sábado, 15 de junio de 2019

ERES TÚ. CAPÍTULO DIECINUEVE. PENÚLTIMO CAPÍTULO.


ERES TÚ.
CAPÍTULO DIECINUEVE.
PENÚLTIMO CAPÍTULO.


“Perdón por aprender a quererte tanto en tan poco tiempo.
Pero eras aquello que nunca busqué, pero siempre necesité”.
José de Espronceda.
 “Y es que el amor no necesita ser entendido,
solo necesita ser demostrado”. Paulo Coelho.
02 de marzo de 2017.

__Cielito, para fin de año falta demasiado tiempo, me gustaría que hagamos un viaje, solos, como un ensayo de convivencia o de vida de casados, unos días, ¿aceptas?
__ ¿Ahora?
__Por mí, me casaría con vos, mañana, pasado mañana, el año que viene o dentro de diez, te esperaré toda la vida, pero quiero pasar unos días solos, ¿puede ser?
__Me mimas demasiado, déjame ver si sobrevivo a tu madre y te contesto, ¿vale?
Guillermo se sintió culpable por el viaje planeado,  por el dolor que le había causado.
__Bueno, es que es como… es una luna de miel, porque falta demasiado para casarnos… y la tía Gabriela de cuidará muy bien _ dijo sin estar él demasiado seguro de sus palabras.

__No quiero quedarme con ella, apenas la conozco, no es mi mamá.
__ ¿Y por qué no? Es buena.
__Me obligará a comer verduras y tomar leche.
__ ¿Y si yo le digo que no lo haga?
Agustín parecía un principito cuando Daniela lo trajo, y también pensó en la hermosa pareja que eran sus papás. Hacía años que estaba con Pedro, y le quería mucho.

__Te deseo que siempre seas feliz como ahora  __le dijo, enjugándose furtivamente las lágrimas  mientras miraba al nene__. ¿Verdad que están guapos tus papás?

__Sí, son lo más, aunque todavía son mis tíos _ dijo a medias enfurruñado,  el sobrino.

Mientras los contemplaba los admiraba y pensó que eran los señores más grupos que jamás hubiera visto.

__Tú también lo estás.

Daniela le acarició suavemente los cabellos y se acordó de su hijita mientras los veía subir al vehículo. Todo era hermoso, pensó, estrechando con fuerza la mano de Agustín.

Todo se  parecía cada vez más al sueño o ensoñación de Pedro tras la magia de la Navidad del año pasado.
Apenas recién…  comenzaba a cumplirse.

 29  diciembre de 2017.

--¡Feliz día de boda! _ entonaron los dos al unísono, mientras Pedro abría los ojos y esbozaba una somnolienta sonrisa.
__! Feliz día de bodas también a ustedes, chicos…!
¿Cuándo se han levantado?

“Hace  un año que el destino nos unió, no puede decirse que haya olvidado ese pasado donde al enviudar pensé que no había nada más para mí, recuerdo aquello como si de otra vida en la misma se tratase, porque esta se inició en ese choque con Guillermo, en aquella víspera de la Navidad de un año atrás. En este año transcurrido cerramos heridas, las pérdidas dejaron de sangrar, mi madre empezó a salir de su oscura celda, mi sobrino recuperó la alegría, y con ella sus limitaciones quedaron atrás. Vendí nuestra casa pequeña. Guille nos colma de todo, entre otras cosas de esa enorme casa en el Delta que nos alberga a todos, donde la dicha aloja a la gran familia que no detiene su andar.
Comencé a trabajar en su estudio, hoy un “Graziani y socios” como socio penalista, y gracias a Dios y a la medicina,  Matías pudo regresar a Baunes. Luego de meses de tratamiento, con radioterapia y drogas venció  a su gran enemigo, dio las batallas más duras, alcanzó el triunfo mayor por sobre la  enfermedad, acompañado y contenido por el amor de José Miller, quizá por su deseo de ser esposo de ese príncipe que pidiera un año atrás es que hoy están en Europa, para cumplir aquel sueño de casarse un catorce de febrero en París, es por ello que faltarán a nuestra boda, y  lo pienso,  aunque se aproxima ese aniversario de la muerte de mi exesposo, el dolor como daga que hace un año me llevó a desmayar en alcohol este  es sordo, solo un recordatorio de una época que se fue.
Hoy es Guille el dueño de este profundo sentimiento que me embarga y me llena de dicha y emoción. Esa clase de amor y complicidad que hay entre los dos que nos lleva desde el balcón hasta la intimidad de la habitación, que nos invita al amor, que nos incita al placer,
que nos encierra en el maravilloso mundo del sexo, en el universo de la pasión carnal y al mismo tiempo nos llena el corazón de palpitantes emociones, de latidos llenos de luz en la misma oscuridad de la vida y sus días absurdos que no dejan de correr y arrastrarnos con el tiempo sin dar tregua a este amor que suponemos eterno.
Por eso amor, hagamos del tiempo, nuestro tiempo, del amor nuestro amor y de la vida nuestra vida... Una vida de los dos, le digo y me digo.
Y así es, como una mariposa bella y encantada entraste tibio en mi vida  en la luz de aquella hermosa noche estrellada. Y me amaste entre tus misterios y te fuiste hasta la próxima luna llena. Bebe los recuerdos de mi boca, me dijiste. Dejaste, el aroma de tu perfume en mi almohada cuando te fuiste en silencio en aquella triste, dulce y naciente madrugada.
Dejaste, un grito de dolor, de mi amor desesperado con sus sonidos en mi alma y allí estalla, en mi apasionado corazón enamorado. Dejaste huellas de caricias tibias y dulces del amor, hijo de los misterios de todas nuestras ardientes noches, solo de los dos. Dejaste el recuerdo del murmullo de tus silencios en las dulces promesas de tu amor que entre la fría madrugada, no se llevaron los vientos. Era yo quien necesitaba aprender desde tu ausencia lo que era la añoranza del amor, y entender que verte de la mano de mi sobrino que nos conectaba y unía entre las suyas no era una fantasía sino mi nueva realidad.
Dejaste,  tu cabello pegado en mi pecho entre tus lágrimas de cristal de tu amor y tu pasión, y mi corazón deshecho. Dejaste, los más hermosos recuerdos en mi vida y cuando la luna se apiade de la noche tú volverás a mí, mi hombre enamorado, me dije cientos de veces.
Dejaste la pasión encendida de tus besos en mi piel y la huella del rosedal de tu boca con tu aroma y aliento, que sabe a pasiones y miel.
Bello, enigmático, perfecto y masculino hombre de mi vida,  de mis amores de los misterios
habla con la tibia luna de mis noches y ella te dirá de mi amor, y que yo te amo y quiero.
Cada momento, cada instante de amor, contigo se iba. Mañana, mi amor de los misterios  otro momento de tu apasionado amor me llegará. Y así pasó este año, llegó este día que  nos encuentra amándonos en una enorme casa en el Delta, compartiendo a diario una enorme mesa de familias ensambladas, y una sociedad laboral y en la calle, caminando la misma senda.  Me enseñaste que te adoro, que pienso todo el tiempo en ti, que me importa verte bien, que no puedo vivir sin ti, que no puedo ni quiero separarme de tu lado, que quiero estar contigo todo el tiempo y para siempre, que eres el sentido de ser, que nuestros cuerpos son un todo, que si no estuvieras me faltaría la esencia de existir, te amo, Guillermo Graziani”.
Te siento adormecido en la piel  como quien acaricia el pétalo de la más bella y delicada flor…  así se posa por tu piel mi primera caricia, sobre mi pecho descansas, aun con los ojos abiertos siento me llevas a un mundo de sueños donde amarnos con locura o con esa suavidad que nos haga sentir hasta el más  mínimo movimiento  al entregarnos la pasión.
Adormecido, se relaja tu cuerpo sobre el mío, te atrapa un sueño del que me apodero, me hago dueño de tus sentidos que me fueron ajenos hace un tiempo, atrapado  entre mis brazos, me robo tu calor, me dominas al respirar tu perfume que no hace más que llenarme de ansias por amarte, sin perder este instante de ternura quisiera despertar también en vos ahora la lujuria.
Adormecido  me atrapas aquí el cuerpo y el alma, tu pierna desnuda entre las mías, la desabotonada  camisa  que cubre tu espalda, pero que tu pecho  y vientre desnudos dejan sentir a mi piel, se atreven mis dedos a perderse por la suavidad de tus cabellos, esparciendo tu aroma en este aire que dominas aun dormido…  dibujo el contorno de tus labios, viaja mi caricia atada a mis dedos por tu cuello, descendiendo y muriendo en  ese delicioso botón… el centro de tu pecho.
Adormecida tu respiración en mi pecho aviva el amor… este fuego que me quema por dentro, un suave aire se escapa de vos, tu aliento que trae un dulce gemido…  mis poros enloquecen, quieren beber todo lo que de vos regalas  al aire…  me dominas aun dormido, no hace falta que digas o hagas algo para encender mis deseos, basta tan solo sentirte, tenerte para que aun adormecido,  tu piel,  tu alma y la mía no dejen un instante de amarse.

