jueves, 8 de enero de 2015

EL VIAJE...CAPÍTULO 34.



















 



EL VIAJE 34.




Brasil, noviembre de 2014.




___ Guillermo  sentía que imperceptiblemente intentaba girar la cabeza hacia Pedro, presentía su presencia. Pedro lo observaba con el alma en vilo. Guillermo actuaba como si estuviera regresando al mundo de los vivos y sabiendo que su amor estaba a su lado, que lo había acompañado hasta el mismo umbral de la muerte.

… ¿Guiie?… ¿Guiie, estás aquí? ¿Puedes oírme?
Pedro sabía  que los síntomas no eran los  mismos que cuando había estado a punto de morir, sino algo mucho más intenso, más real, aunque en aquella ocasión también se lo había parecido. Pero no, ahora era diferente.

…¿Guiie?

Pedro  le tomó la mano decidido a llegar hasta el alma.

… Guiie, amor mío, abre los ojos, ahora sé que estás regresando.
Guiie, amor mío, vamos, ábrelos, no tengas miedo. Soy yo, soy Pedro, siempre estuve contigo.

De repente notó que Guillermo le apretaba suavemente la mano, débil, tenuemente, y rompió a llorar. Lo había escuchado. Sabía que no se engañaba. Guiie lo había oído.

… Guiie, he sentido tu mano. Sé que me escuchas, amor, haz un esfuerzo y abre los ojos, vamos mi amor.

Incapaz de contener las lágrimas que surcaban sus mejillas, Pedro miró los párpados de Guillermo y vislumbró en ellos un suave temblor, que sin embargo cesó al instante. No tenía fuerzas, como cuando los cerrara en el loft. Lo contempló, temiendo que hubiera vuelto a sumirse en el coma, ya que no había signos de vida, pero a los pocos segundos, Guillermo le apretaba la mano con fuerza.

Pedro sintió el impulso de tomarlo de los hombros y zarandearlo para ayudarlo a despertar, llamar a alguien, proclamar a voces que Guillermo estaba vivo, que todavía ardía la llama en algún recoveco de su ser, pero permaneció quieto, hipnotizado, vigilando cada movimiento, alentándolo a despertar.
Y, cuando los párpados volvieron a temblar, lloró en silencio sin apartar la mirada. ¿Y si era un acto reflejo  y nunca salía del coma?

… Amor mío, por favor, abre los ojos, te amo Guiie.

Estaba sollozando en silencio y besándole la mano, cuando se produjo un nuevo movimiento de párpados hasta que al fin Guillermo abrió los ojos por primera vez en dos semanas.
Al comienzo parecía obnubilado, como sin poder distinguir a los objetos, pero al rato lo miró a Pedro y le llegó al alma.

… Mi precioso está soñando.

Sacudido por el llanto Pedro lo contempló, se inclinó besándole ambas mejillas, las lágrimas resbalaban   a las sábanas y Guillermo al fin volvía a pronunciar su nombre.

Pedro.,

Y pasó siglos allí sentado mirándolo, llorando, besándolo, hasta al fin tomar conciencia de que debía llamar al médico.

¡Dios mío, estás despierto! Has salido del coma.



….. Pedrito, precioso, mi amor, estás soñando con aquello, ya pasó precioso, ya está, estoy acá, estoy a tu lado y sano, ¿recuerdas?


___ Pedro lo miraba adormilado hasta que al fin reaccionó y lo abrazó como deseando incorporarlo a su ser mientras Guillermo le daba besos suaves y tiernos en el pelo.

… Ya amorcito, ya todo pasó. Sé que estuviste a mi lado todo el tiempo, que esto te perseguirá como a mí, pero regresé. La culpa me anclaba a la muerte, pero tus palabras y súplicas me tironearon hacia la vida, no temas, no  vuelvas a temer.

___ Entre llanto y lluvia de besos, acurrucado más que nunca, volvieron a dormirse sin tiempo, seguían en el Paraíso, pero a punto de regresar, y quizá ello había disparado aquellos recuerdos en el sueño. Guillermo tenía que hacerse controles al mes del alta y mucho más no podían demorarlo.

Pedro despertó apaleado, aturdido, tenía el pulso acelerado, estaba aterrado y entonces recordó la pesadilla, ¿por qué sentía esa angustia luego de esos días de ensueño?
Miró. Guillermo dormía profundamente, relajado, feliz, libre como nunca y suspiró aliviado. Estaba bien, estaba a su lado, ya todo había pasado. Se había quedado. Guillermo se movió y alargó un brazo en sueños para rodearlo, recostando la cabeza en su hombro, y suspirando siguió en ese mundo onírico. Luego de la enfermedad necesitaba más horas de sueño que antes, le costaba despertar solo  y casi siempre Pedro lo dejaba dormir hasta tarde y  suavemente lo sacaba de ese estado besándolo.

Pedro se quedó esperando a que su corazón palpitante se calmara. Lo observó para convencerse de que estaba a salvo, inspiró y se perdió contemplando ese rostro grabado en él a perpetuidad.
Se incorporó despacio para no despertarlo y le escribió una nota, se cambió y salió en silencio.

Cuando Guillermo despertó, se  impactó de no verlo, se sentó asustado, entonces aspiró el aroma a flores frescas que había recogido y dejado en la mesa de noche y sonrió, y al mirar vio junto al jarrón una nota. Tomó los anteojos y leyó:


“… Amor, perdón por no quedarme a tu lado, pero luego de lo de anoche, necesitaba hacer algo físico. He ido a cabalgar, hace mucho que no lo hago. No temas, estoy cerca, para cuando despiertes estaré regresando. Prepara un rico desayuno para ambos que regresaré hambriento, de comida y  de ti.
Te amo. Pedro.”


