"ACCIDENTE". CAPÍTULO 33.

 “ACCIDENTE”.
CAPÍTULO TREINTA   Y TRES.


Bs. As.,  Provincia.

Lunes 29 de febrero de 2016.

Mario Benedetti - *Fragmento de La Vecina Orilla.

“La sinceridad (…) siempre

nos llevará a odiarnos un

poco”.

Mario Benedetti.

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PREVIO…

“Estoy preparado, lo que más deseo es estar físicamente bien, que me quiten el yeso, moverme libre.

 Llevo la cadena con la llave, nadie más que los íntimos lo saben, me la cubrí con camisa, la corbata la pondré luego al llegar a la audiencia.

Nada he preparado para ella, sólo diré la verdad, no importan mentiras y ataques., sé lo que fue Adolfo, mucho más lo que vi en los muchachos, en Gustavo, y sobretodo, lo que me hizo salir corriendo, nublada la vista en agua cuando de bruces, choqué con mi amor, en… el accidente”.

__Hoy…

“Salimos de la casa como indicara José, camuflados desde la cochera, asfixiados por el calor, con la ropa que nos cubrimos  y los sombreros para pasar desapercibidos, nosotros  en el coche de José, pero de cerca nos siguió Alberto, creo que viene detrás del coche de la custodia.

 En principio me inquieta la curiosidad de saber qué  abrirá esta llave, o mejor  dicho qué dejó Adolfo en esa caja. De no haber sido por esta masacre, ni siquiera hubiera ido al banco, había olvidado que existía.

Confío en Guille, estuvo encerrado con Gaby, Beto entró y salió varias veces de la casa, Camila llamó, no me dijeron, pero sé que estaban recolectando pruebas y preparando mi defensa, el ataque a Miguel por el secuestro de Fabián.

Él está callado, teme tener que declarar, creo, no es para menos, tiene casi la edad de los chicos que estos desgraciados inyectan, pudo ser uno de ellos”.

… Pedro, ni bien te quiten el yeso, y termines los estudios, pregunta al médico cuánto y cuándo puedes caminar, de lo contrario  pediré una silla, iremos a la ortopedia, no quiero que por esto arruines la pierna __ dijo José que estaba bastante impaciente.

… No te preocupes, no quiero más silla alguna, trajimos las muletas por las dudas, no creo que sin rehabilitar pueda caminar libremente, espero que no me demoren demasiado __ contesté, mientras vi  la expresión de desaliento de Guille por dejarme ir sin él, no le teme al careo.

… Guillermo, debes quedarte de campana con Fabián, de lo contrario se darían cuenta de todo, podrían cruzarnos un auto al salir del banco y acribillarnos, sabes que están convencidos de que Adolfo dejó pruebas, que quizá no existan, como nadie sabía nada de esto y murieron para nada __ le dijo José con pesar a  Guillermo que asintió.

… Lo sé José, sé que debo quedarme, ¿cómo sabes que será seguro que salgan por atrás? Allí llevará Alberto su auto, por si en éste nos vieron salir __ preguntó.

… Mientras Pedro se encuentre con los médicos, cegaremos las cámaras de la salida y rastrillaremos la zona, tranquilo, no creo que nos estén siguiendo, es más, creo que al haber rescatado a Fabián deben estar demasiado nerviosos como para seguirnos, mucho más tu hermanastro, saldrá todo bien __ afirmó.

Pedro, mira a Guillermo durante el careo, a mí, no  escuches a Quesada, déjalo pasar, dirá cualquier cosa, lo sabes, ¿verdad?__ me interrogó mirándome.

… Lo sé,  que diga lo que quiera, estoy muy seguro de que nadie podrá demostrar nada contra Adolfo, ¿tienes algo verdad, Guille? ___  Detuve la mirada en él.

… Sí, cielito, entre unas de las corridas de Alberto, conseguimos el informe del Obispado de Chile, las referencias de la carrera de Adolfo desde que se ordenara allá, también tus papeles, y los documentos de lo sucedido en el orfanato, cuando te llevó como tutor, con lo que logramos en las últimas horas, creo que el Obispado de acá se jugará por la defensa, de todos__ afirmó resoplando aliviado__. Lo mejor de todo, es que jugaremos cartas que desconocen, estos papeles, Narváez y su gente, mi denuncia contra Miguel, les irán lloviendo bombas que no  saben que existen siquiera, y quizá haya otra, que remataría las cosas.

