lunes, 19 de enero de 2015

EL VIAJE. CAPÍTULO 21.



 


….. Amor no temas, es un boliche gay pero estamos juntos.
… Precioso, a mi edad hacen siglos que no vengo y en mi época era todo muy distinto, con estas luces temo perderte y que te roben.
… Amor, las cosas que dices, no pienso despegarme de ti, o ¿Para qué crees que quiero bailar?, para estar en tus brazos tonto.
… ¡UY qué tentador!, y sí, en la fiesta no disfrutaste, por eso querías venir acá, porque somos anónimos.
… Claro amor. Gracias a Dios, espero que no aparezca ninguno en este sitio.
… ¡Pedrito!
.. Lo sé, perdón, perdón, nada, no dije nada. Voy por los tragos: ¿Cerveza, whisky o algo especial?
… No no lindo, vos no vas a ningún lado, que ya bastante tengo con que desde que entramos todos te clavaron la mirada,  vamos juntos y el pedido lo hago yo.
… ¡Guiie!, la regla corre para ambos. La del punto final.
… Es distinto precioso, vos tienes 33 años, sos un adonis y están las moscas ávidas porque me aleje, a mí no vendrán.
. …¡UY cómo estamos!

… Amor, déjate guiar, relájate. Al fin te sentiste mejor cuando fuimos a tomar clases de baile que en nuestro ambiente.
… Es que están todos mirándote, voy a estampar a alguno. Y! vos, no puedes ser tan bonito, por Dios! que sos una tortura para exponerte.
… Ya Guiie, ¿puedes mirarme a mí y besarme por favor?
… Ahora ya estamos acá, pero es la última vez que no escapamos al yate a solas, no quiero compartirte.
… Pero,…, si estoy en tus brazos.
… No soporto que te miren, no lo soporto.
…. Ya Guiie, me cansaste, apenas hemos tomado una cerveza y ni me dejas besarte, nos vamos a casa, listo tema boliche, pero ésta me la cobro Graziani. En el cine te portaste bien.
… Porque estábamos con luces apagadas y nadie te veía, pero acá pareciera que creen que estás en exposición, vamos amorcito, te voy a recompensar, lo prometo.
….Vamos a la casa que el guardia ya debe estar sospechando de tanto que estamos en el loft, aunque igual no importa, no, es muy lejos, nos quedaremos en el loft hasta  volver el lunes del estudio.

___ Subieron por el ascensor desde la cochera sin ser vistos y Pedro tenía trompita de enojado, Guillermo se sentía culpable por haberlo sacado del boliche y no se atrevía  a  estar demasiado cerca hasta que su chiquito tomara la iniciativa, solamente se dirigían miradas furtivas. Pedro abrió, sacó la alarma y fue al dormitorio a dejar los abrigos que se habían sacado en el coche. Al volverse se dio de bruces con unos pectorales duros y  familiares, levantó la mirada y encontró a los ojos negros con expresión seria y melancólica.
… Tenemos un pequeño asuntito pendiente, y vamos a resolverlo ahora mismo Guiie. Después soy yo el que monta escenitas, al menos las mías tenían nombre y apellido.
___ Guillermo había quedado petrificado en el sitio, transpirando  por el calor de la loza radiante y por los nervios de haberlo sacado del boliche, lo había decepcionado y le había arruinado el plan de sábado a la noche, pero todo sus pensamientos no evitaron la punzada de placer que salió disparada desde lo más profundo de su vientre ante la carita de enojo unida a la figura esbelta y amenazadora que le estaba plantando Pedro, que unida a su respiración profunda le decía que no estaba en condiciones de emitir una protesta más. Pero quiso provocarlo un poquito más porque a más enojo más se derretía por él.
…. ¿Y si digo que no hay recompensa?
… No lo harás.
___ Estaba tan seguro de sí mismo que sintió al corazón bombear la sangre aún más rápido mientras se decía que ni loco se perdería de compensarlo.
…. Puede que sí.
___ Pedro se pegó a él, la cabeza de su miembro exploró su bajo vientre y  Guillermo saltó al contacto. En esa mirada  leía promesas mientras esperaba a que hiciera el siguiente movimiento mientras se convulsionaba por la anticipación.
… No juegues Guiie, ambos sabemos que nunca vas a decirme que no, bueno al venir de la fiesta lo hiciste porque me dormí, si hubiera insistido no pasaba. Veamos si te resistes.
__ Pedro recorrió  el brazo con la punta del dedo hasta el hombro y luego al hueco entre éste y el cuello y lo inspiró debajo de la oreja antes de besarlo allí, mientras Guillermo   se tambaleaba cerrando los ojos.
“Mierda, me tiene, con nada más que eso ya  me tiene” Y entonces escuchó la voz suave como la seda, pero segura y seria.
… ¿Crees que fue el destino Guiie?
___ Guillermo abrió los ojos, frunció el entrecejo pensando que nunca había creído que las cosas sucedieran por una razón, hasta que lo  encontró en el aeropuerto.
… ¿Adónde quieres llegar? NO, no creo en el destino en general y lo sabes.
… Yo sí. Y también en los milagros y lo sabes.
__ Pedro descendió las manos al sexo de su hombre y su tacto ardiente sobre la ropa lo hizo tensar de cabeza a pies
…. Creo que estabas destinado a estar hoy aquí conmigo y yo  a lo mismo y todo lo demás  me molesta y mucho.
---- Las manos esbeltas se escurrieron bajo la camisa desde el cuello hasta llegar a los pezones para  retorcerlos, alargarlos y endurecerlos mientras Guillermo nuevamente cerraba los ojos ante las oleadas de placer que lo partieron por la mitad.
Pedro se apoderó del control de la boca mientras las manos desprendían la camisa, la dejaban caer y continuaron descendiendo a desabrochar el cinto, los pantalones y bajar la cremallera, persistiendo en el beso, entrelazando la lengua y mordiendo los labios. Lo inclinó haciéndole levantar una y otra pierna para arrastrar al piso pantalones,  bóxer y medias tirando los zapatos, fusionados en el beso. Al ascender aprovechó el acceso al cuello besándolo en el centro, una caricia firme y húmeda que ascendió nuevamente a los labios al tiempo que  desde atrás accedía a su interior con dos dedos ante lo cual Guillermo gimió echando la cabeza hacia atrás.
 Los dedos se deslizaron en amplios y torturadores círculos por su interior estirándolo y ampliándolo, preparándolo para el después.
… ¡Ay Dios Pedrito, sácate la ropa ya por favor, ya no puedo hacerlo! Y tiró de la barbilla prolija para tenerlo cara a cara y encontrar la mirada, Pedro se la dio y  retirándose comenzó dolorosamente  a sacarse la ropa con lentitud
…. Voy a amarte hasta hacerte gritar Guiie.
… No tengo dudas cielito, ya casi estoy gritando solamente con ver lo que haces.
__ Pedro sentía que tenía el control, estaba frenético por demostrarle que era solamente suyo y Guillermo en la única cosa que podía concentrarse era en el  fuego incontrolado que se extendía por su cuerpo  y que arrasaba entre sus muslos anticipando los golpes fuertes y  decididos que imaginaba.
…. Ponte de rodillas a los pies de la cama, de cara a la cabecera amor.
__ Guillermo lo hizo sentándose en sus talones y preguntándose qué habría planeado, hasta que notó su pecho en su espalda y las manos cruzaron hacia delante trazando con las palmas círculos alrededor de los pezones y acercó la boca al oído.
… ¿Confías en mí?
…. Más que en nadie. Te confiaría mi vida.
… Y yo la mía Guiie, te amo.
… No muevas los brazos amor.
… Por el amor de Dios precioso, me estás enloqueciendo.
… Esa es la idea.  Y deseo lo mismo para mí, no pensar si antes te hicieron lo que yo te hago sentir.
___ Guillermo se estremeció tratando de controlar la respiración irregular, el corazón le latía a velocidad en el pecho y nada iba a bajarle las pulsaciones ahora, estaba a merced de Pedro que arrastró la punta de los dedos por su columna vertebral hasta las nalgas y luego entre ellas. Le rodeó luego el vientre con un brazo y con el otro lo sujetó por la espalda  apoyando dulcemente los cuerpos sobre el sommier quedando Guillermo con la cara pegada a las sábanas y con Pedro detrás, sintiéndose placenteramente expuesto y vulnerable.
…. ¿Sabes lo increíble que estás así Guiie?, te amo.
…. No deseo detenerte, nunca.
___ Pedro lo besó en la parte baja de la espalda y Guillermo sintió su miembro duro como piedra contra su ingreso húmedo y anhelante y el alivio de que comenzara a presionar sobre la entrada tomándolo con fuerza de las caderas. Pedro ingresó en él y Guillermo instintivamente se tensó alrededor de su deliciosa invasión comenzando a jadear.
… Pedro, lo quiero todo, estoy desesperado por una penetración total.
… Sí amor.
__ Pero retiró su erección medio sumergida y  Guillermo gimió por haber perdido la sensación de plenitud, lo necesitaba dentro, en su totalidad, atravesándolo y por impulso se arqueó y sintió entonces una estocada potente y un golpetazo que tensaron sus nalgas y sus hombros contra la cama.
:… Vuelve a penetrarme pero ahora solamente hasta la mitad precioso.
… No te muevas amor.
___ Guillermo jadeó con la deliciosa invasión a medias y lo nombró suplicando.
… ¡Pedro!
… Lo sé. Sé todo de ti Guiie.
__ Deslizó las palmas sobre las nalgas entreabriéndola y salió. Guillermo cerró los ojos apretando los dientes tratando de obligar al cuerpo a seguir las órdenes mentales de relajarse para recibirlo y Pedro embistió hacia delante, entró hasta el final dejándolo sin aire, para salir lentamente controlando al grito de Guillermo.
… ¡Pedro!
… Lo penetró nuevamente con furia dejando a Guillermo sin habla, sin aire en los pulmones, con su hombre tan dentro de sí palpitando que su cerebro entró en cortocircuito y al repetir las embestidas sentía que perdía el sentido.
… ¡Pedro!, gritando.
Y se atragantó con las palabras con la nueva penetración y embestida recordando la promesa de que lo haría gritar, y de hecho lo estaba haciendo llamándolo cuando se retiraba.
… ¿Estás gritando amor?
… Sí.
___ Pedro volvió a embestirlo, una y otra vez, otra y otra vez más, incansable, llevándolo a un nuevo y desconocido nivel de placer y quería llorar, llorar de  sorpresa, de placer, de Amor, de felicidad, de placer puro y duro, con el cerebro totalmente colapsado y el cuerpo preguntándose qué estaba pasándole con ese ser que  se daba de esa forma exacta como él deseba recibir.
… Esto es salvaje, intenso, alucinante y sé que solamente lo has hecho conmigo y entiendo ahora tu dolor precioso.
___ Pedro entraba y salía con cada letra de su nombre que pronunciaba entre gemidos y Guillermo estaba mareado, atontado por una felicidad completa, total e intensa jamás conocida con otros.
___ Pedro le dio más tirando de sus caderas hacia atrás al ritmo de cada embestida y comenzaron a saltar chispas entre los cuerpos amándose, la presión estaba a punto de detonar. Gritaron de desesperación y de placer, era demasiado fuerte. Pedro estaba fuera de control y la última profunda embestida los catapultó directamente al orgasmo más fuerte y más desgarrador que nunca tuvieran, gritando, resonando al unísono en el loft, un grito afónico, desesperado, electrizante y satisfecho.
Pedro comenzó a tensarse  y a mover las caderas en círculos contra sus nalgas gimiendo y temblaban de pies a cabeza, temblores sensacionales, ondulantes e incontrolables hasta que Pedro se colapsó sobre él con su peso continuando en su interior, palpitando y  agitándose mientras movía las caderas en círculos, extrayendo hasta la última gota de placer  en ambos.
___ Estaban perplejos y nocaut pero alegres de no haberse detenido y seguros de que ninguno nunca podría decir a nada que no.
Pedro le pasó las manos por los muslos cubriéndole la nuca de pequeños besos gimiendo y moviendo las caderas más despacio  y con voz dulce y aterciopelada, mordiendo el lóbulo de la oreja, Guillermo susurró:
…. ¿Amigos?
… Más.
… He descubierto muchas de tus habilidades sexuales recién aprendidas pero ésta me ha dejado alucinando.
__ Sintió que arrastraba el lóbulo de la oreja entre sus dientes. Salió de su hombre y se echó al costado buscando los labios.
… Me gusta saber que soy yo quien te hace gritar ahora, solamente yo.
… Me has dejado disfónico, nadie me ha provocado esto, te lo juro.
___ Los labios se sellaron en  el aliento compartido.
…. ¿Tienes hambre?
… No, no tengo hambre ni tampoco  pienso moverme de la cama hasta mañana.
… Voy a traer agua y luego nos acurrucamos un rato ¿vale¿
… Vale, ve.
___ Antes lo besó nuevamente colocándolo luego boca abajo besando el cuello, la nuca y los oídos deleitándolo con su fragancia hasta ir por el agua. Guillermo se volvió y quedó mirando el techo mientras Pedro al descender luchaba por alejar los pensamientos no deseados de su mente: ¿Cuántos hombres Guiie? Había optado por no querer saber la respuesta a esa pregunta, la que siempre aparecía en su cabeza, sin invitación y sin sentido. Y la curiosidad la hacía cada vez más fuerte y más difícil de ignorar... Tomó el agua y mentalmente le agradeció a Guillermo haberlo dejado sin energía para seguir torturándose con sus ataques de curiosidad absurda.
___ La cama se hundió y Guillermo vio su cuerpo duro, firme y cálido junto a él colocándose de costado para admirarlo al tiempo que le aceptaba el agua.
--- Finalmente Pedro se acurrucó en su pecho.
… Mi dios arrogante y celoso, te amo, estoy enamorado de ti hasta la médula y no hay nada que pueda hacer al respecto.

