"¿ERES TÚ?" CAPÍTULO SIETE.

¿ERES TÚ?

CAPÍTULO SIETE.

Me gustas cuando callas de Pablo Neruda.

Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.
Como todas las cosas están llenas de mi alma,
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.
Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
déjame que me calle con el silencio tuyo.
Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.
Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa basta.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.

Ciudad Autónoma.

24 de diciembre de 2016.

“Cuando la ambulancia hubo llegado a la zona de entrada de emergencias   ya estaba lo suficientemente despierto como para entenderlo todo, además de saber que era veinticuatro, que llegaba Navidad y  no podría hacer nada para cumplir con lo que tenía pendiente.

Guillermo iba a mi lado en la ambulancia y antes de que me bajaran, no sabiendo si él estaría a mi lado cuando  terminaran de evaluarme decidí no perder lo que el sueño me había mostrado, o al menos intentarlo”.

__ ¿Qué me sucedió?

__ Perdiste el conocimiento, justo cuando llegaba la gente del SAME, y dicen deben evaluarte.

__Estoy bien, Guillermo. Necesito irme a casa. Mi madre estaba esperándome para ir al médico, es Nochebuena, el nene…

__Chis. Tranquilo. No te han dado nada, el médico dijo que es solo una evaluación, quizás en un rato ya tengas el alta. ¿Quieres darme el teléfono para que avise a tu mamá? __ ofreció él con suavidad.

__No.  De verdad te lo dije, si le dicen por teléfono que tuve un accidente y que estoy acá, se va a infartar, es más, iba a llevarla a su médica a control.  ¿Puedo pedirte un favor?

__ Todos.

__ ¿Te quedarías acá hasta que  regrese de la sala de rayos?

__Me quedaré y seré yo el que te lleve a tu casa, no tienes auto ahora.  No te preocupes por nada, Alberto…

__Beto, sí, tu socio, ¿qué sucede? __lo corté.

__ ¿Cómo sabes que le digo Beto?

“Trágame tierra, me pisaré a cada paso”.

__No lo sé __titubeé __. Supuse, Alberto, habitualmente se dice Beto, ¿no?

__Claro, bueno Beto quedó en el sitio con la policía de tránsito en espera de la gente del seguro, en unas horas tendrás un coche, dudo que el tuyo pueda rescatarse, pero tengo seguro total, fue mi culpa, te darán uno igual, nuevo, no tienes que preocuparte, dejé todo firmado a Beto, y se encargará.

__ ¿Por qué cruzaste en rojo? Eres un peligro manejando Graziani  __lancé sin dejar de mirarlo.

__Estaba discutiendo una tontería con Beto, y sí, tienes razón, habitualmente no manejo, ni siquiera ando en coche, justamente como estaba con ese auto que gané de un cliente, Alberto no quiso tocarlo, pero soy un desastre manejando, disculpa.

__Bueno, yo también pasé en precaución, estaba con mil temas y la cabeza ocupada, no te he visto venir.

__Pedro…

__ ¿Qué?

__No te dieron anestesia ni nada, pero me nombrabas dormido, ¿estabas soñando conmigo, vos?

“Madre de Dios bendito, sí que quiero que me trague la tierra, con todo lo que soñé será imposible ocultarle las cosas a este hombre”.

__Algo así, supongo que es lo normal, por el trauma, por el accidente. ¿Qué dije?

__Nada, no sé, me nombrabas, y a Matías…

__ Lo siento, debemos bajar al paciente y llevarlo a la sala de urgencias, puede esperar si desea __interrumpió el paramédico.

___Sí, lo haré.

Cuando quise pedirle a Guille que no me dejara solo, ya me estaban entrando a la sala, me  pasearon por la evaluación inicial, hicieron preguntas, y fui a parar a sala de rayos pese a que les dije que estaba bien, que solo había golpeado levemente contra el volante. No pude liberarme de la Resonancia Magnética ni de las tomografías, análisis y placas.

Para cuando me llevaron a una sala ya no sabía qué hora era, y pensé que   perdería más que el coche, que al regresar a casa, mi madre estaría muerta y mi sobrino en un orfanato,  no era capaz de recordar ni dónde estaba mi bendito celular.

__Bueno, Pedro, al aparecer está todo en orden, pasarás un par de horas acá en observación y solo porque es Nochebuena, de lo contrario quedarías un día internado.

__No, doctor, por favor, tengo familia a cargo, debo regresar a mi casa, perdí el coche y el móvil.

__Lo tengo yo…

La voz, esa voz profunda envolvente apareciendo de la nada.

__Dr. Graziani, iré a ver las placas, el examen  es normal, convénzalo de que se quede tranquilo. No estarán todos los resultados pero los veré y en unas horas le daré el alta.

__Gracias Doctor.

El médico salió  y Guillermo acercó una banqueta a la cama, lo único que deseo es salir corriendo de acá.

__Lo tenías en la mano para cuando casi caíste y lo guardé, el móvil. Pedro, de verdad, quédate tranquilo. De un momento para el otro Alberto estará acá. Me traerá el coche.

Te llevaremos a tu casa, así podré yo mismo explicarle todo a tu mamá si estás de acuerdo.

¿Tan mal está?

__Es más bien hipocondríaca, se le puso que tenía que ir a ver  a su médica, a la peluquería, depende de mí para todo.

__ ¿Y tu papá?

__No tengo. Estoy a cargo de ella y de mi sobrinito. Mi hermano y la esposa murieron, y el nene es como mi hijo, debo llevarle los regalos,  me hizo mil encargos y preparar  todo y…

Resoplé agobiado, impotente.

Llega ese punto en la vida donde nada coincide, donde nada parece tener cuadratura, que nos conduce a desencajar  esos pensamientos que obligan a que miremos de una forma diferente, todo aquello que hasta ahora parecía normal, por alguna extraña razón observamos el universo en que vivimos y en el cual nos desenvolvemos dándonos cuenta que no tenemos  un valor absoluto, que en realidad el valor que se nos adjudica ...es relativo, y precisamente es ahí, donde la conciencia discute con la locura, el razonamiento concuerda con las acciones que en otros tiempos carecían de lógica, la marcha se detiene, el ritmo cardíaco se hace más pausado, las pupilas se dilatan en señal de advertencia de que muchos cambios se están generando dentro y fuera de esa atmósfera donde  normalmente solemos convivir. Supongo que esto me paró las piernas para algo, pero en verdad ellos dependen de mí, Guille, no tienen a nadie más ni salieron indemnes del accidente de mi hermano.

