TERCERA PARTE.
CAPÍTULO CATORCE.
"Me
miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope,
nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre
sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se
encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la
lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene
con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu
pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como
si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de
fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un
breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es
bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento
temblar contra mí como una luna en el agua."
Julio
Cortázar.
Pero, ¿cómo explicarles a los chicos su
emoción, esa emoción que iba en aumento a medida que se acercaban a Bucarest?
Pienso ser el mejor embajador que haya habido
jamás. Antes de concluir mi mandato, Rumania y los Estados Unidos serán
estrechos aliados.
Al encenderse la señal de NO FUMAR, se
evaporaron los grandes sueños de estadista.
No puede ser que estemos aterrizando, pensó
consternado.
Si acabamos de despegar… ¿cómo puede ser tan
corto el viaje?
Sintió presión en los oídos cuando la
nave inició el descenso y segundos más tarde las ruedas rozaron la tierra.
“De veras está sucediendo, se maravilló. Pero
yo no soy embajador. Soy un farsante, y lo que voy a conseguir será que vayamos
a la guerra. Dios nos ampare. Nunca debimos haber salido de Kansas.
¿Estará Pedro esperándome?”
Rumania. Bucarest.
Rato antes…
__Alberto ve tú a recibirlo.
__Pedro, te corresponde ir.
__No puedo, ve tú, me quedaré preparando todo
acá, llévalo a la residencia, luego hacia acá, tendré a todo el personal
reunido.
__ Muero por conocer al resto del equipo, por
cierto, buena suerte, Pedro, con… el embajador.
__En la actualidad los grupos sociales se han convertido en una herramienta muy útil para mejorar las relaciones de pareja, para tener una mejor calidad de vida, para mejorar la autoestima y la relación con los demás.
Tal vez conoces a alguien que pertenece a algún grupo de autoayuda o que acuda con frecuencia a pláticas de relaciones humanas y autoestima y estarás de acuerdo conmigo que esas personas han mejorado su calidad de vida y llevan una mejor relación con su pareja o bien su autoestima se elevó tanto que aprendieron a amarse, a valorarse y entendieron que su dignidad está por encima de todo, no aceptaron un golpe más y tampoco aceptaron malos tratos psicológicos, y decidieron dar por terminada esa relación que a todas luces era nociva tanto para ella, sus hijos y su expareja.
En lo personal creo que muchas veces desarrollamos una zona de confort en nuestras relación con los demás
Estas zonas se forman cuando somos niños, si nuestros padres nos trataron con amor y respeto, entonces asociamos esta forma de trato con la sensación de ser amados.
Pero si como ocurre a muchos y con bastante frecuencia donde los padres son incapaces de tratarnos con amor y respeto, entonces aprendemos a sentirnos cómodos con estas carencias y nos volvemos fríos e inexpresivos y por consecuencia nuestras relaciones se vuelven un caos.
En cierta ocasión una mujer le decía a su esposo: ¿Que ya no me amas? Desde hace mucho tiempo ya no me dices mi amor, mi cielo, ya no me abrazas, ni me besas y ya no digamos que hagamos el amor, eso ya ni hablar, siempre estás cansado, el esposo le respondió a su esposa: Mujer si no te quisiera no estaría contigo.
Dile a tu esposo tantas veces puedas los... te amo, te quiero, dale un beso y un abrazo todas las veces que puedas.
En un esfuerzo por satisfacer nuestras necesidades por sentirnos cómodos y justificados, asociamos el hecho de ser tratados mal con la sensación de ser amados y así se convierte en nuestra línea de conducta.
De la forma en que vivimos nuestra niñez, ya de adultos esa conducta se transforma en el comportamiento que inconscientemente adoptamos en todas nuestras relaciones.
El trabajo más importante lo hacemos nosotros mismos, desear que nuestra pareja cambie es una forma sutil de manipulación.
Demostrar un poder sobre él o ella, es una actitud que le hacemos ver a nuestra pareja que somos mejores que ella.
Permite que la persona que amas sea como ella desea ser.
Aliéntala a ser mejor cada día, a que se supere y se descubra a sí misma, que se ame, se acepte en lo positivo y nunca acepte sus debilidades teniendo eso como excusa para no ser mejor cada día, que se valore.
El que cada día te superes, te aceptes y te valores, más pronto de lo que te imaginas te convertirá en una mujer plena, realizada y entenderás lo hermoso que es ser la protagonista de tu propia película llamada vida-
Ámate, valórate, respeta tu cuerpo y tu espíritu y nunca, pero nunca de los nunca permitas un solo golpe, malos tratos psicológicos en nombre del amor
Recuerda que quien te ama no te arrancará lágrimas, te arrancará muchas sonrisas. Es así Gabriela, no te conformes con menos.
__Te
lo agradezco, Pedro, será un placer trabajar contigo cerca, en verdad no es
fácil entablar amistades acá. ¿Lo de tu separación es definitiva entonces?
__Absolutamente,
tengo muy buena relación con Camila por el papá, por mis hijos, pero solo es
eso, la mamá de mis hijos. Bueno, a trabajar, que en minutos y una hora estará
acá… El embajador.
__
¡Qué nervios! Espero caerle bien.
__Eres
un encanto, te garantizo que te lo ganarás, y eso que es bastante difícil.
Rumania.
A treinta y siete kilómetros del centro de
Bucarest se halla el moderno aeropuerto de Otopeni, construido para facilitar
el tránsito de viajeros provenientes de los países comunistas cercanos, así
como también de los que, en menor número, llegan anualmente a Rumania como
turistas desde Occidente.
Dentro
de la terminal se desplazaban soldados de uniforme marrón, con rifles y
pistolas. Se advertía un aire frío, desolado, que nada tenía que ver con la
gélida temperatura, inconscientemente, Fabián y Malena se acercaron a su padre.
“De
modo que ellos también lo notan”, pensó Guillermo.
En
ese momento se aproximaron dos hombres. Uno era
afable, con aspecto de norteamericano. El otro era algo mayor y vestía
un deslucido traje que parecía ser de confección extranjera.
El
norteamericano se presentó.
__Bienvenido,
señor embajador a Rumania, soy Santiago Malvárez, su encargado de relaciones
públicas, este es Tudo Costa, jefe de protocolo de Rumania.
__Es
un placer tener con nosotros a usted con sus hijos, señor. Bienvenido a nuestro
país.
__En
cierto sentido también será el nuestro. Multumesc domjnule __expresó Guillermo.
__Habla
rumano __se emocionó Costa__ Cu piâcere.
__Apenas
unas palabras __ se apresuró Guillermo a aclarar.
Fabián
dijo entonces:
__Bunâdimineata.
__Y Guillermo se sintió tan orgulloso que casi se pone a llorar. Acto seguido
les presentó a sus hijos.
__Su
auto lo espera señor embajador __le informó Malvárez. El coronel Marini se
halla afuera.
Guillermo
se estremeció.
“El
coronel Marini, Alberto Marini y Pedro Beggio”. Se preguntó si Pedro estaría
también allí, pero no quiso averiguarlo.
Había
una larga cola para pasar por aduana, pero ellos a los pocos minutos habían salido
ya del edificio.
Afuera
los aguardaban también periodistas y fotógrafos, pero en vez de ser ruidosos,
estos eran ordenados y correctos. Al terminar con su labor saludaron a
Guillermo y se marcharon todos juntos.
El
coronel Alberto Marini de uniforme los esperaba en la calle.
__Buenos
días, señor embajador __dijo tendiéndole la mano__. ¿Tuvo un buen viaje?
__Sí,
gracias.
__Pedro
Beggio quería venir a recibirlo, pero le surgió un asunto importante.
Guillermo
se preguntó si tal asunto importante tendría pelo rubio o castaño.
Una
larga limusina negra, con la bandera norteamericana en el paragolpes delantero
derecho, estacionó junto a ellos. El chofer, un hombre de rostro alegre y de
riguroso uniforme, se bajó para abrirles la puerta.
__Este
es Florián.
El
chofer sonrió y exhibió unos dientes blanquísimos.
__Bienvenido,
señor embajador, señor Fabián, señorita Malena. Será un placer servirlos.
__Muchas
gracias _repuso Guillermo.
__Florián
quedará a disposición durante las veinticuatro horas del día. Pensé que
convenía ir ahora directamente a la residencia para que pueda descansar un
poco. Tal vez más tarde quiera dar una vuelta en auto por la ciudad. Por la
mañana Florián lo llevará a la embajada.
__Me
parece bien, gracias.
Una
vez más, Guillermo se preguntó dónde estaría Pedro Beggio.
__
Recostado
en su sillón del despacho de la embajada, Pedro no podía dejar de pensar en el
embajador, en cómo podría disimular y acallar sus emociones y su sentir.
