"NAUFRAGIO".
CAPÍTULO
104. FINALES MAS NO ES EL ÚLTIMO.
¿Puedo
llevarla a la casa? ¿Puede casarse el 21?
__Sí,
está físicamente bien. Es más… se sentirá libre cuando termine el relato.
__ Y
yo tal vez, para emprender en barco el viaje que Pedro me regaló por la luna de
miel que nunca tuvimos, con nuestro hijito.
__
Lo haremos, amor, te aseguro que en nuestra vida no habrá otro… NAUFRAGIO.
"La
indiferencia es una forma de pereza y la pereza es uno de los síntomas del desamor.
Nadie es haragán con lo que ama".
Aldoux Huxley /
Mario
Benedetti y sus amigos.
LA
GENTE QUE ME GUSTA
“Me
gusta la gente que vibra, que no hay que empujarla, que no hay que decirle que
haga las cosas, sino que sabe lo que hay que hacer y que lo hace.
La
gente que cultiva sus sueños hasta que esos sueños se apoderan de su propia
realidad. Me gusta la gente con capacidad para asumir las consecuencias de sus
acciones, la gente que arriesga lo cierto por lo incierto para ir detrás de un
sueño, quien se permite huir de los consejos sensatos.
Me
gusta la gente que es justa con su gente y consigo misma, la gente que agradece
el nuevo día, las cosas buenas que existen en su vida, que vive cada hora con
buen ánimo
dando
lo mejor de sí, agradecido de estar vivo, de poder regalar sonrisas, de ofrecer
sus manos y ayudar generosamente sin esperar nada a cambio.
Me
gusta la gente capaz de criticarme constructivamente y de frente, pero sin
lastimarme ni herirme. La gente que tiene tacto.
Me
gusta la gente que posee sentido de la justicia.
A
estos los llamo mis amigos.
Me
gusta la gente que sabe la importancia de la alegría y la predica. La gente que
mediante bromas nos enseña a concebir la vida con humor. La gente que nunca
deja de ser aniñada.
Me
gusta la gente que con su energía, contagia.
Me
gusta la gente sincera y franca, capaz de oponerse con argumentos razonables a
las decisiones de cualquiera.
Me
gusta la gente fiel y persistente, que no desfallece cuando de alcanzar
objetivos e ideas se trata.
Me
gusta la gente de criterio, la que no se avergüenza en reconocer que se
equivocó o que no sabe algo. La gente que, al aceptar sus errores, se esfuerza
genuinamente por no volver a cometerlos.
La
gente que lucha contra adversidades.
Me
gusta la gente que busca soluciones.
Me
gusta la gente que piensa y medita internamente. La gente que valora a sus
semejantes no por un estereotipo social ni cómo lucen. La gente que no juzga ni
deja que otros juzguen.
Me
gusta la gente que tiene personalidad.
Me
gusta la gente capaz de entender que el mayor error del ser humano, es intentar
sacarse de la cabeza aquello que no sale del corazón.
La
sensibilidad, el coraje, la solidaridad, la bondad, el respeto, la
tranquilidad, los valores, la alegría, la humildad, la fe, la felicidad, el
tacto, la confianza, la esperanza, el agradecimiento, la sabiduría, los sueños,
el arrepentimiento y el amor para los demás y propio son
cosas
fundamentales para llamarse Gente.
Con
gente como ésa, me comprometo para lo que sea por el resto de mi vida, ya que
por tenerlos junto a mí, me doy por bien retribuido...”.
*Mario
Benedetti /
Nordelta,
19 de octubre de 2016.
“Apenas llegamos a la casa mamá se acostó, se
durmió de inmediato como si su mente necesitara hundirse en el sueño para
regresar con el resto de recuerdos, esta vez… todos estábamos alrededor.
Pedro
me mantuvo abrazado, me dejé arropar en su aroma, acariciar por su aliento
cálido, que besara mis sonrisas, y que bebiera mis lágrimas, una a una,
brotaban sin aviso, y ni siquiera me dolía lo que estaba sucediendo.
Simplemente lloraba, no supe si de emoción, o por la expectativa de saber algo
más que sólo ella hoy tenía en su cofre de recuerdos, mas lloraba”.
__Amor,
todo estará bien, los estudios lo están,
lo necesita, doy fe que lleva cuarenta años buscando estos recuerdos, se
negaban a salir a superficie, el casamiento y la charla con mamá al fin lo consiguieron __ dijo Pedro y asentí, le murmuré a través
del nudo de la garganta.
__Lo
sé, como también que no recordará todo, me explicó Matías que ha estado construyendo nuevos circuitos
nerviosos con las experiencias de vida desde el Naufragio, que ellos al ser más
recientes se han venido imponiendo al pasado, y seguramente sólo recordará lo
que la o nos marcó emocionalmente como fue lo sucedido en el barco.
__Es
probable, sí, la carga emocional dispara el recuerdo, como algo traumático en
la niñez suele iniciar el uso de razón.
__Antes
de la lipotimia dijo no recordar ni siquiera el casamiento con mi padre, es
probable que mantenga lagunas vacías para siempre, pero quizá sí necesitara
recordar la tragedia y lo sucedido con la familia.
__Pedro
dice la verdad, Guillermo, En Kenia todo el tiempo vivió con la esperanza de un
día despertar con sus recuerdos, más cuando ni siquiera conocía su identidad o
la tuya, y los médicos no supieron decirle a mamá qué sucedería cuando salió de
alta __agregó Manuel que estaba en el sillón contiguo con los dos bebés.
__Lo
sé, Manuel, es importante cualquier cosa que pueda recordar, si ello la libera
de pesos.
__
Apóyate en mí, sabes que la amo como a mi madre, y a ti, somos corazones y
almas unidos por la chispa del amor, que nos hace resplandecer más que
cualquier rayo de luz.
Nuestro
sentimiento va más allá de cualquier sensación y funde nuestros cuerpos en una
sola alma, nos transforma en un corazón.
Porque,
cuando no te encuentro, te busco porque eres mi mitad y eres mi complemento, eres mi existencia y mi respiración, cuando
estás me haces inmensamente feliz.
Confío
que Dios nos dé la dicha de estar juntos, y si desea que no sea el momento
esperaremos, si hay que extrañar, te extrañaré aunque esa etapa ya sucedió, y
así la extrañaste a ella, lo sé, pero no temas, no se irá, no la afectará
recordar aquello, la hará libre de tu padre para amar a Fernando.
Cómo
iluminar mi alma, sin la mirada que me lleva a tu alma, sin el color de tu
piel.
Cómo
describir la pasión y el dulce sabor de tus besos, sin el aroma de tu piel, las
caricias y los sollozos de tu corazón.
Te
confieso que te amo, te iluminaría como
el arco iris, hoy te sueño y eres mi realidad, eres mi gran deseo.
__ ¿Mirna,
pa? __interrogó José con carita compungida.
__Duerme
hijito, estaba cansada, es sólo eso.
__
Manuel, iré con los chicos a casa, Pilé quiere su comida, José empezará a
preguntar, estaré allá, avísame si hay alguna novedad __dijo Camila colocando
con ternura a Rubén Pilé en el cochecito, José se aferraba de sus piernas.
__Ve
Camila será lo mejor, lleva a Andrés y a Guillermito si puedes, por ahora es lo
mejor __afirmó Pedro.
__ ¿Y
María chicos? ___interrogó Orestes que acababa de entrar.
__No
se despega de Mirna, como cuando dormían juntas, estará en la cama de al lado.
__Iré
contigo entonces hija, te ayudaré con los chicos, está todo preparado para el
casamiento, no te alarmes Fernando, ella te ama __ apoyó Orestes al amigo.
_ Lo
sé y no estoy nervioso, al contrario, por años conviví con el fantasma del
esposo, antes con tu papá vivo, Guillermo, y siempre esperé que esto sucediera,
es mejor que sea ahora, que se case convencida, recordando lo último que vivió
con él, entre una despedida de solteros y esto, lo prefiero mil veces __afirmó
calmo__. Guillermo, no hablé antes porque ella no recordaba, no sabía si podría
hacerle bien o mal, pero supe de la pérdida de los campos de tus abuelos. Yo
era algo menor que tu padre, en aquella
época todo se sabía en el círculo social, muchos fueron a la quiebra, y me
enteré, lo oí de mis padres. Esperaba que ella recordara, y mucho más como al
parecer está logrando, espero que vuelva a elegirme.
__Ella
te ama. Esto es otra cosa, es liberarse de la búsqueda, es saber al fin todo lo
que sucediera en el barco, entre ello, conmigo, pero te ama. Yo no recuerdo a
mis abuelos por algún motivo, quizá el naufragio causó algunos claros en mi
mente, esa parte y lo de la pérdida de campos y fortuna la he bloqueado hasta oírlo
de ella.