  Aunque la materia que ocupamos nos muestra que hace tiempo ha ido  presentando cambios, cambios que son imperceptibles ante la mirada que se llena, que se pierde en ese mar de mercadotecnia barata donde el consumismo, es lo que rige, el aquí y el ahora, de todo aquello que de alguna forma... "Le hará bien a nuestra existencia" llega ese punto en nuestra vida donde no quisiéramos que hubiese un punto ya que el punto significa un paro total, un final de algo, que al mismo tiempo abre la expectativa, el interrogante a todo lo nuevo y desconocido. Por naturaleza humana tememos aquello que no hemos visto jamás, llega un punto en nuestra existencia en que nos dejamos morir estando vivos porque preferimos... claudicar.

__ ¿Así te sientes?

__Más o menos. Supongo que a veces…, siempre, me siento agobiado. Me hice cargo de todo, y dejé de ser el que era, nadie lo fue luego de esa pérdida, y  por eso no te vi, estaba pensando en los encargos, en correr para llegar a Navidad con todo listo, en… supongo que ya no importa, no tendré nada para esta noche, con suerte podré explicar lo sucedido y salvar a mi madre.

__ ¿Matías es tu novio? ¿Quieres que lo llame a él?

__No. No tengo novio. Es mi amigo, mi compañero de trabajo. ¿Cómo sabes que soy… gay?

__No sé, lo supuse, conozco a Matías, me extraña que no tengas novio, que él no lo sea, es bastante insistente.

__Bueno, sí, alguna vez quiso pero yo no. ¿Y tú? Tienes un hijo, ¿verdad?

__Se sabe bastante de mí supongo, sí, Fabián, es grande ya, estudia abogacía, y soy gay, pero hace poco que  él lo sabe, y menos que me divorcié de Ana, estaba casado, quiero decir, con una mujer.

Ayer conversé con un amigo de la juventud que hacía años no nos veíamos y me contaba sobre una mujer que él amaba, pero que él mismo provocó la separación y no sabía cómo volver el tiempo atrás. Yo le di mi consejo pero sabemos que todos hemos pasado por estos momentos desagradables donde perdemos un amor.  Aunque yo no he perdido a nadie, no me enamoré antes de nadie.

__ ¿Antes?

Perdón, no sé qué estoy preguntando, ¿vives en el Delta?

__Sí, ¿y eso de dónde lo sacaste? Pedro, pareces mago, adivino.

__Lo soñé.

__ ¿Cómo?

__ Vi cosas en el sueño, de ti, de mí, y vivías en una casa enorme en el Delta, y… estaba tu hijo.

__ Curioso, sí, soy fóbico, siempre detesté el campo, las vacas, la alfalfa, me aterrorizaban, entonces me prometí que alguna vez  tendría algún contacto con la naturaleza, le dejé la casa a Ana al divorciarme y compré en el Tigre, es enorme sí, curioso que la soñaras. Está poco amueblada, es demasiado grande, cuando Fabi se queda con la madre, es como demasiado solitaria, pero empiezo a acostumbrarme, ¿y vos, cielito?

Me estremecí cuando dijo cielito.

__También _murmuré a través del temblor que me causa su mirada.

__ ¿También qué?

__Vivo en el Delta, pero en una casa pequeña. Cuando murió mi hermano quise alejar del sitio a mi familia, a lo que quedó, para  que se recuperaran, no fue fácil, no lo es. Estoy trabajando duro para terminar de pagarla, por ello no podría comprar otro auto.

__ Ya te dije que no, que lo tendrás en horas, y por nada debes preocuparte. Mira, ya que somos casi vecinos, te llevaré a tu casa, para hablar con tu mamá. ¿Le compraste los regalos a tu sobrino?

__Sí, están escondidos en casa, bueno algunos, porque siempre pide un perrito, y no puedo dárselo, no podría cuidarlo. Y mi madre apenas sale de la cama.

__Bien, como por mi culpa entiendo no hiciste las compras para la cena, y  nada hoy, te invito a pasar la Nochebuena en casa. Después de todo somos vecinos al parecer,  te puedo recoger más tarde, me darás los regalos ahora. Y los colocaré en el árbol, es más pueden dormir esta noche en casa, ya te dije que es enorme.

__ ¿Qué?

__Por si se hace tarde, pueden quedarse en casa.  Yo no soy creyente, por mí no festejaría nada, pero mis amigos insistieron, y como es el primer año en la casa acepté.

Cielito, solo estará mi hijo, la gente del estudio, un amigo, Si quieres puedes invitar a Matías, ¿está de novio?

__Con ganas.

__ ¿Cómo? __ lanzó la voz con la sonrisa que me dejó sin habla de nuevo.

__Nada…  que  anda pidiendo Papá Noel un novio.

__Bueno, creo que haría muy buena pareja con mi amigo, estará esta noche. A mí me gustaría y…

__ ¿Y tú? ¿No estás de novio?

__Estaba, pero desde hace dos horas no.

__ ¿Cómo?

__El amigo que irá a casa, quiero presentárselo a Matías, era mi pareja, mi amigo con derechos, ya sabes, pero ahora no me interesa más, ahora quizá quiera un amor, como pidió Matías.

“Madre de Dios, bendita que no siga”.

__Cielito,  vos estás solo, y yo lo mismo, y no voy arriesgar lo que siento, no sé muy bien si decirlo, pero nunca lo sentí antes. Te quiero a vos, en mi casa esta noche y desde esta noche… siempre,  no solamente como me pediste en el estudio. ¿Eso lo viste en el sueño?

__Dios, no debí nombrarte el sueño, bueno, sí, me vi como tu socio, mejor dicho…  es complejo, yo despertaba en tu casa y no recordaba nada, pero había pasado un año de hoy, ¿entiendes?

__Más o menos. Si me contarás entendería.

__Bueno, eso, que a un año adelante, estábamos por festejar el año de conocernos, así, en el accidente, y yo estaba en esta época, el resto de la gente en el año que viene, pero yo era tu socio, no ya de Matías.

__ ¿Y qué más?

__Nada más.

__Mientes.

__No.

__Pedro, ¿quieres ser mi novio? Bueno, no. No me respondas, sé que tengo un pasado que si lo conoces me dirás que no. Pero te encontré por azar en la vida, cuando menos lo esperaba, llegaste alumbrando mis días oscuros y abrazando mis noches de soledad, ocupando un espacio inmenso en las entrañas más profundas de mi corazón moribundo por heridas de recuerdos fortuitos en el tiempo.

¿Es eso lo que viste a un año adelante? ¿Serás mi amor?

