta tus alas y te deja caer.
Y el amor puede ser el mejor artista, si el corazón fuera un metal, entonces cabal que sería el mejor alquimista.
Y es dominante y sumiso. Tan sensato como loco.
Toca sin manos y mira sin ojos.
Es el rey más avaro y el mendigo más dadivoso.
Y el amor es increíblemente enigmático.  ¿Y qué puede ser más extraordinario? Y es el amor el don del cariño.  Y es tan adorable como bellísimo y confiable.
Y por eso cuando alguien me pregunta por ahí qué es el amor, yo le respondo que el amor eres tú, solo tú mi amor, desde que demoraste en mí la mirada en Mendoza y me atravesaste desde ella al alma, supe que eres tú, Guiiermo”.

Le dije que iremos a verla y a hablar con la madre, aunque ya no duda.  Pensar que en el viaje a Europa mientras hablé de los acosadores de las chicas me decías de todo, desde llegar,  no hemos visto otra cosa, amén de que nuestras hijas se emborrachan _dijo Guillermo con cara de pocos amigos.

__Guiie, ya basta, ocurrió solo una vez y Paula no lo hizo.
__Papá, papi _ dijo la niña.

__Allí la tienes a la aludida, ¿qué sucede? Mira que puedo arrepentirme y enviarte con tu hermana.
_Papá, de eso quiero hablar, Belén no es culpable, ella solo invitó a las chicas y entraron esas botellas, no le cuentes nada a los abuelos, por favor _suplicó Paula.

__Tu hermana pudo no haber iniciado la cosa, pero se emborrachó, y mintió, ocultó la prueba, señorita.
__Guiie…
__No olvides que sos abogado, Pedro, es responsable, es partícipe necesaria. Y esta señorita cómplice.
__Ya Graziani, que no somos tus alumnos, ve Paulita.
__No papi, es que llega la fiestita de bautismo y mi hermana está sola y encerrada, me da pena, ni conmigo habla __ susurró Paula.

__Ve a cuidar que los trillizos no anden comiendo bichos del piso, y no me hagas enojar, acá no habrá ninguna fiesta, que se acostumbran a esto, y no vuelven más de ese camino.
__Vale, Guiiermo, hija, ve con los trillizos, y claro que habrá fiesta, pasa que papá no sabe lo que hemos trabajado en ella en estos días.
Paula salió cabizbaja, y Guillermo echó a su esposo una mirada asesina.
__Te dije que no me desautorices ante ellas.
__Te estás pasando de todo límite, la fiesta es para tu nieta, y no vendrán potenciales borrachos sino bebés y nenas chicas, compañeritas de colegio de los niños de la familia y amigos _afirmó, Pedro.

__ Igualmente, son todos potenciales borrachos y más, y Belén sigue con el castigo con o sin fiesta.  Lo más que puedo hacer en no amargar a los abuelos, al fin ellos no tienen culpa.
__ Eres insoportable Guiiermo. Belén va a   estar en ese bautismo.
__Dije que no.
__Y yo digo que sí, el único alcohol que habrá es el  vino de misa de Jorge.
__Está bien __consintió Guillermo__.  La dejaremos estar pero las llevaremos a la doctora, a todas, por prevención, nos viene justo.

Pedro intuyendo la respuesta lo miró atónito.
__ ¿A qué doctora mi amor? __acentuando la última palabra.

__A la psiquiatra, nos viene justo, se dedica a niños y adolescentes, yo no puedo estar planeando una inseminación si mis hijas se emborrachan.
__ Dios bendito, Guiie, las peques no cumplen el año, y apenas Belu tomó media cerveza.
__Media docena de latas, deja de encubrirlas.
__Y tú sácate al penalista de encima en casa, o me voy a enojar de veras.
__! No me digas! ¿Y? ¿Acaso crees que los chicos tarde o temprano no necesitarán al psiquiatra?
__Estás hablando de otra cosa, y será psicólogo en todo caso.

Pedro tras un incómodo silencio dio la vuelta y llegó a la puerta.
__ ¿A dónde se supone que vas? _ interrogó Guillermo enarcando la ceja.

__Por ahora a chatear un rato, o a la ribera a fumar un cigarrillo de emergencia, luego quizá le diga a Gaby que revea ese contrato de votos de la última vez respecto de… tu comportamiento, celos, berrinches, etc.
__! Pedro!
__Cuando razones y al menos me digas que Belén estará en el bautismo de Diana, llámame, no antes.
Pedro salió y entró Fabián.

__Papá, ¿qué son esos gritos? Se oye desde el parque _ dijo dándole un beso al paso.

__Mi esposo y tus hermanas descarriadas son, las consentiste en nuestra ausencia, y allí vemos los resultados.  ¿Y vos no podrías haber organizado esa  dichosa fiesta en un salón?
__ ¿Qué? No viejo, no me digas que volvió el ogro.
__Lo que digo es que todos saben del castigo de tu hermana y por la culpa del bautismo de tu niña, ahora me pelean para que la deje  estar en la fiesta.
__Y más bien que va a estar, es mi hermana, es decir la tía de tu nieta _dijo Fabián con firmeza.

__No me trates de idiota, Fabián, que puedo mandarte a vivir con Ana,  no me crees una rebelión acá.
__Y me voy a lo de Ana,  ni drama me haré. Ahora si se te va Pedro no me vayas a buscar llorando, a otro con los lamentos.
__ Irreverente como él,  pareces el hijo.
__ Papá deja de hacer macanas, Moni recién te conoce, se va a volver corriendo a Chile y chao hijos.
_ ¿Y?  Ya con seis me estoy volviendo loco, no necesito ocho o nueve. Voy a buscar a Pedro, antes que se esconda para sacarme el perdón para esa mocosa  malaprendida.
__Sí, mejor ve y sedúcelo.
__Menudo par de días, una de mis hijas borracha, drogada con cerveza por primera vez, una cliente de   poco más años intenta suicidarse por tercera vez y podría estar muerta, podría estarlo porque en cada intento la posibilidad es mayor y por la imbécil de la madre y mi familia me condena por querer prevenir, y como si esto fuera poco aunque comparado con lo de la amiga de Melina la fiesta con cerveza de Belén ha sido un juego, aún estoy pensando en ello, y se viene una fiesta,  toda la casa tomada otra vez.
__ ¿Abu, estás enojado? _ interrogó Guillermito que se coló con sigilo.