“Te llevo en mis pensamientos, en cada uno de mis verbos, en mis labios con el sabor de tus  besos, en mi piel como un tatuaje. Te llevo en la obra de mi alma incrustado en mi corazón desde que te conocí, no quiero sacarte de mi mente porque te necesito. Quiero que seas mi fiel amante de todas mis miradas, de mis letras, de mis besos, de mis caricias, de todo mi ser, el único dueño de mi corazón y alma. Compartir con vos cada instante que Dios nos permita vivir, soñar en las madrugadas con tu amor dejándome llevar por la pasión en el regazo de tu cuerpo.  Quiero disfrutar de todo lo que me ha faltado por hacer uniendo mis manos a las tuyas,  entrelazando nuestros cuerpos,  bailando danza con vaivenes de pasión y deseo.
Mis noches son eternas pensando en vos mi amor y deseando tenerte junto a mí para hacer una velada de romance con la música de mis caderas besos y gemidos hasta que te rindas y me digas "no más" mi amor.
Y si llegas a mis brazos… No quiero ni pensarlo.  Sé que te llevarás una gran sorpresa
inesperada. Como también sé de hecho que me la llevaré. Encadenaremos esos sentimientos con deseo. Viajaremos al firmamento  a ver las estrellas que hay en el cielo azul hermoso.  Conoceremos el mar de los dos y disfrutaremos en él.  Me contaminaré de tu deseo que sale por tus poros. Me estrecharé contra tu pecho, buscaré tu boca. Besaré tus tiernos y  dulces labios con pasión.  Recorreré tu piel jugando con mi lengua hasta verte trepando
en mi cuerpo. Con ansias de poseerme y hacerme tuyo  entre las cascadas de mi piel.
Soy una adicto por sentir esos labios jugar con mis pezones, estallo al mínimo roce, adoro ver tu rostro en el  éxtasis que yo y solo yo te provoco. Quiero sentir tus manos acariciar
mi entrepierna que me haga vibrar de emoción, salga de mi fuente el manantial de pasión que será el deleite para tu paladar. Me penetres con deseo todos  tus aromas, me hagas desfallecer entre tus brazos desajustes de lujuria y pasión hasta volver  a caer rendido entre tu piel otra vez”.

Hoy quiero amarte y ver más allá de tus ojos, besar tu boca intensamente, y así robarte hasta el aliento, hoy quiero amarte y sentir en mis labios cómo se va erizando tu piel, cuando te recorro bebiendo el néctar de tu cuerpo, por eso amor, quiero amarte sin cordura, haciéndote lentamente mío, y seguir descendiendo  hasta lo más profundo de tu ser y así sentir cómo nos fundimos,  en una entrega enardecida de pasión, hoy quiero amarte así,  sentir los gemidos del placer, para que al fin podamos eternizar nuestros deseos, por eso amor mío, hoy tan solo quiero amarte, una y otra vez.  Creamos citas en secreto llenas de intenciones, unas buenas con sabor a manos imprudentes,  un beso cerca de los labios acariciando el olor de tu presencia, cena con ingredientes afrodisíacos,  miradas indiscretas, gestos tentadores, risas llenas de misterios, toques con astucia,  palabras destinadas a  la verdad después de un licor que provoca la libertad en nuestros actos, música romántica placentera a oídos que escuchan las letras de canciones obligándonos al baile,  cuerpos moviéndose al compás de los deseos de la mente, sin querer nos provocamos ,  manos entrelazadas,  roces de la piel que incitan al abrazo de sentimientos mutuos de vivir una locura deseada, noche interminable complacidos por la luna, esperamos los rayos del sol,  sueños vividos con intensidad, realidad poseída por las dudas. Despertamos prisioneros de la incertidumbre de haber vivido al borde de una verdad en sueños,  producida por ideas amadas,  enajenadas con razón o una mentira de nuestra realidad absurda en la sensatez de amar con placer, nunca encontraremos las respuestas de los misterios de la mente,  solo debemos caminar buscando el amor sin entender de qué forma llegó a nosotros.