__Llegaste sin darme cuenta, sin pensar que llenarías de colores mi existencia, amándonos en esa alcoba donde preferíamos ser prisioneros del deseo más placentero, donde nos confundíamos de piel por el roce tan pasional de nuestros cuerpos.

Besos que anidaban en la locura irracional de nuestras mentes, caricias que volaban hacia el infinito del cielo derramando en nosotros sus tentaciones de perdernos sin rumbo, sin destino, solo pensando en  la erupción de instintos inimaginables,  de seducirnos.

Miradas que penetraban en los recónditos misterios que guardaban como un tesoro los enigmáticos pensamientos de la mente, cuando llegábamos al límite final de un sentir indescriptible que nos opacaba la cordura y nos cegaba por un momento.

Solo palabras a medias dándole paso a gemidos involuntarios, que naufragaban en un mar de pasiones donde nos ahogaba ese olor aromático a divinidad, donde los suspiros derrotaban nuestras fuerzas haciéndonos caer exhaustos en aquel lecho de amor.

Cómo olvidar esos momentos al cual nos hicimos adictos, cómo pude perderte, tan solo una palabra bastó para romper ese hechizo hermoso que  juramos defender para toda la vida, quizá se interpuso la misma vida por querer entenderla y no vivirla, y así se esfumó nuestro amor sin saber cómo, fuimos culpables de la fuga sin adiós de un amor puro y hermoso, donde yo soy el personaje malvado que protagonizó el adiós y el final de esta bella historia al despertar del sueño, me decepcioné, porque me negué a lo que allí veía y cuando estaba por aceptarlo aun sin entender, desperté.

__Pero estoy acá. Nunca dudes de entregarte al amor sin pensar en lo que nos depara el futuro.  Amar es entregarte sin miedos a las redes de un corazón por siempre. Luchar por encontrar ese amor y cuando lo tengas entre tus brazos cuidarlo  por siempre.

Podemos hacer realidad ese sueño, empezando porque me dejes ayudarte con tu familia, conocerte, pasando esta noche y mañana en casa.

__!Guille! Fue un sueño. No nos conocemos.

__Pedro, pudimos morir en ese coche y no estar hablando de nada ahora, pero estamos bien, vivos.

Te voy a contar una historia, del valor del amor, de darle el permiso de entrar a la vida cuando se reconoce.

“El correr del tiempo entre las colinas de aquella llanura y el canto de los pajarillos, eran la tierna expresión del pueblo, donde el acariciar las verdes praderas era llevar la luz a una mirada fija, muy lejos del andén.

Una joven humilde de belleza impresionante en una apacible tarde salió por el campo montada en caballo. Al saltar una cerca fue tumbada por este y socorrida por Demián, un valiente caballero que había llegado en la mañana de ese mismo día. Los días pasaron y los encuentros eran más frecuentes, el amor había fluido entre ellos.

Mientras caminaban junto el río, Demián tocó las manos de Princesa y le pidió que fuera suya. Sin embargo, ella respondió: "El verdadero amor, sabe esperar", "tenemos que conocernos más y fundamentar nuestra relación en valores", "vamos a presentar nuestro noviazgo ante nuestras familias, haciendo una gran fiesta para el compromiso".

Y llegó el día. Camino a casa, fueron asaltados por unos bandidos, despojándolos de todas sus pertenencias y dejándolos por muertos. Un par de ancianos le brindaron socorro, curaron sus heridas y en un ritual a la luz de la luna, declararon su amor eterno”.

¿Me dejas empezar a conocerte?

__Por hoy sí, acepto pasar la Nochebuena en tu casa, si es que puedo sacar a mi madre, nunca sale.

__La convenceremos.

__Guille, al despertar, me quedé extrañándote, escuchando la emoción de tu voz y el brillo de tus ojos desnudándome.

Me quedé con ganas de ti...  de sentir tus besos despertarme, de tus manos aferrándose a mi figura y sentir tu aliento acariciándome la espalda. Hoy te extrañé... esperé que me escribieras, desesperé el horario tan mundano  y tu recuerdo me robó un suspiro cautivo. Hoy te extraño... te necesito al lado mío, extraño el calor tu piel ardiente y en tus sueños entregarme a ti completamente.

Es lo que estaba por suceder cuando desperté, solo que eras mi esposo, pero las cosas  no pueden ser tan simples como hacer realidad un sueño, ¿verdad?

__ ¿Por qué no? Quizá si lo sean, y nosotros lo  convertimos en complejo.

¿Por qué no animarnos a hacer realidad las palabras del sueño, las imágenes?

__ Cuando te conocí, cuando por primera vez miré tus ojos y sentí tus manos, cuando por primera vez escuché tu voz y presencié tu sonrisa, desde ese instante te guardé en mi corazón.

Ahora por cosas inexplicables del destino te encontré y nuevamente como aquella primera vez, lograste cautivar mi atención. De la nada surgió este sentimiento tan hermoso, en medio de turbulencias y confusiones me enamoré de ti... me resistía a aceptarlo, me daba miedo también, pero ya no pude ocultarlo, en el sueño hacías cosas que me enamoraron.

Equivocadamente posé mis ojos en ti y me entregué sin condiciones en cuerpo y alma. Mi interior era invadido por ráfagas de alegría y emoción al saber que éramos solo tú y yo. Nada me importó, en mi mente y corazón, solo tu presencia y tu calor eran lo que deseaba. Entonces te brindé mi compañía, mis cuidados y atención, quise que supieras todo de mí, aun mis más íntimos momentos de dolor, no para que me compadecieras, sino porque confié en ti y compartirlo contigo era demostrarte todo mi cariño, pero desperté, era un sueño.