__ ¿Yo? No precioso, ¿qué sucede?
__ ¿Puedo dormir contigo? _preguntó solemnemente__. Mami está con la beba, y creo que hay un gorila en mi vestidor.

Guillermo lo llevó a sus brazos y dudó entre explicarle que no había ningún gorila sino solo celos o dejarlo correr, pero lo que hizo fue un guiño a Fabián.
__Hijito, ven acá.
__Papi… _ susurró medio adormilado__. Lo del monstruo me lo he inventado.

__Lo sé. __ Sonrió a su hijo, lo besó en la mejilla recibiéndolo de manos del abuelo y, un momento después, estaba dormido.

Al día siguiente el matrimonio fue al hospital, se reunieron con la psiquiatra y la mamá de la adolescente para comentar lo ocurrido la noche anterior, felicitaron a la médica por haber evitado el suicidio.

__La chica deseaba  morir. Lo sucedido requiere mucho tiempo para que lo elabore, la primera vez para una mujer es muy importante, que sea sin amor, a esta edad, violento, deja heridas abiertas por mucho tiempo, y cicatrices que a veces no se difuminan nunca, lo intentaremos con terapia, pero ella reconoció que iba a seguir intentándolo, y por ello la trasladé y le indiqué la internación. Tardaremos meses, tal vez años, en convencerla de otra cosa y aliviar lo que siente _ explicó la médica__. Suelen experimentar culpa, sentirse sucias, asqueadas, vacías y desean morir, es duro pero es la realidad de los chicos abusados, aunque vean al  culpable preso, señora.

__Disculpe doctora, no le creí, subestimé todo, si no  fuese por usted y los doctores, la habría perdido para siempre y no meses o un año.
__No la ha perdido por la internación, puede visitarla cuando desee, y es el tiempo que estimo, el viaje para esa nena como para todo niño abusado es muy largo, aunque a ella no le he dicho nada.
__Me ha dicho que si ella quiere matarse se matará, que nadie podrá impedírselo, y estoy asustada.
__Me temo que eso suele ser cierto, pero intentaremos curar su alma y su espíritu para que no suceda. Llevará tiempo. Les informo que como era de esperar estaba sedada cuando la he visto, pero hablaba con coherencia, y yo estaba segura de que volvería a intentarlo aunque prometiera a usted señora que no lo haría. No es insólito, pero necesita formas más constructivas de superar la violación, claramente el suicidio no es una de ellas.
__Lo sé, lo siento, me he comportado como una idiota, quisiera que los doctores me acompañen a la fiscalía para declarar, quiero que ese delincuente vaya preso efectivamente.
__Por supuesto _afirmó Guillermo__ , nosotros tenemos nenas de todas las edades, y aunque no están en peligro entendemos que   la mayoría de adolescentes no se suicidan o intentan para llamar la atención, normalmente tienen razones de peso para ello y lo hacen, su hija cree tenerlas y tendrá que trabajar mucho con la doctora para que se convenza de que lo que le ha sucedido no es su culpa, que no la define, que el problema lo tiene la otra persona, que es la víctima, y el delincuente es su violador, un ser digno ni siquiera de odio sino de compasión pues está vacío por no ser capaz de amar, solo consigue cuerpos por ello, se obsesiona con víctimas de las cuales desea la esencia porque no puede amar.
__Así es,  intento hacerles ver a las chicas eso mismo doctor, que ellos toman el cuerpo, que no les den el alma rindiéndose a la tristeza y a convertirse en chicas vengativas, que el acto no define a la esencia ni a la vida, la chispa divina que las hace sabias y seres conscientes es solo de ellas, a la esencia esa gente no llega, no pueden arrebatarles la luz aunque lo desean, como seres oscuros de las tinieblas, quieren llegar a ese centro de luz, pero solo caen en su pozo sin fondo ni alma, de frustración y odio.
Por lo sucedido, todos nos equivocamos señora, no es su especialidad y no puede ser objetiva al ser la mamá, para ello estoy yo y los doctores, yo no podría hacer diagnóstico de una diabetes o un cáncer aunque sea médica, pero créame que puedo saber cuándo una nena está en riesgo de muerte.
__Estaré atenta, y tiene razón, por supuesto, muchas gracias a los tres _dijo la mamá.

Cuando la mujer salió, Guillermo regresó a sus hijas.
__No me extraña que esta señora con los días se desmorone como un castillo de naipes, suele suceder, yo no tengo hijos, pero no puedo imaginar nada peor que lo que le sucede a ella, bueno o sí, además de enviudar, de que su pareja violara a su hija, ella podría estar muerta.
__No la envidio. Debe de tratar casos muy duros _ dijo Guillermo _. Lo que le consulté de nuestra hija es algo menor, pero es que quisiera prevenir.

__No creo que sea algo patológico ni grave, doctor, en la familia continente en que están sus hijos, no creo que sus  nenas sean adictas, solo son adolescentes, por ahora, con marcarles el camino correcto con firmeza, creo es suficiente. Si cree que me necesita, hágamelo saber. Si le sucede algo que no puedan manejar con alguno de los chicos, llámeme.
__Gracias doctora. __Sonó el intercomunicador y los esposos se pusieron de pie.

__Otro tema, una chica anoréxica de la edad de la suya, nadie está libre de estas cosas, pero creo que sus nenas son muy afortunadas.

__Lo que no arrastra el viento, se resiste a dejar mi suelo, este suelo de emociones, aún profundas son las raíces de esta soledad que se abraza a la nostalgia y las ráfagas de viento que azota la piel, desordena un paisaje, mas no logra arrancar de mis sentidos lo que entristece el alma _ susurró, Guillermo en el coche __. Se confunde el cielo gris con el polvo que levanta el  viento a su paso, no se distingue el cielo del mar, ni las nubes del suelo, no se distingue mi cielo con el triste gris que pinta mi alma, algo quiere llorar mi pecho, sin saber qué nombre darle a las lágrimas que por un instante inundan mis ojos… es extrañarte, es necesitarte o es por tan lejos tener que amarte.
Viento que despeina los cabellos de una dama, vuela y juega con la gorra de algún caballero,  por qué no arrastra de mí esta nostalgia, renueva este aire tóxico que respira mi pecho, aire viciado de soledad,  saca de mí este vacío que siento por no tener el aliento de aquel llenando mi pecho.
__Yo no soy aquel, tengo nombre __ replicó Pedro.

