"DESAFÍO".
CAPÍTULO VEINTINUEVE.
Los labios de Pedro; febriles, aterciopelados;
dubitativos y ávidos de amor y de respuestas apenas rozaron los finos de
Guillermo luego de verse el alma en la mirada profunda. Entonces supieron que
la vida era eso. El amor recién nacido en esta pero vivido en la eternidad.
Entonces supieron que ese instante era lo único real.
Homenaje quinto año del primer beso.
MIÉRCOLES, 03 de agosto de 2016.
Detrás de este triste espectáculo de
palabras, tiembla indeciblemente la esperanza de que me leas, de que no haya
muerto del todo en tu memoria...
Papeles inesperados (fragmento)
Julio Cortázar.
Julio Cortázar.
El odio es el amor sin los hechos.
¿Por qué contáis mentiras para
separaros y
destrozaros
cuando la verdad es que
todos sois uno?
Richard Bach, El Manual del mesías.
¿Por qué contáis mentiras para
separaros y
destrozaros
cuando la verdad es que
todos sois uno?
Richard Bach, El Manual del mesías.
Julio Cortázar: "Del sí al no, ¿cuántos
quizá?"
Un día como hoy nacía Julio Cortázar.
"Y cada día que pasa me parece más
lógico y más necesario que vayamos a la literatura -seamos autores o lectores-
como se va a los encuentros más esenciales de la existencia, como se va al amor
y a veces a la muerte, sabiendo que forman parte indisoluble de un todo, y que
un libro empieza y termina mucho antes y mucho después de su primera y de su
última página."
Julio Cortázar.
__ ¿Están revisando el filtro? ¿O sea que
para esto querías una nueva inspección de la cocina?
__ ¿Se lo ha contado Edyth?
__Es que has llamado mientras estaba hablando
con ella de otro tema.
__Bien, ya se han recibido los resultados,
definitivamente no han hallado veneno en las botellas de agua _dijo Guillermo
terciando entre ellos __. Y el profesor está investigando algo, que quizá
cambie de rumbo las sospechas de… algunas personas.
__ ¿De qué están hablando?
__ ¿De un método para hacer llegar el veneno
estando a distancia, quizá profesor? __ se atrevió Jésica.
__ ¿Cómo?
Palermo.
__ Por tu amor estoy sediento, cielito, así
estoy sediento de tus ardores porque aligeras el ritmo de mi corazón siempre
que bebo la miel de tus besos para endulzar y calmar mi sed.
Por los besos tu boca estoy sediento ya que emanan hirviente tu pasión, me rebosas de embelesamientos y salacidades, sintiéndome yo… el hombre más amado como siempre deseé y nunca conocí antes de vos.
Por los besos tu boca estoy sediento ya que emanan hirviente tu pasión, me rebosas de embelesamientos y salacidades, sintiéndome yo… el hombre más amado como siempre deseé y nunca conocí antes de vos.
Por tu calma estoy sediento, apaciguas mis
desconsuelos y mis desamores, saciándome con todos tus encantos por poder beber
un trago de tus amores, sintiendo así el elixir de los besos de tu boca.
Por
tus ganas estoy sediento, siento mi boca deseosa de exaltaciones, haces despertar en mí mis avideces para que
apagues ese intenso fuego el cual deseo que calmes.
Por tu sosiego estoy sediento, me ofreces
calma y me ahogo en tu amor donde me agasajas con los besos de tu boca, trago a
trago me cuentas tus recónditos secretos y saboreo el poder revivir… mi vida y
mi amor con vos. Este amor que perdura más allá del tiempo, distancia y toda
pena, el que pase lo que pase resiste, este amor es… el que llegó con vos.
__Los murmullos suaves envuelven las horas,
la seda resbala de entre los montes que al roce despiertan y acarician las
ansias, lo umbrío sucumbe, arrulla el alma.
Te miro caminar sin prisa, sobre la humedad de mis sueños, te detienes entre
matorrales donde los frutos son frescos, y los llevas a tus labios, te pierdes
en esos caminos que son tu único destino.
No te escapes de mis manos, te necesito
conmigo, quiero arrancar de tus ramas el mejor fruto prohibido, que se
estremezcan las sendas que se encontraban en calma, cuando a mi paso abro el
nido y someto con tal fuerza que totalmente humedecido queda el deseo por
fuera. No detengas la tormenta, el mar que derrama tu fuente, sigue azotando
con furia que se desprendan los placeres y te dejen ver mi hermosura,
suspirando y gimiendo, echa a volar los
deseos, cual parvada de polluelos, hambrientos de sentimientos.
No detengas estos vientos que despeinan mis
adentros, que no culminen los vaivenes, pues los ríos y mares aún no mojan los desiertos, no detendré mi
camino aunque esté hecho girones, no puedo volver vencido, sobre surcos ya
arados, quiero extraer la semilla que florece en mis labios y humedecerla con
savia, con saliva hasta que los placeres de cansancio queden en silencio
apagados. El alba se va apartando dando paso a la alborada, el sol ilumina y
hace fiesta al contemplar en el lecho los sueños de dos amantes que entre
alfombras y aromas de manantiales se
enredan y hacen de sus muslos, la prisión más anhelante. Te amo _dijo Pedro
adormilado luego de hacer el amor.
__ ¿Estás bien vos? _interrogó Guillermo
alborotando aún más el cabello revuelto.
__Sí amor, claro. Es solo que no iré contigo
a casa de Edyth, olvidé algo en el estudio, te veré más tarde allá.
__Bueno, entonces luego de amarte una y cien
veces más, iré a desayunar con mi hijito, hace días que no paso tiempo con él,
y espero que este profesor nos ayude, o si falla su hipótesis que al fin es la
nuestra, estaremos en cero con este
caso.
__Shsss. Mira cómo se pone mi corazón cuando
te ve, cómo se acelera mi sangre cuando te pienso, cómo mis manos se entibian
cuando te tocan. Mira qué profunda puede ser una gota de deseo. A mis ojos te
descubres como una luna nueva o un sol naciente.
Amo tu desnudez en mi cálido lecho. No existe nada más bello
que las uvas de tu boca en su melodía húmeda sobre mis ocultos sueños. Tienes
en tus labios el embrujo de un dios, soy
arcilla en tus manos y leño en tu hoguera. Me derrito como mantequilla al roce de tu deseo.
Soy sed en la punta de tu lengua de cerezo. Yo soy la tentación en la sangre de
tu hambre. Reconoce tu piel la escritura solo de mis dedos. Sé ir ciego por tus
senderos solo con mis labios. Y leer el lenguaje dulce y sublime de tus pezones
henchidos, transformo tus deseos en alados suspiros, talo leña seca para atizar
tu fuego de tus latidos alocados. Robo de tu mirada lo que tu corazón anhela de
mi boca, por tus gemidos sé lo que tú quieres de mi anhelo. Bendita sea la hora
que señala en tus ojos, te desnudo despacio en un oleaje húmedo e intenso.
Bendito sea el segundo cuando escribo tu nombre mientras recorro cada rincón tibio de tu cuerpo, siembra y
cosecha hago de ti, yo campesino. Mineral y marea somos en este profundo cielo.
De tanto besarme te quedaste sin una palabra.
De tanto amarte me quedé sin aliento.
Te amo. Guille, nunca lo dudes, pase lo que
pase. Son dos palabras que marcarán un solo destino, dos palabras clave para
poder escribir una hermosa historia, donde la palabra “Te amo” estará escrita así como una en nuestro corazón, en la mente
y es que me he dado cuenta de que te amo tanto, te necesito más de lo que te
imaginas.
Y así te amo: Te amo por cómo eres, te amo
por todo lo que haces día a día, te amo, aunque estemos enojados. Te amo, y te
he de amar por siempre. He comprendido que tú eres una persona llena de
sentimientos puros, acompañado de un corazón dispuesto a entregarse, dispuesto
a amar, y que anhela ser amado. ¡Te amo, y ya no puedo ocultarlo! Con tan solo
decirlo mi corazón hace una fiesta de colores; donde los invitados de honor son
el sol y las estrellas, el todo del universo. Te amo con alma y vida, no dudes de mis sentimientos, ni de este
enamorado y loco corazón.
Este amor que siento por ti ya se ha convertido en una droga, en el mejor de los antídotos para calmar ese deseo de estar a tu lado.
