¿Y SI FUERA POSIBLE?
CAPÍTULO CINCUENTA Y CUATRO.
NUEVA YORK, martes 05 DE julio DE 2016.
“tu boca que es tuya y mía
tu boca no se equivoca
te quiero porque tu boca
sabe gritar rebeldía
tu boca no se equivoca
te quiero porque tu boca
sabe gritar rebeldía
Si te quiero es porque sos
mi amor mi cómplice y todo
y en la calle codo a codo
somos mucho más que dos
mi amor mi cómplice y todo
y en la calle codo a codo
somos mucho más que dos
*Mario Benedetti / Te quiero, fragmento.
….. Casi había sido una
aventura, excitante, breve, apasionada, dulce y llena de fuegos artificiales.
Sin embargo sabía que las relaciones duraderas exigían algo más simple, fácil,
tranquilo y sólido, y Pedro no tenía nada de eso, tal vez ni siquiera ella lo
tuviera.
En definitiva, desde el primer
día había sabido, que sería… imposible, sonrió intentando parecer valiente,
pero el corazón se le encogió pensando en la vida ahora sin Julio, mas también…
sin Pedro.
Corazón Coraza /
“Porque te tengo y no
porque te pienso
porque la noche está de ojos abiertos
porque la noche pasa y digo amor
porque has venido a recoger tu imagen
y eres mejor que todas tus imágenes
porque eres linda desde el pie hasta el alma
porque eres buena desde el alma a mí
porque te escondes dulce en el orgullo
pequeña y dulce
corazón coraza
porque te pienso
porque la noche está de ojos abiertos
porque la noche pasa y digo amor
porque has venido a recoger tu imagen
y eres mejor que todas tus imágenes
porque eres linda desde el pie hasta el alma
porque eres buena desde el alma a mí
porque te escondes dulce en el orgullo
pequeña y dulce
corazón coraza
porque eres mía
porque no eres mía
porque te miro y muero
y peor que muero
si no te miro amor
si no te miro
porque no eres mía
porque te miro y muero
y peor que muero
si no te miro amor
si no te miro
porque tú siempre existes dondequiera
pero existes mejor donde te quiero
porque tu boca es sangre
y tienes frío
tengo que amarte amor
tengo que amarte
aunque esta herida duela como dos
aunque te busque y no te encuentre
y aunque
la noche pase y yo te tenga
y no”.
pero existes mejor donde te quiero
porque tu boca es sangre
y tienes frío
tengo que amarte amor
tengo que amarte
aunque esta herida duela como dos
aunque te busque y no te encuentre
y aunque
la noche pase y yo te tenga
y no”.
*Mario Benedetti.
Pedro despertó esa mañana junto a Guillermo como en los
días robados en el loft en Bs. As. y esta vez no pudo más que reír. Había hecho
realidad su sueño de niño, estaba regalando a su hijo el triunfo, y la noche lo encontró junto al amor de su
vida, posible o no, estaban allí, juntos.
__Dime que estoy soñando. Debo de estar drogado. Estamos
locos, mira que estar juntos pese a todo.
__Sí __convino Guillermo, dándose la vuelta con una
amplia sonrisa__, estamos locos y me encanta, piensa lo aburrida que sería sino
la vida, es la que conocí antes de vos y que ya no quiero.
__Sí, podría ser hasta normal esto. Vete a saber qué se
siente sin correr riesgos. Yo, ya no me acuerdo.
__Es muy aburrida y estéril _contestó Guillermo sonriendo.
__No me digas eso, por Dios, que me iré contigo a Bs.
As., y no puedo por mi hijito.
__ ¿Qué vamos a hacer hoy mi bello artista loco, sin
normas?
__Tú, no sé, yo debería ir a trabajar, aunque esté todo
vendido, quiero replicar los lienzos de nuestro amor, antes que Sarah los haga
circular por el mundo previo a la entrega, y supongo que debo mostrarme
mientras siga la muestra. __No sé si invitarla a que nos acompañe a Disney, si
querrá quedarse en la galería, la verdad es que es raro todo, la situación con
la prensa me lo hizo ver. Igualmente creo que está aceptando la despedida, en
la muestra ni siquiera se arrimó, menos hizo muestras que hicieran pensar en
que somos pareja.
__Lo sé, creo que sabe que ya no hay retorno, pese a que
le duele lo está comenzando a asumir, lo que no podría es soportar que yo sea
tu amante, no por ahora cielito _afirmó Guillermo__. Pero quiero ir con vos, no
separarme en estos días que quedan, podríamos a la tarde ir a pasear con el
nene por la ciudad, con Dana y tu hermano, mi madre está con Ivonne, sin contar
con que Natasha anda por acá, agradezco que no la cruzaste, no pareciera estar
acá por vos, pero no pierde minuto de ofender, no te enganches, cielito, sería
peor.
__Me tiene sin cuidado ya tu hermana, le ganamos de mano,
ya no puede hacernos daño, lo intentó todo antes, no dirá nada que dañe a
Sarah, es su límite, el único creo.
__Pedro... antes de viajar, quiero un día entero con vos
a solas, necesito empaparme de vos, que me dure hasta volver a verte, es
enloquecedor despedirnos.
__Amor, serán apenas un par de semanas, por nada del
mundo perdería el parto de tu hijo, es
un momento maravilloso, mágico que casi ya he olvidado, y lo viviremos sólo una
vez mi vida, disfrútalo, no habrán más hijos biológicos al menos __afirmé
encontrando la mirada.
__Lo sé, lo voy a disfrutar, quiero que lo revivas, y
más, porque sé que el antes y el después con Michael te lo negaron.
__Así es. Está bien, pasaré hoy tiempo en la galería por
si quieren algo los críticos o clientes, con la familia y dejaré la pintura
para cuando hayas partido, lo llevo dentro, tatuado en la piel, puedo pintarlo
casi sin mirar, lo haré rápido cuando hayas partido, así ya iré a llevar al
nene para regresar lo antes posible.
__Esta vez pese al viaje no voy a perderte ni a volver a ver “esto… lo nuestro” como imposible, Pedro. No importa lo que tenga que hacer. Si sales corriendo o cabalgando, iré tras de ti. Quiero que lo sepas. O conseguimos que funcione o morimos en el intento pero juntos. No podría perderte.
Ya sabes que esta vez debo irme por el parto, pero desde
el próximo viaje, te seguiré, dejaré la Estancia en manos de un administrador,
y ya siempre Camila y mi hijo nos
seguirán donde expongas, supongo que Dana no te negará a Michael, si ella se
casara con tu hermano, no quiero separarme nunca más. He recuperado o conocido
la vida a tu lado. Vos aprendiste a madurar y yo a mantenerme joven, asumiste
normas y yo las he ido dejando. En algún punto intermedio radica el reino de lo
posible que hemos buscado desde conocernos, y por fin pareciera que lo estamos
hallando. El secreto será saber conservarlo, afrontaremos el reto aunque
persista el secreto con mi madre, pero lo intentaremos sin restricciones, estamos
preparados, hemos logrado sincronizar nuestras vidas y formas de ser.
Hay tantas parejas como nosotros que a lo largo de la
historia no pudieron ser, Leonardo Da Vinci fue torturado, García Lorca.
Necesitamos creer en el amor, en esas parejas románticas de las historias
novelescas, pasiones que te atrapan, caballeros y princesas enamoradas hasta la
médula, miles de amantes célebres de toda condición social han remecido los
corazones a lo largo de los siglos.
Romeo y Julieta y su trágico fin, Verona, la ciudad italiana del Balcón de Julieta que guarda el secreto de amor inmortal, pero Shakespeare consiguió envolver con polvo de leyenda una historia que nunca ocurrió.
Romeo y Julieta y su trágico fin, Verona, la ciudad italiana del Balcón de Julieta que guarda el secreto de amor inmortal, pero Shakespeare consiguió envolver con polvo de leyenda una historia que nunca ocurrió.
Abelardo y Eloísa en la edad media. Marco Antonio y
Cleopatra.