Esta
noche no soñé contigo amor, el insomnio se apoderó de mi ser, de mi pensar y
razón, solo en ti pensaba, hoy no pude amarte vida mía, esta noche no tuve ese sueño
donde tú lo eres todo para mi ser, mis brazos te pertenecen y desnudos de ti
sentían frio, la noche me robó tus labios, tus besos, su negrura me abría camino
al infierno en mi desvelo, donde la pasión y el deseo se habían quedado fuera
de mi ser y conciencia, yo quería soñarte , quería darle vida a esa locura de
amor, donde en mis sueños me perteneces, donde las primaveras nacen con su
fantasía desnudando nuestras almas en la entrega enamorada de un beso lento,
hoy, no pude soñarte amor mío.
Esta noche no has sido mi sueño, no he tenido tus ojos, ni tus dedos recorriendo mi espalda, esta noche amor, moría en tu olvido, mis besos se quedaban en mis labios vacíos de ti, esta noche, no sonaban para mi melodías de amor, solo una sombra de duda y celos invadían mi mente, celos del sol y ese cielo que cubría tu espacio donde yo no hallaba cobijo para amarte.
Esta noche no te tuve amor, vuelve a mí. Te quiero para mí.
Esta noche no has sido mi sueño, no he tenido tus ojos, ni tus dedos recorriendo mi espalda, esta noche amor, moría en tu olvido, mis besos se quedaban en mis labios vacíos de ti, esta noche, no sonaban para mi melodías de amor, solo una sombra de duda y celos invadían mi mente, celos del sol y ese cielo que cubría tu espacio donde yo no hallaba cobijo para amarte.
Esta noche no te tuve amor, vuelve a mí. Te quiero para mí.
Todo
el día pensando en ti, siento cosquillas cuando estoy por verte. Ven, quédate junto a mí, cuántas cosas por descubrir.
En ti todo lo encuentro, tú eres mi historia. Ven aquí, aunque sea un instante dime todo lo que quieras.
Lo que no sabes que con solo verte y escucharte enloqueces cada rincón de mi cuerpo, tus huellas, tus besos aun están en mi piel.
Perdóname si pienso en ti, entiéndeme llegas desde muy temprano a mi pensamiento, tu recuerdo dura todo el día y me habla de ti. Perdóname sin ti no sé vivir.
Recuerda lo mucho que siento por ti; te amo. Bésame, quiero verme en tus ojos, abrázame, quiero sentir tan solo el calor tus brazos; te necesito.
Tan solo lo único que sé, que soy tuyo. Te protegeré con mi amor, te llevo en mi corazón.
Busco tus caricias que ocupan mi cuerpo por todos lados, no hay palabras, solo ardiente pasión que escapa de nuestros cuerpos.
Gota a gota el deseo se fue apagando después de la locura de poseerte, de tenerte, de quitarte las ganas, y estallamos como dinamita.
En ti todo lo encuentro, tú eres mi historia. Ven aquí, aunque sea un instante dime todo lo que quieras.
Lo que no sabes que con solo verte y escucharte enloqueces cada rincón de mi cuerpo, tus huellas, tus besos aun están en mi piel.
Perdóname si pienso en ti, entiéndeme llegas desde muy temprano a mi pensamiento, tu recuerdo dura todo el día y me habla de ti. Perdóname sin ti no sé vivir.
Recuerda lo mucho que siento por ti; te amo. Bésame, quiero verme en tus ojos, abrázame, quiero sentir tan solo el calor tus brazos; te necesito.
Tan solo lo único que sé, que soy tuyo. Te protegeré con mi amor, te llevo en mi corazón.
Busco tus caricias que ocupan mi cuerpo por todos lados, no hay palabras, solo ardiente pasión que escapa de nuestros cuerpos.
Gota a gota el deseo se fue apagando después de la locura de poseerte, de tenerte, de quitarte las ganas, y estallamos como dinamita.
__Gaby,
me muero, ¿quién es ese bombón que acabo de ver? _dijo Sonia, la mejor amiga de
Gabriela.
__
El nuevo subjefe de misión, Pedro Beggio, es divino, ¿verdad? Y lo mejor de
todo, acaba de divorciarse.
__Me
muero, por favor, no puede estar más bueno, se parte.
__Sonia,
que yo lo vi primero, esperemos a conocer al embajador y al resto de la gente.
__Ya,
estoy que no llego a mañana, amiga. Dicen que el embajador es un churro de
morir, y otro que viene con ellos, un militar,
pero yo me quedaría con Pedro.
__Pedro
es mío. Y ya calla, los micrófonos, amiga.
El
recorrido entre el aeropuerto y la ciudad fue fascinante. Avanzaron por una
ruta de doble mano muy transitada por autos y camiones, pero cada tantos
kilómetros el tránsito se atascaba debido al paso de pequeños carros gitanos. A
ambos lados de la calzada había modernas fábricas junto a vetustas chozas.
Pasaron frente a innumerables granjas y vieron a las mujeres que trabajaban en
los campos, con la cabeza envuelta en coloridos pañuelos.
Dejaron
atrás Banesa. El aeropuerto para vuelos de cabotaje, y un tramo más adelante
repararon en un edificio gris y azul de dos pisos de aspecto tétrico.
__ ¿Qué
es eso? _preguntó Guillermo.
Florián
hizo una mueca.
__La
prisión Ivan Stelian. Allí es donde envían a todos los que disienten del
régimen.
En
un momento dado Alberto señaló un botón rojo que había junto a la puerta del
auto.
__Esto
es un dispositivo de seguridad _explicó __. Si alguna vez se halla en una
situación difícil, si es atacado por terroristas o por quien fuere, basta con
que oprima este botón para activar un transmisor de radio que se vigila desde
la embajada, y al mismo tiempo, se enciende una luz roja en el techo del auto.
Así, en pocos minutos podemos determinar su posición.
__Espero
no tener que usarlo nunca _deseó Guillermo fervientemente.
__Lo
mismo digo, señor.
El
centro de la ciudad era precioso. Había parques, fuentes y monumentos por donde
se mirara. Guillermo recordó que su abuelo solía comentar: “Bucarest es un
París en miniatura, Guille. Hasta hay una réplica de la Torre Eiffel.” Y allí
estaba, en efecto. Lo emocionaba hallarse en la tierra de sus antepasados.
Las
calles estaban atestadas de gente, de ómnibus y tranvías. La limusina se abría
camino a bocinazos que obligaban a correrse a los peatones. El coche se internó
en una calle angosta y arbolada.
__La
residencia queda un poco más adelante __le informó el coronel__ .Y aunque le
parezca irónico, la calle lleva el nombre de un general ruso.
La
residencia del embajador era una bellísima casa antigua de tres pisos, rodeada
de jardines enormes que hicieron sonreír a Guillermo.
El
personal se había formado afuera de la casa para recibir al nuevo embajador.
Cuando Guillermo bajó del coche, Malvárez se los presentó uno a uno.
Guillermo
fue recorriendo la hilera mientras recibía amables saludos.
“Dios
mío, ¿qué voy a hacer con tanta gente? En casa me bastaba con que Julieta viniera
tres veces por semana para cocinar y limpiar, y yo mismo me encargaba del
jardín”.
__Es
un gran honor conocerlo, señor embajador __manifestó Sonia que acababa de
llegar, la secretaria de asuntos sociales.
Tuvo
la sensación de que todos lo miraban
fijo, como si esperaran que él dijese algo. Guillermo respiró hondo.
__Bunâ
ziua. Multumesc. Un vorbesc… __Se le borró de la mente todo lo que había
aprendido del rumano, por lo que se quedó entonces mirándolos desolado.
El
mayordomo dio un paso al frente e hizo una reverencia.
__Todos
hablamos inglés y español, señor, le damos la bienvenida y con sumo placer atenderemos
sus necesidades.
Guillermo
dejó escapar un suspiro de alivio.
__Muchas
gracias.
Adentro
de la casa había champagne helado sobre una mesa en la que resaltaban
tentadores manjares.
__!Qué
aspecto delicioso! _exclamó, Guillermo. Al ver que todos lo observaban, dudó si
debería convidarlos.
“¿Se
acostumbraba ofrecer algo a los empleados?”
No
quería empezar cometiendo un error.
“¿Se
enteraron de lo que hizo el nuevo embajador norteamericano? Invitó a los
sirvientes a comer con él y quedaron tan horrorizados que se vieron obligados a
renunciar.
¿Te
contaron lo que hizo el nuevo embajador de Los Estados Unidos? Se puso con sus
hijos a engullir delante de los famélicos sirvientes y no les ofreció siquiera
un bocado.
¡Diantres
¿a dónde estás, Pedro Beggio?!”
__Pensándolo
bien _se rectificó__, por ahora no tengo hambre. Más tarde a lo mejor como algo
con los chicos.
__Venga
que le muestro la casa __propuso Malvárez, y todos los siguieron.
Era
una bella mansión de estilo anticuado. En la planta baja había un hall de
entrada, una biblioteca con gran cantidad de volúmenes, una sala de música, un
living, un comedor inmenso con cocina y despensa contiguas. Desde el comedor se
salía a una terraza que ocupaba todo el frente del edificio y daba a un amplio
parque.
