¿Y SI FUERA POSIBLE? CAPÍTULO 35.

¿Y SI FUERA POSIBLE?”

Capítulo 35.

Bs. As., Pilar, domingo 29 de mayo de 2016.

22.30 horas.

“Capítulo 93.

 Pero el amor, esa palabra… Moralista Horacio, temeroso de pasiones sin una razón de aguas hondas, desconcertado y arisco en la ciudad donde el amor se llama con todos los nombres de todas las calles, de todas las casas, de todos los pisos, de todas las habitaciones, de todas las camas, de todos los sueños, de todos los olvidos o los recuerdos. Amor mío, no te quiero por vos ni por mí ni por los dos juntos, no te quiero porque la sangre me llame a quererte, te quiero porque no sos mía, porque estás del otro lado, ahí donde me invitás a saltar y no puedo dar el salto, porque en lo más profundo de la posesión no estás en mí, no te alcanzo, no paso de tu cuerpo, de tu risa, hay horas en que me atormenta que me ames (cómo te gusta usar el verbo amar, con qué cursilería lo vas dejando caer sobre los platos y las sábanas y los autobuses), me atormenta tu amor que no me sirve de puente porque un puente no se sostiene de un solo lado, jamás Wright ni Le Corbusier van a hacer un puente sostenido de un solo lado, y no me mires con esos ojos de pájaro, para vos la operación del amor es tan sencilla, te curarás antes que yo y eso que me querés como yo no te quiero. Claro que te curarás, porque vivís en la salud, después de mí será cualquier otro, eso se cambia como los corpiños. Tan triste oyendo al cínico Horacio que quiere un amor pasaporte, amor pasamontañas, amor llave, amor revólver, amor que le dé los mil ojos de Argos, la ubicuidad, el silencio desde donde la música es posible, la raíz desde donde se podría empezar a tejer una lengua. Y es tonto porque todo eso duerme un poco en vos, no habría más que sumergirte en un vaso de agua como una flor japonesa y poco a poco empezarían a brotar los pétalos coloreados, se hincharían las formas combadas, crecería la hermosura. Dadora de infinito, yo no sé tomar, perdóname. Me estás alcanzando una manzana y yo he dejado los dientes en la mesa de luz. Stop, ya está bien así. También puedo ser grosero, fájate. Pero fijate bien, porque no es gratuito.

 ¿Por qué stop? Por miedo de empezar las fabricaciones, son tan fáciles. Sacás una idea de ahí, un sentimiento del otro estante, los atás con ayuda de palabras, perras negras, y resulta que te quiero. Total parcial: te quiero. Total general: te amo. Así viven muchos amigos míos, sin hablar de un tío y dos primos, convencidos del amor-que-sienten-por-sus-esposas. De la palabra a los actos, che; en general sin verba no hay res. Lo que mucha gente llama amar consiste en elegir a una mujer y casarse con ella. La eligen, te lo juro, los he visto. Como si se pudiese elegir en el amor, como si no fuera un rayo que te parte los huesos y te deja estaqueado en la mitad del patio. Vos dirás que la eligen porque-la-aman, yo creo que es al verse. A Beatriz no se la elige, a Julieta no se la elige. Vos no elegís la lluvia que te va a calar hasta los huesos cuando salís de un concierto. Pero estoy solo en mi pieza, caigo en artilugios de escriba, las perras negras se vengan cómo pueden, me mordisquean desde abajo de la mesa. ¿Se dice abajo o debajo? Lo mismo te muerden. ¿Por qué, por qué, pourquoi, why, warum, perchè este horror a las perras negras? Miralas ahí en ese poema de Nashe, convertidas en abejas. Y ahí, en dos versos de Octavio Paz, muslos del sol, recintos del verano. Pero un mismo cuerpo de mujer es María y la Brinvilliers, los ojos que se nublan mirando un bello ocaso son la misma óptica que se regala con los retorcimientos de un ahorcado. Tengo miedo de ese proxenetismo, de tinta y de voces, mar de lenguas lamiendo el culo del mundo. Miel y leche hay debajo de tu lengua… Sí, pero también está dicho que las moscas muertas hacen heder el perfume del perfumista. En guerra con la palabra, en guerra, todo lo que sea necesario aunque haya que renunciar a la inteligencia, quedarse en el mero pedido de papas fritas y los telegramas Reuter, en las cartas de mi noble hermano y los diálogos del cine. Curioso, muy curioso que Puttenham sintiera las palabras como si fueran objetos, y hasta criaturas con vida propia. También a mí, a veces, me parece estar engendrando ríos de hormigas feroces que se comerán el mundo. Ah, si en el silencio empollara el Roc… Logos, faute éclatante. Concebir una raza que se expresara por el dibujo, la danza, el macramé o una mímica abstracta. ¿Evitarían las connotaciones, raíz del engaño? Honneur des hommes, etc. Sí, pero un honor que se deshonra a cada frase, como un burdel de vírgenes si la cosa fuera posible.

