viernes, 19 de abril de 2019

"SEÑALES DE AMOR". CAPÍTULO VEINTIOCHO.


"SEÑALES DE AMOR".
 CAPÍTULO VEINTIOCHO.
Había tanto tiempo perdido en vos, eras de tal manera el molde de lo que hubieras podido ser bajo otras estrellas, que tomarte en los brazos y hacerte el amor se volvían una tarea demasiado tierna, demasiado lindante con la obra pía, y ahí me engañaba yo, me dejaba caer en el imbécil orgullo del intelectual que se cree equipado para entender (¿llorando a moco y baba?, pero es sencillamente para entender, si dan ganas de reírse, Maga. Oí, esto sólo para vos, para que no se lo cuentes a nadie. Maga, el molde hueco era yo, vos temblabas, pura y libre como una llama, como un río de mercurio, como el primer canto de un pájaro cuando rompe el alba, y es dulce decírtelo con las palabras que te fascinaban porque no creías que existieran fuera de los poemas, y que tuviéramos derecho a emplearlas.
*Julio Cortázar /Rayuela / Cap. 34/ fragmento.
03  de diciembre de 2016.
"La melancolía de una vida demasiado corta para tantas bibliotecas. Cuando crees que has aprendido plenamente cualquier cosa, la cosa lo mismo que un iceberg tiene un pedacito por fuera y te lo muestra, y el resto enorme está más allá de tu límite."
Rayuela, Julio Cortázar.


Miré a Guillermo.

__Suéltame.
__No.
__No puedes salir de esto en modo cavernícola. __No pude sostener su mirada al notar que el dolor y las mentiras burbujeaban en mí__. Me importas, Guille. Eres mi amigo. Pero esto ha durado demasiado.

__Estás asustado. Lo entiendo. __Se inclinó para murmurar tranquilamente en mi oído__. Sé por qué has salido corriendo hoy y sé por qué corres ahora. Hay que joderse, no hay forma de protegerse contra eso, sos más fuerte que tu fobia, no puedes dejar que se apodere de tu vida y gobierne tus relaciones con la gente. Hemos de disfrutar del tiempo que tenemos, dure lo que dure.
Para de correr amor mío. Para… Nos decimos amigos,  cuando en realidad  sos mi amante secreto, te escondes en mi mirada,  en mis labios y en mis caricias, pero entregas tu pasión en mi lecho, porque vos sos esa persona a la que desvisto con mis palabras y a la que le hago el amor por las noches, cuando te tengo y si no nos amamos en nuestros sueños, donde cumplimos nuestras fantasía e ilusiones que van más  allá de la imaginación, porque sos el secreto más bien guardado  que solo vos y yo conocemos y muy poco nos importa lo que  la gente murmure de lo nuestro,  porque mientras ellos  pierden el tiempo hablando,  nosotros lo ganamos,  donde la pasión se siente, entre sábanas húmedas y amándonos en silencio.
Regálame tus besos, tus labios y tu boca, regálame tu sentir  en mi cuerpo, en mi piel, tus sentimientos y tú existir. Regálame mil noches de pasión, donde vos y yo mi amor nos entrelacemos gimiendo y apagando el calor de nuestros cuerpos, acariciando con tus manos mí esencia. Regálame amor tu seducción, tu pasión, hazme sentir deseado en tus brazos. Regálame tu esencia de hombre varonil, regálame tu piel porque en ella escribiré,  vos sos el pergamino, el lienzo al que con tinta escribiría mis deseos y mis escritos perfectos. Porque vida mía  vos sos  el ser perfecto que acurruca y cobija mi piel.
Regálame cielo mío tu universo, tu deseo de tocarme, sentirme y empaparme de vos, regálame tus pensamientos, regálame tu vida, regálame tus fantasías, tus ilusiones, tus susurros, porque solo quiero pronunciar tu nombre, que me erices la piel con tan solo sentirte tan mío. Regálame tu aroma natural,  quiero impregnarme de él para no olvidarte, para respirarte, inhalarte, como si fueras esa droga, regálame ese veneno de tu boca, ese que recorre las venas, quiero morir en tus brazos, en tus manos, ser el que provoque
malos pensamientos, regálame amor mío tu ser y tu existencia, pues sin vos, sin tu presencia me castiga el alma. Regálame y regálate en mí, porque yo te regalaré todo, mi alma, mi corazón y mi existir.
En mis penumbras de soledad, eres tú quien trae ese brillo, como una estrella ardiente de amor, llenando mi cuarto, aquí mis ojos de tu belleza se quieren ya encandilar, de tu fuego mi piel se quiere incendiar… ¿qué esperas? Toma posesión de este amor y aquí por mí déjate admirar.
Se ciegan de deseos mis sentidos, que por rincones perdidos de mi cama, buscan tu calor, tu piel, tu aroma, se despiertan en mi boca suspiros de resignación pues el amarte me dice que te tengo… pero aquí, aquí no te encuentro. ¿Qué esperas? Si aquí  yo muero por adorarte de caricias y besos.
Solo es consuelo aquellas noches que mi tiempo se vuelve eterno cuando entre sueño te tengo, me tienes, eres quien toma control de mis sentidos, donde tu boca se adueña de mis labios, se pierde en mis lugares secretos, donde de tan solo pensarte despiertas allí la pasión, ¿qué esperas para salir de mi inconsciente y volverte mi presente?
Dejas tus huellas, las encuentro al despertar  por debajo de mi piel, mis poros recuerdan el suave posar de tus cabellos, cuando tus labios  tatuaron mi piel,  en la memoria de mi olfato está el aroma de tu perfume, en la memoria de mi gusto está impregnado tu sabor, te siento dentro de mí. ¿Qué esperas para habitar plenamente en mis sentidos?
¿Qué esperas para dejar que mi amor habite tus días y tus noches?
¿Qué esperas para dormir entre mis brazos al abrigo de mi pasión?
¿Qué esperas mi amor para hacer de dos, una sola vida, un solo amor?
No puedo imaginarme el día que yo deje de soñarte, que deje de tejer sueños, esperanzas y sonrisas, no puedo imaginarme que deje algún día de no soñarme en tus ojos y deje de versar el baile de mis besos en tus labios, no puedo pensar vida más que la que deje que mi piel  se estremezca al soñar tus manos recorriendo paso a paso mi piel y tus dedos dibujando vuelos de mariposa, no, no puedo permitirle a este corazón mío que no agite más mis pulsos soñando tu llegada, tampoco puedo ponerle barreras a mis ojos para que frenen mis lágrimas negras, no, no puedo.
Y como no quiero ni puedo, haré de esta noche una noche maravillosa, donde soñaré que los dos nos encontramos en el lugar perfecto, en nuestro refugio donde solos podemos dar rienda suelta a nuestro sentir, a nuestro deseo de amor, abrázame muy fuerte amor, no quiero irme de este sueño, esta será una de las noches más bellas, sabes que sos para mi corazón la arritmia perfecta para seguir amándote. Por eso amor mío, desnuda mi piel, serás su dueño y tendrás por siempre la exclusividad de mis sentimientos.
Te amo amor.
 __Ya basta Guille, deberías haber sido terapeuta.