Más
hacia el fondo de la casa había una piscina cubierta, con sauna y vestuarios
que hizo sonreír a los chicos.
__!tenemos
piscina propia! __se maravilló Fabián __¿Puedo ir a nadar, papá?
__Después,
hijito. Primero tenemos que instalarnos.
Lo
más llamativo de la planta baja era el salón de baile, una enorme habitación
que daba a los jardines. Relucientes apliques de cristal de Baccarat salpicaban
las paredes de bello empapelado.
__Aquí
se realizan las recepciones _dijo Santiago Malvárez ___. Mire esto. __Accionó un control en la pared.
Se oyó un ruido mecánico y el techo comenzó a separarse en el medio dejando una
abertura por la cual podía verse el cielo. __También se lo puede operar en
forma manual.
__!Eh,
qué genial! _se entusiasmó Fabián.
__Lamentablemente
le dicen el “capricho del embajador” __se disculpó Malvárez__. En verano no se
lo puede tener abierto por el calor, y en invierno hace demasiado frío. Por eso
eso se lo usa en abril y setiembre.
__Sigue
pareciéndome genial _afirmó Fabián.
Al notar que ya empezaba a entrar el aire
frío, Malvárez apretó el botón para cerrar el techo.
__Vengan
que les muestro las dependencias.
Salieron
y llegaron a un amplio hall central con dos dormitorios separados por un baño.
Al final del pasillo se hallaba el dormitorio principal con antecámara, cuarto
de vestir y baño completo. Había una terraza en el techo a la cual se accedía
por una escalera separada.
__En
el segundo piso están las dependencias de servicio _explicó Malvárez__, el
lavadero y la baulera. En el subsuelo, una bodega y el comedor de los
sirvientes.
Los
chicos corrían de una habitación a otra olvidados de todo protocolo.
__ ¿Cuál
es mi cuarto? _preguntó Malena.
__Eso
lo decidirás con Fabián, hija.
__Quédate
con este, que tiene muchos volados como les gusta a las chicas _dijo el
aludido.
El
dormitorio principal era muy lindo. Tenía una cama amplia de dos plazas con
acolchado de plumas, dos sillones frente a un hogar, una reposera, una cómoda
con espejo antiguo, un baño lujoso y una vista espléndida de los jardines.
Cuca
el ama de llaves, y Carmen una de las
empleadas ya habían desempacado las valijas de Guillermo. Sobre la cama estaba
la valija diplomática que el embajador Viner le había pedido que llevara a
Rumania.
Mañana
tengo que llevarla a la embajada. Se acercó para tomarla en sus manos y
advirtió que los lacres rojos habían sido cortados y vueltos a cerrar con
torpeza.
“¿Cuándo
ocurrió esto? ¿En el aeropuerto? ¿Aquí? ¿Y quién lo hizo?”
Sonia
entró en la habitación.
__ ¿Está
todo de su agrado señor? __preguntó.
__Sí.
Nunca tuve una secretaria de asuntos sociales. Y no sé muy bien cuál es su
función.
_Yo
me ocupo de que su vida se desarrolle sin tropiezos.
Anoto
sus compromisos sociales. Almuerzos, cenas, eventos y demás reuniones. También
me encargo del funcionamiento de la casa. Con tanto personal de servicio,
siempre surgen problemas.
__Sí,
claro.
__ ¿Necesita
algo en especial para esta tarde, señor embajador?
“Que
me diga quién rompió el lacre”, pensó Guillermo.
__No,
gracias. Quiero descansar un rato. __De pronto se sentía agotado.
La
mayor parte de la noche se quedó desvelado, presa de una profunda sensación de
soledad mezclada con una emoción enorme ante el hecho de iniciar su trabajo, y
un anhelo inexplicable que por desgracia llevaba el rostro de Pedro Beggio.
“Ahora
todo depende de mí, querida Silvina, ya no tengo en quién apoyarme. Cómo me gustaría que estuvieses
conmigo, que me dijeras que no debo temer. Que no fracasaré. No debo fracasar. El beso que nos prometimos navega en los
mares de mis ojos, perdido entre las huellas de la orilla, te siento tan lejos,
me siento tan perdido, te fuiste sin irte, y
mi vida muere despacio, inerte, susurrando tu nombre entre los charcos
por si te encuentro dormida.
Rebusco en mis soledades por si dejaste algún suspiro perdido.
A lo lejos te confundes con la bruma perdida, mis ojos ya rotos vuelan cargados de verbos que caen al abismo desierto secreto de vida.
Desolación sin nombre en la sequedad de la piedra que aprisiona mi alma. Estallidos nocturnos en mi mente por el saber de tu ida, tiento cuanto amo, a ti te encuentro fría,
¿Por qué marcharon tus labios encarnados de mi boca?
¿Por qué ese adiós en ese día tan eclesiástico, por qué rompiste todo lo amado sin ni mirarme a los ojos? ¿Por qué te fuiste sin irte si me dejaste contra la ceniza y la muerte?, Sil, sé que te asesinaron, y soy un cobarde que prefirió salir de casa para que los chicos no se enteren ni sufran ya más, aunque siento que te traiciono, que dejo tu muerte impune, pero sé que no sabré nada y que haga lo que haga no te recuperaremos. Antes sin ti tenía vida entera, mas hoy sin tus labios tengo media vida y la otra yace entre los oteros de mis lágrimas. Triste la luna marcha delante de mi vida, pues errante vuelvo si tus labios ya no me aman.
Maltrecha vida mía donde mi cuerpo perdido aclama al ocaso del llanto, pues yo ya sin tus labios muero”.
Rebusco en mis soledades por si dejaste algún suspiro perdido.
A lo lejos te confundes con la bruma perdida, mis ojos ya rotos vuelan cargados de verbos que caen al abismo desierto secreto de vida.
Desolación sin nombre en la sequedad de la piedra que aprisiona mi alma. Estallidos nocturnos en mi mente por el saber de tu ida, tiento cuanto amo, a ti te encuentro fría,
¿Por qué marcharon tus labios encarnados de mi boca?
¿Por qué ese adiós en ese día tan eclesiástico, por qué rompiste todo lo amado sin ni mirarme a los ojos? ¿Por qué te fuiste sin irte si me dejaste contra la ceniza y la muerte?, Sil, sé que te asesinaron, y soy un cobarde que prefirió salir de casa para que los chicos no se enteren ni sufran ya más, aunque siento que te traiciono, que dejo tu muerte impune, pero sé que no sabré nada y que haga lo que haga no te recuperaremos. Antes sin ti tenía vida entera, mas hoy sin tus labios tengo media vida y la otra yace entre los oteros de mis lágrimas. Triste la luna marcha delante de mi vida, pues errante vuelvo si tus labios ya no me aman.
Maltrecha vida mía donde mi cuerpo perdido aclama al ocaso del llanto, pues yo ya sin tus labios muero”.
Cuando
por fin exhausto pudo dormirse, no soñó con Silvina sino con Pedro.
“__Ven
amor, acércate de una vez, este es el momento, no tengas miedo, deja que nos
amarre el destino, déjate amar por este perverso clandestino. Agarra en un puño
tus sueños, en el otro tus deseos. Ven a cumplirlos conmigo. Dame tu piel cual
suspiro que derrama tu cuerpo sobre el mío. Este momento cambiará tus angustias, asesinará tus culpas. Ven,
escala el laberinto de mi cuerpo, descifra todos los secretos, deja que nos
consuma el sentimiento. Entrega tu piel a mi piel, entrega tu mirada al deseo.
Juega conmigo, sé quién quieras, como quieras, aquí no hay complejos. Anda
amor, empecemos que también el fuego me está consumiendo y yo sé que tú también estás ardiendo. Anda,
acércate, comencemos con el calor de un abrazo y la magia de un dulce y apasionado beso. Su presencia te da vida, su olor se adueñó de ti; es la feromona de
una fiera en celo. Eso desborda tu dulce embeleso, deseando aquel cuello que a gritos te
hurga, te impele urgiendo apoderarte de
mí y disfrutarme como a fruto prohibido.
__
Pedro, no podemos, pero déjame apartar de tu vida lo obvio y conocido. Déjame
regalarte lo imprevisible. En un mundo que hace culto a la razón. Déjame
regalarte sentimientos que donde todo cambia, ellos perduran. Déjame decirte
que nosotros cambiaremos. Pero eso no es algo que nos deba dar temor. Por el
contrario, la energía de nuestro cambio nos mantendrá juntos para terminar. Déjame decirte que la
aventura será vernos dentro de muchos años
siendo otros, pero siempre los mismos.
Cuando
estemos juntos, solo te pido una cosa, ¡que no cambies nunca por favor! Yo
estaré en casa, esperándote para abrazarte y besarte el alma cada vez que decidas trepar a la libertad.