 Del amor a la filología, estás lucido, Horacio. La culpa la tiene Morelli que te obsesiona, su insensata tentativa te hace entrever una vuelta al paraíso perdido, pobre preadamita de snack-bar, de edad de oro envuelta en celofán. This is a plastic’s age, man, a plastic’s age. Olvidate de la perras. Rajá, jauría, tenemos que pensar, lo que se llama pensar, es decir sentir, situarse y confrontarse antes de permitir el paso de la más pequeña oración principal o subordinada. París es un centro, entendés, un mandala que hay que recorrer sin dialéctica, un laberinto donde las fórmulas pragmáticas no sirven más que para perderse. Entonces un cogito que sea como respirar París, entrar en él dejándolo entrar, neuma y no logos. Argentino compadrón, desembarcando con la suficiencia de una cultura de tres por cinco, entendido en todo, al día en todo, con un buen gusto aceptable, la historia de la raza humana bien sabida, los períodos artísticos, el románico y el gótico, las corrientes filosóficas, las tensiones políticas, la Shell Mex, la acción y la reflexión, el compromiso y la libertad, Piero della Francesca y Antón Webern, la tecnología bien catalogada, Lettera 22, Fiat 1600, Juan XXIII. Qué bien, qué bien. Era una pequeña librería de la rue du Cherche-Midi, era un aire suave de pausados giros, era la tarde y la hora, era del año la estación florida, era el Verbo (en el principio), era un hombre que se creía un hombre. Qué burrada infinita, madre mía. Y ella salió de la librería (recién ahora me doy cuenta de que era como una metáfora, ella saliendo nada menos que de una librería) y cambiamos dos palabras y nos fuimos a tomar una copa de pelure d’oignon a un café de Sèvres-Babylone (hablando de metáforas, yo delicada porcelana recién desembarcada, HANDEL WITH CARE, y ella Babilonia, raíz de tiempo, cosa anterior, primeval being, terror y delicia de los comienzos, romanticismo de Atala pero con un tigre auténtico esperando detrás del árbol). Y así Sèvres se fue con Babylone a tomar un vaso de pelure d’oignon, nos mirábamos y yo creo que ya empezábamos a deseamos (pero eso fue más tarde, en la rue Réaumur) y sobrevino un diálogo memorable, absolutamente recubierto de malentendidos, de desajustes que se resolvían en vagos silencios, hasta que las manos empezaron a tallar, era dulce acariciarse las manos mirándose y sonriendo, encendíamos los Gauloises el uno en el pucho del otro, nos frotábamos con los ojos, estábamos tan de acuerdo en todo que era una vergüenza, París danzaba afuera esperándonos, apenas habíamos desembarcado, apenas vivíamos, todo estaba ahí sin nombre y sin historia (sobre todo para Babylone, y el pobre Sèvres hacía un enorme esfuerzo, fascinado por esa manera Babylone de mirar lo gótico sin ponerle etiquetas, de andar por las orillas del río sin ver remontar los drakens normandos). Al despedirnos éramos como dos chicos que se han hecho estrepitosamente amigos en una fiesta de cumpleaños y se siguen mirando mientras los padres los tiran de la mano y los arrastran, y es un dolor dulce y una esperanza, y se sabe que uno se llama Tony y la otra Lulú, y basta para que el corazón sea como una frutilla, y…

Horacio, Horacio.

Merde, alors. ¿Por qué no? Hablo de entonces, de Sèvres-Babylone, no de este balance elegíaco en que ya sabemos que el juego está jugado.

Julio Cortázar – Rayuela”.

__Pedro no miró hacia atrás y caminando llegó a casa de Dana, donde Michel por suerte dormía, y su madre lo atendió incrédula, al verlo llegar con el bolso, pidiéndole una habitación, quizá dos para pintar allí.

… ¿Te separaste de Sarah? Pensé que te habías casado por amor.

…. También yo, Dana, la quiero mucho, pero me equivoqué, no es Amor, además me asfixian sus normas, la de la Sociedad Rural en que se mueve. Ya me conoces. Hoy no pude más, ya veré qué sucede.

