¿Y SI FUERA POSIBLE? CAPÍTULO SETENTA Y TRES.

¿Y SI FUERA POSIBLE?

CAPÍTULO SETENTA Y TRES.

 

 “El más terrible de los sentimientos es el sentimiento
de tener la esperanza muerta”. Federico García Lorca.

“Si la muerte no fuera el preludio a otra vida,
la vida presente sería una burla cruel”. Mahatma Gandhi.

“Como un mar, alrededor de la soleada isla de la vida,
la muerte canta noche y día su canción sin fin”. Rabindranath Tagore.

“Coloco las manos sobre el teclado deleitándome con el frío tacto del marfil de las teclas en los dedos, sintiendo cómo estalla una inefable dicha en el pecho, aprieto las teclas y el acorde en re bemol mayor resuena y rebota contra las paredes, la música y solo ella inunda  el magnánimo teatro mientras las imágenes de mi niño con el pecho henchido de orgullo y de mi amor pasean por mi mente enredadas entre las notas. El piano tiene un timbre exquisito, como el verde profundo de un pino silvestre, pero el efecto del sonido es mágico. Abro los ojos y miro las teclas, maravillado de que el instrumento haya resistido el tiempo, y sin entretenerme comienzo a ejecutar mi preludio favorito de Chopin que sé es también el que ama Michael. Vislumbro el sonido, saboreo los colores, las notas de los primeros compases danzan en la sala de un verde fresco como la primavera. Pero a medida que avanzo los colores se tornan oscuros y siniestros y llenan el espacio de amenaza y misterio como lo fue la vida del músico. Engullido por la música me rindo a la riqueza de cada nota, el amedrentamiento por la muchedumbre del afuera se desvanece, la música y solo ella aleja el miedo, la preocupación, todo  se diluye y desaparece entre los verdes oscuros y tonos esmeraldas de la conmovedora y extraordinaria obra del maestro que me guía desde el inicio de mi carrera”.

“Escucho a Pedro en este desafío renovado, lo observo embelesado, por qué no decirlo en silencio me siento orgulloso de que ese talento sea de mi hombre, solamente mío. Es un  adonis que con los ojos cerrados se pierde en la música, de soslayo observo al niño, al que amo como propio, y casi veo su sonrisa de orgullo por el padre que al fin tiene frente a él, haciendo lo que sueña para sí mismo. No sé demasiado  de arte, casi envidio a mi hermana que lo entiende más, Sarah no vino, pero lo que veo en el rostro bello de Pedro creo son los pensamientos y sentimientos que Chopin evoca en la obra. El cabello le brilla como el ala de un cuervo bajo la luz del sol que se cuela por el ventanal. Con esa vestimenta de gala es cautivador como lo es en cada momento, las notas crecen, llenan el teatro, la gente llora, se conmociona, lo escucho y contemplo cómo toca, se me eriza el vello y siento trepidar la piel, me emociono mientras la música colma mi corazón, presumo de él, me ama, lo amo, es mío, es posible, ejecuta  sin conciencia de lo que provoca, es su genio, sin partitura, todo está en su memoria, es como mejor lo hace como cuando se  desliza por el lienzo. Sé que toca los últimos compases pues me ha llevado al éxtasis y sé que el sonido queda suspendido en el aire, casi es su eco en el aire que se desvanece… nos deja en nirvana, él está de pie, la gente conmovida lo ovaciona y quiere llegar al ídolo, Michael me ha estado jalando de la ropa, y  solo cuando estalló en aplausos y vivas a su padre me arrancó del encantamiento, los aplausos estallan alrededor igual que yo, Pedro sonríe,   me buscan sus ojos, me hallan, nuestras miradas anegadas se entrelazan, y nada más importa”.

__Guille, ven, vamos a saludarlo, luego se lo llevará la prensa _dijo Michael tomándolo de la mano.

__Vamos _respondió Natasha _, el nene lleva la razón, o lo saludamos ahora o se perderá por buen rato.

__Felicitaciones amor mío _ dibujó Guillermo con los labios sin sonidos, Pedro supo atrapar las letras y devolver el mensaje mientras abrazó a Michael y lo llevó con él a la conferencia de prensa.

Ciudad Autónoma.

─Hola,  Guille, ¿estás solo?
─Sí, preparándome para ir a dormir─ respondió ─ ya la familia regresó a la estancia, pero dime, ¿dónde estás? Te extraño, te añoro.

─ ¿Tienes deseos de bailar?─  Guillermo abrió los ojos desorbitadamente ante tal cuestión, ¿o era una invitación?, sacudió la cabeza pues no alcanzaba a comprender lo que acababa de escuchar.

─ ¿A esta hora?
─ Ve a la biblioteca, colócate los audífonos y yo, con el altavoz, escucharé tu respiración mientras te deleitas con un amor  â Venirse con  André Riau. (Inició su carrera musical siendo niño y perteneció a diversas orquestas hasta que en  1987  fundó la propia, con el nombre neerlandés de "Johann Strauss Orquesta" y a partir del año siguiente empezó su fulgurante carrera de éxitos por todo el mundo, comenzando por su propia patria, y convirtiéndose en una de las grandes estrellas de la música al nivel de los más prestigiosos artistas de pop o de rock, al tiempo que ganó multitud de adeptos y aficionados a su música.

Con su característico estilo de difundir la música clásica, que anteriormente parecía reservada a las clases de élite o acomodadas, André Riau decidió ponerla al servicio de un público joven y en aquellos lugares que dichos jóvenes suelen frecuentar, bien sean de ocio o culturales, tales como plazas públicas y estadios deportivos. Y lo consiguió con gran éxito, pues ganó diversos premios como el Top 10 o el Top 100, este último ostentando un número uno)

Con una copa de vino en la mano y cómodamente apoltronado en el sofá, cerró los ojos para disfrutar el concierto.
El vino tinto comenzó a oscilar al movimiento de su mano, creando un oleaje suave y cadencioso; la pierna cruzada seguía el mismo ritmo, bajo el influjo de la música celestial.
Con la mente relajada, dejó volar su imaginación, en la que sus dedos por la cintura lo sostenían. Las telas, sus muslos rozaban, mientras él su vals bailaba sin apartar la vista de ese rostro de porcelana, de esos ojos enamorados, de sus labios carnosos que le sonreían. Y lo veía alejarse de sí tan solo unos centímetros, para hacer una vuelta, provocando su regreso con un sutil movimiento de mano para quedar pegado a su cuerpo, para seguir al compás del bendito vals. Sentía latir su corazón sin prisa pero con júbilo, advirtiendo que del  palpitar en el cuello otro ritmo se acoplaba a la agitación de su propio respirar.
Bebió un trago de vino para mojar sus labios, paladeando la tibieza de un beso imaginario que su boca inundaba con la humedad deseada. Chasqueó su lengua sintiendo que por la garganta se escurría la saliva, deseando ahogarse con esa audaz caricia.