__Lo
sé, Guillermo __dijo Fernando y se quedó pensativo__. Es más, me atrevería a
afirmar que esto mismo sabe e hizo Isabel, Marcos fue a buscarlos, debió saber
todo de aquello, tu padre por lo que dijo Mirna lo supo durante el viaje, u
horas previas, por tanto se lo contó a
Marcos, quizá todos pensamos que si no recordaba sería lo mejor, y si lo hacía
que debería ser así.
__Supongo
que es lo mejor, y seguramente al no recordarlo yo, mi padre no quiso sumarme
otro desastre, nunca me dijo de los abuelos maternos ni lo de los campos, sólo
hablaba del estudio.
__Papá,
llegó el psiquiatra __avisó Fabián, el
médico se asomó, aunque era afable dudamos que a Mirna le gustara hablar en su
presencia.
__
¿Es imprescindible que la asista? __interrogué.
__No
Guillermo, me dijo el Dr. Olazábal que no tiene daño neurológico, me quedaré
cerca, si ve que la desestabiliza el relato podrá llamarme, no entraré si no lo
desea, cuando termine veremos si necesita de mí, o de algún tipo de apoyo,
aunque quizá no.
__Gracias,
Dr.
__Guillermo,
Pedro, Manuel, Mirna despertó __avisó María que paseó la mirada y saludó al médico__. Pidió que entrara
Guillermo con su nieto y los Beggio, es decir mis hijos y yo Dr., nos considera
como su familia, pasó cuarenta años en casa, en Kenia.
__Lo
sé, Sra., me contaron la historia, vayan, estaré acá si necesitan.
“Entramos
a la suite y Mirna nos esperaba sentada en el sillón, se la veía calma, sonriente, pidió que la
rodeáramos con Pedro, María, Fabi y Manuel se sentaron alrededor. Le tomé de la
mano, me interné en su mirada, vi la
emoción en ella de reencontrarse con el pasado, con su hijo de doce años, quizá
con mi padre, con los propios”.
__ ¿Te
sientes bien? __interrogué cauto.
__Sí,
hijo, no deben asustarse por los
recuerdos, Fabi, llama a Fernando, por favor, merece saberlo todo, aunque
intuyo que siempre supo más que yo y no lo dijo por respeto a mi ex esposo.
__Dale
abuela, ya lo llamo.
__Hijos,
los llamo así porque los siento así, María, lo sabes, se criaron con ambas, te
vi traerlos al mundo, buscarlos, Guille, mi amor, compartí más tiempo con ellos
que con vos, y lo siento y no, no quiero que se asusten, estoy bien, en paz
como jamás.
Guillermo,
quiero decirte que no recuerdo todo, que no
veo mi infancia, tampoco el casamiento con tu padre, sólo veo escenas de
tu infancia y el naufragio, pero es
muchísimo considerando que por años no supe ni siquiera mi apellido __dijo sin
perder la calma.
__Lo
sé, madre, Matías nos explicó, no importa lo que no recuerdes, dinos lo que
desees.
__Fernando,
mi amor, ven, quiero que sepas lo que hoy recuerdo, no es secreto, aunque
presiento que lo viviste, tus padres eran amigos de los míos, tú de mi
esposo, puedes estar acá.
__
Aquí estaré, en efecto sé más de lo que has dicho, pero quise respetar tus
tiempos, Mirna.
__Guille,
cielo, amé a tu padre, y él, pero fue criado en una familia donde el poder, el
tener y el apellido hacían a su identidad, debes entender que se perdía sin la
fortuna, cuando pasó lo que contaré, sintió que no sabía quién era, menos cómo
continuar, no deseo que lo juzgues, quizá eso explique que no te haya contado
siquiera que había sido rico, ni nada de lo que perdió.
Fabián,
me alegro que ustedes y mis bisnietos sean de otra manera, que sean… más allá
del título, de lo que logren poseer.
__Te
escuchamos abuela.
__
__”Luego
de días cruzándonos en silencio, al fin papá me dijo que estaba listo para
entablar la conversación que venía eludiendo. Estábamos en cubierta, paseando
con parsimonia, él pensaba que pondría allí nuestro final, y apoyados en la
baranda, no imaginó que el mar y Dios estaban por sobre sus designios. El aire
fresco de una hermosa tarde invitaba a disfrutar con el mar azul ocupando
nuestras pupilas, él trató de romper el hielo.
__ ¿Y
ese colgante? __interrogó olvidado de la cadena que comprara mi padre.
__
Es el que me colocaste, el que tiene grabado nuestros nombres.
__
Disculpa. Te queda muy bien.
____Te
escucho mi amor, al fin ¿puedes contarme lo que te ha tenido en vilo durante el
viaje?
Hizo
silencio, lo veo y lo siento hoy,… inspiró fuerte la brisa marina tomando valor
para lo que se avecina, y fue directo, el momento de la verdad había llegado al
fin.
__Mirna,
algo terrible ha sucedido, algo que lo ha cambiado todo __su voz sonaba a
desastre o a drama teatral.
__
¿Qué ha pasado? __interrogué sorprendida, jamás había pensado que sería así el
inicio de la charla.
__Mi
familia ha perdido su fortuna __sonó contundente.
__ ¿Te
refieres al dinero? __me interesé. No alcanzaba a entender. Estaba anunciando
algo completamente diferente a lo que imaginaba.
__Así
es… los Graziani, estamos en la ruina.
__
¿Y cómo ha pasado semejante cosa?
__Una
serie de hechos desafortunados se superpusieron y terminaron trayendo una ruina
casi total, muy bien aún no lo sé: gastos excesivos como este viaje por ejemplo
de mi parte, la forma de vida en la mansión de mis padres, los viajes de ellos,
e ingresos insuficientes, hubo un envío de carnes a Europa para el cual papá compró hacienda ajena además de la
nuestra porque sería un negocio importante, se ha visto arruinado por la compañía
naviera, la cambió por una desconocida que el seguro no cubre, y las carnes
llegaron en mal estado. Busqué las oficinas en Europa y cerraron como en Bs.
As., nos estafaron, el cargamento se perdió, estaba avalado por la hipoteca de
los campos y por préstamos bancarios como muchos de los gastos en personal de
ellos y de las propiedades, la cruza de animales que se hizo no funcionó, todo
se confabuló en contra.
__ ¿Qué
dice tu padre? __pregunté sin darme cuenta de la tensión ante mi intento de
consuelo__. ¿Lo sabe?
__Sí,
no mi madre, lo supimos justo antes de embarcar, fue parte del motivo del
viaje, comprobar el estado de las exportaciones personalmente, hablar con los
bancos, renegociar deudas, intentar ver si algo podría salvarse.
__Amor,
¿por qué no me has dicho esto antes?
__No
he sabido cómo hacerlo, tampoco cómo seguir adelante con mi vida, Mirna, sólo
el estudio podré salvar, con suerte la casa, una.
__Por
la manera en que lo dijiste pensé que había pasado algo peor __lo consolé. Yo
estaba lidiando con una enfermedad de mi madre, hijo, la abuela entonces estaba
enferma, viajó por ello. Si bien lo económico me parecía triste y grave, no me
impresionaba tanto, excepto por lo mal que lo había tomado tu padre. Le
pregunte…__ ¿Y qué has pensado hacer?
__Debemos
regresar a Argentina y vender todo lo que quede, incluidas las propiedades, en
intento de que los campos no vayan a remate. Intentaré renegociar la deuda con
los bancos y que me permitan venderlos, con ello pagar las deudas, y ver lo que
quede para que mis padres se muevan. Si no resuelvo parte de esto, tendré
problemas con los bancos, juicios de los acreedores, y el apellido se revolcará
en el fango, lo cual afectará el estudio también, mis padres deberán mudarse,
prescindir de empleados, es sólo la punta del iceberg de lo que me deparará el
regreso.
__Ay…
Guillermo, en verdad son malas noticias __reconocí al tiempo que descubría
cuáles eran las consecuencias de una quiebra__. Y tú has visto cuán apegados son
tus padres a las propiedades y a su estilo de vida.
__Así
es, y nadie que no sea un Graziani, necesita pasar por eso, ¿entiendes?
__No,
explícate mejor __exigí negando lo que alcanzaba a entender.
__Que
he decidido dejarte en libertad. No quiero tenerlos a ti y al nene atados a mi
suerte, Mirna. Eres joven, hermosa y quién sabe qué me tocará vivir a mí en los
próximos meses.
Fernando
asintió, lo había sabido.
__Qué
dices, a los malos momentos, se los enfrenta juntos, si deberemos mudarnos con
tus padres, lo haremos, los tres.
__Dime
cómo… porque la parte práctica yo no la alcanzo a ver.
__Te
ayudaré, empezaremos de nuevo juntos, acaso ¿quieres el divorcio? Conseguirás
nuevos trabajos, nuevos negocios.
__Eso
llevará tiempo __dijo de manera realista. Los problemas de la quiebra insumirán
años.
