"VECINOS". CAPÍTULO NOVENO.

"(...) y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua".

Rayuela cap. 7, J. Cortázar.

“VECINOS”

CAPÍTULO NOVENO.

Lunes, 19 de setiembre de 2016. Bs. As.

“El necio

Para no hacer de mi ícono pedazos,
para salvarme entre únicos e impares,
para cederme un lugar en su Parnaso,
para darme un rinconcito en sus altares;
me vienen a convidar a arrepentirme,
me vienen a convidar a que no pierda,
mi vienen a convidar a indefinirme:
Me vienen a convidar a tanta mierda...

Yo no sé lo que es el destino,
caminando fui lo que fui.
Allá Dios, que será divino:
¡Yo me muero como viví!

Yo quiero seguir jugando a lo perdido,
yo quiero ser a la zurda más que diestro,
yo quiero hacer un congreso de lo unido,
yo quiero rezar a fondo un "Hijonuestro".
Dirán que pasó de moda la locura,
dirán que la gente es mala y no merece,
mas yo seguiré soñando travesuras
(acaso multiplicar panes y peces).

Yo no sé lo que es el destino,
caminando fui lo que fui.
Allá Dios, que será divino:
¡Yo me muero como viví!

Dicen que me arrastrarán por sobre rocas
cuando la Revolución se venga abajo,
que machacarán mis manos y mi boca,
que me arrancarán los ojos y el badajo.
Será que la necedad parió conmigo,
la necedad de lo que hoy resulta necio:
la necedad de asumir al enemigo,
la necedad de vivir sin tener precio...

Yo no sé lo que es el destino,
caminando fui lo que fui.
Allá Dios, que será divino:
¡Yo me muero como viví!

Silvio Rodríguez (1991)”.

“El tablero de ajedrez es un cuadrado subdividido en 64 casillas o escaques iguales (8×8), también cuadradas, alternativamente de color claro y de color oscuro. Cada jugador se sitúa de cara al ajedrecista contrincante, colocando el tablero de manera tal que cada jugador tenga una casilla blanca en su esquina derecha.

Los elementos básicos del tablero son:

• Fila. Es cada una de las ocho líneas de ocho casillas que se forman alineando estas horizontalmente respecto a los jugadores. Se nombran con números del 1 al 8, comenzando desde la primera fila con respecto al bando de las piezas blancas.
• Columna. Es cada una de las ocho líneas de ocho casillas que se forman alineando estas verticalmente respecto a los jugadores. Se nombran con letras minúsculas de la a a la h, comenzando desde la primera columna izquierda con respecto al bando de las piezas blancas.
• Diagonal. Es cada una de las 16 líneas que se forman agrupando las casillas diagonalmente. Las dos diagonales mayores tienen ocho casillas.
• Centro. El centro del tablero son los cuatro escaques centrales. Por extensión, a veces se incluyen los 12 que rodean a esos cuatro.
• Esquinas. Cada una de las cuatro casillas ubicadas en las esquinas del tablero.
• Bordes. Las dos columnas (a y h) y dos filas (1 y 8) situadas en los extremos del tablero.

Un tablero puede tener los números y letras para identificar las filas, columnas y casillas, con el fin de registrar el desarrollo de las partidas mediante la notación algebraica, que es la notación oficial. Es frecuente en el mundo del ajedrez utilizar este sistema para poder reproducir y comentar las partidas”.

…¿Guille, estás acá? ¿Puedo abrir los ojos? __ pregunto entre asustado y curioso.

… No, sácate la remera, me dijiste que confiabas en mí, pero sin abrir los ojos__ me dijo seguro, y dubitativo pero expectante le hago caso, me quito la remera por sobre la cabeza, me la saca de las manos.

… Bien, voy a dejarte algo sobre el vientre __Me anunció en voz susurrada__. Quiero que lo toques, que imagines qué es, qué hay dentro, como en un juego de adivina- adivinador.

…¿Cómo? __dije para evitar el sonido de mi sangre golpeteando en las sienes, en latidos alocados, apreté los puños, se me erizaba la piel de la nuca en un desconocido cosquilleo.

Pienso en hacer trampas y entreabrir los ojos, pero me contuve, en que lo sensato sería huir, pero decidí quedarme.