Es
que me he vuelto adicto a tus cambios y a tus misterios, porque me vengo
escapando de la tediosa rutina que quiere sofocar mis sueños. Te pido que no me
escondas tus enojos y que puedas mirarme de frente al hablar cuando algo no te convence o te hace daño,
porque yo haré lo mismo con vos, no quiero ser tu enemigo ni seguir fingiendo
que no siento nada o que te odio, precioso arrogante.
Tendré
días de inmensa fragilidad, donde no suelo herir, pero necesito apartarme en
silencio para sanarme. Pero estoy seguro de que no habrá una crisis tan grande
que no pueda resolverse entre tus brazos fuertes. Y si algún día descubro o me
sorprende una vieja herida que quiera asomar, solo bésame, bésame el alma una y
mil veces y así prometo curarme.
Solo
te pido que no dejes de ser ese (uno en un millón), ese ser único que pudo
atravesar mi gran armadura. Esa que usé para apartarme de los simples. Cuando
murió Silvina nunca pensé en volver a sentir algo, menos por un hombre, y me
envolví en mil corazas, pero apenas una mirada tuya y las desmoronaste.
Al
momento que el sueño cambió, luego despertó recordando esas palabras: “Odio a
los aficionados. ¿Por qué no se vuelve a su casa?”
__
La
embajada norteamericana en Bucarest en Soseaua kiseleff 21, es un edificio de dos pisos estilo
semigótico, con un portón de hierro al
frente que vigila un oficial de uniforme gris y gorra roja. Un segundo custodio
permanece dentro de una casilla, a un costado del portón. Hay una puerta
cochera por donde pasan los vehículos y una escalinata de mármol por la que se
accede al interior.
Ya
adentro, se advierte un hall con el piso de mármol, dos televisores de circuito
cerrado sobre un escritorio atendido por un infante de marina, y un hogar
frente al cual hay un chispero que tiene pintado un dragón que echa humo por la
boca. En los pasillos hay retratos colgados de ex presidentes. Una escalera de
caracol sube a la planta alta, donde hay oficinas y un salón de reuniones.
Un
infante de marina estaba esperando a Guillermo.
__Buenos
días señor embajador. Soy el sargento Hughes, me dicen Gunny,
__Buenos
días, Gunny.
__Están
aguardándolo en su despacho. Venga que lo acompaño.
__Gracias.
Subió
con él hasta un hall de recepción donde había una mujer sentada en un
escritorio, pelirroja y esbelta, le
pareció encantadora.
__Buenos
días, señor embajador _dijo la chica de unos treinta años y se puso de pie__.
Soy Gabriela Soria, su secretaria.
__Mucho
gusto en conocerla, Gabriela.
__Lamento
decirle que una multitud lo aguarda ahí adentro.
__No
los hagamos esperar, entonces.
__
__Beto,
¿cómo fue ayer?
__Bien,
aunque creo que te buscó sin decir nada por todos lados.
__ Y
yo quiero decirle mil cosas a escondidas. Mi siempre en la consciencia de mi
ser, de mi ejemplo a tomar, de mi ícono a seguir.
Decirle que toda una vida sin usted sería toda una muerte, es lo que le intenté decir desde mi casa. Sería morir desnudándome hasta renacer en la desnudez de su piel. Ahogarme en sus besos, hundirme en su boca, resucitarme en sus labios, nombrándome en su garganta para nacer en sus suspiros.
Decirle que toda una vida sin usted sería toda una muerte, es lo que le intenté decir desde mi casa. Sería morir desnudándome hasta renacer en la desnudez de su piel. Ahogarme en sus besos, hundirme en su boca, resucitarme en sus labios, nombrándome en su garganta para nacer en sus suspiros.
__Pedro,
te va a oír toda Rumania, no solo él.
__Perecer en sus caricias, renacer entre sus dedos, atrapado entre sus manos perdido entre sus huellas. Elevarme por su pecho, escalar sus aureolas, saciarme de sus cumbres, caer libremente enterrándome en su ombligo. Sería morir, morir en los cementerios de sus aposentos, nacer en la tumba de su lecho reescribiendo el epitafio de su vida.
Enterrarme entre sus piernas, encerrándome entre sus entradas, para lubricarme de sus cavidades, naciendo en sus glándulas, expirar en sus orgasmos, nacer en el siguiente, y morir en mil más de los simples orgasmos del silencio de sus miradas. Nacer y renacer, morir y resucitar entre sus piernas alzadas sujetando mi caderas, entre sus montes, por fuera y por dentro por sus interiores y sus afueras, y derramado, llorar, como los niños lloran sintiéndose amados, amarlo como un hombre y contemplarlo como los sabios, buscando sus preguntas hallando sus respuestas, cual científico matemático y metafísico desvelan sus misterios acertando sus acertijos, desesperarme de usted y como los ancianos inaugurarlo de nuevo, inventando otras formas de amarlo, de distintos besos caricias confidentes, extrañas, miradas desprecintadas, te quiero no conjugados en ningún tiempo pasado ni en este continuo presente. Y de nuevo, enterrarme entre sus entrañas, ser su simiente dividirme en su vientre, nacer en su placer de siempre que solo Dios siente, y en un orgasmo, más grande que la materia, que el cosmos y el vacío, más dilatado que el tiempo y la luz, que todas las estrellas y soles para nacer toda una vida con usted, haciendo toda una muerte conmigo.
Eso, es amarlo con todo el desprecio de la existencia, escupir a la vida, llorarle a los cielos, gritarle a Dios, silenciar al diablo, para amarlo toda una vida sin usted toda una muerte teniéndolo. No hay tiempo, mi señor, ni distancia ni espacio ni vacío ni materia, ni universo ni infinito ni eternidad que pueda medir lo que lo amaría vivo, o la desearía muerto en la distancia de la muerte.
__Perecer en sus caricias, renacer entre sus dedos, atrapado entre sus manos perdido entre sus huellas. Elevarme por su pecho, escalar sus aureolas, saciarme de sus cumbres, caer libremente enterrándome en su ombligo. Sería morir, morir en los cementerios de sus aposentos, nacer en la tumba de su lecho reescribiendo el epitafio de su vida.
Enterrarme entre sus piernas, encerrándome entre sus entradas, para lubricarme de sus cavidades, naciendo en sus glándulas, expirar en sus orgasmos, nacer en el siguiente, y morir en mil más de los simples orgasmos del silencio de sus miradas. Nacer y renacer, morir y resucitar entre sus piernas alzadas sujetando mi caderas, entre sus montes, por fuera y por dentro por sus interiores y sus afueras, y derramado, llorar, como los niños lloran sintiéndose amados, amarlo como un hombre y contemplarlo como los sabios, buscando sus preguntas hallando sus respuestas, cual científico matemático y metafísico desvelan sus misterios acertando sus acertijos, desesperarme de usted y como los ancianos inaugurarlo de nuevo, inventando otras formas de amarlo, de distintos besos caricias confidentes, extrañas, miradas desprecintadas, te quiero no conjugados en ningún tiempo pasado ni en este continuo presente. Y de nuevo, enterrarme entre sus entrañas, ser su simiente dividirme en su vientre, nacer en su placer de siempre que solo Dios siente, y en un orgasmo, más grande que la materia, que el cosmos y el vacío, más dilatado que el tiempo y la luz, que todas las estrellas y soles para nacer toda una vida con usted, haciendo toda una muerte conmigo.
Eso, es amarlo con todo el desprecio de la existencia, escupir a la vida, llorarle a los cielos, gritarle a Dios, silenciar al diablo, para amarlo toda una vida sin usted toda una muerte teniéndolo. No hay tiempo, mi señor, ni distancia ni espacio ni vacío ni materia, ni universo ni infinito ni eternidad que pueda medir lo que lo amaría vivo, o la desearía muerto en la distancia de la muerte.
No
te preocupes que nadie entendería de qué
habló, se lo he escrito, pienso dejarle una carta anónima por día, nunca sabrá
que soy yo, y tú no lo dirás.
__Yo
me quedé embelesado con el rojo de
afuera __dijo Alberto en susurros.
__Cuenta
conmigo, es un amor, y ya he hablado con ella.
___
Gaby
abrió la puerta y Guillermo entró en su oficina. Había nueve personas ubicadas
alrededor de una amplia mesa y todas se levantaron al verlo entrar. Guillermo
vio esos ojos fijos en su persona y experimentó una sensación de animosidad
casi palpable.
Al
primero que vio fue a Pedro Beggio, que le trajo a la memoria el sueño de la
noche anterior en sus dos facetas sin saber cuál sería la real.
__Señor
embajador, permítame presentarle a su equipo, a los jefes de departamento
__dijo Pedro con una seriedad que a Guillermo le asombró__. Esta es Valeria Janklow, encargada de asuntos
administrativos. Miguel Mendoza, encargado de asuntos políticos. Nancy
hatfield, encargada de asuntos económicos, Diego Velásquez, jefe administrativo. Marcial Thompson, de
agricultura. A Santiago Malvárez, de relaciones públicas ya lo conoce. Eladio
Gómez, de comercio y el
coronel Marini, a quien también conoce.