__Que podemos intentar hacer realidad. Nada lo impide.

Me pregunto si se jubilarán las palabras, si se terminará de ejercer el oficio más tierno de la vida, si se irán a descansar las frases y los detalles contados a lo largo del filo de la vida, lo digo porque todos los días escribimos sin más escapatoria que contar lo vivido, en cualquier lugar, en determinado espacio de la vida algo escribimos, algo somos y si somos es que seremos y seguimos siendo, ser y no ser, ese el mundo cierto, lo incierto es no escribir, ya una respuesta consciente, de la conciencia o del alma y lo importante es la vida que le damos a la palabra, la palabra es como las plantas, se deben de regar con agua todos los días para vivir, se debe de escribir entonces para vivir todos los días con las palabras que nacen y son de quienes las aman y hacen de ese momento, un espacio para suspirar, reflexionar, de lo escrito o lo propuesto. Me gusta decirte toda la verdad que cabe en un suspiro, un decir y sentir del espacio y el tiempo, tantas oportunidades convertidas en breves segundos que rozan con la eternidad de las miradas, me gusta decirte que siempre te veo a la vuelta de las esquinas en el vuelo trazado por los incontables detalles de las aves que escriben tu nombre a lo largo y ancho del celeste tierno con el que se adornan tus sueños, me gusta contarte de lo último sentido en mi alma, al comprender cómo se origina el silencio de la sencillez y la intensidad de la humildad encontradas en las alamedas de la voluntariedad, embelesado con el palpitar de tu nombre que se hace universo al sentir los saludos del viento, cuando estos se depositan en la piel y aroma de las rosas, me gusta reír con tu sonrisa, pues aprendo a conocer rostros bellos que se divisan en lo profundo de tu mirada, me gusta caminar con tus pasos y sentir que alcanzo a  tocar el rocío de todas las hojas de los árboles que son humedad a lo largo del camino, enseñando el deber de seguir caminando, insistiendo en construir la verdad de los triunfos, convertidos en perseverancia y fe, me gusta escribir en el libro de la vida, para contarte que sigues siendo el prólogo de todos los días, adornado por esa belleza presencial que es la vida, me gusta creer que he sido y seguiré siendo un artesano de los abrazos sencillos, para convertir los espacios en una novela de vida, espontánea, decidida, cordial y sana, me gusta saludarte y sentir las gotas que se deslizan en tus cabellos, para quedarse en mis manos y oler la esencia de tu belleza, me gusta besarte una sola vez, como beso de siempre, como beso de vida, como beso de toda una vida, así me gusta, es la verdad.

Nordelta.

Cuando estábamos charlando el médico regresó, estaba todo en orden dijo, me vería en un par de días, pero me dejaba ir. En efecto el rubio, Beto esperaba en la sala, y estaba en el coche de Guille, había hecho todos los trámites, le di la dirección de casa, nos llevó y allí  lo pasó a buscar Gabriela que era tal como la recordaba del sueño, mientras en el camino llamé a Matías para invitarlo a casa de Guille, en efecto, lo conocía, y estuvo más que encantado, aunque no terminó de entender cómo yo estaba invitado.

Sé que en unos pocos días me darán un coche nuevo, es lo que dijo Beto, que me trató muy bien.

Para cuando llegamos a casa, ya me sentía casi esposo de Graziani, ya creía en el sueño, y al entrar mi madre como lo esperaba lanzó su teatral exclamación.

__ ¡Hijo, pero es que me quieres matar! ¿De dónde vienes a esta hora? He perdido el turno con Camila, el nene estaba asustado, no tenemos nada hecho para la noche.

__Madre...

__ Es que seguro te colgaste con Matías y no piensas en nosotros.

__Mamá, tuve un accidente.

__Y que nada, no tienes excusas, es Nochebuena… ¿un accidente?

__Encantado Amalia, soy Guillermo, Guillermo Graziani  __Le tendió la mano, mi madre lo miró sin articular más palabras mientas Agustín corrió a mis brazos __ .Pedro no miente, lo llevé por delante con mi coche, por eso llegó tarde. Pero estará todo bien, tendrá  un auto nuevo, y pasarán la Nochebuena en mi casa, a poco de acá, con el nene, con mi hijo, no tiene de qué preocuparse.

__ ¿En su casa? Pero… hace años que yo no salgo, solo con Pedrito, y al médico _dijo mi madre y pensé que reproducir el sueño sería imposible, había sido eso, un sueño.

__ Vamos abuela, yo quiero _dijo Agustín que al acercarse a Guillermo hizo que este lo alzara, llamativamente lo cautivó como al tío.

__Muy bien señor, así será, tendrás  la visita de Papá Noel en casa, y la abuela estará bien, dormirá allí. ¿Crees en la bruja de la Navidad? _ le dijo como en el sueño y el nene asintió __.Pero es buena, ayuda a los chicos buenos como sos según me ha contado Pedro.

__ ¿Madre se siente bien?

__Perfecto hijo, ¿no sucedió nada malo en el accidente?

__Nada, Pedro está perfecto, lo vieron en una emergencia, y le dará mi seguro un coche nuevo.

__Nuevo.  ! Bien tío!

 ¿Juegas a la play tiíto? __dijo Agustín a Guillermo que me hizo un guiño dejándome sin aliento.

__No, pero me puedes enseñar, o jugar con mi hijo.

__ ¿Es chiquito?

__No, es grandote pero le encantará.

Ahora iré a casa a preparar todo, los pasaré a buscar en dos horas, ¿les parece bien?

__ ¿Qué puedo llevar, Guillermo?

__Nada Amalia, Julieta mi ama de llaves tiene hecho de todo, va gente a casa, pero solo mis socios _dijo Guillermo acariciando a Agustín ya cautivado con el abogado.

__ ¿Es abogado?

__Sí, y su hijo empezará a trabajar en mi estudio luego de la feria, ando necesitando un abogado, ¿verdad cielito?

El rubor me subió hasta la coronilla pero se detuvo cuando vi la sonrisa de mi madre. Guille dejó al nene tras darle un sonoro beso, y me acompañó a la cochera donde tenía escondidos los regalos.

Cada paso que daba era un déjà vu, cada vez más agradable.

Antes de sacar los regalos de las cajas Guillermo me abrazó desde atrás, el calor de sus manos me quemó la piel bajo la ropa, sus labios,  yo solo deseaba besarlo y abrazarlo. Guille se dio cuenta de cómo lo miraba y me tomó por los hombros y acercó los labios. Aquel beso, que al principio era inocente y tembloroso, poco a poco se volvió apasionado y ardiente. Ambos nos deseábamos.

__Pedro _susurró Guillermo con los ojos cerrados__. ¿Qué me has hecho? ¿Me has hechizado?

 __Te he besado, y te he de volver a besar, Graziani  __ susurré cerca de sus labios__. Siento como que siempre te he estado buscando y ahora no deseo dejarte escapar.

__No tengo intenciones de ir a ninguna parte, al menos sin vos. Tu familia me parece encantadora te aclaro.

__Te los ganaste, como en el sueño.

__ ¿Sabes qué somos? Dos cuerpos que se agitan al compás del ritmo de los corazones, al compás de cada suspiro. Dos cuerpos que encienden la pasión, dos cuerpos que tiemblan de emoción al sentir el roce de las manos,  al fuego que desprenden.
Dos cuerpos que  al abrazarse, brotan la locura y el placer, dos cuerpos que al besarse, provoca a recorrerlos, sin dejar nada pendiente. Dos cuerpos amándose, amándose sin cesar, hasta llegar al éxtasis. Dos cuerpos que se juntan, dos cuerpos complacidos, dos cuerpos satisfechos. ¿Es lo que viste en el sueño?