__Viento del oeste sacude mis sentidos y trae entre tus alas pronto ese amor que invada mi espacio, tráeme su aroma que hechice de amor mi razón y sentidos, al momento que despeines con tu repentino soplido sus cabellos, estos acaricien mi rostro y despierten la sensibilidad de mis poros, adormecidos por la fría soledad.
Viento de este desierto, llévate veloz el tiempo y trae ese momento en que tus ráfagas sean la excusa perfecta para beberme su aliento, para que mis brazos se anclen a su cuerpo, se pierda mi mirada en la suya, que sus manos  sujeten mis mejillas y en sus labios mis besos de pasión hagan para siempre su puerto.

Guillermo deslizó una mano  y el posó en el muslo de Pedro que manejaba mirando atentamente la carretera.

__Suelta, que  no te he dicho que se me pasara el enojo contigo, veremos qué nos depara la casa, y   la fiestita de   Dianita. Y que me enoje ya sabes que no hace que deje de amarte, eso por desgracia es imposible.
Tú excavas dulcemente mi pecho y hasta el hartazgo. Y me remiendas todo... y pedazo en pedazo. Y puede tu ternura horadar a este corazón indómito, horada en él sus piedras inmunes. Y con amorosa sutileza, con tus pálidas manos; intensas, me decantas sobre un fecundo valle de luz extensa e indefinidamente extraordinaria, y donde todo es emergente belleza. Y en los portales del agua que  siempre es muy clara y fresca. Y esos sucesos solo ocurren cuando tú me amas. Pero amor, cuando tú no me amas, en mí se envuelve la nostalgia y la tristeza...Y se rompe el eje de la tierra, y todo lugar, y todo sitio es soledad que me aterra. Y cada vela que encendiste se apaga. Cada dulce y adorable llama se transforma en  nieve en mi alma, en mi almohada, en mis sábanas y en mi cama,  también en mis entrañas. Y eso es cuando tú no me amas. Y es ahí que yo siento que no es verdad el amor. Que es una gran incertidumbre el olvido. Que es vano intentar poder olvidar. Y que es un gran infortunio el haberte querido, y quererte como te estoy queriendo ahora mismo..., sí así como yo te estoy queriendo ahora mismo, así como yo te quiero con la furia del cielo. ¿Y para qué recordarte si ese recuerdo me deja vacío y sin fuerzas? No, no amor. De nada me sirven los recuerdos cuando las tardes son sin tu cariño... sin tu calor. Si las noches son sin tus susurros. Las mañanas sin los detalles de una flor. Y si cada recuerdo me repite que no estás conmigo. Y ahora te digo: olvidarte nunca he podido... Y por eso amor mío te pido de nuevo, excava en mi pecho hasta el hartazgo, hazlo amor mío y no me dejes pensando en el olvido sin fuerzas y vacío.
 Yo he sufrido más que tú durmiendo fuera de nuestra cama, sabes que me recuerda a épocas que no deseo,  pelear contigo es mi peor castigo.
__ Ya cielito, hagamos un trato.
__Deja en paz al poeta, y dame soluciones.
__Es un trato, Belén bajará al bautismo, pero sigue castigada fuera de ese rato, el mes que dije y como lo dije, ya oíste a la doctora, hay que ser firmes.
__Está bien, tienes razón, será así.

Nordelta, 29 de julio.
 Cuando entraron en la casa, Guillermito pasó corriendo a toda velocidad, disfrazado e imitando a un pavo. Ellos sonrieron. Era agradable estar en casa. Los trillizos enredados con Moni en el sofá reían y hacían monerías.

__! Halloween no llegó, Guillermito! _gritó a su nieto, Guillermo. El nene se paró y fue hacia su abuelo para abrazarlo, casi lo derribó al hacerlo. Era un niño fuerte.

__Lo sé, abuelo, soy pavo en la función del colegio __dijo orgulloso.

__Eso ha quedado claro __comentó  Fabián entrando de buen humor de pantalones de gimnasia con zapatillas con barro dejando marcas de suciedad en alfombras sin inmutarse, cargando montones de videojuegos que le había dado Beto para la fiesta.

__Grandote, a Julieta le dará un ataque _ advirtió el padre, mirando la alfombra, y en cuanto lo dijo ella ya miraba con cara de pocos amigos

__Su hijo mayor doctor es peor que los trillizos, creo le voy a tirar esas zapatillas por la ventana como no aprenda a dejarlas en la puerta.
__Echarás a perder las alfombras, hijo.
__Lo siento, Julieta, es que hemos ganado un partido a los de Baunes, papá, y del entusiasmo me vine sin cambiarme
__Me alegro que les ganaran pero ve a adecentarte _dijo Guillermo y luego miró a Guillermito__. ¿Cuándo es esa función en el colegio?

__La semana que viene _dijo Guillermito.

__ ¿Tienes que aprenderte algo para decir?
El nene glugluteó con fuerza a modo de respuesta y todos echaron a reír.
__Diez minutos para la cena _dijo Julieta.

__Gracias _ dijo Guillermo mientras Pedro jugaba con los trillizos y echó un vistazo alrededor. Todavía no había visto a sus hijas mayores __.  ¿Dónde están las nenas? ¿Belén sigue en su habitación?

__Probablemente, y de pésimo humor tras el castigo que le han impuesto _ dijo Fabián que le acercaba al abuelo los brazos con su beba.

__Ha recuperado el móvil y estaba llamando _ dijo Guillermito antes que Moni o Julieta pudieran contestar y salió corriendo al ver a Valeria.

__No está bien… __empezó a decirle Fabián pero su hijo había desaparecido tras la madre para cambiarse.

Guillermo arqueó una ceja y fue rumbo a la habitación de Belén. Pedro lo siguió aunque no pensaba defender a la nena. Efectivamente, como había dicho el nene, la encontraron en la cama, charlando animadamente por el móvil. Al ver a sus padres, pegó un salto. Guillermo avanzó hacia ella con la mano extendida mientras Pedro lo dejó hacer, y Belén, luego de colgar rápidamente sin despedirse, le entregó el celular.

__¿Todavía queda un poco de sentido del honor por aquí o debo cerrarlo bajo llave? __Las cosas estaban cambiando demasiado deprisa para Belén.

