NAUFRAGIO. CAPÍTULO 37.

 

NAUFRAGIO. CAPÍTULO 37.

Bs. As., miércoles 08 de diciembre de 2014.

___Ana enmudeció y sin apartar la mirada se dejó caer en un sillón. El silencio dominó la sala una eternidad hasta que al fin habló.

... No. Es mentira. Me dices semejante atrocidad para acelerar el divorcio. Es demencial.

... Quizá lo sea Ana. Quizá haya sido demencial ser amante de Juan toda la vida y casarme con vos, pero es mi verdad.

… Es que no puedo imaginar que  durante toda la vida, mientras me hacías el amor, estabas además con un tipo, que es socio o asociado o lo que sea de tu hijo. ¿Quiénes lo saben y desde cuándo? ¿Lo sabe Fabi?

… No. Si apenas me habla con solamente haberte pedido el divorcio imagina cuando sepa  todo. Los demás creo que ya saben todo todos.

Cuando supe que mi madre regresaría, decidí sincerar mi vida, lo dejé a Juan y se encargó de desparramar la mierda por todos lados.

… Yo no lo vi, me lo estás contando.

.. Mereces saberlo por mí, al igual que mi hijo, está enviando anónimos para todos lados y antes o después te lo iba a hacer saber, y no quise que fuera así.

… ¿Lo saben en la clínica?

… Mandó una carta, sí. Lo saben.

… Y,…, ¿no  tienes vergüenza?

… ¿Vergüenza? No Ana, no siento vergüenza por ser gay, es mi naturaleza, soy así. Siento asco por el error, por la mentira, por haberme dejado arrastrar a tu cama, por luego haberme casado con vos en lugar de haber reconocido a Fabián y haber seguido con mi vida, por haber pasado cuarenta años junto a Juan sin amor, por las otras aventuras sinsentido que mantuve al margen, por todo eso….. sí siento vergüenza.

… ¿Además de Juan y yo, tenías a otros?
.. Sí, Ana, me metí con cualquiera cuando se me antojó, por aburrimiento, por instinto, porque soy una  mierda, porque buscaba otra cosa y no la encontraba.

… ¿Y tu madre lo sabe, y Miguel?

.. Mi madre no, estoy esperando su llegada para decírselo, puede que lo sospeche como sospechó siempre mi padre.

 Mira Ana,  desde siempre, fui un niño solitario, distinto, y la única persona con quien estuve desde la niñez fue Juan. Mi padre se molestaba por ello, y Mirna lo veía.

 Luego del Naufragio, Juan me contuvo en mi dolor, me apoyó, me acompañó, y me entregué a él a los doce años, desde entonces hasta el 22 de octubre….fuimos amantes.

Esperaba que alguna vez lo blanqueara, pero cuando quedaste embarazada, me casé,  y seguí alimentando la farsa, la mentira, por mi padre, por no darle el gusto que supiera que tenía razón, por Miguel, luego por Fabi y por vos, pero Ana, no puedes decirme que alguna vez pensaste que en nuestro matrimonio hubo amor, siempre supiste que no te elegí. Te hacía el amor de vez en cuando como un acto mecánico, obligado, sin involucrar nada más que una parte de mi cuerpo…

.. ¡Basta!, no me humilles más, por Dios.

¿Para qué mierda me estás diciendo todo esto ahora?

… Para liberarte, para que tengas una vida, para que no dudes que divorciarte de  mí es lo mejor que te puede pasar, y para...

.. ¿Para...?

.. Para que me ayudes con Fabián.

.. Estás en pedo vos si piensas que te va a perdonar alguna vez. ¿Para qué le vas a contar? Lo vas a hacer mierda.