__Tomen
asiento, por favor. __Se encaminó hasta la cabecera de la mesa y pasó revista
al grupo con la mirada. “La hostilidad viene de todas las edades, formas y
tamaños”, pensó.
Nancy
Hatfield tenía un cuerpo voluptuoso y rostro interesante, Valeria, la más joven
del equipo, lucía el típico aspecto e indumentaria de las universidades
norteamericanas más tradicionales, los demás eran mayores, delgados, más o
menos.
__Va
a llevarme cierto tiempo distinguir bien a cada uno.
Pedro
decía en ese instante.
__Todos
somos y estamos a su disposición, o sea que en cualquier momento puede
reemplazar a cualquiera de nosotros.
“Eso
es mentira, pensó Guillermo, furioso. A usted, precioso arrogante, no pude ni
podré reemplazarlo nunca.”
La
reunión duró quince minutos, luego de los cuales hubo una conversación general
intrascendente.
Por
último avisó, Pedro.
__Gabriela
irá llamándolos individualmente en el curso del día para reunirse en forma
individual con el embajador. Gracias.
A
Guillermo no le hizo gracia que él tomara las riendas de la situación. Cuando
quedaron a solas, le preguntó:
__
¿Cuál es el miembro de la CIA asignado a la embajada? Pedro lo miró un
instante.
__
¿Por qué no viene conmigo un instante?
Salió
del despacho, Guillermo vaciló un momento, pero luego lo siguió por un largo
pasillo de oficinas que asemejaban una conejera. Pedro llegó hasta una puerta.
El soldado que estaba de custodia se
hizo a un lado cuando Pedro la abrió y le hizo señas a Guillermo para que
entrara.
Guillermo
paseó la mirada a su alrededor. El ambiente era una extraña combinación de
metal y vidrio que cubría el piso, las paredes y el techo.
Pedro
cerró la pesada puerta.
__Esto
es lo que llamamos la Burbuja. En todas las embajadas de países comunistas hay
una de estas habitaciones, que son imposibles de controlar con dispositivos de
escucha.
Vio
la mirada de incredulidad en el rostro masculino.
__Señor,
no solo hay micrófonos ocultos en la embajada, sino que también puede apostar hasta
su último dólar a que los hay en su residencia. Y si una noche sale a cenar,
los habrá escondidos en su mesa. Recuerde que está en territorio enemigo.
Guillermo
se dejó caer en un sillón.
__ ¿Y
eso cómo se supera? Me refiero al hecho
de no poder hablar libremente.
__Nosotros
realizamos un barrido electrónico todas las mañanas. Encontramos los micrófonos
y los retiramos. Luego ellos los reemplazan por otros, que también sacamos al
día siguiente.
__ ¿Por
qué permitimos que trabajen rumanos en la embajada?
__Estamos
en cancha ajena. Ellos juegan de locales, Guillermo, y nosotros aceptamos sus
reglas porque de lo contrario se acaba el partido. Es esta habitación no pueden
instalar micrófonos porque la puerta está custodiada por infantes de marina
durante las veinticuatro horas del día. Ahora, bien… ¿qué pregunta deseaba
hacerme?
__Quería
saber quién era el hombre de la CIA.
__Miguel
Ángel Mendoza, el encargado de asuntos políticos.
Trató
de recordar qué aspecto tenía. Canoso y de mediana edad, ojos claros. No, ese
era el de agricultura. Miguel… Ah, el de
mediana edad, peso y ojos claros, de expresión siniestra. ¿O acaso eso lo
pensaba ahora que sabía que era un agente de la CIA?
__ ¿Es
el único que pertenece a la CIA?
__Sí.
“¿Hubo
una cierta vacilación en su voz?
Pedro
miró la hora.
__Dentro
de una hora debe presentar sus credenciales. Florián estará esperándolo afuera.
Lleve su carta credencial. El original se lo da al presidente Arismendi. Y la
copia la guarda en su caja fuerte.
Graziani,
puedes confiar en mí, no me temas.
Lo
que sucedió cuando te emborrachaste, fue real, me enamoré de ti, no volveré a
decírtelo porque ni siquiera sé si eres gay, si yo lo soy, pero de hecho te amo
y te deseo a rabiar, mas no temas que podré separar las cosas y no deseo perjudicarte.
__!Pedro!
__Me
encantaría poder no sentir nada
cuando se miran tus ojos y los míos
pero admiran todo y solo
conspiran porque desean estar con tu mirada. No sentir tu boca orando su
sonrisa ni el aliento de los besos que respira pero mi ánima por su amor
suspira y en su cuerpo improvisa.
No
sentir las palabras que me hablas o todo el calor que regalas, quiero salir
pero esa llama que acorrala y no logro huir de tu infierno diablo. No sentir la
partitura de tus labios, si suenan a envenenadas sinfonías, que de esas caricias tú componías canciones
que llenaste de adverbios. Pero si tan solo pudiera, no sentiría, podría prometer que te olvidaría y en el nido
de tu pecho ni anidaría, sería ave y partiría a otras tierras. Para olvidar por
completo esa vida que tiene tu pecado en la desdicha de ese querer que tanto
encapricha cuando mi cariño busca y convida.
__Pedro,
yo…
__No
busco que me ames, sería imposible acá, en nuestro país, solo decirte lo que
siento para que no me temas. El brillo de mis ojos que desbordan alegría, entusiasmo y
felicidad cuando se encuentran con los tuyos, te amo y se refleja en mi
mirada, en mi sonrisa y en mi corazón.
Desbordo
alegría solo con pensarte pero cuando estás a mi lado mi corazón va a mil, deseo acariciarte,
besarte, desenvolver tu cuerpo como si de un regalo se tratase, de un regalo que me ofrece la vida y solo deseo mimarte, llenarte de
caricias pero lo que más deseo es hacerte el amor. Caricias cargadas de sensualidad que recorran tu cuerpo, desnudarte para que así, piel con piel, nuestros sentidos, den rienda suelta a nuestra imaginación, quiero sentir cómo se acelera tu corazón, tu respiración
agitada será nuestra melodía, sentir
cómo se eriza tu piel, quiero tus hirvientes
jugos de pasión de los mayores
deseos de amar y ser amado durante toda
la noche en una entrega total de lucha, pasión y amor. Terminar fundidos en un beso
y una noche juntos enredados en un abrazo. Sé que es imposible, pero cuídate de Arismendi.
y una noche juntos enredados en un abrazo. Sé que es imposible, pero cuídate de Arismendi.
Amor
callado, que deambulas triste por la
sinuosidad de mi cuerpo. Que desnudo de
sonidos, sin rimas ni música, como notas
solitarias, naufragas los pentagramas.
Melancolías
desgarran el silencio, que como arcano guarda mi secreto. El chasquido de
acaramelados besos le despiertan el sonido al viento y nuestros cuerpos en
simbiosis armónicas al placer se entregan, olvidándose del tiempo que acompaña.
Y calladamente... en místico embeleso,
un sortilegio de pasión me envuelve, me arrulla, me amuralla. Me
enloquece y nuestros cuerpos, en simbiosis armónicas en líricas pasionales,
orquestan su drama. En murmullos rutilantes,
sé que debo verte como mi jefe porque a la sazón del amor, tú, no me
convienes ni me retribuirás.
¿Quién puede jugarle a otro su destino? Si para amarte he de ocultar este amor me envolveré en mantillas negras.
¿Quién puede jugarle a otro su destino? Si para amarte he de ocultar este amor me envolveré en mantillas negras.
__Pedro,
yo amé a mi esposa durante todo el tiempo que estuvo, mas algo me sucede con
vos, te odio y te amo, confío y huyo, en todo caso sabes que en este cargo y
sitio, no podemos amarnos.
__Transitaré
en solitario el camino del destierro
cantando relicarios de verbos grabados al viento. Pero dejarte de amar
nunca lo conseguiré. Prefiero callar mi
amor y navegar en un mar con tormentas, me subiré en caracolas rotas, o por su
uso desgastadas. Acallaré este amor y no me traiciones. Me morderé hasta que sangren mis labios por no pronunciar al mundo ¡cuánto te amo!
No tengas miedo de amarme, no tengas miedo de seducirme, de llevarme a tus brazos, de sentir el fuego de tu cuerpo. Tampoco yo nunca antes amé a un hombre, solo tú me atrapaste desde que te vi. Soy veneno en tu sangre, soy tuyo en cuerpo, alma y mente, tu amor mío, lo sabes. Quiero hacerte el amor, quiero tu pasión, quiero saber el sabor de tu piel, me encantaría besarte cada parte de tu cuerpo, estremecerte tan lentamente que suspires, que tu alma tiemble de frío o sudor de tu cuerpo, que en este silencio de la noche solo nuestros gemidos se escuchen. Susúrrame al oído mi nombre, eres ese veneno en la sangre, que entra en mis venas tan suavemente y me mata lentamente. Entreguemos nuestros cuerpos. Entrelacemos corazón, alma, piel, labios, seamos amantes cálidos y ardientes
con ganas de amarse, tan profundamente, tan apasionadamente que todo acá parezca fácil, mas si no puedes amarme al menos no me odies, pase lo que pase, veas lo que fuere, y no te enamores de otro.
