miércoles, 25 de noviembre de 2015

ATRAPADOS. CAPÍTULO DOCE.




















ATRAPADOS.





CAPÍTULO 12.





BRASIL, FLORIANÓPOLIS, lunes 02 de noviembre de 2015.









___El celular de Pedro vibró e interrumpió la magia del abrazo, y ante el llamado, la mirada de Pedro mostró incógnitas y se incorporó…. dejando a Guillermo asustado.











“…Guille, me arropas, me sentí cómodo, soñando el más hermoso de los sueños, y me siento totalmente feliz, lánguido, embebido en tu aroma, pero al mismo tiempo tengo dudas y me siento culpable.

Siento el calor de tu cuerpo desde acá, lo sentiría ahora así estuviese a kilómetros de distancia, como un baño de sol escaldando la piel.



No hemos hecho nada vergonzoso, excepto que desearte estando casado lo sea. Estas extrañas sensaciones que me provocas, no son solamente deseo, ahora lo sé y al mismo tiempo conforman el deseo más puro que jamás imaginé.”







“… ¡Qué torpe, te asusté precioso! Me vas a odiar y nunca podré tenerte si no me calmo. Si no te doy tiempo para descubrir cada cosa en el diario compartir.



Si te hubiera odiado, si hubieses sido un traidor, todo quizá hubiera sido más fácil.



Podría ser cruel, convencerte de que deberías salir de mi vida, decir la verdad, regresar junto a Camila. Si fuera insultante y desagradable,…, quizá lo que sientes desaparecería.

Pero no puedo, no puedo renunciar a descubrir al fin que el deseo y el amor están entrelazados en vos y con vos.

Jamás te hubiera odiado así no fueras un ser de luz, te amo y te deseo con desesperación y aunque no creía en Dios, aunque jamás fui religioso, hoy rezaría por poder hacerte feliz.



Es extraordinario lo que puede llevar a un hombre descreído como era yo, a encontrarse con Dios.

Te miro y luego de ese beso deseo continuar, aunque le ordene a mi cuerpo calmarse se excita a cada instante más.”







__Guillermo aspiró el aire que sus pulmones pudieron cobijar,…, mientras Pedro sin apartar la mirada, turbado y sonrojado, respondió al llamado de Matías.





… ¡Hola, Matías!

… ¿Estás bien? ¿Encontraste a Guillermo?

… Todo bien, sí. Me estoy instalando. Ha encontrado una casa aislada y por dinero poco le preguntaron.



¿Alguna novedad?

… No por ahora, quería asegurarme de que ya estabas fuera de acá. La prensa se va extendiendo, la noticia también, y deseba saberte seguro.

… Lo estamos, creo, al menos por ahora.



Cuida de los nuestros allá.

¿Hablaste con Orestes?

… No oficialmente todavía más de lo que sabes. En la mañana nos comunicaremos con Centrales de Inteligencia de países vecinos y direcciones de Estupefacientes, esta vez el operativo será por todos, y luego…. entre ellos,…, tendremos que salvarlos a ustedes.

… Hagan lo que deban para atrapar a Mendoza y a los jefes de la organización, para desbaratarlos en la mayor cantidad de países que puedan, nos cuidaremos.



De acuerdo a lo que me vayas diciendo nos iremos moviendo. Gracias por todo.









__ Pedro se quedó apoyado en la mesa del living, Guillermo en los codos y lo escudriñó con ahínco,…, pensándolo asustado, o confundido.









… Perdón. Me apuré creo. Quizá no estabas preparado para…

… Chsss.

Fue perfecto, Guille, me encantó estar en tus brazos, que me comiences a enseñar a besarte, porque ya no besaré nunca a nadie más.







___ Las palabras se hundieron en el alma de Guillermo haciendo que lágrimas cargadas de alegría le escocieran los ojos.







… ¿Por qué te apartaste y te percibo confundido? Y no me digas que fue por el llamado.

… No. Pero tampoco fue por el beso o porque dude de lo que sentí.



Guille, yo jamás miento, bueno mira justo el momento en que vengo a decirlo, con las infamias que dije de ti. Pero fue otra cosa.

… Lo sé. ¿Qué es lo que te tortura? ¿Es Camila?



Si necesitaras tiempo, lo entenderé, con tal de albergar la esperanza de que algún día construiremos algo juntos, entenderé.

… No. Ya no podría estar con Camila como mujer, ni con nadie. Vine a descubrir lo que me sucedía y ahora lo sé.

