ENIGMA. CAPÍTULO 32.

 

ENIGMA.

CAPÍTULO 32.

Bs. As., sábado 19 de julio de 2015.

Hospital Borda.

__Pedro se vio ovillado, estaba junto a la tumba de Claudia, inmóvil, en silencio, contemplando la lápida con los números que decían  lo mismo que en él.

Eran números y al tiempo no, sino símbolos que marcaban un tiempo de vida que para su hermana no continuaría, en cambio en él se irían acumulando sin que su existencia tuviera valor alguno.

Por momentos pensaba que estaba esperando que Mendoza lo encontrara, que allí mismo o en el pabellón se colara por un recoveco y lo asesinara. Tal vez fuera su deseo más secreto, cuando sentía que no le quedaba nada, que atar a Guillermo a su vida sería condenarlo. Su existencia le parecía sin sentido, o peor aún, condenada a poner en riesgo a todos los que a él se acercaran.

Y allí… distraído no escuchó los pasos, sino que de pronto la sombra de un hombre lo cubrió. Supo que era él. Lo había encontrado, venía a matarlo como a Claudia y el pánico a la forma lo paralizó. Una mano tapó su boca y el aire faltó. La sangre se congeló vertiendo lágrimas desde el corazón.

Sabiendo que otra vez eran hacia su interior, que como siempre los gritos no saldrían de la garganta para pedir ayuda.

__Guillermo sintió su agitación que lo despertó, alarmándose al verlo sacudir la cabeza como queriendo liberarla de algo, al sentirlo empapado en el mismo sudor, al ver los lagrimones descendiendo a raudales por el rostro, y entonces lo llevó como cada vez hacia él, acunándolo y besándole la cabeza.

La noche todavía se cernía sobre la ciudad, Pedro no hablaba, en cambio vio cómo de la nada primero una lágrima y luego un torrente, se deslizaban silenciosas por las mejillas hacia el cuello, el labio inferior temblaba y el cuerpo se contorsionaba, aunque no fuese una convulsión. Las lágrimas caían sin cesar, en un llanto silencioso…. sin vida.

... Pedrito,…, amor despierta. Soy yo. Mi amor es una pesadilla, despierta.

___ Guillermo le secó la cara con la sábana cubriéndolo de suaves besos y pesadamente Pedro elevó los párpados como si ni siquiera lo viera, ausente, perdido en algún rincón de los pensamientos y de la mente, en algún resquicio al cual solamente entraba él, como si allí estuviese la presencia y no abrazándolo.

Sin embargo en ese estado de trance, habló con la voz trémula, quebrada, suave.

... Lo vi. En realidad no, lo sentí, su sombra, su fuerza, su aroma, la muerte. Vendrá por mí. Guille tu hermano me encontrará, no hay nada que puedas hacer.

… No precioso, claro que no te puede encontrar, ya te dije, si existiera esa posibilidad  nos escaparíamos, encontraría la manera de sacarte de acá.

…. No quiero hacerte daño, no quiero que te mate por mi culpa, como está matando a todos.

… Otra vez con eso, no. Nunca fuiste culpable de ninguna de las muertes. Miguel es en esencia un asesino, no es tu culpa. Nació así.

.. Pero va  detrás de todos los que rodearon a mi madre, y soy su hijo, nadie que se encuentre cerca se salvará del ataque, Gabriela apenas pudo.

Tienes que dejar que me lleven al penal, dejarme ir, no verme más, continuar con tu vida, que  tu camino no vuelva a cruzarse con el mío.

… ¿Te volviste loco? Basta, Pedro. Miguel jamás llegará a vos. Y si lo sospechara, siquiera, ya iría a pedir a Matías que me dejara sacarte de acá.

___ Por primera vez Pedro elevó la mirada hacia él, anegado en el mismo telón que se negaba a detenerse.

… Si  acá estuviera en riesgo me enviarían al penal, y allí me mataría al instante.

… Jamás irás al penal. Te llevaría bajo custodia a mi casa, pediría licencia para cuidarte, es más tenía los días de los que hablamos de vacaciones, los dejé en suspenso y de última huiríamos lejos, pero nunca más vuelvas a decir que me separe de vos.

… ¿Qué sucedió en el rescate?

… No sé. Te dije que Alberto no apareció, no conozco los detalles.

… Solamente que le sacaran a Gaby de las manos debe haber enfurecido a ese tipo, y buscará revancha.

A veces temo terminar odiando a Diana.

…. ¿Qué dices?

.. Eso. Yo supe que el día que ese hombre oscuro entró a su vida terminaría con la paz que nos quedaba, ella le permitió todo. ¿Tenía que esperar a ponerle un punto a que la matara, a que hiciera lo que hicieron con Claudia?

Nunca lo entenderé, por más que me expliques de la mente y de la psiquis, no al punto de poner en riesgo y dejar que abusaran de una menor. Y está muerta como para poder preguntarle o cuestionarle nada ya.

Bs. As., sábado 19 de julio de 2015.

Juzgado penal número ocho.

___ Matías, Marcos y José se reunieron para revisar el material que encontraran en el prostíbulo. Acababan de hallar lo que hubieran querido que fuese mentira.

Los cadáveres de tres chicas en distinto estado de descomposición, enterrados apenas en el fondo bajo el aparente jardín, y pocas dudas tenían ahora con ello y la confesión de uno de los hombres de Miguel, que era el lugar de encuentro, el sitio mayor donde trabajaba Diana.

Habían decidido mantener a Antonio preso hasta el lunes. A  Gómez con la firma de Moravia, lo colocaron en plan de testigo protegido y lo trasladaron a un lugar  secreto, por pocos conocido hasta el juicio.