─ ¡Bravo!, ¡bravo!─ Voces estridentes y aplausos sonoros, abruptamente lo volvieron a la realidad…

─ ¿Guille, sigues ahí? ¿Lo escuchaste completo?
─ ¡Ah!, sí, claro que estuve atento, gracias por llamarme.
─ Solo quería que escucharas la versión en vivo. Hasta ya, que descanses.
─ ¡Espera! ¿Cuándo volverás?
─ En minutos.

 Como besando la copa, el líquido restante en un sorbo bebió y con el  eco de la música aún en su mente… ─ ¡ah!─ un suspiro profundo exhaló.

__

Me sorprendes… ahogas mi aliento y callas mis palabras con un mojado beso y riegas mi boca con la humedad de tu lengua que contagia su travesura a la mía, siento una inquietud por dentro que quiero controlar… pero respirar tu aroma junto con el aire que exhalas hacen que me pierda en este fuego tuyo y mis manos que comienzan a recorrer suavemente tu espalda por debajo de tu ropa, comienzo en tu cintura subiendo al paso de tus jadeos, llego a tu  hombro, doblo y asciendo en la curva, mis dedos se inquietan y  demarcan como propio el recorrido.

Mientras mi boca, sumisa a tus labios rojos, hace fluir por la garganta esa esencia exquisita de tu saliva, siento en mi espalda  a   través de tu  camisa la liberación de tu pecho  que libre parece acariciarme con la erección de los pezones, estoy a merced de tu delirio, no puedo resistirme a este fuego tuyo que por dentro comienza a devorarme despertando mis sentidos, mis deseos de sentirme dentro de tu infierno.

Quiero liberar tu cuerpo y el mío de la ropa que nos estorba sin perder la conexión a tu boca, caen tus prendas y las mías, ansío ahora con mi piel vestir tu figura, el encanto de tu aroma me atrapa… me excita y no contengo las ansias de perderme en tus húmedas entrañas. Ya sé que después de esta locura de amarte no podré vivir lejos de ti, este ardiente momento es la condena anunciada al final de la soledad.

Y adoro tus movimientos, la repetitiva danza de tus caderas que sigue el compás marcado por la melodía de tu excitación al habitar yo tu interior. Comienza tu roja boca a explorar mi piel bañada en placer, creo perder por momentos mi conciencia cuando siento tus besos conquistar los lugares ocultos de mi cuerpo y tus gemidos que me enloquecen… quiero contener mi suspiro pero no puedo ocultarte que estoy ardiendo en tu infierno.

Ya la existencia mía no tendrá sentido sino la comparto a pleno contigo, estar en tu cielo y arder en tu infierno eso siento y necesito. Ya siento que en ti está mi manantial de amor que a diario me alimentará… estar contigo será escaparle a   la fría soledad… serás mi camino, mi último destino de amor y delirio.

Pedro tamborileaba los dedos en el pecho de Guillermo que le revolvía aún más el pelo alborotado cuando elevó la mirada con un tono de picardía.

__ ¿Qué? __preguntó Guillermo.

__Nada, que todo parece mentira, me retrotraigo a un año a París cuando era un artista anónimo, solitario y Donjuán y no me reconozco, no sé en qué momento alguien me tocó con un vara mágica para hoy estar acá, a punto de poder casarme con el  amor de mi vida que por cierto no es una mujer, con mi hijo a un paso, famoso, realizado… rico.

__Lo mereces, el afortunado he sido yo, solo me entristeció que Sarah no haya estado con nosotros, fue todo quizá más imponente que la muestra en Nueva York _ dijo Guillermo con una nota de pena en la mirada.

__Paso a paso mi amor, para ella ya ha sido demasiado lo vivido y lo reconocido cuando se presentó  ante todos, dale tiempo, ya todo se acomodará, estoy seguro de ello porque ella te ama más que si hubieras crecido en sus entrañas.

__Y yo amorcito, también yo la considero mi madre. ¿Y ahora que eres millonario y famoso esto cómo sigue?

__Ahora quiero ver que mi niño se concentre y adapte a su colegio, que mi hermano termine de acomodarse con Dana y los niños, y en cuanto se pueda concretar una entrevista, iré a hablar con Alejo _ respondió, Pedro ya de regreso a la pintura__. Por lo pronto, seguiré pintando, quiero terminar amor en el lienzo  en la temática con los niños, lo nuestro solo espera ser expuesto ahora que Sarah lo sabe.

__ ¿No más conciertos? ¿No es una lástima dejarlo? __ interrogó Guillermo.

__ No dejaré  el piano del todo, pero no más conciertos por ahora, este fue una deuda con mi hijito, pero los dejo para él cuando llegue, lo mío es la pintura, Guille, no quiero que me olviden, mejor dicho quiero presentarme en el país, lo otro fue en Nueva York, y tampoco me sobra el tiempo si quiero darme a conocer, pues luego ya me deberé a Europa __respondió__. ¿Seguro que me acompañarás donde sea que el arte me lleve?

__Te seguiré donde vayas, porque mi hogar sos vos amor mío, siempre, nada ni nadie me alejará de vos, no ahora que ya no hay secretos, la estancia está en orden, puedo delegar la administración, solo quiero estar cuando el parto de Natasha, casi que se lo he prometido tácitamente a mis padres.

__Y no te pediría que la dejes sola en esa instancia, está muy cerca de ti ahora, y lo agradezco, no me gustaba ser motivo de discordia entre ustedes _ susurró Pedro.

__Nunca fuiste culpable de nada, Pedro, es más,  perdimos tiempo de estar juntos por pensar en terceros.__ Traeremos a nuestro encuentro ese tiempo perdido… ese espacio vacío que nos consumió los momentos.
Traeremos a nuestra piel esas caricias tan anheladas y que en las manos dormían… esos besos que se ocultaron en los labios y que tan solo para nuestras bocas parecieron aguardar.

Tiempo eterno, tipo corto o tiempo inexistente será el que en ese momento nos tomemos tan solo para saborear lo que tenemos para darnos a pleno amor.
Instante perpetuo que morará allí cuando el roce suave nos acerque a sentirnos más allá de nuestra propia esencia.

Una pausa antes de todo… una pausa después de nada, así será ese instante en que nos veamos frente a frente,  dispuestos a darnos lo que por dentro traíamos oculto y ahora pide a gritos salir en libertad para enloquecer los sentidos de nuestros cuerpos e iluminar nuestra alma que vivía a las sombras de este amor.

Titubearemos… y no será por temor, será por sentirnos más allá de la piel, será por querer saborear nuestro deseo, nuestro amor que en ese momento será verdugo del tiempo y del espacio… lento iremos cerrando los ojos para ir percibiendo ese momento mágico de amar.