 ___Guillermo fue al baño, se lavó la cara, y entonces se asomó al ventanal y lo vio, hermoso, con porte de príncipe, cual dios griego caído del cielo,…, sobre el caballo que se dejaba acariciar embelesado al igual que él lo estaba admirando y amando con la mirada.
Era suyo, su Pedro, su amor, su futuro esposo, el hombre que le había impedido morir.

Embriagado por la visión fue a preparar el desayuno  preguntándose  adónde estarían los caballos que nunca los había visto, pero desde que Pedro se reconciliara con sus padres todas las propiedades y posesiones de ellos estaban a su alcance nuevamente.



”...Precioso, de cuántas cosas que tenías en Santiago te privas por acompañarme en todos los instantes. A veces olvido que sos tan joven y que amas el golf, cabalgar, nadar y todo le que hacías antes de conocerme. Apenas hemos pisado la piscina del loft, al gimnasio has ido un par de veces, y solamente has seguido disfrutando de navegar, porque aprendí a no temerle y a adorar estar en el yate para tenerte para mí. Cuando regresemos tendría que impulsarte a volver a hacer todas estas cosas ahora que  nuestro mundo se está acomodando, tratar de acompañarte en alguna, o que vayas con Alberto o Fabi. Te amo Pedro y quiero que disfrutes de lo que te gusta, no solamente de estar a mi lado”



¡Buenos días mi amor!


___ Pedro se acercó besándolo con devoción sin tiempo ni pausa para que le respondiera hasta que al fin le ganó el aroma a café.

… ¡Qué rico!
… Sospecho que te refieres al café y ya estoy celoso.
… ¿Qué te hace pensar eso? ¿Quieres una demostración?.....



“levanto la vista para mirar a través de las rendijas de la sombrilla y admiro el cielo más azul que haya visto. Suspiro feliz. Pedro está a mi lado tirado en una reposera. Sexy, hermoso como siempre, y ahora relajado y pleno.
Sige leyendo una novela, sin dudas atrapante para mantenerlo así de quieto. Es tan bonito y tan joven que parece un estudiante.
Son los últimos días en el Paraíso, y estamos haraganeando bajo el sol de la tarde en la playa. Me vuelvo a adormilar”


….” Me acomodo en la reposera dejando el libro y mi amado Guiie está dormido, me pongo a escuchar música y me quedo dormido también bajo el sol de última hora de la tarde recordando su propuesta de matrimonio a los dos meses, en el yate. Esa maravillosa proposición que me hizo en el yate cuando apenas nos habíamos reencontrado y teníamos a todos en contra.  Ahora, las cosas son muy distintas y su propuesta más firme, hasta puedo sentir el aroma de las flores del prado la última vez que la hizo, que fue anoche luego de amarnos en una manta en el piso.

… ¿Y si nos casáramos mañana?
… ¿Qué dices amor, si tienes que esperar el divorcio? ¿Me tengo que preocupar? ¿Son secuelas del coma?

Estoy abrazado apoyando la cabeza en su pecho bajo la pérgola llena de flores de la casa, satisfecho luego de haber hecho el amor apasionadamente sin cesar.

… Tonto, estoy más lúcido y apurado que nunca.
… Mmmm.
…. ¿Eso es un sí?
…. Mmmmm.
… ¿Es un no?, Pedrito, estás siendo incoherente vos ahora y el que estuvo en coma fui yo.
 Está decidido, En las Vegas, mañana, con una gran fiesta.

Guillermo reía abrazándolo con fuerza y besándole el pelo. Pedro sonreía seductor y adormilado.

… ¿Qué es lo que deseas precioso? ¿Una  gran boda en las Vegas, una boda a todo trapo?, lo que pidas te lo doy.
… NO. Una gran boda no. Solamente con los amigos y la familia.
…Bueno. ¿Dónde?
… ¿Porque no aquí ahora que he perdonado a mis padres?
… ¿En propiedades de tus padres? ¿No les importará?
… A mi madre al menos le darás una alegría, estará encantada.
… Bueno, aquí entonces.

___ Guillermo le acariciaba el pelo haciéndolo ronronear.

… ¿Se puede ser más feliz? Bien, ya tenemos el lugar. Ahora falta el cuándo. Debería formalmente anunciárselo a tus padres.
… Mis padres, ¡Dios!, no saben nada. Amor, fuera de chiste, una cosa es que  tu enfermedad los hiciera razonar, y otra es que vaya a casarme contigo. Tengo que hablarles. Antes de abril tendremos que viajar a Chile, a mi padre no lo he visto, tuvo el infarto y no deseo causarle otro.
…. Mmmm, eso significa que antes del 21 de abril no me aceptarás, te deseo demasiado como para esperar tanto.

___ Pedro lo miró entre divertido y preocupado.

… Pero,.., amor, si ya me tienes. Ya me has tenido desde mediados de junio todo el tiempo a tu lado. Le dio un beso suave en el pecho mirándolo sonriendo.


… Te vas a quemar.

___ Guillermo le susurró al oído despertándolo del sueño y Pedro le dedicó una de sus sonrisas con hoyuelos.

… Solo de deseo por ti.

---El sol vespertino se había desplazado y estaba totalmente expuesto a sus rayos y Guillermo tiró de la reposera para colocarlo bajo la sombrilla.
… Mejor lejos de este sol de Brasil que quema a toda hora, prefiero que te incendien mis manos.
… Gracias por el altruismo Graziani.
… De nada, pero no estoy siendo altruista. Si te quemas, no voy a poder acariciarte.