__Puedo
trabajar, ya veré qué puedo aportar.
__No
pienso verlo, no podría soportarlo.
__No
es malo que trabaje, muchas lo hacen, Guillermo estará en el colegio.
__Es
el único que no quiero que sepa, quiero poder seguir pagándole los mejores
colegios, que no pierda sus contactos, pero no quiero la eterna discusión entre
nosotros de que desees trabajar. Me ha cansado.
__ ¿Qué diablos quieres entonces? __pregunté
furiosa.
__
Creo que no tenemos que seguir juntos __repuso terminante __. Tus padres pueden
darte todo, yo ya no.
Lo
miré dolida, a punto de llorar, incrédula de estar escuchando eso. ¿No estar
juntos porque ya no era millonario? Ridículo, pensé.
__Entiendo,
ya no me quieres porque no tienes plata.
__No
es así, pero dime, ¿con qué dinero te daría un viaje como éste?
__No
necesito de viajes, en cualquier caso mi padre nos puede prestar dinero para la
casa, el nene, sus matrículas.
__Jamás
recurriría a dinero de mi suegro. ¿Con qué dinero viviríamos?
__No
necesitamos mucho.
__Mirna,
por Dios, estás acostumbrada a vivir bien.
__No
creas, no necesito lujos.
__ ¿En
qué casa viviríamos? La grande ya no podré mantenerla.
__Somos
sólo tres, viviré contigo donde digas. No importa si es en una casa pequeña sin
empleados.
__Probablemente tenga que compartir la residencia con mis
padres hasta que comencemos de nuevo, vivir todos de los aportes del estudio,
suplicando que no se resientan.
__Puedo
adaptarme, no sé, vivir donde digas, me llevo bien con tus padres si no deseas
aceptar nada de los míos.
__Terminarás
trabajando en cualquier parte.
__
__Entonces
ante su resistencia y rendición lo fulminé con la mirada, me enfadé, estaba
dolorida, enojada.
__Guillermo,
ya entendí…__Los ojos se me llenaron de lágrimas e hice silencio antes de poder
continuar __. Lo que tú no quieres es que sigamos juntos. No importa lo que
diga o acepte, ya lo has decidido, nos quieres al nene y a mí fuera de tu vida.
__Creo
que por ahora es lo mejor. No puedo someterlos a la suerte que me toca, ni aceptar
que me mantengan mis suegros. Por lo demás, todo por años será malo.
__Nunca
vas a entender que lo único que me importa eres tú. Dejaría todo por ti.
__Mirna,
pienso que es lo mejor porque…
__Ya
entendí __admití decidida___. No necesito que me digas más nada.
Volvió
a insistir con explicaciones que rechacé. Al cabo de unos minutos, me marché al
camarote de los abuelos a buscarte, lo dejé en cubierta, terco, ni me miró,
perdió los ojos en el mar.
__
__Yo
lo supe amor __dijo Fernando__. Me vi tentado de acercarme, pero no quise que
me eligieras porque él te alejó, lo supe desde antes de que embarcaran, ya
había corrido esa suerte mucha gente, y luego ya no volví a verte, no tuve
oportunidad de declararte mi amor, cuando regresó sólo Guillermo con Marcos,
sentí que había muerto en el mar contigo.
__Yo
no estaba muerta, pero mi mente quizá bloqueó todo no por el naufragio sino
porque no deseaba no tener dónde regresar, mis papás se ahogaron, y Guillermo
me había alejado, sólo apareció mi niño, tú, hijo.__El rostro de Mirna estaba
anegado, el de Guillermo por igual.
__Esa
noche el barco estaba de fiesta, todo era alegría, música y risas. En el gran
salón las parejas bailaban, había una orquesta. En cubierta, la gente iba y
venía con copas en mano disfrutando de una noche bonita.
A
pesar de los desperfectos sufridos por el motor del barco, al fin parecía haberse
encauzado en su curso, no faltaba
demasiado para llegar a la costa africana, y la proximidad del destino ayudaba
a que el clima fuese festivo.
En
el salón la orquesta interpretó una ronda de tangos, una pareja de amigos argentinos
bailaba, yo los miraba… enamorados, él complacido de tenerla tomada de la
cintura, de compartir su vida con ella, reían, se abrazaban y eran felices sin
importarles nada más, como imaginaba que sería con tu papá. Estaban en su mundo
feliz, dejaron fuera todo, suponiendo que yo estaría feliz en alguna parte del
barco, nada más alejado de la realidad. Mis padres a punto de salir del
camarote, no pudieron, no lo supe, pero mamá volvió a tener los dolores de antes de recibir
quimioterapia, se pensaba que quizá estaba curada, y esa noche supieron que no,
los viejos síntomas paliados por el tratamiento habían regresado a miles de
kilómetros del país o de algún hospital. Yo no lo supe, no había salido del
camarote, estaba contigo, desde que discutiera con papá, ocupé otro, el tuyo, y
a pesar de la fiesta, de que apenas eran las diez de la noche estaba dormida,
como cada vez que me sentía dolida. La ansiedad y el dolor me ponían así.
Supe
luego que tu papá, fiel a su personalidad insomne, frente a la angustia causada
por la confesión, caminó desde la tarde, incluso en su andar errante, entró en
lugares restringidos, como la sala de telégrafos en donde lo alejaron de mala
manera... Por el desconcierto que observó entre los marineros, tuvo la
impresión de que allí tenían un grave problema. Acarreaba con los propios como
para interiorizarse en ellos, pera eso estaban el capitán y el comisario de a
bordo. Y se instaló en una esquina alejada de la fiesta, uno de los mozos que
hablaba español y que siempre se ocupaba de nuestra mesa, le servía las copas de whisky, nos había escuchado
discutir, pensó que estaba sufriendo por mi culpa, le daba pena, me confesó,
mas no era de palabra fácil para dar aliento. En el bar le habían solicitado
que en cuanto acabara su labor de mozo, se presentara en la cocina. Allí, desde
la mañana lidiaban con un nuevo problema: las cañerías no funcionaban
correctamente, no salía el agua suficiente. Por lo tanto cocinar y lavar la
vajilla eran tareas engorrosas y necesitaban de su ayuda. Ya en el barco nada
funcionaba como correspondía a lo que de él se esperaba.
Después
de la larga noche de fiesta que duró hasta la madrugada, el barco permaneció
pacífico hasta la tarde, horario en que los pasajeros aparecieron en el salón
de té, el té se acompañaba con un variado y generoso servicio de sándwiches,
brioches y tortas.
Esa
tarde, poco a poco, la comida despertaba a los viajeros, y los iba sacando del
letargo y la resaca de la fiesta. Desde temprano sucedía un hecho extraño: el
barco navegaba inclinado hacia un costado. Por esta causa, en algunas zonas de
la cubierta no se podía avanzar si no se lo hacía sujetándose de la baranda... Ciertos
pasajeros se lo atribuían a los efectos del alcohol, otros creían que era fruto
de las olas bravías del mar. Al resto le preocupaba el escorado a babor.
Fuimos
con mamá a tomar el té, seguimos charlando, otros se instalaron en la sala de
lectura. Mamá me dijo que papá había ido a intentar hablar con el capitán,
quería preguntarle qué ocurría con el suministro de agua que realmente era un
problema, además buscaría al médico del barco para que viera a mi madre.
__Mamá
¿quieres que demos un paseo por cubierta y saque unas fotos?
__No,
hija, gracias. Me cuesta caminar con la nave tan inclinada. Creo que me
retiraré a descansar otro rato __comentó.
Se
la notaba más apagada, sólo había tomado un té con limón.
__
¿Te sientes bien?
__Si,
quiero estar descansada para las actividades de la noche. El plan era cenar y
luego presenciar el show en el teatro, y necesitaba reunir fuerzas.
__
Te acompañaré __ofrecí.
__Espera,
antes deseo decirte algo. No sé si podremos al llegar charlar tranquilas como
ahora.
__Dime…
__
Quiero confesarte algo que nunca te he dicho. Estoy orgullosa de la mujer que
eres, estoy feliz de reconocerte contenta y segura, Mirna.
__Madre,
gracias…___dije y le tomé de las manos, lo que acababa de decir era significativo,
sin embargo yo había tomado una decisión y le conté ___. Por un lado me pone
feliz tu bendición, por el otro como no logro ponerme de acuerdo con Guillermo,
no sé si seguiré insistiendo con ser fotógrafa profesional __previne.
__ ¿Lo
amas a Guillermo? __interrogó llena de sabiduría.
__Sí.
__ ¿Él
te ama?
__ Creo
que sí __dije recordando que al hacer el amor la última vez pese a todo, había
dicho amarme.