…¿Y qué te sucede, Pedro?

… Que te amo, no sé cómo ni cuándo, pero te amo, quiero pasar la vida contigo.

Pero…

…¿Pero…?

…Camila está muy enferma, lo sabes, y mi niño es muy pequeñito, apenas tiene tres años.

… Lo sé, el mío tiene veinte más y lo extraño igual.

.. Me refiero a que el nene me necesita más que nunca, quizá me necesite más aun si Camila…, no puedo ni pensarlo siquiera pero es una posibilidad.

… Si Camila muere el nene solamente te tendrá a vos, y al abuelo, pero nunca serás vos.

… Es la primera vez que lo dejo. Nunca pasó una noche sin mí, siempre me esperaba, llegara tarde o no, y jugábamos revolcándonos hasta que se dormía en mis brazos.

… Es precioso, igual a vos.

… Lo que quiero decirte, es que no puedo prometerte que no tenga que ir y venir, que arriesgarme a entrar a Argentina a verlos, porque lo haré.

.. Lo sé, lo imaginé. Me muero de miedo, pero no puedo pedirte que no lo hagas, lo entiendo.



Sé que desde acá quizá sea incómodo, que nos conviene más ir a Uruguay, lo iremos evaluando.



Entiendo que si Camila te necesitara, o para ver a tu niño tendrás que ir como sea de vez en cuando.



Es más, aún estás a tiempo de regresar, digan la verdad con Matías en todos lados, me las arreglaré.

.. No. Eso ya lo evaluamos, no es una opción ahora. Recién cuando desbaraten esta red lo haremos, y seré libre de limpiar tu nombre, tu imagen, la mía.



Lo importante es que tu gente sabe la verdad, y los míos que me importan también, el resto se verá luego.

… ¿Sabes que Camila en el viaje a Iguazú, me pidió que te cuidara cuando ella no estuviera?

…¿Qué? ¿De verdad?

.. Sí, te lo prometo.

… Te creo, porque me pidió que no me aleje de ustedes, de los nuevos amigos, de Bs. As. creo.









___Pedro se acercó nuevamente, arrodillándose en la alfombra,…, recostándose en las piernas de Guillermo, que trémulo llevó los dedos a enredarlos en ese cabello que había imaginado suave como plumas, o algodón, y los dejó perderse allí…. mientras Pedro le tomó una mano y le besó el dorso haciéndolo estremecer.



Lo que el pánico antes había desencadenado…. como escalofríos invadiendo la columna, y el corazón con latidos acelerados, ahora se convirtió en llamas en el vientre, en latidos desbocados y en el aire contenido en la expectación.







… Cielito lindo, todavía estás a tiempo de huir de mí, de regresar y decir la verdad, Camila y José, yo inclusive estamos a resguardo.

… No. No es así y no es mi deseo tampoco. Vine para quedarme a tu lado, para vivir lo que siento ahora que lo descubrí.



No podemos desdecirnos ahora, Mendoza se enfurecería y tomaría revancha haciéndoles daño a los nuestros, mi niño y tu hijo están a su alcance, tus amigos y socios también. No puedo distanciarme de la tragedia de ver morir inocentes, como Juan, he visto demasiado en la reserva y en la selva. Han muerto niños en mis brazos, maltratados, desnutridos, bebés.



Sus vientres abultados con sus miembros sin tejidos, la imagen de la desnutrición, me perseguirá de por vida en sueños, no puedo cargar con muertes ni sufrimiento que pueda evitar, Guille.



No imaginas el pánico en el que viví y continúo, viendo a mi niño sano, lo que significaría arriesgarlo. No podría seguir viviendo.

.. No repitas semejante cosa. Si algo le pasara a ese ángel que es tu hijo, a Miguel lo mataría con mis manos, te lo juro.

… No. No repitas eso, no eres como él.

.. Lo sé, pero intentamos todo por vía de la justicia, logramos inhabilitarlo, sacarlo de la Fiscalía hace dos años y escapó, ha seguido asesinando gente todo este tiempo.

… Chsss.



___Las miradas se encontraron, y las mejillas percibieron el aliento cálido del otro que se derramó hacia el cuello, mientras los dedos exploraron las líneas del perfil, los labios, la barbilla,…. leves, como plumitas en el otro, detonando chispitas en cada terminal nerviosa, como demostración palpable de que todo cambiaría sin remedio entre ellos.



