AMOR ETERNO. CAPÍTULO VEINTIUNO.

 

AMOR ETERNO.

CAPÍTULO 21.

 Inglaterra, 15 de enero de 1836.

… Vamos Peter, que es mejor que todos duerman todavía.

___ La mirada penetrante de Spencer captó un dejo de nostalgia en los ojos marrones que miraron la mansión, antes de subir al carruaje, arropados hasta cubrir la cabeza por el frío y la nieve reinantes, esperando el calor del brasero del interior.

Peter lo miró con los bellos ojos brillantes, acusó un ligero temblor cuando entrelazó los dedos en los de Spencer que lo ayudó a subir al carruaje, y apenas el lacayo cerró la puerta lo abrazó y lo atrajo hacia sí.

… Pensaba en Pedro y Guillermo. ¡Qué felices son! Qué lindo cuando nos encontremos en esa sociedad libre y podamos andar por la calle de la mano, casarnos, adoptar hijos, sin que nadie nos juzgue.

… Es verdad, son más libres,  y son felices al igual que nosotros cuando estamos juntos, también han tenido  y tendrán juicios y problemas, aunque reconozco que no tan graves como los nuestros, que para el afuera somos traidores al rey.

… ¿Es largo el viaje? ¿Cuántos carruajes van?

.. Si tenemos suerte, más o menos en tres días llegaremos, y viene otro carruaje con Anthony y su mujer. No podemos arriesgarnos con este frío a que ocurra alguna avería y quedar sin resguardo.

Igualmente pararemos en posadas en el camino para reabastecernos de carbón y de comida, pasaremos alguna noche  en ellas para dormir bien.

¿Tienes frío?

… No, en tus brazos no.

… ¿Y miedo?

… No, ahora que eres mi esposo no. Estamos unidos en sangre, nada puede sucederle a uno que no le suceda al otro.

Espero que Gerard y los tíos estén bien en nuestra ausencia. Y que pronto podamos regresar, aunque luego el futuro sea incierto.

… Así será mi amor, pronto estaremos nuevamente con ellos.

Te gustará mi casa, ya verás. Es tan grande como la que dejamos, solamente que tiene dos plantas, las habitaciones están en el primer piso, los salones en planta baja, y si ocurriera algo imprevisto, siempre podremos refugiarnos en el coto del que nos habló Den.

__ Spencer le enmarcó el rostro mirándolo:

….Amorcito, no puedo presentarte con tu nombre… ni ante mis lacayos, por las dudas.

¿Qué te parece si te presento como Pedro Beggio?

Eres tú pero en el futuro.

.. Me encantará, claro.

___ Peter se aferró a Spencer apoyando la mejilla en la de él, los ojos le escocían por lágrimas contenidas y parpadeó para evitar que cayeran.

… Debería haberme detenido, pero cuando te amé no sabía de esto como para protegerte.

… Yo deseo lo que me das, es lo único que importa.

___ Los ojos negros se ensombrecieron en el recuerdo de Gregory, como negras nubes tormentosas en el horizonte de un cielo de verano y suspiró.

… Lo único que no hubiese soportado es que me dejaras, que hicieras solo este viaje. ___ El pensamiento provocó en Peter un súbito dolor lacerante en el pecho, una punzada con un ardiente deseo de llorar, pero no se arrepintió de haber hecho el amor con Spencer. Había sido el momento más singular y precioso de su vida, y todo valía la pena a su lado. Ese hombre viril que disfrutaba del placer se lo daba todo a él, y lo miró sonriéndole con dulzura.

… Bueno, eres mi esposo como deseabas, Guillermo y Pedro nos guiarán, mis primos no me traicionarían, por tanto  tenemos que centrarnos en Gregory, para regresar lo antes posible.

___ Luego de horas, Spencer deslizó la mirada hacia la luminosa figura que dormía en sus brazos, y agradeció al destino que lo llevó hacia él. Tomó la manta que tenía en su regazo, y lo arropó para protegerlo del frío de la tarde. La luz mortecina de un pálido rayo de sol se filtraba entre grandes nubarrones grises en aquel día lluvioso, en el cual todavía no había llegado a nevar.