__Sí —murmuré atontado__ .No, no tanto quiero decir, solo me besabas.

__ ¿Te besaba?

__Nos besábamos. Y no sé quién eres. Vale Graziani, te lo contaré.

Espero no molestarte, pero acabo de tener un sueño, un sueño vivido en tus brazos, un sueño extraño porque te olí, y no sé quién eres. Tus facciones eran bellas, tu mirada tierna y tu boca esponjada, repetía en mis labios el dibujo de un hermoso beso. Tus cabellos doraban luz, mi palabra caminaba en tu cuello y tu mejilla se perdía en mi pecho. Corría sin sombras la noche y el día no salía de su ocaso, pintaba el aire exóticas esencias y el viento las mezclaba en cada poro de mi piel: vainillas y caramelos, resinas e inciensos, jazmín y canela, té indio y almizcle.

Sueño de ojos abiertos en el limbo del dormido amor,  catarsis de sentidos en el umbral de un excitado sentimiento, sublime imaginación del pensamiento escrita en ternura y mágica seducción  al sentir mis labios recorrer tu piel. Poseído por el dulce letargo del trance onírico, me sentí atrapado por tu cuerpo, absorbido por tu alma y envenenado por tu corazón: corría lenta la sangre por la membrana de mi espíritu, un intenso sudor fluía arrogante, la caricia picaba, el ambiente paseaba romántico y una tenue brisa bailaba sabores de poder y miel.

Un deseo se filtraba constante en cada cruce de miradas, una seducción envolvía caliente el espacio, tu desnudez rebosaba cremosa almendra y mi mano no se atrevía a tocarla.

Sentía profundo la excitación y por servida se daba la mente de mi proscrito seductor. Una elegante sofisticación hablaba de prisas y pausa, de oro y diamantes, de pasión y erotismo, de sedas y terciopelo en piel. Exploramos el bosque lejano donde las  fuentes se vestían  con dulces vainillas, donde lo goloso era denso, el ámbar transparente resina y el grito de un eco, la suave sinfonía de un gemido. Y entonces temblaron tus piernas y el vigor se disfrazó con el color de un cielo, el mástil se deshizo de su corcho y lo fundió en enmaderado sabor a regaliz y sándalo, penetró el impacto del nuevo clímax, la sensualidad devino gourmet de los sentidos y el placer, un hipnótico someterse de nuestras humedades. Desafiaba intrigante un escondido temblor, tu espalda se arqueó, una lágrima brotó y el orgasmo llegó mágico, afrutado, intenso, cálido, erótico, profundo y adorado.

Y el misterio abrió su teatro, el sueño la pesadilla de su despertar, el silencio jugó con el tiempo y el luminoso astro pegó de azul el cielo y su mar. Las incipientes arrugas se mezclaron con el olor de rubio tabaco en el espejo de un amanecer soñado, dos copas sedientas de sus tintos seguían vacías de añoranzas y las melancólicas velas del romántico anochecer, todavía esperaban quietas, una chispa que ardiera sus ceras. Encendimos la hoguera, nos hundimos en el ser, volamos al cielo, y volvimos a caer pero deshechos en polvo de estrellas, para solo muy tarde poder brindar.

Ahora te cuento convencido de que eres el hombre de mi deseo, porque te encontré en medio de la sencillez reconfortante de un bonito sueño y por eso te persigo más allá de lo permitido. Te escribo e idolatro porque mis sábanas amanecieron húmedas, mi almohada empapada de tu olor, mis tintas dibujando tilde por tilde las gotas de tu sudor y mi alma reacia de lo astral,  buscándote fuera de mis sueños, porque todavía no sé quién eres.

Mañana le diré a mi sobrino que te conocí una tarde y eras toda simpatía, recuerdo que llovía yo no sabía qué hacer, no sabía que decirte solo deseaba mirarte, pero a decir verdad recorrimos una vereda, donde quedó hermanada nuestra amistad.

Qué lindo es recordarte,  los recuerdos salen de mi mente, y vivo por siempre este presente tan solo por la gracia de tenerte, entraste a mi corazón  para brindarme tu amor, siempre estás en mis pensamientos porque sé que a todas horas, tú... de corazón me adoras porque son puros tus sentimientos.

__Sos tan encantador que mi corazón se alborota, y el sentimiento brota del pecho como ahora, no me canso de nombrarte lo único que quiero es amarte, porque me das calma y me haces sentir garbo, por eso yo escribo cada trazo con mi alma. Ayer... ayer eras mi amigo hoy... hoy sos mi amor, y sin ser una cuchilla afilada entraste como una daga  en mi pobre corazón para brindarme tu amor, y con toda simpatía has curado mis heridas, hoy...  hoy sos mi vida y por vos yo moriría.

__Cuando creía que  mis mariposas agonizaban y morían,  llegaste tú y con un solo
beso llegó la vida. Me encantaba  soñar entre tus brazos,  porque tú me dabas  las alas para volar,  pero se te olvidó  decirme  que la caída podría ser mortal... Echa tu amor a la suerte.
Desbórdalo de emociones de todas nuestras pasiones. El amor es la más fuerte pero no puede ser verdad, es la magia de la Navidad que todo lo confunde, lo mío fue solo un sueño, y te he sugestionado.

__No fue solo un sueño, o sí, pero que podemos hacer realidad, Pedro.

Ámame siempre sin miedos. Haz que siempre mi alma vibre. Deseo que me ames libre. Sin miedo, temor ni enredos. Si te invade la tristeza y te apresa allá en su aureola, aunque te sientas muy solo mantente en pie con firmeza y confía en mí, no sos uno más en mi vida, apenas te vi supe que te amaría y jamás  me arrepentiré de ese accidente.

Soy feliz porque ahora siento que siempre estarás  a mi lado. Mi amor es tan limpio y puro, no vivo una vida incierta. Mi amor sigue abriendo puertas donde solo existen muros. Quiero levantarme en las mañanas y recibir tu mirada tierna, quiero jugar con Agustín, que tu madre recupere la alegría, que Fabián los ame. No me digas que se acabó  como y en el sueño, dime que se inició en él.  Háblame de vos, de tu historia,  de mí, pero no  me mientas más. Háblame del mar, de las nubes, de las montañas.

Háblame de lo que quieras  pero háblame en realidad  de lo que sientes por mí, sé sincero, háblame sin temor  no me mientas por favor. Háblame con sinceridad, con cariño, amor y respeto, cuéntame lo que sientes... Sincérate conmigo, no cuentes más mentiras, esto es el hoy, el presente.