Juana La Loca y Felipe El Hermoso. Tristán e Isolda amantes hasta en la tumba, Borges, San Francisco y Santa Clara de Asís con su amor sublimado de almas gemelas y tantos amores imposibles, la boda de oro de tus abuelos, el romance perpetuo del tendero de la esquina, ese flechazo que aún perdura entre papá y mamá, el hormigueo perenne de un hombre y una mujer con luna esplendorosa en todas las épocas alumbrando a los pretendientes
dándoles la fuerza para gritar “te quiero”… eres lo más bello que me ha pasado caminando cogidos de la mano comprometiéndose para toda la vida en un grito de esperanza con los espíritus embelesados latiendo al unísono en historias de gente común como vos o yo.
Juana La Loca y Felipe El Hermoso. Tristán e Isolda amantes hasta en la tumba, Borges, San Francisco y Santa Clara de Asís con su amor sublimado de almas gemelas y tantos amores imposibles, la boda de oro de tus abuelos, el romance perpetuo del tendero de la esquina, ese flechazo que aún perdura entre papá y mamá, el hormigueo perenne de un hombre y una mujer con luna esplendorosa en todas las épocas alumbrando a los pretendientes
dándoles la fuerza para gritar “te quiero”… eres lo más bello que me ha pasado caminando cogidos de la mano comprometiéndose para toda la vida en un grito de esperanza con los espíritus embelesados latiendo al unísono en historias de gente común como vos o yo.
__Amores imposibles, desde la luna y el sol, siempre
estuve dispuesto a creer en los imposibles, el siempre no es un adverbio más,
una muletilla. El siempre de Julieta era su siempre romántico, su verdad
preservada sin abrir, es como que las historias se convierten en un cuento
cuando no te creen lo que leen. Pero hay narraciones que tienen que ser
ciertas, porque la realidad de todos es demasiado vulgar. Por ello se desea
creer en la realidad que se lee, vestir con ropas reales a los personajes que
vemos desfilar en las páginas, en el lienzo o seguir el paso de los sueños para
evadirnos del presente. Los sueños salvan de la monotonía del desamor, hasta se
cree en ellos para aceptar y creer el
día a día.
El sol y la luna no pueden consumar su pasión hasta que
no hay un eclipse. Es entonces cuando se abrazan porque no se han dado cuenta
de que es de día y de noche a la vez. El amor es dedicar tiempo a alguien, pero
en caso prohibido hace daño, puede doler intensamente.
A Leonardo no le agradaba la palabra enamorado, no era su
centro el amor, sino el crear, el aprendizaje, la luz, y era un enamorado del amor, un enamorado del
universo con locura a partir de sus creaciones. No quería mostrar que era
vulnerable y también enamoradizo. El sexo llegaba y le calmaba los nervios
erizados de deseo, pero una mujer promulgaba la eternidad de su vida por un
amor abstracto, no consumado, la amaba, pero como el amor a lo abstracto, su
amor por ella era distinto al concepto de amor que el mundo tenía, la palabra
enamorado lo confundía, como si el sentimiento lo llevara a pisar terreno
pantanoso. Sufrió por su homosexualidad. Nunca se avergonzó de desear a los
hombres, le irritaba que ese sentimiento fuese penado por la incomprensión de
sus prójimos, y sobre todo, con la cárcel, Estuvo en ella más veces de las que
hubiese querido reconocer, la primera por su primer amante, su maestro primero,
siendo muy jovencito cuando se inició en el taller de Andrea Verrocchio,
maestro de pintores. Muchas de sus obras
reflejaban al amor de su vida, aunque tuvo muchos amantes, y en
simultáneo, fue Gian Giacomo Capriotti, Andrea Salai o Saladino, Salai lo
llamaba, fue su amante muchos años, lo adoraba pese a que lo engañaba y era
indeciso en cuanto a su sexualidad, de hecho al creerlo muerto se casó, como lo
hizo el último de los amantes conocidos que reflejó en su obra, Francesco Melzi, el último amor que se casó y tuvo ocho hijos.
Ve a tu suite amor, o no saldremos, mañana escaparemos
solos, lo prometo, a sus órdenes, señor. __Saludé con un beso y fui a la ducha
suplicando que no me siguiera. Era maravilloso estar con él, quería una isla juntos en cualquier parte.
__Me fascina verte, bello, tu esbelto cuerpo desnudo como
en el lienzo, mío.
Descalzo, sin hacer ruido, Guille se acercó. Se apoyó en
mi espalda de modo que su pecho rozara con sensualidad, y me abrazó. Luego se
separó levemente y empezó a acariciarme, los dedos peregrinando los sederos
desde la nuca, la espalda hasta las nalgas. En silencio lo dejé que siguiera,
esa sensualidad iría a un lienzo. Guille suspiraba mientras su cuerpo bajaba
hasta la cintura y buscaba mi sexo, acarició mi vello y la umbría dormida empezó
a moverse sorprendida. Masajeó en círculos la piel encogida, la boca se pegó húmeda
a los muslos temblorosos, apreté los ojos, dejé caer los brazos. Guille
continuó con las osadas caricias, hasta que notó cómo se elevaba mi deseo y
asomaba la primera humedad. Me volví y
me tomó con descaro en sus manos. Tomó con la lengua la primera gota como si
escogiera una perla preciosa de una concha recién abierta. Lamió con gusto,
apretó con las manos hasta hacerme gritar, y entonces lo detuve, o estallaría
allí, en sus manos. Escapé.
__! En serio! _le grité
desde la puerta__. Ve amor, y desayunemos con todos abajo.
__ Te amo __me respondió a gritos antes de salir.
Llegamos todos a la galería luego de desayunar y Sarah ya
estaba allí. Guille salió un rato con los chicos y mi hermano, mientras estuve
charlando con algunos críticos y clientes, todos preguntaban lo mismo, los
próximos cuadros, desalentados porque ya estaban todos vendidos.
Sarah me presentó a varios clientes exclusivos como el
artista joven más famoso y con más futuro de sus galerías. Me recibió con un
beso en la mejilla para dejar en claro que era o había sido mucho más que eso,
además aunque yo me la había quitado, reparé que ella llevaba la alianza, todavía.
__Ha sido bonito lo que acabas de hacer.
__ ¿El qué? ¿Presentarte a un cliente? __Sabía a qué me
refería y se alegraba de que me hubiera gustado. Ahora comprendía cuánto
significaba para mí el ser aceptado, lo que antes tanto le había costado.
__ ¿Vas a trabajar en los lienzos? __ interrogó atenta.
__ En un par de días,
los cuadros estarán expuestos, no demoraré la entrega, los iré
rehaciendo sin molestar _respondí sin
decir que lo haría una vez que Guille ya no estuviera__. ¿Vendrás con nosotros
a Disney?
__No, pedro, me quedaré terminando las entregas, cerrando
la muestra, si quieres, los encontraré en al Aeropuerto de Miami, o ya en Bs.
As. __definió y asentí__. Hoy mismo empieza el depósito de dinero en tu cuenta,
hay clientes que pagan el total a la entrega, otros a la compra, ya recibirás
tu parte y libre de impuestos.
__Gracias, no tengo más apuro que por el dinero que debo,
a ti, a Guillermo, a tu hija, quiero
pagar las deudas, y al regresar liberaré la casa que ocupa Dana y me mudaré del
casco, compraré algo, no sé bien dónde.
__No hay apuro, nadie te ha echado, ni a Dana, además es
amiga de Camila.
__Luego del parto, nos mudaremos, además ayudaré a mi
hermano, y debo ponerme a trabajar amor en el lienzo para agosto, lo haré con
los chicos como le dije a la prensa.
__ Bien, Pedro, acá volverás en dos años, un menos de
uno, organizaré París, Londres, Roma, ¿Podrás?
__No lo dudes, en un año o menos tendrás renovados los
lienzos, en cuanto pase lo de agosto y el concierto, me pondré a trabajar para
la muestra Europea, pero sólo te pido una cosa... Natasha. No quiero trabajar
con ella, creo que se entiende, ¿verdad? No puedo en cada muestra estar
escondiendo de ella los lienzos.
__Lo sé, Pedro, no va a intervenir en tu carrera, se lo
dejaré en claro, no te preocupes.
La exposición cambió tu vida, por fin tienes el dinero
para lo que desees hacer y dar al nene, a tu hermano, para irte de casa.
__Es lo mejor para todos, Sarah, entiende.
__Lo entendí, Pedro, entiendo.
__Papá ¿vendrán con nosotros a pasear? _interrumpió mi
hijo que estaba entre los cuadros como en casa.