...¿Otra? __ Miré a Guille, paseé a Miller___. ¿Qué más sucedió? Guille, dímelo__ insistí.

… Te lo diré, creo que es mejor que te prepare, quizá, pero sólo quizá, tengamos algo grabado por Gustavo, despertó ayer, mejor dicho, Arias lo mantuvo bajo el coma inducido, y Camila lo monitoreó este tiempo, como están haciendo con todos en espera de que se metabolicen las drogas que recibieron, o de que el cerebro en reposo, al despertar se acomode a la realidad.

Al parecer, Gustavo está regresando a la normalidad, quizá Camila llegue con una grabación.

…¿De verdad  estará bien? ¿Entonces el efecto de lo que recibieron es reversible? __ la algarabía me hizo casi gritar.

… No se sabe, Pedro, no sabemos aún si todos recibieron la misma droga, sólo de Gustavo estamos hablando, Arias decidió despertarlo, porque Camila le comentó de la audiencia,   iremos de a poco, los demás quizá se mantengan como están hasta tener algún informe de lo que se analiza fuera del país.

… Está bien, ¿podré verlo más tarde? Por favor, un ratito__ supliqué.

… Es que justamente, te llama, quiere verte, se acuerda de vos __ me dijo Guillermo sonriendo___. Pero tranquilo, vamos por pasos, ahora a la parte médica, luego a lo del banco, al careo, y quizá antes de regresar puedas verlo, si no es hoy iremos mañana, pero es preferible hacerlo todo en una salida.

Ciudad Autónoma. 08.30 horas.

“En la clínica a regañadientes me despedí de Guille, y de Fabián que quedaron en la sala de espera, José se escabulló hacia la salida que íbamos a usar, todos seguidos por custodios, uno vino conmigo, y pasé  a un box, donde una enfermera me cortó al fin el yeso, sentir libre la pierna casi me llevó a abrazarla, pero detrás llegó el médico que me atendiera  desde el accidente, y  me sentí contento de que fuera él. Indicó que me tomaran una muestra de sangre, estaba en ayunas, de orina, me revisó, y luego ordenó una serie de placas y tomografías, indicándome las sesiones de rehabilitación”.

… Bueno Pedro, cuando  termines de hacer las placas, yo las veré en el momento, en principio si todo está bien, podrás salir, comienza la rehabilitación mañana mismo, y cualquiera con autorización puede retirar los análisis y los resultados, conociendo el tema judicial, veré  cada cosa,  y de tener algo que agregar o repetir los llamaré, de lo contrario les enviaré todo por escrito __ me dijo sonriendo, mientras el camillero me llevaba a la sala de rayos.

… Gracias Dr. Hoy debo moverme demasiado, supongo que no puedo caminar libremente __ le interrogué.

… No aún, con las muletas, o en la silla, puedes caminar en la casa, pero si andarás por tantos sitios, entre la gente, prefiero que no corras riesgos, los músculos están atrofiados, no te sentirás seguro sin muletas por unos días.

“En definitiva, pasé por todos los aparatos, me siento bien, ya sin el yeso, quisiera correr, aunque al bajar de una de las camillas supe que el médico lleva la razón, estoy débil.

 Me lleva José en la silla hasta el coche, está Alberto esperándonos, el médico iba a hablar con Guille, le daría algunos resultados. Hacia tribunales ya iré con muletas, la silla la dejaremos al regresar.

Siento una lluvia de deseos, que me come por dentro, esperando encontrar a Guille en la noche, cuando la pesadilla haya pasado, José sigue dándome indicaciones, casi no escucho, quiero saber lo que dejó Adolfo, ahora me dio por saberlo todo, de pronto paseo por la mente la película desde mi infancia, desde que lo conocí en Chile, era muy joven, hacía poco que  se había ordenado, cómo pueden querer difamarlo así, él me acogió, fue al padre que  no tuve, los hermanos mayores que se fueron, el techo, el ejemplo, la comida, todo para mí, lo que quizá me hizo equivocar el rumbo, entrando al seminario porque sólo allí me sentí seguro antes de conocer a Guillermo.