… ¿Quieres  comer  o tomar algo?

.. No, gracias, volveré a salir en minutos,  pero no quería que luego estuviera el nene en la mañana o más tarde despertarte. Dana, escúchame, confío en ti plenamente,  le temo a Natasha, está haciendo cosas extrañas, lo sé, es peligrosa.

… No me lo parece, me trata muy bien, me visita, incluso dijo de organizarme alguna muestra. ¿Me parece a mí o fue tu novia antes que su madre?

.. Mi novia no, tuvimos una relación informal, corta en París, ella es una mujer libertina, me buscó, nunca la amé ni le prometí nada, pero ahora está celosa, y amenaza continuamente.

…¿Cómo?__ inquisidora ___ La relación con ella fue antes o después de Sarah.

… Antes, ella me descubrió como artista y me presentó a Sarah, cuando elegí a la madre se puso como loca, intentó ponernos en contra a Guillermo, pero luego quedó aislada, y comenzó a hostigarme. Cuídate de ella, y sobretodo cuida a Michel, que no vaya al casco por unos días.

… Pedro, si te separas de Sarah, no podremos quedarnos en esta casa, no es lógico.

.. No te preocupes, esta casa está desocupada, no estoy separado definitivamente, le pagaremos un alquiler, es más, le  dejaré a Natasha que es el problema un cuadro que cubre diez años de un alquiler, por el dinero que me adelantó Sarah para el nene y por la casa, no te preocupes, Sarah es buena gente además. Ahora me urge proteger mi obra, temo que Natasha intente sabotearla, no me preguntes por qué, intuyo que algo está maquinando, no creo que sea dañarnos, lo más directo es a mi obra.

Me exigió verla, me negué, está furiosa, y por ello pedí un sitio privado donde resguardarla. Todo lo que te estoy contando no debe saberlo ni siquiera el nene, Dana, el futuro de los tres y más están en juego.

… ¿Tan peligrosa la crees?

… No lo vi antes, pero sí, creo que lo es. Ahora mismo alguien me está ayudando a sacar los lienzos que he pintado acá, pero necesito viajar a París, para traer la obra que dejé en Europa, ella ya dispone de algunos cuadros que llevé de muestra a Nueva York, pero no hacen diferencia si rescato el resto. Lamentablemente conserva llaves de mis lugares, y la obra original la quiero conmigo, y llevarla cuando viaje yo, que supongo no tardará en provocarlo, por medio de las conferencias de prensa.

Necesito viajar sin que lo sepa, cerrar mis sitios allá, traer los lienzos originales, arrendar el departamento, el estudio, pero si alguien te preguntara por mí, dirás que estoy trabajando en un estudio privado que alquilé en el centro, que no sabes donde, por favor, Dana, te aseguro que el futuro del nene depende de esto. Lo que hago lo impulsa mi sueño de dar un futuro mejor a nuestro hijo, ya mi sueño de ser famoso no importa como antes, pero necesito el lanzamiento con esa muestra, además de evitar acciones legales por incumplimiento del contrato que firmé sin leer, que Natasha no dudaría en iniciar.

… Pedro, lo siento. No imaginé que estuviese tan despechada, al fin Sarah es la madre, ella te la presentó.

… Eso no importa ya, sí que se haga la muestra, luego se dispararán solas las siguientes, acá, y daré el concierto como algo independiente de ellas, pero para comenzar necesito de la venta de esta muestra.

… No te preocupes, nadie sabrá nada por mí, ¿cuándo viajas?

… Lo antes posible, no he sacado ni el pasaje, lo decidí hoy ante el apremio de Natasha por ver la obra, lo mismo que el resguardo, eso lo tenía ya previsto, mientras menos sepas mejor. Intentará en mi ausencia entrar al estudio, dejaré con llave, entrará, pero no encontrará nada de valor.

…¿Qué quieres que le diga a Michel?

… Pienso que en un mes estaremos viajando a Nueva York, necesitaría que apuraras los papeles del nene, por ahora dile que estoy trabajando en el centro, antes del fin de semana regresaré. Según el estado de Sarah, me quedaré acá en la habitación de huéspedes o regresaré al casco, por el alquiler no te preocupes, mañana mismo le dejaré en consignación un cuadro a Natasha, tonta no es, sabrá lo que puede sacarle en el mercado.

…Cuenta conmigo, Pedro, no hay nada que desee más que el nene tenga su futuro seguro, cerca del papá, y que cumplas tus sueños, los del chico que conocí, además lo mereces, tu talento es único.