Traté de relajar el cuerpo y de no hacer caso del horrendo movimiento en mi estómago.
__Por eso termino esto, la vida es corta. Deberíamos estar con la gente que amamos, tienes a tu familia, y a tus socios, yo solo a mi hermano.
Guille se quedó helado contra mí y yo esperé sin respiración, rogando tener fuerzas para continuar con la mentira. Lentamente se apartó de mí, con los ojos duros al mirar los míos.
__Estás mintiendo.

“Sí, estoy mintiendo, pero no te sobreviviré. Y peor, tú no me sobrevivirás.”
__No. No te quiero, y después de todo lo que has pasado, te mereces a alguien que te quiera.
Dejó caer los brazos, pero no como si quisiera soltarme, parecía anonadado. Creo que estaba en estado de shock. Aproveché la oportunidad para dar un paso atrás, temiendo que si me quedaba cerca finalmente perdería mi acerada determinación y le diría que era un maldito mentiroso y que no quería que me soltara nunca.
Pero ya había sido bastante egoísta por un día.

__Vos me quieres _ argumentó, con voz suave y grave__. Lo he visto.

Tragué saliva y me obligué a sostener su mirada.
__Me preocupo por ti, pero es muy diferente.

Por un momento, no estuve suficientemente seguro de que no iba a decir nada y entonces sus ojos se apagaron y  asintió con la cabeza en un gesto brusco.

__Muy bien.
__ ¿Vas a dejarme ir?
Curvó el labio superior, con una expresión dolorosamente amarga al dar un paso hacia mí.
__Aparentemente __ nunca te he tenido. __Se volvió con brusquedad y sin decir una palabra más empezó a alejarse por la calle en la oscuridad.

Guillermo nunca miró por encima de su hombro, por suerte.
Si lo hubiera hecho, habría visto  a Pedro Beggio derramando lágrimas reales por primera vez en mucho tiempo y habría sabido que le había mentido, que sé que existe un lazo profundo entre nuestras almas que no lo rompería ni siquiera la muerte. Y lo más grande. Cualquiera que me viera, sabría que estaba observando un corazón en el proceso de romperse.

04 de diciembre de 2016.

__No creo que sea la cosa más sana que hayas hecho, Pedro, ¿no te parece? _me preguntó la doctora en voz baja, juntando las cejas.

__Fue lo mejor que he hecho nunca.
__ ¿Por qué piensas eso?
__Si le contaba la verdad a Guille, que lo amaba, nunca retrocedería. Es así de tenaz. Y entonces podría haber pasado toda su vida conmigo.
__ ¿Y eso sería malo?
__Bueno, sí _respondí con irritabilidad__. ¿No ha oído lo que le hice a Gaby y a él? Estoy tan aterrorizado de perder otra vez que miento de esa manera. No soportaría una pérdida más.

_Sí, pero eres consciente de lo que estás haciendo y es un paso en la dirección correcta.
__No. No lo es. Tengo problemas que vienen de muy lejos y no puedo prometer que no le haría eso a él, una y otra vez. Eso no es justo para él. Alguien a quien amaba ya le rompió la confianza una vez. Si me quedo con él y sigo siendo injusto, estaría rompiendo su confianza una y otra vez. Y él no lo merece.
La doctora inclinó la cabeza a un lado.
__Eso no te corresponde a ti decidirlo. Seguramente tiene que decidirlo Guillermo,  no es el caso de Camila, con ella no tenías elección, tenías que decirle la verdad porque nunca podrás amarla. Y no estás seguro de que seguirás siendo injusto como dices. Estar con Guillermo podría ayudarte en eso. Él podría ayudarte.
__No ayudó. Estar con él no ayudó.
__Te convenció de que estuvieras allí por Gaby, y has estado. Yo diría que ayudó.
Me bloqueó una terca determinación.
-Para amarlo no necesité tanto. Solo la caricia de su voz en mis oídos, solo un beso de su mirada enamorada y un te amo que acelerara mis latidos... Para amarlo solo me bastó un momento, de los que se convierten  en eternos, porque aprendimos a compartir nuestros silencios, nuestros cielos, nuestros paraísos y  también nuestros infiernos. Para amarlo no necesité tocarlo ni saborear sus besos, ni aspirar la belleza en su fragancia porque de ese sentimiento compartido entre los dos se acortó la distancia  en un te amo.
Para poder enamorarme de su todo solo bastó comprender  que nada lograría si ignoraba a mis sentidos y  a mi necesidad alejando al único ser por el cual mi corazón se perdía en latidos acelerados. Para amarlo así de esa manera que hasta se convierte en agonía cualquier espera,
solo me bastó encontrar en su ser esa hermosa imperfección de amarme hasta morir como solo lo hace él.
Pero no voy a decirle la verdad. Lo que estoy haciendo es lo mejor para él, volverá con su familia, y será feliz con amantes ocasionales como siempre.
__Lo que estoy intentando decir, Pedro, es que quizá deberías dejar de ser mártir.
Abandonaste a Emanuel por Eloísa y quizá Guillermo piensa que lo mejor para él es tenerte en su vida. Y quizás esté dispuesto a dejar en el camino hasta a su familia,  a superar tu ansiedad y afrontar tus defensas altas, tus muros casi infranqueables.
__Quizá tiene razón. __Asentí, con los ojos encendidos al tratar de bloquear la dolorosa idea de Guillermo conmigo en un futuro juntos__. Quizá soy un mártir. Y quizás él lo sería. Pero él merece algo mejor que esa lucha. Merece ser feliz en su relación, como mi padre lo era con mi madre. Y si el amor de mis padres me ha mostrado algo es que Guille tiene razón. La vida es demasiado corta.

__Como siempre, trato de mirar a la vida de frente, sin prisa, siempre mirando a la verdad
con ojos ilusionados, sin maldades estrenadas  y primaveras por vivir contigo amor mío o sin ti, uso la esperanza para admirar lo prodigiosa que es la vida, me ha dado la oportunidad de amar, de soñar a través de mis pupilas, y he ahí, que mirándome en las tuyas descubrí vida mía, la belleza que posee este universo y lo que nos entrega cada día.
Me gusta el mundo cuando hace que vuele sin alas, me gusta cuando llegas en la noche apretando amores para entregármelos en mis sueños, me gusta soñar tu risa con mis ojos cerrados, tragar saliva por sentir un suspiro ahogado que aprieta mi garganta cuando un beso tuyo traspasa mis infiernos, hoy nado solo en el mar de tus sueños, hoy, vuelo de nuevo sin alas en busca de tu cuerpo, hoy, he emprendido el sueño del deseo y te sueño como jamás he soñado, hoy, en mi noche negra muero por tus besos lentos, muero por esos suspiros que hablan de mí, hoy sí que muero por tener tu mirada apasionada perdida en el vértice de mis ojos, más que nunca vida mía hoy me duermo soñándome en tus brazos en el calor de tus besos, y soñando con la vida que nos queda por vivir, ni más ni menos.
__ ¿Guille? Te oí, ¿peleaste con Pedro de nuevo? _ preguntó Gaby con dulzura.

