ATRAPADOS. CAPÍTULO DOS.

ATRAPADOS.







CAPÍTULO SEGUNDO.





Misiones, lunes 26 de octubre de 2015.









___ Pedro estaba en una zona desconocida de su mente y del alma, donde no existía el cuerpo, solamente las imágenes y el recuerdo de un pasado feliz,…, deslizándose en cámara lenta.



Al llegar a Misiones, en principio estuvo por quedarse en el hospital regional del departamento, pero necesitaba más aislamiento y un desafío mayor.



Por tanto se quedó allí solamente a prueba tres meses, aprendiendo las costumbres regionales de los pueblos originarios, la problemática de poblaciones tan necesitadas, algo de guaraní y portugués. La llegada de gente golondrina desde Paraguay y Brasil era importante, ya fuera para trabajar en reservas y plantaciones, o lamentablemente en prostíbulos y casas de juego.



A Camila la conoció allí, en El Dorado.

Hija de un Juez de la Nación, con una vida demasiado cómoda hasta entonces, se había planteado el desafío de ayudar en zonas necesitadas, carenciadas de todo. Cuando supo que Pedro se trasladaría al centro de atención primaria, no dudó en acompañarlo.



Desde el hospital lo calificaron como excelente para iniciar un proyecto en una zona virgen de toda asistencia, sin embargo le habían prometido convertir en breve el lugar en un mini-hospital zonal y la llegada de especialistas y personal para ello, además de aparatología e insumos, cosa que jamás ocurrió, pese a sus reclamos y visitas con petitorios.



Y así… el tiempo fue transcurriendo olvidado como el pueblo, y con Camila se pusieron el trabajo al hombro, haciendo un poco de todo y con escasos recursos, pero no les había importado.

Che rechaga’úpa ajeve reju: vienes porque me añoras, le llamaron al centro.

Cada vida salvada, cada niño desnutrido que alcanzaba su peso y talla, cada uno rescatado del trabajo y de la explotación, cada mujer que escapaba de un prostíbulo, eran para ellos el premio mayor, y creían que no podían ser más felices.



Hasta que Camila comenzó a anemizarse sin sangrado evidente al comienzo, y luego con sangrados uterinos fuera de fecha que los alertaron y llevaron a consultar en Posadas, tarde, al parecer demasiado tarde.









“… Camila, mi amor ¿qué me hicieron? No logro moverme, ni siquiera sentir que tengo un cuerpo, pero sí recuerdo que me necesitas, que me estás esperando.”











--- De pronto sintió una cachetazo de agua helada en la cara que le hizo recuperar sensaciones, y con ellas sonidos, voces, pero desconocidas y desagradables.

Tenía la cabeza agarrotada, con un dolor sordo en la nuca que comenzó a agudizarse, y sintió otro similar en las muñecas y tobillos.











… Vamos pibe, no sos el bello durmiente. No es para tanto, apenas te tocamos para dormirte unos minutos, abrí los ojitos que te necesito.









___ Una voz sarcástica, ronca, como acompañada de risa del mismo tenor, fue lo primero en llegar al cerebro. Y detrás de ella, las conexiones retomaron su curso, los recuerdos concurrieron juntos agolpando cada recoveco, y con ellos el golpe que recibiera, no sabía cómo, menos el por qué, el tiempo transcurrido.



Sintió la boca seca y pastosa por lo cual lamió el agua agradeciendo que quedara en el rostro, y cuando intentó mover las manos, supo que no podía, tampoco las piernas, y la conciencia del cuerpo que retornaba de a poco le dijo que lo habían acostado en la camilla y que estaba atado de manos y pies, pero…¿quién?



No supo el esfuerzo que necesitó efectuar hasta que los párpados respondieron la orden de elevarse, para poder abrirse y ver lo sucedido, para intentar lo que fuera para salir de allí e ir con Camila, y al fin,…, ayudado por el agua que chorreaba de a ratos, pudo. Lánguida y perezosamente los fue elevando apareciendo imágenes de colores, borroneadas, una nebulosa incomprensible que lo llevó a abrir y cerrar los párpados desesperado por lograr enfocar, visualizar algo coherente y conocido, hasta que lo logró.