… Lo sé, Fabián  me va a odiar, pero ya todos lo saben, y Juan o Miguel se lo dirán de la peor manera, como han hecho en mi trabajo, en tribunales, y quiero que sepa todo por mí, ni bien lo sepa Mirna lo sabrá Fabián, y sé lo que le voy a producir, por ello te necesito a su lado, para que lo contengas, para que lo ayudes. Sé que nunca podrá aceptar lo que soy, mucho menos que te engañara toda la vida, ni yo puedo perdonarme esa cobardía aún, menos puedo pedírselo a él.

Ana, sos una buena mujer, más allá de que no debimos casarnos, tenemos un hijo, un nieto, son tu familia. Necesito que me ayudes a contenerlos. No les pediré nada, les dejaré todo, la casa, el auto, no quiero nada. Comenzaré nuevamente de cero como cuando me fui de la casa de mi padre, pero sí te pido que ayudes a Fabián, y que me permitas ver a Guillermito.

¿Es mucho?
.. Supongo que no, pero no sé si pueda ayudar a Fabi luego de que sepa esto. Le vas a causar un daño irreparable, Guillermo.

 Cómo mierda va a entender que estuvo trabajando con el amante de su padre toda la vida, que yo no lo sabía, que ahora ese infeliz está diciendo la verdad y… ¿Está preso porque se volvió loco por esto?

… Estuvo preso porque empuñó un arma contra una mujer, Ana. No está loco. Y Miguel para joderme la vida, odiándolo lo sacó, en realidad suponemos que argumentando emoción violenta.

… ¿Qué no me estás contando que no puedo entender por qué Juan secuestró a la novia de Manuel?

¿Acaso Manuel es tu nuevo novio, lo dejaste por él, es puto y está por usar a esa pobre chica porque la embarazó repitiendo tu historia?

… No. Pero qué dices mujer, no. Manuel es un sol, ama a Camila y se casarán en días. No es gay. No es por él que Juan apuntó a Camila.  Pero,…, ¿para qué quieres saber más de esto?, por favor. Lo que te incumbe, lo que necesitabas saber ya te lo dije, el resto hace a mi intimidad, a mi vida a partir de ahora, o desde que te dejé, lo demás no tengo por qué contarlo.

… ¿Vos me pediste el divorcio y lo dejaste a ese puto de Juan por otro, no?

Claro, de allí tu generosidad de dejarnos todo porque tienes otro techo y otro amante, vamos, ahora que empezaste quiero saberlo todo.

… ¿Para qué? ¿Qué te importa?

… Necesito poder entender por qué Juan…. abogado, asociado en el estudio, hizo semejante locura cuando lo dejaste contra esa chica, que por lo que sé además es hija de un juez.

… No te lo voy a contar, Ana, no ahora ni a vos, quizá la semana que viene a Fabián, pero vos sabes lo que necesitas saber. Que lo nuestro no tiene retorno, que te dejaré todo, que  cuanto antes salga la demanda mejor te sentirás, podrás salir con tus amigas, viajar, volver a trabajar, recuperar una vida propia, Ana, sos joven, atractiva.

… Y vos sos una mierda. Tu hijo tiene veintisiete años, yo llevo ese tiempo dedicada a ustedes, ¿ahora voy a empezar a salir? ¿Y la vergüenza? ¿Qué les digo a mis supuestas amigas? Miren qué suerte, el puto de mi marido me dijo que me engañó desde que nació con tipos y ahora soy libre. ¿Eso cuento?

¿Y lo que le dirán a Fabi en tribunales, lo pensaste?

Nos hiciste mierda, Guillermo, lo del divorcio no es nada, con esto nos demoliste la vida, a todos.

… Lo pensé cuando decidí decir la verdad, intenté ver si podía seguir con la farsa.

.. Y la hubieras continuado, a muerte debiste continuarla.

… No pude, Ana, no quise, no se me antojó resignar la única puta oportunidad que me dio la vida de ser un poquito feliz: el regreso de mi madre y...

… ¿Y? ¿Y qué mierda?

… Que me enamoré, por primera y única vez en la vida, de súbito, en un fogonazo, en un día encontré al amor de mi vida. Un hombre. Mi hombre destinado, con el único que debí compartirlo todo siempre.