¿Te has dado cuenta de cuánto te amo? Yo te amo por sobre todas las cosas, te amo y ese hermoso sentimiento me conduce a volar, me incita a soñar. Te amo tanto, que cuando tú no estás me pongo a llorar. ¡Así te amo vida mía! Te amo en lo tangible e intangible, te amo en lo cierto y en lo incierto. ¡Solo así amor de mi vida! Te amo y lo gritaré a los cuatro vientos.
Te amo hoy, te amaré mañana. Y si llego a morir, recuerda lo mucho que te amo. Y si me llegaras a necesitar, solo cierra tus ojos que ahí estaré en tu imaginación y escucharás el eco de mi voz gritando. “Te amo”.
Este amor que siento por ti ya se ha convertido en una droga, en el mejor de los antídotos para calmar ese deseo de estar a tu lado.
¿Te has dado cuenta de cuánto te amo? Yo te amo por sobre todas las cosas, te amo y ese hermoso sentimiento me conduce a volar, me incita a soñar. Te amo tanto, que cuando tú no estás me pongo a llorar. ¡Así te amo vida mía! Te amo en lo tangible e intangible, te amo en lo cierto y en lo incierto. ¡Solo así amor de mi vida! Te amo y lo gritaré a los cuatro vientos.
Te amo hoy, te amaré mañana. Y si llego a morir, recuerda lo mucho que te amo. Y si me llegaras a necesitar, solo cierra tus ojos que ahí estaré en tu imaginación y escucharás el eco de mi voz gritando. “Te amo”.
__ ¿Me tengo que preocupar?
__No amor mío, es solo que a veces no somos
capaces de expresar lo que sentimos, de hecho nunca puede ponerse en palabras
la medida del sentir, pero mereces que lo intente porque me haces muy feliz,
aunque andemos corriendo con el trabajo, te amo en cada instante y lugar.
__ Sin palabras y en silencio te llevo en mi
alma como el más anhelante deseo de amor al que no puedo pertenecer y ni merecer, si solo yo me fijé en tu alma porque
vos me pones un muro de cemento de cabeza a pies, más no me dejas que llegue a
tu ser, por tus amores ya construidos.
Yo te amo así en silencio, y mi alma viaja siempre hasta vos va, así y sin decirte nada sin que me invites voy tras de tus mares que tanto amas, pues de ahí siento que eres mío, en mi mente y corazón.
Cuando sus aguas mi alma acaricia las siento como si fueras vos, y aprendo tanto de tu amor, de tu fortaleza por tu tesón de lucha cada día.
Y sigo tus pasos con mi alma, y mis pies así descalzos acarician la arena caliente que ya ha acariciado tus blancos pies, siguiendo tus bellas huellas, más son las huellas que amo cuando las veo y toco sin que lo sepas.
Sin palabras y en silencio por tu amor me he quedado, y solo digo en silencio que daría mi vida entera, solo por tenerte un momento así en secreto, sin que ni siquiera sepas que te amo así sin palabras, y en silencio... ángel de amor, sin que sepas que mi alma sufre porque te ama a vos, pues vos sos el sueño de sus entrañas, y que veas en mí, que sin mirarte te veo con los dos de mi alma, que te ama así en secreto sin palabras y en silencio.
Yo te amo así en silencio, y mi alma viaja siempre hasta vos va, así y sin decirte nada sin que me invites voy tras de tus mares que tanto amas, pues de ahí siento que eres mío, en mi mente y corazón.
Cuando sus aguas mi alma acaricia las siento como si fueras vos, y aprendo tanto de tu amor, de tu fortaleza por tu tesón de lucha cada día.
Y sigo tus pasos con mi alma, y mis pies así descalzos acarician la arena caliente que ya ha acariciado tus blancos pies, siguiendo tus bellas huellas, más son las huellas que amo cuando las veo y toco sin que lo sepas.
Sin palabras y en silencio por tu amor me he quedado, y solo digo en silencio que daría mi vida entera, solo por tenerte un momento así en secreto, sin que ni siquiera sepas que te amo así sin palabras, y en silencio... ángel de amor, sin que sepas que mi alma sufre porque te ama a vos, pues vos sos el sueño de sus entrañas, y que veas en mí, que sin mirarte te veo con los dos de mi alma, que te ama así en secreto sin palabras y en silencio.
__A usted, dueño de mis entrañas le permito
todo, tenemos un pacto no escrito, una promesa de amor usted y yo socio.
Entre usted y yo no existe un solo espacio
que no se desee, que no se conozca ni siquiera en la boca se pueden contener las ansias de besos que extasiadas provocan idas y regresos.
Entre usted y yo no existen secretos porque todo se confiesa. El calor de nuestros cuerpos, no existe sequía ahí sobra humedad cuando cada caricia nos provoca a la par, ganas de que nuestros labios que toman por asalto nuestra piel, como una serie de largas vías que se empiezan a besar en pautado ritual.
Entre usted y yo no existen secretos porque todo se confiesa. El calor de nuestros cuerpos, no existe sequía ahí sobra humedad cuando cada caricia nos provoca a la par, ganas de que nuestros labios que toman por asalto nuestra piel, como una serie de largas vías que se empiezan a besar en pautado ritual.
Entre usted y yo hay esa sincronía que solo
se da en las mentes perfectas, que
cruzan el pecho llegando desde el
cuello y mueren en las piernas.
Las ansias, los deseos como nubes viajando lentas por el cielo. Hay una sociedad que sin solicitud lleva a que se tomen nuestras manos enlazando los dedos, se acoplen caderas, espaldas, con total intensidad, mientras apasionadas nuestras umbrías embonan y encienden las chispas de la hoguera. Nos leemos la mirada, los latidos, los gestos, la respiración agitada, con una precisión tan exacta, tan cálida y pura cuando nos poseemos que en el vaivén nos volvemos arte. ¡En una sola figura! detenemos el tiempo mientras el universo se revoluciona, cuando cada beso nos eriza la piel, mientras nos leemos sin puntos, ni comas.
Entre usted y yo no existen las reglas, ni las imposiciones ni descortesías, cuando nos tocamos, cuando nos soñamos, no hay en nuestra piel una sola zona fría.
Las ansias, los deseos como nubes viajando lentas por el cielo. Hay una sociedad que sin solicitud lleva a que se tomen nuestras manos enlazando los dedos, se acoplen caderas, espaldas, con total intensidad, mientras apasionadas nuestras umbrías embonan y encienden las chispas de la hoguera. Nos leemos la mirada, los latidos, los gestos, la respiración agitada, con una precisión tan exacta, tan cálida y pura cuando nos poseemos que en el vaivén nos volvemos arte. ¡En una sola figura! detenemos el tiempo mientras el universo se revoluciona, cuando cada beso nos eriza la piel, mientras nos leemos sin puntos, ni comas.
Entre usted y yo no existen las reglas, ni las imposiciones ni descortesías, cuando nos tocamos, cuando nos soñamos, no hay en nuestra piel una sola zona fría.
Existe un pronóstico anunciado de volcanes
desatados, de huracanes que violentos, dejan huellas de nuestro paso en cada
parte del cuerpo. Pero también existe Amor que fluye en las venas.
Necesidades completas de tenernos, de mirarnos y perder en nuestros brazos cada resquicio de frío. Entre usted y yo no nos faltan razones nos sobran tantos motivos para amarnos intensamente… Porque ese es nuestro destino, un destino, un amor, por eso te amo.
Necesidades completas de tenernos, de mirarnos y perder en nuestros brazos cada resquicio de frío. Entre usted y yo no nos faltan razones nos sobran tantos motivos para amarnos intensamente… Porque ese es nuestro destino, un destino, un amor, por eso te amo.
Se demostraron las ganas, las ansias
acopladas a las apetencias, los anhelos
en derroche de sacarse la verdad del amor a besos, hambrientos… fueron lenguas y saliva, danzando y tomando, dando y conquistando,
aspirando las inmensas ganas del sabor del otro, envueltos en el aroma a
tierra, a madera, a sudor, al de los dos.
