ENIGMA. CAPÍTULO DIEZ.

 

ENIGMA. CAPÍTULO DIEZ.

Bs. As., martes 23 de junio de 2015.

Hospital Borda.

… Mira Matías, en verdad la familia de Pedro quedó en enviar hoy un abogado, y te contacté por las dudas, pero ellos no lo saben.

Pedro es autista, y no deseo someterlo a estrés. Sin más, ayer al ver a los hombres de mantenimiento, se asustó  y tuvo una convulsión mayor.

… ¿No habla como para decidir su defensa?

… Solamente ha hablado algo conmigo. Llevaba una vida casi independiente antes de los sucedido, pero,.. de ir a prisión, creo que se iría apagando hasta parecer oligofrénico o peor.

… Concretamente no tiene abogado y por lo que sé, el arma homicida estaba en sus manos, lo cual lo deja bastante mal parado.

… Peor lo deja el hecho de que insiste en declararse culpable.

… ¿Qué pierdes con dejarme verlo? Quizá necesite un equipo, o el otro abogado no aparezca. ¿Quién es?

.. No estoy autorizado para dar información. Ve a la comisaría 34 donde está la hermana, que sospecho que tampoco tiene abogado.

.. Si Pedro es conciente como para auto- incriminarse, puede decidir si desea o no un abogado. Déjame verlo, Graziani. Por algo le pediste a Juan que me llamara.

A todo esto, el que necesitará un psiquiatra en breve si lo abandonas así es él.

___ Guillermo se puso de pie con furia en la mirada y ganas de tomarlo del cuello, contrajo todos los músculos y se contuvo.

.. Mira pendejo. Si crees que vendrás acá a  hacerte el galán porque te gustó la foto de Pedro y que además tienes derecho a meterte en mi vida privada, te puedes ir por donde entraste.

… Bueno, bueno, parece que lo que más te interesa de verdad es  cuidar a Pedro solo, que nadie más lo vea, para nada Juan.

 ¿Qué sucede Dr.? ¿Se enamoró de su paciente?

___Al momento en que Guillermo levantó la mano en un puño para acertar una trompada en el bello rostro, entró Alberto y le gritó, corriendo luego a tomarlo por detrás.

… Guille, basta. ¿Qué sucedió? ¿Vos quién sos?

… Matías Olazábal. El Dr. me llamó para defender a Pedro Beggio pero no me deja verlo.

… Suéltame Beto. ¿Cómo les fue con Claudia? ¿Declaró?

.. No. Y dudo que lo haga.

… ¡Mierda!

… Voy a analizar los test a ver qué dicen. Hablaremos con Gaby más tarde, porque para sumar más problemas se presentó a declarar un supuesto abogado que defiende al muerto.

.. ¿Qué?
… No sé mucho al respecto todavía.

… ¿Apareció el abogado?

… Hasta que salí, no. Fueron los padres de  Marcial a declarar, pero Labrapoulus, no.

… Marcos, ¡el gordo Labrapoulus!

… ¿Lo conoces?
… Por supuesto, es bueno, grande,  vivo, sería interesante trabajar con él.

… Espera en el pasillo, averiguaré si Pedro regresó al pabellón. Lo envié a hacer estudios neurológicos. Te llevaré a conocerlo, nada más que para ver su reacción, no significa nada más tu visita, por ahora.

___ Matías salió sonriendo y a Guillermo se le agolpó toda la sangre en la cara, por la furia y los celos.

… Guille, si no entraba le pegabas. ¿Qué hizo?

… Vino a hacerse el facherito, a conquistar a Pedro más que a defenderlo.

.. Y te pusiste celoso.

.. Beto, mira que estoy con ganas de pegarle a medio mundo y al que tengo cerca es a vos. Lo sacaría a patadas, pero si el otro no aparece hoy, antes que uno de oficio, lo necesitaré, vigilado, pero al menos Juan supuestamente lo conoce.

 Voy a ver cómo reacciona Pedro.

Quiero pedirte un favor.

… Que  apure  el informe de  la pericia de Claudia y te resuma  lo que sé.

.. Además. Ve a traer los tests que Martínez le hizo a Pedro. No sé si colaboró o no, pero dile que los interpretaré e informaré yo, que lo que hizo es estrictamente confidencial, que le haré firmar un acuerdo.

