“LA HERENCIA”
CAPÍTULO VEINTE. FINAL.
"La melancolía de una vida demasiado corta para tantas bibliotecas.
Cuando crees que has aprendido plenamente cualquier cosa, la cosa lo mismo que
un iceberg tiene un pedacito por fuera y te lo muestra, y el resto enorme está
más allá de tu límite."
Rayuela, Julio Cortázar.
“No me tientes, que si nos tentamos
ya no podremos olvidar”. Mario Benedetti.
ya no podremos olvidar”. Mario Benedetti.
“Quisiera que estés entre mis brazos y no sentirlos vacíos. Quisiera
verme en tus ojos al despertar y no sentir esta ausencia que siento al no
verlos.
Quisiera abrazarte tan fuerte que tu calor apagara este frío que hoy siento.
Quisiera que estés aquí y me ames con la misma intensidad de este amor que estoy sintiendo cada día.
Quisiera no solo fuera en mis sueños donde pueda tenerte, sino también en mi realidad.
Quisiera tener tan solo una señal que estás deseándome tenerme en tu vida, seguro sin pensarlo iría por ti. Tan solo quisiera que estés aquí.
Es ahí en ese instante que recuerdo que un día sin avisarme apareciste y mi vida comenzó de nuevo a necesitarte, pero en tu "no me busques" revivieron mis miedos, fantasmas del pasado donde me recordaron el dolor que un día causaste en mi corazón.
Justo cuando regresaste comenzaba a escribir una nueva historia, de repente surgió esa conversación que de la nada volví a soñar y sentir en mi interior ese calor, el cual llamo amor.
Comencé a pensarte más y sonreír al hacerlo, un arcoíris con un sol hermoso se dibujó de nuevo en mi vida; ese que dibujas con tu presencia en mí.
Todo es perfecto desde tu regreso, tu miraditas, besos, tus caricias; pero mi temor no desaparece por completo, será que en algún momento apagaste lo más hermoso que sentía con tu adiós, solo te pido vida mía que si has vuelto a mi vida nunca más destruyas de nuevo mi corazón”.
Quisiera abrazarte tan fuerte que tu calor apagara este frío que hoy siento.
Quisiera que estés aquí y me ames con la misma intensidad de este amor que estoy sintiendo cada día.
Quisiera no solo fuera en mis sueños donde pueda tenerte, sino también en mi realidad.
Quisiera tener tan solo una señal que estás deseándome tenerme en tu vida, seguro sin pensarlo iría por ti. Tan solo quisiera que estés aquí.
Es ahí en ese instante que recuerdo que un día sin avisarme apareciste y mi vida comenzó de nuevo a necesitarte, pero en tu "no me busques" revivieron mis miedos, fantasmas del pasado donde me recordaron el dolor que un día causaste en mi corazón.
Justo cuando regresaste comenzaba a escribir una nueva historia, de repente surgió esa conversación que de la nada volví a soñar y sentir en mi interior ese calor, el cual llamo amor.
Comencé a pensarte más y sonreír al hacerlo, un arcoíris con un sol hermoso se dibujó de nuevo en mi vida; ese que dibujas con tu presencia en mí.
Todo es perfecto desde tu regreso, tu miraditas, besos, tus caricias; pero mi temor no desaparece por completo, será que en algún momento apagaste lo más hermoso que sentía con tu adiós, solo te pido vida mía que si has vuelto a mi vida nunca más destruyas de nuevo mi corazón”.
__Pedro. ¿Y Guille? _interrogó Alberto.
__Con Fabián, lo acompañó a casa de Ana luego de que el psiquiatra le
diera el alta. -- Beto, ¿crees que debo quedarme con ellos?
__Por supuesto que sí, no se te ocurra volver a desaparecer, lo que hizo
el pibe más tiene que ver con descubrir todo de repente que contigo, Pedro.
__ ¿De veras? _ lo miró con la mirada brillante.
__Por supuesto.
__ Basándome en mi honestidad solo puedo
pensar limitadamente y permitirme
algunos sentimientos. Debo cumplir mi palabra dada, debo espantar las
traiciones, debo ser, ante todo, leal. Basándome en mi honestidad necesito
subyugar mi inteligencia, necesito administrar la bondad, evitarte falsas
expectativas, estabilizar tus procedimientos, apaciguar tu esperanza vital.
Basándome en mi honestidad interpongo una frontera de principios, me callo el
dolor que me oprime, dejo respirar tu
vida en libertad. Que pase veloz por mi
lado tu ángel sin interponer mi ubicuo lidiar. Respeto mi vida, que ya es tuya,
esta cualidad, la que más aprecias, para que realces su valor, su significado,
involucres al hombre que amas y llegue contigo hasta el final. Basándome en mi
honestidad espero que comprendas mi actuar, que no lo tomes por cobardía, pues
para obrar necesito algo más, que soy estafermo en tu caballería, y asumiría
embates sin pestañear. Te descubro mi
preferida cualidad, es la eterna polémica de la vida, la de las dudas
del alma a entregar, no sabe de miedos e incertidumbres, es regalarte mi
capacidad de amar.
__ ¿Y esto?
__Le dejé esa nota a Guille, iré
por mis cosas, estaré en lo de mis padres si quiere continuar_ dijo con
una profunda tristeza en la mirada.
_Pedro, no vuelvas a desaparecer o esto no termina más, Guille te ama
desde el minuto cero.
__Tal vez todos, Fabián, Ana, Diego tengan razón, Beto yo era mozo y
apenas he empezado a estudiar, él pertenece a otro mundo.
_Tonterías, no hay mundos diferentes ni nadie puede controlar el
amor, no se elige, no se piensa, es un
bello caos, y así debe de ser.
Mira, Pedro, yo no era nadie cuando Guille me rescató y creo que lo
sabes, yo vivía en la calle, y apenas tenía estudios secundarios incompletos y
sin embargo, crucé una mirada con Gaby y me enamoré, y sí, me sentí una mierda
por mucho tiempo, como vos ahora, pero no pude renunciar a ella, la peleé,
estudié, en medio fui a la cárcel, y hasta llegué a exigirle que se animara a
dar el salto hacia mí.
__Sí, lo sé, Guille me contó.
__Bueno, entonces no me vengas con esas tonterías de que eras mozo, de que sos pobre y todo
eso, sos un pibe noble y estás estudiando, vas a ser abogado cuando menos
quieras acordar, y ese mundo diferente
se habrá convertido en el mismo.
Alberto lo miró en profundidad.
__ ¿Sabías que con los años hasta las parejas se llegan a parecer
físicamente y que sus auras se mimetizan en la misma energía? Bueno, ahí va, no
hay un mundo ni otro, hay o no amor, y Guille antes de vos nunca se había
enamorado, ni siquiera creía en el amor, Pedro, no te rindas, no digas que no a
lo que tienen porque no sé si hay otra oportunidad. Cuando el amor es tan
profundo y lo llevas pagado a ti, en los
más profundo de tu ser, en tus entrañas,
en tu corazón en tu alma, en tu piel,
tus sentimientos son multiplicados, el sentir de tu alma es más
profundo, sientes más las alegrías,
sientes más las vibraciones, es
más profundo el sentir. Sin ni siquiera tocar tu piel te hace estremecer.
