PROHIBIDO. CAPÍTULO PRIMERO.

 

PROHIBIDO.

CAPÍTULO PRIMERO.

“Entiéndeme. No soy como un mundo

ordinario. Tengo mi locura, vivo en otra

dimensión y no tengo tiempo para cosas

que no tienen alma.

Charles Bukowski”.

Ciudad Autónoma, jueves 19 de mayo de 2016.

__Pedro tomó una inspiración profunda y despegó la mirada de esos ojos negros oscuros que le causaron un impacto antojadizamente similar a un disparo, y al fin  asumió el control, mirando a los novios, comenzando la ceremonia, en medio de la algarabía y la emoción general, de algo tan esperado, tantas veces postergado.

Aída lloraba mirando a su nena, la colorada, Cuca en brazos de Isabel que paseaba la mirada desde Solange a Marcos, y de allí a Sonia, Juan, el amigo de vida de Guillermo algo más atrás, Pao y Antonio, en pareja desde que Gaby lo dejara, estaban presentes también.

Fabián con Valeria, su novia, cursando abogacía, no despegó la mirada de su padre, intuyendo la tormenta interna de la cual no supo el motivo, al parecer algo que solamente se mostraba a él, nadie más, concentrados en la pareja, miró el estado de Guillermo.
Los invitados no eran muchos,  ni Gaby ni Alberto tenían más que a la gente del estudio en sus vidas, y a la mamá de ella, el padrino apenas a su familia y a sus socios, Juan mirando siempre al amor esquivo de Guillermo.
___
La ceremonia se inició para todos, menos para Guillermo que renuente como ensordecido al contenido, con escasa capacidad de razonar, al comienzo se concentró en respirar, en detener el temblor que amenazaba con doblarlo en dos o desmoronarlo, y luego  de pronto algo lo alivió, y fue lo mismo que lo había conmocionado, él, como fuera que se llamara el ángel de Dios que oficiaba  la ceremonia.
Si bien no escuchó una palabra de la misma, sí la voz,…. sensual, especial en tono y timbre, dulce y delicada le acarició relajándolo como si las manos que deslizaba sobre la  Biblia, estuvieran rodando en los caminos de su piel.


“…Nunca Jorge me habló de él, es muy joven además. Quizá no sea sacerdote todavía, puede que sea diácono o seminarista, sin embargo algo en mi pecho me dice que aparte la mirada, que ciegue mis ojos, que ensordezca los oídos, que voy a sufrir, que este fruto sí es prohibido, que está casado con Dios, y contra ello no podré hacer nada.
Sin embargo antes de rendirme al destino del sinsentido, debo saber quién es, si realmente es un fruto prohibido, si esta conmoción que jamás sentí es lo que los poetas llaman amor en el cual nunca creí, como tampoco en el Dios que rige que este ángel sea imposible de amar por los hombres, que se lo guarde sólo para ÉL.
Imposible es bajar una estrella o la luna con las manos, es llegar con ellas al cielo, enterrarse en una nube para espiar a la luna y besarla a escondidas del sol, acariciar una estrella, aunque los poetas prometan todo a su enamorado, pero nadie debiera ser imposible de amar porque Dios lo use para que haga sus tareas en la tierra, si Dios es amor, no puede oponerse a su creación.
Su voz es un susurro de miel que me hace viajar en mis sueños, pensar que lo que recién creí que era la muerte, en verdad era el descubrimiento de la vida, lo que es decir al fin del Amor.
¿Qué sentido tiene que ame a alguien prohibido entonces?
Imposible es caminar sin ojos, a ciegas en un camino lleno de escombros sin caer, o por senderos de arbustos y rosas llenos de espinas, de animales venenosos, imposible es navegar en el mar sin rumbo, o en lancha, o en otro sin olas ni tormentas, pero quizá todo ello fuera factible si un amor me llevara de la mano, como nunca sucedió.
Imposible me ha sido ver una salida a mis días oscuros en estos años, cuando todos los caminos, las personas y las puertas que abrí me llevaron al fracaso, excepto como abogado, y de súbito, cuando pensé que mi vida era esto, la nada, o la poca cosa de vivir vidas ajenas, la de ellos, la de mi hijo, las prestadas,  este ser con tan sólo mirarme me abrió miles de puertas y caminos, reavivó esperanzas inútiles de vivir la vida plena que nunca encontré, y sin embargo sé que él podría enseñármela, decirme que nada es imposible cuando se ama de verdad, a un hombre con mayúsculas que se dé en la esencia, que me regale su lealtad, que sepa Amar”.