__El universo conspira con esta pasión que siento, la delicadeza con que me abrazas, al sentir tu piel, tu boca, tus besos, me has cautivado con tu dulce mirar, me entrego a ti, así completo, toda mi esencia, esclavo ante tu desnudez, me fascinas, me enloqueces, delirio eres y no controlo mis sentires, loco ante los placeres, ante el deseo de pertenecerte.
Amor eres inefable, así te llamo porque eres lo más sublime, el tiempo contigo no quiero que se termine, en nuestros cuerpos hemos encontrado las más jugosas mieles, la gloria misma de sentirme amado, esta noche soy libro abierto en donde seré tu poesía tatuada, tendrá cada letra grabada en mi piel con tu nombre, esta noche contigo me siento en el paraíso.
Quiero fundirme en tu cuerpo,  que solo tu alma me sienta aspirar el rico aroma de tu piel estremecida, mis manos quieren conocer tu cuerpo, oír cómo late tu corazón, oírte gemir, y gritar mientras yo solo te beso, acallando tu boca, eres la hoguera de mi pasión, la ansiedad de mi cuerpo, despertando nuestros sexos, muero por hacerte el amor, en estos momentos quiero ser tu amante comiéndote a besos, somos fuego y llamas, desnudando nuestras almas, sin pudor, sin miedos, bajo las estrellas , bajo la luz de la luna. Cierro mis ojos porque así quiero que me ames, eres el culpable de enloquecerme, de conocer todas mis fantasías, de seducirme, fusionando nuestras esencias, incitando a provocar encuentros más excitantes.
No sé quién eres ni de dónde vienes solo sé que al conocerte algo en mi cambió, llegaste a llenar un vacío que llevaba dentro y sin darte permiso entraste al corazón y es que tus ojos, tu cuerpo, tu voz y tú todo están llenos de magia, haciendo que tu esencia produzca en mi interior un torrente de sensaciones que me invitan a soñar, apenas has llegado y ya has desatado en mí una locura extrema y sentimientos que yacían dormidos hoy palpitantes y ansiosos están por amar y amar, ¿pero qué es esto,  qué me está sucediendo? nunca antes me había pasado  y en tan poco tiempo  ya llevo un “te amo”  preso en mis labios y al estar cerca de ti  el corazón se acelera y mil suspiros se escapan al sonido de tu voz.
__
 Al terminar el desayuno, Guille se fue casa de Alberto para vestirse, contra la tradición y todo temor anoche dormimos juntos y con mi sobrino en la cama como cada vez Guille permitió. La ceremonia es a las doce, aún tengo mucho tiempo para darme un baño y arreglarme, pero quiero ayudar con mi madre y con el nene.  Sabemos que sigue triste como en marzo cuando  al fin lo llevamos a aquel viaje que terminó por ser de tres, y protesta por quedarse sin nosotros. Como sorpresa y compensación tenemos para mostrarle un papel que es mucho más que eso, es  la forma de legalizar que ya no es solo mi sobrino, que tiene dos papás. Desde que supo lo adoptaríamos ya nos llama así, papás.  No ha olvidado a mi hermano ni a la mamá que lo llevó en la panza, es más,  me pidió ir al cementerio, de la mano condujo a Guille a las tumbas, y quiso explicarle que allí estaban ellos, que  estaban en forma física aunque sus almas seguían entre nosotros, y junto a él por lo que ya no estaba triste ni lloraba, ahora tenía dos papás y un hermano que lo ama, Fabián estaba a su lado.

Daniela peinó cuidadosamente el cabello de Agustín, y el atuendo de camisa blanca, y traje celeste con sus gemelos de oro regalo de los papás, lo convirtieron  en un angelito cuando salió de casa tomado de la mano de Pedro para subir al automóvil que los llevaría al registro civil.
Por su parte, Pedro lucía un  esmoquin de terciopelo negro de Dior, con zapatos a juego también de marca, camisa blanca, y gemelos de oro, con el brillo del cabello   compitiendo con el de la mirada colmada de emoción. No pudo saber hasta encontrarlos, que de la casa de Alberto salía su príncipe, producto de la magia de la Navidad del año previo, vestido de manera similar, con Fabián orgulloso de papá enamorado al fin, de un varón pero feliz lejos de la farsa que viviera por años con otros o junto a sus dos mamás.

 Todo era hermoso, pensó Pedro mientras en el coche estrechaba con fuerza la mano de Agustín. El chiquillo lo miró sonriendo, era un gran día al fin para los dos.
Guillermo los aguardaba en el civil, enfundado en un traje azul oscuro y luciendo su mejor sonrisa al pasear la mirada y reconocer a los invitados ya ocupando sus asientos y se daba cuenta por fin de lo que sucedía. Lo que hasta entonces había sido un sueño, ahora estaba a punto de convertirse en realidad. Levantó la vista y vio a su madre, increíblemente elegante enfrascada en una charla con Amalia en la primera fila de bancos. Sin embargo, de súbito todo el espacio que lo separaba de Pedro pareció llenarse de una energía magnética, haciendo que el resto de sonidos y de gente se diluyera como si se hubiese sellado entre ellos el espacio cuando encontraron las miradas, se anudaron,  se ataron,  se entrelazaron y el resto desapareció, eran solo ellos…  conscientes de la presencia del otro, deseando  compartir el mismo espacio que ocupara el otro, respirar el mismo aire, ser el uno en la vida y mucho más que la suma de uno más uno, que dos.
Solo quedó fijado en ver avanzar a Pedro, más guapo y elegante que nunca, mientras sonreía con sus hoyuelos y se deslizaba lentamente por el pasillo de la vida para iniciar una nueva  con él.

__Señor Guillermo Graziani, ¿acepta por esposo al señor Pedro Beggio?
__Sí, acepto.
__Señor, Pedro Beggio, ¿acepta por esposo al señor, Guillermo Graziani?
__Sí, acepto.
--Por el poder que me confiere la ley, los declaro unidos en matrimonio igualitario.

El beso no fue uno más, en  otro plano alejado como único fondo escuchaban aplausos, pero la boca de uno desapareció en la del otro, literalmente el ansia de uno devoró al otro. Guillermo  penetró y dominó  esa boca con el señorío de quien se siente el dueño de ese hombre, y le hurgó las encías, le saboreó los dientes, paseó el paladar y llevó a la lucha a la lengua de Pedro antes de profundizar en cada recoveco hasta la garganta, sabiendo se estaban ahogando, gimieron pues no deseaban detener el beso, querían morir en esa entrega e intimidad de aliento único, de la misma saliva, del mismo sabor, envueltos por el aroma del otro, por el perfume que se hizo el mismo, y allí estuvieron hasta que necesitaron recobrar el aire para no morir, sintiendo un tironcito en la tela que era la manito del niño que buscaba su porción de aquel amor.

__Solo unas palabras. Al amor que es como decir a Pedro _ dijo un Guillermo emocionado con la mirada brillante y la voz cascada y ronca…
Con las brisas de la noche he sentido tu voz en un "te quiero" mi amor y he alucinado con el eco de tu querer. Me pregunto si tú sientes algo parecido a mí que es tan claro como las aguas de un manantial para calmar mi sed de soñar con vos. Vivo con las ganas de volverte a ver y cortar los hilos de esta marioneta de los sentimientos en que vivo yo.
Me pregunto  si algún amor ronda por ahí, los celos me devoran sin poder pelear por lo hermoso de tu ser apenas te apartas a  un metro de mí. Estoy enamorado y yo sé de quién porque conozco tu corazón que  en miradas lo reflejas y enciendes  en mí esta llamarada de amor que con tu pasión se vuelve carnal. Estoy a la orilla del mar de mis locuras cuando apareces con sigilo y me haces volar en el deseo de naufragar en los brazos de tu pasión y a tu lado quedarme con mis alas paralizadas, siempre con vos, te amo _ susurró antes de aclararse la voz y los dos dirigirse a la gente querida que acallaron las voces.