Guillermo asentó algo sólido que  siento frío sobre la piel. El contraste entre el calor del cuerpo, y el  frio de lo que usó me molestó, y a la vez resulta intrigante. Llevé las manos como si jurara al gallito ciego, la textura era aterciopelada, la forma rectangular, me dejé guiar por los bordes metálicos que daban más sensaciones.

…Es una caja__ aseguré___. Una como la que me enviaste con las entradas para el ballet.

“Guille sonrió. Contemplarlo lo satisfacía, y ahora pensaba que no sólo se sentía satisfecho, sino además atrapado por ese animalito difícil. Le gustaba verlo, tenerlo cerca, a su lado”.

…¿Qué crees que contiene? --- Preguntó con un tono de voz suave, profundo,  sensual.

… No puedo saberlo sin abrir los ojos __ contesté inquieto.

… Tienes que adivinar, ya te dije, piensa.

“Me humedecí los labios. La intriga, su presencia y la voz me estimulaban”.

… Dame al menos una pistas__ pedí.

…Está bien ___ accedió. Contiene objetos, con ellos vamos a jugar un rato, hoy sólo vamos a jugar.

… Guille, no sé, nunca jugué, no quiero seguir, ¿cintos?__ arriesgué sólo para oír su voz, me habla tan en susurros que lo siento muy lejos, sin embargo su calidez está en mi oído.

… Frío__ replicó.

… ¿Vendas? __ arriesgué.

.. Tibio.

… ¿Velas?

… Helado, perdiste las tres oportunidades, ahora tendrás que experimentarlo para descubrirlo.

.. Nunca supe que tenía tres oportunidades __ me ofendí llevando el rostro hacia donde creía que estaba y percibí que se reía porque respondió complacido.

… Está bien, hice trampa __ reconoció.

“Sonrío ante la respuesta, no me da miedo pese a las circunstancias, sin embargo sacudí la cabeza para quitarme la idea de huir a tiempo de la mente. No podía salir ante el primer síntoma de inseguridad, ante el mínimo resquicio de temor, así las posibilidades de descubrir si realmente  podría sentir algo se desvanecerían, hasta el momento lo estuvo logrando, siento cosas, inquietud, ansiedad, expectativa”.

…¿Puedo abrir los ojos?__ pregunté.

… No__ respondió alejándose, pude escuchar el cerrojo de la puerta, me humedecí los labios, tenía la boca seca, el corazón se volvió  a disparar.

…Estás sediento__ murmuró Guille que estaba manipulando algo, presentí que era la botella, de pronto me dio de beber, era vino, el cabernet, me dio con los dedos en los labios, el roce nos estremeció a ambos. Me atreví a pedir más, pero lo que deseo son más de sus caricias, en mis labios, los dedos en mis labios,  y Guillermo volvió a mojarle los labios.

..Ahora colocaré de nuevo algo en tu vientre, de nuevo quiero que lo palpes, que lo estudies y me digas qué puede ser__ anunció él susurrando otra vez. Un escalofrío me recorrió la médula, me erizó la piel, no supe si se debía a que tenía frío o a su presencia cercana sin tener la posibilidad de verlo, a dudar de mi propia consciencia.

Sentí el objeto y rápidamente las manos corrieron hacia él, inconscientemente deseando llegar a las manos de Guillermo antes de que las retirara, pero se me escaparon por milésimas de segundo.

… Quiero que me digas qué es__ pidió él__. Te doy una pista, es algo de lo que hablamos hace un rato.

___Pedro palpó, acarició el objeto, lo tanteó con los dedos, y alcanzó a percibir que era cuadrado, el tamaño, la textura, que podía doblarse en dos, como un cartón grueso.

… Es una tabla__ arriesgué percibiendo su sonrisa.

… Bien, vas en camino __ aprobó, ¿una tabla de qué? Ya te di pistas, te dije que hablamos de ello hace un rato.

… Un tablero de ajedrez__ lo interrumpí con aire triunfal, él sonreía, lo supe__, ¿quieres jugar a ciegas? __ Pregunté divertido.

… Vamos a jugar a muchas cosas, al ajedrez precisamente ahora, no__ aceptó divertido, me estremecí__. ¿Sabes cómo es el tablero, verdad? __ siguió. Está dividido en casillas.

.. Lo sé.__ repliqué triunfante. En filas horizontales y verticales que forman casillas,  las verticales llevan letras de la A a la H, las  horizontales números, hasta el 8.