… ¿Qué estás planeando, Guille?
… Quiero ser el único en saber el psicodiagnóstico de Pedro, te incluye Alberto, al menos por ahora.

.. ¿Nada más?
.. Por ahora nada más. Cuéntame lo que sabes de Claudia, de la comisaría.

___ Alberto sintió un nudo en el estómago, una inquietud imprecisa. Sabía que Guillermo rara vez perdía el control, pero casi había trompeado a Matías.

Nunca interpretaba pericias,  aunque fueran judiciales y lo que le pedía no era ni correcto ni habitual, no obstante lo puso al corriente de las novedades.

__ Pedro había concurrido a todos los estudios, llegó de los mismos agobiado, pero hizo lo que el psicólogo le pidió. Dibujar el arbolito, la casa, el hombre, interpretar las manchas y copiar los dibujitos, harto de hacerlos en su vida, lo permitió una vez más.

Además el neurólogo lo torturó con el test neuro-cognitivo para terminar pasándolo por el tomógrafo y el resonador.

Guillermo le había hecho llegar unos libros, pero le recordaban a Diana cuando estaban en Nueva York y ensayaba las obras de teatro y el dolor le laceraba el alma.

Se tumbó, cerró los ojos, y en el intento de no ver el rostro de su madre, ni la plenitud de aquellos años, ni la palidez inerte última, apareció otro, acompañado de mil sensaciones por todos lados,  la imagen y el sabor del hombre que lo había besado por primera vez, al cual se  había entregado en caricias y besos sin reparos, el que confiaba en él pese a sus palabras, el que parecía decirle que estaba enamorado, el que lo hacía temblar con la mirada,… y entonces sintió el ruido de la llave, voces, y se sentó asustado, cuando Guillermo entró con Matías, pero pese a la presencia del desconocido inoportuno, fue incapaz de apartar la mirada del apuesto rostro de su ¿médico?

Tragó saliva en un intento de lograr articular alguna palabra, embebido en la mirada y Guillermo le interrogó en ella y con ella.

… Pedro, ¿te sientes bien?

.. Sí. Un poco mareado, cansado, recién he regresado. Para mí esos malditos estudios son torturantes, Guillermo.

___ Los ojos negros se derritieron en ternura, mientras olvidado de la presencia de Matías, magnéticamente fue al borde de la cama y le tomó la mano.

…. Lo sé. Son feos sí. Pero ya está. Ya pasó. Los locos de los psicólogos dicen  conocer a la gente así.___ Y le sonrió acariciándole el dorso de la mano.

___Irremediablemente el contacto de la mano les desbocó el corazón que tronó aprisionado en el pecho, y Pedro no pudo hablar para replicar, pero el hecho de que lo comprendiera sin necesidad de más explicaciones le aceleró la respiración.

De pronto la mirada se posó en el abogado que lo miró con la intensidad y el algo más que había aprendido en los ojos de Guillermo, y los ojos cristalinos le provocaron un nudo en la garganta.

Pedro lo miró echando chispas y aferró la mano de Guillermo que vio en Matías lo que había temido y también palpó el miedo en Pedro.

… Chsss... Tranquilo, es abogado, pero no el que envía tu familia. Solamente es conocido penalista, ___ Guillermo se perdió en el hoyito del mentón, y comenzó a faltarle la respiración.

… No quiero abogado, no quiero.

.

__ La sonrisa de Matías pareció tatuada, y con voz ronroneante le habló.

… Pedro, me gustaría ayudarte, puedes confiar en mí.

… Que se vaya, Guillermo,  no me gusta,  defiende a mi hermana si quieres ayudarme.

 ___Sin más Pedro se echó en los fuertes brazos que sabía le quitaban el miedo y Guillermo lo estrechó fusilando a Matías con la mirada.

… Ya veo la conexión que tiene y con quién.

… Si no te gusta, eres libre de marcharte. Vete Matías. Pedro no está bien. Te dije que no era momento de molestarlo. Si quieres ayudar trata que su hermana confiese. Te llamaré si él cambiara de opinión.

__ Pedro  a cada instante se hundía más en Guillermo, sabía que no lo dejaría caer, confiaba solamente en él lo suficiente. Supo que sus mejillas debían aparecer encendidas y que sus ojos también tendrían el brillo de los otros, pero Guillermo aunque lo viese, guardaría un silencio elocuente.