También es más doloroso, el
sufrimiento se agrava, se triplica y el dolor que sientes es infinito, te rompe
el alma, te destroza tu interior, te
roba tu corazón, te roba tu alma y queda un vacío en tu interior que te
desgarra las entrañas, el corazón y el
alma, ya no las encuentras porque te las
robó ese amor tan profundo.
Cuando eres tan feliz, desprendes
luz, irradias felicidad, y tu belleza se multiplica, por ser tan profundo
e inmenso el amor que sientes por ti,
que te hace
sentir que el amor que siente hacia ti, es como el que tu sientes por el todo y por el otro, un amor profundo, intenso, un amor que nace desde lo más profundo de tu ser. Pero están esos
momentos que te hacen sentir la persona más importante y más amada, y es tan inmensa la felicidad, que te sientes la persona más afortunada del universo, pero otras veces después de hacerte sentir la persona más importante de su vida, te sientes la persona más olvidada, sientes esa angustia que te desgarra tus entrañas por sentir que no eres tan importante, sentirte olvidado. Sientes que tu cuerpo se rompe por dentro en mil pedazos, que no tienes alma ni corazón porque se los has entregado, sientes el dolor de cada pedacito de tu cuerpo como duele con tanta intensidad que te sangran de dolor. Pero no es el caso de ustedes, Guille te ama, te buscó una y mil veces, no te escapes.
sentir que el amor que siente hacia ti, es como el que tu sientes por el todo y por el otro, un amor profundo, intenso, un amor que nace desde lo más profundo de tu ser. Pero están esos
momentos que te hacen sentir la persona más importante y más amada, y es tan inmensa la felicidad, que te sientes la persona más afortunada del universo, pero otras veces después de hacerte sentir la persona más importante de su vida, te sientes la persona más olvidada, sientes esa angustia que te desgarra tus entrañas por sentir que no eres tan importante, sentirte olvidado. Sientes que tu cuerpo se rompe por dentro en mil pedazos, que no tienes alma ni corazón porque se los has entregado, sientes el dolor de cada pedacito de tu cuerpo como duele con tanta intensidad que te sangran de dolor. Pero no es el caso de ustedes, Guille te ama, te buscó una y mil veces, no te escapes.
Pedro asintió.
__
__Ana, ¿me dejas a solas con mi hijo por favor? _pidió Guillermo
mirándola con intención.
__Está bien, pero no te lo lleves, no está del todo bien todavía y yo
puedo cuidarlo _ dijo ella con la mirada triste.
__Fabián es grande ya, él sabrá dónde quiere vivir, solo quiero hablar
unas palabras a solas con él, Ana, no quiero discutir.
__Ya me voy.
Ana salió y Guillermo se sentó en el borde de la cama, acariciando la
mejilla de Fabián con el dorso de la mano.
__! Qué susto nos hiciste dar, hijo, nunca más!
__No papá, gracias por no obligarme a seguir con el psiquiatra, de
verdad, no soy adicto como Ana, no
podría serlo creo que justamente por ella _ dijo en un hilo de voz.
__Lo sé hijito y te creo _ respondió Guillermo __. Lo que voy a pedirte
es que tengas cuidado al elegir a tus amigos, una vez más y no sé qué pudiera
suceder.
__No son malos, son compañeros de la facultad, yo soy responsable, he salido decenas de veces con ellos y
cuando se pasan me voy, pasa que me sentí mal, expuesto… no sé, supongo que todo sucedió demasiado
rápido, apenas hace un par de meses que sé de tu sexualidad, siempre te vi tan
diferente, vos sos mi modelo, mi pilar, y verte con unos pibes disfrazados, en
ese boliche, me pegó, me chocó _ se entrecortó y perdió la voz.
__Hijito, no estábamos haciendo nada malo, pero entiendo que no es lo que
siempre viste en mí, aunque es mucho más honesto lo que viste en ese bar que
los años de matrimonio con Ana. Eso sí fue una mentira, puro teatro, una farsa,
y si te dije la verdad es porque nos viste
a fin de año, pero igualmente iba a hacerlo porque no quiero seguir
mintiendo.
__Lo entiendo pa., supongo que soy un imbécil, porque conozco a decenas
de tipos que son gais, a lesbianas,
hasta en mi curso los hay, pasa que de pronto una cosa es verlos afuera, y otra
es saber que tu padre lo es, pero sé que es más honesto lo que estás viviendo
que la farsa que montaron con Ana para mí. Perdón.
__Hijo, Pedro es sano, bueno, honesto, sí es pobre, no tiene dinero para echar al aire,
era mozo del hotel, y allí lo conocí, así, pero siéndolo era feliz, era un
muchacho alegre, hasta desfachatado, y quizá por eso me enamoré de él, sin
darme cuenta eso me hizo verlo, y diferenciarlo del resto __ habló con
serenidad.
__No tienes que explicarme papá, se aman y listo, ya lo entendí, lo vi.
__Quiero hacerlo, quiero que entiendas por qué me viste en ese bar,
porque no vivimos de farra de bar en bar. Casi te diría que
apenas salimos. Primero porque somos celosos, y luego de varias idas y
venidas con Juan, Matías, etc., y peleas, preferimos dejar de exponernos.
Y segundo porque trabajamos en el estudio muchas horas, y Pedro no cursa
prácticamente, siente ansiedad por recibirse, y por eso prefiere estudiar en
casa, que yo le ayude y rinde libre, es así como en meses está ya terminando
segundo año. Y lo está haciendo muy bien.
Pero cuando lo conocí, siendo mozo, Pedro era un muchacho que siempre
estaba rodeado de amigos, alegre, feliz, y quizá fue eso lo que me enamoró de
él, eso es lo que trajo a mi vida, alegría. Pedro me enseñó lo que es la
alegría, el me hizo andar liviano por la calle, bailar, sentirme a gusto con mi
cuerpo, con ropa informal, en un
tribunal o en la calle. Vos sabes mejor que nadie que en casa con Ana no hubo
alegría, que todo fue pelear y continuar a pesar de… ¿no es así?
__Sí, a pesar de que vos sos gay y ella adicta, lo sé.
__Bueno, no quiero más eso, y por
eso mismo cuando recibí la herencia me había divorciado ya de ella, y
apenas veo a Silvina, cuando llegué al hotel y conocí a Pedro, yo me acostaba
con alguno de vez en cuando por necesidad, para terminar más solo y vacío que
antes. Pero de Pedro sin preverlo ni buscarlo me enamoré, y ya no me importó ni
su edad, ni su mundo, ni las
diferencias, solo que lo amo y me corresponde, que con él soy feliz, ya no hago
las cosas porque sí, me apasiona todo, un juicio, una quiebra, discutir con mis
socios, con Ana, y siempre sé que al llegar a casa todo pasará porque lo voy a
ver a él, le voy a contar y nos vamos a reír, ¿entiendes? Cuando te enamores
podrás, el amor significa la vida, hijo, y cada experiencia, o le quita valor a
las tonterías.
__Es muy lindo lo que dices y me alegro de saber que encontraste eso en Pedro.
__Es muy lindo lo que dices y me alegro de saber que encontraste eso en Pedro.
__Nos separamos varias veces, y justamente, yo siempre me centré en mí,
fui siempre muy egoísta, nadie nace con
un manual sobre cómo ser o hacer feliz a
otro, y pensé que dándole trabajo y exigiéndole que estudiara él estaría bien,
pero me di cuenta que con los meses, él se había amoldado a mi mundo, a mi
forma de ser, a mis gustos, y que estaba perdiendo esa chispa, esa alegría, esa
fuerza y coraje que me enamoraron, y además que había dejado no solo el hotel,
sino a sus amigos. Es por eso que quise que los viera de vez en cuando, que no
se apartara del todo de ese mundo de joven, de recitales, de copas, de
compartir con ellos, y la noche que nos
viste no fue la regla sino la excepción. Sus amigos nos invitaron a esa fiesta
y fuimos, y en verdad lo estábamos pasando bien, no me pareció justo prohibirle
que fuera, y él no iría solo, y perdón
si te dio vergüenza, pero no estábamos haciendo nada malo, hijo.