__Un día… Te cruzaste en mi camino,  me hablaste tiernamente a mi oído, caí preso a tus brazos,  tus miradas me robaron mi bello y tierno corazón.
--Un día, y es literal _ rio Pedro__.  Te vi en el arcoíris de mis ojos,  te alababan mis besos y caricias que te hacían soñar despierto entre el jardín de mi ser.
__Un día…  Llegué despertando tu alma dormida con la vibración de mis pensamientos,  me hice dueño de tu mente y recorrí todos tus anhelos con las estrellas de mis ojos.
__Un día…  Fuiste mío en cuerpo y alma,  yo tuyo,  nos fundimos juntos en el fuego de la pasión,  me hiciste contar una a una las estrellas en el firmamento.
_Un día…  Fui a parar en el túnel de tus deseos y bebí del cauce de tu piel la esencia de tu ser ahogándose mi cuerpo de placer en las olas de tu mar.
_Un día…  Me abrazaste tan fuerte que sentí el dolor de tu alma abrazar la mía con tristeza.
_ Un día...  Te perdí en medio del silencio de la noche y los testigos fueron la luna y las estrellas que nos acompañan en esa triste despedida.
_Un día…  Dejé que descansara de mi llanto y ese día grabé en mi memoria su imagen para siempre recordarlo.
__Un día…  Sí,  un día como hoy sigo alucinando con sus recuerdos que me hacen suspirar  y a la vez llorar con sentimiento, porque al día siguiente regresamos uno al otro para perdernos en el abrazo, de almas que supieron ya no deseaban hacer uso de la famosa independencia, que ya no entendían esa falsa libertad, si no era la real que solo da el Amor.
__  Sin los ripios de las emociones, dejé fluir el pensamiento libre. Tus cabellos  brillan como con luz propia tras el dorado atardecer en  una playa. Tu perfil de hombre  en la eterna alegría de vivir, tu rostro iluminado con los resplandores de la pureza. Tu figura transparenta un aura del azul al blanco luzca. Adelanto los detalles de este futuro inmediato,  encuentro
que nos hemos permitido tú y yo, aquí en este fin de mundo lleno de jardines impregnados  de mariposas. Aquí nos hemos permitido amarnos sin reservas. Lluvia de pétalos de multicolores flores nos lanza el destino feliz, tu mirada se pierde en la mía en esta hora de increíble alegría,
se encenderá en besos y caricias mientras el agua nos baña. En la penumbra de un recuerdo,
veo un mar de cerezos en flor y las abejas en su carrera hacia la miel, toda la naturaleza se confabula para nuestro amor. Seguiremos juntos en este último viaje, con la ilusión de llegar a buen puerto. Nada nos impide mi amor, somos dueños de nuestros sueños, juntos hemos construido este espacio, el tiempo y Dios  nos ha unido, para caminar juntos, el resto del camino.
__
La recepción en un salón de fiestas en un hotel alcanzó un gran éxito y todo el mundo se lo pasó muy bien en la terraza, admirando el soberbio panorama que el río y la ciudad se confabularon en dibujar. El hotel no era tan lujoso como otros, pero quizá tenía más encanto. A Pedro le gustaba muchísimo, y Guillermo estaba de acuerdo con él. Ni siquiera su madre tuvo nada que objetar. Guillermo abrió el baile con ella, y Pedro lo hizo con Amalia. Al final los dos tomaron de la mano a Agustín a y a Fabián y los hijos se emocionaron de ser incluidos en el ritual.

__Bueno, muchachito, ¿qué te parece todo esto? ¿Te gusta?
__Sí. Mucho.

El niño parecía nuevamente feliz, pero Guillermo seguía preocupado por él como en marzo le hizo saber a Pedro. Se tomaba muy en serio sus nuevas responsabilidades paternales hasta el punto de que Pedro volvió a tomarle el pelo, la víspera. También él estaba preocupado por el niño del que apenas se había separado en seis años, pero sabía que Gaby y Daniela lo cuidarían muy bien, y además se sentía con derecho a disfrutar de su luna de miel, qué caramba, al fin solos.
__El sentido de la culpa es muy importante para mí _ dijo Guillermo en susurro mientras trazaba el contorno de la oreja con la punta de la lengua percibiendo el trepidar de la piel_. Al menos desde conocerlos.

__Utilízalo para otras cosas. Agustín estará perfectamente atendido.
 Tras bailar juntos se trasladaron al buffet repartiendo saludos, estrechando manos, desparramando sonrisas, demorándose en alguna mesa y eligieron todo cuanto quisieron, el nene llamativamente quedó junto a Mirna cuando sus papás se fueron a bailar de nuevo.

__Hola _ dijo Agustín a Mirna__. Me gusta tu sombrero. ¿Qué clase de piel es esa?

La pregunta pilló desprevenida a Mirna, la cual estudió detenidamente al niño, y pensó que era una criatura preciosa y muy  educada, a juzgar por lo que había visto hasta entonces.
__Es visón.
__Te queda muy bien con ese vestido. __ El vestido tiene el mismo color de tus ojos, ¿te has dado cuenta?

El niño estaba fascinado por todos los detalles y Mirna lo miró sonriendo sin poderlo remediar.
__Tienes unos ojos muy bonitos.
__Gracias. Son como los de mi mamá. Mi papá y ella murieron, ¿sabes?
__Lo siento mucho.
__Yo también, pero ahora Pedro y Guillermo son mis papás y por eso ya no estoy triste.
Lo dijo como si nada, con la boca llena de un  bombón, Mirna se compadeció súbitamente de él. La vida no debía haber sido fácil para Pedro y el niño antes de que Guillermo se cruzara en su camino. Su hijo se le antojaba un salvador de dos almas heridas y solitarias, cosa en la cual tanto Agustín como Pedro hubieran estado de acuerdo con ella. Solo Guillermo hubiera discrepado, tal vez.
Mirna no sabía qué otra cosa decirle al niño más que lo siento.

__Yo también los extraño a veces, pero ahora tengo papás nuevos _ dijo Agustín, mirando con orgullo hacia la pista mientras los ojos de Mirna se llenaban de lágrimas. Inesperadamente el chiquillo agregó: __Tengo a Fabián y tú eres la nueva abuela que tengo, ¿verdad?

__Ah _ dijo Mirna, avergonzándose de que el niño la viera llorar. Después, se inclinó hacia delante para  acariciarle la carita__. Es muy amable de tu parte. Tú eres mi único nieto pequeño, Fabián es un hombre ya.

El niño la miró con adoración al tiempo que le tomaba y apretaba la mano.
__Me alegro de que seas tan buena conmigo. Antes de conocerte, tenía un poco de miedo. __Guillermo los había presentado aquella misma mañana en el civil__. Pensé que, a lo mejor, serías una vieja fea y antipática.