Matías  dejó una tarjeta en la mesa, y fue a la puerta.

… Dudo que resista un día de cárcel, Graziani.

… Lo sé.

… Iré a ver a la hermana, llámame si cambia de opinión. Más allá de los chistes, creo que necesitará ayuda. No me molestaría trabajar con Marcos.

___ Guillermo percibía con todos los sentidos al hombre que había buscado sus brazos,  supo que cada vez que apareciera la amenaza, el recelo, el miedo, elegiría ese refugio. Percibía los latidos acelerados o quizá fuesen los suyos, y al salir Matías su mirada penetrante paseó por el rostro…acomodando mechones imprudentes que intentaron ocultarlo, y la mirada cristalina fue a la suya, mientras los labios se entreabrieron, pero sin hablar.

-          Lo estaba mirando directamente,….el alma, el ser, la esencia y sabía que no estaba disgustado porque hubiera rechazado al intruso.

-          Pedro sentía un intenso calor en las entrañas, las manos en cambio estaban heladas, los nervios a flor de piel, las miradas iban de los ojos a los labios.

Los dos sabían y decían que no habría más besos, que no debían, que no podían, sin embargo…los dos mentían. Se mentían.

La mirada de Pedro resplandecía. Sin embargo la expresión se empañó, y Guillermo supo que era recelo, lo que él había despertado, sin embargo estaba precioso, y no se arrepentía de nada.

Paseó la mirada por la blancura del cuello, por el rostro, por el cuerpo que imaginó bajo la ropa, por los hoyuelos en los que se perdía, por los labios y la barbilla y el aire con la razón nuevamente se fugaron muy lejos del lugar.

… No me mires así. Él me miraba igual.

.. No mi amor, él no pudo mirarte igual.

.. ¿Mi amor?___ Los ojazos marrones se clavaron en los negros.

… No pudo mirarte con lo que siento. Y además te miro como al adonis que me eligió a mí entre todas las personas  que pasaron por su vida,…, para hablar, para acariciar,…, para besar.

Me siento un ser afortunado.

… No vas a confundirme con palabras bonitas.

.. No pretendo hacerlo.

.. Ese es tu problema. Que no pretendes hacer muchas de las cosas que terminas haciendo, como...

.. ¿Cómo?

¿Besarte por ejemplo?

___Guillermo hizo esfuerzos sobrehumanos por no perder el hilo de los pensamientos, embebido en la mirada, pero terminó perdiéndolo. Desde que conociera a Pedro solo soñaba con besar esos labios carnosos a placer, moldearlos a su antojo, y que Pedro se entregara a él para amarlo de todas las maneras existentes y por inventar.

__Pedro lo miraba con los ojos muy abiertos, anhelante y Guillermo se rindió, al posar la vista los labios fueron detrás y se encontró lamiendo y dibujando ese labio inferior carnoso, húmedo, turgente, por dentro, por fuera, mordisqueándolo mientras Pedro se aferró a su boca como a un salvavidas, y Guillermo descendió a la curva de la garganta y del cuello, sabiendo que deseaba continuar por todos lados, sin descanso, sin afuera, aunque fuera una sola noche y luego murieran. Necesitaba hacerlo suyo y enseñarle todo, y el roce de los esbeltos dedos en el pecho le provocó un deseo más ardiente todavía.

Sus músculos se tensaron por entero, quedó inmovilizado. En su ingenuidad, seguramente Pedro desconocía lo que sus manos podían generar en él, y sus ojos se oscurecieron, ya se habían mostrado vulnerables antes y era algo conocido.

… No quiero ver a nadie más que a ti. ¿Lo prometes? No tengo nada que ofrecerte a cambio de esa promesa, pero confío en tu palabra.

.. ¿Y por qué estás tan seguro de mí?

.. Lo sé, sin más.

… Lo prometo. Mientras estés aquí, solamente hablarás conmigo.

___Pedro se  retrajo pensativo, necesitando silencio, y Guillermo se lo dio mientras lo mantuvo acurrucado besándole la cabeza y revolviéndole el pelo.

Pensó en sus besos que le robaban la conciencia, y la imagen no era la apropiada para calmar a los sentidos.