__No preciosa, yo no soy el que duda o pelea, es él el que tiene vértigos de amarme, pánico. Y yo de perderlo.
Un temor horrible persigue mis desvelos,  no imagino vivir sin su presencia. Mi prosa como testigo es la manera que alivia mis fantasmas, que se alejan pronunciando una lírica encomiástica en mis argumentos. Mis verbos se convierten en palabras endemoniadas,  manchando el papel blanco en un mar de tragedias desesperanzadas, donde se unen cielo y tierra tras sus huellas en aquel invierno nostálgico. Pedro es  el silencio de mis pronunciados misterios, afloran abiertamente sus partículas vivas de fugaces caricias en el baúl escondido de mis intimidades más preciadas, el no verlo me hace perder en el infierno. En mi destino nunca experimenté mis apuros,  invitado por la paciencia a una controversial entrevista sobre desesperos, y no desearía nunca transformarme, prisionero de mis propias frases como un personaje malvado de mis historias contadas. Síntomas de locura, sin cordura, mientras espero su regreso me cuelgo a las historias pasadas donde me aferro a imágenes en el tiempo, y suplico a su majestad el divino Dios que me alimente de su aliento buscando el rostro de su camino. Navegaré en el espacio en busca de segundos,  minutos, horas,  días,  semanas,  meses, años,  siglos, no importa cuánto tiempo esperaré solo para amarlo   y abrazar los recónditos paisajes de su cuerpo. Siempre seré el ángel que sonreirá y le brindará seguridad para no demostrarle mis angustias y sufrimientos a la hora de alejarse,  de marcharse para siempre. En ese momento para él seré el perfecto actor de una actuación fenomenal, no se dará cuenta cómo se desliza mi tristeza como sangre sobre mis páginas llorando de dolor su partida. Entre la realidad y los sueños ahí estaré yo esperando su regreso o muriendo por cada gota mágica de su placer, en las sombras esperando la salvación con la llegada de su amor verdadero. Y así estoy ahora.
__
Una vez que la lluvia empieza a caer es difícil que pare. Supongo que para a su debido tiempo. Mis lágrimas, como la lluvia, seguían cuando volvía a casa con la visión nublada. En realidad es difícil describir un corazón roto. Lo único que sé es que es un dolor comparable a una amputación de una extremidad, a un desgarro en el alma, inimaginable que se centra en tu pecho e irradia desde allí, un dolor punzante y agudo que causa más incapacitación. Pero no es solo el dolor. La negación se aloja en tu garganta, y ese bulto posee su propia clase de dolor. La aflicción del sufrimiento también puede encontrarse en un nudo en el estómago. El nudo se contrae y se expande, se contrae y se expande, hasta que estás convencido de que no vas a poder contener el vómito.
De alguna manera logré aferrarme al menos a esa parte de mi dignidad. En cuanto volví a casa, a través del dolor de abandonar a Guille llegó el temor. Miré por el pasillo a la puerta del dormitorio donde alojamos a Gaby, y tuve que contenerme para no incumplir mi promesa de no huir de ella.
Así que hice lo contrario.
Me quité las botas y la chaqueta y me metí en silencio en la habitación a oscuras. A la luz de la luna que brillaba a través de la ventana, vi a Gaby de costado, hecha un ovillo.  Hice un movimiento hacia ella y el suelo crujió bajo mis pies. Gaby abrió los ojos de inmediato.
Levantó la mirada con los ojos como platos pero cautelosa.
Eso dolió.
Empecé a llorar más y al ver mis lágrimas, una lágrima se deslizó por la mejilla de Gaby. Sin decir una palabra,  me acerqué a la cama y le tomé las manos entre las mías.

__Lo siento _susurré.

__Está bien __. La voz de ella era ronca por la emoción__. Has vuelto.

Y como la vida era demasiado corta…
__Te quiero, Gabriela Soria. Vas a superar esto.
Oí su respiración que se convertía en un sollozo.
__Yo también te quiero, Pedro.
__ ¿Y mi hermano?
__ Estaba agotado, lo envié a dormir a su habitación, ya estoy mejor _dijo ella, y le di un beso en la coronilla.

Así fue como Guillermo nos encontró al día siguiente,  en algún momento me debí  quedar dormido en el sillón cuidando de ella, y en otro me tumbé a su lado sosteniéndonos las manos, durmiendo con las mejillas sucias con regueros de lágrimas como dos niños pequeños.
No me despertó. De hecho ni siquiera me miró.
Me desperté porque estaba sacudiendo a Gaby para despertarla.

__ ¿Qué hora es? _Oí que preguntaba ella somnolienta.

__Es más de mediodía. Beto salió a comprar insumos, y he preparado algo de comer.

El sonido de su voz fue como un puñetazo en el pecho. Mis ojos se abrieron con dificultad, pegajosos con la sal de las lágrimas secas e hinchadas por el peor ataque de llanto que había tenido desde que perdí a David o a Eloísa. Guille se estaba inclinando sobre Gaby, peinándola hacia atrás, con un brillo de amor en la mirada. Todavía tenía los ojos inyectados en sangre y grandes ojeras.
Tenía un aspecto horrible.
Apostaría que yo estaba peor.
__No tengo hambre _susurró Gaby.

Guille negó con la cabeza con expresión decidida.
__Necesitas comer. Vamos, cielo, es hora de levantarse.
Y vos, Pedro, me diste un beso.   No uno… miles.
__Y vos me dijiste que un beso no significa nada.
__Pedro… en el mejor de los casos somos compañeros de trabajo o vecinos, dime en qué lugar del mundo un beso entre dos  compañeros de trabajo no significa nada. Vos a mí me despertaste de una larga época de adormecimiento por lo que estoy dispuesto a dejar a Ana, a decir la verdad a mi hijo. Ya hablaremos.

Observé que Gaby tomaba la mano grande de Guillermo y él delicadamente la ayudaba a bajar de la cama y ponerse de pie. Todavía demasiado débil, sosteniéndola la condujo fuera de la habitación. Gaby tenía los pantalones lisos de lino arrugados al máximo, la camisa retorcida en torno al cuerpo y el pelo hecho un desastre. Parecía  un ser cuya vida habían puesto patas arriba. Sufría por ella. Y ni siquiera podía  mirar a Guille, porque el dolor que sentía por él era indescifrable.
__ ¿Y mi mamá? _preguntó ella__. Por favor que no sepa nada.

__Tranquila, está en lo de Isabel, nadie le ha contado nada, le dijimos que estás de viaje por un asunto del estudio.
__Gracias Guille.__Pedro, ¿vienes?__Gaby me miró por encima del hombro.