__ ¿Eso te dijo Guillermo? __preguntó Mirna, horrorizada.

__No _contestó el niño, sacudiendo la cabeza __. Dijo que eras maravillosa.
 Mirna esbozó una radiante sonrisa de felicidad. El chiquillo era adorable, pensó, dándole unas palmadas en una mano mientras tomaba un pastelillo de una bandeja para entregárselo. Agustín lo partió por la mitad y le ofreció uno de los trozos. Mirna se lo comió sin soltarle la mano.
Cuando los papás fueron a cambiarse de ropa, ambos ya se habían hecho muy amigos. Al ver que se iba su tío- papi, el niño se puso a llorar en silencio. Fue entonces cuando Guillermo lo vio desde el otro extremo del salón y corrió, presuroso, a su lado.

__ ¿Qué pasa, tesoro? __le preguntó, agachándose para rodearlo en sus brazos.

Mirna se había ido a bailar con Marcos.
__No quiero que tú y papi se vayan _ contestó Agustín llorisqueando.

__No estaremos fuera mucho tiempo.

Para el nene un mes se le antojaba una eternidad. Guillermo pensaba en su fuero interno que eras demasiado tiempo para dejarlo solo al cuidado de su socia y la niñera aunque se quedara Fabián con ellos. En aquel instante, apareció Gaby, y Agustín rompió a llorar. Mientras, más tarde regresó Mirna, y el niño se aferró a ella como si la conociera de toda la vida.

__Pero, bueno, ¿qué ocurre acá? __Guillermo se lo explicó y Mirna se compadeció del niño__. ¿Por qué no se lo llevan con  ustedes? __le preguntó a su hijo en voz baja.

__No creo que a Pedro le pareciera una buena idea… Es nuestra luna de miel--- __contestó Guillermo.

Su madre le dirigió una mirada de reproche y después miró al lloroso chiquillo.
__Nunca te lo perdonarías. Ni él. ¿Cómo podrían divertirse pensando en él en este estado?
__Te quiero, mamá _ dijo Guillermo, sonriendo.

El sentimiento de culpabilidad siempre daba resultado.
Momentos después. Guillermo fue en busca de Pedro y le dijo lo que pensaba.
__No podemos llevarlo otra vez con nosotros, Guille. No tenemos el equipaje preparado, ni hemos reservado habitación para él en el hotel...
__Ya conseguiremos una… En caso necesario, buscaremos otro hotel…
__ ¿Y si no encontramos habitación?
__Dormirá con nosotros _ contestó Guillermo, sonriendo__. Y haremos otro viaje, el tercero, el de real luna de miel más adelante.

__A este paso será cuando él se haya casado amor. ¿Qué te ha pasado? _Pero Pedro se alegraba de haber encontrado a un hombre que amara tanto a su sobrino, hijo ya, pensó en su hermano y le pareció verlo sonreír. Él también sentía escrúpulos por dejarlo, en cierto modo, le parecía más fácil esta nueva solución__. De acuerdo, vale. Y ahora, ¿qué? ¿Corremos a casa a hacer sus maletas o  va con lo puesto y le compramos de todo al llegar?

__Vamos, a la mayor rapidez posible, tenemos tiempo. __Guillermo consultó el reloj, salió de nuevo a la zona de recepción, le dio un apresurado beso a su madre, abrazó a los amigos y tomó a Agustín en brazos precisamente en el momento en que aparecía Pedro y empezaba la lluvia de arroz y pétalos que Gaby se empeñó en sumar. El niño se asustó, temiendo que aquello fuera la despedida. Sin embargo, Guillermo lo rodeó fuertemente con los brazos y le murmuró al oído: __Te vienes con nosotros, ganaste de nuevo. Pero cierra los ojos para que no te entre ningún grano de arroz y no hagas enojar a papi o te deja.

El niño cerró los ojos con fuerza y sonrió alegremente mientras Guillermo lo sostenía con un solo brazo y tomaba la mano de Pedro con la suya libre. Corrieron hacia la salida bajo una lluvia de pétalos de rosas y arroz, y al cabo de unos instantes subieron al automóvil para regresar a la casa a toda prisa.
Hicieron una maleta de Agustín en dos minutos, incluyendo bañadores y ropa que le había regalado Guillermo, y consiguieron llegar a tiempo al aeropuerto. Quedaba una plaza en primera clase. Guillermo compró el billete y pensó que ojalá tuvieran la misma suerte en el hotel. El niño los miró sonriendo con devoción cuando subió al avión. ¡Lo había conseguido otra vez! Se sentó sobre las rodillas de Guillermo y, más tarde, se quedó dormido en brazos de Pedro mientras volaban rumbo a destino.

__Te amo señor Beggio.
__Yo a ti también señor Graziani __respondió Pedro en voz baja para no despertar al niño dormido.---Lentas imágenes paganas iluminan mis ganas de amotinarme cual turba, entre tus mágicas curvas. Un deseo incandescente, seductor y atrayente, se aviva poco a poco, produciendo suspiros locos... Tus caderas alocadas, se mueven como oleadas, mi cuerpo se sacude, en secuencia de aludes...
Todo alrededor se mezcla, tu perfume, mi fragancia, tu cadencia, quejidos, testigos mudos,
del cóctel de nuestros jugos... Voracidad asesina que no daña ni lastima, sensaciones atrapantes de dos cuerpos jadeantes... Me llevaste sin recelo hasta el mismísimo cielo, nada fue predecible, en este sexo increíble... Ni siquiera nuestro encuentro, espontáneo, un momento, de explosión lujuriosa, como música armoniosa.
--Me sentiría halagado de ser esa parte del tiempo que se doblega a tu belleza cuando en el futuro tu cansada persona se rinda conmigo en el mañana. Sería dichoso si me obsequiaras las migajas de tu hermosura,  las sobras de tus besos en los pensamientos de tu boca, las caricias de tu intención que se pierden en tu sentir o que por el olvido de tu corazón se derraman entre tus dedos. Que me regalases algún secreto furtivo del alma de tu almohada y el deseo de tu piel extraviado entre las sábanas de tus noches solitarias. Sería feliz como el mañana te otorga la belleza plomiza de la serenidad, el encanto de la madurez certera en tu rostro envidiable,  la cándida hermosura del esplendor de tu ser. Sería gozoso que me otorgases tus experiencias,  que mezclases tus vivencias con mi vida, que me descubrieses tu mundo como yo te descubro a ti en el misterio de tu ser. Sería maravilloso que me prestases un bastón para caminar contigo en alguna playa solitaria, compartir un banco de otoños con hojas de recuerdos y que me prestases tus ojos del pasado para seguir queriéndote ayer, como te quiero hoy. Y sería glorioso, sublime contemplar el desvanecer de tus arrugas cuando la muerte nos devuelva en el tiempo del principio para seguir amándote en un futuro infinito que nunca se alcance.
Dispondremos de muchas oportunidades de amar pero solo dispondremos de una sola vida y una sola persona que comparta el resto de nuestra existencia.