__Lo sé papá, no sé qué me pasó, soy un idiota por cómo reaccioné, y más por haber aceptado colocarme con los
pibes, casi me maté, pero no es lo que quería, no sabía, y me pegó muy fuerte
__ balbuceó con lágrimas en el ojos. __
¿Me perdonas?
__Claro que te perdono, grandulón, pero nunca más me des un susto
semejante, que no quiero morirme de un infarto justo ahora.
__Lo prometo.
__Pedro merece ser aceptado tal como es, creo que es importante para él,
y en mi opinión hace bien, yo no buscaré cambiarlo, cuando lo hice escapó,
deberemos adaptarnos.
__ ¿Dónde está él? Quisiera disculparme.
__Debe de estar en casa, o en el estudio, ya tendrás oportunidad de
hacerlo, ahora tienes que recuperarte, y no te voy a pedir nada, vos sabrás qué
es lo mejor, qué quieres hacer.
__Si no te molesta, por ahora, por un tiempo, me gustaría quedarme acá,
con Ana digo. Está todo bien, pero necesito acostumbrarme…
__No tienes que explicarme, son muchos cambios, está muy bien, yo lo
entiendo, y cuando estés preparado, debes de saber que te amo, que soy el mismo
de siempre, y que tienes otra casa, pero solo cuando puedas y quieras ir o
vivir, o si eliges vivir solo, está muy bien _afirmó Guillermo de pronto recordando…
la herencia__. Hijo, antes de este lío, yo pensé en que no quiero esa herencia,
los hoteles no son lo mío, el derecho tributario siempre me pareció un opio,
pero quizás a vos te guste o puedas
hacer también algo de contabilidad
administración de empresas.
En concreto, ya he hablado con Marcos y un escribano, cuando estés en
pie, y firmes, serás millonario, te dejo la herencia, puedes vivir acá, o solo,
podrás viajar, estudiar en otro lado, el dinero ya no es un límite.
__ ¿De veras no quieres para vos y Pedro esa fortuna?
__Mi mayor fortuna es que gracias a los hoteles lo conocí, el dinero no
nos importa, ni a él ni a mí, yo gano lo necesario en el estudio, Ana tiene la
casa y lo que le dejé, Silvina es rica,
nosotros compraremos una casa en el delta y no necesitamos más que el
trabajo, hijito, disfruta sin culpas de lo que te dejo.
__Gracias, ya pensaré qué hago.
El abrazo que siguió ahogó las palabras.
__
__Los extraño mucho a los dos, adiós mamá, prometo que los visitaré.
Pedro apretó el botón de terminar la llamada con el dedo meñique y
después se dirigió a la cocina donde estaba haciendo pollo con verduras
salteadas. Justo antes de agregar las chauchas a la salsa alguien abrió la
puerta. Esperó con el aliento contenido pensando había sido su imaginación pero
oyó los pasos.
“! Oh no! _ se dijo a sí mismo,
bajando lo más posible el fuego.
Se limpió las manos en un repasador
y fue corriendo hasta la sala.
__Guille _ murmuró, sin poder
disimular su total sorpresa y alegría__. ¿Y Fabián?
__En casa de Ana, mejor, pero por ahora quiso quedarse allí _ explicó
colgando el morral__. Qué bien huele _ dijo olfateando.
__Sí. __Pedro se volvió hacia la cocina__. Un salteado de pollo y
verduras, no es pasta. Hice un montón por si tienes apetito.
__ ¿Estás solo?
Pedro largó una risotada.
__Por supuesto que estoy solo. ¿Quién más podría estar?
Se quedó mirándolo largos segundos.
__Tienes puesto mi buzo y mi delantal.
Bajó los ojos.
__ ¿Quieres que te los devuelva?
Meneó la cabeza.
__No, para nada. Solo que no sabía que todavía los usabas.
__Lo uso un montón y a veces me
hacen sentir bien.
__ ¿Quieres… quieres que me quede con vos?
Pedro lo miró. Su expresión le suplicaba que sí. Deseaba con alma,
espíritu y vida que se quedara para siempre, pero no deseaba más discusiones ni
dolor ajeno que terminaran en peleas. Sacudió la cabeza, pero Guillermo ya
estaba a centímetros de él, y sus fuertes manos aferrando su rostro.
__Maldición __masculló y apoyó los labios en los de Pedro que dejó caer
el repasador y estiró los brazos para sujetar su camisa con las manos, pero él
no tenía apuro alguno en irse. Se tomó su tiempo para saborearlo, sintiendo el
calor de las bocas mientras se derretían juntas en ese anhelo por esos labios
gruesos, húmedos, y suaves, mientras los de él eran seguros, firmes y
dominantes pero cedieron en cuanto Pedro apretó su boca contra ellos, y cuando
parecía terminar la magia, Guillermo lo aferró entre sus brazos.
Lo besó como si hubiese extrañado sus besos por años, con deseo, con
tristeza, con ansia, entremezclados pero controlados, besos dulces y suaves, y
cuando finalmente se separaron, apoyó la frente en la de Pedro.
__Volvamos al fin. Podemos charlar de todo toda la noche. He hablado con
Fabián mucho, y quiere verte. Te lo explicaré tantas veces como quieras, no hay
mundos diferentes ni cosa que me avergüence, ni nada que me aleje de vos,
cielito. Tal vez presioné demasiado. Ahora me doy cuenta. Podemos ir más
despacio o casarnos mañana. Podemos llegar al acuerdo que desees. Nunca he
querido tanto en mi vida.
__No.
__ ¿No? ¿Por qué?
__Porque lo deseo tanto que me asusta mucho __lo dijo y las lágrimas
bajaron por las mejillas, pero Guillermo se apresuró a interceptarlas y Pedro
se estremeció al contacto.
__Amor, mírame __dijo usando el pulgar para levantar la barbilla y
encontrar la mirada, esa mirada que era tan intensa, que Pedro sentía lo
perforaba y lo asustaba__. No puede ser peor juntos de lo que es estando
separados, y no hay motivo para ello.
__Pero siempre pasa algo que nos separa, y lo de tu hijo pudo ser grave,
además estás tratando de olvidar a tus amantes, Juan no deja de molestar,
tampoco Matías. Puede llevar tiempo, pero es posible, y nadie consigue todo en
la vida, ¿verdad?
__No lo sé, pero si lo que quieres
es que te diga que ya he olvidado a cuanta mujer y hombre pasó por mi vida, ya
los he olvidado, y además de amarte, te necesito, Pedro. __Esperó hasta que él
levantó la vista__. He tenido amantes, pero solo vos has sido, sos y serás mi
amor.