Y merece que diga mi verdad, que me case con él. ¿Puedes entenderlo? NO. Seguramente que no,  y menos Fabián, entonces ¿para qué quieren que se los diga?

… Me haces reír, sos patético, estás caliente con un putito nuevo que te durará diez minutos y haces mierda a todos por ello. Estás loco, Guillermo. Me das lástima.

…No es una calentura, Ana, esta vez no. Esta vez es Amor, el único, el verdadero, el Eterno y es un hombre. Que se descubrió gay a mi lado, que me lo dio todo, a quien respeto y que me respeta, a quien siempre seré fiel, a quien no le mentí en nada por primera vez en mi vida, y con quien quiero pasar el resto de mi vida. Formar una familia a su lado.

.. La familia la tenías en casa, conmigo, con tu hijo y tu nieto.

.. Mi hijo y mi nieto son familia, sí, vos no, a vos no te elijo, y Fabián dejará de elegirme como padre, sospecho que será la consecuencia que tendré que pagar por mis años de mentira. Y lo aceptaré si es así. Yo mismo no perdoné que mi padre se casara con la madre de Miguel y creyendo a Mirna muerta, cómo no entender a Fabián. Te estoy pidiendo que lo ayudes, porque justamente, además de lo que yo le diga, recibirá la mierda de Miguel, de Juan, en tribunales, de toda esa gente que no entiende nada de nada y que pensarán que soy un degenerado, y no lo soy, Ana. No ahora al menos, menos por mi condición.

… No me contarás nada más entonces. Bueno, me tendré que enterar por tu hijo cuando llegue llorando entonces, porque como mucho, piensa que me dejaste por otra, por una mina, Guillermo.

… Bueno, no tengo más que hablar Ana, nuestros abogados harán todo lo antes posible, ya te dije que no quiero nada material y por favor, cuando algún día mi madre, como abuela de Fabi vaya a la casa, trátala como  merece, como la abuela de tu hijo, que pasó cuarenta años en África creyéndonos muertos y sin memoria.

… Para, para… pero claro, Mirna estuvo y está en la casa  de los padres de Manuel allá, Manuel tiene un gemelo médico que trabaja con vos, Fabi lo conoce. ¿Cómo se llama? Pedro, Pedro Beggio. Él estaba de novio con la hija del juez antes  del hermano, el hijo es suyo entonces, y tu amante es ese pendejo. ¿Es Pedro Beggio tu gran amor?

… Sí Ana, sí. Pedro, el gemelo de Manuel, mi residente brillante, africano pero con raíces chilenas, es mi gran amor, el padre de José Thomas, el hijo que espera con Camila que se casará con Manuel, por eso Juan le apuntó, para dañarlo a Pedro y a mí por medio de él.  ¿Eso necesitabas saber?

¿Te cambia la vida saber a quién amo? Bueno, amo a Pedro, Pedro es el Amor de esta vida y de todas, con él me casaré, José Thomas será mi hijo también, y  estamos formando otra familia con los suyos, con Manuel, con Camila, con el bebé, a la que se sumará en días mi madre que por otra parte los ama, casi los crió a Pedro y a Manuel.

… Es un horror.

… Piensen lo que les plazca, Ana, vos y Fabián, pero no voy a renunciar ni a Pedro, ni a la vida que comencé a su lado por nada ni nadie.

Adiós. Espero que cuides de tu hijo, y que Valeria tenga libertad de traer a mi nieto con los míos cuando lo desee.

___ Guillermo salió suspirando de alivio, chocándose con Fabián que entraba, casi sin mirarlo, y que corrió a abrazar a Ana que lloraba.

… Mamá, ¿qué te hizo? ¿Tiene otra mina, no? Ma., lo sé, recibí un anónimo, estoy seguro, pero déjalo ir, que se vaya con esa mujer. Estaremos bien.

