"ATRAPADOS". CAPÍTULO CUARENTA.

“ATRAPADOS”.

CAPÍTULO CUARENTA. EL RESCATE.

 

 Bs. As. Provincia, sábado 26 de marzo de 2016.

“La pálida.

 Mis certezas desayunan dudas. Y hay días en que me siento extranjero en Montevideo y en cualquier otra parte. En esos días, días sin sol, noches sin luna, ningún lugar es mi lugar y no consigo reconocerme en nada, ni en nadie. Las palabras no se parecen a lo que nombran y ni siquiera se parecen a su propio sonido. Entonces no estoy donde estoy. Dejo mi cuerpo y me voy, lejos, a ninguna parte, y no quiero estar con nadie, ni siquiera conmigo, y no tengo, ni quiero tener, nombre ninguno: entonces pierdo las ganas de llamarme o ser llamado.

Eduardo Galeano - El libro de los abrazos.

“A veces el bajón demora en irse

y yo ando de pérdida en pérdida,

pierdo lo que encuentro,

no encuentro lo que busco,

y siento mucho miedo de que

se me caiga la vida en alguna distracción”.

Eduardo Galeano.

…William, disculpa, sé que cambié todo el plan, pero es por el bien de todos.

… Está perfecto, Pedro, me parece bien, cuando pensaste en lo anterior no tenías cómo llegar a ellos más que por la casa, era peligroso, hay demasiados empleados allí. Esto es mucho mejor.

Termino de ordenar el bolso, y salimos, voy ligero de equipaje, no creo que pueda llevar más que lo puesto en realidad, pero le dejaré el saco a Guillermo, al menos eso llevaré.

Perdona que demorara la ida de todos a lo de tu suegro, es que deseo despedirme, no temas no se darán cuenta, sólo quiero darles un beso por última vez, quizá pueda sacar una foto con el celular.

… Está bien. Yo te saco con todos, no te preocupes, Orestes pasará por ellos en una hora, la casa de él es inmensa, y muy segura, acá no podría dar comodidad a todos, y si Dios quiere que los rescate, necesitarán descansar, la casa del Juez es lo mejor por si esto se prolongara.

… Bueno, amigo, a esta altura lo eres, al menos para mí. Te despido acá, no quiero mostrarme sensiblero, pero  los voy a extrañar, a todos, fueron la familia que perdí, de verdad me encariñé con los chicos, con Gaby, y con vos. Sos un gran tipo, Pedro, Guillermo y Beto también, les deseo lo mejor, sin máscaras.

… Gracias William, sabes que  deseo con el alma que logren escapar, pero estará en tus manos, sé que si el pampeano no me enviaba la carta a Misiones, si vos no me ayudabas, estarían todos muertos, y yo atrapado en el negocio, de verdad.

… No tienes que preocuparte, espero escabullirme, de lo contrario, estará bien también, disculpa que no vaya a ese bar, pero  me estaría entregando.

… Tienes razón, no lo pensé al comienzo, todo el tiempo estamos todos vigilados, no van a provocar una balacera en el centro, no quieren bajas civiles, pero seguirán a Miguel milimétricamente hasta enfrentarlo en cuanto entre a la ruta, si estuvieras allí, no podrías huir.

Suerte, William, ojalá en un tiempo sepa algo de ustedes, que estás ejerciendo de abogado en algún lugar, el pampeano puede ser tu secretario después de todo, quién dice, quizá hasta volvamos a vernos en algunas vacaciones, te deseo lo mejor, de verdad.

No me des detalles, no me digas tu plan, sabes que si me interrogan no puedo ocultar ni mentir, ya bastante tendremos con Guillermo que explicar  ante la Dirección de Estupefacientes, y en el juzgado las falsas declaraciones a las que nos llevó Miguel.

… Entiendo, tranquilo.