José habla con el gerente, nos envían a un sector de ascensores, descendemos al segundo sub- suelo, allí se encuentra al final de un larguísimo pasillo que no hubiera podido recorrer de pie, un guardia del banco, me toma las huellas digitales, me pide el documento, y me viene el recuerdo de un día con Adolfo en que hicieron lo mismo, fue cuando me trajo para abrir la caja, me dice el sector, el cuerpo, ingreso  con él, que me conduce al mueble blindado, abre una pesada puerta de acceso, y luego me deja frente a la caja.

Con los dedos trémulos encajo la llave, luego de que él abriera la puerta del mueble, y encuentro la caja, mediana, decía el registro.

Sacudo la cabeza intentando desalojar del recuerdo de Adolfo, quisiera que Guille estuviera a mi lado, y agradezco estar en la silla, porque me siento tambalear, cuando la abro y ahogo una exclamación, lo primero que veo es un sobre, al parecer es  una carta, debajo está llena de dólares, están en fajos,  no entiendo cómo, de dónde los obtuvo Adolfo.

Saco el sobre, y encima  del dinero hay otro, lo palpo, parece tener un CD, un DVD, debe ser lo que los tipos dicen, porque levanto el dinero buscando debajo, y no hay nada más.

Sé que no puedo demorarme, he sacado la caja del mueble, la tengo apoyada en el sector  lindante, pueden esperar otros,  dudo, pero el dinero no lo quiero, no ahora, luego pienso en la factible fianza, en que quizá debiera llevarlo, pero decido que no, que no me van a imputar, dejo el dinero como está y me llevo los dos sobres, guardo la caja , cierro, y sofocado, llamo al guardia para que cierre y me deje salir”.

… ¿Estás bien, Pedro? __ pregunta José, creo que tiemplo, debo estar pálido, porque tengo las manos frías, le asiento con la cabeza, el guardia interroga con la mirada, pero salimos del sector. A mitad del trayecto logro contarle a José, y nos detenemos para abrir los sobres.

… Lee, Pedro,  acá estamos seguros, necesitamos saber qué dice __ me lo pide con la mirada, abro el primero, tiene manuscrito mi nombre, está escrito en tinta, reconozco la letra de Adolfo,  siento que las lágrimas amenazan, degluto el nudo que crece en la garganta, hasta que logro comenzar a leer.

 “…Querido Pedro, hijo te diría si no fuera sacerdote, es lo siento, que Dios me perdone, es lo que fuiste siempre, lo que sos al día en que escribo esto __ entonces leo la fecha, 02 de enero del corriente, unos días atrás__, así te sentí desde que fuiste a pedir comida a la iglesia por primera vez, así te intenté amparar cuando quedaste solo, lamento que pasaras por aquel orfanato. Si tienes esto en la mano será que ya no estoy a tu lado. Encontrarás detrás,  los papeles de tu partida de nacimiento, de ingreso y salida del orfanato, los de adopción cuando logré ser tu tutor. Quizá debas demostrarlo ante alguien.

Si estás leyendo es que abriste la caja, viste que está llena de dinero.

Es tuyo hijo, no son ahorros de mi carrera, sabes que mi sueldo lo usaba en la iglesia, para mantenerla mejor y ayudar, como todos, lo que está allí es herencia de mis padres. Desde que te vi llegar, cuando yo ya era sacerdote, supe que  no estabas allí por vocación, que estabas a mi lado, que me ibas a seguir siempre, que era tu refugio, tu familia, tu papá.

Antes del traslado, mis padres fallecieron, lo que heredé lo convertí en dinero, y me prometí que sería mi legado, porque sé que si  dejo la iglesia, no creo equivocarme, en que no te ordenarás.

 Hijo… no es tanto, te permitirá comprarte un departamento, y estudiar sin prisas lo que desees para moverte en el afuera, sé que puedes dar clases, pero poco ganarías con ello.  Te pido que lo tomes, que lo uses, es mi herencia, acá mismo tienes el testamento, es todo legal, ponlo en manos de  un abogado, de un escribano, en definitiva te estoy dejando quinientos mil dólares de las propiedades de mis padres que vendí en Chile.