… Che, tengo que decírselo a  la familia, a Marcial, a los padres, a Pedro. Era la madre. Una de esas pibas muertas desencadenó todo lo demás. Tiene derecho a saberlo.

… Habla con Graziani, Marcos, Pedro al saber esto ya sabes que puede caer en su pozo.

.. Lo sé, pero no se puede encontrar con todo junto en el juicio porque sería peor.

… Chsss. Escuchen, tengo señal desde los micrófonos que puse en la casa apartada donde Miguel se encontró con Manero la primera vez. ¿Con quién mierda estará hablando?

___

… Alguien  les pasó la información, había un buche acá, que no era Manero, tampoco Gómez porque están presos.

Era imposible que justo dieran con ese prostíbulo, por poco nos agarraron a todos.

Y encima me sacaron de las manos a la colorada.

¿Quién mierda es el tipo que la rescató?

… Algún milico, Miguel. Herimos  a uno pero se lo llevaron, a los cinco minutos allanaron.

… Pero sos tarado, estoy rodeado de pelotudos, por eso pasó lo que pasó. Yo conozco a ese tipo que entró a rescatar a la comisario, lo he visto, no recuerdo quién mierda es. Antonio debe saberlo porque seguía de cerca a la piba, pero está preso y no quiero acercarme por ahora.

Ese tipo no es cana.

… Yo lo conozco, Miguel.

… ¿Y ahora hablas? ¿Quién mierda es?

… Lo conocí en la facultad, es médico, fuimos compañeros  alguna vez, creo que se especializó en psiquiatría.

… ¿Psiquiatra? ¿El novio de la piba es psiquiatra? Porque para arriesgarse así,…, mínimo tiene que ser el novio.

¿Cómo se llama? Vamos estúpido, mira que si caigo estuviste en todas a mi lado vos, estás más adentro que yo. Si lo cruzaste en la facultad sabes todo de él. Quiero saber por qué entró él y no directamente un milico a rescatar a la piba. Manero dijo que tenía al comisario de la Dirección de Estupefacientes cuidándola, no a éste.

… Alberto Marini, se llama Alberto Marini, hasta donde supe hizo la residencia en el Borda.

… ¿En El Borda? ¿Vos sabes quién dirige esa mierda de locos?__ Miguel caminaba inquieto de un lugar a otro.

¿Adónde fue a parar Pedro Beggio?

Cuando fui a la comisaría estaba la hermana, de él nadie habló, teóricamente tiene que ser imputado por la muerte del padrastro.

Chato, para hoy,…, me averiguas adónde está el pendejo. Dicen que es autista, necesito saber si habla. Y el Dr. del Borda es mi hermano, Guillermo Graziani, la persona que más odio en el mundo, imbéciles.

Para hoy me averiguan por qué ese Marini se arriesgó a rescatar a la piba, su relación con mi hermano, y adónde mierda está Pedro Beggio.

___ Matías se deslizó en el sillón, José palideció, Marcos se derrumbó.

Cuando le dieron el sí a Alberto, desesperados por  la vida de Gabriela, nunca imaginaron lo que podría suceder si lo reconocían.

Manero lo sabría y confirmaría al salir, al menos que era  médico, y el que acababan de escuchar, era el médico de la banda, del cual había hablado Claudia en la confesión.

.. ¿Y ahora? Tengo que hablar urgente con Guillermo, este desgraciado en cinco minutos sabrá adónde está Pedro. Y ya saben para qué.

… Voy a enviar refuerzo de custodia al Borda, trasladarlo al penal sería matarlo, allí lo mata en minutos. Y trasladarlo a otra institución lo haría caer en el abismo.

… ¿Por qué?

… José, sé de la relación que lo une a Guillermo tanto como vos. Pedro solamente habla y sale del autismo a su lado, si los separara se dejaría ir, para siempre.

¡Mierda!

___Matías pegó un puñetazo en el escritorio que hizo saltar a todos.

….Hay que terminar con Mendoza, hay que sacarlo de acá, pero cómo acelerar los tiempos, tiempo, siempre o casi siempre excepto con Gaby nos gana de mano. Le llevó nada saber de Alberto y de Pedro.

.. Cálmate,  Matías. Al menos pudimos escucharlo, estamos avisados, no podrá llegar al pabellón si refuerzas la custodia y si Guillermo está al tanto.

Quizá tenga que acelerar lo que te pedí  para hacer acá, y vos tengas que hablar con los jueces lo antes posible, para que traten de voltear a los que lo apoyan.

El agente que está con la secretaria de Donato, pídele que saque más cosas de allí, algo que lo comprometa al Juez, algo para que Moravia con Pérez vayan por uno al menos.

… No es tan sencillo para nadie, José, menos tan rápido.

… Yo voy al Borda a hablar con Guillermo.

.. Y yo voy a reforzar la custodia allí y para Gaby que regresaba a la comisaría, hay que poner en aviso a Marini también, quizá lo veas en el Borda, Marcos.

Bien José por las escuchas, pero cómo saber la identidad de ese médico.

Tengo que ver si pudieron identificar a las chicas que encontramos, hay que entregar esos cuerpos.

Quería continuar con los allanamientos para desestabilizar a Miguel, pero es tanto lo que encontramos en horas, que es imposible.

La prioridad es cuidar  vidas, a Gaby y a Pedro, ahora.

Bs. As., sábado 19 de julio de 2015.

Hospital Borda.

___Pedro no quería quedarse solo esta vez, intentó retener a Guillermo como  lanzando ganchos hacia él. Se abrazó bajo las sábanas a su desnudez, y riendo le advirtió que no lo dejaría salir de allí.