__El abrazo llegó espontáneo, como sinceras las palmas en la espalda, y realmente el fuerte cuerpo de William tembló en brazos de Pedro, conmovido, nostálgico, no por temor, le daba igual huir que morir, ya había perdido todo antes, ahora a ellos, a la nueva familia que encontró en la casa.

Descendieron aparentando despreocupación, Fabián  estaba estudiando, los chicos jugando con Gaby, sabiendo que sin preguntas, deberían trasladarse a casa de Orestes, cuando los pasara a buscar.

Sólo Gabriela sabía la verdad, y el corazón ascendió a la garganta al verlos, sabiendo que al regresar, Alberto y Guillermo vendría con Pedro, o no los vería más a ninguno de los tres.

Las lágrimas no terminaron de brotar, agazapadas tras los párpados, cuando desalojó el presagio e intentó la sonrisa.

___Miércoles, 23 de marzo de 2016.

Bs.  As., San Martin.

__Pedro estaba en el laboratorio, ensimismado, preocupado porque el plan inicial no terminaba de cerrarle. No admitirían ni la entrada ni la salida de una ambulancia, aunque William llamara, y le estaba enviando  a las fuerzas al dejarlo junto a Miguel, además en la casa, había personal, de limpieza, cocineros, guardias, demasiados para salir por allí aun en un fin de semana, cuando muchos no iban. Por todo ello había desistido de hacerlo el domingo previo.

De pronto lejano, como desde otro plano, como colándose por una gruesa pared, escuchó el eco de golpes, con el ritmo concertado con Alberto, y de súbito supo que le estaba dando la señal, saliendo de la ensoñación, paseando la mirada para distraer al bioquímico y a los dos técnicos que andaban por allí, agudizó los sentidos, la letanía de suaves golpes lo fue  guiando, estaba cerca, lo sentía en el pecho.

Nadie pareció siquiera escucharlos, pero él los esperaba, hasta que al fin entendió por qué eran sordos, casi no tuvo dudas de estar de pie junto a la puerta que daba a la celda, ensordecida y cegada, por un frízer  inmenso, donde guardaba drogas y reactivos.

Se quedó junto a él, y efectivamente, el sonido estaba detrás, si existía una puerta, estaba oculta por el aparato.

“… !Bien, Beto, amigo, ya te escuché!

Espero que  recuerdes dónde estás golpeando, porque los voy a rescatar por acá, sorteando el peligro de la casa”.

Esperó hasta que todos se marcharon, incluso recibió sonriente a Miguel, que iba y venía sin entender demasiado, y para cuando se quedó a solas, cegó la cámara que tenía frente el sitio, y tanteó el peso del artefacto, pese a su musculatura, apenas   pudo moverlo centímetros.

“…! Mierda, Betito, te necesitaría acá para correr esta cosa, excepto que…!”

Febrilmente como poseso, lo abrió, y comenzó a trasladar el contenido a otros, algunas cosas las desechó, casi nadie tocaba el material si no lo autorizaba, no sabrían que estaba dejando el artefacto sin nada, y para cuando logró  ordenar todo, entonces, no sin su mayor esfuerzo, logró moverlo, y detrás al fin observó un milimétrico corte de la pared, lo que le dijo que debía ser una puerta de cierre centralizado, electrónico como la de ingreso a todas partes, y que necesitaría del control, de descubrir en él qué pulsar para que se abriera esa pared.

Apenas  devolvió al sitio el frízer, dejando oculta sólo la parte del cierre lineal, nadie percibiría que estaba  apenas más hacia un lado que antes.

En los días y a distintas horas que siguieron,  Alberto continuó dando señales, ya estaba seguro del túnel, o lo que fuera eso que lo llevaría a la celda, y también entonces supo, que tendrían que huir, desde allí, por el laboratorio, olvidando de pasar por la casa, donde no podrían reducir a todos, además de que saliendo Miguel, seguramente estaría con las puertas de ingreso cerradas, y la custodia afuera.