___ Guillermo abrió los ojos y encontró a Pedro pegado a su pecho, era de noche y calculó que  era de madrugada, fue al baño, se refrescó y regresó junto a su hombre seductor y difícil, bello en su desnudez sentándose a horcajadas sobre sus caderas, sintiendo como comenzaba  a revolverse bajo él  y esperando. Sus preciosas pestañas no tardaron en comenzar a moverse y sus párpados cobraron vida, los ojos se encontraron de inmediato y ya se sentía todo firme bajo su dios.
… ¡Hola precioso! Guillermo lo recorrió desde la nuca hasta perderse. Y Pedro le dedicó una sonrisa con hoyuelos radiante recuperando del todo la conciencia.
… ¡Hola mi amor!, sin perder la belleza de su rostro somnoliento, sus hermosos ojos clavaron la mirada en Guillermo que deseaba comerlo a besos.
 Guillermo se movió sobre él tensándolo
…Te amo precioso.
… Por Dios bendito Guiie.
 Guillermo rodeó su pecho y se acercó a su cara, vio los ojos brillantes por la anticipación y se escapaban pequeñas bocanadas jadeantes por los bellos labios entreabiertos mientras levantaba la  cabeza buscando mayor contacto hasta que los labios se acariciaron. Guillermo movió las caderas en círculos sobre él que dejó caer la cabeza, sintiendo a su dios acercando la boca a su cuello, desplazarse a la oreja lamiendo y besando su piel, mordiéndole el lóbulo, con respiración ahora lenta y profunda esperando. Giró la cabeza, Guillermo la tomó en sus manos y cubrió la boca con la suya, Pedro la abrió y su lengua entró como dardo en busca de la ajena.
 Guillermo se apartó colocándose en su ingreso nuevamente manteniendo el contacto visual cargado de deseo. Dejó caer la cabeza y Guillermo  se apoyó en sus caderas dibujando círculos con la lengua en la espalda haciéndolo ver estrellas y luego de treparse en él y besarle las comisuras de los labios lo penetró comenzando a moverse hacia arriba y abajo primero con suavidad mientras Pedro echaba la cabeza hacia atrás  y luego aumentando la velocidad y la profundidad de las embestidas comenzando a gemir mientras las gotas de sudor se formaban en su frente hasta constituir un río, aumentando a cada embestida más y más la presión con placenteras punzadas en ambos.  Pedro apoyó desde atrás las manos en los muslos empujando, mirándolo, llamándolo y su hombre se acercó a su cara pasando las manos por el cabello y besándolo, susurrando” te amo” a medio beso.
…. Los años de diferencia no son problema, sigues siendo mi dios apuesto y arrebatador gimió, mientras Guillermo se concentraba en darle a esa boca un poco más de tratamiento, continuando por el cuello y volviendo a descender para adentrarse con brutalidad estremeciendo los cuerpos cuando estallaron luego del último ingreso del miembro húmedo y palpitante previo al derrame inundando el ser de Pedro que en el grito final  le dijo: “Estoy locamente enamorado, mi dios arrogante. Te amo”.



… Amor, antes de ir a pasear por el centro, ¿te importaría si voy un rato al gimnasio del edificio?, ayer me asomé a las amenities y es genial, además todavía hay muy poca gente. ¿Quieres venir y haces un poco de cinta?
… No precioso,  prefiero ordenar las cosas del desayuno y quedarme escribiéndote algo en la agenda que me regalaste, la gimnasia no es lo mío.
…. Bueno, como desees, corro un rato, hago algunas pesas y regreso.
… Sí precioso, tranquilo que tenemos todo el día para nosotros.

 ___ Pedro se cambió y fue al gimnasio mientras Guillermo ordenó la cocina y se puso a escribir, pero de pronto una opresión rara en el pecho imaginando a la belleza de su hombre con la ropa de gimnasia lo empujó a la habitación a cambiarse para ir  tras él. Mientras Pedro corría en la caminadora y al lado un joven de su edad lo miraba sin disimulo. Se sintió incómodo, bajó y fue a tomar agua para cambiar de aparato y el pibe se le acercó agitado.
… ¡Hola!, recién te mudas supongo porque es la primera vez que te veo acá.
…. Sí, hacen unos días.
… Hay poca gente todavía, que tal, me llamo Diego y vivo en el 20 ¿y  vos?
… Pedro, Pedro Beggio, encantado.
… El abogado del piso 15, me enteré de la fiesta por los ruidos molestos.
… Sí, en verdad soy abogado, recién llego al país desde Chile, entré a un estudio a trabajar y me hicieron la fiesta de bienvenida un tanto ruidosa. Perdón.
… No, si no escuché nada, sentí comentarios solamente, ¿te mudaste de país con tu familia?
… No tengo familia, me mudé solo.
… Sos soltero como yo entonces, ¡qué maravilla!
___ Pedro comenzó a inquietarse, aunque quizá  se hiciera de un amigo heterosexual para compartir los deportes que Guillermo odiaba, pero al instante sus esperanzas se desvanecieron.
… Sos gay ¿verdad?
…. ¿Cómo lo sabes?
…. Por tus nervios, tu reacción corporal, porque yo lo soy y los reconozco.
….Sí, lo soy.
…. Gay, soltero y un dios del olimpo, ahora sí que empieza a gustarme el edificio. Sos hermoso, fantástico diría y me encantaría conocerte mejor, ¿puedo invitarte a tomar algo una de estas noches ya que somos ambos solteros?
…. No. Claro que no puedes, es soltero pero no es libre. Es mi hombre, lo amo con locura, lo necesito y es solamente mío.

___ Pedro quedó atónito al ver a Guillermo  que obviamente había escuchado todo y se disponía a matar a este Diego. Aunque de inmediato lo que hizo fue zambullirse en su boca para que los viera.
… Guiie, mi amor, él es Diego, vive en el piso 20, no alcancé a contarle de nosotros.
…. Pero yo le voy a contar, al detalle le voy a contar así no se confunde. Pedro es mi pareja, es mi amor y  por tu bien te pido que no vuelvas a acercarte a él, si coinciden aquí te vas, si se cruzan en la vereda  te vas a la otra, ¿entendido? Es mi novio  y pronto nos vamos a casar.
… ¿Nos vamos a casar? (Pedro lo miró atónito)
…. Perdón, no imaginé que tenía pareja, es muy lindo y joven.
…. Y muy mío también, me llamo Guillermo Graziani, somos abogados penalistas y socios,  no lo vuelvas a molestar. Pedro, vamos por favor.
… Sí amor, chao Diego. Disculpa.