No tengas miedo de entregarte, yo te llevaré poco a poco al cielo. Abrázame, siénteme, tómame. Acaríciame, ámame, quiéreme. Sedúceme, tócame, hazme tuyo.
Hazme tu fantasía de placer, no tengas miedo amor. Eres mi sueño de amor. No te resistas a estas inmensas ganas de tu piel, de tu cuerpo, de tu boca, de tu esencia de hombre varonil, solo amor hagamos el amor, tan rico, tan suave, tan excitante como casi lo hiciste con ese desconocido, sé que te estabas descubriendo deseando a un hombre, aunque hayas amado a tu esposa. Deja que quede huella en nosotros, por si algún día ya no estamos juntos, que sea ese recuerdo que nos pertenezca por siempre. Te deseo tanto. Solo no tengas miedo.
No tengas miedo de amarme, no tengas miedo de seducirme, de llevarme a tus brazos, de sentir el fuego de tu cuerpo. Tampoco yo nunca antes amé a un hombre, solo tú me atrapaste desde que te vi. Soy veneno en tu sangre, soy tuyo en cuerpo, alma y mente, tu amor mío, lo sabes. Quiero hacerte el amor, quiero tu pasión, quiero saber el sabor de tu piel, me encantaría besarte cada parte de tu cuerpo, estremecerte tan lentamente que suspires, que tu alma tiemble de frío o sudor de tu cuerpo, que en este silencio de la noche solo nuestros gemidos se escuchen. Susúrrame al oído mi nombre, eres ese veneno en la sangre, que entra en mis venas tan suavemente y me mata lentamente. Entreguemos nuestros cuerpos. Entrelacemos corazón, alma, piel, labios, seamos amantes cálidos y ardientes
con ganas de amarse, tan profundamente, tan apasionadamente que todo acá parezca fácil, mas si no puedes amarme al menos no me odies, pase lo que pase, veas lo que fuere, y no te enamores de otro.
No tengas miedo de entregarte, yo te llevaré poco a poco al cielo. Abrázame, siénteme, tómame. Acaríciame, ámame, quiéreme. Sedúceme, tócame, hazme tuyo.
Hazme tu fantasía de placer, no tengas miedo amor. Eres mi sueño de amor. No te resistas a estas inmensas ganas de tu piel, de tu cuerpo, de tu boca, de tu esencia de hombre varonil, solo amor hagamos el amor, tan rico, tan suave, tan excitante como casi lo hiciste con ese desconocido, sé que te estabas descubriendo deseando a un hombre, aunque hayas amado a tu esposa. Deja que quede huella en nosotros, por si algún día ya no estamos juntos, que sea ese recuerdo que nos pertenezca por siempre. Te deseo tanto. Solo no tengas miedo.
Cuando
en mi soledad te siento ausente: tú estás en el plácido canto de las aves que
cada mañana pronuncian tu nombre. En los rayos de sol que saludan mi ventana recordando
el dulce candor de tus besos que en mi boca cantan con algarabía. En el despertar
de la flor con cánticos cuando perlas de rocío adornan y visten sus pétalos de
diamantes cristalinos.
En
el mar pintando tu sensual silueta con pinceladas de arena nacarada reflejando
la beldad de tu alma en tu piel prendida. En el viento mensajero del tiempo con
el eco susurrante de un te amo en los auriculares del vitral de mi alcoba. En
la lluvia que me cobija de nostalgia con el cielo conjugando mis cuitas cuando
tus caricias están ausentes.
En
las hojas del otoño gris que suspirantes en el viento, pintadas de nostalgia
caen anhelantes que tu primavera de verde pinten. Cuando mis labios reclaman
tus besos, cuando mi piel reclama tus manos, cuando nuestro amor se cubre de
sueños. Tú estás amor desde el principio hasta el final de mi aturdido tránsito
y estarás en la eternidad conmigo porque este amor es inmortal pase lo que pase.
__
¿Por qué repites a cada rato pase lo que pase?
__Porque…
este sitio es complejo, estos cargos lo son, pero en los peores momentos, nunca
olvides que… te amo.
Nos
llenamos de silencios, que no nos dejan enseñar lo que pensamos. Callamos cada
uno de esos secretos que nos queman el alma, lloramos cuando nadie nos ve, y
regalamos sin querer una sonrisa.... Todos llevamos nuestros temores y miedos
escondidos, huellas del pasado que aún no han cicatrizado. Que han quedado
marcadas. Heridas que no nos dejan amar ni ser amados. Miedos de volver a caer
en la trampa del engaño y sufrir. Miedo de volver a sentir. Temor a entregarnos,
de darnos por entero, de no recibir nada
a cambio, solo más dolor y lloro.
Miedo de que esas cicatrices se vuelvan a abrir y no nos dejen de nuevo vivir o soñar que se puede ser feliz. Que se puede sonreír sin esconder el pasado, sin esconder los temores, sin callar lo que sentimos. Porque estamos aquí y no nos hemos ido. Mientras hay vida hay esperanza. Mientras hay luz hay claridad y un día los sueños serán realidad. Si se fue un amor otro volverá con más fuerza y verdad y te amará para toda tu eternidad.
Miedo de que esas cicatrices se vuelvan a abrir y no nos dejen de nuevo vivir o soñar que se puede ser feliz. Que se puede sonreír sin esconder el pasado, sin esconder los temores, sin callar lo que sentimos. Porque estamos aquí y no nos hemos ido. Mientras hay vida hay esperanza. Mientras hay luz hay claridad y un día los sueños serán realidad. Si se fue un amor otro volverá con más fuerza y verdad y te amará para toda tu eternidad.
__ Sin
que me sientas o me veas, me tienes como siempre a ti aferrado, Pedro, no puedo
negarlo… te siento ser toda mi vida… mas
yo de ti me siento ausente gran parte de tus días, esperando con desesperadas
ansias y hasta resignación que me hagas saber que me piensas, que me extrañas,
que aun me amas.
De
repente parece me ves, me sientes, me quieres vivir… la luz ha cambiado y por
un momento como tu reflejo en el cristal aparezco en tus pensamientos… parece
me extrañas, logras acercarme a ti, me hablas palabras que me vuelven real, por
un momento no soy tan solo ilusión.
Me
hablas de amor… y la luz llena mi vida, primavera eterna florecida me llena el
alma, siento soy parte de tu espacio, de tu aire, de tu vida… palabras me
faltan para decirte que por ti desespero, que por ti espero contando minutos,
horas y días, que por tu amor me desangro por dentro, este sentir me atravesó,
aún no logro entender cómo, cuándo si estaba llorando a Silvina y te odiaba.
Pero
la luz vuelve a cambiar… el cristal transparente, puro ahora te deja ver a
través de él y me pierdes… me hablas de que pronto no estarás solo, volverá, tu
atención le dedicarás… me juras me amas y a ella mucho le quieres… mas es quien se lleva tus besos, tus
abrazos, el roce de tu piel, tu voz diciendo te amo al terminar de amarse.
Ella
tiene todo de ti y tú todo lo que el pasado te dejó.
Yo tan solo una sombra en el cristal que un cambio de luz en tu vida espera… un cambio de luz que me ilusiona con saber que me sientes y te siento mío, que tengo tu todo amor aunque sin poder vivirlo en tu realidad plenamente.
Yo tan solo una sombra en el cristal que un cambio de luz en tu vida espera… un cambio de luz que me ilusiona con saber que me sientes y te siento mío, que tengo tu todo amor aunque sin poder vivirlo en tu realidad plenamente.
__Camila,
ya no me tiene, ni siquiera casi la pienso, no es ella mi amor.
__
Ahora te diré cuánto te amo por única vez, luego lo negaré a muerte Beggio,
pero no serán solo palabras, te lo demostraré con el corazón en la mano y
expresaré todo mi sentir, aquel que haga vibrar tu corazón, el que me hace
tener los sueños muy bellos y que al despertar me haga volar al mismo paraíso
siempre serás tú.
Un te amo, enamorado y apasionado, aquel que te lleve hasta el fin del universo, un amor del que seas prisionero de las cadenas del amor, tú tan enamorado como la belleza de las rosas en los valles mágicos, tan dulce como tu alma bondadosa y una mirada mágica que me tiene hechizado, así como lo eres tú, vos.
Tus ojos son como dos luceros en el firmamento los cuales dan luz a mi alma enamorada y cautivo de tu sonrisa, tu belleza es igual e enigmática, jamás dejo de admirar tu belleza, siento que al fin he conocido un ángel disfrazado, y desde aquel momento me siento libre y feliz, tú le has dado un giro a mi vida, vives dentro de mi alma y solo anhelo ofrecerte lo más bello de mi ser, este amor que solo será para ti.