Sólo necesitaba que William le diera un control, y que desde la celda, burlando al perro, Guillermo y Beto localizaran a la inversa, el sitio de comunicación, para lo cual  necesitaría avisarles del cambio de plan, de fecha, de todo, sin embargo no deseaba levantar sospecha a último momento, volviendo a entrar.

Esa misma noche habló con William, y acordaron el nuevo plan, que al día siguiente fue a relatarles a ellos en parte, dejándoles armas y la carta, mientras Pedro estaba en el laboratorio.

Jueves, 24 de marzo de 2016.

…” Amor, perdón, desistí de sacarlos por la casa, es muy arriesgado, y al oír los golpes que hicieron, localicé el  acceso desde el laboratorio.

Necesito que  mantengan la calma, y todo si Dios quiere estará bien.

Lo haremos el sábado, a la tarde, muchos  ya salen de franco hasta el lunes, en el laboratorio puedo estar solo.

No expondré a William a encontrarse con Miguel, seguramente Orestes ha dicho la verdad a la gente de la DEA y del FBI, y lo siguen a todos lados, en cuanto lo vean sin mí, lo apresarían con Miguel, o más, al menos creo que tanto él como el pampeano, merecen la oportunidad de huir, si lo logran o no, no lo sabremos, pero no quiero entregarlo en bandeja.

Citará a Miguel como dijéramos, pero no irá al bar,  será solamente para sacarlo de allí.

Seguramente pensarán que lo bueno sería reducirlo, dejarlo servido en la casa, pero lamento que estando allí, los guardias  nos impedirían la huida, intentar salir por la casa, con los guardaespaldas  de Miguel allí sería suicida.

Beto, amigo, necesito que sepas dónde golpeaste, dónde está la puerta allí, debe estar oculta, son centralizadas en el cierre, fíjate en la mano del perro, debe abrir y cerrar desde algún control remoto, allí mismo debe tener el pulsar para la puerta oculta, apenas se distingue, si es como la que está acá, es una línea.

William no irá a la cita con Miguel, entrará a la propiedad a mi lado en el coche, como un día más, sólo que al salir, quien estará a mi lado, serás tú amor, y Beto atrás en el piso o en el baúl.

Me dejará su saco, su ropa, y el control para entrar y salir de la celda, del laboratorio, él se irá caminando, no pregunto cómo, tampoco  a qué lugar, sospecho que intentará salir caminando burlando el cerco, o antes que se forme por las fuerzas, y que el pampeano lo esperará cerca, pero no lo sé, nos ayudará hasta allí, entrará conmigo,  me dará su ropa, el control, tendremos muy poco tiempo,  va a entretener a Miguel con excusas, pero no tardará mucho en perder la paciencia y emprender el regreso, no sé dónde lo interceptarán, además, deben reducir al perro.

Amor, sé que no quieres el arma, que dirás que ni siquiera sabes usarla, sabes. Recuerda que Matías me dio cuando huimos a Brasil, y que practicamos. No estoy diciendo que maten, Beto, amigo eres fuerte, sé que puedes calcular un golpe certero y dormir al perro, como para quitarle el control y darte tiempo de abrir, y de que podamos salir,  quédatelo, al despertar quedaría entrampado allí, hasta que ingrese, otro, o ya el ejército.

En resumen,  trata de localizar el acceso que se una a mí, a las 20.00 horas del sábado daré un golpe en mi acceso, será la señal, amor, simula el infarto, lo que te expliqué, para que el perro vaya a ti, y Beto lo duerma, de inmediato abran, yo lo haré desde acá.

 William llevará con excusas a los dos guardias de la puerta del laboratorio, el auto estará  justo allí, no es más que cruzarlo, y subir, luego pasar el portón,  no tendríamos que tener dificultad ninguna, los guardias apostados en la casa, ya verán el coche, como al llegar, y tú llevarás la ropa de William, Beto será invisible.