.. Muy bien__ dijo__. Pero mi tablero es un tanto particular, si bien para decirme una casilla debes darme una letra y un número, si las acaricias, con delicadeza, sabrás que las he grabado específicamente, cada casilla  se refiere a algo, a un objeto.

“Me humedecí los labios, de nuevo estaba en debate si huir o quedarme, de nuevo el cúmulo de sensaciones, me mordí el labio inferior, me doy cuenta que se ríe y se inquieta, de a ratos, acaricié las casillas, percibí marcas grabadas, pero no sé leer como los ciegos, no tengo idea de lo que es”.

… Cada casilla  corresponde a uno de los objetos de la otra caja, de modo que me dirás un número, una letra, y te regalaré el objeto que corresponda a la casilla__ me explicó.

… Sin ver__ completé, entendiendo dónde radicaba el tema de la confianza, preguntándome si era  factible confiar  en él.

… Es la idea, viendo, no tendría gracia, no cumpliría el objetivo__ agregó__. Está escrito en cada una, si lo vieras, sabrías el objeto que designa cada casilla. Te escucho.

 “Tomé una bocanada de aire, en la mente se cruzaron flashes de los días, de los ratos con él, de cada charla, de sus actos, no sé nada de él, le conté mucho de mí, demasiado”.

A-8__ lancé sin meditar.

… Muy bien, excelente objeto. Ya te dije que los objetos de la caja están seleccionados para darte placer.

“.. Supe que se alejó, intenté localizarlo girando la cabeza, pero antes que pudiera reaccionar, una melodía  rara, algo que he escuchado, pero no recuerdo, flotaba en la estancia, y protesté”.

… No es un objeto, es otra trampa, es música, sabes que me gusta__ discutí.

.. Limítate a sentirla, como sentiste el concierto que me hiciste escuchar en la guitarra, el que trajo la tristeza de la muerte de tu abuela, esto es diferente, es justa para lo que deseo, para este momento... tratar de resurgir, de dejar salir algo, de volver a nacer, como el ave fénix, algo así creo que dice o significa. Si dejas que te atrape, es mucho más que un objeto, es parte de vos.

“La canción tenía un ritmo extraño, no pude identificarla, pero entonces Guille pidió que le diera otra casilla”.

… D-1__ dije enfurruñado, casi gritando para que resaltara encima de la voz de la cantante que no sabía qué decía, estaba en inglés.

“Guille dejó la caja cerca, en la cama, extrajo de allí el CD, ahora escuché dos metales chocando, pude, porque estaban cerca, se me erizó el vello, la piel se puso en alerta”.

… No te asustes__ alentó__, es fría y filosa, pero siempre debe ser un objeto de placer para vos.

“Pensé, traté de tomarlo en broma. Adivinanzas, de pronto en instantes entendí que era una tijera”.

…¿Qué…?__ intenté protestar y las palabras se encallaron, aunque fuese una trampa decidí abrir los ojos. Pensé en sentir pánico, decidí ver, y al volver a ver a Guillermo, al descubrir que mi ropa se deshace en  pedazos, que estaba usando la tijera para cortarla, se despertó algo en mí que jamás antes sentí. Verlo con la camisa desabotonada, el pecho con escaso  vello, el pantalón con el cinto desprendido, me hizo sentir calor y sed, hambre. Me llamé a silencio por elección, dejé que me cortara la ropa, pensé cómo saldría de allí luego, cómo regresaría al departamento, hasta pensé que... no, mentira, no llegué a temer realmente que fuera capaz de matar, eso no.

 Me despojé de razón, desalojé los pensamientos, salir era futuro, el pacto era centrarse en aquí y ahora. Me encontré un una cama, desnudo, con un hombre atractivo, abogado, vecino, misterioso, desconocido prácticamente, en una casa que ocultaba hasta a su familia, me sentí un ser anónimo, no nadie como le dije, especial, pero anónimo. Alguien que apenas conozco, que no me dijo nada de él prácticamente, está abocado a darme placer, no debo hacer nada a cambio, sólo confiar, no debo fingir nada irreal, ni me pide que le haga nada, es excitante por demás.

… Otra casilla, Pedro__ me dijo sacándome del nuevo pensamiento.

… A-6.__ exclamé.

“Su aliento es un beso traído por la brisa al oído, me susurra que puede que me trasportara al más allá, de nuevo el temor quiere aparecer, de nuevo logré desalojarlo, ya elegí no mirar, no importa lo que el destino me haya demarcado, lo que Guillermo haga conmigo.