Un te amo, enamorado y apasionado, aquel que te lleve hasta el fin del universo, un amor del que seas prisionero de las cadenas del amor, tú tan enamorado como la belleza de las rosas en los valles mágicos, tan dulce como tu alma bondadosa y una mirada mágica que me tiene hechizado, así como lo eres tú, vos.
Tus ojos son como dos luceros en el firmamento los cuales dan luz a mi alma enamorada y cautivo de tu sonrisa, tu belleza es igual e enigmática, jamás dejo de admirar tu belleza, siento que al fin he conocido un ángel disfrazado, y desde aquel momento me siento libre y feliz, tú le has dado un giro a mi vida, vives dentro de mi alma y solo anhelo ofrecerte lo más bello de mi ser, este amor que solo será para ti.
__Llegaste
a mi vida como lo prohibido y te recibí como si ya te hubiese conocido, como las olas de un mar embravecido, recibí
tu amor, recibí tu cariño. Sentí mariposas, mil aves de distinto color, junto a ti sentí el amor... El amor eterno, ese que nunca sentí apareció contigo y se apoderó de mí. Y pasarán mil años y el mundo dejará de
existir pero yo siempre estaré pensando
en ti... y yo bien sé que tú no te olvidarás de mí. Me encantaría no poder sentir
nada cuando tus ojos y los míos se
miran pero todo admiran y solo conspiran
porque desean estar con tu mirada. No sentir tu boca orando su sonrisa ni el aliento
de los besos que respira pero mi ánima por su amor suspira y en su cuerpo los
verbos improvisan.
No sentir
las palabras que me habla o todo el calor que tu candor regala, quiero salir
pero esa llama acorrala y no logro huir de tu infierno diablo. No sentir la
partitura de tus labios si suenan a envenenadas sinfonías, de esas caricias tú componías canciones que
llenaste de adverbios. Pero si tan solo pudiera, no sentiría, podría prometer que de ti me olvidaría y en el
nido de tu pecho ni anidaría, sería ave
y a otras tierras partiría. Para olvidar por completo esa vida que tiene tu
pecado en la desdicha de ese querer que tanto encapricha cuando mi cariño busca
y convida.
En
tu boca roja y fresca te beso y mi sed no se apaga, que en cada beso quisiera…
beberme entera tu alma. Me he enamorado de ti y es enfermedad tan mala, que ni
la muerte la sana, ¡bien lo saben los que se aman! Te protejo. “Cuando el sueño
te muerde los párpados, sientes cómo el cuerpo te abandona y las esclusas de
los ojos se te cierran, y duermes, como un hada con alas nuevas, en la palma de
mi mano. El acto se plasma en la mañana y el amanecer del rocío, ante mis ojos su color me invita a degustar mis
labios húmedos de la mañana para sentir el licor sagrado de tu fuente que se
derrama en gotas de tu savia mientras contemplo el amanecer glorioso. Disfrutas
de la resaca madrugada del festín que disfruté bajo mis sábanas.
__Duermes
firmemente en cada poro de mi piel, despiertas en mis labios al sol y al viento
una y otra vez, tengo tu perfume y el delicado aroma de tu desnudez, aprisionas
mis ganas hasta no poder y deleitas mi alma como solo tú lo sabes hacer, te amo
con delirio y ansias, me asombra lo dulce de tus labios escarlata, me reflejo y
me miró en tus ojos de amor como lo que más deseas mi lindo amor, en mi corazón
has hecho tu espacio, tu lugar y la
manera de hacerme soñar, te amo como tú me amas, con esas ganas de no perder,
amo tus palabras y la seda de tu piel, bésame con pasión y locura porque tú
llenas las venas de mi cuerpo y de mi corazón con tu inigualable amor, como
marea y tormenta, como calma y bonanza así eres en mi vida, apasionado, no das tu sol, das tu alma con todo su explorador, no das
amor das la vida en cada beso mi amor . Yo te adoro a cada minuto que vivo a
cada latido de mi corazón has hecho de mis besos una colmena de miel y de amor,
siempre te amaré, siempre mi bello amor, eres la rosa delicada que en el jardín
brota brillante con la alegría de ser la que engalana mi vida y mi corazón.
Te amo y te amaré por siempre más que a mi mujer, desde que me rescataste de ese hombre eres el que mueve mi alma y mi razón, hombre de mis sueños y de mi ilusión, Pedro.
Te amo y te amaré por siempre más que a mi mujer, desde que me rescataste de ese hombre eres el que mueve mi alma y mi razón, hombre de mis sueños y de mi ilusión, Pedro.
Cómo
duele el peso del alma, cargando dolores en medio del pecho; lleva a cuestas
esta tristeza que me embarga, acarrea lágrimas sembrando desiertos. Son las
palabras dichas que arrancan la calma, arrasan con todo el sentimiento, de un
amor inmenso que abandona mi alma, dejando en su lugar heridas y desasosiego. ¿En
qué instante la oscuridad se apoderó de mis mañanas?
¿Cuándo atracó en mí tanto desvelo?
¿Por qué me abandonan besos y la sonrisa se vuelve esclava, pendiente de un corazón roto pidiendo el destierro? Un peso inmensurablemente mis huesos se instala, arañando células y esparciendo centelleos; el cuerpo si ya apenas se arrastra, por cada rincón de este vasto universo. Finalmente el ejército de estas lágrimas, ganan territorio y poseen mis cimientos; y es que a veces lo que ya está roto no se repara, cuando solo resta la ausencia y mora el silencio, así me sentí al morir mi esposa, Pedro, y solo a poco reconocerte esto empezó a diluirse.
¿Cuándo atracó en mí tanto desvelo?
¿Por qué me abandonan besos y la sonrisa se vuelve esclava, pendiente de un corazón roto pidiendo el destierro? Un peso inmensurablemente mis huesos se instala, arañando células y esparciendo centelleos; el cuerpo si ya apenas se arrastra, por cada rincón de este vasto universo. Finalmente el ejército de estas lágrimas, ganan territorio y poseen mis cimientos; y es que a veces lo que ya está roto no se repara, cuando solo resta la ausencia y mora el silencio, así me sentí al morir mi esposa, Pedro, y solo a poco reconocerte esto empezó a diluirse.
__Lo
sé, algo símil me sucede, pero por ahora es solo un sentir oculto. Y así será
mientras no salgamos de acá, ¿sabes que no podemos amarnos libremente, verdad?
Es
imposible amor mío no soñarte en mis brazos, soñarte viajando de mi mano, se me
hace imposible no soñarte cuando te beso los labios en mis sueños, y en ese
viaje que en soledad emprendo hacia tus ojos encontrarme de nuevo en ese lugar
de luz donde ya estuve regalándote mi amor, mil motivos tengo para amarte, eres
y serás mi primavera eterna donde desembarco en mis noches para dejarte mis
verbos, y hoy como otra noche cualquiera haré de mis sueños tu vivir, donde con
risas pienso llenarte el alma.
A veces y sin poder remediarlo me cuelo por las rendijas de tu vida, quiero dejarte el sabor de mis besos, y quiero abrazarte en los silencios, donde las soledades mueren, donde allí entre hilos de plata encontrarás mi amor. Es imposible amor no soñarte.
A veces y sin poder remediarlo me cuelo por las rendijas de tu vida, quiero dejarte el sabor de mis besos, y quiero abrazarte en los silencios, donde las soledades mueren, donde allí entre hilos de plata encontrarás mi amor. Es imposible amor no soñarte.
__Me
cansé de mi vida vacía, de olvidar que yo existo, de ser flor mustia marchita, de morir como muere un te quiero. Caminar por caminos audaces, de él te quiero incongruente de mis sueños perdidos, de luchar contra
dragones de fuego, que me hieren
con sus lanzas ardientes rompiendo la
armadura oxidada de olvido. Me cansé de perderme un instante y regresar solitario e inerte. Quiero renacer del olvido, recordar que estoy vivo, me salvé de una muerte inminente. Renacer rompiendo
paradigmas, persiguiendo mis sueños
perdidos, despidiendo y mandando al
destierro el olvido. De ilusiones
encadenadas, de soñar en mi cama vacía, de dormir solitario en mis sábanas frías. Se engalana mi alma de sueños,
se atavía la luna plateada y mi piel
cual rosa florecida siente caricias de gotas de
rocío como pétalos sedosos y
música armoniosa de piano. Extrañar ese dulce y suave cariño que me entienda y me lleve de viaje a
un mundo feliz con mi equipaje de sueños
dulces y fugaces. Renacer de caricias de amor, de dulzura,
pasión y ternura con mi piel perfumada de
aroma de flores, un enjambre de besos de dulces y deseados sabores. Amar en versos y prosas sintiendo que me abrazan, que acarician mis cabellos con amor y ternura.