Si por algún motivo algo saliera mal, usen las armas, nadie los condenará por defenderse, no tendremos otra oportunidad, es el sábado o nunca.

 Amor, aférrate a la imagen de Fabián, Beto a la de Julito, a la de Gaby, tenemos que escapar, en cuanto salgamos de la propiedad, a menos de un kilómetro dejaré liberada la ruta, tengo otra alternativa para llegar a la Panamericana, por si Miguel regresara y es interceptado en el sitio, ya no cruzaremos con él ni con las fuerzas.

Estaré solo, Matías no será de la partida, lo pensé mejor, no lo expondré ni directamente a William ni a él, y estará con la familia esperándonos, en la casa de Orestes, allí nos encerraremos todos, hasta que el operativo finalice.

 Beto, busca  en los lugares que golpeaste, debiste sentir eco diferente en el sitio, piensa. Amor, no temas, es la última vez, hemos pasado por todo desde que llegaras a Misiones, por la culpa de Miguel, puedes con esto también.

Beto, sólo duerme al perro, no te pases de no ser necesario,  tenemos urgencia en salir, porque Miguel puede sospechar y llamar a la garita alertando de movimientos extraños, pueden bajar, eso nos urge a salir, pero creo que estaremos sobrados de tiempo, además no verán nada raro,  si salgo en el coche, contigo amor.

El sábado, a las 20.00 horas.

Cualquier día antes, luego de las 20, ya me quedo solo acá, golpea si encontraste la puerta, será mi señal de que todo puede ser el sábado, yo ya la tengo.

___Amor mío, necesito de tu sonrisa sensual como esperas la mía pícara deseándote al mirarme, recuerda cada locura, las locas ganas de besarnos, de llagarnos con las caricias, las uñas, desgarrando la piel hasta ser uno.

De una vez por todas libres, seremos en días libres por primera vez como nunca lo fuimos, para amarnos y para nuestros hijos que se adoran, para formar la familia que merecemos.

Sueño con las cosas simples a tu lado,… cocinar, mirarte, besarte, acariciarte, soñarte lo hago cada noche, necesito verte, palparte a mi lado en la cama, o verte dormir a mi lado, ahora sólo puedo soñarte, imaginarte, a veces tomando prestada la imagen de William, pero no tiene tu olor, no bebo tu sabor, no me embriago de ti, de esa mirada que parte de los ojos colmados de ternura, de amor, de tus besos llenos de  miel, necesito esos momentos de inquietud previos al amarnos, necesito despertar amándote más, hacerte el desayuno, llevártelo a la cama, el beso del despertar, el último de cada noche, mi otra parte.

Hoy eres un recuerdo dulce y amargo, dulce porque nos pertenecemos para siempre, sin tiempo, sin espacios, ni distancias, amargo porque no puedo percibirte a mi lado, junto a Fabián, a José.

Piensa que el sábado los abrazarás, en los brazos continentes te reconocerán, y al fin en poco más seremos libres para recomenzar.

Nunca tu hermano nos dejó, siempre marcó el ritmo, fuimos sus marionetas, más yo cumpliendo su voluntad desde que me conoció, pero el  sábado o el lunes, muy pronto, sé que Miguel será pasado, apenas tu mala sombra, que un día ya ni siquiera podrás recordar, desaparecerá hasta como tal, lo prometo, no puede no pasar.

___Beto, Gaby te ama, te espera, tu hijo y el mío son como hermanitos, Fabián de los dos, como debe ser, amigo, te esperan, como yo a Guille.

Hasta que todo pase, anclen en el Amor.

Te amo, Guille. El sábado dormirás a mi lado al fin, lo prometo.

Pedro”.

…Guillermo, Beto, ya me despido, no volveré a verlos.

Este plan es bueno, ayudaré a Pedro hasta el final prácticamente, haré lo imposible para ganar tiempo con Miguel fuera, me llevaré a los hombres que pueda, después de todo quizá les salve la vida.

