ATRAPADOS. CAPÍTULO CUARTO.

ATRAPADOS.



CAPÍTULO CUARTO.







El Dorado, Misiones, miércoles 28 de octubre de 2015.







___Pedro luchó contra lo que su cuerpo y su mente deseaban, contra la fuerza de gravedad, contra todo orden racional, y se obligó a ingresar al micro-hospital, sin poder alertar a Guillermo de la trampa, de la burla del destino, de la presencia de su siniestro hermano, pero además su mente, su psiquis, se habían convertido en una hora… en un remolino de sentimientos y emociones encontradas incomprensibles, desconocidas, imposibles de descifrar, menos bajo aquellas circunstancias.







“… ¿Qué fue todo lo que sentí al percibirte y luego al verte?

¿Quién eres en mi vida Guillermo Graziani si apenas te he visto?

¿Por qué esto duele más que la enfermedad de Camila?



Las sensaciones son en algo parecidas a las que experimenté de niño casi… con… Diego, pero mil veces más intensas y profundas.

No, no es lo mismo, no. Entones estaba confundido. No es eso, no se parecen. Esto es meramente culpa, la maldita culpa de entregarte a ese ser siniestro que me amenaza.



¿Y a ti qué te sucedió al verme? Acabas de casarte, estabas de luna de miel.

No tienes que confundirte como lo hizo también Matías. ¿Por qué mierda provoco esto en los hombres?



Lo que sea que hayas sentido de bueno, desaparecerá cuando empieces a odiarme. Quizá sea lo mejor. Que pienses que soy un traidor que te entregó sin más y así me odies. Así debe ser. Y yo tengo que hacer esto para recuperar mi vida y salvar a Camila. Es así.



No sé si soy religioso, si alguna vez creí en Dios, pero si existe, le pido que te salve, que Matías pueda sacarte de acá. Si eso ocurre, entonces sabré que Dios existe.”







… ¿Le colocamos una vía a cada uno Dr.?







___La ronca voz de uno de los hombres de Miguel lo sacó de la ensoñación.



Regresó a la realidad sacudiendo la cabeza, mientras la mirada de Guillermo seguía en él.







.. Lo haré yo.

… Dr., podemos hacerlo.

… Dije que lo haré yo.

…Está bien, usted manda.

..¿Sucede algo, Pedro?





__ Se acercó a Guillermo y en un hilo de voz susurró.









.. Mi enfermera de confianza trabaja de día, estos no son diplomados, les pondré un suero para lavar el resto de droga por riñón y hacer análisis sacando sangre antes de ponerlo, pero lo haré yo.







__ Trémulo y sintiendo que Guillermo tenía la capacidad de leer su desesperada confusión, se volvió hacia los dos hombres.









.. ¿Mi esposa y mi hijo?

… Adentro, Dr. En el privado.

.. Bien. No toquen a los Dres., ya regreso a colocarles la vía.



… ¿Le sucede algo a tu mujer, Pedro?

…. Sí. No estaba bien, me llamó y como tuve el llamado de la posada a la vez, mandé a buscarla.



Regreso en unos minutos.

… Estamos bien, ve, por favor.



… Acuéstense. Si quieren ponerse las batas mejor.

… Esperaremos al Dr.

… Como quieran.







“… ¿Qué te sucede Pedro? ¿Tan mal está tu esposa? ¿Qué puedo hacer por vos? No puedo dejarte ni puedo tenerte, y tendré que irme. Aunque en verdad me siento mal, me falta el aire, me duele el pecho, pero me duele lo que presiento en vos, no es por la droga.



¿Y Juan? Acabo de casarme con un hombre equivocado.

¿Qué voy a hacer ahora?

¿Cómo podré sobrevivir en el error luego de saber que existes?

¿Acaso tengo que confiar en que el destino te lleve a Bs. As. por la enfermedad de tu esposa?

Me parece macabro.”







… Guille. ¡Ey!

… Juan, ¿qué sucede?

… A vos ¿qué te pasa? ¿Le viste la cara a esos dos tipos?

Quiero salir de acá, me siento bien. Íbamos a hacer dedo en la ruta. Vamos a buscar la ropa y hagámoslo.

.. No. Pedro dijo que alguien nos ayudará. No me siento bien yo.

… ¿Es por él, no? ¿Te crees que no me di cuenta cómo te derrites al mirarlo?

… Juan, por favor, lo menos que necesito son tus celos, ahora. Déjame en paz.









___ Pedro ingresó al despacho y vio en la camilla a Camila y al nene dormidos.



“¿Dormidos o inconcientes?