… Sí Fabi, seguramente estaremos mejor sin él. No sé quién es ese hombre que acaba de salir. Nunca lo conocí. Divórciame de él lo antes posible, no quiere nada de nosotros, solamente irse de nuestra vida, menos de la de Guillermito.

… Será lo mejor, y vamos a estar mejor sin él, al fin nunca estaba en casa. Siempre con sus guardias, sus urgencias, y sospecho que seguramente sus aventuras, ¿no?

… Algo así Fabi, vamos por favor. Sácame de acá.

___ Guillermo en el taxi hacia la clínica se sentía liviano, asombrosamente en paz a pesar de saber que estaba perdiendo un hijo, que seguramente  estarían por un largo tiempo con Pedro en boca de todos, se sentía con una carga menos en la mochila que acarreó más de cincuenta años, y en lo único que ahora podía pensar era en Mirna descendiendo del avión, en la mudanza, y en la luz de la mirada y de la sonrisa de Pedro. Nada de lo demás ahora tenía importancia. Ana era parte de un pasado equivocado, el divorcio un trámite  a ejecutar a manos de los abogados.

Inspiró aire nuevo y fresco que le expandió el pecho, se sintió limpio, aunque Juan estuviera libre, aunque volviera a atacar por algún lado, él ahora era exclusivamente el hombre de la vida de Pedro, su única pareja al fin era quien debió serlo siempre: Pedro Beggio y sabía que lo esperaba en la clínica, como en cada lugar los pocos minutos que pasaban separados, porque para ellos los minutos eran siglos si no los compartían, si no espiraban el mismo aire, si no estaban bajo el mismo cielo.

__ En el departamento de Juan.

… ¿Y Miguel, cómo seguimos ahora?

… Ahora te quedas quietito. Apenas logré sacarte bajo fianza, pero estás con condicional, no  vayas a  amenazar a nadie o  no te va a defender ni Cristo. Tenemos la feria para que lo que hiciste se enfríe, para que Moravia pierda fuerza, pero Manuel no se quedará quieto, no hay que subestimarlo.

¿Vos realmente piensas que mi hermano va a volver con vos?

… No. Ese cretino de Pedro me lo quitó. No va a regresar, al menos mientras él siga en su vida.

… Y entonces estamos en el mismo bando, los dos nos queremos vengar de ellos. Yo encima tengo que bancar que regrese la ex muertita a humillar a mi madre.

… Primero, vamos a conseguir que el hijo lo odie, tanto, pero tanto que se arrepienta de haberlo tenido. Ya le pidió el divorcio a Ana, pero el estúpido de mi sobrino debe pensar que tiene otra mina, no que es puto, bueno se lo tenemos que hacer ver.

Luego le iremos sacando cosa por cosa, en la clínica ya están marcados, en tribunales el hijo y Manuel. Va a perder todo en el divorcio. Al final, para tu postre, le pegaremos a ese Pedro Beggio, pero al final. Antes nos vamos a encargar de que queden bien mugrientos, la mamita incluida. Él está dando por sentado que aceptará todo, veremos si es tan así. Ya veremos.

… ¿Qué vas a hacer?

… Vos nada, ni se te ocurra moverte. Menos te dejarán asomar por el estudio. Tengo unos contactos que pueden darte trabajo, también te voy a ayudar con ese tema. Y yo seguiré avivando a mi sobrino, soy el tío, tengo que velar por él si el padre no sirve para nada.

___

…¿Qué hiciste Miguel? ¿Por qué lo sacaste a Juan?

… Porque me dio pena.

.. No seas hipócrita, sabes como yo que es imputable, no es sicótico ni actuó bajo emoción violenta. Trabajamos en el mismo lugar, pero te juro que te voy a recusar, y a tu amigo Fontana también.