Lo más importante, tus papeles, y necesito decirte que hace tiempo, que casi desde siempre supe el paradero de tus… hermanos”.

... Toma, José, no puedo… ___ Las lágrimas me ganaron la batalla, estábamos perdiendo tiempo, le entregué el sobre a José, la carta, todo, me dediqué a escucharlo, con el pañuelo y mi dolor, deshecho en agua.

“… Pedro,  no los juzgues, te buscaron, nada fue fácil para ellos, se fueron sin nada, sin estudio, y al llegar a Santiago, todo les costó demasiado, no conseguían trabajos dignos, menos el dinero que deseaban para ayudarlos, hasta que al fin con los años y mucho esfuerzo, estudiaron, y lograron emplearse, el caso es que  quiero que sepas que no están en Chile, al año más o menos de  nuestro traslado, ellos se instalaron en Córdoba, antes de llegar a Argentina, fueron por ti, por tu hermanito, y no encontraron a nadie, algún vecino les dijo que estaban todos muertos. Los vi, mi lindo, en uno de los retiros fui a verlos, son capataces en una estancia inmensa en Córdoba, terminaron el secundario, no fueron a la facultad,  por mí supieron que estás vivo, que murió tu madre y tu hermano. Por mí supieron tu destino, les dio vergüenza verte, me  dieron  permiso para decirte que los busques si los necesitaras, te quieren, pero creen que te fallaron, no pudieron estudiar, ni ayudarte a tiempo, pero son buena gente, trabajan duro, honestamente.

Ni ellos ni yo supimos nada de tus hermanas. Creen que las prostituyeron de nenas y que fueron víctimas de la trata, no sé de ellas, acá tienes los datos de tus hermanos.

 Hijo, haz la vida que sientas, sé  vos mismo, si la iglesia no es tu lugar, búscalo, te dejo tus papeles, mi testamento, dinero, y la posibilidad de ir por tus hermanos.

Sabes que estoy por denunciar las cosas que vemos a diario en los muchachos de la villa, sé que puedo perder la vida, por ello no les he dicho nada a ustedes. Si algo me sucediera antes, entrega el segundo sobre a la policía, a las autoridades, sospecho muchas cosas, el resto lo sé por confesiones, me condenaría al infierno de decir todo lo que me contaron, no me atrevo a decirlo todo, o quizá sí los hechos, lo que no puedo dar son los nombres, temo a Dios, al castigo, soy sacerdote. Entrega el segundo sobre que no es tuyo, el resto lo es.

Te quiero. Tu padre… Adolfo”.

__

“El coche se desliza insolente por Bs. As., lejos de espiar la ciudad, de regreso, sólo pienso en Guille, lo necesito más que nunca, no quería ese dinero, menos esta carta, pero quizá la muerte de Adolfo como presintió, me llevó a conocer mi verdad. Guillermo es mi verdad.

Guille, viviría de tus caricias un siglo y más,  deslizándome por tus silencios, a nuestro mundo de cristal aislado del otro, allí me dejaría atrapar por esa ternura que emana de tu mirada, cuando en tus pupilas hacemos el amor de almas, en travesuras de intensa pasión sin o con testigos. Quiero aprovechar tus provocaciones, tener tiempo para sentir el torbellino de emociones que creas, para sentir el fuego de la  hoguera que encendemos, ahogándome en el Cabernet de tu piel.

Quiero que hablemos sin palabras, escribiendo en las sábanas, ese lenguaje que sólo existe en tus caricias, en las mías, en los garabatos de labios y manos de uno, del otro.

Deseo besar tus labios, olvidar el frío de las muertes que vi antes del accidente, saciar la sed de mi alma, a tu lado  tomar la vida con calma, sin miedo,  sin temor ni agravios, junto a ti, junto a Fabián, estudiar, trabajar, ser libres. No quiero que sigas encerrado cuidándome, no deseo ser un escollo en tu vida, no quiero  ser el que te haga llorar. Yo sólo te quiero amar y que me brindes tu apoyo. Tu amor me causa desvelo, desde que Adolfo murió has sido mi único consuelo en medio de esta locura, para no hundirme en la desesperanza de aquellos años en Chile.