Hubo un tiempo, no hacía mucho, en que la niña habría respetado el castigo y no habría tomado su teléfono sin permiso. Los trece años lo estaban cambiando todo, y a Guillermo no le gustaba.
__Lo siento __ dijo sin mirar directamente a sus padres.

 Julieta llamó para que fueran a cenar, y todos acudieron a la mesa. Fabián descalzo y recién salido de ducharse. Belén y Paula con la ropa que habían llevado a la escuela, y Guillermito llegó con la mamá aún con el disfraz. Guillermo y Pedro se habían alcanzado a enfundar en unos jeans y  remeras, era tarde y se morían de hambre, como los niños. Se respiraba aire de fiesta en la casa. Fue una cena agradable y relajada. Los niños comentaron lo que habían hecho durante el día, excepto Belén porque todavía estaba castigada. Además se sentía avergonzada por el incidente del teléfono. Todos estaban de buen humor cuando dejaron la mesa, para tomar algo en el living antes de dirigirse a sus habitaciones.
__Papá, la  ampliación del estudio marcha bien.
__Lo sé, me alegro hijito, iré a hablar con Belén, no me gusta verla así.

__Hola, ¿puedo pasar? __preguntó a su hija desde el umbral. Aunque normalmente pedía permiso, ahora lo hacía con más motivo.

__Como quieras _contestó ella. Guillermo sabía que era lo máximo que lograría sacar de ella, dado el castigo y el incidente con el móvil.

Entró en la habitación y se sentó en la cama donde Belén estaba tumbada mirando la tele. Había hecho los deberes antes que sus padres regresaran a casa. Era una buena estudiante y sacaba las mejores notas, Paula era un poco más voluble por los tentadores videojuegos y Guillermito no tenía aún deberes.

__ ¿Y papi?
__Con tus hermanitos. Sé que estás enojada conmigo por el castigo. Pero no me gustó tu fiesta de la cerveza. Quiero poder confiar en vos y en las amigas que traes a casa,  sobre todo si papi y yo no estamos en ella.

 Belén no contestó, ya había explicado sus razones, solo apartó la vista. Finalmente miró a su padre con resentimiento.
__Ya te he dicho que no fue idea mía, que la cerveza la trajo otra, que apenas la probé, y Paula ni siquiera porque le da asco.
__Pero vos dejaste que ocurriera, e imagino que algo bebiste, y además ayudaste a esconder las botellas, y quizá lo hiciste cuando papi y yo estábamos en Europa y vinieron esos chicos. Nuestra casa es sagrada, al igual que nuestra confianza en ustedes, y no quiero que nada la eche a perder. Aunque sé con certeza que tarde o temprano eso sucederá, es de esperar a tu edad y a la de Paula, lo comprendo, pero debo de hacer el papel de padre. No puedo fingir que no ha pasado nada y no reaccionar, lo sabes. Quiero que sientas haber mentido, no que te haya pillado.
__Sí, lo sé.
__Tus amigas tienen que respetarnos cuando vengan. Y no creo que estas fiestas con alcohol sean buena idea, no acá.
__Otras niñas hacen cosas peores _retrucó la hija.

Guillermo era consciente de ello, veía en el estudio y lo sabía de lo dicho por la psiquiatra. Otras fumaban hierba o tomaban drogas duras, o alcohol además, muchas ya habían tenido relaciones sexuales a la edad de Belén. Guillermo lo oía continuamente.

__ ¿Por qué es tan terrible que tomáramos un poco de cerveza? _insistió, Belén.

__Porque va en contra de nuestras normas, porque la escondiste y mentiste, porque podrían encontrarla las peques e intoxicarse… Y si empiezas a romper reglas, ¿cómo pararás? Tenemos ciertos recaudos, expresos o no, y debemos respetarlos, o renegociarlos pero hablando hija. Las normas son las normas. Con papi no traemos amigos borrachos a casa, no organizamos orgías sexuales ni nada raro aquí. Somos gais, sí, pero tenemos ética y nos regimos por normas morales  sanas. Y esperamos de ustedes un comportamiento dado como ustedes lo esperan de nosotros. No nos encerramos a beber y luego a dormir la borrachera. ¿Qué te parecería si lo hiciéramos?

Belén sonrió ante la idea, ante aquella inverosímil imagen de sus padres.
__Ustedes no invitan a nadie que no sea de la familia, a lo sumo del estudio, ni salen por celosos. Muchas madres de mis amigas llevan novios a la casa.
Sus palabras pretendían hacer daño, y dieron en el blanco.

__Hija, alguna vez yo antes de conocer a papi tenía novios pero aun así  no me emborrachaba a tu edad en mi habitación. Cuando seas mayor podrás beber delante de nosotros o con nosotros. Pero no tienes edad legal, ni para manejar, ni para beber, ni para nada raro, y tus amigas tampoco, así que no queremos que lo hagan aquí. Por ahora no  diré nada a los abuelos.
__Ni ellos harían tantos aspavientos, el abuelo una vez me dejó probar vino.
__Eso es distinto, estarías con él y vos lo has dicho, probaste, no te desmayaste supongo. Sos demasiado pequeña para beber. No tienes que correr con ciertas cosas, ni empezar tan pronto...
__ ¿Cuando sea mayor, nos dejarán beber aquí? _ siguió la niña implacable.

__Tal vez, si estamos presentes, con moderación. Pero no dejaremos que tus amigas vengan a beber aquí si no tienen edad. Somos abogados, podríamos tener muchos problemas si le pasara algo a alguna. No es buena idea hija. Podrás ir a la fiesta por el bautismo de Diana, pero el castigo por lo demás sigue.

Belén no hizo comentarios. Ya había dicho todo y oído suficiente. Sabía que otros padres tenían normas más relajadas o no tenían ninguna, y también que otros eran como los de ella. De repente Guillermito apareció en la puerta, buscando al abuelo.
Guillermo le sonrió, y Belén subió el volumen de la tele con lo que indicó que ya había oído suficiente. Guillermo se inclinó para besarla y salió con su nieto de la habitación.

__Me da igual que hayas ido con cuidado, ya que despertaste, tienes que ir con mami y bañarte.
__Qué asco…

__
Guillermo reparó que la casa estaba llena de globos blancos y rosa, motivo y colores que se repetían en manteles y servilletas, al día siguiente decenas de niños correrían por allí, y los payasos animarían el bautismo de Diana Elizabeth,  pero no todo sería un tormento, lo sabía, y sonriendo fue a su suite, intuía que Pedro estaría tumbado, vestido como siempre, esperándolo.