..Gracias, Dana, no dependas ni firmes nunca nada con Natasha, si quieres exponer tus fotos, lo harás en mi muestra en Bs. As., a mi cargo.

… Como digas, te daré un juego de llaves, entonces, y si quieres dejar el bolso, mientras vas a guardar los cuadros te dejaré la habitación preparada.

… Es tarde, esta noche quizá la pase en el centro, sacaré el pasaje y vendré a almorzar con ustedes, quizá mañana a la noche ya viaje, pero por favor no digas nada a nadie. Sarah algo sabe, se me escapó y dije que quizá fuera a cerrar aquello que por seguirla dejé como estaba, pero no conoce fechas.

.. Está bien, ¿te vas ahora?

… Sí, en un rato me esperan con los cuadros en el centro.

… Pero… entonces alguien de mucha confianza te está ayudando.

… Así es, más adelante lo sabrás, ahora prefiero ocuparme de lo urgente.

Gracias, hasta mañana.

___Pilar. Casco.

__Guillermo sin permiso, usando las llaves que Pedro le diera, había sacado toda la obra, dejando los caballetes. Originales y muestras estaban cargadas, pero supo que su hermana no se quedaría quieta si Pedro no estaba a la vista, por tanto dejó algunos cuadros menores que Pedro le indicó.

Fue con disimulo al estudio, en espera de que todos durmieran, cuando Natasha entró en una exhalación destilando furia por los ojos y en la voz.

…¿No piensas hacer nada con tu amiguito?

...No sé a qué te refieres.

… A Pedro, a mamá. No hagas el tonto, conmigo no, sabes perfectamente que se fue, esto lo  tramaron juntos__ Guillermo se recostó en el respaldo del sillón haciéndolo girar impasible, mientras su hermana gritaba cada vez más.

…¿No te importa nada ni nadie, verdad? ¿Ni siquiera tu madre?

¿Cuál es el plan? ¿Pedro está tramitando a la buena los papeles para llevarse a Michel y  tú luego le robarás el bebé a Camila para huir con él?

…! Basta, Natasha! ¡Termina de decir estupideces o no responderé por mis actos, por más que lleves mi sangre! ¡No tenemos ningún plan, menos alejaríamos a los niños de sus madres, deja de inventar cosas de las que sí vos sos capaz!

…¿Sabes que jamás vi a mamá como ahora? Ni siquiera le dolió así la muerte de papá, si Pedro la dejara, no sobrevivirá.

… No la he visto, ya iré a su habitación, tampoco creo que Pedro la deje, pasa que supongo que lo de esa dichosa fiesta, los hizo discutir.

…Y yo quiero creer que no defenderás lo que hizo. ¿Dónde está?

… No lo sé.

… ¡No me tomes por idiota, Guillermo! No soy Camila que se banca verte con un tipo en la cama.

…. ¡Basta te dije! No sé dónde está Pedro, supongo que no lejos, que estará con su hijo, o ¿quieres buscarlo acá detrás de algún armario?

En todo caso se comunicará con Sarah, a ella debe darle explicaciones, no a vos.

… Se negó a mostrarme su obra, debo organizar los espacios, necesito verla.

… Tendrás que esperar a que regrese, y en todo caso a que se la muestre a su marchante, a mamá. Iré a verla, ve a dormir mejor, hermana, quizá en la mañana Pedro regrese, y estás rompiéndome los tímpanos.

… Trata de hacerlo regresar, o el peso de la muerte de mamá, también caerá sobre ti, Guillermo___ la cachetada de las palabras se unió al portazo que dio Natasha al salir, y Guillermo sintió el impacto, decidió ver a su madre antes de  salir, sin embargo nada lo haría dar marcha atrás e hizo un llamado para conseguir el vuelo a  París.

___

…Siento que me dio una puñalada en medio del corazón, Guillermo. Es un chico grande que sobreactúa cuando se siente rechazado y criticado, pero no puede andar por la vida sin normas, no en la vida que eligió, ni a su edad, y tampoco darme a elegir entre Natasha y él. Lo amo, pero más amo a mi hija. Sin embargo si no regresara, siento que no podré seguir, estoy agonizando, hijo, duele demasiado, sé que fui responsable como él de seguirlo en esta locura, pero no pude evitarlo, y si no regresara, no sé si...

…Chis…__ Guillermo vio a su madre deshecha, sabía que estaba sufriendo más que con Julio, por saber lo que era un duelo quizá Pedro doliera más aún, y no lograba que dejara de llorar.