Surgiste de la nada, corría mirando hacia atrás, pegué contra el coche, pero en mis noches de desvelo o en mis sueños, fuiste el consuelo cuando estaba desolado, solo como antes, me cuidaste, me amaste en silencio, me mostraste el camino, me trajiste a Camila, a tu hijo, me infundieron entre todos las ganas de continuar pese a todo, cuando de nuevo no entendí mi supervivencia.

Quiero ser el simple hombre que amas, que te ama, un nómade, un errante, que supo salir adelante, que no se perdió en el camino, quizá porque encontré abrigo, primero en Adolfo como mi padre, luego en tus brazos como mi amor. Extiendo mi mano, me tomas la mía, y sé que caminando juntos a la par, no ha sido en vano supervivir a mis pares, a mi hermano en Chile, te amo, Guille”.

…Juzgado Penal. Lunes 29 de febrero de 2016.

13.00 horas.

“En la cafetería de tribunales, es todo un lío, Miguel me mira con el odio de siempre, espero que al menos no venga a insultar, no pierde gesto de Pedro, de mis miradas, pero no me importa de él, será  recusado, estoy casi seguro, estamos  intentando comer algo, Pedro regresó devastado en llanto luego de leer la carta, me la dio, y entendí, también que la carta es mi prueba contra los dichos infames de Quesada, llegaron Gaby, Beto, Camila, Rubén, por allí veo a Narváez, también lamentablemente vi a mi ex cliente junto a Malvarez,  creo que no tienen defensa posible.

Camila me acompañó a ver a Moravia,  entregué las pruebas de todo lo que diré, y la copia de la demanda que le inicio a Miguel por el secuestro de Fabián, Narváez aportó fotos y videos, se quedará a declarar. Sé que esto es un careo entre Quesada y Pedro, pero se derivarán otras causas, estoy seguro, José cree que en cascada caerán mi ex cliente, Miguel,  y el farmacéutico con pena menor si declara contra el primo.

Se encerró a ver lo que dejó Adolfo, Moravia me dijo que no será usado hoy, que  nos concentremos en lograr la preventiva sin excarcelación de Quesada, la libertad como testigo protegido de Pedro, quizá la primera figura para mi ex cliente, el apoyo del obispado ante lo que tengo desde Chile, y la recusación de Miguel, el resto serán causas separadas”.

“Cuando el juez baja el mazo, miro a Pedro, se lo ve triste pero tranquilo, en estrado están… el juez imparcial , Fontana y Moravia, en la otra mesa, Quesada que es un tipo de mi edad, desagradable desde la mirada esquiva, ni alto ni bajo, peso medio, nada que lo destaque excepto la mirada de desdén, Miguel echa humo por los oídos, por allí oí uno de sus habituales epítetos, que Pedro es como yo, etc., no le dimos lugar.

Miller informa que deja la palabra a Mendoza, Miguel y Malvarez dan la versión trillada de los sacerdotes pedófilos, de Pedro como amante de Adolfo, del crimen pasional, y esas tonterías, me mantengo imperturbable, José por igual, e increíblemente hasta Pedro y Fabián se sostienen tranquilos, sabiéndose ganadores.

Cuando el mediador dio la palabra a Quesada, repitió todo tal cual, sumando a que no sabía que el primo le daba la droga de la violación, cuando el moderador da la palabra a Pedro, cuenta más tranquilo, con  Adolfo más en su ser que nunca, toda su vida desde que quedó huérfano en Chile al día del accidente, las pruebas las tiene el secretario del Juzgado.

En teoría esto deben ser testimonios, no es una audiencia, se nos conceden tres preguntas a cada uno.

 Desde la mesa de Quesada curiosamente no preguntan, no objetan, pensé que irían por mi relación con Pedro, por dónde vive y por qué, sin embargo a sabiendas Miguel de que lo vi el día del accidente, que es obvio que me sentí responsable de cuidar a Pedro, más sabiendo que rescaté a Fabián, me mira odiándome pero calla.

 José me da lugar para interrogar a Quesada, en lugar de ello, uso mi tiempo para llamar al primo.

 Le pregunto si fabricó por encargo del Dr. Quesada la droga de la violación, si sabe el destino que le daría su primo”.