__ ¿Entendió?
__Espero que sí, al menos por uno o dos años. __ ¿Estás siguiendo el libro?

__Solo agregando sí lo de los viajes últimos o me atrasaré mucho. Pero ahora he desnudado
todas las mañanas  buscando  aquel poema  que una noche compuse para ti,  un poema  que al ser partido  en dos mitades  almacenará  tu nombre  en su sombra.
He despojado  a la primavera  de su trono,  soñando  encontrar  el polen  que germine
tus besos,  y me perdí  en un oasis  de palmeras. He buscado  en el ojo negro  de la noche  y el deseo,  en el cabalgar herido  de tus sueños.  He cruzado  las aguas azules  de la pasión
y el pecado,  buscando para ti  el gran poema  invisible pero las musas  no acudieron
a mi mente. No puedo recordar  aquel poema  que embrujaba  tus labios  y esparcía  por tu cuerpo el enjambre asesino  de noches  en celo, desnudando  un baile inmortal,  en las trompetas  adormecidas  de un sediento  amor. He ocultado  los dioses en el callejón
perdido  de mis palabras y en las soledades  de poemas  sutiles he bailado ebrio conjurando
mi locura  a satisfacer  los encantos encendidos  de tu sed para deshojar  tu mirada  en el madero  donde arde  el tiempo... Rota la luna  en diamantes, me he quedado  con la piel
del más  bravo guerrero  de la noche,  para ofrecer  en el fuego salvaje  de su amor  más preciado este gran poema  invisible que entre palabras  de agua se escribió en tu alma.