Pedro levantó la mirada y con tristeza pero firme balbuceó:

… No quiero que vuelvas a besarme.

… No tengo la menor intención de volver a hacerlo. No debo.

… No creo que la tuvieras antes, pero lo hiciste, lo hicimos.

__ Pedro en verdad deseaba con el ser acercarse cada vez más y seducirlo, pero a cambio de que confesara con todas las letras que lo amaba, no que intentaba conquistarlo para hacerlo hablar de lo que no deseaba.

… ¿Intentas librarte de mí?

.. Lo que tú quieras.

___ Las palabras decían una cosa, pero en la mirada se formaban llamas, como el sol estallando en el horizonte, lanzando una lluvia de chispas desde el cielo por doquier.

… ¿Sabes cómo está mi hermana?

… No confiesa. No declara.

… No tiene nada para decir.

.___ Guillermo olvidó el amor y le enmarcó el rostro con cierta impaciencia clavándole la mirada.

… ¿Le hiciste jurar que no hablara?

… ¿Qué inventas ahora?

… Contéstame. ¿Hicieron un estúpido pacto de silencio? Porque de ser así, en 24 horas te sacarán de acá e irás a un penal de máxima seguridad bajo el cargo de asesinato en primer grado. ¿Estás buscando terminar así? ¿Cómo piensas soportarlo?

__Las lágrimas anegaron los ojos, Guillermo se derritió en ellas y fue a beberlas una a una, atrapándolo de nuevo en sus brazos.

… No, no. No llores, perdón, es que pasan las horas y ninguno de los dos quiere confesar, se termina el tiempo, y no puedo soportar la idea de que te lleven de aquí.

… No podrás evitarlo, Guille. Mañana o pasado vendrán a buscarme. Soy responsable, sé lo que hice y lo que sucedió, no importa mi condición y lo sabes.

… Yo lo sé. Vos lo sabes. Pero si no anduvieras declamándolo a los cuatro vientos, nadie más debería saberlo.

… ¿Cómo? No puedo hacer eso.

… ¿Por qué?

¿Para encubrir a quién?

Pedro, vos no estuviste estos años con ellos, no te puede quedar un céntimo de complejo de Edipo, menos de síndrome de Estocolmo, lo haces por tu hermana, ¿no?

La violaron, no fue un intento como me dijiste, el tipo alcanzó a violarla, y seguramente lo hizo siempre.

… ¿Qué? ¿Qué dices?

… Pedro, basta, hay pruebas, las examinaron.

 Alberto vino hace un rato de la comisaría, tu madre y Claudia tienen las mismas lesiones vaginales,  estaban los tres desnudos. La policía no está convencida pero nosotros y la oficial Soria sí. Termina con las versiones de los hechos que te inculpan. Fue defensa propia, quien mató a tu padre estaba a centímetros de su cuello, fue Claudia  mientras la violaba quien lo apuñaló, y quizá tu madre lo intentó y murió antes, ¿verdad?

. No. Mierda… no. ¿De dónde sacas esa barbaridad?

Yo tenía el cuchillo, yo se lo quité de encima y lo apuñalé, fui yo.

Mi princesita, ¿por qué la siguen torturando?

___Pedro se alejó de los brazos comenzando a mecerse llorando y Guillermo tembló, esta vez de pánico. Por temor a que se encerrara en sí mismo y no hablara más ni siquiera con él.

Lo obligó a volver a sus brazos e intentó calmarlo acariciándole el pelo.

… Chsss, ya está, perdón, ya pasó. Esperaremos a que los abogados hablen con ella. Faltan estudios todavía. Tranquilo, precioso, tranquilo. No llores.

Mírame, escucha, en el peor de los casos, que no sucedería si ustedes hablaran y contaran todo, más Claudia que vos, pero pensando lo peor, si se elevaran los cargos y pasado mañana quisieran trasladarte a la comisaría o a un penal, no lo permitiré, no puedes estar allí.

.Si no vas a cambiar de opinión, por ahora, al menos no hables con nadie, y deja que haga que te dejen esperar el juicio acá, para ganar tiempo.

… ¿Qué me estás pidiendo exactamente?

Cuando llegué no hablé con el Dr. rubio, pero hace un rato sí, poco, pero algo hablé.