Algo suave, leve  me estaba rozando los pies, me molestaba porque odio las cosquillas, es la sensación, cosquillas, pero no lo dije. Deambuló por el aire hacia la parte interna de los brazos, de las muñecas, y las cosquillas se hicieron insoportables”.

… No me gustan las cosquillas __ protesté llevando la mano a la zona, y Guillermo apartó el objeto antes que llegase corriendo.

… Fue tu elección, Pedro__ respondió en tono que se me antojó de abogado___, somos el resultado de nuestras elecciones, la vida es la consecuencia de ellas.

“A punto estuve de protestar, de decirle que no elegí nacer, menos que me quitaran a mi madre, mucho menos la vida que llevé, pero no lo dije, resistí, y de cosquillas sentí electricidad, las cosquillas se convirtieron en corrientes eléctricas, y temblé, se me erizó la piel. El objeto que parecía una pluma, una cerda, algo más pesado que pluma pero similar se trasladó al esternón, paseando la clavícula, de allí al blanco pecho, y en las cúspides sentí de nuevo como pluma, se deslizó en círculos, los pezones se irguieron estremecidos por el contacto.

Me estaba excitando. El latido en la pelvis no era imaginario, entonces supuse que él me penetraría, que al fin llegaría a lo que todos quieren, que me había estado preparando para él, no dije nada, no podía desconfiar de él. Sus esbeltos dedos se posicionaron en mi latido, en mi hombría, ligeramente me presionó, tomé aire, no entraba, me costaba respirar, estaba agitado, sediento, ¿lo ansiaba? Un grito de la cantante acompañó a uno mío. Los dedos de él corretearon a mi hendidura, apenas se entrometieron en el asterisco saliendo rápidamente, y la intrusión me robó el latido, pero del corazón, sentí que moriría. De pronto se apartaron, todo se fue, como si nada de lo anterior hubiese sucedido,  no supe qué pensar, quise preguntar qué sucedió”.

“.. Guille, ¿por qué me estás haciendo esto?”

“No dije nada, no puedo preguntar, he tenido orgasmos espontáneos, durmiendo, en las pulsiones adolescentes, hacía demasiado tiempo,  pero sé que no llegué a ello. Aun así me pregunté si de esta manera, ciega, anónima, confiando en él, podría sentir algo más que asco, que aversión por el sexo.  Todo lo que Guillermo venía haciendo desde que le conté de mí, me ha hecho gozar, desde la velada en el Colón, hasta la intimidad de recién”.

__Guillermo retrocedió, si no lo hacía no soportaría, Beto tenía razón. Se estremeció de miedo, jamás deseó así a nadie, ni la primera vez a Juan, por ello se sintió seguro de jugar con Pedro para ayudarlo a él, para darle placer, y al parecer no estaba equivocado con respecto a Pedro, jamás él había jugado, se habían abusado siempre de él, pero respecto de él estaba equivocado.

Lo deseaba tanto, era tan hermoso, tan puro, tan completo, que estuvo a punto de llegar al éxtasis sin poseerlo, como un adolescente preso de fantasías nocturnas. Se levantó de la cama apartándose de la tentación, inquieto, temeroso, no se lo podía decir a Pedro, al planear aquello creyó que resistiría sin entrar físicamente en él. Sin embargo ahora no estaba seguro de nada. Al menos sabía que no lo tomaría hasta que él no se lo pidiera, así eran las reglas que había inventado para su juego.

Le habló antes de que abriera los ojos, no sabía si era capaz de enfrentar la mirada.

… No abras los ojos__ fingiendo el tono de voz imperturbable del rostro impasible que no tenía__, hasta que no haya salido yo. Puedes ducharte, comer algo porque sé que no has almorzado, luego sin hacer preguntas te irás al departamento.

Yo no iré por unos días, no me preguntes por qué, no puedo ser tu vecino, mientras tengamos estas citas... Tampoco significa que te haya mentido, que desee vivir acá, no es así, esta casa no es mía, es de Fabián, la estoy usando por estos días solamente.

Si ese hombre te molestara, llama a la policía y avísame. Tienes mi teléfono.

En cuanto a la invitación al asado en el estudio, es el jueves, sigue en pie, como que te he pedido los datos de tu mamá,  aunque ahora no quieras aceptar que puedo darte el pasaje, podemos intentar buscarla.