Y por ella asentí. Aunque no quería estar cerca de Guille.
¿Sabes que es lo peor? Él ni siquiera podía ser absolutamente mezquino respecto a la ruptura. Claro, no podía mirarme, o no podía hablarme, pero… también había preparado mi comida.
Gaby y yo nos sentamos en torno a la mesa de la cocina a comer deliciosas masas y tostadas con mermelada mientras Guille estaba apoyado contra la encimera tomando café. Gaby al principio no reparó en el silencio entre nosotros porque estaba metida en su propia cabeza y porque el silencio en ese punto no parecía inusual.
Te contaré lo poco egoísta que es la chica, con todo lo que le estaba pasando, se fijó en lo que estaba ocurriendo entre sus amigos, no éramos precisamente sutiles al respecto. Me levanté para poner el plato y la taza en el fregadero y Guille pasó al otro lado de la cocina. Después yo crucé para sacar un poco de zumo de naranja de  la nevera y Guille volvió al fregadero. Me acerqué al fregadero para sacar un vaso del armario y él volvió a la nevera. Fui a ella para volver a dejar el zumo y él volvió al fregadero.

__ ¿Qué está pasando? __preguntó Gaby con suavidad, juntando las cejas al observarnos.

Murmuramos un par de nadas.
__ ¿Chicos? __Gaby parecía paralizada__. ¿Ha llamado el médico?

Nuestras cabezas se inclinaron sobre ella y de inmediato se asentó el remordimiento entre nosotros.
__No. __Guille negó con la cabeza__. No, Gaby. Tenemos cita esta tarde, como quedamos.

__ ¿Entonces por qué están actuando de forma tan extraña?
La miramos sin inmutarnos, pero uno de nosotros delató algo, algo grande porque después de un minuto de escrutar nuestras caras, Gaby cayó.
__ ¿Han roto?
Guille no le hizo caso.
__Gaby, deberías meterte en la ducha y arreglarte un poco. Te sentirás mejor.
__ ¿Por mí? __Ella se levantó, con los ojos redondos__. Han roto por mí.

Intenté mirar a Guille, pero él estaba mirando solemnemente a Gaby. Como yo, él no había querido añadir más peso a sus hombros. Me volví hacia ella.
__No, Gaby. No es por ti. No tiene nada que ver contigo y ya está hecho. Estamos bien. No te preocupes por nosotros.
Su expresión se endureció, echando la barbilla hacia delante de forma testaruda.

__Pero está claro que no se hablan.  ¿Qué ha pasado?
Guille suspiró.
__Pedro no me quiere y yo creo que él es un tipo frío que no es de fiar. Ahora ve a la ducha.

Como no me estaba mirando a mí, no me molesté en enmascarar el dolor que sentí por sus palabras. No es de fiar. Frío.
También olvidé que Gaby podía verme y sus ojos se oscurecieron de compasión.
__Guille _ susurró, con un suave reproche en la palabra.

__A la ducha. Ahora.
Gaby centró su atención en mí, preocupada. No podía creer que ella estuviera preocupada por mí en un momento como ese.
__A la ducha, Gabriela.
__Eres peor que mis padres __murmuró sin humor, pero decidiendo que prefería no tener que enfrentarse con dos de las personas más tenaces que conocía, salió de la cocina dejándonos solos en un silencio grueso y espantoso.

__Has dejado parte de tus cosas en mi Loft.  Lo tiraré esta semana __dijo Guillermo.

Él también tenía cosas en mi habitación.
__ Recogeré tus cosas.

Debe señalarse que en este punto estábamos apoyados en puntos opuestos de la encimera de la cocina, hablando a la pared de delante de nosotros, sin mirarnos.
Guille se aclaró la garganta.
__ ¿Has vuelto por ella?
“¿Había esperanza en su voz?”
__Bueno, a veces los tipos fríos indignos de confianza mantienen su palabra _respondí con rapidez, dando un sorbo a mi zumo.

Guille gruñó y dejó su taza con fuerza en la encimera.
__Ella no necesita tu caridad ni tu puta culpa.
__Mierda.
Claramente, Guille había aprovechado la noche para dejar que su rabia hirviera y se derramara. Me abracé a mí mismo, tratando de comprender y de no hacerle más daño del que ya le había hecho.
__Ella no tiene ni mi caridad ni mi culpa. La quiero.
__Entonces tenía razón anoche. __Guille asintió__. A mí  no me quieres pero a ella sí.

__Guille… __Me atraganté.

Esperaba que él fuera como siempre. Guille era estoico, intimidante, inamovible, y sereno. No era abierto menos vulnerable ni amargo, nunca se enfadaba. Básicamente, se estaba comportando como un arrogante en un momento muy inapropiado. Aunque yo lo había dejado horas después de que se enterara de que Gaby podía tener cáncer, así que, ¿quién era más estúpido?
__Tú tampoco me quieres, Guille. Soy el amante de turno.
Sus ojos destellaron al oírlo antes de posarse en mi cuerpo y volver a subir en un frío examen que me causó temblores horribles. Si mirada volvió a la mía y era pálida como el hielo.
__Tienes razón, no te quiero. Solo estoy cabreado por tener que buscar un nuevo acuerdo, sobre todo cuando el último no era nada malo en la cama.

Por un beso tuyo yo daría la vida entera. Me volvería loco de contento, escribiría versos por
todo tu cuerpo,  besos que saben a cielo  y  tu boca a miel, tierna, bella, agradable  que enciende mi deseo y el mar de mis anhelos. Por un beso tuyo  rico, pasional, sabroso,  erótico y amoroso,  húmedo, con  aroma a sándalo sería capaz de detener el mundo entero y demostrarles a todos el amor que te tengo, que estoy dispuesto a  darlo todo para  contemplarte  extasiado y cariñoso. Porque no te quiero sino que te amo, Pedro.
Por un beso tuyo qué no daría por uno solo, iría hasta la constelación mayor solo para traerte la más bella estrella de la osa mayor que hay en el firmamento.  Si me dieras un beso detendría  el tiempo. Y así  cada amanecer admiraría tu hermosa sonrisa sintiendo el amor, como un milagro  de la vida. Por un beso tuyo entrelazaría mis manos  con las tuyas, me quedaría  en el oasis de tu sonrisa  y me internaría por siempre en tu mirada,  como una ola que se interna en la inmensidad del mar. Me mezclaría con tu esencia, fragancia de olorosas  flores que despide tu cuerpo  y  te diría al oído en susurros lo mucho que te quiero, que eres mi mundo, lo más mágico,  sublime, es lo que  daría por un beso tuyo mi amor.
 Como siempre, trato de mirar a la vida de frente, sin prisa, siempre mirando a la verdad
con ojos ilusionados, sin maldades estrenadas, y primaveras por vivir, contigo amor mío o sin ti, uso la esperanza para admirar lo prodigiosa que es la vida, me ha dado la oportunidad de amar, de soñar a través de más pupilas, y he ahí, que mirándome en las tuyas descubrí vida mía, la belleza que posee este universo y lo que nos entrega cada día.
Me gusta el mundo cuando hace que vuele sin alas, me gusta cuando en la noche llegas apretando amores para entregármelos en mis sueños, me gusta soñar tu risa con mis ojos cerrados, tragar saliva por sentir un suspiro ahogado que aprieta mi garganta cuando un beso tuyo traspasa mis infiernos, hoy nado solo en el mar de tus sueños, hoy, vuelo de nuevo sin alas en busca de tu cuerpo, hoy, he emprendido el sueño del deseo y te sueño como jamás he soñado, hoy, en mi noche negra muero por tus besos lentos, muero por esos suspiros que hablan de mí,  hoy sí que muero por tener tu mirada apasionada perdida en el vértice de mis ojos, más que nunca vida mía hoy me duermo soñándome en tus brazos en el calor de tus besos, y soñando con la vida que nos queda por vivir, ni más ni menos.
Un  día estuve en tu piel, estuve en ti, en ese espacio tan hermoso que dibuja tu silueta mientras yaces desnudo sobre la cama, en ese instante tan sublime cuando me miras entre sensual y coqueto, entre tierno y atrevido me embriagué de tu esencia, me deleité con tu fragancia, me enloquecí con tu voz que a mis oídos suena a poesía, a hechizo y fantasía.