… Sí, lo hice por dinero, nunca supe del resto de drogas, lo que sé, es que la usaron con los muchachos, en otros sitios la destinan a chicas, luego de violadas, al despertar, las convierten en esclavas sexuales, con los muchachos de la villa creo entender que el objetivo de mi primo era diferente, era debilitar el psiquismo, para probar las drogas que viene experimentando desde hace años, en pos de curar la psicosis, que en algunos como efectos colaterales la produce.

La materia prima para el G.A.B.A., me la daba de las droguerías que tiene en sociedad con el candidato, el amigo.

… Muchas gracias. El Honorable tribunal tiene los datos de los allanamientos y la titularidad de alrededor de una decena de droguerías, donde efectivamente se encontró lo que dice el testigo entre drogas legales que se investiga si en mezcla dan alguna de las halladas en tejidos y sangre de los muchachos.

… Protesto, Su Señoría, no es el objetivo del careo___ gritó Miguel, Moravia  habló en murmullo algo al otro juez, y lo mandó de regreso, no dio  lugar a  la protesta.

… Cito al Sr Narváez, partido independiente, opositor a mi ex cliente, socio y/o dueño de droguerías  con el Dr. Quesada.

“Prestado el juramento, directamente le pregunté por lo que sabía del secuestro de mi hijo, y fui repartiendo las fotos y videos con el rostro de Miguel que se demudó en terror. Continué preguntándole por la mafia de medicamentos”.

… En efecto, el día en que le Sr. Fabián Graziani salió de la Facultad de Derecho, a pocos metros el Fiscal Miguel  Ángel Mendoza lo llevó a su auto, como ven en las fotos, mis hombres lo siguieron hasta la casa de Almirante Brown, donde lo rescatara el Dr. Graziani, le pidieron el intercambio, por Pedro Beggio, o un millón de dólares, o bien alguna información que creen que el padre Adolfo dejó a Beggio.

“… Interrumpí para decir, que en la fecha, el Fiscal José Miller había tomado contacto con un DVD, que el Sr. Beggio ignoraba que Adolfo había dejado en una caja de seguridad, en audiencia de juicio se presentará como prueba”.

….Por lo relatado, lo que ven, mi propio testimonio, el de mi hijo, efectuamos exposición penal policial, la demanda contra el Fiscal Mendoza la ingresé hoy, solicito que dada la gravedad de los hechos, sea tenido en cuenta el caso, para suspenderlo hoy mismo de la función.

Continúe por favor __ le dije a Narváez a modo de disculpa.

… Lo segundo que podemos decir,  es que mi partido combatirá este accionar, hemos seguido al candidato opositor en sus pasos junto a Quesada, estamos en condiciones de asegurar que hay casos en otras villas y barrios carenciados del Gran Bs. As., el Dr. Graziani y el Fiscal han presentado las pruebas para ser investigadas, y según nos informan delegaciones partidarias del interior, también habría células en otras provincias, en efecto, como antes se dijo, al parecer, la diferencia está en que en este caso se aplicó a varones, y  a pocas chicas, en el resto más a mujeres, que en al caso de la villa.

Acá,  presumiblemente se encuentre Quesada trabajando el manejo del psiquismo con manipulación farmacológica, más algo de hipnosis, caso que se vio en Gustavo Amaya, pero entiendo que será juicio separado, en mi opinión, aporto pruebas de que le Dr. Quesada apoyado por gobiernos de turno, viene trabajando con psicofármacos, en investigaciones personales, desde su previa inhabilitación, desde que trabajaba en el Hospital Moyano, tenemos un testigo de aquello, un ex director a disposición del Juzgado, que puede declarar. Entonces se lo echó, se exoneró, y se cubrió el accionar para resguardar el nombre del hospital.

Muchas gracias. Sr. Narváez __ le agradecí seguro.

…En resumen, ya que el Fiscal José Miller me dio lugar, solicito, la preventiva sin excarcelación para el Dr. Quesada, para el candidato socio, y la recusación de Miguel Ángel Mendoza, en tanto se lleve la masacre a juicio, presumo que entre ellos puede encontrarse el autor intelectual de los asesinatos, en ningún modo, pueden ser imputados en ello, Pedro Beggio, ni Gustavo Amaya. Dra. Camila Moravia, por favor.