…. Guiie por Dios, el pobre no tenía manera de saber que estoy contigo, no debías tratarlo así. Ya que a ti no te gustan los deportes podría ser su amigo y compartirlos.
…. Pedro, ¿sos pelotudo vos? Yo no, vi cómo te mirada y ese amigo no quiere ser, te lo aseguro.
…. Está bien, siento mucho lo ocurrido.
.. No es tu culpa, solamente tenía ganas de decirle a ese pibe que sos mío y que desviara sus obsesiones para otro lado, ya con Matías tengo suficiente.
… ¿De verdad querías decirle eso?
___ Guillermo sonrió, se inclinó y buscó los labios. Mientras su lengua rebuscaba en la boca Pedro se tomó con fuerza de sus hombros. Cuando se apartaron, se miraron, reflejados en los espejos del ascensor y el corazón les latió con fuerza.
… Tienes razón, estoy celoso como siempre precioso. Me ha encantado decirle que sos mi novio.
… Lo de novio,…, pase, lo que no tolero es la palabrita que comienza con C.
…. ¿Caricias?
…. No la otra que dijiste, no te hagas el tonto.
… La que me gustaría es, a la cama.
… Esas son tres palabras no una. Hablando de ello, siento que tú verdadero ser es desinhibido a la hora de hacer el amor, pero a veces me parece que  tuvieras que luchar con otra parte de ti mismo que hace que te parezca que hay cosas que no están bien. Y no es cierto. No es verdad que no estén bien basados en el amor. Son maravillosas.
…. Tienes razón precioso, es así, porque soy un ser herido.
.. No. Eres perfecto. (Pedro lo besó en la sien), eres perfecto.
___ Guillermo echó la cabeza hacia atrás y le dirigió una mirada muy profunda de esas que lo hacían temblar y una lágrima asomaba en los ojos negros que Pedro se apresuró a beber.
… Guiie, te acepto como eres, lo sabes.
… Lo sé precioso.
___ Pedro lo atrajo a sus brazos y Guillermo se aferró a él como su puerto seguro, ambos se sentían seguros y protegidos solamente en brazos del otro.
… ¿Necesitas que te dé espacio emocional,…, y necesitas que te dé tiempo?
… Sí cielito, y que tengas paciencia.
… Te daré todo lo que necesitas, pero no me resultará fácil. Siento algo muy intenso por ti amor.
___ Guillermo sonrió, lo miró a los ojos, a aquellos ojos marrones de mirada cálida.
…. Siento algo muy grande por ti Guiie, que empieza por A.
… ¿Apasionado?
…. Me gustan también abrazo, y acariciar,  eso también me gusta pero lo que siento se llama Amor.
… Y yo ya te dije que me gusta. A la cama.
… Y esas son tres palabras. Y abrazados se echaron en ella. Pedro no deseaba apartarse en realidad.
…. Pedrito, había imaginado que quizá al pasar 24 horas del día juntos de lunes a lunes el delirio que sentimos el uno por el otro se iría apagando o al menos disminuiría de intensidad, pero por lo contrario, su intensidad se renueva cada día. Jamás había experimentado nada parecido. Estoy locamente, desesperadamente, profundamente enamorado de vos.

… ¡Uy Guiie!, amor, mejor me ducho y vamos a almorzar.

___ Almorzaron en una parrilla en el centro y Pedro se detuvo en cada negocio de calle Florida, en cada librería de calle Corrientes, quiso hacer una visita guiada al Colon, a Plaza de Mayo, a la catedral y casi arrastró a Guillermo al teatro, definitivamente esta ciudad y su vida lo cautivaban, al fin comieron una pizza en Corrientes y regresaron de la mano caminando ya olvidados de  Diego.
… Pedro, no quiero más problemas con vos, voy a llamar a Juan y a cancelar el almuerzo de mañana, tienes razón Miguel está preso y Ana confío en que esté razonando.
… Me parece bien amor, no podemos perseguirnos por todo.

___ Mientras Guillermo llamaba a Juan, Miguel llamaba a Ana.

…. Listo Anita, ¿A que no sabés las noticias que tengo para darte?
… Miguel, te dije que no quiero más problemas.
…. No son problemas, solamente quería contarte que mis amigos localizaron a los putitos paseando  de la mano por Puerto Madero y por el centro todo el fin de semana y que el putito chico parece que tiene más guita que tu Guillermo, tiene un loft plantado  en  Puerto Madero, solamente me falta localizar piso y departamento, pero no creo que tarde en averiguarlo. Los encontré Anita.
… Miguel ¿qué vas a hacer?
… Eso no te importa, pero no firmes el divorcio porque no vale la pena, ya te lo dije, solamente llamé para contarte, Chao.

… Ana, ¿pasa algo?
… Valeria, no y sí, pero no le cuentes nada a Fabi de esto porque no está preparado. Vino Gabriela mientras estaban en la facultad, me trajo la demanda de divorcio, hablamos mucho y me hizo comprender muchas cosas. Guille quiere dejarnos todo, a Fabi y a mí, a cambio del usufructo del estudio y creo que lo mejor para todos es que le firme, pero antes voy a discutir lo que Gaby me hizo ver en el grupo. Que soy adicta a las relaciones.
… ¡Qué bueno Ana!,  me parece genial y creo que es un primer paso para que Fabi recapacite. Sos muy valiente, cuenta conmigo en lo que sea y te apoyo en todo.
…. Gracias Valeria, perdón si te traté mal, y por favor no le cuentes ahora a Fabi porque no me dejaría hacer nada y necesito por una vez en la vida pensar en mí, hablar de esto en el grupo y cuando esté preparada firmaré la demanda, Guille no me está presionando ahora.
… Me parece perfecto Ana y tienes mi palabra de que Fabi no lo sabrá hasta que vos se lo decidas contar.

 ___El Lunes apenas desayunaron Gabriela llamó avisando que los de la multinacional habían pedido más días para decidir y Guillermo le dijo a Pedro que se adelantaba en ir al estudio para cambiar la citación a las víctimas, se despidieron  y Pedro se quedó ordenado la ropa y la vajilla un rato más, comenzó a vestirse para ir tras Guillermo cuando sonó el timbre y al abrir quedó atónito: Matías, nuevamente Matías.
Pedro hizo de tripas corazón y lo hizo pasar dejando la puerta abierta pensando que de todos modos no se quedaría mucho tiempo allí.
 Matías como si nada hubiera pasado en la fiesta, con una sonrisa demasiado exagerada lo miró devorándolo.
… ¡Hola Pedro!
…. ¡Hola!
…. ¿Podemos hablar? (Matías preguntó esperanzado)
… ¿De qué?
“Aunque sé perfectamente de qué quieres hablar y tengo que lograr que te vayas y entiendas de una vez que no puedes regresar, por milagro Guiie no está”
… De nosotros Pedro.
… Matías por Dios, no voy a cambiar de opinión, te he dicho un millón de veces…

___ Pero antes de terminar la frase estaba intentado abrazarlo y entrar su lengua entre los labios de Pedro hasta la garganta y éste lo empujó con todas sus fuerzas incrédulo.
… Pero,,, ¿Qué haces,…, estás loco?
 ___ Matías jadeó y lo miró
… Trato de que entiendas que estás confundido, y que estamos hechos para estar juntos. Pedro por favor date y dame una oportunidad lindo, yo te amo. Mira…
… ¿Qué mierda es esto?
… Dos pasajes, vámonos juntos a Chile, a tu país y déjame demostrarte lo que puedes sentir por mí sin la presencia  de Graziani.
… ¿Estás loco?, yo no voy a ninguna parte, menos contigo y jamás voy a traicionar a Guillermo. Lo amo ¿entiendes?
…. No puedo creer que   te engañes con eso todavía después de lo que viste en esa fiesta, porque yo los vi a sus ex y los conozco, no es lo que mereces.
… Y te he dicho que eso no es asunto tuyo.
…. Apártate Matías, no hace falta llegar a esto, me hierve la sangre cada vez que intentas ir en contra de Guiie.  Estoy saliendo con él, es mi amor, es mi amante ¿y, sabes qué Matías?. Sé que es el mejor con el que podría estar en mi vida.
___ Matías soltó una sonrisa estúpida merecedora de una cachetada y Pedro pensó que quería darle una bofetada con la mano abierta y borrarle la sonrisa sobradora. Pero decidió decir algo que iba a doler más que una trompada para poner fin a aquello.
… Bueno, ya que tanto te importo, te digo que estoy seguro que Guiie hace el amor mucho mejor que tú (Toma, para que te diviertas)
_ A Matías le dolió, estaba confuso y aturdido y Pedro se mantuvo firme.
… Sos patético Pedro aceptando a ese tipo con ese pasado.

…. ¡Mierda!, el patético sos vos Matías
___ Guillermo entró como una topadora, había olvidado los documentos y el celular y con la puerta abierta escuchó lo último. Pedro se sintió un ingenuo por haber creído que ya había visto todo lo furioso que Guillermo podía ponerse. Estaba fuera de sí y le dio miedo.
…. ¿Qué mierda haces aquí otra vez Matías?
___ Pedro temblaba por las consecuencias para ambos.
…. Contéstame
----Matías sabiamente se apartó de Pedro paseando la mirada entre ambos y cerró la boca para al fin decir:
… Hola Guillermo.
… ¡Te lo he dicho mil veces!, no llames a Pedro, no lo mires, no vengas a su casa
___ A Matías se le escapó una risita disimulada y Pedro le dio un latigazo con la mirada. Estaba satisfecho con la escena. Lo que faltaba para enfurecer más a Guillermo.
…. Guillermo,…, Pedro y yo nos hemos besado.

___ Matías lo dijo muy contento antes de terminar en el piso por haberse comido el puño de Guillermo y Pedro deseaba llorar. Se moría de vergüenza, no podía creer que las cosas hubieran llegado a ese extremo, se sentía culpable porque al comienzo de algún modo con sus dudas y comparaciones sentía haber alimentado esperanzas en Matías. Guillermo lo tomó de la barbilla y se acercó.
…. ¿Te das cuenta lo que ha sucedido?, te hubieras portado bien.
… ¿Por qué regresaste?
… Eso no importa.
… Te has pasado de la raya. Sí que importa (Aunque enojado le parecía hermoso). Matías, ¿estás bien?, ¿te ayudo? Estás sangrando.
… No es nada Pedro. Graziani, esto no queda acá.
___ Guillermo solamente miraba a Pedro.
…. Estoy muy enojado con vos, ¿lo has besado?
…¡No! Él ha intentado besarme y le di un empujón. Estaba a punto de echarlo.
… No vuelvas a decirme que soy posesivo, celoso y que exagero, ¿me has oído?
… Eres más que posesivo. Matías te vas por favor ¿o esperas otro puñetazo?
… Me voy, por ahora me voy Guillermo. Pedro,…, es un violento, piensa por favor.

… Pedro, en dos días te he encontrado con dos hombres que estaban intentando meterse en tus pantalones. Dios sabe qué habría pasado si no llegaba a tiempo.
… A no, me estás insultando desconfiando de mí, eres un paranoico.