… No importa, el psicólogo que te hizo los tests no hablará, me debe obediencia. Tu palabra de silencio necesito, Pedro. Para ganar tiempo.

… ¿Tiempo para qué? ¿Y  a Claudia quién le evitará ir al penal?

… Amorcito, a ver,  le diré al que vino recién que defienda a Claudia, que sea su abogado,  Alberto, el Dr. que te vio antes con la oficial Soria la están ayudando a ella, déjame ocuparme de ayudarte a ti, a vos.

Tus tíos declararon, pidieron informes del tipo a Estados Unidos, puede que aparezca algo que desvíe las cosas a un tercero, por eso necesitamos tiempo, pero te quiero seguro, acá.

… Quiero quedarme acá, pero no perjudicar a Claudia.

… Que te violen o te maten en el penal no ayudará en nada a tu hermana, te lo aseguro.

___ Un escalofrío de pánico recorrió a Pedro y lo miró en profundidad:

… ¿Qué quieres que haga?

… Nada. Justamente, nada. Que si tenemos que ir a una audiencia  o ante el juez, no vayas gritando que lo mataste, que no hables, sos autista, es lo que sucedería en días de estar en un penal de todas maneras. ¿Lo harás?

… ¿Y la pericia?

… ¿Lo harás? Olvida la pericia, es una formalidad.
… No sé. Estoy aturdido. No lo sé.

___Guillermo suspiró agobiado porque sabía que si no rescataba antes a Claudia no pactaría  silencio con él, excepto…, que lograra que ya no pudiera separarse de su lado nunca más.

… Necesito ir al despacho, y te traerán el almuerzo, necesitas comer, tienes ropa limpia y puedes ducharte y dormir.

… ¿No te veré hasta mañana?
… Pasaré la noche acá, me quedaré a tu lado, hoy, mañana, pasado, y siempre. ¿Entiendes? Iré a mi casa a traer ropa, veré qué sucede en la tarde, y regresaré. Puedo decirle a los guardias que no eres peligroso, y si quieres ve al gimnasio, lo necesitas creo, te calmará la ansiedad.

… ¿Puedo?

… Les diré. ___Guillermo estuvo a un nanosegundo de regresar a atrapar los labios, pero se contuvo, le besó en la coronilla y perezosamente se puso de pie, sintiéndose anclado a él, al lugar donde Pedro estuviera. Supo que lo acompañaría al penal de declararse culpable, y de alguna manera Pedro lo intuyó.

… Almuerza, ve al gimnasio y dúchate. Regresaré más tarde, ¿sí?

… Está bien.

Guillermo…

… ¿Qué?

… No quiero que te enamores de mí, te haré sufrir como a todos, no quiero hacerte daño. Por más que te quedes acá esta noche, en días te cansarás, tienes que tener una vida afuera. Regresa a ella. Déjame ir. No quiero destruirte.

… No sos dañino, Pedro. Y… ya es demasiado tarde para decirme o pedirme eso, pídeme la vida, pero no que me aleje de vos. En todo caso, déjame la oportunidad de decidir qué es dañino para mí.

¿Quieres saber algo? Mi vida antes de conocerte, esa vida que tengo afuera, ha sido la peor elección, no vos. Menos lo que siento por vos.

… Ve al infierno, Graziani, no entiendes.

… Me temo que has llegado años tarde, hace años que vivo en el infierno, Pedro.

___ Pedro se obligó a tragar el doloroso nudo que se formó en la garganta de súbito, no sabía ya qué decirle para salvarlo, soltó el aire con fuerza como tratando de arrojar allí la confusión y la añoranza de ese hombre que lo hacía temblar como una hoja azotada por un viento huracanado, que lo hacía sentir débil, cuando siempre había podido contra todo.

Quería correr el riesgo de perderlo todo  como aquella vez que dejó Nueva York y él no se lo permitía.

Había luchado con fervor para sobrevivir a la pérdida del mundo perfecto que vivió junto a sus padres, suprimiendo los recuerdos, agarrotando el cuerpo y la mente con ejercicio, ahogando el corazón obligándolo a adaptarse a la vida estudiando y luego trabajando, acurrucado a la sombra de sus tíos y de Marcial. Pudo hacerlo una vez,  hubiese podido hacerlo de nuevo,.. , si no  hubiera aparecido él. Ahora ya no estaba tan seguro de resistir.