__Entonces
hija mía, no te preocupes, ese amor que se tienen, con ayuda de Dios y de la
vida, encontrará el camino que los conducirá hacia buen puerto para que juntos,
compartan el futuro, y le des la hermanita a Guillermo. De no ser así, no sería
amor__. El amor es más fuerte de lo que todos creen, te lo digo por
experiencia. Hijo casi heredaste las palabras de ella, como si te las hubiera
susurrado desde donde esté.
Todo
saldrá bien __continuó__. Confía en él, nada se atreve a desafiar al amor, el
universo entero, tarde o temprano debe acomodarse a ese sentimiento, y los que
se aman, podrán estar juntos.
__
¿Entienden?
Fernando, Guillermo, el naufragio acomodó los amores, los destinos, en ese
momento poco entendí, hoy lo veo claramente, y la acompañé a su camarote sin
saber que tu padre, había tomado una decisión que el mismo Naufragio le impidió
llevar a cabo.
___
¿Qué decisión, Mirna?
__Se
había encerrado en el camarote, no quería interrupciones para concretar lo que planeaba,
hijito, necesito que sepas todo, perdón
si duele, no sé si conservaré estos recuerdos o sólo llegaron por hoy.
__Dime,
madre.
__Preso de la angustia, se hallaba sentado
frente al espejo, jugando con un arma que había llevado, regalo de niño de tu
abuelo. Se le había antojado que era una obsesión, la única capaz de acabar con
el sufrimiento, varios entonces habían hecho aquello, y decidido a realizar lo
innombrable por lo cual nos había liberado, levantó el arma con intención de
apoyarla contra la sien, pero algo pasó. Un sacudón semejante a un terremoto lo
desestabilizó y, por un instante el mundo se movió.
__ ¿Qué?
Pero… yo recuerdo cuando me sacó de entre las llamas __dije confundido.
__
Espera hijo, espera, fue mucho después, yo ya no estaba en el barco.
El
barco entero se estremeció, el atroz movimiento fue acompañado de un crujido,
como si una fuerza bruta y reprimida proveniente de las entrañas del barco,
quisiera salir a luz.
Tu
padre instintivamente se tomó de la cómoda con la mano libre para no caer, pero
lo cierto era que todo el camarote se sacudió, hasta la enorme cama cambió de
lugar... Horas atrás habíamos pasado un puerto y una zona de peligrosas rocas
contra las cuales muchos buques habían chocado, así que eso no podía ser,
estábamos a millas del escollo. Evidentemente algo grave le había sucedido al
barco.
Pensó
en nosotros y el instinto de cuidarnos fue lo más fuerte y decidió detener la
locura y salir del camarote, el arma quedó olvidada.
El
estallido me tomó por sorpresa con mamá a quien ya le costaba caminar por
cubierta debido a la inclinación del barco, que a cada hora se había
pronunciado más, y con el movimiento, terminó cayendo al piso. Cuando intentaba
levantarla, comprobaba aliviada que no le había pasado nada grave, tu abuelo llegaba corriendo a encontrarnos.
Estabas
conmigo, cielo.
__
¿Qué pasó, papá? ¿Qué ha sido eso? __ pregunté.
__No
lo sé __ contestó__. Acabo de hablar con el comisario, me ha dicho que todo
está bajo control… sin embargo… viniendo hacia aquí pasó esto…
__Creo
que nos están mintiendo, padre __advertí, inmersa en los problemas personales
había dejado de preocuparme por los del barco.
__También
lo creo, volveré a hablar con el capitán, aunque… no, me quedaré con mi esposa.
Me
di cuenta luego que se sintió escindido entre las dos preocupaciones, el barco
y mamá.
__Quédate
conmigo __ pidió mi madre__, si está pasando algo grave, ya nos dirán qué
hacer.
__ ¿Hija
y Guillermo?
__En
su camarote, padre.
__Ve
con cuidado por él, déjame a Guillermito, pídele que averigüe qué fue el
sacudón, y que me avise.
__
Iré __ dije. Mi madre antes de que me marchara me dijo, como presintiendo que
ya no nos volveríamos a ver.
__Hija,
recuerda lo que hemos hablado, el amor tiene la fuerza suficiente para acomodar
el entorno. El perfecto amor echa fuera el temor.
Entonces
parecía que aquello estaba fuera de contexto, y así como algo dentro de ella la
llevó a recordármelo, yo por amor me obligué a escucharlo como lo último que
escucharía de su boca. No imaginaba que nada era más cierto, triste y terrible
que lo que acababa de escuchar.
Mis
padres contigo avanzaron en una dirección, yo en otra.
__
Guillermo,
mi amor, la tragedia y aquellas palabras, me asieron a la vida, me condujeron a
los Beggio, me permitieron seguir a los gemelos en busca de mis amores, de vos,
y de Fernando, el universo acomodó el entorno, el destino, y Pedro llegó a tu
vida, por la promesa que me hizo de ser cirujano, todo estaba hilvanado,
determinado, el naufragio lo hizo posible.
__
En
medio de la marcha, quedé atrapada por el gentío, desesperado por el estallido,
salía del salón, de los camarotes y de cada rincón del barco para averiguar qué
sucedía, yo iba con mi cámara, tú quedaste con los abuelos, habían vibrado
hasta los mástiles.
La
preocupación pintaba los rostros de las personas que llegaban a la cubierta, la
misma era la que se reflejaba en las facciones del jefe de la sala de máquinas,
que, en las entrañas del barco, luchaba con sus operarios contra la terrible
situación que acababa de suscitarse: la única hélice que funcionaba terminó por
quebrarse, la rotura se produjo cuando giró a noventa y tres rotaciones por
minuto. Por consiguiente, el trozo desprendido dio con fuerza contra uno de los
laterales del vapor, lo que causó un considerable agujero en el casco.
Los
hombres intentaban tapar el hueco construyendo una pared de hierro y cemento
para evitar que el agua llegara a la sala de máquinas. Mientras lo intentaban,
las paredes laterales cedieron ante la terrible presión del agua, y entonces,
como si una gran compuerta se hubiera abierto de golpe, la popa comenzó a
inundarse irremediablemente.
El
comisario de a bordo gritó y corrió a dar parte de la situación al capitán.
La tripulación
había pasado gran parte de la travesía peleando contra lo vetusto de los
motores del barco, y ahora, el desperfecto era fatal.
El
interior del barco se desangraba mientras que los atemorizados pasajeros se
amontonaban descontroladamente en la cubierta, provocando desencuentros como el
que había tenido con tu padre, y él, volviendo por el recorrido habitual, no me
vio. Atravesando los costados opuestos de la cubierta, no pudimos cruzarnos,
más la angustia que sentía de haberte dejado, y no poder regresar por ti y por
mis padres, empecé a gritar llamando a tu papá. Llevaba minutos buscándolo en
medio de la gente y, cuando la desesperación comenzó a abatirme, al fin
reconocí su camisa, y lo llamé a gritos. Él
se dio vuelta, me había oído y, abriéndose paso con violencia entre la
multitud, llegó a mí, y nos abrazamos. Aliviaba pensé: ahora estará todo bien.
En
ese mismo instante, el capitán pensó lo contrario: “Todo va mal”. Si bien había
emitido un parte oficial para comunicar a los pasajeros que la situación era
grave pero controlable, él sabía que no era cierto. Por culpa de la compañía
naviera, que se había negado a abortar el viaje cuando descubrió las primeras
fallas, ahora corrían peligro las vidas a su cargo. Pidió a los telegrafistas
que emitieran el alerta y un pedido de auxilio a los barcos que navegaran por
la zona. Éste no se hizo esperar: “A todos s.o.s., estamos en peligro. Y la
posición. Vengan enseguida. Necesitamos asistencia y evacuación”.
En
segundos la frase cruzaba el océano sembrando preocupación entre los barcos
cercanos, los que, de inmediato, cambiaron el curso para rescatar al buque de
bandera italiana que nos llevaba a Sudáfrica. Si una nave de esa envergadura
enviaba semejante mensaje, algo grave sucedía.
En
cubierta, Guillermo me tomó de la mano y me llevó hacia un costado más
tranquilo, alejados del gentío.
__ ¿Qué
crees que fue el sacudón tan terrible?
__No
lo sé. Probablemente se haya roto una pieza importante del motor.
¿Y
el nene?
__Con
mis padres, en el camarote espero.
Estábamos
a punto de llegar al lugar donde Guillermo al oírme quería llevarme, cuando los
marineros hicieron sonar los silbatos que anunciaban la emergencia. Eran las
cinco de la tarde y el estridente sonido convocaba a los pasajeros a cubierta.
Sería
verdad o simplemente un simulacro, se preguntaban los viajeros sin dar crédito
a lo que vivían, pensando seguramente en Titanic. “¿A este barco le podía pasar
algo realmente malo?”