…Cuando murió tu padre, no tenía mi carrera, pude darme el lujo de encerrarme a llorarlo, ahora que estoy en el mundo, si perdiera a Pedro y debiera salir  a fingir que estoy bien, enloqueceré de dolor. Duele demasiado, hijo, prefiero morir antes que perderlo, más siendo su marchante.

__Guillermo sintió la tristeza embargándolo, pero no culpa, tristeza por el dolor de Sarah, y además porque supo que por ahora, Pedro debería seguir a su lado, como él junto a Camila hasta que su hijo fuera algo mayor.

Cuando exhausta de llorar se durmió en sus brazos, la deslizó en la cama, la arropó con ternura, apagó las luces, y salió para llevarle los lienzos a Pedro, además del bolso de viaje que ya había preparado. Ni siquiera dejando a Sarah así, podía renunciar a los días en París.

Bs. As., Ciudad Autónoma, lunes, 30 de mayo de 2016.

00.30 horas a.m.

“…Pedro, amor mío, me duele Sarah, pero no puedo renunciar a vos, te esperé toda  la vida con una ilusión moribunda, te busqué en decenas de hombres equivocados, y te encontré al fin con un Amor desesperadamente correspondido.

Ellas deben apartarse del camino en algún momento, no perdernos nosotros, yo bendigo a tus padres, al día en que naciste a esta vida, también a Natasha a pesar de todo que te encontró, a Sarah que te condujo a Pilar, a Dios en el cual no creía le agradezco hoy que vivas, que seas real, que tu presencia  me inunde y me colme, sos la creación más bella, la que se vuelve suspiro en la mirada, la que me lleva a respirar para vivir en vos, para vos.

Bendigo el don de tu vida, el de la de Michel, los dos llenan mi alma de esperanza, el amor se convirtió al fin en el acto de fe que no se elige, que es.

Sos mi amor absoluto, mi otra mitad, mi otra parte, mi alma gemela, mi completitud.

__Cuando Guillermo llegó, entró al subsuelo, Pedro lo esperaba y lo alertó por un mensaje de texto, entre los dos con cautela bajaron las cajas con los lienzos, y subieron al piso de Guillermo en Palermo, que era exclusivamente suyo, ni Sarah sabía de él, mucho menos Natasha.

Acomodaron los cuadros por ahora guardados en una habitación, Pedro decidió que quizá quedarían allí enmarcados y bajo llave al regresar de Paris, y agotados pero sin hablar de nada más se echaron abrazados en el sillón del estar con dos copas de whisky entre besos y risas, felices de estar juntos, sin cuestionarse más.

… Mañana si quieres podremos salir, ya conseguí el avión.

… ¿Qué? Guille hay que pagarlo, debe salir un dineral.

… No amorcito, no te preocupes, es de alguien que me debe favores, no es oficial, no lo robé, y si quieres que luego le haga un regalo, cuando seas millonario veremos. Lo usa una o dos veces al año para andar por el mundo, tiene la tripulación mínima, comodidad para diez personas, mañana a la noche podemos partir.

…¿Le dijiste a Camila?

… No. Le diré a último momento, digamos que avisaré por teléfono que salí, ya no regresaré, traje el bolso, ya que irás a almorzar  con Michel, no coincidirán las desapariciones.

___Afuera el viento peinaba la copa de los árboles, adentro Guillermo despeinaba a Pedro en una calma silenciosa que parecía contener la respiración mientras se internaban en la mirada del otro, ya soñando con los días en París.

…Te amaré todo el viaje, de noche, en un avión, es maravilloso, jamás pasamos tantas horas,…,  juntos.

__Le acariciaba las piernas sobre la ropa, mientras los cuerpos se acercaban, y la voz llegaba en pequeñas oleadas como el aroma que los envolvía y embriagaba a la vez.

Y desnudos en la mirada, en el sentir, en el alma, más tarde vendría la desnudez completa, pero ya se sintieron libres y capaces de volar, cada parte furiosa del ser, con coraje y albedrío decidió querer estar dentro del otro, y despertar cabalgando en la sangre, entre el hechizo de besos, entre los susurros de los “ te amo”.