Y espero que finalmente Miguel vaya a reclusión, sé del daño que viene haciendo, desde hace mucho.

… Gracias por todo, William, por no haber abusado de Pedro, por haberlo ayudado, por haber tratado bien a los chicos, por haber frenado a Miguel, ojalá puedas salir de acá, recomenzar.

… Guillermo, Alberto, tienen una familia de oro, los dos, y son una, el estudio por entero es una familia a la que suma Pedro y Josecito.

Creo que deberás llevarlo a pescar, me lo pidió, prefiero que lo lleves al regresar, me enteré que te enseñó en Misiones.

… Así es, yo de bichos, pesca, picnic, campo, etc., no sabía nada de nada, les tengo pánico, pero por Pedro, y obligado por mi hermano, he hecho de todo este tiempo.

Suerte socio, cámbiate la cara, sé vos mismo, ya para Graziani estoy yo, dos, son multitud, ¿no Beto?

… La verdad, una tortura, sí. Con uno como Guille, sobra.

___Los abrazos y las palmas se dieron simples, mientras el perro estaba fuera, y en silencio, ya William los miró desde el umbral al abrir, confiado en que no  iban a fracasar frente al mal.

___Las lágrimas eran una cortina en los dos, el rostro enrojecido en ellas y en la adrenalina de los minutos amontonados, que comenzaban a correr en descuento, en el temor, en la esperanza, y Beto sin palabras, paseó la mirada por la celda, los ojos claros de súbito se clavaron, Guillermo observó la pantalla, sin embargo se veía el estudio vacío, a esa hora a oscuras, entonces los dos intuyeron lo mismo.

…¿Qué sucede, Beto?___ Guillermo lo vio ponerse de pie, con la mirada fija.

…! Qué pelotudos! Claro, no hay otro lugar donde ocultar una salida más que detrás de la pantalla, está allí, Guille.

…¿Golpeaste desde allí?

… No exactamente, porque está esa mierda, al lado, eso escuchó Pedro, la salida está detrás, pero necesito poder desconectar la parte eléctrica, encontrar la conexión, cuando salgamos, la pantalla la haré añicos a trompadas, hazme de campana, quiero asomarme con cuidado,  ver  el cierre sutil del que habla Pedro.

Guille…

…¿Qué?___  con el corazón en un puño.

… La encontré hermano, está tras la pantalla, lo sabía.

Sábado 26 de marzo de 2016.

Provincia.

.. Viejo, ¿estás bien vos?

Te noto extraño, emocionado, no sé.

¿Se casan y no me enteré?

… No Fabi, no pasa nada, está todo bien, saldremos un rato, al regresar sabrás la verdad, ahora te pido que hagas todo lo que Gaby te indique.

…Pero, entonces pasa algo.

¿Por qué debemos llevar ropa de todos a lo de tu ex suegro?

.. Confía en mí, ¿puede ser?

… Confío, pero siento que me perdí bastante, y Gaby sabe, yo no.

..!Papi! ¿Cuándo vuelven? ¿Cenamos juntos?

___Pedro se acuclilló frente a José, la paseó los dedos dibujando el rostro, disimuló las lágrimas mirando hacia arriba, como pidiendo a Camila que lo cuidara, y al fin lo estrechó incrustándolo en él, acariciando la seda del pelo, mientras Gaby apenas lograba contener el manantial que deseaba echar  en llanto, y William rompió el momento, pidiendo la foto.

…¿Ves que estás raro, vos? Nunca quisiste sacar fotos con celulares, odias las fotos.

… Una hijito, desde que estamos todos acá, no tengo, no tenemos fotos de la nueva familia.

… Es verdad, pero bueno sería, por ejemplo que se comprometan, hagan…perdón Gaby, nada, no dije nada. Cuando Beto aparezca, haremos la fiesta que merece, y sacaremos fotos, o mejor, él hará el asado de siempre en el estudio y filmaré.