La furia bulló en la sangre y se abalanzó sobre Miguel, apretándole el cuello contra la pared con el antebrazo, hasta hacerle salir los ojos de las órbitas.









.. ¿Qué les hiciste, mierda? ¿La drogaste?

… Déjame, loco de mierda. Acá el que manda soy yo. Está dormida, nada más.

Ya despertará. Tenía que traerla de alguna manera. El nene estaba dormido de antes.



Al fin no somos tan distintos vos y yo, a ver si te das cuenta de una vez por todas.



Vos usas drogas llamadas legales, incluida la morfina para casos como los de ella, y yo… otras, que a los hombres se les canta decir que son ilegales. Nada más.

… Necesito que despierten, hablar con ella, que me vea y se quede tranquila.

… Ya va a despertar, no le hice nada a pesar de ser la hija de Moravia, el maldito juez que me hizo inhabilitar junto con el puto que trajiste. Al menos lo trajiste.



Ahora quedarán en manos de mis muchachos, con vos vamos a ir a dar un paseo.

…. ¿Qué? No iré a ninguna parte con vos, menos sin hablar antes con Camila.



Y me comprometí a ponerles el suero yo, al menos.

¿Qué harás con ellos?



… No es asunto tuyo.

… Estás en mi lugar, mierda, claro que es asunto mío. Los traje a mi hospital.

… Les daré algo suavecito para dormirlos, luego me los llevaré. Y punto.



Pero ve a ponerles el suero si quieres quedar bien, no tengo problemas. Mientras…. Esperaremos a que la nenita despierte.







___ Pedro sentía una vorágine de emociones, sentimientos, la ira y el asco de sentir a ese hombre le provocaban ganas de vomitar, náuseas, mezcladas con el pánico de la amenaza cierta hacia los suyos y ahora hacia Guillermo, además de todo lo que ese hombre le generaba que nunca jamás había sentido.



¿Sería culpa?







“…. Guillermo ¿todo lo que sentí será lo que llaman culpa?



Confío en que Matías pueda liberarlos si me llevo a éste, pero acaso ¿podrá?

¿Y si lo único que logro es que lo maten también? ¿Cómo seguiré sobreviviendo?



Pero Camila y José son inocentes, los va a matar. Estoy atrapado sin remedio. Tengo que hacer lo que me pida y confiar en la existencia de Dios, en que Matías los saque de acá y se salven.”







… ¿Qué más quieres de mí?___Le clavó la mirada llena de angustia en los ojos claros.



… Fácil. A cambio de que sigas vivo, mientras cuidamos a tu mujer y a tu hijo, darás un paseo en una avioneta privada que está esperándote.

… ¿Qué?

… Que ahora, o bueno, luego de que esta estúpida despierte y que le pongas el suero a esos dos, te llevaré a una avioneta, irás a Bs. As. Cuando llegues mis muchachos te estarán esperando en Don Torcuato. Te llevarán a la Policía Federal, a la Dirección de Control de Estupefacientes, a los medios, y vas a declarar lo que hizo mi hermano acá, con el puto del marido.



___ Pedro lo miró incrédulo, atónito.





.. ¿Qué cosa?

… Pero… pareces estúpido. Que se drogaron, que brindaron un espectáculo público, que son traficantes, y vas a mostrar las pruebas, sencillo. Tan sencillo como que todos crean que éstos…. vinieron a encontrarse con los jefes narcos acá, y que se les fue la mano en una fiestita.

… ¡Qué hijo de puta! Tú los drogaste, ellos no consumen ni trafican, menos tienen idea de que estás acá o de la banda que manejas.

…Eso lo sabemos vos y yo, tarado.



… Yo no voy a hacer semejante cosa. ¿Qué quieres ganar mintiendo así? Ya los tienes ¿no te basta?

… No. Claro que no. Antes de matarlo, quiero que todo el país vea a estos putos revolcándose en el piso drogados, quiero que el gran Guillermo Graziani aparezca ante todos como un drogadicto traficante puto, que mi sobrino vea al papá. ¡Todos!

… Estás totalmente loco. ¿Y todo eso porque seguramente te descubrieron en esto con Moravia y te inhabilitaron?

… Esa fue la frutilla del postre, y no tengo tiempo de ponerme a contarte todo lo que tengo para decir de ese desgraciado.



Mira.

… ¿Qué es eso?

… Lo que vas a mostrar. Estos degenerados se filmaron su propia orgía con sus celulares, mira que linda película, además de las fotos claro.

…. ¡Dios! Vos los tenías, y esto lo tuvo que haber hecho… Jorge. ¿Fue él quien los filmó?