“… Ganar tiempo. Sí, quizá pueda callar hasta el juicio, pero luego la separación será mortal, y no quiero arrastrarte a mi agonía,… amor mío.”

___ Guillermo caminó los pasillos suspirando, apesadumbrado por tener que dejarlo horas, pero estaba decidido a ir por sus cosas y a dejar a Juan, sin más. No podía volver a verlo y mentir lo que nunca sintió por él, antes no esperó que apareciera otra cosa, pero ahora la había conocido, apenas, pero lo sabía, y no habían dudas por disipar. Estaba enamorado de Pedro. Su cuerpo, su alma, su corazón, su ser se los había entregado ya en el primer beso, como el absorbió el suyo, aunque  todavía no escuchara un te amo de esos bellos labios.

 Quince años con Juan,  se conocieron, se divertían, era su mejor amigo, confidente,  compartían sus preocupaciones laborales,…sin casamiento, sin promesas de futuro o de hijos. Viviendo el día a día había transcurrido la vida.

Y en un día, Pedro  había dado vuelta su mundo. Ya no podía seguir el día a día con nadie que no fuera él, que insistía en condenarse a prisión.

Casi sin pensarlo  salió del hospital, saludando como autómata, caminando pausadamente con las manos en los bolsillos, con una imagen, un aroma, un sabor… saturando sus sentidos y el alma toda, subió a un taxi, y bajó frente al edificio donde vivía con Juan.

Entró en el mismo estado, con la misma decisión.

… Amor, ¿apareciste?

Ahora si no es por Matías ni sé adónde estás.

___Juan fue a su encuentro, como siempre, como cada día lo besó y al primer roce, Guillermo se echó hacia atrás con náuseas mirándolo con furia, pero sabiendo que no era culpable de su estado.

… ¿Estás loco? ¿Te contagiaron tus pacientes, al fin?

… Perdón Juan. No pude, no quiero que me beses nunca… más.

… ¿Qué? ¿Cuándo peleamos nosotros que no me enteré?

… Nunca, creo. No es una pelea esto, Juan. Tampoco vine a quedarme.

… ¿Qué es entonces? ¿Pedro Beggio quizá?

… ¿Qué mierda estás diciendo?

.. Lo poco que alcanzó a ver y a contarme Matías. ¿Te calentaste con el pendejo asesino?

…. ¡Pedro no es un asesino!___ Gritando, llorando, todo a la vez, el cúmulo de todas las emociones de esas horas desbordaron en las palabras y en el puñetazo que estaba conteniendo desde hacía horas que terminó en la mandíbula de Juan, que sangrando quedó en el piso.

… Te volviste loco por un...

… No vuelvas a decirlo, porque no respondo de mí. Déjame ver, no quise pegarte.

Juan, no quise pegarte, pero no puedo soportar más que nadie difame a Pedro, quizá porque él se dice asesino, y sé que no lo es.

… Déjame Dr. No necesito al médico. Puedo  lavarme  la herida o aguantar trompadas, ahora.

.. Vine a buscar ropa, me quedaré unos días en el hospital.

… ¿Me estás dejando, vos? ¿Te estás yendo de casa?

… Creo... que sí. Lo siento Juan, no sé lo que me sucede, no quiero hacerte daño, necesito irme ahora, pero solamente vine a buscar algo de ropa, no esperaba encontrarte. Hablaremos en otro momento.

___ Juan solamente lo miraba, con un rostro impasible, sin siquiera levantarse, con la mano en la cara, sin sentir el dolor físico, sino otro mucho peor, y Guillermo caminó con el peso de la culpa hacia la habitación a armar un bolso con sus cosas, algunas… para acomodar en la habitación de guardia del hospital.

No tenía un plan. No premeditó lo sucedido, no pensó en alquilar un lugar,… la vida se le vino encima de golpe, más fuerte que la trompada que le diera a Juan, la vida con el alma y el cuerpo de Pedro Beggio lo cacheteó sin aviso, y lo despertó, de golpe despertó de un período de un largo adormecimiento, de una anestesia afectiva en la que ni siquiera tuvo conciencia de estar y permanecer.