Escudriñó lentamente el lugar, y habían tres hombres desconocidos, el cuarto como custodiando la puerta, pero uno era el que estaba al mando, y al enfocarse en él, supo que era el dueño de la voz.



El rostro era tan desagradable como ella, no era fealdad física sino aura negativa, con el ceño fruncido, una penetrante mirada partiendo de ojos muy claros y una sonrisa sarcástica que le revolvieron el estómago, era el que estaba con la jarra con agua.



Estaba en la camilla atado, le habían puesto una vía, un suero, y de pronto el pánico fue ascendiendo desde las vísceras, una piedra plomiza se posó en el estómago, que igualmente ascendió a chocar con el corazón que latió desbocado en la sienes aumentando el dolor, mientras un sudor frío perló la piel. Le llevó largos minutos lograr que las órdenes de la mente formaran palabras, poder emitirlas, y al fin susurró con un hilo de voz:









… ¿Quién eres? ¿Qué quieres de mí? No tengo nada.

… Desde este instante soy el dueño de tu vida, en realidad soy el dueño de todo este pueblo de mierda, y de mucho más.

…. ¿Qué?

… Nene, el que da las órdenes acá y el que habla soy yo, mientras menos sepas mejor, pero ya que insistes. Miguel Ángel Mendoza, me llamo, encantado Pedrito Beggio.

…. ¿Cómo sabes mi nombre? No te conozco.

…. Mal hecho pibe, todo sé, y de todos acá. Tu nombre, el de tu nene, Camila que te espera impaciente.









___ Pedro se retorció impotente y sacudiéndose intentó escapar de los nudos, cayendo exhausto y frustrado en la camilla de nuevo.







… ¿Qué mierda quieres de mí? No te atrevas a tocar a mi familia porque serás lo último que hagas. Me espera, ella, Camila. Está muy enferma y me necesita.

… Ya sé ¿cuándo entenderás que sé todo? Si dejaras de hablar estupideces y me escucharas, llegarías antes a tu mujercita, pero al paso que vamos, no sé. De última ella es médica, podrá esperar a que llegues.

… ¡Qué hijo de puta! ¿Qué quieres de mí? ¿Por qué tengo este suero?

.. Iremos por parte, todo junto no se puede. El suero lo pusimos para pasar algunas cositas por si te ponías loquito.

… ¿Qué me diste?

… Un toquecito de heroína, para que te sientas bien, qué más quieres.

…. ¡No! ¡Hijo de mil putas, heroína no! De eso no se regresa, no te creo, no siento nada extraño.

… Bien, no sos tan estúpido al fin. Todavía no te inyecté nada que no sea suero, pero si sigues jodiendo, la preparamos enseguida.

.. No. Heroína no. Está bien. ¿Qué quieres?

… Un favorcito, una pavada y estarás con tu mujercita y con tu hijo rápido.

Necesito que vayas al hostal y traigas a esos dos putos de Bs. As.

… ¿El matrimonio gay por el que me llamaron?

… ¡Viste qué fácil! eso mismo. Pasa que por la estúpida de tu mujer, los ibas a dejar allá.

..No, iba a ir luego de pasar por casa.

… En realidad vine a hacerte un favor, vas a cumplir con el juramento hipocrático, antes atenderás a esos dos, y después verás a Camilita.

… No pensaba traerlos, salvo que estuvieran graves.

… Nene, estás empeñado en perder el tiempo. Me voy a cansar. Con razón te mandaron acá. Si te digo que subas a esa ambulancia de mierda que tienes afuera y me los traigas, vas y lo haces. Punto.

… ¿Quiénes son? ¿Qué les harás?

… Otra vez con las preguntas. Mira pendejo, así como me ves, alguna vez fui Fiscal de la Nación, y abogado antes obvio, y el degenerado que quiero que me traigas,…, me hizo inhabilitar, es mi hermano, el puto Guillermo Graziani y el novio, bueno ahora parece que marido, los dos abogados.

… ¿El hombre que llegó rumbo a Cataratas es tu hermano? ¿Vos le averiaste el vehículo y los hiciste drogar?