Conquistaron senderos con las yemas
dibujados, tallados con los labios,
recorridos por ansiosas lenguas que se perdieron en el pecho, torturando los pezones sin poder frenar apetitos porque
las bocas tomaron el dominio, peleando por el puesto y espacio, para dominar el
ser por completo, las armas de la guerra, los dedos y las bocas, aladas las
manos recorriendo y aleteando, el territorio como objetivo, comenzando por los
ojos, encontrando las pupilas fulgurando el alma en ellas, besando los
párpados, dibujando el balcón de cejas y pestañas, deslizándose en viaje por el
iris a vericuetos del alma hasta contagiar cada parte de la piel y del cuerpo.
Esas ganas plenas tomando uno el control, yendo luego el otro por lo suyo a atormentar en caricias hasta que dócilmente el otro confiesa quién es el único ser que logra estremecerlo en cada milímetro y poro de piel. Esas ganas de ambos de raspar y sentir la barbilla desde donde nace al sitio en que acaba la piel en territorio, las ganas delatadas por el alocado pulso al besar el cuello, al chupar la oreja, al hundirse la lengua en el oído, al recorrer cuello y clavícula para volver a sentir pulsar los pezones recorriendo cada centímetro de la hermosa espalda, con jadeos y gemidos cuando marca y demarca lengua o dientes el camino , con inusual maestría estando uno u otro completamente a cargo o a merced de sus dominios. En esa marcha loca de marcar cada beso a fuego lento en el lienzo hermoso de la piel delineando en el recorrido las fronteras, ángulos y esquinas del cuerpo vuelto obsesión bajo la remanente escasa razón en locura de conquista y fuego de pasión que solo podrán fenecer al cumplirse los deseos en esas ganas compartidas de morderse, estrujarse, apretarse, embeberse, comerse y beberse, de querer trasmitir un… me fascinas, con cada una de las partes, volviendo a más de cinco sentidos dedicados a adorar al otro, sin regreso a la cordura, extasiados en la conquista en cada parte de cada uno, serán la máxima locura, con ganas insaciables de arrancar a besos la confesa declaración de ser parte del tatuaje eterno del alma única, del cuerpo el molde perfecto y el par de cada latido del corazón dado.
Esas ganas plenas tomando uno el control, yendo luego el otro por lo suyo a atormentar en caricias hasta que dócilmente el otro confiesa quién es el único ser que logra estremecerlo en cada milímetro y poro de piel. Esas ganas de ambos de raspar y sentir la barbilla desde donde nace al sitio en que acaba la piel en territorio, las ganas delatadas por el alocado pulso al besar el cuello, al chupar la oreja, al hundirse la lengua en el oído, al recorrer cuello y clavícula para volver a sentir pulsar los pezones recorriendo cada centímetro de la hermosa espalda, con jadeos y gemidos cuando marca y demarca lengua o dientes el camino , con inusual maestría estando uno u otro completamente a cargo o a merced de sus dominios. En esa marcha loca de marcar cada beso a fuego lento en el lienzo hermoso de la piel delineando en el recorrido las fronteras, ángulos y esquinas del cuerpo vuelto obsesión bajo la remanente escasa razón en locura de conquista y fuego de pasión que solo podrán fenecer al cumplirse los deseos en esas ganas compartidas de morderse, estrujarse, apretarse, embeberse, comerse y beberse, de querer trasmitir un… me fascinas, con cada una de las partes, volviendo a más de cinco sentidos dedicados a adorar al otro, sin regreso a la cordura, extasiados en la conquista en cada parte de cada uno, serán la máxima locura, con ganas insaciables de arrancar a besos la confesa declaración de ser parte del tatuaje eterno del alma única, del cuerpo el molde perfecto y el par de cada latido del corazón dado.
Cuando se agotaron por fuera todos los límites,
al borde del acantilado, avistando el despeño, Guillermo penetró la oscuridad sinuosa
donde su deseo permaneció detenido a la espera de sentirlo todo, y dejarse
sentir antes de iniciar cuerpo y miembro el mágico vaivén, las ondulaciones
artísticas, la cabalgata feroz, el controlado ir y venir, el caos de la
tempestad inminente, el ascenso a la cresta de la mayor antes de la caída final
y derrame en la playa de la esencia misma del ser del amor y deseo, para morir
y renacer, solo para… volver a amar.
__Quédate quieto, por favor detente ahí no te
acerques, antes de ser tuyo, disfruta mientras me quito la ropa y me quedo solo
con la toalla, quiero que deleites tu
pupila con la humedad de mi piel sudada... Hazme el amor con tu mirada, quédate detenido en cada
recoveco y déjame contemplarte, primeramente en la total belleza de tu piel. Las
formas y figuras de tus caminos. Lentamente te has deshecho de tus vestimentas.
Es momento de ser perverso, de ser indecoroso. Te poseeré como el jardinero
acaricia a su rosa y se deleita en sus espinas. Serás mío una y otra vez,
placer intrigante.
Mírame y termina de jugar con tu cuerpo
imaginando junto a él, el mío. Quiero ser tuyo,
mi cuerpo mismo denota el deseo,
quiero que tus ojos sean los primeros en poseerme, sonrojes mis mejillas
y eriza mi pecho, humedezcas mi centro, que hay romance entre nosotros pero
esta noche deseo invitarte a que seas perverso,
muéstrame esas ganas en tu mirada desnuda, te espero en nuestra cama de
sábanas mojadas, iré a tu encuentro con
el jardín de tu profano deseo. Seré más que eso, el fantasma que despierta tu lujuria.
El niño que se alimenta de tu pecho, y te consume con demasía. Lograré
sonrojarte inmediatamente, en tus lugares prohibidos, la impronunciable sal es
de números como una vieja canción, uno, por entre tus piernas, mi boca testigo
de tu humedad y de tus sabores.
Dos… en embates inmisericordes, que te llenan una y otra y otra vez, de seducción primitiva
Tres… a la siguiente puerta, donde exploro más allá de lo que te han explorado
Cuatro… la permanente, la que te enloquece, la que te enmudece, la que te obliga a decir lo impronunciable.
Dos… en embates inmisericordes, que te llenan una y otra y otra vez, de seducción primitiva
Tres… a la siguiente puerta, donde exploro más allá de lo que te han explorado
Cuatro… la permanente, la que te enloquece, la que te enmudece, la que te obliga a decir lo impronunciable.
Pero no dejes de mirarme, deseo ver tus
pupilas dilatadas y entre ellas mirarme excitado gimiendo y disfrutando de hacerte mío en aquella cama, besando, muerde mi labio mientras el vaivén de nuestras
caderas disfruta de nuestros cuerpos sudados.
Tómame, sométeme, entrégate a mí, como yo a ti estoy siendo tuyo, pero no dejes de mirarme, deléitate romántico entre orgasmos pervertidos de cama… No tan solo mirarte, escucharte y excitarme con cada nota musical que sale tu boca, cada gemido es mi adicción.
Con cada movimiento, que se mezcla y se enreda en sábanas testigos de nuestra oscura pasión morderé tus labios, tus erizados, tu cuello, tu vientre, el todo de tu ser.
Acelera tu corazón, entrégate totalmente a este erotismo transformado en verbo amar sublime. Haremos este trío de inmundicia, un lecho, tú y yo. Mis medallas… tus orgasmos, los lunares de mi piel, que luego formarán la constelación de las perversiones.
Tómame, sométeme, entrégate a mí, como yo a ti estoy siendo tuyo, pero no dejes de mirarme, deléitate romántico entre orgasmos pervertidos de cama… No tan solo mirarte, escucharte y excitarme con cada nota musical que sale tu boca, cada gemido es mi adicción.
Con cada movimiento, que se mezcla y se enreda en sábanas testigos de nuestra oscura pasión morderé tus labios, tus erizados, tu cuello, tu vientre, el todo de tu ser.
Acelera tu corazón, entrégate totalmente a este erotismo transformado en verbo amar sublime. Haremos este trío de inmundicia, un lecho, tú y yo. Mis medallas… tus orgasmos, los lunares de mi piel, que luego formarán la constelación de las perversiones.
Terminar entre tus brazos desfallecido y
lleno de ti desnudo, abrazado a tu piel y tus brazos, acurrucado en ti, que solo cubra nuestros cuerpos la sábana
blanca.