__

“Quiero hablarle, pero creo que no debo, no puede ser mi vecino, pero quiero saber cómo seguirá nuestro vínculo, cómo sabré del próximo encuentro, pero debo respetar el pedido de no preguntar.

Agudizo los sentidos, lo escucho alejarse, la música se apaga, siento la puerta, se abrió, se cerró, entonces recién abro los ojos, y se fue.

Acostumbré la vista a la penumbra, sólo me ilumina la luz de las velas, me dejó comida en le mesita ratona, bebida no alcohólica, y ropa nueva, sabe mi talle. Me incorporé trémulo, titubeando llegué a la silla, bebí un vaso entero de jugo de pomelo, estaba exquisito, me dejó una llave en un llavero con cola de zorro, creo que es lo que me hizo cosquillas, veo un CD, música celta para alcanzar el Nirvana, es la música que sonó una y otra vez en la extraña sesión, no supe cuánto tiempo pasó, está escrito con su letra, el CD sólo tiene una canción, se repitió todo el tiempo, a veces escuché, en momentos no, la perdí, pero siempre sonó de fondo, dejó una nota en la orilla de la cama, escrita por él , miré mi desnudez, sin poder negar que me estaba divirtiendo, que Guillermo lejos de un violador, tenía una manera muy especial de tener sexo con sus hombres, y leí:

“.. Te esperaré, el miércoles acá, a la misma hora, la cita será de Geografía, hoy fue ajedrez, en la próxima, descubriremos tus zonas erógenas. Verás que soy  buen rival, te estoy dando pistas para el juego que sigue, me dirás las que crees que lo son, y lo verificaremos.  Quiero poder compartir la mayor cantidad de horas juntos... Sin silencios  pero por ahora desaparezco lentamente detrás de los sonidos que deja el viento. Voy ocultándote detrás de mis pensamientos, buscando paz interior para los dos, lo que hago por vos, lo hago por mí, somos lo mismo, Pedro. Voy olivando sueños, que reaparecen, sin silencios, en noches donde el reproche quizá te nombre, me aqueja y me estremece el sonido de tu voz, y no puedo permitírmelo”.
“… ¿Qué significa esto, Guille?”


__Después de dejar a Pedro, Guillermo se encerró en otra de las habitaciones, se desmoronó en la cama. Nunca había entendido hasta entonces por qué Pedro se apoderó de él desde escapar después de la cena, quizá desde antes.

“Pedro, puse música, porque en silencio la vida se encapricha en mis pesares colmándome de palabras que no veo ni de lejos ni de cerca, pero que resuenan en mi pecho. No quiero ser el que describa lo que estoy sintiendo, mi silencio me descubre por entero. No puedo pensarte sin sentir en el espacio vacío el grito de tu silencio, como en la noche de la cena, en que dejaste caer lágrimas de sangre sobre mi cuerpo, no puedo verlas, menos imaginarlas. Supe cuando te moviste esa noche, supe que ibas a escaparte, no estaba dormido, no puedo decírtelo, te percibí, me espabilé cuando te moviste, corrí detrás, te vi en la escalera, quise seguirte, y todo se movió, el piso, el techo, debí regresar a mi departamento, caí en el sofá y me quedé dormido.
Tanto que en la mañana pensé que todo había sido un sueño, la cena, la charla, tu historia, todo, te busqué, no estabas, sin embargo existías, el encargado me lo dijo, te encontré en la facultad, supe de Diego, y de Raúl, no pude resignarme a vivir de tu recuerdo,  menos pude olvidar la parte de la historia que ya habías contado, deseaba y puedo ayudarte.

Ese rato a tu lado, cuando te pedí silencio entré en un mar calmo, en un remanso de paz que jamás antes logré, cada vez que estás cerca la paz regresa, no quiero perderla. Estando con vos olvido lo demás.
No puedo dejarte ir lejos, las huellas que marcaste no se van a borrar con el tiempo, como no se borraron las otras, las que te hicieron, mis marcas se esconden hoy en vos, las tuyas en mí, dejando muda la voz un instante, sintiendo el silencio, el sonido de las murallas que se desmoronan en mi pecho, olvido el pasado, no importa que el tiempo se aleje lento, tampoco que llegue antes, el silencio puede traer el olvido, pero no, los recuerdos regresan cuando   no relleno mis vericuetos con recuerdos construidos con vos, como lo de recién.