___ Los ojos brillaban divertidos y los corazones se derretían.

.. ¿Tú crees?
… Sí, eso creo, que lo sabes y te estás riendo de mí. Lo haces a menudo. Es una de las muchas cosas que adoro de vos.

Guillermo se inclinó mordisqueándole los labios y tirando de ellos devorándolos.

… Tenía la esperanza de que desearas ponerme nuevamente protector, ya pasaron dos horas desde la última vez.
.. ¿Me estás proponiendo algo sucio? Pero no puedo negarme. Incorpórate.

__ Pedro hizo lo que le pidió y los dedos firmes, decididos, valientes, con movimientos lentos y meticulosos, atrevidos y provocadores, le iban cubriendo cada centímetro con la crema. Y mientras los dedos pasaron rozando los pezones y Pedro se estremeció le susurró:

… Tengo demasiada suerte. Sos precioso por donde mire.
.. Es verdad, eres afortunado.
… ¿Modesto te llamaban?, a ver de vuelta que te pondré en la espalda. Pedrito no me gusta que  no lleves nada en la playa, no tientes a la suerte.
… Amor, si nadie nos ve.
.. Nunca se sabe, ya sabes, te quiero solo para mis ojos.
… Tal vez en la casa podríamos hacer algún tipo de espectáculo solo para tus ojos.

___ Ambos sonrieron y volvieron a abandonarse a su siesta.

… Mmmm, la voz de Guillermo lo despertó.
…¿Tienes sed?
… Sí. Pedro contestaba medio dormido.
… Podría pasarme la vida mirándote. ¿Estás cansado?
… Algo, anoche no dormí mucho. (Pedro se ruborizó)
… Tampoco yo lo hice.

Guillermo se fue quitando la remera, las ojotas y el short de baño y Pedro perdió el hilo de los pensamientos y la cordura, lo miraba y se  aturdía.

…. Ven, vamos a nadar un poco.
.. ¿A nadar?
… Creo que necesitas algo para despertarte.

__ De repente se lanzó sobre Pedro y lo tomó en brazos y lo hizo gritar por la sorpresa.

… Guiie, bájame.
.. Cuando lleguemos al mar.

___ Pedro le rodeó el cuello mientras Guillermo entraba al mar sorteando olas y sin aliento por la risa le dijo:

… No te atreverías.
… ¿Eso crees?

__ Guillermo selló los labios y Pedro aprovechó la oportunidad para devolverle el beso  invadiéndole la boca con la lengua mientras Guillermo le acariciaba el pelo y se perdían en el abrazo y el beso... Guillermo se apartó suspirando con la mirada lanzando llamas.

… Te conozco precioso, me estás enloqueciendo nuevamente.

___ Se fue sumergiendo en el agua fría y clara con él en sus brazos. Mientras sus labios volvían a dedicarse a los gruesos Y el frío del agua quedó pronto olvidado cuando los cuerpos se iban envolviendo incinerándose y Guillermo jadeando en la boca apenas le dijo...

… Creí que te gustaba nadar.
… Me gusta, pero me has distraído y ahora deseo otra cosa.

__ Guillermo le rozó la mandíbula con los dientes ascendiendo a la barbilla y gimiendo su nombre le obligó a echar la cabeza hacia atrás para con su lengua devastar el cuello, la oreja y descender lentamente.

… ¿Quieres que vaya más adentro?
…. Sí, a ver si no nos consumimos.

Eran fuego y besos, manos y jadeos, alientos y suspiros y Guillermo se apartó con la mirada colmada de deseo.

… ¿Qué clase de monstruito he creado?
… Como te pedí en Santiago la primera vez, hecho a tu imagen y semejanza, ¿recuerdas? ¿Me querrías de alguna otra forma?
… Te amaría de cualquier forma en que pudiera tenerte. Pero ahora mismo no.

___ De repente Guillermo lo tomó de la cintura y lo tiró al aire, dejándolo caer al agua y hundirse bajo las olas hasta tocar las rocas y la arena del fondo. Pedro salió tosiendo y riendo, retándolo con la mirada fija.

… Creía que íbamos a hacer el amor en el agua.

__ Pero Guillermo comenzó a salpicarlo riendo.

… Tenemos toda la noche para ello.

-- Y se zambulló regresando a superficie alejándose de Pedro.

“… ¿Qué podría hacer para que vuelvas?”

___ Pedro fue pensando posibilidades mientras regresaba tras él a la orilla. Se recostó nuevamente boca  arriba, dejándose abrazar por los últimos rayos del sol y  mientras, sus pensamientos se trasladaban a su hombre.

__ De repente despertó totalmente por un reto de Guillermo, que puso fin a su sueño erótico con él, le ardía la cara de furia porque se había dormido desnudo.

… Guiie, no hay nadie mirando, es una playa privada.
… No importa. Nos vamos y cúbrete.
… Por favor, no te enojes.
… Demasiado tarde, vamos. Has tomado mucho sol. Tenemos que hidratarnos.