Las
personas alteradas por el temblor de unos momentos atrás, ahora entraban en
pánico y corrían de un sector a otro buscando a sus familiares o regresaban a
sus cuartos para recuperar objetos personales valiosos. Los más belicosos, se
presentaban por la oficina del capitán para exigir explicaciones. Claro que
éste no estaba allí, sino en la sala de máquinas. Aún azorado, con las manos en
la cabeza, exclamaba: “Se trata de una verdadera catástrofe”.
__
¿El barco se…? __Me costaba poner en palabras mis negros pensamientos, pero,
como necesitaba saber, terminé la frase__. ¿… se está por hundir?
__Están
llamando a todos los pasajeros porque es una emergencia. Creo que sólo será un
cambio de barco __dijo tu padre tranquilizándome. Sin embargo, a su alrededor
no se avizoraban los barcos que vendrían a rescatarnos.
Espantada
y confundida lo miré.
__El
nene, mis padres, los amigos…
__Tranquila,
también oirán los silbatos y vendrán. Si los buscamos, correremos el riesgo de
desencontrarnos. Necesitamos oír qué tiene para decirnos el comisario
Tu
papá había visto al comisario que se había acomodado en la parte alta de
cubierta y, a juzgar por los movimientos, estaba a punto de dar una orden
importante.
La
explicación no me tranquilizó, sobre todo, porque cada vez llegaba más gente
desde los confines del barco. Parecía que pronto todos los pasajeros estarían en cubierta
porque aun las personas de tercera clase __que tenían vedado el acceso a esa
zona__ comenzaban a instalarse a un lado. Esos hombres, casi todos inmigrantes
que iban rumbo a África para ser esclavos o buscar trabajo, ahora insultaban y gritaban.
Temían que les pasara como en la tragedia del Titanic. Ellos por lo tanto,
subirían antes que nadie, y así lo exigían, a viva voz.
La
multitud se descontrolaba y el pánico se adueñaba de la cubierta. Guillermo
seguía con la mirada atenta los movimientos del comisario, pensaba que tanto nosotros
como él… actuaríamos según lo que hiciera y dijera el hombre.
Estaba
parado sobre la rampa superior, dio una explicación corta en italiano,
Guillermo, por la distancia, no alcanzó a oírla, sin embargo, percibió la
conmoción causada entre los que pudieron escucharla, porque los gritos
aumentaron y los empujones y apuros, también.
En
minutos, iniciarían las maniobras para liberar los barcos de emergencia atados
con sogas a los costados. Los bajaron al agua para cargar a la gente. Estaban
por realizar un desembarque de urgencia y en alta mar no se veía ningún navío
para socorrernos. Sólo nos evacuarían,
la situación, por lo tanto, era gravísima.
El
comisario daba órdenes en italiano para que formaran fila. Intentaba darles
prioridad a las mujeres y a los niños, sobre todo, a los de primera clase. Pero
era imposible. La diversidad de idiomas que se hablaban, la imposibilidad de
imponer la autoridad y la ausencia de armas para disciplinar se conjugaban para
incrementar el caos.
Entonces
vi a una señora italiana que tenía dos nenes que jugaban contigo, intentando
lograr un lugar, los pequeños lloraban, y me agité porque no estabas a mi lado,
mas tu padre no me dejaba ir por ti, su plan era diferente.
__Mirna,
tienes que procurar meterte en uno de esos
botes __me exigió.
__!
No! Yo no me iré sin mi hijo, sin ti, sin mis padres.
__Mirna,
ayúdame, debes partir, mi amor. Las barcas son pocas.
¡Mirna!
__dijo y señaló a babor.
Me
di vuelta y espeluznada comprobé que el agua comenzaba a tapar las barcazas
amarradas en ese sector, es decir, la mitad de los botes de emergencia se había
perdido y lo peor, poco a poco, el mar se tragaba al barco. Desde el día
anterior, ladeado a babor navegaba,
nadie se había quejado, y ahora era demasiado tarde.
Tu
padre me tomó el rostro con las manos, y mirándome a los ojos me dijo:
__Escúchame
bien Mirna, mi amor, te pones en esa fila y tratas de subir. Yo buscaré al nene
y a tus padres.
Su
voz sonaba desesperada pero no quería. Él trataba de convencerme cuando en el
horizonte vimos un gran transatlántico rumbo a socorrernos, era un barco
Holandés que recibió los llamados de auxilio y viró de rumbo. Al divisarlo en
el horizonte el alma nos volvió al cuerpo, venían en nuestro auxilio.
Más tranquilo tu papá insistió.
__Amor,
quédate en la fila y trata de subir. Con ese barco en camino, todo estará bien.
Yo iré por el nene y por tus padres.
Esta
vez le creí, asentí, perdón amor mío, pero tu papá era fuerte, te amaba, yo
sería un estorbo en medio del caos, al fin no me dio tiempo a opinar, y vi cómo
se alejaba abriéndose paso entre la gente corriendo. Permanecí luchando por un
sitio, pensando en ustedes. Por momentos, lograba avanzar unos metros entre la
multitud, pero retrocedía con el movimiento de la nave, y mi lugar en el bote
peligraba. Aunque llegada la hora, dudaba si subiría, antes quería cerciorarme
de que ustedes también me acompañarían,
por ello buscaba un bote con cuatro lugares, pensando en llevarte en mi regazo,
rogando que Guillermo regresara pronto contigo y con mis padres, pensando en el
horror de estar viviendo esa catástrofe, ni siquiera me di cuenta que estaba
vestida elegante para el té, menos que tenía colgando la cámara del cuello, y
la medalla, al fin serían los objetos que harían pensar a Marcos y a tu padre
que estaba muerta. Nadie actuaba con caballerosidad, por el contrario, cada uno
defendía su lugar con insultos y empujones,
La tripulación
logró bajar los botes salvavidas y uno fue cargado con mujeres y niños. Parecía
que con el siguiente procederían del mismo modo, sin embargo, un grupo de
personas de la tercera clase se abalanzó valiéndose de amenazas y usando la
violencia sobre los demás, tomó el control y se metió en uno vacío. El resto de
la tercera clase, envalentonado, acentuó el desorden y copó los sitios. Pánico,
descontrol, gritos, llantos, caos, terror. Las mujeres y los niños quedaron
olvidados, relegados a segundo plano porque esa gente rústica ocupaba los botes
salvavidas. Sin contemplación, sin esperar su turno, algunos hombres fuertes se
lanzaban desde la cubierta. Caían con estruendo sobre otros, sobrepasaban la
capacidad de los barcos. Sólo les importaba salvarse. Nadie podía frenar esa
turba descontrolada y en barcazas para veinte se metían treinta, las familias
se hacían a un costado, los dejaban pasar, daban más miedo ellos que el mar embravecido.
Algunas señoras, incluso, habían sido aplastadas por los desbordados, a
quienes, con tal de subir, no les importó nada.
Lo
indisciplina no tardó en traer su fruto: dos botes de emergencia se quebraron
por sobrepeso y por el estado de la madera __vieja y reseca, jamás la habían
mantenido__ y no estaban preparados para soportar la evacuación. Los ocupantes
se hundieron y las olas los cubrieron. Algunos gritaban desde el agua sin que
nadie pudiera hacer nada para rescatarlos, las cabezas aparecían y desaparecían
bajo la furia del mar.
Al
contemplar la escena, los pasajeros de la fila, yo con ellos, supimos que, por
más que el barco holandés acudiera en nuestro auxilio, nuestra vida corría peligro.
Entonces, luché con más ahínco para conseguir lugares en algún bote. Ahora sí,
quería uno. Cuando estuviera segura cerca, intentaría subir, esperaba que, a
esas alturas, tu padre hubiese logrado llegar a ti y a mis padres. En ese
terrible caos, volví a ver a la señora con los chicos. La tenía al lado y la
dejé pasar primero. La mujer me agradeció.
__No
entiendo por qué se ha desatado esta locura y desesperación si hace unos
minutos el capitán aseguró que el barco tardará doce horas en hundirse, y ya se
está acercando el holandés.
Miré
a babor, cada vez se hundía más. Desde la mañana temprano no se podía caminar
por algunos sectores porque avanzaba escorado del lado izquierdo. La inclinación
ahora era tan pronunciada que ya nadie creía que el capitán hubiera dicho la
verdad, nos estábamos hundiendo, en minutos.
Para
entonces tu padre, que había logrado ingresar a la parte interna de la nave,
fue directo al camarote de mis papás. Frente a la puerta, sin paciencia,
intentó abrir, pero estaba cerrada. ¿Habría procedido mal? ¿Se llamaba a la
puerta a pesar del caos y se esperaba o se entraba sin anunciarse? No necesitó
la respuesta. Mi padre quitó la traba rápidamente y abrió.
__!
Guillermo!
__ ¿Están
bien? __preguntó a la pareja mientras corriste a sus brazos, y mi padre
entrecerraba la puerta del camarote, tal como si con la conversación no quisiera
molestar a mi madre.
__Sí,
pero mi esposa duerme __. Estaba dolorida __ explicó__. ¿Qué sabes de Mirna?