… Piedra libre. Muy bien. Maravillosa tu inteligencia.



Fui yo sí, bueno no directamente, digamos que me ayudaron.

.. ¿Jorge? No puede ser, él es honesto, lo conozco desde que llegué.

… Claro que lo es, pero es un muerto de hambre como todos acá. Y yo pago muy bien a la gente que colabora, además cuando está triste le regalo porritos.











___ Pedro sopesó lo que estaba escuchando incrédulo, nada podía ser real, sin embargo sabía que la zona estaba dominada por empresarios sin escrúpulos y narcotraficantes.

¿Sería posible que estuviera frente al jefe de la banda?



Guillermo Graziani, abogado, de Bs. As.

Un particular cosquilleo en las palmas al pensar el nombre lo sobresaltó, y un golpe en la mejilla lo sacó de la ensoñación.









… ¿Y? ¿Te vas a quedar mudo y acostado allí o me vas a hacer el favor de cumplir con tu trabajo?

O quizá necesites de una dosis.

… No, sácame todo esto, déjame al menos llamar a Camila para saber cómo está y traeré a tu hermano.

… Está bien, mis muchachos la van a cuidar. Si haces lo que te pido, cuando regreses del hostal ella te estará esperando acá.

… ¡No la toques hijo de puta!









___ Pedro calló al ver la jeringa cargada con que lo apuntaron.







… No le digan nada que la asuste, dile que eres un amigo, por favor.

… Pero sí, si hasta soy amigo del padre, el Juez Orestes Moravia. ¡Cómo no voy a cuidar a su nena!



Y vos deja de hacerte el maridito modelo, que te dije que lo sé todo, ahora te preocupa ella pero cuando te viene a ver tu amiguito lindo, no te preocupa más.

… ¿Matías?

… Ese puto, sí, Matías Olazábal. Puto de Bs. As. abogado, tu amigo actual.

… ¿Qué dices hijo de mil putas? Es apenas un conocido, ni sabía que era gay, menos abogado.



Yo amo a mi esposa, solamente salí con ese muchacho a tomar un café.

… ¿Y con el otro?

.. ¿Qué otro?

… Vamos Pedro, no hagas el tonto que no lo eres, o a lo mejor te gustan los dos bandos, vas para ambos lados, no como el degenerado de mi hermano y el novio.

.. No sé de qué hablas.

… De tu desliz de jovencito en Chile, del que mataste.

.. ¿Sabes que soy chileno? Yo no maté a nadie.

… Bueno, directamente no. Peor en realidad, sabiendo por qué murió el pibe, yo que vos lo pensaría. Y tan jovencito.



..¿Qué sabes de Diego?

… Todo, me vas a hacer repetir cosa por cosa. A ver, quizá con esto te convenzas de que sé todo de todos, que manejo todo. Y que no te conviene que Camila se entere, pobrecita justo ahora que está medio muerta.



Diego, tu primer noviecito, en Chile, a los diecisiete años se escaparon juntos, el papá los encontró, lo llevó a un colegio de curas, y el pobre pibe se suicidó. Te extrañó tanto que se mató. ¿Y no te gusta el porteñito fachero ahora?

… Lo de Diego fue distinto, éramos chicos, me confundí, amo a Camila, aquello fue un error, no soy gay, no me gustan los hombres, lamento lo que sucedió. No se suicidó por mí, sino por vergüenza, por el juicio familiar, por el encierro del seminario, no lo sabe nadie en Argentina esto.

… Y seguirán sin saberlo. Bueno, me cansé, muchachos, desátenlo.



Jorge trabaja para mí como todos acá. Te ayudará a llegar a ellos si no despertaron aún, pero deben estar despiertos, les dices que tienes que dejarlos en observación y hacer estudios.

… ¿Qué les diste? Porque seguramente ellos no se drogan.

.. No, son degenerados pero no drogadictos, tampoco yo, no la pruebo. Estoy limpio como vos, solamente la traigo y la vendo.



Pero en Bs. As. van a creer que sí, que el puto de mi hermano, además de degenerado, es traficante y consumidor.