___ Pero Pedro sabía que no lo era, que esta vez tenía razón, no era su culpa pero lo que decía había ocurrido con Diego y con Matías, en dos días.  Igualmente no deseaba alentar el comportamiento de Guillermo o llegaría el día en que se sentiría preso.  Cerró de un portazo el loft y corrió escaleras arriba echando humo
 “¿Ahora qué?,…, debería irme para que pudiéramos pensar. Esto es demasiado intenso y va demasiado rápido. Yo le pegué a Nazarre y Guiie a Matías.”
___ Se encerró en el baño, fue hacia la ventana y contempló a la gente minúscula que seguía con sus vidas abajo, salían, paseaban, bebían, pareciendo felices y relajados. Seguro que no era así pero tal como se encontraba Pedro pensaba que nadie ahí abajo podía tener tantos conflictos. Estaba completamente enamorado de un hombre temperamental en extremo y de carácter imposible. Por otro lado era el hombre más cariñoso, sensible y protector del universo. Y ambos aspectos aparecían con referencia a él.
“Mi amor, ¿debemos seguir juntos así? Al paso que vamos te puede dar un infarto solamente si ves que alguien me mira y será mi culpa.  Haberte conocido es una bendición y una maldición al mismo tiempo, para ambos.”
___ Suspiró agotado, se cubrió la cara con las manos y sintió cómo las lágrimas brotaban sin permiso y se le hacía un nudo en la garganta.
           
 La puerta se abrió y Guillermo entró como si lo hubieran electrocutado. Temblaba y tenía la carótida hinchada, los ojos negros fulminaban y agitaba un papel en la mano:
… ¿ Qué mierda es esto Pedro?
…. Unos pasajes. El delirante de Matías pensó que me podía invitar a viajar a Chile. Los ha dejado.
… Vos no vas a ir ni a  Chile ni a la China, ni a ninguna parte  (Su voz denotaba una mezcla de miedo e ira al tiempo que rompía los tickets)

___ Pedro lo miró y lo confirmó, en sus ojos había miedo, el mismo que en el sueño.
…Eso le he dicho.
… ¿Qué más me escondes?
… Nada.
… Te diré una cosa chiquito hermoso, antes muerto que dejarte salir del país con ese  cerdo come hombres, ¿entendiste?
… Guiie, no iba a ir a ninguna parte.
…. Te iba a convencer, te va a seguir, créeme. Es implacable cuando persigue a un tipo y encima  dice estar enamorado de vos.
… Ambas cosas como tú,.., lo de implacable y lo otro.
… Eso es distinto.
… Guiie, eres imposible.
… ¿Qué me estás ocultado, a ver, viajes, visitas cariñosas de tus pretendientes jovencitos, qué más?
… ¿Cariñosas,…, qué mierda dices Graziani? Si me conocieras tan bien como crees y me amaras tanto, no me estarías soltando todas esas idioteces.
… Mira Pedro, mira, no sé, no entiendo nada, ahora mismo no puedo estar acá.
___ Apretó los dientes y los músculos de la mandíbula le temblaban.
… Te amo, te amo Pedro pero ni siquiera puedo mirarte a la cara. ¡Esto es una mierda! Lo mío y lo que se está iniciando con vos, ambas cosas son una mierda.

___ Abrió la puerta, salió zumbando y a los instantes, la entrada principal se cerró de un portazo.

Pedro bajó pero era tarde, se sentó en la escalera y se puso a llorar a gusto, fuerte, intentando encontrar una solución, un camino a seguir. Era una sensación conocida que no pensaba volver a experimentar. Y ahora estaba volviendo. La sensación de vacío y no sentía más que abandono, el mismo que lo había perseguido desde su niñez, estaba allí nuevamente. Entre lágrimas incesantes no se le ocurría nada. Le punzaba la sensación; vacío, soledad, abandono, pérdida, todas las emociones que lo tuvieron sumido en el infierno mientras Guillermo no estuvo en su vida. ¿Cómo había llegado a necesitarlo tanto? ¿Cómo podía haberle pasado? Sentía que se había marchado y sabía que  lo que sentía era lo que a Guillermo le había disparado el sueño y lo que reflejaba su mirada ahora. Le faltaba una parte de su ser.
“Me falta Guiie”
El corazón le dio un vuelco ante la idea de vivir sin él. No podía respirar como en la Toma, el pánico se apoderó de él sin remedio y Guillermo no estaba para abrazarlo. Se levantó de un salto, subió, trató de disimular las ojeras del llanto lavándose la cara, enjabonándose y se quedó ausente bajo la ducha. Se veía con él, allí, en la bañera,  contra la pared, en el suelo, se veía con él en todas partes. Salió intentando escapar del recuerdo de sus encuentros íntimos pero de pronto volvía a estar sentado preso de pánico, el corazón le galopaba dolorosamente en su pecho ascendiendo hasta su boca y no dudó, corrió a buscar el celular y llamó al estudio y la voz  grave de Beto sonó a través del teléfono.
… ¡Pedro!, está aquí.
.. ¡Qué alivio Betito!, si le pasara algo me mato.
… Pedro, está en ruinas, pero parece arrepentido de algo. No me gusta meterme, pero…
… Beto, ¿crees que debería ir?
___ Ya estaba camino al dormitorio para vestirse.
… Creo que sí. Se ha cerrado como hace siempre que algo le duele y fue directo al despacho.
___ Pedro se vistió, tomó las llaves del auto y corrió a él, sintiendo que su necesidad de ver a Guillermo era más poderosa que sus nervios.
Entró al estudio y Beto lo esperaba.
… ¿Se ha tranquilizado?
… Pedro, ¿qué mierda hiciste para volverlo tan loco?
… Nada, o sí, pero él también me vuelve loco Beto. Es un hombre difícil.
… No seas muy duro con él.
… ¿Hace mucho que lo conoces?
… Sí, años. El tiempo suficiente para saber que  está enamorado de vos, nunca antes sintió algo así.
… Está bien, Gracias Beto.
___ Pedro se quedó tras la puerta del despacho con la mano en el picaporte, hasta que al fin respiró, abrió y entró.

Y al instante se sintió insultado, burlado, por Guillermo,  por Beto, por ese puto del fiscal.  Guillermo estaba en su enorme sillón mirándolo a cm de distancia. Pedro se sintió posesivo, como si hubiera recibido una bofetada y ambos, con una copa de whisky en la mano lo miraron a la vez. José le lanzó una desagradable sonrisa falsa y Pedro los veía cariñosos, la cabeza le daba vueltas, tenía náuseas porque sentía que acababan de tener una relación sexual, era como que José lo llevaba escrito en esa puta cara. Quería vomitar y se sentía posesivo y celoso como nunca.
El intruso atrevido ni siquiera amagaba con levantarse, con separarse del sillón de Guillermo, seguía sentado en uno contiguo, disfrutando de la tensión que generaba su presencia y Pedro no estaba de humor para juegos con exconquistas sexuales de su hombre. Miró a Guillermo y él lo miró asustado e incómodo. Pedro sintió que acababa de sorprenderlo en plan cariñoso con su último ex y con una botella  a su lado, dos de sus peores pesadillas para con él.
___ Guillermo al fin hizo girar el sillón, se apartó de José y se le acercó.

… ¿Has bebido?
… No.
___ Entonces José se paró y le puso un brazo en el hombro a Guillermo. Pedro lo apartó en un movimiento y lo arrinconó con el antebrazo en el cuello contra la pared ante la mirada atónita de Guillermo.
… ¿Quién mierda te crees que eres? No soy lo bastante ingenuo como para tragarme que eres un buen amigo de Guiie. (De pronto Pedro se enfureció consigo por haberle dado la oportunidad a José de consolar a Guillermo)
…. Perdona. (José hablaba con una sonrisa burlona, sabiéndose descubierto en sus intenciones y enfureciendo más a Pedro)
… Pedro, déjalo, ya basta.
.. Te callas Guiie.
___ Guillermo los miró a uno y a otro, dos hombres enfrentándose en su despacho por él.
….Pedro suspiró, lo soltó mientras José se agarraba el cuello y le abrió la puerta del despacho de par en par.
…. Adiós José.
___ Pero entonces el puto descarado acarició la mano de Guillermo al paso y le dirigió a Pedro una mirada asesina, llena de soberbia y aplomo y Guillermo lo atrapó desde atrás antes que fuera por José nuevamente.
… Te vas mierda y la próxima vez que te acerques a Guiie, te mato, ¿lo escuchaste? Te mato a  ti o al puto de tu marido, da igual.  (Le dedicó una mirada especial hasta verlo desaparecer y se soltó furioso de los brazos de Guillermo)

… Precioso, acabas de amenazar a un Fiscal de la Nación.
… ¡Mierda! ¿Qué dices?, que no estaba acá precisamente como fiscal Guiie.
___ El aire se cortaba con cuchillo,  Guillermo volvió al sillón y Pedro caminaba, Guillermo se mordía el labio inferior, Pedro lo miró pensando” Ahora vamos a lidiar con mi hombre imposible, con mi dios arrogante. De repente estoy decidido a solucionar esta mierda ya. Es mío…. Y punto.”
… ¿Te la quieres beber?
… Ahora que estás aquí  ya no.
… ¿Y si no hubiera venido?
___ Siguieron encontrados en la mirada unos instantes y Pedro no sabía por dónde empezar de todo lo que tenían que aclarar.
…¿Beberías si te dejo?
___El pánico  se apoderó de Guillermo y Pedro lo vio en los ojos.
… ¿Vas a dejarme?
___ Pedro lo vio poner cara de derrota y no soportó más la distancia. Se  acercó  y Guillermo lo recibió con los brazos abiertos, mientras Pedro se sentó en su regazo. Se dejó arropar con sus brazos e invadir  sus sentidos. Su tacto, su aroma lo calmaron al instante y ocurrió lo inevitable, lo que siempre ocurría cuando estaban así: todo lo que de repente los abrumaba y los agobiaba,  carecía de importancia. Solos uno y el otro, en su pequeña burbuja de felicidad, apaciguándose uno al otro. El resto del mundo se interponía en sus caminos, para ser exactos el pasado de Guillermo se interponía en sus caminos.
… Moriré amándote Pedro.
--- Con toda la emoción que hizo que Pedro supiera que era verdad.
… Lo sé Guiie, lo sé. Y también te amo.