__interrogó con voz preocupada a coro contigo.
__La
encontré, y está en la cubierta.
__Gracias
al cielo __dijo mi padre dándole una cálida mirada. Guillermo se la retribuyó.
Y
eso fue lo último que vieron porque en ese preciso instante la luz se cortó, y
quedaron en absoluta oscuridad.
__
__Lo
recuerdo, madre, esa parte la recuerdo, me aferré a las piernas de papá
temblando cuando la luz se cortó, me puse a llorar por los abuelos, ahora lo
recuerdo.
__Guille,
amor, tranquilo, o le harás mal a ella _dijo Pedro.
__
__!
Carajo! __ gritó malhablado como era tu padre, como tú. Los tiempos se
acortaban. Luego prosiguió__. Dejé a Mirna tratando de que aborde un bote
salvavidas. La tripulación está llevando a cabo el desembarco de emergencia. Un
carguero ha venido a buscarnos.
__Es
una excelente noticia que haya llegado un barco por nosotros, así estaremos
fuera de peligro __dijo mi padre, que no alcanza a entender qué sucedía arriba,
la paz de su camarote le hacía creer que todo estaba en orden.
Guillermo
se dio cuenta e intentó explicarle.
__Ahora
reina el caos, es un descontrol. Hay una larga fila esperando para ocupar un
sitio en los botes. Deben venir ahora mismo con nosotros.
Mi
padre respiró profundo.
__Lo
sé, mamá, todo lo que se vivió allí lo estoy recordando, el abuelo pareció
tomar cabal conciencia de la gravedad del incidente. Sin embargo, como no
actuaba, papá quiso cerciorarse.
__ ¿Entendió?
__le dijo.
__ Hijo…___musitó.
En la absoluta negrura que nos rodeaba, papá sintió que su suegro le tomaba del
brazo con suavidad y le hablaba con tranquilidad __. No puedo llevar a mi
esposa a ese loquero, ella está débil. Dejaré que descanse un rato y subiremos
cuando se sienta mejor, lleva al nene con Mirna. Si ves que tenemos alguna
posibilidad, por favor, ven por nosotros.
__Creo
que deberían subir ahora __insistió papa__. No puedo volver sin ustedes, Mirna
se preocupará y no querrá abandonar el barco, ni ponerse a salvo en ningún barco.
__Guillermo,
deben hacerlo por el nene, seré sincero contigo, pero no le cuentes a ella, no
lo sabe, o cree que sanó __, mi esposa está muy enferma. Si atraviesa
situaciones extremas como las que podría vivir en la cubierta, temo perderla,
¿entiendes?
Se
hizo silencio. Su suegro acababa de contarle un secreto que ni Mirna siquiera
sabía, papá entendió de lo que hablaba y le dijo:
__De
verdad, entiendo. Vendré en cuanto lo
crea conveniente, y si todo está en orden, nos iremos todos juntos de aquí.
__Gracias,
hijo. Por favor cuida de Mirna y de Guillermito.
__Sí,
claro.
__Promételo.
__Lo
prometo.
El
abuelo me besó, abrazó a papá sin
vernos, pero el cariño se hizo palpable en la negrura del pasillo.
Papá
me cargó en brazos, salimos apurados, tanteando las paredes. Urgía saber qué había
sido de usted, le pregunté, me dijo lo de las fotos en cubierta, me mintió para
tranquilizarme. Por los caminos nos cruzamos con tres hombres. Por los ruidos
de la conversación supimos que estaban saqueando las habitaciones. Agradecimos que
el abuelo cerrara con llave.
Papá
decidió pasar por su camarote para retirar tres salvavidas dispuestos en los
camarotes. Uno para cada uno, también sacaría el arma, comenzaba a pensar que
la necesitaría.
Al
tantear la puerta en la oscuridad, notó que estaba abierta y que ya se habían
llevado todo, partimos hacia el otro camarote, las preguntas nos abarrotaban.
¿Acaso
usted ya estaría en el bote? ¿Había logrado subir a la embarcación? ¿El capitán
había lanzado mensajes de s.o.s.?”
__Guille,
Mirna, deben detenerse, están llorando, agotados, necesitan descansar __dijo
Pedro terminantemente, María se acercó a Mirna que no dejaba de sollozar, yo le
había completado los recuerdos de sus padres, la verdad de su mamá, a la que nunca volvió a ver.
__Mirna,
ven, a la cama, hijo ve con Guillermo a descansar, a tomar algo, Manuel ve con
Camila, si está Orestes por allí dile Pedro que me quedaré con Mirna hasta que
se duerma, que luego venga Gaby o Pía a reemplazarme.
__Estaré
bien, María, sólo necesito comer algo, y dormir un rato. Fernando, ve a
almorzar con todos.
__Me
quedaré y almorzaremos juntas, luego te quedarás con Pía, y te verá el médico,
si te sientes bien, seguirás el relato, que deben casarse en horas, debes estar
bien, lo merecen.
“Le
di un beso a mi madre, me abracé a Pedro y con el corazón encogido nos
dirigimos a la puerta, al vernos, Pía y Gaby se abalanzaron hacia nosotros, les
pedí el almuerzo para ellas, el nuestro a la habitación, Orestes almorzaría con
Beto y con Fernando en el comedor.
Necesitaba
ordenar el torbellino de recuerdos que había acudido a mi mente, y estar en los
brazos de Pedro.
Cuando
entramos, me desmoroné en llanto abierto, incrédulo de tener disfrazado todo
lo sucedido, o buena parte a como se me diera la gana acomodar para evitar
mayor sufrimiento”.
__Pedrito,
había borrado a mis abuelos, deformé a antojo los hechos, tenía buena parte de
las respuestas en mí, no sólo ella no tenía memoria, tampoco yo __ dije.
Pedro
me estrechó besándome con suavidad la leve sonrisa, bebiendo una a una las
lágrimas.
__Shh.
Se defendieron del dolor en la amnesia para resistir, también tu papá, quizá
olvidó los detalles o no quiso contarlos, quizá se casó con Lucía para
amortiguar tanto dolor, para evadirse, todos hicieron lo mejor que pudieron
para sobrevivir, mi amor, pero hoy estás a mi lado, y Mirna contigo, ya no
habrá naufragios ni más dolor, eso te lo prometo yo.
__ ¿Por
qué Isabel y Fernando no dijeron nada, Marcos supo todo, por qué?
__Ya
lo dijo, no sabían que Mirna regresaría, luego Fernando temió hacerle daño,
acaba de enterarse por ti cómo murieron sus papás, por decisión murieron
juntos, en el camarote, fue un amor eterno, decidido, el universo se amoldó a
la enfermedad de ella para que él se fuera a su lado. Se cumplió lo que ella le
dijo a Mirna, como se ha venido cumpliendo hasta llegar ella acá, y yo a ti o
al revés.
Ayer
caminé y conocí contigo de la infinitud de la piel húmeda y sedosa como el
cielo desnudo de tu ternura cual suavidad anidada en cada uno de los poros que
resbalaban despacito con el rocío de mis labios. Era noche llena de todas las
mañanas con ese especial invierno de tu boca que guiaba los instantes precoces en
el eco prendido de la entrega convertida en una algarabía silente frente al
espejo de tu cuerpo, y bastaba oler tu piel para encender la hoguera de las
manos que daban paso a las magistrales pinceladas en ese mapa en relieve, cuadro
primitivo de los secretos en tus costados y recónditos espacios con ese sabor a
pino y a primavera sentido en tus detalles, inmerso de lagos, volcanes, túneles
y frondosa vegetación como noble geografía sudando a tus espaldas el sudor
divino de tus deseos como patria apetecida por el amor y el alma. Todo en un
suspiro total que ahogaba el frenesí del alma descubriendo las exquisiteces
guardadas en la virginidad de tu mirar que era adivinar tanto mar en tus labios
por besar lo besado, soñar lo soñado y eternizar lo sentido.
Debo
agradecer a todos, a Dios, a tu padre, a Mirna, a mi padre que la rescató, a María que la cuidó, a Manuel que me
acompañó en salir de Kenia, el haber
llegado a Palermo, a ese veintidós de octubre de 2014, a ti, mi amor, todo
estuvo escrito, desde ese viaje a Europa.
__No
debí ser tan duro con mi padre, se casó por dolor, no fue culpable de que
naciera Miguel para lo que fue, no por ello dejó de amarnos, ni a mi madre ni a
mí, agradezco haberlo visto antes de morir, que mi hijo sea abogado del estudio
que legó, que mi nieto quizá lo siga, que salvara a mamá, a mí, aunque hoy no
sé si lo del fuego lo imagino o fue real, veremos, Marcos debía tener las
respuestas a muchas cosas, yo al no hablar mi papá, no pregunté a tiempo. Ahora
entiendo aquellas salidas frecuentes, no
eran por Lucía al comienzo, sino intentos de salvar los campos, los negocios,
al parecer, sólo salvó la casa, a expensas de la venta del resto, no recuerdo a
mis abuelos, aunque creo que murió él a meses de regresar papá, y detrás la
abuela vino a casa un tiempo, para morir
de pena meses más tarde, ni eso sé con certezas.