… Deja en paz a ese desgraciado.



Mira, pendejo, aquellos dos están esperando demasiado, pueden sospechar y no te conviene que los tenga que matar ahora y acá, quiero antes que disfruten de esto, que se vean en la tele, que se hagan famosos y lo sepan, que les quiten la matrícula y todo,…, como a mí.



En el mismo celular de Guillermo, tienes grabado lo que vas a declarar. Lo escucharás en la avioneta y lo eliminarás, obviamente.



No vas a mentir en definitiva, dirás lo que viste, por lo que te llamaron, y claro que les sacarás sangre ahora, la dejarás en proceso, y parte la llevarás a analizar como corresponde allá, para que queden las pruebas de todo.



Yo ahora , cuando te suba a la avioneta, regresaré, ellos estarán dormiditos ya, de ello se encargarán los muchachos luego de que nos vayamos, y los llevaré conmigo, acá te dejaremos todo limpio, si vemos por la tele lo que te ordené, claro, en el primer noticiero de la mañana tiene que explotar esto. En los diarios, en tribunales, ¡pum! La bomba Graziani por todos lados.





___ Pedro sentía la loza que se deslizaba en el pecho sin piedad, mientas una fuerte mano le apretaba la garganta con crueldad, impidiéndole emitir una sílaba siquiera, las vísceras se retorcieron por igual creando punzadas lacerantes en el vientre. Supo lo que era el dolor. Era dolor. Se convirtió en dolor…., puro, primitivo, visceral, absoluto dolor. Creyó no poder llegar nunca más a sentir algo que no fuera… dolor.









.. ¿Qué te pasa? No te vas a desmayar vos, ahora.

…Déjame llevarme a Camila y al nene y dejarlos allá. Necesita que la operen.

… ¡Ja, ja, ja! ¿Me viste cara de pelotudo? Sí,…, te voy a dar el viaje gratis para toda la familia, nada menos que para la hija de Moravia, agradece que va a morir solita, debe ser pagando culpas del padre, pobrecita, lástima me da. Pero de lo contrario, tendría que matarla también.

Se queda acá, estúpido. Cuando hayas hablado con ella le darás algo suavecito, como para que no joda ni digas que la drogo yo, y cuando me lleve a aquellos la llevaré conmigo, te limpiaremos todo acá, mañana tu enfermera vendrá. Dirá que tuviste que viajar de urgencia por su salud, que regresas a mediodía a los sumo, y así será. Le dejarás una nota.



Cuando aterrice la avioneta de regreso, a ella y al nene, los llevaré a tu casa. Más honesto no puedo ser.



Y nada de hacerte el vivo en Bs. As. e intentar llegar a tu suegro o a los socios de éste, porque no la vas a contar. Y después de matarte a vos la mato a ésta y al nene.





___ A Pedro el corazón le dio un vuelto, recordando de súbito desde que Camila le anunciara el embarazo, al día del parto en que él recibió al nene, a las noches revolcándose a su lado jugando en la casa y las lágrimas pugnaron detrás de los párpados por caer.









…Sabes que soy el único médico, que pueden necesitarme, morir gente en horas.



No te importa nada ni nadie. Nada.

… Nada, pibe. Solamente hacer justicia con el degenerado de mi hermano.

…¿Justicia? ¿Le llamas justicia a drogarlo, difamarlo, torturarlo y matarlo?

… En este caso sí, y me estoy quedando corto. Algún día vendré de visita y sabrás todo lo que puedo contarte de ese tipo.



..¿Pedro?

.. Está despertando la bella durmiente, me voy a esconder en el baño. Apura el trámite que necesito que llegues a Bs. As.







__ Miguel salió hacia el baño y Pedro se sentó junto a Camila acariciándole el pelo que siempre adoró, besándole suave el dorso de las manos, mientras José dormía a su lado como siempre entre ellos dos.





Camila sentía que el cuerpo pesaba toneladas, no podía mover ni los dedos siquiera, la cabeza estaba en otro sitio deseando aferrarse al aroma conocido, algo le decía que Pedro estaba allí, y los párpados se negaban a obedecer las órdenes que intentó darles.









… Mi amor, acá estoy, tranquila. Estás en el hospital.







___ Pedro le besaba las manos y sin remedio el telón de agua se derramó y Camila al sentirlas en la piel abrió los ojos llevando hacia él la mirada, ojerosa, cansada, débil.









…Al fin.

… Chsss.

… Me siento rara, pesada, casi no puedo moverme.

… Lo sé.__ Pedro ahora habló en susurros.