Solos no podían volar, apenas supervivían latiendo despacio, respirando apenas, pero desnudos en el otro flotaban, se encerraban y se envolvían en círculos amorosos o pecaminosos, desnudando entre los dedos el sabroso aliento, rociados en el mismo fluido, emanado de cada poro en los dos, pegados y desnudos deseaban algún día vivir, en la suave caricia, en los corazones encantados, enredados en ilusiones únicas, palpitando en todos lados juntos, confiando en el otro, envueltos en ensueños y quimeras que volverían realidades.

Guillermo pensó que por primera vez se veía en esos  ojos, marrones con destellos dorados en el centro al amarse, la primera vez que arrancaba sonrisas que horadaban los hoyuelos, como esculpiendo aquella geografía en gestos, y se fundieron en un beso risueño, con labios y lengua sabiendo a whisky, rodaron y se contemplaron, sintiendo punzadas que oprimieron el pecho y el sexo por igual en el mismo amor, en el mismo placer, en la misma emoción de estar juntos, libres, aunque fuese pecado, por unas horas, en cualquier lugar.

…Sos tan hermoso, tan mío, temo tanto perderte.

.. Chis.

__Las palabras cesaron cuando las bocas se abrieron y se encontraron en la avidez, en el mismo ardor, y una corriente eléctrica recorría los cuerpos vestidos  a través del hilo conductor del placer y del amor, como pulsando un interruptor., erizando hasta el pelo, el sexo, las yemas, los labios al rozarse, emitiendo gemidos que disparaban a los dedos a colarse a cualquier lugar.

Se arrancaron las camisas, lamiendo los pezones,  mordisqueándolos en círculos hasta restregarse en la pelvis , en la urgencia de la unión, buscando con las manos a tientas, cinturones y cremalleras para liberarse de las barreras todas, deslizándose juntos para que todo cayera, y acceder con los dedos, succionados y cobijados en el otro mientras los labios paseaban donde podían y si podían continuaban torturando las notas mágicas, blancas de vida, negras para que fuesen vida, bemoles, fusas, semifusas, para dar los acordes justos, armónicos primero, en contrapunto loco al final.

Uno quiso abarcar al otro, pero en la mirada desearon sentirse dentro, y se envolvieron en el calor, uno en las llamas en la boca, en la lengua, uno en cómo los cuerpos se buscaban  , se envolvían, mirándose hambrientos de todo, siguiendo cada movimiento que exacerbaba la excitación en los dos, hasta que rodaron lo justo, ajustando la piel manteniendo el beso, los labios paseando en los otros, las lenguas danzando o succionadas en ritmo, y Guillermo se deslizó al interior de Pedro que se arqueó hacia él, primero entró despacio, provocándolo, deleitándose en el cobijo y en sus movimientos, sin prisa, mirándolo, colando los dedos ante cada embestida, una mano hacia delante, la otra al pezón por turnos…. hasta que dejaron de emitir y de oír ya palabras, para ser sólo jadeos, respiraciones entrecortadas, gemidos, sudor, lágrimas, mientras Guillermo aferró las caderas, enterrándose más y más profundo y el deseo de Pedro enardecido empujaba más hondo, hincándole las uñas desde atrás, convirtiéndolos en rotundos, en primitivos, en expresionistas sublimes cavando fosos a la vez ascendiendo juntos al infinito, apaciguando el ritmo sólo para el beso, para recorrer los labios por dentro, por fuera, la curva del hombro con la lengua, capturando pezones con los dedos, torturando ante cada lenta embestida, hasta que los ojos se oscurecían, el ceño se arrugaba colocándolos a ambos al borde del precipicio, por no hablar del envite de las caderas de Pedro que ahondaban la dominación de su amor, alternando presiones delante, suave,  fuerte, hasta ser un  jadeo, un gemido, una tensión completa antes de la relajación en el abandono, hasta el grito ahogado en el último aliento, cuando se catapultaban en el clímax infinito, derramando chorros de amor por doquier y adentro, embebiendo el ser de los dos, y todo se expresaba en y por los cuerpos al susurro del nombre que disipaba todo lo que no fuera el otro que cobijaba, envolvía, corría al encuentro, abrazaba,  y se daba o recibía por entero.

Y allí permanecieron por el deseo consumido, con la respiración agónica, desencajados, desmoronados, como deteniendo el tiempo, el movimiento de las estrellas, de los planetas, del universo entero, detenido el tiempo en la unión final absoluta…. en un ser.

CONTINUARÁ.

IDEA ORIGINAL. ALBERTO MIGRÉ. 1973.

HECHOS YPERSONAJES SON FICTICIOS, CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES MERA COINCIDENCIA,

LENGUAJE ADULTO. ESCENAS EXPLÍCITAS.