Se acortará la distancia entre tu boca y la mía… habrá una pausa y no será de duda, será una pausa para que pueda beber tu aliento… para que seas en ese momento del primer beso el aire que oxigene mi pecho… la brisa que refresque mi alma de aquellos días agobiantes de soledad.

Nos tomaremos una breve pausa, incapaz de ser medida por el tiempo, para que antes de amarnos la piel se llene de ansias y los poros se despierten para que ese imperceptible calor y espacio fundan nuestra esencia en ese gran amor que grita por libertad en nuestro pecho para abrazarnos por el resto de nuestra vida.

__Quiero desnudarte pero no tu cuerpo sino cada sentido, cada risa, las formas perfectas en las que miras con tanta emoción donde  lo complejo  lo conviertes en sencillez, así como tú eres.

Disfrutar de tu niño interior, cuando el agua de la ducha te hace chapotear entre juegos y risas... ¡te vuelves contagioso! Siempre dices tanto cuando me miras,  como el aire cuando te acaricia y no lo puedo atrapar, atraparte.

__Tan distante y tan cerca a la vez,  imaginándome dentro de tu piel,  pero tan inalcanzable,  tan sufrible, como nadie... Eres la vereda de mi soledad,  verte pasar junto a mí y no poder alcanzarte como esa estrella inalcanzable aun sabiendo que estás ahí. Cómo explicar… Pensaba en lo que el amor significaba y caí sin querer en el cliché de pensar que el amor es dar todo de uno en favor del otro y cosas así. Reformulé la pregunta e indagué en mis adentros tratando de dilucidar si realmente yo pensaba lo que decía sobre el amor. El amor al que me refiero en este momento no es el que se tiene hacia los hijos, padres, etc. Hablo del amor de pareja, el amor que se siente en todo el cuerpo y más allá del tiempo que haya pasado desde el día en que conociste a esa persona que despertó este sentimiento tan importante, vital, diría yo, y que muchos ni se toman el tiempo de experimentar.

¿Qué es amor para mí? Amor o amar es morir y vivir en el mismo instante sin poder explicar cómo una figura conocida, una estampa parada frente a mí, puede causar tal revolución, sacudir mis entrañas y sentidos haciéndome pasar por el arcoíris de sentimientos que sacuden y sacan lágrimas y llanto y dolor adictivo y risas interiores y miedos que abofetean y la desesperanza embestida por ese magnífico sentimiento de poder y gloria que solo dura vivo unos segundos pero que nos regala la sensación de haberlo poseído y se desliza como lava sobre nuestras ansiedades durante todo el tiempo que le lleve volver a suceder y más risas y las mariposas que pujan por ser libres y que no quiero que se vayan ¡Por Dios! La incomparable sensación de consuelo que esa bella voz entrando por los poros de mi ser genera cada vez, todas las veces, como si fuese la primera vez que la oímos, y el susurro de la palabra amor en los oídos y repetir en cámara lenta, “te amo amor”, dejando parte de nuestra vida en ese intento por perpetuar la vida que se va y regresa en oleadas de ahogo y respiración al galope ¿Entiendes de qué hablo? Ojalá lo entiendas, lo recuerdes, lo anheles, ojalá.
El cansancio sobre la desazón y lo frustrante sobre los sinsabores de la vida y más cansancio y caídas, tropiezos, dolor bañado con capas de angustia y el ver cómo desaparece todo a medida que la luz de tus ojos empuja esas malditas nubes y desaloja lo innecesario y obligatorio, lo malo de esta vida y ya no recordamos ni quiénes somos, ni el rencor. Solo importa el color de tus ojos y esos hermosos párpados que descienden haciendo que el corazón quiera cantar una canción sin ritmo, mientras tu aroma golpea mi ser y lo conmueve desde los cimientos y se derrumba todo lo planeado y por fin bebo el agua de tu boca que me convierte en hombre otra vez y hace que crea en todo y confíe y me entregue y quiera morir en tus brazos hasta que tú lo digas. Pedro… eso es amor, mi amor, el que quiero, el que tengo, el que siempre voy a buscar en vos.

__ ¿En qué piensas  amor? ¿Estás llorando?

Trago saliva y me hago el que bostezo y después de un rato y ya recompuesto respondo con seguridad: “Pensaba en que no sabes todavía lo enamorado que estoy de vos”.

__ Bésame, quiero sentir la humedad de tus labios y perderme en ese torbellino de sensaciones que tu cercanía me provoca... Solo un beso que me robe el alma y derrumbe mis dudas... Tengo abrazos y caricias guardadas en el silencio que deseo entregarte... Anhelo el calor de tu cuerpo para abrigar a este corazón errante, serás el refugio donde me guareceré de la fría melancolía... Solo un beso con el que te entrego mi esencia... Un beso, que por un instante, nos convierta en sentimiento.

Mis labios recorrieron tu cuerpo bajando tímidamente por la espalda, todo tu cuerpo temblaba de emoción, mis brazos te sostenían seguro.

Al llegar al final de ese dulce camino seguí bajando suave por tus piernas, largas e interminables como mi deseo de hacerte mío esa ardiente noche. Nuestras manos inquietas e inspiradas encontraron ángulos ocultos inesperados y nuestra pasión se desbordó a tal punto
que nos fuimos entregando todo. Sin arrepentirnos de lo que hicimos esta noche bajo la luna pecamos y hoy seguimos amándonos y deseándonos.

Fueron esos atrevidos momentos  los que llenaron nuestras almas y entre los dos quedó muy guardado el pudor que tanto pregonábamos. Ese instante de gloria anticipada  es el causante que hoy te ame tanto.

A mitad de camino se pierden mis suspiros, cuando a escondidas de tu atención ensayo besos viajeros que aterricen en tu boca, dibujo el trayecto que recorrerán mis labios, hago mapas perfectos con la longitud y latitud exacta de cada punto que llama mi atención y donde hacer vibrar con ese chispeante sonido de mis labios al estallar sobre tu piel en besos.

A mitad de camino se perderán mis ansias, cuando a centímetros de besarte esté bebiéndome tu aliento, cuando mi aire esté viciado por tu aroma y se vuelva mi oxígeno vital para respirar, nutriré mis labios y mi piel de adicta pasión para que insaciables sean de tu boca y de tu cuerpo, será todo de ti mi templo de adoración, en ofrendas de besos y caricias a ti ciego de amor me entregaré.

En el tiempo que te llegan mis palabras habré hecho el camino perfecto por donde llegar a tus sentidos, por donde invadir ese espacio entre tus labios con mis besos, haré caminos que me lleven a esos puntos en tu cuello donde las ansias de mis labios quiero dejar, trazo de tus labios una invisible ruta que marca mi mirada y me lleva a acariciar tu piel, dejando besos en lugares de tu cuerpo que desespero por conquistar.