__Entre  las líneas del rostro celestial que estaba escrutando, se coló el Ave María, y de soslayo vio el intercambio de votos y de anillos, increíblemente con lo que había deseado ese casamiento no logró concentrarse en él, y tampoco deseaba que terminara y dejar de ver ese rostro, pero al fin la trillada frase de los declaro marido y mujer, llegó a él, vio a Beto besar a su mujer,  y de súbito las miradas chocaron nuevamente cuando los presentes en el altar se saludaron, y en aquella delicadeza  de contacto, en aquellos dedos entrelazados, los suspiros nacieron desde el alma, como la electricidad que recorrió los cuerpos, pero Pedro parecía haber escapado del impacto inicial, y fue el primero capaz de emitir sonidos.

…¿El padrino, verdad?

… Amigo, socio y padrino, sí. Guillermo Graziani, encantado.

… Lo mismo digo, Pedro, dime Pedro, soy el sacerdote amigo del padre Jorge, me pidió el reemplazo y no puede negarme.

…¿Sacerdote?___Guillermo sintió que le amputaban el corazón con la vida en él.

… Sí, claro, Jorge me pidió que no se suspendieran los casamientos, pedí permiso en mi parroquia y vine esta noche acá.

Perdón, creo que me necesitan, de inmediato a la salida de sus amigos tengo otro casamiento.

… Claro, disculpa, debo salir supongo.

¡Pedro! Perdón, padre, me cuesta por tu juventud hacerme a la idea de que sos sacerdote.

… No soy tan joven, tengo más de treinta, aunque reconozco que siempre me ganó esta vocación de servicio, y que hace años que estoy junto a Dios.

___Guillermo sangraba hacia dentro, poniendo su mascarada más feliz hacia el afuera, y deseando retenerlo a como diera lugar, sacó el tema de Jorge a la luz.

… Disculpa, antes de irme, me gustaría ver al padre Jorge, sé que no es grave lo que tiene, pero hace años que somos amigos, y deseo saludarlo.

… Mira, no sabía.

… Sí, desde antes que decidiera el sacerdocio, de la facultad de abogacía, soy abogado penalista, no vengo demasiado a la iglesia. Confieso que no soy muy amigo de tu Dios, tampoco acostumbro a desafiarlo, me mantengo neutral.

__Los labios finos se curvaron en una sonrisa con un dejo de tristeza, y Pedro iluminó con la suya el aura de los dos.

… Nunca es tarde para acercarse a Dios, además ÉL no lleva la cuenta de los años de ausencia, puedes regresar cuando desees.

… Lo tendré en cuenta. ¿Podría ver a Jorge? Conozco el lugar, y dónde está su casa, no te preocupes.

¿Pedro? ¿No quieres ir un rato a la fiesta?

Somos pocos, es algo íntimo, Jorge hubiese ido.

… Mil disculpas, pero debo hacerme cargo de las otras ceremonias, otra vez será, gracias igual.

… Disculpa, tienes razón. Paso a ver a Jorge.

… Sí, Claro. ¿Conoces adónde están sus habitaciones?

… Sí, paso entonces, encantado padre___decirle padre se le antojó ridículo, decirle Pedro era pecado con lo que le provocaba, y para salir del paso, despegó la mirada, con mayor dificultad las manos que temblaban como hojas, y deseando que un pie se pusiera delante del otro, al fin comenzó a alejarse rumbo a la habitación de su amigo, aunque desde el umbral de la puerta donde se apoyó para que los pulmones inútiles tomaran el aire, lo miró hasta perderlo tras la puerta que supo era donde esperaba otra de las parejas.

Los suyos habían salido, ni siquiera los había acompañado, seguro de caer como fulminado por un rayo en medio de la estancia si no se quedaba hablando con él, y Fabián luego de los saludos afuera, se negó a dejar el sitio sin encontrar a su padre.

…Fabi ¿qué te sucede?

… Mi papá, Valeria, no está por ningún lado, en la ceremonia no escuchó nada, en la entrada pensé que se iba a desarmar, algo le sucede, y ahora desapareció. Ve si quieres acompañarlos a  Palermo para las fotos con Marcos, no dejaré a mi papá.

…¿Y adónde puede estar?

… Nunca salió, supongo que adentro, regresaré, o se derrumbó o quizá haya ido a ver al cura amigo, pero es el casamiento de sus amigos, podría haber venido en otro momento, no sé, Vale, es muy raro todo.

… Voy contigo, vamos a buscarlo, está por comenzar otra ceremonia, luego será más difícil encontrarlo.

___Mientras Fabián con Valeria fueron a la sacristía a averiguar el paradero de Guillermo, éste entraba al cuarto austero de su amigo, que afable como siempre le sonrió al verlo vestido con smoking, sabiendo lo que los odiaba.

..¿Estás vivo todavía?