… Pedrito, el hecho de que hoy  te ame es un incentivo para los otros,.., para Matías, para José, para… Cuando reapareció en el estudio el pibe de Rosario y lo desprecié, me dijo que algún día  iba a aparecer alguien que me volaría la cabeza y que si lo perdía entendería lo que sentía y ahora lo comprendo. Pero él no te haría daño.
… Guiie, actué por impulso, no soy agresivo, nunca lo fui.
… Lo sé. Te provocó. Yo pensaba que  José era un buen hombre, un caballero, un amigo que podía contenerme. Vino a ayudar a Gaby en algo,…., al parecer no podía estar más equivocado.
… Estoy confundido Guiie. Sé que no vas a dejar que me acerque a menos de un Km. de estos tipos. Quieren usarme para hacerte daño a ti, para vengarse de ti, porque me amas y los rechazaste o los dejaste, y soy tu punto débil.  Estoy seguro que esos dos se casaron para olvidarte, que Juan sigue enamorado de ti y José te desea. No sé que hacer con ellos.
___ Guillermo lo tomó de la cara sacándolo de las ensoñaciones, se le iluminó la mirada, los labios le bailaban y Pedro hundió la cabeza en su pecho dejándolo que le acariciara el pelo.
… No quería que te fueras precioso.
… Entonces tendrías que haberte quedado.
___ Pedro le sacó la camisa de los pantalones y sus manos se escurrieron por debajo necesitando su calor corporal, Guillermo lo abrazó con más fuerza y sintió latir su corazón bajo sus palmas.
… Estaba loco de furia precioso. (Guillermo le besó la sien y enterró la nariz en el cabello inhalándolo)
…. Lo sé. Pero jamás te dejaría.
…. Me he enfurecido, ese pibe del gimnasio, Matías...
… Eso ya lo has dicho.
…. Más o menos como vos con José hace unos minutos.
… No estaba enfadado Guiie, como en la fiesta, estaba marcando mi territorio. Te desea, lo sé, lo supe ni bien lo vi.
___ Pedro hizo una mueca de asco y Guillermo sonreía de oreja a oreja, con la sonrisa que reservaba  solo para él. Pedro no pudo evitar sonreír.
… Pareces muy contento contigo mismo.
… Lo estoy. Me encanta cuando te pones posesivo y  protector. Significa que estás locamente enamorado de mí.
… Lo estoy, a pesar de que eres imposible. ¿Te has acostado con él?
… Antes de vos, sí.
… Puedo vivir con ello siempre y cuando la mantengas desde ahora como con zona de exclusión.
…. ¿No será mucho?
… Que lo quiero a 200 a 300 metros de ti Graziani. Y respecto a mis supuestos pretendientes, te voy a decir una última cosa. Sólo tengo ojos para ti.
… ¿Sólo para mí?
___Ya eran susurros en los labios y para enfatizar la declaración éstos se sellaron en el beso.
… ¿Por qué tienes el pelo mojado?
… Me duché y salí para acá, no tuvo tiempo de secarse.
… Te amo Pedro.
___ Apoyado  con la cabeza en su hombro.
.. Lo sé. Pero no hemos dejado las cosas en claro todavía. ¿Tengo que competir con José, un tipo despechado y  también lidiar con tu vena posesiva? Porque esto sería un trabajo de por vida. Más si Matías sigue apareciendo, los veremos en el juzgado. No sé cómo vamos a solucionarlo.
…. Y yo solamente puedo pensar en que necesito  que llegue el viernes y que nos escapemos en el yate. Tener esos días libres y estar con vos.
…. Bueno. Tal vez allí encontremos la seguridad que necesitamos nuevamente. Igual, nunca iré a ninguna parte si no es contigo Guiie.
… ¿En serio? (Le brillaban los ojos, sonriente)
… Guiie, no podemos vivir como fugitivos,  en pocos días tú le rompiste la nariz a Matías y si ese Diego vuelve a aparecer seguirás el mismo camino y yo  se la rompí a Nazarre y casi ahorco al fiscal. Tenemos que lograr la confianza absoluta que nos libere de estos celos y de este accionar.
El amor es libertad.
… Lo sé bonito, el amor es un acto de voluntad, de verdadera libertad, el amor es un acto de fe.
… Por eso, nos hemos elegido libremente, eso no va a cambiar nunca. Se me ocurre algo para curarnos de esto.
… ¿Con qué vas a salir ahora?
…. Una salida de chicos,…, separados, con total confianza uno en el otro, un desafío.
… ¿Qué?
… Guiie amor, tú armas una salida con tus amigos, con la parejita esa y tratas de saber qué mierda les pasa contigo, puedes invitar a Beto y a  Marcos o no y yo salgo por mi lado con Matías y Diego, de paso los presento, quizá peguen onda y mato dos pájaros de un tiro.
… Estás loco precioso, completamente loco, salvo en eso de presentar a esos dos que me encantó a ver si dejan de acosarte, pero no salgo sin vos ni loco.
… Porque no confías en mí, volvemos a lo mismo.
… No confío en ellos, Matías casi te secuestra y te lleva a Chile amorcito.
… Ya Guiie, que no iba a secuestrarme ni lo iba a seguir a ningún lado.
… Dije que no. Punto o vamos a volver a pelear.
___ Guillermo lo levantó y se puso de pie.
… ¿Nos vamos?
… Me gustaría caminar un poco.
…. Otro día precioso, ahora quiero hacerte el amor.

___ Guillermo le habló con dulzura mirándolo a los ojos y Pedro sentía mariposas en el estómago sabiendo lo que le esperaba.
. Salieron del brazo y saludaron, habiendo cancelado las citas hasta que los de la Multinacional pusieran fecha. Guillermo le colocó la mano en la cintura y al salir del estudio se cruzaron con José que seguía afuera y no les quitaba los ojos de encima. Sus ojos y sus labios destilaban amargura y Pedro sintió que acabarían a las piñas o a los tiros. Parecía el tipo de hombre que conseguía lo que quería y él ya lo tenía, por tanto le lanzó una última mirada de reto a intentarlo, la última advertencia, aunque una parte de su mente le decía que no estaba preparado para aplastarlo, otra le decía que se estaba contagiando de las costumbres de Guillermo. Al fin subieron al auto y Guillermo lo amaba en la mirada.
… Me muero por tenerte todo el fin de  semana para mí, a solas.
… Perfecto.

 ___ El martes Pedro despertó con Guillermo dentro de sí, haciéndole el amor, con su pecho contra su espalda, sujetándolo de la cintura y penetrándolo con decisión. El cerebro de Pedro no fue lo único que despertó. Su cuerpo dio alarma y se arqueó, volviendo la cabeza hasta encontrar la boca, dejándolo apoderarse de la suya. Las lenguas se retorcieron como salvajes mientras Guillermo entraba y salía  a toda velocidad. Pedro empujaba hacia él con cada penetración y lo dejaba llegar cada vez más lejos en su ser. Guillermo jadeaba en su boca.
… Pedro, te amo. Prométeme que no me dejarás nunca.
… ¡Ni loco! Nunca te dejaré.

___ Lo tomó de la cabeza y trajo nuevamente su boca a la suya, le encantaba jugar en su boca, quería comérsela incluso cuando se ponía imposible y Guillermo pensaba lo mismo.
“Mi amor, necesitas que te diga constantemente que no voy a dejarte, que no me voy a ir a ninguna parte. ¿Me lo harás prometer de por vida? Mi respuesta no va a cambiar, pero necesito que lo creas y no que me lo tengas que preguntar a cada rato.  Eres tan apabullantemente seguro en todo, menos en eso”
.. Créeme Guiie, por favor.
___ Mantenía los embates firmes y fuertes  con el contacto visual, no contestó  lo que Pedro necesitaba escuchar, que le creía, le sonrió antes de volver a la fusión de las bocas para aumentar el ritmo de las embestidas aún más. Pedro lo intentaba con toda la fuerza pero no podía mantener la boca en la suya cuando lo estaba penetrando con tanta intensidad. Lo soltó y se aferró al sommier para  arquearse mientras Guillermo se echaba  sin parar. El hilo se tensó y se rompió y los dos gritaron al unísono. Entraba y salía de Pedro a un ritmo frenético y lo lanzó a un abismo sin fin de placer absoluto al que cayeron juntos. Intentaron recobrar el aliento, el corazón luchando por recuperar el control y el cuerpo de Pedro  se convulsionó a su aire. Guillermo se arqueó una vez más y la ardiente sensación de su orgasmo inundó a Pedro de su ser. Suspirando salió y se echó de espaldas al costado.
… ¡Por Dios Santo,…, Pedro, cómo te amo!
 Pedro se le montó a horcajadas, se apoyó en su pecho, hundió la cara en el cuello besándole los vasos palpitantes. Le dio un mordisco y succionó un poco en el cuello.
… ¿Estás intentando tatuarme?
… No por ahora, sólo te estaba saboreando.
___ Se miraron, se perdieron en el beso y en el abrazo eterno.

… ¿Desayunamos? Tengo hambre y quiero que comas algo, pero la verdad es que no me movería de la cama.
___ Le dio un beso rápido y se deslizó por su cuerpo hasta quedar recostado bajo su axila con la punta de los dedos acariciándole el pecho.
… Estoy muy a gusto aquí...
… Te amo precioso. Qué novedad.
… Lo sé.
… ¿De verdad?
… Claro que lo sé. Sí. Guiie, amor, me lo dices y demuestras a toda hora y sí, me amas tanto como yo a ti, muchísimo, Infinito. Absoluto, en realidad. Por favor, ¿no me digas que todavía lo dudas?
___ Guillermo lo subió sobre él y luego lo colocó de espaldas sobre la cama sujetándolo por las muñecas, su mirada era ardiente y estaba muy serio.
… No sé si los sabes.
 ….Me lo dices siempre. Claro que lo sé.
… Las palabras no bastan Pedro.
… Por eso me pones a prueba con tu forma imposible de ser.
___ A Pedro no le gustaba verlo así preocupado, parecía hasta abatido. Ojalá no volviera a pensar que iba a abandonarlo,  intentando  que lo amara más y preguntándose siempre lo mucho que lo amaba. Todo eso  había quedado  claro en el primer minuto.
…Pedro, todo lo que hago es porque estoy enamorado de vos, nunca antes me había sentido así. Nunca. Me vuelvo loco sólo de pensar que puedo perderte. Se me va la cabeza por completo.  Créeme, soy perfectamente conciente de que soy celoso y posesivo... ¿Te saco de las casillas no?
…. ¿Estás reconociendo que eres imposible a veces?, bueno eres difícil pero te amo, acepto como eres...
… Tú también eres difícil, pero yo también te amo y vales con creces todos los dolores de cabeza que me das. Guillermo iba a seguir pero los labios carnosos de Pedro lo atraparon  y lo alejaron de todo. Relajó la lengua y se abandonó al ritmo de sus caricias. Su boca  era lo más maravilloso del mundo.
… Sabía que eras el hombre de mi vida cuando te vi, que si no huía no tendría retorno, y me quedé. El Hombre que iba a devolverme la vida porque yo estaba muerto Pedro, respiraba pero estaba muerto antes de vos.
… ¿Cómo lo supiste?
___ Guillermo lo miró como flecha con una mirada cargada de significado.
…. Porque mi corazón volvió a latir cuando nuestras miradas se cruzaron en Mendoza.
___ Pedro sintió un nudo en la garganta. Lo que estaba diciendo era muy serio y muy profundo y no sabía qué responderle. Ese hombre devastado lo miraba como si él fuese lo único vivo en el universo. Pedro lo abrazó como si no existiera nadie más en el mundo. En verdad para él, no había nadie más. El poder de las palabras que había pronunciado lo habían dicho todo. Pedro entendió que no podía vivir sin él y él tampoco podría vivir sin Guillermo. Ese hombre era su mundo.
Permanecieron quietos abrazados hasta el dolor.
… Amor, ¿puedo darte de comer?
--- Guillermo lo levantó de la cama, todavía aferrado a él,  bajaron la escalera.
…. Me encantaría.
___ Guillermo le sonrió y le dejó sobre el mármol de la mesada. Estaban desnudos y seguían admirándose cuando fue a la heladera y luego lo bajó.
… Guiie, se suponía que iba a prepararte yo el desayuno. ¿Qué te gustaría?
--- Y Guillermo miró su cuerpo desnudo.
… Deberías vestirte si quieres que te acepte algo.