Seré capaz de dejar en el camino tanto tiempo vacío, tantos tiempos de nostalgia y soledad, quedará todo eso en el olvido cuando esto de amarte callado a las sombras de tu presente quede estancado en un irreal ayer y haré nuevos caminos por donde llevar mis ansiados besos y recorreré los ya transitados, pues cada línea de tu piel guardo, sin tú saberlo, a fuego de amor en mi corazón.

__

__Hoy desperté emocionada esperando ver las flores que siempre me regalas, pero la mesita estaba vacía, no había un recado que hablara de nuestro día, ni un buenos días escrito.
Suspiré y en silencio me preparé un café y lentamente a solas lo bebí...
¿Qué ha pasado entre nosotros? ¿En qué momento perdimos pisada? ¿Cómo hemos podido sobrevivir sin tener contacto uno con el otro?
Cuando llegas (cansado sin duda), no me despiertas y por las mañanas te vas muy tempranito sin hacer ruido.

Anoche te esperé en el sofá pero el cansancio me venció y me quedé dormida.
Entre sueños sentí tus brazos fuertes que me cargaban y dejaron suavemente sobre la cama cent tus manos sobre mi pelo y besaste mi cara y mi boca, susurrando en mi oído que me amabas pero no pude despertar.
¿Sabes? a pesar de nuestro  amor con tristeza veo que ya no soy tu prioridad, que tu trabajo que te has echado a cuestas ¡sin necesidad caramba! es lo más importante y cuando termine, buscarás otro y otro y lo nuestro va quedando atrás.
Ya no te veo, ya no desayunamos juntos... Ya los buenos días o las buenas noches quedaron en el recuerdo; quizá porque sabes que estoy aquí, pero el saber que existimos, aun viviendo juntos no lo es todo.
¡Faltan las palabras! ¡El aliento, el roce!
Ya lo pensé esta mañana cariño, mientras bebí mi café y mis lágrimas que caían algunas dentro de la taza: Si no reaccionas me iré.
Creo que será lo más viable y así nos daremos cuenta si nos necesitamos o no y de nuevo nos buscaremos, y quizá pronto venga en busca de ti.

__Camila, esto estaba hablado y arreglado, no tienes que irte porque yo no pueda amarte, no sos la responsable, tenemos un hijito demasiado pequeño, pero si lo mejor para vos es alejarte, lo entenderé _ le informó Guillermo mientras besaba los carrillos  y las manitos regordetas de su hijo.

__Discúlpame, quizá fue demasiado fuerte ver cómo lo veneras a Pedro en el concierto, tu mirada nunca mostró un amor así conmigo, antes de él.

__Lo sé, lo imagino, porque te quiero mucho, son amores distintos, pero el amor que siento por él es  mágico, es el amor de mi vida, el mayor de mi vida, es lo que más amo, él y mi hijo, lo que no significa que no te respete y quiera _ se sinceró Guillermo.

__Lo sé, cuesta entenderlo, pero lo sé __ dijo Camila en tono muy bajo__. Creo que ver al abogado con la demanda de divorcio en curso fue más de lo que esperaba, pero podré, tengo a mi hijo y me debo a él, me quedaré en la estancia, al menos hasta el parto de Natasha.

 __

__ Entre tus velos se vislumbra esa belleza delineada cual fantasía de grandeza inigualable, única como tus ojos profundos donde me inmerso en la más ferviente marea taciturna, cual movimientos de caderas en pasión con tal sutileza que la brisa roza tu rostro acariciándote.

Todo el espacio en ti es tan maravilloso que tus velos aferrados a tu piel son como volcanes a punto de a ser erupción, sintiendo cada milímetro de ti, cada rincón donde tus ojos lo expresan todo y lo más tentador es que genera envidia...! Son los velos que te envuelven y no puedo tomarlos para deshojarte.

Descubrir tu piel de tan majestuosos pliegues, sería como perderme en el fin del firmamento al ver tu majestuoso relieve bordeado de tanta belleza, pero ella está ahí amándote en silencio porque bordea tu figura con ese calor tan sutil que está en ti aclamando que se desprenda para que te ame.

Perderme entre el brillo de tus ojos, es quedarnos atrapados en las estrellas y tus labios serían mi fuente de vida eterna de dulzura encadenada a ese sol que nos quema con oleajes de vaivenes en ese éxtasis de locura y lo que ellas no saben,  es que no les tengo envidia, porque estoy entre tus velos y tu piel.

En el Edén de tu cuerpo plácido navego, deteniéndome en la playa del celoso tiempo contemplando esa baya… que húmeda suspira y suplica vaya; a espeso bosque donde feliz descansa, y masturbo tu gruta cual intrépido duende, trazando esa ruta que ha de llevarme a tan jugosa fruta. Y tiembla la tierra al encender tal vorágine hoguera, dejando escapar letal suspiro dama milonguera, arañas mis carnes… dulce mujer; acariciando el alma derrotando al sexo que inevitable sucumbe al deseo flagrante de la calma. Y en ese erótico retumbe… nos entregamos alcanzando la cumbre.

__Natasha, me gustaría conocer a tu madre, después de pasarme un día preocupándome contigo por su suerte en el atentado. ¿Crees que podría ser?

__ ¿De verdad es lo que quieres?

__Sí, tu hermano aunque no de manera exultante digamos que me soporta, quisiera conocer a Sarah.

__Pues, no quisiera decirte que está desesperada por echarle un vistazo al hombre que ha engendrado a mi hijo sin mantener relación estable con la madre, parece absurdo, pero en realidad es así. Organizaré una salida, una comida y pienso que eres muy valiente al desear ir allí, me refiero a que no debe resultar reconfortante conocer a la madre de una mujer a la que has dejado embarazada sin amarla, sin tener relación alguna con ella, sin querer a su hijo __ dijo Natasha con una expresión entre asombrada y curiosa.

__Bueno, digamos que no es tan así, por algo estoy contigo en la misma cama, quiero conocerla _ ratificó, y Natasha sonrió ocultando el rostro.

__

No había pasado el suficiente tiempo desde el día en que nos conocimos y ya tenía ganas de pintarlo de anaranjado. Guille apareció en mi vida con los colores habituales: Rojo, verde, azul, fucsia, etc. pero no me convencía. Ante mi requerimiento de cambio de color, se encogió de hombros y dijo que sí, que hiciera lo que me pareciese apropiado. Esa noche lo pinté. El anaranjado casi rojo que tanto me gusta, de un tirón. Yo no soy de andar perdiendo el tiempo. Hasta la cabeza anaranjada, y cuando la pintura secó, mi orgullo floreció.
Cada tanto desteñía un poco, cuando se bañaba o salía, pero era mi novio  y al fin y al cabo yo era el encargado de volverlo al nivel superior con que el anaranjado que tanto me gustaba lo envestía.
Uno de esos días en que iba por la pintura y el pincel, me preguntó qué buscaba y le dije, “lo de siempre” a lo que él me contestó que ese día no quería ser totalmente anaranjado, que le gustaban las manchas que el desteñido dejaba en su vida y me quedé tieso. “Yo solo iba a hacer lo de siempre”, le respondí tratando de reconocer ese síntoma pero no fui capaz. La cosa se mantuvo así por un tiempo. A veces lo pintaba y a veces no. Cuando lo encontré tirando la pintura anaranjada y el pincel supe en mis adentros que todo había cambiado. Salió del baño violeta, rosa, amarillo y blanco, con el cabello verde rabioso. No dije nada, era su decisión y la acepté, no de muy buena gana pero la acepté.
Esta mañana me desperté molesto por esa sensación de cambio que subía desde mis piernas y lo vi. Munido de un tacho de pintura y un pincel revestía mi piel de color azul francia y traté de detenerlo pero  Guille frenó mi mano y me pidió silencio. “Ahora yo digo qué color”, indicó con cierta autoridad y me recosté otra vez sobre la cama mientras él me volvía del color asignado.