__Ya amor, papá sí, invita a Sarah a ver si nos acompaña.
___No, vayan, tengo que organizar las entregas, cuando el
artista termina, la marchante no, Pedro, vayan, yo pediré algo para almorzar y
esta noche cenaré con Ivonne, ¿Guillermo?
__ Con mi tío, ¿lo llamo?
__
__Guillermo, mira, te invité a tomar el café porque sé
que te vuelves en horas, más allá de que me impactó la verdad de Pedro, y que
lo veo feliz, y no los juzgo, quiero preguntarte si lo amas de verdad, él
sufrió demasiado. Más allá de ver su sueño de niño cumplido, no quisiera verlo
mal de nuevo _dijo Juan Pablo en el café de la galería.
__Lo amo, Juan, daría mi vida por él, si no lo gritamos
al mundo es por mi madre, pero jamás dejaré a Pedro, ni le seré infiel si es lo
que crees que haré.
__Lo de Sarah lo entiendo, todos queremos que salga
sanamente de esto, sólo deseaba saber lo que acabo de oír.
__Mira, Juan Pablo, no voy a engañarte, Pedro es mi
primer amor, así como de él se dijo que era un donjuán por mi vida pasaron
muchos hombres y una mujer, Camila, pero desde que vi a Pedro, no quedó ni
siquiera ella, jamás le sería infiel, somos la misma esencia con tu hermano,
aunque no vuele mi cielo, está en mí, dentro, es lo mismo, somos lo mismo.
__Está bien, lo veo feliz como nunca, y veo el amor en
las miradas, es lo que siento por Dana, es lo que no vi hacia Sarah o de ti
hacia Camila, te creo. Les deseo y espero verlos felices, en poco tiempo, los
dos son buena gente, nada será fácil pero lo merecen, y mi sobrino, tu hijo, a
los cuales le deben la verdad.
__Así será Juan, no lo dudes.
__
Pasamos la tarde
de compras en el centro, llevamos a los
chicos al Central Park, al Rockefeller center, y terminamos en la excusión a la
Isla (Staten Island), a la Estatua de La Libertad, y al fin en el mirador del
Empire State, mi niño está feliz como nunca, Dana con mi hermano como cuando
éramos muy jovencitos.
_Papi, Guille, vengan, mamá nos filmará a los tres.
Y así es, mi hijo nos tomó de la mano, hizo de puente de
amor entre Guillermo y yo, nos unió para
que Dana sacara fotos y filmara en el mirador, se había sacado con ella y con
Juan, pero extrañamente quiso plasmar la imagen de los tres por separado, las
miradas nuestras chocaron y los ojos
entendieron el mensaje sin palabras.
__Pedro, iremos al Museo Metropolitano un día y a
Broadway, al Fantasma de la Ópera, ¿vienes?
__Dana, no, al Museo no podré, al teatro puede que sí,
lástima que Guille no llegará, ¿verdad?
__No importa, Pedro, he ido muchas veces, no, esta vez no
podré, sácale entrada a él, Dana, será
lo mejor, pregúntale a mi madre, aunque seguramente de ir, lo hará con Ivonne y
con mi hermana.
__Lo haré, Guillermo.
Nos reunimos a cenar en el Hotel, se cena tan temprano y
rápido que el contraste con Argentina se siente, empieza a pesarme el
transcurrir tirano del tiempo, sé que Guillermo entre las salidas de hoy compró
el pasaje y me duele hasta el alma.
__Papá, ¿cambiaré de colegios ahora que somos ricos?
__No mi niño, déjame que pague mis deudas antes, a Guille,
a Sarah, además te buscamos ya los mejores colegios, espera a regresar y sí
empezarás con el mejor profesor a estudiar música hasta que tengas edad de ir a
la Universidad.
__Hermano, según donde compres casa, buscaré la nuestra.
__Está bien Juan Pablo, pero demoraré un poco, me corren
los tiempos para la muestra de agosto, el parto de Camila, el concierto, te
diría que podríamos buscar todos juntos los fines de semana, y algunos, ya
veremos cuando regresemos, por ahora podrías alquilar o quedarte con Dana, Sarah sabe que nos mudaremos en
cuanto encuentre.
__ ¿Te vas a
divorciar de ella, papá? _me sorprendió mi hijo, a veces olvido que va a
cumplir once años, que no es un nene.
__ Sí, hijito, no ya, pero Sarah y yo estamos separados,
la quiero mucho como a mamá, pero no la amo. Papi, se equivocó, nos pasa a los
adultos muchas veces.
__Como a Guille con Camila.
__!Hijito!
__Déjalo, Pedro, es grande, entiende, claro, Michael, es
verdad, también estoy separado de Camila.
__Pero la quieres, ¿verdad? Es buena, no quiero dejar de
verla.
__No hijo, las verás, a Sarah, a Camila, irás a la
estancia de visita. Mañana te irás a pasear con mami, tengo que hacer cosas de
grandes, ¿sí? __Hice un guiño a Dana que entendió que deseaba pasar el día con
Guillermo.
___ No te preocupes, Pedro, o iremos al Museo o al
crucero, pasaremos el día ocupados, entradas sacaremos para lo antes que haya buena ubicación.
__Está bien.
__Hijo, despídete de papá y de todos, iré a acostarlos,
vengan amores.
Dana se llevó a los chicos, que al fin ocuparon una suite
a dormirlos y nos quedamos tomando un whisky los hombres.
__Pedro, cuando nos organicemos en domicilios, papeles,
trabajos, le pediré a Dana que nos casemos,
la amo desde siempre, creo que ella también, no lo hemos hablado, yo por
respeto a su ex muerto, a ti, pero creo que será así _dijo mi hermano
sonriendo.
__Lo sé, claro que será así, no temas, no estaba bien con
su ex cuando él murió, ya no lo amaba, en el fondo cuando lo eligió creo que
fue porque tú estabas casado, hoy son viudos, pueden casarse cuando deseen, los
chicos se adoran, ella es una gran mujer, y madre, me alegraré por los dos.
__ ¿Y tú Guillermo? Digo, una vez que sepa todo el nene,
que se entere Sarah, supongo que vivirán juntos, ¿en tanto a dónde? _interrogó mi hermano.
__En tanto y luego, me mudaré con Camila a pasos de
ustedes, algo sabe mi madre, cuando lo nuestro no sea secreto amén del
divorcio, dejaré a Camila con mi hijo muy cerca y viviré con Pedro, ya nos
iremos acomodando, o el entorno al amor como dicen.
Los ojos de Guille me acariciaron, necesitaba que sus
brazos rodearan mi cuerpo y que me apretara contra el suyo. A su lado podía
sentir la mirada enamorada, la fragilidad y la fortaleza del hombre que me
erizaba la piel, que pervertía mis sentidos, nos buscamos con los ojos
anhelantes, con un dulce sofoco que no dejaba paladear el whisky, levantamos
las copas en un brindis tardío mirándonos profundamente al topar las miradas
recostándose en las retinas, envueltos por notas a madera del perfume del otro,
deseándonos a morir, sintiéndonos amados por primera vez.
Juan Pablo se despidió dejándonos solos.
__ ¿Dónde estabas antes, Pedro? __preguntó aturdido
Guillermo, su voz sonó envuelta en deseo al besarlo en los labios.
__Esperándote, eres el hombre que estuve esperando desde
el inicio de los tiempos, no seré el primero en tu vida, pero sí el último, y
me alcanza.
El tiempo… ¿Qué es el tiempo? Poco importa ya que las
horas se acorten, que sea un nuevo día. Nuestra vida está llena de tiempo, pero
ante el amor, se me antoja un tiempo definitivo y corto. No puedo imaginarlo en
estas dos semanas lejos. No quiero que hablemos más de la ausencia, quiero
disfrutar de ti, de las horas que nos quedan juntos. Al fin creo que la vida es
de los locos, de los inoportunos, de los cándidos y de los insensatos. El casarme con tu madre puede
haberlo sido, una locura, pero fue el hecho, el espacio, el tiempo irrepetible
con los ingredientes mezclados al azar.
El enamoramiento al verte es el privilegio de los humanos que yo creí encontrar
en ella, esa voluptuosidad uniforme que hace que el amante se sienta único, lo
encontré, lo supe, lo sé a tu lado.