… Pedrito, no me hagas esto, tengo que salir un rato, ___ Guillermo hablaba con la voz entrecortada, sin dejar de acariciarlo, ___, tengo que hablar con Alberto, con Marcos, aunque desee quedarme enterrado acá con vos. Un rato amorcito.

Seguramente vendrán Fabián con Guillermito, o Mirna, no estarás solo.

___ Agotadas las súplicas, Pedro desplegó las armas infalibles para retenerlo, nunca le costaba excitarlo hasta el delirio, con sólo mirarlo, sonreírle con hoyuelos, susurrando un te amo él se derretía.

… Chiquito, no. Una horita, o dos. ___. Con voz ronca y mirada turbia.

Espérame tranquilo y continuaremos con “esto”, justo donde lo estamos dejando.

___Guillermo le surcó los muslos en la base, sonriendo excitado, pero Pedro tenía miedo, de estar solo y por Guillermo.

En las últimas horas se había detenido en cada movimiento y llamada, sabía que estaba preparando algo peligroso con Miller, para Miguel. No lo había engañado.

Había escuchado algo sobre que comprara droga a un tal Arias, o mejor dicho a su gente y el pánico lo enceguecía, y mientras lo miraba vestirse, se aferró a la almohada, conteniendo las lágrimas hasta que lo vio abrocharse al pantalón, la angustia lo dominó, levantándose y echándose a sus brazos, suplicándole que no lo dejara solo.

Guillermo lo devoró en el beso, con apasionada codicia,…, dejando vagar las manos descendiéndolas a los glúteos, mientras Pedro exhaló refugiándose en su pecho, y Guillermo le acarició los labios y le revolvió el pelo suspirando.

… Sos la razón de mi vida, te amo precioso, si por alguna razón llegara a perderte querría morir, lo haría.

Te prometo regresar pronto y ya quedarme a tu lado todo el fin de semana.

__ Bs. As., sábado 19 de julio de 2015.

Comisaría número 34.

… Gaby, mi amor, no puedo quedarme tranquilo, no sé cuándo ese tipo estará de nuevo en la calle. No me convencen los planes de Matías y de José.

… Me cuidarán, yo fui responsable del secuestro. Le había hecho un escándalo a Agustín por seguirlo, por no dejarlo en paz, pensando que estaba limpio, que ya no sería capaz de hacer daño.

Y dejaron de seguirlo, los custodios de la policía me cuidaban a mí y los eché cuando merodeaba mi edificio desde que salió de la cárcel.

Quería protegerlo de regresar a prisión e hice todo mal. No quería que destrozaran la vida que de por sí le iba a costar retomar. Pensé que quizá esta vez pudiera ser feliz con esa chica Pao, Paola.

.. Gaby, es un tipo grade, responsable de sus actos como vos, como yo, y sabía que recién salido de la cárcel lo último que debía hacer era acecharte, conociendo los riesgos se expuso, entonces es el único culpable si termina con perpetua, además trabajando para Mendoza.

… No quiero discutir contigo Alberto.

.. Yo tampoco lo quiero, odio hablar de ese tipo tanto como de Mendoza.

.. Le debía una oportunidad de creerlo cambiado.

… ¿Qué le debías a un hijo de mil putas que te ocultó que era un delincuente, que no fue jamás capaz de mantener un trabajo decente? Te juraba amor y te puso en riesgo siempre, Gaby por favor.

__ Alberto apoyó la cabeza en el volante pensativo y herido, Gaby lo miró con una mezcla de pena y amor.

… Albert, no parecía un delincuente.

… Pero lo era y lo sigue siendo, no puede salir, no le dejarán salir. Y no creo que sea un perejil como dices, un simple camello, sino un traficante y más como todo ese grupo.

… Me creía adulta, comisario, capaz de cuidarme sola,…, pese a que me dio miedo el  Antonio que regresó ahora, me equivoqué, ahora me cuidaré, te llamaré si necesito ayuda.

… Lo sé. Pero si vuelve a acercarse  o a causarte problemas no sé lo que puedo llegar a hacer.

… No te extralimites, está la policía para cuidarme.

.. Pero yo te amo, esa es la diferencia.  Cuando no te veo estoy en alerta, esperando el instante de verte, de escuchar tu voz, de sentir tu aroma, de estar cerca.

… Bueno, entonces nos vemos a la noche, tenemos una cita pendiente creo, si sigue en pie.

… Te vengo a buscar a la salida, y te dejo dentro de tu departamento, luego será la cita.

… Está bien, no quiero discutir más, menos hoy.

… Iré mientras al hospital que ni siquiera he visto a Guillermo.

Regresaré a la hora que me llames para llevarte a casa hermosa.

Bs. As., sábado 19 de julio de 2015.

Hospital Borda.

… Dejo cafecito sobrino.

… Gracias tía.

…¿Albertito, vos quieres algo para comer?

… No Cuca, gracias.

…¿Estás enfermo?

… Enamorado, de una mujer policía, lo cual es más que suficiente para quitar el apetito a cualquiera, hasta a mí.

…Entonces, el lugar era el centro de operaciones. Pedro tiene razón. Miguel debe estar furioso. No solamente le sacaste de entre manos a Gaby, sino que le desmantelaron el lugar, apresaron a Manero y a Gómez, a los otros que pueden hablar. Es un peligro ahora, Beto. Tengo que detenerlo.

… ¿Vos? ¿En qué quedamos respecto de que no te ibas a exponer con Miguel?

…¿Crees que te reconoció alguien?

…No sé, Miguel no creo que llegara a verme siquiera, Manero quizá sí. ¡Uy qué boludo!

… No tienes la culpa, pensaste en Gaby, está muy bien.

