lunes, 2 de febrero de 2015

PREDESTINADOS...CAPÍTULO TRECE.


 

PREDESTINADOS…CAPÍTULO TRECE. RELATOS BREVES…






Bs. As., viernes 27 de octubre de 2014.



…¡Hola!, ¿molesto?
  No, buenas noches. Parece que el destino está empeñado en que nos encontremos una y otra vez.
… Así parece, ¿puedo sentarme con vos?
… Sí, claro. Perdón: Pedro, Pedro Beggio, encantado.

___ Guillermo sintió que el mundo se le venía encima al escuchar el nombre y temblando sin apartar la mirada se presentó.

… ¡Guillermo, Guillermo Graziani! Increíble, ¿no?
… ¿Eres tú?, ¿el abogado que tiene que acompañarme, que cuidarme, a quien envié la denuncia anónima? Me vas a odiar por cómo te he complicado la vida.
… Y vos sos el asesor letrado que pensé que estaba en complicidad con los de la multinacional.

Todo el tiempo habían mantenido la mano de uno en la del otro, los dedos entrelazados en un contacto de tal intimidad que los estremecía y los electrocutaba sin razón. Los sonidos eran ruidos sordos de fondo, el espacio estaba desdibujado, estaban en algún rincón del  tiempo a solas, como en una burbuja de aire de a dos mirándose con la luz titilando en los ojos.

__ De repente, alguien los llevó por delante y el mundo regresó de súbito.

… Siéntate, nos vimos en tribunales y no fui capaz de asociar.
… Es raro que no te haya visto antes aunque presiento que sí. ¿No nos conocemos de alguna parte?
.. No lo creo aunque también me lo parece.
… ¿Estás seguro que no fuiste mi alumno o que no has ido a alguna audiencia? ¿Por qué elegiste el estudio para enviar la denuncia?
… No hice la carrera en Bs. As., no pude haber sido tu alumno. Soy chileno, cursé y me recibí en Santiago, hace cuatro años que vine a Argentina y desde entonces trabajo en la multinacional.
Espera, ¿qué lugar tienes en el avión?, muéstrame el pasaje.

___ Guillermo se lo dio, Pedro miró y sin darle tiempo ni preguntarle nada salió disparado a  la entrada haciendo lo imposible porque lo dejaran volver a ventanillas, y lográndolo regresó agitado y sonriendo, de tal manera que encandiló a Guillermo que deslumbrado por la sonrisa  con hoyuelos parpadeó preguntando con la mirada.

.. Perdón, pero como tenemos tanto por hablar, fui a cambiar los lugares, así podemos viajar juntos y seguir charlando, ¿no te molesta no?
.. No, para nada, está perfecto, muy buena idea.

___Antes que el avión despegara eran mucho más que unos simples conocidos en tribunales.

 A Pedro, Guillermo le resultaba muy familiar, sabía exactamente qué movimientos iba a hacer en cada momento, qué le iba a decir, como si existiera una extraña comunicación telepática que Guillermo sentía igual.
Pedro, de pequeño había escrito los sueños que se repitieran el fin de semana, era muy intuitivo, pero los valores y  principios de la educación en su casa y en los colegios, habían limitado su talento intuitivo, Guillermo nunca los había desarrollado, sin embargo ahora estaban con todos los sentidos a flor de piel, y su atención exactamente dirigida.
Pedro no podía apartar la vista del rostro de Guillermo. Nunca antes unos ojos le habían cautivado de aquella manera. Eran negros y profundos, indagadores y llenos de misterio, y esa mirada se apoderó de él.
Guillermo volvió a oír en su imaginación, la voz de su madre en alguna de las vidas que recordó, en que  vestida o envuelta en luz blanca se le había aparecido diciéndole: Dale la mano,.., alcánzalo.

… ¿Qué miras Pedro?
… Pensaba que viajabas con tu amigo, con el Fiscal, mi suegro me dijo.
… ¿Sos casado?
.. No, perdón, el Juez Orestes Moravia, es el padre de mi novia Camila, y  fue contactado por el Juez Pérez que conoce a tu amigo.
… El Fiscal Miller, sí, no es mi amigo, o sí, del estudio, es un Fiscal de la Nación a quien le pedí que me ayudara con la denuncia, porque al ser anónima no podía hacer nada sin la ayuda de un juez.
… Perdón, sí él, Orestes me contó todo. Él me ayudó mucho en mis comienzos y también a mi ingreso a la empresa, lo que no sabía es que también los estaba investigando, y tengo para ver las pruebas que estuvo juntando en años, por ello no confié en él desde el comienzo, pensaba que trabajaba para ellos y no era así.
.. Y yo que vos estabas con ellos y no era así. Miller se queda acá, viajo solo Pedro.
.. Cuánto por hablar, ¿no?
… Mucho, y tenemos que ver todos esos papeles en el fin de semana entonces.