Guillermo deslizó las fuertes manos por la espalda de Pedro, lo atrajo hacia él, y percibió que estaba latiendo en forma dolorosa, cuando los labios se encontraron, lánguidos esta vez, en caricias perezosas de descubrimiento y conquista a la par, entreabriéndose invitando a continuar la caminata por resquicios desconocidos, recovecos desiertos, ávidos de recibir, de albergar, y las lenguas se aventuraron muy despacio hacia cada uno, de a poco, temerosas, ardientes, mientras los cuerpos se mantuvieron paralizados en el contacto.



Guillermo salió de paseo hasta soplar el lóbulo de la oreja, y regresó hacia las comisuras, mientras Pedro le facilitaba los accesos ronroneando por primera vez en su vida, mientras con el alma en las manos, Guillermo le enmarcó el rostro y se aventuró a demarcar seguro su territorio, a marcarlo como suyo, mientras Pedro le permitió la conquista y exploración,…. minuciosa y acuciante, profunda, sin alcanzar a pensar adónde irían las lenguas porque ya estaban en otro lugar.



Pedro le rodeó el cuello y Guillermo coló las manos sacándole la remera del cinto, para encontrarse con la suavidad imaginada de la piel añorada, y al fin llegar donde hacia tiempo deseaba posar y jugar con sus dedos, acariciando los pezones con los pulgares, haciéndolos rodar, mientras sintió el estremecimiento en su hombre que gimió en la agonía de la garganta, sintiendo que perdería el control, ante la sinfonía de desesperados jadeos de uno y del otro, con tan mínima estimulación, y de pronto se apartó, quedando la mirada, viendo los labios húmedos, hinchados, el rubor, el pelo alborotado , signos de la primera intrusión.









…¿Estás bien?

.. Sí. Sintiendo mil cosas a la vez, mareado, encendido.



¿Podríamos bajar a la playa un rato?

… ¿Ahora?

… Sí, hacer esto mismo al aire libre, quizá así el incendio sea menor.







__Pedro le tendió la mano y Guillermo sonrió dejándose llevar hacia la puerta- ventana que al correrla, daba acceso a la playa, y el golpeteo de las olas los cacheteó al salir, sintiéndose abrazados por la brisa y el aroma se mezcló con el sabor del otro, embriagándolos mucho más, y más al descender el sendero hacia el mar, bajo el manto aterciopelado manchado de hilachas plateadas de luna y estrellas asombradas, por la presencia de seres que iluminaban con el mismo resplandor universal.

Desde que se habían declarado su amor, cada instante ahora les encogía el estómago de emoción, los hacía estremecer, cada mirada, cada roce, cada contacto tenía otro significado, y apenas podían respirar.







… No lleguemos al mar ahora, por la mañana, ¿sí?

… Está bien, necesitaba aspirar el aire, el aroma, es una ensoñación estar juntos acá, mientras las circunstancias son tan adversas. Curioso designio del destino que dictaminó que nos encontráramos así.

… No me importa, volvería a pasar por todo, si al final de la travesía estuviera tu sonrisa, tus labios. ¿Te arrepientes?

… De amarte, no. De haber mentido por la orden de tu hermano, quizá, pero no vi ni veo opción alguna tratándose de gente así.

… Gracias a ello estamos acá, no te sientas culpable.___La ronquera de la voz aceleró los sentidos, generando la excitación suficiente para que para mantenerse en pie se acercaran a un árbol donde Pedro se apoyó,…, antes que los labios finos aterrizaran en los suyos sin remedio otra vez.



Fue un beso ávido, apremiante, exigente, denotando años de experiencia sensual, pero Pedro decidió no dejarse intimidar, y se entregó en cuerpo y alma en él, devolviéndolo con el mismo ahínco y ardor, con las manos recorriéndose sobre la ropa desencadenando llamaradas por donde surcaban.



Guillermo llevó los dedos nuevamente a las cumbres y esta vez fue por más, levantando la remera, descendió a chuparlas una y otra, dejando estelas húmedas,…, mientras Pedro cerró los ojos para no gritar, en la sensación exquisita, mágica, perfecta de cada cosa que comenzaba a descubrir, y para cuando gimió,…, las manos de Guillermo estaban ahuecadas en su virilidad, haciendo que se arqueara separando las piernas deseando morir allí…. cuando las caricias imprudentes se iniciaron, mientras la mirada más oscura que la noche, turbia y anhelante lo dejó sin razón, sin reparos, sin indecisiones, dispuesto a dejarlo hacer lo que su antojo porfiado supiera y quisiera enseñarle, aunque ni supo si podría soportar tantas experiencias y sensaciones en cúmulo, nuevas, apremiantes, inusitadas, y no imaginadas jamás.