.. Camila, amor, escúchame. ¿Puedes entender lo que digo?

… Sí. ¿Quién me trajo acá? ¿Y al nene?

… Estamos atrapados, amenazados, no te asustes, por favor. Tranquila.

.. Pero… nunca nadie nos amenazó… somos médicos.

.. Esta vez nos tocó. Les servimos.

.. ¿A quiénes?

.. A los narcos. Amor, todo estará bien, si cumplo con lo que me piden todo saldrá bien. Ahora tendré que irme con ellos unas horas.



… ¿Me dejarás acá? ¿Somos rehenes con José?

… Algo así, pero escucha, por favor. Un amigo los rescatará.

… No tenemos amigos. No me mientas.

… No bonita, jamás te mentiría. No lo conoces, se llama Matías, es una abogado penalista de capital, de Bs. As. que estaba paseando acá, nos conocimos por casualidad y nos ayudará porque conoce al jefe de esta banda.



Cuando me lo lleve en un rato, debe pensar que te inyecté algo para dormirte, cuando regrese te harás la dormida, ¿sí?

… Sí.

.. No te daré nada. Acá no te molestarán por un rato. Hay dos hombres en el consultorio de adelante que custodian a otros dos abogados de Bs. As. a los que quieren secuestrar.

… ¡Dios!



… Cuando yo salga, ve hacia la puerta de atrás, la que da a la reserva, estoy seguro que no la han visto. Matías es alto, delgado, de ojos claros, estará en nuestro auto.



Espéralo con el nene en la puerta de atrás o cuando veas que llega,…, sube al auto y acomoda al nene, él entrará a intentar liberar a los demás.

… ¿Y si no puede?

… Esperarás cinco a diez minutos, si Matías cae, si los atraparan, escapa amor, te pongo dinero en el bolsillo, te alcanzará. Si Matías no regresara, ve a Posadas y toma el primer vuelo a Bs. As. Si él logra rescatar a sus amigos igual te llevará al aeropuerto.

… ¿Y vos?

… Los buscaré allá, preciosa, por favor, me tiene atrapado porque me amenaza con matarlos, si ustedes llegan a lo de tu padre… me liberarás, ¿entiendes?



Matías te hará subir al primer vuelo, llamarás al abordarlo a Orestes para que te espere en el aeropuerto, para burlar a estos tipos. Cuando estés con tu padre,…, Matías te habrá dado el número de su celular que tengo yo ahora y me enviarás un mensaje, entonces sabré que ya no tengo que regresar acá, que ustedes estarán a salvo.

… Pero... cuando este tipo vea que no regresas, cuando se entere que escapamos...

… Lo sé, querrá matarme. Linda tienes que ponerte en manos de Orestes, por favor hermosa. Matías lo conoce. Me esconderé en una casa suya, tengo la llave, te contactaré. Quizá tu papá tenga que ayudarme a salir del país por un tiempo, hasta que agarren a esta banda, él lo conoce.



… Mi amor, no quiero, tengo miedo de no volver a verte. Puedo...

…. Chsss. __Pedro con el alma en las manos le rozó los labios y escuchando pasos le susurró: “te amo”, cuídate y cuida a José, los veré pronto, ahora cierra los ojos, te amo.



… ¿Ya terminaste?



¿La dormiste?

… Sí, déjala en paz, estaba adormilada y no costó nada, dormirá un día entero.

… Elijo creerte.

… Déjame darle una gotitas suaves al nene, ¿sabes alimentarlo? Tiene tres añitos.

.. Pero sí, tengo mujeres en la banda, che, si llora no importa, él no importa que despierte, me gustan los niños.

… Cuídalo, por favor.



… Vamos, ve a sacar las muestras a aquellos que nos vamos.









___ Pedro anegado,.., besó en la coronilla a su familia, se secó los lagrimones con la ropa, y derrotado fue a la sala de adelante…. donde lo primero que vio fue la mirada penetrante, y Guillermo en los ojos marrones percibió tanto dolor, que sintió un latigazo, o peor, uno o varios puñales escarbándole con ahínco su corazón.



La mirada de Pedro era dolor, él se convirtió en el mismo dolor, y no sabía el por qué, pero supo que no podría hacer preguntas.







___Pedro en silencio tenso fue a buscar gasas, alcohol, sueros, agujas, guías, y se aproximó primero a Juan. Le colocó la vía, le sacó la muestra que dividió en dos frascos, y lo dejó con el suero, para luego auscultarlo y comprobar la presión arterial, y las pulsaciones más un examen neurológico que salvo algunos signos oculares menores fueron normales.











… ¿Y?