… Gaby, lleven ropa de todos, ya sabes, arriba está abierto, en  un ratito llegará Orestes, o quizá Matías, no salgan si no es con ellos, y sí precioso, dormirás hasta que papi te despierte, para cenar, irás a lo del abuelo, pero si Gaby les dice de dormir, dormirás con Julio en tu habitación, cuando papi regrese, te despertaré para la cena.

… Bueno, ¿lo prometes?

…Lo prometo campeoncito, mira, el abuelo, llama.

¡Hola, Orestes! Estamos saliendo, sí, a las 20.00  horas en teoría espero  estar en la ruta, tengo en claro que los llamaré cuando haya salido de la propiedad.

No me cuentes nada, confío en ti, Chao.

… ¡Pedro!

… Fabi, nada, no te preocupes, en la cena te contaremos todo.

…¿Tiene que ver con mi tío o con Beto?

…. Con Beto, sí, Fabi, tranquilo, o me pondré nerviosa yo, y necesito estar lo más calma que pueda por los chicos, ¿me ayudas?

… Ya sabía que algo pasaba, está bien, listo, no los demoro más.

___Pedro estaba  manejando el último tramo antes de la propiedad en San Martín, estaban ya en tres de febrero, cuando sonó el móvil de William.

…¿Miguel?___ preguntó lo obvio.

… ¡Hola, Miguel, disculpa!

Me retrasé, Fabián y el nene de Pedro quisieron sacar fotos, y otras cosas, se me hizo tarde, ya salgo, pasea un poco por las peatonales, es de noche, sábado, aprovecha, en media hora llegaré.

…¿Seguro? Mira que los muchachos están algo nerviosos, además no sé nada del pampeano, es raro que no me acompañara, pero llamé a la casa, y está todo bien allí, sólo que no estoy, ni él, ni ustedes.

.. No pasa nada, relájate, en un rato estaré allí. Chao.

Vamos, Pedro acelera, en media hora volverá a llamar, le diré algo más, pero no podré retenerlo demasiado, cuentas con el tiempo del viaje desde el centro para sacarlos, y yo para escabullirme.

Recibiste la señal de Alberto ¿verdad?

… Sí, encontró seguramente la puerta, o la boca, pareciera puerta.

__Pasaron el control de la guardia que al reconocer el coche abrió el ingreso desde adentro, igualmente Pedro tenía otro control que ya William le había dado.

… Llegaré con el auto hasta el ingreso al laboratorio, William, saluda a los guardias al pasar por la casa.

… Está bien, mejor para mí irme desde allí, el pampeano me espera.

…. No me digas nada.

___Pedro pasó junto a la casa, siguiendo el sendero hasta el final, donde estaba el ingreso a los laboratorios, mientras William se sacaba la campera, la camisa, y se cambió en el auto,   dejando allí la ropa para Guillermo, apenas se colocó una remera, y encima otra campera.

… Cuidado con las cámaras, Pedro, un movimiento en falso y los verán desde la casa.

… Descuida, las cegaré. Nos moveremos por el piso, sé dónde están, si desconectáramos la luz, nos detectarían las  de infrarrojo, y alertaríamos más a los guardias de la casa,  no creo que se encuentren monitorizando la celda estando adentro el perro, pero un movimiento en el laboratorio, y nos detendrán en el acceso.

… Toma, el control, ya sabes donde  pulsar para abrir el laboratorio, y para abrir la puerta, ¿seguro que  arrastras el aparato?

… Sí, ya esa cámara la averié, no dije nada, no se han dado cuenta, está ciego el sector.

… Bien. Bueno, te dejo la ropa, el control, llevo el teléfono, poca ropa, y si llama Miguel, lo demoraré algo más, toda la suerte amigo.

…. Suerte para ustedes, la necesitamos por igual.