.. Ja, ja, mira qué miedo Manuel, por favor. Yo diría que el que tendrá que disfrazarse de algo en tribunales es Moravia. Mira pendejo, no te metas conmigo. Ya le dije a Juan que la cosa no es ni con vos ni con tu noviecita, no volveremos a molestarlos. Pero mi hermano es un cretino, y un degenerado, y le vamos a cobrar todo lo que ha hecho en su vida. Para su desgracia, el putito de tu hermano se enamoró de él, así que no puedo asegurarte que no caiga en la volteada.

__ Manuel saltó sobre Miguel en un instante rodeándole el cuello y apresándolo contra la pared.

… Mira mediocre resentido, le llegas a poner un dedo encima a Pedro, y me vas a conocer de verdad, te voy a hundir Miguel, ahora ya es una cuestión personal. Ni tu sobrino te soporta acá, voy a buscar tu basura y te voy a llevar a la cárcel a hacerle compañía a Juan. Te lo prometo.

… Suéltame, infeliz. Primero trata de llevar a Juan de nuevo a una celda antes de amenazarme a mí, que no creo que la tengas tan fácil.

… Claro que lo intentaré, mañana mismo pediré una nueva pericia psiquiátrica, no voy a esperar que termine la feria, y cuando demuestre lo que es, ni tu amigo Fontana podrá dejarlo fuera. Camila va a declarar, Pedro y Guillermo también y regresará a prisión, no sigas con esta guerra Miguel.

… Esta guerra no empezó todavía y no es con vos, ya te lo dije tarado. No te metas.

Kenia, miércoles 08 de diciembre de 2014.

.. Te escribiré, Pedro.

… ¿Para qué? Para decirme que Pedro se casará con un tipo. Porque es lo que permiten en Argentina, ¿no?

.. También Manuel se casará, con la hija de un juez, Camila. ¿Tampoco quieres saberlo?

¿Y cuando tengas nietos tampoco?

¿Es tan fuerte tu rechazo a la elección de Pedro como para renunciar a toda tu familia, a mí, a Manuel y a tus nietos?

… Manuel tampoco me quiere.

… No digas tonterías, ambos te quieren. Se fueron porque siempre quisiste imponerles tu voluntad, y no deseaban seguir tu camino. Míralos, uno médico, el otro abogado, se hicieron solos, en un país extraño, trabajando, lejos de nosotros. Deberías estar orgulloso de ello.

… No lo estoy María, quizá alguna vez me permita pensar en  Manuel, a  ti te amo, fuiste la única mujer de mi vida, pero los elijes a ellos y me dejas.

… Te elegí a ti todos estos años, perdí de verlos crecer y ayudarlos todo este tiempo. Es hora que pueda estar con ellos, presente en el casamiento de Manuel, conocer a su esposa. No te estoy abandonando ni cambiando por ellos, Pedro. Yo te amo, nunca ha habido otro hombre en mi vida, pero sabes lo que luché por ser madre y el tiempo que llevo sin estar con mis hijos.

¿Realmente crees que tienes derecho a tenerme encerrada acá sin ellos? Soy tu esposa, no tu esclava. Y siempre puedes venir a buscarnos, te escribiré y sabrás adónde estamos.

… Yo nunca volveré a América, María, hace mucho que hice mi elección.

… No es la mía, Pedro, lo siento. No sé si alguna vez necesite regresar a Chile y buscar a alguien allá, pero sí quiero estar los años que me queden por delante con mis hijos y mis nietos.

Bs. As., viernes 10 de diciembre de 2014.

___ Los días transcurrieron de prisa, sin sobresaltos ni sorpresas, y el viernes los encontró entusiasmados pero muy ocupados a todos, haciendo boletos de compra- venta y embalando, yendo y viniendo desde y hacia las casas del Delta.

… Mi amor, mañana tenemos que dejar mínimamente ordenada la casa y contratar a personal que nos ayude, el miércoles ya llegará Mirna.

… Nos encontrará agotados, mira que hemos corrido en estos días, pero han sido hermosos.

… Ven acá, dame un beso al menos.

… Estoy todo sucio.

… Los labios no están sucios.

… Tonto.