Bésame una vez más, ha llegado en el ventanal el alba y mírame una vez más caminar por la habitación... Invitándote ahora mis ojos a que juegues en la ducha mirando sobre mi cuerpo caer el agua, quiero tus caricias de nuevo en mi piel. Sabes estoy de nuevo excitado. La noche es corta, sin desfallecer a la danza de cuerpos sudados, sábanas manchadas de nuestras huellas, de estos encuentros. Te veré desnudo caminar hacia la cascada, donde te mezclarás con el agua. Te limpiarás levemente, pues nuevamente mis embates te someterán y me someterán a repetir una y las veces necesarias esta pasión, este desenfreno, tú y yo, los adictos sin remedio, ni pudor, en pecado profundo.
Porque no solo he de tocar todo tu cuerpo con
mis manos, no solo es recorrer tu bello
cuerpo con mis besos, esto va más allá. Cuando quiero habitar tu piel, primero
entro a tu mente con mis miradas llenas de excitación, lleno de deseo todo mi
cuerpo, por poseerte.
Admiro tu mente llena de la más bella perversión. Esta noche todo está permitido,
esta noche no hay marcha atrás, nuestros cuerpos se pondrán en sintonía con el universo y describirán las estrellas a través de nuestros gritos y gemidos.
Esta noche podremos cabalgar cual jinetes sobre oleadas de pasión desatadas.
Admiro tu mente llena de la más bella perversión. Esta noche todo está permitido,
esta noche no hay marcha atrás, nuestros cuerpos se pondrán en sintonía con el universo y describirán las estrellas a través de nuestros gritos y gemidos.
Esta noche podremos cabalgar cual jinetes sobre oleadas de pasión desatadas.
Hoy nuestras mentes se olvidan de lo cursi
del amor y dan rienda suelta a la lujuria y el deseo que nuestros cuerpos
destilan con nuestras miradas. Mira, mi cuerpo te llama, mi cuerpo despierta al
llamado de la carne. Mi cuerpo te desea,
mi mente te desea, nuestras
pieles se erizan al contacto de nuestras miradas, al contacto de nuestros aromas, al contacto
de nuestras pasiones.
No, no por favor; no te vistas aún; deja que mis ojos se pierdan en el oasis de tu cuerpo, déjame ofrendarte mis más sumisos deseos; permite que mis labios enmudecidos te admiren y que saboreen ese maravilloso cuerpo, que en este instante es el milagro de lo nuestro. No te vistas de vergüenza y despoja las prendas tímidas de tus miedos, deja que la estética muera en este momento; no te amilanes con mi silencio, es que no tengo expresiones para contemplarte, más que unos suspiros adulando a lo completo; porque Dios hizo alarde de lo perfecto dejando su divina firma en tu cuerpo. Mi cuerpo, mi cuerpo es tu sumiso esclavo, rebelde y autónomo no obedece ante el aura que despoja tu silueta; y tembloroso ante tanta belleza cuestiona el concepto de lo hermoso e inventa en mi boca nuevas y desconocidas palabras y verbos por tratar de explicar la mezcla de lo bello y lo intenso.
No
agaches tu mirada, en la timidez de tus pensamientos; y permite que la sombra de tu cuerpo
enloquezca a la luz que te pinta con fuego;
ese mismo fuego.... que me
consume desde adentro. Permite que las
yemas de mis dedos se purifiquen en la divinidad de tu cuerpo; quizá
los antiguos se equivocaron en adorar a sus dioses, es que no te han
visto parado ahora, vestido de un divino cuerpo perfecto; quizás ahora la mitología se esté
reescribiendo con tinta de delirio y deseo.
No te muevas un momento y permíteme inmortalizarte en el tiempo; esculpiré tu cuerpo en mi memoria y te haré
mío por mil segundos eternos; el deseo por estar en tu adentro y recorrerte
entero, hasta perderme en el fondo, blandiendo mi umbría, desgarrando tus
entrañas que van a gemir ante la intrusión del deseo donde al fin dejaré mi
esencia.
¡Ahora no importa! Ya eres mío, ahora que con mi alma te estoy viendo; cada pedazo de tu carne, es polvo del cielo lejos de ahogarme es vida para mi cuerpo; y aunque no te hubiera conocido mi alma ya te habría soñado; y en un sublime sueño mi amor ya habías sido mío por completo; siempre tuyo, siempre mío, hasta el final de los tiempos.
¡Ahora no importa! Ya eres mío, ahora que con mi alma te estoy viendo; cada pedazo de tu carne, es polvo del cielo lejos de ahogarme es vida para mi cuerpo; y aunque no te hubiera conocido mi alma ya te habría soñado; y en un sublime sueño mi amor ya habías sido mío por completo; siempre tuyo, siempre mío, hasta el final de los tiempos.
__Tu mirada me cautiva, me sorprende, me
rinde, me cautiva porque tienes el hechizo que no permite olvidarte y te tengo
presente en todo momento, no te puedo arrancar de mis pupilas, pues te has
adentrado hasta el más apartado rincón de mi cerebro, mis neuronas hacen corto
circuito con la electrizante imagen que se ha quedado grabada en ellas.
Me
sorprende pues eres mitad hombre, mitad niño, no sé si en tu mirada hay la súplica
de una caricia simple, o la promesa de una noche de loca pasión y delirante
entrega, y me rinde, porque hay la promesa de una entrega completa, sin
falsedades, sin condiciones, sin términos, solo de entrega, entonces, tu mirada
me cautiva y soy tu prisionero, me sorprende estoy fascinado, me rindo no tengo
trabas, soy todo tuyo.
__
Palermo.
La última vez que conversé con un psicólogo me llamó poderosamente la atención la facilidad con que llegué a su interior, sin proponérmelo. Fue uno de esos llamados equivocados que uno recibe en cualquier momento del día y cuando se presentó como el señor fulano de tal, psicólogo, yo solo le pregunté cómo andaba, no con intención de nada, solo porque me llamó la atención, no sé, pero lo que sí sé, es que esa sola pregunta le bastó para que en segundos y casi sin mi intervención, me contara su vida y hasta llorisqueara por lo mal que andaba su matrimonio. Cuando colgué, quedé maravillada por la simplicidad del ser humano, también es complejo en otras cuestiones, pero en temas emocionales, somos todos muy iguales y necesitamos ‘todos’ ser escuchados. Me quedé mascullando: psicólogos… psicólogos…
A propósito de ellos, cuando a mi marido le aconsejé que fuera a uno, debido a su inestabilidad emocional, o mejor debería decir, no poder decidirse en cuanto a si haría pedazos nuestro matrimonio o no, sabía de antemano que me estaba atando una piedra al cuello y cerca de la orilla de un profundo río.
¿Qué clase de estúpida arregla una cita de su
marido con un psicólogo cuando las cosas andan mal? ¿Quién terminó siendo la
culpable de todo? Es que cuando una quiere bien, no quiere ver a la persona
amada sufriendo, aunque eso signifique que en poco tiempo, la que quería el
bien de la otra persona sea justamente la causante de que esa persona esté mal,
¿se entiende?
No,
no se trata de hacerme la víctima pero sí, yo había encontrado en él, a la
persona capaz de soportar todas mis cosas y poco a poco me abrí, hasta un punto
en donde nunca lo había hecho con nadie, sentí por mucho tiempo que seríamos el
uno para el otro hasta que la muerte nos separara pero me equivoqué y esa loca
decisión de mandarlo al psicólogo no entra dentro de lo que considero un error.
Que no la considere un error no significa que no me haya dado bronca, odio
muchas cosas. “Una manipuladora” fue la bandera que enarboló su psicólogo y que
él estúpidamente miró hasta que quedó como hipnotizado con el descubrimiento.
Una manipuladora… Cuando él me lo reveló, me contó lo que su mejor amigo pago ahora
le había dicho de mí y cómo esa “revelación” hacía que él ahora entendiera
“todo”. Yo me lo quedé
mirando, tratando de saber qué era lo que estaba pasando. Mil veces le recordé
que yo se lo había dicho, que ese era mi problema de chiquita y él tantas veces
se rio de mis confesiones, no en mala manera ni burlándose, sino con un dejo de
satisfacción pues el mismo me aseguraba que eso era lo que más le gustaba de mí
y ahora frente a mí, tenía un pedazo de carne que me observaba con recelo
porque se había dado cuenta del secreto de su vida o mejor dicho de la mía: yo
era una manipuladora.
Ay Dios mío, que tonta se vuelve la gente que
siempre fue tonta y que por estar a tu lado se cree algo ahora. Parecía como si
él ahora se creyera el descubridor del mundo y me apuntaba con su dedo índice
diciendo que yo, yo, había arruinado su vida con mis manipulaciones.