 Guillermo miraba el techo escuchándolo y Pedro se pegó a su costado peligrosamente como desde el inicio de sus tiempos.
__Quiero entregarme a los brazos del dormir placentero. Sentir el toque de tus dedos  deslizándose suavemente  sobre mis piernas tan suave y ligero. Cambiarme  de este estado
no quiero, caricia fantasmal, no estás conmigo no te veo... palpable como mis manos que me cuentan  que deseo tu cuerpo.
Rostro sobre la almohada me cuenta mi cara ansiosa, de aguas de mar mi cuerpo; tú eres bote que mece ligero vaivén.
Mi alma arrullada en tus ojos ciegos. Me abrazas con tan solo nombrarme como tú sabes hacerlo, cada vez que me miras  logras tocarme suavemente con las punta de tus dedos.
Silencio voluntario  de entender tu dialecto; no precisas de palabras rebuscadas  para desnudar mi intelecto, carente de barreras innecesarias los muros del pavimento.
Sabes tocar mi fibra sensible sin entregar las llaves del casillero, estás muy cerca de mí
sin desconocerlo…  palabras, caricias, carcajadas  envueltas en el exterior  de un sobre frente al espejo. De vestidura mis cabellos, sonrisa de par en par  que dibujas cada vez que te veo... Eres obsequio cada vez que caminas con tus falanges al acariciar mi cuerpo sin pasaporte ni equipaje envuelto. Te quiero tan cerca  que no podría tu mente entenderlo, no podrías imaginar  ni un minuto lo que siento, y en ese mismo segundo, ansioso, anhelante y deseoso
 te amo.
__ Te amo más. Basta la reverberación de tus ojos y el respiro de tu aliento con el mío, oasis de un segundo y de años eternos, agua de mar en el aire suspendido  emitiendo movimiento... Sensación de una gota de agua en el camino como si un ángel se descubriera mirándose al espejo. Vuelo de un ave en el lugar preciso repitiéndose una y mil veces suspirando pensando en un no sé qué... Una cosa sí sé... Te amo más allá  de la vida y lo infinito,  manto de estrellas puestas cada noche en su cielo  y es que conocemos tantos paisajes pincelados con el polen de la verdad  que asombra hasta lo más diminuto estando de nuestro lado una libélula de las flores, no existen los desiertos.
-Eres momento perfecto... Manantial infinito, arena de toda playa que converge en un charco de mar con sus peces en instante fecundo y perfecto. Tantos cielos pintados celestes,
estás aquí y allá al mismo tiempo que no logro encausar la dirección de mis recuerdos. Cada vez que te pienso te cobijas en un lugar prohibido de mi ser que no sabe de rencores y sí de bellos momentos. Frente a ti diluido en un beso muy profundo me entrego, revelo mi sentir, sin miedos y todo mi ser en un instante se hace eterno. Ya ves, nos sentimos así como lo hace el carbón al calor que después de ser extinto nace el fuego, capullo a la flor sus pétalos rozados por el viento, transparencia del aire y del agua para que las partículas no sean atrapadas por su oxígeno para elevar sus sentidos titilando su eco. Lo que más deseo en este mundo... Me gustaste desde siempre,  me gustaste con tu seriedad, con tus locuras y esa vena que te sale  cuando por tus celos quieres irte, que no te hable, que no te mire,  quiero conocerte aún más,  quiero conocerte completamente. Sé que ha de ser un deleite  el poder estar a tu lado,  juntos para demostrarte lo que siento, para demostrarte el verdadero  significado de la palabra amor...
Tu mirada se adentrará en mi alma para ver mi corazón que lleva tu nombre, tu hermosa sonrisa es el motor de mi alegría  que siempre despierta en mí  los sentimientos más bellos,  puros y verdaderos de este mundo. Nunca me cansaré de decirte que te amo  y si me lo permites te lo demostraré  porque tú eres esa luz que ilumina mi vida,  te quiero, te amo, siempre serás todo para mí,  siempre estaremos juntos pues  es lo que más deseo en este mundo. Hoy te haré el amor, como nunca te lo han hecho, porque te lo haré de una forma diferente, no será la forma clásica y tradicional, pero si será muy ardiente, y lleno de toda mi pasión, porque hoy amado mío, hoy te hare el amor con mis  locuras y con ellas describiré la forma  en que te haré mi hombre, primero diré que besaré tus labios  y continuaré con todo tu cuerpo, más lo haré muy suave y lentamente, paso a paso,  saboreando cada parte, cada refugio de tu ardiente cuerpo, hasta que con cada beso mío, todo tu ser comience a enloquecer y que entre suspiros y susurros de pasión, nuestros cuerpos ardan en el fuego de nuestro amor, y cuando llegue a tus pezones, viviré con ellos esa fantasía de sentirme como un niño amamantándose, mas por último,  seguiré recorriéndote con mis labios, mientras tu cuerpo se estremece, cuando beso tus muslos, para luego probar  y devorar tu fuente prohibida, hasta saciar todo mi deseo por ti, mientras el amanecer me encuentre  muerto entre tus piernas y así convertir en magia, esta forma de hacerte el amor.
__ Recuerdo esos días que feliz eras de tenerme entre tus brazos. Acariciar, besar, contemplar mis pies que eran tu gran  pasión y delirio. Me sentía feliz cuando escuchaba tu voz acariciar  mis oídos con palabras dulces tiernas seductoras que me hacían vibrar estremecer de felicidad el corazón.  ¿Cómo olvidarlo? Si parece que fue ayer cuando me elevabas en caricias y besos a tu mundo mágico.  Donde despertar no quería de aquel  sueño tan hermoso que un día viví con vos. Conocí la magia del amor y pasión despertar en mí todos mis deseos.  Sentí amarte como a nadie en esta vida pero no quiero que por terceros un día todo se derrumbe, menos discutir con vos, no más amorcito. Dime tan prudente con sigilo, que soy tu alma elegida, hilvanado el destino por un hilo, y no cortes lo que nos da.
Dime simplemente que soy tuyo, en esta esfera, nuestro mundo, pues tu pasión es desmedida, me envuelve ese aroma tan tuyo. Dime que no acabará jamás, el amor lo viviremos intenso, como si no amaneciera más, en este invierno tan denso. Dime tan prudente con sigilo, si soy tu alma elegida, dímelo tan suave al oído, para deleitarme y estar unido.
--Cierra tus ojos, a la luz del taciturno faro, enciende este amor, tan solo un momento, en esta madrugada cómplice. Caen sobre mis tierras, uno a uno tus besos; se deslizan, reptantes, recorriendo mis venas por dentro, me encienden, los poros térreos  que por ti aguardan en silencio… ¿Qué harás, sino buscarme en cada uno de tus sueños?
¿Qué haré, sino encontrarte dormido en mis verbos? Que no te ahoguen las palabras no dichas, sabes bien que viajan con el viento, las has enviado en mi busca, y en la frontera de mis tormentas yacen en silencio... Mira cómo se deslizan por mis labios, y resbalan profundo, mar adentro; hemos cruzado otras eras, en nuestras bocas, nuestras almas se reconocen de nuevo; no podrás despedir este canto, pues mi ser, habitará por siempre en tu pecho… Eres mi amor absoluto.
__Siento tus esencias, que embriagan mis sentidos. La belleza de tu cuerpo invita a recorrerlo todo, entre pasiones y delirios con mi boca y mi lengua, desde tu cuello hasta la pradera de tu ombligo. Mi lengua bebe sin saciarse de tu garganta y de tu boca de rosas.
Luego recorro tu espalda húmeda, hasta  el diamante tatuado en tu vientre entre tus espasmos de gozo cuando acaricio la tibia  fuente en tus cimientes. La penumbra tibia de tu alcoba, turba mis ensueños. Lentamente, mis manos dibujan las curvas de tu cuerpo, en infinito placer, entre caricias profanas bebo de  tus aromas y aliento, y voy a enloquecer.
Y te poseo, quemándome entre la humedad de sales y arena. En el abismo y placer de una tarde desmayada, pierdes tu pudor naciente cuando busco con premura la  entrada, en la dulce pesadilla de tus montes.
Me embeleso con el néctar de tu boca, como la abeja de las flores. Loco desenfreno y los espasmos extasiados de nuestras lujurias soberanas entre el gozo que entrecierra tus ojos, en el límite de las caricias profanas. El sol ilumina tu figura menuda, cuando te aquietas, desnudo. Tu belleza atrapa mis sentidos, en el recuerdo de tu total entrega al amor porque me siento perdido en los barrancos de tu pecho. Siempre supe que  vos  eras mío.
Pero ahora, no serás de nadie más…
--Me cuelgo de tus labios cuando mi cuerpo es tu suelo, aras con tus uñas mi piel que es tierra tuya donde siembras tus caricias, la humedad de tu piel cae como suave riego y hace florecer en mis sentidos la locura de poseerte, de amarte desde lo más profundo de tu intimidad.
Eres mi cielo a quien aquí me entrego, me invade la inmensidad de tu pasión, te vistes de tormenta de delirio y estremeces mi suelo con tus gemidos que truenan en mis sentidos encendiendo mi adicción a tu piel y a ese rojo pedazo de cielo que es tu boca, donde me bebo tus besos que saben a dulce fuego que incendia mi pecho.
Desatas un fuego de pasión sobre mí, te vuelves un rojo cielo que huele a excitación desatando el deseo, me vuelvo un mar de delirios que agitas con el movimiento de tu tempestad de amor, a la que sucumbo por completo… siento que acompaño el vaivén de tu candente tormenta, se evapora mi pasión sobre tu piel volviéndose rocío que ahoga las ansias de amarnos.
Se pierde en tu piel la noción del tiempo y espacio… eres ahora mi rojo infierno donde siento me consumo, donde ardo en el fuego de tus gemidos que ahogas en mi boca, incendias mi pecho, consumes en tu pasión mi alma enamorada que perdida entre tu cielo e infierno, sumisa a tu amor se entrega, dejándome caer vencido en el delirio de tu cuerpo  vestido de perfecta desnudez.
Me hundo en la excitación ardiente que encuentro entre tus labios… mi boca se consume en la tuya… me bebo de tu garganta el fuego de pasión y ardo en aquel infierno íntimo tuyo que es mi delirio, incendias por completo mi cuerpo, consumido me tienes, me disfrazo de tu cielo y en tus tinieblas de pasión, mi alma se entrega navegando entre tu humedad y la mía,  quiere perderse para siempre en el delicioso averno de tu amor, mi gran adicción.
__