… Quiero que en la próxima ecografía de Camila, vayan Mirna y Orestes, los abuelos de José.

Pobre Manuel, entre la jugada en tribunales para tratar de ganarle la pulseada a Miguel, la mudanza, el estudio, apenas si se ha acordado de la fiesta creo. Lo acompañaré a comprarse el traje y de paso a comprar el mío.

… Qué envidia del espejo en que te mires.

… Guille, que me haces poner colorado. No soy el novio ahora, solamente testigo.

… Novio o testigo te esculpieron los ángeles a vos.

 Precioso, ¿qué nos falta embalar?

… Nada, la ropa que usaremos mañana está en el vestidor, termino de colocar el resto en las valijas y creo que solamente quedará la vajilla que usemos ahora.

Media pelada se verá la casa por ahora, tenemos pocos muebles. Bueno, no importa, ya la iremos equipando, además con la ayuda de Orestes no nos hemos endeudado con el Banco y siempre podemos pedir algo para el mobiliario si Mirna  o Camila lo desean.

… Mejor déjalo para cuando nazca José que necesitará sus habitaciones, cunitas, cochecitos, ropita y más. ¿A todo esto? ¿Cuándo llegará el pequeño Pedrito?

… José, amor, Pedrito no.

… Bueno, José Thomas. Te gustan los niños, ¿verdad?

… Mucho, a pesar de todo, muchísimo. Los niños tienen el don de recordar el verdadero propósito de la vida.

… ¿Cuál?

… Amar y ser amado, por supuesto. Aunque en mi caso no haya sido así. (La mirada de Pedro se entristeció de repente)

… ¿Y cuándo llegará entonces?

… Mediados de junio más o menos, en pleno invierno, más ropita necesitará.

Listo, valijas cerradas, a descansar que tendremos que madrugar para que dejen esto vacío.

… ¿A qué hora vendrán para que les demos la llave?

… A las 10 horas quedamos.

… ¿Estás contento, no?

… Feliz, qué le parece Dr. Graziani. Casa nueva, vida nueva, hijo nuevo, Mirna.

… Menos mal que no dijiste novio nuevo.

___

… Eso jamás, es lo único que nunca desearé renovar.

___Apuraron la cena y colocaron todo en la lavadora, mientras Guillermo puso música y también apuró su whisky, fue la última noche en ese departamento donde se habían amado en cada rincón, de todas las maneras, y Pedro acurrucado en su pecho, le lamió el cuello paseando hasta los oídos, regresando a la base de la garganta, mientras las intrépidas manos le desabotonaron la camisa, y peligrosamente le erizaron el vello alertando las terminaciones nerviosas de la piel y más.

Apenas fueron concientes del paso del tiempo a partir de entonces. Nada se interpondría entre ellos en la última noche allí. Estaban dispuestos y expectantes a todo lo que el otro deseara dar y recibir.

Las mentes se enturbiaron de sensualidad compartida y la razón se fugó muy lejos del lugar, mientras Pedro lo tumbó en el sofá con su cuerpo encima que no daba treguas ni respiro, ni con las manos ni con la boca.

Los labios de Pedro se abrieron paso entre los finos succionándolos para abrirlos e ingresar con su lengua en busca de su compañera de juegos y la halló, y jugaron, y se extinguieron en el beso, se regodearon y enroscaron, se bebieron y devoraron, se marearon en el aliento, se aturdieron en el sabor, el aroma los impregnó, mientras las manos entrecruzadas, se ocuparon de desabotonarlo todo, para que al ponerse de pie, fusionados en la boca, fuera muy sencillo para ambos hacer resbalar las camisas, pantalones y bóxers, para amoldar las piezas y que los cuerpos comenzaran el diálogo perpetuo que conocieron de memoria desde octubre y para siempre.