Estuve en tu piel, en cada rincón, en cada lugar de ti que dejaba de ser arcano para mí y mi mundo fuiste tú y mi religión fue tu cuerpo y mi dios fue tu ser, fue tu alma que de la mía se apoderó y fui libre para amarte.
Estuve en ti, desnudo e indefenso ante tu belleza, ante tu seductora presencia, preso fui de tus besos, de tus deseos que eran míos, de tus caricias que se encontraban con las mías, de tus ojos  que encerraban el tiempo que se detuvo por un instante y en etérea forma me convertí para fundirme en ti y en el universo de tu cuerpo fui dios y tu creador.
Estuve en ti, estuve en tu piel, fuimos amor, fuimos pasión, fuimos tú y yo, fuimos todo y fuimos nada.
Como recién nacidos recién desnudos. Cohabitando nuestros cuerpos sentado en mis caderas
me adentras en tu alma y tú, adherido al velcro de mi piel. Sin movimiento, sin la emoción contenida del instante. Enlazados, apoyándonos en los hombros, habitando el silencio formando un solo cuerpo de una misma alma. Una sola nube de una sola lluvia,
de una sola gota de un mismo sentimiento. De la misma lágrima de tus mismos ojos en mi misma mirada. Una sola estrella del mismo universo de tu ser.
Una sola luna del mismo mundo de cuanto eres de una sola tierra del mismo barro que me da tu vida. Del mismo soplo de tu pecho que forja el viento. Como recién nacidos, recién desnudos posado en mis caderas dentro de ti.
Inamovible, quieto como el silencio percibiendo con mis sentidos tus adentros, cerrando tu alma en mi quieta calma escalando cuanto sientes receptivo, húmedo entre sudores, abrazados y perpetuos desvelando tus crucigramas,  espantando tus soledades, juntando latidos en la coronaria de mi sentir,  inseminando tus interiores con los embriones de nuestras almas.
Como recién nacidos recién desnudos asentado en mis caderas. Absorto en tu mirada percibiendo tus adentros. El circuito de tu sangre. El palpitar de tus venas. El transpirar de tu piel. El vaivén de las olas de tu pecho. Los sonidos de tu sentir adentrándose en tu alma.
Los impulsos de tus pensamientos acelerados en tu agitación. Contemplando tus recuerdos
formando parte de tu memoria. Adentrándome en tus reencarnaciones hasta llegar a mi vida al instante que mi alma te mira, me duele y te siente y ahora, dame movimiento dame cuanto eres como recién nacidos recién desnudos. Amar de prisa, sin la conciencia de los días es olvidar con la seguridad del tiempo. Pero olvida todo mi discurso porque en verdad no te quiero.
__ Guille, la primera vez. Aquella noche ya no pude olvidarla, de aquellos labios no me pude desprender, sentí el amor que abrazaba mi locura de aquellos besos,  ya no vuelven otra vez,
aquella noche te entregaste como nunca, sentí tu aliento y también tu desnudez, besé tus labios saciando mis instintos, de tu mirada fue que yo me enamoré.
Y crucé contigo el palmar de lo prohibido, de los excesos de los besos por tu piel, aquel aroma del rocío de tu cuerpo, aquella noche otra vez me enamoré, sentí mis pies que flotaban en la luna y viví de nuevo en el recuerdo del ayer aquella estrella que ilumina mi camino, aquellos besos ya no vuelven otra vez, aquella noche las estrellas se apagaron y tu silueta en penumbras adoré, besar tus pies en el camino hacia la gloria,  llegar al centro de la tierra que yo amé, aquel volcán erupciones repetía,  entre la lava de tu amor yo me perdí, aquella noche nunca más podré olvidarla, aquella noche que en tus brazos yo caí.

Diría que era bastante buen actor pero si seguía con su asalto verbal iba a derrumbarme por el dolor. Me volví con rapidez para que no viera el efecto de sus palabras en mí.

__Esperaba que todavía seríamos amigos, pero claramente no quieres eso. Así que, ¿podemos estar de acuerdo en no hablarnos a menos que tengamos que hacerlo por el bien de Gaby?
__Si fuera por mí, por el bien de Gaby, te echaría de una patada de nuestras vidas y te diría que no volvieras a cruzar el umbral, pero ni ella ni Beto necesitan eso ahora mismo.
El asombro me obligó a levantar la cabeza y le miré con incredulidad.

__ ¿Estás de broma?
Cruzó los brazos poderosos sobre el pecho y negó con la cabeza.
__No. No puedo confiar en vos. Estás enfermo. No creo que Gaby necesite eso.
__Anoche me querías acá o donde fuese cerca de ella, con ella.
__He tenido tiempo para pensarlo. Si pudiera, me desembarazaría de vos. Pero eso solo causaría más dolor a ella que no es lo que necesita ahora mismo.
__ ¿Podrías hacer eso? __Estaba casi sin aliento__. Echarme sin más de tu vida.

__ ¿Por qué no? Vos me hiciste eso anoche.
__No. Yo rompí contigo. Yo no te eché de mi vida ni de la de mi hermano. __Lo fulminé con la mirada__. Pero si hubiera sabido lo poco que significaba en realidad para ti, probablemente debería haberlo hecho.

__Oh. __Guille asintió__. Es verdad. Vos no me quieres, pero te preocupas por mí. __Se encogió de hombros__. Bueno, pues vos me importas una mierda.

Apreté la mandíbula esforzándome por contener las lágrimas.
__De hecho, anoche me acosté con otro.

¿Alguna vez te han pegado un tiro de escopeta en el estómago? ¿No? A mí tampoco. Pero tengo la impresión de que lo que sentí cuando Guille dijo eso sería similar a un tiro de escopeta. Y la verdad, ni siquiera el mejor actor del mundo podía ocultar esa clase de dolor.
Me encogí físicamente con sus palabras, mi cuerpo se echó atrás y casi cedieron mis rodillas. Tenía los ojos como platos y la boca abierta por el horror. Y entonces ocurrió lo peor. Empecé a llorar.
A través de mis lágrimas vi que los labios de Guille se apretaron y dio pasos hacia mí, con todo su cuerpo crispándose.