___ Las miradas seguían una en la otra sin remedio y sin explicación cuando los llamaron al embarque y luego  en el micro se mantuvieron en silencio fundidos en la mirada, estudiándose el alma, buscándose, tratando de explicar lo que aún no veían, hasta al fin subir al avión.


… ¿Me dejas junto al pasillo? Tengo fobia a estos aparatos, a muchas cosas en verdad.
.. Claro, me encanta ver desaparecer  la ciudad al subir.


__ Apenas alcanzar la altura programada, antes de salir de la provincia, una tormenta eléctrica desestabilizó al avión, que estaba surcando el cielo nocturno. Por un momento Guillermo entró en pánico, demostrado en su expresión de intranquilidad ante la turbulencia repentina. Pedro se dio cuanta al instante y sin dudarlo le tomó la mano sujetándosela con fuerza. Sabía que eso lo tranquilizaría.

Y entonces sucedió,.., ambos  se paralizaron por la sensación de un rayo o una corriente eléctrica pero que fluía de uno al otro, por sus arterias y sus venas llegando al corazón que ya era Uno. Sus vidas anteriores despertaron con aquella corriente de súbito: acababa de producirse sin permiso la conexión que venían eludiendo, ambos lo supieron y no lo pusieron en palabras, simplemente mantuvieron la mirada, embebidos, compenetrados, uno en el otro, fusionados sin contacto ulterior, unidos por las vidas de ser amantes, padre- hijo, amigos, esposos y más.


 __Cuando tengamos una decisión importante que tomar, escuchemos a nuestro corazón, a nuestra sabiduría interior, especialmente cuando hayamos de tomar la decisión sobre un regalo del destino como es un alma gemela.

El destino había depositado el obsequio directamente a sus pies, lo que decidieran hacer a partir de ese momento de lucidez cósmica con él, dependía de ellos. Si confiaban en los juicios ajenos seguramente cometerían errores muy graves. El alma sabía lo que necesitaban, los demás y la razón tenían otros intereses.
Acababan de recibir el obsequio del alma gemela compañera de viaje a través de los siglos por parte del destino, reapareciendo constantemente en cada vida y ahora en la presente e internamente ambos supieron que deseaban estar juntos para siempre, aunque nadie entendiera que el corazón y el alma habían acumulado una experiencia de miles de siglos y que era algo que iba mucho más allá de la comprensión racional. Supieron que la separación ahora era algo inconcebible, pero no lo expresaron,…, todavía.

 ___El alma les demandaba una cosa, la razón otra y como en un acuerdo tácito decidieron evitar lo que ambos sabían y lo que el destino marcaba.


…¿Por qué no te presentaste en persona al estudio?
… No te conocía, tuve mis reservas porque sabía que estaba tratando con gente capaz de todo. Sabía por  rumores de tribunales que los mejores estudios eran Baunes y ustedes, algo me hizo confiar en  ti, en tu estudio, pero no te conocía, como te dije pensé que Orestes trabajaba para ellos y no quise consultarle. Apenas comenzar en la asesoría empecé a ver  más allá de la mercadería faltante, y de los números que se dibujaban en el departamento contable, hasta que al fin me infiltré entre la cúpula corrupta y abiertamente lo supe, y sin participar de los ilícitos ni quedarme con ningún vuelto en negro, comencé a sacar remitos y documentación, nombres, todo lo que te envié y de lo cual tengo copias. Al hablar con Orestes me dijo que los investiga desde hace años y lo de Córdoba, supongo que ya sabes todo.