Para cuando Peter se desperezó era de noche y habían detenido  los caballos en una posada del camino.

… ¿Adónde estamos amor?

… Hace demasiado frío para continuar. Dormiremos bajo techo y seguiremos al amanecer. ¿Estás bien?

… Sí, con ganas de comer.___ Por detrás de la cortina de pestañas, Peter miró al hombre con el cual se casara la noche anterior, admirando los rasgos de su rostro, la mandíbula cincelada, la solidez de las facciones, que irradiaban poderío y presencia. No tenían papeles de matrimonio, pero eso no tenía importancia alguna-

… Estarás bien en casa, a Gregory no se le ocurrirá que estoy con alguien, pasaré mucho tiempo con él, cerca de la condesa, y los sirvientes son leales.

Bueno, abajo, a ver que te coloco bien la capa, hace mucho frío.

___Pidieron tres habitaciones, una para ellos, otra para Anthony, la última para los cocheros, y se apostaron en un comedor sencillo, cerca de la chimenea, bebiendo un licor mientras esperaron la cena, que en platos simples no tardó demasiado en llegar.

… Bueno, Anthony, le diré a mi hermano que como pasaré mucho tiempo en su casa, no deseo sobrecargar a sus lacayos y que por tanto te quedarás allí con Esther.

Básicamente, deseo que escuchen todas las conversaciones que puedan, sobretodo cuando Gregory reciba visitas, y mucho más si la visita es ese ex comisario que lo ayuda.

Esther, tú quiero que le prestes atención a la condesa, y eventualmente que la ayudes a encontrarse a escondidas con Den.

… Sí Milord.

.. Además  es importante que se ganen la confianza de los demás, y que intenten descubrir a alguien que lleve mucho tiempo en  el palacio, alguien que conociera a mi padre, eso seguramente nos llevará a encontrar si los hubo, a testigos del asesinato.

Si lo envenenó, pudo hacerlo él o ayudado por alguien de la cocina.

 Contesten pocas preguntas, eviten hablar de Peter y Gerard sobretodo.

… Entendemos Milord.

__ Spencer se preguntó cómo podían hacerlo si ni para él estaba nada claro. Intentaría infiltrarse en el despacho de Gregory y buscar papeles que lo vinculasen a delitos económicos, y mientras… buscar testigos y pruebas del asesinato de su padre.

… Hay que tener muy vigilada a la condesa y a su padre. Si las sospechas de Den son ciertas, el Duque  puede llegar a atentar contra ellos, y si asesina a alguien más o lo intenta, podemos  estar allí, para evitarlo pero a su vez probar la tentativa.

Intentaremos no hablar demasiado en el palacio, vendrán cada dos días a casa a informarnos de todo.

 Ni bien llegue al palacio, le haré saber a Gregory que no me interesan los títulos, que le dejaré el Ducado, a cambio de que no devele mi secreto, que no es necesario por tanto que muestre carta  alguna a la familia mostrando nuestra filiación. De cualquier manera, lo que intenta mostrar es falso, lo verdadero lo tiene Sarah, y aparecerá llegado el momento. Por ahora tiene que pensar que seguirá siendo el Duque de LInsters, y yo un primo que se conforma con ser conde, que intentará   acallar los rumores conquistando a alguna mujer.

___ Peter lo miró furibundo, y bajó la vista.

… Tranquilo, no dije que llegaría a casarme, te dije que tengo otros planes para no tener que traicionar nuestro pacto. Solamente le haré creer a Gregory que me casaré, para ello tendré que concurrir a sus hipócritas fiestas y cotejar a alguna dama deshonrada que me siga el juego a cambio de dinero.

… Pero… ¿y el heredero?

.. Peter, amorcito, confía en mí. Si todo sale como planeo, una vez que Gregory vaya preso o a la horca, dejaré un heredero en el Ducado, sin necesidad de tocar a ninguna mujer.

… No entiendo.

… No importa. Por ahora, cuanto menos sepas, mejor. Y tengo que llegar a tiempo de evitar que pueda ser electo para el Parlamento como debe ambicionar. Tendremos que movernos con rapidez.

… Anthony, vayan a descansar, saldremos ni bien amanezca a ver si podemos llegar sin más paradas, si no comienza a nevar.