___El último abrazo fue en el auto, William bajó, pero esperó ver entrar a Pedro al laboratorio, no llamaría la atención, siempre venía los feriados y fines de semana, cuando lo perdió de vista, miró la casa, aspiró, y supo que debía internarse urgentemente en el parque, antes que las fuerzas de seguridad todas siguiendo a Miguel rodearan la zona, aunque sabía que igualmente debía pisar con cautela, que a ellos también los seguían, confió en su instinto para huir, en las luces de infrarrojo, esperando que el pampeano estuviese apostado con el coche en la ruta acordada, para acelerar rumbo a la avioneta, intentando despegar antes que llegaran siguiendo a Miguel todas las de la Fuerza aérea, aunque igualmente podrían ser interceptados.

19.50 horas.

__Pedro con disimulo, se colocó el guardapolvo que siempre usaba, haciendo movimientos cotidianos, sólo en el último instante abriría la puerta terminando de correr el frízer en un movimiento.

--- Guillermo se internaba en los ojos claros, esperando el alerta para fingir, ya había manifestado al perro que no iba a cenar, por un malestar inespecífico en el abdomen, y Beto tampoco pidió nada, por primera vez en su vida supo que no le pasaría bocado alguno.

Palparon las armas que tenían bajo el colchón, Beto en un movimiento la colocó en el pantalón, en el bolsillo de atrás.

…Perro, ¿qué hora es?

… ¿Qué pasa Marini? ¿Te levantaste a alguna mucama y te espera?

… No te pases de vivo, ¡infeliz!

… Beto, tranquilo. Perro, ¿qué hora es? ___ Guillermo le habló con la calma que estaba perdiendo.

…. Casi las ocho, las 20 como dicen ustedes.

__Las miradas chocaron, Guillermo empezó el teatro, sabiendo que debía ser convincente comenzó a tomar hondas bocanadas de aire, resoplando tan sonoramente que el perro lo miró.

…¿Qué le pasa Don Graziani?

… No lo sé, te dije que no quería cenar, me falta el aire.

…! Guille! ¿Qué pasa? A ver, despréndete la camisa__ Beto fingió preocupación, mientras la mirada paseaba por el perro furtiva.

… ¡Uy, no!, me duele el pecho.

… Guille, no me asustes, era el estómago, no el pecho.

___Guillermo se tumbó en la silla tomándose el esternón, mientras el perro estaba atónito a mitad de camino.

… Tengo como un elefante encima, Beto, creo que me voy a morir, hermano.

… ¡No, Guille, no!

¡Infeliz, llama a un médico! ¿No tienen a nadie acá?

… El amigo de ustedes, en el laboratorio, nada más, si vino.

… ¿Pedro?

… Él.

…! Qué infelices son!  ¿Qué Mierda haces parado?

 ! Búscalo!

… No tengo órdenes del patrón, y salió, no está ninguno de los jefes dijeron desde la guardia, sí, llegó el Sr. William, con el Dr.

__El perro estaba aturdido, Beto, aprovechó a asegurarse que el control estaba en la mano, y lo llamó.

.. Ayúdame a recostarlo___ Guillermo se retorcía en su fingido dolor, mientras la respiración era jadeante, simulaba como quedaba haciendo el amor, estaba pensando en Pedro para representar el papel, que del otro lado, ya empujaba el frízer.

___El perro mirándolo a Guillermo compungido, porque en esos días había empezado a apreciarlos, se acercó, se inclinó,  Beto con pena, porque también lo lamentaba, hubiese deseado descargar el arma en Miguel, ….,  pensó en Gaby, y en una exhalación levantó el arma y le dio un golpe en la nuca, el perro clavó la mirada en Guillermo, que viendo que iba a caer, se levantó,  mientras Alberto le quitaba el control, empezó a pulsar, a intentar dar con el indicado, abrió la celda, cerró, tocó el segundo, y de pronto fue el grito de Guillermo lo que le dijo que había acertado.

…! Pedro, mi amor!___ Pedro había destrozado la pantalla desde atrás.