… Sí, estuvimos reunidos con el Juez Pérez, lo sé todo.
  Cuando sean detenidos los cabezas de mando en Córdoba, presentaremos al juzgado  las pruebas de acá, vas a declarar y pasará a la justicia Federal y desde allí darán a Pérez el poder para intervenir en Bs. As.
¿Presentaste la renuncia verdad?
… Sí, envié el telegrama hoy temprano como me dijo Orestes, pero no entiendo.
… ¿Qué cosa?
… ¿No hubiera despertado menos sospechas que siguiera dentro hasta que los atraparan?
… NO. No Pedro, podría filtrarse información desde Córdoba y podrían haberte descubierto, secuestrado, te podrían haber matado de haberte descubierto, te queríamos fuera de la provincia al momento del allanamiento, ¿entiendes?
… ¿Tan peligrosos son? Perdón qué tonto, lo sé, por algo te envié los papeles desde el anonimato.


___ Evitaban los roces y las miradas pero se atraía inevitablemente, Pedro disparaba esas sonrisas radiantes y a Guillermo le aparecía la luz con que lo identificara en cada vida en sus sueños y a la vez cada vez que Pedro detectaba sus ojos negros y la mirada profunda se disparaba la señal  en él del hombre que venía amando desde siempre.

… ¿Vas al Sheraton?
… Sí, Orestes me hizo la reserva, por mí hubiera ido a un hotel menos llamativo si la idea es ocultarme.
… No creas, a veces estás más seguro en hoteles importantes con grandes eventos como ésos, a mí también me hicieron la reserva.

… “¿Cómo hago para preguntarte si es verdad que eres gay, que estás casado, que tienes de amante a ese fiscal? ¿Con qué derecho si no me animo a decirte que sé lo que significas en mi vida? ¿Qué vamos a hacer, lo sabrás?
Cuídame, no dejes que me maten o nos maten como en Polonia, me lo prometiste. En muchos encuentros me dijiste que no podía no pasar, que estaríamos juntos una vida y deseo que sea ésta.”

… “Muero por saber de esa novia que dices tener, por saber si has soñado nuestras vidas pasadas, creo que haces lo mismo que yo, disimular y que sabes lo que significa este encuentro y tienes el mismo miedo. Me muero por besar esos labios que hace siglos  no pruebo, pero no quiero asustarte, estamos en medio de un caso peligroso, tenemos que mantenernos alejados por ahora. Tengo que cuidarte  mi amor, no puedo dejar que te hagan daño nuevamente, si te perdiera no lo soportaría, quiero tener una vida feliz a tu lado, deseo que sea ésta.”

___ Necesitaban mirarse y no se  atrevían, Pedro aparecía como inquieto, vehemente y extrovertido, su rostro era alucinante y su cuerpo un poema de simetría y de gracia que dejó a Guillermo hechizado cuando se pararon al descender del avión. Vestía de Jean y remera, con una campera de cuero y zapatillas y a su vez Pedro lo miró con avidez, observando que Guillermo poseía una serena y elegante  belleza, que tendría unos cincuenta años y emanaba un poderoso atractivo sensual. Como el fuego y el hielo.

Guillermo mientras recogía el equipaje lo contempló embobado, la gente, las mujeres más precisamente se volvían para mirarlo y era lógico porque era perfecto. Hubiera deseado que el viaje fuera al fin del mundo y  que no terminara jamás pero llegaron demasiado pronto. Era obvio que nunca había conocido a nadie igual. Las corazas que había confeccionado por años desaparecieron frente a Pedro como por ensalmo. Pensó que era la criatura más bella del mundo no solamente para él y deseaba invitarlo a cenar, no quería separase de él, era espectacular y sería suyo.
Ahora Guillermo entendía por qué había conocido a tantas mujeres y hombres y jamás había podido enamorarse y pensó si Pedro sería conciente de que era gay, porque al parecer no había ningún hombre en su vida.

…Has sido muy amable en aguantarme todo el viaje y desde el lunes vaya  a saber qué nos depare el destino.
… Vaya a saber Dios el por qué.

_Pedro pensaba que Guillermo era hermoso, un hombre de complexión fuerte, imponente y absolutamente poderoso. Con una línea de rasgos faciales alucinantes, perfectos para enmarcar esos ojos tan oscuros que a veces le costaba diferenciar la pupila del iris y esa mirada que eran su marca en todas las vidas, su pelo negro, sus cejas pobladas, sus labios finos, lo hacían irresistible.