__ No
te tortures, Cuca e Isabel deben de tener las respuestas, ahora que Mirna
recordó, podrán preguntar y rellenar los
baches.
__Juan
puede que recuerde, lo veré en el penal si quieres.
__Claro,
iremos, tranquilo, todo a su tiempo.
Guillermo enlazó la mirada a la de su esposo,
le tomó el rostro entre las manos, se hizo con su boca hambriento, ávido tomó
el calor de ella como si le fuese la vida en ello, y la boca de Pedro más tarde
envolvió la hombría, enervando su pasión, alejándolo del dolor, convocándolo al
placer, provocándole deleite, llevándolo a las estrellas alejándolo de las
profundidades oscuras del mar, amarrándolo a esas cosas bellas que los
cautivaban, también necesitó alejar su propio naufragio en medio de las balas
cuando Juan y Martín se lo llevaron en el barco y Manuel, siempre su hermano,
cuando las fuerzas desfallecían allí estaba para tenderle la mano.
Desalojó
el recuerdo y sacó la esencia entera de
Guillermo, con su calor destellando en su boca, sintió el calor mismo de sus
manos como su fuerte sostén, para que sus labios dieran esos besos tan sanos que
cual retoños acianos lo hacían perder la razón, aceleró los corazones, y
llegaron al infinito en pura degustación de ser, de esencia, sin que el deseo
pereciera embebiéndose en cada átomo, ni que el placer acabara en ello, ni que
su labor terminara, se entretuvo dejando regueros húmedos acunando orgasmos, en
tiempo conjunto llegando a los labios cuando los finos lo ansiaban, yendo por
un éxtasis que llegara en plena sincronización, llenándolos de pasión al
tenerlo los dos, juntos.
__Tú
que eres la verdad de mí existir, te palpo, te siento, estas ahí siempre,
porque eres el Amor, señor dueño, amo,
la rueda que gira en mi entorno porque
eres parte de mí y el todo. Deja por un
instante de pensar, olvídate del mundo donde estás y siente el esplendor que
producen mis caricias y mis mimos en tu interior, déjame ser el artífice de lo
sublime. El artesano, el pintor, el músico, el escritor, para moldearte, pintarte,
sacar música de tu llanto sacando la belleza, lo sensual, lo más hermoso que
tienes en tu interior, que termines agotado, extasiado, cansado entre mis
brazos, que ante ti se abren.
__
La vida no es una comedia, o lo es luego de varios dramas siendo todos los
actores protagónicos al levantarse el telón. A veces somos los buenos, otras
veces los perversos, depende de la actuación que nos toque en la ocasión; mas,
como buenos actores tratamos en cada obra de seguir perfeccionando el texto que
nos van dando conscientes de que en la
audiencia algunos quizás aplaudan, pero otros criticarán sin lograr nunca ese
afán…Mas sigue así la actuación mientras la vida prosigue hasta que baja el
telón y se apaga el corazón.
Nosotros ya actuamos miles de dramas, Pedro,
quiero prometerte y que me prometas que desde ahora seremos comediantes, que
los chicos no conocerán la tragedia, que serán felices.
Sos
mi esposo perfecto, mi amante único al fin, mi mejor amante. No te enojes si te
digo mi amante. Muchas pude decir o te dijeron mi amor. Ser amante es un todo.
El enamorado cómplice con el que se tejen los sueños. Eres mi único dueño, el de la fantasía de mis noches, el que deja en mi lecho rocíos de amor. Serás mi amante. Más te entregué en Palermo más que ese espacio en mi corazón. Serás mí amado… un mundo, mi universo, mis sentimientos te pertenecen. Sólo vive este instante con dicha y placer, encuentra mis verdades, lee en mis besos, siente el amor en mis caricias que te reafirman lo que siento, lo que piensa un alma que gime por vos. No reclames por una palabra que se la lleva el viento. Sólo embriágate de cariño que tengas una resaca de amor.
El enamorado cómplice con el que se tejen los sueños. Eres mi único dueño, el de la fantasía de mis noches, el que deja en mi lecho rocíos de amor. Serás mi amante. Más te entregué en Palermo más que ese espacio en mi corazón. Serás mí amado… un mundo, mi universo, mis sentimientos te pertenecen. Sólo vive este instante con dicha y placer, encuentra mis verdades, lee en mis besos, siente el amor en mis caricias que te reafirman lo que siento, lo que piensa un alma que gime por vos. No reclames por una palabra que se la lleva el viento. Sólo embriágate de cariño que tengas una resaca de amor.
Encendiste
el motor de mis suspiros, convertiste el aire en tentación para mis
instintos, pintaste de rojo pasión el silencio de mi noche y en tu dulce
atrevimiento robaste el sueño de mis
noches. Juntaste alucinaciones entre tus hierbas y bebí de su té, fotografiaste
la dulce perversión del pecado y lo pusiste en mi mesita de noche, calculaste
espacio entre las arrugas de mis sábanas y supiste cómo y cuándo arañar mis
deseos.
Le
mentiste a mi lujuria, engañaste mi espera, sufriste los escalofríos de la
intensa emoción y cuando tu espalda erizó tanta pasión, robaste las yemas de
mis dedos y las tatuaste en tu piel. Quisiste arrancar una lágrima de mi alma y
besaste la humedad de mi orgasmo, quisiste oler el sudor de mi cuerpo y resbaló
tu lengua en las vainillas del exótico azabache, retaste la fragilidad de tus
cabellos entre mis manos cuando el gemido rompió la fragilidad del cielo.
Enciende
tu cigarro que absorberé tu erotismo en mi añejo tinto, no dejes que tu mirada
se aparte de mis labios porque mis ojos siguen embelesados en tus
transparencias. Dame tu mano porque quiero escribir lo que acabo de sentir,
acércame una caricia porque sequé mi tinta en tu cuerpo, dame un poco de tu
aliento porque mi corazón se resecó de tanto latir. Lo hiciste. No hay
palabras, sólo el recuerdo. No hay historia. Sólo un hoy en libertad.
“Nos
duchamos atolondrados de amor, ni
siquiera almorzamos, para cuando logramos vestirnos, y salir, Josecito, Andrés,
Guillermito, corrieron hacia nosotros,
ellos y Rubén, las nenas bebés eran la nueva generación de Graziani- Beggio,
los que llegaron en tierra firme, los que nacieron del amor seguro, diferente,
a veces juzgado, llamado por algunos pecado, por otros prohibido como el
nuestro, o el de Manuel con Camila, pero real, verdadero, firme, sin amenazas de naufragar en los avatares
del tiempo, en las tormentas de la vida, éramos sobrevivientes, y por ello
fuertes, murallas contra el agua y el odio, contra críticas y recelos, contra
vientos huracanados, y lo mismo transmitiríamos a los chicos, una familia
compleja, enorme, diferente, que el naufragio vino diagramando desde hace
cuarenta años, que en Palermo se develó en parte, que hoy era una realidad
sólida, concreta, inmortal, como eterno era el amor que me unía a Pedro.
La vida
nos dio a todos otra oportunidad, esta vez, iba a dejar el corazón.
Para
cuando decidimos que todo debía ser dicho ese día si deseábamos el casamiento
que mamá merecía, ella estaba abrazada a Fernando sonriendo, en el sofá, en el
living de casa, el médico la evaluó y se marchó, estaba calma, embargada de
emociones encontradas mas como yo… dispuesta a relatar y terminar de correr el
velo que por defensa o por olvido, habíamos corrido y dejado atrás a tantos,
cuarenta años atrás, supimos que esta vez, llegaríamos al fondo de lo sucedido,
hasta yo despertar en casa de Marcos, y ella en la casa de los padres de Pedro,
en la mansión de Kenia, donde en años,
vería nacer al amor de mi vida, donde se estaba gestando un amor eterno, o
quizá… varios, mas en nuestro caso… un
destino, el mismo amor”.
CONTINUARÁ.
HECHOS
Y PERSONAJES SON FICTICIOS.
CUALQUIER
PARECIDO CON LA REALIDAD ES MERA COINCIDENCIA.
LENGUAJE
ADULTO.
ESCENAS
EXPLÍCITAS.
UN
DESTINO… UN AMOR… GUILLE Y PEDRO… PEDRO Y GUILLE.
Joyce Alviz Beautiful
ResponderEliminarEncarna Precioso
ResponderEliminarRosa me encanto,
ResponderEliminarEva Saavedra Mendoza Bellísimo
ResponderEliminarSancho Precioso
ResponderEliminarRosa Maria Hidalgo Mejia Que hermoso
ResponderEliminar
EliminarBonifacio Leon Si verdad?...Pinche Orgullo a veces es prioritario cuando en esto debe ser el Amor!