Con voz ronca y sensual lo oía entre las olas decir lo que haría, supo que por sobre la cabeza le quitó la remera arrojándola a la arena, ahuecando las manos en los hombros, paseando la lengua por el cuello, y la nuca, mientras un furor creciente estremeció el cuerpo, hasta que se hizo casi insoportable cual tortura dulce en la sangre y en el palpitar, y el fuego ardía sin cesar de uno al otro en cada caricia, en cada modelaje, cuando las manos demarcaron la columna vertebral descendiendo más allá.



Guillermo seguía con la lengua reclamando en la boca, cuando las manos estaban por doquier, a veces susurrando los hechos, las más…. aspirando el sabor, deleitándose en el aroma, consumiéndose a la vez en el mismo ardor, cuando de pronto las palmas de Pedro estaban surcando su espalda que estaba perlada, empapada y caliente, y jadeando se apartaron para respirar.





… ¿Entramos?

… Bueno, tengo sed, mucha.

…¿Quieres dormir conmigo, Pedro?

… No sé, creo que no puedo vivir un momento más así, sin ti, ni un minuto más.



No sé tú pero yo no puedo seguir sin ti.

Te voy a decir algo que leí o dije en alguna vida. Debe ser un poema de alguien, pero te lo quiero dedicar.





“..No puedo robarte el corazón,

porque tú me lo regalas en cada mirada y en cada suspiro.

No puedo robarte el alma,

porque me la diste o escapó a fusionarse con la mía en el primer instante de este reencuentro.

No puedo dejar de amarte,

porque eres EL AMOR, EL UNO, EL UNO conmigo y el UNO con Dios.

Y de hecho te amo, te amo desde y para siempre.

Te amo solo a ti y te amaré

aunque no seas mío.

Porque no puedes serlo o dejar de serlo,

si siempre lo has sido.”







….Y yo te dedico otro entonces. Con los ojos colmados en humedad, uno en el otro con las estrellas como testigos.







“… .No puedo retenerte porque sos vos quien elige no irse.

No puedo dejarte ir, porque ya lo hice y has regresado.

No puedo engañarte cuando ahora sabrías leer mi verdad.

No puedo decirte otra cosa como verdad cuando la sabías desde siempre.

Pero sí puedo hacerte el amor y dejar que me ames porque para ambos es la primera vez, porque nunca habíamos amado, y lo aprenderemos juntos, uno en el otro.

Sí puedo hacerte el amor porque nunca lo has hecho con nadie, y tendré el honor, el regalo de ser el único.”





___La luna teñía de plata el cabello, y se derramó en la piel dejándolos extasiados, mientras miraron las estrellas como pidiendo un deseo.



La noche estaba demasiado apacible, era perfecta como para no pensar en transcurrirla unidos, haciendo el amor, por primera vez.





__Los labios de Pedro lamieron las comisuras antes de posarse en los finos esta vez, tomando el mando de un ávido beso del cual era obvio deseaba el control, y sucumbieron en él una eternidad, mientras torpes las piernas, lánguidas … fueron desplazándose hacia el interior.



Las remeras que tenían ya en las manos volaron por el aire, y en un exótico baile al compás de la música creada por los gemidos y exclamaciones de los dos, piel a piel, danzaron, y trataron de no sucumbir allí.







__Se separaron jadeando, con la visión nublada, y con la voz rota, lograron hablar apenas.







… Vamos a cerrar todo y a apagar las luces, somos prófugos después de todo.

… Mientras lo haces llevaré algo para tomar, y creo que me mudaré de habitación.

… Eso por la mañana, ahora no.









___Los dos sonrieron, en la misma urgencia de amarse al fin.





Nuevamente, ante la luz de la luna colándose a espiar, se unieron en el beso, y piel a piel, mientras las manos fueron ahora a desabrochar los cintos, a desabotonar los pantalones, y alternativamente, uno y otro después, colaron los dedos en la cintura, descendiendo los pantalones y bóxers milímetro a milímetro…. estudiando al otro de hito en hito, extasiados en la visión de la desnudez descubierta, que empezarían a compartir.





Juguetearon un rato más con las comisuras y los labios, mordisqueando, saboreando, lamiendo, reexplorando y paseándolos de ida y de regreso hasta los hombros, atrayéndose cada vez más y más.