___ Volvieron a mirarse y Pedro comprobó que había perdido la batalla contra su sonrisa. Estaba encantado.
…  Bueno, tú preparas el mío y yo preparo el tuyo, ¿vale?
___ Al fin desayunaron y fueron a ducharse.

 Y antes de salir para el estudio, se atraparon en el beso en el ascensor mientras Pedro le susurró:
… Guiie, no olvides que eres el amor de mi vida, para siempre.


…. Guille, Pedro, ¿están bien? Beto me contó lo de José.
… Todo bien Gaby, ya pasó. ¿Sabes algo de Ana?
…. Nada, pero me dijiste que no la presione, yo creo que es mejor así, dale tiempo Guille.
… Está bien, tienes razón. Gaby disimulada  sin que Pedro sepa  dile a Cuca que me retire un paquete en esta dirección y me lo traes sin que Pedro lo vea, en todo caso lo colocas en mi saco del perchero. (Casi susurrando mientras Pedro   iba por café). Y, ¿Beto?
…. En la facultad, con Fabián, pero mira quién viene a visitarte.
…. ¡Abu. Abu!
___ Guillermo se dio vuelta y vio a Valeria que le había traído a Guillermito que se colgó al cuello de su abuelo y a Guillermo se le arrasaron los ojos en lágrimas.
… ¡Hola precioso!, pero,…, qué grande que estás. Pedro míralo, ¿no es hermoso?
…. Como tú mi amor.
… Pero ¿no tendrías que estar en la facultad?
… Puse una excusa para traerte al nene Guillermo, ahora cuando volvamos voy o no, no pasará nada si falto un día, te lo había prometido.
… Gracias Valeria. ¿Algún cambio en Fabián?
… Me temo que no, aunque casi no habla del tema. Sí hay cambios en Ana. Y entonces Valeria les contó y agradeció a Gabriela el milagro.
___ Guillermo y Pedro dedicaron la mañana a jugar con Guillermito y entonces Guillermo pensó en algo que jamás había pensado.
“Amorcito, serías un padre perfecto, como en todo, nunca hablamos de si lo deseas, quizá no por la infancia que tuviste, pero es algo que ahora tenemos que plantear”

… Bueno Guillermito, mi amor, besos al abuelo que volvemos a casa.

___ Cuando se despidieron Guillermo todavía lloraba y para disimular llamó al encargado de la multinacional.
…. Mire, no creo que sea bueno que sigan dilatando las cosas, eso podría poner nerviosos a los demandantes y terminarían perdiendo, sé lo que les digo. Bueno, pero es la última fecha que aceptaré. Los estaremos esperando.
…. ¿Y?
… Son muy pelotudos, se creen poderosos y si siguen dilatando la mediación van a perder millones. Veremos, dicen que el lunes tendrán la respuesta definitiva, que demoraron la decisión por consultar a Estados Unidos, qué se yo.
 Esperaremos al lunes y si no aparecen lo siento por ellos. Tomaremos la demanda de las víctimas. ¿Te parece precioso?
… Sí amor, perfecto. Si no  entienden que lo mejor es la mediación no es nuestra responsabilidad.
…. Guille, tengo que ir al juzgado, Marcos me está esperando. Matterazzi y sus mujeres, ¡Dios!, cómo lo odio.
… Gaby…
.. Perdón Guille, pero es verdad. Me dijo que te dejó unos expedientes a la firma, están en tu escritorio. Si no me necesitan ya no vuelvo.
…. Ve tranquila chiquita, saludos a Marcos y gracias por todo.
…. Ven precioso, vamos al despacho así firmo todo eso. Parece que tendremos una semana tranquila.
___ Trabajaron un rato en casos menores y ya estaban a solas al atardecer, cenaron  en el camino y se acostaron temprano luego de amarse con devoción. Charlaron de todo un poco sin caer en temas conflictivos.

___ El miércoles en el estudio el día fue tranquilo para todos y nuevamente quedaron solos. Ya que tenían poco trabajo Pedro hasta última hora quiso ver la cartera de clientes y ponerse al tanto del accionar de sus socios y del estudio. Guillermo lo ayudaba o se quedaba embelezado en la mirada buscando besos y caricias furtivas.

… Precioso, quisiera llevarte a cenar. ¿Puede ser? Aunque bien pensado lo que en verdad deseo es otra cosa. Llevamos horas trabajando sin amarnos y eso sí que no puede ser.
___ Guillermo fue por detrás  a masajearle la espalda mientras Pedro cerraba la notebook y echaba la cabeza buscando el beso mientras los ojos comenzaban a cargarse de deseo mutuo.
…. ¿Me estás pidiendo permiso para hacerme el amor?
…. Sólo intentaba ser respetuoso y razonable.
___ Guillermo lo besó junto a los labios mirándolo con picardía, lo incorporó para sentarlo en su regazo y aprisionarlo entre sus muslos quedando adaptados para el beso íntimo en sus pelvis.
… No seas razonable mi amor.
… ¿No lo quieres?
… No, empieza a faltarme el aire Guiie, sabes exactamente lo que estás provocando en mí.
…. Aclárame eso que estoy confundido.
___ Guillermo meneó las caderas contra el sexo de Pedro despertando el palpitar entre sus piernas.
… No hace falta.
___ Mientras Pedro lo inhalaba besándolo bajo la oreja Guillermo colaba su mano bajo el pantalón acariciándolo y enviándolo al cielo.
… ¿Carta blanca?
… Sí. Por favor Guiie, tus caricias hacen que esté ardiendo por ti.
___Pedro se arqueó ante la anticipación y Guillermo coló las manos por detrás ingresando a su hombre los dedos empujando, para luego ir a desabrocharle la camisa y a retorcer los pezones abalanzándose sobre ellos para morderlos y succionarlos volviendo a ingresar los dedos bajo el pantalón mientras Pedro gemía. Guillermo tiró de los pezones alternativamente con sus dientes provocando oleadas de placer que recorrían la totalidad.
… Me encanta lo receptivo que sos a mi tacto, me das el poder.
___ Guillermo desabrochó el cinto,  el botón y bajando la cremallera, por detrás llevó los dedos a profundizar en su hombre, trazando círculos e ingresando, profundizando y ampliando, anticipando el después, entrando y empujando viéndolo a Pedro retorcerse en su regazo.
….. ¿Te gusta?
… Mucho, amor, por favor, necesito esto. Bésame.
___ Mientras Pedro recibía entre sus nalgas los empujones de la mano, ahora necesitaba su boca.
… Mírame precioso, no cierres los ojos.
___ Guillermo se acercó pegando los labios mientras el pulgar enervaba cada terminal nerviosa de su  entrada obligando a Pedro a tomarle de la cabeza y a aferrarse a él como si la vida dependiese de eso mientras se besaban con fuerza y desesperación, las lenguas se enroscaban, despacio pero con firmeza, con dureza y con adoración. Pedro al sentir el pecho fuerte pegado a él, su boca contra la suya y sus dedos en su interior acariciando, se tensó, la mente quedó en blanco y el alma regresó a su sitio haciéndolo perder la razón con una oleada de placer atravesándolo. Gemía contra su boca mientras el cuerpo se agitaba de manera incontrolable.
… Sólo para mí, siempre mío precioso.
… Siempre amor.
… Arriba.
___ Guillermo le colocó los brazos alrededor del cuello y le rodeó la cintura con sus piernas y Pedro le siguió para incorporarse.
… ¿Adónde vamos?
…. A ningún lado, quiero hacerte el amor acá, en nuestro despacho, para que siempre que esté trabajando te recuerde desnudo, entregado, en mi escritorio y vos a mí.
___ Guillermo lo colocó sobre su escritorio quedándose él en su sillón, aquel en que Pedro lo imaginara estando en Santiago. Le retiró los pantalones con bóxer, medias y zapatos dejándolo desnudo y quedando extasiado ante su esplendorosa belleza y virilidad y Pedro abrió las piernas exponiéndose a su hombre por completo. Sabía que no le daba nada que ya no hubiera visto un millón de veces pero así se sentía realmente desnudo y entregado a él. Sentado en el sillón luego de desvestirse a sí mismo con su inmensa erección descansando en su vientre, teniendo el mando poseía un aspecto absolutamente poderoso mientras Pedro sabía que su respiración se aceleraba y que otra vez se dejaría llevar. Estaba nervioso sin saber el por qué, se habían amado de mil maneras y posturas diferentes, con mil estados temperamentales distintos pero hoy y allí se sentía ligeramente intranquilo. Apenas lo hizo rodar y sabía que observaba extasiado el ingreso a su territorio sintiendo que el corazón se le salía del pecho.

…. ¿Por qué estás nervioso?
… No lo estoy, o sí, me siento expuesto y es ridículo. No hay un mm de mi cuerpo que no haya estado debajo de ti, encima o dentro. Soy todo tuyo.
… Te amo Pedro, no lo dudes nunca.
… No lo dudo, yo también te amo ¿Terminaste con las observaciones?
… NO, estoy evaluando mis  territorios y mis posesiones
…. ¿Soy una posesión?
…. No, sos mí posesión y yo la tuya. Y estoy evaluando en disfrutar de mi posesión.
___ Guillermo mantenía la vista fija en su ingreso y se ahogaba en su saliva al ver lo perfecto que era.
… ¿Quieres saber el veredicto?
… Claro.
….Mírame. Soy un hombre muy rico. Millonario diría.

___ Guillermo acercó  el sillón, se inclinó, le elevó los tobillos colocándolos sobre sus hombros, apoyando las manos en ellos comenzó a besarle los tobillos, con la mirada evaluando arriba. El calor de sus labios activaron en Pedro todas las terminales nerviosas de la piel llegando a su sexo dejando escapar leves gemidos cuando la lengua de Guillermo le recorría las plantas de los pies.
… Apártate el pelo de la cara precioso que quiero ver mi posesión en toda su longitud.

___ Le dio un mordisco en el tobillo y Pedro se sacudió. Guillermo ascendió las manos hacia el sexo de Pedro contra el escritorio y la caricia liberó suaves jadeos repetidos en su boca y se retorcía queriendo cerrar las piernas.