Obviamente yo entendí todo enseguida y quise hacerle ver su error, no que pensara ahora eso de mí, sino que se diera cuenta que eso ya lo sabía, se lo había dicho yo y sin cobrarle un peso y que a él le fascinaba, pero no, ciego con las revelaciones mesiánicas de una persona que seguramente no podía hacer frente a sus propios problemas, encontró alguien a quien echarle la culpa de todo y así ‘lavar’ sus culpas o mejor dicho taparlas tras las mentiras y la maldad de la manipuladora que lo quería realmente pero que él y su amiguito se encargaron de apuntar como la mala de la película. Cuando comenzó a engañarme, pensé por mis adentros que el tratamiento estaba muy bueno, primero: encontrar una culpable, segundo: desfogar toda la promiscuidad acumulada en años de mostrar que él era lo que en realidad no era. Y por último: dejar siempre la puerta entre abierta “Te quiero pero…” “Si supiera cómo…” “No te merezco…” y cada tanto cuando alguna de sus amantes le hace alguna promesa que no va a poder cumplir, “la culpa de todo es tuya”. Cuántas veces le quise explicar que soy una mujer como cualquier otra, que no era un fenómeno, que las cosas malas mías son similares a las malas de otra persona y que las personas somos o se nos puede dividir en tres o cuatro grupos por la forma de ser.
Obviamente yo entendí todo enseguida y quise hacerle ver su error, no que pensara ahora eso de mí, sino que se diera cuenta que eso ya lo sabía, se lo había dicho yo y sin cobrarle un peso y que a él le fascinaba, pero no, ciego con las revelaciones mesiánicas de una persona que seguramente no podía hacer frente a sus propios problemas, encontró alguien a quien echarle la culpa de todo y así ‘lavar’ sus culpas o mejor dicho taparlas tras las mentiras y la maldad de la manipuladora que lo quería realmente pero que él y su amiguito se encargaron de apuntar como la mala de la película. Cuando comenzó a engañarme, pensé por mis adentros que el tratamiento estaba muy bueno, primero: encontrar una culpable, segundo: desfogar toda la promiscuidad acumulada en años de mostrar que él era lo que en realidad no era. Y por último: dejar siempre la puerta entre abierta “Te quiero pero…” “Si supiera cómo…” “No te merezco…” y cada tanto cuando alguna de sus amantes le hace alguna promesa que no va a poder cumplir, “la culpa de todo es tuya”. Cuántas veces le quise explicar que soy una mujer como cualquier otra, que no era un fenómeno, que las cosas malas mías son similares a las malas de otra persona y que las personas somos o se nos puede dividir en tres o cuatro grupos por la forma de ser.
Que
la mujer perfecta deja de serlo con unos meses de convivencia y que lo malo
mío, le puede parecer espectacular a otro, a él mismo antes del lavado de
cerebro. Pero no, él repite como loro: “violencia emocional”, ahí termina todo,
yo soy la culpable, mira qué raro todo, pero bueno, si no pudo darse cuenta que
la terapia no era para eso, qué se le va a hacer, él y su amigo se merecen y
que sean felices, lástima que cuando está deprimido, es la estúpida la que
corre. Porque en el fondo, manipuladora y todo, me preocupo por él y él lo
sabe.
Cuando me llamó porque me quería ver, me necesitaba dijo, le pedí que viniera a casa. También para que viera lo que dejó, pero me respondió que en ese momento prefería que nos encontremos en otro lugar. No entendí muy bien por qué, pero solo le pedí que no fuera para señalarme mis faltas mientras repetía: “manipuladora” o “por tu culpa” y aceptó. Cuando abrió la puerta casi me caigo de espaldas pero hice como si nada, es que verlo vestido de nada fue algo peor que imaginarlo con su amante. Después de todo me quedé pensando… ¿habré sido yo la culpable de todo esto?
Cuando me llamó porque me quería ver, me necesitaba dijo, le pedí que viniera a casa. También para que viera lo que dejó, pero me respondió que en ese momento prefería que nos encontremos en otro lugar. No entendí muy bien por qué, pero solo le pedí que no fuera para señalarme mis faltas mientras repetía: “manipuladora” o “por tu culpa” y aceptó. Cuando abrió la puerta casi me caigo de espaldas pero hice como si nada, es que verlo vestido de nada fue algo peor que imaginarlo con su amante. Después de todo me quedé pensando… ¿habré sido yo la culpable de todo esto?
La
primera vez, me recibió desnudo, y detrás estaba… Guillermo, no una mujer mejor
que yo… un hombre.
Barrio Norte.
__Beto,
yo. ¿Está Pedro con vos? __interrogó Guillermo ante la ausencia.
__No,
Guille, no vino, no lo he visto, ¿sucede algo?
__Qué
raro, me dijo que pasaría por allí, bueno debe de estar llegando, entonces, no.
Solo vigila de cerca a Elsa y al nene,
estamos revisando de nuevo la casa de la viuda. José y todos estamos acá _ordenó.
__Dale,
Guille, si Elsa se mueve, o alguien la visita te llamo, tranquilo. Y Pedro es
grande, quizás esté con Fabián o con algún lío del divorcio, ya llegará.
___
__Puesto
que le hemos invadido la casa de nuevo, no veo qué tenga de malo al menos regarle
las plantas _ordenó a un policía Malvárez __.Solo ocúpate de las del jardín, yo
mismo lo haré luego con las de la terraza del segundo piso.
__ ¿Regar?
_interrogó más para sí misma Jésica.
__ ¿Me
explican qué se supone que están haciendo ahora? __solicitó el inspector
apoyándose en el fregadero.
__El
problema que me ha planteado esta joven detective, Santiago es el siguiente:
¿Es posible poner el veneno en la bebida a una determinada persona desde un
lugar remoto y además hacerlo con algún método que no deje huellas? Y, vaya, la
verdad es que en el mundo de la física no se suelen hallar problemas tan
complicados __dijo el profesor.
__Con
que desde un lugar remoto __dijo Malvárez mirando con el ceño fruncido a
Jésica__. Está claro que siguen todos empeñados en sospechar de la esposa y
dejar fuera a la amante o a un tercero. Y han decidido que ella es la autora del
crimen y ahora le piden al profesor que los ayude a averiguar qué método mágico
pudo emplear para poner el veneno desde tan lejos, ¿no?
__Ella
no es la única sospechosa, Malvárez _dijo Guillermo__. Creo que lo que todos
deseamos es asegurarnos de que todo el que cuente con una coartada para ese fin
de semana no haya podido realmente cometer el crimen, se hable de Edyth, de los
amigos o de otro.
__
¿Acaso no es lo mismo, Graziani? El objetivo de ustedes sigue siendo ella _dijo
Malvárez, pese a que Elsa estuvo acá, Paula y algunos empleados, que alguien pudo
entrar en la tarde, solo y todos apuntan a la esposa__. Bien, ¿y qué es lo que
hacen fisgoneando debajo del fregadero?
__Si
hacemos un resumen, el veneno ha sido hallado en tres lugares distintos _dijo
el profesor mostrando tres dedos de la mano enguantada__. Uno, en el café que
bebió la víctima. Dos, en los restos de café molido y el filtro usados para
prepararlo. Y tres, el hervidor de agua.
No
estoy mencionando las pequeñas maniobras de distracción iniciales que los
llevaron a la insulina y a un posible suicidio. A partir de allí, ya no sabemos
más. Por tanto, las posibilidades son dos: o el veneno fue puesto directamente
en el hervidor, o ya estaba en el agua empleada para preparar el café. Si estaba
en el agua, habría que preguntarse en qué agua. Y aquí las posibilidades
vuelven a ser dos: agua mineral en botella reforzado esto por la esposa, o agua
de grifo.
__ ¿Agua
de grifo? ¿Quieres decir que estaba en las cañerías? _dijo Santiago, y soltó un
resoplido.
__Cuando
las posibilidades son varias, lo más razonable es seguir el método de
eliminación.
Al
parecer, la policía científica ya ha confirmado que ni en las tuberías, ni en
el filtro purificador había nada anormal. Pero ya sabes que yo soy de los que,
hasta que no lo comprueban mis propias manos por sí mismas, no se lo creen del
todo. Por eso, estaba examinando la parte de debajo del fregadero. Si la idea
era alterar el agua de grifo, teóricamente no hay otro sitio desde donde
hacerlo.