__Mi príncipe azul __dijo arrojándose sobre mí.

Aromas que se funden  entre cuerpos, entre pieles, es la fascinación, la perversidad para amar, la fragancia irresistible, el aroma del placer, despertamos sentimientos que fascinan y estremecen, que se vuelven vehemencia, somos el veneno exquisito y el antídoto que cura nuestro cuerpo...

Nos prestamos cuerpos, nos regalamos besos, caricias, navegamos en un mundo de pasión y deseo, somos pecado, somos anhelo delirante, bajo las sábanas es perpetuidad entregarnos sin miramientos, nos sofocamos, nos hundimos cuerpo a cuerpo, en nuestra cama nuestras siluetas se vuelven geografía, nuestras manos se deslizan suavemente para desvestirnos sin prisa, bebernos, embriagarnos hasta ahogar todo el deseo sublime.

El sudor y el perfume que brota de los dos, nuestras bocas guardan y destilan miel, y claman fantasías, sueños, y nunca rendición, se funden, recorriendo mares, caminos…  perdición, escribimos nuestros nombres donde nadie los puede borrar, exploramos labios, miradas cautivantes que enloquecen, nos deseamos en forma indecente, en completa catarsis, viviendo  en éxtasis, moldeando y esculpiendo la libido, palpando nuestra piel.

Cuánto nos deseamos a diario, noche tras noche como fieras con las más ansiadas caricias de todo nuestro sexo volviéndonos locos, con la travesía de tus dedos, pidiendo no parar, hasta nuestro próximo encuentro, somos apasionados divirtiéndonos al juego seductor de hacer el amor, anhelándonos con gran fulgor adorando nuestros cuerpos de viciosa pulcritud, ansiados de beber el cáliz de cada uno.

Y así terminamos la jornada tan inefable, cuando las ganas se acumulan, cuando la madrugada llega a su fin amándonos sin tregua y sin fin.

__Cada  vez que te observo viene a mí un remolino de ideas que se combinan en frases dedicadas a tu magnífica persona, poseedora de una serenidad que me baña de paz, y una agradable personalidad que sugiere la estampa de tu imagen, pues eres lo más divino de esta tierra __susurró, Guillermo _. Suspiro tanto que hay veces que no me doy cuenta de que lo realizo, en donde tú eres mi dios, mi rey de belleza, mi bello amado quien solo puede acosar a mi espacio interior, porque sus conceptos bien delineados dan colores mágicos a mis sentimientos de amor por tu ser.

---Estoy enamorado de ti, además mi mente está en sintonía con tu presencia, el aire que respiro lleva tu nombre, mis ojos te miran en todo lo hermoso por todas partes, dando un toque maravilloso a mis ilusiones ópticas por donde quiera que yo transite.

Dame tu delicada, y fina mano, para así acompañarme a amarnos para hacernos muy felices, porque se trata de ti, a quien tanto busqué en mi lugar, en mi espacio, y en mis sueños. Te amo porque eres tú. Fue entonces cuando me enamoré. Mi corazón se sentía como cayendo al vacío de una manera vertiginosa sin poder controlarlo. Algo tan simple pero a la vez tan mágico, eso pasó. No hiciste nada y sin embargo todo se hizo por ti. Todo desapareció y fue rehecho por ti. Bastó tu presencia encantadora, tu mirada desnuda y algo despreocupada
sin saber lo que estabas produciendo…  sin imaginar el caos que sucedía a tu alrededor y que luego  se convirtió en calma. Sin darte cuenta que ya nada era más. Que todo renacía por ti, de ti, desde ti. Fue entonces cuando me perdí en mi sentir. Ese palpitar tan fuerte de mi pecho.
Esa felicidad tan grande que me cubría por completo, esa calma y a la vez ese caos en mi interior. Me dejé llevar sin miedo a nada. Fue entonces cuando caí enamorado de ti

__ Solo los mejores besos calan hasta los huesos. Solo con los mejores besos duelen los labios.
Solo el mejor beso te provoca ese mareo que te deja extasiado, ebrio de amor por  quien
posee esa boca exquisita. Mis labios necesitan tus besos…  quisiera gritarlo, pero mis palabras se quedan atrapadas en mi pecho y guardo silencio. Ese silencio de no poder decirte que te Amo, que mis manos necesitan tocar tus manos, tu piel. Necesito entregarme a ti,  necesito hacer el amor, pero no de ese amor en la cama sino un amor con miradas, con detalles.

Necesito tomar tus manos  y llevarlas a mi pecho, para que  sientas los latidos de mi corazón que vive por amarte. Pero ya no quiero amarte en silencio, ya no amarte de esta forma
que solo ahoga mi pecho… Me preguntaron  el porqué luzco tan feliz, que tenía cierto brillo en la mirada…  ellos desconocen mi motivo... que siempre estoy pensando en ti imaginando tu sonrisa  y a ese par de ojos que iluminan todo mi ser cada vez que tú me miras.

Final del formulario

__Hoy voy a hacerte el amor de mil maneras,  quiero que sientas mi alma como un suave frescor en primavera. Que mis ojos recorran cada poro de tu cuerpo,  que te sientas transportado hasta el íntimo momento. Que nuestros cuerpos confundidos permanezcan enlazados, que mi aliento cubra cual manto abrasador tu cuerpo. Sentirás mis manos palparte con ardor y con locura cuando acaricien tu cuerpo, con pasión y con ternura. Quiero dar a tus brazos mi calor, que me sientas ardiente, como fuego abrasador. Quiero sentirte acurrucado entre mis brazos, quiero hacerte gozar con mi amor y mis abrazos, que tu cuerpo se confunda con el mío, como se mezclan las aguas caudalosas de los ríos. Quiero que bebas de mis labios el dulce aroma, que te colme de placer y de deseos, que te sientas vivo, y que vueles tras de mí, al placer el infinito. Quiero sentir tu cuerpo estremecido de placer, cuando ansioso recorras con tus besos cada poro de mi piel. Que tus besos y los míos sean abrasadores,  que nos hagan gozar nuestros amores. Y fundiremos los cuerpos con deseos de gozar. Beberemos dulce néctar, con locura y ansiedad.