El tiempo hoy es amarte, el tiempo desde que partas será
recordarte, quedaré pegado en la memoria de evocaciones desde el crucero en
París, los encuentros furtivos en la estancia a éstos, será la maraña de
evocaciones buscando esas gotas de felicidad lo que me dé vida, la que como tu
perfume, me colmará los sentidos de notas sensuales y dichosas, una locura. Una
locura ha de ser un estado de impotencia
y de miedos. Me sentiré y nos hallamos al borde de un precipicio, lejos de la
realidad al estar tan dentro de esa misma realidad. Y a pesar de las
ensoñaciones, estoy sobrio, me siento dichoso de hoy tenerte, y en la esperanza
de una inexplicable vida nueva. La
felicidad, la posible felicidad, quedó pegada en esos puñetes del primer
encuentro.
Eres mi antojo y capricho, quiero prender los rosales de
mis besos en tu cuerpo. Pintar con mis aromas, tus superficies, llanos, esquinas
y montes, dibujar tus lunares en la blancura de tu piel.
Nadar en tus laderas, con hambre, con sed, con ahínco. Eres
mi antojo, como un helado de chocolate expectante, o una copa de vino deliciosa que
me llama, me provoca y apasiona. Ansío tocar tus cálidas hojas, y que me
envuelvas en tus follajes. Mi gran amor niño, adolescente, hombre. Me cautivan
todos tus sentidos, todos tus bordes. Yo me duermo de amor entre tus luces. Te
amo intensamente y sin importarme nada.
__Ven, moldea con el néctar de tu boca, el barro de mis
múltiples deseos, esculpe con el buril de acero
de tus dientes, y con tu mano generosa y firme, la roca sólida y dura, de
mis emociones intensas, como lo hizo Leonardo. Explora con cariño y ternura, mi
corazón ardiente, y cúbrete todo de mí,
bajo mi cuerpo, usa mi misma piel como tu manto.
Quemémonos en las llamas ardientes de nuestras pasiones
exaltadas, uniendo nuestras almas, hasta que, al unísono derramemos hasta el
último de nuestros más arcanos secretos que beberemos anhelantes y con desesperación como si fueran las últimas gotas de agua en el desierto. Vienen a nuestro encuentro luces
de colores y arco iris, intensos cubiertos aún con explosiones internas. Nuestros cuerpos brillan, uno al lado del otro quedando casi
inermes después de satisfacer nuestros febriles constantes deseos.
__He escrito notas, prosas y rimas, bemoles y sostenidos
en cada curva de tu risa, en cada pliegue de tu cuerpo. He juntado los
suspiros, las tonadas, los recuerdos, tus
ademanes y tus rezos. He buscado el tesoro de tus ansias en tus íntimos
deseos, en tus ocultos placeres.
He invocado tus santos, tus dioses y estrellas, a todos los planetas. He tratado de vibrar tu áurea, de sentir tu luz candente, he soplado de lejos tus cabellos para que sientas mi ser y te confundes con la brisa. He estado presente junto a ti, contigo, con tu sueño y con el mío.
He alegrado tus mañanas, tus tardes y tus noches, soy tuyo. He reanimado tu entorno cuando al pasear por tu recuerdo te he provocado la risa, esa mueca modesta que la gente al darse cuenta, te aguza, curiosa te increpa y...tú respondes que no es nada.
He venido a este mundo sencillo, sencillamente a quererte, a deshacer este nudo, ese trance, el tuyo y el mío. He juntado los suspiros suficientes para un vendaval, para doblar los árboles, para volar los papiros y todas mis notas en todas direcciones para que te alcancen.
Vientos alisios de vaho cálido que se llevarán tus besos en el vuelo en horas, que desaparezca tu aroma pero ni una tormenta ayuda, tampoco la continua lluvia, la niebla ni la bruma. Quisiera cerrar mi pecho en tu ausencia para ahuyentar la congoja, la enorme y abierta herida, a la que le pone sal la soledad y vinagre la angustia, porque ya la conocí cuando puse distancia en la estancia.
Te he juntado mis suspiros...los del surgir el nuevo día, también los del ocaso para brindar por tu vida, para sufrir un rato tu partida, para gozar tu silencio, el espacio muy tuyo, el que he deseado hacer mío.
He invocado tus santos, tus dioses y estrellas, a todos los planetas. He tratado de vibrar tu áurea, de sentir tu luz candente, he soplado de lejos tus cabellos para que sientas mi ser y te confundes con la brisa. He estado presente junto a ti, contigo, con tu sueño y con el mío.
He alegrado tus mañanas, tus tardes y tus noches, soy tuyo. He reanimado tu entorno cuando al pasear por tu recuerdo te he provocado la risa, esa mueca modesta que la gente al darse cuenta, te aguza, curiosa te increpa y...tú respondes que no es nada.
He venido a este mundo sencillo, sencillamente a quererte, a deshacer este nudo, ese trance, el tuyo y el mío. He juntado los suspiros suficientes para un vendaval, para doblar los árboles, para volar los papiros y todas mis notas en todas direcciones para que te alcancen.
Vientos alisios de vaho cálido que se llevarán tus besos en el vuelo en horas, que desaparezca tu aroma pero ni una tormenta ayuda, tampoco la continua lluvia, la niebla ni la bruma. Quisiera cerrar mi pecho en tu ausencia para ahuyentar la congoja, la enorme y abierta herida, a la que le pone sal la soledad y vinagre la angustia, porque ya la conocí cuando puse distancia en la estancia.
Te he juntado mis suspiros...los del surgir el nuevo día, también los del ocaso para brindar por tu vida, para sufrir un rato tu partida, para gozar tu silencio, el espacio muy tuyo, el que he deseado hacer mío.
__Tu mirada, es una invitación al paraíso, una
ventana, que atraviesa irreverente espejo, esa mirada, que incita al
otro lado donde estoy adonde no existe
ningún impedimento original. Donde la fuente, de mi
torrente sanguíneo despoje tu
figura escultural y descubra auroras. Auroras, tan bellas, como los dioses
griegos, que hacen del Olimpo un eterno paraíso.
Y el hechizo, de los amantes en turno, tus ojos, dos
luceros, que prometen mucho, nido de fuego y llamas tan intensas
como yo… que siento mis venas prorrumpir
en lava ardiente donde fluye impetuoso el río arrebatador, un volcán encendido,
abriendo venas de lava, riachuelos por todos lados brotan enfurecidos, en
deflagraciones fogosas seducidas
por las brasas de ese mirar, que provoca pasiones tormentosas en mi
ardoroso y ya excitado cuerpo.
Sensaciones, que me recorren de arriba abajo, todo
yo, soy ese mar embravecido por el furor de las encrespadas olas,
crecientes como el volcán que no puedo apagar, la ira de su excitación,
más que únicamente en los brazos quemantes en el núcleo de tu sinuoso y
delirante éxtasis de amar. ¿Subimos?
__Vamos, amor, y alquilé un coche para que mañana nos
lleve lejos, a cualquier playa, a perdernos por cualquier lugar, hasta que
llegue la hora de tu vuelo.
__Esta noche quiero pecar en las caricias de tus
encantos, sentir el tacto de tu piel como una suave seda tocando mis manos y
que te vayas quedando dormido lentamente entre mis brazos, quiero esta noche,
escribir el más arduo de los deseos en tu tez de terciopelo, pasearme por tu
pecho, dedicar un cálido ruego y con las puntas de mis dedos, prenderé de amor
tu pasión, para que este crepúsculo sea uno de tus sueños y yo, sea tu pecado,
la tentación en cada salmo que mi voz te ha susurrado, ven príncipe, pégate a
mi lado y déjame ver el cosmos en tus ojos reflejado, mientras sientes el acoso
de mis embriagadores besos en tus labios. Pues esta noche, quiero recorrer la
piel de tu cuerpo con mi tenso aliento, quiero que me enreden tus caderas y
desatar en ellas, el desenfreno, dar a mi lengua juego en tu cuello y ser el
culpable de los gemidos en tu lecho, las veces que entre mis dedos te tenga.
Los ojos de Guille se movieron deliberadamente hacia mí y
quedamos congelados en la mirada. Esa voz… Su voz… Tenía en mí un efecto
mágico, tan rica, tan profunda, tan masculina. Se me cerró la garganta y me
arrojé a sus brazos ya en el ascensor, y los de él se ajustaron en torno a mí,
y cuando hundió la nariz detrás de la oreja comenzó a besarme. Para cuando
saqué el rostro del cobijo del hueco de su cuello y elevé los párpados, él me
contemplaba con tal devoción que me robó el aliento. Nunca me había sentido, tan
deseado, tan adorado, tan amado, era la sensación más poderosa y vivificante
que había experimentado.