__ Guillermo observaba lo mismo, los labios gruesos y turgentes anhelantes de besos, los dientes perfectos en la sonrisa que lo llenaba de hoyuelos, la nariz, los ojazos marrones tímidos en el encuentro, la barbilla prolija, el pelo que alucinaba con alborotar, la perfección hecha hombre y era su amante y su Amor de siglos.

__Ambos sabían lo que acechaba bajo la quietud en que iban en el taxi porque los dominaba la misma corriente de anhelo de ausencias y muertes prematuras. Y esta vez querían tener la libertad de una vida como la que pocas veces se les había concedido, de amarse, de casarse, de formar una familia algún día.

Pedro no quería que Guillermo lo viera como un cristal, como alguien frágil que necesitaba su protección, como una mariposa dentro de una burbuja de cristal. Tenía la certeza de que habían sido muchos los hombres y quizá mujeres que le habrían ofrecido sus cuerpos y que él los había utilizado a placer, porque él había tardado en llegar y  que hasta Guillermo se escandalizaría de saber la intensidad del deseo que sentía a dos horas de reconocerlo.

… ¿Te importaría darme los papeles que te acercó Moravia para echarles una mirada esta noche? Soy ansioso y obsesivo.
… Pero tenemos dos días para verlos juntos.
… Lo sé, pero no tengo sueño.
… Está bien, pero tendrás que esperar a que los desentierre, porque por temor a perderlos los coloqué en el doble fondo de la valija. ¿Me das media hora y te los acerco?
… Claro. ¿Quieres que bajemos a cenar juntos?
… Mañana, ¿sí?, en realidad dediqué el día a correr y hacer deportes, estoy agotado, y ya hemos comido algo en el avión.
… Tienes razón, tampoco tengo hambre, ya mañana compartiremos todo el día. Voy a ordenar la ropa y paso si no te molesta por tu suite a buscar los papeles.
… Bueno.

 ___ Guillermo apenas dejó pasar quince minutos, no podía esperar para verlo y Pedro aún no había abierto la valija perdido en sensaciones e imágenes de lo recordado del pasado que se apoderaron de su mente, cuando escuchó que llamaban a la puerta y se sobresaltó.

Ahora que al fin estaban en la misma vida, en el mismo edificio, Guillermo decidió que no podía acostarse sin verlo. Al ir hacia la suite de Pedro podía oír la música en lo más profundo del hotel. Debía haber alguna fiesta privada en el salón de baile, o algún acontecimiento en el famoso comedor. Recorriendo con la mirada los números al fin dio con la habitación de Pedro. Se le encogió el estómago, estaba  mareado, se le tensaron todos los músculos y sintió que la frente se le perlaba de sudor.

Golpeó suavemente con los nudillos y esperó inmóvil, con la cabeza gacha por los nervios, incapaz casi de respirar. No supo cuánto tiempo estuvo esperando, sólo que le pareció una eternidad antes que la puerta se abriera, y antes de levantar la mirada oyó la voz de Pedro que reverberaba en su propio cuerpo.

Varios pensamientos le vinieron a la mente. No tenía derecho aún a reclamarle nada, no le pertenecía en esta vida,…, todavía. No se habían prometido nada. No se debían fidelidad, ni siquiera habían hablado de lo que sabían, de los sueños y revelaciones.
Aún así no podía dejar de preguntarse: ¿Cuántas mujeres? ¿Cuántas noches?
Hasta que se dijo que no importaba, era el reencuentro esperado por siglos, desde la última vida, y pensaba en cuál había sido: ¿La de Polonia?, no y sí, como vida le parecía que sí. Pero recordaba haberse aparecido a Pedro cuando era adolescente en Chile para que no modificara su destino en esta vida por temor a perderlo.

Una sola lámpara iluminaba la suite.
Pedro lo miró de arriba abajo con rapidez, lo suficiente para ver que llevaba el cuello de la camisa abierto, revelando el vello del torso, las brillantes ondulaciones de sus músculos en los  hombros y en  los brazos. Pero nada le intrigaba más que su cara, se le antojaba hermoso y tentador como el diablo, la curvatura de su mandíbula, los austeros ángulos de los pómulos, pero ahora veía finas arrugas que partían de la nariz hacia los labios finos y en el entrecejo.

… Perdona, aún no he abierto la valija, pero en un minuto lo hago, pasa, sírvete lo que desees.