Llevemos esta vida  adelante con nuestra unión, nuestro amor para mí  es lo más importante,
sos mi vida, mi corazón, con vos sé que puedo tenerlo todo, en la vida, en casa, en el estudio.
Cuéntame lo que sientes, dime tus pensamientos, ayúdame a comprenderte, entenderte, que nuestro amor  es mucho más fuerte, más grande.

No solo el amor es lo único que importa, no solo el cariño que forjamos  en el hogar cada día
después de años juntos. No me digas que se acabó, no dejes que está llama se apague,
luchemos por nuestro amor.  

Te esperaré hasta que aceptes que el sueño puede ser real.

De pronto, los minutos y el tiempo se acortan, las oportunidades estarán a punto de extinguirse, las fuerzas siento que ya no son suficientes, la respiración se vuelve lenta, estoy aletargado y yo sigo aquí, esperándote...

Solo un instante es suficiente para vivir o morir y la agonía de no saberte mío parece interminable, ese pequeño instante se convierte en una eternidad insostenible, lleno de incertidumbre y oscuridad, el clima cambia hacia mis adentros, todo es gris y yo sigo aquí, esperándote.

Vivir es un privilegio y morir... bueno, morir es natural, pero ¿sin vivir? no, no es opción; vivir para compartir, para realizar, para crear, para dejar huella y disfrutar pero sobre todo para amar, vivir en toda la extensión de la palabra es valorar cada momento y explotarlo a su máxima potencia y estar satisfecho con ello.

Cada segundo cuenta en este recorrido, cada parpadear es un deleite, cada palpitar es una emoción, cada respiro es la respuesta a lo que somos, todo es honrar el privilegio de nuestra existencia; por eso hoy te digo que quiero vivir a tu lado, que quiero acelerar mi pulso en cada beso, en cada abrazo, quiero perderme en tu mirada y en ese laberinto encontrar tu alma y hacerla mía hasta mi partida, quiero saborear cada gesto, cada palabra, cada paso. Y mientras eso sucede, yo sigo aquí esperándote.

__

__Papá, te estás arreglando demasiado, ¿acaso le pedirás matrimonio a José?

__ ¿A José?, ni loco hijito, no tengo nada que ver con él, es más…  le presentaré a un amigo.

Fabián lo miró y se encontraron las miradas en el espejo.

__Para, para, ¿entonces lo del accidente y  Pedro son verdades?

__Y sí hijo, te dije que iré a buscarlos, que recibas  a la gente, ¿de qué estuvimos hablando?

__Pero… no te enamoraste a primera vista, ¿verdad?

__ ¿Por qué no?

__Porque no, no seas pendejo, papá, después me lo dices a mí.

__Hijito, si no es amor, el tiempo lo dirá y pégame, pero te afirmo que esto que siento resistirá a todo, que estoy enamorado, que al fin sucedió, Pedro lo soñó con todos los detalles, te vio, supo tu nombre en el sueño. Además vive a cuadras, su familia pareció ser la mía desde siempre, verás a ese nene.

__No lo conoces.

__Lo haré, me contará, le diré de mí todo, ¿qué cambiará eso?

Anda, grandulón, termina de ordenar los regalos del nene, ahora no hay tiempo, pero si esto se da, el año que viene tendrá su perrito.

__Estás loco, viejo, pero te veo feliz, y entonces está todo bien, iré por Valeria, y a esperar al resto, anda, ve por…  nuestra futura familia.

Horas más tardes, Guillermo estaba en casa de Pedro con el nene enroscado en el sillón, hasta que fue a buscar a su abuela que se estaba arreglando feliz.

__ Es nuestro mes, son sus bellos días en que nació  con el aroma de bondad y ternura que se hizo nombre los que recordaremos para siempre cielito, llamarte es sentir tu fragancia que derrama la miel de tu piel con sensibles y diminutas pecas atracción única de la cobertura de tu cuerpo.  Tu cuerpo que habla con flores y rosas, con maestría y pasión de pensamiento fluido, bello…  allí su estatura y masculinidad, allí el todo y las partes que amo y amarte  es besar tu alma.

La importancia de la vida está en ser perseverante, las cosas no llegan por simples coincidencias, es necesario hacer brillar todos los días el espejo de nuestras verdades, aunque estén sentidas, no siempre lo que veamos será garantía de tenerle, pensar así es muy fácil y no responde a la química buscada, cada quien lleva su bandera y sus símbolos, esos símbolos son la estafeta con la que andaremos por la vida y su color debe tener el color de la sangre, para que exista un transición de amor por lo hecho, la vida el milagro más especial y el que negamos con los celos, indiferencias y egoísmos, celamos lo que tiene el vecino, cuando en realidad debemos de construir los secretos de la vida como las sonrisas, en contubernio con los pasos y las alas para volar con libertad, somos indiferentes ante el dolor humano y somos egoístas con el tiempo porque lo dejamos perder, porque no sabemos que un día es también un milagro.

 
Lo bello del infinito es que se convierte en cielo y mirada. Allí se juntan el misterio como breve eternidad,  eterno el suspiro y aún podemos verle en el imaginar de cuantos puntitos nos observan y lo breve que somos, aunque el pensar de la vida no muere, se resiste a morir. La materia está flotando y la energía en la piel en el fondo del alma del pensamiento que se hace destino y el tiempo que pasa y no ha pasado,  solo se queda y nos dice adiós al cambio de piel cuando nuestras miradas se han quedado en el allá que vimos desde aquí.
__Deja correr tu espíritu y no dejes que lo alcance el cuerpo,  deja que la llama alumbre los rostros  y deja a las sombras atrás,  camina con las alas de las nubes  para que nadie escuche lo que sientes  y a quien busques entre los árboles de la vida cuéntale la verdad  y conversa con el viento y allí escucharás la voz que has buscado siempre, la del hombre que te ama y que te besa despacio y cerquita en tu tiempo en tu vida.

Guille, mi familia, está reaccionando contigo como lo soñé. Mi mamá ha buscado su mejor vestido, se hizo peinar en casa, quiere ir a la fiesta, y el nene está feliz, llevará la play para enseñarte _dije asombrado.

__ Lo sé, sé que sucederá, relájate Pedrito, no temas.

Vos  te avalanchas sobre los misterios de mi silencio, yo invado tus dudas liberándote de tus miedos. Amainamos en las brisas del viento como gaviotas indomables, retando los inevitables embates del tiempo. Entregándonos a los brazos placenteros del amor, como prisioneros enjuiciados por la causa más divina que es ser culpables de amar.