___ Se tomaron de las manos y en silencio regresaron a la casa.

… Lástima tener que regresar.
… Y no lo hagamos, podemos quedarnos hasta que salga el divorcio.
… No amor, sabes que tienes que hacerte el chequeo del mes.
.. Estoy perfecto, ¿o lo dudas?
.. No amor, no lo dudo, pero con el susto que pasamos no lo voy a dejar pasar. Además  Fabi nos debe extrañar, apenas conseguimos estar a su lado desde que entendió, lo justo es que disfrutes de tu familia también, que pasemos las fiestas con ellos, les prometimos traerlos a navegar, las vacaciones en el yate.
 El yate. Claro.
… ¿Qué pasa?
… Que te traje en avión porque  me daba miedo navegar solos, pero podríamos regresar en el yate. Llamaré a Julián  para que lo traiga. ¿Te gustaría?
… Sí, mucho. Hace siglos que no te hago el amor en el yate y es nuestro sitio, nuestro refugio.
… Guiie,…, no quiero regresar al loft, no nos ha ido bien allí, pasaron demasiadas cosas y apenas estábamos ahí, pero no lo deseo.
… Amorcito, pasaron esas cosas no por culpa del lugar,…
… Lo sé, pero preferiría que disfrutes de Fabi y de tu nieto y mientras ir buscando otra cosa, además pronto nos casaremos y deseo que tengamos otra cosa.
No quiero que te enojes  o que sientas que no corresponde. No es así. Hay algo que no te he contado.

…. ¿Qué pasa ahora?
… No te asustes, no es nada malo. Realmente hemos tenido meses difíciles y poco hemos contribuido a las ganancias del estudio.  Vendiendo el loft en Puerto Madero podríamos comprar algo más grande en algún barrio o incluso una casa en provincia, pero para tener algo definitivo tendríamos que  vender el yate y liquidar todos los ahorros, y no quisiera desprenderme de  algo que tiene tanto significado para nosotros.

 Cuando estabas enfermo, cuando me reconcilié con mi madre y le dí esa segunda oportunidad que me pidió la vez anterior acá, me dijo que mi padre  deseaba vernos, que la enfermedad lo había hecho recapacitar, que no quería morir sin volver a verme.
Yo no lo hubiera aceptado y me conocen, por tanto, sin que supiera, Marcial les hizo llegar el número de mi cuenta bancaria. Él la tenía desde cuando me compró el loft de Santiago y me giró el dinero.
… ¿Entonces?
… Cuando me llegó el resumen de cuenta,…
… Ya cielito, que me estás mareando.
.. Bueno, mi padre me había depositado medio millón de dólares.
… ¿Qué? ¿Cuánto?
… Lo mismo dije, y llamé a Marcial. Entonces me explicó que mi padre había deseado darme mi parte de las ganancias de sus empresas que me había negado desde que me fuera de casa, y que suponiendo que no lo aceptaría le pidió la cuenta.
Y me convenció  de que sería un golpe duro si no lo aceptaba, que me correspondía ese dinero. Bueno amor, en definitiva, somos casi millonarios, entre eso y la venta o el alquiler del loft podríamos construir o comprar la casa definitiva que soñemos.
… ¡No!, entonces Fabi dirá que tenía razón al decir que me puse de novio con vos porque eres rico.
… Tonto… Yo no sabía esto. No soy rico. Pero con ese dinero podríamos ahora mismo, usar estos meses para hacernos de nuestra casa, y quizá nos quede un resto para un viaje de bodas a Europa en abril, de paso sería mi regalo de cumpleaños.
¿Qué me dices? ¿Aceptarías?
… Te amo precioso, pobre o rico no puedo separarme de vos, así que si ahora tienes todo eso, igualmente tengo que aceptarte.
… ¿Es un sí eso? ¿Lo usamos para hacer nuestra casa y viajar luego de casarnos?
… Sí, si es lo que deseas, acepto. Pero antes quiero que veamos a tu padre. Les llevaremos a Chile la invitación personalmente. Quiero presentarme ante él y que sepa que te amo, que nunca fuiste una aventura, que esto siempre fue Amor, y que  por ello queremos casarnos, y más...


___ Cenaron luego de cocinar entre ambos, charlando de los padres de Pedro y del regreso a Chile luego del verano, para poner todo en  la lavadora. Guillermo salió antes a poner música y encender velas por doquier.


___ Al fin Pedro entró al estar y Guillermo estaba en el sillón, se acercó. Eran los últimos días solos, se miraron intensamente hasta verse los huesos, sintiéndose palpitar el uno por el otro, dándose el aire para respirar en el aliento y en el suspiro del otro, quemándose en el fuego de las manos recorriendo y dibujando geografías renovadas cada vez, inhalándose hasta la embriaguez, fusionándose de todas las maneras aprendidas y por llegar, y allí estaban otra vez, anudados en el sillón.


… Estoy cada vez más loco por vos amorcito.
… Y yo tuve mucho miedo de perderte Guiie. Creí que no volvería a ver nunca tus ojos y quise irme contigo. Pero luego supe que aunque  te hubieras rendido, no hubiera podido seguirte mientras Fabi me necesitara. 
Bueno, ya está, necesitaba expresarlo. Todos mis peores miedos condensados en estas palabras, y por fin exorcizados.


___ Guillermo lo observaba como si fuera su razón de vivir y Pedro supo que él lo miraba de igual modo porque eso era el uno para el otro.

… Estás aquí, realmente estás aquí, decidiste quedarte a mi lado.

__Guillermo lo estrechó más y Pedro se dejó envolver por su cuerpo nombrándolo y sintiendo que las lágrimas aparecían.

…. Shhh, Guillermo lo calmaba besándole el pelo. ¿Sabes?, durante esas espantosas horas, solamente pensaba y te escuchaba a vos, cuando quise irme no pude por vos y cuando me liberaste para hacerlo decidí que no podía alejarme, regresé a vos.
… Entonces creí que te había perdido, y pensé que debía liberarte.