__Te he soñado toda la noche, me quedé lleno de deseo. Un deseo que me quema por volver... Volver a sentir tus besos excitantemente apasionados, tus labios sobre mi pecho ardiendo de anhelo, tus manos sobre mi piel acariciándome dulcemente, tus ojos frente a los míos provocando mi rubor, sentir tu deseo por amarme y el mío por responderte, tu mano cogiendo la mía por la calle vacía y oscura, como adolescentes buscándose en su primera cita. Unas horas furtivas robadas a una rutinaria vida; planes de reencuentro que nos llenen de placer, de horas y días de aventuras nunca antes vividas. Has traído una ilusión a una vida vacía; regalo de un sueño hecho realidad que quisiera disfrutar con mis cinco sentidos.
Y cuento los días que faltan para verte y sentirte, para entregarte mi tiempo perdido y nunca más olvidar que estoy felizmente vivo. Te amo, Guiie.
__Yo más precioso, más vale apurarnos o se llenará la casa.
__He dejado preparada la ropa, está en el vestidor, no discutas con nadie.
__No lo haré. ¿Fue tuyo el regalo de los payasos?
__El comentario que me decidió fue que los niños se calman cuando empiezan la función, tranquilo. Esperaré a que ellos lleguen para buscar la torta a la casa de la repostera, la vecina que vive en la misma cuadra. La encargamos con tu hijo, enorme, de chocolate y frutilla, con cobertura glaseada en color rosa y blanco como los globos.
Hicimos cubrir el jardín aunque haya sol, en los sillones que se distribuyeron sobre el pasto, en el medio del parque se ubicará la gente grande, los abuelos, los tíos, los amigos y algunos amigos.
__Lo que no entiendo es tanto lío para dos bebés que no se enterarán más que del mejunje que le echarán en la cabeza, pobrecitas.
__Estás lindo, te queda lindo el blanco.

Guillermo sonriendo nervioso le dio las gracias por el piropo, pero ese cumplido fue solo un intercambio al paso porque apenas bajar el frenesí de tener tanta gente en la casa no les permitió charlar nada más, era tiempo de atender a los invitados y de que la fiesta saliera bien, además era el bautismo de Betsy, con padrinos cruzados y  Fabián ya repartía sonrisas para todos lados.
Guillermo no se quedó a conversar,  sino que fue a controlar que Julieta sacara a tiempo las empanadas del horno y para ganar tiempo fue colocando los sándwiches de miga en varios platitos. Se apuró porque la gente pedía más comida, pero antes se aseguró que no hubiera bebidas alcohólicas más que para los mayores. Lo miró a Pedro, con la intención de pedirle ayuda, pero no cruzaron miradas, él también estaba ocupado sirviendo bebidas a niños y grandes.

Pedro miró su imagen en el vidrio de la puerta- ventana, estrenaba un traje gris a medida, que contrastaba con la piel bronceada propia de un invierno parte cerca de la nieve, residuo de un verano disfrutando de una casa con piscinas, de varios veranos, y de los días en Europa.
La fiesta fue avanzando, los invitados elogiaron la comida. Pedro charló un rato con sus padres que sostenían a los trillizos.
Todos comían, bebían, reían, la gente estaba pasándola bien, la mañana trascurría preciosa, agradable, no hacía frío extremo, solo faltaba Jorge para la ceremonia, y mientras,  compartían un momento familiar maravilloso.
___
Pero desde hacía unos minutos, Pedro temblaba de ansiedad porque había recibido un whatsapp en su celular. Era una invitación para ausentarse de la casa. El texto lo escribió él. Marcharse en medio de esa fiesta __lo sabe__ es una insensatez. No puede escaparse. Podría traerle problemas. Era llevar la situación a un extremo. Era demasiado.

El timbre sonó, eran los payasos que al fin arribaron a la casa. Debería con Fabián actuar como anfitrión, recibirlos, mostrarles dónde dejar las cosas, llevarlos al patio y un largo etcétera. Con la distracción se olvidó de la propuesta que le llegó por teléfono. La fiesta se encarriló. Solo faltaba Jorge, no podía llegar antes, por ello adelantaron o invirtieron las cosas. Vestidos con trajes multicolores, los payasos lograron controlar a los niños de todos y todas las edades que sentados en el pasto miraban alucinando. En segundos inflaron globos de colores que, con concretos movimientos,  retorcieron hasta darles formas de diferentes animalitos. Coronaron la obra con unos trazos de marcador. Entusiasmados, los pequeños hicieron cola para recibirlos.
A continuación comenzaron el espectáculo de malabarismos y chistes que disfrutaron todos los presentes por igual. Porque los mayores, interesados en el show, ampliaron la ronda y rieron a carcajadas.

__Son buenos _dijo Pedro a su padre__, parece que valen lo que hemos pagado.

Pedro observó a Guillermo con detenimiento. Al inicio vigilaba a Belén, ahora estaba de buen humor, inmerso en la fiesta, relajado, logró olvidarse del trabajo y la pelea.
“Mejor”, pensó Pedro que no ha descartado escaparse a la cita.
Se escabulló rumbo a la cocina con la excusa de buscar bebidas, pero en verdad lo que quería era  chequear el celular, ese aparato que funcionaba como puente hacia la tentación. No había nuevo mensaje, solo el de la propuesta, enviado un rato atrás. Miró por la ventana que daba al patio y comprobó que la fiesta seguía su curso, en orden. Pensó en la invitación y lo asaltaron unas ganas locas de ir. “Un riesgo”, reconoció, pero decidió correrlo. Él le aseguró que el encuentro sería corto, muy corto. Entendía la situación.

__Pedro, ¿qué haces acá, perdiéndote el show? __le dijo su madre que entró para buscar más servilletas.

__Vine por las gaseosas. Además nadie me necesita. Pareciera que la fiesta está bajo control.
__Es que los payasos son muy buenos. ¿De dónde los sacaron?
 Pedro no respondió. Acababa de entrarle un mensaje. Es él, que insistía.
__ ¿Estás bien, hijo?
__La verdad madre, debo salir un segundo.
__ ¿Ahora? ¡Hijo, tendrías que haberlo previsto! __ Se quejó__. Está por llegar el sacerdote, ¿te faltó bebida?

 __No, peor, tengo que buscar la torta, justamente antes de que llegue el cura.

Era una buena excusa, aunque incluía un problema, la casa de la repostera quedaba demasiado cerca.
_Pero, si vive al lado… ¿Por qué no la trae ella?
__Madre, luego le cuento. ¿Me ayuda durante el momento que no esté? Fíjese que no falte bebida, vigile a Belén… ¿Puede ser?
__! Ay, Dios! ¿Y qué alternativa me queda? Anda, apúrate _dijo resignada__. No te demores.