__Lo sabía __dijo entre dientes, todavía viniendo hacia mí.

__! No te acerques! _grité, incapaz de soportar la idea de tenerlo cerca ahora.

__ ¿Que no te toque? _ rugió con los ojos destellando con violencia__. ¡Voy a matarte!

__ ¿A mí?

Me volví, tomé un plato del escurridor y se lo lancé a la cabeza. Él se agachó y el plato se estrelló contra la pared.
__Yo no soy el que se acuesta con otros dos segundos después de romper, ni siquiera con mi exnovia.
Busqué un vaso para romper al lanzar, pero ya tenía a Guille encima, con las manos fuertes sujetándome las muñecas en el costado, con su cuerpo sobre el mío contra la encimera. Me debatí con ferocidad, pero él era demasiado fuerte.
__Suéltame _sollocé__. Suéltame. Te odio.

__Chis, Pedro _ me aplacó, inclinando la cabeza a mi cuello__. Chis, no digas eso __rogó contra mi piel__. No digas eso. No quería decirlo. Es mentira, estaba enfadado. Soy un idiota. Mentí. Estuve toda la noche en casa, con Fabián y Valeria. Puedes llamarlos y preguntarles, pero él te dirá la verdad. Y jamás yo te haría a vos lo que me hicieron a mí.

Sus palabras penetraron mi histeria y dejé de luchar. Y empecé a temblar.
__ ¿Qué?
Guille se echó atrás para mirarme con un par de ojos café muy sincero.
__Mentí, celosín, no estuve con nadie, luego de vos ya no podría. No ha habido nadie desde que empezamos a estar juntos aunque viste rondando a Juan y otros en las salidas, lo prometo.
Tenía la nariz tapada de tanto llorar, así que soné como un niño cuando murmuré.
__No lo entiendo.
__Pedro, cuando hablaba de acuerdos no hablaba de otro hombre, si tengo que renovar el contrato para estar con vos, lo haré, pero solo con vos _rugió su voz, con la ternura recuperada, aunque todavía podía ver el enfado en sus ojos__. Sos imposible cuando algo se te pone como anoche y es preferible dejarte, estaba enojado cuando rompiste conmigo, así que solo me fui a cenar a casa caminando, y luego fui a casa de Marcos e Isabel porque sabía que estarían preocupados por Gaby, y Aída sin entender nada, quería ver si estaba bien. Marcos supo que me pasaba algo más en cuanto me vio entrar, le conté lo que había ocurrido, y me contó que sabías todo de mi pasado y que al saberlo sufriste como si te hubiesen abofeteado, también yo te había contado. __Me soltó las muñecas para deslizar sus manos al pelo, llevándome la cabeza hacia atrás para que no pudiera desviar la mirada__. Pasé la última noche repasando una y otra vez los últimos meses en mi cabeza y sé que me estás mintiendo.
Sé que me quieres, Pedro, por eso he dicho lo que antes oíste, porque no es posible que esté tan enamorado de vos y que vos no te sientas de la misma manera. Al principio pensé que volverías con Emanuel, pero luego de que se casó con Diego, eso no es posible, supe que me amas a mí.

Con el corazón latiendo, el miedo aferrado a mi garganta, traté de tragarlo.
__ ¿Entonces qué demonios ha pasado esta mañana?
Me apretó la nuca y se acercó con los ojos oscuros de rabia.
__No sos ni frío ni de poco fiar, nada de lo que he dicho. Tienes… problemas. Eso lo entiendo y creo que al fin por eso Emanuel dejó de insistir y se casó con Diego. Pero en cuanto me di cuenta de que todos tenemos nuestras cosas, que yo tengo decenas de fobias, y que me estabas mintiendo, empecé a comprender por qué. Crees que nunca  te delataste conmigo. Crees que tienes tiempo de dar marcha atrás y simular que  no ocurrió nada entre nosotros, porque de esa forma si alguna vez me pasa algo a mí, podrás decir que no te importa y no sentir dolor.

Dios mío, ahora era un puto vidente.
__No puedes soportar una pérdida más, ¿verdad? Pero Gaby se salvará. Aunque sos bueno simulando que no te pasa nada, que no sientes nada. Pensaba que si lograba hacerte daño esta mañana, podría tener la prueba que necesitaba de que estabas mintiendo.

Lo paralicé con una expresión que decía que quería arrancarle parte de su anatomía.
__ ¿Por eso me contaste que te habías acostado con otro? Pensé que habías vuelto con Juan que no deja de perseguirte.
Él asintió con suavidad y plantó un beso de disculpas en mis labios.
__Lo siento. Lo hice para conseguir la verdad… pero si soy sincero lo hice también para hacerte daño como vos me lo hiciste anoche. __Sus ojos se llenaron de remordimiento__. Lo siento de verdad. No quiero volver a poner esa expresión en tu cara otra vez, ni hacerte llorar otra vez, lo juro. Pero la verdad es que lloraste, lloraste porque la idea de que hiciera eso te destrozaba, y eso es porque vos me amas y no admites que mire a otro.

Floreciente amanecer, sinceridad en pétalos, lágrimas de ausencia. Tiemblo de amor, buscando latidos  luchando por estar  vivos. Nostalgia entre manecillas del reloj el tiempo vaga en  silencios. Viajero ardiente, navegando vas kilómetros en  recuerdos. Voz que late  en mi corazón pues  solo eso conozco  de vos. Aun así me llevas a conocer ese cielo donde suspira mi
alma. Por tus ojos veo el despertar más hermoso y  solo quiero abrazarte. Divino sueño amor
hacerlo algún día  una bella realidad. Llegar a mi destino final con vos. Te escribo cartas si no te veo y es cuando mis letras se transforman en esos sentimientos habitados en mi interior, deseosos de salir y transformarse en caricias tiernas para tocar tu alma.
Disfruta mi escritura criatura entristecida con mis versos rimando y tocando tu corazón,  caricias sin tocar la piel, caricias sí caricias tocando tu alma, calma regocijada entre mis letras,  apagada estará esa tristeza y entre mis letras tu paz encontrarás, saboreando las delicias de un ser que sientes sin tocar la piel, definitivo siento tu ser desprendiendo todo dolor por amor, sin el dolor solo amor.
 Soy quien brinda paz,  aquel que remueve lágrimas,  humedecida tu tersa piel secando y calmando el llanto derramando en vos con cariño y amor. Déjame tocar tu sentir
con mis palabras sin hablar,  tan solo déjame llegar a mi destino final y con mis letras alcanzar  a tocar tu corazón,  así lograr  tu paz.
Como una plegaria nunca escuchada embargo mis emociones en lo diáfano del día que se completa con un abrazo. Me siento inútil sin tu rostro, me siento indefenso sin tu mirada, pobre de palabras y lleno de soledad sin la armonía de tu perfume.
Estiro mis brazos, los convierto en infinitos seguidores de tu cintura, mas no llego a darte la paz que tus piernas ansían. Y callo, mi silencio es hacedor de mil palabras que no dicen nada, cómo decirte que tus lágrimas son la opacidad de mi vida.
Lucho y no concreto,  percibo y me asfixio, deseo evadir el universo pendiendo de un pelo  que me hamaque con la sencillez de tu olvido y la intrepidez de tus sueños. Llegarán mis brazos a ti
te darán un solo suspiro mientras rodeas mi cuello y en el aire solo vivirá la eterna agonía de un principio majestuoso e interminable.