___ Pedro lo miró atónito y confundido.







… No me mires así, vos los vas a convencer.

… ¿Qué? Si tu hermano no se drogó, los mandaste vos a tomar vaya a saber qué.

… Pero no es lo que dirás. Pero eso es el segundo mandado, ahora hazme el primero. Me cansaste. Tráelos o me encargaré de que Camila la pase bien. ¿Acaso cuando tienen cáncer terminal a la gente no le das morfina?

.. Hijo de puta, no te atrevas a drogarla. Te mato. Te juro que no…









___ Pedro salió disparado golpeando contra la pared por un puñetazo en el vientre que lo dejó doblado aullando, mientras lágrimas de impotencia rodaron sin permiso.









… Con Camila y mi hijo no te metas, haré lo que me pidas, te lo juro, pero a ellos no.

… Bueno, al fin. ¿Viste qué sencillo es así?

… Déjame llamar a la enfermera que trabaja conmigo para que vaya a cuidarla, y haré lo que pidas.

… No. Nélida no puede dejar a sus hijos a esta hora. Basta Beggio, Camila está bien, es mañosa la piba también, un poco y un poco. Ve a traer a mi hermano que la verás.

… ¿Y luego?

.. Luego te sigo contando.

… ¿Mi celular?

.. Guardado.

… Lo necesito, soy médico.







___ Uno de los matones lo apuntó y Pedro supo que no podría hacer nada más que cumplir órdenes.



Le sacaron las sogas y tenía las muñecas ardiendo, le dolía todo, los golpes, las ataduras, la cabeza, los ojos, pero había caído en una trampa mortal, y no había nada que pudiera hacer más que entregar a ese hombre al loco que tenía allí, o no volvería a ver a Camila y a José Thomas. Estaba atrapado sin remedio.



Al parecer esta mafia era dueña del pueblo y más, además de saber todo de él, aunque nunca se había dado cuenta de que alguien lo siguiera o investigara.









… ¿Fumaron o tomaron?

… Tomaron, una mezcla linda en el vino como para ponerlos contentos. Mi hermano es además el ser más amargado del planeta, y en su luna de miel, al menos estuvo un rato contento.

… ¿Puedo llevar el maletín?

… Ya revisamos todo, llévalo, y en la ambulancia, todo en regla.



Y no demores más de la cuenta ni nada de reproches al pobre Jorge, que trabaja honestamente pero con ese hotelucho,…, sin nuestra ayuda se moriría de hambre, al menos así, a cambio de alojar a algunos amigos recibe unos pesitos extra.

… Está bien.



Los traeré.

… Yo no voy a estar visible cuando llegues, dos de mis muchachos se harán pasar por enfermeros, son buenos, no te preocupes, luego de hacer como que los internas en el cuartucho que vi a la entrada, te estaré esperando acá para que veas a tu mujer y hagas el otro mandado. Cuando cumplas con los dos, quedarás liberado, y todos contentos.





___Miguel recibió de uno de sus hombres un pan de cocaína, lo rompió y comenzó a esparcirlo por el despacho, que hacía a la vez de consultorio.







… ¿Qué se supone que estás haciendo?

… Cubrirme, por si algo saliera mal.

.. Si manejas a todos acá, supongo que también a la policía.

… ¿Ésos? son los mejores clientes, pero hay justo uno honesto, y no pienso arriesgarme a nada por uno. Ya me encargaré de sacarlo del medio, pero a veces tengo que disimular, y si pasara algo imprevisto acá el que porta la droga serás vos.



Pero todo saldrá bien, estoy seguro que sos inteligente como para hacer todo lo que te diga y en una semanita estar contento jugando con tu nenito. Lindo el pibito.















El Dorado. Misiones, martes 27 de octubre de 2015.







___ Guillermo sintió la ingravidez plena en el cuerpo, y la cabeza estaba vacía, el esfuerzo para elevar la mano a la cara le pareció sobrehumano, pero necesitaba frotarse las sienes, el dolor era intolerable, por lo cual supo que estaba vivo. Si eso era una resaca, seguramente nunca había conocido una y sería el peor recuerdo de su vida.