___ Se quedaron allí, abrazados, recuperándose y tranquilizándose mutuamente, hasta que Guillermo lo miró sonriendo.

.. Ven a ducharte conmigo.
… Vamos.

___ Pedro levantó la mirada hacia él sin querer soltarlo y Guillermo le levantó la barbilla, se inclinó y le fue besando despacio y con ternura.

… Estos labios tan bellos que me pierden, tan suaves, soñaba con ellos cuando no los tenía.

Y regresó a besarlo pero con mayor intensidad mientras Pedro en el beso pensó en que podría haberlo perdido, pero entonces la invasión y posesión de su boca disiparon los pensamientos oscuros y se rindió a las sensaciones comenzando el juego de la ceremonia del beso que reinventaban cada vez.

Cuando se separaron sin aliento, Guillermo volvió a la pregunta que iba y venía.

…¿Te casarás entonces conmigo el 21 de abril?
… Pedro  asintió nervioso, ansioso, sin poder creer la reacción de ese hombre al que había creído que perdería.
… Dilo, precioso quiero escucharlo.
… Sí, cuando salga el divorcio, si es posible para tu cumpleaños, me casaré contigo, para siempre, y te llevaré a París de luna de miel.


___ Guillermo suspiró y de repente se levantó y comenzó a darle vueltas en el estar, riendo, fuerte, sano, joven y despreocupado, radiante de una alegría contagiosa, eufórica. Pedro se aferró a sus brazos, sintiendo cómo sus músculos se tensaban bajo sus dedos, y se dejó llevar por la risa, confundido, perdidamente enamorado de ese hombre. Lo dejó en el piso buscando el beso. Selló los labios con intensidad tomándole el rostro entre las manos, lo poseyó con su lengua insistente, persuasiva, salvaje, impertinente, rabiosa… excitante hasta el delirio. Y musitó su nombre contra los labios encendiendo a Pedro y haciendo que el mundo girara. Sintió ese amor y disfrutó del sabor de ese hombre delicioso, ese hombre que creyó que la muerte le arrebataría, y ahora su felicidad era evidente, le brillaban los ojos y sonreía como un adolescente, y el alivio que sintió fue casi palpable. Y todavía sin aliento, abrumado por los besos le susurró:

.. Pensé que te perdía.
… Pedrito, hace falta mucho más que un puñal para alejarme de tu lado.

___ Con su sonrisa sensual, sus ojos ardiendo juguetones mientras Pedro sentía a sus entrañas contraerse de deseo.
Guillermo lo aferró con un movimiento rápido y Pedro gritó de placer, sorprendido y sobresaltado. Lo cargó en sus hombros y comenzó a caminar.

… ¿Adónde vamos?
… Ahora a ducharse amorcito.


___ Pedro se esforzó por parecer enojado pero fracasó cuando Guillermo le sujetó firmemente los muslos con el brazo, y por la razón que fuera o sin razón no podía parar de reír, mientras Guillermo abría las puertas del dormitorio y del baño y sin bajarlo le quitó los zapatos y las medias dejándolos caer, se vació los bolsillos junto a la bañera, abrió el grifo dirigiéndose a la ducha mientras Pedro imaginó tarde sus intenciones.

… ¡Guiie!

“…. ¡Dios!, un chorro de agua helada  me cae directamente de cabeza a pies y grito. Estoy totalmente vestido, pero tengo mucho frío. El agua helada me empapa la remera y el pantalón, me inunda  hasta el esqueleto. Estoy empapado y en un ataque de risa.”

… ¡ No, Guiie, bájame”!

“Le doy cachetazos suaves, y Guiie, me suelta dejando que chorreante me deslice por su cuerpo.
Él tiene también la ropa empapada, pero estamos enardecidos, aturdidos borrachos, y sin aliento y me mira sonriendo, está tan… increíblemente sexy que me pierdo en él más y más.”
“Se pone serio y sus ojos negros centellean, vuelve a tomarme la barbilla acercando mis labios a su boca. Es un beso tierno, acariciante, que me trastorna por completo.
Ya no me importa estar bajo la cascada de agua empapado totalmente vestido y chorreando. Ha vuelto, está bien, es mío y nos  vamos a casar para su cumpleaños.”


___ Las manos de Pedro se dirigieron involuntariamente a la camisa de Guillermo, que se pegaba a todos su valles y montañas, músculos y tendones del torso, mostrando el vello apelmazado bajo la tela empapada. Pedro le sacó la camisa del pantalón de un tirón y Guillermo gimió, pegado a su boca, sin despegar los labios se los suyos. Cuando comenzó a desabrocharle la camisa, Guillermo empezó a quitarle la remera lentamente y luego sus labios fueron más intensos, más insistentes, más invitadores, más provocativos, su lengua invadió la boca y el alma,…, y el cuerpo de Pedro estallaba de deseo. Le abrió la camisa de un tirón, los botones salieron volando, rebotando contra el piso y repiqueteando, mientras iba apartando la tela mojada de sus hombros y de su pecho reemplazándola por un reguero de besos, empujándolo contra la pared, dificultando los intentos de Guillermo por desnudarlo.

Pedro dejó caer la camisa y los ojos negros buscaron los suyos entre la cascada de agua, con una mirada incandescente, como el agua ahora abrasadora. Pedro le tomó los pantalones por la cintura, pero Guillermo tomándolo de los hombros lo colocó de espaldas. Terminó de quitarle la remera apartándole el pelo de la cara y pasando la lengua hirviendo desde la nuca sin pausa en el beso y la succión de la piel.
 Pedro gimió y Guillermo echó fuera la remera lamiendo la nuca y luego mordisqueando la oreja, y susurrándole palabras bonitas fue a torturar con sus dedos los pezones.