… Sabía que ibas a venir a pelear. ¿Cómo salió todo?

… Bien, al fin aquellos están casados.

__Jorge conocía como nadie a Guillermo pese a verse en pocas ocasiones, y no fue ésta la excepción en que creyó ver sombras en la mirada que observó con perspicacia.

… ¿Me parece a mí o algo más que el casamiento de tus amigos te ronda en la mente? Es más, me pregunto qué haces acá en lugar de haber salido tras ellos.

__Guillermo descendió la mirada, la sola mención de lo que deseaba saber, le desbocaba el corazón, le hacía temblar de cabeza a pies, y la tristeza le formó un nudo en la garganta cuando al fin pudo con voz ronca hablar con su amigo.

… Jorge, sabes que no soy devoto, que soy mi propio soberano, que nunca me metí con tu Dios, y pretendo que tampoco ÉL interfiera en mi vida.

…Lo que ÉL  decida no es cosa de los hombres, Guille, aunque seas tu soberano, y, puede entrar en la vida de cualquiera sin pedir permiso.

¿Qué está pasando ahora?

¿Te enamoraste o se enteraron Ana y Fabián de lo de Juan?

… No es de ellos que deseo hablar.

…¿Entonces?

…¿Quién es Pedro, Jorge?

…No Guille, con Pedro, no. Con él no. Te he bancado y he ido contra lo que me dicta mi religión mil veces,…, pero con él no.

… Me pasó todo con él, Jorge, por un momento mientras caminaba hacia al altar al verlo, pensé que moriría allí. El corazón se agrandó en mi pecho, el aire y la razón se fugaron, temblaba como  en medio de una temperad, todo se difuminó, pensé que no daría un paso más__la tristeza le provocó un extraño nudo en la garganta y la voz salió ronca, rota, en un hilo, con lágrimas que comenzaron a rodar en el rostro, y a preocupar a Jorge como nunca antes con nadie ni ante nadie, porque nunca se había mostrado vulnerable___,  no pude estar en la ceremonia, estaba mi cuerpo, mi mente y mi alma en él, su voz me relajó y al mismo tiempo me transportó fuera del mundo conocido, y al presentarnos y darle la mano, me electrocuté en la energía.

…Olvídalo, Guillermo, como sacerdote, y como amigo, no quiero verte destruido esta vez.

Lejos de ser un muchacho traumatizado en el pasado o gay que se refugia en la iglesia, Pedro siempre amó a Dios, desde muy pequeño renunció a permanecer en una familia de la nobleza, para entrar como pupilo en un  colegio religioso, y luego casarse con Dios, hace cinco años que es sacerdote, muy respetado y querido por todos.

Olvídalo, Guille, olvida que pisaste la capilla, que lo viste.

… Por favor, Jorge, dime adónde tiene su lugar.

.. No Guillermo, no lo haré. ¿Para qué deseas volver a verlo?

… Te juro que no quiero confundirlo, tampoco nada raro, sólo necesito verlo una vez más, dime por favor ¿adónde lo puedo encontrar, cuál es su iglesia?

..Guillermo, regresa con Ana, con Juan y con los tuyos, no quieras torcer lo imposible, te juro que Pedro tiene real vocación de sacerdote, es incapaz de amar a alguien que no sea a Dios, y desde ÉL, a la humanidad, pero como sacerdote, no como vos.

… No importa, no estoy preparado para no volver a verlo, una vez, Jorge, como si estuviera muriendo y te pidiera un último deseo, por favor, se lo pido al amigo.

… Está bien, pero, Guille, no intentes nada por favor, te juro que no quiero que vengas acá en un mes hecho pedazos.

… Lo veré desde lejos, en su sitio, para entender que... le pertenece a Dios, solamente a Dios.

… Está bien, agenda la dirección de la iglesia, puedes ir en horario de misas o de confesión.

… Gracias, te prometo que no intentaré nada.

Ahora debo irme, ya deben estar en la fiesta.

Regresaré a verte en un par de días.

… Eso espero, aunque es una gripe, nada grave.

¡Guille!

… No te preocupes, todo estará bien, se me pasará, si es como dices pasará.

___La fiesta estuvo preciosa, en al salón preparado por Gabriela con Sonia, duró hasta el desayuno, pero Guillermo estaba ausente, como autómata respondía a las charlas como un “otro” intruso incrustado bajo su piel, el verdadero, el que tenía alma, corazón, sentimientos, había quedado junto a Pedro, y lo único que lo mantenía en pie era saber que podría en horas ir a la iglesia a verlo, aunque no tendría pretexto alguno ni siquiera para hablarlo, quizá al fin tuviera que soportar una misa, con tal de verlo, mintiendo a Jorge, pretendía ir a diario.