De pronto se apartaron para mirarse, de Norte a Sur, de Este a Oeste, mientras las miradas refulgieron de deseo, para regresar al contacto, y dejar pasear y surcar a antojo las manos, a recorrer la geografía, vista antes en el mapa, …, por todas partes y por doquier.





Dejaron que las manos y labios jugaran a su antojo, y no pasó mucho tiempo antes que el beso se tornara desenfrenado, y los miembros se hubiesen entrelazado para contactar la virilidad de uno y del otro en la intimidad.







… Pedrito, esto va a doler, ¿lo sabes verdad? No tengo lubricante alguno que no sea mi boca y tu deseo.

.. Lo sé, placer y dolor son la misma cosa, deseo por igual los dos, pero te deseo en mí.







__ Guillermo se prometió adorarlo, cuidarlo, hacerlo lentamente, para lo cual se arrodilló ahuecando las manos en las rodillas elevando la vista, y Pedro supo que le haría primero el amor solamente mirándolo, como aquella vez en el hostal, en que lo hicieron así, aunque entonces no supo que era el Amor.





.. Te amo Pedro. A partir de hoy seré tu amigo, tu compañero, y tu amante fiel, y lo antes que podamos deseo que seas mi esposo, eterno esta vez.







___Pedro intentó controlar las emociones pero los sollozos se convirtieron en lágrimas, llenas de amor y plenitud, que Guillermo se apresuró a beber, toda esencia de Pedro ahora era suya, las lágrimas también, como su boca, su piel y en breve todo lo que provocara en él.



Regresó a acariciarlo…. el cuello, la barbilla, lamiendo los hombros, el pecho, y encendió cada terminal nerviosa que estimuló a su paso, no negando más atención a los pezones, colocándolos en la boca, mordisqueándolos y succionándolos, reclamando todo como suyo, masajeando y modelando por doquier y sin reparos, dibujando círculos y garabatos por todos lados, y echándose en la cama cuando las piernas los dejaron de sostener.



Y continuó lamiendo, suavizando , acariciando, chupando, succionando, mientras Pedro le aferró la cabeza gimiendo, disfrutando del cielo que comenzaba a vislumbrar a cada instante con su hombre destinado al cual jamás pensó en encontrar, mucho menos amar así.





Las manos y los labios de Guillermo se apoderaron de todos lados, de cada trozo de su ser, haciéndolo gemir y suspirar en lluvia de besos, poniendo en fuga temores de un incierto futuro que se encontraba más allá.







… Te amo, para siempre Pedro. Sos el único.

… Tú eres el único en mi vida, siempre te esperé y siempre te amaré.





La tira contiene lenguaje adulto y escenas relacionadas.





CONTINUARÁ.





98 comentarios:

  1. Guau Eve, esto es demasiado fuerte...El Amor mutuo que sienten seguros uno del otro y de sí mismos, confesándose toda su entrega con las más bellas y puras palabras, y descubriéndose en cuerpo y alma, con el único deseo de formar Un Solo Ser al unirse con Dios y el Universo por toda la Eternidad...Maravilloso Eve!!! Te aplaudo de pie mientras vuelvo a repasar cada palabra de tu obra genial...TQM......Alicia Vitolo

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    1. cada vez me salen más seguros estos dos, corrieron a huir juntos muy entusiasmados sin deseos de regresar ni de mirar atrás, comenzando el descubrimiento mutuo, de lo que las extrañas sensaciones ya decían, amor puro, gracias infinitas y mi amor.

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  2. Que lindo este cap descubriéndose enamorados de siempre!!!! Pero no me dejes así, necesito el próximo capítulo ya

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    1. Viste ansiosa que protestas y protestas y siempre llega, pasa que acá lo comencé separándolos pero a poco se uniron aun en medio del peligro, y sigue, mi amor.

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  3. Que complicado es siempre el amor entre Guille y Pedro,pero que amor!!!Ese amor que arremete y no le teme a nada ni siquiera al egoísmo pues los dos se han jugado sin importarles y sin pensar demasiado en lo que dejan atràs y està bien porque sabés que Eve?creo que es la unica manera de amar,de otra manera ya no es amar.Gracias Eve.

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    1. Y sí, La vida es complicada, y ellos tienen la suerte de amarse, la mayoría no, ellos tienen el remanso del amor incondicional eterno, en medio de todos los riesgos y desafíos que persiste porque como dices es el real, gracias y mi amor.

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