__Te busco en mis memorias, por todas las reencarnaciones de las historias. Siento que te voy a encontrar, junto con el universo comienzo a orar. Sueño contigo, hermosura angelada de apacible abrigo. Percibo que tu esencia me abraza, tu luz majestuosa mi ser entrelaza…

Cada vez que camino, voy imaginando que estarás en mi destino.  Al ver las parejas enamoradas, mi pensamiento sube al paraíso de las hadas. Suspirando el perfume de tu esencia, donde despiertas mi conciencia. Mi núcleo palpita de emoción, evocando el poema en rima de canción. Bajo la luna visualizo tu llegada, mi ángel de la dulce morada. Tu advenimiento me habla al oído, al estar conscientemente dormido. Concibo que beses mi piel, mi espíritu dice que soy tu hombre fiel. Haciendo el amor mental, romántico, tierno y puro como el cristal. Al despertarme brindo gracias al infinito, por el sueño real bonito. Mi boca sonríe de felicidad, porque pronto llegará mi amada deidad. Para unirnos en un solo corazón, fusionados en la mágica constelación. Gracias Dios por mi adorada alma gemela, mi flamante dulzura bella.

-Tómame de la mano y hazme sentir esa vibración de tu querer que será lazo que se creará entre tu latir y mi latir, melodía de la piel cuando está perdida en los ecos de mil latidos de mi corazón enamorado que se amarra a tu mano y  se expresan las dos con seducción y mucha ternura. Y se agigantan esas manos cuando salen a conquistar las tierras de piel corporal cultivando caricias para amarme, sembrando placer. Dame tu mano, unamos las vidas entrelazando los dedos,  mareando al tacto en un gran pacto de amor, piel y placer.

- Ya no soy aquel niño, soy apenas un viejo sentado en el trono de la ilusión, la ilusión aquella que vuela apresurada como el viento,  como las palomas, como las cometas y las ilusiones de papel aunque mi sonrisa elevada solo se abra al firmamento, buscando a DIOS.
Ya no soy aquel ser que cantaba a dúo con la aurora ni tampoco soy el que va en búsqueda de ángeles sonrientes,  soy el que se cansó de haber desplegado sus piernas como alas con miedo,  de volar por calles, prados y por campos _susurró, Guillermo a Pedro esperando la cena en un oculto restaurante exclusivo donde evadir a la prensa que desde el concierto perseguía aún más al artista__. Ya no vengo como niño sosegado, envuelto en arpegios de cantos mañaneros,
yo solo recuerdo haber despedido contento a la luna de mis sueños entrelazado en los rayos vistosos de mis despertares dormidos entre viejas sábanas que rehúsan guardar la tibieza de mi piel. Ya no soy el infante intrépido que trataba de alcanzar al aire y al viento lleno de ansias, cantando coplas, lleno de angustia, silbando tiempos,  ya no alcanzo a abrigar mis anhelos junto al vuelo del  águila, solo atino a abrigar mis esperanzas, soñando con la piel.
Triste cual niño, soy el que traigo añoranzas entre mis manos tratando que mis dedos hurguen las sonrisas que se fueron y son silentes,  lloro en soledad la letanía que acompaña mis tardes solitarias,  ya no está mi padre, tampoco mi madre biológica  que murieron ayer.

Yo pienso que soy quien se acoge a la sonrisa de los niños sonrientes porque la ilusión que guardo, es la ilusión que salta y escapa como la liebre, ya no duermo en una cama, cajón, o en un banco, solo sueño en las distancias, tampoco tengo el abrigo de mis parientes, solo migajas recogidas en la esperanza. ¿De qué valen mis intenciones si ellas espantadas han volado con el tiempo… para qué me acojo a la esperanza, si ella se agita al sentir el silencio frío?
Ya mis manos han dejado de ser y apenas puedo alzarlas en plegaria sabiendo que no podrán crecer, porque este viejo y la ilusión, se van en la nada.

__ ¿Qué? __se asombró Pedro entrelazando las manos.

__Así me sentía antes de tu llegada. ¿Te das cuenta de lo que hiciste por mí?

__Yo solo te amo, Guille, te amé sin darme cuenta _ susurró, Pedro embargado de emoción__. Dos almas que se aman de verdad,  viven tan alto, sueñan tan alto, y sienten tan alto, que nada ni nadie las puede separar.

No es el amor solo el encuentro de dos cuerpos, allí donde mueren de deseo y pasión, donde las bocas se secan y los labios arden temblorosos, donde por los adentros vuelan millones de mariposas, no, el amor, es mucho más, el amor es la fusión de dos almas que a la espera estaban, con el mismo palpitar, dispuestas a volar sin saber el destino, son dos almas que se escapan de cualquier plano físico  a pesar de montañas, mares y océanos.
Por eso vida mía dejemos abiertas las puertas a las primaveras que están por llegar, tú y yo sabremos cómo vivirlas y llenar las madrugadas de realidades soñadas de un ayer, ahora el tiempo es nuestro y el amor está en nuestras manos que están de ansias llenas de vida.
Te amo vida mía.

-Principio del formulario

Soy muy soñador,  hombre sin etiquetas, ni tabúes, sin banalidades, ni miedo a amar.

 No te  fuiste y ya tu recuerdo está en mi pensamiento, pero reside en calma.

Necesito amar como el aire fresco que respiro, en el que me va un suspiro y me lanzo al vacío.

Mi cuerpo necesita las caricias que invaden las noches de silencio traspasando mis sentidos.

Escuchar las más bonitas palabras que calen mi alma, maravillosos susurros de te quiero.

Ser  hombre en mis entrañas desnudando placeres, cobijando lanzadas que emanan lo mejor de mí.

Necesito amar como el ser amado y transitar esos milímetros de tu piel, que me llevaron a la desnudez inmensa del amor.

Reconozco que tus  palabras tejieron mi vuelo hacia anhelos de ardiente pasión. Como la profundidad del mar cada pensamiento fue tuyo. Como águila feroz te posaste en mis alas.
Tu virilidad abolió el entendimiento y toda lógica que me prohibía sentirte desapareció, entonces tu cándido susurro incitó cada centímetro de mi universo a perderse en el desapacible y desenfrenado deseo que cobija tu ser.
Los encuentros abordaron aquel remolino de aguas misteriosas con caricias y besos que sedujeron al alma y esa distancia entre la piel y el corazón con sutil y etérea gentileza, se esfumó... la combinación de ambas nos convirtió en un volcán.

Pergamino, lunes 29 de agosto de 2016.