Pedro se hundió de súbito en sus brazos, dejando que lo envolviera en
ellos, se permitió abandonarse, dar el control a las fuerzas misteriosas que
los habían llevado a encontrarse. Podía alejarse de Guillermo y padecer el
dolor de cada día de estar lejos de él,
o podía correr el riesgo enorme de basarse solo en la fe, en el acto de fe, sin
predicciones, ni certezas. Guillermo lo amaba y necesitaba, tal vez no fuese el
primero, pero sí quizás el último y tal vez ese amor que sentían durara para
siempre, y no se sentía un último premio, sino suyo para siempre.
__Eres tan bello, que la esmeralda del mar se enturbia de lujuria cuando
recorre sin pudor y gozo tu cuerpo menudo y desnudo en sus turbias olas que
besan tus partes ocultas en su tibia gloria. Amor, ahora voy a ir a buscarte,
ya no resisto más tu ausencia, extrañar tu piel y tu boca es poco, mi
cuerpo me exige tu presencia.
Solo desnúdate y espérame. No tardaré en llegar. Tengo el pensamiento lacerado de tanto extrañarte y desearte entre mis estériles y apasionados murmullos y rumores, llamándote. Porque tu sombra es luz en mis otoños mustios, y son mi tormento y allí entonces, te abrazaré hasta que te duela y beberé tu aliento. Te prodigaré las caricias más locas y lujuriosas con mi boca que te arrancarán desde el lunar de tu vientre suspiros y gemidos, hasta tus pezones de seda que serán música celestial en mis oídos.
Solo desnúdate y espérame. No tardaré en llegar. Tengo el pensamiento lacerado de tanto extrañarte y desearte entre mis estériles y apasionados murmullos y rumores, llamándote. Porque tu sombra es luz en mis otoños mustios, y son mi tormento y allí entonces, te abrazaré hasta que te duela y beberé tu aliento. Te prodigaré las caricias más locas y lujuriosas con mi boca que te arrancarán desde el lunar de tu vientre suspiros y gemidos, hasta tus pezones de seda que serán música celestial en mis oídos.
Voy a morderte todo, buscando el límite preciso de una caricia, entre la alegría de la carne, hasta que desfallezcas y casi mueras de la pasión que guardas en tus montes de pétalos de rosas.
Mientras, te atraparé sobre mi vientre y entre mis brazos y vas a sentir el calor, el aroma, y el sabor de nuestra pasión cuando mi boca busque y beba de la tuya las savias placenteras
y así, piel a piel, romperemos todas las quimeras de las esperas en el regocijo de la pasión y el sexo, de nuestros cuerpos y tu amor. Voy a caer rendido de lujuria hasta los profundos y azules abismos de la pasión, la dicha, y tu candor porque quiero, amor, que me ames con la carne y hasta con los huesos y allí entonces quiero sentir tu vientre estremecido de gozo y de alegría cuando pienses, quieras y al fin sientas, que serás todo mío perdidos en los ardientes espacios sin tiempo de este consentido amor.
Voy a amarte con impúdica herejía y poseerte seguido, sin respirar, entre un apasionado fluir de aromas, pieles, caricias y besos hasta perderme entre el abrazo lujurioso y tibio de tus piernas y entonces nos detendremos, en el límite justo del éxtasis final.
Y allí, comenzaremos otra vez, lo que no dejaremos terminar nunca y volver a amarnos viviendo lujuria, como locos, de deseos y pasión como si este instante fuera el último momento de nuestras vidas.
Voy hacia vos, en busca de tus primaveras, vida mía. Espérame amor, enciende el fuego, y desnuda todos tus fuegos. Y sírveme el vino que a mí me gusta.
Aquí estoy, ábreme amor, estoy tocando a tu puerta. ¿Sabes?, me están matando tus recuerdos. Te amo.
__ Sos el embrujo que crece al verte y es magia que me invade amor encantado del alma…
Como brisa capturas mis labios. Pétalos rociados de estrellas son tus labios de lucero. Bello es amarte como el cielo. Manantial que son miradas de tus ojos de brisa. Ojos que tiritan como lucero que iluminan mis emociones. Encanto de amor es amarte, sentir en cada palabra tu amor. En cada te amo la piel sueña y endulzo con tu voz el néctar celestial. Bendición con sueño eterno de amor, suspiro del alma inspirada. Tesoro de ternura en el corazón. Eres caricia como viento en pétalos que enciende mis anhelos pretendidos.
Dibujarte como corazón de dios que me encadena a sus besos que son suaves te amo, eres mi consuelo. Eres refugio de mis emociones.
Tú amor, eres como ese grano de café, a veces amargo, a veces dulce, a
veces incierto, a veces tan rico, cada sorbo te disfruto mirando tus ojos y más
me enamoro.
Cada día al despertar en tus brazos, siento tus besos tiernos que rozan
mis labios que siento bellos, tu compañía la más maravillosa, me siento tan feliz,
y me miras y me sonrojo.
Porque me vez tan dulcemente, y me platicas todo, tus aventuras, tus
tristezas, y quizás hasta tu cambio de humor, yo estoy recargado en tu pecho.
Me pongo tu camisa, esa que siempre te fascina y tu aroma que se impregna
en mi piel como ese café inigualable, incomparable es tu aroma.
Mi piel se eriza, y me vuelven a ver tus ojos, y mi timidez vuelve otra
vez, no puedo negarlo me gustas, me encantas, me fascinas.
Entre sábanas empezamos el goce de entrelazarnos, de sentir nuestro fuego
que quema por dentro de nuestras almas, porque tú eres volcán en erupción, tú
eres el que me lleva al infierno del deseo y pasión.
Y solo yo te complazco amor, en todo, porque tú te has convertido en mi
todo, porque por dentro de mi alma tú eres mi dueño, mi sueño, mi amor eterno,
mi amor de ensueño.
Cierra tus ojos, calla no digas nada, solo déjame amarte, con toda la
intensidad de mi alma, tengo sed de tus
besos, de tu cuerpo, de tu piel, de todo lo que posees.
Memorizar tu cara, tu sonrisa, tus ojos color café, tu rostro, tu boca,
tus labios en fin todo tu ser inmortalizado el momento exacto en el que te
puedo tener es mi fin y mi inicio.
Y con cada palabra crear un retrato que hable de ti, de tus sentimientos
de tu sentir, y así amarte sin fin, como lo que quiero escribir de ti, porque
son escritos que nacen sin pensar, que salen del alma y de mi corazón palabras
que solo afloran.
Y lo más bello es lo que siento cuando beso tu rostro, acaricio tu
cabello con mis manos y voy más abajo y te deseo tanto, cuando de repente llegan
tus labios a mi cuello.
Huelo tu fragancia, tu aroma y tu esencia se penetra en mi piel, me
excita, la percibo, la saboreo, la acaricio y la tomo, para que nunca te puedas
escapar.
Y veo que tiembla, que late más tu corazón, y que las palabras que
susurro a tu oído son palabras sin pensar, son palabras tontas, sentimientos,
emociones, y locura que ya no serán secretos.
Y aquí precisamente te siento entre mis brazos, entre mi cuerpo, entre mi
piel, y entrelazamos nuestros cuerpos, se han vuelto uno, y somos el uno para
el otro.
Oleadas de pasión y deseo, juntos haciendo el amor, nuestras manos se
deslizan suavemente en cada parte de nuestro ser, pasión ardiente quema
nuestros cuerpos, como volcanes en erupción.
Subimos juntos al firmamento, a ese universo de nuestros excitantes
cuerpos, y te abrazo y me abrazas, y ahí quedamos paralizados en ese acto tan
perfecto que es la pasión de nuestros cuerpos, fugaces como las estrellas.