.. ¡No, pero cómo no me di cuenta! Ahora sabrán que soy algo de ella, de allí a llegar acá hay medio paso, y acá está Pedro. Guille, perdón.

… Beto, termina, no me ocultaste lo que harías, pude detenerte y no lo hice.

Ya hablé con José, vamos a ir contra Miguel, ahora.

… ¿Lo de la droga?  ¿Vas a meterte en la casa a plantar cocaína? Estás loco.

.. No. En la casa como en esos lugares debe tener de todo, y al por mayor.

… ¿Entonces?

.. En el Juzgado, para que lo saquen de la Fiscalía.

… ¿Qué? Estás loco, no Guille, por favor no.

___ La angustia se reflejó en el rostro de Beto como la luna en un cielo de verano, cuando tocaron a la puerta al tiempo que no esperaron respuesta y Marcos entró.

… Marcos, pero… es sábado y al parecer estamos todos trabajando.

… Es todo un quilombo, Guillermo, Alberto. Menos mal que estás acá.

.. ¿Pasó algo con Gaby?

… Que yo sepa no.

… ¿Entonces, qué más sucedió?

… Van a tener custodia reforzada Guillermo. Hay posibilidades de que ya sepan que Pedro está acá, o de que lo anden buscando.

… ¿Cómo? Mierda, Pedro lo soñó, lo supo. ¿Qué sucedió?, habla.

___ Mientras escucharon lo que Marcos tenía para contarles, desde el allanamiento hasta las escuchas, Guillermo no pareció acusar el latigazo, y apenas en un hilo de voz  le preguntó a Marcos.

… ¿Qué posibilidades habrían,…, sabiendo Matías que no puede separarme de Pedro que lo deje ir a mi departamento?

… ¿Qué? Che, Guille, para. Pedro está preso, con atenuantes y muchas dudas. Con la confesión de la hermana y con toda la mierda de Miguel junta, siguen teniendo un arma homicida con sus huellas y… ¿vos  crees que te dejarán llevarlo de paseo?

… ¡Basta,  Marcos! Acabas de decir que todos saben que Miguel vendrá por él, que en el penal duraría un minuto, qué van a hacer, encima sabiendo que es inocente, esperar a que…

No puedo ni decirlo, menos imaginarlo porque se me rompe el corazón en mil pedazos, por Dios, a Claudia la mataron en sus narices, en la comisaría. Dejen de joder.

Mirna, mi madre, acaba de comprarme un departamento, ni siquiera lo conozco todavía, nadie lo sabe excepto ella y yo. Perfectamente podría llevarlo allí, no se escapará ni matará a nadie. Es inocente mierda.

… Guillermo, eso lo sabemos nosotros, pero hasta el juicio Pedro está preso. Y después nadie puede decirlo.

Salvo…

.. ¿Qué pensaste? Vamos Marcos, que mientras nosotros pensamos Miguel mata.

.. Buscarle la vuelta para lograr que lo pongan en plan de testigo protegido probable del crimen del padrastro a manos de la hermana basándose en la confesión que dejó, pero para eso tendrían que dejar de imputarlo como posible asesino, las dos cosas entre sí son incompatibles, salvo que algún juez bondadoso pusiera la cabeza. Suena muy descabellado, ¿no?

… Es perfecto, Marcos es perfecto. Moravia es ese Juez. Mierda, ¿le dieron la oportunidad a Gómez que es de todo y van a dejar en riesgo a Pedro?

… Para, que Matías y José sepan de lo tuyo con el pibe, pase, pero Moravia no sabe nada, y no lo va a dejar en tu casa aunque aceptara esto.

… Pedro solamente habla conmigo, bueno a veces con pocas personas más, pero eso no tiene por qué saberlo el juez, Marcos. Puedo hablarle si quieres.

.. Pégate al pibe hoy y mañana, déjame que lo piense y lo hable con Matías, a ver qué posibilidades tendríamos de que así como no terminan de desestimar su imputabilidad en el crimen del padrastro pese a la confesión de la hermana y su condición, también consideren que pueda ser el testigo, y no el causante del crimen, a pesar de haber marcado el arma, y le otorguen protección hasta que caiga Miguel. Aunque ligue el cargo de encubrimiento de la hermana, que siempre será menos grave y podré apelar llegado el caso.

.. Está bien Marcos, esperaré al lunes, y no me quedaré quieto.

.. ¿Y eso qué significa?

.. Lo que escuchas. No tengo por qué decir lo que puedo hacer de mi parte para atrapar a mi hermanastro.

… Guillermo, no agregues más quilombos a los que ya tenemos, lo único que falta es que vayas preso vos ahora.

… El lunes,…, cuando suelten a Manero será peor, le confirmará a Miguel mi relación con este hospital, y puede poner  en riesgo de nuevo a Gabriela.

… Nene, vos pégate a la piba, supongo que no dejarás que la toquen.

.. Lo intento, lo más que puedo. Te recuerdo que quien los llevó hasta allí fui yo, Marcos.

.. Bueno, me voy. Cada uno cuide al que tiene al lado, que voy a hablar con los otros dos a ver cómo los protegemos. El tema es que no tenemos nada concreto para agarrar a Miguel. Todos sabemos que es la cabeza de casi todo, con el desgraciado de Arias, pero no los podemos agarrar con las manos en la masa.

Voy a decirle a Matías que nos veamos con los pibes infiltrados a ver si hay noticias de algún golpe, de alguna reunión cumbre, de algo donde  encontrarlos.

… No lo van a voltear sin sacarlo antes del Juzgado Marcos, muevan piezas allí, acosen a Fontana y a Donato.