… Sos precioso.

 Pedro ladeó la cabeza para facilitarle el acceso al cuello y dejó que sus manos mágicas tomaran posesión de su torso, vello y pezones, y echando hacia atrás los brazos le alegró saber que inspiró ruidosamente cuando sus manos tomaron contacto con su erección que presionó contra ellas que lo acogían y más.

… Quítate los pantalones amor.

Pero Guillermo pellizcaba los pezones sin cesar y mientras se iban endureciendo, bajo sus manos expertas en caricias, todos los pensamientos relacionados con los pantalones se esfumaron y un placer mortal se clavó con fuerza bajo su vientre. Pegado a su cuerpo Pedro echó la cabeza atrás gimiendo.

.. Sí, amorcito, y le atrapó la boca con la suya.

 Guillermo le quitó las barreras, y pantalones y bóxer se unieron a su camisa y a la remera en un amasijo de ropa húmeda sobre el piso de la ducha.
Pedro tomó el gel de baño, lo miró profundamente, se colocó en las manos el jabón y posó su mano sobre el esternón y, con suavidad comenzó a frotarle la piel. Guillermo lo aferró por las caderas con las manos, pero no lo apartó, lo observaba con mirada intensa, con los labios entreabiertos y su respiración acelerada.

¿Estás bien?
… Sí.

La breve respuesta fue un jadeo. Y Pedro recordó la película de todas las veces que se habían duchado juntos y siguió trazando círculos y haciendo garabatos sobre la piel amada, por debajo de los brazos, sobre las costillas, y descendió por el abdomen, hasta el vello que sobresalía de su zona púbica.

… Ahora me toca a mí, le susurró.

Guillermo tomó el champú, los apartó a ambos del chorro de agua y le colocó un poco en la cabeza mientras Pedro se aferró a la cintura del pantalón. Le extendió el champú por el pelo y lo masajeó con sus dedos fuertes hasta el cuero cabelludo aumentando la presión haciéndole gemir de placer. Pedro cerró los ojos y se rindió a la sensación celestial.

… ¿Te gusta?, mirándolo complacido.
…Mmmm.
… A mí también. Date vuelta. Los dedos se movían despacio, lo lavaban, lo mimaban, lo amaban y eso era el éxtasis. Y cuando terminó lo empujó bajo el chorro de agua para quitarle el jabón.

Cuando terminó  Pedro echó mano de nuevo a los pantalones que quedaban.

… Quiero lavarte todo amor.

 Él le respondió con sonrisa sensual y le susurró:


… Soy todo tuyo.

Pedro sonrió por la maravillosa sensación. Le bajó delicadamente el cierre, y los pantalones y boxer no tardaron en unirse al resto de la ropa en el piso. Pedro se enderezó y tomó el gel y la esponja.
Y reemprendió el viaje que dibujaba en la piel a través del torso,…, fue descendiendo pasando por encima del abdomen hasta deslizarla entre su vello púbico y luego sobre su erección hasta la base del miembro.
 Guillermo lo miraba acechando con anhelo y a Pedro la mirada le disparó lo que faltaba y tiró la esponja y usó las manos para sujetarle el miembro con fuerza desde la base para agigantarlo con la sangre atrapada. Guillermo cerró los ojos, echó la cabeza atrás gimiendo e impulsó las caderas contra las manos. Y de pronto los abrió y lo miró ardiente, lo tomó por la cintura, lo atrajo y lo comenzó a besar en forma salvaje y sin retorno.

.. ¡Uau,.. Cambio de roles y de ritmo!

Las manos de  Guillermo descendieron a recorrer el cuerpo húmedo, resbaladizo, con avidez, hasta moverse en torno al sexo de Pedro, los dedos lo exploraron provocativos y la boca implacable lo dejó sin respiración. Subió una mano hasta el cabello húmedo para sujetarle la cabeza, mientras Pedro resistía como podía toda la fuerza de su pasión desatada sin control. Guillermo fue a su acceso  e introdujo dos dedos a acariciarlo por dentro, Pedro jadeaba en su boca mientras los dedos lo ampliaban y recorrían siseando.
Al fin las manos fuertes aferraron las nalgas firmes levantándolo , volviéndolo de espaldas, aferrándolo con las piernas contra la pared de la ducha, mientras las miradas intensas se mantenían embelesadas o se escapaban a espiar la fusión inminente, cuando uno desaparecía en el otro, el momento mágico en que se completaban y se convertían en el  UNO.

… No vayas a cerrar los ojos precioso, quiero ver tu alma mientras amo tu cuerpo.

Pedro lo miró parpadeando, con el corazón latiendo desbocado, la sangre en ebullición en sus vasos sanguíneos, ardiente, corriendo  urgente y, un deseo letal y galopante que crecía sin cesar en su interior amenazando con estallar. Entonces Guillermo se deslizó dentro, despacio, disfrutando de la caricia íntima, muy despacio, colmándolo, llenándolo, agigantándose, piel contra piel, mientras Pedro empujaba y se arqueaba hacia atrás para fundirse con él en el recibir celestial, gimiendo ambos muy fuerte. Una vez dentro, Guillermo se detuvo otra vez, intensificando el beso en la pausa, retorciéndose las lenguas desaforadas y susurrando.

… Sos mío Pedro.
… Siempre.

___ Guillermo sonrió victorioso  y lo embistió sin piedad haciéndolo jadear y gritar.


… Ahora sí podemos contárselo al mundo, porque me has dicho que sí, porque nos vamos a casar.