Calmados estamos de tanto amarnos, agotados por esa hazaña tan voraz,
sueños quedan de otra vez realizar este acto tan sublime de los dos simplemente
porque nos amamos con loca pasión y deseo.
__Tómame la vida. Ella reclama todo mi cuerpo como un perito necesita de muerte, la aprobación por identidad; es así
como urge de mi humanidad. Me reclama con insistencia. Necesita verter su
impudicia, un depósito para sus efluvios, una diana para su candor.
Él prepara su emboscada sobre un
manto de sexualidad. Aprieta fuerte sus manos contra el ardor de su maduro
sexo. Sus deseos desgarran de mis carnes un aroma remontando el llano. El
frenesí del sabor colma los éxtasis de
mi avidez. La semilla, mi virtud en el mundo, se esparce dentro de su universo;
las condiciones de mi sangre a la perfección de su seno vital. Él exige
devorarme, ya, ahora. Yo, macho, he acudido suculento a su festín.
Indescriptible. Mi vida por este amor.
__Sigo en secreto el camino de tu cuerpo que responde a mi andar, mantengo en silencio mis besos que reposan su
esfuerzo en tu exquisita piel. Como una sinfónica orquestada tus oídos se disponen a escuchar mis
sentimientos, permitiendo la entrada de mis verbos a tu alma,
donde te embriagarás de sus cantos y sonidos. Tu corazón latiendo al compás de caballos galopando sin control por tanta pasión y deseos que sientes en tu cuerpo, expresando arpegios de suspiros como notas musicales que te incitan a la tentación de gemidos,
apoderándose de un placer insaciable, te sientes flotar en el cielo. Lágrimas que brotan de tus ojos acompañados de una angustia implacable que conquista todo tu ser si me alejo de tu camino, pero sabes seguiré en él, para amarte y secar tu llanto donde se impondrá tu risa abriéndole el destino a la divina felicidad que sembraré en tu corazón.
donde te embriagarás de sus cantos y sonidos. Tu corazón latiendo al compás de caballos galopando sin control por tanta pasión y deseos que sientes en tu cuerpo, expresando arpegios de suspiros como notas musicales que te incitan a la tentación de gemidos,
apoderándose de un placer insaciable, te sientes flotar en el cielo. Lágrimas que brotan de tus ojos acompañados de una angustia implacable que conquista todo tu ser si me alejo de tu camino, pero sabes seguiré en él, para amarte y secar tu llanto donde se impondrá tu risa abriéndole el destino a la divina felicidad que sembraré en tu corazón.
__Cierra tus ojos, calla no digas nada, solo déjame amarte, con toda la
intensidad de mi alma, tengo sed de tus besos, de tu cuerpo, de tu piel, de
todo lo que posees. Memorizar tu cara, tu sonrisa, tus ojos color café, tu
rostro, tu boca, tus labios… en fin todo
tu ser inmortalizado el momento exacto en el que te puedo tener. Y con cada
palabra crear un retrato que hable de ti, de tus sentimientos de tu sentir, y
así amarte sin fin, como lo que quiero escribir de ti, porque son escritos que
nacen sin pensar, que salen del alma y de mi corazón palabras que solo afloran.
Y lo más bello es lo que siento cuando beso tu rostro, acaricio tu cabello con
mis manos y voy más abajo y te deseo tanto, cuando de repente llegan tus labios
a mi cuello. Huelo tu fragancia, tu aroma y tu esencia penetra en mi piel, me excita, la percibo, la
saboreo, la acaricio y la tomo, para que nunca te puedas escapar. Y veo que
tiembla, que late más tu corazón, y que las palabras que susurro a tu oído son
palabras sin pensar, son palabras simples, sentimientos, emociones, y locura
que ya no serán secretos. Y aquí precisamente te siento entre mis brazos, entre
mi cuerpo, entre mi piel, y entrelazamos nuestros cuerpos, se han vuelto uno, y
somos el uno para el otro.
Oleadas de pasión y deseo, juntos haciendo el amor, nuestras manos se
deslizan suavemente en cada parte de nuestro ser, pasión ardiente quema
nuestros cuerpos, como volcanes en erupción. Subimos juntos al firmamento, a
ese universo de nuestros excitantes cuerpos, y te abrazo y me abrazas, y ahí
quedamos paralizados en ese acto tan perfecto que es la pasión de nuestros
cuerpos, fugaces como las estrellas.
Calmados estamos de tanto amarnos agotados por esa hazaña tan voraz,
sueños quedan de otra vez realizar este acto tan sublime de los dos simplemente
porque nos amamos con loca pasión y deseo.
Te sigo en los parajes más abstractos, en tus silencios desmedidos, en
las locuras abiertas de tu mente, te
sigo en singular y en plural, porque estás
loco, y eso me mantiene vivo. Te sigo, pícaro deslumbrante, en los disimulos
cerrados de tus piernas, en el segundo que abres tu sol y tu aroma crea mis olas de calor, donde pueblo tu villana
sentencia, un ofrenda en divina conjunción.
_Se duerme la
luz de tus ojos a espalda o al compás de otros a tu lado, siento lejos de
llegar mi sueño, el despertar de mis sentidos… viaja mi percepción más veloz que
la luz para sentirte dormido… para ser ese delgadísimo espacio entre tu piel y
la tuya… por celos quiero evitar le sientas tocarte… puedo evitar sientas su
respiración fundirse con la tuya… mas no quiero inquietarte, no quiero
interrumpir tu sueño… para así dormido tocarte y pensarte.
y así
mientras la mitad del mundo duerme, obligo a este mundo tan solo mío permanecer
despierto para no perder un segundo sin sentirte, aunque lejos de tus
pensamientos me hayas dejado dormido, en un sueño tuyo buscaré despertar para
vivir lo que tanto anhelo a tu lado, eso tan solo me queda…. poder lograr que
de tanto pasearte por mi mente, en tu noche inconscientemente me despiertes y
me lleves a ser tu sombra, vivir una realidad oculta, clandestina a tu presente
y al mío.
Cómo lograr
invadir tus momentos desde aquí, si tu realidad me vuelve algo que va detrás de
ti sin siquiera poder tocar tu sombra… te persigo en silencio sin alcanzarte,
aunque tus pasos detengas… y me sabes en tus momentos de soledad estar
desnudando tu piel con los ojos del alma… y ese frío que tan suave te recorre y
eriza tu piel no son más que mis caricias distantes y mis besos viajeros que
sin saber cómo hacen hogar en tu boca mi perfecta adicción.
Y me dejas al
recibir tú la noche, al borde de la locura… pues sabes de mis ansias por estar
viviendo en tu piel… me dejas al límite de romper mi cordura y mi razón se
nubla… se estremece mi cuerpo de deseos por el tuyo… mas de nada servirá por un
momento pienso, pues al abrigo de otra sombra duermes… y un grito estalla en mi
pecho; amor despierta tan solo para mí… y te escapas a la luz de este amor que
como un faro te indica que al sur de tu realidad mi amor aún espera devuelvas a
la vida esta alma, sin ti perdida.