El primer contacto con los labios fue suave, Guille se
mostraba fascinado con la esponjosidad y la generosidad de mis labios y se
demoraba para besarlos, mordisquearlos apretados entre los suyos, hasta que los
separé para exhalar un suspiro y un gemido que murieron dentro de la boca de
Guillermo. Y el deseo se desató. Mis dedos, que habían permanecido inertes
sobre los hombros de él, revolotearon hacia la nuca donde se ajustaron y se
enredaron en algunos cabellos indisciplinados. Los labios de él se abrieron
paso para devorar los míos, su lengua penetró con delicada firmeza y sus
fuertes manos treparon por los costados del cuerpo hasta calzarse bajo las
axilas y detrás de mi cabeza. Quedé paralizado en la sensación de placer físico
y alegría del alma. Guille era lo más real y puro que había compartido con otra
persona, caí en la cuenta de que cada vez que había besado a una mujer, sólo
había buscado la cuenta de satisfacción personal. Con él era todo diferente,
había pensado en Guille, en agradarle, en que fuese tan feliz con ese beso como
lo estaba siendo yo mismo. A juzgar por la respiración acelerada y el frenesí
con que me estaba aferrando, por el modo en que movía la cabeza, estaba
disfrutándolo como yo, al fin… exhaustos
de faltos de aire, cerré los ojos, y él apoyó los labios en mi frente.
__Siento mucha alegría por saber que sos mío, que te
conquisté, que te estoy abrazando.
Pedro ¿quieres ser mi novio?
__Me enloquece tu voz ronca.
Reímos embriagándonos en la alegría que trasuntaba la
mirada chispeante del otro, hasta que las risas fueron languideciendo y
quedamos en silencio agitados, energizados por la pasión que nos despertábamos.
__Gracias _susurré.
__ ¿Por qué?
__Porque no sabía que se podía ser tan feliz.
__ ¿No lo eras antes de saberte gay?
__ ¿Y tú con Juan u otros?
__Yo nunca fui feliz, Pedro. Tengo como vos, memoria de algunos
momentos de alegría cuando era chico y estábamos todos, pero de todo eso hace
tanto que me parece que nunca existieron.
Guille me acarició el pelo rebelde, callamos y nos
apartamos apenas. Nos miramos para
descubrir la misma emoción profunda y visceral que nos dominaba, sentir con la
misma intensidad era nuevo, sin esconder ni disimular, sin ruegos, deseándonos
por igual, necesitándonos por igual. Los ojos se desplazaron hacia la boca, le
toqué primero una comisura con la punta de la lengua y la arrastré hasta la
otra, la calma de Guille se esfumó. Abrió la boca, engulló mis labios, mi
aliento, mis gemidos, mi sorpresa, mi ardor, y me recostó sobre la pared. Mi
lengua lo invadió con el mismo descaro que con el que sus manos escalaron hacia
mis pezones por sobre la ropa, mas se detuvieron justo debajo en las costillas,
ahogué un suspiro de frustración, me dolían de anticipación, me era imposible
no imaginarlo succionándolos. Arrastró la nariz por mi cuello, me aspiraba.
__Te amo cielito, me vuelvo loco de celos de pensarte con
admiradores, sin estar, sos lo más importante para mí.
Hablaba y me hacía cosquillas con el aliento en el
cuello, dejando regueros de besos húmedos.
__Dilo de nuevo.
__ ¿Qué?
__Lo que dijiste, que me amas, que soy lo más importante.
Guille reprimió la risa y elevó los ojos al cielo
disimulando fastidio, mas soltó una sonora carcajada antes de atraerme de nuevo
y apoderarse de mis labios. El beso se desató entre nosotros con la fuerza de
una explosión, en la que el fuego de uno era alimentado por el aire del otro,
acabé atrapado en sus fuertes brazos que se cerraban en torno sin medir ímpetu,
los dedos en los mechones de la nuca, salí al encuentro de la lengua que me
penetraba con una ansiedad agresiva, casi una válvula de escape a la angustia y
a la incertidumbre del porvenir separados. El deseo físico que se despertaba
era una sensación tan arrolladora que asombraba, como la primera vez en la
estancia, hambre sexual insaciable que nos convertía en bestias voraces desde
que los labios se rozaron, la energía que brotaba del contacto de las bocas se
irradiaba como las llamas de un incendio hacia el ombligo, el estómago, el
deseo, incluso los dedos de los pies reaccionaban y se encogían. Era sentirse
vivos y sobre todo, amados. Allí residía lo abrumadoramente poderoso, lo
inexplicable, ser amado, algo que habíamos aprendido juntos, que nos había
dejado perplejos desde el inicio.
__ ¿Sientes cuánto te amo? __le pregunté porque de pronto
me acució la necesidad de que fuese consciente de la magnificencia del amor,
deseaba hacerlo feliz.
__Sí, pero quiero oírlo igual.
__Tanto, Guille, no sabía que era capaz de amar tanto a
alguien.
__Amor… susurró Guille sobre mis labios, quebrado por la
emoción.
Quiero hablarte a besos, sin prisas, quiero deletrear en
tus labios cada sílaba, cada coma, quiero hablarte mientras te beso, mientras
compartimos suspiros, quiero besarte toda la vida, despacio, sin prisas.
Que tus labios endulcen mi tímida amargura, que tus
suspiros me alienten la boca, quiero besarte toda la vida mientras mis letras
se callan, que sólo la tinta de sal de mis labios pueda tocar tu dulzura
Quiero besarte toda la vida, dormir en tus labios,
hablarte despacio en tu boca, unirme al candor que desprendes mientras nuestras
lenguas se rozan.
Quiero que nuestros labios jamás se separen, que el
olvido se olvide y que tus sueños descansen en mi cuerpo abrazo, que tus ojos
de estrellas se cierren y que tu boca..., tu boca duerma en la mía.
__Es tu piel como un veneno cuando febril me
provoca consciente la voy libando,
con mis labios, con mi boca. Porque al irme envenenando al sorber ese elixir, me siento morir de amor, te adueñas de mi existir.
con mis labios, con mi boca. Porque al irme envenenando al sorber ese elixir, me siento morir de amor, te adueñas de mi existir.
Los venenos son amargos mas… no lo noto en tu piel,
tienes en cambio amor mío, exquisito gusto a miel. De tanto beber de ti,
inmune soy al veneno, es una obsesión amarte, gozarte, dejarte pleno. Serán
tus manos, mi vida, las que hurguen en mis rincones, las que me
causen sofocos, mil y una sensaciones como esta mañana.
Poseíste mi conciencia a través de tu mirada felina.
Me rindo a la clara evidencia tu hechizo, me domina. Me robaste el corazón, te
adueñaste de mi vida, eres el ser de mi razón, sanaste todas mis heridas.
Supiste solidificar mis días, liberándoles de su monotonía. Mi alma siempre
pedía que fueras su eterna compañía. Iluminaste mis amaneceres con tus ojos color café,
ellos tienen mágicos poderes, atrapan mis etéreos espacios.
ellos tienen mágicos poderes, atrapan mis etéreos espacios.
Monopolizaste mis sentidos con la viveza de tu ser.
Todos mis miedos se han ido para nunca más volver. Revoloteaste mis
mariposas, encendiste todos mis bríos. Eres ese amoroso y dichoso, me
enamoré de ti, “amor mío”.
Ahora me siento protegido, junto a tu incandescente
candor. Mi tiempo que dejó de ser aburrido, algo hay en ti, que me deja buen
sabor.
__Esos labios tuyos tan suaves y hermosos me atraen y más
cuando estás junto a mi lado me estremecen y me dejan desestabilizado como un
átomo ionizado. Esos labios tuyos junto a tu mágica mirada acaparan todos mis
sentimientos y mis pensamientos pero no me haces nada fácil alcanzar tu lujoso
mundo. Ya sé que tus labios son sacros y nadie se atreve a profanarlos a menos
que no sea yo tu amante.