___ Pedro nervioso y con torpeza abrió la valija sobre la cama echando ropa aquí y allá temblando y Guillermo pudo percibirlo de lejos, acercándose sin remedio, y tomándolo por el brazo buscando la mirada...


…¿Te ayudo?
… No es necesario. Están aquí abajo, luego ordenaré la ropa.
“Quiero que me ames deseo gritarte. Hemos viajado desde muy lejos, hemos estado separados demasiado tiempo, eres tú, lo sé y no me atrevo a decirlo”


.. Pedro, sé quien sos y creo que tú también.
… Mi oficial en Varsovia, mi náufrago, mi hijo, mi amante, mi…
… No sigas. Mientras tenía los ojos muy abiertos y la mirada incrustada en la de Pedro y pronunció su nombre  en un susurro tembloroso… Pedro….
… Guillermo, ¿eres tú?, le temblaban los labios, los ojos se le anegaron en lágrimas de alegría. Estar con él de nuevo lo dejaba abrumado en todos los sentidos.


___ Guillermo alzó sus manos secando la brillante humedad del rostro con los dedos, le ahuecó la cara con las manos tan suavemente que Pedro parpadeó, y no se resistió cuando sintió que se acercaba, menos cuando lo estrechó contra su cuerpo. Guillermo abrió los labios para catar la estela salada de una lágrima huidiza que pasaba por la mejilla, y en ese momento su tranquila fachada se evaporó. Con avidez movió las manos rápidamente por la espalda y, agarrándolo firmemente por las caderas, lo apretó contra sí.


___ En instantes sin permiso, la  mirada de Guillermo se perdió en los labios de Pedro y su boca buscó la  de él con una presión cálida y urgente. Levantó las manos hasta las mejillas y trazó con sus dedos la sombra de la barba. Un sonido áspero como un gruñido partió de la Garganta de Guillermo, de placer, de añoranza, de necesidad. Sus brazos se cerraron en torno a Pedro en un abrazo inquebrantable que él aceptó encantado, pues sus rodillas temblorosas amenazaban por ceder.

…¿Cómo es que estás aquí, que no te vi antes?

__Un escalofrío recorrió a Pedro de cabeza a pies ante el cálido aliento de Guillermo en sus labios, y éste volvió a tomar la boca, esta vez sin demasiada suavidad. Hundió la lengua, indagando agresivamente. Luego tomó la cabeza de Pedro en sus manos y la recolocó hasta que su boca fue totalmente accesible a la suya. Pedro lo rodeó con sus  brazos aferrándose a la espalda con desesperación y Guillermo gimió al sentir en su cuerpo las manos de Pedro y enredó los dedos en  el cabello sedoso. Echándole la cabeza hacia atrás buscó la sensible piel de la garganta y del cuello y deslizó la boca como si quisiera consumirlo. La voracidad fue en aumento, se le aceleró la respiración, y el pulso del latido con fuerza, hasta que se percató que estaba a punto de perder el control.
.
 Se echaron en la cama con los labios fundidos, provocando una dulce y profunda conmoción, consumiéndose en los cálidos e indagadores besos.
Guillermo descendió sobre Pedro, inmovilizándolo con su sólido cuerpo  y sacándole la remera de un tirón, ofuscado por el salvaje deseo de siglos, hasta abarcar la suave curva de los pezones y atraparlos en la suave presa de sus dientes. Pedro soltó un gemido y se arqueó hacia él sin poder evitarlo. Guillermo se colocó a gatas, con la cara cubierta de sudor, y se acomodó entre sus muslos hasta que Pedro sintió su poderosa erección contra las capas de tela de pantalones y bóxers y al abrir los ojos se encontró con llamaradas en los negros. Guillermo se movió contra él y Pedro gimió abriéndose. Guillermo soltó un sonido primitivo cuando volvió a rozarlo, acariciándolo con indescriptible intimidad. Pedro deseaba que se detuviera y que no lo hiciera jamás


… Guillermo, alcanzó a decir jadeando.

 __Pero la boca masculina cubrió la suya penetrando con su lengua profundamente, mientras las caderas se movían con lentos embates sobre el cuerpo de  Pedro. Acalorado, arrasado, excitado, Pedro se arqueó contra la  exigente  dureza. Cada provocativo empuje provocaba sensaciones que se extendían por su totalidad. Se retorció debajo, incapaz de hablar con esa boca poseyendo la suya. Más calor, más deliciosa fricción  y sus músculos se tensaban, sus sentidos se abrían con ansia… a… ¿a qué? Iba a desmayarse si él no se detenía.  Pero Guillermo incapaz de detenerse lo alzó para estrechar sus nalgas contra la presión ardiente y bombeante de su miembro.
Pedro sintió una tensión tan afilada que soltó un grito.