No era culpa de nadie, era un plan predeterminado,…de Alguien a quienes  para los creyentes llamarían Dios, él… destino. Pero supo que no quería ni podía eludirlo, no  podría evadirse de lo que fuera que sucediese, pero… junto a... Pedro.

Bs. As., Martes 23 de junio de 2015.

Comisaría número 34.

… Buenas tardes, Oficial Gabriela Soria, pase por favor.

… Encantado, haber sabido antes no declaraba con el comisario belleza.

 Dr. Miguel Ángel Mendoza, para lo que disponga.___ La mirada le provocó a Gaby un estremecimiento generalizado, a punto estuvo de caer y de inmediato trató de disimularlo y se sentó derrumbándose. El tipo le pareció siniestro al verlo, sin más, y hubiese dado la vida por haberlo citado estando con Alberto.

… ¿Conoce usted a los hermanos Beggio?

… A la piba, la asesina que tienen acá. Al otro no tengo el gusto, por suerte.

…  Limítese a contestar sin emitir juicios por favor.

… ¿De dónde conoce a Claudia Beggio?

… De la casa, a ella y a Diana las vi un par de veces que visité la casa de mi pobre amigo.

… ¿Trabajaba para usted?

… Bueno, esa pregunta suena media rara. Soy un prestigioso abogado penalista, Oficial, y el pobre hombre  que mataron los hijos….

… Le dije que no emita juicios salvo que aporte pruebas.

… Perdón, pensé que estaba claro que son los asesinos, mi amigo era un hombre ejemplar, fue un abogado muy prestigioso  en Chicago, pero la burocracia de nuestro país lo desanimó para revalidar. Por eso  nos ayudaba de vez en cuando en el estudio.

… ¿En qué, haciendo qué lo ayudaba?

… En lo que se hace en un bufete oficial, ver expedientes, pensar, opinar, todo menos poner el gancho.

… ¿Cree que su... amigo... fuera capaz de maltratar o de violar a su mujer y a su hija?

… ¿Qué?  Mi amigo era el tipo más decente del mundo y las adoraba.___ Pareciendo conmovido y afectado, deseando poco menos que pena de muerte para los hijos y demasiado convencido, nada de lo cual engañó a Gabriela, pero decidió seguirle el juego.

… ¿Cree que la familia, tendría algún motivo para matar a su amigo Dr.?

.. ¿Qué sé yo?  Quizá no sabían que estaba arruinado y pensaron en heredarlo.

… El hijo hace años que llevaba una vida independiente, la hija no parece  necesitar mucho dinero para sus intereses.

… No lo tendrán tampoco, lo único que tenían era la casita, que hipotecó hace unos meses para pagar deudas, a mí me debe mucho dinero. Cuando la mujer no trabajaba hasta para comer me pedía a veces. A lo mejor la hija pensó que con la casa pagaría los estudios, y no sabía que estaba hipotecada, menos que me debe plata, y a otros amigos.

Claro que no pensaba morir tan pronto el pobre hombre.

… Creo que Claudia tiene muy en claro que lo único que le dejaría ese hombre eran deudas, Dr. Y no creo que no fuese a la Universidad por falta de dinero, no es lo que dice, al menos.

… ¿Declaró acaso?

.. No. Oficialmente no.

… No sé qué quieren hacer los Beggio, oficial, sólo sé que uno o los dos mataron a mi amigo, y que tienen que pagar por lo que hicieron.

… ¿Por qué intuyo que tiene demasiado encono o quizá está demasiado interesado en que no se interpongan en su camino?

… ¿Qué quiere decir, Oficial? Soy abogado, por tanto quiero justicia, carajo. Era mi amigo, y lo mataron. No hay nada para repartir acá.

…Aunque es una obviedad la respuesta, se lo preguntaré igual. Ya que es tan buen abogado penalista, y por la memoria de su gran amigo, ¿no se ofrecería como abogado de los hermanos?

… ¿Se está burlando Oficial o lo que tiene de bonita lo  tiene de tarada usted?

Si fuera Fiscal, que pronto lo seré, o Juez, los mandaría a pena de muerte, de existir claro.

..Comprendo. Muchas gracias por su tiempo, Dr.___ Gabriela sintió náuseas nuevamente, y lo hizo salir.

 Con lágrimas en los ojos se dejó caer en la silla y llamó a Alberto contándole lo sucedido.