… Déjalas, quiero ver como palpitas en mi mano, bajo mis caricias, atrapado en mi profunda mirada y Pedro gimió echando la cabeza hacia atrás.
… Mírame precioso, no apartes tus ojos de los míos, mírame con esos hermosos ojos que me atraparon en el aeropuerto.

 ___ Pedro se obligó a levantar la cabeza y temblaba ante su tacto, y cuando las miradas se encontraron Guillermo aumentó el ritmo de sus caricias. La visión de los ojos negros, de los labios finos entreabiertos y  de su cuerpo relajado aumentaba en Pedro el placer. Sus únicos movimientos eran los de sus dedos sobre el sexo de Pedro acariciando de arriba hacia abajo, de abajo hacia arriba, el de las sacudidas de su propio miembro y las de su pecho agitado.
… Guiie, pierdo la razón
___ Guillermo sintió que apretaba los tobillos en sus hombros y que se contenía para no gritar. Pedro  sintió una descarga de presión que estallaba y lo invadía por todos los ángulos de su cuerpo hasta reducirlo a una masa de nervios palpitantes. Guillermo jadeaba besándole el pie e ingresando los dedos ahora en su interior.
… Pedro,…, sos perfecto mi amor, estás palpitando. Tu Pecho agitado sube y baja, estás empapado, tus músculos se contraen con violencia y todo provocado por mi mirada en tu hendidura, en el acceso anhelante. Ven aquí precioso, estoy enloqueciendo.
 ___ Bajó los pies de los hombros y se sentó apoyando la espalda en el pecho de Guillermo, se volvió sentándose en su regazo y Guillermo aceptó sus pezones lanzando una sonrisa cómplice, enroscando la lengua alrededor de uno y otro y atrapándolos en sus dientes
… ¿Cómo consigues hacerme esto y controlarte?
… Baja despacio precioso y vuélvete, no puedo controlarme más.
___ Pedro descendió los muslos, bajando lentamente sobre él hasta que su vara de acero encontró su ingreso y lo atravesó mientras exhalaba un largo suspiro apoyando la cabeza en su nuca con los ojos cerrados. Lo tenía absolutamente empalado, estaba en lo más profundo de su ser y su aliento fresco invadía las fosas nasales de Pedro envuelto por la cintura por las manos fuertes que lo atraían hacia atrás…. No te muevas cielito, siénteme.
___ Pedro se quedó quieto sintiéndolo vibrar en su interior costándole un mundo no contraer sus nalgas a su alrededor.
… Me encanta tenerte a mi alrededor Pedrito ¿Cuánto tiempo podríamos estar así?
___ Las bocas se cruzaron, Pedro echó la cara hacia atrás y se miraron sabiendo que estaban en el abismo y sin tiempo.
El miembro de Guillermo seguía sacudiéndose frenéticamente dentro de su hombre que contrajo las caderas para retenerlo, al tiempo que los labios se encontraban y jadeaban.
… Te necesito Pedro. Te amo.
…. Yo también No te detengas.
___ Guillermo levantó las caderas, tirando de las de Pedro hacia arriba cuando se dejaba caer hacia abajo penetrándolo hasta la eternidad, dejando escapar un sonido gutural mientras Pedro se agarraba del escritorio.
… ¿Así amorcito?
… Sí. (Echó la cabeza hacia atrás cerrando los ojos)
… Mírame, siénteme.
 --- Guillermo se retiraba y penetraba hasta  lo más profundo, una y otra vez y la expresión de su rostro lo hizo sentir a Pedro como la criatura más deseada de la faz de la tierra.
… Te siento mi amor.
___ Guillermo gruñó subiéndolo y bajándolo  para que recibiera cada una de sus embestidas y una capa de sudor brillaba en su frente, los músculos del mentón se le tensaron, temblaron y Pedro se agarró con fuerza del escritorio  deseando besarlo pero sabiendo que ya las bocas no podrían permanecer unidas. Los sexos temblaron, los saturados montículos de nervios protestaban ante tal intensidad y pedían más y más.
… Espera amorcito, controla hasta el dolor.
… Contigo no puedo controlar nada.
… Ya lo sé.
 ___ Las respiraciones eran irregulares, jadeaban, el miembro de Guillermo se sacudía como fiera en las pausas, volvía la cara al pelo y lo besaba, giraba las caderas suavemente y Pedro buscaba apoyar su cabeza en su pecho hacia atrás.
…. Sos mío Pedro, yo te controlaré.
… Te amo Guiie. Te pertenezco por completo, te entregué mi alma antes que mi cuerpo. Te amo.
… Yo también te amo precioso, ¿Vamos juntos al paraíso?
… Por favor.
… Pero dame esos labios.
___ Los labios se encontraron, Guillermo se movía hacia delante y hacia atrás y se derretían en el beso profundo como la penetración. Guió las caderas tomando con fuerza las de Pedro.
…. Sos precioso, perfecto, me encanta que te contraigas a mi alrededor, sos delicioso reteniéndome.
…  A mí también me encanta que permanezcas en mi interior.
___ Se aferró más y Guillermo le tomó del cabello comenzando a hacer círculos estudiados acompañados de embestidas de caderas hacia delante contra las de Pedro hacia atrás aferrándose ahora de los muslos de su hombre para terminar de hundirlo dentro de sí. Se retorcieron  ahogando el grito triunfal en el beso.
… Sos increíble hermoso.
___ Pedro se aferró al miembro palpitante y lo hundió con sus movimientos hasta el fondo de su ser. Cada uno era para el otro el placer encarnado, manifestado por el Amor profesado,.., hasta que se derramaron en la gloria de la comunión universal gritando su amor a Dios.
… Ha sido fantástico Guiie
___ Seguían devorándose la boca, Guillermo ahora le dejaba hacer lo que quisiera en la suya y Pedro le acariciaba por detrás las caderas hasta que al fin lo dejó salir y continuó cubriéndolo de besos, terminando abrazados sobre el piso, anudados y extasiados por la eternidad.
…. ¿Adónde vamos?
…. A la ducha y luego a cenar, he hecho una reserva.
…Deja que te ame,… (Pedro lo besaba y mordisqueaba)
… Ducha dije, ya está grabado nuestro amor en nuestro despacho. (Le advirtió tirando de él para levantarlo con los ojos brillando)  Pedrito,…, sos mi razón de ser.
… Y tú la mía mi amor. Sabes, menos mal que en Santiago sucedió lo del terremoto, y ello ante la amenaza de vida me arrojó en tus brazos.
… ¿Y eso?
… Es que yo todo lo había imaginado aquí, primero cuando no conocía de tu secreto  ni de mi naturaleza te imaginaba en el sillón con tu whisky, a Beto haciendo el asado, que de paso me deben.
… Es verdad precioso. Sé que esperabas eso de bienvenida y no esa fiesta. Al fin la organizamos por Ana y parece ser que será la primera en aceptar lo nuestro. Prometo que le diré a Beto la semana que viene que organicemos el asado que añoras.
… Está bien, déjame continuar. Cuando supe de mi naturaleza y de lo que  sentía por ti, esto que acaba de suceder lo imaginé antes de que fueras a buscarme. No sabía cómo sería entregarse por entero a un hombre pero imaginé todas las formas posibles y tú las hiciste realidad, acá, era lo que me faltaba.
___ Guillermo le enmarcó el rostro y lo recorrió con sus labios con devoción.
… ¿Iremos a la casa o al loft?
 … Por un tiempo a la casa, a ver si las moscas te pierden de vista.
… ¿Moscas?
… El nuevo ese del gimnasio y Matías.
…¡Guiie!, no empieces.
… Sigo precioso, marco mi territorio como dices, mi posesión, si vuelven a intentar ponerte una mano encima se la corto.
…. Y si José lo hace contigo yo a él y pondremos un museo de manos.
¿Te das cuenta que es una locura? ¿Que tenemos que hablar con ellos, entenderlos y hacerles entender?
.. Ya precioso, no quiero discutir, vamos, a la ducha, a cenar y a la casa.

___ El  viernes Pedro se quedó en el escritorio de Gaby, le encantaba estar con ella que era la primera amiga que estaba haciendo. Le pidió para la semana siguiente el festejo del mes de noviazgo con Guille con uno de los asados de Beto, con la gente del estudio y ella estaba encantada. Cuando prendió el celular y miró tenía un mensaje de Matías y el rostro le cambió.
…” No sé qué me pasó, lo siento. Matías”
--- Se le pusieron los pelos de punta  de pensar en que Guillermo lo encontrara y lo borró.
… Pedro, ¿quién era?, te pusiste mal.
… Gaby, te cuento pero ni una palabra a Guiie, no quiero más quilombos.
… No, obvio, ¿qué pasa?
… Matías pasa, entre otros. Intentó besarme y justo llegó Guiie y le dijo que nos habíamos besado.
…. ¡Nooo!
… Resultado, estoy seguro que todavía anda por el mundo con el ojo morado.
…  ¿Guille le pegó? Merecido, me alegro.
… Y sí, se lo tenía merecido, lo odié por haberlo provocado así, luego dejó unos pasajes que compró para llevarme a Chille y se armó el quilombo de  José, un desastre. A veces me dan ganas de enviar a Guiie a que le parta la cara otra vez, aunque me ha enviado un mensaje de que lo siente, veremos.
…. Matías está despechado, no le hagas caso ni vuelvas a atenderle el teléfono...
… Lo sé amiga, tengo que dejarte, voy a ver qué hace mi hombre.

___ Cuando entró al  despacho Guillermo lo miró apoyado en el respaldo del sillón. Y su sonrisa desapareció en cuanto vio la expresión de Pedro.
… ¿Qué ocurre?
… Nada.
___ Guillermo le tomó la mano.
… Vamos, dímelo.
… No quiero empezar el día mal Guiie. Matías que me envió un mensaje, dice que lo siente.
… ¡Mierda!, no le creo.
___ Pedro al verlo cambió de opinión, no deseaba que Guillermo le hiciera una cara nueva a Matías, por la mirada que tenía pensó que lo mataría esta vez. Y esperó pensativo a que sopesara lo que estaba pensando. Pero lo vio acercarse sonriendo y Pedro pensó que nunca se cansaría de mirarlo...
… ¿De qué te ríes ahora?
___ Guillermo lo tomó de la mano y lo condujo fuera.
… Vamos a ir de compras, quiero hacerte regalos.
… ¿Qué?
…. Que quiero comprarte ropa.
…. ¿Y eso?
…. Tengo ganas.
… Pero entonces yo a ti.
… No Pedro, vos no me vas a vestir a mí a tu estilo.
… A bueno y tú sí.
…. ¿Vamos a ir en coche?
…. No creo que quieras ir caminando y no usamos transporte público. Sólo porque no quiero discutir y mañana nos vamos a navegar. A propósito. Ya estamos en agosto, ¿Y si nos aventuramos al mar?
… No quiero aventurarme a nada este fin de semana amorcito, más adelante, todavía estamos en invierno.
… ¡Ufa Guiie!