Se anudaron y entrelazaron en batalla feroz, en la boca, en las manos en las notas exactas de la intimidad que se  hundía en el otro, en besos por doquier, las manos ahuecadas moldearon las nalgas, los dedos surcaron, arañaron y se hundieron amasando la carne, mientras perezosos los pies fueron avanzando sin remedio hacia la habitación, para a oscuras con la luz del amor rodeándolos, llegar a la cama y tumbarse  dejándose caer como fuese, enredados, arriba, o abajo , entrelazados y alrededor, mientras las gotas de rocío del mismo sudor perló la piel, y la saliva dejó surcos húmedos por todos lados.

 Rodaron sin encontrar el sitio exacto para concretar la fusión, indecisos de quién había ganado la batalla para merecer comenzar la entrega y la posesión, el dar y el recibir, pero ya perdidos de este mundo, del tiempo, del espacio, de toda noción, finalmente Pedro quedó boca abajo, con la lengua ajena enterrada en su garganta, ahogando y muriendo en ella gemidos y gritos al unísono, y Guillermo reacomodó los montes, valles y planicies, para encontrar lo que deseaba, y lo halló al fin.

 Urgente lo aferró de las caderas, entrelazadas las extremidades, y le separó las piernas con las rodillas, besándole las nalgas antes de abrirlas para hallar el ingreso por fin.

En la boca fueron uno todo el tiempo, y Guillermo lo penetró sin más, mientras Pedro quedó sin aire al sentirlo palpitar acerado y pétreo en su interior, al tiempo que abrazó su virilidad contrayendo los músculos alrededor, Guillermo lo colmó, entró, avanzó, se detuvo, salió y reingresó, una, dos, veinte veces, la razón no estaba para contar el número de embestidas que los empujaron hacia arriba y adelante, a ritmo final rápido, exigente, demoledor, haciendo vibrar los cuerpos, mientras Pedro se acompasó arqueando las caderas ante cada embestida, y  cerró los ojos al sentir además los dedos de Guillermo haciendo rodar sus pezones, para luego estirarlos y pellizcarlos hasta la locura, disparando un  torrente de sensaciones abrumadoras,  mientras en la boca se mordieron, se acariciaron , labios, lenguas, chocaron los dientes, bebieron y se asfixiaron, se devoraron sin dejar de saborearse por todos lados.

Cuando el choque mortal estuvo a un paso de llegar, Pedro se apretó más contra Guillermo, ansioso de sentir su peso, su calor abrasador, y éste lo besó con la boca abierta, hambriento, sediento de más, y por fin se devastaron y deshicieron en un intenso orgasmo que los barrió de arriba abajo en oleadas sucesivas y duraderas, convulsionando en la agonía, sacudiéndose gritando, temblando al liberase y verter el contenido en el interior y alrededor, mientras se hicieron UNO en su totalidad y con el TODO y nada más existió por una eternidad que lejos estuvieron de poder medir, hasta que en algún instante no reconocido de ella volvieron a ser materia, y Guillermo a desgano se retiró, tumbándose al costado, para regresar al beso otra eternidad.

 Cada vez que se separaban sentían una parte del cuerpo amputada, y el silencio invadió la habitación cuando  el concierto de  gritos, gemidos y jadeos llegó a su fin, dando paso a la respiración y a los latidos normales de todos los mortales, al tiempo que quedaron mojados en el otro,  y por el otro, enredados y aturdidos por otro tiempo suspendido, hasta al fin poder recordar cómo se articulaban las palabras, para usarlas para decirse lo único que deseaban oír uno del otro, hoy y para siempre.

… Te amo, Guillermo Graziani.

… Te amo Pedro Beggio, y en vos a nuestro hijo y a la humanidad.

No me importa nada más que la vida que iniciamos el 22 de octubre. Asumo los riesgos y estoy dispuesto a pagar las consecuencias.

… Lo mismo yo, mi amor, no lo dudes. Te amo más allá de esta vida. Lo sé.

CONTINUARÁ.

UN DESTINO…. UN AMOR… GUILLE Y PEDRO… PEDRO Y GUILLE.