Luego, Pedro apoyó la cabeza contra el hombro de Guillermo y estuvo durmiendo hasta que llegaron a las islas Hawai.

__Cielito, despierta.
__Mmm.
__Parece que dormiste bien.
---Tras su ausencia de unos días, mi subconsciente se tomó la venia de soñarlo a usted, y con el corazón en las manos, no sé, si darle las gracias a él, o pedirle perdón a su persona. No sé si fue lo que siento, o este deseo que me martirice, abriendo mi piel, rompiendo mi carne. Reclamo sus disculpas por mis manos atrevidas desnudándolo, por mis labios conspiradores, de mis besos pretenciosos de su dermatología. Perdone a  mis dedos por distraerme en su ropa,
por jugar a escondidas entre sus labios. Disculpe usted la hipocresía de mi vergüenza, la ironía desvergonzada de robarle los suspiros, a morbosidad de sus jadeos, mi sarcasmo pervertido del placer de sus orgasmos. Perdone usted este subconsciente inconsciente que lo vive y lo siente. Seguiré aquí esperándolo, tras el cristal de mi ventana y  mis sueños por si nuestro niño se colara en nuestra cama.
__
 Habían reservado habitación en el Mauna Kea Resort Hotel y los dioses les fueron nuevamente propicios. Consiguieron dos habitaciones contiguas a cambio de la suite que habían reservado previamente, pero, por lo menos,  no tendrían que dormir los tres juntos… excepto algunas noches.  En las otras sin embargo, de nada sirvió, porque también había un monstruo debajo de la cama  del hotel, y Agustín se pasó casi todas las noches durmiendo con ellos en la espaciosa cama hasta que despuntaba el sol por encima de las palmeras.
Fue una luna de miel tripartita que jamás podrían olvidar, pensó Guillermo, mientras sonreía mirando tímidamente a Pedro por encima de la cabeza del chiquillo. A veces se limitaban a permanecer tendidos en la cama riéndose de la situación.

__Ahora también yo estoy casado contigo _ decía Agustín y ellos reían.

__París en primavera, ¡te lo juro! _dijo Guillermo, levantando una mano como campista mientras Pedro le miraba entre risas.
__Siempre y cuando nuestro niño no se ponga a llorar y te dé  lástima… Matías y José nos esperaban.
__No, esta vez te lo prometo… ¡No sentiré remordimiento!
__! Ja, ja!

Pero a Pedro no le importaba. Se inclinó sobre la figura dormida de Agustín y volvió a besarlo. Al fin y al cabo, aquella era su vida y querían compartirla con el niño. Fueron tres semanas deliciosas y los tres regresaron de su luna de miel morenos, felices y relajados. A la vuelta, Agustín presumió ante todo el mundo, explicando que había  ido en viaje de luna de miel con sus papás. Fue un recuerdo imperecedero para los tres.

Besos de enamorados, humedad y sabor de ternuras y dulzor de labios en flor para que florezca el amor. Te roba las inocencias para desear y tentar  provocando a la boca a buscar el néctar de la pasión. Incitando a la piel, a buscar horizontes en ese sol ardiente del placer.
Besos de enamorados reflejos del corazón que late en labios acelerados por el contacto de esas bocas acarameladas y apasionadas que son el imán, de una pura atracción como el beso de amor. Tómame entre tus duendes y tu melodía, en el furor almendrado de tu  pelvis, cuando dejo al ladrido despierto de mis manos  amparar el silencio de tu piel. Que atenta tus miradas en su  entrada, tu mar de aguas y olas, la ventaja de unos glúteos reservados, a mi gárgola de puentes y castillos. Tú busca la cercanía del horizonte, donde se descompone tu brisa, en quejidos suaves, donde trago la saliva de la suerte, y mis ojos parpadean una frase. Yace desnuda entre pompas, buscando estoy tus arrecifes, pícara subasta, abierta la finura, donde busco esconder la tentación. Ya estamos completos, solo nos queda una eternidad.
Un fulgor de reminiscencia tan vivo se pasó por mi mente, observo la alborada a través del ventanal de mi morada, me abrazo con algo de nostalgia contemplando los recuerdos viejos que no he podido olvidar.
_Al cerrar mis ojos, vivo de nuevo aquel destello de nuestra pasión, descanso en el mismo sillón donde nos amamos muchas veces con furor, miles de cosas se cruzan por mi mente, de momentos intensos que despertaron todos mis sentidos, haciéndome vivir tu cariño que aun tanto extraño.
Mil lágrimas me envuelven sin querer, las velas de mi aposento iluminan esta melancolía, o simplemente hasta entienden mi vacío de tu presencia, mientras el fuego de mi chimenea ardía, brindándome y reemplazando el calor que tú ya no me das, abriga mi llanto que se corría sin cesar.
Fui afortunado al haberte tenido entre mis brazos, al haberte amado en cuerpo y alma, me hace sentir bien pensar en ti, aunque seas solo un recuerdo que conquistó mi corazón, quedándome perdidamente enamorado de ti.
Tomo a mi mascota, la arrullo contra mi pecho y le hablo de ti desahogando mi sentir, él solo me observa lamiendo mis lágrimas.
Junto a él y a esta gris tarde, borro tu memoria intentando esconder mi corazón por siempre.  Mas entonces apareces, y con esa mirada que me atraviesa, me recuerdas que entre nosotros no puede haber un adiós.
Final del formulario
--Disfruta leyendo y besando, "así no perderás tu lengua."
Ama aunque tu mundo parezca una telaraña con el corazón roto y trizas de cristal que hiere como perdigones.
Hay corazones en mundos corpóreos con mentes bipolares; de repente cambian como las fases de la luna, y son estaciones bruscas donde la tormenta la apacigua una oleada de tormentas que llevan a la desestabilidad emocional.
Si eres el fabricante de tu telaraña, puede que no te quedes atrapado en ella, pero sin darte cuenta ya eres dependiente de estar viviendo en una red sin valores.
El amor no se compra ni vende, tampoco se puede jugar con los sentimientos porque la confianza mata y la costumbre se vuelve rutina en hilos invisibles que te atrapan porque vives ahí.  Mi faro sigue enviando señal, mientras yo sigo observando, aguardando que aparezca esa barca perdida en la tormenta y que zozobra en medio de la nada, tambaleando y tratando de salir a flote. ¿Quién puede y desafía la tormenta? -Solo aquel que no le teme a los desafíos del corazón, que se aferra al timón y el vuelo de la gaviota le hace sentirse con alas para seguir en la lucha mientras permanezca con vida y logre encontrar la luz que le guiará a tierra firme.
¿Dónde estará mi sino que su amor no es fácil de encontrar? -no lo he encontrado en mis libros ni fábulas; tan solo delirios y aventuras donde pequeñas conquistas hacen quijotescas aventuras para un gran soñador que sabe de las beldades en jardines florecidos y pétalos de rosas con espinas hirientes.
Cuando aparezcas, desnúdate ante mí; no tengas miedo que lo corpóreo es el espejo del alma y la belleza interior, y sin contemplar la puerta, no se verá el templo ni la señal de bienvenida.
Estoy ebrio de las aventurillas, y estas ya no me sientan bien; busco ese fiel guerrero que allá en la distancia me contempla a través de mis escritos cargados de amor: ven ahora, muestra tu coraje y dale rienda suelta al amor, que el acorazado ha atracado en el puerto y no quiere volver a la mar, porque quiere otra clase de turbulencia; la del amor y pasión que brinda la vida en pareja y allá en mi bohío. Me cansé del amor en migajas de cada puerto, me dije poco antes de hallarte cielito y Alguien me escuchó.

