MARCADOS. CAPÍTULO TERCERO.

Bs As., 28 de abril de 2015.




Ángeles revivió en sueños los meses últimos en los que junto a Francisco ejecutara su venganza, y el rostro ingenuo, casi de niño de Agustín,  no la abandonó esa noche.

El choque que echara sus empanadas al piso en el acto de campaña, las miradas entrelazadas, las manos trémulas, la corriente generada en el roce,... en los dos, sensaciones difíciles de fingir, hasta para un perfecto simulador.
Cada encuentro en  el que se buscaban, en que se reían de tonterías dichas al paso, los intereses compartidos de ayudar a terceros, lograr proyectos increíbles como  el asfalto de la calle de aquella señora con un hijo discapacitado. La valoración que sentía de parte de él a cada idea que le prestaba, las sonrisas cómplices, los pocitos, las miradas colmadas de dulzura,..., aquel rostro perfecto, angelado, que se dedicó a tatuar en la mente, en la retina y en el alma, cuando se sentaron al sol y lo obligó a cerrar los ojos, durante un minuto, aunque ella  deseó tenerlo así y perderse en su contemplación para siempre.

Las primeras insinuaciones, los piropos, aquella invitación a cenar, cuando al fin supo que no había muerto con Daniela y se vistió arreglándose para la mirada dulce de Agustín.
El primer beso, la primera vez.

Pudo sentir nuevamente el agua de la ducha recorriéndola, seguida por las manos diestras, los dedos, mientras la callaba a besos, y desmoronaba toda defensa, disuelta en el agua y en el placer que parecieran descubrir juntos, como el Amor aquella vez.

."..!Agustín! Mi amor."




___Miró atolondrada, aturdida alrededor, había tenido un orgasmo magistral soñándolo, estaba empapada, pero la realidad le dio un cachetazo de súbito, al descubrirse en la cama que le brindaba Martín, sola, mientras los recuerdos del horror presurosos se agolparon en la mente.


"....Dios, no pudo fingir aquello, hasta que comenzamos a centrar el plan en Castro, él era otro, todavía no le dábamos cocaína, y  ni siquiera bebió hasta que ese desgraciado lo maltrató, lo humilló.
Sin el alcohol ni las drogas de por medio, era otro. Era perfecto, de ese hombre me enamoré, y entonces no era el peor, pude confiar en él, de hecho,... quizá cuando le conté la verdad, y había despertado antes, me dijo la verdad. Que estaba recordando el día en que me conoció, ahora entiendo que lo despertó el recuerdo de aquella noche, y quizá no  pudo decirlo, quizá temió  perderme, quizá me amaba.

No. Es un psicópata, no puedo pensar en el primer Agustín, no debo, menos ahora que Francisco dio la vida por mí, para llevarlo a prisión, no."


___

Rafael había dormido poco, y mal, repasando cada mirada, cada palabra, cada momento de la confesión de Agustín.
Y por delante de los ojos celestes, pasearon escenas miles, que emergían una detrás de la otra, empujándose, peleándose porfiadas por dominarlo, con el pibe, con Lucio, con patita, con Julio.
Cuando se sentó en la cama supo que estaba llorando, los quería, a todos, a pesar de todo.
Se preguntó una y mil veces qué hubiera sucedido aquella noche en el río de estar con ellos, la respuesta lo torturó, porque supo que hubiese sucedido lo mismo, también él, borracho y embravecido por estar en el grupo, hubiera violado a las chicas.
Y su padre, con más motivos los hubiera dejado fuera.

Antes de despedirse de Agustín, le pidió que lo dejara llevar su defensa, al fin deseaba demostrar que servía como abogado.
Deseaba demostrar, siempre siguiendo mandatos, tratando de obtener la aprobación ajena, incluso en una situación límite.



"... No me envíes abogado, yo mismo me defenderé.
... No te dejarán.
... Es mi derecho. No aceptando otro no les dejaré opción.
...Al menos al comienzo permite que te defienda alguien de mi confianza.
... No soy un psicópata, Rafael, que me hagan las pericias que quieran, ya he pasado por esto para demostrarlo. No soy ese monstruo que aparece cuando me transformo por el alcohol y lo demás, de hecho ni siquiera sin la presión extrema del final, con ellos encima había matado.

Que hagan  el psicodiagnóstico, sabrán que no soy lo que parece, nada ni nadie es lo que parece. Ni soy un boludo como dije y aparenté serlo por años, ni soy el demonio que asesina a sangre fría o a su propio hijo.
... Eso va a demorar unos días, acepta a mi amigo y ayúdalo.
... No diré nada. No voy a declarar ante el juez todavía, necesito lavarme de toda la mierda que me dieron, y cuando vuelva la lucidez, podré pensar cómo hice las cosas, cómo sentí, qué disparó este final.
...Me parece bien lo que dices, está bien, no declares por ahora.