… Bastante bien, en una hora estará bien.









___ A medida que fue acercándose a Guillermo, todo lo que vivieron en el hostal y más reapareció, las miradas se encontraron y eran dolor, los corazones enloquecieron bravíos empujando las costillas y eran dolor, la respiración de los dos escapó y en el falta de aire hubo dolor, y cuando le levantó la camisa y la desabotonó para auscultarlo, sintió que las piernas se negaban a seguir sosteniéndolo, y terminó de expulsar el poco aire que quedaba en el interior, mientras Guillermo suspiró por igual.







… Voy a auscultarte y a hacerte las mismas pruebas que a Juan, Guillermo, respira hondo, por favor.







___ Guillermo en las palabras sintió caricias, en el aliento en la espalda fuego, y cuando le tomó el brazo para sacarle sangre creyó que moriría allí, y no le importó, en los dos detonaron kilos de explosivos desde las profundidades del ser, desde la esencia misma de la vida, oleadas de sensaciones embotaron la mente, la razón se fugó como la primera vez, el aroma los mareó a los dos, y a punto estuvo Pedro de errar en el pinchazo, pero abrió y cerró mil veces los ojos para enfocar, hasta que al fin lo consiguió, desesperado por alejarse de las fuerzas electro-magnéticas extrasensoriales que lo impulsaban a la fusión absoluta con ese hombre que estaba entregando al destino, a Matías y a Dios.



Y cuando se apartó, ambos jadeaban como si acabaran de correr una maratón, y Juan lo supo, lo vio.









… Dr., lo esperan, nosotros los cuidaremos ahora.

… Lo sé.

…¿Te vas?

… Lo siento, Guillermo, tengo otra urgencia, quedan con mi familia que está en el otro consultorio. Todo estará bien.

… Te estaremos esperando.

… Quizá.

… Sí, quiero esperarte.

… Me esperan con urgencia, perdón.







___Las miradas se encontraron y los dos supieron que en ella y con ella hicieron allí frente a todos,…, por primera vez el amor. Sin contacto, sin nada más que viendo la fusión álmica en el espejo del otro.







___Pedro agobiado, intentando agotar las últimas fuerzas, se obligó a caminar hacia atrás hasta la puerta, Miguel ya lo esperaba afuera. Había usado una puerta lateral que le había abierto premeditadamente para que no viera la de atrás, tras la cual, el Sonic azul de Pedro esperaba, y Matías en él.



Al llegar a la puerta del consultorio, a punto de desmoronarse en pedacitos del ser, se apoyó en el umbral acariciándolo con la mirada, por última vez, los ojos negros lo quemaron a él, y musitó en susurros: perdón.





__Apenas se había deslizado dos pasos cuando vibró el celular, con un número desconocido, y supo que era Matías, y en un hilo, contestó.











… ¿Matías?

… Estoy viendo a Mendoza junto a un auto afuera, estoy detrás con el tuyo.



No pude comprar celular nuevo, robé uno en el hostal, en la mañana compraré y te llamaré, si sobrevivo.

… Matías, cuando veas que subo al auto con Mendoza, entra, Camila y el nene están despiertos correrán al auto, ven adelante a sacar a Guillermo y a Juan.



Hay un arma en el escritorio del fondo, puedes golpear a alguno de los dos monos.



Guillermo y Juan están bien y podrán ayudar.



No puedo contarte lo que tengo que hacer ahora, pero sácalos ya, antes que Mendoza regrese.



Dile lo que tuve que hacer, lleva a Camila al vuelo, y que ellos salgan en colectivo a Fox de Iguazú, no pueden quedarse en el país, saldrá el video de lo de anoche por todos lados, los acusarán de narcos, que saquen todo el dinero de sus cuentas en Iguazú para que no haya movimiento alguno en Brasil. Tienen encima los documentos por suerte.



Les alcanzará para moverse fuera en colectivo, que vayan a Uruguay, a algún sitio donde los puedan ayudar desde Bs. As., sácalos Matías.

… ¿Y vos?

… Cuando sepa que Camila está con su padre y ellos en Fox de Iguazú, iré a tu casa, deja mi auto en el Hostal, recoge tus cosas y las de ellos.



Dile a Jorge que le dé la llave del auto a Nélida, ella sabe manejar, y si no puedo regresar, hasta que llegue otro médico,…, podrán usar dos vehículos para el traslado de pacientes al Hospital Regional.



Salgo Matías, Gracias, suerte, si esto sale, estaré esperándote en tu casa en Bs. As., pero me convertiré en un fugitivo, como Guillermo.









CONTINUARÁ.