… Lo lograron, vamos, Beto, vamos, trae el control, lo podemos necesitar, ven amor, dame la mano, al piso en el laboratorio, debemos reptar hasta salir, por las cámaras, vamos.

___Beto estaba saliendo, el perro desmayado, y Guillermo y Pedro se unieron  en un beso, ansiado, anhelado, desesperado, cuando Marini los devolvió al mundo.

… Che, paren que quiero ver a mi mujer, vamos, Pedro   marca el camino.

__Reían y lloraban, pero estaban adentro todavía, al llegar al laboratorio, Pedro había apagado las luces, como indicando que se iba,  reptaron por el piso, Guillermo y Beto siguiéndolo, el corazón latía desbocado en los tres, la adrenalina corría a raudales en la sangre, pensaron que los oirían desde la casa, cuando al fin Pedro pulsó el control dejando cerrado el acceso a la celda, se incorporó para correr el mueble, y volvió al piso.

…! Cielito, te paraste!

… Tranquilo amor, cegué el sector, vamos, a la puerta, síganme, ahora sí, no se eleven del piso, hasta el coche.

…Cuando pulsó nuevamente…. la puerta se abrió,  Guillermo acarició agradecido el aire al fin del exterior, la cachetada sabía deliciosa, detrás llegó a Beto., y sin más, salieron  hasta el Sonic que estaba a un metro.

…! Beto, échate en el piso de atrás, en al baúl no entras!

Amor, sal con naturalidad, eres el jefe, recuerda, en el auto te cambias agachado, y si nos hablan al llegar o al pasar por la casa, eres William, recuerda.

… Sí__ temblaba pese a las veces en que habían huido, y  enfrentado secuestros, ésta era la peor.

Beto se escabulló al piso del coche, Guillermo extasiado mirando incrédulo el rostro de su amor se cambió la camisa, la cubrió con la campera aunque le faltaba el aire,  Pedro encendió el motor, y aceleró, mirando de reojo la hora.

Paseó una última mirada, y no había rastro alguno de William.

Saludó con la mano a los guardias de la casa, cuando al llegar a la garita, los detuvieron los otros dos, y los corazones ascendieron a la garganta.

… Beto, alerta,  puede que llamara Miguel. Déjenme a mí.

… Dr. ¿Se van?__ Guillermo miraba para el afuera, tratando de pensar que era su doble, imaginando la tortura de William tomando su lugar.

… ¿Sucede algo?

… No.  Solamente que llamó Don Mendoza, lo esperaba jefe en el centro, pero dijo que si estaba acá se venía.

___Guillermo se sacudió recordando que eran idénticos, miró al tipo y habló.

… Dígale que perdone, lo llamaré.

… Pasa que debo irme, tengo una urgencia, estoy de guardia en el hospital___ Pedro mintió sereno___, y me llamaron, íbamos a cenar acá como el sábado pero debemos irnos, dígale a Miguel que disculpe.

… Está bien, Dr., le diremos cuando llegue, entonces.

… Adiós.

___Cuando las puertas se abrieron y Pedro aceleró a 100 km/hora, Beto se asomó, Guillermo exhaló el aire que estaba reteniendo, llorando lo miró.

…Cielito, ¿eso qué fue?

…¿Qué cosa?

… Lo que dijiste, no sabes mentir.

.. Aprendí amor, cuando se trata de los míos, y por Miguel he mentido en todos lados, ya veré cómo me saca de encima mi suegro a la policía, pero en minutos tomo la ruta, Beto, la radio, abajo del asiento, busca, pásamela, debo dar la señal.

…¿Qué señal?

… A las fuerzas, llamar.

¡Avisar que somos libres!

___El grito de Pedro reverberó en el auto, en los tres, y se abrazaron llorando al tiempo que entraba en una ruta lateral.

CONTINUARÁ.

HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS, CUALQUIER, PARECIDO CON LA REALIDAD ES MERA COINCIDENCIA.

LENGUAJE ADULTO.