Traté de ordenar mis ideas, pese a que el pánico iba esparciéndolas. Había mucho que afrontar, demasiado que discutir y todo tendría que ocurrir después, porque Gaby nos necesitaba.

__Uno: Ha sido la cosa más cerda que se puede hacer en el mundo. Dos. No podemos ocuparnos de eso ahora mismo.
__No vamos a salir de esta cocina hasta que reconozcas que me amas.
__Guille, lo digo en serio. __Lo empujé con severidad y él me soltó, aunque no retrocedió__. No voy a volver contigo. No voy a cambiar de idea.

Levantó la mirada como si quisiera mirar al cielo y yo observé que luchaba con su paciencia. Finalmente volvió a mirarme y vi el músculo de su mandíbula que se tensaba.
__ ¿Por qué no? _ soltó.

No iba a explicárselo. Guille encontraría una manera de darle la vuelta y yo solo… no.
__Porque no. Ahora, tenemos un día muy largo por delante y posiblemente unos meses aún más largos, así que dejémoslo estar.
__Vale. __Guille levantó las manos y retrocedió.

Estaba a punto de suspirar con una pequeña dosis de alivio cuando habló otra vez.
__Por ahora.
Demonios.
__ ¿Qué?
 Él sonrió, y era una sonrisa infantil que pretendía ser perversa, pero estaba demasiado cansado para conseguirlo.

__Te quiero. Sos mío. Mataré a cualquier cabrón que intente arrebatarte. Así que esto es lo que vamos a hacer. Primero va Gaby, pero mientras estemos cuidándola vos puedes ser todo lo cabezote que quieras y simular que hemos roto. Incluso te dejaré. Pero también voy a estar aquí, cada día, mostrándote lo que te estás perdiendo.
Todavía tenía las mejillas húmedas, los ojos húmedos, y sabía que tendría un aspecto horrible pero justo en ese momento no me importaba. Parte de mí estaba sobrecogido de asombro. La otra mitad de mí estaba muerto de miedo. Y aferrándome a ambas correas estaba mi persistencia cabezota.

__ ¿Estás loco? No voy a cambiar de opinión.
__Sí, lo harás. __Guille suspiró__. Vamos a necesitarnos el uno al otro en esto. Todos nosotros. Pero si no puedes hacer eso, entonces voy a jugar duro. Haré lo que haga falta. Algunas cosas te frustrarán, otras cosas te excitarán y con un poco de suerte alguna te enojará.

__Estás loco.
__No. __Nos volvimos al ver a Gaby en el umbral de la cocina con su bata, luciendo una sonrisa pequeña. Exhausta pero decidida__. Está luchando por lo que quiere, Pedro, lo conozco mucho y es la primera vez que lo hace, te lo prometo.

__No es el único. __Oí la voz de Alberto cuando la puerta de calle se abrió y se cerró y Gaby se volvió en el umbral para mirar al pasillo.

Esperamos que las pisadas se acercaran y entonces estaba justo al lado de ella.
Tenía un aspecto horrible. Nunca lo había visto así, sin afeitar antes, y llevaba una camiseta vieja y gastada y jeans que habían conocido mejores días. Tenía unas ojeras que rivalizaban con las de Guille y la desesperación grabada en cada molécula de su expresión.
Beto tomó la mano de Gaby y se la llevó a los labios, cerrando los ojos al apretar su boca en la piel. Cuando los abrió vi lágrimas brillando allí y sentí que se me cerraba la garganta.

__Guillermo, eres como otro hermano y nunca haría nada para hacerte daño. Y sé que quizá no he sido lo que un hermano consideraría buen  partido para su protegida, pero amo a Gaby, desde que la vi, y no puedo estar sin ella, daría mi vida por y para ella. Ya he desperdiciado mucho tiempo, y me gustaría casarme con ella lo antes posible, pase lo que pase.
Gaby y yo contuvimos la respiración cuando ellos  se encaraban.
Los ojos de Guille viajaron a los de Gaby, sin que su expresión delatara nada. Dios, podía ser un cabrón intimidante cuando quería.

__ ¿Tú lo quieres así?
Beto miró a Gaby y ella le apretó el brazo. Con una pequeña sonrisa se volvió hacia Guille.
__Sí.
Guillermo se encogió de hombros y se acercó a la tetera para encenderla.
__ Ya era hora. Ya estaban dando dolor de cabeza.

Me quedé tan boquiabierto como ellos. Ni una sola vez en todo el tiempo que llevábamos saliendo Guille había dado a entender que esperara eso.
__Eres un incordio sabelotodo__ anuncié con sarcasmo, pasando a su lado con brusquedad. Me paré un momento ante Gaby y Beto para decir__. Me alegro por ustedes.

__No te alegres tanto que ellos son la segunda pareja de la leyenda.

Fulminé a Guille con la mirada y me precipité por el pasillo para alejarme de él, ese gruñón perceptivo e inflexible.
Oí la risa sensual y suave de Guille, su voz deliciosa haciendo eco en mi cabeza cuando replicó.