… También estamos en ello, Guillermo, los estamos rodeando por todos lados, el allanamiento fue un golpe importante, ni hablar de los cuerpos de las chicas, pero necesitamos que alguien una las piezas entre sí y a su vez que se le endose todo a Miguel.

.. Tienen a Gómez, sabe mucho. A las chicas llegaron por otro que habló, hay gente que habla, Marcos. Lo que sí intenten que sigan vivos.

___ Cuando Pedro regresó al pabellón luego del taller de lectura para pacientes psicóticos, Guillermito se colgó de su cuello y Fabián lo esperaba con él allí.

El nene nunca parecía sufrir tedio ni preocupaciones, corría, reía sin razón y Pedro le agradecía de corazón. Él no hacía preguntas que no quería ni deseaba escuchar, no cuestionaba, solamente le hacía disfrutar del tiempo juntos.

Cada vez que Guillermito lo abrazaba, Pedro sentía que era una ofrenda, que le estaba dando algo que era para él, para que pudiera guardar y atesorar. Un regalo.

Su conversación y sus expresiones lo desconectaban del mundo, además era muy alegre, y a su lado reía casi todo el tiempo, contagiándose de la risa del niño.

 Y Fabián les daba espacio, los dejaba pasar tiempo a solas en que el nene solamente tenía ojos y oídos para Pedro y al revés. A veces dormían acurrucados, o Pedro lo rodeaba en sus brazos besándole la cabecita como guardián hasta que lo entregaba dormido,  y era en esos momentos donde demostraba y podía demostrarse que sí podía cuidar de otros.

Cada día se querían más, sentía que el encuentro con el abuelo y el nene estaba predestinado, que los caminos se venían cruzando desde otras vidas.

Y mil veces se dijo que no había podido proteger a Claudia, pero que su misión sería proteger a Guillermito de todo mal, para siempre. Y curiosamente, tanto Mirna, como Fabián, Valeria, y por supuesto Guillermo lo veían así, como el ángel custodio del nene.

… Vamos hijito que tenemos que ir a saludar al abuelo.

… Chao, Pedrito. Mañana voy a traer el tren, y la pista.

… Bueno campeoncito, lo que más te guste.

.. Pedro, ¿para cuándo el juicio así sales de acá?

… No lo sé. Si los separaran, probablemente el mío sería pronto, si lo hacen todo uno como desea tu padre para culpar de todo a tu tío, me temo que pasará tiempo aún. Igualmente nadie puede asegurar que no me condenen.

… Sos inocente, Pedro. No puede haber juez que crea que  eres capaz de matar a alguien.

… Más temprano vinieron mis tíos, ¡estaban tan emocionados al ver que no estoy tan mal como supieron que estuve al comienzo!

… Pobres, Marcial me contó que vendrían.

….Vayan Fabi, es tarde y hace frío. Chao amorcito.

… Chao Pedrito, cuídate.

___ Guillermo sintió el golpe de todo lo sucedido cuando lo dejaron solo, las piernas dejaron de sostenerlo  y apenas alcanzó a llegar deslizándose en el sillón, en una súbita debilidad temblorosa que lo inutilizó, y escondió la cabeza entre las manos, como buscando consuelo en alguna parte, diciéndose que el sueño de Pedro no podía ser premonitorio, mucho menos convertirse en real, susurrando para sí conmocionado, un no.

Creyó volverse loco al pensarlo en peligro si le negaran el cuidado, no había muchas opciones para esconderlo.

Se llevó la mano al pecho corroborando lo que sabía, su corazón batallando como caballo desbocado, impulsando con furia la sangre hacia el cuerpo. Inspiró y exhaló buscando el aplomo perdido, el control para pensar. Siempre había tenido temple de acero y sin embargo, ahora se sentía vulnerable, y se masajeó las sienes mientras pensaba en cómo detener a Miguel.

Cuando pudo articular palabras marcó el número de José, mirando inquisitivamente los números, pálido de furia todavía, rígido  de ira, harto de vivir a merced del criminal de Miguel, meneándose ansioso en la silla, exhausto.

… Guillermo, ¿ya sabes todo?

… Marcos recién sale, iba a contarles todo a los padres de Marcial, después de todo Diana era la hermana de la madre, y encontraron el lugar donde trabajaba, aunque pobre mujer, menuda sorpresa se llevará al saberlo, y sobretodo que encontraron a las tres chicas allí.

José, Marcos les hablará de algo referido a Pedro, pero no tengo más tiempo de espera con Miguel, necesito que ni bien salga Manero, le compres lo que te encargué y vayamos a lo nuestro. Por mi parte tendré que dar la cara con ese hijo de mil putas. Iré a su casa, sé que hay micrófonos, me podrán seguir desde donde quieras. Necesito hacer algo, y además tratar de desviar su atención de Alberto, del Borda y de relacionar todo esto con Pedro, mientras ejecutamos el plan.

… ¿Qué quieres que haga?

.. Lo que te dije cuando Manero esté suelto, te avisaré de cuando vaya a verlo para que me sigas en las escuchas. No puedo esperar ya más.

___ Pedro tomó el diario, no tenía decidido qué era, o sería, si un diario o una novela, no importaba, necesitaba a veces escribir.

“Lo que me sucedió al verte no fue algo súbito, un flechazo instantáneo, sino como un extraño reconocimiento, una sensación llegando desde lo más profundo de mi ser, poco a poco, para dar paso a una clara calma, a la paz de sentir que te conozco de otra parte, de otro tiempo, que te guardaba de alguna manera en algún rincón de mi corazón o de mi alma y de repente te traje a superficie al verte.