… Yo no fui, ejecuté la orden de Mendoza __ gritó Quesada y Miguel se incorporó fulminándolo con la mirada, gruñendo.

… ¡Eso es mentira!

… Silencio en la sala. Será tema de otra audiencia, en el juicio por la masacre en la capilla – dijo el Juez.

“”Vimos a Camila subir a prestar juramento, estaba segura, casi sonriente, y se sentó relajada, explicando cómo me conoció, mi estado al momento del accidente, mis estudios, el resultado de las pericias de su grupo de trabajo, e independientes, y de Gustavo Amaya”.

… Dra. Moravia, por lo que acaba de resumir, ¿cree que Pedro Beggio o Gustavo Amaya tienen rasgos de personalidades psicopáticas, o agresivas?__ Guillermo preguntó relajado.

… No. Rotundamente no. Pedro se encuentra en shock, en  síndrome de estrés postraumático, sumado al psiquismo deficitario en áreas emocionales determinado por sus vivencias infantiles, pero nada lo inculparía como co- autor, o autor de un crimen, las cartas remitidas por usted, demuestran claramente, que el Padre Adolfo, por los antecedentes llegados de Chile y los de Argentina, en ningún momento abusó de nadie, se sintió el padre de Pedro, fue su tutor y su guía espiritual como de Gustavo y de mucha gente de la villa que atestiguará en el juicio.

Gracias Dra.

… Cito al estrado como excepción porque acaba de llegar, al Dr. Emanuel Arias, a cargo de la clínica donde trabajó Quesada, y donde está internado Gustavo Amaya.

… A lugar, suba el  Dr. Arias al estrado __ dijo el Juez.

… Dr. Arias.  ¿Nos podría  resumir el estado de Gustavo?

… “Arias resumió cómo llegó, lo actuado, adjuntó la historia clínica, lo que constatara Moravia y Miller en la primera visita, el coma inducido al quedar preso Quesada y que había cerrado la inducción para verificar el estado, habiendo despertado en la noche”.

… En efecto está recuperando la conciencia de los hechos, traje la primera  grabación ante personal del juzgado de la madrugada:

___

“… Gustavo, ¿recuerdas al Dr. Quesada?

… Un demonio ___ el paciente entró en llanto compulsivo, cambié de pregunta pronto __ , nos violaba, yo era normal hace meses, estudiaba, trabajaba, y una vez me enfermé, lo fui a ver a la salita, no sé qué me dio, empecé a no ser yo, a oír voces, se me escapan imágenes donde me llevaba a un consultorio, a otro sitio, me hacía dormir, me decía cosas contra los sacerdotes, ellos eran buenos, el padre Adolfo era bueno, era mi confesor, el de todos…

… Recuerdo que el día de la masacre desperté entre ellos ya muertos, con una carta en la mano, no sé cómo, vi a Pedro entrar, horrorizado gritó, no me escuchó cuando lo llamé y salió corriendo, Pedro es mi amigo…”.

… Suficiente, creo que el material que dejamos al Honorable tribunal, les da un nuevo panorama de investigación, más allá de este careo sinsentido, planeado, en el contexto de creer que llegaría acá con mi hijo secuestrado, y las manos atadas, sin prueba alguna.

 Por último, y termino por hoy, a los abogados representantes del Obispado, les pregunto, o les pido que me digan si tienen alguna sospecha en contra del padre  Adolfo y de sus seminaristas ___ Guillermo habló y con la mirada acentuó la pregunta.

… Ninguna, Dr. Graziani, era ejemplar. Si suspendimos a Pedro fue por consejo de la Dra. Moravia, que en su estado de estrés postraumático dudó de su fe, y que no podía tener en claro las cosas, estamos dispuestos a esperar que ella nos diga cuándo podemos citar a Pedro para determinar su situación.

__“Miré a los jueces, a Quesada, a Malvares, a Miguel, y seguro, terminé”.

… A disposición quedarán los testigos y las pruebas, el pedido de la Fiscalía del Dr. Miller, el mío es: prisión preventiva sin excarcelación hasta el juicio, de los mencionados, recusación de Mendoza, absolución y figura de testigo protegido para:   Pedro Beggio y hoy para Gustavo Amaya.