__La verdad es que me quiere.
Me siguió.

-Qué extraño es el amor  y a veces tan impredecible, porque a veces las palabras sobraban,  pues, las miradas lo decían todo, porque los ojos ya no tenían ese brillo de amistad y en ellos podía verse grabado  el deseo incontrolable, porque tu mano entrelazada con mi mano,  los corazones palpitando, más cientos de silencios solo  salían de las bocas, mas los labios solo deseaban lo mismo  y una sonrisa trajo a la otra, un abrazo trajo otro abrazo y lentamente comienzo a sentir  tu respiración quemándome y no puedo contenerme, te robo un beso me lo devuelves inmediatamente, ya el deseo no se puede ocultar,  y mis manos comienzan a acariciarte, somos piel y piel ardiendo,  deseo y pasión en la oscuridad, los temores quedaron atrás, y un acto de amor estaba por comenzar.
__Por amor, dejé de ser yo, para que juntos fuéramos un nosotros. Para que camináramos juntos el largo camino de la vida, camináramos el sendero que lleva al amor. Por amor, te entregué todo mi corazón. Te lo deposité en tus manos, para que lo guardaras en tu pecho. Y lo unieras al tuyo en un solo latido; un latido de un eterno amor. Por amor, te di mi alma entera, te di todo mi ser. Para que tu alma y la mía, formaran un solo espíritu, con la fuerza inquebrantable, y lleno de la fuerza de nuestro amor. Por amor, son mis versos de amor, mis poemas de pasión y deseo, los cuales, escribí solo para ti. En mis palabra solo estabas tú,
en mi mente, tú eres  dueño de mi pensamiento. Por amor fui capaz de todo por ti, aun arriesgo de mi vida. Todo lo di, todo lo entregué por estar contigo. Por amor entregué mi ser, mi alma y mi corazón. Por amor di toda una noche, una noche en que te hice el amor.
__Por amor, fui yo el que te dio todo. Solo para que tú me dieras tu amor. Para que fuéramos uno en el camino a la eternidad. Y que nuestras almas y corazones, se amaran aun más allá de la muerte. Nunca dejaré que nos sabotee tu miedo, soportaré tu pánico, y lo venceremos juntos, Pedro, ¿entiendes?
Estoy buscando al que ha de tomar mi corazón. Estoy buscando al que habré de darle mi alma. Pero lo voy a buscar dentro de una flor ya que quiero que esa flor florezca solo para mí. Dentro de una flor, voy a buscar a  ese hombre herido al que le voy a entregar mi corazón y mi alma. Y no me importa las cicatrices que esconda ni que parezca inalcanzable o incapaz de amar, sé que solo necesita estar cerca del cielo para desplegar las alas y echar a volar, y yo seré ese cielo. Dentro de una flor, porque quiero que solo sea para mí. Que el aroma de su cuerpo, la esencia de su piel, solo yo los pueda percibir. Dentro de una flor lo habré de buscar;
porque solamente yo  podré admirar su belleza. Solamente yo habré de tocar sus pétalos. Y entre mis manos podré acariciarlo. Mis manos serán las únicas que podrán tocar su piel,
el aroma de su cuerpo solo yo percibiré y de la suavidad de sus besos, me deleitaré. De adentro de una flor, yo lo tomaré para mí, y su cuerpo desnudo yo vestiré con el mío.
Ese será el único lugar donde estoy seguro que lo encontraré. Y me aseguraré, que solo sea para mí. Me aseguraré de yo ser su único dueño. No habrá quien puede arrancarme mi flor de mis manos. La cuidaré, protegeré, vigilaré, como experto guardián. Porque dentro de una flor, estará guardado el que será mi pareja. Dentro de una flor, será guardado todo mi Amor, que será solo para vos.
_Se vestirá el campo de flores, el azul del cielo resplandecerá, el mar y sus olas nos acariciarán tú y yo nos besaremos sin cesar. Un sueño azul brillará en mi cielo y en el tuyo la luna alumbrará, el viento traerá ricos aromas y la tierra fértil fructificará. Renacerá la mañana o la tarde, el arcoíris mil colores tendrá, tu alma recibirá a mi alma y nuestros sueños se juntarán.
Mi cabeza descansará en tu pecho  y tus manos me acariciarán, mi boca encontrará tus labios y para siempre en un beso se unirá.  Nunca lloraremos ausencias porque juntas nuestras almas,  por siempre y para siempre, juntas, eternamente vivirán.  Ven, príncipe de mis sueños
llena esta noche mi almohada de tus caricias soñadas, de tus besos y tus roces. Acércate hasta mi cuello, en mis oídos deja suspiros, sobre mi pecho posa tus labios y sobre mi vientre tu beso sabio. Ese beso que me estremece, esas caricias que me hacen vibrar, regálame también tus roces y sobre mi espalda ven a soñar. Déjame disfrutar tu desnudez, déjame sobre tu pecho volar cual mariposa y mis alas quemar en el fuego de tu blanca piel. Déjame saborear tu amor,
déjame hacerte disfrutar, soñemos juntos una y otra vez,  llenemos de amor las horas olvidando tiempo y distancia.

_Él pide que le dé ardiente beso, quiero besarle de tarde y mañana. Tengo la sensualidad del gitano de pasión y deseo. Le beso; acerca sus cálidas manos, su boca sabe a pulpa de manzana, su piel roza la mía de madrugada y huele a olores furiosos, lejanos. Quién pudiera en algunos momentos ser llevado en los escondidos pliegues, excelsos placeres distantes de cielos... El beso que pide lo entrego con mieles. Quiero entregarle mis besos más tiernos y así me recuerde y nunca me olvide. Cómo te explico amor que siempre tengo ganas  de que abraces mis anhelos causando un revuelo, siendo tu desvelo. Y es que mi nivel energético
es alto en vibración  y te acelero el corazón  y qué de decir  de mi campo magnético elevado,  es el que te tiene conectado a mi lado; activando todas  tus terminaciones nerviosas. Eres mi imán implantado; es por eso que ganas me sobran de tenerte y amarte en cada instante,
desplazando este sentir. Y es que de verdad amor sé deleitar  la vida con mis cinco sentidos, siempre están encendidos y hasta he incrementado extras, porque no me son suficientes  siempre quiero más, “fluir”,  amo este existir y me permito ser extremadamente feliz. Inexplicable sentir  fui diseñado con ganas de vivir, mi pasión  siempre activada. Así es que nunca me cansaré de amarte vida mía.
 La febril hoguera de tu amor… siento recorrer por mis laderas, con ese frenesí que me ata, y me tiene sujeto a ti, noche y día. Me eriza tan solo el imaginar cómo lengüeteas recorriendo por mi aterciopelada y sedosa piel, que tiembla de placer a tu fuego. Siento la vibración de tu cuerpo,  cuando deslizo mis manos por tu espalda, susurrándote al oído  lo feliz que me haces al penetrar mi sendero húmedo, haciendo que mis jadeos  sucumban en placer  en cada suspiro tuyo  y en nuestros sudorosos cuerpos  que desprenderse no quieren, y nos exigen más y más, sacando fuegos de cada célula conjugada. Hoy te amaré como nunca  te había amado, ámame de  tal manera que pierda la noción del tiempo de sentir  tus caricias que me encienden  y mi mirada cambia como la perla. Siente mis caricias que  encienden tu alma y tus  poros despiertan dejando  miles de aromas en estas  noches de sexo y pasión. Es la pasión que desbordas  al sentir cómo tus labios  recorren mi cuerpo que me  llevas al paraíso donde el manantial de mi intimidad  desborda al sentirte en mí. Noches de sexo y pasión  donde tu mirada perdida al  besar tus labios, haces que  pierda el control estando  junto a ti... sentir tu cuerpo,  fundirme en ti; noches de  sexo y pasión. Siento cómo te sumerges  entre mis pezones y  la suavidad de tus labios cómo muerde mi botón en noches  de sexo y pasión; nos fundimos  los dos una noche más y nuestro sueño de amor.

No sé ni qué pensé, ni qué sentí, fue una situación nueva, distinta y diferente, donde la locura, el delirio y la felicidad me invadieron por un lapsus de tiempo que no sabría ni medir y aunque me pareciese infinito hoy me gustaría estar enredado entre tu cuerpo, como hasta hace unas horas. Sentirte húmedo  y extraer de ti el sabor a jalea que destilan los poros de tu vientre y de tu piel, hilvanando con la yema de mis dedos toda la geografía que un corazón como el tuyo, puede almacenar en el subconsciente de mis sentimientos. Fue una noche única, mágica con el embrujo y el sabor de la ciudad. Fue la única noche en la que soñé contigo. Te amo Guille, pero no prometo no volver a escapar.
__Puedo soportarlo, Pedro, todo menos lo de ayer, lo prometo.
CONTINUARÁ.
HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS.
CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES MERA COINCIDENCIA.
LENGUAJE ADULTO.
ESCENAS EXPLÍCITAS,




13 comentarios:

  1. Maria Rosario Bellísima historia la he disfrutado mucho al leerla, abrazos de luz y paz para ti.

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  2. Bellísimo Eve...Las fobias de Pedro van a desaparecer ante la seguridad de Guillermo, que además lo seduce y lo enamora cada vez más...Y Gaby por supuesto que se va a poner bien y va a ser feliz con Beto...

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