¡Qué extraño! Los latidos de mi corazón están acelerados como si estuvieras acá, pero no. Y a mi mente vienen imágenes de otro lugar como el día de la playa. En otro tiempo estamos corriendo, me sonríes y el viento nos acaricia, estamos tomados de la mano, simplemente corremos en el atardecer bañados por los últimos rayos de luz, felices por el solo hecho de estar juntos, y el mismo crepúsculo denota nuestra juventud despreocupada, la alegría bañándonos el rostro, sin saber ni adónde vamos, porque estamos juntos.”

__ De pronto el papel se escurrió de entre sus dedos al recordar el sueño, el terror lo atenazó y se preguntó si debía echar a Guillermo de su lado.

No sabía mentir, no entendió nunca a la gente que vivía en la mentira, pero quizá  fuera lo que tenía que hacer para liberar a Guillermo, enmascararse y  ser cruel, borrar el amor de su rostro, de su alma y mostrarse frío e insensible. Mentir. ¿Qué? ¿Cómo para ser convincente? Guillermo era psiquiatra y lo conocía en profundidad.

Una idea cruzó por la mente, y la dejó hacer, transcurrir por ahora. Esperaría el fin de semana, si los sueños regresaban o no.

Siempre temía dormir, pero antes los sueños habían sido con Claudia y con Diana, nunca con ese hombre.

Se asomó al ventanal y bajo el crepúsculo todo parecía un sueño, como cada vez, y en el silencio supo que sus ojos al pensar en él lanzaban destellos, que las mejillas ardían porque se ruborizaba, la pasión lo rebelaba oponiéndose al abatimiento de la pérdida, y hasta la dureza del frío afuera cedía por doquier a la ternura.

___Pedro salió a la oscuridad del patio. Había para su sorpresa estrellas en el cielo en lugar de nubes, y el aire helado lo reconfortó, aunque sintió deseos de alejarse de allí, de poder pasar a través de los muros, de liberar a Guillermo del peligro y él de escapar del mundo para siempre.

De pronto el frío que se había colado abrazándolo lo hizo temblar, y entró acercándose a la calefacción que le dio temperatura al rostro y al alma, cuando de pronto Guillermo entró, y vio el dejo de agotamiento en la mirada, aunque de inmediato le sonrió suspirando.

Pedro se deslizó hacia él y cayó en sus brazos, Guillermo lo estrechó en el calor que ahora se extendía desde su interior, muy cerca de su pecho, y la sangre regresó y tomó lentamente temperatura en los dos. Y se estrecharon en un impulso desesperado.

…¿Qué sucedió? No me ocultes las cosas.

… No vienen buenos días para nadie, Pedrito.

… ¿Para nosotros?

.. Para nadie.

… No hables así, si lo haces tú, me derrumbaré.

___ Guillermo guardó silencio, pero Pedro percibió un negro vacío de desesperanza en la mirada, la muerte de todo deseo, el fondo en el cual los espíritus morían y con ellos el amor.

Estaban estrechamente unidos, pero Pedro percibía su alma gris y ausente, no estaba para él.

… ¿Me vas a contar?

Por favor, no soy solamente tu amante, no es solo sexo lo nuestro. A veces pienso que estás demasiado acostumbrado a eso, a nunca creer ni confiar en los hombres que te acompañaron, y no sé si en el fondo crees en mí.

… Nunca creí en mujer u hombre alguno, precioso. Hasta que te conocí, jamás.

… ¿Y en qué creías entonces?

… Supongo que en la necesidad de tener un buen corazón, ternura, y en hacer el Amor alguna vez con los dos, pero nunca pude antes de vos, y tuve ese sexo impersonal, que ahora veo estúpido, sin alma, penetrante, instintivo, sinsentido.

… Bueno, eso ahora ya pasó.

___ Pero  Pedro lo veía en silencio, cargado de sombras, lejos, y las mismas sombras opacas lo invadieron sin remedio, entrando en una especie de desvanecimiento sin perder la conciencia, una extraña sensación de ausencia, percibiendo los ojos abiertos pero sin ver, perdido, como atravesado de lado a lado por alguna herida, y Guillermo de pronto reaccionó y lo llevó a sus brazos incrustándolo a él, y sus manos ciegamente buscaron estimularlo, temiendo que escapara como cada vez, se colaron bajo la ropa para llegar a la piel.

… Mi precioso, no temas, no estamos peleando. Estamos juntos, es lo que importa. Te amo.

___Pedro alzó la mirada.

… Dime la verdad, entonces, no busques excusas para la realidad pero tampoco te atormentes por ella. ___ . Aunque los dos estaban llorando.

___Pedro se acurrucó en él y se adormilaron sentados,…, en el mismo sueño, y al rato despertaron en la mirada.

… Quiero ver desaparecer al mundo y vivir para siempre contigo acá.

… Pero no desaparecerá.

… Igual estamos en nuestro mundo ahora. El alba es un momento especial  y su transcurso hasta la salida del sol es tan breve, que pocas personas logran vislumbrarla, en general adormiladas todavía, y en esa mágica vibración que pocos ven,…, cualquier cosa puede suceder puesto que mientras la gente duerme el mundo no. Con la llegada de la aurora, el paisaje y las formas que quedaron cubiertas por el oscuro manto de la noche resurgen  con el canto de las aves que despiertan a la par, al tiempo que las criaturas nocturnas se van a descansar junto con las mismas sombras y dejan el relevo a la luz y al nuevo día. El alba y su hermano el crepúsculo, tienen por fin posibilitar el encuentro de amantes, de la luna con el sol, que se ven obligados a separarse por razones de fuerza mayor, en el devenir de las cosas. Y deben conformarse con la magia de ese instante eterno de encuentro. Por ello amo esos dos momentos desde siempre, y ahora lo sé.