Fuimos fuego de amantes en la hoguera encendida por ambos en la quimera de nuestra inocencia. Somos tormentas de placeres en la verdad que gime sus secretos en la fragilidad de interminables noches.

Seremos la historia contada por muchos, que derramarán lágrimas involuntarias por la nostalgia de recuerdos. Juntos estaremos siempre como embajadores de sentimientos, que anidan en las profundidades del alma, alimentando los impulsos deseados del corazón.

 Y en el ocaso de nuestras vidas nos seguiremos amando sin límites, burlándonos de frente a la muerte, como expresión genuina de un amor que continuará respirando, aun cuando nuestros ojos se cierren en un sueño eterno.

¡Tanto tiempo te esperé!, cielito, hasta pensar que ya era tarde para mí.
Mi cuerpo se hizo vergel por vos, de abandonadas madreselvas moribundas y florecen mis otoños, al mirar tus ojos café  y perderme en tus laderas.

Puedo verlo todo pero sin fijarme en nada, solo verte a vos. Caminas apurado sobre el cristal de la lluvia que besa y acaricia tus pasos, el trigal de tu cabello reposa húmedo en tu frente, rebelde a tus manos.

Sigo tus pasos embrujado, al murmullo de tus pies descalzos. Sos como la primavera, pintando a la brisa de azul y con aromas de flor miras la vida sin atreverte a estremecerte cuando me miras, y ves el amor. Caminamos juntos en la lluvia, y la brisa se hace viento. Entreabres tus labios,  tu boca murmura un reproche, música para mi alma te tomo de tu frágil cintura te protejo del viento y pierdo la razón y calma.

Siento el impaciente presagio de amarte, en una dulce quimera. La lluvia acaricia tus labios, besa tu boca, cuelga cristales en tus pestañas. ¡Qué cerca estás! siento tu tibio aliento a fresas, sin saberlo casi me matas. La tibieza, la dulzura  me pierde.
No existió el tiempo, lluvia ni día, solo amor, llegó la luna y ella nos unió ya siento la dulce pasión virginal de tu boca en la mía, en una dulce pasión. Voy a besarte, con la arrogancia de una profecía cumplida. Sos mi único amor, el hoy y el mañana de mi vida, y bebí sediento tu piel de porcelana cuando besé tus mejillas arrobadas con una caricia de mi alma enamorada.

Y se ungió mi alma de amarte con una pasión impuesta. Y mi sueño es que vengas y desnudes tus sombras perfumadas, tus santuarios entre las horas encendidas de mis desvelos y nuestros murmullos paganos. El primer amor, embelesa el alma, desgarra los sentidos. El choque y tu sueño dieron comienzo  a esta historia, dos amores que se hacen uno tan esperado.  Y vivamos amándonos entre la lluvia y la luna que nos unió, enamorados. El primer amor, a pesar de todo y de todos, es inolvidable, es único. Y en mi caso será el único.

Desgarra mi garganta el grito de un sentimiento, confunde la sombra su agonía de luz, mira el pensamiento su historia, suelta el puño su mano y lloran mis labios el recuerdo de un beso que por más que arrancarlo quiero, todavía dibuja miel en sus grietas.

Pinta lágrimas de olvido la soledad, se atreve  quedito el nervio, fluye frío el sudor, la mirada se cierra y no encuentra el alma un refugio en mi suspiro. Se desbarata el hombre, gime el payaso, se ríe el silencio, el aliento quema,  aquella fragancia duele y las tintas ya secan  su sangre sobre el papel de la vida.

Cae tensa la oscuridad, el ocaso germina, el viento arde, crece el mar su marea, el sol aguarda y el abrazo no llega. Piensa el cielo en sus estrellas, la montaña esconde su paisaje, aúlla el lobo, gira el cuello un búho y rechina el asfalto un prepotente caucho. Una lamparita prende su constancia, la mesita su noche, el libro se abre, las sábanas tapan, cruje una almohada y el escritor lee: ajenos sentimientos se arremolinan en su pesar, las letras saben a música y los versos a coñac, liman asperezas las páginas en sus manos, camina tembloroso el vaho, sueña el pensamiento y el hombre prende un cigarrillo. Deshace despacito su piel la ceniza, los ojos se cierran y la mirada vuela.

El loco amante se convierte en luz, su corazón en cometa, los dedos acarician todo y  sus manos tocan  el centro ígneo. El alma se abre y desnuda habla, no respira y siente, en el vacío desea y en el reflejo se mira. Lo consiente  el mago y de su azucarado deseo bebe, lo reta el rayo, lo desbarata con la mirada y cae como trueno de mil luciérnagas. De muy lejos ve su tierra, su planeta, su base de oro, sus volcanes, su grieta entre montes  y le pide que lo alcance…  y ella se muestra, baila, lo rodea, lo abraza, lo seduce y en su condición, lo posee. Lo ama y le dice que la penetre por su puerta. Grita uno, gime el otro, se abren los montes, se desgarran las entrañas en glorioso vaivén nada el buzo, las tintas corren, los ríos se parten, giran los duendes, el volcán explota y los hombres vibran en el escalofrío universal.

Despierta en los brazos de su par, con espuma de cielo pegada a su cuerpo y dorada arena de piel fundida caminando por su espalda. Sus pies están llenos de caricias, sus manos de ternura, su mirada de luz y su deseo de pellizcos,  abrigados por una extraña pasión.  Se miran, se besas, se ríen, el horizonte pega el cielo a su mar y no hay soledad, solo infinito, no hay límite, solo poder, quizás no hay vida ni  muerte, solo un sueño eterno que cambia de colores.

Si el amor vive en la cima, la montaña escalaré, si nada en la fosa más abisal en ella me sumergiré y si gotea en el pétalo de una rosa, en cielo me convertiré, de ternuras la primera nube llenaré y envuelto en rocío lo amaré. Quizás sonría si mi boca lo besa, quizás cierre sus ojos si es mi alma la que lo abraza, quizás tiemble si mi corazón lo late y quizá me entienda, si mis humedades en su piel se pegan. Cada vez está más cerca y lo respiro despacio para que mi vaho no empañe sus ojos, porque ya siento el roce de su miel, la caricia de su mejilla resbalando por mi pecho y el suspiro  de su alma cuando su mirada recito. Lo pienso y me observa, lloro y su mano me seca, sonrío y mis comisuras se llenan de su cálida saliva. En la tristeza pinta de luz mis sombras, abre mi boca y entra… y cuando su alma me pide, mi corazón profundo lo penetra.