He roto el
latido al atravesar ojos de hielo que no sabían amar, he dejado mi vida en
manos de dos copas de champán, y pienso
beberme cada gota de mí con quien quiera verme amanecer, gritando que quiero ser la sed que le calme
cada desierto que le quiera arder. Y ven, si llegas alguna vez, acércame a tu
mar, enséñame a esquivar cada roca que
te forma cuando no puedes más. Quiero conocer cada uno de tu bordes aunque
alguno pueda cortarme, no me importa la sangre, no me importan los fuertes que
tendré que romper para encontrarte, ni las llaves que intenten abrirme, no
dejaré que pasen alas grises. Las calles se visten de bares si no vienes a
callar mis rotos, amor, tiré las veces que el tren me dejó tirado enfrente del
trayecto, vi cómo me fui tan lejos...
Pero oí tu risa paseando entre páginas afiladas, sin miedo a las arrugas que pueda causar la prisa, te vi y no pude dejar de verte, te vi como quien ama septiembre.
Pero oí tu risa paseando entre páginas afiladas, sin miedo a las arrugas que pueda causar la prisa, te vi y no pude dejar de verte, te vi como quien ama septiembre.
__No hace
falta que me digas "te amo", basta con observar cómo me miras en ese silencio absoluto que viste tu
rostro ejerciendo locura en mi acelerada
razón y erizando cada poro de esta embravecida
piel. No, no hace falta que digas nada, solo sentir el roce perfecto de tu
respiración en mi cuerpo enaltece la pureza de este amor envuelto en delirio
llenando de seducción los instintos más escondidos liberando la pasión cautiva
en los deseos. No, no hace falta que digas "cuánto me amas". ¡Eso de
sobra lo sé! Pues lo siente el corazón
cuando ante tu mágica presencia varonil se arrebatan los sentidos más
prohibidos prometiendo un futuro sin
final porque cuando se ama así, las palabras están de más. "Quien nunca ha llorado por amor, nunca
ha amado; aun en la quietud de los
cielos, se siente el huracán... del
viento enamorado; no es lluvia lo que
moja a los hombres, es el llanto del
viento, que al cielo le ha llorado.
“Incliné la
cabeza hacia delante desafiando a Guille a que me besara, vaciló mientras
observaba detenidamente mi cara, y luego sus ojos se oscurecieron, inclinó su
cuerpo y lo que comenzó como un suave beso se convirtió en un beso lujurioso y
romántico. Sus labios se movían con los míos como si los recordara o incluso
cómo si echase de menos su sabor. Una extraña corriente eléctrica descendió
desde los labios hasta el latir doloroso en el sexo, como nunca había sentido
en la vida atravesó todo el cuerpo, haciendo que los nervios se desvanecieran
por completo. Una vez terminado el beso permanecimos con los ojos cerrados un
momento, como saboreando el momento, pero al abrirlos, esos ojos me encadenaron
a él, tenían poder, una fuerza y energía que siempre se transmitía por esa
línea de visión.
Me tomó las
caderas y me estrechó más a su cuerpo mientras los labios hurgaban en los
oídos, reseguían los ángulos del rostro, delineaban las orejas y ansiaban
mordisquear el cuello, esos labios aterciopelados y traviesos que no
descansaban mientras yo sentía que mis nervios chispeaban y bailaban bajo mi
piel. Los pequeños besos que me dio a lo largo de la mandíbula eran decididos y
experimentados. Sus manos me rogaban que me pegara más a él con cada roce como
si hubiera esperado ese contacto toda la vida, y el modo en que bregaba por
tirar de la ropa llevaba a que todo mi cuerpo se estremeciese.
__ Sos tan
bello, tan suave.
Olfateaba su
aroma intentando adivinar sus notas, era vainilla, un deje de fruta, otro diría
que de café, me embriagaba en él, y ya no pensaba cuando caímos al suelo y
nuestros labios volvieron a encontrarse. Dejé que su lengua se deslizara en mi
boca, mientras yo entrelazaba los dedos detrás de su cuello. Me quitó el buzo,
lo dejó caer al suelo, después se aflojó el nudo de la corbata y se la quitó por
encima de la cabeza Mientras me desabotonaba la camisa, le ayudé a sacarla y él se quitó la suya,
dejando ante mí su torso, una combinación de genes impresionantes, y varios
años de ejercicios que lo habían esculpido en esa madura perfección que tenía
delante de mis ojos, y esos ojos, esa extraña combinación de dulzura y esas
pestañas y cejas renegridas y pobladas que daban ese toque exótico.
_Entre mis sábanas pierdes la decencia, pierdes el miedo, ese pudor que te caracteriza, das rienda suelta a tu instinto, estás completamente a mi disposición, entre que empiezo a hacerte el amor.
Desnudamos
sentimientos a placer, nuestros cuerpos archivan caricias, emanan sonrisas, el
olor de nuestros sexos perfuma la noche, se impregna en nuestro lecho, habilita
deseos, murmura pasiones y se vuelve intenso, la pasión y las fantasías
voraces, provocando sutiles sorpresas, llevándome a una tierra fértil.
Te observo
desnudo, tirita mi piel, me embriago de tus besos, caricias llenas de
estremecimiento, como el palpar con tus manos todo mi cuerpo, te abres al
cielo, buscando mi esencia, tus piernas
abiertas, esperando mi sexo, humedeciendo mi miembro, cuánto néctar de embrujo.
Tus pezones
erguidos son mi destino, me vuelvo tu esclavo en verbos, en pecado prohibido,
somos amantes desquiciados, me bebes, rica y suculenta es tu piel, el aroma
perfecto de tu perfume que me embriaga, que me envenena, como esa droga que
hace perder los sentidos.
Tus labios me
besan hasta casi sangrar, tu boca con sabor sin igual despierta el hambre de
devorarte completamente, traigo el sabor lleno de dulzura, y te hago gemir,
estremecer, enloquecer, porque soy tu dueño y tú dueño de mi infierno, me fascina tenerte en
mis adentros, sed de amarnos, de tocarnos, de llevarnos al paraíso completo.
Un suspiro
que se acentúa y que se vuelve lujuria, que desciende en sudor, piel salobre
que tu cuerpo despide, un suspiro suelto cuando culminas conmigo y terminamos
libremente entre tu cuerpo y el mío, eso es pasión, eso es sucumbir los dos.
_Esta noche me embriago contigo de ti, de tu cuerpo. Tocarte muy lento,
haz eterno el momento de quedarme dormido entre tu pecho y tu cadera.
Esta noche te deseo a mares. Ven refresca mi piel con tus dulces besos. Recorre mi cuerpo con tu boca ardiente. Apaga tus deseos con el elixir de mi fuente abierta para ti. Esta noche llueve a torrentes y mi corazón palpita fuerte por los deseos de tenerte, y al escuchar tu voz susurrando a mi oído, te amo vida mía, entonces me arrancas los suspiros y aumentan mis delirios.
__ Y mis deseos de devorarte sin prisa y con afán con total intensidad haciendo que cada mordisco sea una explosión en tu ser, sea una súplica por piedad en que continúe y no me detenga jamás.
Esta noche te deseo a mares. Ven refresca mi piel con tus dulces besos. Recorre mi cuerpo con tu boca ardiente. Apaga tus deseos con el elixir de mi fuente abierta para ti. Esta noche llueve a torrentes y mi corazón palpita fuerte por los deseos de tenerte, y al escuchar tu voz susurrando a mi oído, te amo vida mía, entonces me arrancas los suspiros y aumentan mis delirios.
__ Y mis deseos de devorarte sin prisa y con afán con total intensidad haciendo que cada mordisco sea una explosión en tu ser, sea una súplica por piedad en que continúe y no me detenga jamás.