… Ven aquí.

… ¿Adónde?

….A adosarte a mí bajo las mantas, hace frío.

… ¿Estás desvestido?, no te vi.

… En boxer, haz lo mismo mientras te miro. ¿O tienes hambre?

… De comida todavía no.

___ Pedro entró a la cama, y se abrazaron en una madeja de miembros, por un instante eterno cada uno perdido en sus pensamientos, hasta que se estremeció cuando los labios finos se posaron en la curva de su cuello. Y cerró los ojos para disfrutar de la excitación que le había causado, dejando para luego,…, como en acuerdo tácito, las confesiones de lo acontecido en el mundo exterior,…, que allí no existía.

… ¿Me estás distrayendo a propósito para no contarme nada de lo sucedido?

… Luego, ¿sí?

...Gracias.

…¿Por qué me das las gracias?___Con voz quebrada.

… Por cuidarme, por estar acá a mi lado.__ Pedro esta vez lameteó el cuello y Guillermo expectante lo dejó hacer.

…. Gracias a vos por elegirme. ___Apretándolo contra su pecho.

A tu lado volví a sentirme como un adolescente inexperto que se enamora por primera vez, que descubre su cuerpo, el deseo por otro, emociones que creía desconocidas para siempre, otras dormidas.

__ Guillermo enmarcó el bello rostro, paseando los pulgares por los labios, y luego fue a investigarlos con delicadeza, lentamente, con paciencia, reabsorbiendo el sabor, para ahondar luego en la pasión que venía conteniendo de todo el día sin él, recorriendo la espalda para regresar a enredar los dedos en el cabello mientras Pedro le respondió con desenfado y el mismo ardor.

Abrió los ojos que  había cerrado para disfrutar de las sensaciones, para luego apartarse y escrutar el rostro con avidez y desesperación, mientras los pensamientos insolentes se agolparon sin permiso:

¿Estaría mal amarlo así a pesar de todas las dudas sobre el futuro?

Los expulsó de súbito porque deseaba volver a sentirse un hombre en otro hombre, en su hombre, el único en su vida y el hombre destinado le respondió como  leyendo sus pensamientos, con un beso profundo, con lenguas regodeándose, inspirando el aliento ajeno,… húmedo, largo,…, mientras…. se envolvían con los brazos y reacomodaban las piezas del cuerpo para amoldarse uno al otro sin espacios entre sí.

Y se reexploraron con paciencia, con languidez, con olvido, recodo a recodo, resquicio a recoveco, investigándose con respetuosa admiración como si fuera la primera vez.

 Mientras que con los labios y lenguas exploraban la suavidad, la tibieza  y cada rincón de la boca, con las manos surcaban cada planicie, valle y cima, cada curva de los cuerpos por encima de la ropa de Pedro. No era la primera vez, sabían lo que había debajo, pero la presencia de barreras que los separaban del contacto directo, los excitaba todavía más.

Sentir las formas, las curvas, el mapa oculto de los cuerpos, tanteando a ciegas cada rincón, al tiempo que escuchaban los sonidos del amor aunados en jadeos y gemidos, era una explosiva combinación que ponía en fuga a la razón y a todo discernimiento de más, y la idea de que estaban así desde hacía un mes solamente, se evaporó cuando se unieron piel a piel.

Guillermo  lo irguió frente a sí para deleitarse acariciándolo primero con la mirada, para luego pasear las manos por  el vientre firme, la suave piel llegando al pecho, a jugar con los dedos alrededor de los botones anhelantes que se irguieron al mínimo roce, creciendo ante él cuando los frotó con los pulgares, los hizo rodar ya siendo cumbres sin apartar la mirada del rostro, que parecía en trance ante cada caricia, brindándose a ellas sin tapujos ni pudor, con absoluto placer, gimiendo y consintiendo  a lo que llegara después.

Pedro disfrutaba del hombre que lo acariciaba de esa manera como nadie antes, como si él fuera un dios pagano, o el único hombre en el mundo, como si él no pudiese ya subsistir sin sentir su piel bajo esas expertas manos, bajo esas intensas palmas que lograban erizar  el vello y la piel.

Guillermo notó que comenzaba a pensar, pero Pedro supo que ese hombre no dejaría ya que su pensamiento escapara a ninguna parte, cuando los labios tomaron entre ellos un pezón haciéndolo arquearse gimiendo por más, y cuando pasó a mordisquear el otro, una corriente eléctrica lo recorrió de arriba abajo, y ante esa energía el cuerpo se convulsionó sin remedio mientras la impúdica lengua continuó la tortura sin piedad, arremetiendo  en uno  y luego en el otro, creando cumbres dolientes, que le hicieron a Pedro suplicar, que terminara de sacar la ropa, que había amontonado  en la urgencia inicial.

Guillermo no pudo emitir palabras, ya embrujado por su voz, con los sonidos que emitía, con su piel y sabor, pero obedeció la orden sin demora esclavizado para siempre ante su voluntad, hasta tener a la vista la juvenil desnudez, para su admiración única que lo hizo temblar en forma sutil.

Se inclinó a besarlo, con toques suaves como plumas, por todo el rostro y luego los labios y se alejó al tiempo que vio aparecer la sonrisa con hoyuelos que quiso  grabar en las retinas, y ya que se había separado algo, se incorporó ante la sorpresa y disgusto de Pedro que atónito esperó.

Y entonces lo vio, sensualmente introducir el dedo bajo el elástico de la única prenda que llevaba, y deslizarla hacia abajo, mientras se acercaba de nuevo a unirse a su par, con el cuerpo de un hombre, que reafirmaba su virilidad en la madurez, ante los ojos marrones curiosos recorriendo el vello de arriba abajo, hasta que se fundía con el vello púbico que coronaba el deseo erecto por él.