… De repente Guillermo se apartó y se dirigió al extremo opuesto de la suite. Apoyó las manos contra la pared excitado, jadeando, estremeciéndose bajando la cabeza.

___ Pedro tembloroso y aturdido se movió lentamente, recolocándose la ropa, sintiéndose desesperadamente vació, anhelando algo para lo que no tenía nombre y se levantó con las piernas temblorosas.

 Se acercó a un Guillermo excitado, queriendo decirle que lo rodeara en sus brazos, escuchar que estaba feliz de haberlo reencontrado.

… Pedro, si me tocas, te arrastraré nuevamente a la cama y ya no seré responsable de lo que ocurra luego, no quería que esto se precipitara como en las vidas en que estábamos a punto de morir, deseo que vayamos despacio.
…. Y yo deseo amarte y que me ames, que tengamos esa vida juntos que me prometiste, en Chile y tantas veces. ¿Recuerdas tu promesa?
… ¿Cuál?
…” No puede no pasar”…. Me lo prometiste...
… Lo sé.


CONTINUARÁ….

34 comentarios:

  1. Eve que cap más hermoso, ese encuentro en el aeropuerto, si bien es para lo q están contratados pero la desesperación de ir a la habitación de Pedro y esas bocas que se entregaron a la pasión contenida de siglos. Espero el cap 14omo loca..

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    1. Viste Valeria que esta fic era sublime, en verdad debió ser la primera, antes que ninguna espiando su amor en la eternidad antes de llegar a la vida presente, me apsaiona, la amo y gracias por haber confiado y estar en ella, te amo.

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  2. Por favor mujer está historia la fui descubriendo de a poco leyéndola con mucha calma sin apuro y hasta tardío, y poco a poco me fue atrapando esas vidas, esas experiencias que sumaban para el momento que se acercaba, ellos buscándose creyéndose sólo una invención de su imaginación, hasta que llegó el momento trataron de ser indiferentes pero el camino estaba marcado por el amor de siglos de almas gemelas destinadas a buscarse y a encontrarse para estar juntas, y este despertar por favor cono lo podrán manejar entiendo la postura de Guille de querer proteger e ir lentamente y a la vez a Pedro exigiendo por fin poder cumplir con esa promesa tan bella y tan imperante lo que se viene será para degustarlo lentamente, sos genial mi querida a seguir disfrutando de tu arte.

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    1. Hola Amor al fin, cómo te he extrañado. Esta fic es mi amor, pensada como unitario con un final, querría haber seguido en las vidas pasadas pero pocas la entienden así y pedían el encuentro en la presente y se está dando, con rechazo a lo evidente y resistencia, al comienzo no viendo lo evidente, luego la revelación y el Amor desesperado de la última vida con la urgencia de la guerra persiguiéndolos, me parece fascinante, la escribí de madrugada y fluye sola, gracias por estar regresando y mi amor.

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  3. gRACIAS aNA mARTA, AMO ESTA FIC Y A VOS. BESOS.

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  4. Gracias Adry, tu amor y mi amor. Besos.

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  5. Gracias Raquel por estar allí al despertar y disfrutar, mi amor.

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  6. Gracias Marisol y mi amor. M Boris.

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  7. Gracias Marislol García y mi amor.

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  8. Hermoso capítulo Eve ...Por fin el encuentro en esta vida, reconocerse ambos, y no poder contener esa necesidad de siglos del Amor que estalla en sus corazones y en sus cuerpos...Maravilloso y muy interesante Eve, porque yo encuentro en esta historia tuya, un poco de ficción y un poco de realidad...Tu talento genial. tu esfuerzo inagotable y tu corazón generoso, nos regalan en esta bella fic un poco de todo lo que sabés, explicándonos de la forma más sencilla posible, esto tan apasionante de las Vidas Pasadas y de las Almas Gemelas...Sos genial Eve y muy generosa...Te admiro, te aplaudo y te agradezco con todo mi corazón...Beso desde el alma, querida amiga!!!......Alicia Vitolo

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