.. Gracias Milord.

.. Vamos precioso,  pedí una botella de vino a la habitación, y unos frutos secos para matar el frío.

___ Todos dejaron las mesas, hicieron una reverencia a los dueños y cada uno fue a las habitaciones, humildes., pero limpias y con chimenea.

.. Bueno, no es una mansión, pero al menos estamos bajo techo y tenemos fuego.

___ En la mirada se embriagaron al tiempo que chocaron las copas, y el placer de sentir el cuerpo derritiéndose por el otro y en el otro los llevó a sacar  los abrigos, a liberar los brazos, y el alma se reconfortó.

.. Mi amor. ¿Qué podré hacer en la casa para ayudarte? Te extrañaré demasiado todo el día solo.

… No estarás solo, y puedes encargarte de los establos que están bastante descuidados, cabalgar cuando el tiempo lo permita, tienes una biblioteca importante.

… Lo sé. Moriré extrañándote pero salvo que me necesites, no tendré más remedio.

¿Y si me presentaras a Gregory como una especie de secretario?

… ¿Secretario? ¿Sabiendo él que soy gay?

… Por favor mi amor, no soportaré en día sin verte. Si igualmente lo vas a extorsionar, llévame contigo, al menos algunos días.

… ¡Peter, mi amor! No sé si fue buena idea traerte.

Ven acá, que hace un siglo que no me besas.

__Spencer lo llevó a su regazo en el sillón junto a la chimenea y recorrió el cuello con los labios, mientras hundió los dedos en el cuero cabelludo alborotando el cabello, y Peter perdió el raciocinio como para continuar reclamando, y solamente deseó una cosa ahora. Y lo demostró, lamiendo las comisuras, mordisqueando los labios finos, succionándolo hasta abrirse paso e ingresar con la lengua a ejercer el dominio de la boca, mientras Spencer soltó las riendas y coló la mano bajo la ropa, yendo a pasear bajo ella hasta encontrar lo que estaba buscando y hacer rodar los pezones entre sus dedos, ahogando los gemidos de Peter en su garganta y los propios en la boca ajena.

… Te amo, precioso, y no quiero que te arriesgues, te llevaré, pero ante el menor peligro, prométeme que te marcharás a la casa o a la de Den. Promételo.

… Está bien, lo prometo.

__Spencer dejó las copas, y con el conocimiento de un cartógrafo… dejó caer los pesados sacos, sacaron la ropa de lana, hasta quedar solamente con las camisas, donde las manos se colaron entre los botones con facilidad, en búsqueda de las notas exactas, mientras se incorporaron urgentes, y con torpeza y temblando comenzaron la tarea de desabotonar y desabrochar, mientras las prendas olvidadas cayeron una tras otra en un mismo montón, y los cuerpos se adosaron con premura y decisión. Las manos subieron y bajaron, crearon valles y montañas, buscaron tesoros escondidos.

La ansiedad ganó a Spencer al igual que a Peter, pero sobretodo el deseo.

Y se besaron una y otra vez con desesperación, lamiéndose, succionándose, bebiendo en el otro, devorándose, mientras uno se entregó al dominio del otro sin reparos sometiéndose a la furia sexual del amante, llevados por la adrenalina que bramó en la sangre con el deseo. La mente y su contenido se fugó cuando las manos amoldaron las nalgas pegando pelvis contra pelvis, y luego ascendieron paseando, milímetro a milímetro para dibujar y experimentar cada recoveco que luego sería recorrido por la boca.

Spencer hurgó bajo el bóxer y encontró su tesoro ansiado, lo acarició y le arrancó un grito, que ahogó en el beso. Sabía que gritarían, y los ojos se clavaron refulgiendo en el otro, desorbitados y suplicando mucho más. Envueltos en la desmesura, desconociendo todo límite, excitados como nunca, descubrieron la zona de fuego endurecido, imposible de apagar.

La excitación agarrotó los cuerpos y en la mirada la súplica  fue obvia. Ambos eran dueños del otro, los únicos capaces de saciar el ansia y el deseo, y para cuando abrieron las cremalleras, vieron el deseo de ambos enorme, duro, listo.