 __Cenaré con él _ dijo Sarah a su hija__. Todavía camina con muletas, pero dice que se encuentra bien.

__ ¿Te ha invitado a cenar? Es todo un detalle.

Natasha parecía sorprendida, y no le dijo a su madre que investigando si sería bueno para representar a Pedro supo que se lo solía ver con chicas que tenían la mitad de su edad o menos. Era evidente que los dos se estaban haciendo amigos después que él la rescatase de los terroristas.

A la hora convenida Alejo pasó a buscar a Sarah en un todoterreno, iba sentado en el asiento trasero, y ella se sentó a su lado, no sin dejar de reparar en el chofer. Los dos se habían vestido con jeans gastados y camisas, abrigos para la noche, y charlaron con desenvoltura durante el trayecto hasta el centro.

Él le contó que tenía un hijo, que mantenía una aceptable relación con su exesposa, que había vuelto a casarse poco después del divorcio, y que tenía tres hijos pequeños, y casi de buen modo reconoció que no había sido un buen marido.

Sarah le contó de Julio y de Pedro, de sus dos hijos y de su nieto, no se avergonzó en reconocer lo que poco atrás en su vida centrada en juicios y banalidades intrascendentes le había separado de ellos.

__Te admiro, Sarah _dijo Alejo__. Yo de hecho en cambio _dijo con expresión avergonzada__, fui terrible. Demasiadas tentaciones. Además era demasiado joven. Estuvimos diez años casados, y no entiendo cómo ella pudo aguantar tanto. Cuando estás en la cima se te sube a la cabeza. Me creía superior, y supongo que entonces lo era. Me divertía demasiado, y he de admitir que después he seguido haciéndolo. Este último cumpleaños me hizo pensar, y por supuesto el atentado. Puede que haya llegado el momento de que me tome las cosas con calma. La víspera de mi cumpleaños casi me muero.

__Cuando te vi de hecho tenías un aspecto terrible.

__Creía que me moría. Tuve que pasar dos semanas en cama por una hernia de disco, y  casi entré a cirugía, aun no está descartada. Jamás me había sucedido algo parecido. Me lo tomé como una especie de mensaje.

__ ¿Y cuál sería ese mensaje? __preguntó ella en tono de broma.

Alejo parecía muy animado a pesar de su reciente lesión y a Sarah no le daba la impresión de que estuviese tomándose las cosas con calma. Salía a cenar a menos de un  mes después de recibir un disparo.

__No estoy seguro _ dijo él con una sonrisa__. Quizá que me vaya a un monasterio. O al menos que me tome las cosas con calma con las mujeres. Llevo demasiado tiempo en medio del jaleo. Mientras estaba en el hospital lo pensé bien. Podríamos haber muerto todos.  Creo que quiero usar más materia gris para plantearme cómo vivo y ser un poco más selectivo con las personas con las que vivo.

Las modelos con las que salía eran muy guapas pero él sabía mejor que nadie que solo eran una serie de ligues de una noche. Hacía años que no tenía una relación seria, admiraba la cantidad de ellos que Sarah había permanecido sola, contenta con sus hijos y su carrera. Él aún no había conocido a la persona adecuada, pero tenía las cosas más claras luego del atentado terrorista.

Esa noche para cenar Alejo pidió todos sus platos favoritos, en tanto Sarah se contentó con hamburguesas con queso que le apetecía desde hacía días y que jamás se permitía. Además compartieron un enorme plato de papas fritas. Tras un debate serio entre un suflé de chocolate o  tiramisú, decidieron compartir un  poco de cada uno. Los dos disfrutaron mucho de la cena.

__Te agradezco la ayuda en la galería, la verdad es que no habría podido ir y no confío tanto en la gente que tengo, menos luego del atentado, sabemos cómo afectan estas cosas y por largo tiempo _le dijo sonriendo.

__No fue nada, me ayudó a salir de casa y pensar menos en lo sucedido, me encantaría trabajar contigo si me necesitas este año, al menos hasta que mi hija dé a luz a mi segundo nieto, no quisiera ausentarme de Buenos Aires _ le pidió Sarah.

__Yo encantado, cuéntame de tu carrera.

Mientras ella lo hizo desde su padre Antoine, dieron cuenta de una bandeja de masas secas y bombones mientras tomaban café, y Alejo quedó impresionado de los artistas a quienes había representado.

Tal como ella lo contaba parecía sencillo. A lo largo de los años había considerado mucho su trabajo, e incluso seguía probando cosas nuevas y estudiando minuciosamente todos los detalles. Además estaba dispuesta a trabajar más duro y durante más tiempo que nadie y a hacer cualquier cosa y sacrificio que fuese necesario. El esfuerzo había sido una parte importante de su éxito. Poseía una gran disciplina en su trabajo.

__Sarah, nadie sabe mejor que yo que no es tan fácil, eres muy modesta, todo el mundo dice que tú te matas a trabajar, lo mismo que tu hija. Al final creo que los dos sabemos que el trabajo duro es lo que vale.

¿Y de Pedro qué puedes decirme?

Era tu carta de triunfo seguro más importante, y por lo que leí además un pianista eximio __admitió Alejo que lo venía siguiendo de cerca.

__Lo es, y quizá mejor como pintor, tiene lienzos que te sorprenderían, pero como imaginarás, al divorciarme, quise separar también lo profesional por el bien de los dos _ dijo evadiendo la mirada __.  Me encantaría que lo representes tú.

__ ¿Lo amas todavía?

__No lo sé, creo que antes del atentado pensaba demasiado en él, y cuando vi esas fotos creí morir, por mi hijo y por él, los creí traidores _admitió__. Luego ya nada fue igual, hoy entiendo que mi matrimonio con Pedro siempre fue una locura, es más,  lo supe desde conocerlo, él fue quien me convenció, luego supongo que por un tiempo me hizo sentir amada,  deseada, feliz, llevaba una vida sola, pero cuando conoció a Guillermo, en algún punto supo su elección o identidad de género, y contra ello no puedo luchar. Hoy sé que el amor que lo une a Guillermo es real, se van a casar, todo terminó.

__ ¿Y pudiste perdonar?

__No solo que pude, sino que hay algo que no sabes, Guillermo no es mi hijo de sangre, sino que  es mi hijo del corazón, mi exesposo lo trajo a casa cuando era bebé, huérfano de madre, hace nada que supo la verdad, pero yo lo amé desde verlo, lo amo.

__Sorprendente.

__Creo que por fin puedo asumir mi edad y que soy abuela _reconoció ella__, cuando veo mujeres jóvenes que están comenzando sus carreras me pregunto hasta cuándo seguiré.

__Yo acostumbraba a decirme que aún era muy joven, pero el último cumpleaños pudo conmigo _ admitió él.

__A mí me pasó lo mismo __dijo Sarah con una sonrisa__, sobre todo cuando se supo en todos lados, pero si bien no creo que ya me guste andar viajando entre las  tres galerías, me temo que hasta que mi hija redefina su vida con un hijo, deberé hacerlo.