__
¿Y qué has descubierto?
Pedro
se deslizó con sigilo a la escena, pero Guillermo lo vio, y enseguida le
susurró:
_ ¿A
dónde estabas?
__En
el estudio, te dije.
Guillermo
sintió la sangre bullir y un escalofrío recorriéndolo, nunca hubo una mentira
entre ellos, jamás desde encontrarse, y se crispó, Pedro notó el
estremecimiento al rozar la mano.
__ ¿Qué
sucede?
__Que
mientes, hablé con Beto, no fuiste al estudio.
__No
me gusta lo que dices, lo hablaremos en casa, no he mentido, no estaba en tu…
en nuestro estudio, sino en el mío, jamás te mentiría, Guillermo, me dolió.
__!
Pedro!
__Hablaremos
en casa, déjame oír.
__Que
ni en las cañerías, ni en la derivación del filtro purificador ni en el propio
filtro hay señales de que se instalara algún artilugio. Para mayor certeza
sería recomendable desmontarlo todo y examinarlo a conciencia, pero me temo que
seguiríamos sin encontrar nada. En tal caso, podemos afirmar, casi con total
seguridad, que si el veneno se encontraba en el agua, era en el agua
embotellada.
__Ya,
pero en las botellas no se ha encontrado veneno.
__Bueno,
aún estamos a la espera de que nos remitan resultados de laboratorios
especializados _dijo Jésica.
__No
saldrá nada. Los de Científica no son ningunos aficionados. No suelen
equivocarse en esas cosas __afirmó Malvarez descruzando los brazos para
ponerlos en jarra, al tiempo que dirigía la mirada al profesor__. ¿Y esa es la conclusión a la que ha llegado?
Para las molestias que te has tomado, tampoco parece gran cosa.
__Eso
era solo en lo que respecta al agua. Ahora falta examinar el hervidor. Creo que
ya lo he dicho, pero otra posibilidad es que el veneno lo hubieran puesto
directamente en él.__ Eso es lo que yo sostengo, ahora bien, ten en cuenta que
el domingo por la mañana no había nada en él. Siempre, claro está, que creamos
a Elsa Contreras.
El
profesor se limitó a tomar un hervidor que había al lado del fregadero.
__ ¿Qué
es eso? __preguntó Malvárez.
__Un
hervidor idéntico al que se empleó en este caso. Me lo ha conseguido la
señorita __respondió el profesor, que abrió el grifo y empezó a llenar el
hervidor con agua caliente. Una vez lleno, le puso a vaciar su contenido en el
fregadero___. Sin trampa ni cartón. Un hervidor normal y corriente.
Después
volvió a llenarlo de agua y lo puso al fuego.
__
¿Qué se supone que pretendes ahora?
__Espera
y verán _dijo el profesor volviendo a apoyarse en el fregadero__. Tú crees que
el domingo alguien pudo entrar en esta casa a pesar de cámaras y guardias y
poner el veneno en el hervidor, ¿no es así?
__No
se me ocurre otra cosa si dejamos fuera a Elsa.
__En
tal caso, aun Elsa, el autor habría optado por un método muy arriesgado.
Tendría que estar seguro que el señor no iba a contarle a nadie de su visita,
no olvides que la nieta estaba en la casa. ¿O piensas que pudo entrar en la
casa a escondidas aprovechando una pequeña ausencia, al menos del señor?
__No
creo que entrara a escondidas. Mi hipótesis es que el autor sabía que la
víctima no le iba a hablar de la visita a nadie.
__Claro.
Podría tratarse de una persona cuya visita la víctima no quería que se supiese,
pero vuelvo a la nieta, ella podría haberse asomado _dijo el profesor
asintiendo con la cabeza, y se volvió hacia Jésica __.Me tranquiliza ver que al
compañero más veterano aún le funciona la cabeza.
__ ¿De
qué va esto? _dijo Malvárez paseando la mirada.
__De
nada en concreto. Solo digo que, si todos somos razonables, la confrontación de
ideas será siempre enriquecedora.
Malvárez
miró con ceño al profesor de sempiterno tono arrogante, pero su mirada de
enfado no surtió efecto alguno. El científico siguió sonriendo.
Por
fin el agua empezó a hervir. El profesor apagó el fuego, quitó la tapa del
hervidor y miró en su interior.
__Parece
que la prueba ha salido bien __dijo inclinando el hervidor sobre el fregadero
para vaciar su contenido.
El
detective se sobresaltó al verlo. Los demás todos se asomaron por su expresión,
lo que vieron caer no se trataba de agua sino de un líquido rojo.
__Pero
¿qué has hecho?
El
científico dejó el hervidor en el fregadero y miró a Malvárez con una sonrisa.
__Si
sigues desconfiando puedes hacerlo tú, o cualquiera… ¿señor fiscal?
Miller
azorado negó con la cabeza.
__Cuando
he dicho lo de “sin trampa ni cartón”, era mentira. Dentro del hervidor había
puesto un polvo rojo cubierto por una gelatina. Al calentar el agua, la
gelatina se va disolviendo y libera poco a poco el polvo, hasta que, al final,
este se mezcla por completo con el agua __explicó el hombre asintiendo con la cabeza en dirección a
Jésica y los dos abogados. En el caso que investigan, el hervidor fue utilizado
como mínimo dos veces antes de que la víctima falleciera. ¿Verdad?
__Así
es. El sábado en la noche y el domingo por la mañana _respondió la detective.
__Bien,
en función de la cantidad y calidad de la gelatina, podrían ser necesarios dos
o tres usos para poder disolverla y liberar el veneno.
¿Qué
tal si le pedimos a los de Científica que lo comprueben? También habría que
considerar en qué parte del hervidor podría haber sido colocada. Y, además,
habría que estudiar también la posibilidad de que, en lugar de gelatina, se
hubiera empleado algún otro elemento.
__Entendido
_dijo Jésica mientras empezaba a tomar nota de las indicaciones que acababa de
dar su profesor.
__ ¿Qué
te pasa, a qué viene esa cara, Malvárez? __interrogó el científico con sorna__.
Pareces abatido.
__No
es abatimiento. Más bien me preguntaba si a una persona normal se le podría
ocurrir un método de envenenamiento tan especial como ese.
__
¿Especial? Para nada. Tratándose de una persona acostumbrada al uso de
gelatina, no le resultaría nada difícil. Por ejemplo, una ama de casa habituada
a la cocina.
El
detective apretó los dientes. Estaba claro que el físico también acompañaba al
resto en la sospecha contra Edyth, tal vez influenciado por Jésica.
__Tu
hallazgo, no me desestima ni me confirma a nadie, ni a las dos mujeres ni a un
tercero, solo es un método.
__Así
es.
En
ese momento sonó el teléfono de la joven. Ella contestó, y tras intercambiar
unas pocas palabras con el interlocutor, se volvió hacia los presentes.
__Ya
se han recibido los resultados últimos de laboratorio. Efectivamente, no han
encontrado nada en las botellas de agua.
¿Cómo
seguimos?
__No
sé qué más hagan ustedes acá, yo iré a ver a la amante, Edyth no sabe nada de
las ex de la víctima, y una fuente me habló de más de una amante __concluyó
Malvarez __. Ya que ustedes
hallarán la ruta del veneno, y no estaba en las botellas, iré a buscar al
posible tercero, si es que lo hay.
__Bien
dices, porque quizá no sea necesario, y Edyth pueda haberlo colocado antes de
su viaje, mucho antes.
__
¿Por qué creo que sospechas o sabes más
de lo que dices?
__Paso
a paso, ahora déjame trabajar, confirmar
o descartar el hervidor, Malvárez _afirmó calmo el físico.
Elsa
sintió que todos sabían no solo de su relación sino del embarazo, que alguien
de la policía había contado su secreto.
La
inquietud la invadió mientras peinaba a su sobrino agradeciendo que al menos él
se mantuviera ajeno a todo. ¿Qué iba a hacer ahora de ella? Aunque en el segundo
testamento algo fuera para ellos, no estaba dispuesta a recibirlo, solo amaba a
su amante muerto, hoy solo deseaba tener a su hijo y cuidar de Luciano. Pero
era de imaginar que la gente se iría enterando de su relación y estado, ya no
iba a poder permanecer cerca de Edyth ni de Paula para siempre como él le
pidiera tantas veces. Además, también ella, por su parte, se había convencido
de que lo mejor era no aproximarse a más a esa familia. Los hermanos de su
hijo, nunca tendrían por qué saberlo si Edyth y la policía ayudaban. Tampoco
pensaba que la viuda la hubiera perdonado de veras.