Spencer tomó a Peter y lo obligó a arrodillarse,  y Peter lo abarcó en su totalidad, ejerciendo presión experta, subiendo y bajando la cabeza, con los labios tapando los dientes, lamiendo de arriba abajo, mientras Spencer se aferró al pelo y lo dejó hacer echando la cabeza hacia atrás disfrutando de estar en esa boca perfecta. Pero Peter lo dejó huérfano. Se incorporó y lo provocó dándole la espalda.

Spencer lo tomó del pelo, y desesperado, sin tiempo., lo penetró  con decisión hasta el fondo y más allá y Peter gritó no recordando que no estaban en la mansión, que los  podrían escuchar,…, pero poco importó.

Y Spencer embistió  una y otra vez, apretándolo contra la pared, acariciando delante para aumentar el goce, llevándolo al abismo, caminando sobre un hilo muy fino durante demasiado tiempo como para evitar no sucumbir cuando al fin decidieron dejarse llevar en la llegada a la gloria final deshaciéndose en esquirlas en la detonación de la liberación del Amor,  quedándose Spencer en la espalda adosado, besando la nuca, calmando la respiración, recuperando los latidos y la conciencia de realidad, para al fin lograr llegar a la cama y escabullirse enredados bajo la ropa, para dejarse  llevar al sueño donde se saludaron con el par que los espiaba desde el futuro, cuidándolos desde allá.

___ Inglaterra, 30 de enero de 1836.

Ducado de Linsters.

… La nieve y el frío demoraron la llegada, y decidieron pasar los primeros días en la casa, para que lacayos y doncellas conocieran a Peter, a Pedro Beggio, para todos.

… Peter, ___ decía la doncella.

… Pedro, I am not Peter. I  am from Spain. No soy Peter, vengo de España retrucaba Peter, hasta que al fin le creyeron que era un erudito español que sabía hablar inglés y todos quedaron tranquilos con la nueva identidad, mientras Pedro en Bs. As. reía en sueños.

Con los brazos cruzados por detrás, Gregory caminaba de un lado al otro del salón, mirando los jardines de la parte trasera del palacio.

Todo le había salido bien en los últimos ocho años. Había asesinado a su padre, nadie lo supo, le había quitado a Den a la hija de un hombre rico y con la dote había pagado sus deudas, tenía un heredero varón. Pero algo lo inquietaba sin saberlo, cuando llamaron a la puerta y su ladero fiel entró, empapado, y temblando por el frío, se quitó el tricornio y lo miró.

… ¿Has hecho lo que te pedí?

.. Sí Milord,  en una semana el padre de la condesa emprenderá un viaje de tres semanas, de negocios.

Eso nos da la oportunidad perfecta para llevar adelante nuestros planes, como cuando conquistó a Melany.

..  ¡Basta! No es asunto tuyo aquello, se supone que ya lo quitaste de tu memoria, hasta yo olvidé cómo la violé para obligarla a que se casara en días y a su padre a dármela.

… Sí su Excelencia, por supuesto, ya lo olvidé.

.. Bien,  es la oportunidad exacta que esperábamos para que toda la fortuna de la familia de Melany pase a mis manos, para financiar mi campaña política, supongo que tienes en claro lo que debe suceder con el padre de la Condesa, ¿verdad?

… Por supuesto Milord.

… Eso merece un brindis, entonces.

___ Mientras Gregory festejaba su próximo atentado, Spencer acababa de llegar al palacio, solo, y detrás de la puerta un escalofrío lo recorrió de cabeza a pies.

Den había sabido la verdad, iban a matar al padre de Melany, y él tendría que estar allí para evitarlo pero además comprobar el plan de Gregory, es más hacer que no fuese su cómplice el potencial ejecutor, sino su desgraciado hermano de sangre. Y en el momento comenzó a pensar en un plan, al tiempo que como si acabara de llegar, tocó a la puerta del despacho del delincuente de su hermano.

Las cartas estaban echadas, el plan tenía que ponerse en marcha, necesitaría ese mismo día reunir a Den y a los demás para tratar de impedir otra muerte, pero además dejar involucrado en la tentativa a su hermano.

CONTINUARÁ.