Maria De La Luz Estrada Tapia Hermoso
ResponderEliminarMarta Susana BELLOOOOOOOOOOO!!!
ResponderEliminarNoe Hermoso.
ResponderEliminarDiego UNA NOCHE HACIA EL ESPLENDOR DEL AMOR.
ResponderEliminarMartha BONITOOOOO!!!
ResponderEliminarAlena Suchankova waw!
ResponderEliminarJulio Castro Muy buenas letras
ResponderEliminarMaria Hidalgo Mejia Es un milagro de amor, bellísimo, fascinante este naufragio, gracias.
ResponderEliminarRoss Odino me gusta
ResponderEliminarNoemí Me encantó.
ResponderEliminar
ResponderEliminarIsabel ¡qué bueno, que el final sea como el inicio, genial idea. Gracias amiga
Eve monica
Que tengas una feliz tarde.
Victoria Precioso.
ResponderEliminarPatricia Precioso!!!
ResponderEliminarVeronicka Muy hermoso querida Monica
ResponderEliminarMaria Angelica Me encanto gracias gracias gracias
ResponderEliminarRosa de Henriques Hermoso!!!
ResponderEliminarMary WOW...👏👏👏
ResponderEliminarMarina Excelente
ResponderEliminarLuz Exelente
ResponderEliminar
ResponderEliminarYoli Ganuza Gonzalez muy bonita gracias
Bell Me fascina
ResponderEliminarPaloma Sánchez-Archidona Divino, amiga
ResponderEliminarLucy Chadid Chadid Hermoso
ResponderEliminarJoseEmilio Fontirroig Muchas gracias amiga , Eve Monica Marzetti
ResponderEliminarJosefina MAGISTRAL !!!
ResponderEliminarMiryam No me gusta Meeeee encanta Eve, genial.
ResponderEliminarEmocionante relato Eve...Naufragio comenzó bello, con dolor pero bello, y será bello hasta el final de los tiempos...Tal como lo es el amor verdadero...
ResponderEliminarEs maravilloso, aunque Normita se enoje, creo que es la más bella de las finalizadas o cercanas, el encuentro, el romanticismo, el desarrollo, y cuando iba a poner fin, pensé en dar estos capis finales como se inición, contantddo el naufragio desde Mirna, no es malo Solcito, es el dolor pasado para liberarlos aaún a mayor felicidad hoy, es bellísima, falta poquito, en breve, desafío o vecinos, ya veré, con las elecciones se me co,plican aun más los tiempos, gracias infinitas y mi amor.
EliminarSol Urvino El recuerdo de Guille y Mirna fue durisimo, EVE, espero que sirva al menos para encarrilar el futuro. GRACIAS Y UN BESO.
ResponderEliminarMaria De La Luz Estrada Tapia Gracias Eve, es maravilloso este final, besos querida.
ResponderEliminarbellisimo Eve volver a vivir a traves de Mirna y Guillermo todo lo pasado , es bueno saber de cuantas tormentas hemos salido , me gusto volver al principio y saber que siempre el amor triunfara , eso es lo hermoso de esta grandiosa historia , ame , amo y amare Naufragio por siempre ,no se si saldra el comentario , no anda bien la notbook , pero agradecerte Eve por todas tus novelas en especial por este Naufragio , mil gracias , besos y abrazos ¡¡¡
ResponderEliminarGracias Susana, sí, te lo intenté enviar a tu muro, pero vivo bloqueda y creo que no te llegó, iba a dar el capítulo final, y luego quise dar más, terminarlo como comenzó, relantando el naufragio desde los recuerdos de Mirna que a su vez despiertan los de Guillermo, volveré s todos antes del final, más allá en el epílogo que no tengo planeado, sólo imaginé contar el naufragio al leer historia de un Náufrago de García Márquez, me dije esto debe ir al final de esta tira NORMA FERZILA, VIEJITA DEHEN LA TIMBA USTEDES DOS,M LAS VEO, NO TE ENFADES, PERO CREO QUE NAUFRAGIO ES LA MEJOR, QUE SUPERÍO A EL VIAJE, Y DUDO QUE LE DEJE DEL TODO, PROHIBIDO ES MARAVILLOSA, Y SI FUERA POSIBLE LA MÁS ROMÁNTICA, PERO ESTAS DOS TIENEN MÁS DE FARSANTES COMO DESAFÍO Y LA CÁTEDRA,L BUENO ME GUSTAN TODAS, AMO ÉL, VECINOS Y EL EMBAJADOR, ME GUSTA MUCHO LO POLICIAL, MER VUELVO LOCA PARA DESENREDAR A COMO ESTÁ HOY VECINOS, ACCIDENTE O DESAFÍO, PERO SON PENALISTAS Y MERECEN CASOS ASÍ, gracias Susana, seguirá el relato de Mirba, su casamiento, y el fianl no lo veo aún, menos el epílogo, ruego sñarlo y cerraría esa magia que fue soñar el inicio, con los gemelos, nombres y Kenia, gracias y mi amor, en rato desafío, creo que por el tema elecciones quisiera poberme con vecinos, es muy compleja, y no quiero olvidarla, además de que el otro grupo gigante, me deja nada de tiempo, duermo noche por medio para publicar, besos mil. Calculo que da para cinco capítulos más MAUFRAGIO, EL VIAJE SIGUE NORMA COMO LO PROMETÍ.
EliminarHermoso!!!!!
ResponderEliminarEstuve casada con mi esposo durante 5 años. Vivimos felices juntos durante estos años y no hasta que mi esposo viajó a Australia para un viaje de negocios donde conoció a esta chica y desde entonces ella me odia a mí, a los niños y al amor. Ella sola. Entonces, cuando mi el marido regresó del viaje y dijo que no quería volver a ver a mis hijos y a mí, así que nos llevó fuera de la casa y ahora iba a Australia a ver a esa otra mujer. Entonces, mis hijos y yo estábamos tan frustrados y me estaba quedando con mi madre y no estaba tratando bien porque mi madre se casó con otro hombre después de la muerte de mi padre, así que el hombre con el que me casé no estaba y mis hijos estaban tan confundidos y yo estaba mirando para que mi esposo vuelva a casa porque lo amo y lo aprecio mucho, así que un día mientras estaba navegando en mi computadora, vi un testimonio sobre este DR EDDY, los testimonios de hechiceros compartidos en Internet por una señora LINDA y Estoy tan impresionado que también pienso en probarlo. Al principio tenía miedo, pero cuando pienso en lo que mis hijos y yo estamos pasando, lo contacté y él me dijo que se mantuviera en calma por tan solo 24 horas para que mi esposo me contestara y, para mi mejor sorpresa, he recibido una llamar a mi esposo el segundo día preguntando a los niños y llamé a DR EDDY y le doy las gracias por haber solucionado mis problemas, así es como recupero a mi familia después de un largo estres por una mujer malvada, así que con toda esta ayuda del Dr. EDDY, quiero que todos ustedes en este foro se unan a mí para expresar un enorme agradecimiento a DR EDDY y también le aconsejaré a cualquiera que tenga problemas similares o similares, o cualquier tipo de problema, también debería contactarlo, su correo electrónico es (dreddyspiritualtemple @ gmail .com) él es la solución a todos los problemas y predicamentos en la vida. Nuevamente su dirección de correo electrónico es (dreddyspiritualtemple@gmail.com)
ResponderEliminarESPECIALIZADO EN EL SIGUIENTE ESPACIO.
(1) Si quieres que tu ex vuelva.
(2) si siempre tienes pesadillas.
(3) Si quieres ser promovido en tu oficina.
(4) Si quieres que mujeres / hombres corran detrás tuyo.
(5) Si quieres un niño.
(6) Si quieres ser rico.
(7) Si quieres obligar a tu esposo / esposa a ser tuyo para siempre.
(8) Si necesita ayuda financiera.
(9) Cómo te han engañado y quieres recuperar el dinero perdido.
(10) si quieres detener tu divorcio.
(11) si quiere divorciarse de su esposo.
(12) si desea que se le otorguen sus deseos.
(13) Embarazo para concebir al bebé
(14) Garantizar casos ganadores de tribunales molestos y divorcios, sin importar la etapa
(15) Evite que su matrimonio o relación se rompa.
(16) si tiene alguna enfermedad como (H I V), (CÁNCER) o cualquier enfermedad.
(17) si necesita oraciones para la liberación de su hijo o para usted mismo.
Nuevamente, asegúrese de ponerse en contacto con él si tiene algún problema que lo ayude. Su dirección de correo electrónico es (dreddyspiritualtemple@gmail.com) en contacto con él de inmediato ... o llame o whatsapp su número +2348160830324 MI NOMBRE ES: Araceli la