Pedro sos un dios pagano, el más bello, pero no es tu fuerte mayor conmigo, no esta vez, me siento uno con vos, lo mismo, me identifico con vos, y ocurrió al instante de conocerte, más al ir descubriendo tu historia, no me violaron, no fui huérfano, no es eso: es  la negación a amar y a ser amado, la sensación de no merecer estar vivo, la oscuridad en que viven las almas, somos iguales.

 Pero yo puedo ayudarte, me necesitas, comenzando por el sexo, por darte placer, porque no lo percibas como producto de una violación, siguiendo por la vida, puedo hacer que llegues a tu identidad o a terminar con esa duda extrema que te atormenta, puedo hacerte crecer rápido profesionalmente, llevarte al estudio, a mi lado, asociarte, nadie es un ser completo no sanando todas las áreas de la vida, yo puedo sanarte, vos me puedes ayudar, en el estudio. Pero hay más, representas una parte de mí. Siento que me desdoblo en vos, y me despiertas confianza. Te quiero ayudar a rendir, luego enseñarte lo que necesites para ser mi socio.

No te he mentido amor, cuando en verdad por vos sólo por vos quizá pueda sentirlo, con el alma, con el corazón que pensé ni siquiera tenía, las que siempre pensé palabras falsas en mi rol de farsante, quizá para vos serían verdaderas. He dado puñaladas por la espalda, he causado profundas heridas aun sin decir te amo, a Juan, a Ana, a tantos, quizá hasta a Fabián. Albergo un gran dolor secreto para todos, menos para Alberto, mientras ando por la vida con descaro, sonriendo, quizá ladrando pero seduciendo, cautivando, traicionando sin reparos, como te vi a vos  la primera vez, cantando,  fumando, como adolescente irresponsable, porque no conocía de tu dolor, no veía las heridas escondidas, así los dos, hemos andado por la vida engañando, con actos y palabras, aparentando lo que no somos, lo que no sentimos, lo que nos negamos, lo que no merecemos.

El alma no es de quien la rompe sino de quien la sana.

 No  sabía qué me atrapó de vos,  supe que iba más allá de tu belleza, era algo que  no lo tiene nadie más, en los cientos de conocidos, decenas de amantes, en las miles de personas del mundo, vivía esperando un mensaje de alguien, y lo traías vos, Pedro, en el fondo no era tan complicado, era saber leerlo, encontrar a la persona que lo portaba. Claro que sos un desafío, el desafío de poder sanarte, el mayor aún de no amarte en el intento, el de no ser un farsante con vos.

 No debo cambiarte, debo sanarte, pero temo  a este comenzar a contar las horas y los días que faltan para volver a verte, a escucharte, a que me llames, sé que no es una obsesión como dijo Alberto, y no debe ser amor, si pude pasar cincuenta años sin amar, usando y descartando, no puedo darme el lujo de enamorarme de vos, no puede esto escapar de mis manos, esta estrategia fue planeada para el beneficio mutuo, en mí no incluye enamorarme, y sin embargo pese a estar recién separado de Ana, de los quilombos que le crea a Fabián,… desde que fui a tu departamento, pienso todo el día en vos, no hay un puto minuto en que no piense en vos, y no sé si hay vuelta atrás, si te llegara a saborear esos labios, sé que moriría en ellos, que me los llevaría para el resto de las vidas tatuados  en la sangre, y hoy mi corazón se aceleró al verte rendido al placer, porque aunque no lo sepas, ya sientes, claro que puedes sentir, precioso, todo puedes sentir, borraré el asco que te dan los hombres, lo prometo, aunque luego no pueda respirar el aire en que no estés, vas a sentirlo todo. Puedo cambiar tu vida, puedes ayudarme en algo, tengo una estrategia, trazaré el plan perfecto, no puede no pasar, debe funcionar”.

__ Renovado y con bríos,  seguro se deshizo de la ropa, preparó el baño, se sumergió, abrió los chorros de la ducha irlandesa,  en la esperanza de que cada golpe del agua expulsara  y ahuyentara las reflexiones, sin embargo, rendido, exhausto, perdido, acabó… con los brazos apoyados en los azulejos, el agua golpeteando la espalda, la cabeza enterrada entre los brazos, pensando e imaginando, otra vez a… Pedro Beggio.

CONTINUARÁ.

HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS, CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES MERA COINCIDENCIA.

LENGUAJE ADULTO. ESCENAS EXPLÍCITAS.

ENYA "Only Time" CELTIC MUSIC Ireland.