En cada molécula de mi cuerpo escalar la cima del deseo percibiendo en mi piel mil sinfonías, sintiendo en el estío mi cuerpo empapado de rocío.
aroma de flores, un enjambre de besos de dulces y deseados sabores. Amar en versos y prosas sintiendo que me abrazan, que acarician mis cabellos con amor y ternura.
En cada molécula de mi cuerpo escalar la cima del deseo percibiendo en mi piel mil sinfonías, sintiendo en el estío mi cuerpo empapado de rocío.
Sé
que no podemos, que es imposible, que podríamos morir, solo quisiera amarte una vez, y cuando todo termine poder
huir juntos donde lo nuestro… no sea prohibido. ¿Lo harías?
__Todo,
por ti, todo.
__
Guillermo
se puso la máscara cuando Gaby se asomó para avisar que lo esperaba el chofer.
__Eso
ya lo sé, señor Beggio.
__Como
él pidió que lleve también a los niños, ya envié un coche para que los busque.
Sin
consultarme.
_Gracias.
La
sede del gobierno rumano es un edificio de sórdida apariencia erigido en el
centro de Bucarest. Está protegido por sus muros de acero, y guardias armados
en el frente. En la entrada propia del edificio había más custodios. Una
persona acompañó a Guillermo y los chicos a la planta alta.
El
presidente rumano los recibió en una habitación larga y rectangular del primer
piso. Arismendi tenía un aspecto atlético, delgado, imponente. Era moreno, de
rasgos aguileños y pelo negro oscuro. Tenía una de las narices más autoritarias
que Guillermo hubiese visto jamás. Sus ojos despedían un brillo hipnotizante
como su espléndida sonrisa.
__Excelencia,
permítame presentarle al señor embajador de Los Estados Unidos.
El
Presidente tomó la mano de Guillermo y la mantuvo en la suya más de lo
necesario barriéndolo con un intensa mirada.
__
Es usted más atractivo incluso de lo que sale en las fotos.
__Gracias.
Su Excelencia. Esta es mi hija Malena, y mi hijo Fabián.
__Muy
lindos hijos. __Arismendi poco disimulaba su
atracción por Guillermo, le dirigió una mirada expectante. __ ¿No tiene
algo para mí?
Casi
se olvidaba. Abrió enseguida su billetera de cuero y sacó la carta credencial
firmada por el presidente Labrapoulus.
Juan
Arismendi le echó un vistazo indiferente.
__Gracias.
La acepto en nombre del gobierno rumano. Desde ahora es usted oficialmente el
embajador de los Estados Unidos acreditado en mi país. __Esbozó una ancha
sonrisa. __He organizado una recepción en su honor esta noche. Allí tendrá
oportunidad de conocer a algunos de los nuestros que trabajarán con usted.
__Muy
amable.
Él volvió
a apoderarse de su mano.
__Aquí
solemos decir que un embajador llega envuelto en lágrimas porque sabe que habrá
de pasar varios años en un lugar desconocido, alejado de sus amigos, pero
cuando se marcha también suele llorar
porque debe dejar a los nuevos amigos que se hizo en un país del que se encariñó.
Espero que usted llegue a amar nuestra nación, embajador. __Le acarició la
mano.
__Así
será. __Piensa que soy solo un tipo guapo, se dijo Guillermo, con pesar. Habrá
que hacerlo cambiar de opinión.
Envió
a los chicos a la residencia y pasó el resto del día en la embajada, reunido
con los jefes de departamento y sección. El coronel Marini estuvo presente como
agregado militar.
Estaban
sentados ante una larga mesa. Contra las paredes del fondo una decena de
funcionarios menores de los diversos sectores.
El
encargado de asuntos comerciales, Gómez, un hombre bastante antipático, hizo
uno de los comentarios en el que lanzó cifras y datos. Guillermo recorrió la
concurrencia con la mirada, y pensó: Tendré que recordar el nombre de cada uno.
Luego
le tocó el turno al encargado de temas agropecuarios. Marcial.
__El
ministro rumano de asuntos agrarios enfrenta problemas peores de lo que
reconoce, este año van a tener una cosecha desastrosa y nosotros no podemos permitir
que se vayan a pique.
Nancy
Hatfield, encargada de temas económicos, protestó:
__Bastante
ayuda les hemos dado. Rumania ya opera bajo un tratado SGP. __Miró
disimuladamente a Guillermo.
Estoy
me lo hace adrede para ponerme en ridículo.
Nancy
continuó, en un tono condescendiente.
__SGO
significa…
__Un
sistema generalizado de preferencias __la interrumpió Guillermo__. Consideramos
a Rumania un país en vías de desarrollo para que puedan obtener ventajas en el
campo de la importación y exportación.
A Nancy le cambió la cara.
__En
efecto –admitió__. Ya estamos regalándoles…
El encargado de asuntos comerciales no la dejó
terminar.
__No
estamos regalando nada. Lo único que hacemos es tratar de mantener la tienda
abierta para poder venir a comprar. Ellos necesitan más créditos para poder
comprarnos maíz. Si nosotros no se lo vendemos van a comprarlo a Argentina.
__Se volvió hacia Guillermo. ___ Parece ser que con la soja nos irá mal porque
los brasileños están bajando los precios para ganarnos el mercado. Yo le
agradecería que hablase cuanto antes con el Primer Ministro y trate de
suscribir un acuerdo global antes de que quedemos fuera del panorama.
Guillermo
miro a Pedro, que estaba sentado en el otro extremo de la mesa haciendo garabatos
en un anotador, sin prestar atención aparentemente a lo que se hablaba.
__Veré
qué puedo hacer __prometió Guillermo.
Anotó
para no olvidarse de enviar un cable a Washington al titular del Departamento
de Comercio solicitando permiso para ofrecer más créditos al gobierno rumano,
bancos norteamericanos pondrían el dinero, pero solo podían otorgar los
préstamos si contaban con respaldo oficial.
Miguel
Mendoza, asesor sobre temas políticos, así como también agente de la CIA tomó
la palabra, y a Guillermo la mirada le causó escalofríos, mientras… no adivinaba que Pedro mantenía la mirada baja
por dos motivos, uno era que lo estaba dibujando, la fascinación que le causaba
su rostro, no podía dejarla pasar.
“No
temas, Guille, no temas”, se dijo para sí.
CONTINUARÁ.
TERCERA PARTE-
LIBRO DE ANCLAJE: EL CAPRICHO DE LOS DIOSES.
SIDNEY SHELDON.
HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS.
CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES
COINCIDENCIA.
LENGUAJE ADULTO. ESCENAS EXPLÍCITAS.
Amalia Que precioso !
ResponderEliminarMaria Elena Wau
ResponderEliminarAsiyah Eres muy gentil, me fascina este tema, súper Eve Mónica Marzetti
ResponderEliminarMuchas gracias 🌹🙏😇🕊🌈
Elena Gracias Eve Mónica Marzetti, fascinante temática y amor, un beso..
ResponderEliminarAmeliaHermoso
ResponderEliminarPatricia Hermosa
ResponderEliminarGladis hermoso .
ResponderEliminarNorma Sensual y bello, eve.
ResponderEliminarMiguel Precioso
ResponderEliminarMara bello
ResponderEliminarEdith K hermosa
ResponderEliminarAurelia Muy bello. Bendiciones
ResponderEliminarOlivia Hermoso
ResponderEliminarVioney Tan hermoso como todo lo que escribes
ResponderEliminarPili Acevedo Que bueno
ResponderEliminarElisa Precioso
ResponderEliminarCarmen Que bello.me encantó
ResponderEliminarVeronica Lorena Piccinino Muy lindo capítulo Eve Monica Marzetti. Ya quiero verlos juntos. Aunque sea un beso.. . El amor que siente preso por su embajador es demasiado fuerte
ResponderEliminarBeatriz Filippa muy linda !!!
ResponderEliminarSe está poniendo interesante Eve, aunque no niego que todavía me cuesta adaptarme a los nuevos personajes con los nombres conocidos...Eso sí, me mataste con Miguel Mendoza como agente de la Cía...Te juro que me hizo gracia, aunque me imagino que será el mismo engendro de siempre...
ResponderEliminarAli la pensé tantas veces cómo era el elenco, en qué sitio, lo del amigo lo decidi en la marcha, iba a dejarlo como el sicario, pero louego me di cuenta que lo necesito acá, y me lo traje, están todos y más como dije, y como verás falta uno, que lo tengo resevado para un final feliz, de paso ya llega el otro, si estoy complicdada con mil estudios los huesos rotos y mucho dolor pero sabes que esto es mi vida, no faltaré más que para dar vuelta el sueño ante cada estudio porque por los poetas rtengo que trabajar de noche, es muy linda, iré viendo qué sale, gracias y mi amor, se me atrasé el otro, llega o eres tú, son esas dos, luego tengo que mirar, besote. Y MIguel bueno no existe ami.- Pero... a esperar. Aca nada es lo que parece.
EliminarNo te preocupes si no podés escribir tan seguido, lo importante es que te cuides y te pongas bien...Te mando un beso grande...
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