Te sacaron sangre y saltará que estabas tapado de drogas, es lógico que te niegues a declarar. Estoy de acuerdo, luego veremos.
También debo pensar en lo que me corresponde por haber permitido tapar lo de Julio, por haber acorralado a Chicharra y llevarlo a  la decisión que te comunicó y...
Tenemos mucho en que pensar, es verdad, nada ni nadie es lo que parece."



..!Valmora! !Qué sorpresa!
... !Hola, Martín! Disculpe si lo molesto tan temprano.
... Los hombres de la casa de Dios, siempre estamos despiertos.
¿Vienes a hablar con Ángeles?
... Con usted.
... No me trates de usted,  para todos soy Martin, y de tú.
¿Vienes a confesarte  o  a hablar con el amigo de Ángeles?
Es curioso, una vez Larralde vino confundido, y le pregunté algo similar.
....¿Qué pensabas de él antes de  los últimos días?
...Que era un buen tipo, tanto que casi aplaudo que enamorara al fin a Ángeles, su mirada era limpia, sus manos no parecían manchadas.
...No lo estaban.
Perdón, hola Rafael.



___Diego le dio una palmada y un beso a Martín.



... Estaba,..., quizá siga furioso con él toda la vida, no lo sé, pero hay algo que averigüé, que me quedó dando vueltas. Creo que quise enterrarlo para así odiarlo, pero empuja deseando salir.
 Supo que había llegado a su pasado, o que estaba muy cerca sintiéndose amenazado, porque llegué al sitio donde tu papá lo hizo rehabilitar hace veinte años, hablé con el profesional que lo trató.
No sé si repetiré esto, si lo diría al juez, pero es o era tu amigo.
... ¿Qué  te dijeron, Diego?
... Que Agustín no es malo, que está enfermo,  que aquella vez mejor dicho fue así. Que es difícil imputar a un drogadicto. Algo así entendí.



___Ángeles se deslizó  luego de ducharse a  buscar a su amigo, porque al sacerdote nunca pudo contarle lo que planearon con Francisco, y escuchó voces, sacudió la cabeza intentando adaptarse, y entonces vio la escena.



...Ángeles, ven.
... Mamá. ___. Diego la abrazó y la condujo hacia los demás.

.. Hola, Ángeles, ya que están acá los tres, quiero decirles que hablé con Agustín, ayer. No dio órdenes de que te involucraran con la droga, Diego.
Estaba drogado y asustado, te acercaste demasiado a su pasado, y le pidió a Chicharra que te diera un susto, pero lo de la droga no fue idea de él.
...¿Declaró?
... No lo sé. Creo que hoy tenía la indagatoria ante el juez, no acepta defensa otra que la propia.
... ¿Cómo? ___Ángeles clavó su penetrante mirada en los ojos claros.

... Se quiere defender él mismo, es abogado. No aceptará otra defensa, me temo que necesita demostrarse y demostrar que vale, aunque sea así. Que no es un boludo, como todos lo pensamos por años, y llegamos casi a convencerlo.
... No, no es ningún boludo, nunca lo fue.
... Ya lo sé. Me gustaría hablar con vos, a solas, cuando puedas,..., gracias Diego por contarme, es una opinión importante la de ese profesional. Igualmente es de suponer que ahora lo volverán a evaluar.
... ¿En qué sentido?
... Pericias, psicodiagnóstico, todo eso.
... Es un hijo de puta, perdón, no debí decir eso.
... Quizá, veremos Ángeles.

El que esté libre de pecado que arroje la primera piedra. ¿Era así padre?
... Sí, aunque no sé adónde apuntas Rafael.
.. No apunto a nada, mejor no volver a mencionar esa palabra, solamente creo que hay que esperar los resultados de los estudios y de las declaraciones de Agustín.
... Vamos hijo, ayúdame a preparar el desayuno, creo que todos necesitamos un café.


___Martín y Diego salieron, Ángeles se sentó sin soportar esa mirada en ella, la atravesaba,  descubría sus zonas erróneas, sus secretos, y no debía permitirlo.


.... Cuéntame todo Ángeles, desde el comienzo. Eran todos mis amigos, tengo derecho a saber.
.... Ya te conté.
... Poco, y lo que sucediera hace años. Quiero saberlo todo.
... No entiendo. Daniela murió. ¿Qué más necesitas saber?
...Toda tu vida, y la de tu amiga, llegando a hoy, transcurriendo estos veinte años.

¿Podrías confiar en mí y relatar todo lo sucedido hasta  la muerte de Lessin?
También yo deseo hacer  justicia, te repito, eran mis amigos, los elegí, con virtudes y defectos, los quiero, necesito saberlo todo.
¿Puedes ayudarme?




CONTINUARÁ.


Los personajes pertenecen a TELEFE y a Juan José Campanella y su equipo.
Los hechos son ficticios, cualquier parecido con la realidad, es mera coincidencia.