Al pensar en la última noche de sexo salvaje a Alejo le dio risa.

__Creo que fue mi última cana al aire. Después de eso, pensé que quizá hubiese llegado el momento de madurar. Sobrevivir al ataque terrorista fue la revelación para mí acerca de lo que importa y lo que no. Algunos de mis actos han sido bastante estúpidos. En el fondo, destruí mi matrimonio por simple chulería.

Lo que Alejo contaba había hecho pensar a Sarah, en lo de su matrimonio nada era parecido, pero el secuestro y las víctimas también habían supuesto una revelación para ella, pero de pronto comprendió que la mayoría de decisiones que había tomado mientras estaba casada guardaban relación con su carrera y no con lo que le convenía a Pedro en lo personal que luego había negado abiertamente.

__Quizá yo no arruiné el mío para progresar en lo profesional, pero  vi luego que estaba casada con el hombre equivocado. Pedro es una persona maravillosa, pero en realidad nunca funcionó, más allá de mis miedos por la diferencia de edad, por los hijos _ se sinceró__. En fin, en verdad luego de la muerte de Julio yo quería construir un imperio y lo hice. Eso requiere muchos sacrificios, y no estoy tan segura hoy de que merezca la pena. Me encanta mi trabajo y sigo disfrutándolo mucho, pero no es lo único en la vida. Me ha costado mucho darme cuenta __dijo Sarah con una sinceridad y una franqueza que impresionaron a Alejo.

__Si, a mí también _ reconoció él__. Divertirse no lo es todo en la vida. De lo contrario acabas rodeado de una multitud de aprovechados con ganas de pasarlo bien a tu costa, un montón de chicas guapas y tontas que están allí para sacarte dinero. Eso cansa. En las semanas que pasé en cama compadeciéndome de mí mismo he tenido tiempo para pensar.

__Yo he pensado en ello en los últimos años, pero no sé qué más podría hacer que trabajar, lo de Pedro fue tan corto que se desvanece, mis hijos son adultos _dijo Sarah en voz baja, no me necesitan. Lo único que me queda es el trabajo, y es lo que mejor se me da.

Alejo la miró con aire reflexivo, sus palabras tenían sentido también para él. Sentía un gran respeto por ella. Su nombre era muy conocido, era una auténtica autoridad mundial en lo suyo, era arte e industria en sí misma. Era un negocio, un ícono, una leyenda, una estrella, una mujer hermosa, todo en uno.

Cada uno a su manera estaban en el mundo de la fama, pero al final los dos habían comprendido que por muy emocionante que pudiera ser a veces, sencillamente no era suficiente.

Alejo a veces deseaba haberse vuelto a casar joven como su ex y tener más hijos como esos tres de ella, pero desde años se decía que algún día lo haría, que las mujeres con las que salía eran lo bastante jóvenes como para que pudiera volver a casarse y tener más hijos, pero no se había enamorado, y a los cincuenta quizá fuera difícil recuperar el tiempo perdido. Y aún más difícil a la edad de Sarah. Un día te despertabas y estabas solo, y te preguntabas cómo había sucedido, y ellos sabían cómo.

--Siento presagios tristes de azules abismos  imagino un horizonte cercano de cruces donde camino en secos senderos, grises  veo encendidos cirios en mármoles fríos. Mis latidos divagan en ecos sin sentido en el laberinto cavernoso de mi pecho,  son como tambores sin ritmo al acecho y augurios de vuelos, al final del tiempo.

Siento que tristes se mueren mis otoños, pétalos secos de perfumadas primaveras, sueño despierto detrás de mis ausencias muriendo entre mis ensueños perdidos. La catrina esta triste en esta sentida agonía, penumbras que invaden mi jardín desolado en grises visiones de la nada, atormentado sumido en el ayer donde mi esperanza ardía.

¿Pienso, serán eternos el amor y la memoria? O viviré entre los senderos de ecos y silencios
buscando los signos de la nada y sus misterios cuando mi conciencia se pierda en la historia.
Y llega a mi alma el alba, y el aroma de las flores, dejo la lentísima agonía de morir cada mañana, llora la vida, y a la muerte reza en la madrugada que regresen los recuerdos, de la vida y amores. Y así será, en el alba de mi alma,  entre mi esperanza muerta.

__Eres muy joven para pensar así, si volvieses a empezar, ¿lo harías de otra forma? _preguntó Alejo.

Pergamino.

Comencé a vestirlo, como de costumbre. Con suavidad de seda acomodé su ropa interior sin ningún vestigio de algo que sobrepasara lo estrictamente gentil. Luego de la camisa,  peiné su cabello  y besé su esbelto cuello con dulzura infinita. Pinté sus labios con una sonrisa, era algo que siempre me generaba ansiedad, transformar un ser majestuoso en sobrenatural.   Roce  a sus uñas y la caricia del final. Me quedé mirándolo unos segundos en silencio esperando más, siempre espero más. Es que con él no llegué a conocer los límites del amor.

 La congoja a la distancia y el corazón que salta al contemplarlo otra vez. Recordé sus zapatos y se los coloqué, demorando segundos en horas y horas a velocidad luz. Besé sus empeines, también era costumbre hacerlo. Este ritual se había transformado de a poco en la droga que sustenta este suplicio de amor y la nostalgia de lo que sé, indefectiblemente vendrá.
Como todos los días lo abracé, pero esta vez con un espíritu nuevo y la convicción de que todo debía cambiar, que hoy era el día asignado para el milagro mayor.

Me arrodillé frente a él aferrado a sus soñados muslos y mi oración así sucedió. “Señor… si es tu voluntad por favor, extiende tu mano y realiza esto por lo que no me canso de pedir. No lo merezco pero tú conoces mi corazón. Amén”.

Me incorporé y lo tomé por el cuello, lloré amarga y felizmente sobre mi esperanza. Imaginando respuesta de  este hombre mío que solo permanecía allí soñando, igual que yo, el milagro de amor. Cuando percibí la fuerza incontenible de su abrazo y la tibieza de su respiración en mi hombro, supe que se había realizado. Este maniquí, mi maniquí, ahora era en verdad mi  hombre  y nunca más volveríamos a sufrir. Había cobrado vida al fin o había yo traspasado un límite, en todo caso, no miraría atrás.

__Estás loco, ¿lo sabes verdad?

__Por vos, loco por vos __dijo Guillermo  y unió los labios a los de Pedro en una promesa renovada.

__No sabía qué hacer con mi sensualidad, hasta que llegaste tú, entonces quise regalarte
el calor de todos mis veranos _le susurró, Pedro__. Te amo, Guillermo Graziani.

IDEA ORIGINAL. ALBERTO MIGRÉ. 1973.

CONTINUARÁ.

HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS.

CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES COINCIDENCIA.

LENGUAJE ADULTO.

ESCENAS EXPLÍCITAS.