"EL VIAJE". CAPÍTULO 107.

 “EL VIAJE”

CAPÍTULO 107.

AUSTRIA, VIENA, 28 DE MAYO DE 2016.

“Todavía

No lo creo todavía
estás llegando a mi lado
y la noche es un puñado
de estrellas y de alegría

palpo gusto escucho y veo
tu rostro tu paso largo
tus manos y sin embargo
todavía no lo creo

tu regreso tiene tanto
que ver contigo y conmigo
que por cábala lo digo
y por las dudas lo canto

nadie nunca te reemplaza
y las cosas más triviales
se vuelven fundamentales
porque estás llegando a casa

sin embargo todavía
dudo de esta buena suerte
porque el cielo de tenerte
me parece fantasía

pero venís y es seguro
y venís con tu mirada
y por eso tu llegada
hace mágico el futuro

y aunque no siempre he entendido
mis culpas y mis fracasos
en cambio sé que en tus brazos
el mundo tiene sentido

y si beso la osadía
y el misterio de tus labios
no habrá dudas ni resabios
te querré más
                  todavía.

Mario Benedetti”.

___Guillermo alargó el brazo medio dormido aún, buscándolo, sentía frío, deseaba acurrucarlo  y sin embargo para variar, la sábana fría le dio la bienvenida, no estaba ya en la cama.

A regañadientes, abrió los ojos resignado, no lo vio, y buscó la ropa  en el piso, tampoco estaba, entendiendo algo desilusionado, que mejor sería ir a la ducha, pasando por la cunita, pero al hacerlo, gloriosamente desnudo, ver que  los chicos tampoco estaban en su lugar.

“… Pedrito, otra vez desaparecidos, y yo dormido, ni siquiera recuerdo en qué momento de la noche, o del alba me dormí, menos sé qué hora es, pero necesito tomar conciencia de mi propio cuerpo en la ducha, ya que no estás acá.

Espero que no hayas secuestrado a los chicos para ir a hacerles pruebas de vestuario, porque al regresar, te mataré.

No te atreverías, no. Supongo que no”.

__Dejó de protestar en el recuerdo de la noche,  de ciertas cosas que para otro pasarían desapercibidas, pero no para él, no con Pedro.

“:.. Te conozco en cada detalle, precioso, nunca imaginé saber de memoria a alguien en la época en que no veía a ninguno, simplemente los tomaba. En cambio de vos, lo sé todo, con todos los sentidos te amo, y sé que vos igual. Sé que tu cuello no huele igual que tu pecho, que en el hombro tienes lunares formando una estrella, que la piel en el diamante es más rugosa que la seda del resto, que cuando susurras los te amo, la voz parece de jovencito.

Sé que tos ojos tienen un halo verdoso en torno a las pupilas sobre el marrón, que justo debajo de la nuez de Adán, en el hueco entre las clavículas, cuando te acaricio te disparo una sonrisa que no veo en otros momentos.

Y podría seguir milímetro a milímetro de la cabeza a los pies”.

__Se encontró en las palmas el rastro del aroma mezcla de madera y canela, de él, y las paseó con la huella de Pedro en sus propios hombros, no sabiendo si ir a la ducha, y quedarse con su esencia un rato más, hasta desayudar o saber de él, mejor dicho de ellos.

De repente, como en los viejos tiempos, observó en la mesa de noche la pista, la nota con el garabato escrito a las apuradas, y sin buscar los anteojos, lo intentó leer desde mayor distancia.

“…Mi amor, estaba apurado, y bajé con los chicos a desayunar, dormías sonriendo, me dio pena despertarte, pide tu desayuno, que ya regresaremos, espéranos. Te amo. Pedro”.

“…! Qué gracioso, precioso! Espero que regresen, pero ¿dónde están es el tema?

¡Apurado estaba! No, esto me dice que hoy lo voy a asesinar. Mi peor pesadilla debe ser real, se fue con los trillizos a medirle trapitos, para bautismos, cumple mes, años y más, o lo peor, fue a comprar más valijas”.

___No obstante besó la huella de ternura que le había dejado, y pidió el desayuno, antes de ir a la ducha, en bata lo recibió, y mientras degustaba la mermelada  a cucharadas como le  fascinaba, sonreía imaginándolo pese al enojo, sin dejar de mirar a cada instante el reloj, controlando el tiempo en que estaría sonriendo encantado a las chicas del shopping, y la sonrisa se le desdibujó.

Salía del agua, envuelto en el toallón, cuando lo sintió abrazándolo desde atrás, paseando los labios en el cuello, y disfrutó del escalofrío que le causó, llevando las manos al pelo revoloteado por la brisa, mientras Pedro en susurro le  habló, para evitar la segura protesta, llenando apresurado el silencio, con caricias imprudentes, y besos en el cuello, en la oreja, dejándolo indefenso como sólo él podía.

Le había enseñado a que sus sentidos despertaran, que un sonido despertaba a la piel, un aroma a la mente, que un color viniera con un sabor, y la voz, lo recorrió por entero como una remolona caricia.

…! Buen día hermoso!

…¿Siempre saludas así a los hombres vos, atorrante?__ con voz suave, olvidado del enojo o de los causales.

.. A los que admiten el calificativo, sí, no es cuestión de andar por la vida malgastando piropos o palabras.

… Yo diría que no es cuestión de andar malgastando plurales, ¿desde cuándo los usas? ¿Qué es eso de “los que lo admiten”?

… Ya Guiie, a partir de hoy, descartaré los plurales de mi vocabulario, será complejo, pero lo haré.

..Shhh… no prometas lo que no puedes cumplir. No tengo pretensiones___ socarrón___, casi.

.. El casi, lo podríamos remediar. ¿Desayunaste?

… Sí, ¿adónde se supone que dejaste a los chicos?

… Con los abuelos, hoy no habrá excursión ni trillizos, ni nada.

… ¿Cómo?___ Guillermo sintió un cosquilleo significativo en el vientre donde las manos de Pedro estaban haciendo estragos, mientras ante la audacia la voz tembló.

…Vístete, es una sorpresa, quiero pasar el día a solas con mi bello marido. ¿Te gustaría?

__Guillermo suspiró, Pedro no se apuró por llenar el silencio, de nuevo no encontraban palabras para imponer el control, cediendo riendas y armas al otro, y Guillermo se dejó llevar, como haciendo la plancha al sol. Pedro se echó en la cama disfrutando del panorama de verlo vestirse, sonriendo y  dibujando cada milímetro de su esposo con la inquieta mirada.

__El día los sorprendió soleado, cálido, y un coche esperaba en la puerta del hotel, subieron, y sin dudas, Pedro dio una dirección, Guillermo no supo si preguntar o callar, tratándose de su esposo podría ser un shopping más, un palacio, o una fiesta, luego de lo que llevaban haciendo desde dejar Bs. As. , de haber  pasado días sobre el agua en Venecia, estaba resignado a todo.

Para su sorpresa, el coche se acercó cada vez más a un sendero lindante al Danubio, que discurría presuroso en su cauce, magnético en su belleza, y  Pedro abrió las ventanillas aspirando un aroma mezcla de agua y flores, que los hipnotizó.

El coche se detuvo frente a una cabaña, en una propiedad rodeada de flores, de césped,  junto al Danubio, Pedro pagó, y fue a abrir la portezuela a Guillermo que incrédulo descendió cuando le tendió la mano.

…¿Y esto? ¿No me digas ahora que compraste una casa en Viena, que fue de algún Archiduque y todo eso?

…. No amor, no es mala idea, para regresar con el familión que tenemos, pero no la compré, la alquilé para pasar el día con mi esposo, ¿te gusta?

___Guillermo se sintió como quien abre las páginas de un libro nuevo, y se dejó llevar al interior de la casa, antigua, remodelada, con ventanales que dejaban ingresar el sol, la luz a raudales, quedó hipnotizado con la vista al parque y al Danubio más allá, y por delante con su adonis perfecto regalándole sonrisas y hoyuelos.

…¿Te gustaría un pollito al horno con hierbas, papas y Cabernet?

…¿Desde cuándo cocinas, atorrante vos?

No tengo ganas de estar acá para ponerme a cocinar.

… No señor, error, hoy usted es el agasajado,  me encargaré de la comida, de la bebida y del postre, del paseo  por la senda junto al Danubio, y de todo lo que el rey quiera a de su siervo___ bajando la voz, hasta lo más profundo del vientre de Guillermo, que antes de poder emitir un sonido, hizo un guiño al destino que le estaba regalando  a ese hombre.

__Guillermo lo observó divertido en la cocina midiendo y sopesando ingredientes, condimentos, hierbas y el pollo, pero el aire se le iba cada vez que se movía, provocándole sensaciones de toda clase y colores.

… Chiquito, ¿no podías traer a los trillizos?

… No mi amor, es una salida de novios, a solas,  como cuando furtivamente escapábamos en el yate y nadie sabía de “esto”___ haciendo el gesto con los dedos, que Guillermo moría por devorar.

Además estoy practicando extrañarlos, para saber si soportaremos estar sin ellos en el otro viaje.

… Yo no los extraño para nada, es más para escuchar a las nenas pedir galletas y chocolate, que las críen las hermanas, aunque debo reconocer, que ayer estuviste algo duro con ellas, las volviste adictas, y les quitaste de súbito la droga.

___Pedro lo miró disgustado.

…! No empieces, Graziani! Yo no he drogado a nadie.

…Bueno, no te enojes.

Ahora que lo dices, hace siglos que no salimos en el yate, al regresar de Chile, podríamos.

… Ir al estudio debemos, o Marcos nos denunciará por acoco laboral, Guiie, hemos hecho abandono, ya basta, luego de un tiempito, en la primavera pensaremos en el yate, ahora confórmate con ir a Chile, y no causar otro terremoto.

… Ya no les temo, si tienen el efecto del primero, bienvenido.

… Muy gracioso, ve a descorchar el vino, mejor, así almorzamos y vamos a caminar  por la senda junto al río.

… Me quedo más tranquilo, por un momento pensé en que ibas a querer nadar en él.

…  Me encantaría, pero no sé si se puede, no quiero tener un accidente a horas del vuelo a Argentina, sí tomaremos algo de sol, está hermoso el día, y al llegar, estaremos en invierno.

__Cuando se sentaron en la mesa con vista al Danubio, el aroma mezcla de la bandeja y del césped con las flores, pensaron estar en el séptimo cielo, sin llantos de bebés, ni grititos, ni papis y papás, solos como hacía mucho.

…¿Y?

¿Te gusta?

… Exquisito mi amor, como vos, un poquito menos. No sabía que cocinabas así, lo tendré en cuenta al regresar.

… Hay mucho que no conoces de mí, Guiie, la verdad, no siento picazón de los años de estar a tu lado, me siento como el primer día.

…¿Picazón? ¿En la luna de miel? Eso se siente en el séptimo año, no llevamos ni el segundo descontando tu huida.

… No huí, no pelees, bueno a los siete, no lo sé, peleamos a veces demasiado, pero es llevadero.

…! Llevadero! Me dejas muy tranquilo si piensas que esto, es llevadero, en la luna de miel.

A todo esto, ¿Qué estás por pedirme a cambio de esta comida, este paisaje y un día a solas?

… Mira que eres malo, nada.

…! Pedro!

… Pedirte, nada. Te diré algo.

… ¿Me tengo que preocupar?

… Siempre te preocupas, por lo tanto lo diré igual. Guiie, no es un capricho lo de los chicos, la ropa, el negocio en Bs. As.

Una vez hace mucho, cuando llegué al estudio, cuando entraste en pánico en el baño, me dijiste que alguna vez,  comprarías una casita en Tigre, porque algún contacto con la naturaleza debías  tener, y era una manera de comenzar.

…¿Entonces? ¿Qué tiene que ver mi fobia al campo, la tierra, los bichos con los trapitos que pretendes que usen los chicos, las chicas mejor dicho?

… Yo no pretendo nada, deseo que puedan elegir, primero, segundo, lo de la casita lo cumpliste, tenemos no una casita, una mansión en el Delta, que no me parece mal, gracias a ella, fuimos casa de acogida, y en esa función encontramos a las chicas, Gaby, Juan, José a los suyos, ayudamos a mucho niños en ese caso.

Sigo sin entender.

… Bueno, sigo. Dijimos entre los dos, que si dejáramos la abogacía, tu pondrías una mercería, yo creo dije una panadería, etc., en lugar de eso, pensé en la casa de ropa, por los muchos niños de la familia y amigos, pero también por algo más.

… Momentito, no pienso dejar el estudio, ¿acaso vos quieres irte?

… No amor, ¡cómo voy a dejar tan joven mi profesión!, no dije eso, quiero sumar, dinero, pero no para nosotros, nos sobra holgadamente por ahora.

…¿Entonces? ¿Por qué no te decides a buscar Editor y publicas el libro si quieres buen dinero?

… No fue la idea original, el libro es íntimo, es un regalo nuestro, para la familia, para los amigos, lo otro es diferente, quiero crear, una fundación, solventarla desde el negocio, y  tener un hogar de tránsito, o refugio  o los dos, para chicos de la calle, y para chicas rescatadas de la trata, permanentemente, ya nuestra casa se llenó con los nuestros, Fabi, Gaby, mis padres, ¿entiendes?

__Guillermo le tomó la mano besándole los nudillos con ternura, estaba viendo al pequeño en Chile huyendo del maltrato de Alberto, era  el hombre fuerte de hoy que luego de vencer a la muerte, a los juicios, a la invalidez, deseaba ayudar a esos chicos.

…Amorcito, eso lleva tiempo  además de dinero.

… Lo sé. No estaría yo al frente, o debería dejar el estudio, la idea, es que tengan escuelitas, comedores, y un poco que todos los apadrinemos, Juan, José, Gaby, con Beto, nosotros, y formar una sociedad, o la fundación, supervisarlos, pero contratar personal especializado. ¿Qué opinas?

… Que te amo, que sos una cajita de sorpresas, no de Pandora, de sorpresas buenas, que me hiciste crecer, ser mejor persona, que sos lo mejor que me pasó en la vida, eso opino.

…! Gracias amor! Sabía  que lo ibas a entender. No sabes lo importante que es para mí, para la gente que podamos sacar de esa porquería, como sacamos a las chicas, a las nenas, a José.

…Imagino lo importante que es para vos, claro que lo haremos, aunque igualmente requiere de tiempo, pero podremos, somos multitud en el estudio, pero te diría que esperemos al año próximo, porque las chicas están embarazadas, una se atrasará en dar las últimas materias, la otra estará de licencia, y Marcos nos va a cobrar los viajes.

… Está bien, esperaremos a que estemos todos en el estudio, no te preocupes.

¿Vamos a pasear y a ver luego el crepúsculo? A  la noche regresaremos, no quiero que los trillizos pasen la noche sin nosotros.

… Me parecía, vamos a dejar esto en la lavadora, pero yo vine con lo puesto.

… Te traje el bañador, evasor.

… Tontín, lo imaginaba, como ya alucino con el trapito que debe ser el tuyo, ¿amarillo o verde?

…Te odio, Graziani, para ti sí puedo usarlos, para el mundo no.

… Como debe ser. Obvio.

___La tarde los encontró caminando por el sendero junto al Danubio, luego tumbados mirando el crepúsculo, en medio aceptaron el baño de sol que Pedro deseaba, y se tentaron mientras sonaba de fondo “eres”, con las caricias del mapa al colocarse protector.

…Eres y seguirás siendo lo que más quiero, amo en este mundo, eso eres, Guiie, pese a las fobias, a los rezongos, compré el paquete completo, y no habrá picazón ni al séptimo ni a los veinte años, siempre te amaré.

… No estaría tan seguro, crisis las tiene cualquiera, divorcios muchos, y entre hombres también, aunque yo ya tengo cubierta sobradamente la cuota de fracasos, con mujeres y con hombres.

… De mí no te divorciarás, Graziani, olvídalo, eres  mi sueño protagónico hecho realidad, la humedad de mis sábanas que me embriaga cada noche, el que con un roce pone a temblar mi cuerpo, eres parte de mis suspiros, de mis gemidos, de mis jadeos.

Eres la caricia que se pierde en mis senderos, que me pone la piel de gallina al paso, mi manantial, para calmar mi sed, mi comida, el placer en el hombre que me sacia, me completa, me ama, en la espera que gime en convulsiones cada noche, a cada rato, en cualquier parte, la pasión nacida en   Chile y eterna, el alma que se fusiona en una antes que el cuerpo, la fragancia, el néctar, el elixir de mi vida, el fuego de cada  noche sedienta, el aliento en busca de labios perdidos que son los míos solamente, mi singular, sin plurales, el temporal de pasiones hambrientas, que se entierra en mis estrecheces, la gloria a que me llevas, los besos que calman mis dolores, que todo lo perdonan, que me dan la vida, en la sublime caricia de almas como se rozan los labios, como buscan llegar a lamer los dientes, a entreabrir la puerta, a buscar la punta de la lengua, como  dones del amor.

… Mi chiquito precioso, llegaste a llenar una existencia vacía donde me creí perdido para siempre, y como un sueño apareciste en el  camino, cuando más a desgano había llegado a Mendoza, a ese caso que veía como un quilombo, y desalojaste los fantasmas del que había deambulado un mundo que no existía, que era una farsa, una quimera inútil, de llantos, melancolías y soledades, donde como poseso gritaba a veces el dolor a escondidas, implorando que llegara la muerte, el único alivio que conocía., que imaginaba.

…Shh. Ni lo digas.

… Sos la geografía  más bella, entre surcos, valles, y líneas, entre puntos, cimas y hondas, se estremece cada célula, en cada relieve que veo erizarse a mi paso, en  las montañas en que nacen riachuelos donde descansan lagunas de saciedad de la piel o se estremecen sensaciones y emociones en cada roce, te amo, mi bello esposo.

___La ternura los desbordó, las miradas se encontraron, sabiendo que los cuerpos se necesitaban,  embriagados en las palabras, uno loco con las sonrisas, con hoyuelos, y los ojos contando la historia al tiempo que la vivía en una mirada.

El otro con los ojos almendrados, la mirada que leía todo, y en instantes estaban sintiendo el abrazo que envolvía, el continente, el enredarse, el abarcarse, la calidez del encuentro de las piezas como dos años atrás, sin fisuras, sin grietas, ni en el alma, ni en el amarse.

Los labios se  devoraron lamiendo por fuera, por dentro, las lenguas buscando, exigiendo la conquista, y Guillermo ganó la primera batalla, pasando a recorrer con besos el bello rostro,  Pedro se escaldó en la calidez del aliento en la barbilla que cosquilleó en Guillermo.

El afán por dominar, por recorrer, por conquistar debilitaba y demolía defensas y armaduras.

La boca de labios finos desafiaba la cordura, continuó el andar pausado por la barbilla, la oreja adueñándose del oído, el cuello, las clavículas y el hueco entre ellas, demorándose adrede allí. Pedro a merced de su rey, para él, donde no existía otro sitio mejor, le facilitó cada acceso, cada posición y movimiento

Tiró la cabeza hacia atrás y la boca siguió haciendo de las suyas. El sonido de la respiración jadeante, el sabor de los besos, el perfume y especialmente esa lengua perversa, lo asaltaban con sensaciones que no podía ni quería clasificar.

Los cuerpos se tensaron, llevándose al límite como cada vez, Pedro atrapó los dedos que paseaban sus labios, las lamió, los succionó uno a uno, degustándolos mientras Guillermo se estremeció en la humedad de esos labios gruesos enloquecedores y  una mano poderosa fue directa a su pecho, jugó con su pezón hasta arrancarle el primer gemido tenue.

El sonido pareció encender nuevamente a Guillermo, que no le daba descanso.

La boca, ahora, se había adueñado de su pecho. Cada beso, cada mordida, cada caricia, directamente enviaban una señal irrefrenable a su pelvis.

La mano continuó su recorrido descendente sin dar tregua ni pausa, se detuvo en la entrepierna y con cuidado invadió el interior del minúsculo bañador. Apenas  sintió el roce, el irrefrenable mareo del deseo le llevó al delirio, a la febril necesidad de suplicarle que lo recorriera por entero, como toda su geografía externa estaba siendo adorada, venerada, con las yemas, con labios, a lametones imprudentes, insaciables.

Sintió los dedos dibujar el contorno de sus costillas, delimitar sus pezones, jugar con su ombligo, llegar al elástico del bañador que fue desalojado seguido de un letal masaje sensual en las caderas, los muslos, la pelvis levantando a su paso piel de gallina. Se sintió temblar.

Boca, manos, dedos, se adueñaron de él, sus puntos débiles eran sus viejos conocidos y no dejaron ninguno sin atender.

Dejó de pertenecerse a sí mismo. La marea de sensaciones lo intoxicaba. Su cuerpo se arqueaba al compás del ritmo que le imponía Guillermo, sin necesidad de pedirlo, eran lo mismo, se conocían de memoria.

Eran el  calor,  y el deseo latente, incontenible, insatisfecho, manejado a la perfección por su esposo llevándolo a la cornisa que los dos deseaban siempre, mientras  una fina capa de transpiración perlaba los cuerpos.

Cuando ya el deseo  era casi más doloroso, torturante, irresistible, al fin Guillermo se apiadó y en una estocada única lo invadió hasta colmarlo por entero, en ancho, en profundidad, en su todo, en el todo.

No le dio respiro. Cada estocada le hacía perder la poca cordura que tenía.

Cuerpo, alma y mente fusionados. El momento de la entrega absoluta, donde se diluían los límites y cada parte del cuerpo clamaba por su otra mitad, perdiéndose en el placer infinito de ser uno solo. Del Uno.

Cuando  ya todos los límites fueron sobrepasados, cuando más alto no podrían llegar, cuando las oleadas  no podían apagar las llamaradas de la pasión, al fin concertaron el desenlace, dejándose ir en el derrame en el otro en el grito al Universo, que reverberó en el paisaje, que amedrantó a la corriente, que acalló a los ruidos del afuera, hasta que sonriendo regresaron a la vida, y en ella, al sitio, para que Pedro hiciera de las suyas, como discípulo que iguala o supera al maestro, hasta volver a hacerse añicos, antes de rearmarse, para ir a la ducha que se prolongó más de lo conveniente, antes de dejar el lugar, porque más allá de amarse, de ellos, del Amor de siempre, estaban tres almitas esperando por  saludar con sus balbuceos de papi, de papá, de galletas, de chocolates, y ni bien los vieron asomar a la suite de los abuelos parecieron  poder entender que eran su refugio, su propio hogar en el mundo, cuando los tres lanzaron los bracitos hacia los papás que adoraban y que los cobijaron en el mismo amor, para llevarlos a la ducha, a cenar, y a dormir, y al día siguiente a las corridas continuar el viaje, con las excursiones finales, el hacer el equipaje, para retomar en horas el regreso al verdadero hogar, elegido por los dos, en… LA CASA DEL Delta.

CONTINUARÁ.

HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS. CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES MERA COINCIDENCIA.

LENGUAJE ADULTO. ESCENAS EXPLÍCITAS.

¡FELIZ CUMPLEAÑOS NORMA FERZOLA! MI AMOR ETERNO.

“Si pruebas a
ser ficticio durante
un tiempo, comprenderás que
a veces los personajes de ficción
son más auténticos que
los individuos de carne y hueso
y de corazón palpitante.

Richard Bach”.

.

... ¿Viste Guiie?, por eso las chicas nos persiguen y nos mantienen vivos. Somos más reales que muchos y marcamos una huella.

.... Sí amorcito, tienes razón, al fin si lo dice Richard no están tan locas como pensaba. Te amo Pedro Daniel Beggio.
.... Yo te amo más.