__No son solo sentimientos, es lo que me haces sentir, lo que juntos descubrimos y empezamos a vivir. No es el amor que me das, si no el que hiciste nacer en mí, toda esta inmensa pasión que hace humedecer mi carne al roce de tus caricias al contacto de tus manos y esa boca enardecida, desesperada y sumisa que se perdió sin medida dentro de esta boca mía. No es solo lo que siento,  es un sentimiento intenso que tú me hiciste sentir,  sin haber ningún motivo yo me perdí entre tus aguas y allí quiero seguir.
--Amarte es un privilegio que me otorga la vida, eres un regalo del cielo, la prueba misma de que Dios sí existe, la respuesta a mis oraciones,  me siento bendecido  por quién tú eres, eres el amor que cura toda herida que haya existido,  eres la alegría que borra toda tristeza que haya sentido, eres la fuente inagotable de amor y ternura,  eres la inspiración, el motivo de la pasión y el placer,  toma mi amor  te entrego mi vida, con eso te pago  y el resto que queda lo iré completando amándote con todo mi ser…  haciéndote feliz, día tras día.
__Me hiciste tocar el cielo. Yo no sabía ni me imaginaba,  lo que era tocar el cielo,  hasta que hice el amor contigo.  De tu boca deseaba un beso,  un beso lleno de pasión  y al hablarme,  no solo besaste mis labios,  me besaste hasta mi alma. De tus manos deseaba tu calor,  y no solo abrigaste mi piel, abrigaste el frío que en mi ser,  yo sentía. De tu mente deseaba tus pensamientos,  ahora tú me habitas  todo el tiempo,  en mi mente y en mis sueños.
 De tu pecho deseaba que fuera  mío tu corazón,  ahora no solo tengo tu corazón,  ahora mi corazón es solo  para ti. Hicimos el amor de sueños  y fantasías, fuiste mío por un momento, y ahí en la oscuridad de la noche,  te hice el amor,  entre sábanas ocultas  de mi corazón. No hizo falta ni lencería,  mucho menos perfumes,  ni accesorios,  solo con tu voz me hiciste  sentir el más hermoso  y deseado,  simplemente la gloria  me hiciste alcanzar. Ahora sé,  lo que es hacer el amor,  contigo aprendí  que las noches se hicieron para amar  entre voces la gloria se puede alcanzar. Aunque hoy ya no estás aquí, cada noche me limito  a recordar  aquellas largas charlas  que culminaban hasta el amanecer. Eres la historia más bonita  que el destino escribió en mi vida.
__
Los meses pasaron volando porque todos estaban constantemente ocupados.
 Guillermo y Pedro no daban a basto en las causas penales, por otra parte se ocupaban de llevar y buscar a Agustín del colegio, Fabián estaba todo el día en la facultad, y Amalia se ocupaba de la casa con Daniela y la empleada, estaba tan recuperada que lo hacía a gusto e incluso invitaba amigos a tomar el té o a cenar.
Junto con Guillermo en los ratos libres llevaban el jardín, tenían unos rosales preciosos y un huerto en la parte de atrás que cuidaban con esmero. Abril llegó sin que se dieran cuenta, y una convención los tentaba en Nueva York, deseaban ir, esta vez solos. En cierto modo les hubiera gustado llevar también a los chicos pero Guillermo había prometido que la tercera vez sería una auténtica luna de miel. Por suerte, consiguieron resolver la situación de la mejor manera posible. La convención apenas duraba tres días, Guillermo planeó el viaje esperando vacaciones del nene, y decidió llevar al niño a casa de su madre. Agustín se puso tan contento que ya no le importó no ir a Europa con ellos.

__Y, además… _ anunció en el avión__, iremos con la abuela a Radio City Música Hall y a Broadway.

Sería una gira triunfal. El Museo de Historia Natural, para ver dinosaurios que estaba estudiando en la escuela, el rascacielos del Empire State, la estatua de la Libertad. Estaba impaciente por llegar  y Mirna por tenerlo consigo, tal como pudo deducir Guillermo a través de las conversaciones telefónicas con ella, que eran más relajadas últimamente.
 Pedro llamaba a Mirna solo para saludarla y tenerla al tanto de las noticias, pero lo que más deseaba Mirna era hablar con el chico. Era curioso que se hubiera encariñado tanto con el niño, pero el caso era que Agustín la idolatraba. Le encantaba tener una abuela en Estados Unidos y un día le preguntó a Guillermo solemnemente si podía usar su apellido en la escuela.

__Pues claro que sí _ contestó emocionado él, y un tanto sorprendido.

Al día siguiente, el niño se convirtió oficialmente, en la escuela, en Agustín Graziani Beggio y regresó a casa, radiante de felicidad.

__Ahora sí yo también estoy oficialmente casado contigo.

Pedro se alegraba mucho de poder dejar al nene en buenas manos durante su ausencia. De no haber tenido a nadie más, lo hubiera dejado con Gaby, aunque Agustín  no se llevara muy bien con ella.
En el aeropuerto Kennedy de Nueva York, la abuela Mirna, lo estaba esperando.

__ ¿Cómo está mi cariño?

Por primera vez en su vida, Guillermo no era el objeto de aquellas palabras y, por un instante, le pareció extraño.
Las lágrimas asomaron a sus ojos cuando Agustín se arrojó en brazos de su “abuela” mientras él abrazaba a Pedro. Durante el camino a la casa, los cuatro se pasaron el rato riendo y charlando todos a la vez. Era como sí, de repente, se hubieran convertido en una familia en lugar de ser enemigos. Guillermo comprendió que todo era obra de Pedro, el cual poseía el don de ganarse a todo el mundo. Ahora lo vio conversando animadamente con su madre y se alegró con toda el alma de ello. Era un alivio que su madre lo hubiese aceptado.  Por un momento, temió que jamás lo hiciera, pero no había calibrado el impacto que el hecho de ser abuela ejercería en ella.

__Y ahora mi apellido es como el de ustedes abuela, y el de papi _ anunció orgullosamente el niño en el automóvil__. Es mucho más fácil de pronunciar. El otro nunca lograba pronunciarlo bien _ mintió, esbozando un guiño a Pedro y una desdentada sonrisa.

Acababa de caérsele el diente aquella semana y le dijo a la abuela cuánto dinero le había dejado el ratoncito.