___ La voz tenía un tono reverencial, y entonces se inclinó para con los labios apoderándose de lo gruesos y de la boca, comenzando a moverse impiadoso e implacable, con ritmo y cadencia que Pedro estudió para replicar y acompañar, primero embistiendo dulcemente mientras Pedro cerraba los ojos echando la cabeza hacia atrás, arqueándose y sometiéndose a la voluntad del amado, esclavo de su ritmo y cadencia embriagadores y perfectos.

 Guillermo lo recorría con labios y lengua, mordiendo, saboreando, devorando, lamiendo,… la barbilla, la oreja, la nuca, dejando surcos y Pedro caminos y hoyos con las uñas por detrás, empujando, mientras el empuje lo elevaba y llevaba al infinito, adelante y arriba, con fuerza y determinación, con audacia y reverencia, con martirio y con exquisitez, y se iban, se iban, de la ducha, del lugar, del universo, para ser uno y el otro , fusionados en el UNO, moviéndose al unísono, absolutamente compenetrados y embebidos uno en el otro, incrustados, absorbidos, con gritos y sonidos de la sinfonía de amor que empezaran a componer en junio, con un aliento, una saliva, una boca, un ser,…, saboreando la sensación exquisita de poseer y ser poseído.


…”Podría haberte perdido… y... te amo… te amo tanto Guiie. Este amor y este compromiso me superan.” Pasaré el resto de mi vida y las siguientes amándote.”

 Y sin remedio, sin retorno, sin reparos, sin impedimentos,… explotaron, estallaron, se  desarmaron, mientras uno se vertía en el otro, y las lágrimas caían uniéndose al sudor que era uno y se dejaban caer para amontonarse fusionados en el piso, desfallecientes, muriendo, exhaustos, besándose la cara, bebiéndose las lágrimas con besos, abrazados por el agua que los cuerpos habían calentado  y que caía sin cesar.

___ Pedro se quedó apoyado en el pecho acariciando el vientre mientras Guillermo lo hacía sobre el pelo empapado, saciados, dichosos y plenos uno del otro.
Guillermo acercó los dedos esbeltos  a sus labios y los besó uno por uno.

.. Deberíamos salir de la ducha.
.. Estoy muy a gusto aquí amor.

Reposaba sentado entre las piernas de Guillermo mientras él lo abrazaba fuerte, no deseaban moverse y en un murmullo Guillermo expresó su conformidad.

De pronto se sintieron agotados, extenuados, totalmente exhaustos. Habían pasado tantas cosas en las últimas semanas y además ahora veían el casamiento asomando, la casa, el viaje y más. Y Pedro reía imaginando.

…¿Qué te causa tanta gracia hermoso?
…Han sido meses intensos.
… Sí, mucho.
… Gracias a Dios, que has regresado, sano y salvo, el pensar  en lo que podría haber pasado me encoge el alma.


___ Guillermo se puso tenso y Pedro lamentó el recuerdo. Pero para su sorpresa le habló.


… Tuve mucho miedo…
…¿Cuándo? ¿Antes? Santo Dios, creíste que morirías y que no podrías regresar, ¿verdad?

… Sí, pero lo conseguí, no sé cómo o sí, por vos, por tus palabras, tus ruegos y tu liberación final para que eligiera.


___ Pedro levantó la mirada con una cascada de agua  cayendo por su rostro…


..¿Estuviste cerca?
… Muy cerca. Durante días espantosos pensé que no volvería a verte.


___ Pedro lo asfixió en el abrazo enredándose como hiedra.


.. No puedo imaginar mi vida si ti Giiie, Te amo tanto que me da miedo.
… Yo también, Estrechándole y hundiendo el rostro en el pelo. Nunca dejaré que te vayas.
… No deseo irme, nunca.


___ Pedro le besó el cuello y Guillermo buscó los labios besándolo con dulzura y contención.


… Ven, vamos a secarte, y luego a la cama, que hoy hemos hecho de todo. Yo estoy exhausto, y a vos parece que te hubiesen dado una paliza.


___ Se pusieron de pie tambaleándose y ya sentados en la cama, Guillermo se empeñó en secarle el pelo… y lo hacía muy bien. Eran más de las tres de la madrugada, y estaban deseando dormir. Antes de entrar en la cama Guillermo inclinó la mirada hacia las alianzas moviendo la cabeza sin poder creerlo todavía.

Al fin, se acurrucaron Guillermo lo rodeó en los brazos con dulzura, estrechándolo contra su pecho y quedándose abrazado a su espalda.


… Sos perfecto precioso.
… Yo no soy perfecto, ni mucho menos Guiie, solamente te amo.
… ¿Estás sonriendo?
… ¿Cómo lo sabes?
Tal vez. ¿Puedo preguntarte algo?
… Claro.
… ¿Te das cuenta del momento que nos hiciste pasar a tu familia y a mí? Todos te amamos. Vaya si tenías cosas que contarme, pero cuando me fuiste a buscar a Santiago apenas dijiste tu secreto uno.
… No imaginaba que pasaría eso último ni que todos se preocuparían tanto.
… ¿Cuándo te entrará en esa cabeza dura que la gente que te rodea te ama?
… ¿Cabeza dura?
.. Sí, muy dura. Y estoy hablando en serio. Aún estoy un poco enojado contigo, aunque eso haya quedado parcialmente eclipsado por el hecho de que estés a salvo y sano. Cuando pensé en…, a Pedro se le quebró la voz al recordar las horas de angustia. Bueno, ya sabes lo que pensé, lo que sentí.
.. Lo siento. ¿De acuerdo? Ya no quedan más secretos. Y tu pobre madre. Fue conmovedor saber que vino a verme y verte con ella.
… Nunca la había visto así Ha sido impresionante. Resultó todo muy impactante, siempre había sido tan fría, tan ausente.
… ¿Lo ves? Todo el mundo te ama a vos también. Quizá ahora empieces a creerlo.