Con ahínco intentó abrir los ojos, pero los cerró atenazado por el pánico de lo que viera.



Se sintió como habitando una nube o flotando en algún sitio desconocido, y el temor a abrir los ojos se lo impidió no supo por cuánto tiempo, pero….debía enfrentar la realidad.



Los sentidos estaban saturados,…. de imágenes, de sensaciones, corrían por la mente inconexas voces, movimientos, rostros, lugares, pero cada vez que entreabría los párpados se transfiguraban en manchas o colores, que se difuminaban en extraños garabatos desconocidos, al tiempo que el cuerpo comenzó a pesar, y las extremidades adormecidas parecieron de plomo, los brazos de gelatina, y los recuerdos pugnaron por ingresar a la conciencia, hasta que al fin recordó a Juan.







“… ¿Qué es esto? ¿Qué me sucedió?

No recuerdo casi nada.”









___ Alargó el brazo pesadamente y pudo sentir el cuerpo junto a él y Juan le tomó la mano, en el mismo estado.





Cuando al fin la visión se aclaró, la mirada se quedó pasmada, al pasear por el lugar no reconociéndolo, hasta llegar al cuerpo desnudo de Juan a su lado, que comenzaba a intentar moverse, y los labios de los dos intentaron susurros, pero el cerebro aún no daba órdenes o el aparato del habla no respondía a ellas.







“… ¿Cómo llegamos acá? Es Juan. Nos casamos hace poco. Viajamos de luna de miel. Estamos en... Misiones.”









… Guille…a...mor.

… Juan ¿qué sucedió?

… Nos emborrachamos creo.

… Jamás me he emborrachado, tampoco recuerdo cómo llegamos acá, ¿cuándo nos quitamos la ropa?___Sin embargo el dolorimiento en ciertas zonas le dijo a Guillermo que habían hecho el amor. Pero no recordaba más que imágenes difusas de cuerpos rodando en el piso, y estaban en la cama del hostal, ahora recordaba cómo estaban allí…. pero no cómo llegaron a la habitación.



… Juan, alguien nos hizo algo.

… Yo te hice, amor, ¿qué dices?

… No hablo de eso, el vino estaba amargo, te lo dije, algo sucedió. Nosotros estábamos cenando, piensa, nunca llegamos acá por nuestros medios.

… ¿Qué quieres decir?

… Que nos drogaron, en el mejor de los casos nos intoxicamos, pero que sepa eso no lleva a hacer locuras, ahora recuerdo, me excité, Juan piensa por Dios. Podemos estar en peligro. Nos revolcamos en el piso, y no acá.













___ Juan quedó en silencio, y las imágenes comenzaron a aparecer, Guillermo decía la verdad. Y no habían llegado por sus piernas a la habitación.











.. ¿Te acordaste?

.. Estoy en ello. ¿Crees que alguien le hizo algo a propósito a la camioneta?

… No lo sé, Juan tengo miedo. Lo peor es que no tengo fuerzas para incorporarme, tendríamos que darnos una ducha, salir de acá como sea.

… ¿Y si llamáramos a la policía?

… Para decirle qué. ¿Que hicimos el amor en el piso de la entrada para que nos lleven presos por exhibicionismo?

.. Tienes razón.

.. Intentemos incorporarnos, si logramos llegar a la ducha quizá podamos recuperarnos.



¡Dios! Todo me da vueltas y se me parte la cabeza, no fue borrachera, ni sé si terminamos la botella, Juan.

.. ¿El dueño del hostal?

… ¿Por qué haría algo así?

.. No sé. Para robar quizá. Esta gente no tiene nada, por la ropa son capaces de matar.

… No ese hombre Juan, se nota que es buena gente. Acá hay algo más, y no sé a quién contarle, a quién llamar. Si es que tenemos los celulares, porque los llevábamos con nosotros anoche, hoy, ni sé la hora, el día.

… Es de noche todavía, mucho tiempo no pasó, pero no veo los celulares, es verdad. Ni siquiera la ropa que llevábamos puesta.