__ ¿Tan poco? __repitió Mirna, impresionada__. Yo creía que era mucho más.

__Eso era antes __dijo el niño en tono despectivo, ahora es pobre. Luego besó a su abuela en la mejilla y le susurró al oído: __Te invitaré a un helado, abuela.

A  Mirna se le derritió el corazón de felicidad.
__Vamos a hacer un montón de cosas divertidas mientras tus papás estén fuera.
Ahora, Agustín llamaba papá a Guillermo y papi a Pedro y ya había recibido la explicación de lo que significaba que lo habían adoptado, ahora eran sus padres.

“__Podemos hacerlo _ dijo Pedro ante la idea, sus padres han muerto__. Oficialmente es huérfano y podemos hacer lo que queramos, sin embargo, no veo por qué si ya somos su familia, además él ya espontáneamente ha decidido llamarnos papá.
Al fin convinieron que la adopción sería lo mejor”.

Era la primera vez que se alojaba en la que fuera la casa de sus padres, hoy de Mirna, y se asombró de lo agradable que le resultaba teniendo a Pedro y al nene con él, a su lado. Pedro y él ayudaban a Mirna a preparar las comidas, a limpiar todo luego. El único parte médico que les facilitó Mirna la primera noche se refirió a la enfermedad de la mucama. Sin embargo, esta vez no les habló de ataque cardíacos ni de apoplejías porque, afortunadamente, no contaba con información. El único problema surgió al desear hacer el amor aquella noche.

__ ¿Y si entra mi madre? __preguntó en la oscuridad, mientras Pedro se reía quedo.

__Podría saltar por la ventana y esperar en el jardín hasta que no hubiera moros en la costa.
__Me parece muy bien cielito… _ dijo Guillermo, deslizando la mano entre las nalgas de su esposo, se besaron e hicieron el amor susurrando como niños traviesos. Y después pasaron buen rato charlando en la oscuridad.

--Pensé que solo serías una conquista más,  una dulce tentación, y una deliciosa fruta apetitosa, pero en cambio, encontré, al mejor amante que supe tener, en cada recoveco de mi cuerpo, porque vos  me besas con la mirada y me excitas de placer, cuando navegas por mi piel, vos que me seduces con tu voz, con tu caminar y  me tientas con una sola sonrisa,
vos me haces el amor cada noche y con quien he descubierto que cada parte de mi cuerpo está deseosa de pertenecerte a vos,  que me enseñaste a sentir, a olvidarme del mundo y a solo desear amarte, vos que me fuiste convirtiendo  en un océano de sensaciones y a quien le entregué mi pasión, mi masculinidad y todo mi ser, vos que hoy me has convertido en prisionero de tus deseos  y esclavo de tus momentos de pasión, vos que cada vez que me besas, haces que pierda la cordura… Si hoy tuviese que escoger  un lugar en el que vivir, escogería mis sueños, porque yo estoy aquí soñándote y vos  sin duda soñando y deseo ser parte de ese sueño, mas yo sigo soñándote y susurrando al aire tu nombre, miro el cielo y te envío un beso, esperando que la brisa nocturna, te lo haga llegar, mas hay días que me la he pasado soñándote despierto,  pero a veces no sé, si estoy despierto o es un sueño, en el que sueño que estoy despierto, soñando contigo, realmente, vos te has vuelto parte de  mi mundo y de mis ilusiones, yo ya no sé, si tú eres real o eres un sueño, pero si eres real, te quiero aquí a mi lado, pero si eres un sueño, no quiero dejar de amarte, por eso he decidido que no quiero despertar y solo quiero seguir soñándote.
__ Deja que sean mis labios los  que griten la pasión de mis sentimientos, porque hoy quiero dejar de amarte en silencio, ya me cansé de callar mi amor, quiero dejar de imaginarme tu mirada, tu sonrisa, tus besos y tus caricias,  basta de jugar a tenerte, basta de sueños y fantasías, hoy quiero al fin detener el tiempo, vivir en tu mirada y que sean tus ojos, la luz de mi amanecer, perderme en tu cuerpo, con el candor de mis labios y así conocer cada uno de los  secretos que esconde tu piel, mientras los cuerpos se irán fundiendo, en el eterno abrazo de la pasión  y así podré pintar un arco iris en mi vida, porque al fin pude tenerte a mi lado.
Ven que mi boca…  espera. Mi sed estira mi aliento sobre las copas de las campanillas.
Entro en tus laberintos y refugios para que me des vida. Junto ramos exquisitos de piel con tu sabor desnudo. Y solo para besar tu boca fresca me separo del mundo.
Humedeces mis curvas con tu vaho caliente y tu semilla se vuelca entre los muros que sostienen mi sendero profundo, un naranjo de plata suspira su nostalgia con un dolor profundo.
Yo me quedo en tus brazos absorto como pájaro errabundo y me doy todo entero en un loco divagar de sensuales caricias mientras hundes tu gozo y tu dulzura en mi cerrada alegría.
Sudo pasiones sin sentido sobre tu pecho bello cual ninguno.
Sudas pasiones claras en el arco sedoso de mis muslos.
Nos amamos con hambre y con perfumes de flores cristalinas. Nos damos uno a los otros trenzados con delicia  en las bocas heridas.
Ven y dame tu corazón y toma mi vida, bebe de mi dulce fuente el elixir de vida.
Ven que te doy el alma y te recorro todo . ¡Ven en este minuto!
__ Por toda mi boca. Vaporosa luna de grutas dulces, runas de cristal que por tu espalda briosa ruedan, mas penetrando el aire del hechizo, tus manos serenas, tus manos llenas de calma,
tocan mi alma, nacen las pasiones escondidas al primer roce, complicidad en nuestros cuerpos.
Mas ellas fueron las primeras en amarse mucho antes que nuestras bocas, hilo de amor de claros suspiros, cómplice de nuestros lujuriosos momentos,  hombre  de cabello alborotado,
de tirabuzones de pajar rojizo, de pezones hervientes y mareas húmedas, de labios de sabor místico, de ojos de un brillante deificar, de mejillas rosáceas y dulces al tacto, de templo encendido, de labios de encarnados suspiros, de caderas de tic-tac armónicos.
Mas en tu piel tersa como el velo, mis manos resbalan mientras tu vientre acalorado suspira,
y en la tormenta de tu sexo  me pierdo como tarde vencida, y  ya las  turgentes cubiertas de tu sexo, terminan dulcemente por toda mi boca.
Te amo, Pedro Beggio.

__ ¿Eres tú mi amor eterno?
__Ese soy yo.

CONTINUARÁ.
HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS.
CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES COINCIDENCIA.
LENGUAJE ADULTO. ESCENAS EXPLÍCITAS.


2 comentarios:

  1. Veronica Lorena Piccinino Bellísimo Eve Monica Marzetti... hermoso dulce y romántico. Gracias

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  2. Bellísimo Eve, en todo está presente el verdadero amor, ese que se encuentra ona vez en la vida y que le da sentido a todo...Hermoso capítulo de una historia para no olvidar...

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