..!Papá! ¿Qué te sucedió hoy en la iglesia y por qué te quedaste?

… Fui a ver a Jorge, te dije hijito.

… ¿Y en la ceremonia?

… Estaba algo ofuscado, el smoking, el lugar, ya sabes  que no me gusta demasiado todo eso.

… Estás raro vos, no sé si te creo.

… Ahora cansado, me voy a casa, hijo, ellos en rato se irán a la costa, les regalamos pasaje y estadía con Marcos, iré a saludar y cierra todo cuando lleguen ustedes.

… Bueno, pa.

¿Seguro que estás bien?

… Bien hijito, ve a divertirte.

___Cuando al fin entró a la casa, solo como deseaba, se fue quitando la ropa que se le antojaba una prisión, se sirvió un whisky y se desmoronó en el sillón, cerrando los ojos al fin para traer las imágenes tatuadas en las retinas.

“…No puede estar pasándome esto, una vida sin creer en nada, sin enamorarme de nadie, y ahora quedar prendido en el anhelo por un sacerdote, por alguien de Dios, prohibido para hombres y mujeres, no es lógico, menos es justo.

¿Me habré muerto al entrar a la iglesia y estoy en otro plano imaginándolo?

¿Enloquecí y alucino?

¿Existes, Pedro?

Es muy sencillo, lo sabré al amanecer en tu iglesia donde te buscaré cada día de mi vida sin pausas, no me voy a detener e inventaré cada vez un pretexto para quedarme cerca, sería capaz de hacerme cura con tal de estar a tu lado”.

__Pedro había llegado a la cama sintiendo un raro anhelo, un ansia desconocida de algo impreciso, y de súbito apareció aquella mirada perturbadora, hipnotizante, y sintió deseos sin el porqué, de cuidar los sueños de ese desconocido, de curar sus penas…. adivinadas en el vacío en que lo presentía hundido, consolándolo minuto a minuto.

De pronto sintió que estaba en un cuarto oscuro, y que la luz se encendía cegándolo en su esplendor, al sentir esa dulce y provocadora, penetrante mirada clavada en la suya,  se estremeció y a la vez se encendió al pensarlo.

Ganar o perder batallas eran la constante en la vida de todo sacerdote, pero esa noche supo que sentía algo por Guillermo, por alguien desconocido y sin embargo familiar como nadie, algo sin motivo, sin nombre, pero que imperiosamente se le antojaba necesario en sus días, como si el alma del desconocido se hubiera quedado en sus manos y la suya hubiera flotado hacia él, supo que se volverían a encontrar.

“… ¿Qué me sucede con Guillermo?
Yo amo a todo el universo desde Dios, lo imposible, las noches, las alegrías, las tristezas. Amo el manantial de mi pobreza y el llanto que vierte mi  carencia.
El amor a Dios siempre fue lo único sublime para mí, el cristal o la piedra más preciosa sin impureza alguna, por ello lo elijo.
¿Cómo no amar mis noches tristes que entienden mis lágrimas y las felices que lo hacen con mi alegría?
¿Cómo no amar el universo si es la creación de Dios?, allí lo conozco, veo su belleza y su infinita bondad. En él encuentro mi refugio cuando vago solo, y flaquea mi fe.
En él ahogo mi llanto que amo, por ser mi fiel compañero desde mi niñez, como lo fue la soledad que elegí, que Dios solamente significó. Decidí amar de un modo diferente, no estoy arrepentido, desde lo imposible conozco a Dios”.

Ciudad Autónoma, viernes, 20 de mayo de 2016.

08.00 horas.

 Iglesia.

__Como cada mañana, Pedro con la alegría recuperada, las sombras esparcidas en la comunión, dio la misa primera de la mañana, y luego fue al confesionario, mientras los dos sacerdotes mayores seguían con los seminaristas y con las misas siguientes.

Parecía una mañana más, tranquila, lluviosa y demasiado fría en ese apresurado invierno del año, cuando  terminó de confesar a un mujer, cara a cara, de súbito se iba a retirar, pero alguien se había arrodillado, buscando el método tradicional de confesión tras la rejilla, y entonces se volvió a fin de cumplir con su deber.

..¿Cuánto hace que no te confiesas hermano?

… Nunca lo hice, padre, es la primera vez.

__La voz profunda lo abofeteó de frente, plantando cara sin verlo, al hombre que perturbara sus sentidos, en la noche del día anterior, Guillermo estaba del otro lado del velo, y deseaba confesarse por primera vez, allí  sin saber cómo había llegado, y…. con él.

CONTINUARÁ.

Hechos y personajes son ficticios.

Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia.

Lenguaje adulto.