La
mirada que le había dirigido la viuda durante la última reunión de ambas, y en
la misa celebrada dos días atrás con apenas parientes y empleados, donde la vio
salir para vomitar, le había quedado grabada en su mente. Lamentaba haber
tenido que llevarse las manos a la boca en el momento de la ofrenda floral
porque seguro que entonces Edyth se había dado cuenta que eran náuseas de
embarazada, y le había preguntado si se sentía bien, pero la mirada decía lo
contrario a las palabras.
Si
se hubiera tratado solo de una amante transitoria de su difunto esposo, seguro
que ella hubiera dejado correr el asunto o lo hubiera olvidado. Pero estando
embarazada… era hasta probable que le llegara desde ella el recuerdo de su
hermana desde diez años atrás y de aquel abandono que se cobró la vida de su
hijo mayor, y ciertamente Edyth debía de sospechar desde antes que ella estaba
embarazada. Pero entre sospecharlo y confirmarlo para alguien que ya no puede
tener hijos, hay gran diferencia.
Hacía
días que le había confesado a Jésica lo del embarazo. Y desde que lo hablaran
frente a ella con Edyth, ella ya no había hablado una vez más del tema. Y, por
supuesto a Elsa no se le habría ocurrido sacarlo a colación. Por eso no tenía
idea de lo que pasaría, menos si alguien lo decía al resto de los hijos o a Paula, tampoco qué pensaría la viuda,
pero ella quería e iba a tener a ese chico.
Cuando
pensaba en qué era lo que debía hacer, la cabeza le daba vueltas. No tenía
esperanza alguna, sabía que debía abortar, pero todo su ser le decía que no lo
hiciera.
Si tenía el niño, no se veía capaz de
procurarle una existencia feliz, tal como le sucediera a su hermana, no quería
verse arrastrada al suicidio, porque además estaba Luciano. Su padre había
muerto, ella misma estaba a punto de perder su trabajo. Estaba claro que si
daba a luz, Edyth ya no le prestaría ninguna ayuda, tampoco sus padres, y por
más que deseaba tener a ese hijo fruto del amor, al menos del de ella, no
encontraba la salida. Y, aun así, los días pasaban y no acababa de decidirse.
Tal vez fuera porque el amor que aún sentía por su amante le impedía deshacerse
de la única herencia que deseaba de este. O tal vez fuera su instinto de mujer,
su última oportunidad de ser madre lo que la impulsaba a tener ese hijo. Ella
tampoco lo sabía.
En
cualquier caso, no tenía mucho tiempo. Debía decidirlo en dos semanas como
máximo.
Había
salido ya del trabajo y se encontraba en la calle intentando tomar un taxi. Fue
entonces cuando alguien la llamó por su nombre.
__!
Señorita, Elsa!
Al
ver quién era, Elsa se sintió todavía más deprimida, el detective se aproximaba
hacia ella con paso rápido.
__La
estaba buscando. ¿Ya se va a casa?
__Sí.
Estoy algo cansada.
Seguramente
el detective sabía que estaba embarazada. Tal vez debería pedirle, que habida
cuenta de su estado, no la cansara demasiado. Sopesó la posibilidad.
__Lamento
molestarla. Entiendo que esté usted cansada. No obstante, me gustaría hablar
con usted unos minutos. ¿Me los concedería?
Ella
desistió de intentar que el desagrado no se reflejara en su rostro.
__ ¿Tiene
que ser ahora mismo?
__Sí,
por favor.
__ ¿Y
tenemos que ir otra vez a la comisaría?
__No.
Podemos ir a cualquier lugar donde se pueda hablar con tranquilidad _dijo
Malvárez y, sin esperar que de verdad ella contestara, alzó la mano y detuvo un
taxi.
El
lugar que indicó estaba cerca de la casa de ella que comprendió que de verdad
iba a ser muy poco tiempo y suspiró aliviada.
El
taxi se detuvo en la puerta de un restaurante familiar. Estaba prácticamente
vacío. Se sentaron, uno frente al otro, a una mesa del fondo.
__Últimamente
en establecimientos como este no se puede fumar creando un entorno favorable a
su estado –remarcó Malvárez con una sonrisa.
Elsa
supuso que lo decía para darle a entender que ya sabía lo del embarazo, pero a ella,
que en esos momentos se debatía entre abortar o no, le pareció una falta de consideración.
__Bien,
en cuanto a lo que iba a comentarme… __preguntó ella sin levantar la cabeza del
vaso de leche que pidió.
__Disculpe.
Será mejor entrar directamente en materia _dijo él inclinándose hacia
delante__. La cuestión, es esta: Las relaciones del señor con otras mujeres.
__ ¿Qué
quiere decir?
__Bueno,
puede usted tomarlo en sentido literal, me gustaría saber si había alguna otra
u otras mujeres con las que estuviera saliendo además de usted.
Ella
se enderezó en el asiento y parpadeó confusa. No se esperaba esa pregunta.
__ ¿Por
qué me pregunta algo así?
__ ¿A
qué se refiere?
__A
si me lo pregunta porque le han contado que había otra mujer además de mí
__dijo ella.
Sin
quererlo, su voz sonó aguda.
El
inspector forzó una media sonrisa al tiempo que negaba con la mano.
__No,
no es que tengamos ningún fundamento
concreto para ello. Que hubiera otra mujer es solo una posibilidad a tener en
cuenta, por eso se lo pregunto.
__Pues no, no lo sé. Ni entiendo por qué
considera eso.
__Como
ya sabe, la víctima falleció debido a un envenenamiento. A la vista de lo que
sabemos, el veneno solo pudo ser colocado por alguien que entró ese mismo día
en su casa. Esa es la razón de que, al principio, usted fuera la principal
sospechosa.
__Pero
ya le he dicho que yo no…
__Ya
conozco su versión. Pero si usted no fue, ¿quién más pudo entrar en la casa?
Por el momento no hemos dado con nadie del entorno, ni en el trabajo, ni en el
ámbito privado, que pudiera haberlo hecho. Ello nos induce a pensar que tal vez
se trató de una persona a la que el propio señor quería mantener en secreto.
Ella
comprendió por fin. Pero no quiso aceptarlo. Era una teoría absurda.
__Detective,
creo que se equivoca con él. Verdad que a veces su comportamiento dejaba que
desear y que además, estaba saliendo con alguien como yo, así que tampoco me
extraña que tenga esa opinión de él. Pero, créame, no era mujeriego. Y lo suyo
conmigo no era un mero escarceo.
__Así
que usted no sospechó en ningún momento que hubiera otra mujer, ¿verdad?
__Eso
es.
__ ¿Y
qué hay de las mujeres de su pasado? ¿Sabe algo acerca de ellas?
__Cuando
dice… pasado, ¿se refiere a las mujeres con las que salió anteriormente? Bueno,
parece que fueron varias, pero él nunca me contó nada en detalle, solo sé lo
que todos acerca de mi hermana.
__Cualquier
cosa, por trivial que parezca, podría ser de ayuda. ¿Hay algo que pueda
mencionar? No sé, cosas como a qué se dedicaban, cómo se conocieron…
Ante
la insistencia de él, ella no tuvo más remedio que hacer memoria, ciertamente,
en alguna ocasión a su amante se le
había escapado algo sobre anteriores relaciones. Y algo de aquello se quedó
grabado en su memoria.
__Solo
recuerdo que alguna vez comentó haber salido con una periodista o algo así.
__ ¿Una
editora?
__No.
Creo que escribía libros y tal.
__ ¿Una
novelista?
__No
sé… Creo recordar que me dijo que era un poco rollo salir con alguien que
publica libros, porque luego tienes que contarle tus impresiones sobre ellos.
Yo le pregunté de qué libros se trataba, y él salió por la tangente, y al final
no me respondió en concreto. Como a mí tampoco me gustaba preguntarle, no
insistí más.
__ ¿Y
aparte de eso y las escort de las que habla Paula? ¿Alguna más?