Diego había enviado a la gente de la policía científica a dar vuelta la casa nuevamente. En el celular que quedó sobre la mesa justamente solamente estaba la llamada de Claudia a Pedro, según le contara ella a Gaby, y llamadas del occiso a Miguel Ángel Mendoza. Pero Claudia hablaba de varios tipos relacionados a su padre, aunque nada declarado de manera oficial.

De la clínica faltaban los análisis de flujo vaginal de Claudia, y Gaby pidió que buscaran ADN para cruzar con el del semen del padrastro, demorarían unos días pero podría confirmar su sospecha.

… ¿Pedro habló?

… No Gaby, ___ Un dolor punzante le laceraba el pecho ante la mentira, pero no podía traicionar a Guillermo. Alberto tenía una relación de lealtad única hacia él, ___ supongo que Pedro cree que si Claudia no habla o sostiene la teoría del desmayo, por haber sido encontrado con el arma supuestamente homicida, le imputarán los cargos a él.

Lo cierto es que los dos, si no dicen la verdad, con dos armas y las lesiones, están metidos en un quilombo infernal. Claudia no admite que su padre la violara, ellos no pueden hablar, nadie está de parte de ellos, tibiamente de Pedro los tíos, ahora aparece este Mendoza que pareciera querer librarse de ellos, bonita, ¿qué más puedes hacer?

…Supongo que esperar a Labrapoulus a ver si confiesa ante él, si tiene algún aura mágica que haga que Claudia diga la verdad. Albert, ninguna chica de dieciocho años se levanta Per se a matar a los padres, menos llama antes a un hermano que lleva mil años sin ver y lo deja pegado.

Estaba el camisón rasgado en el piso,  desnudos, con semen en las sábanas.

Para mí están todas las pruebas allí. Diana está muerta, pero Pedro y Claudia no nos dejan usarlas a su favor, y Miller con Diego no parecen tener entusiasmo en usarlas.

… Estos pibes se están autodestruyendo, Gaby, sus padres, al menos él,  seguramente ha estado años dañando a Diana y a Claudia, pero no quieren perjudicarlo, así funciona esta mierda de relación entre víctima- victimario.

… Albert, te dejo, estoy viendo a Miller saludando a Marcos Labrapoulus, por la contextura física doy por hecho que vino, gracias a Dios, tal vez logre que le asignen el caso, que los hermanos lo acepten y con él confiesen. Hablamos luego o nos veremos a la noche.

… Dale, quedamos en cenar juntos, ¿recuerdas?

… Sí. Gracias.

___ Guillermo no cruzó más palabras con Juan, que se lavó la cara y se echó en el sillón del living, pareció ausente al verlo salir. Guillermo temió una reacción tardía desmesurada, pero en ese momento, lo único que ansió era estar junto o cerca de Pedro.

Antes de regresar al pabellón quería ordenar su ropa en una de las habitaciones de los médicos de guardia, ducharse, cambiarse, casi como si fuese un adolescente en su primera cita,  sólo que su amor lo esperaba encerrado en un pabellón de un hospital público.

También necesitaba saber de Claudia y ver los test de Pedro.

__ Pedro sintió alivio, porque ante la mirada de dos guardias, pudo pasar dos horas en el gimnasio. Su condición le disparaba sin necesidad de más, estados de ansiedad generalizada, y el gimnasio era una manera de descargarla, y corrió hasta quedar sin fuerzas y sin aire en la cinta, pasó por todos los aparatos, hasta que le dijeron que debía regresar.

Se duchó casi olvidado de dónde estaba hasta que vio el ambo limpio, y  escuchó el repiquetear de la lluvia en la ventanilla del pabellón, entonces recién regresó a la realidad, y en ella al hombre que había entrado en ella en el peor momento, sin permiso, sin aviso, y que al parecer se negaría a salir.

Guillermo Graziani. El hombre que amaba, porque si bien no podía comparar con ninguna mujer ni con otro hombre, nunca estuvo tan seguro de algo en su vida.

En el peor momento, en el más inoportuno, en el que una burla del destino lo reunió con su pasado dejándolo a un paso del penal, apareció  la luz, la verdadera luz de la vida que nunca antes creyó conocer. La luz única e inconfundible del Amor.

CONTINUARÁ.