__No, por supuesto que no… Le juro que me apuraré. Míreme a los trillizos, por favor.
__Sí… ¡claro!
__Gracias, mami _dijo dándole un beso al tiempo que le lanzaba una mirada a Guillermo. “¿Qué está haciendo?, se preguntó, Pedro. “Charlaba con Alberto y Gaby”. Pero no alcanzó a responderse porque debía irse de inmediato.
Buscó el morral y lo espió de nuevo. Seguía enfrascado en su conversación mientras Pedro, sin avisar, desapareció rumbo a la cochera. Debía sacar el auto.
El encuentro sería cerca. Pedro le propuso estacionar en un lugar que conocía, tranquilo y cerca de su casa. Lo que hicieran tendría que ser allí, y en media hora. Porque él le aclaró que no pensaba ausentarse por más de ese tiempo de la fiesta familiar. No sería justo. Sus niños son la prioridad. Tampoco debería abandonar a los invitados. Es más,  supo que debería excusarse, posponer el encuentro, pero la tentación de revivirlo es más fuerte. Y esta situación extraña, con el peligro que conllevaba, lo volvía más emocionante que nunca.
Esperaba que nadie  notase su ausencia. Arrancó el Sonic. Esta vez no puso música para ambientarse. El tiempo corría con prisas.

__
Se encuentran, se besan con locura, se tocan,  se acarician, se despedazan. Y, como siempre, no pronuncian palabras. Hoy la pasión es más intensa que nunca. Allí, dentro de su auto, empiezan a quitarse a los tirones lo esencial para poder amarse. Boca, saliva, lengua, pezones, piel. Posición incómoda y el incendio del reencuentro que perdona todo, hasta las molestias. En el asiento de atrás, gimen. Pedro sentado sobre su regazo, se mueve acompasadamente, cadenciosamente…  arriba, abajo, ardorosamente… desesperadamente. Inmerso en el placer, ni siquiera percibe que en la rodilla que pega contra el asiento, se le está marcando un moretón azul. ÉL tampoco advierte que lleva el brazo tenso y tan mal ubicado que le duele.
Sumergidos en la nebulosa febril, Pedro se sorprende cuando le  sujeta la muñeca con fuerza. Lo mira con inquietud.  ¿Qué quiere? Porque él lo único que desea es que no se detenga, su cuerpo le reclama que lo acompañe, que continúe el baile, que siga, que termine lo que han empezado. Por ello pagaría el precio que fuese. Él sabiéndolo, rebusca en el bolsillo del pantalón que lleva a medio poner, una caja pequeña. La abre y aparece algo insólito, aunque muchos las llevan, dos pulseras de oro, idénticas, lisas por fuera y con un reloj de arena en  repujado bajorrelieve por dentro. Es obvio que hacen referencia a alianza y al valor del tiempo. Antes de ponérsela, las manos le recorrieron con premura los pezones acercándose peligrosamente al anillo de casado. Sus ojos de hombre piden permiso. Entonces, Pedro enardecido, aún teniéndolo dentro de él se deja llevar y concede la petición.
 Él retira del anular el anillo y luego se quita el suyo. Y así, con las manos libres, primero engarza la pulsera en la muñeca de Pedro, luego en la suya.
Los cintillos de oro de ambos caen al piso de vehículo, pero a ninguno parece importarle. La pasión es una correntada que se lleva lo que encuentra a su paso. Y ambos respiran con esfuerzo. Los corazones  les van a galope. La locura va terminando, la cordura regresa a ellos.

__! La hora!
Pedro debe irse ya mismo.
Él se acomoda las ropas como puede, se baja del auto.
Es de tarde. En el apuro de la despedida nadie se acuerda de los anillos.
Pedro se prende el pantalón y arranca el Sonic, sabe que ambos  se deben una conversación, pero este no es el día ni el momento. Quedará pendiente. Deberán hablar porque esta vez han ido más allá de los límites. Los han pasado en demasía. Sus pulseras muestran que lo que acaban de hacer no tiene retorno.

___
Pedro condujo el auto a la casa de su vecina, la repostera. Estaba cerca pero se le hizo muy tarde, su madre se lo reprochará. No sabía nada de sus hijos. ¿Y de Guiiermo? Hum… Pedro apretó los ojos con fuerza.
Solo esperaba que la fiesta no se hubiese descontrolado, no podría perdonárselo. Menos aún sabiendo la causa.
Quince minutos después, entró apurado a la casa con la torta en brazos. Los payasos se estaban despidiendo. El griterío de los niños se volvió estridente como al inicio, pero Jorge estaba llegando. Pedro fue por los trillizos, también Guillermo se acercó.

__! Por fin, cielito! ¡Qué hermosa torta! __. ¿Por qué demoraste tanto? __protestó.

Pedro no respondió, solo lo miró… insolente.
__Los chicos se portaron bien –dijo Amalia buscando cubrirlo.

__ ¿Te ayudo? _preguntó Guillermo.

__Sí, por favor _respondió, Pedro.

La madre los miró sin moverse, y dijo:
__! No se olviden de la vela!
La mujer la ubicó encima del centro de la torta aunque no era el cumpleaños mientras Guillermo la sostenía, entonces ella exclamó.
__! Qué hermosas pulseras tienen! ¿Son nuevas?
Ellos se miraron cómplices sin saber qué responder.
__ ¿Ya no usan los anillos de casados? __insistió ella. Pero luego, pensando que tal vez, las cosas no andaban bien en el matrimonio, agregó__. Vamos, que Jorge y todos esperan.

Los esposos con la torta tomada entre ambos marcharon detrás sintiéndose extraños.
Cuando sus hijos los rodearon, al dejar la torta para acomodarse para la ceremonia, Pedro  sonrió feliz. Era la primera vez que Guiiiermo había unido el mundo de fantasía de sus encuentros con el real. Las pulseras eran la prueba de ello. La relación entre ellos, mejor que nunca, y la magia que esperaban había regresado con creces, aunque se prometió… recuperar los anillos.

CONTINUARÁ.
HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS.
CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES COINCIDENCIA.
LENGUAJE ADULTO. ESCENAS EXPLÍCITAS.
¡FELIZ DÍA DEL AMOR Y LA AMISTAD!
¡FELIZ ANIVERSARIO DE REGRESO DE PEDRO A FARSANTES!




14 comentarios:

  1. Dominga Hermosa, pasión pura, que tengas un buen día.

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  2. Bellísimo Eve...Es verdad, el amor es algo maravilloso pero que necesita que la pasión y el deseo se renueven cada día...Hermoso El Viaje, como siempre...

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