Me siento en el
parque de los sueños donde te conocí, donde me enamoré de vos, donde te besé
por primera vez. Donde te descubro con mis manos, donde tu silencio es
una respuesta. Con un suspiro me dices que me amas, donde beso tus labios y con
mis manos recorro esos largos e indefinidos caminos de tu cuerpo. Donde todo es
principio y fin para nosotros, donde los prados son bellos. Las
flores son suaves como tu piel. Donde teníamos miedo de salir para no
despertar de esto que es un sueño, donde te pude amar, te pude
tener, te hice mío una y otra vez. Me preguntaste estamos en el cielo, no amor es el sitio donde un Amor es Eterno, nació hace eones, nos reencontramos en el parque de la Estancia.
tener, te hice mío una y otra vez. Me preguntaste estamos en el cielo, no amor es el sitio donde un Amor es Eterno, nació hace eones, nos reencontramos en el parque de la Estancia.
__ ¿Cuántos besos llevo impresos en mi cuerpo no tocado, y
mi piel has trastocado con tus labios y tu aliento? ¿Con cuántos "te
amo" cubres, la dulzura de mi sudor, y derramas en mi alma la
pasión que bien encubres? Soy el amor de tu vida, ufano me lo recuerdas, y
me pones tras las cuerdas, sueño de mi piel dormida.
Caballero de mis noches, compañero de mi día, amante de
mi abadía, que no sabe de reproches. Tus besos, tatuajes míos, tu luz, esfera
de calma, tu voz es bendita palma, ropaje sobre mis fríos. La pasión se
desborda por mis poros, quiero que me tatúes la piel, desnudos nuestros cuerpos
llenos de amor y placer. Quiero beber de tu esencia, ámame, muérdeme,
enloquéceme, entra en lo más profundo de mí ser, explora cada rincón de mi
cuerpo en cada pliegue.
Entregarme apasionado, en esta noche mis labios recorren lo sensible de ese bello cuerpo, respiré tu
esencia para entregarte el alma de la pureza.
Dos cuerpos que vibran en el éxtasis infinito, las
caricias así desnudan tus deseos más íntimos, te llevaré al universo del
placer.
__Somos amantes en el secreto de vivaces deseos, que
anidan en las locuras tentadas por el pecado. Somos fuego que abrasa la
soledad, aplacando la sed de amarnos. Emergen desde las ruinas las pasiones
perdidas. Somos las mentiras que conquistan verdades al borde de los extremos
inalcanzables de las dudas. Somos el silencio entre las grietas incurables que
se esconden en las impurezas de recuerdos. Placeres que gritan en el lenguaje
callado de noches, que suspiran en las caricias sin aliento que rozan
humedecidas el alma. Somos una historia oculta que habita en las intimidades de
nuestra aventura. Sentimos las garras justicieras del olvido en el ocaso de un
romance, que desgarra su existencia en el tiempo indomable de la eternidad. Somos
destellos de luces que se apagan si mostramos el rostro, en las auroras
inducidas por el sol. Somos amantes, en un camino sin salida, que nos
marca el destino...
Son bellos hasta
los sonidos que desplazan tus pasos al compás de tus caderas con garbo
y la sensualidad que te hace gala. Te vas contorneando con esa
música que trasmite feromonas en tu andar confundiendo el oxígeno que me
alimenta. Transparentas tu decir bajo la piel que no te cubre, te
desplazas dentro mi retina y sucumbo a tus encantos. ¿Dónde estabas,
dónde derramando afrodisíacos deseos?, provocando agradables espasmos
dentro de mí. Tu boca en la mía mientras encallamos.
¿Cuántas veces tendré que morderme la Lengua para no
delatar el amor que hierve en mi
corazón? Amparo en mis íntimos sueños, tejedor de hilos de plata del amor en mi pecho de Hombre. Mi sueño
único. Callo en silencio el amor que llevo dentro. El amor que hierve mi
sangre. El amor que deseo ofrecerte. Cuídate…
mis labios rozaron tus sueños. Callo y muerdo mi lengua por no perderte.
Por no tenerte.
__
Nos besamos en todas partes, apretando las pelvis, en el ascensor
completamente desbocados, las manos colándose a las cumbres, enredando dedos en el pelo, el
ruido del ascensor no acallaba los gemidos, las respiraciones, los sonidos
húmedos de las bocas, y en el vestíbulo continuaron las caricias cada vez más
caldeadas y atrevidas. Abrí a tientas la suite, serio y ceñudo como pocas
veces, nos arrastramos de la mano
besándonos, y al cerrar la puerta soltamos el aliento.
Cuando las miradas tropezaron el impacto fue mutuo,
permanecimos mudos, estudiándonos, nos
descalzamos y los dedos desnudos nos excitaron. Guille me atrajo hacia él,
éramos imanes, me besó en la boca, en el cuello, me devoró la oreja a
morisquitos, la pasión se volvía ávida, conociendo nuevas dimensiones uno en
manos del otro.
__Cielito, no sé qué decir para explicar lo bello que
sos, lo que siento porque seas mío. Me pondría a rugir y a golpearme el pecho,
te lo prometo.
__ ¿Cómo supiste que eras gay?
__Porque siempre me atrajo lo masculino, me gustaba mirar
cuerpos de hombres, en verdad, en dibujos, en fotos, pinturas, me deleitaban
sus músculos, sus formas, sus olores, nada de eso me atraía en las mujeres, que
veía bonitas como Camila, objetivamente, pero sin deseo.
__A mí sólo me pasó contigo, es extraño, no amé ni a
Dana, ni a Sarah, pero las deseé, eso es llamativo, me hace dudar de ser gay,
pero qué importa el rótulo, no sentí como tú, pero sé que te amo, que quiero
planear la vida contigo, y con los chicos.
¿Supiste apenas llegué con ella que te iba a amar?
__Tenía esperanzas, desde antes que viajara Sarah esa
vez, lo intuí, algo raro, y era tu llegada _admitió__. Dicen que es lo último
que se pierde, te amé ni bien verte, te pegué por bronca y frustración.
Guille me besaba el cuello, mientras su mano derecha ya
había dado cuenta de mi camisa, y masajeaba mi pezón con su pulgar, duro y
sensible. La entrepierna me pulsaba dolorosamente, pesada, húmeda, la sangre
bombeaba caliente, bullía y comencé a perderme en una nebulosa de calor, de
ardor y deseo.
__Pídeme que te haga el amor.
__Guille, por favor. Te necesito.
__Pídelo, es un antojo _exigió y me mordió el filo de la
mandíbula apretando el pezón, solté un gemido, me desmembré contra el cuerpo que
me sostenía.
__Guille, hazme el amor.
__Es lo que más deseo __dijo y me deslizó las manos por
los costados del cuerpo, hasta levantar lo que quedaba de ropa para quitarla.
Quedarme desnudo frente a él y convertirme en el objeto
de su mirada cargada de anhelo, me impulsó hacia delante, a la camisa que le levanté
sin preámbulos y que él terminó quitándose mientras yo le abría el pantalón y
me acuclillaba para bajarlo, despojándolo del bóxer, experimentando una
fascinación nueva en el instante en que su hombría se plantaba erecta frente a
mí, ese sentido de la posesión tan perfecto, sin dudas, sin fisuras, él hoy era
sólo mío. Lo tomé en la boca y enseguida fui recompensado por un gemido ronco
que soltó y por la intemperancia de sus manos que me aferraron la cabeza.
Olvidé el mundo al alzar la mirada y ser testigo de la escena más hermosa: la
expresión gozosa de Guille, tenía los ojos cerrados y la boca tensa y
entreabierta. Se movía hacia atrás y hacia delante muy lentamente como en
trance, o por temor a lastimarme la garganta, y lo amé aún más por eso. Ya no
cabía en mí tanto amor, me explotaba, me salía por los poros, por los ojos, por
la boca, por el sexo, por todas partes.
__Amorcito __la voz torturada de Guille me afectó__.
Basta. No quiero estallar así.
Caminé hacia atrás guiado por las manos de él en mis
caderas e hipnotizado por su expresión determinada, me hacía sentir delicado, a
su merced, deseándolo a rabiar, nada comparable a lo que pudiera haber conocido
con tantas mujeres, tardé un poco en darme cuenta a que jamás en los ojos de
mis amantes, había descubierto tanto amor, tanta dedicación ni promesas.
Me recostó en la cama, y se irguió sobre mí con las
rodillas pegadas a mis caderas.
__Guille _supliqué y extendí los brazos a contactar la
piel, pero me interceptó enlazando los dedos a los de él sin cambiar de
posición.