 Amor eterno. Enséñame y aprenderé, muéstrate y me mostraré, desnúdate y me desnudaré. Atravesaré tu noche para entenderte, cogeré en mi puño tu ilusión y abriré mi vientre para que tu deseo permee. Le diré al infierno que soy tu arcángel, a tus pozos que soy  aire, a tu mirada que soy iris de cielo y a tus alas que soy libertad. Ya  cubrí tu hermosura con mi piel y, la nube enceló cielo, el rayo su trueno,  mi sol encogió el destello de tu Sol y mi piel… mi piel solo esperó la ternura de tu caricia, copió un hilo de miel y expandió su dorado terciopelo. Mira, ve esa Luz, es mi alma que se abre, mi corazón que rasga su sangre, la mente que juzga su pensamiento y la idea que juega con su imaginación. No detengas el sueño, abrázame en tu  ilusión, detén tu corazón y deja que tu latido traspase profundo en mi sueño.

Mil veces has visto mi mano sobrecoger mis piernas, has sentido mi tocar y mis dientes apretar, la cuerda de una guitarra vibrar, el grito de una trompeta y el suspiro de mi mar… y sabes  que la que grita es mi soledad, que el gemido es profundo, que el deseo es profano y que mi orgasmo está lleno de confusión. Me dejas ir y raudo te extraño, caigo vacío, desmorono cada pared de holística montaña, cada muro de confundido pesar y cada valle de maldito paraíso. Y en tu oscuridad, siempre suena un saxo en el viento, un piano entre ramas salpica y grita erecta una trompeta: no me dejes ahora porque empieza el juego, un juego sin reglas, un juego de atrevimientos… un juego que escribirá de colores mi destino.

Te busca el enamorado y encuentras fuerza en el desahuciado, penetras en sentimientos de corazones equivocados, respiras escondites entre las esquinas del pecado y te diluyes cálido entre los montes del  amante. Envuelves cuerpos con celofán y caramelo, transparentas mirada en tu éxtasis y caricias en tus escalofríos, explicas deseos en tu huida y pasión en tu posesión. Amor que estás hecho de viento y cielo, de algodón de nube y rayos de sol, de voz y música… de cautivas lágrimas y seductoras sonrisas.

Enséñate en la pureza de tu virtud y muéstrame la erección de tu alma,  haz que suene profundo el bajo, que lata pisadas un piano, que respire ronco el saxo y que la  guitarra prenda su acorde en el sublime ocaso del horizonte. ¡Qué dance  su voz el coro!, que la soprano enchine cada membrana de sus notas  y que el silencio retarde su agonía en la dulce melancolía de tu verbo. Amor que confundes sentimientos y arrancas esperanza en cada una de mis vísceras, amor que despacito esperas recostado en tu ventana y ves cómo sufre un payaso su espesa lágrima, cómo un viejo cabestro relincha quieto su comida, cómo el vagabundo arranca su horizonte y cómo el bandido susurra un hurto en los oídos de su amante. Danzas con brujas sus aquelarres y provocas que la nieve abrace fuego, que un frío recuerdo enrede nostalgias y  que el viento del norte arrodille sus brazos a una intemperie que jamás buscó. Grita el sueño y una ilusión lo quiere, el hombre gime y el Amor no se deja. Se deshace el laberinto y muestra sus salidas, el amor se enamora sin querer, sin saber, con ilusión y agarrado a los vestigios de un utópico sueño… se enamora de él y derrama lágrimas, llora sangre y suda caricias. El milagro viste disfraz, se atreve, huele y surca los cuerpos que humedecen su ansiedad. ¡Quién quiera que lo compre! Grita la prostituta ¡Quién se atreva que me abrace! Grita el amor. 

En el cielo, las estrellas, en el cielo  el sol, el amor  en las entregas, la pasión  sin duda.
Corazón a corazón, mieles  acariciando almas, deseos amando una razón, placer  dar a quien verdad amas.
Deudores, buscadores de pasiones, fulgores, ojos miran sudores, pudores ,
acertijos de olores, rubores,  con delicias y sin rencores, sabores,  adicción a mil razones, amores, provocando corazones
Destino, un mismo camino, sentir,  expresión de vivir tus deseos, tus labios en mí, mi camino,
es tu destino, mis deseos  están junto a ti.
Divina liviandad al goce en derroche, anidando secretos en el día y en la noche, bullicio de olores,  susurros de amores.

__No importa dónde  nos encontremos, tú y yo. No importan las distancias  y obstáculos que nos separen;  tarde o temprano,  estaremos juntos. Tarde o temprano,  podremos amarnos  completamente: con el alma, con la piel. Para pasar toda la noche juntos.

Actuar con mucha cordura disgusta a muchas personas, y de ti me gusta la magia de tu locura que me empuja a arriesgarlo todo en apenas horas aun sabiendo que no eres un santo.
Sino conservas la calma y  das a tu vida un giro no escucharás los suspiros que salen del fondo de mi alma. No pierdas cordura y razón, no es el lugar ni el momento,  deja brotar los sentimientos que emanen del corazón.

Si dejaste para mí aquellos besos grabados,  los míos dejé tatuados dentro muy dentro de ti.

Amarte en locos excesos sin hablar ni que digas nada solo escuchando a tu almohada que te hablará de mis besos. Cuando la puerta  me abras y yo te encuentre temblando te voy a seguir amando sin que medien las palabras pero vayamos despacio, ayer no nos conocíamos, y tenemos una familia detrás.

__Iremos como desees, ya con lo de esta noche, me conformo.

Confía en un nosotros y te prometo que en un año, mirarás atrás y me dirás que cumplí  tu sueño.

 __ ¡Tiito! ¿Vamos a tu casa?__ gritó mi sobrino que tomó por asalto a Guille, lo abrazó susurrándole algo al oído.

Yo no tengo papás, ellos están en una nube, más arriba Guille, y no puedo correr como todos, pero puedo hacer mejor otras cosas, ¿verdad?

__Claro, yo nunca puede correr ni hacer deportes, era un desastre, sin embargo nadie me ganó jamás jugando al ajedrez, ¿quieres que te enseñe?

__Sí.

__Tío, ¿te casarías con Guille?

__ ¿Qué?

__Por fa. Tío di que sí, yo quiero ser el hijo de ustedes dos, si mi papá no va a volver, quiero ser hermano de Fabián.

Me  deshice en el sillón, ya no sabía si estaba en el sueño o en la realidad, pero el palpar mi living, me dijo que las palabras de mi sobrino esta vez, eran…  la verdad, reales.

CONTINUARÁ.

HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS.

CUALQUIER PARECIDO CON LA  REALIDAD ES MERA COINCIDENCIA.

LENGUAJE ADULTO. ESCENAS EXPLÍCITAS.