Aclaro que Pedro está en terapia con el licenciado del grupo de la Dra. Moravia, por el duelo y el estrés postraumático, fijo su domicilio en el mío, lo acogimos con mi hijo, luego del accidente, con autorización del Juzgado.

Muchas gracias __ concluí y regresé a la mesa, donde Pedro lloraba con la mano de Fabián sobre la suya, y Beto me abrazó exultante.

… Bien Sres. De más está decir que esto era un simple careo, adicionalmente surgieron testimonios y pruebas inesperadas, que urgen a dar lugar a lo solicitado por el Dr. Graziani o no, damos un receso intermedio de dos horas, y daremos el veredicto parcial, teniendo en cuenta el estado de convalecencia y duelo de Pedro Beggio, en la semana podrán acercarse los Fiscales por el definitivo, los abogados penalistas, y quedan en marcha las demandas por la masacre, y la del secuestro de Fabián Graziani, a determinar el tema de la mafia y/o uso ilegal de drogas como causa provincial o federal. Muchas gracias.

“Nos pusimos de pie, viendo salir a los jueces”.

…! Puto, ¿le dijiste al putito de Beggio que mataste a mi hijo, que por eso te secuestré al tuyo?

… Basta Miguel, sos un mamarracho, lo internaste, no lo cuidaste, lo abandonaste y se murió, yo no maté a nadie.

Patético sos, como el mamarracho de tu abogado, y tus clientes, patético __ remarcando las sílabas elevando el tono, mientras, el grupo salía del lugar, esta vez rumbo a un restaurante fuera de tribunales.

Ciudad Autónoma. 17. 30 horas.

… Fabián, Pedro, vayan a casa,  recién te sacan el yeso, debes descansar. Esto terminó __ dijo seguro Guille__. Bueno, no, en realidad debes quedarte hasta que den el veredicto, bueno entonces comeremos como Dios manda, así llegamos a dormir, no pensé en esta maratón de pruebas, y apenas las pudimos esbozar.

… Guille, quiero ver a Gustavo__ le recordé que me lo había prometido.

… Está bien, ahora comeremos___ dijo sonriente y cansado, pero feliz abrazándonos a Fabián y a mí.

… Sos rico, Pedro, podrás comprarte la casa, estudiar, ver a tus hermanos__  insistió Fabián.

… Fabi, ahora no es momento para hablar de todo, espera __ le dijo Guille lanzándole una mirada reprobatoria___,  mientras charlaban escribí en una servilleta

“Te describí en las líneas de un escrito y en ellas te saboreé cual sorbo
de refrescante vino, sentí el sabor de tus besos y aunque el tiempo ha pasado, aún los latidos de mi corazón  se aúnan a los tuyos por ti.
Mientras escribo te observo, recuerdo al abogado de hace un rato defendiéndonos, al hombre de hace horas, acariciando mi cara, rozando mi espalda y deslizando tus manos con sutileza, desde mis pies, hasta encontrar ese punto donde me haces débil y tú muy firme.
En mi mano la pluma que  recorre el papel asemeja  en él la humedad de tus besos y ese perfume que invade mi piel.
En mi piel siento un sabor deleitante a chocolate, ese que  te gusta beber de mi cuerpo, a café, a whisky, pero sin darme cuenta escribo puntos suspensivos..., y espero a la noche, para que al regresar a casa, libres, podamos brindar con Cabernet o con Champagne, por el inicio de la vida, por estar caminando juntos.

Quiero pedirle a Camila, que informe en el Obispado que deseo una cita, luego de leer la carta de Adolfo, de saber que supo que no tenía vocación, luego de amarte, luego de saber que no iré preso, que enfrentaremos con la verdad a esta mafia, quiero con prisas renunciar definitivamente al seminario, soy tuyo mi amor, te admiro, te idolatro te doy las gracias, te amo Guillermo Graziani, amo  a tu hijo”.

…¿Qué estás haciendo? __ me dice sonriendo y… le entrego la servilleta…

CONTINUARÁ.

HECHOS Y PERSONAJES SON FICTICIOS. CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES MERA COINCIDENCIA.

LENGUAJE ADULTO. ESCENAS EXPLÍCITAS.