Se recostó sobre mí. Y comenzó a besarme, le rodeé el
cuello y le clavé los talones en las nalgas, más de inmediato me hizo rodar, lo
mismo me arqueé intentando rodearlo en jaula, me contorsioné, y en los pies
sentí los movimientos sinuosos con los que él me penetraba, lento, torturando
hasta que me sorprendió un empujón que me obligó a hundirme cuando lo tuve alojado muy profundo.
Gemí sin medida.
__Pedro. __Había exhalado mi nombre con un tinte de
emoción, de desconcierto, de asombro__. Amorcito, te amo.
Sus Embestidas fueron flameos y vaivenes adquiriendo
seguridad, me acompasé, rapidez y profundidad, los besos igualaban la pasión de
la penetración, sus manos conquistaban cada centímetro cuadrado de piel. Su
boca, sus dientes, su lengua, dejaban marcas, saliva, tatuaba su sello a fuego
lento, las pelvis chocaban, y cuando las
manos rozaron mi intimidad poco faltó para hacerme volar, grité, me agité bajo
su peso, detuvo el ímpetu de las arremetidas en el momento en que caminando la
cornisa, vimos el abismo sin conocer el final donde nos lanzaríamos, y transido
por una parálisis, echó la cabeza hacia atrás como yo, en una exclamación muda y
enajenada, … habíamos agonizado en el estallido al caer.
__!Por Dios, Pedro! __ masculló, y se mordió el labio
bajando los parpados.
Cuando recuperamos el aliento, recobramos los sentidos,
me depositó besos de labios estirados en una sonrisa dichosa mientras absorbía
mis respiros agitados.
__Te amo, Pedro.
Respiraba por la boca, que cerraba a intervalos para
tragar y humectar la garganta seca, apretaba los párpados y seguía aferrado a
mi cuerpo, con las manos en mi espalda, y yo con los pies clavados en sus
pantorrillas.
__Guille, nunca lo había sentido de este modo, ha sido alucinante
__dije y lo miré, lo encontré observándome, más bien devorándome__. Ha sido
alucinante__. Te amo tanto __pensé en voz alta, Guille sonrió. Rio, respiró por
la nariz, ocultó el rostro en mi nuca y se quedó en silencio, golpeándome la
piel del hombro con una respiración que lentamente se aquietaba.
__Estoy feliz __lo oí decir al cabo___, alucinado, pero
más feliz porque vos lo estás.
Así éramos, mirando al otro todo el tiempo, esperando el
consenso, cuidándolo, todo lo hacíamos de a dos.
__Feliz no empieza a describir cómo me siento. Mi vida
está patas arriba, casado con Sarah que es tu madre y yo sólo sé que soy feliz
porque te tengo dentro de mí ser.
Guille recomenzó con los besos en el rostro. Su alegría
me contagiaba, me hacía reír como con nadie, todo con él era nuevo, puro, sano,
genuino y sincero.
__Mi pintor loco. __Me quitó mechones de pelo rebelde que
bajaban por la frente y me acarició con la yema del índice cada lunar que fue
encontrando, luego los besó, empecé a buscar los suyos y a adorarlos.
__Amo este lunar, y éste. __los señalé y los besé, en el
filo de la mandíbula.
__Estoy lleno de lunares, tendrás más trabajo que yo con
el tatuaje.
__No me importa, es porque eres muy blanco. Tu blancura
es increíble. Me encanta.
__Y yo alucino con tu piel, amorcito. Es lo más suave que
hay, como un delicado lino italiano que puedo penetrar más allá con sólo
mirarla.
Buscó mi pecho desnudo y resucitó mis pezones al
acariciarlos con el mentón.
__Debes usar protector cada vez que vayamos a alguna
playa.
__ ¿Quieres cuidarme?
__Siempre.
__ ¿Siempre, Pedro? ¿Estás seguro?
__Sí, siempre.
__Ya vengo.
Salió caminando y admiré sus hombros anchos, sus brazos
largos, casi formaban un ángulo, los glúteos blancos, pequeños, musculosos,
cubiertos por una ligera capa de vello negro como él con besos había adorado
los míos, también le estudié la espalda, de hombros increíblemente rectos, casi
parecía formarse un ángulo de noventa grados entre los hombros y los brazos
largos. Era un espécimen que habría robado el aliento a cualquiera, a muchos
antes, pero era mío, hoy sólo mío.
Me quedé volando después de esa extasiaste desmaterialización
del uno, esa hermosa y sublime
conjunción de cuerpos, de almas, de energías. Sentí cómo mi ser se fusionaba
con su energía y juntos en una espiral ascendente luminosa, refulgente, nos diluíamos en el magma cósmico, energía
inmersa en energía, ambos flotábamos entre bellos parajes astrales, entre entes
y seres siderales con los que con sólo vernos sincronizamos en bellas
conversaciones naturales, flotando en medio de la nada, rozándonos con meteoros
y cometas, tocando luminosas estrellas, hasta que nos sentamos en el segundo
anillo de Saturno y desde allí miramos lo minúsculo del planeta tierra y sus microscópicos
habitantes, en su caos muy distante, así que volvimos a esta maravillosa
dimensión y al tiempo del sublime instante.
__
Lo vi hurgar entre la ropa, regresó a la cama con algo en
la mano, aparté las sábanas y se desplomó, desplazándome hacia la pared para
hacerle espacio. Nos ubicamos de costado, uno frente al otro, con las cabezas
elevadas sostenidas con las manos. Nos contemplamos en silencio, había tanta intensidad
en ese intercambio mudo como la había habido mientras lo acogía en mi interior
minutos antes.
De pronto Guille depositó una cajita roja sobre la
almohada, del tipo que contiene alhajas, anillos para mayor precisión, y me
reproché porque era yo el nuevo rico que debió comprarle un regalo. Mi corazón
se desbocó en el pecho. Alcé la mirada para cuestionarlo antes de hablar.
__Feliz cumpleaños, mi amor, amor de mi vida, me contó
Dana, y disimulamos todos, por eso también quise estar acá. Se inclinó y me
besó en los labios__. Ábrelo.
__ ¿Sabías de mi cumpleaños, y nadie dijo nada?
Asintió, levanté la tapita. No era un anillo, eran dos.
Simple cintillos de oro, me quedé mirándolo con los ojos escocidos, me devolvió
un gesto grave, medido, difícil de descifrar qué pensaba.
__ ¿Me apresuré comprándolos? Es demasiado pronto, sé que
estamos casados, pero siento que lo que sentimos es para siempre, y quiero que
aunque sólo los usemos cuando estemos juntos y en secreto, esta noche nos
comprometamos.
Nada me había preparado para sus palabras. Me sonaron a
la mejor música de Chopin, a un coro de ángeles, a helado de chocolate, a mi estupendo
amor, a Guillermo Graziani. Lo aferré por la nuca y lo aplasté contra mi boca
en un beso que pretendía ser rápido pero que él prolongó.
__Guille __ susurré __. ¿Tanto me amas?
__Tanto y más.
Le ofrecí la mano izquierda.
__Acepto, amor. Quiero que nos comprometamos en secreto y
para siempre.
Guillermo extrajo el anillo con reverencia y mientras lo
deslizaba en el anular, explicó.
__Tan simple y perfecto, y la medida exacta, pero debo
volver a llevarlos para que graben los nombres y la fecha de nuestro primer
beso. Hoy no hubo tiempo.
__El día de tu despedida de solteros, cuando rodamos en
el pasto en Pilar.
__ ¿Lo recordabas?
Extraje el otro anillo y lo coloqué en el anular
izquierdo de Guille y se lo besé, y le besé los nudillos de ambas manos
__Guille mi amor __elevé la mirada para tropezar con la
de él, prometo serte fiel, amarte siempre y ponerte siempre primero, y dar mi
vida por vos si es necesario.
Advertí la sorpresa que la promesa le causó. A mí, en
cambio, me había surgido naturalmente de lo profundo de mi ser. Era una de las
declaraciones más sinceras que había
expresado en mi vida.
__Pedro, amorcito, amor de mi vida, prometo amarte para
siempre y serte fiel, y protegerte con mi vida si es necesario, y cuidarte, y
hacerte feliz. Lo que más deseo es hacerte feliz.
Il Tuo Fidanzato.