__Siempre
decía que no le interesaban las mujeres de la noche. Ya sabe, los bares,
actrices, modelos, eso. Por eso iba a veces a esas fiestas organizadas en las que
uno pretende encontrar pareja, para no caer en citas a ciegas. Sin embargo,
también decía que los organizadores infiltraban a menudo modelos o señoritas de
compañía para generar ambiente, y que lo que acababan consiguiendo con eso era
echar a perder las fiestas.
__Pero
a su mujer la conoció en una de ellas.
_Así
parece.
__ ¿Tiene
usted idea si seguía manteniendo contacto con alguna relación anterior?
__Creo
que no. Al menos hasta donde sé. __Elsa alzó los ojos__. ¿Cree que pudo matarlo
alguien de ellas?
__Es
una posibilidad bastante real. Por eso le pido que se esfuerce por hacer
memoria. Los hombres somos más descuidados que las mujeres para ese tipo de
cosas. Siempre nos dejamos algún resquicio abierto o algún hueco sin cubrir.
Siempre se nos acaba escapando alguna mención a una novia anterior o cosas por
el estilo.
__Pues
la verdad es que no…
___
¿Hay algo más?
__Él
más bien era de café, pero hablaba mucho de tés y cuando le pregunté por ello,
me dijo que era por una ex novia. Al parecer a ella le gustaba mucho el té y
siempre le compraba en el mismo sitio. Una tienda especializada.
__ ¿Cómo
se llamaba el lugar?
__Lo
siento, no lo recuerdo. Puede que ni siquiera lo dijera en su día.
__O
sea que una tienda especializada en tés.
__Es
todo lo que recuerdo. Lamento no poder ser de ayuda.
__No,
al contrario, creo que la información puede ser valiosa. Muchas gracias. A
decir verdad le hice las mismas preguntas a Edyth, pero no sacamos nada en
claro. Se limitó a decirnos que el esposo nunca le contó nada, tal vez él tuviera
más cuidado para hablar con su esposa de este tema que con usted.
Ese
comentario, irritó a Elsa. No sabía qué pretendía en el fondo, no iba a
consolarla con esas palabras.
__ ¿Hemos
terminado? __lo cortó.
__Claro.
Lamento haberle robado su tiempo. Sé que está cansada. Si por casualidad
recuerda algo más, no dude en llamarme.
__Muy
bien.
Elsa
se puso de pie sin tomar la nota de consumiciones. Tampoco quiso darle las
gracias por la invitación.
Palermo.
__Pedro,
¿no piensas hablarme durante toda la cena?
__No
tengo nada que decir, pensaba si realmente el profesor cree que ese método lo
usó el asesino en el hervidor.
__Y
yo pensaba en que estás enojado, perdón, casi había olvidado tu estudio. Y no
lo niegues, estás preocupado, y no por el caso.
__Vale,
Guille, vale. Nunca hemos peleado desde conocernos, menos mentido, no será la
primera vez, lo estoy.
__ ¿Me
puedes contar?
__Camila,
su estado no es normal, y para serte sincero, no he pegado un ojo desde que
dijo desear concebir otro hijo… conmigo.
__Pero…
no aceptarás.
__No
me necesita, Guille. No te lo conté más
que al paso porque casi lo había olvidado. Estaba tan mal ella luego de perder
el último embarazo que la convencí de esperar, y solo aceptó si tomábamos
reserva de semen y óvulos, ella sabe dónde están, y tengo miedo que los use,
que sin saberlo yo, en ella o en vientre
de alquiler, termine en meses diciéndome que vamos a tener un hijo, es con lo
que me amenazó en la calle.
__ ¿Qué?
¿Y entonces la viste hoy? ¿Es eso?
__No,
no está para razonar. Cité a Orestes a mi estudio, no quería que se enteraran
todos, le conté lo que pienso.
Le
pedí que haga algo, le di los datos, el sitio. No es anónimo lo que hicimos.
Le
pedí que fuera él, que ordenara la destrucción de las muestras, al menos de la
mía, por la salud de ella quizá debiera hacerlo con ambas, pero solo espero que
no sea demasiado tarde.
__!
Cielito! ¿Es por eso que llegaste tarde?
__Sí,
sabía que te iba a preocupar y quería contártelo una vez que supiera que no
pasaría nada, pero ya te sentí celoso, Guille, no tienes que estarlo, solo
tengo ojos y amor por y para ti, es para lo que fui a mi estudio, si no me
crees puedes llamar a Martín o a Orestes.
Guillermo reptó la mano por la mesa y entrelazó los
dedos de la de Pedro.
__Te
creo, mi amor, claro que te creo, pero
prométeme que pase lo que pase, me lo contarás, estoy preparado, quiero todo
con vos, compartirlo todo.
¿Y
si sucediera? ¿Si Camila usara tu semen?
__Nada,
te amo a ti, seguiré el divorcio, y se vería si tengo o no un hijo, pero no regresaría
con ella, por eso te dije que te amo pase lo que pase, que es decir que nunca
te dejaría.
Ya
Guille, lo prometo, eres mi único amor, siempre estaré contigo, haga lo que
haga ella. Es nuestro… Desafío.
CONTINUARÁ.
HECHOS
Y PERSONAJES SON FICTICIOS. CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES MERA
COINCIDENCIA.
LENGUAJE
ADULTO ESCENAS EXPLÍCITAS.
Elda Ramirez y si los dos guardaban muchos secretosssssssssssssssss, pero más amor, te quiero Eve.
ResponderEliminarKuky Qué miradas, cuánto amor, a la par........hablan!
ResponderEliminarPatricia Precioso!!!
ResponderEliminarVictoria Bellísimo .Gracias
ResponderEliminarMiryam Hoooo!!!!!maravillosa en amor y suspnso, este caso me encanta felíicitaciones.
ResponderEliminarLuisa Preciosa y tiernamente romántica y sensible felicidades, un fraternal abrazo.
ResponderEliminarAurelia Es hermoso!! Y pensar que realmente nos damos cuenta cuando ya no nos aman... Bendiciones
ResponderEliminarKaro Muy bello
ResponderEliminarSol, cinco años del beso, increíble, ¿cuántos de este desafío? Hermoso, un beso Eve.
ResponderEliminarVioney Gracias por compartir tus bellas novelas, me encantó, realmente son muy lindas, encierran mucho de ti.....
ResponderEliminarGraciela MARAVILLOSO Eve Monica Marzetti
ResponderEliminarStella OMG los ojos a Pedro se le iban a salir de órbita mi vidaaaaa!!!! TODITITO en esa mirada, y Guille acariciandolo, intentando creer lo que estaba sucediendo. ..suspiro♡♡♡#Guilledroeterno, perdón Eve, divina Desafío, siempre juntos, es farsantes dos.
ResponderEliminarOlga, qué hermosura, quiero saberrrrrrrrrrrrrrrrr como sigue, gracias
ResponderEliminarPochi Barrionuevo INOLVIDABLE
ResponderEliminarSan en un susurro. Còmo no morir de amor?
ResponderEliminarCarmen Contigo aprendí que yo nací el día que te conocí..
ResponderEliminarAprendí que el amor se siente cada instante.Maravilloso
Blanca Bello
ResponderEliminarDelma Graciela Bello !!!!
ResponderEliminarBeatriz Me encanta
ResponderEliminarGeovanna Maravilloso...
ResponderEliminarTe amo,
Te amo
Carmen Hermoso.!!!”
ResponderEliminarIsabel Bonilla GRACIAS AMIGAAAAAAAAAAAAAAAA
ResponderEliminarMuy bueno Eve...Se complica la trama alrededor del asesinato, y ahora esta novedad acerca de Camila...Ojalá que Orestes llegue a tiempo para impedir semejante locura...
ResponderEliminarEs bellísimo y muy farsantes, de las más, juntos a la par, el caso, genial, me encanta aunque ni yo sé quién es el asesino, doy Prohibido dedicado a NORMA FERZOLA, ES EL CUMPLEAÑOS HOY QUE TE RESPONDO, MARTES, MI AMOR, LUEGO SORPRESAS EN VECINOS MÁS, Y EL VIAJE PARA LA VIEJITA, LUEGO... LA QUE ESPERAS QUIZÁ, NO EL SECRETO DE SARAH, BUENO NO SÉ, TENGO QUE RELEER DÓNDE QUEDÓ, BESOTE.
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