__Jamás mi alma y mi ser ardió de
amor y placer como lo estoy
sintiendo por ti vida mía, cuando sutilmente llegas y muerdes cada espacio de mi piel, me haces locamente estremecer.
__Sin prisas mi señor llenemos de
suspiros a la noche y que nos sorprenda
el alba brindando de deseos a la entrega de nuestro amor, candentes caricias que se funden en besos en un solo amanecer dorado
entre sábanas de húmedos de suspiros.
Nos sacamos los zapatos, pasé los dedos por cada uno de sus abultados
músculos y senderos, por recodos y huesos, y tomé su erección sin reparos. El agudo
sonido del cierre hizo que mi latir se incrementara, rogando que lo
acariciaran. Presioné mis dedos contra su espalda, mientras sus besos
vagaban desde el cuello a mis hombros, y
luego apresaban mis pezones.
A la vez sus manos me quitaban la vergüenza y el jean. Se detuvo unos
segundos, tomándose el tiempo para apreciar mi cuerpo desnudo delante de él.
También parecía un poco sorprendido.
__No usas bóxer.
Me encogí de hombros.
__Jamás.
__ ¿Jamás? __preguntó sabiendo que mentía, pero rogando con los ojos que
dijera que no. Adoraba la manera en que me miraba en parte asombrado en parte
divertido, en parte abrumadoramente excitado. Alcé la ceja saboreando lo sexy
que mi amor me hacía sentir.
__Mi otro yo, el que conociste en el hotel, no tenía ni un par _dije la
verdad.
Me levantó en sus brazos y enganché los tobillos en sus fuertes glúteos,
la única prenda que quedaba de barrera era su bóxer gris, y así me besó
mientras me llevaba hasta el sofá y después me depositó suavemente entre los
almohadones.
__ ¿Cómodo? __preguntó en un susurro.
Cuando asentí me calló de nuevo
con besos, no podíamos dejar de besarnos, de tocarnos, de saborearnos, de
olernos, sin más preámbulos que recorrerme el cuerpo de cabeza a pies y de
estos a los muslos, con la boca seguida de yemas que se hundían en la carne y
dejaban huella indeleble rozó con el
glande mi hendidura, se inclinó hacia
delante para susurrar pero solo dejó escapar un suspiro entrecortado. Estiré
mis brazos hacia atrás para empujar su musculoso trasero contra mi piel,
guiándolo, mientras él me penetraba, y entonces a mí me tocó suspirar.
Guille gimió y volvió a juntar su boca con la mía, el rostro enrojecido,
me sujetó quedándose dentro de mí, ya no quería más que habitarme en cuerpo y alma y así, atolondrados y enredados,
aferrados llegamos a los tumbos hasta la cama, sin entender cómo no tropezamos
estando enredados con una boca en la otra, y mientras caminaba aún dentro de
mí, no pude evitar gritar su nombre, y supe que él era mi herencia, la única
que deseaba, la única a la que no podría renunciar.
Sonrió en mis labios mientras pateaba la puerta y caímos luego sobre el
colchón. Se acomodó arriba de mí sin apartar esa mirada que me ataba y me
turbaba de la mía. Sus rodillas estaban más separadas que cuando estábamos en
el sofá lo que le permitía entrar más a fondo y mover sus caderas en vaivén de
tal madera que hacía que las rodillas me temblaran en cada arremetida, mientras
me ondulaba hacia él para acompasar los cuerpos en la danza erótica envidiada
por los astros.
Su boca estaba de nuevo bebiendo
mi aliento contra la mía como si la espera le hubiera resultado una agonía, y
entendí que la forma en que me miraba, me besaba, me tocaba y se movía contra
mi cuerpo era amor, el más puro amor.
Acercó su mejilla a la mía y contuvo la respiración mientras se
concentraba, a medida que la excitación nos hacía ascender y acercar al
paroxismo, me abismé a la profundidad de esos ojos que eran mi fuente, mi alma.
A la vez trataba de prolongar el insensato, tonto e impensable viaje en que nos
habíamos embarcado, apoyó una mano en el colchón mientras me aferré con fuerza
al cobertor, las mandíbulas y todos los músculos en tensión, se arrojó desde lo
alto arremetiendo una vez más dentro de mí, embistiendo una y otra vez como si deseara
dejar la vida en ello, y así supe que llenaba cada centímetro de mi ser, me colmaba y dilataba, cada vez que me
penetraba lanzaba oleadas de un dolor maravilloso por todo mi cuerpo y cada vez
que retrocedía casi entraba en pánico de que hubiera acabado.
Con brazos y piernas alrededor de su cuerpo, volví a lanzar un grito por
enésima vez.
Su lengua era contundente y manejaba con destreza su accionar en mi boca,
demostrando que había asediado y conquistado muchas veces antes. Eso volvía
todo más fácil. Volvió a penetrarme más allá, su sudor mezclándose con el mío.
Como si las pieles se estuviesen derritiendo juntas. Y mis ojos se fueron hacia
atrás y quedaron casi en blanco con la desbastadora mezcla de dolor y placer
que recorría mi cuerpo con cada embestida.
Su boca volvió a juntarse con la mía y no pude evitar perderme en el
pensamiento de lo voraces que eran sus labios a la vez que suaves y deliciosos.
Cada movimiento de su lengua estaba calculado, ejercitado, y preciso como si
todo estuviera dirigido a darme placer. Y todo mientras me embestía sin piedad
y sus manos iban frotando tiernamente con su pulgar en círculos sobre la zona
sensible del glande o sobre mi sexo.
Unos segundos más tarde ya no
podíamos dejar de gritar, yo alzaba las caderas para pegarlas a las suyas, y le
apretada desde donde podía para enterrarlo cada vez más mientras se inclinó
para acercar su boca a la mía, gimiendo, podía sentir el susurro de sus labios
curvándose en una sonrisa.
Tras algunos movimientos agónicos más. Y unos tiernos besos, dejó de
controlarse.
Sus músculos y los míos al verlo se tensaron, al arremeter con fuerza
dentro de mí, cada vez con mayor violencia, solo éramos fuego, sudor, pieles
fundidas, apretujados, fundidos, lágrimas, saliva, carne, mordiscos, arañazos,
gritos y arremetiendo contra mí sin piedad, nos catapultó al centro del
universo en con orgasmo magistral donde derramó su amor hasta desangrarse
dentro de mi esencia, y le hice saber que cabalgaba la ola de mi propio orgasmo
ahogando su nombre en la boca, antes de caer en la dulce inconsciencia, unidos cuerpo
y alma en un solo ser.
_Cuando tu voz acuna sublime mi
alma. Mírame, desorbita mi sentir con tu mirada, acércate,
esculpe con tus dedos mi
explanada, dame tus labios, toma mi
candor, acaricia todos mis
espacios, bebe de mi fuente.
Atiéndeme mi amor, cuando te pienso, me invaden tantos deseos, cuando te pienso habla mi corazón, entonces vuelco mi sentir, entiéndeme mi amor, cuando te pienso nace mi inspiración, tú eres mi motivación.
Cuando en ti pienso, mi corazón ama, yo sé que cuando solo estás piensas en mí, yo sé que me recuerdas, yo sé que tu sentir me piensa, yo sé que tú me amas.
Te juro que de mi corazón no puedo borrar esto, esto que solo tú me haces sentir, esto que me invade por completo, esto que siento por ti.
Tan solo pensarte delicioso trastornas mi razón, exquisito prendes mi llamarada, no sé cómo esto logras, pero tan solo al escucharte desorbitas mi pasión, tú no sabes cómo me provocas, cuando tu voz acuna sublime mi alma.
Atiéndeme mi amor, cuando te pienso, me invaden tantos deseos, cuando te pienso habla mi corazón, entonces vuelco mi sentir, entiéndeme mi amor, cuando te pienso nace mi inspiración, tú eres mi motivación.
Cuando en ti pienso, mi corazón ama, yo sé que cuando solo estás piensas en mí, yo sé que me recuerdas, yo sé que tu sentir me piensa, yo sé que tú me amas.
Te juro que de mi corazón no puedo borrar esto, esto que solo tú me haces sentir, esto que me invade por completo, esto que siento por ti.
Tan solo pensarte delicioso trastornas mi razón, exquisito prendes mi llamarada, no sé cómo esto logras, pero tan solo al escucharte desorbitas mi pasión, tú no sabes cómo me provocas, cuando tu voz acuna sublime mi alma.
Lentamente fuimos aquietándonos, y
después se giró para besarme, sin despegar de inmediato los labios.
__ ¿Cómo seguiremos?
__Juntos, trabajando, estudiando, pero juntos. Verás a tus padres y amigos, yo a los míos,
confiando.
Dos cuerpos entre sábanas húmedas, labios que se unen apasionadamente,
besos que ahogan a las palabras, miradas
que rebosan pasión, reclamando placer, labios que recorren laberintos, en busca de los rincones secretos, manos que siguen la senda de los sitios para acariciar pieles que se
atraen, se rozan y se unen, cuerpos que arden, sumergiéndose en un frenesí de
pasión, robando hasta el último de los suspiros, cuerpo temblando, labios aún
adormecidos después de una noche de placer y amor.
__Sé que a veces es difícil para ti comprender lo que siento. En
ocasiones, puedo ser
la más encantadora compañía, en otras, parecería que no me importas. Pero si miras en el fondo mismo de mi corazón, verás que solo quiero amarte para siempre, cuidar de ti. En la felicidad y el sufrimiento, serás siempre mi vida, mi esperanza, la aspiración de todo lo que logre hacer. A lo largo del viaje de mi vida te amaré siempre.
la más encantadora compañía, en otras, parecería que no me importas. Pero si miras en el fondo mismo de mi corazón, verás que solo quiero amarte para siempre, cuidar de ti. En la felicidad y el sufrimiento, serás siempre mi vida, mi esperanza, la aspiración de todo lo que logre hacer. A lo largo del viaje de mi vida te amaré siempre.
__Hoy amanecí ardiendo en deseos por vos, mas, cómo quisiera tenerte como te tengo en mis sueños, para cubrir tu
piel con mis besos, mientras mis manos pintarían, paso a paso, con la punta de
mis dedos y con mi húmeda lengua, tu
bella desnudez, como Goya lo realizó, en
su Maja desnuda, hoy amanecí deseándote y solo queriendo ahogarme en tus ardientes labios, y poder
susurrarte al oído, con palabras mudas,
el deseo que siento por ser parte de vos, ahora mismo... por qué
amaneció, si hoy no quería despertar, quiero volverme a dormir,
para así poder soñar con vos.
para así poder soñar con vos.
__Escribiré sobre tu piel, estas letras que brotan de mi corazón y lo
haré sin tinta ni pluma, lo haré con mis labios y mi saliva, mientras mis apasionadas
manos dibujan las caricias, que
delinearán la curvatura de tu cuerpo, trataré de rimar nuestras pieles, formando
versos con tu mirada y crearé miles de metáforas con tus ojos, tus labios de miel y con la
ayuda de la llama que late en tu pecho, haciendo
de ti una poesía o quizás un soneto, o
una fábula o un cuento, mas lo que sí estoy seguro, que tú y yo nos volveremos
leyenda y recrearemos una historia de
amor jamás contada, por eso comenzaré con tus labios y verso a verso los iré transformando en besos y deletrearé
tus suspiros, antes de comenzar a amarte.
__ ¿Te casarías conmigo?
__Sí, es nuestro plan.
__No al recibirte ni en meses o años, nadie tiene la seguridad del mañana
y el futuro no existe, tenemos esto… lo
nuestro.
__ ¿Cuándo?
__Mañana.
__ ¿Cómo?
__Mañana, entrar a un registro civil con Beto y Gaby de testigos, y
listo, y en el verano irnos a donde deseemos de luna de miel.
__ ¿Y tu hijo, tu gente?
__Mi hogar sos vos, Pedro. Fabián entenderá, no necesito más.
__Sí.
_Pero entendería que con tu juventud
quisieras una fiesta con tus amigos, ¿qué dijiste?
__Que sí, solo quisiera decirle a mis padres, ¿puede ser?
__Sí amorcito, claro que puede ser.
Guille apoyó mi mano contra su mejilla y luego me besó la muñeca,
descendiendo lentamente nuestras manos hasta el colchón, se acomodó y se relajó
como si hubiera estando esperando las palabras, asegurándose de poder verme hasta
caer dormido.
Guille es mi herencia y yo la suya, nunca nos interesó el dinero, aunque
agradezco que lo recibiera junto a esos hoteles para que llegara a mí.
Yo le necesitaba tanto como él a
mí. Tal vez en un tiempo haya fiesta, tal vez viajemos, quizás entonces sea lo
convencional, pero él me vuelve loco, y tiene razón, juntos somos mucho más que
dos, solo tenemos sentido juntos, hemos nacido para estarlo.
Me negué a pensar qué sucedería luego. A analizar posibilidades o la
lógica de una relación exitosa o mundos similares, a tratar de conciliar si
tenía demasiado o sentía demasiado. Finalmente había llegado una herencia,
había encontrado el amor por el que valía la pena correr todo riesgo, hasta el
de que se rompiera el corazón.
Habíamos tenido que encontrarnos y Fabián que estar al borde de la muerte
para entender muchas cosas, pero fundamentalmente, que el amor es… un rayo que
te parte, que no puede elegirse ni controlarse. Mi amor por él es
incontrolable, el suyo avasallador.
Pero… eso era el amor. Y es un amor verdadero… una herencia de amor.
FIN.
Victoria Bellísimo
ResponderEliminarMaria Gloria muy bello
ResponderEliminarBlanca Bellísima
ResponderEliminarFlor Bellísima
ResponderEliminarNorma Preciosa
ResponderEliminarSusana El amor con el tiempo queda en nuestro corazón como un trocito de azúcar.Lo he vivido.Hermosa
ResponderEliminarMaria Precioso
ResponderEliminar1
ResponderEliminarLily Rz Precioso!
Isabel Magnífico
ResponderEliminar1
Veronica Lorena Piccinino Hermoso final Eve Monica Marzetti... una de mis historias preferidas...muy dulce y bien cuento de hadas...lo bueno es que siempre triunfa el amor entre ellos... Gracias
ResponderEliminarHermoso Eve, me encantó esta bella y apasionante historia...Además sabés que prefiero que no sean tan largas... Mil gracias por esta maravillosa HERENCIA de hizo posible que Guillermo Y Pedro se unieran una vez más para vivir su eterno amor...
ResponderEliminarSol Urvino Un merecido y justo final para ambos, porque el amor no entiende logicas ni razones. UN BESO, Eve.
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