___ Pedro lo besó con devoción y con dulzura.


… Me alegro de que estés aquí para compartir tus días conmigo,…, para siempre.





Continuará.





“___ No__dijo el principito___.Busco amigos. ¿Qué significa “domesticar”?
___ Es una cosa demasiado olvidada___ dijo el zorro___ Significa “crear lazos”.
___ ¿Crear lazos?
___ Sí___dijo el zorro___: Para mí no eres todavía más que un muchachito semejante a cien mil muchachitos. Y no te necesito. Y tú tampoco me necesitas. No soy para ti más que un zorro semejante a cien mil zorros.
Pero, si me domesticas, tendremos necesidad el uno del otro. Serás para mí único en el mundo. Seré para ti único en el mundo…
(…)
___ Mi vida es monótona, Cazo gallinas, los hombres me cazan. Todas las gallinas se parecen y todos los hombres se parecen. Me aburro, pues, un poco. Pero, si me domesticas, mi vida se llenará  de sol. Conoceré un ruido de pasos que será diferente de todos los otros. Los otros pasos me hacen esconder bajo la tierra. El tuyo me llamará fuera de la madriguera, como una música.

(….)

 El zorro calló y miró largo tiempo al principito.
___! Por favor…!domestícame!___dijo.
___Bien lo quisiera___respondió el principito____, pero no tengo mucho tiempo. Tengo que encontrar amigos y conocer muchas cosas.
___Sólo se conocen las cosas que se domestican___dijo el zorro___.Los hombres ya no tienen tiempo de conocer nada. Compran cosas hechas a los mercaderes. Pero como no existen mercaderes de amigos, los hombres ya no tienen amigos. Si quieres un amigo, ¡domestícame!
___ ¿Qué hay que hacer?___ dijo el principito.
___Hay que ser muy paciente___respondió el zorro___. Te sentarás al principio un poco lejos de mí, así, en la hierba. Te miraré de reojo y no dirás nada. La palabra es fuente de malentendidos. Pero, cada día, podrás sentarte un poco más cerca….




ANTOINE DE SAINT-EXUPÉRY,

EL PRINCIPITO.”

58 comentarios:

  1. Gracias por tu privado y mi amor Alicia Leguizamón, seguiré republicando en el finde. Besos.

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  2. Gracias Fernanfda Burgos y mi amor.

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  3. Gracias Marilú por tu adicción, que lo disfrutes.

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  4. Gracias María Elena Cuidet, mi amor.

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  5. Gracias Pochi querida, gracias por tanto. Besos.

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  6. Gracias Romina Chávez, aparece por favooooor, please, tee extrañooooo. Te queremos.

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  7. Eve magnífico relato de amor erotico y a su vez dulce y maravilllso ahora podrán casarse y ser felices con toda la familia porque se lo han ganado por fin la felicidad les llegó lo merecían gracias por tan hermoso relato que .e hizo llegar a llorar pero también reír con la felicidad de ellos te quiero un beso grande querida Eve

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    1. Bellos los dos últimos viajes para que los disfrutaran, mucho en su lugar pero quedan obstáculos como en la vida, aunque saben que nunca los separo y que este amor sobrevive a todo y a todos, Gracias infinitas y mi amor.

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  8. Gracias Mirta por tanto y te espero acá.

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  9. Gracias ängela Dos Santos, besos.

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  10. Eve, qué maravilla!!! Éste ha sido un viaje al Amor Infinito, realmente al Paraíso de sus Almas Gemelas...Por Dios, qué manera exquisita de narrar todas sus sensaciones, su Amor incondicional, el miedo que sintieron ambos cuando Guille no volvía del coma, las palabras de Pedro que le llegaban pidiéndole que no se rendiera y que regesara a él...su regreso cuando despertó y este viaje soñado, reinventándose cada vez en los besos interminables, en la entrega y la posesión hasta la Unión Celestial en la que son dos en Uno...La recociliación con las familias, y ese sueño cercano de casarse con la promesa de ambos de no separarse jamás y de amarse hasta el fin de esta vida y en las vidas próximas, por toda la Eternidad...Eve, sos genial, única, te aplaudo temblando todavía y emocionada por la pertenencia de amor de Guille y Pedro...TQM......Alicia Vitolo

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    1. Me parece un capítulo bello, lleno de cuidados, amor, planes, ternura, celos, un poco de todo de ellos y todo lo que dices, pero quedan dificultades todavía, pero debía dos capis de disfrutarse al menos, gracias eternas y mi amor.

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  11. Gracias Alicia leguizamón, mi amor.

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  12. Hermoso cap Eve gracias x esta historia! !!

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    1. Gracias amor, un capítulo todo ternura y amor, antes de nuevos problemas, pero faltan pocos, ya, gracias por estar y mi amor.

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  13. HOLA EVE QUE BELLO CAPITULO GRACIAS POR ESTA HISTORIA Y TAMBIEN LAS OTRAS SON UN BÁLSAMO PARA EL ALMA MIA GRACIAS AMIGA

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    1. Los últimos dos capítulos los hice para compensar tantos dramas, y ahora releyendo los primeros me emocionan, faltan obstáculos pero a confiar. Gracias infinitas por tanto y mi amor.

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