… No Pedro, no vas a comprarme ropa.
…. Ya lo creo que sí.
… Vas a ver que no.
… Guiie, eso no es negociable y punto.
…. Cierto, no es negociable, mi ropa me la compro yo...
___ Al estacionar, Pedo saltó  de asiento, le clavó la mirada y los labios.
… Hagas lo que hagas no vas a comprar mi ropa.
… Escúchame, si me dejas que te regale cosas, (poniéndole los dedos para cerrarle la boca cuando iba a protestar), te llevaré al yate de inmediato.
___ Y cerró el trato con un beso inolvidable. Guillermo  dejó que lo besara hasta quedar sin reclamos. Una vez más estaba poseído por ese hombre que le ponía un dedo encima y lo dejaba inconciente. Pedro gimió en su boca, se separó y lo tomó en sus brazos
….  Vamos al yate amorcito.
… No, ahora primero las compras. Y bajaron del auto cruzando la calle en dirección a la tienda.

 ___Al salir tomaron rumbo al Tigre, cargados de bolsos  y zarparon por el Delta sin rumbo.

 Pedro como niño en día de reyes comenzó a abrir los bolsos, habían comprado de todo: remeras, trajes más livianos, camisas,…
… Pedrito, guarda todo eso menos el traje claro de etiqueta que te compré y el negro que me compraste a mí que  voy a cocinar, luego nos ducharemos y nos vestiremos para una velada muy especial,
… ¿Velada especial?
…. ¿La olvidaste?
… Por qué crees que acepté lo de las compras, para hacerte regalos por el cumple mes tonto, jamás podría olvidar que hace un mes que soy tuyo. Tengo champán preparado para la medianoche.

___ Guillermo preparó un pollo al horno y Pedro se encargó de las ensaladas y el vino. Luego  se ducharon y se pusieron los trajes nuevos quedando embebidos en la mirada, extasiado el uno en el otro y cenaron a la luz de las velas, con música culta de fondo….
…. Amorcito, haría cualquier cosa por vos, ¿ya lo sabes?
…. Nunca habías dicho eso.

___ Guillermo le apoyó los dedos debajo de la barbilla y lo besó suavemente en la comisura de la boca.

…. Cualquier cosa. Te amo Pedro. ¿Terminaste?
…. Nos falta el postre.
…. Lo dejamos para el brindis, ¿lavamos esto antes de la medianoche?
…. Bueno, qué misterioso estás.
___ Recogieron la mesa y lavaron la vajilla. Guillermo luego cambió la música mientras Pedro bajaba casi todas las luces para quedar enmarcados por la luz de las velas y lámparas esparcidas acá y allá,  y preparó el Champán  con el postre junto al sillón. Guillermo fue  a sacar algo del bolso que Pedro no supo qué era.
…. ¿Me dices la hora?
… Amor, me estás preocupando, ya sé qué sucede a medianoche pero  presiento que pasa algo más.
… Vamos.
… ¿Adónde vamos?
… No mejor comemos antes el postre, es temprano todavía. No puedo creer que hacen tres meses no te conocía, que nuestras vidas eran opuestas,  transcurrían sin más, en países distintos, que hacen dos viajé a Mendoza puteando por no tener un reemplazo. Y que en ese aeropuerto tu mirada y tu sonrisa me cautivaron para siempre.
…. Y yo, que  hace un mes fueras  a buscarme, justo cuando había decidido correr hacia ti, que ese terremoto me arrojara en tus brazos e hiciera que me entregara a ti para siempre.
___ Guillermo  lo miró con el alma en sus manos para entregársela nuevamente a Pedro, y sin apartar la mirada plena de Amor le besó el recorrido del rostro.

…. Sirve las copas mi amor, mi niño hombre, mi seductor imposible, mi socio, mi compinche, mi amante perfecto, mi ser y mi todo. Mi vida.

___ Las lágrimas aparecieron sin permiso y sin motivo nublando la visión de las almas titilando en la mirada y Guillermo se puso de rodillas frente a un Pedro atónito y expectante que bajó la vista observando boquiabierto cómo le tomaba la mano y lo miraba con todos los sentimientos conocidos.

…. ¿Lo hacemos a la manera tradicional?

___ Pedro comenzó a temblar sin saber el por qué, un nudo gigante se había instalado en su garganta pugnando por deshacerse en lágrimas.
… ¡Ay, Dios mío Guiie! (El corazón quería huir de su cuerpo y fusionarse al de Guillermo en uno)
…. Precioso, supongo que sabrás lo mucho que me ha costado llegar hasta acá, y  dar este paso, me costó mucho hacerlo porque ni siquiera creía en el amor, luego pensé que no eras real, pero hoy lo único que sé es que te quiero a mi lado para siempre, que te amo.
___ Le soltó las manos y cruzó los brazos por detrás para acercarlo a él y Pedro apoyó las manos en sus hombros. Guillermo levantó las manos y hundió sus dedos en el cabello todavía húmedo de Pedro mirándolo con mayor intensidad.
…. Pedro, ¿Te casarías conmigo?
… Estás loco Guiie, si estás casado.  Salvo que me estés pidiendo de casarnos en Las Vegas que no me parece.
…. Amorcito, ya sé, ahora no podemos pero para mí ya sos mi esposo. Ana igualmente me dará el divorcio. Luego de ello ¿te casarías conmigo?
___ Pedro no puedo contener las lágrimas  y sollozando se inclinó para besarlo y sus manos descendieron a tomarle la cara. Pegado a su boca susurraba:
…. Estás completamente loco mi dios arrogante.
…. Pero ¿seré un loco casado en unos meses? Por favor dime que este loco se casará con vos.
--- Y tiró de sus manos hasta dejarlo de rodillas  sosteniéndolo por los hombros estudiando su rostro.
… Vos sos lo único que me importa en el mundo y siempre será así. Durante el resto de mi vida y en todas las siguientes solo estarás vos. Te amo con locura. Cásate conmigo Pedro, por favor.
___ Pedro se dejó caer en su pecho llorando sin parar escuchando el galope del corazón fusionado.


…. ¿Eso es un sí?

…. Esto es un Sí, un Sí para siempre. También yo me siento tu esposo aunque no tengamos los papeles todavía mi amor. Te amo.
…. ¡Dios precioso!, no puedo respirar.
___ Guillermo se dejó caer arrastrando a Pedro hasta quedar ambos tirados en el suelo, besándose con adoración.

…. Una vez más mi ex don juan me toma donde y como quiere, sin el menor pudor.
… Te amo tanto Pedro, tanto que me duele. Siéntate y dame tu mano izquierda.
… ¿Qué?
___ Pedro automáticamente lo hizo. Guillermo le tomó la mano y fue deslizando en su dedo la alianza de oro que había comprado a escondidas esa semana para el cumple mes. Pedro seguía llorando sin palabras cuando le dio la suya para que se la colocara y se adoraban en la mirada cuando al fin la deslizó en el dedo de Guillermo.
Sin emitir sonidos sellaron su unión en el beso susurrando en la boca el “te amo”
…. Te amo Pedro.
…. Eres el mejor regalo que me ha dado la vida Guiie. Te amo. Feliz primer mes.
…. ¿Me vas a soportar otro más?
…. Te voy a soportar como hasta ahora, por toda la eternidad amor mío.
__ Guillermo lo bendijo con la sonrisa que reservaba para él, lo estrechó contra su pecho antes de hundir la nariz en el cuello para inspirarlo mientras Pedro se derritió en él.

“….Guiie,… En este pacto, en esta alianza te digo que te amo, en toda tu perfección y en toda tu imperfección, a pesar de tu personalidad imposible y posesiva. Me atrapaste de inmediato. Hiciste que me enamorara de ti. Hiciste que me conociera a mí mismo. Lograste que te necesitara.
….Pedro, apareciste sin que te esperara, sos el milagro que la vida me tenía reservado. Sos apasionado e irresistible, perfecto en lo que pueda llegar a imaginar. Y hoy, ahora sos todo mío, y yo soy indiscutiblemente tuyo.
… Por fin te entiendo Guié, por fin he llegado al interior de mi hombre.”


 ___ Se incorporaron y chocaron las copas con la música de Café Tacuba, “Eres” de fondo, que en parte los identificaba.

…Guillermo hundió los dedos en el cabello de Pedro absorbiendo sus labios y Pedro lo dejó hacer en su boca lo que la suya deseara.
… ¿Cómo es posible que compraras el anillo y no me haya dado cuenta hasta ahora?
… Estabas distraído, la mañana en que te dije que me adelantaba para ir al estudio, mejor no digamos quién te distrajo.
… ¡Guiie!... ¿Contento?
… Encantado ¿y tú?
…  He dicho que sí y no tengo ninguna duda. Ninguna. Mi sitio eres tú Guiie. Qué locura. ¿Cuándo crees que nos casaremos?
… Tal vez el año que viene si todo va bien con Ana. ¿Te parece mucho tiempo?
… No, mejor el otro, creo que el que viene es en muy poco tiempo.
___ Pedro se burlaba y Guillermo se indignaba, con su hermoso semblante desfigurado de incredulidad.
… ¿El otro? Por mí nos casaríamos el mes que viene.
…. Pero no podemos. No puedo casarme contigo el mes que viene.
…. ¿Me amas?
… ¡Uy no Graziani! ¿Qué problema hay en esperar lo que sea?, no voy a huir a ninguna parte y ya somos esposos. Podemos planear la boda de manera razonable y qué importa si es en un año o dos.
… Lo único que importa es nuestro Amor.
… El Amor Absoluto.
Amor, no podemos usar las alianzas hasta tu divorcio.
…. ¿Por Ana? No importa, no la veremos, y necesito que las usemos, que todos sepan que estamos comprometidos, que se terminen las dudas,…, para todos.
Si Ana viniera al estudio, sabré ocultársela, pero el resto del tiempo quiero que permanezcan en nuestros dedos, son el símbolo de nuestra unión.

… El símbolo de nuestro compromiso, al mes de ser novios. Estás loco mi dios arrogante.
…. Por vos mi seductor imposible, loco por vos.

___ Y ya no volvieron a hablar, mientras dejaban los sacos y subían a cubierta fusionados en el beso, para no regresar a dormir.
 El amanecer los encontró amándose , anudados y despojados de todo lo que no fuera su Amor Absoluto, con las estrellas y el cielo aterciopelado como testigos y una botella de champán vacía cerca de ellos.


 Continuará.


 Sabrás mucho de una persona
cuando sepas
qué es lo que le reconforta.

 Richard Bach.

8 comentarios: