¿Y SI FUERA POSIBLE? CAPÍTULO PRIMERO.

Bs. As., Pilar, domingo 03 de enero de 2016.



Sarah estaba inquieta, pese a que todo estaba en orden, como cada vez, acostumbrada como estaba a viajar una o dos veces por mes a Europa y a Nueva York a visitar las galerías de arte.

Era una belleza que cautivaba, lo sabía y le gustaba el efecto que a su paso causaba, en los dos sexos, más allá de su  estampa, era una dama especial, como siempre le dijera Julio.


Nunca desde su muerte pensó en volverse a casar, pese a la insistencia de sus amigas, que a poco de la partida de Julio, comenzaron  el intento del juego de citas con hombres respetables, pese a lo cual, ante cada cena, cada concierto, cada exposición..... ella se deprimía más y más, reprochándose la incapacidad de negarse  a concurrir.

La muerte de Julio impactó como daga certera en el corazón, de ella y quizá por igual de Guillermo, que a la fecha continuaba sintiendo la culpa que no tenía.

Cuando aquel fatídico día, el de la graduación de Guillermo, él no llegaba, algo en su alma se movilizó, pero por la algarabía del acontecer en la vida de su hijo, lo acalló.

 Pero en poco tiempo, la brutal realidad se impuso, y  aquel llamado  los dejó atónitos, incapaces de reaccionar, al momento de recibir la noticia del accidente aéreo sin sobrevivientes.




...Lo de siempre, tu hermana. No quiso venir con nosotros, y ya está llamando.


___Sonrió a Guillermo y sin pensar respondió a su hija despreocupada.



.....Bonjour, chérie,___, el silencio dominaba  sobre el sonido, pero Sarah sintió un imprevisto impacto, antes de recibirlo, mientras Guillermo tenía su mirada clavada en ella.



...¿Natasha?¿Estás allí?



___Sarah tuvo la certeza del llanto silencioso de su hija, antes de escuchar los sollozos, y el corazón dio un vuelco cuando la escuchó al fin, con la voz entrecortada por un abierto llanto sin razón aparente....todavía.



....Vengan a casa mami. Es papá.

Apenas despedirlo en Ezeiza, y llegar a casa, ..., murió mamá, papá se murió, el avión ya no llegará.




____Las manos de Sarah  dejaron resbalar el aparato en el temblor, que era concordante con el martilleo del corazón en el pecho, con el ritmo en que las lágrimas se agolparon inundando las manos,  y Guillermo presintió  el llanto de su hermana, y en el mismo temblor tomó el teléfono, mientras su madre para no caer se aferraba a sus brazos.

Antes de escuchar el desconsuelo en la voz de Natasha, ya él mismo sintió la tenaza en la garganta, que casi impedía la salida de los sonidos.



... Natasha. ¿Qué sucede?



___Guillermo sentía al corazón bregando por escapar del pecho antes de la respuesta de su hermana, y para cuando ella  se dispuso a hablar, Sarah se adelantó, y el mundo se detuvo para los tres.




"...Mi querido Julio, cuánto dolor sentimos, cómo hubiera deseado morir aquel día, pero continué de pie por ellos, los chicos re-significaron mi vida, pero reemplazarte  fue imposible, apenas pude supervivir, casi no disfrutando de nada, y a veces todavía espero que la muerte me sorprenda en uno de estos vuelos, como te visitó a vos. Pero luego pienso en Guillermo, y en Natasha, y sé que no lo podrían entender, menos perdonar.
Seguiré hasta donde Alguien haya marcado que debe ser y te sigo amando aunque nadie lo pueda creer, aunque ni siquiera intente explicarlo ya... cuando alguien intenta acercarse."



___Sarah era fruto de una familia de artistas, desde los abuelos a su padres, todos lo habían sido. Grandes coleccionistas de arte, respetados y buscados en Europa y en los grandes centros mundiales. Las obras expuestas en la galería se vendían a todos los museos afamados del mundo.

Sus abuelos habían construido la primera galería de París, y  su padre la  había dirigido, soñando con hacerlo con ella, para lo cual, pese al decepcionante precoz casamiento y nacimiento de  los niños, .ella había completado los estudios en Bellas Artes.

Casi había crecido en un anexo de la galería de París, construida  por sus abuelos,  remodelando un antiguo palacio, dejando la construcción original en la base estructural.

Los coleccionistas accedían a un patio interno, y desde él a la galería, donde se exponían pinturas y esculturas de clásicos y de artistas contemporáneos.

Sarah había heredado la ternura y belleza de su madre, la férrea voluntad  y determinación de su padre, y de ambos el mayor amor de su vida  hasta conocer a Julio, junto al que le profesaba a sus padres, que era el amor por el arte, en especial la pintura, pero todo en sí la subyugaba.

Antes que la lectura, su padre, le mostraba obras de grandes maestros de gigantes libros, y le enseñaba a pronunciar los nombres de ellos con su creación,..., para que al aprender a escribir más adelante ya los supiera reconocer y plasmar en papel.

Sarah había crecido devorando, bebiendo, durmiendo y despertando al arte y por el arte, que así se convirtió en su pasión, además de la que le despertaba su padre.
Ella aceptó el desafío, encantada, hechizada, y  el arte era  en cierto modo desde que su madre muriera a su diez años, todo lo que sabía, lo que deseaba, lo que llenaba sus días, además de la devoción por su padre,que  quedó atónito y sin aliento, cuando Julio Graziani encandiló la visión de su hija, y en cierto modo la desvió de su propósito, que era llegar a dirigir la galería.

Cuando Antoine supo del amor de su hija, se horrorizó en la idea del casamiento y mucho más del  inminente traslado a Argentina, pero el diplomático padre de Julio, supo hacerle entender, que ganaría a un hijo, y a los nietos que llegarían después.

Antoine permaneció en París, y así como Julio,  cuya vida se esfumó en instantes, continuó su obra por y en Guillermo, en cambio hizo brillar la galería no solamente en Francia sino en sucursales de Londres y Nueva York, en una larga solitaria vida que trascurrió sumido en el trabajo hasta los noventa años.

Una vez  o dos por año,  Sarah lo visitaba con Julio, y luego con los nietos que le supieron dar, a los cuales poco entendía de pequeños, sobretodo a Guillermo, ya que ni siquiera había tenido propios hijos varones.
Pero la pequeña Natasha fue ganando un espacio en el alma del abuelo, que sintió que había heredado el don de su hija, el amor, y el talento para y por el arte, como luego realmente demostrara, cumpliendo el sueño de todos, que fue su licenciatura en historia del arte  en La Sorbona, el doctorado en Columbia y el paso por el Metropolitan, antes de trasladarse luego de corta estancia en Argentina, definitivamente a dirigir la sucursal de las galerías de Londres.

Fue Natasha quien se empapó como su madre, de todo el conocimiento que obtuvo desde nacer de ella, luego en las galerías, cumpliendo el sueño de su abuelo.
Antoine sobrevivió a Julio, falleciendo cuatro años atrás.

En vida de Julio, la vida de Sarah giró a su alrededor, y alrededor de ver crecer a sus hijos, pero para cuando Guillermo se hiciera cargo de la estancia, a sus veinticinco años, Sarah con apenas cuarenta y tres años, siguió el sendero de su padre, y de su hija, repartiendo su vida entre las galerías y la estancia de Pilar, yendo y viniendo, cumpliendo así también al fin con el sueño paterno de verla ser una de las más respetadas marchantes del mundo, al igual que su pequeña Natashe.





Bs. As. Ezeiza, lunes 04 de enero de 2016.




... Madre, dígale a mi hermana, que como no regrese con usted o al menos viaje para mi casamiento, iré en persona a buscarla.
... Está bien mi amor, lo haré, veré si no está por darme algún nieto, ya que ninguno de los dos pareciera tener apuro en ello, y deseo llegar a conocer a alguno.
Al parecer, cuando llamé, no estaba precisamente en Londres, sino en París, lo cual no llamaría la atención, si no fuese porque el teléfono no lo atendió ella.
....¿Cómo?
¿Tiene un nuevo novio en París?
... Así parece, al menos contestó la llamada, creo que es un artista, seguramente lo estará patrocinando, desde ya que desea presentármelo. Bueno, en realidad dijo a su obra.

...!Dios! Esta hermana mía, bohemia como todos los artistas, de novia con uno peor, seguramente.
...Por ello ni te había contado, ya sabes lo que dura ella con los novios, pero tengo que reconocer, que en la voz, y en la forma, este chico me pareció especialmente delicado, educado.
...¿Chico?
... Es joven, creo que menor que tu hermana, se nota en la voz, y algo me dijo al pasar, algo como que era muy lindo, y muy joven, pianista además.
Pedro se llama, pero no recuerdo o no  dijo el apellido.




____Guillermo palideció de súbito, sintiendo un disparo al corazón sin escalas, en el instante en que supo de labios de su madre, el nombre del novio de Natasha,  Pedro, y el techo comenzó a moverse, sus manos a temblar mientras se aferró de la pared, porque sus piernas parecieron desaparecer, mientras el corazón se desbocó y corrientes eléctricas se dispararon atravesando su ser, como diminutas detonaciones naciendo en cada átomo de  esencia.



....¿Hijo? ¿Te sientes bien?




___Guillermo asintió, conciente de que no era capaz de unir las sílabas para formar un sonido y una palabra, al tiempo que suspiró intentando renacer de aquello desconocido que acababa de arrasarlo, al escuchar el llamado a embarque y a su madre decir algo al respecto que confuso todavía no pudo percibir.


Con el amor que le profesaba a Sarah, agradeciendo haberla traído solo, sin Camila allí, en el abrazo se aferró a su madre con desesperación del que desconoce  todo, como cuando era un niño, como en el abrazo del día de la muerte de su padre, y solamente paseaba por su mente el nombre, que ya nunca podría desalojar, aunque no pudiera saber el por qué: Pedro.



CONTINUARÁ.