… Tenemos que incorporarnos, tomándonos de las paredes llegar al agua, Juan, el agua ayudará. Hay que vestirse y salir de acá, así hagamos dedo hasta el pueblo más cercano donde encontremos un mecánico o directamente huyamos a Bs. As. en un vuelo desde Posadas.

…. ¿Y dejar la cuatro por cuatro? ¿Sabes lo que vale?

… La vida podemos estar poniendo en riesgo si esto ha sido armado. Estamos atrapados, Juan.











___ Pedro condujo por la ruta mirando más por el espejo retrovisor que hacia delante, intentando saber si podía ir a la casa a sacar a Camila, pero aunque no podía asegurar que lo estuviesen siguiendo,.., el eco de la voz macabra resonaba diciendo “lo sé todo”, y no quiso arriesgarse.



Además si el tipo cumplía, entregaría al hermano y Camila lo estaría esperando en el hospital, pero qué le quiso decir con que él sería el encargado de difundir que ese hombre era narco y consumidor.



Le había mostrado las fotos de dos hombres desnudos en la puerta del hostal, antes de salir, de espalda y un escalofrío lo recorrió de cabeza a pies sin explicación razonable.



Unas manos batiendo en el aire, una luz intermitente lo sacaron del trance, se arriesgó a aminorar la marcha, estaba a menos de un kilómetro del hostal, y a pesar de la oscuridad, al acercarse distinguió una silueta conocida, que ahora le despertaba desconfianza también. Era Matías.











… ¡Ey, Pedro! ¿Adónde vas? ¿Todavía trabajando?

… Sube, no puedo detenerme.











___ Matías subió y Pedro prosiguió la marcha más lentamente, intentando que las palabras no salieran a borbotones y que Matías entendiera.







… ¿Es verdad que eres gay y abogado de Bs. As?

.. Sí, pero no te lo había contado.

… ¿Adónde estás parando y para qué viniste? Contesta, por favor, es cuestión de vida o muerte. Mi mujer y mi hijo están en manos de un desquiciado narcotraficante y yo amenazado.

… ¿Qué?

… Lo que oyes, pueden estar detrás, pero necesito saber.

.. Paro en el hostal.

… ¡Mierda! ¿Conoces a un abogado llamado Guillermo Graziani que llegó al hostal ayer de luna de miel con el marido?

… Mucho, demasiado.

… ¿Cómo?

… Estoy acá por él. Es largo Pedro.

… Hazlo corto o matarán a mi mujer y a mi hijo.

… ¿Quién?

… El hermano.

… ¿Miguel?

… ¿Lo conoces?

.. Pero sí, Dios, ¿qué hace acá? ¿Cómo es que te tiene amenazado?













___ Pedro abreviado le contó lo sucedido, y Matías se horrorizó.









…Guillermo es un famoso penalista de Bs. As. Tuve una relación con él. Para mí fue importante, para él fui uno más. Viajé a un congreso a San Francisco, y al regresar supe que acababa de casarse con el novio de pendejo, uno que le soportó todo, hasta un casamiento con una mujer y un hijo.

… ¿Tiene un hijo?

… De 23 años, casi abogado, sí. Fabián.



Me desesperé y armé un quilombo en su estudio, así supe que habían salido hacia Iguazú por tierra, los seguí.

… ¿Pensando en qué?

.. En arruinarles la luna de miel, en hacer lío, no sé en qué, Pedro.



Pero cuando te vi, me pasó algo fuerte con vos, y me olvidé de ellos. Es más, no los he visto en el hostal. Vengo del bar de tomar solo la cerveza a la que te invité.

… Miguel te conoce, sabe que salimos a tomar el café. Matías no soy gay, no te confundas. Tengo una esposa y un hijo.

… Pensé que sí, sentí algo al verte que me dijo que sí, perdón.



Si Miguel te pide que le entregues a Guillermo lo matará, lo hizo inhabilitar y desapareció de capital hace dos años. Nadie tenía idea de él desde entonces.

… No sé qué hará, Matías, pero estoy atrapado, lo siento por tu amigo, pero más me importa mi familia, además me plantó droga en el centro por si no cumplo, para dejarme pegado.