Guillermo se acomodó entre las piernas de Pedro apoyándose en sus manos al costado, con los brazos como pilares, haciendo rozar su virilidad, tibia, dura,… sobre los muslos y Pedro se onduló ante el cosquilleo general, mientras Guillermo mimaba su cuerpo con más besos y caricias de toda especie.

 Pedro le seguía el ritmo y el compás que marcara, y poco a poco no quedó lugar para pensar o recordar. Lo único que quedaba era rendirse al deseo del hombre y llegar hasta el final conocido e intentar esta vez ir por más.

Sin mucha espera, Guillermo fue a estimular por delante, y sus dedos a penetrar su recorrido detrás, hurgando atrevido in crescendo sin más, y cuando Pedro enloqueció, Guillermo lo vio sabiendo que era por él, excitándose más,  haciendo a Pedro llevar las manos al deseo de su hombre para sentir su potencia y llevarla más allá, frotando y acariciando hasta que Guillermo en el límite capturó la insolente mano y se abalanzó haciéndolo girar montándolo como salvaje animal hambriento, devorando la boca, mientras se acomodó entre las piernas hasta lejos de los esperado,..., penetrarlo con una estocada firme, pero con suavidad, aquietándose en la fusión para ahogar el gemido de Pedro en la boca, y las uñas dejaron marcas cuando el movimiento comenzó, por la emoción insoportable de sentir el sexo del hombre dentro, los avances y retrocesos, los sonidos de los cuerpos perfectos haciendo el amor.

Casi perdidos, ahogados agónicamente en los besos, supieron que estaban en la cresta mayor de una ola gigante en un mar embravecido, y que podían ya ver el lugar de impacto donde no podrían evitar hacerse trizas…  cuando porfiados y furiosos rompieran allí, en la gloria final del derrame al unísono ante el grito mayor.

…¿Te gustaría ir a mi nueva casa pronto?

…¿Cómo?

___Pedro  lo miró confundido, meditando las palabras y Guillermo supo que debía contarle todo, como prometiera antes de hacer el amor.

.. No llores, no soporto verte llorar.

… Tenía razón, no fue un sueño, percibí que él me está buscando, entonces.

… No te encontrará. Te sacaremos de acá.

… ¿Iré al penal?

.. No cielito, te juré que jamás. Tú mismo dijiste, te mataría al instante allí.

Le propuse algo a Marcos, pero necesito que esperes un poquito más. Debe convencer a Moravia, y quiero contarte todo cuando sea un hecho.

¿Puedes confiar en mí?

.. Siempre lo hice. Pero no pienses en esas tonterías de huir como prófugos, porque jamás te alejaría de tu lugar y de tu gente, antes prefiero arrepentirme de correr riesgos a escapar como si fuera culpable de algo.

… No lo sos, tampoco yo.

Necesito que confíes en mí. Y ahora disfrutemos de este par de días. Por lo pronto Matías envió un escudo de guardias que rodearon la manzana y están dispersos por todo el hospital, y lo mismo para Gaby, aunque a esta altura, pienso que Alberto ya la instaló en su casa o se mudó él.

¿Puedo hacerte una pregunta?

.. Claro.

… ¿Por qué la comparación de nuestro amor con el de la luna y el sol? No entendí mucho lo que dijiste antes.

…Porque así es nuestro amor: Secreto. Prohibido. Oculto y sin embargo es eterno.

Sujeto al devenir del afuera sólo se consuma así, en el crepúsculo y en el alba como el de ellos. La luna y el sol se esconden de sus hermanas de la galaxia y del mundo entre las nubes para amarse y tienen esos únicos precisos instantes de encuentro pero sin embargo su amor es eterno.

… Nuestro amor no es prohibido precioso, y será oculto y secreto un tiempo solamente. Cuando esto termine seremos libres de gritarlo en todos lados, adentro, y afuera, ya no quedará sujeto al devenir de nadie.

__ La mirada de Pedro se apagó y Guillermo lo vio.

Le levantó la barbilla buscando la mirada.

… ¿Qué sucede? ¿No me crees?

… Tengo miedo,…, tengo mucho miedo que ese vivir afuera, que esa libertad de antes, ya no regrese jamás.

… Chsss.

___ Cuando Guillermo iba a continuar, el celular lo asustó, la manoteó al instante, y asombrado leyó que era Marcos.

… Guille, perdón por la hora.

… No importa. ¿Qué sucedió para que llames un sábado a la noche?

… Necesito que hablemos, por lo que me pediste hoy. ¿Puedo ir por la mañana?

…. Claro. Pero… ¿qué pudiste hacer un sábado?

.. Mucho.  Fui a la casa de los tíos de Pedro a darles las últimas noticias, estaban allí Camila con el padre, porque la piba se puso de novia con Marcial al parecer. Iban a cenar allí, me invitaron y entonces hablé frente a todos.

Moravia ante su hija es otro tipo. Ella lo puede e idolatra a Pedro.

… ¿Entonces?

… Estaría dispuesto a aceptar tu propuesta.

… ¿En verdad lo conseguiste?

… Espera, que no está libre de riesgos. Además, aceptaría pero puso condiciones, por ello necesito que hablemos. Con Pedro presente Guillermo, esto le compete.

… Está bien, te esperaremos en la mañana. Cualquier cosa que sea, seguramente será mejor que esperar que Miguel llegue a él.

___ Guillermo cortó la llamada y Pedro lo estaba mirando lleno de interrogantes.

… ¿Mi amor…. qué sucede?

CONTINUARÁ.