__ ¿Il mío Fidanzato?
__Tu prometido, como no hablo francés, te lo digo en
italiano, porque ellos diferencian el novio, del prometido para casarse alguna
vez.
__Lo haces, me haces feliz, no sabes cuánto.
Sellaron los votos con un beso que se fue intensificando
hasta que Guillermo se ubicó sobre Pedro, pero en esta ocasión se tomó el
tiempo que había descartado en el frenesí de la primera, y apartó la sábana,
expuso a Pedro y lo adoró con los ojos que quemaban y con las manos que
marcaban, y después recorrió con los labios que tatuaban senderos y lo hizo
erizar con la respiración cálida que iba acelerándose en tanto la excitación
dominaba.
__ ¿Quién te habrá enseñado a amar de ser modo tan exquisito?
A diferencia de todas, sabes dónde tocarme, cómo y lo haces con dedicación,
como si sólo contase que yo desee.
__Vos me enseñaste, vos siempre me amaste antes como un
pianista, aprendiéndome para llevarme al lienzo, vos me enseñaste a amar
adorando, es la primera vez que asumo el control.
Ante esas palabras, otro orgasmo nos catapultó al
infinito.
__
Guillermo me acomodó contra su cuerpo, le observé el
perfil de nariz aguileña, las cejas pobladas, las pestañas que descansaban
sobre la piel lechosa, el pecho plano con pectorales marcados cubierto por vello
ralo, y le acaricié las tetillas, Guille emitió un sonido de complacencia sin
alzar los párpados. Me coloqué a horcajadas sobre sus muslos, y él los abrió
súbitamente, y le hurgué delicadamente el obligo, seguí la línea de pelo que desembocaba
en su umbría, dormida segundos atrás, completamente despierta ahora.
Me deslicé sobre él que se tumbó, me aferró desde atrás
por las piernas, y penetré a su ser moviéndome hacia delante y atrás, arriba y
abajo, la fricción bastó para alcanzar una oleada de placer que me arrojó en
lanza sobre la espalda que siguió mis movimientos, meciéndonos y empujando,
cada vez con mayor frenesí y rapidez hasta detenerme de golpe, hundir dolorosamente
los dedos en su carne, y emitir un clamor mientras gozábamos de un nuevo
orgasmo. Me detuve a admirarlo en el momento justo en el que parecía más
hermoso que nunca, con el ceño apretadísimo, los ojos bien cerrados y la boca
entreabierta por donde exhalaba aliento agitado.
Permanecimos así, yo a horcajadas de él, aún dentro de él,
mientras él me acariciaba llevando las manos hacia atrás, y yo estudiaba el
dedo con el anillo fascinado.
__Ese día en que Beto te dejó en mis brazos cambió mi
vida para siempre, ¿cómo no voy a recordarlo? Bueno no, cambió cuando llegué a
Pilar, o quizá cuando conocí a tu madre, porque a tu hermana no la seguiría
hasta Argentina.
Seguí contemplando los anillos de los dos, el de él en
esa mano sobria, de dedos largos.
__ ¿Crees que me desubiqué con los anillos? __aclaró
cuando lanzó una mirada inquisitiva y ceñuda___. Nunca tomo una decisión tan rápido,
menos en algo tan importante, de hecho Camila la tomó por mí.
__Me alegro que no hayas dudado conmigo. Me hace sentir
muy especial.
__Lo sos.
__Hiciste lo que sentías, lo que nació de tu corazón, y
eso es lo más importante para mí, me hiciste sentir tan amado. No creo que se
pueda ser más feliz de lo que soy ahora, con este anillo en la mano, estamos
comprometidos para siempre, no me lo creo __ me erguí todavía montado en él___.
Es tan genial, tan alucinante, no parece cierto.
__Guille sonreía y me apartaba el pelo de la cara.
__Es cierto. Sei el mio amato Fidanzato.
Nos perdimos en la mirada mientas me acunaba simplemente
y le acariciaba los pezones con los pulgares.
__Quiero hacerlo de nuevo __dijo Guille maravillado __.
No sé qué me pasa, no puedo parar.
Esta vez Guillermo cuando Pedro salió barrió a besos
desde la nuca a las nalgas, le acarició y se las besó con devoción y reverencia
antes de penetrarlo de nuevo. Excitados, felices, pletóricos de alegría.
Quiero morder tus gemidos, sintonizarme con tus latidos,
ambos del tiempo y del amor bandidos, enviar a lo sideral alaridos, sumergirme
en tus huertos floridos y extasiar todos tus sentidos. Explorar todos tus
espacios salinos y trastocar tus oquedades y arrancarte suspiros…
__También tengo un regalo, porque usé mi primer dinero.
Después de tantos años, he sentido lo que llaman amor,
esa borrachera de deseo, esa embriaguez que nunca se sacia y que se puede
transmitir al amante. Ser uno y distinto. Ser dos en uno fundidos sin separarse
en un éxtasis dichoso y antes desconocido.
Estiré la mano, y le di mi cajita.
__ ¿También son alianzas? __interrogó asustado.
__No, no lo pensé,
yo me quité la de Sarah, pero tú aún no.
Ábrelo.
__Con manos trémulas Guillermo abrió la cajita, y era una
cadena de oro, con un dije en forma de corazón, azul. Dos en verdad.
__ ¿Azul?
__Símbolo de la fidelidad, de mi amor eterno, también
debo llevarlo a grabar, también lo compré hoy, te amo para siempre Guille, y
quiero pasar el día contigo, empaparme de ti, que me dure el éxtasis hasta
reencontrarte.
Cuando la
madrugada se asomó, asombrada los halló despiertos, mas al vislumbrar el paso
de los primeros rayos del sol, recién
cambiaron de brazos, de Cupido, a… Morfeo.
CONTINUARÁ.
HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS. CUALQUIER PARECIDO CON
LA REALIDAD ES MERA COINCIDENCIA.
LENGUAJE ADULTO. ESCENAS EXPLÍCITAS.
IDEA ORIGINAL. ALBERTO MIGRÉ. 1973.
ResponderEliminarSILVIA...BELLISIMO.
Silvia C Mil gracias Eve feliz día.
ResponderEliminarAbel Hermoso de corazón gracias, Eve Monica Marzetti, saludos
ResponderEliminarGilda Me gusto ....bello .....Es todo !!!!
ResponderEliminarRoberto Gracias mi Adorable Eve!!!!!!!
ResponderEliminarLeonor Barreiro. Genial,... Gracias
ResponderEliminarAngel Seducción. hermoso...
ResponderEliminarMabel Qué hermosa. Muchas gracias querida Eve Monica Marzetti!!
ResponderEliminarSil Exelenteee!!!!!!
ResponderEliminarIsabel Bello
ResponderEliminarCarmen Y. Que Bonita, cómo me gusta. Un saludo
ResponderEliminarAlexis Que hermosa
ResponderEliminarErika el amor, súper hermoso estar enamorados
ResponderEliminarBellísimo Eve...Un amor así, tan perfecto, total y eterno es el sueño de todo ser humano...
ResponderEliminarES TAN BELLA Y SÉ QUE LA ESPERAN QUE LA DI ANTES DE SUR Y ÉL PORQUE VIENEN A CONECTARME FIBRA ÓPTICA Y POR AHÍ ES PEOR QUISE ASEGURARLA, ES ARTESANAL, SIEMPRE LO FUE, NI BIEN SAQUE LO ATRASADO SIGO EL ORDEN QUE APENAS ALTERÉ CON SORPRESIVO SUR ALICIA QUE TE GUSTA TAMBIÉN, SORPRESAS EN SUR. GRACIAS Y MI AMOR.
EliminarVeronica Lorena Piccinino hermosisimo Eve... ese amor es formidable y las escenas románticas un lujo leerlas... impresionante tu narrativa... Gracias
ResponderEliminarClaudia Patricia Aguirre
ResponderEliminarMe gusta
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Eli Perez Gracias hermosa por tu amistad me encantan tus publicaciones tus etiquetas...Espero q sean muchos años más...de Amistad Dios te bendiga...
ResponderEliminarmaravilloso Eve , ese amor tan unico que lo describis tan bellamente , gracias hermosa novela , siempre regreso mientras lo pueda hacer querida Eve ¡¡¡ veo que estas trabando mucho querida Eve , pero tambien es mi deseo que puedas descansar , se que esto es tu vida , pero quiero verte bien Eve , besitos y abrazos ¡¡¡¡
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