… ¡Qué hijo de mil putas!



Por lo visto perfecciona día a día su maldad. ¿Estás bien? Digo,…, de lo que te hicieron.

… Sí, casi me inyectó heroína pero lo detuve.



Necesito que me ayudes, porque algo me dice que esto no termina cuando le entregue al hermano.

… Obvio, y tampoco quiero que mate a Guillermo.



¿Qué hago?

.. Me quitó el celular. Dame el tuyo y cómprate otro liberado, al llamarme lo tendré registrado, para quedar conectados.

… Perfecto.

… Si luego de internar a estos dos, me sacara del centro, él irá conmigo me parece, no sé bien, lo intuyo, pero quiere otra cosa. Dejará a dos monos que aparentarán ser enfermeros, pero puedes entrar por atrás. No creo que hayan visto la parte que da al caserío de la reserva.

…¿Y qué hago?

… Libera a tus amigos y si quedaran allí,…, a mi mujer y a mi hijo, Camila es la hija del Juez Moravia. ¿Lo conoces?

… Obvio, él fue contra Miguel.

.. Me dijo que era amigo, bueno, no importa. Te voy a contar algo que no conoce nadie, ni Orestes. Camila está muy enferma, tiene cáncer de endometrio. No quiere tratarse y el padre no lo sabe.

…. Lo siento.

… Toma la llave de casa, si a ella la lleva al hospital, liberará la casa, allí está mi auto, llévatelos, cuéntale todo a Graziani, me odiará por lo que hice, explícale el por qué, por favor. Ayúdalos a esconderse, pero antes lleva a Camila y a mi hijo a Posadas y asegúrate de que suban a un vuelo a Bs. As. Dile que pronto me reuniré con ellos allá, que vaya con su padre, pero no la asustes.



Si logro que ella llegue con Orestes podré liberarme de este loco, de lo contrario, me obligará a algo peor contra Graziani.

… ¿Peor al secuestro y entrega?

… Mucho peor, lo voy a destrozar si lo hago, no podrá regresar.



No tengo tiempo de contarte ahora, por favor, pon a mi familia en el vuelo a capital, y dile a Graziani que salga del país, a Colonia, a algún sitio donde sus amigos del estudio puedan luego hacerle llegar documentos falsos para regresar, tendrá un plazo de pocas horas para salir, luego tú podrás rescatar el vehículo, que huyan en colectivo.

… ¿Y vos?

… Tendré que hacer lo que este loco me pide, Matías. Aunque Cami y mi hijo queden con el abuelo, si no hago lo que me pide me matará.



Si intentara acercarme a Orestes para que me proteja lo llevaría a Camila de nuevo, tiene gente por todos lados.

.. Lo sé.

… No sé qué haré, ya veré de esconderme, pero no tengo otros contactos allá, y no podré salir del país con mi identidad.



… Yo te ayudaré. Haré lo que me pediste, luego de sacar de en medio a tu familia y a ellos, si no muero en el intento, toma, ve a esta dirección, es una casa que tengo en Bs. As., puedes esconderte allí, cuando libere al resto te buscaré, te conseguiré documentos para que salgas del país con tu familia.



.. No, Camila tiene que decirle la verdad a su padre y luchar por su vida.



Gracias Matías, lo pensaré, te acepto la casa y la llave por las dudas, estoy muy confundido, no sé qué pasará, qué quiere este loco.



Si ves que no salgo con él del hospital, no te acerques, si no me manda a ningún lado, ya veré qué hacer, no te arriesgues. O me arreglaré para llamarte. Ojo, Jorge trabaja para él, todos acá dice, menos un policía honesto del cual no dijo el nombre.



Baja ahora, llega por tu cuenta al hostal, nunca me viste ni me conoces.

… Suerte.













___ Pedro llegó al hostal con una extraña sensación en el cuerpo y en la mente que era distinta al pánico. No supo ponerle nombre, o quizá sí llevara un nombre la causa de ella, y cuando bajó de la ambulancia lo supo:













Guillermo Graziani. Tan atrapado por su hermano como él mismo.













CONTINUARÁ-